#sentir que todo es tan absurdo y todo lo contrario a la vez

[translucent-serendipity]

🤍 21 de octubre 2023. 18:40 de la tarde.

[nicolemarieeh]

Therapy

28/04/2024

Hola mundo, aqui nos encontramos de nuevo, visitando viejos rincones de nuestro pasado y dandonos cuenta de que en aquel momento, realmente no teniamos muchas razones para estar deprimidos y taciturnos, aqui me encuentro hoy, con 23 años, sientiendome como esa chica de 16 años que pensaba que el mundo se le estaba cayendo encima, cuando en realidad fueron los mejores años de mi vida, para ese entonces no sabia el valor que tenian mis sentimiendos ni la pureza de los mismos, ahora solo estoy tratando de ser un adulto funcional con miles de emociones reprimidas y mucho mas jodidisima que antes, he dejado de ser autentica, he dejado de sentir y esa es una de las cosas que mas me aterraban cuando era mas chica, he querido encajar en un mundo de cuerdos para no ser catalogada como el bicho raro, como aquello con lo que siempre me identifique y por lo que la pasaba tan mal, ahora que he crecido me he puesto una mascara y me he convencido de que soy fuerte, que ya no tengo por que llorar, ya no escucho musica como antes, ya no paso horas mirando por la ventana, nostalgica, imaginando historias que me gustaria que pasaran, en su lugar, paso horas en el celular buscando la manera de distraer mi mente lo mas posible y convencerme de que soy ''funcional'' pero eso en el fondo solo me hace sentir mas miserable y como si estuviera desperdiciando mi vida. Hoy me encuentro en esa esquina de mi habitacion que presencio los momentos mas genuinos e importantes de mi vida, aquel rincon que vio mis lagrimas mas sinceras y fue testigo de aquellos pensamientos que me mantenian resguardada en mi caparazon en una realidad idilica.

Hoy, Domingo 28 de Mayo del 2024, solo me siento como si quisiera desaparecer, y si me preguntan si estoy bien, no, no lo estoy. Verdaderamente no lo estoy, quiero llorar, quiero irme de aqui por una larga temporada y olvidarme de todo o simplemente que me trague la tierra...debo confesar que a veces he pensado en volver a viejos habitos destructivos, pero prometi que por ninguna razon, lo volveria a hacer, y se que si lo hago ahora, en la situacion que me encuentro voy a car en un hoyo muy profundo del cual sera increiblemente dificil salir, porque aunque me cueste admitirlo, la verdad es que soy debil, y solo puedo aparentar lo contrario si no pienso en nada ni por un segundo, si no derramo ni una sola lagrima y si pretendo que todo esta bien, mantenerme distraída, o mas bien entumecida.

En momentos como este me cuestiono si alguna vez verdaderamente llegare a cumplir mis sueños y mis metas o si estare orgullosa de la persona en la que me convertiré en un futuro, mis palabras estan llenas de miedo, de un resentimiendo absurdo y un orgullo toxico. No se como llegue a este punto, no se que he hecho mal, solo se que siento que estoy en el mejor y peor momento de mi vida y no se que carajos hacer, mi madre piensa que soy un fracaso y que soy una inutil que solo representa una carga para ella y para su casa, que a pesar de saber de su enfermedad y delicado estado de salud solo soy una egoista que piensa en si misma y hago todo a proposito para que ella se muera. Odio decir esto porque entiendo que ella esta pasando por una situacion muy dificil y quiere sentir mas apoyo por parte mia y de mis hermanas, pero alguna vez nos preguntaron como todo esto nos hace sentir? Como me hacen sentir? Saber que tu madre esta luchando con su vida para mantenerse viva y que no sepas como acercarte a ella porque de alguna manera sientes ese rechazo hacia ti, porque eres pésima hija y tus hermanas menores hacen mas que tu que eres la mayor, cuando sientes la responsabilidad de ser tu quien vele por todo, pero simplemente no te dan ganas de hacer muchas cosas porque sientes que todo lo que haces esta mal o no es suficiente, siempre hay algo malo que comentar sobre mi con toda la familia para que todos vean la clase de hija que soy, que lo que hago nunca es suficiente y que no me importa mi propia madre....

Es curioso, en el pasado cuando ocurria algun evento detonante que me hacia recurrir a metodos autodestructivos, siempre tenian que ver en la forma en la que mi propia madre se expresaba de mi o de como me hacia sentir...y no quiero que me malinterpreten, no quiero hacerla ver como la culpable y menos hacerla ver como la villana, mucho menos ahora con su enfermedad. Tal vez el problema soy yo, tal vez es que me afectan mucho sus palabras y sus acciones, tal vez es que soy demasiado observadora y analítica, y me doy cuenta cuando hay cierta preferencia sobre otras personas o cierto rechazo hacia otras, tal vez es porque me parezco demasiado a mi papa y de alguna manera ella lo refleja en mi, ya que siempre nos esta comparando o colocándonos juntos en el mismo saco, nunca hace eso con mis dos hermanas, solo conmigo, y esta bien, lo entiendo, pero no tengo por que aceptarlo... por mucho tiempo he vivido con ese dolor dentro de mi y me he callado, pero últimamente no he estado en la actitud de callarme las cosas y cada que tengo la oportunidad me defiendo de vuelta, ellos lo llaman justificación, o que me he vuelto respondona, esto ha llevado a muchas peleas y discusiones en la que quien termina perdiendo y viendose como la mala soy yo, pero nadie se pregunta cual es la raíz del problema y el por que de mi actitud rebelde. La verdad? Siento que soy un estorbo en mi casa, siento que no soy bienvenida y que mi presencia es un problema o una molestia, y la verdad no se cuanto tiempo pueda aguantar sintiéndome así bajo esta atmosfera, pero sabiendo que a pesar de todo mi madre necesita de nuestro apoyo y no me puedo ir asi por asi, aunque es lo que quisiera hacer ahora mismo, porque entonces, que clase de hija seria que abandona a su mama en una enfermedad tan grave como la que tiene? Ahí entonces si le estaría dando la razón de que todo lo que dice es cierto. Pero wow, es difícil estar en un lugar donde no te sientes bienvenido.... A veces solo quiero detener el tiempo o escapar, escapar de todo, de todos, mandar todo a la mierda y no darle explicaciones de nada a nadie. Podría ser la solución mas fácil y cobarde que enfrentar los problemas como una persona madura, pero a veces la vida se pone dificil y volvemos a ser esos niños indefensos que no tienen ni una puta idea de como reaccionar, a veces solo estoy cansada de tener que ser para otro, de tener que llenar expectativas, de tener que ser buena en todo, se actuar responsablemente, tener que actuar como '' adulto''. Es pura mierda. Estoy cansada de tener que mantenerme ''cuerda'' cuando en realidad estoy descompuesta por dentro, justo como la asquerosidad de habitación que tengo.

Tengo 23 años, pero me siento igual o mas perdida que cuando tenia 16. A veces solo quisiera devolver el tiempo, pero se que es imposible pedir algo así. Soy un desastre emocionalmente y mi mente esta luchando entre querer ser una persona o la otra, pero todo a mi alrededor me dice que debo mantenerme firme, cuerda, no puedo mostrar vulnerabilidad ni debilidad, no puedo dejar que cualquier cosa me afecte y tengo que enfocarme en lo realmente importante, que es construir mi futuro, y así no arrepentirme unos 15 años mas adelante. Ya no tengo 16, ya no hay tiempo para sentirse mal por las cosas, ahora solo queda vestirme con el traje de la falsa felicidad y el éxito, estando verdaderamente deprimido y roto por dentro.

Nadie dijo que seria fácil.... Solo hubiera deseado que las cosas fueran un poco diferentes.

[lascartasdepsiqueaeros]

INSANO

Solamente tengo dos miedos involuntarios; A la caída libre y a las agujas.

En ambos casos no tengo idea, no logro recordar que experiencia traumática las insertó en mi inconsciente; sin embargo, siempre que estoy en una situación al rededor de cualquiera de ellas, mi reacción siempre es la misma: Parálisis, llanto y arcadas.

Tengo la sospecha que mi miedo a las agujas se originó, de alguna forma, a partir de la sensación de abandono de mi progenitor, pero eso solo es una teoría. Como sea, este miedo se ha puesto a prueba de muchas forma y a medida que crezco, no es que disminuya, simplemente mi ego y la vergüenza que me da llorar en público, por algo que varios niños (empezando por mi hermano) no lo harían, me ha sacado adelante.

En cambio, la caída libre, es algo que afortunadamente nunca he tenido que enfrentar, más allá de las situaciones cotidianas, que, entre otras cosas, muestran mi patetismo, ternura y fragilidad. Un ejemplo de estas situaciones es que; tengo un miedo absurdo a los puentes peatonales, a las escaleras interminables de la línea 7 del metro y en general a cualquier barandal que esté por arriba de un tercer piso y me llegue por debajo de la cadera.

Normalmente, para evitar sentir el vértigo, me alejo de los bordes y me sujeto de lo que puedo, de barandales, de rejas, de amigos... y de ideas.

Y es que las ideas son las que siempre me salvan de las caídas libres, porque por alguna razón siempre termino en los bordes de los abismos, balanceándome entre peldaños inestables. Uno creería que a mayor edad, mayor precaución tendría para estas cosas, pero resulta ser todo lo contrario.

Me gustan los amores insanos, aquellos que me hacen regocijarme en los cantos de las cornisas, en los que desde las alturas me sostienen de cabeza desbordando las palpitaciones de un corazón en extremo impaciente.

Confieso que me gustan las cicatrices que dejan, las asfixias de las noches. Todos los bordes, todos los límites, todas las formas apresuradas de sentirte vivo. Después de mis 25 empecé a buscar los excesos; excesos de latidos y rasguños, de pieles mordidas, de lágrimas injustificadas, de llantos arrebatados, de gritos ahogados, de golpes al aire y de plegarias forzadas. Excesos de; Primaveras, de ojos y bocas, de risas prolongadas, me volví adicta a las pupilas dilatadas, al pelo enmarañado y al enrojecimiento de mis mejillas.

Sin embargo, nunca había saltado. Me mantuve dentro de una pequeña tortura, sintiendo el miedo paralizante y el vértigo vomitivo, teniendo un nudo en la garganta que se desenvolvía a una velocidad, una vez más; insana.

Me apasionan los amores insanos, tanto que me volví experta para sobrevivir dentro de ellos, para sostenerme con una sola mano y un hombro lesionado. Uno de ellos cortó varias veces mis alas.

Ninguna de mis previsiones me advirtieron que la caída libre llegar��a en forma de caricia, y sí; "Yo sé que el amor me entra por el cuerpo"; sin embargo, cuando escribí esa frase ni siquiera sabía lo que significaba, solo me imaginaba que así debería ser.

Tampoco pude prever que se sentiría de esta forma; una profunda calma tan prolongada que me hace pensar que llegaré al centro del mundo, que cuando finalmente mis pies toquen la tierra le crecerán raíces que se engarzaran entre mis venas y torrentes.

Cierro los ojos mientras caigo, y me acaricia el viento, tal vez se trata de una falsa ilusión, y las alas nunca vuelvan a crecer por completo, que en efecto me destruya el piso, pero en este momento todo pareciera una suave promesa.

Pareciera que me deslizó entre el desconocimiento de no volverme víctima de mis insanas pasiones, parece que el cielo, las nubes, los abrazos, y las dinámicas tontas me depositan en una nube de humo, no puedo ver más allá del vórtice en el que estoy cayendo, no encuentro la salida ni la meta, inclusive no tengo claro si sigo cayendo o ya estoy volando.

[kerobeardays]

Algunas cosas de las que he leído en este blog

No me gustan para nada, son varias absurdas o tan dolidas. Hoy fue un mal día. Hoy mi ansiedad ha escalado demasiado. Hoy alguien me cortejó, me asqueó enormemente. He estado viviendo días que no me gustan.

A veces me siento como un niño, quizás un adolescente. Esta relación me hizo cambiar muchas cosas, incluso mi sentir. De a poco si, vuelvo a aceptar la simpleza de las cosas.

El amor y bla bla, no le gustas amigo, no tanto, no lo suficiente. De alguna manera sé que hay algo de felicidad en salir de una relación con alguien que no me corresponde de la misma forma. En algún punto quizás mi arrogancia convergió con lo patético, increíble si. Era tan arrogante y me impedía ver que a la gente le puedes dejar de atraer, interesar, gustar, etc. Eso es muy simple. Al mismo tiempo de que era patético porque seguía intentándolo.

Recuerdo el primer día que perdoné algo. Si no lo hubiese hecho ahora estaría bien. Nunca sabes, no la primera vez, cuando perdonas a alguien, que va a volver a fallar.

