Tumgik
#mesa de comer
Text
Tumblr media
38 notes · View notes
entropiasgift · 1 year
Text
Yo de comida familiar dominguera:
@laultimahijadelcaos dándole una paliza a Dario en vivo señalando que las cosas que le asquean o le asustan de sí mismo no están ahí porque sí, y que son marcas causadas por vivir en el mundo en el que vive:
Tumblr media
Chhaya diciendo clarito, los recuerdos de lo que me ha pasado en la vida me pesan, pero también me inspiran a ayudar a quien está sufriendo:
Tumblr media
¿QUÉ ES ESTO Y POR QUÉ DUELE TANTO?
Tumblr media
¿Suficiente? ¿Suficiente? ¿SUFICIENTE?
*Yo corriendo a buscar LA CANCIÓN*
Suficiente.
youtube
7 notes · View notes
bububalofa · 15 days
Text
Diferenças entre Gordas e Magras que percebi trabalhando como atendente em Padaria - Parte 2
...🪷 ꪆৎ 🦢‧₊˚♡︎ 。🩰ꪆৎ 🐇˚⋅. ₊˚🎀⊹♡˚₊‧......
Uma coisa que sempre reparo nas gordinhas é que sempre estão "ajeitando" a roupa porque por menor que sejam seus movimentos as roupas se embolam pra dentro das banhas e elas tem que ficar tirando, fora o suor que sempre fica marcado nas roupas claras;
Já as magrinhas nunca vi com esse problema, a única dificuldade que uma Magra tem com a roupa é se a roupa está larga então precisa dar jeito de apertar;
As Gordas sempre colocam muito molho nas coisas, juro que algumas até colocar na parte de cima da mão só pra comer puro (quando forem em lanchonete ou padaria sentem perto de um gordo e vão ver que não estou mentindo, você definitivamente não vai querer ser gorda nunca mais)
Diferença gigantesca na postura ao se sentar, as grandes sentam quase deitadas na cadeira e quando a comida chegam faltam pouco enfiar a cara no prato, enquanto meninas Magras ficam sempre retinhas;
Testar o banco ou cadeira antes de sentar, isso é uma das preocupações básicas das acima do peso, checar qual cadeira vai aguentar as toneladas;
Se vestir em camadas mesmo em dias de calor, basicamente usar uma uma camisa por cima da outra, não por estilo, mas pra esconder o corpo;
Abrir o botão da calça pq a barriga estufou, sério é uma das situações que mais mechem comigo;
Por último o que mais me apavora: como as pessoas te descrevem. Pode ser a magrela mais FEIA de rosto sempre vão falar "aquela magrinha ali", "aquela lá que vem todo dia e não come quase nada", "a magrinha que come igual passarinho" ou então "aquela magrinha bonitinha"
Enquanto a gorda que tem um rosto LINDO sempre vai ser " a grandona lá", "Aquela que pede dois mistos todo dia", "Aquela que senta esparramada na mesa 3", "A que fica quicando no banco antes de sentar pra ver se quebra" ou então "a gorda"
Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media
557 notes · View notes
americangroupie · 8 months
Text
✮ lust for life ✮
enzo vogrincic x reader
tw: +18, un poco de exhibicionismo jj
a/n: lo escribí rapidísimo, pero me terminó gustando un montón;) manden requests!!
୨୧┈┈┈┈୨୧┈┈┈┈୨୧
tu novio y vos mantenían una relación privada.
era lo más razonable bajo las circunstancias en las que se encontraban; enzo pasó de nada a todo en cuestión de semanas gracias al estreno de su nueva película, y lo mas lógico era esconder a la novia del novio de internet. pero enzo nunca fue una persona privada.
cuando recién comenzaban a salir, no tardaste en notar que él tenía una manía con tenerte cerca cuando salían a la calle, o cuando estaban con amigos, o cuando iban a comer; cuando hacían cualquier cosa que involucrara a un tercero. esto al comienzo se manifestaba a través de el tomando tu mano y no soltándola, colocando sus manos en tu cintura o acariciando tu cuello mientras te encontrabas distraída haciendo algo más.
pero al pasar el tiempo, estas dulces muestras de afecto fueron escalando a sus manos sobre tus muslos, sus dedos rozando por fuera de tu ropa interior, o directamente bajarla por tus piernas para estremecerte.
como cualquier otra persona, te ves rápidamente colorada o exaltada por sus acciones, mirándolo con los ojos muy abiertos mientras el te respondía con una sonrisa ladeada sin prestarte mucha atención.
hoy no fue distinto.
