#que bajón coño
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Tercer año consecutivo de oposiciones, no me lo puedo creer. Justo el año que me había planteado hacer un poco de vida social, apuntarme a un club de juegos de mesa, de recreacion histórica o de teatro, o de cualquier cosa, para al menos conocer un alma en mi propia ciudad, y justo cuando me propuse intentar hacer cosplay por primera vez en mi vida e ir a algún evento de comic con o algo así y ya me había comprado cositas para ir practicando. De verdad pensaba que tendría el año más tranquilo, y me ponen por tercer año consecutivo oposiciones... Ni academias hay a estas alturas de curso. Y por esto no puedes dejar las cosas para mas tarde, porque te encuentras con 30 tacos y ni siquiera sin formar familia y en las mejores circunstancias encuentras tiempo para hacer las cosas que te gustan. Problemas del primer mundo.
#personal#de verdad#que bajón coño#en serio he tenido muy mala racha los ultimos 5 años y parecía que este año por fin#iba a poder hacer algo de vida#bueno#pues la vida a durado mes y medio y hasta luego
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Podíamos haberlo hecho bien a pesar de todo…pero no se en que coño te empeñaste..😔 no solo tengo que ir por “compromiso” al trabajo. Si no porq me hacía muchísima ilusión, incluso después del bajón de ir viéndome venir que no ibais a poder o que se yo, si imaginé que de alguna manera podría estar allí conmigo y podríamos no solo aprovecharlo y no perderlo, si no disfrutarlo todo lo que pudiésemos juntos… videollamadas, fotos, historias…ojalá un día si puedas crear tus sueños y no te los rompan. Lo siento. Aún a pesar de todo, estaré allí y haré todo lo posible por sentirte cada día conmigo en este último viaje. Cuídate de corazón, con todo el amor. 7EQV13RO🦋💫💙🏡✨
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A NADIE LE IMPORTA LO QUE TE GUSTA
La flipo bastante
con los pedazo trozos de tomate
que te ponen en las ensaladas de menú,
pero me mola pedirlas
y meterme uno en la boca
y hacer como Marlon Brando en El Padrino
cuando se mete las naranjas en la boca
antes de morir.
No me va eso de leer en los bares
aunque me gusta ver a peña leyendo en ellos
mientras espero ese momento en el que piensan
que es la hora de darle otro trago
a su trago.
Me gusta estar viendo un amanecer
cerca del mar
con la brisa soplando suave,
con un cigarrillo en la boca
y no sentir nada
porque en realidad pasa todos los días
y bueno���que sí, que es bonito
pero sois un poco pesaditos a veces con ellos.
Es bastante full de Estambul
sacar una foto de tu comida
antes de tocarla, pero seamos serios,
la cara que pones al sacar la foto
es peor todavía.
Es genial ver el bigotillo de un adolescente
moverse por el viento
en una habitación cerrada a cal y canto,
pero a ver… imagínate tenerlo tú así siempre.
Un bajón ¿no?
¿Cómo te llamarían tus amigos? ¿Terciopelín?
Es chungo defender una idea
y salir a la calle
y que te siga muuuuucha peña
y luego verte en la tele
con todas esas personas detrás
y que pasen los días
y que al tiempo te mueras
sin ver la luz
al
final
del
túnel.
Y ahora piensas
que quieres dejar tu curro
porque en realidad no te motiva,
pero necesitas la pasta,
así que vuelves,
y la misma persona de siempre
te hace la misma pregunta de siempre:
¿Qué tal? ¿Cómo te va tío?
Y tú no sabes qué contestar,
pero quieres decir algo,
porque tampoco te cae tan mal,
y entonces dices alguna chorrada
como “aquí ando”
y por unos segundos piensas:
¿Quién coño soy
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No sé muy bien si hago bien o no en escribir parte de mi vida aquí, pero me sirve en parte para desahogarme. Antes de escribir me siento como si estuviera metida en una piscina de la que no puedo salir, no puedo respirar. Pero una vez me pongo a escribir y termino es como...ufff puedo respirar, acabo de salir se esa piscina. Este blog me está ayudando a contar ciertas cosas que nadie sabe. Y ahora estoy en unos de esos momentos de...me estoy ahogando.
Hace como cosa de un mes y algo, pasó algo completamente inesperado.
Alguien muy especial para mi, que ha estado casi toda mi vida a mi lado, desde pequeña, y me a apoyado mucho este último año, me besó. Y desde entonces es en plan, ¿que coño estás haciendo con tu vida?, referido a mi, por supuesto.
Es una persona que, para que negarlo, siempre me ha llamado la atención, pero, te parabas a pensarlo y es como que obviamente no va a pasar nada. Es el mejor amigo de mi hermana, es seis años mayor que yo(que a día de hoy no es diferencia de edad) pero para cuando tienes, que se yo, doce años, sí es diferencia. Con todo esto quiero decir, que nunca se me habría pasado por la cabeza que pasara nada entre él y yo. Pero de repente, buum! la niña crece y él la besa.
¿Y por qué no paro de pensar en esos momentos? Ha pasado dos veces, pero es que para mi ha sido tan, no se, ¿especial? Joder si me pongo a pensarlo, hace unos meses dejé a mi pareja, precisamente para "vivir"(todo muy resumido en una simple palabra) y, ¿de verdad pasa esto? De verdad que mi cabecita no está muy allá.
Pero es que esas dos veces...han sido realmente especiales. Los dos a solos...ese típico tonteo, que yo al principio no me esperaba para nada lo que iba a suceder(puedo ser muy ingenua a veces). Recién despiertos(las dos veces he dormido en su casa) haciendo el tonto, cosquillas, caricias...besos inofensivos...y de repente tumbados en el sofá dice...me apetece besarte....y bam! pasó lo que tenía que pasar, me besó!!!
La segunda vez fue como, no sé, me pongo a pensarlo y me sale la sonrisa tonta, pero así contado se puede pensar, esta chica es boba, pero no! Recién levantados, otra vez la tontería de cosquillas, y hacer el tonto, y de pronto, un beso! Es como...me derrito, aquí y ahora, ya! Una mañana de hablar, abrazarnos, besarnos...y obviamente una conversación pendiente. La conclusión de esa conversación es que hay atracción y si fuera otro momento de mi vida, podríamos llegar a algo, pero acabas de salir de una relación de siete años y tienes que vivir y disfrutar. Lo veo genial, por que si yo dejé mi relación es por que bueno ya no estaba enamorada, pero un motivo que me motivó fue que quiero disfrutar de mi vida, sola.
Pero llegan mis momentos de bajón, y pienso en las cosas que podría hacer con él, los momentos que podría vivir con él. Pero eso son todo fantasías.
En mis momentos buenos de lucidez, es lógico que ahora una relación quizás no pueda mantener. Creo que ahora estoy en un momento de mi vida que tengo que conocerme a mí, y solo a mí. Y puedo hacerme daño, y lo peor, hacer daño a más personas. No puedo ser egoísta en este caso.
Y pienso, olvida lo que pasó y aléjate...
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Papá:
Lo primero que perdí fue la calma. Una sacudida sin aviso en mi cerebro en medio de un día caluroso.
Aún me sigo sintiendo incómodo al escribirte. Recuerdo que solamente una vez te envié un correo electrónico y ni si quiera pudiste volver a iniciar sesión. Te escribí una carta para hacer las paces contigo, después de ese horrible día en el que nos dijimos de todo.
Casi siempre te hablo y te pienso antes de dormir. En varias ocasiones te he sentido muy cerca; a veces alcanzo a distinguir tu bigote dorado y tu cara de amargado entre el trafico de la mañana, en señores parecidos a ti que me voltean a ver raro porque me les quedo viendo, o simplemente sé que vas caminando a lado mio, o que ese lugar vacío que miran mis perros eres tú viéndome mientras yo lo miró a ellos.
Hoy te escribo porque quiero empezar a hacerlo más seguido, y también porque necesito contarte algo.
Aún tengo bastantes reclamos. No te voy a negar que sigo enojado contigo y triste y que la mayoría de esos reclamos son para ti. El que últimamente más me ha rondado en la cabeza es: por qué no me enseñaste a ser adulto. Por que le tengo tanto miedo a tomar mi lugar, y por qué no puedo derribar estos muros de silencio que levanté hace más de siete años.
tengo otro más: por qué no fuiste con un doctor cuando te comenzaste a sentir “raro”. Por qué tu miedo a enfrentar el problema lo quisiste remediar alejándote.
Y el último por esta noche: por qué me diste el poder de terminar con la neurosis de mi mamá y con la nube oscura que se había expandido en cada rincón de la casa. Por qué lo último de ti que tuve en mis manos no fue amor, ni un estúpido consejo, ni si quiera una cochinada de veinte pesos de esas que te gustaba usar de collar.
Intento cada día olvidar estos reclamos y convencerme de que mis preguntas ya no van a tener respuesta. Prefiero recordar los días cálidos y alegres que me diste, y pensar en un día intentar tener mi propia familia.
El papá de mi amiga Sofia acaba de “irse”. También de lo mismo. Mi mamá y yo fuimos a despedirnos de él y a darle un abrazo a ella y a su familia. En un momento Sofia me apretó la mano y descubrí que hay una conexión secreta entre los que hemos perdido a nuestro padre.
En fin, eso era lo que quería contarte. Que ahora conozco a alguien que se siente como yo. Y si mis conocimientos en metafísica (que no sé un coño de metafísica) no me fallan, estoy seguro de que esa conexión se dirige a donde te encuentras tú.
Sé que don beto y tú son diferentes. Al menos, la manera en la que nos despedimos de ustedes fue todo lo contrario: ocho horas después de que te fuiste, ya teníamos tus cenizas y a la casa solo llegaron pocas personas. En el velorio del papá de Sofia no dejaban de llegar amigos y parientes, y hasta un ex gobernador le envió una corona enorme.
También sé que tú y yo jamas fuimos personas que les guste tener muchos “amigos” y que te fuiste rodeado solamente de personas que te amaron. Pero aquí también tengo un reclamo para tu esposa. Me hubiera gustado tener más amigos durante mi infancia. Ustedes dos siempre se apoyaron para enfrentar la vida. Yo lo intento, pero me he dado cuenta que los amigos te enseñan que a la vida no necesariamente se le enfrenta como si fuera una enemiga.
Pero aunque don beto y tú sean totalmente diferentes, no creo que no puedan ser amigos. Fuiste la persona con el mejor sentido del humor que he conocido y me consta que puedes disfrutar de una cerveza y un porro como don beto. Así que me gustaría pedirte un favor.