Agradezco que de a poco mi razonamiento sano vuelve. Estaba en esta relación teniendo mucho miedo y desconfianza. Totalmente contrario a lo que pensaba antes de entrar en ella, de que si estás con alguien debe haber plena confianza o solo sufrirás. Dicho y hecho. Llegado a cierto punto revitalizador de traumas es imposible seguir con esa línea de pensamiento.

En primer lugar, la falta de comunicación; en segundo, las mentiras; en tercero, la desconfianza. Imposible no destruirme, quizás no imposible, pero no vislumbré a tiempo como actuar y solo terminé solucionando mal las cosas.

Aún así, independiente de lo anterior, nada importa si le dejas de interesar lo suficiente a alguien. No, no, no. En primer lugar ¿en algún momento le habré interesado lo suficiente? Sentía que si en un inicio, me sentía muy bien. No lo sé, fui ciego en muchas cosas en mi intento de actuar bien. Me descuidé en sobremanera. Avancé en este amor que ahora y para siempre será solo de mi.

Me empiezo a cuestionar sobre la existencia de este blog. Si esta persona leyese estos pensamientos tan absurdos, peor me sentiría.

La ansiedad aumentaría al tener estos cruces tan indeseados.

Es increíble como mi mente se escapa del hilo de ideas.

Te amo, pero decirlo me hace sentir patético.

Hoy alguien me cortejó, posiblemente en un tiempo varias personas lo hagan, siempre es así en mi soltería. Por ahora sigo mostrando de mi a alguien desinteresado y dolido. Me impresiona el descaro que tuvo alguien de intentarlo de todas formas. Quizás suene cruel, pero no tiene la más mínima posibilidad conmigo. No entiende el mundo que solo acepto hacer lo que quiero aceptar hacer. Me enamoré en esta relación y permití que al amor crezca porque así lo quise. El resultado si bien, es desafortunado, yo avance en medida de lo que quería y claro, de lo que este amor me hacía querer, inevitable, pero acompañado de mi decidir.

————- Esto va dirigido exclusivamente a esa persona————

Me apena todo, a pesar de lo que entregué en esta relación, me siento como el gran perdedor. Distanciarme de ti, evitar este contacto, incluso el que querías de devolvernos cosas, me evita cierto dolor de algunas hechos. No es que no quiera hablarte o verte, tampoco que quiera complicar la situación. Estoy intentando sobrevivir, lo hago lo mejor que puedo. A ratos me siento fuerte, pero no dura mucho, no lo suficiente para complacerte. Espero ir haciéndome fuerte, no para hablarte, para lograr no hacerlo con mayor facilidad.

Perdí el hilo de lo que decía, buenas noches.

Te amo.

Cristóbal

[tastaturean]

Los acontecimientos del sábado hacen que baje la guardia, y el domingo por la tarde cometo un error. No es un error muy grave, pero sí algo que podría haber sido dulce, y sin embargo nos agria el día por completo.

Todo empieza en la piscina, donde esa tarde pasamos varias horas en remojo, porque somos conscientes de que el verano tiene los días contados, y hay que aprovechar cualquier coletazo de sol para remojarse a lo grande. Echamos carreras de largos, hacemos peleas de aguadillas, nos escupimos agua (él no quería, oiga, no quería, pero lo convenzo tras un par de ataques a traición) y, en cierto momento, acabo subido a caballito, arengándole como un vaquero para que galope por la zona que menos cubre. Vamos, lo que hace cualquier payaso cuando va a la piscina con sus amigos, como aquella vez que nos bañamos en el mar con sus primos.

Sin embargo, cuando llega la hora de salir, porque empieza a refrescar y Ernie dice que tiene hambre, yo me resisto. Al principio consigo retenerlo en el agua agarrándolo por la cintura y pegándome como una lapa a su espalda, pero finalmente Ernie logra arrastrarme a grandes zancadas hacia la orilla.

Está a punto de subir las escalerillas cuando, en un último intento desesperado, tiro de él con todas mis fuerzas y... con tan mala suerte, que mis manos resbalan de la cintura al cinto del bañador, y del esfuerzo contrario éste acaba bajando conmigo la distancia hasta el agua, mientras que Ernie casi pierde el equilibrio antes de acabar en zona seca, perfectamente mojado, y completamente desnudo.

Contemplo con horror la prenda en mis manos unos segundos, hasta que un tinte de malicia se apodera de mi cara. Ernie tirita y se tapa las vergüenzas. Los dientes le castañetean cuando suplica:

"Vamos, Justin, devuélvemelo, anda."

No hemos traído las toallas. Un absurdo despiste que ahora juega a mi favor. Empiezo a nadar hacia el centro de la piscina. "¡Si lo quieres, ven por él!" grito.

No quiero que se acabe el domingo. Lo estoy pasando demasiado bien, como hacía tiempo que no disfrutaba. Y no quiero que se acabe. Todavía no. Luego sólo habrá estudio y más estudio. Ernie maldice un poco, se echa el pelo hacia atrás y salta al agua. En menos de cinco segundos me ha dado alcance. "Jajajajajajaja, Macmillan, ¿has perdido algo?" río con ganas mientras que esquivo sus intentos por quitármelo de las manos.

Pero como siempre pasa en estos juegos cuando las dos partes tienen las hormonas activas, el juego no dura mucho como tal.

En medio del forcejeo y con una rapidísima maniobra de las suyas (porque mira que es hábil el tío) Ernie me da la vuelta y me deja atrapado de espaldas a él con la cabeza bajo su barbilla, mientras que con un sólo brazo me inmoviliza los dos. Si mi respiración está agitada, la suya está desbocada. No hay mucho que ocultar cuando sólo se lleva un bañador, pero menos aún cuando no se lleva nada. Y en ambos casos se puede sentir hasta el último recoveco del cuerpo del otro. "Ernie... " jadeo, soltando el bañador en el agua. "¿Qué haces?"

Su barbilla está en mi hombro, sus labios cerca de mi oreja. Me aprieta con todo el cuerpo pero no se mueve. No se atreve. "Tú te lo has buscado... siempre te lo buscas... sabes muy bien cómo encontrarme las cosquillas. Y todos tenemos un límite de aguante, Justin. ¡Todos!" El tinte desesperado en su voz me asusta y me excita a la vez. "Suéltame, Ernie." "No quiero. Tú te lo has buscado." Estoy ardiendo por dentro y temblando por fuera. Mi cuerpo no quiere perder ese contacto, pero mi mente no puede soportarlo. La mano de Ernie que no me sujeta se cuela por mi bañador. Lo demás, es historia.

La historia que se repite.

¡Hufflepuff Existe! por Tastatur. Capítulo 13: London Calling Leer en Ffnet Leer en AO3 Leer en Wattpad

[idntknwmyname]

estoy cansado de los días, de la vida, de las personas que supuestamente son amigos, de los amigos, de la rutina de siempre, de escuchar las mismas canciones una y otra vez como si no existieran más, de dormir pero mucho más de despertar; no sé cómo se llama esa condición pero me aburro hasta de mí mismo, no quiero a nadie, no quiero hablar, no quiero salir pero tampoco quiero estar aquí porque aquí lo único que hago es dormir y cuando no duermo estoy pensando por eso procuro hacerlo, y cuando no puedo dormir de tanto que lo he hecho me siento maldito, porque ya no sé me ocurre otra manera de escapar de mis pensamientos que no sea hacerme daño

duermo mucho y cuando despierto me siento tan mal, se siente como drogarte realmente, no sé si lo has sentido pero es jodido, se siente como si has pospuesto toda la mierda y ya, y cuando despiertas de eso no te sientes mejor, solo va contra ti todo lo malo que sientes, una cosa tras otra, y duele mucho más

supongo que no estoy bien, supongo que necesito ayuda pero ya estoy harto de esa mierda también. no tengo las ganas siquiera de hacer algo para estar bien y así no puedo ir al psicólogo porque si no haré nada de lo que me diga, sería absurdo

la escuela no me está importando mucho realmente, a tal punto de que he estado pensando en ni ir, le dije a mi mamá eso y ella no entendió a qué me estaba refiriendo, así que lo que me dijo fue que ya faltan pocos días, que me esfuerce un poco más para acabar, pero yo no tengo ganas de esforzarme más

siento que cada día estoy un poco menos yo, me estoy comportando mal y sé que no soy así, contigo estuve intentando lo más que puedo que no, igual tú misma logras alejarme de ese estado y no sé cómo, pero normalmente estoy como que malhumorado, estoy teniendo muy poca paciencia, y estoy siendo muy violento conmigo, y ninguna de esas cosas me caracteriza, al contrario

hoy pensando me di cuenta de que sí estoy muy alejado, y que la única persona con la que hablo eres tú, de repente puede que le responda a alguna persona o un día hable con b y así, pero en realidad solo contigo, y no es porque nadie me hable, porque sí me hablan, solo que yo no contesto

la verdad no sé porqué estoy viviendo, me estoy levantando con el deseo de que ya se acabe el día, porque todos los días hago exactamente la misma mrd, y nunca he sido una persona que se lleva bien con la monotonía, mucho menos con el aburrimiento o hacer nada, pero justamente mi vida está siendo mucho de eso

últimamente eres lo único que mantiene mi mente aquí por momentos, creo que si no estás en mi cabeza entonces nada bueno estoy pensando, y no, no lo digo de forma romántica, pero eres la única persona que realmente siento conmigo ahora, porque me estoy sintiendo muy solo. pero no puedo depender de ti, no puedo solo sentir paz cuando tú estás conmigo, porque muy aparte de que no es sano, yo debo lograr estar bien por mí mismo, creo

siento mucho estar en tu vida, me gusta pero lo estoy lamentando por ti, soy un desastre, una persona muy vacía, y creo que tener que lidiar conmigo ha de ser muy jodido, he estado dándole muchas vueltas a todo y sinceramente quiero desaparecer, no quiero seguir haciendo esto, intentándolo para no llegar a nada bueno, solo retrocedo, vuelvo al mismo lugar o todavía más atrás, y estoy cansado de eso, de la vida, no tengo ganas, ni energías, ni me quiero esforzar para seguir

antes creo que tenía una esperanza por lo menos porque estaba mal pero quería estar bien, ahora ni eso

espero que nunca olvides que te quiero muchísimo, d

[someoneelse-j]

Enero 7, 2020.

Martes.

7:33 Pm.

Miedo. Es ese temblor en las manos y la presión en el pecho inconfundibles. Los ojos llorosos sin razón y el nudo en la garganta. Eso siento. Miedo. Miedo cuando te veo y sonríes como si nada. Miedo cuando las nubes en tus ojos son más espesas, cuando pierden brillo y parecen cerrarse para mi. Miedo es que se me revuelva el estómago y todo dentro de mi grite “te va a hacer tanto, tanto daño. No confíes, no te entregues, va a pasar de nuevo”.

Pero hay otra pequeña voz que me dice “¿y qué? ¿No vas a hacerlo por miedo? ¿No vas a disfrutar el hoy, por lo que pueda pasar mañana?” Sólo me digo, “ya que”, te sonrió como si nada y miro a la ventana.

Porque sigo sintiendo miedo, el mismo desde el día en que te conocí, no el que desconfiaba del desconocido de Tinder; el que desconfiaba de la palabras correctas, del verbo de músico y la voz profunda que emergía cuando el sol se ponía. Miedo de los “tu clase”, de los que ya conozco, con los que ya he jugado... Pero eras tan diferente, prometías en la voz suave un mundo diferente, no prometías nada y evadías compromisos como yo misma lo hacía o como jugaba a tirar papelitos para medir interés.

No prometías nada y yo misma me prometí el cielo. Me prometí una oportunidad ganada a pulso, me prometí aprender y disfrutar del día a día como si mañana no existiera, pues mañana podía decidir si decirte nene, cielo o cariño se sentían correctos. Mañana podía decidir con tranquilidad si contestarte a las siete, a las dos, cuando mirara el teléfono o en dos segundos. No importaba. Mañana no existía parcialmente, tú tampoco y un nosotros mucho menos.

En realidad nunca existió y eso, eso precisamente me da más miedo. Y vuelve a empezar, el nudo, el temblor, las manos frías y la mente loca a dar vueltas. A buscar soluciones que no necesito y no quiero. Explicaciones que nuevamente no necesito y no he pedido. Empieza a darme escenarios, donde te ríes de mis lagrimas y otros donde besas mis ojos; otros donde me miras con esos ojos vacíos que tanto odio y solo te encoges de hombros y otros en los que lloras sin querer y no me miras. Imagino gritos y reclamos que no quiero, que no tengo, que no puedo hacer. Imagino abrazos y besos tranquilos, y todos, absolutamente todos se sienten reales, posibles, correctos y al mismo tiempo absurdos y tóxicos.

