#perfumes para mujer baratos
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Hola.
Me siento fea, y antes de que digas algo... Sí, me siento fea.
La famosa sensación de fealdad en mujeres, ¿Algún día dejaremos de sentirla? Y no digo que este mal, cualquier mujer en este mundo se ha sentido lo insuficientemente bella para llegar a gustarle a alguien o si quiera llegar al estandar, ¿Por qué? No lo sé, pero es una mierda.
Me siento fea, tan fea que cuando me miro al espejo solo veo a una cerda, a alguien ni siquiera femenino, veo a una perezosa, ojerosa, simplemente veo a una fea.
Y aunque por más que lo intente, por más que busque cien mil metodos para verme linda, nunca lo hare. Por más que me aplique un millon de perfumes y productos caros o baratos para el cuidado de la piel y el pelo, me vere horrible, por más que me maquille o no me maquille, siempre vere una imperfección en mi.
Cuando intento verme linda o me siento un poquito más, la gente me hace sentir que no... ''Ay, se parece a mi papá.'' ''Tienes cara de lesbiana.'' ''Estas gorda.'' dicen, y yo, que me encuentro tan vulnerable y chiquita, me quedo parada sin poder defenderme, porque cuando lo intento las lagrimas brotan por todo mi ser y rompo mi versión sensible y chillona de mujer, ¿Acaso sentirme bien está mal?
Ningún chico se me acerca, ¿Será mi pelo? ¿Será mi cuerpo? ¿Será mi cara? Voy al gimnasio, cuido mi alimentación, la dejo, dejo de ser marrana y aún así me veo como una. Comer no es una imperfección, pero lo es para mi, y aunque sin culpa o con culpa, voy a detestar la maldita genetica que me dieron para engordar tan fácil, ''No comas demás.'' ''Eso es mucha grasa para ti.'' ''A nadie le gustan las gordas.'' ¿Soy gorda? ¿Por eso no le gusto a nadie?
Con triste cansancio y el alma enojada, por no poder ser delgada y linda como las demás, por no tener pechos pero si tener patas gordas, por tener cachetes, una cara que se ve asquerosa, me pregunto si algún día lograre llamar la atención de alguien, si algún día me veré linda al espejo, y que cuando lo sienta, la gente lo sienta conmigo... Anhelo el día de encantar en las calles, como las modelos, de con solo exhistir y ser linda tenerlo todo.
Quiero sentirme linda, quiero ser linda y quiero dejar este maldito cuerpo en el que me toco vivir.
#desahogo#autoestima#mujer#woman#adolescencia#identificarse#girl problems#tristeza#enojo#linda#tc4#quiero ser flaca#no quiero ser gorda
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La vida a través de la lente de Burberry Brit para hombre: momentos de pura elegancia y distinción.
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TRACEY EMIN & ANAÏS NIN
TISHNAR
París estaba envuelta en niebla blanca, que se había replegado en las sombras profundas volviéndose impalpable. Frente a la mujer emergían rostros inesperadamente, pero todos eran vagos. Se topaba con sombras negras que podían haber sido hombres de otros tiempos. Los sonidos eran amortiguados y extraños. Caminaba por calles brumosas sin final y doblaba por esquinas que desembocaban en jirones flotantes de niebla. Vio libros en sus cajas tirados en mitad de la acera, pero no pudo leer los nombres. En su camino también se interponían las mesitas de las cafeterías, aunque vacías y mojadas. Estaba aislada del resto del mundo y no tenía casa. Su cara resultaba vaga para otros, su silueta era como una sombra, y su voz carecía de eco y de calor, y sus ojos habían perdido el brillo, y su caminar era más bien un deslizarse, silencioso y muerto.
Había buscado un momento como aquel por todo el mundo, en el que pudiera estar completamente sola, en el que nadie leyera en su cara pensamientos que no podía ocultar, donde nadie reparara con claridad en que su andar era lento y triste ni echara en falta el sonido de sus pasos cuando no fuera capaz de caminar más, un lugar donde existir olvidada y perdida. Había buscado quedarse al borde de otro mundo, donde su voz no produjera ningún sonido cálido, donde sus pasos no se oyeran, donde pudiera recorrer calles sin final y ver con ojos apagados una vida que no pudiera tocarse ni sentirse como nuestra.
La lluvia sobre su cara era real, así como el viento que soplaba a su espalda, pero ¿qué espíritu la movía a ella? ¿Y por qué tenía que sobresaltarla y asustarla el sonido de las voces reales? Le gustaba estar sola notando la lluvia en la cara, y la niebla, y el viento a la espalda. La gente que ríe debería pasar de largo, igual que la gente que habla. Buscaba un mundo sin color ni sonido, donde nadie pudiera advertir que tenía los dedos trabados en los sueños y que sus ojos no veían más que sombras.
La niebla se había levantado muy despacio, como un telón muy viejo en un teatro muy viejo. Se encontró en la parada del autobús con un billetito en la mano, y mucha gente que esperaba junto a ella.
El autobús iba muy lleno y empezó a alejarse con dificultad de la Ópera entre crujidos, patinazos y traqueteos. La lluvia lo azotaba todo, silbando y golpeando en el asfalto. Las personas, sentadas, se miraban entre sí y a las ventanas chorreantes. Olía a paraguas, y a caucho, y a lana y a cuero mojados, y a puros y a perfumes baratos.
Las luces del autobús resplandecían amarillas y mortecinas. Ojos opacos miraban adelante y atrás, ojos opacos en cuerpos apiñados.
Nadie bajaba.
El cobrador estaba en un extremo de la plataforma con el cuello alzado. Sin parar, entre chirridos, entre giros repentinos para evitar otros coches, entre languideces repentinas cuando subía una cuesta, el autobús huyó de la Ópera.
Nadie bajaba. El cobrador había colgado el cartel de COMPLET. El autobús pasaba por todas las calles que ella conocía, las atravesaba deprisa y despreocupadamente, y había más personas bajo las farolas, dóciles, con la cara empapada de lluvia. Se levantó y corrió hasta la plataforma. No encontró ningún timbre...
-Por favor -le dijo al cobrador-, ¿puede parar? Quiero bajar.
-Este autobús no para nunca -respondió el hombre-. Debe de haberse equivocado..., quizá por la niebla. Le pasa a mucha gente. Solo hacemos este viaje una vez... ¿No ha visto el rótulo de la parte delantera?
-¿Qué pone en el rótulo?
-«Otro mundo» -repuso el conductor.
-Pero yo no quiero ir allí -replicó ella-. En realidad, no quiero. Solo ha sido un deseo, solo un deseo... Quiero volver a la Ópera. Déjeme bajar. Mire, hay un montón de personas esperando para ocupar mi lugar.
Entonces alguien corrió detrás del autobús y subió de un salto al peldaño y se colgó de la correa un momento. Ella vio el rostro que había esculpido tanto tiempo en su mente y había querido encontrar y amar toda su vida.
-Complet! -gritó el cobrador, enfadado, empujándolo afuera y haciendo sonar el timbre como un loco para indicar que el autobús continuaba la marcha.