te encontrabas en un bar, sentada en la esquina de la mesa al lado de tu novio y sus amigos, quienes se encontraban charlando y riendo audiblemente mientras los dedos de enzo rozaban por encima de tu ropa interior. tus ojos reposaban en su perfil, veías sus labios moverse pero tus oídos no registraban ningún sonido al estar todos tus sentidos enfocados en la sensación de sus dedos, y preocupada de no hacer ningún ruido.
miraste sus ojos achinarse justo antes de dedicarte una rápida mirada de reojo, la comisura de sus labios torciéndose hacia arriba al ver brevemente tus ojos suplicantes.
sus dedos se movían lento, rozaban apenas el delgado material de tu ropa interior desesperándote aun mas, y haciéndote mover las caderas hacia adelante de vez en cuando.
no soportabas mirarlo así, pretendiendo como si no estuviese sintiendo lo mojada que estabas al escucharlo charlar tan naturalmente sobre algo que tus oídos no lograban entender.
brevemente, tus ojos brillaron gracias a una idea.
te acomodaste en la silla sin hacer mucho ruido, acercándola más a tu novio, y cerraste tus piernas, haciendo que enzo girara tu cabeza para mirarte sin dejar de hablar. le sonreíste con inocencia, ladeando la cabeza para luego apoyar tu cabeza en su hombro y abrazarte a su brazo como un koala.
escuchaste un pequeño “aw” de alguno de sus amigos gracias a la acción, y reíste al saber tus intenciones detrás.
sin tener idea, enzo siguió siendo partícipe de la conversación mientras tu mano bajaba despacio hacia su bulto, haciéndolo acomodarse en la silla y sintiendo como el agarre que tenia en tu muslo paso de ser delicado, a dejarte la mano marcada.
lentamente, enzo giró la cabeza para mirarte, tenia el ceño fruncido y su respiración se había vuelto irregular y más profunda.
“cuidado, mi amor.” susurró al bajar la cabeza para acercarse a ti.
pestañeaste varias veces, mirándolo con inocencia y confusión. “¿que, en?” dijiste mientras aplicabas más presión en el bulto, ganándote un callado jadeo que te hizo apretar las piernas.
seguiste con el juego unos minutos, hasta que te diste cuenta que ya no tenía el mismo efecto en su hablar ni en sus acciones. charlaba con normalidad, mirándote cada cierto rato y tratando de mantener la compostura frente a sus amigos. pero vos querías hacerlo sentir como el te hacía sentir siempre.
agradecida de que llevara pantalones de fácil acceso, pudiste meter tu mano despacio por entremedio, y comenzaste a frotar y dar palmaditas por encima de su ropa interior, como el acostumbraba a hacer contigo.
sus facciones se endurecieron al darse cuenta de tu acción, bajando la cabeza casi inmediatamente para suspirar y callar los jadeos que amenazaban con salir al mirar tu cara de inocencia mientras lo tocabas por debajo de la mesa.
hacer contacto visual con vos lo estremeció completamente, logrando tu propósito: llevarlo hasta el límite.
“nos van a tener que disculpar, pero tenemos otro compromiso y se nos está haciendo tarde.” dijo enzo con la voz un poco más ronca de lo normal mientras sacaba su billetera del bolsillo, sacando un par de billetes y colocándolos sobre la mesa, haciéndote sonreír y quitar la mano de dentro de su pantalón para acomodarte tu propia ropa. “un gusto verlos a todos.”
abriste la boca para decir algo pero enzo agarró con fuerza tu brazo para hacerte acercar hacia el, caminando hacia la puerta con rapidez mientras saludabas con tu mano en forma de adiós a sus amigos.
caminaron a paso rápido al auto, sin decir ni una sola palabra. “te portás tan mal vos, eh.” dijo apoyándote contra la puerta del auto, acercándose hacia ti lentamente haciendo notar la diferencia de altura entre ambos. “no te puedo llevar a ningún lado.”
habían muy pocas luces en el estacionamiento, la única iluminación presente siendo las luces anaranjadas del cartel del bar que lo hacían parecer de otro mundo con las ojos oscurecidos, el semblante molesto y el cabello desordenado.
“cogeme.” susurraste contra sus labios, ganándote una sonrisa de parte del pelinegro.
“¿así se piden las cosas, chiquita?” negaste con la cabeza. “¿y entonces?”
“por favor.”
“¿por favor qué?”
te quejaste. “por favor cogeme.”
sonrió mirándote a los ojos mientras abría la puerta del auto entrando el primero y corriendo el asiento hacia atrás para luego sentarte a horcajadas encima de él.
apenas cerró la puerta del auto te lanzaste encima, tomándolo por las mejillas para acercarlo más hacia ti mientras el agarraba tu cintura con fuerza. el beso rápidamente se transformó en necesitado, con ambos jadeando mientras movías tu cuerpo de adelante hacia atrás sentada en el bulto entre sus piernas, haciéndolo gruñir mientras gemías en su boca por la sensación.