Tóxico, que ha sido la palabra.

Miedo, que ahora es mi realidad.

Y con el nudo en la garganta y los ojos pesados, y con el miedo latente, me pregunto para quien y porque escribo esto.

¿Para ti? Para explicar cómo me siento, como una carta con los tintes de escritora frustrada que tengo, obsesionada con las comas, pues me parece que entre pausas tal vez dejo más claro mi punto o al contrario, lo complico todo tres veces más, cómo tiendo a hacer con todo. Cómo aprendí a creer que hacía, pero tal vez en eso me equivoco también.

¿Para mi? Pues me sirve para organizar mis sentimientos, tal vez para ponerle orden al no sentir nada, que no me importe y al mismo tiempo me importe un montón y sienta un montón.

Miedo. Y es que me sentí usada. La nena que va a estar ahí y ya, porque es una idiota y todas se las cree. Miedo. Porque te vas. Miedo. ¿Porque putas me importa? Miedo. Que chimba que te vas, enserio disfruta mucho. Miedo. Porque soy una idiota.

Miedo. Más bien dejo aquí.

Martes 14.

11:25 pm.

Entonces duele. Todo duele.

[julcsx]

pjunseo​:

      suelta una risita al escuchar la frase del contrario,  una que claramente diría un abuelo.  ‘  bueno,  luchare por abordarlo en la siguiente estación…  ’  responde con tranquilidad,  aguantando las ganas de burlarse sobre su comentario y confirmando que  (  tal vez  ) si desea esa oportunidad,  aunque obviamente no lo diría en voz alta.  ‘  ¿tan yo?  ¿qué hay de malo en mi,  jules?  ’  se siente un poquito ofendido,  pero sabe exactamente a lo que el nouguier se refiere.  no es de su agrado que ahora sea jules quien pareciera tener el control en ese juego;  suelta un suspiro al mencionar a su familia,  si tan solo el contrario supiera que junseo es quien siempre agobia a su familia.  ‘  no me gusta tener que demostrar nada,  supongo que por esta ocasión puedo hacer la excepción  ’  pulgar se eleva hasta altura de labios contrarios,  dejando una leve caricia.  

“suerte intentándolo” de haber sabido que contrario encontraba absurdo su comentario, jules simplemente se habría limitado a rodar los ojos. pero no puede leer su mente, por lo que responde de la forma más desinteresada que puede. pero una alarma se enciende en su cabeza, y es que de alguna forma cree sentir que junseo no se dará por vencido. le resulta algo particular, siempre lo había visto como uno de esos chicos que si no obtienen lo que quieren cuando quieren se largan. “uf, ¿quieres una lista o que?” la burla es notoria en sus palabras y aunque se quiere reír no lo hace. “eres sumamente odioso, siento que no puedo tener una conversación normal contigo sin que tu ego acapare todo el lugar. y eres un presumido” vale, tal vez estaba siendo algo brusco, pero el park había pedido su opinion y a esa altura debería saber que que jules no teme decir lo que piensa. “pero supongo que todos tenemos defectos” busca apaciguar un poquito su frase con eso. ultimas palabras ajenas no hacen mas que confirmar su primer pensamiento: park junseo quiere intentarlo. ¿que clase de multiverso era ese? el gesto lo congela, y su reaccion es tragar en seco. por poco no quita su mano de un golpe, esa invasión repentina de privacidad no es totalmente de su agrado. pero el nouguier tiene algo de clase que debe mantener esa noche. entonces simplemente sube mano propia hasta la ajena para bajarla con cuidado. “ni a mi. pero a veces la situación requiere que lo hagamos, para ver cuanto deseamos las cosas o si las merecemos…”

[emevedea]

Un amor que me llena y que me mata a la misma vez.

Nunca pensé que sentirse lleno pero a la misma vez vacío podría ser posible, que sentirse amado pero también desplazado podría suceder, y si, desde que te conocí soy la mujer más feliz y afortunada del mundo pero también soy miserable cuando me tratas mal y me desplazas.

Después de tanto dolor en el pasado una vez mas me he atrevido a creer en el amor, en la ilusión, en el querer bonito, pero lo que nadie te advierte es que el amor viene acompañado de un dolor punzante que te aniquila el corazón apenas te descuidas, dejándote exhausto y decepcionado pero con más sed de cariño que el día anterior.

Nunca me imaginé querer a alguien con tantas fuerzas hasta el punto de imaginarme y anhelar en mi mente el sueño de una familia feliz, trasladarme a un momento hermoso juntos y sentirme la mujer más dichosa de este planeta. Pero inmediatamente despierto de ese sueño cuando en una disputa me dices que no te importa, que no te duele y que no quieres nada más conmigo. Parece absurdo que algo tan sencillo sea capaz de matar mi corazón en segundos, pero lo mata porque jamás en mi vida cabía la posibilidad de querer con tanta ilusión a alguien, de imaginarme tan siquiera con una familia. Lo más increíble es que contigo lo quiero todo pero me duele tanto tus actitudes que a la vez quisiera solo alejarme y no volver nunca más.

El amor es un sentimiento complicado, te hace sentir en las nubes pero a la misma vez hace sentir que el mismísimo infierno te quema y te desgarra la vida de una manera tan pero tan dolorosa, que a veces es hasta complicado de describir. Tengo tambien la certeza de que el amor es un compromiso, aquella responsabilidad de hacer cumplir una felicidad mutua y a la misma vez entender que se debe mantener con el tiempo, porque de lo contrario no se podría llamar amor.

Debo admitir que en todo este tiempo también he aprendido que el cariño placentero, amoroso y bien recibido es adictivo, así como una droga que te hace sentir la experiencia más maravillosa del mundo, pero que te va matando lentamente sin que te des cuenta, puesto que todos sabemos que de las adicciones casi nadie se libra...

A estas alturas solo se que te quiero, y te querré siempre en todas las dimensiones, vidas y mundos posibles y que este amor es tan peligroso como un proyectil directo al corazón...

Emevedea

[len3313]

Hace mucho que no escribo, no porque no haya querido, si no porque no he encontrado un motivo, una inspiración que valga para volver, porque cuando escribo, dejo mi corazón en las letras, son combinaciones perfectas que intentan igualar mi alma, en donde intento plasmar mis sentimientos y dejar mi esencia.

Hoy encontré un motivo, estoy segura que no es porque me encuentre bajo los efectos del alcohol, porque llevo varias madrugadas sobria, mirando al techo y cuestionándome qué carajo hago con mi vida, escuchando canciones que te dedico silenciosa y anónimamente, canciones en las que te escucho, en cada parte de la letra, y que jamás conocerás.

No puedo entenderme, no puedo entender qué sucede conmigo, con mis sentimientos, me repito una y otra vez que no te quiero, me riño cada vez que te pienso, y luego... me sorprendo sonriendo, recordando tu persona, y me detesto.

En mi cabeza pasan mil riñas sobre lo que quiero de ti, me repito diez veces que no quiero nada contigo, pero hay una pequeña voz, en mi interior, que me dice que es todo lo contrario, entonces me vuelvo a detestar, pongo en tela de juicio mi voluntad, y mis aspiraciones.

Pero entonces... si no te quisiera, ¿por qué sigues presente en mi mente? ¿por qué no puedes dejar de ser protagonista de mis sueños? ¿por qué te miro sonriendo cada que te recuerdo? ¿por qué no puedo olvidar la sensación de tus labios sobre los míos? ¿por qué no puedo dejar de pensar en tu aroma, en cada onda sonora de tu voz, en tu garganta al pronunciar cualquier palabra? ¿en la calidez de tus manos sobre mi cuerpo? ¿en la sensación de ser uno?

¿Por qué tu mirada sonriente viéndome viene a mi cabeza y es proyectada como si fueran una película de vídeo una y otra vez?

¿Por qué escucho tu respiración relajada que me traía paz? ¿por qué te miro feliz y pleno, relajado y tranquilo?? ¿por qué deseo tenerte e inmortalizarte así para siempre?

No puedo dejar de pensar en tu sonrisa de lado hacia la izquierda, no puedo dejar de soñar con besar la cicatriz que tienes en el labio, recuerdo la cálidez de tu risa ronca y sincera, la confianza que te provocaba y cómo el mundo desaparecía.

¿Sabes lo difícil que es pasar todo tu día con una persona y de pronto no ser nada? De pronto no hablar y tener que olvidarte de todo lo que pasaste con esa persona, mi memoria no me permite olvidarte, mi memoria no permite que te deje pasar, sabes que es indomable, sabes que puedo reproducir momentos como si fueran videos.

Así que aquí me tienes, embriagada por el insomnio, el alcohol y la infinidad de la noche, haciendo lo más difícil de la vida, admitiendo mis sentimientos por ti.

¿Qué va a pasar? Lo ignorarás, te alejarás; siempre hemos sabido que yo no soy así, una vez que una persona pertenece a mi vida, esa persona estará siempre en ella, pero también hemos sabido lo sencillo que es para alguien como tú desapegarse, y aquí sólo pierde uno, sólo sufre uno, y ese no eres tú.

Desde el momento en que empecé a interactuar contigo supe que valías la pena, por cómo eres, no estás maleado, no eres malo, eres inocente, eres tierno, eres genuino y eres diferente. Diferente conmigo, una cosa es el Alan que habla con su equipo de trabajo, al Alan que habla con sus hijos como la persona más paciente y el padre más comprensivo y tierno del mundo.

Eres el Alan con uniforme, sin unforme, eres el Alan lleno de lujuria, al que sus ojos se prenden en fuego, y me miraba sediento de deseo, así como el Alan que me procura y cuida a su manera, el que me desea éxito en la vida, el que estuvo para abrazarme y hacerme sentir cobijada, el amigo que extraño y deseo contarle mi vida mientras se acaba el día, escuchar rap, rock, pop, reggaeton, ir y saber que puedo ser yo misma, plena, etérea, sin filtros, hablar del meme más absurdo, o el tema políticamente incorrecto, escuchar música, y compartir la fortuna de una persona que inspira en sus letras, quedarme mirando a la nada mientras escucho tu voz endulzando mi cerebro, mirarte despilfarrado en el sillón, mientras tu respiración pesada y relajada ocupa el protagonismo del ambiente y no tienes qué preocuparte por nada mas que por ser tú; mirar tu lenguaje corporal, cuando pasas tu pie derecho por delante del izquierdo, apoyándote en él, saber cuando ríes por compromiso, por desagrado o por genuinidad, cuando mojas el cigarro con tus labios porque lo sostienes en tu boca y no con tus manos mientras haces otras cosas, tu mirada cuando estás bajo los efectos de un estupefaciente, tierna y triste, las comisuras de tus ojos bajan, y el color verde de las ventanas de tu alma hacen lo posible por mantenerse atentas; la malicia de tu mirada cuando sabes algo que quieres y te limitas por responsabilidad, porque alguien debe ser el adulto de la escena, mientras por tu mente pasan mil escenarios sobre si no fuese ese el caso.

Ver a tu yo de 18, 20 años hablando de parchís, de memes de facebook, de cosas absurdamente infantiles que la gente deja pasar por alto y solo unas pocas personas entienden; cuando te encuentras tan pleno que te desenvuelves y hablas o actúas de una manera que quieres, hasta que de pronto vuelves a la realidad y a recordarte a tí mismo que tienes que ser diferente, y te apagas.

Si supieras las veces que mi cuerpo ha exigido tu cuerpo, sufrirías de frustración y tristeza, el deseo te haría explotar de rabia al darte cuenta que no me tienes para satisfacerte cuando desees.

Eres mi primero, eres algo inexplicable, eres mi gran descubrimiento del deseo, eres el fuego quemando por mi piel, eres el sol quemando mi alma, eres TODAS mis excepciones, eres ese algo al que siempre le he huido o he rechazado en una persona, eres lo que me asusta, a lo que le temo.

Lo que viví contigo es algo que jamás pensé que podría hacer.

Y me pesa, me pesa demasiado, porque sé...

...que nos repetimos una y otra vez que era sin enamorarnos, y yo lo hice, odio el momento en que lo hice, en que me di cuenta que te quería de otra manera, en que necesitaba entregar todo de mí para cuidarte y procurarte, en lo feliz que me hacía quererte y lo dichosa que era y soy por verte pleno.

¿Sabes lo difícil que es admitir que tienes sentimientos por una persona en este contexto?