Y el hombre se quedó en medio de la calzada, mirándola mientras la lluvia le caía a chorros por la cara.
- La intemporalidad perdida, Anaïs Nin Lumen. Traducción de Raquel Marqués García.
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MARÍA MAGDALENA
Bajo la penumbra de tus faroles —Oh, ciudad sin alma—, una cueva para poetas y bohemios, una casa sin esquinas, es cobijo para María Magdalena. Cada noche, cuando el reloj sin aguja apunta la una de la madrugada ella sale de su cueva y prende fuego a las calles adoquinadas. Cruza el marco de tus puertas y se despide. Quién sabe si por última vez. Y en tus calles —Oh, ciudad sin alma—, tus pecadores le lanzan sus piedras en forma de versos. Que crueles son sus palabras, que terminan con un mar y con mucho miedo. “Muéstranos lo que ocultas, tras el velo”. Mujer de larga melena y cabello que le nace en sus piernas y le llega hasta la boca de su vientre —una puerta nueva—, cabellos que viste como abrigo ceñido, dejando solo sus ojos lampiños. María Magdalena nunca vio una mujer como ella en los teatros. Abanicos y fallas, decorados baratos, vestidos rojos de gitana y pintalabios morados. Entre bambalinas y tarros de perfume, las niñas de pelo corto se corrompen con tus vicios. Los hombres, en trajes y corbatas, ocultan a sus amantes de nombre masculino a sus mujeres de instinto femenino, cazadoras de aromas y mentiras. María Magdalena se peina, se pinta y llora, rodeada de angelitos negros para que la protejan. María Magdalena llora y llora, pero cuando la luz la enfoca es otra persona. María Magdalena nunca vio a una mujer como ella en los teatros. Chasquidos y palmas, guitarra española noches de julio y jaleo, nuestra sirena canta y baila. María Magdalena nunca vio una mujer como ella en los teatros. Las horas espigadas ciernen tus calles, ¡Oh, ciudad sin alma! Vuelven a casa tus niñas borrachas. ¿Qué harás esta vez con ellas? Tus pecadores le lanzan sus piedras en forma de versos. Que crueles son sus palabras, que terminan con un mar y con mucho miedo. “Muéstranos lo que ocultas, tras el velo”. Oh, ciudad sin alma, déjalas en paz. Deja en paz a María Magdalena, déjala. Oh, ciudad sin alma, la van a matar. ¡Qué crueldad! Los amantes de la violencia la besan con piedras, mientras su cabello se tiñe de rojo y nadie hace nada. ¡Qué crueldad! La vais a matar. María Magdalena, mujer de larga cabellera, cabellos en el pecho y en las piernas. Sus besos son como la morfina, no llores, son solo morfina. Duerme tranquila, todo pasará, no escuches las risas. Amantes de la violencia y besos de piedra. Duerme ya, tranquila, arropada por la ciudad sin alma. No habrá justicia para esas hienas.
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DBDP - Capítulo 392
Historia paralela Capítulo 20 ¡Tintineo! “Así que estaba diciendo…” “¡Puha! ¡Otra cerveza por aquí! El timbre sonó claramente cuando se abrió la puerta, pero pocas personas en una ciudad tan grande se preocupaban por los demás, incluso si se trataba de un pub ubicado en el callejón trasero. "¿Qué puedo conseguirte?" "Vodka. Que sea un doble trago”. En lugar de ir al bar, Isla se sentó en una mesa vieja y polvorienta en un rincón. Después de pedir una bebida a una anfitriona vestida con un vestido barato que dejaba ver claramente su escote, Isla observó su entorno. Casi todos los invitados eran hombres e iban armados. Edenfield prohibía estrictamente a la gente traer armas, pero a los caballeros territoriales o aquellos con fichas de identificación de mercenarios se les permitía poseer armas. En otras palabras, este no era un bar para gente común, sino para personas con ocupaciones especiales. Plaff. "Aquí está. ¿Mmm?" Un brillo apareció en los ojos de la anfitriona mientras colocaba un vaso que contenía un líquido transparente sobre la mesa. Aunque todavía estaba adornando una capucha, el rostro de Isla había sido revelado brevemente en la penumbra. “No recuerdo haberte visto aquí antes. ¿De dónde eres? Ah, ¿quieres invitarme a una bebida? Ale estará bien”. La anfitriona coqueteó descaradamente después de ver su hermoso rostro. Ella acercó una silla a su lado con una expresión curiosa. El olor a alcohol se mezcló con el olor a perfume barato, pero Isla asintió sin fruncir el ceño. "Seguro." “¡Hoho! Eres bastante luchadora”. Rápidamente se sirvió un vaso de vodka y luego susurró después de acercarse poco a poco a Isla. “Por cierto, realmente eres bastante guapo. ¿Mercenario? ¿O un caballero libre?” “Estoy vagando de un lugar a otro. La tierra donde residía tuvo un final desafortunado”. “Ahh, ¿entonces eres un ex caballero territorial que busca trabajo?” "Podrías decirlo. Todo el dinero que ahorré también se está acabando”. Isla sonrió después de levantar su copa. Isla era considerada guapo y varonil incluso entre los Caballeros de Valvas. Su sonrisa multiplicó su atractivo y los ojos de la anfitriona se volvieron ligeramente nublados. Ayudó que ella también hubiera estado bebiendo desde antes. "¡Oh mi! Aunque tus bolsillos estén vacíos, ¿estás dispuesto a invitarme a una bebida?” "Naturalmente. Para una mujer tan atractiva como tú, hasta mi última moneda valdrá la pena”. "Oh mi…" Los visitantes más frecuentes del pub eran hombres corpulentos y rudos. Después de trabajar muchos años en un establecimiento así, las dulces palabras de un hombre tan guapo como Isla fueron suficientes para despertar las emociones olvidadas de la anfitriona. “¡Hoho! Tampoco eres sólo una cara bonita. Tienes habilidad con las palabras”. Después de tomar un par de sorbos más de alcohol, no pasó mucho tiempo antes de que se inclinara contra Isla y susurrara. “Recibí más que solo palabras. Yo también las uso bastante bien. Especialmente… este. Por supuesto, aquí no sirve de nada”. Podía sentir su aliento desprendiendo un hedor repugnante a alcohol y bocadillos, pero mantuvo una sonrisa mientras golpeaba su espada y su daga. “Vaya…” Su rostro estaba sonrojado y sus ojos brillaron por un momento. La espada larga representaba un tipo de trabajo que realizaban todos los mercenarios, pero la daga representaba algo especial. Representaba asesinatos por encargo. "Dijiste que estabas aquí para encontrar un trabajo, ¿verdad?" "¿Mmm? ¿Por qué? ¿Tienes algo bueno para mí?” "Algunos. Trabajo pequeño pero estable para ganarse la vida. Y…" Después de mirar a su alrededor, redujo su voz a un mero susurro. "Algunas cosas que pueden darte grandes resultados". “Vaya…” "Pero la mayoría de ellos tienden a ser más complicados, por lo que tus habilidades deben estar garantizadas..." "Creo que podemos averiguarlo ahora mismo". "¿Qué?" La anfitriona se quedó con los ojos muy abiertos, sin entender el