Recíbelo con tu bigote, dale un abrazo de compadres. Si quieren, pueden platicar con morbo y curiosidad sobre sus últimos días. De en donde les dolió, que pensaron, y dile que su familia estará bien.
Sé que voy a verte pronto. Cuando la ciudad esta callada, ya muy noche, me basta con mirar el cielo para saber que te tengo cerca, riéndote con tu risa grave y tocándote el pecho. También te he cachado, que a veces te escondes en mi rostro, cuando me miro en el espejo. Pero ya no lo hagas porque eso todavía me provoca un bajón en el ánimo, así que procuro ignorarte la mayoría del tiempo ahí. No sé cuando la muerte de cualquier otra persona va a dejar de ser para mi la tuya repetida en mi memoria. Mientras tanto, seguiré platicando contigo, pisaré la tierra acercándome cada vez más contigo, y lejos del rencor que tengo hacía ti y mis tontos reclamos.
Te ama
Tu hijo
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Coño, que ladilla cuando me da un bajón de esos de depresión
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“USA es una chulería”, dicen
“Todo ahí es más fácil”
“To es más barato”
Su maldita vida a to el que me diga algo como eso, ditos fatales, vengan si pa que vean cuál es la maldita realidad. Que perro bajón, coño bro.
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Hola, por primera vez me voy a presentar directamente, me llamo KIKIN, tengo 32 años y soy una persona carismática, centrada y con muchas ganas de construir un futuro estable.
Hace un poco más de 4 años conocí a esa persona especial (después de 12 años de casado), esa persona que desde la nada se convertiría en tan importante para mí, que ni yo me fijara en todo el terreno que iba ganando en mis sentimientos, haciéndoles pertenecer a ella.
Yo vengo de una familia separada, criado en una casa solo con su papá, dependiendo de mí desde los 16 años, siendo yo quien decidiera que era bueno y que era malo para mí. Aprendiendo a vivir y salir de las tempestades que la propia vida me mando.
Cuando decidí darme una oportunidad para mi felicidad, fue porque la tenía a ella, ella me dio ese empujón que necesitaba para darme cuenta que, a veces, vale la pena arriesgar o apostar a algo mejor, que no todo lo que nos manda dios o la vida es 100% definitivo y que uno como ser humano debe tomar sus decisiones para corregir cualquier desvió (obstáculo) que se nos presenten.
No te conozco en absolutamente nada, no tengo idea de quién eres, que haces, a que te dedicas, que edad tienes, donde vives (MADE IN COLOMBIA solo se eso), porque te interesaste en ella, no tengo la más mínima idea de que intención tienes o que tanto estas dispuesta a arriesgar o dar por ella. (solo sé que tengo mi 6to sentido en leer a personas como tú).
Estoy seguro que no te importa mi opinión, o capas simplemente estas palabras te hagan sentir bien, te hagan creer que ganaste la partida en que tu sola estabas compitiendo o peor aún, te haga sentir victoriosa y refuerce esa confianza que tienes en ti para conseguir lo que te propones. Sé que mi opinión no importa, pero al menos puedo darme el placer de dejar por escrito lo que pienso y mejor aún, dejar asentado mi percepción y esperar que simplemente mañana no tenga la razón en todo lo que exponga.
Entraste a su vida por casualidad, a través de un grupo (unas 5 o 7 personas, no lo sé) en el cual estabas buscando algo más allá de los que esas personas podían interpretar o reflejarte, COMO UN CAZADOR CUANDO ENTRA EN LA SELVA Y NO SABE QUE PRESA SE VA A CONSEGUIR DE PRIMERO. Sé que desde el día uno evaluaste a todo el grupo, fuiste dejando el interés en aquellos que no cumplían tu estándar, en aquellos que no eran capaces de satisfacer tu necesidad de guía, líder, gustos, manipulación, X... Realmente no tengo la más puta idea de qué coño buscabas en cada uno de ellos, pero sé que en la medida que te ibas dando cuenta que no podías llegar a ellos, los fuiste descartando.
Luego la identificaste, visto lo buena que es ella, lo especialmente, lo confiada y sincera que es, te diste cuenta del valor como persona que es y de las ventajas que tenía en referencia a tu estereotipo de víctimas (viste potencial en ella para conseguir tu victoria). Poco a poco te fuiste metiendo en sus intereses, fuiste preguntando de su vida hasta identificar si realmente ibas a poder conseguir tu cometido, si realmente esta chica a la cual estabas conociendo iba a ser quien te diera la posibilidad de brillar a través de ella.
Luego mandaste tu segunda jugada, ir aislándola de todos para que simplemente confiara en ti y nadie más, hasta de mi la tuviste alejada, sabias que yo era un inconveniente para ti y tu objetivo, ya que toda esta mierda venia basada de un juego, en el cual trate de relacionarme también con quienes ella andaba y tu simplemente no diste bola, me ignoraste (rara vez diste importancia a mis ganas de jugar contigo y conocerte) porque sabias que si dejabas que entrara en tu círculo tus objetivos no se cumplirían, simplemente la aislaste del grupo o gente que quizás le pudieran decir “CUIDADO CON “, aunque estoy seguro que desde que la conociste supiste que podías conseguir lo que buscabas. No tengo duda de eso. (ella es una persona sentimental, a pesar que lo niegue se vincula con las personas simplemente confiando en lo que dicen o escriben, en lo que ella cree sentir por lo que demuestran a través de una imagen o mensaje). Ojo no estoy despreciando o diciendo que lo que ella es está mal, al revés, es tan especialmente encantadora que gente como tú se aprovecha de ella.
Una vez que sabias que confiaba y estaba aislada del resto de personas que vieron en ti la clase de persona que eres, simplemente empezaste a meterte en su vida, su juicio, su forma de ver las cosas. Te aprovechaste de un vacío que más allá de nuestra relación, creo yo, era por todo el entorno que se está viviendo actualmente.
Yo me enamore de una mujer capaz de entender, interpretar y relacionar las acciones con los sentimientos, no te puedo negar que me hizo muy feliz y por un momento pensé que yo a ella. Igual creo que simplemente te aprovechaste de una situación y lograste manipular con tus escrituras y acciones (online) el criterio o relación que tenía conmigo.
Estoy seguro que no eres, ni serás quien le haga vivir, le haga amar incondicionalmente. Yo tampoco pude, pero estoy seguro que de mi parte no tuvo ninguna mentira, ninguna manipulación, nunca estuve en posición o tuve la actitud de engañarla en nada y lamentablemente tu eres toda una mentira. Eres un ser que aprovecha la tecnología para engatusar y hacer creer que eres real, pero yo sé que eres una farsa.
Ella es inocente desde algunos puntos de vista, yo no…. Yo con solo un poco de conocimiento, sé que eres una falsedad que se aprovecha de otros, sé que tus intenciones no son lo que dices, no eres real, no eres transparente con ella. Una llamada, una nota de voz, una promesa no maraca que tanto estas dispuesta a dar o arriesgar……. ERES UN BILLETE FALSO, SOLO SIRVE PARA QUEMAR.
Gracias a dios tengo una mentalidad muy desarrollada y sé que, a pesar de querer equivocarme respecto a tus intenciones, relación, promesas, sentimientos, al final ella será quien sufra porque jugaste con su ser, jugaste con su interior como te dio la gana.
Entiendo que, aunque te lo pida, no serás 100% sincera con ella, para ti es un trofeo que colocaras en tu mueble una vez logres que tal ilusión le haga más daño del que hallas hecho a otros. Tu perfil en la web es básico, predecible, sin conocer mucho de ti puedo leer que tipo de persona eres…. Y lo peor mañana será ella quien aprenda de una muy mala forma a entender que todo lo que se escribe o dicen en redes, chat, juegos, no es realmente cierto, las personas se aprovechan de las otras para conseguir sus propios beneficios. Sean cual sea, tu estas a un paso de empezar a conseguir lo que quieres. Al final todo sigue siendo una historia de Whatsapp o Facebook…. Realidad, tacto, caricias, y de más acciones todavía no existen entre ustedes y estoy seguro que tu simplemente empezaras con las excusas para evitar que se dé cuenta que toda la mierda que escribes es eso, MIERDA……
A ver que tanto tardas en decirle que es complicado el juntarse, que para ti dejar tu casa no es tan fácil como le dijiste, que la percepción cariño que estas reflejando no es realmente lo que aparentas.
Sabes que lo que más me duele, es que sé que la conozco, se quién es, se de quien me enamore…
Ella es un ser invaluable, una persona que cuando siente que su contra parte se abre y deja que entre en su interior, se da una oportunidad de compartir y buscar la felicidad para ambos, pero también creo que sus propias dudas pueden causar una niebla en su camino que no le permite ver bien, evaluar con criterio el camino por donde va. Es un ser tan espectacular que su confianza se debe valorar, respetar y claro está, hacer valer, demostrar que ella vale y para mucho, más que una mujer, es un ser con sus defectos que merece ser amada y complementar ese vínculo de lealtad que le demuestre que es el TODO para la otra persona.
Lamentablemente, tengo mi opinión de ti, para mi ella no te corresponde, simplemente tu entraste en un momento, bajón, desequilibrio o simplemente en un momento en donde ella quería cambiar lo que es sentirse querida, importante, valorada…. Sé que falle en algunas cosas respecto a esto…
Pero también evaluó quien soy, como fue nuestra relación, como se reflejó un ciclo que marco a mi corazón. No eres la primera persona en la que cree, no eres su primera vez por web, al revés, yo llegue de la misma forma que tú, la diferencia que yo luche por ella, me gustaría ver que tanto vas a luchar tu…
Tengo plena confianza que este desamor se supera, cuesta en su puta madre por que la amo con todo mi ser, cuesta verla y saber que su interés o su valoración de importancia va referida a ti y no a mí, duele porque soy incapaz de dejarla ir a su libre disposición, no puedo dejarla sola porque me preocupa, ella es un sol para mí, ella por mucho tiempo ha sido la razón para seguir luchando por el futuro, ella es un amor que costara mucho olvidar y simplemente me toca aceptar y tener una ilusión que mañana volverá y tendrá la experiencia para no volver a creer en las mentiras de personas como tu… A valorar lo real e identificar a quienes quieran aprovechar las circunstancias para beneficio propio.
La amó, ella cuenta conmigo, tengo la seguridad que ella sabrá valorar quien fui y por lo menos quien soy con ella en estos momentos, mil formas de actuar tengo, pero al final, mañana lo que pueda opinar de mí no será de mala forma, al revés, soy quien la apoyo a pesar de todo, soy a quien le sigue importando a pesar de todo.