¿Sabes las noches que he tenido que

luchar contra mí minsa al repetirme que jamás sucederá algo con nosotros? que no puedo aspirar a eso porque tenemos un abundante abismo en nuestras vidas que nos separan, porque no coincidimos en el momento en el que pudimos haberlo sido todo.

¿Pero quieres saber lo que verdaderamente sorprende?

Que te quiero de la manera más genuina en la que alguien te podría y te podrá querer en su existencia, ¿te explico los motivos? Es porque yo no quiero nada de ti, no espero nada de ti, no idealizo nada de ti, yo te quiero simplemente cómo eres y con lo que conllevas, te quiero como un marinero adora el altamar, te estimo como un pintor abriga sus pinturas, te miro con la misma fascinación con la que un ciego mira por primera vez las estrellas.

No necesito nada de ti, tampoco quiero nada de ti, no quiero cambiarte, no quiero persuadirte, no quiero otra versión de ti que no sea la que eres.

Es tan intensamente injusta la vida, que no puedo tenerte y jamás voy a poder tenerte. Jamás experimentarás que alguien te vea con tanto amor como mis ojos te verían deslumbrada por tu persona, ni que el corazón se acelere con el simple hecho de sentir tu aroma o fragancia, que un cuerpo te deseé tanto, porque le encantas tanto; que su cordura se desvanezca y solo pueda pensar en ti, convirtiéndose en polvo con solo tener su frente contra la tuya, rozando narices, sintiendo la atracción hacia sus labios.

Te quiero por lo que eres, por quien eres, y es duro, es duro tener que reprimir todos los sentimientos que tengo por ti, es duro pensarte y no poder decírtelo, es duro escribirte y que no puedas saberlo; como si todo lo que alguna vez aprendí acerca del funcionamiento del cuerpo en medicina no fuera verdad, o simplemente no existiera, mil ciencias jamás podrán explicar el cariño sincero que yo siento por ti.

Imagínate qué impresionante es el hecho de que tú estás en alguna parte del universo viviendo y siendo, y en otra parte del mundo... alguien te está amando de la forma en la que yo podría hacerlo, alguien te está pensando de la forma en la que yo hago, alguien te está procurando a la distancia, alguien se desvive porque que tú estás existiendo.

La tragedia que me define es la digna de una mártir, la cual añora en cada célula de su cuerpo la posibilidad y oportunidad, pero a su vez alberga la desgracia y tristeza de la realidad.

En otra vida... fuimos, y lo fuimos todo.

En vidas próximas... seremos, y lo seremos todo.

Mientras tanto...

...no sabes, y jamás sabrás, la intensidad con la que pudiste vivir un amor como mereces, un amor digno de ti y de lo que vales como persona.

Jamás sabrás... lo que es sentirse la persona más amada del universo, la persona más amada de la historia, a la que las novelas literarias, los personajes y la humanidad misma le quedan cortos, a la que las historias de amor como Romeo y Julieta envidiarían, a las que los grandes escritores pagarían por dejar plasmar con su tinta.

Pero...

¿y si lo supieras?

[brassknucklesrol]

◈ Nombre completo: Jamila Haughton Tavarez.

◈ Apodos conocidos: Missy.

◈ Nacimiento: 11 de octubre de 1996, actualmente tiene 23 años. 

◈ Origen: Nacida y criada en las calles de Miami, aunque como gran parte de la población con procedencia de distintos lugares su sangre es afrolatina. De madre originaria de la región de Santo Domingo en la República Dominicana, y de padre afroamericano nativo de Miami, en concreto del barrio de Wynwood. ◈ Historia: Cuando sus progenitores se conocieron decidieron mudarse a otro barrio dónde la influencia dominicana estaba impregnaba en cada esquina para que la niña creciese rodeada de sus raíces. Para lograr esto la pareja se trasladó al barrio de Allapattah conocido como el «Pequeño Santo Domingo». Dicha zona recibe ese nombre debido al alto número de dominicano que habitan, al igual que Little Havana acoge a una gran cantidad de cubanos. Su padre, ya acostumbrado a la violencia al haber formado parte de bandas callejeras desde temprana edad, no encontraba peligroso que en la calle 20 de NW repleta de comercios con productos baratos, también hubiese una alta tasa de criminalidad desde riñas que terminaban a balazos o trafico de drogas que pasaban desde el trapicheo inocente a grandes cantidades. En el presente la Allapattah se está librando de ese estigma y se está transformando en un área familiar de aire caribeño.

Desde niña vivió situaciones de desestabilidad dentro de las paredes de su propio hogar que generaron en ella el efecto contrario al esperado. Tenía tan solo cinco años cuando el pasado de su padre volvió a ser el pan de cada día: gente desconocida entrando y saliendo de casa, dinero en exceso de origen dudoso y la visión de armas normalizada. Para cuando tenía 10 años aquella vida pasó factura y condenaron a su padre a cadena perpetua por narcotráfico y homicidio en primer grado. Jamila era consciente de que a ojos de la ley su padre no era un buen hombre pero para ella sí, hacía lo que que tenía que hace para sobrevivir y con esa mentalidad siguió viviendo los años venideros, bajo el consejo que le dio su padre antes de que las rejas se cerrasen tras él:

«Tienes que cree en ti porque nadie va hacerlo más que tú misma»

La mala vida afectó a su madre de distinta manera porque para ella el fanatismo religioso respaldado en la fe era lo primero, incluso antes que su propia hija una vez su padre desapareció de la vida de ambas. Al menos de forma física para una de ellas. Iba y venía, dejó de ser una figura estable para convertirse en la sombra de lo que un día fue y debido a eso, Jamila aprendió a buscarse la vida para seguir adelante sin importar a qué precio. 

Los años se sucedieron hasta la quincena, en este momento fue cuando la vida que se había forjado aireosamente se truncó sin ser ella consciente. No era tonta, jamás una se enamora de la bestia sino del humano que hay tras ella y una niña piensa que nada está definido  y que el amor todo lo puede. Incluso cambiar a la persona que vendió su alma al diablo mucho tiempo atrás. Así fue como Lino Esparza entró en su vida. Había sido su perdición desde que sus miradas se cruzaron en Allapattah cuando contaba con la escasa edad de 15 años.  Para entonces Lino no solo había entrado recientemente en la veintena, sino que dominaba las calles en las que ella se movía a diario. Cada punto tenía sus ojos, cada negocio pertenecía a su familia, cada movimiento estaba controlado. Cada chica tenía su marca si así él lo quería. Quizás que la eligiese de entre todas la hizo sentir especial, aunque aquello sonase absurdo nunca se debía subestimar el poder y la ingenuidad del primer amor. Los días con Lino se convirtieron en meses y luego en años dónde todo lo idílico se quedó a un lado: otras chicas, muchas drogas y exceso de violencia, la historia de su padre se repetía solo que ahora era ella quién estaba metida de primera mano y sufriendo las consecuencias. Para cuando tenía 17 se le abrió un nuevo camino limpiar casas a precio de nada, lo único que omitía de aquella época que duró un par de años, quizás por miedo a que los demonios del pasado volviesen, era el trabajo de noche que la joven dominicana tenía. Si de 10h a 18h su herramienta era la escoba, de 23h a 5h era la barra. No supo cómo Lino logró convencerla pero en uno de los múltiples clubs que para entonces, ya más mayor, dirigía había quedado un puesto libre y en ese momento y sin saberlo fue donde comenzó su pesadilla. La agresividad de Lino había ido creciendo quizás al ver que ya no era el único que la miraba y esa exclusividad de ser suya se había convertido en ser de cualquiera que tuviese o quizás simplemente porque era así, pero no había despertado de aquel sueño que comenzó tiempo atrás y siguió bajo su influencia. Cuatro años después fue cuando logró ver realidad y solo tenía una cosa clara: quería huir pero no podía. Fue cuando alguien caída del cielo entró en su vida o como ella llama a Chanelle: su ángel de la guarda. Tomándola bajo su ala se encargó de sacarla del influjo y las garras de Lino de la mano de las Grillz, aquella historia tuvo un desenlace trágico... Al menos para él.

Una nueva etapa se abrió camino, había logrado salir de la toxicidad de los últimos años pero seguía necesitando dinero relativamente fácil, había dejado la escuela años atrás y el futuro del sueño americano no estaba hecho del material que deseaba, por eso Chanelle le procuro un nuevo empleo con buenas ganancias, mejor clientela y dónde cada persona que estaba dispuesta a dejarse 4 cifras podría entrar: el Sweet but Salty. La vida de stripper le generaba grandes ingresos para poder vivir, pero su ambición por más siguió creciendo y en ese momento fue consciente de las habilidades que poseía pero habían permanecido latentes. Recordaba cosas que nadie más hacia y hasta que no investigó no logró ponerle nombre a ese  pequeño don conocido como memoria eidética, esto se traducía en la posibilidad de recordar una imagen al milímetro con tan solo echar un vistazo. Le sirvió para recordar los detalles necesarios para ser buena en lo suyo: robar. El club se llenaba cada noche de hombres con grandes verdes en sus bolsillos, el lugar más indicado para mangar era entre alcohol, sustancias y vicio. Con 21 años ya llevaba más de un año robando algo más que sonrisas: carteras, relojes, teléfonos, joyas y si te descuidabas hasta la ropa interior. Perfeccionó sus técnicas, noche tras noche, pardillo tras pardillo, tanto dentro como fuera del club, no había quién la frenase. Lo que no se esperaba es que un año después, en mayo de 2019, todo cambiase.

◈ Entrada a los Brass Knuckles

Fue del todo y cuanto menos improvisada o como a ella le gusta recordar con diversión: la vieja historia del ladrón robado. En una de esas noches bailando en el club donde el negocio le iba bastante bien y había recaudado casi mil de los grandes en relojes, vio una última pieza que valía todo lo que había conseguido esa noche. El poseedor era un afroamericano de sonrisa llamativa y tatuajes en cada trozo de su piel que no había visto punca pero que parecia derrochar fajos por los poros. La mala suerte, buena en la posterioridad, vino cuando aquel varón se trataba de Macko, uno de los cabezas de la banda más conocida en todo Miami y el continente: los Brass Knuckles, nadie conocía el rostro del varón ni de ninguno de sus integrantes, así que procedió a hacer lo suyo al igual que haría como cualquier otro día. La diferencia de esa noche fue que por primera vez el robo se vio truncado y Macko acabó pillándola, aunque en vez de hacer lo que cualquiera haría y denunciarla para la echasen y exponerla ante sus jefes, el detalle del don que poseía la muchacha no le pasó inadvertido. Tras una serie de pruebas para ver si era de fiar y hasta donde podía llegar, decidió reclutarla para que se uniese a las filas de los Brass Knuckles como ladrona experta otorgándole la oportunidad de comenzar una nueva vida lejos de las barras

Tras aquello su vida dio un giro de 180°, si bien en el club y con su empleo de mano larga vivía bien, la vida que conoce con la banda roza los límites del paraíso: dinero en exceso, buenos coches, buena vida, viajes y sobre todo, una familia. Dedicados al tráfico de armas y coches de alta gama, los Brass Knuckles cuentan entre sus filas con expertos en varios sectores: desde Worm con su habilidad para hackear lo imposible, con Simone con una destreza en la mecánica apabullante a Tito con una puntería impecable. Fue Macko quién le ayudó a perfeccionar su técnica que la convirtió no solo en una ladrona buena, sino en una excepcional potenciando su don y facilitando información a la banda que nadie más podría recordar o hackear. Además, un par de días por semana trabaja en Claws, este salón de manicura y pedicura situado en Liberty city sirve de tapadera para el blanqueo de capital que posee la banda. Cada miembro posee un empleo que le sirve de coartada y gracias a su mano con la lima encontró la excusa perfecta en el local dónde la energía vibrante de la dominicana se siente como en casa entre diseños estrafalarios, color y hermandad.

◈ Otros datos y curiosidades:

— Al crecer en Allapattah creció hablando tanto español como inglés con fluidez, mezclando ambos idiomas de una forma que parece natural aunque siempre saque a relucir su carácter con el primero. ⠀ — Su personalidad podría definirse como pura vida, es vivaz, sonriente y alegre, siempre está bailando, cantando, fumando y riendo. No para quieta ni un minuto, no da tregua ninguna porque estar triste no es siquiera una opción para ella. ⠀ — El mote de Missy tiene su origen en el Sweet but Salty y venía dado por su respeto hacía Missy Elliot, así que cuando se unió a los Brass decidió que ese era el mote que seguiría empleando porque no se avergüenza de su vida en las barras e incluso a veces lo echa de menos. ⠀ — Tras el primer golpe con la banda y lograr una cuantiosa suma, se hizo con una nueva casa en la zona de Miami Beach junto a la playa, dónde pasa gran parte de su tiempo. Vive sola, sin mascotas ni ataduras, aunque a menudo sus paredes están llenas del resto de los Brass. ⠀ — Si algo llama la atención de ella a simple vista es la cantidad indecente de oro que lleva puesto: múltiples colgantes, gran variedad de pulseras, anillos llamativos, cadenas a la cintura hechos por ella, pendientes de grosor. Todo lo que brille y pese lleva su nombre.