significado de sus palabras. Entonces, se escuchó una voz áspera detrás de ella. "¡Ey! ¡Mina! ¿Cuántas veces te he llamado ya? ¿Me estás ignorando? Ya que tu hombre está aquí, deberías correr y saludar…” Un gran mercenario se acercó a Isla y la anfitriona junto con dos colegas. Habló violentamente antes de extender la mano para agarrar el hombro de la anfitriona. Plaff. Isla usó su mano para apartar de una palmada la mano grande y sucia del mercenario. "¿Eh? ¡Ja! ¿Qué le pasa a este bastardo? ¿Tienes ganas de enterrar tus huesos?” El rostro del mercenario, que ya estaba de un tono rojo, se iluminó aún más. “¡Mina! ¿Qué estás haciendo?" El rostro del mercenario se distorsionó aún más ante la voz feroz de la anfitriona. "¡Te callas! Sabía que no debía esperar nada de una prostituta, que saltaba de hombre en hombre en un abrir y cerrar de ojos, como un pequeño murciélago. ¡No eres más que una puta sucia, un trapo!” "¿Qué…?" La anfitriona tembló al escuchar las duras palabras del mercenario. Aunque trabajaba en un pub mientras vestía esa ropa, no era una mujer que vendiera su cuerpo descuidadamente. Además, había mantenido una relación amistosa con el mercenario que tenía delante porque parecía una persona decente. Pero pensar que diría esas cosas... “Mirándote la cara o la boca, parece que eres el trapo”. "¿¡Qué!?" El mercenario giró la cabeza con un grito en respuesta a la voz tranquila. Sus colegas también se unieron a él para mirar ferozmente al responsable de pronunciar esas palabras. Shhk. Isla se levantó lentamente. "Eh…" Los tres mercenarios quedaron desconcertados. El hombre era un poco más alto de lo que esperaban. Isla se quitó la capucha y habló mientras miraba a los tres. “Nunca he visto a un ser humano adecuado que le dijera palabras tan vulgares a una dama. Tanto en términos de esto como de aquello”. Después de golpear su espada, Isla apuntó hacia la ingle del mercenario. El rostro del gran mercenario se puso morado ante los comentarios burlones de Isla. "¡Puaj! ¡Bastardo!" ¡Vaya! Sacó el puño de la nada. Sin embargo, el mercenario de segunda categoría estaba borracho y era torpe. El ataque no alcanzó más que el aire. "¡Tú…!" El mercenario apretó los dientes después de fallar, luego intentó golpear una vez más, pero el puño firme de Isla golpeó su barbilla. ¡Plaff! "¡Guau!" Su cuerpo se elevó en el aire antes de golpear el suelo. "¡Pequeño bastardo!" "¡Keugh!" Los dos mercenarios restantes también corrieron hacia Isla. El uso de armas estaba estrictamente prohibido en el pub, por lo que en su lugar dieron puñetazos. Sus ataques fueron bastante agudos. Pero incluso sin despertar su espíritu, Isla fue mucho más rápido que ellos. "¡Guau!" Después de esquivar sus ataques con facilidad, lanzó un ligero golpe y golpeó a uno de los mercenarios en la nuez, antes de darse la vuelta y golpear la barbilla del otro con el codo. ¡Plaff! El último mercenario cayó al suelo con varios dientes rotos. La sangre goteaba de su boca. “¡Jajajaja! ¡Idiotas!" "¡No vayan por ahí llamándose mercenarios con habilidades tan patéticas!" Peleas como estas eran algo común en el pub. El resto de los invitados se rieron y se burlaron de los tres mercenarios. "¿Qué opinas? Si fuera con mi daga en lugar de mis puños…” "¡Me he enamorado de ti!" Isla no pudo terminar sus palabras cuando la anfitriona de repente se apresuró a abrazarlo. “Eres guapo y talentoso. ¿Qué eres realmente?” "Sólo un ex caballero que busca trabajo". “¡Hoho! Bien. En ese sentido, te contaré algo bueno”. Después de masticar ligeramente el lóbulo de la oreja de Isla, la anfitriona susurró suavemente. ━━━━━━✧♛✧━━━━━━ ¡Toc! ¡Toc, Toc! ¡Toc, Toc! ¡Toc! Isla llamó a la vieja puerta exactamente como la anfitriona le describió. 'Tres. Uno de ellos sabe cómo utilizar el espíritu.’ Isla pudo detectar las figuras que residían detrás de la puerta. Crujir. Pronto, la puerta bien cerrada se abrió lentamente. "¿Qué es?" Preguntó un hombre después de abrir la puerta, mirando lentamente la figura de Isla. Los grandes músculos del pecho del hombre eran visibles dentro de su camisa andrajosa. "Mina del Red Horse Bar me dio una presentación". "Mmm…" La mirada del hombre se volvió más aguda, pero pronto asintió. "Venga." Vio dos figuras más una vez que entró. Uno era un joven con una impresión fría y el otro era un hombre con barba completa. Era difícil calcular la edad de la segunda figura. "Si te presentó el Red Horse Bar, ya deberías saber qué es este lugar... ¿Qué rango tienes?" El rango se refería al nivel del mercenario grabado en su ficha de identificación. Aunque simplemente podían pedir la ficha, la mayoría de los mercenarios que llegaban a este lugar estaban lejos de ser normales. Por lo tanto, podrían encontrar un trabajo apropiado acorde al rango del mercenario después de escuchar una respuesta. "Probablemente sobre plata". "¿Eh?" El hombre corpulento adoptó una expresión de sorpresa. Por supuesto, el hombre podría estar mintiendo, pero no había razón para mentir arriesgando sus vidas. La dificultad de las solicitudes variaba según los rangos y la compensación se otorgaría una vez completadas las solicitudes. “Plata… ¿tenemos algo adecuado?” El hombre corpulento volvió la cabeza hacia el joven. "No ahora. Bueno, deberíamos tener uno en unos días”. “Lo escuchaste. Vuelve en un par de días”. "Mmm." Isla asintió y luego habló mientras miraba alrededor del establecimiento. "Por cierto, ¿qué sucursal es esta?" "Oye, incluso si eres plateado, tu curiosidad podría costarte la cabeza". Los ojos del hombre corpulento de repente se volvieron fríos. “Bueno, sólo me preguntaba porque, hasta donde yo sé, los lugares que aceptan este tipo de solicitudes son extremadamente raros. Por ejemplo, en un lugar como este, podría encontrar…” Las expresiones de las tres personas se volvieron agudas mientras Isla continuaba. Isla los miró por un momento y luego abrió lentamente los labios. "Miembros de los Desperados Grises". ¡Vaya! Una daga cortó el aire. Isla esquivó el proyectil con una ligera inclinación de cabeza y luego dio una patada hacia atrás sin mirar. ¡Ruido sordo! "¡Guau!" El hombre barbudo fue obligado a arrodillarse tras recibir un golpe en el muslo. Había estado apuntando a la espalda de Isla. ¡Fuuush! Tres dagas salieron de las manos de Isla y dejaron rastros de luz. ¡Chaechaeng! ¡Plaff! “¡Argh!” El joven logró desviar dos de los puñales pero no logró detener el último. Se desplomó en el suelo con una daga clavada en el costado. Simultáneamente, Isla giró su cuerpo y golpeó la cabeza del hombre barbudo con su pie. ¡Plaff! El hombre barbudo rodó por el suelo varias veces antes de detenerse. Ni siquiera tuvo la oportunidad