Simplemente me gustaría adelantar el tiempo y ver hasta donde quisiste llegar, hasta donde llegaste, en que momento del sacrificio decidiste abandonarla y buscar a tu siguiente víctima.
Ojalá Dios me dé la oportunidad de equivocarme y mañana (porque la quiero y estoy seguro de mi) pedirte perdón por mis palabras, poder ser amigos y saber que fuiste o eres quien hace feliz a la mujer que amo o ame…. Espero de corazón equivocarme contigo, pero como ya menciones tengo un 6to sentido que me da la oportunidad de leer a las personas con solo una foto, una conversación o simplemente porque pasé 6 días espiando como se escribían y simplemente me di cuenta de quién eres.
Atentamente
Kikin....
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well, maybe we got lost in translation, maybe i asked for too much, but maybe this thing was a masterpiece ‘til you tore it all up.
asunto: vengo a chingar. participan: ivanna garcía, mariana ruiz. ambientación: chingos de lugares. advertencia: está bien pinches largo. lesbianas. mariana + ivanna tw. un chingo de jerga mexicana. ivanna era una mocosa toda idiota.
Ojos observando su reflejo en el espejo del solitario baño del colegio, ha salido unos minutos para perder clase. Acomoda un par de mechones rebeldes, perdida en sus pensamientos. El fin de semana pasado se reproduce en su cabeza: risas burbujeantes y un poco torpes, contacto físico innecesario pero deseado, manos que la toman por el cuello para besarla con profundidad, sabor a vodka y arándanos en sus labios, el alcohol y los retos las guían a la habitación donde sus ropas desaparecen y sus cuerpos se unen por vez primera. Aquella línea que se supone que no deberían cruzar, se convierte en una que está como pretexto para volver aquella relación más íntima. Y como si de una invocación se tratara, un empujón la regresa a la realidad, siente su espalda contra la pared del baño y un cuerpo pegarse al suyo; sus labios se ven atrapados y no tiene que ponerse a averiguar quien es, pues la reconoce al instante. ❝Uhm❞ musita con suavidad, sonido gutural, sus manos se colocan en los hombros femeninos pero no la apartan. ❝Mariana… Alguien puede entrar❞ pronuncia entrecortadamente contra sus labios, pero no deja de besarla, no puede hacerlo. Puede percibir la sonrisa traviesa de su amiga sin siquiera verla. ❝¿Quieres que pare?❞ pregunta casi como un reto, manos curiosas que ascienden por las piernas de Ivanna, se cuelan por debajo de su falda escolar y los labios se hacen camino por su cuello; la azabache se remueve en su lugar, cierra los ojos. Joder, no. No quiere que pare. Cede, la toma de la mano y la guía hasta un cubículo, le importa un carajo quien pueda entrar, le importa un carajo los problemas que aquello pueda ocasionar si las atrapan, quiere volver a sentirla. Y ahí están rebasando la línea prohibida una vez más, volviendo de aquello un juego; solo sexo y diversión entre un par de amigas.
❝Samuel dijo que llevaría un par de tequilas❞ la fiesta de esa noche es de las más esperadas, semanas planeando la celebración del cumpleaños de una de sus amigas. Como de costumbre, se encuentran en la residencia de los García, decidiendo que vestirán. ❝Que bien. Yo llevo mi propio alcohol con Ximena y Mario❞ su mirada clavada en la prenda que sostiene entre sus dedos, la analiza como si le importara más eso que la conversación que mantienen. Y es que, Samuel lleva días atravesado en su garganta; causándole una molestia ( celos ) cada vez que lo ve besar a su mejor amiga. Le repugna, pero es algo que nunca ha dicho en voz alta, más es bastante notorio. ❝¿Por qué te cae tan mal Samuel?❞ inquiere la castaña, volteando a verla con los brazos cruzados y una ceja enarcada. Ivanna actúa con cautela, sigue observando las prendas de vestir. ❝Me da igual❞ contesta, y se aparta unos pasos para buscar su bolso de maquillaje que en aquel entonces era muy sencillo y básico. ❝Solo me parece que es un imbécil❞ bien, definitivamente aquello subió de nivel muy rápido. Mariana ríe, se acerca a ella y permanece detrás, estudiando sus movimientos. ❝¿Estas celosa porque me lo estoy dando?❞ la azabache siente que sus músculos se tensan, pero finge estar ocupada en su búsqueda. Claro que está celosa. ❝¿Por qué lo estaría? No digas mamadas wey❞ bufa, y entonces la menor la obliga a encararla, acorta la distancia; sus rostros ahora se encuentran muy cerca. ❝Porque estás enamorada de mí, lógicamente❞ contesta juguetona, provocando que Ivanna trague con fuerza. ¿Lo está? ❝Pero no te preocupes mi amor, sabes que contigo es diferente❞ y entonces une sus labios en un beso que dura lo que un suspiro. ❝Además, tú eres mejor en la cama, si me lo preguntas❞ y suelta una risa, antes de alejarse para continuar escogiendo ropa. Sus ojos siguen el cadereo ajeno, suelta el aire que está reteniendo. Oh, sí que lo está.
Sostiene en su mano un vaso con whisky, mordisquea con suavidad la pajilla y toda su expresión es de disgusto por más que intenta disimularlo. Mariana ha estado toda la noche con un muchacho y odia admitirlo, pero no soporta verla con alguien más. ❝Ivanna ya, no mames. ¿Qué tienes?❞ dos de la mañana, la castaña se acerca a averiguar lo qué pasa con su mejor amiga. La mayor niega con la cabeza. ❝Nada, fumé y me dio el bajón❞ mentira; no ha tocado ninguna sustancia ilegal esa noche. Ni siquiera la mira, está enfocada en su teléfono. Por supuesto su pretexto no es creído por la joven. ❝Eres una celosa de lo peor❞ contesta entre risas, la toma de la mano. ❝Ven, dame un beso❞ / ❝No quiero❞ aparta la mano, pero no retrocede. Mariana insiste, la atrae por la cintura.
❝¿Por qué te pones celosa si ya sabes que te quiero a ti? Lo demás es solo coger y ya❞
❝Ay, Mariana, para de mamar por favor. Llevas toda la noche con ese pendejo, quítate❞
❝No❞
❝Mariana❞
❝¿Qué?❞ la expresión de la castaña es traviesa, burlona. Ivanna por su lado está irritada, disgustada. Bufa y desvía la mirada, pero la cercanía permanece. ❝Dime, ¿Por qué estás celosa?❞ la azabache rueda los ojos ante la pregunta. Sabe que está bromeando como acostumbran, después de todo es un juego. ❝Porque me gustas wey❞ contesta hastiada, y no la mira. ❝Ya Ivy, en serio❞ ríe, lo toma como otro juego de la latina mayor; pues aquellas confesiones son recurrentes y usualmente de broma. ❝Es en serio, Mariana, me gustas❞ y entonces la menor la observa, estudia sus facciones y comienza a tomarsela en serio. ❝¿De verdad?❞ / ❝Sí, coño. De verdad. ¿Ya?❞ no sabe si es el alcohol o el coraje ( o ambos ) los causantes de que esta vez esté hablando en serio. ❝Tú nunca dices eso en serio❞ tiene un punto, pero hay motivos. Ambas guardan silencio. ❝Entonces ¿por qué nunca me has pedido que sea tu novia?❞ inquiere, sonrisa divertida colándose en sus facciones, aunque la pregunta es en serio. Ivanna la mira con los ojos entrecerrados, incrédula. ❝Mariana no mames. Como si me fueras a tomar en serio. Te la pasas cogiendo con un chingo de vatos y solo te acuestas conmigo cuando estamos pedas o aburridas❞ rueda los ojos, va a apartarse pero Mariana la toma del brazo y la vuelve a acercar. ❝Pero… Yo quiero que me lo pidas. Si lo hicieras sería distinto❞ y esas palabras crean un poco de esperanza, emoción, pero su expresión permanece serena. Sus comisuras de elevan ligeramente, y Mariana sonríe de manera encantadora. ❝Estas toda pendeja❞ Ivanna contesta ya con fingido mal humor, Mariana ríe y la besa. Vuelve a parecer uno de sus juegos, pero esta vez ha sido real.
Su corazón está roto, y la única que puede unir las piezas se encuentra lejos; no tiene permitido verla desde hace un par de horas. Pero ¿que más da? Si ya no hay nada que echar a perder. Sale a escondidas, conduce el auto de su hermano por varios minutos hasta llegar a su destino. Y llora. Llora desconsoladamente entre los brazos de su novia. ❝No va a pasar nada, amor❞ Mariana intenta calmarla, acaricia su cabello oscuro, la abraza con fuerza. ❝No quiero, no quiero alejarme de ti❞ repite entre sollozos, se esconde en su cuello. La escena de su madre horas atrás se repite en su cabeza: la mirada punzante, el tono duro y las palabras hirientes. El rechazo en todo su esplendor. ❝Hey, escúchame. Calma❞ Mariana toma su rostro entre sus manos, la obliga a mirarla y le duele ver los almendrados llenos de lagrimas. Niega una vez. ❝Hallaremos un modo❞ le asegura, el par de ojos chocolate se unen. ❝Vamos a… Seguiremos viéndonos en la escuela. Vamos a conseguirte un novio falso, sí❞ esboza una sonrisa divertida, aunque por dentro la situación la destruya. Sonrisa que es contagiada a la otra mexicana, quien comienza a calmarse. ❝Y… Santos va a ayudarnos, estoy segura❞ Ivanna asiente, sabe que su hermano no la dejará sola. La defendió a capa y espada ante sus padres, no permitirá que pierda lo que más quiere. ❝Vamos a estar bien❞ añade acercándose a su rostro, frentes juntas, la mayor asiente una vez más. ❝Te amo❞ murmura en la cercanía. No es la primera vez que lo dicen, pero si es una de esas en las que el sentimiento parece estar amplificado, eriza cada milímetro de su piel y acelera sus corazones. ❝Yo también te amo❞ Mariana responde, una sonrisa en sus labios justo antes de unirlos con los contrarios en un beso que expresa cada emoción que sienten una por la otra. Y entonces se sienten invencibles. Al menos, por esa noche.
#i cried#perdón por ser así#*all too well intensifies*#✧ ° › does she give a fuck? i don’t think so / headcanons.#ᴍᴀʏʙᴇ ᴛʜɪs ᴛʜɪɴɢ ᴡᴀs ᴀ ᴍᴀsᴛᴇʀᴘɪᴇᴄᴇ 'ᴛɪʟ ʏᴏᴜ ᴛᴏʀᴇ ɪᴛ ᴀʟʟ ᴜᴘ ; ivanna & mariana.