[tevedeconaceitunas]

“Usually when people ask how i’m doing, the real answer is I’m doing shitty, but I can’t say I’m doing shitty, because I don’t have a good reason to be doing shitty.” – Bojack Horseman

Para las personas, entender y aceptar que la vida puede llegar a ser miserable es tan tremendo que lo niegan y se aferran a la felicidad como si esa fuera la única razón de existir o de vivir; lo que me gustó de Bojack Horseman es que es todo lo contrario: la vida es una mierda porque lo es y eso no tiene nada de malo.

Podría hablar de lo bien lograda que es la serie, cumple con todos los requisitos de calidad que puede tener una historia y rebasa las expectativas de lo que quisieras encontrar, pero lo que realmente quiero abordar es lo auténtico en la miseria.

Al principio cada personaje me pareció irritante, superficial y hasta cierto punto aburrido, sinceramente esperaba una serie como cualquiera con chistes bobos en donde la burla principal fuera la miseria, como casi cada serie estadounidense aborda sus problemas sociales: burlándose y haciendo de cuenta que no pasa nada; sin embargo, en el momento en el que hay una crítica directa hacia la forma en la cual divinizan la guerra, comencé a prestarle un poco más de atención. Con el tiempo pasé de la risa a la comprensión, a la empatía hasta sentirme extrañamente identificada con la miseria que veía reflejada, y no precisamente porque mi vida fuera idéntica a la que veía en pantalla, pero no creo recordar un mejor momento de desesperación que cuando tuve que enfrentarme a la realidad de tener un trastorno… Tener un trastorno es una mierda, ves todo a través de un espejo polarizado que no te permite mirar la imagen con claridad, a veces hay momentos completamente claros en los que puedes respirar, pero por lo regular el vidrio sólo se va oscureciendo más y llegar al episodio en donde podemos ver la fluctuación de los pensamientos de Bojack, claros, rancios y oscuros, para terminar con la escena donde Hollyhock le pregunta si esos pensamientos (que ella también tiene) sólo son cuestión de la adolescencia; fue un punto de quiebre para mí; yo no tuve esa conversación con alguien más, yo la tuve conmigo.

¿Cómo explicas que de pronto estás tan lleno de ira que no reconoces nada y de pronto estás aventando por la ventana el bebé de juguete de tu madre y después la ansiedad te persigue tan de cerca que necesitas un trago… o pastillas, o clonazepam (unas gotas en unos ml de agua) todo el tiempo?

Los personajes son reales, sinceros, son el producto de vidas manipuladas por sus respectivos entornos, lo básico de su construcción fue intervenido por individuos igual de afectados por circunstancias de las que no pudieron escapar y cada uno a su manera encontró la forma de sobrevivir. Puedes identificarte con ellos sin restricciones, no los ves a lo lejos, más bien ellos se acercan a ti y encajan contigo en esta forma en la que está construida la sociedad en la que vivimos.

El personaje más superficial de todos podría ser el Señor Peanutbutter, sin embargo, su superficialidad es profunda y recurrente, este ser que siempre ha sido protegido por los otros al grado de no poder ver más allá de él mismo, no tiene problemas con expresar sus sentimientos, no sufre por la variedad de las emociones que enfrenta, pero tampoco tiene idea de que alguien está a su lado experimentando cualquier otro tipo de emoción que quizá él no comprenda y volvemos al punto de que en realidad no es su culpa, pero al final sí tiene que enfrentarse a la ironía de sentirse solo, haberse adentrado tanto en él mismo cuando está con alguien más, pero no poder estar sólo; y sí, no es gratuito que esta metáfora de sentir la casa demasiado vacía sea tan recurrente.

Siguiendo con este hilo de personaje, no puedo dejar de mencionar lo maravillosos que son los personajes femeninos, incluyendo cada una de las parejas de Bojack, a quienes las conocemos, pero no realmente por él sino por su forma de interactuar con ellas, él de pronto se vuelve un ente perdido entre las ganas de amor sin estar realmente dispuesto a aceptarlo, mientras ellas enfrentan el panorama, nada diferente, de encontrarse con un ser como él; por otro lado tengo que resaltar la fuerza de la Princesa Carolyn, podría ser el único personaje que logra rescatarse a ella misma bajo sus conceptos y su percepción de la vida, que logra tener lo que quiere porque lo busca, me parece una lección particular en tanto que vivimos en el sueño de cumplir tus sueños, pero pocas veces mencionan que cumplirlos no es como una epifanía, es el recorrido y la acumulación de lo que has hecho para llegar hasta ahí y que una vez que lo logres podría pasar que no es nada comparado a lo que tenías en el ideal y puede resultar que vivir tu propio sueño resulte ser también una patada.

Finalmente, explorar a Bojack y a Diane, personalmente fue muy tremendo, mirar en la pantalla gran parte de las cosas por las que tienes que pasar o estas pasando en forma de dos personajes muy devastados, te hace pensar. Por un lado me dio miedo mirar la posibilidad de lo que podría estar siendo mi vida, negando afectos y dañando a los que sabes que no pueden escapar de ti, mirarlos así, sentir que quizá nadie tiene por qué aguantarte aunque tengas un trastorno, todo eso fue un tanto revelador, pero al mismo tiempo sentí el alivio de saber que no soy la única, aunque mi compañero inmediato sea un caballo de ficción, pero sin importar la razón, sentí alivio y me sentí acompañada, comprendida, abrazada. Con Diane, fue un poco similar, a veces intentas tanto, todo el tiempo para que las cosas funcionen solamente porque si funcionan quiere decir que absolutamente todo lo que has vivido valió la pena ¿y si no funcionan?, no hay respuesta y ese vacío y esa depresión, te estrujan fuerte.

Me encanta lo transparente de todo, me encanta que todo sea tan bello en medio del caos, quizá es el hecho de que no se tenga pudor sobre ningún tema y que de pronto te veas en lo profundo de la mente torcida de alguien, viendo una absurda realidad sin filtros y hasta lo más mugroso reluce una pureza auténtica. Quizá todo esto es lo que sirve para que al final de todo, tengas el valor para pedirte perdón frente al espejo y empezar a reparar el daño que vas causando, sin tomar de pretexto tus propios problemas.

Y miren, yo no sé si realmente lo dijo (aunque no lo dudo), pero alguna vez vi esta cita de Hayao Miyazaki en internet: "No hay personas buenas o malas. Puedes hacer cosas buenas, pero una persona que hace cosas buenas no es necesariamente una buena persona". Más allá de quién lo haya dicho, me parece que es cierto; la vida no son dos polos opuestos, la vida no es una serie de momentos mágicos conectados unos con otros, la vida no es la resolución pronta ni afortunada de cualquier conflicto, la vida es una serie de decisiones que vamos tomando y la forma en la cual afrontamos las consecuencias, me parece que esa es la premisa de la serie, con todo y absurdos, con todo y que a veces no tenemos control sobre lo que pasa en nuestra vida, y por eso es que me parece tan valiosa.

Por Nebulosa del Lobo Oscuro

[misslouder]

Látigo de Culpa – Extra #2

Látigo de Culpa – Extra

POV Jin Chan, después de ser liberado. Situado en el capítulo 6.

Fanfic completo: https://www.wattpad.com/770419962-l%C3%A1tigos-de-culpa-pr%C3%B3logo

Cuando Jin Chan fue liberado, su cuerpo se desvaneció contra el suelo como una muñeca rota. Sintió sus extremidades paralizadas a causa de las mordeduras de aquel látigo infernal y contuvo una maldición entre los dientes. El miedo aun se atenazaba a sus poros, mezclado con la humillación y el pánico.

Una mano cálida se posó en su hombro, y alzando la vista se topó con unos ojos que le hablaban de calidez.

—¿Se encuentra bien, joven maestro Jin? —le preguntó el líder de secta Lan—. Lamentamos un poco la brusquedad, espero que entienda que la situación es algo delicada.

Aquellos dedos sobre sus hombros eran como plumas y apenas sentía su peso. Asintió débilmente, bajando la cabeza en respeto.

—Quisiera… serles de utilidad, pero no sé nada —Contuvo las lágrimas detrás de sus párpados, aquellas que amenazaban con salir desde que entró a esa habitación custodiada por la persona que tomó el liderazgo de su secta a base de amenazas—. En serio, no soy culpable de todo lo que se me ha acusado…

Sintió ahora el toque en la cabeza, y Jin Chan cerró los ojos con fuerza.

—Lo sabemos, no te preocupes, joven maestro Jin.

Más allá, un resoplido se escuchó y siguiendo el rastro del sonido se encontró con la figura del líder de secta Jiang aun frente a él. El líder de secta Lan al oírle, sonrió para sí y pudo advertir que sus labios se entrecerraban, como murmurando en silencio.

—Si no es él, estamos en punto muerto —declaró el Jiang, dejando a un lado deliberadamente su presencia—. Deberé verificar las entradas y salidas de todos los que salieron en los días  que estuve ausente.

—No es necesario buscar, WanYin —adujo el líder Lan, incorporándose para situarse una vez a su lado—. Si nos buscó una vez, ¿quién dijo que fue la última?

—¿Sentarme a esperar que un intruso burle, una vez más, la seguridad de mi secta? —pronunció esas palabras con una dureza que parecía forjada en años de secreto y sombra, enarcando una ceja de agregó un filo aún más lúgubre. Un tono que parecía robarse los signos, y revelaba lo que era una irritación debajo de simples palabras.

Ni siquiera era una pregunta, pensó Jin Chan, estremeciéndose. Respiró hondo y se negó a moverse a menos que se lo indicaran. Lo que tenía frente a él, era un hombre que tenía un gran poder en sus manos. Su secta Jin dependía de su juicio y decisión. Era absurdo pensar que podían ser expulsados, por llevar el linaje de sangre corriendo por sus venas; sin embargo, Jin Chan no quería tentar a su suerte.

Un paso en falso, y su familia podría ser expulsada escoltando un velo de desgracia y deshonra. Para nadie era un secreto que el líder de secta Jiang era repudiado en el núcleo interno de la secta. Por usurpador de un liderazgo y, por la tenebrosidad de su carácter, nadie se había atrevido a decirlo en voz alta.

Se decía que amenazó a todos los viejos Jin, colocándolos en fila bajo el aliento eléctrico de su látigo y Jin Chan ya sentía esas palabras tan claras que eran imposible robarles su veracidad. Sus brazos mallugados eran una evidente prueba. Sin embargo, había sido esa persona quienes les dio, en poco tiempo, el derecho de volver a alzar la cabeza tras aquella penosa caída pese a los rumores que los habían infectado como plagas.

Sus padres habían renegado al inicio, yéndose para no presenciar tal humillación, pero no habían salido de los territorios para presagiar que los que les esperaba afuera era más indigno aún. Cuando se enteraron que el nombre de su secta, poco a poco se lustraba nuevamente, decidieron regresar para observar como todo había sido cierto.

Jin Chan escuchó decir a su padre que lo reconocía como líder.

—…eso es lo que desean, WanYin.

Parpadeó, volviendo de sus pensamientos para notar que los líderes todavía hablaban entre ellos.

—No permitiré la caída de la secta Jin. Los alzaré nuevamente, ya lo hice una vez con la mía —rebatió el líder Jiang y Jin Chan abrió los ojos, observándole. Su alta figura adusta, su semblante severo y hombros rectos. Mirada que guardaban una tormenta y tono que respiraba autoridad, haciendo que muchos inclinaran su cabeza. Por miedo o respeto. Y esa persona estaba luchando por no dejar caer su secta cuando no tenía que hacerlo—. He trazado alrededor de seis planes de contingencia para la secta, y organizado un grupo para averiguar las pérdidas de las reliquias. También me inquietan los discípulos, he establecido un horario para las cacerías y distribuido los grupos. También asigné vigilantes para protegerlos, en caso de alguna novedad. Lo último que deseo es un baja en los discípulos Jin. Ya tienen suficiente con ser degradados.

—Si mezclamos discípulos de su secta y la mía, junto con los Jin, podrán pasar desapercibidos. —agregó pensativo el líder Lan.

—Eso es lo que pensé. De igual forma debería probar la lealtad de alguno de los guardias Jin, solo para asegurarme.

—Puedo dejarle esa tarea a los subordinados que traje.