de gritar antes de quedar helado. Shhk. Después de cuidar de dos personas en un instante, Isla se volvió hacia el hombre corpulento con una mirada fría. "¿Quieres continuar?" “…..” El hombre rápidamente sacudió la cabeza mientras miraba la espada larga sobre la que estaba colocada la mano derecha de Isla. “¡P-por favor créame! ¡Lo juro! ¡En los últimos meses, no tuvimos ninguna solicitud de primer nivel, o más bien, ninguna solicitud por encima del nivel de Gran Señor!” “¿Y cómo sabes todos los encargos que se hacen a la organización?” “Yo, las figuras importantes, siempre soy compartida incondicionalmente en caso de que los objetivos de los asesinatos se superpongan. Sería problemático para nosotros si eso sucediera”. "Mmm…" Isla frunció el ceño mientras miraba al hombre corpulento, que estaba de rodillas. Aunque no conocía todos los grupos asesinos existentes, Isla solo conocía un grupo que aceptaría una comisión para secuestrar a una línea directa de la familia real Pendragon. Eran los Desperados Grises, un grupo de asesinos con raíces en el Sur. "Te estoy diciendo la verdad. No somos responsables de ello. No sé de dónde es tu estimado yo, pero…” Mientras decía eso, el hombre estudió disimuladamente a Isla. Aunque el hombre desconocido no dio los detalles exactos, que una persona tan hábil irrumpiera en una rama significaba que estaba involucrada una fuerza extraordinaria. Como tal, existía la posibilidad de inferir su identidad por su apariencia o ropa… “Tu curiosidad podría costarte la cabeza. ¿No es eso lo que dijiste antes?” “¡Uah! Yo, me disculpo”. El hombre rápidamente bajó la cabeza y se encogió de miedo. Los ojos fríos y penetrantes de Isla seguramente eran capaces de matar a un hombre. Una de las cosas que aprendió mientras trabajaba en esta línea de negocio fue que a veces es mejor no saber. "Bien. Entonces te preguntaré algo más. ¿Hay otros grupos asesinos ubicados...?” ¡Toc, toc! “¡…..!” Isla rápidamente se dio la vuelta después de escuchar el sonido de pasos urgentes. Sin embargo, la figura ya había salido del primer piso del edificio. “¿D-disculpe…?” Isla ignoró las palabras del hombre y se agachó después de saltar hacia adelante. ¡Estrépito! La ventana se rompió en un millón de pedazos y él cayó de bruces. Ruido sordo. Giró dos veces en el aire y luego aterrizó en el suelo sobre una rodilla. Después de ver una sombra oscura que desaparecía en el callejón oscuro, Isla comenzó a correr. Atrás Novelas Menú Siguiente Read the full article
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EL REGRESO DEL VEINTE
La moneda de cobre de 20 centavos tenía muchos usos en cosas y actividades hoy extinguidas: era la unidad de medida del perfume que usaban las muchachas, era la apuesta en los juegos del trompo, el tacón y la rayuela y era lo que costaba una llamada en los teléfonos públicos.
De esa moneda se derivaron dichos mexicanos que todavía sobreviven. Uno de esos dichos proviene de los teléfonos… Sin embargo, hay que hacer una aclaración: en Vícam no había teléfonos públicos ni de ningún otro tipo a pesar de que ese medio de comunicación era cosa común en el resto del mundo (con la honrosa excepción de la hermana república de Pótam, que estaba peor que Vícam).
Aquí se usaban como medio de comunicación el correo y el telégrafo en clave morse. ¿Quién, de esa época, no recuerda los recorridos en bicicleta de Neto Aguiar, el cartero, y de don Isaac Vilchis, el telegrafista?
En sus orígenes, el teléfono era una caseta telefónica que estaba enfrente de la casa del Indio Osuna, a donde la gente acudía a pedir llamadas a través de operadoras. Luego, muy pronto, en algunas casas contrataron el servicio y el teléfono particular se convirtió en un símbolo de distinción.
Los que tenían teléfono, levantaban al aparato, le daban vueltas a una manivela y desde sus casas pedían las llamadas. Los que no, tenían que ir a enfrentarse al permanente malhumor de la Lala, la telefonista. Un poco con timidez, llegaban y pedían una conferencia (así se decía antes). La Lala tomaba nota al tiempo que hablaba, enchufaba y desenchufaba cables.
En momentos de tragedia, como el terremoto de 1985 o como cuando se descarriló el tren en Tepic, las filas de gente desesperada queriendo saber de los viqueños eran enormes. La Lala, en medio de una frenética actividad, trataba inútilmente de que la gente guardara la calma. En tiempos normales, el lugar lucía con muy pocos usuarios porque el servicio se cobraba por minuto de llamada y, si no se tenía prisa, la gente prefería el correo o el telégrafo.
En el resto del mundo, la gente se comunicaba por “lada”, un acrónimo que significaba “larga distancia”. Era un servicio de llamadas automáticas que le permitía a la gente marcar desde sus casas a cualquier ciudad de México e, incluso, del extranjero. Ese servicio llegó a Vícam muy tarde, tanto que la gente, en broma, decía que nosotros no hablábamos por lada, sino por Lala.
Para entonces, la compañía telefónica había inundado las ciudades de teléfonos públicos y la gente de Vícam aprovechaba sus viajes a Obregón para hacer sus llamadas. Esos aparatos eran muy deficientes, pero eran mejores que la caseta y, además, mucho más baratos porque la llamada de tres minutos costaba un veinte.
Siempre era lo mismo: se agarraba la bocina, se le echaba el veinte en la ranura de arriba y, casi siempre, la moneda salía por la ranura de abajo. Había que hacer varios intentos para lograr que diera línea. Muchos practicaba rituales inútiles como soplarle a la moneda o tallarla en el pelo o en los pantalones de terlenka para que se magnetizara y se quedara adentro. Después de varios intentos, al méndigo teléfono por fin le caía el veinte y daba línea. Pasados los tres minutos, una voz de mujer le decía a uno: “para continuar, deposite sin colgar otra moneda”. Algunos, sin saber que era una grabación, se desesperaban y le decían: “un momento señorita, no encuentro un veinte”.
Esas dificultades para que la moneda activara la línea dieron origen a un dicho referido a los que no entendían alguna cosa. Tanto era así que cuando esa persona, dura de entendederas, lograba entender algo, los demás le decían: “Hasta que te cayó el veinte”.
2023
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Perfume Nina L’Elixir, de Nina Ricci
Perfume Nina L’Elixir, de Nina Ricci, presentada con éxito en su anuncio de televisión.
Hablaremos hoy de Nina L’Elixir, de Nina Ricci. No es una fragancia nueva, ya que lleva en el mercado desde agosto de 2010. Y tampoco es novedosa su campaña publicitaria, protagonizada por la cantante Florrie Arnold, sustituta de la modelo rusa que falleció en 2008, Ruslana Korshunova.