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Apuntes aleatorios de un diario de agosto (Título alternativo: el diario es mío y me lo follo cuando quiero)
Cuando alguien me presenta como una persona interesante, creo que decepciono: o��bien me quedo callado, lo que no sé si muestra humildad o falsa modestia, o bien digo tonterías, lo que quizá indica que no soy tan interesante como han dicho.
A veces, un elogio exagerado es una forma de desprecio. Nunca sé cómo elogiar sin parecer ofensivo; tampoco sé cómo aceptar un cumplido.
A veces pienso que hay un elefante en la habitación, pero solo lo veo yo. O el elefante está en mi habitación. No sé cómo resolver este aforismo, si es que es un aforismo.
Hay poca gente que escuche de verdad. En las conversaciones parece que esperamos a que nos llegue el turno para hablar y contar lo nuestro. Un poco como Ana Pastor: no escucha, rumia lo que va a contestar en cuanto tenga ocasión.
Un día de piscina. No hace falta saber qué día. En Madrid, en Aravaca. Con M. y el tío P. M. me cuenta una noche con amigas, un chico turco con mucho dinero les invita a la discoteca Gabanna, a un reservado. Se emborrachan, pero con buen alcohol. El socorrista liga torpemente con ella en la piscina: “Te tienes que duchar, eh”. Una frase que solo en el contexto de una piscina suena mínimamente razonable. Luego dice: “Póntelas bien, que se te sube el gemelo”. Se refiere a unas aletas que le ha prestado tío P. Alguien que dice “se te sube el gemelo” difícilmente me caerá bien. Tomo un café con tío P. en una cafetería pija de Aravaca. Odio Aravaca. Viví aquí seis meses, en la oficina del tío P. No me dejaba subir las persianas porque oficialmente no podía vivir ahí. Cenaba con él, siempre una sopa y quizá de segundo unos pistachos, unas almendras, unas nueces. Duré poco, pero en realidad me medio echó él (y por intermediación de mi madre). Aravaca me recuerda a Azca, a un mundo demodé, hortera y facha, de una riqueza envejecida, de mi infancia en Madrid.
Tío P. me habla de su doctorado en ingeniería eléctrica. No puede continuar porque necesita un cable que cuesta 4.000 euros. Una asociación de peritos calígrafos quiere comprarle su software de caligrafía digital. Hace años lo vendió a El Corte Inglés por 25.000 euros. No sé si es mucho o poco.
Cojo del trastero los libros que me faltan. Son unas cinco bolsas del Ikea. Llevan ahí desde diciembre, tras el lío Madrid-Barcelona-Londres-Barcelona. Durante meses estuve solo con una mochila. Ya tengo todo conmigo. En casa, empiezo ordenando los libros por editorial, pero luego me canso. Algunos los quiero vender o regalar.
Ensalada de quinoa en casa de Y. Vemos Les amants reguliers. Dice Y. que Garrel filma muy bien los bailes. La escena en la que todos bailan This time tomorrow de The Kinks es una preciosidad, pero me pone muy triste. Creo que es porque la escuché por primera vez con D.G. y estaba triste.
Otro día. También da igual cuál es. Estoy muy deprimido. No leo, no escribo. He dormido 16 horas. Quiero seguir durmiendo, pienso que al levantarme estaré mejor. No lo estoy. No paro de pensar en mi estado, de reflexionar sobre por qué me ocurre esto. No pienso ni en el pasado ni en el futuro. No siento nada. Duermo una siesta desnudo en el sofá-cama del salón, un poco alerta por si viene J. y me pilla en pelotas. Me levanto muy tarde. Apenas he comido. No me queda dinero, aún no he cobrado. Salgo a pasear sin móvil, para despejarme. Todo me deprime, pero en realidad no observo nada. Compro una cerveza, le robo un poco de atún a J., y un poco de vino blanco. Me duermo y me levanto a las dos horas. Robo unos cereales muesli y ya me consigo dormir un poco más satisfecho.
Al día siguiente sigo deprimido. D.C, que es mi pepito grillo, está sorprendido de que mi malestar no tenga una causa, aunque sea artificial, construida por mi. Cada dos horas encuentro un motivo, pero en general es una sensación de vacío. No busco cariño o atención. Simplemente estoy cansado de vivir. Por la tarde me obligo a salir, M. me invita a su casa a ver béisbol con amigos. Me lo paso bien, bebemos, el béisbol es un coñazo pero M. es una de las mejores personas del mundo. Luego vienen la mujer de M. y varias amigas. Me vuelve el bajón. Estoy cansado y triste. Desde esta terraza vi hace dos años un suicidio que me jodió el verano. También era en agosto. Un hombre se tiró desde una ventana frente a nosotros.
Me voy de casa de M. y voy a la de Y., a la que hace días que no veo. De pronto empiezo a respirar. Me mejora el tono vital. Me vuelve la vida. ¿Qué coño me ha pasado?
En uno de estos días, de la primera semana de agosto, vemos Céline y Julia van en barco, de Jacques Rivette, en la filmoteca. Me deja descolocado, fascinado, como drogado. Salgo del cine con una sensación de extrañamiento impresionante, en buena medida porque la película son más de tres horas. Es fascinante, loquísima, marciana y bellísima, detallista… No esperaba eso.
Un viaje a Málaga con Y., en bus. Leo a Emmanuel Bove y un ensayo de John Lanchester sobre Facebook. El calor de Málaga, el “terral”, es seco e insoportable. Nos recogen M.P y J.P. con su padre. A J.P. le preocupa mucho que me haga una idea equivocada de la ciudad al ver el barrio de la estación. Al llegar a la casa donde viven con su madre, hay cajas de una mudanza. Nos bañamos en la piscina, que es pis caliente. A las 9 hemos quedado J.P. y yo con M.A.M. Un día, cuando estábamos toda la pandilla o “estatus-esfera” en Mazarrón, me escribió por Facebook sobre el diario: “Voy a hacerme el encontradizo en Mazarrón para protagonizar un párrafo. Bueno, una línea me basta.” Le respondí: “Jaja ¡estoy planeando ir a Málaga pronto! Ve eligiendo siglas. Yo propongo M.A.M.” Me hace ilusión verle, y más en Málaga. Con J.P. hablo mucho de la impresión que tengo de Málaga como ciudad ilustrada, muy activa culturalmente. Me dice que no tanto, que están la Semana Santa y la Feria. Pero luego me concede que tiene más oferta cultural que muchas ciudades medianas. Le digo que en Murcia no podría ni soñar con las exposiciones del Museo Picasso de Málaga.
M.A.M. nos cita en una taberna llamada “Antigua casa de guardia. Vinos de Málaga.” Es de 1840. Es oscura y los toneles ocupan toda la pared. Papá me escribe por WhatsApp: “[Málaga] es donde más vino de Montilla y de Alvear he vendido en mis tiempos.” Tomamos vermú con soda y ginebra. Me pongo a tono (¿escribo mucho sobre alcohol? Realmente bebo poco). Unos asiáticos preguntan al camarero qué es lo que bebe Picasso en una de las fotos colgadas. Al principio parece que los dos jóvenes le están preguntando por Picasso al camarero. “Sí, claro, lo llamo y sale”.
Hablamos de cine, de Revista de Libros, de los columnistas de El País, de cuando Houellebecq vino a Málaga a dar una charla.
Luego M.A.M. nos lleva a un mexicano. Tacos, cervezas y luego margaritas. M.A.M. va a publicar un libro en Taurus sobre el Antropoceno. Luego hablamos más de cine. A veces creo que sus mejores textos son los de cine. “¿Va a venir Y?”, me pregunta. Digo que sí, pero se le ha debido apagar el móvil. Su móvil es ahora solo “alámbrico”, como dice ella, no aguanta mucho sin cable. Llegan Y. y M.P. Vamos a un local pequeño con buena música garaje. Reconozco algo de los primeros discos de King Gizzard. M.A.M. charla con el dueño y pide una cerveza de jengibre. Empiezo a estar borracho. Y. está triste, así que yo un poco también. Se pone a hablar con M.A.M. de Múnich, donde ambos han vivido, y de su filmoteca, y me pongo más feliz. J.P. luego le habla a M.A.M. de Fraga, y lo critica mucho. Nuestra generación no puede olvidar que fue un hijo de puta: es como con Otegi, ¿es justo que esté fuera de la cárcel? Sí. ¿Está bien convertirlo en un mártir o un demócrata? Ni de coña. Me uno a J.P. en su diatriba, pero pronto me canso. No sé hablar de cosas serias borracho. J.P. insiste. Cuando nos despedimos, M.A.M. dice que va a soñar que Fraga entra en su casa, con sus característicos tirantes.
M.P. se queda por el centro y los demás cogemos un taxi. YJ.P. habla con el taxista, como siempre (“Bueno, y qué tal va la noche”). Es joven, lleva siendo taxista desde los 18. Parece majete.
Nos acostamos en la cama de M.P., sin saber dónde nos corresponde dormir. Después de un par de horas nos despierta M.P. y nos vamos a la cama de su madre. Oigo: “No sé qué estoy haciendo con mi vida”, pero no sé quién lo dice, y si lo dice alguien de verdad o es un sueño. Realmente es una frase que podría decir cualquiera de nosotros. Ya en la cama, Y. me dice algo que no parece muy gracioso, pero recuerdo ahogarme de la risa antes de dormirme.
Horrible resaca. Me explota la cabeza. A las 9 no puedo más y me levanto. Busco ibuprofeno en vano. Me meto a la piscina en calzoncillos. Cualquier gesto envía pinchazos a mi cabeza. Al salir sigo igual de mal, pero mojado. No tengo mis cosas, ni móvil ni ipad ni ordenador ni libros. Está todo en la habitación de M.P. y en la de J.P, que duermen profundamente. Me tumbo en el sofá de cuero y me quedo pegado. Me da calor. Muero con cada movimiento. Me hago un café. Pongo el aire acondicionado. ¿Qué hago? No puedo dormir. Hay muchos Anagramas en las estanterías. Cojo Corazón tan blanco de Javier Marías. Claro que sí. Marías para la resaca. Me engancha pero el dolor me despista. Salgo otra vez a la piscina. Ya pica el solazo. Miro el agua, las hojas flotando. Tiro el Almax que tengo en la boca para ver cómo se diluye en el agua. Se hunde aburrido. J.P. me encuentra sentado en el bordillo, los pies en el agua, la cabeza caída, la cara de mala hostia. Nadie desayuna. Escribo el post. Por la tarde vamos al Museo Picasso, a la exposición de la Escuela de Londres. Están Francis Bacon y Lucian Freud, descubro a R.B. Kitaj, Michael Andrews, Leon Kosoff. Hay muchos judíos. Un cuadro de Kitaj es su boda judía, salen Lucian Freud, David Hockney, Auerbach. “The murder of Rosa Luxemburg”, de Kitaj y “Melanie and me swimming”, de Andrews. También “Children’s swimming pool”, de Leon Kosoff. Y uno divertidísimo de Andrews: “A man who suddenly fell over”.