—Supongo que lo hará, aunque me niegue —Lan XiChen sonrió—. El problema es la aceptación de los mismos Jin. Aún tienen la cara demasiado grande.

—Me parece que no están en condiciones de rechazar —comentó el líder Lan—. Y usted ha mejorado la reputación de la secta en poco tiempo. Ciertamente, no es algo que se pueda discutir.

Jin Chan sabía que eso era cierto.

Una risa pequeña se oyó de los labios del líder de secta Jiang.

—Debo proteger incluso a los que me odian. —Se presionó el puente de la nariz—. La secta debe entender su posición, o tengo que hacérsela a entender. En cualquier instancia, me declino por la última.

—WanYin… —dijo suavemente el líder de secta Lan.

Al oír eso, atónito, Jin Chan se hizo muchas preguntas.

«Debo proteger incluso a los que me odian»

Quería preguntar, quería saber. La pregunta pesaba en su lengua, pero temía más por su vida si la dejaba salir.

¿Realmente quería ayudar a la secta?

Antes de ser llamado, recién le habían notificado que sus estudios iban a continuar y que se asignaron nuestros sub capitanes para dirigir las cacerías. Si repasaba un poco, en corto tiempo, la suciedad que había manchado su secta, su evidente declinación a las sombras, y repudio en el exterior, estaba siendo minimizado por las acciones de ese hombre.

¿Con qué motivo, exactamente? Estaba seguro que no le debía nada a la secta. ¿Todo esto era, por aquel hijo de nadie, Jin Ling?

Jin Chan sintió una punzada de celos. No lo entendía. Sus padres al oírle que fue llamado por el líder de secta Jiang, le entregaron sin siquiera abrir la boca. Aceptaron la decisión, entregándole como un animal al matadero y no se molestaron en rechistar. Y, aquel idiota, alegando que su tío era de lo peor, gritándolo a los cuatro vientos, no se daba cuenta de lo que estaba haciendo por él.

Apretó los puños.

—Ya puedes irte, Jin Chan.

Aquella oración dirigida a él, le hizo parpadear. El líder del loto le estaba observando.

—Sí… —dijo, y mordió las siguientes palabras—: Líder de secta. Gracias por ser atento conmigo —Se puso de pie tambaleante y, cuando sintió que sus piernas desfallecieron, se precipitó hacia delante.

Algo le detuvo, percatándose que no fue su primer auxiliar, sino que chocó directamente con el cuerpo del líder de secta Jiang.

—¡Lo siento! —titubeó, estableciéndose rápidamente, tragando saliva, con el pulso lanzándose a la brava.

—Hmph —bufó el líder de secta despectivo y le dedicó una mirada como si apenas reparara actualmente de su presencia—. Niño, esta conversación es un secreto y no puede filtrarse. Tu secta está en problemas. Ahora mismo, estamos lidiando con los trozos que dejaron los líderes anteriores, mientras más cooperen será más mejor para todos.

Jin Chan asintió, colocando las manos frente a él y se inclinó respetuosamente. Los escoltas Jiang entraron para darle un pase a la salida.

—Ante… mi nombre y, mi secta, guardaré silencio. —dijo obedientemente y con ello fue despedido con ademán.

Solo cuando estuvo entre las puertas en par, siendo tropezado por Jin Ling que exclamó una orden para entrar, atrapó con su oído como el líder Lan le murmuraba algo.

—Si mi opinión personal no te molesta, diría que evitaste que se cayera, WanYin.

—Por supuesto que no, tropezó conmigo.  —gruñó el líder Jiang.

Lo último que escuchó fue la risa de una suave armonía antes que las puertas se cerraran con un gran eco.  Aquella relación que sus ojos presenciaron le dejaron con muchas preguntas. Aun podía recordar, como el líder de secta Lan había logrado hacer retroceder el humor de aquel personaje que se juró que era un energúmeno ser que no permitía clemencia. Podía recordar como los dedos Lan que apartaron la mano que sostenía la famosa Sandu, escribiendo una relación de confianza que era imposible de creer. La forma en que se habían acercado, y las palabras a penas escuchado, le hicieron sentir un calor en las mejillas que sacudió la cabeza para alejarse de esos pensamientos.

Al salir, Jin Ling también expulsado, revoloteaba de un lado a otro, y al verle, le asaltó de inmediato.

—¡¿Qué te dijeron?!

Jin Chan frunció el ceño.

—Se me dio orden de no decir nada, y aunque pudiera hacerlo, no lo haría contigo.

—¡¿Qué diablos sucede contigo?! —se enfureció Jin Ling—. ¡Te recuerdo que ahora soy el próximo líder y me debes respeto!

—¡A quien le debería tenerle respeto es aquel hombre que está haciendo, lo que tú deberías  hacer, en vez de formar ridículos berrinches! —explotó Jin Chan—. ¡Nuestra secta está hundiéndose, y no veo acción de tu parte en evitar lo contrario!

Él lo vio en el exterior. Observó como los Jin ya no eran pisoteados, y aunque ellos se defendían con orgullo, ciertamente no tenían cómo. Su padre tuvo razón. Era indignante, pero las acciones hablaban por sí solas. Lo que dijo el líder Lan también era verdad; no llegarían a ningún lado  si seguían creyendo en un lema que los había abandonado.

Siendo avasallado por el torrente de palabras, Jin Ling se quedó pasmado.

—Que… —articuló.

Jin Chan bufó con exasperado.

—Oí por los chicos que en estos últimos días que tu tío se fue, tuviste una competencia lamentable, pegando gritos por todos lados y nadie oía tus órdenes. Supongo que no me sorprende. Vaya líder nos tocó.

—¡Cállate! ¡¿Acaso olvidas tus propias acciones ante los otros discípulos?! —rebatió Jin Ling—. ¡No me hables de moral, cuando no la tienes!

Sintió la mano de Jin Ling cerrándose alrededor de su cuello, con el puño temblando, y ante su última derrota en el banquete pasado, Jin Chan abofeteó su mano con fuerza.

—Ja, piensa lo que quieras, solo estoy diciendo la verdad. Si quieres que te tome en serio, empieza por pensar un poco en nosotros. Incluso por los que te odiamos, eso lo dijo tu tío. —Esbozó una sonrisa—: Quiero decir, el líder regente. Aunque dudo que lo entiendas, solo eres un mocoso que piensa en sí mismo.

Caminó hacia el frente, ajustándose las solapas de la túnica con elegancia.

—¡¿Te dijo algo de mí mi tío, dímelo?!

—¿Tu tío? —Jin Chan se rió—. Tu tío tiene cosas más importantes que lidiar ahora.

Con ello, partió en retirada. Y antes de dar un paso más, una voz desde atrás le llegó:

—Voy a demostrar que soy digno de ser el líder de secta Jin, Jin Chan.

—Espero ver eso.

Siguió adelante, perdiéndose en los infinitos corredores que se abrían en el estómago de Lanling Jin. Sus brazos dolían y ante tal penosa escena, no sabía cómo se sentía. 

¿En verdad dijo que le tenía respeto al líder de secta Jiang?  ¿Después de lo que le hizo?

Observó el palacio Jin, aquel que ya no tenía orgullo con el que alzarse. Si el líder de secta Jiang era capaz de evitar la caída de esos muros, sabría que sus palabras habían sido ciertas.

Por ahora, solo quería descansar.

[seleneysuluna]

Capítulo 7: El moribundo Sr. Reserva de Comida y Ruan Qiuqiu comienzan la historia de la difícil vida de un lobo y una humana en el mundo primitivo

Las razones por las que Ruan Qiuqiu quería hacer todo lo posible para salvar al lobo gris eran complicadas. No era solo porque estaban casados ​​y él podría proporcionarle un lugar seguro para vivir mientras él estuviera vivo.

Estaba más influenciada por una simpatía que no podía expresar con palabras y también... una esperanza explicable.

Ella esperaba que él no fuera tan retorcido y terrible como se rumoreaba, y que la vida de ella fuera como las heridas del lobo, mejorando lentamente.

De esa manera, no estaría tan sola en este antiguo mundo de fantasía de humanos, demonios y diablos.

Después de todo, la única persona con la que tenía una relación en este mundo era este lobo gris.

Si él moría...

Ruan Qiuqiu respiró hondo. No quería imaginar la vida solitaria y difícil que la esperaba. Era demasiado aterrador.

Sacudió la cabeza y se obligó a calmarse.

Estiró las puntas de sus dedos que se habían adormecido por el frío y trató de sentir el elemento de agua en el aire circundante. Después de guiar lentamente la habilidad de su cuerpo, pudo condensar una gota de agua curativa con gran dificultad.

Soportando el agudo dolor en su cabeza, se inclinó sobre el Sr. Lobo Gris en la cama de piedra, le agarró suavemente la barbilla y le dio la gota de agua con la otra mano temblorosa.

Para no desperdiciar, Ruan Qiuqiu ignoró el decoro y secó suavemente sus labios pálidos después de darle la gota de agua.

Aunque la naturaleza demoníaca del lobo gris disminuía la temperatura de su cuerpo para su autoconservación, un poco de calidez permanecía en sus labios.

La sensación de tocar sus labios suaves y sorprendentemente cálidos se sintió maravillosa.

Ruan Qiuqiu no pudo resistirse a tocar sus labios de nuevo antes de volver abruptamente a sus sentidos y tirar apresuradamente de sus dedos que estaban a punto de congelarse como zanahorias. Ella presionó débilmente su cabeza mientras sentía punzadas de dolor.

Afortunadamente, el supuesto pervertido y violento Lobo Feroz estaba inconsciente. De lo contrario, ¿cómo podría explicar sus acciones? Parecía que ella se estaba aprovechando de él y no lo trataba con respeto.

Pero resultaba que así es como los labios de un humano masculino... No, los labios de un demonio masculino se sentían...

Las puntas de las orejas de Ruan Qiuqiu se sentían algo calientes. Se compuso, gastó la mayor parte de su energía para condensar otra gota de agua y alimentó al Sr. Lobo Gris con la gota.

Esta vez, no se atrevió a tocar sus labios. Ella solo observó la tez del lobo mientras soportaba la débil sensación cuando usaba hasta agotar su habilidad.

El efecto del agua curativa debería ser obvio. No podría dejar de preocuparse hasta que viera que él había recuperado algo de vitalidad.

El cielo se había oscurecido y la luz que venía de la esquina de la cueva también se había debilitado mucho.

Ruan Qiuqiu abrió mucho los ojos para buscar cualquier indicio de mejora en la tez del Sr. Lobo Gris.

De hecho, era muy guapo ...

¿Fruncía las cejas oscuras de dolor? Había arrugas de aspecto feroz anidadas entre sus cejas fruncidas. Sus ojos eran largos y estrechos. Sus pestañas espesas y densas no se curvaban tanto y parecían dos pequeños abanicos que temblaban ligeramente.

El Sr. Lobo Gris tenía círculos oscuros poco saludables debajo de los ojos. Al mirar con cuidado, podía ver su nariz era recta y que esos labios ligeramente cálidos, pero mortalmente pálidos, estaban apretados.

Era el demonio lobo más incomparablemente guapo que había visto en su vida. Pero, eso solo era cierto si ignoraba esa atroz cicatriz que iba desde su frente izquierda hasta debajo de su párpado derecho.

Aunque esa cicatriz larga y profunda no lastimó los ojos del lobo gris, arruinó su rostro exquisito y hermoso.

Esa herida no se había curado por completo, y apenas podía ver las partes de la carne ensangrentada que no habían formado costras. Le hacían parecer extraño y absurdo.

Realmente era un demonio lobo muy lamentable.

Estaba desfigurado, lisiado, ciego y abandonado por su tribu cuando se acercaba a su muerte.

Mientras Ruan Qiuqiu observaba cómo las mejillas del Sr. Lobo Gris ganaban color lentamente, pensó en cómo ese cachorro de lobo había estado mordisqueando la nieve.

Ruan Qiuqiu miró en silencio el vientre demacrado del Sr. Lobo Gris, luego tocó su propio vientre demacrado. Suspiró en silencio.

Si no fuera por el hambre, ¿este demonio lobo anteriormente digno estaría dispuesto a cambiar a su forma más débil y mordisquear nieve? Estaba peor que ella.

Por lo menos, ella tenía comida y pieles de animales. Este esposo suyo realmente no tenía nada más que su carne de lobo y esta cueva fría.

Con los ojos llenos de lágrimas de nuevo, Ruan Qiuqiu se levantó de la fría cama de piedra y extrañamente sintió un indicio de consuelo en ese pensamiento.