El perfume combina notas de jazmín y frutos rojos con algodón, caipirinha de lima y limón de Calabria. En resumen, una fragancia de larga duración y muy atrevida, con cierto toque oriental marcado por esa mezcla de sus toques cítricos y florales. Su símbolo característico, la manzana roja, es otro de los protagonistas en este perfume.
Te traemos el vídeo de YouTube sobre el making of del anuncio de Nina L’Elixir de Nina Ricci.
Si antes comentábamos que el anuncio de televisión de este perfume ha tenido bastante éxito, sobre todo por su protagonista, y se ha convertido en una de los vídeos más buscados de este mes, en Perfumes Valencia .net queríamos traer un vídeo que nos describe cómo fueron rodadas las escenas del anuncio. No hay mejor manera de admirar una obra que contemplar su elaboración para saber valorar el trabajo realizado, así que la mejor opción es ver las horas de maquillaje y de interpretación para comprender que cada anuncio de apenas unos segundos esconde muchas horas de esfuerzos y sacrificios.
from Perfumes Valencia. Ofertas, tiendas perfumes baratos https://perfumesvalencia.net/perfumes-mujer/perfume-nina-elixir-nina-ricci.html
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Perfume 2y2 Beat Prestige | 212 Wins Mujer
Perfume 2y2 Beat Prestige | 212 Wins Mujer
Esta fragancia con las notas superiores de mandarina y brotes verdes se mezclan con las intermedias de rosa y granada, y culminan con la base de almizcle y habas tonka para una experiencia olfativa en múltiples capas. Inspirado en212 WinsAromaVerde FloralContenido9100 mlCasaPrestigeDescripción $ 57.000 📲 ¡Envíanos un mensaje para confirmar la disponibilidad! Compra a través…
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https://mdperfumes.es/blog/los-mejores-perfumes-para-las-mujeres-leo/
LOS MEJORES PERFUMES PARA LAS MUJERES LEO
Según tu signo del zodiaco, hay un aroma que te van mejor que otros. Hoy te traemos las ideales para la mujer LEO.
PERFUMES Y SIGNOS DEL ZODIACO: MUJER LEO
Leonas de la selva, reinas del zodíaco, mujeres carismáticas y vitales, comprometidas y creadoras. Para vosotras no hay nada mejor que un perfume intenso que deja huella.
PERFUME de Alta gama equivalente Nº422 PALOMITA PIKA
Lujo y romanticismo, esos son los dos conceptos base para esta fragancia. La mujer que usa este intenso perfume es poderosa y deja una larga estela, ideal para eventos elegantes en los que sin duda, dejarás boquiabierto a todo el que pase cerca de ti.
Familia olfativa: Floral Chipre Estación: Invierno Intensidad 3 Uso recomendado: Noche
Perfume de alta gama equivalente nº48 J ADURES C.DOR
Esta fragancia es para una mujer poderosa, que domina los elementos y brilla como el oro. Le gusta la autenticidad, vive su vida intensamente sin perder ni pizca de feminidad y elegancia. Es un perfume floral que te acompañará en los momentos más importantes de tu vida.
Familia olfativa: Floral Frutal Estación: Primavera Intensidad 2 Uso recomendado: Día
Perfume de alta gama equivalente nº46 COCO MAMOSE
Siéntete princesa por un día acompañada por este perfume sofisticado y exclusivo que te dará un increíble toque de distinción. Un aroma oriental que refleja exclusividad y lujo. Si quieres vivir momentos inolvidables, sensaciones intensas y experiencias únicas, esta es tu fragancia.
Familia olfativa: Oriental Estación: Primavera Intensidad 3 Uso recomendado: Día
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🌼💫 Contradiction de Calvin Klein celebra la individualidad femenina con una mezcla de notas florales, sándalo y almizcle. Ideal para una salida nocturna o un evento importante. 🌿
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Mapa de Tepito, para ir a pensar cosas ...
1. Relojes
Sí, son clones, pero destacan no sólo por la variedad y la precio, sino por ser los mismos que venden en todo el ambulantaje chilango y en “ofertas” de internet. ¿A poco creías que es auténtico tu Databank que compraste en el bazar por 800 pesos?
Calle Toltecas
2. Lentes
Es la continuación del mercado de relojes y aplican las mismas condiciones. Como atractivo adicional, aquí podrás probarte esos lentes “ojo de águila” que anuncian en los informerciales de medianoche, por si alguna vez te preguntaste cómo se vería el mundo a través de ellos.
CalleS: Toltecas y Rinconada
3. Ropa de marca
En estos locales venden ropa de marca. Su precio es prueba fiel de que no es original, pero sucede lo mismo que con los relojes y los lentes. Es lo mismo pero más barato, para los que acostumbran comprar en bazares o tianguis de prácticamente cualquier lugar del DF.
Calles: Caridad y Rinconada
4. Plaza del perfume
Aquí si puedes encontrar productos originales que, en muchos casos, estaban destinados a ser probadores en alguna tienda departamental. A diferencia de la gran mayoría de la oferta del comercio informal local, no se trata de envases rellenados con químicos adquiridos en la farmacia.
Calle Caridad
5. Calzado deportivo
Puestos semifijos con clones de marca. Aquéllos que hacen estas compras en La Lagunilla, el Chopo, Pericoapa, similares o anexas, encontrarás grandes ofertas.
Calle: Matamoros, entre Tenochtitlán y Toltecas
6. Entretenimiento en audio y video
Aquí venden clones de películas y discos de música. Aquí es donde se surten los piratas de la ciudad y hay vendedores especializados, por ejemplo, en cine de arte o rock mexicano de los 60 y 70.
Calle: Matamoros, de Peralvillo a Tenochtitlán
7. Salderos
Saldos de marcas originales, sí, o-ri-gi-na-les. Su bajo precio se debe a los cambios de temporada. Es como ir a una barata de tienda departamental o boutique, pero a nivel de calle. Deja el glamour para el reven.
Calle: Cerrada de Matamoros
8. Ratoncito Libertario
Tiene la más impresionante colección de clones de documentales y películas de culto. No fomentamos la piratería ni mucho menos, pero su acervo es único. Vaya, a veces ni en internet puedes conseguir los documentales que aquí despachan. No te saques de onda si escuchas que son anarquistas.
Calle: Jesús Carranza, casi esquina Matamoros
9. Bazar de las ganas
Antes de las tiendas para adultos, las frustraciones chilangas se aliviaban en Tepito. Es una pequeña calle, pero profunda en cuanto a alternativas para encender la llama de la pasión. Desde disfraces y muñecas, juguetes sexuales e incluso ofrecen la mítica yumbina.
Callejón de Tenochtlitlán
10. Videojuegos
En casi todos estos puestos semifijos hay clones, pero también encontrarás títulos originales baratos y consolas y cartuchos viejos. Además, cables, controles, eliminadores de voltaje, carátulas y todo lo que tu consola pueda necesitar. Van probados, van calados, van garantizados.