Vamos al cine Albéniz a ver Solo los amantes sobreviven, de Jarmusch. Me gusta lo intencionadamente “intensita” que es, la parodia del género de los vampiros, las bromas de que como han vivido siglos uno escribió obras de Schubert y otro, Christopher Marlowe, se queja de que Shakespeare se llevara el mérito de obras que escribió él.
Menú del día de gazpacho y pescado frito delicioso en local cutrillo en segunda línea de playa. Un cuñao en una mesa de al lado, J.P. fantaseamos con darle una paliza, pero somos unos tirillas y pusilánimes. Una anécdota que leo, demostrada falsa, de las aventuras de Hemingway y Joyce en el Londres de los años veinte: Hemingway afirma que cuando Joyce se enfadaba con alguien, le decía “Ernest, ¡a por él!”, y Ernest se peleaba para defender a su colega.
Otro día, comida de lujazo, con el padre de J.P. Cosas que recuerdo: un plato con tartar de gambitas y unas tostitas de avena y tuétano de vaca, camareros cordialísimos, cerveza, luego un gin tonic (hostia, sí que hablo de alcohol) que en realidad el camarero llama “digestivo”, una conversación sobre el presidente de Uzbekistán y su yate en el puerto de Málaga, el PCE en los setenta, La Luna de Madrid, la historia de juventud de J.P. padre por Interraíl en los setenta, la Movida.
Más piscina. J.P. y yo leemos, burlones, un libro de Sartre que tiene para documentarse para su libro. Y. nos traduce lo que no entendemos, que es casi todo. “Ah bueno, pues que lo diga así.” Museo Thyssen, mucho costumbrismo andaluz. Un Sorolla, un Zuloaga, poco más. Una fiesta frustrada, nadie viene, pero es porque vienen mucho más tarde. Una siesta como de 9 a 11 de la noche. Cena de pizzas, nachos, cerveza, vino blanco. Los amigos de J.P. ya llegan; como era de esperar, encantadores. Uno trabaja en temas de inteligencia artificial. Vivió en Taiwán. Y. lo admira, dice que tiene una libreta en la que apunta todo, absolutamente todo lo que considera necesario, tanto de la carrera como de cualquier cosa que estudie o lea. Lo interesante es que no está repleta o es muy grande, sino al contrario: es admirable su capacidad de concisión, los esquemas. A clase, si mal no recuerdo, cuentan que se llevaba un folio donde le cabía todo, y que solo él sabía comprender.
Vemos un cacho de la película de serie B Manos, the hands of fate, que obsesiona a J.P. y sus amigos. Es delirantemente mala.
En el Blablacar de vuelta a Madrid, antes de que empiece la feria de Málaga. Dos ¿hippies? ¿perroflautas? No sé qué término usar sin parecer Eduardo Inda. Dos perros-trauma en el maletero: Fidel y Canela. Pienso mucho si Fidel es por el Fidel que creo. Ella trabaja de captadora de socios en una ONG y en una protectora de perros con problemas. Estudió arte dramático. Él trabaja en una empresa que instala cámaras de seguridad. Su último trabajo es para Qatar.
Unas “vacaciones” en Lavapiés. Comidas y cenas con vino. Cine: Jarmusch, Truffaut, Louis Malle. Literatura: Emmanuel Bove. Escribo una cosa larguísima sobre él para la revista, que recorto en casi 10.000 caracteres. Y. estudia teoría de juegos en Coursera. Luego el cierre. Y luego ya, supongo, me pondré al día con el diario. O, bueno, puedo decir más así, de esta forma fragmentaria: mi compañero J. quizá se case con su novio mexicano en Huesca para obtener la nacionalidad; una cena en mi habitación con M., que está escribiendo una novela y me hace mucha ilusión; acompaño a Y. a coger un bus de madrugada, hablamos del atentado de Barcelona y discutimos un poco sobre cómo reaccionar a él; veo a la pequeña L., que me pide que me encierre en el armario para jugar al escondite, luego nos escondemos los dos para que no nos vean papá y mamá; le digo a M., mi hermana, que si le apetece ir al Reina Sofía, pero hay una cola demencial así que vamos a la cafetería del museo, que es muy sesentera, me cuenta un poco sus vacaciones, un chico con el que sale que se niega a hablarle por WhatsApp y cuando quiere quedar con ella parece un espía (“Puerta del Sol, hoy, a las 19:00”); cena de “intelectuales” con P., R. y D.G., llego antes que nadie y parece que estoy esperando a una cita, hablamos de cosas serias, al contrario que Sartre, Camus, Koestler, que seguro que solo hablaban de mujeres, la cena vietnamita está rica y el camarero, muy motivado, nos enseña a cómo mojar en las salsas, me gasto mucho dinero pero me lo paso bien, hablamos de la figura del intelectual, casi como una parodia de nosotros mismos, me pierdo un poco al volver a casa, como siempre. Leo The memory chalet, de Tony Judt. Me acuesto. Por la mañana, escribo este texto, lo que implica que ya estoy al día con el diario. Una cosa menos.
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Lo cura
CAPITULO 25
Han pasado dos años desde aquel dia. Sofia y yo estuvimos escondidos en casa de koy unas semanas, pero la veia mal. Sabía que estar escondidos le estaba haciendo daño y no era justo para ella. Sabia que le dolería pero seria lo mejor para ella. Una persona como yo no le ohace bien a nadie, ni siquiera a si mismo.
Me levante tenprano y me dirigí al armario a por mis vaqueros negros favoritos, una camiseta blanca, mi chaqueta negra de cuero y mis zapatillas. Me acerque lentamente a la frente de sofia y la besé. Te quiero, susurre. Salí intentandi no hacer ruido. Andaba casi de puntillas por el pasillo, la puerta de koy estaba abierta, era muy raro porqué el era muy cuidadoso con su intimidad, así que me acerqué y me plante delante de su puerta. Estaba en la cama tirado con una tia que supuse que habia conocido aquella noche. En la habitación habia algunos litros de cerveza vacios y sobre la mesa un plato negro con restos de cocaina.
-te lo habras pasado bien. Te voy a echar mucho de menos koy. A ti y a todos. Todo este kaos.
Pense.
Me fui, pero procuré dejarle una nota a sofia para que no me buscara.
-Sofia, te quiero. Supongo que te estaras preguntando que donde estaré, que seguro que habré ido a por tabaco al bar de abajo. Pero no cariño. Me he ido. Estoy cansado de tener que ir con una gorra y unas gafas de sol hasta para entrar a por el tabaco. Pero mas cansado estoy de que tu te tdngas que estar escondiendo por mi culpa. Creo que lo mejor que lo mejor que puedo hacer es alejarme de ti. Para tu bien. Cuidate mucho.
-te quiero.
Dan.
Fui a mi antigua casa, estaba patas arriba. Me acerqué a un cajon de la mesita de noche y saqué un cajón.
En el fondo tenia un sobre con 5 mil euros que tenía guardados para una emergencia.
Salí de casa y cogí un bus que iba hasta la estación de trenes.
Cuando llegue y me acerqué a una de las chicas que vendian los billetes noté como me temblaban las piernas, no podia hacerlo, era incapaz de irme de su lado. Pero tenia que hacerlo. Compre un billete Almería-Madrid y me fui. Tire la colilla al suelo, la pisé y me subí a aquel tren que me alejaría de todo esto.
El camino se me hizo largo. Estaba de bajón. Llevaba dias sin consumir y el mono me desesperaba. Cuando llegué a Madrid lo primero que hice fue comer. Y no fue gran cosa. Un sándwich de una máquina expendedora, pero despues de casi 5 horas de viaje es todo un manjar.
Cogi otro bus que iba Galicia. Queria estar lo mas lejos posible de Almería. Allí estuve un par de dias en un hostal hasta que encontré a una anciana que alquilaba un pequeño piso. No pidió muchas explicaciones.
Pasaron las semanas y no conseguía quitarme a Sofía de la cabeza. Ya no consumía. Estaba totalmente limpio. Salía todas las mañanas a correr y me alimentaba mejor. Mi vida había cambiado para mejor. Pero solo físicamente. Mi mente estaba destrozada. Tener que haber hecho esto es muy duro.
Un dia abriendo la puerta del piso coincidí con la vecina de enfrente. Era una chica joven. Morena de pelo corto. Me miró y me sonrió. Me recordaba mucho a Sofía.
Me quede mirandola como si la conociera de algo.
-por fin coincidimos. La señora Ángela me comento que vendria un inquilino nuevo, el último era un poco loco y a ella no le hacía mucha gracia, pero bueno, en el fondo todos necesitamos un poco de locura de vez en cuando para sentirnos vivos. ¿No crees? Por cierto me llamo Silvia.
Dijo aquella chica.
¿Enserio? Pensé. Silvia, sofia. ¿Es una put broma? Y encima parecen primas.
Solté una pequeña carcajada.
-¿de de que te ries, a caso te resulta gracioso?
Dijo ella.
-no no perdona es que me has recordado a alguien.
Dije.
Ella bajo las escaleras y yo saque las llaves de mi bolsillo para abrir.
-por cierto se me olvidó comentarte que el antiguo inquilino cuando vino aqui estaba totalmente cuerdo , es el piso el que te vuelve loco.
Grito Silvia desde el portal.
Supongo que lo habra dicho para gastarme una broma, asi que no le hice mucho caso.
Fui a la nevera y cogí un refresco. Ya no bebía ni cerveza. Me senté en el sofá y me puse una serie en Netflix.
Un ruido me despertó. Tocaron a la puerta. La abrí y entró Silvia con una caja de latas de cerveza.
-hola vecino.
Dijo como si me conociera de toda la vida.
Se fue directa al salón y se sentó en el sofá. Estaba un poco confuso. No sabía que coño acababa de pasar.
-muchas gracias. Me alegra mucho que me des la bienvenida al bloque de esta manera pero no bebo alcohol y ya me estaba apunto de dormir.