Mirando a cierto lobo, que parecía estar inconsciente, ella bromeó:

-Tienes que seguir viviendo, de lo contrario, realmente te convertiré en cecina de lobo, Sr. Reserva de Comida.

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Poco a poco, el viento frío entró en la cueva. Ruan Qiuqiu pasó unos minutos descubriendo la estructura de la cueva y contó las posesiones de su esposo.

Esta cueva podría considerarse bastante grande con una altura impresionante. Al entrar, había un espacio abierto de unos 20 metros cuadrados. La piel y la sangre del Sr. Lobo Gris habían caído sobre este espacio abierto.

Después de dar varios pasos hacia el interior, la cueva se hacía más estrecha. A la vuelta de la esquina, había un dormitorio de unos 30 metros cuadrados. En la parte más interna de la habitación, había una gran cama de piedra plana. Probablemente era raro tener una losa de roca plana tan grande. Parecía recién hecha.

Si no se dobla la esquina y se sigue caminando directamente desde el espacio abierto, se verá una pequeña sala de almacenamiento. Parecía tener solo unos cinco o seis metros cuadrados y tenía una olla de piedra fría y varios cuencos de madera. Estas cosas también parecían recién hechas.

Además de la olla de piedra y los tazones de madera, el almacén también tenía varias piedras planas, algo de leña seca y dos pedernales. El dormitorio también tenía una mesa de piedra y un taburete de piedra.

Aparte de esas cosas, Ruan Qiuqiu no encontró nada más.

Suspiró y sonrió con ironía. Sentía profundamente que la vida era realmente difícil.

Esta historia de vivir en una cueva con un bosque afuera comienza con solo un lobo como compañero.

En cualquier momento, podría ser asesinada y devorada por un demonio o un diablo. Esta vida no tenía garantías. Deseó poder volver a su mundo postapocalíptico y vender agua. Por lo menos, tendría lo suficiente para comer y tendría la ropa y el refugio para mantenerse caliente en ese mundo.

Sin embargo, Ruan Qiuqiu solo consideró brevemente la idea de quejarse. Rápidamente se recompuso.

Escogiendo un lugar que no estaba en la trayectoria del viento, construyó una estufa simple con las piedras planas en el cuarto de almacenamiento. Colocó la olla de piedra con un fondo bastante fino sobre la estufa y trajo nieve limpia del exterior con un cuenco de madera.

Trajo un poco de leña seca, recogió el pedernal con los dedos que le dolían por el frío e intentó varias veces antes de que finalmente encendiera un fuego.

Mientras esperaba que la nieve se derritara e hirviera, Ruan Qiuqiu corrió de un lado a otro varias veces para limpiar la sangre del Sr. Lobo Gris dentro y fuera de las cercanías de la cueva.

Aunque no sabía si esto sería útil o no, el olor de la sangre fácilmente podría atraer a las grandes bestias. Aunque creía que si el Sr. Lobo Gris cambiaba a su forma de lobo gigante, podría derrotarlos, estaba segura de que tendría que pagar un precio amargo.

Sería mejor evitar los riesgos tanto como sea posible.

El cielo se había oscurecido gradualmente. Ruan Qiuqiu miró el bosque algo misterioso que estaba lleno de árboles gigantes y se estremeció.

Aunque su situación actual era un poco peor que la peor posibilidad que había imaginado antes de casarse aquí, no importa qué, todavía tenía que seguir viviendo.

Ella todavía tenía su habilidad de agua, y había leña en la cueva. Podrían arreglárselas con las pieles de animales y la comida que ella trajo. Si ellos fueran frugales con la comida al comer una vez al día, soportaran un poco de hambre y bebieran más agua, podrían racionar las provisiones durante diez a quince días.

Una vez que ella descansara un poco y se sintiera mejor, podía salir a cazar o cambiar la sal por comida.

Sin embargo, la cantidad de hierbas que había traído definitivamente no sería suficiente. Tenía que encontrar una forma de conseguir más.

Pero en este momento, la tarea más urgente era tratar las heridas del lobo. Después de eso, cocinaría y comería algo para calentar su estómago y reforzar su fuerza.

No era solo el lobo el que parecía estar en su último aliento. Sintió que ella también iba a colapsar. Su visión se estaba volviendo cada vez más borrosa. Ruan Qiuqiu levantó la mano y mordió el brazo con fuerza. Usó el dolor para mantenerse consciente mientras volvía a tropezar en la cueva.

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Mientras el lobo estaba en su lecho de muerte y Ruan Qiuqiu estaba haciendo todo lo posible para descubrir cómo sobrevivir, la Tribu León del Viento celebró con vítores y risas.

No era solo porque habían obtenido 300 jin de sal de la Tribu Lobo de Fuego y resolvieron la crisis por la falta de sal. También era porque el guerrero más poderoso y guapo de su tribu de la generación más joven, Lu Ziran, había regresado con varias presas gordas.

Al enterarse de que Lu Ziran había regresado de cazar, Rou Yuerao salió de inmediato con los demonios león para saludarlo. En el espacio vacío en la entrada de la Tribu León del Viento, había una pila de varias presas enormes.

-Eres un tipo impresionante, cazando una bestia de trueno de dos cuernos. Mirando su cuerpo, deben ser unos cientos de jin. Eso es suficiente para que todos los demonios de la tribu coman todo lo que quieran en una comida.

Un demonio león de edad algo avanzada estaba mirando felizmente a la bestia de trueno de dos cuernos que tenía una longitud de casi tres metros. Se frotó las manos emocionado.

-Sí, ustedes incluso atraparon un ciervo gordo del oligoceno. Son muy difíciles de atrapar. -Otro demonio león también estaba sonriendo mientras decía-: Con tanta comida, me pregunto si el jefe nos permitirá tener un festín.

Al escuchar estas palabras, un hermoso demonio león, que estaba parado en medio del equipo de caza, dijo:

-Tío Li, solo ha pasado medio mes de invierno. A pesar de que cazamos muchas presas esta vez, todavía necesitamos racionar nuestra comida -dijo el demonio león esas palabras tranquilamente.

Había una intención sonriente en sus hermosos rasgos faciales. Sus movimientos eran distinguidos y vestía un abrigo de piel de animal completamente negro, lo que hacía que el demonio león pareciera aún más valiente.

Este era el demonio león que se convertiría en un rey demonio en el futuro: Lu Ziran.

-Jaja, solo estamos bromeando. ¡Te lo estás tomando demasiado en serio!

El demonio león de mediana edad, el tío Li, le dio a Lu Ziran un golpe amistoso mientras sonreía. Señaló las dos pieles de armiño cuidadosamente procesadas que Lu Ziran sostenía y le guiñó un ojo.

-¿A qué mujer demonio planeas darle estas dos pieles de armiño?

-¿Qué quieres decir con demonio? Se los está dando a esa humana, ¿verdad?

No estaba claro quién había dicho esas palabras en el grupo de demonios leones, pero todos se rieron de esas palabras.

De pie en un grupo de demonios femeninos muy amigables, Rou Yuerao se sonrojó en silencio.

Recordó a Lu Ziran diciéndole que encontraría algunas hermosas pieles de armiño para ella si tuviera la oportunidad cuando saliera a cazar esta vez.

Todavía recordaba cómo la había mirado con una mirada gentil cuando dijo: "Sólo el color de los armiños puede igualar la belleza de Yuerao".

Entonces, por supuesto, Lu Ziran le estaría dando estas dos pieles de armiño.

Justo después de que Rou Yuerao sonrió ante este pensamiento, escuchó a una demonio cercana, con quien tenía una relación bastante buena, decir en broma:

-Lu Ziran, no es fácil atrapar armiños y les vas a dar Yuerao a ambos. ¡Realmente tratas a Yuerao de manera muy especial!

CAPITULO 6 | CAPITULOS | CAPITULO 8

[lilietherly]

[MiniFic! Mystrade]

Basado en los personajes de Sir Arthur Conan Doyle.

Quinta parte ❤️

Sexta parte.

Séptima parte ❤️

(Capítulo editado :D)

* * *

La aprehensión atacaba a Lestrade más fuerte y más duro de lo que hacía el dolor en sus miembros. Cada señal que le enviaba el robusto caballero decía claramente cuánto disfrutaba sus palabras y miradas, sin embargo, parecía que repentinamente algo andaba mal. Del cielo claro, aun a pesar de las nubes en la lejanía que representaban a Charles, se veía entrando en una tormenta diferente, navegando en un barco a la deriva y sin capitán al mando.

Mycroft primero parecía orgulloso ante el hecho de que hubiera demostrado abiertamente su emoción al saberse entre sus brazos, luego lo rescataba sacándolo del hospital… y casi al segundo le mostraba esa clase de rostro. Esos gestos malditamente conocidos. Comenzaba a cerrarse, ocultando sus emociones, ¡cómo si no pudiera saberlo! Tras su espalda cargaba su temporada de conocer a Sherlock Holmes para saber cuándo un hombre intenta mantener encerrado bajo candado su corazón.

Y él impediría que precisamente este hombre se cerrara. En sus manos se disponían ya las pistas necesarias para saber que Mycroft correspondía a su sentir al menos una parte, e importaba en absoluto el temor al rechazo o la nula experiencia de Greg si de cualquier manera todavía fuera insuficiente, ni siquiera las posibles consecuencias contra su persona —por mencionarlo, el apellido del hombre o la dulce forma en que lo trataba— lo obligarían a mantenerse quieto. Habría una mejor seguridad sobre el futuro en su compañía, en lugar de pensar cuanto pudo haber sido de permitirle alejarse sin hacer un mínimo progreso.

Dar el primer paso, casi contrario al valor que esa resolución firme podría tener, se le antojaba un imposible.

No estaría jamás seguro de cuánto el hombre aceptaría, hasta el momento tuvo suerte, evitaría saber el límite al topárselo de golpe. Tantear el terreno y quizá seguir la línea de lo que conocía aparentaba ser una opción viable, aun si quisiera inclinarse y probar sus labios o tocar otra cosa aparte de sus manos suaves, la distancia impuesta lo frenaba, iniciar algo y aparentar no hacerlo sería difícil, por no decir que parecería un tonto si llegara a fracasar.

Mirando al exterior se alegró de ver la cantidad de camino recorrido, ansiaba llegar con tiempo para obtener al menos un ápice del corazón de Mycroft. Enredado en sus pensamientos, carecía de la preparación mental para tomar como dictaba su entrenamiento la bala que atravesó el coche desde atrás hacia delante, rozando apenas unos centímetros las puntas levantadas de su cabello revuelto y el grueso brazo de Mycroft. No supo los segundos que tardó en reaccionar, mas al hacerlo su salvador ya lo cubría usando su cuerpo, el cerebro de Greg comenzaba a procesarlo cuando de inmediato un fuerte choque estuvo a punto de voltear toda la cabina, interrumpiéndolo. Sintió claramente el esfuerzo que hacían los caballos en la búsqueda de obedecer las órdenes del cochero.

Oía gritos y los cascos golpeando firmes contra el suelo, detonaciones múltiples perforaban la madera de su ya delicado escudo. ¿Por qué Gregson no le dio su arma? Un proyectil atravesó la camisa de Mycroft, tuvo menos de un segundo para descubrir la falta de algún rastro de sangre. Ganando de ese hecho un poco de fuerza y haciendo a un lado las quejas del señor Gran Hombre pidiéndole que se mantuviera quieto, Lestrade se levantó, mirando a través de la ventana durante al menos un latido acelerado hacia la avenida, acto que le costó tres disparos más, pero le valió para hacerse con una rápida ruta de escape.

—¡A la derecha en Royal Road! —gritó, impaciente por saber si el conductor, quien incomprensible y afortunadamente seguía vivo, le había escuchado. Tuvo la oportunidad de observar la ventaja de al menos tres coches contra, quizá, dos hansom persiguiéndolos, ese hecho le dio una buena porción de ánimo.

En cuanto sintió cómo viraban su mente también dio un vuelco. Cerró los ojos, mantuvo la esperanza de ayudarse y no causar mayor problema. Siguió dando órdenes. En algún punto Mycroft terminó encogido en una esquina, sentado en el suelo entre los asientos, con Greg sobre sus piernas y aferrado entre sus brazos. El inspector no pensó mucho en ello, al contrario, en esa posición aprovechaba un par de cada tantas vueltas para levantarse y verificar que sus instrucciones se seguían al pie de letra. Lo hacían.