Calle: Florida, entre Héroes de Granaditas y Caridad
11. Electrónica y línea blanca
Pantallas, tablets, lectores de DVD, línea blanca y todos los artilugios que demanda la vida moderna. Hay de todo, originales baratos y marcas chinas económicas. La gran diferencia es que no te venderán una china con logo de japonesa a precio de californiana.
Cerrada de Díaz de León
12. Mural y monumento
“Las siete cabronas e invisibles de Tepito” reivindican el rol de género y demandan programas culturales y de calidad de vida. En 2009, Mireia Sallarès presentó un proyecto relacionado con la expropiación del predio conocido como La Fortaleza que culminaría con un documental y esta obra.
Calle: Rivero
13. Refaccionaría Gallardo
Fabrican muebles de diseño reutilizando autopartes. Quizá en tu casa no te dejen tener una silla con tapa de distribuidor o doble garganta, pero vale la pena visitarla.
Calle: Peralvillo 60
14. Galería José María Velasco
Espacio de la red del Instituto Nacional de Bellas Artes. Desde hace más de 60 años da cabina a creadores de todas las generaciones y formaciones, siempre y cuando involucren aspectos de la cultura pop mexicana.
Calle: Peralvillo 55
15. Migas La Güera
Sopa de pan con hueso de cerdo, chile cascabel y epazote. No es el platillo más exclusivo que podrás probar, pero es un clásico que encuentras en el barrio.
Calle: Toltecas 12
16. Tacos Ramiro
La especialidad son los de tripa, pero igual hay de bistec y suadero para los menos aventurados. Aguas con la salsa roja, suele exigir un tepache como complemento.
Calle: Aztecas 54
17. Tacos de la Suerte
Los más populares tacos dorados de todo el rumbo. Su nombre obedece a que es una suerte que te toque carne, pero igual tienen buen sabor.
Calle: Matamoros y Tenochtitlán
18. Filetes y caldos de pescado
Sus pescaditos fritos son legendarios. Daniel Gimenez Cacho llega al barrio buscando su sabor, en una relación que ya tiene en su haber una serie de televisión y obras de teatro con tepiteños actuando dentro en sus propias casas.
Calle: Jesús Carranza y Matamoros
19. Afiladuría Peralvillo
Es la más antigua de la ciudad y está en lo que se conocía como la primera legua del Camino Real de Tierra Adentro, ruta de 2.6 mil kilómetros que conectaba la Ciudad de México con Santa Fe, Nuevo México, allá por el siglo XVI.
Calle: Peralvillo 9
20. La Campana
Durante la guerra civil española, en este cajón de ropa (interior, de cama y bonetería) los refugiados se reunían para conseguir dinero y comprar armas.
Calle: Peralvillo y Jaime Nunó
21.Maracaná
Este deportivo tiene canchas de futbol y un gimnasio donde se practica box. Punto atractivo para fotos pero no para buscar pleitos. Aquí es donde empezó Cuauhtémoc Blanco y otros tantos futbolistas famosos.
Calle: Toltecas y Caridad
22. Deportivo Morelos
Centro deportivo recientemente remodelado. Su objetivo es erradicar la violencia a través del deporte, en uno de esos programas del siglo pasado.
Calle: Rivero 21
23. Deportivo Kid Azteca
Actualmente en rehabilitación, rinde homenaje al pugilista Luis Villanueva, campeón nacional welter durante 17 años, se retiró con el título. “Kid Azteca” fue tan popular que participó en películas y tuvo su propia historieta.
Calle: Rivero 74
24. Museo Indígena
Es el recinto del Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas y tiene una impresionante colección fotográfica en su acervo. Otro tesoro oculto chilango.
Calle: Reforma 707
25. Parroquia de Santa Ana
El tezontle de teocalli de Toci, abuela de los dioses y madre de Tonantzin, fue utilizado para edificar este templo. En 1796, celebró aquí su primera misa el cura Mariano Matamoros, lugarteniente de José María Morelos.
Calle: Peralvillo esq. Matamoros
26. Primer monumento a Morelos
La escultura la mandó a hacer Maximiliano, por lo que fue repudiada y vandalizada. Primero estuvo en Madero, en lo que es hoy el edificio Guardiola, luego anduvo rondando por varios sitios hasta llegar a este punto.
Avenida del Trabajo y Caridad
27. Escuela Nacional de Homeopatía
Es la clínica especializada más antigua de México. El paraíso de los “chocheros”, pero de los que curan eh.
Calle: Santa Lucía 6
28. La vecindad más antigua de la ciudad
Este conjunto habitacional conserva sus lavaderos de piso y algunas mujeres que recuerdan lo duro que era lavar de rodillas. Aquí está el único taller de organillos de toda la ciudad.
Calle: Fray Bartolomé de las Casas 13
29. Bazar de oportunidades
Los “miércoles de menaje de casa rica” es el secreto mejor guardado de anticuarios y coleccionistas. Se instalan en la plaza de la iglesia de La Conchita Tequipeuhcan (lugar donde comenzó la esclavitud), llamado así porque aquí cayó preso Cuauhtemoctzin, la tarde del 13 de agosto de 1521.
Calle: Tenochtitlán y Constancia
30. Tacos de hígado
Otra tradición gastronómica del barrio. Un manjar para conocedores.
Calle: Matamoros y Toltecas
31. Pulgas
Mercado de segunda mano con chácharas y ropa. También se le conoce como “los miércoles de ropavejeros”. Televisores de cinescopio, bicicletas, radios, juguetes, discos, videocasetes, lamparas viejas, libros y un largo etcétera. Si amas descubrir tesoros por pesos tienes que venir. No los pague al doble o triple cuando un vendedor te los lleve a ofrecer en la Condesa.
Calle: Tenochtitlán, entre Rivero y Constancia
32. Frontón Las Águilas
Este lugar es tan conocido entre los aficionados al golpe de pelota que una marca española lo patrocina. El barrio tendrá su fama, pero también muchos espacios deportivos.
Avenida del Trabajo y Labradores
33. Restaurante Jorullo
Gastronomía típica de Michoacán. La recomendación es el molcajete.
Calle: Libertad 119
34. Restaurante Correo Español
Especializado en comida española, este apacible lugar es reconocido por su cabrito y su cava, qué más puedes pedir.
Calle: Peralvillo 30
35 Chácharas
En este bazar dominical encuentras discos de vinil, guitarras, equipo fotográfico, ropa, adornos, muebles y un sin fin de cosas que no necesitas pero que se verán di-vi-nas en tu casa.
Calle: Comonfort, entre Matamoros y Rayón
36. Patinetas
Tiendas de tablas y demás artilugios para el skate de hoy.
Calle: Granaditas y Jesús Carranza
37. Centro de Estudios Tepiteños
El Cepetis es un espacio de difusión cultural. Lo mismo organizan tour por el barrio que buscan espacios para exponer su riqueza.
Calle: Granaditas 56
38. José Guadalupe Posada
Aquí vivió y murió el grabador mexicano. El maestro sí conocía el barrio.
Calle: Jesús Carranza 6
39. Baños públicos
Presumen de ser Las mejores cacas de Tepito. Por alguna extraña razón se ha vuelto un espacio muy “instagrameable”. El barrio los respalda.