Dije.
-venga pero si solo seran unas cervezas. Te llevo viendo todos estos dias por la ventana como sales a correr. ¿ eres el tipico amargado fanático del runing que ni bebe ni fuma? Venga cojones, toma y bebete una.
Me dijo abriendo una lata y poniendomela en la mano.
-bueno... pero solo una y me acuesto. Por cierto ya veo que te conoces la casa.
Dije.
-claro, conocía al inquilino de Ángela. Me pasaba las tardes aqui con el.
Comentó.
Me bebí la cerveza y me sente ha su lado. Estuvimos hablando un buen rato y acabé bajando al chino a por mas cerveza. Ya me habia liado, y lo sabía. Lo tenia presente todo el rato. Cuando llegue de nuevo al piso me la encontré de espaldas mirando la mesa y haciendo algo con las manos.
-mira, un tirito nos vendra bien para espabilarnos un poco.
Dijo.
Una sensación de dolor inundaba mi cuerpo. Una parte buena de mi me decia que me alejara y la mala que lo hiciera. Pero de costumbre siempre ganaba la mala.
-eres un gilipollas Dan
Me dije al dia siguiente cuando el sol consiguió despertarme despues de todo el dia dandome en la cara tras la ventana.
Silvia ya se había ido. Me sentía mal. De haber caído de nuevo y haberme acostado con ella queriendo a Sofía. Porque aunque ya no estuviéramos juntos mi mente solo le pertenecía a ella. Y me sentí una persona infiel.
Me cree una cuenta nueva en Instagram. Nunca subia fotos mias, solo de paisajes. Solo seguía a mis amigos y a Sofía. Hacia tiempo que se conectaba. No habia actividad alguna en su cuenta desde que me fui. Pero me pasaba los dias mirando sus fotos de arriba a abajo, una y otra vez...
Limpié el desorden de la noche y me prometí no hacerlo mas, que solo habia sido un paréntesis, trate de convencerme de que seria la ultima vez y me tranquilice un poco. Me hice una pechuga de pollo a la plancha y una ensalada y comi frente la tele.
A la mañana siguiente abri los ojos y me sentí un poco aliviado a pesar de haber recaido, pues habia comenzado un nuevo dia y eso era una nueva oportunidad de seguir como hasta ahora. Me puse mi chandal, me até las deportivas y sali a correr. Baje las escaleras andando y ne coloque en un poste de madera que habia en frente del bloque ha estirar. Mire hacia la ventana de un piso y me cruce con una mirada, era ella, Silvia.
-Que tia mas rara.
Dije.
Me gire y me puse a correr. Siempre llevaba la musica al máximo en los auriculares, no queria escuchar mis propios pensamientos. Pero era muy difícil cuando hay recuerdos que estan grabados con fuego. Sofia no salia de mi cabeza. Me pare y saque el movil para meterme en su perfil y ver sus fotos. Par mi sorpresa habia añadido una nueva. En la que se veia con gente nueva. En la foto parecia feliz. Supongo que ya habia conseguido superar que me fuera y este mejor sin mi. Me alegré mucho por ella.
Volví a casa y puse la televisión. En las noticias ya parecia que se habian olvidado de mi. Mire la gorra y las gafas de sol que tenia en un mueble al lado de la puerta de casa, eran las que me ponia cada vez que salía. Las cogi y las guarde. La señora Ángela y Silvia me han visto sin las gafas y no me han reconocido. Ademas la foto que emitian por la televisión era una imagen de archivo de cua do tenia 17 años, sin tatuajes y sin un pelo en la cara. Y miradme ahora, parezco un libro de colorear y la barba que tengo me cambia la cara totalmente. Voy a dejar de rallarme.
Me puse a ver una serie y otra vez me dormí. Me despertó la puerta, otra vez era ella.
-hola vecino.
Me dijo con el mismo tono de voz y entrando de la misma forma que ayer. Parecia un robot. Llevaba otra caja de cervezas.
-oye silvia no puedes estar entrando de esta manera cada vez que quieras.
Le dije
-¿cada vez que quiera? Tu me has abierto la puerta
Contestó
-pero no te he invitado a pasar, es que no se de que coño vas con esta confianza.
Añadi yo con un tono muy cabreado.
-dann es como si te conociera de toda la vida.. y estoy de bajon. Mira el otro chico, el antiguo inquilino, me pasaba las tardes con el aqui, y se ha ido de repente sin dar explicaciones y ya le estaba cogiendo cariño.
Me dijo con un tono tristón.
Se que me estaba intentando manipular pero esta vez necesitaba dejarme llevar. Al menos asi me distraigo y e quito a sofia un rato de la cabeza.
-venga pero solo un par de latas
Le dije.
Los cojones. No fueron un par de latas. Y si fuera poco tampoco fue un dia, si no dos dias bebiendo y follando drogados.
Ahi estaba yo otra vez, solo en la cama, ella ya se habia ido. Me levanté y fui a la nevera a por algo de comer, pero estaba vacía, me ticaba hacer la compra ayer y no la hice porque estaba en otro mundo.
Me mire al espejo y me di uma bofetada.
-venga Dan no vuelvas a ser el desastre que eras antes.
Fui a ponerme la ropa para salir a correr pero me dolía el cuerpo de haberme pasado tantos dias de completa locura a si que me puse el pijama y baje la basura. Ya correría en otro momento.
Y fue lo peor que pude hacer. Mire la ventana y alli estaba ella mirandome otra vez. Entre al portal y subi las escaleras. Levante la mirada de los escalones al llegar a mi planta y me la encontré de frente. Con una bolsa de cocaína. Me abalance sobre ella y empecé a besarla por el cuello, y a desabrocharle la blusa. Aunque dentro de mi sabia que deberia parar no lo hice. Cogio la bolsa de cocaina ya machacada, saco una llave y con la punta de esta saco un poco y lo llevo hasta mi nariz. Estabamos en mitad del rellano, no podiamos parar, escuchamos la puerta del portal, y empezamos a vestirnos corriendo.
Era la señora Ángela, venia a ver que tal me iba en el piso.
-anda veo que ya has conocido a Silvia, es una chica encantadora.
Dijo cogiendome las manos.
-si es cierto.
Le dije con voz temblorosa debido a la excitacion de la cocaina.
-bueno, ¿entonces todo bien?
Dijo
-si señora Ángela todo va estúpidamente.
Dijo Silvia metiendose en la conversación mientras me empujaba para entrar en casa.
Me metio en casa y cerro de un portazo dejando a la anciana fuera sin mediar una palabra.
-me vuelves loca.
Me dijo miemtras me quitaba la ropa super excitada.
-y tu a mi silvia... y tu a mi.
Ya yodos los dias eran iguales. Un bucle. Ni siquiera se iba de mi casa, nos tiramos así muchos meses hasta que me mire al espejo y vi todas las heridas que me había hecho rascanrome de los nervios, como volvian a marcarse todos los huesos de mi cuerpo y mi cara Blanca comoel papel. Me meti a la ducha y grité. Entró al baño y me vio apoyado en la pared.
-¿que te pasa? ¿A que ha venido ese grito?
Preguntó.
-¡Tu! ¡tu eres lo q me pasa! ¡no es el piso el que vuelve loca a la gente, eres tu!
Le grité.
Iba super colocado. La cogi del brazo y la intente sacar del piso pero se resistia. No se iba.
-ah ¿no te vas? ¡pues me voy yo!
Grite cogiendo una maleta y todo el dinero que me quedaba.
Fui a abrir la puerta y esta estaba cerrada con llave.
-¿que mierda? ¡has cerrado la puta puerta! Maldita loca de mierda.
Dije mientras buscaba las llaves.
Ella ni hablaba solo me miraba y se reía invitandome a seguír con la fiesta.
-¡que me des las llaves!
Le grite
Me estaba volviendo loco no sabia que hacer. Me asome al balcón y tire la maleta. Vivia en un segundo, menganche de una barandilla metalica y me colé en el balcón del piso de abajo. Entre dentro y habia un niño jugando en el salón.
-¿eres un superhéroe?
Pregunto un niño.
-¿con quien hablas victor?
Preguntó una mujer que parecía venir del fondo del pasillo
Corrí a la puerta y me encontré de cara con la mujer que esta pego un chillido que me retumbo en toda la cabeza. Abri y sali escopeteado a coger la maleta que estaba se habia abierto. Meti toda la ropa dentro pero el dinero habia desaparecido.
-puffff mierda mierda ¿que hago?
Mire hacia arriba y ahi estaba ella mirandome y riendose.
-¡estas como una puta cabra!
Le grite al mismo tiempo que le sacaba el dedo.-puta loca... ¡joder!
Me fui a un parque y me sente en un banco. Estaba hasta el culo, en Galicia y sin un puto euro. Y necesitaba irme de allí.
Deambulaba por las calles pensando pero no podia volver a aquel piso asi que me acerque a un coche antiguo y con una piedra rompi la ventana para hacerle un puente y largarme. Estaba tan colocado y desesperado que me daba igual todo. Y no estaba la cosa como para enfrentarme a la policía. No tengo ni DNI. Lo perdí, y me es gracioso ya que el otro dia concluyó las labores de búsqueda en el bosque donde me escondí porque me han dado por muerto. Asi que me dare prisa y lo hare rápido.
El coche era un Renault clio williams del 95. Hacerle el puente fue fácil, un coche tan antiguo tiene los cables casi a la vista.
Junte los cables hasta que hicieron conexión y arrancó.
-¡olé mi polla!
Grite al ver el tanque lleno.
Y me dispuse a irme de allí. No sabia donde ir sin dinero asi que después de una ralladura de cabeza decidi volver a Almería. Era tal la locura que llevaba encima que llegue del tirón. Aparqué en mi puerte y entré. Todo estaba muy limpio, no tenia ni idea de lo que habia pasado alli. Escuché un ruido y fui a ver quien era.
-Ostia puta...
Dije.
-Hola Dan
Dijo mi hermana.
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Una bajada de defensas y muchas cosas bonitas.