Tanto que en un transcurso menor a lo calculado, en el galope de los caballos se vio reflejado cierto nivel de calma. Comprensiblemente resaltarían mostrándole al mundo todos esos agujeros; en un convenio silencioso entre ambos decidieron detener el coche. Y el contexto lo desmeritaba, la idea fluyó contra su deseo, un poco de culpa lo atacó al pensar en que la vestimenta desgarbada del conductor resultaba graciosa. Lestrade no supo la cantidad principesca que Mycroft debió darle al hombre para comprar su silencio y cubrir los gastos de reparación, supo que bastó al verlo marchar sin decir palabra. Con eso, pronto se vio dentro de una nueva cabina. Su ángel era rico. Casi no se sorprendió.

Esta vez sin ninguna demora llegaron, entrada la tarde, más cerca de la cena que de la hora del té. Hasta ese entonces ninguno pronunciaba palabras que se alejaran de los monosílabos. Entendido completamente al presenciar esa serie de sucesos tan espantosos, quienes aún no alcanzaban a cortar el ánimo del inspector, que no fue creado para soltar las cosas a pesar de las tempestades. Podría llamarse terquedad o estupidez… tal vez las dos o ninguna. Como sea que fuere, evitar pensar que el atuendo antes elegante y pulcro de Mycroft ahora sucio, desarreglado y decorado con uno que otro hueco; se miraba endemoniadamente salvaje y atractivo, le pareció una tarea quimérica. El oscuro cabello enmarañado, los rasguños superficiales o la camisa abierta casi al punto del diafragma, tampoco hacían algo en contra de su mente perversa.

El sitio consistía de una casa de dos plantas camuflada en un área urbana de edificios parecidos entre sí, prácticamente iguales, aunque solo unos cuantos estaban habitados. Sencillo, sin algo que llamara la atención, dedicada a resguardar mujeres que huyen de sus maridos sin opciones a dónde ir, no ha inspectores escapando de… conocidos homicidas. Así pues, la decoración del lugar se dedicaba a la tranquilidad de féminas asustadas, por tanto al dar un paso adentro los toques de delicadeza y suavidad no tardaron en manifestarse. Tal como la situación iba encaminada, Lestrade contendría las quejas al menos el resto del día.

Mycroft hizo gala de su valía hasta que fue colocado cuidadosamente en uno de los dos sofás en la sala, tras abrir con la llave escondida bajo una roca, caminar despacio superando la recepción, virando hacia la izquierda y llegando por fin. El hombre resopló de cansancio y sed cuando se sentó en la silla a un lado. Sin resquicios de energía o ideas que expresar.

Al no conseguir palabras que agradecieran las diez vidas que en definitiva debía compensarle, Greg mantuvo el silencio. Cojeando llegó a la cocina, intentaría alivianar de su presencia a Mycroft, tenía la excusa de ir por agua. Sus heridas dolían en cada paso, lo tomó como una especie de penitencia, haber incluido a un inocente en su trabajo se le hacía completamente imperdonable, peor aun tratándose de él. Sí que sabía cómo alejar a un hombre. ¿No se supone que se limitaría a llegar y quizá robar un poco de su atención? Tomando en cuenta lo sucedido se sorprendería mucho de poder ser considerado un simple conocido. Lejos de su positividad inicial, volviendo irrelevante los pensamientos al respecto de la nueva apariencia desgarbada, Lestrade quería tener la oportunidad de mirarlo un poco más.

Lo necesario para grabar de nuevo el atractivo rostro en sus ojos y dar una despedida honorable a lo que pudo haber sido. No se haría el tonto, ante los hechos recientes, ya sea o no su culpa, seguro que ni él mismo superaría fácilmente los roces con la muerte por quien apenas conocía. La conexión o lo que sea que hubiera sentido carecía de la resistencia suficiente. Si bien esto le incumbiera unilateralmente al señor ojos de niebla.

Suspiró, llegar a la cocina le costaría subir tres escalones. Evidentemente no regresaría o pediría ayuda de nuevo, tuvo que tropezar media docena de veces, al final lo consiguió. Vio una jarra llena en la pequeña mesa del centro. Dejó el pesado saco en una de las sillas alrededor, mirando la calidad de la tela y que en el gran cuerpo de Mycroft calzaba tan perfecto, seguramente la prenda valía tanto como su casa —o quizá el doble.

Suspiró de nueva cuenta… ¡Greg quería estar con Mycroft!                            

Cada sentimiento, aunque irregular e ilógico, provenía de una emoción verdadera, completa, real, latía en su pecho y resonaba en su mente. Pensar en todas ellas siendo el vacuo resultado de alguna endeble conexión jamás formaría parte de una conclusión satisfactoria. Sabía que no podría obligar al hombre a sentirse igual, mucho menos ahora, de su parte al parecer la decisión estaba ya tomada. Aceptaría sin reclamos que huyera de su vida si lo deseaba, al ser consciente del daño hecho nunca lo perseguiría, aunque al menos lo haría escuchar sus disculpas. Sin pelea lo dejaría marcharse junto a su corazón. Lo soltaría aun si después de un intenso segundo encuentro hallar a alguien como él o compararlo contra cualquiera se le apeteciera un absurdo.

No querría más. No iba a buscar más. Con suerte aquel par de encuentros le servirían lo que le restara de vida.

—¿Inspector? —Lestrade tardó un segundo en reaccionar. Haciendo válida su excusa acudió al llamado cargando un vaso. Bebió la mitad antes de abrir la puerta y enfrentarlo, el líquido humedeció sus labios resecos. La frescura eliminó un poco la fatiga. Descubrió a Mycroft al pie de los tres escalones. Por inercia le extendió el agua, su corazón se saltó un latido al verlo tomar sin limpiar el contorno—. ¿Debería comunicarse con alguien? No sería un buen movimiento quedarse con un civil que no pueda protegerlo sin aumentar su número de heridas —dijo mientras intentaba peinar hacia atrás sus oscuros cabellos. Decepcionado, el inspector notó la camisa cerrada, se despidió solemne y ridículo de la blanca piel.

Greg no creyó en la veracidad de lo que había oído. Mycroft le salvó la vida al tiempo en que le otorgó recuerdos que llevaría presentes hasta su muerte y aun así… aun así… aun así se atrevía a desmeritar con esas horrorosas palabras su esfuerzo. Se negó a tomar eso como caballerosidad o modestia. Debería en cambio estar cobrándole lo que sin duda hubo gastado, fuera incluso de los confines monetarios, en realidad parecía crítico el decirlo sinceramente o el hombre nunca lo entendería desde su perspectiva.

—¿Le sucede algo, inspector? —cuestionó, dejando el vaso en el suelo a su lado y levantando un poco los brazos en caso de alguna recaída.

—Un momento, deme un momento, yo… no sé cómo decirlo. —Mycroft le mostró un rostro cubierto de extrañeza.

Lestrade se confundía pensando en qué palabras usar. ¿Cómo encontrar en su vocabulario el agradecimiento perfecto? Convenía dejar los hechos muy en claro, sin lugar a dudas o espacios en donde entrara la menor inseguridad. Ese hombre… ese hombre maravilloso no se merecía menos que un mar de gratas benevolencias. Se tragó de un bocado las sobras de su nerviosismo, sabiendo ya lo que debería hacer. En la cima sobre las cortas escaleras pensó que, a pesar de ser la altura perfecta, la distancia separándolos no. Rechazó la ayuda de Mycroft para bajar un escalón.

—Dígame si puedo…

Greg lo besó. De puntillas, con solo un brazo para atraerlo rápidamente y sostenerse de los gruesos hombros. Su corazón pronto saldría disparado de su pecho, esa clase de atrevimiento podría ser recompensado de la peor manera, tampoco es como si lo hubiera pensado luego de llegar la cuenta a tres segundos. Sin embargo no importaba en absoluto, su boca contra la de Mycroft era en definitiva un primer beso del cual estar orgulloso para toda la vida.

Sintió sus manos anchas tomándolo por las caderas acercándolo hacia él y nada quiso hacer contra los labios ajenos invitándolo a moverse.

A su propio entender, le correspondió de inmediato.

(😚❤️💕💞✨)

(Aquí un hansom :3)

[paranoidandreaoid]

No sé escribir bonito

La música me gusta triste y las versiones acústicas me gustan más. Puede que sea porque soy emo, puede que sea porque relaciono la sinceridad con los sentimientos profundos y hondos.

Pueden ser las dos cosas.

Me gustan los autores que escriben burdo, agrio, los que narran en palabras duras lo que sienten, y por lo regular, los que hablan de tristeza, del amor como dolor, de la vida como un pesar.

Yo siempre digo que no es que esté triste o deprimida sino que naturalmente ese es el género literario, musical y cinematográfico que a mí persona le transmite algo.

No creo que mi obsesión resida en la tristeza. Mi obsesión desde siempre es la sinceridad, me obsesiona desvestir a las personas hasta verlas reducidas en su mínima versión dónde ya no pueden esconderse en una sonrisa. Desarmarlos de sus trucos y recursos, conocerlos solos.

Actualmente vivo una realidad muy compleja pero que a la par es la vida más feliz que he conocido. Este año he vivido por primera vez la apropiación de todos mis asuntos, dejé de evadir temas, todo está en mi agenda, no estoy ignorando nada, estoy haciendo frente a todo lo que me ocurre.

Difícil, algo súper difícil.

Pero eso es para mí la felicidad. No es que me guste sufrir, es que no me gusta la felicidad con atajos.

Rara vez creo en los sentimientos de felicidad porque la mayor parte del tiempo solo es evasión, por eso no creo mucho en la felicidad de los demás, pero pues, aunque sea evadiendo eso es felicidad para ellos.

Sergio es ese reto para mí. Comprender la felicidad de otros modos distintos a los crudos en los que la conozco, dónde la felicidad cuesta mucho y dura muy poco.

Por eso no escribo casi nunca de Sergio y de la felicidad porque suena siempre tan idílico, tan falso, pero basta una plática con él para creer que todo es fácil.

La facilidad de la felicidad.

De los 3 años juntos entre idas y vueltas, 2 años me resistí a entender su gozo... en lugar de simplemente gozar con él, ese era sencillamente el gran truco.

Él logra percibir sin mucho engrane lo mismo que yo percibo de los demás con tanta amargura, él no evade lo horrible de las personas que nos rodean, simplemente las acepta, no pretende aleccionarlas.

Y es más, no necesito generalizar, me ha amado a mí a pesar de todo el daño.

Él tiene conmigo la consideración que yo tengo con todo el mundo. Es curioso lo mucho que critico los juegos de los hombres: no clarificar nunca con la otra persona lo que están sintiendo, mantenerse "cool", no intensearse con lo que de verdad los está quemando por dentro; y yo ahí persistía. Fue lo que ví desde mi casa, el abuelo y el padre patanes, indiferentes; la mujer esforzándose por esos días en que de repente las cosas funcionaban, por esos momentos de apertura emocional que eran oro.

Ese juego cansado de buscar el amor en quien desprecia, así aprendí que funcionaba el amor entre dos.

Y de repente Sergio, llega haciendo todo lo contrario, expresando todo apenas conociéndome, explicándose con palabras, con abrazos, con cariño, todo el tiempo. Era lo más dulce.....

Lo más absurdo.... Lo más abrumador.

El organismo se resiste, continúa anhelando las dinámicas ya conocidas, lo que le hace sentir seguro: no me busques tanto, no me sigas tanto, no me escuches tanto, no esperes tanto de mí.

Complacer momentáneamente a los extraños que no dan nada por mí es más fácil que tener que asincerarme con alguien de manera constante.

La sinceridad que tanto añoro siempre observar en los demás se me presentó sin batalla enfrente y yo quería devolverle las capas, "no tan rápido, ¿dónde está el truco?"

Sergio llegó a demostrarme que estaba yo invadida por el mismo mundo que me tenía tan decepcionada, me hizo confrontar cómo me la había pasado buscando personas erosionadas en las que no echaba raíz nada porque eran igual a las personas de las que yo había aprendido el amor.

Ha sido difícil dejar mis capas, dejar de buscar corazones qué sanar y dedicarme al mío, ha sido difícil tener la atención de una persona honesta con una moral, integridad y honestidad tan alta. La única estrategia que funcionó y que me ha logrado traer hasta este momento después de 3 años ha sido dejar de pensar y aprender a sentir.

Seguir el camino donde me siento bien, seguir a las personas donde me siento cómoda siendo yo misma, mover mis pasos por dónde me siento en paz.

Yo nunca escribo cosas bonitas porque me molestan las cursilerías, pero de las anécdotas más hermosas que tiene mi vida es algo de lo más cursi. El día que sin palabras en un abrazo dije te amo. Y es una historia tan íntima que es difícil sustentar su veracidad, pero... Sólo los dos que lo sentimos, lo vivimos, sólo nosotros dos sabemos ese día qué pasó.

Sólo Sergio y yo hemos sentido toda esta historia, solamente así se logra superar tantas cosas.