Calle: Díaz de León s/n
40. Clínica de salud
En su faceta como médico, Mariano Azuela atendía en esta clínica. Se especializaba en enfermedades de transmisión sexual, antes llamadas venéreas y no se ha comprobado que su especializada tenga relación alguna con el título de su más famosa novela, Los de abajo.
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Un último cigarro y una última botella de Whisky, ambos aderezando una escena premeditada que concluiría una historia rota; no de una puta mentirosa, sino de un novio imbécil. No serían más de las tres o cuatro; en realidad eso da igual, lo único que sé es que el frío me tenía los testículos como pasas, y las luces de los pocos coches que se aproximaban, daban un color amarillento a una calle sin luz. No era más, sólo yo y una maldita desgana que por poco acaba por tirarme al piso; no distinguía siluetas, sólo puntos intermitentes en el cielo que pareciese que se cayeran nada más caminar; y luces rojas y amarillas, y aceras de concreto partido, y pura mierda en un cerebro incapaz de pensar. No bastaron más de diez segundos para percatarme del neón incandescente de una taberna a lo lejos que desentonaba la melancolía de un callejón sin fin. No fue corto el camino pero la disposición ya estaba echada y la vida misma se había largado de una cáscara vacía y ridícula como yo. Sólo hacía falta un poco más, y podría sentarme a descansar un momento, a terminar la malparida desgana con un irremediable desdén. Sólo eso...
... Me paro en la puerta cubierta por cortinas de seda de color vino tinto, y sin más qué decir me siento en una de las mesas que se aparta del resto; me empeño en seguir bebiendo y fumando a la vez que denoto un misterio innato de cualquier hijueputa ebrio. No pasa mucho hasta que veo aproximarse a una puta con pezones color cereza; en realidad no sé qué dice, pero no está mal lo que veo; no me importaría en absoluto pagarle un par de pesos y penetrarle con ganas hasta las entrañas... En fin, no vine a eso. Retomo mi conciencia con dificultad mientras me ahogo en un hedor a sudor y a semen intenso, y me pierdo por momentos en los bailes sexuales de la puta en la barra. Le regreso la mirada a la perra de las cerezas, y le digo con decisión que me busque a Pedro. Se retira entonces dejando un olor barato a sus espaldas, y unas cuantas escarchas con sudor mezclado sobre la mesa. Le miro el culo mientras avanza, y me regala miradas pícaras mientras me lanza besos... Cierro los ojos un segundo y veo puntos verdes golpeando mis párpados, el espacio flotando entre mareos incontrolables, y una oscuridad opacada por luces multicolores rotando desde una bola colgada en el techo en el medio de la sala.
Pedro, mi mejor amigo, el jefe de mi malparida novia, del amor de mi vida, de mi perra encadenada, de mi media naranja. Pedro... Pedro... Me saluda de un apretón de manos olor a cerveza negra. Le pregunto por mi mujer, por el trabajo, por lo que hacen regularmente, por cómo se tratan, y por cómo va ella... Me responde sin duda, pena ni gloria; “Todo está bien” me dice, dejando como acompañante y conclusión: “Ella es muy buena en todo lo que hace, muy buena”... Y sí, vaya que lo era, una perra trabajadora con dotes para follar hasta el cansancio. Y yo, bueno, al parecer no basta tener un buen pene para satisfacer a una puta infeliz. Sea como fuere, ahí estaba él, y ahí estaba yo, fumando de mi último cigarro, y bebiendo de mi último Whisky.
... Sirenas suenan y se manifiesta un efecto Doppler que hace eco en el prostíbulo, luces azules y rojas que se difractan entre cristales tintados, y una atmósfera de drama que parece quedarse fuera de la entrada. Pedro sigue hablando de las putas en las barras, de lo bien que van las cuentas y de su tremendo intelecto y potencia en la cama. Le miro con ojos entrecerrados, y en medio de un dramatizado absurdo, le doy un abrazo. “Pedro, te quiero mucho, eres mi mejor amigo; gracias por cuidar de mi mujer”. Me echa para atrás y me dice: “Para eso estamos hombre”; sin antes dejar un rastro a perfume barato. Sonrío entonces con una lucidez plena, y abro los ojos tal cual lo haría un cazador acechando su presa. Pedro, pedro... “¿Sabes por qué suenan sirenas? Su negativa era un reflejo de la agradable ignorancia que me mostraba. “Fueron por mi mujer, la están sacando de casa” Le digo con una tranquilidad inherente de todo un orador confiado. “¿Le pasó algo? ¿Se lastimó?” En realidad no, no se había lastimado, sólo había resbalado mi cuchillo sobre su cuello mientras follaba con ella en el sofá. “La maté” Le dije, tragando los últimos sorbos de Whisky y dejando que el cigarrillo se consumiera lentamente entre mis dedos. De la nada un repentino salto opacó las erecciones de los presentes, y desde mi cintura un Revolver reflejó las luces intermitentes. Tres balas de las seis se incrustaron en su espalda y otra más en una puta sin fortuna que pasaba descontrolada. Ups, mala suerte. Me levanté entonces sin expresión aparente, y de mi cintura también conseguí el cuchillo. Pedro, mi amigo, este mismo cuchillo degolló a la mujer que penetraste; deja que haga lo mismo con tu cuerpo malparido. Vez tras vez contaron 29, 30, 31... Quizá 10 más, quizá 20 más... El punto es que Pedro dejo de ser Pedro porque ni su cara se reconoció después de eso; la sangre se regaba ante la mirada de los ebrios, y mi sonrisa de oreja a oreja regalaba un precioso deceso ¿Alguien quiere terminarse el Whisky conmigo y fumar esta mierda de cigarro? Grité sin esperar respuesta. Fue entonces cuando vi acercarse a la puta de las cerezas, la perra con ganas; “Que te quede claro que no tengo dinero” dije; pero al parecer sólo buscaba compañía. Bebió entonces la última gota del Whisky, y fumó el último tramo de cigarrillo, encima del cuerpo sin vida del caído.
... Un revolver, una botella de Whisky vacía, un cigarrillo gastado, una puta con pezones de cereza, una sirena que no frena, luces que entran por las ventanas, policías que presencian la escena; Una perra que me abraza, una perra que me besa; una sonrisa vacía, un levantar del revolver.
Una cien, un gatillo. Una novia malparida; un amigo malparido. Una puta amorosa, una muerte repentina. Oscuridad infinita. Nada absoluta.
...
Mr. Cat
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Poesía barata:
De poesías baratas, tu rostro demacrado.
De rimas asesoradas, tu voz precaria.
Intrínseca y afónica, la risa circundada
Al honor y al rechazo, el cilantro barato
Cremalleras intactas, el desamor follando
Mortífera operaria, el sonámbulo cantando
Colchones rígidos, cigarros baratos, sexo casual, la mojigata cenando
Dialéctica de la embriología, el párpado caído
De pómulos desiertos, los poemas llegando.
Al despertar por el despecho, la saliva con ron
Entre tuertos y tartosos, la disonancia y el amor.