No te cortes chica, cuenta tus problemas. No sé si todo va bien o simplemente las cosas suceden y las sobrellevo. Hacía dos semanas que no fumaba, y no porque no hubiera tenido ocasión, todos sabemos lo fumeta que es Vasco pero... Qué coño está pasando con éste tío? Llevan dos meses quedando pero se conocen de hace un año. Se conocen bien, bastante bien, la suya no es la típica relación romántica. Diría que puede ser muchas cosas, pero romántica no. Y sabe que puede aspirar a alguien mejor pero... Acaso hay algo mejor que alguien que te comprenda, acepte y te quiera y te cuide? Eso es romanticismo real. Por primera vez desde su ex el psicólogo, María está viviendo una relación real, sin las mierdas que le metió la sociedad en la cabeza, sin príncipes ni princesas, la realidad con su rutina de mierda que casi no te deja tiempo para tu pareja, cuando hay que limpiar, aguantar las mañanas de mal humor, cuidarle como a un niño, los cambios de planes, los cambios de humor, y todos los detalles que dan asco de la confianza. Y aún así quererse mil. Quienes eran esas personas??? Algunos lo llaman madurez. De todas formas era un tipo de estabilidad que ambos querían, porque siendo realistas, ambos han vivido ya suficientes relaciones. Aún así Vasco no confiaba en ella, o quizás no confiaba en él con ella, qué más da, aquí están los dos personajes, nadie lo habría dicho.
Por dónde iba.... Ah sí, bajón de defensas, no todo en el amor realista es estabilidad, vivir con Vasco era vivir en la precariedad, igual que vivir con María la verdad, ambos dos precarios supervivientes de la vida, pero ella bastante más delicada... Desde que se volvían a ver había estado bastante más fumada, con anginas, con cistitis, con candidiasis, había descansado menos cada día que había dormido en su casa en un colchón de 90 dos personas, comía peor y en general... El amor de él compensaba la falta de amor propio hacia ella? No, y por eso le montó un pollo sobre lo drogadicto que era y ella aguantó dos semanas sin fumar, estaba orgullosa, vio muchas mejoras. Pero como todo... Sin saber cómo acabó con cistitis en una rave fumando un sábado mientras él la esperaba en casa con su perro. Ay... La locura...
Y en esas anda ahora, fumando pero sin abusar, a una semana del EUCIMA, festival del circo que se cargó su relación el año anterior, con una bajada de defensas de la hostia pero con Vasco en el corazón pero no románticamente, vamos, que... Estaba todo en proceso. En pro ce so.
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a day in the life
Eché -por fin- mano de mi madre y le dije aquello de que siento que me estoy extinguiendo, para, de alguna manera, definirle qué es que estoy standby, like spinning plates, o en Babia, viéndolas venir; todo viene a ser lo mismo. Que me voy desconociendo, aunque es bueno mientras no abruma, porque sé que llegaré a lo que voy a ser en lo que me quede por vivir. Siempre habrá quien dirá lo contrario, que todos cambiamos y todo eso... pero por esta noche voy a seguir creyendo que tengo una intuición paranormal, que soy raro y siempre acierto. Es bonito hablar así a una madre, aunque lo haga poco y prefiera estar dejando que las paredes me aplasten, de mala leche y tocando una y otra vez Exit Music (For A Film).
Tengo unos días muy raros... bueno sí, casi de bajón... así que necesitaba a alguien y ya está.. te llamé... pero estoy mejor, ¿lo ves?. Mueca de payaso respuesta con una carcajada. Y esto me recuerda a que una vez Iván me dijo que lo que más le gustaba de mí, era mi humor cuando dejaba de llorar. Me gustan los momentos como el de esta noche, cuando vi a Verónica y le dije lo mismo que encabeza este párrafo; son momentos en los que no te perturban las dudas de lo que si haces es correcto o no, si está bien o mal, si es egoísta o no, o en los que notas que se te olvida que estás perdiendo la noción de lo que es justo, de lo que es un principo y de lo que es real. Me gustan porque sí, porque me digo: joder Jordi, ¿necesitas llorar, hablar, un abrazo, contar, fumar, estar en uno de tus sitio sin estar solo? ¿Por qué no? Sigues siendo persona, coño... y "Rules of attraction" puede esperar al miércoles. Recordé en voz alta la cita al principio de "Vivre sa vie": hay que prestarse a los demás y darse a sí mismo (Montaigne) y me miró diciendo que debería pensar más en mí, además de pegarme una fiesta como Dios manda. Al final, es la persona en el sofá frente a ti quien deja de mostrar seguridad y comienza hablar de sus flaquezas y de sus propias preguntas; aún tengo ahí algo de ganas de sonreír para los demás y, aún pequeñito, me siento con el valor del que habla y sabe que le creerán. Magno me llama Ángel. De repente, te alegras de que Verónica dejara de ser la pelirroja del sexo por sexo y se convierta en alguien con quien sabes que tendrás una amistad, que sólo queréis eso, y aquello entre tú y el mundo, y tú y ella, acabó.
Escribo para intentar no olvidarme que siempre hay pequeñas cosas que pueden salvar los días que caen por su propio peso. Por eso, esta tarde fui al Charlot Cefé y me senté justo debajo de la mesa del cuadro de Audrey Hepburn mirando la cristalera de Tiffany's y ahora no he podido evitar pensar que yo hice lo mismo y que nada malo puede sucederte en Tiffany's, y que estuve allí, en Tiffany's, en Nueva York, y ¿no merece la pena vivir para volver? Y esta noche me quedé mirando mi cuadro preferido de los Beatles en la Garrafa, al lado de la puerta del lavabo, cantando Help!; sonó A day in the life y se me coló entre la conversación y la cerveza; la precipitación final recuerda a una espiral sobre la que pretendes llegar al nucleo y abandonar los ciclos porque siempre pasas por los mismos puntos y ya no valen... tienen que acabar.
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Sonnenblume.
Madre mía la apatía.
Que se apodera de mi alma y de mi ser.
Vaya día.
Un Blue Monday en condiciones y a traición.
Marzo empieza fuerte, dos semanas de lluvia y lo que queda todavía.
He estado apático toda la mañana. Y lo peor es que ha sido de sopetón porque yo me he levantado bien, rollo persona normal que toma tostadas de ajo para desayunar.
Pero algo entre las 10 y las 11 se ha apoderado de mí, no sé si un bajón bioquímico en mi body, que me ha quitado las ganas de vivir en un plumazo. A CUATRO HORAS DE ACABAR LA JORNADA.
No podía venirme cinco minutos antes de acabar, no.
Cuatro horas.
QUÉ HAGO YO ESTAS CUATRO HORAS.
Con ganas de llenarme los bolsillos de piedras y tirarme al río.
Malestar general.
Pensamientos cruzados.
Qué haces con tu vida.
Qué haces en este curro.
Qué coño haces, seriously.
¿Dónde vamos?
¿De dónde venimos?
¿Crisis existencialista a las 11 de la mañana?
¡¡NO POR FAVOR!!
He cancelado todo plan de socializar y me he ido directo a casa.
Un sólo pensamiento en mi cabeza:
Patatas fritas. Patatas fritas. Patatas Fritas.
Media hora después, con una fuente de patatas fritas y ochocientas salsas.
La vida se vislumbra mejor.
Ha salido el sol un rato y todo.
Y es que es eso lo que necesito:
SOL.
SUN.
SOLEIL.
SONNEN.
Bitch.
Vitamina D.
Y siesta.
Que no falte la siesta.
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Un café con... Kalen S. Lothbrok
1. ¿Quiénes fueron sus padres? ¿Qué relación tienes (tuviste) con ellos?
Mi madre real a la que conocí hace poco se llama Alexa, cuando era pequeño me dio en adopción a un orfanato al descubrir que tenía poderes, aunque estos residen en mi subconsciente , tras eso fui adoptado por Kayley. Sin embargo a mi padre no lo conocí, Alexa me explico que murió, los dos llevaban una vida algo extraña puesto que se dedicaban al robo de blanco, motivo por el que tal vez pensaron que era mejor que estuviera en el orfanato, mi relación con mi madre biológica no es ni buena ni mala, sin embargo en ocasiones vigilo sus robos, no deseo que muera.
2. ¿Tienes hermanos? ¿Cómo son?
Adoptivos solamente, y todos ellos también son adoptados, son... ¿De verdad tenemos que responder? Son tan buenos como capacidad de sacarme de quicio tienen. Aunque en general les tengo cariño. Hm bueno, además mi subconsciente tiene vida y nombre propio, el podría también ser algo así como un hermano, y es el más incordio de todos...
3. ¿Creaste algún vínculo durante tu infancia que aún se mantenga?
Por supuesto, con mi subconsciente, se llama Nelak... como dije, tiene vida, pensamiento propioy aunque suene extraño muchos se abran dado cuenta de que o habló solo o estoy loco, en realidad es él el que me come el tarro... Y se mantendrá, hasta que la muerte nos separe.
4. ¿Cuándo te diste cuenta de que habías desarrollado esa habilidad de hablar con tu subconsciente?
Todo empezó el 15 de Marzo del 2001, aburrido del orfanato decidí darme una vuelta por ahí escapandome... y entonces no sé como alguien tenía ganas de pelearme, cuando me fui a abalanz...
— Nelak: Cuando fue a caerse de culo al suelo,
— Kalen: ¡Nelak! ¿Qué coño?
— Nelak: Como te encanta dejarme mal en todos lados ¿eh? Cómo te iba contando... Por cierto ¿esto era un café con no? ¿Donde está mi café?
— Kalen: Si no respondes sigo yo.
— Nelak: Claro, y no contar que te pegaron una paliza entre los tres que había allí, que perdiste la conciencia, y tuve que salvarte el culo la primera de las setecientas ochenta y siete veces que te lo he tenido que salvar....
— Kalen: ¿No eran quinientas y pico?
— Nelak: Las cuentas las llevo yo, tú hazme caso a mí, entrevistador/a HAHAHA ¡Quo yo controlo!
5. ¿Qué efectos tiene Nelak en ti? ¿Hasta qué nivel puede ser difícil convivir con él?
— Nelak: ¿Díficil convivir conmigo? ¡Pero si soy un amor!
— Kalen: ¿Qué no es díficil convivir contigo? ¿Tú imaginas tener a alguien comiendote la cabeza todo el santo día? ¿Imaginas lo que es conocer a Alexa y que su comentario sea "Qué buena está"?
— Nelak: ¡Pues por que lo estaba!
— Kalen: ¡Venga sí! Cómo puedes ver... que no lo digo yo es un degenerado... aunque a veces no se deja oír, y sólo puedo escucharlo yo... pero ahora va mi respuesta sincera, no , no es díficil convivir con él, te acostumbras, y al fin y al cabo tiene razón, me salvó la vida quinientos y pico de veces.
— Nelak: Setecientas ochenta y nueve.
— Kalen: ¡Acabas de subir dos!
6. ¿Tienes algún tic, manía o hábitos extraños que puedan definirte?
Puede, quiero decir, cuando me siento algo más de bajón , tiendo a ponerme soundtracks tristes, por alguna razón extraña me sacan del bajón.
— Nelak: Dejar el baño echo un desastre cuando te duchas, lo cuentas mañana.
— Kalen: ¿Lo ves normal?
7. ¿Y alguna debilidad?
Seguramente tenga más de las que quisiera reconocer, pero una de ellas es lo inestable que puedo llegar a ser.
8. ¿Qué es lo más cruel que has hecho en tu vida?
Debía esperarme este tipo de preguntas, está bien, el día que conocimos a Alexa, tres tipos irrumpieron en su casa, pues estaban detrás de lo mismo que roba ella, en ese momento uno de ellos trato de asfixiarla agarrándola del cuello, fue la única vez que Nelak y yo por así decirlo sacamos la conciencia a la vez, que yo deje que el hable através de mi no significa que me domine, aunque hay veces que puede llegar a hacerlo para , digamos controlar el cuerpo, en aquella ocasión digamos que nos unimos, y...
— Nelak: Casi todo bien, pero en aquella ocasión la rabia que sentía de ver aquella escena le nubló su propia conciencia, y es verdad que las nuestras tuvieron un nexo de unión poco común, tenemos una maldición que puede hacer que todo a nuestro alrededor pierda la vida, pero solo sale en la ocasión que nuestras conciencias se unen, me di a conocer a Kalen para que eso no pasará nunca. Y como entenderás, aquellas tres personas, la perdieron aquel día.
9. ¿Tiene algún código de autoconducta interiorizado o que tú mismo procures imponerte?
Por supuesto, no prejuzgar a las personas por como se comporten al principio , o por lo que me digan de ellas, las trataré así según se porten conmigo.
10. Volvamos al terreno superficial, en concreto al profesional... Sabemos que, de vez en cuando, trabajas en el Bar Manolo. ¿Qué funciones desempeñas? ¿Llevas mucho tiempo trabajando allí?
Abrió el sábado, básicamente llevamos 3 días abiertos y no entra ni dios... Mi mayor función es pedir patatas fritas, por alguna razón desaparecen sin dejar rastro... tendré que poner cámaras. Realmente me gusta bastante la cocinera, aunque la chef titular es Kayley. Otra de mis competencias sería atender mesas.
11. Tenemos entendido que, a pesar de lo prometedor que presenta ser el futuro del Bar Manolo, tu verdadera vocación es la medicina. ¿A raíz de qué nació ese interés por el campo?
La cirujía en cuestión. Hm...no estoy muy seguro, porque desde siempre me ha gustado, aunque... soy bastante perezoso para estudiar, se podría decir que verdaderamente tengo una vocación de ayuda al que lo necesita.
12. ¿Qué debemos pensar entonces que el futuro le depara al joven Lothbrok?
Esa pregunta es más digna de responderla alguien con el poder de ver el futuro, sinceramente no yo mismo se que me deparará la vida mañana, en verdad me gusta así, ¿Carpe Diem no?
13. ¿Ninguna preferencia? Mójate para terminar la entrevista: ¿Orden o caos?
A eso te referías... Sin duda caos, siempre pedimos tranquilidad... Pero que sería de nuestras vidas sin un poco de desastre...
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5 cosas de 'Operación triunfo' que sobran
Después de tres meses de programa con actuaciones maravillosas, amores impredecibles y momentos mágicos, ya podemos confirmar que la vuelta de Operación triunfo es toda una revolución de masas. La creación del canal 24h ha sido el elemento decisivo para que esta edición sea diferente a todas las demás, ya que ha logrado una fidelización de la audiencia como pocas veces se había visto antes. Sin embargo, siguen existiendo algunos elementos que se podrían mejorar bastante para un mayor disfrute de la experiencia OT. Hoy comentamos algunos de ellos:
Todos son muy “guapos”
Esta edición del talent show ha apostado por una gran diversidad de personalidades y estilos musicales, siendo la más aplaudida la diversidad sexual tan necesaria de ser representada en la televisión pública. Desafortunadamente, esta diversidad no ha sido aplicada al físico. Quizá lo que más me decepcionó de la primera gala del programa fue ver que todos los concursantes coincidían con los modelos físicos imperantes (de hecho, una de ellas era Miss) a excepción de Marina, una excusa para no ser tachados de superficiales pero que no resulta convincente sino hasta insultante (ya no estamos en los 2000).
Creo que en una época como esta en la que mucha gente sufre por no tener un cuerpo 90/60/90, con la degeneración en enfermedades tan graves como la anorexia o la bulimia, es fundamental que los medios, especialmente los públicos, traten de mostrar físicos hetereogéneos con los que la audiencia pueda sentirse identificado y no acomplejado, para que el concepto de “belleza” se amplíe y no se vuelva cada vez más exclusivo.
El “Y recuerda: eres muy guapa” de una operada Mónica Naranjo a Nerea junto a las modificaciones físicas impuestas a Marina y a otros concursantes son escenas un tanto vergonzosas que, probablemente, se unirán a los futuros procesos de “embellecimiento” a los que los concursantes se verán sometidos al salir del concurso, contribuyendo a este círculo autodestructivo de falsa belleza que sigue reinando y que los medios fomentan en programas como este.
Las clases de imagen y comunicación
En la academia, los concursantes asisten a todo tipo de clases. Algunas de ellas son bastante celebradas por los espectadores, como las de interpretación de los Javis, y otras un tanto innecesarias, como las poco comentadas clases de imagen y comunicación de Andrea Vilallonga.
En estas clases se enseñan a los concursantes cómo hablar, moverse e interaccionar, no solo como artistas frente al público, sino también en la propia academia, incitando a los chicos a no decir tacos, no enfadarse o no hablar de cosas como pedos; a comportarse de una manera que, desde mi punto de vista, es antinatural y restrictivo de la individualidad. Afortunadamente, muchos de los chicos, como Aitana o Amaia, han tenido la personalidad suficiente para pasarse estas clases por el forro y decir en directo que se estaban meando o darnos maravillosas escenas de pedos en el 24h.
¿Qué hay de malo en que un artista llegue a una entrevista y diga que ha tenido un día de mierda? ¿No resulta ya agotador ver siempre a los artistas con una actitud positiva fingida y diciendo todo el tiempo la mismas frases? Ellos también son humanos y este tipo de clases contribuyen a una idealización tan perjudicial para el público y para ellos mismos como la idealización física.
Amaia es una gran cantante. Y también una gran pedorra. Y qué.
El chat
Operación triunfo es un gran talent-show en el que podemos observar la evolución de unos cantantes que luchan por tener una carrera fuera, pero que no nos confudan, esto no es una obra altruista, como a veces lo vende Noemí Galera, esto es un negocio con fines comerciales dentro de la industria de la televisión (de ahí la selección de temas comerciales, las críticas exageradas del jurado, la invitación de artistas más populares que buenos, los físicos de los concursantes...) y donde más se da cuenta uno de ello es en El chat.
Imagínate que eres un concursante de OT. Que esa noche estás nominado y tienes que dar todo de tí para que no te echen y que echen al otro concursante que, además, es tu amigo. Sales. Lo das todo y te salvas. Tu amigo se va. Pero ahora el jurado te dice que no lo has hecho tan bien, es más, que eres uno de los peores, y lo hace ante más de dos millones de espectadores. Vuelves a la academia que es, supuestamente, tu casa, o eso te han dicho, y te “obligan” a ver una serie de mensajes de gente que no conoces absolutamente de nada y a participar en juegos musicales cuando tú lo único en lo que puedes pensar es en lo mierda que te sientes.
Es completamente innecesario. Completamente. Primero, por humanidad y respeto a los chicos. Segundo porque, creo, que a nadie le resulta agradable ver a un concursante que acaba de sufrir un gran bajón emocional fingir que está bien en directo. Tercero, porque quién coño ve la televisión a esa hora. Y cuarto, porque no aporta nada televisivamente hablando, especialmente la despedida del concursante expulsado (con verlo despedirse una vez sería suficiente y mucho más emotivo).
Una cosa es sacar partido de un programa de éxito y otra forzar la máquina por sacar un poco más de share. La gala de la semana pasada nadie quería ver llorar a Ana Guerra en directo. Ni ella ni nosotros. Nadie.
El buenismo de los Javis
Una de las grandes atracciones de esta edición son los Javis, que están aportando con sus clases de interpretación la locura-gay que Ángel Llácer puso en la primera. Tampoco ellos participan en el programa por caridad o amor a la música (de hecho, dudo mucho que lo estuviesen viendo si no trabajasen ahí). Gracias al programa, los Javis han conseguido una promoción bestial de La llamada, acercando una película más o menos independiente al espectador de televisión en abierto, lo cual me alegra y por lo que los felicito sinceramente.
Todos adoramos las clases de los Javis, ya que en ellas se generan muchas escenas emotivas y divertidas. Salvo por un par de piques, los Javis son los profes favoritos dentro y fuera de la academia. Sin embargo, trabajar en un reality es exponer tu personalidad y al igual que, al principio, se veía que uno de ellos, Javi Ambrossi, sería más duro con los concursantes, la trayectoria de la pareja se ha acabado definiendo como un exceso de buenismo que da un poco de pereza a estas alturas.
Todo les parece fantástico, todos los concursantes son unos artistazos, todos los momentos son únicos... Es como si todo lo que les dicen fuese siempre lo mismo. Ni una sola crítica negativa, ni una sola regañina.
Es bonito ver el amor con el que tratan a los concursantes, sí, pero de cara al espectador este comportamiento llega a resultar poco creíble y hasta grimoso.
La omisión de momentos importantes y los contenidos vacíos
Igual que hay secciones que sobran como El chat, hay otras que faltan y que podrían aportar mucho a la experiencia del espectador. Por ejemplo, sería muy interesante ver los debates de los profesores cuando tienen que salvar a alguien o los del jurado cuando tienen que nominar o ver cómo se eligen las canciones de cada gala... Igualmente, los vídeos que se ponen durante la gala podrían ser mejores y no una selección de momentos de marca blanca que, además, ya hemos visto en los resúmenes. Aunque esta edición haya sido todo un éxito, en realidad, el enfoque del programa y su funcionamiento no es muy distinto al de las primeras ediciones, y sigue siendo, por desgracia, bastante comercial para lo que debería ser un programa de televisión pública.
Sigo pensando que es posible crear formatos que atrapen tanto al público de las generalistas como al de las privadas. Si esta edición de Operación triunfo ha conseguido llamar la atención de los de la segunda es más por factores accidentales que por los planeados por la cadena.
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