Almohadas vacías, sueños rotos, labios mojados
La mujer de la calle treinta y tres, el beso de cien
Entre virus y amores, los fluidos fetales
De incoherencias malditas, la musa de la montaña.
Volátil y traumada, los dólares de ayer
De poesías baratas, tu vulva hinchada
Entre inseguridades cromáticas, el olvido y el alquitrán.
De finales autónomos, la astucia victimaria
Al rechazo y al credo, piernas entreabiertas, sostenes mojados
Del mar y la nada, una rumba saciada
Entre copas y gemidos, tu recuerdo y el mío
Pudiente y quejosa, el whisky sabe a rosa
De poesías baratas, tu mano en mi pecho
A la analogía y la palabra, tu religión crucificada
Promiscua quien te canta, sinfónica del tedio
Vida mía, la mía mamma
Vibradores y agua, tus lágrimas guardadas
Barata y útil, la santísima trinidad
De escombros y pecados, tu rostro fragmentado
Al llorar por el cuerpo, el alma consumada en sal
De dulces y melocotones, tu piel sumisa
A cientos de cuentos, baratos los recuerdos
De la fantasía y la rima, la prosa sin vida
Entre senos pequeños, el látigo masturbador
De jugosos y asmáticos, mis dedos girando
Locuaces y seniles, tu ruina emocional, mi dependencia a la nicotina.
Tragos amargos, a recaídas seniles
fructífera y mal viviente, las líneas dependientes
Al cantar en silencio, los gritos maquinando
Entre vulvas gigantes, tu voz excitante
Del adiós a la exigencia, el cerebro palpitando
Del corto circuito y un te extraño, los tés polvoreados.
De agujetas abiertas, mi musa llorando
Entre el clímax perfecto, los vínculos llamando
Llamadas cortadas, sueños atrapados, la cabeza de estropajo
De medicina interna, a la anestesia local
Un trago más, mi condena enferma
A recaídas extremas, la fiesta victoriana
La musa de la calle, el perfume conservador
De pelos salientes, tus pecas relucientes
De amores baratos, poemas onerosos
A oportunidades vendidas, dia noches vacías
Tu cama y la mía, el ruido adormecedor
A las almas rotas, tus besos pagados
Entre cumbres y lluvias, tu pecho calcinado
Puta quien te escribe, pero tuya siempre
De baratos a caros, los almacenes incinerados
Una culpa y la magia, el país sollozando
A los tenis blancos, las botas rotas y la ropa de ayer
Vida mía, tu indiferencia disparando
Del cuchillo frenético, la hemorragia del desacuerdo
El cantar del envejecimiento, tu ruina y el tiempo
Desacertado tiempo, mi lengua en tu cara
De pasiones y emociones, las rimas pedigüeñas
De lo barato, la poesía, mi esencia, tu recuerdo y mis fantasías
Al ripio deseo, mi alma ensangrentada
Por tu dolor y el mío, la falsedad y el tiempo
Lo corto y mediano, cuatro senos despedazados
Al sin fin del final, tu alma y la mía
Entre crímenes baratos, la lírica llamando
De bandas y nodales, los lutos asociados
A la costumbre y al apego, la ilusión motora, los orgasmos inexistentes
A la falacia y al encuentro, tu escondida y la calma viva
Entre el amor propio, la mendiguez de tus pasos
Para agobios eternos, mi niña interior
De rimas absurdas, poesías baratas
Amores clandestinos, mi musa apática
A la apatía y la melancolía, un regreso al corazón
De convulsiones extravagantes, tu rostro vibrante
Entre el arte y la medicina, la puta cocina
Al adiós entrelazado, tus pecas rogando
Entre el final llegando, tu número marcando
De poesías baratas, los políticos follando
Desahuciada y mitómana, el veneno mortal
De mujeres clandestinas, mi amor eterno
Por los billetes falsos, tu falsedad cambiante
De despedidas y vacíos, mi alma entre gérmenes
Al azúcar y el gluten, vuelve por favor
De los favores factibles, las curitas de veinte y cinco
Al sol y la luna, el cáncer terminal
De la sobredosis al atardecer, tu espera marchándose
Por tu dolor y el mío, envuélvete en el silencio
A las escondidas, los juegos maquiavélicos
Un ataque y el mar, la erupción del volcán
De la musa de antaño, el conservador monógamo
El brillo intacto, los granos llegando
De poesías baratas, mi amor y tu alma
Entre canciones clásicas, mis líneas llorando
Para dramas innecesarios, mi niña interior
Una nena colapsando, la mujer clamando
De mentiras y encuentros, un domingo degollado
Entre cuerdas flojas y amenazas volcánicas, el ego y el apego
A la misa y a los santos, mi musa olvidando
Por los audios vociferantes, mi cuerpo marginado
De risas y llantos, mi amor volando
Entre crisis y borrachos, la morfina de mi vida.
A humillaciones y esperas, tuya siempre
A poemas sin condición, los orgasmos claustrofóbicos
De repeticiones banales, mi sol durmiente
Decepcionada y ardida, mi novia mía
Al sueño por el desespero, lo barato mutilado
Al final de los sueños, Lorca asesinado
De doctores y ambiciones, la puta despertando
Entre el ego y el narcisismo, mi diosa flagrante
Sensible e inteligente, la rima acabando
De un perdón indescriptible, los deseos llegados
A falacias y destellos, mi amor de pandemia
Por lo ostentoso y mundano, mi tiempo maltratado
De irrupciones y compasiones, el luto de cartón
Al olvido vivido, tu alma y la mía
De demonios y pasiones, las confusiones mentales
Sin finales abruptos, la vacuna dependiente
Entre largos textos, el paréntesis del montaje
Criminal y tópica, la barata de clase alta
Desatinado tiempo, que cansa y acompaña
De menor a mayor, tus pezones sanguíneos
Por la suciedad y el qué dirán, los amores propios decaen
Al barato ron, y la cerveza enlatada, tu carne y mi sed
A la despedida en la soga, el clonazepam llamando
De un adiós extraño, el bizarro canto
Entre criminales y peores, tu vida conectándote
De bruscos y mordiscos, los senos caídos
A los olores cambiantes, tu sexo y el mío
Para mentiras fallidas, los vínculos abombando
De obsesiones abstractas, tu droga contemporánea
Un efímero amor, y la llaga infectada
De deseos y sueños, las líneas doliendo
Por vómitos y los impulsos, mi cuerpo silenciado
A los silencios y los despidos, un regresa y no llores
Por los abrazos fugaces, mi eterna morada
De barata a cara, la sal apagada
Entre dolores y desamores, mi musa esperando
Del espero al desespero, la puta llorando
Cristalina y humana, mi vida entera.
Del fin de los tiempos, mi tumba te espera.
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Agua de Luna de Puig, uno de los perfumes baratos con mejores resultados.
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Las características fundamentales de este perfume son sus notas cítricas de bergamota y mandarina, combinadas con pétalos florales y hojas de violeta. Esta combinación tan especial hace de este perfume una esencia refrescante poco común. Es una opción muy válida para quienes deseen un buen perfume por un precio bastante económico.
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