“sos una hija de puta.” dijo entre besos, haciéndote reír mientras bajabas por su cuello, pasándole la lengua y mordiendo cada parte que tus labios rozaban. “me vas a volver loco algún día de estos.”
“tú empezaste, enzo.” dijiste separándote de su cuello.
“mhm.” asintió con la cabeza mientras corría los tirantes de tu vestido hacia un lado. “no me puedo controlar si te ves así. parecés una muñequita.”
sentiste sus ásperas manos masajearte sin nada de delicadeza y echaste la cabeza hacia atrás; tus caderas no cesaban de moverse contras las de tu novio y tu espalda se arqueaba de placer, hipnotizando al uruguayo completamente con tu figura y los gemidos que salían de tus labios.
“¿te gusta, mi amor?” susurró burlescamente, mirando detalladamente cada movimiento de tu cuerpo y cada facción de tu cara. asentiste atontada, con los ojos cerrados buscando más fricción entre los dos. “decime cuanto.”
lloriqueaste. “mucho, enzo. sabes que mucho.”
“te ves tan bonita frotándote así, mi vida. te comería toda.” gemiste. “ah, eso querés. ¿querés que te coma? ¿querés moverte así, sentada en mi boca, hm?”
“basta, por favor” suplicaste, moviéndote más rápido. “cogeme.”
“¿como, bebé?”
“cogeme. no aguanto más.”
“pedilo bien, hermosa.”
“cogeme, por favor cogeme.”
mientras bajabas tus manos para desabrochar su pantalón, él sumergió la cabeza entre tus tetas, lamiendo y mordiendo todo lo que sus labios tocaran; haciendo mil veces más difícil la tarea de bajar sus pantalones.
mientras el se tomaba su tiempo lamiendo y besando, comenzaste a trazar circulitos en la cabeza de su miembro con lentitud, irregulando aún más su respiración y haciéndolo morderte para ocultar los gruñidos que salían de su boca.
te acomodaste encima de sus piernas, alzándote para poder sentarte encima de su miembro mientras el corría tu ropa interior hacía un lado, metiéndolo dentro por completo de un brinquito. enzo tiró la cabeza hacia atrás, gimiendo gracias a la sensación de estar dentro tuyo que a pesar del tiempo, se seguía sintiendo como la primera vez.
“mirá lo bien que me tomás, chiquita.” dijo mientras comenzabas a moverte de arriba hacia abajo, escondiendo tu cabeza en el hueco de su hombro para ocultar tus gemidos. “te sentís tan bien.” susurró mientras agarraba tu culo con fuerza, ayudándote a moverte más rápido.
enterraste las uñas en su espalda mientras te movías, mordiéndote el labio inferior tratando de no hacer tanto ruido.
“¿ahora te da vergüenza, mi amor? ¿después de todo lo demás?” dijo en un tono burlesco mientras movías tu cuerpo al compás de sus embestidas. “no te calles. deja que todos escuchen como te pongo, como te cojo.”
respondiste con un quejido, sintiendo una sensación conocida en tu cuerpo mientras escuchabas sus jadeos cerca de tu oído, y el uruguayo lo notó al sentirte estremecer y moverte más lento, apresurando sus embestidas y agarrando tu culo con más fuerza.
“te hacés la niña buena, la princesita, y estás por acabar mientras cogemos en un estacionamiento.” sentiste tus mejillas pintarse de color rojo con sus palabras. “sos una cínica.”
“es tu culpa, en.” lloriqueaste en su oído, bajando tu mano entre ambos cuerpos para frotarte. “estoy muy cerca.”
“yo también, chiquita.” dijo entre jadeos. “¿puedo?”
“por favor.”
un par de embestidas más y ambos alcanzaron el mayor punto de placer, acercando sus cuerpos a no más poder y llenando el ambiente de sus gemidos. pasaron unos segundos donde lo único que se escuchaba eran ambas respiraciones agitadas, y levantaste tu cabeza para besarlo con lentitud.
apoyaste tus manos en su pecho mientras se besaban; un beso lento y torpe mientras se acostumbraban a la sensacion y volvían a la normalidad. al separarte de el, lo miraste con dulzura.
“estás todo pintado, amor.” reíste mientras tratabas de limpiar el labial de su boca.
“y vos estás toda rojita. es parecido.” colocaste tus ojos en blanco y lo besaste, acariciando su mejilla.
“llevame a casa.” dijiste mientras el comenzaba a besar tu cuello, indicando que no quería parar. “no podemos hacer tanto acá.”
“pero tenemos que esperar que los vidrios se desempañen.” dijo pasando un dedo por el cristal del auto, haciéndote notar que todo el auto estaba así.
te tapaste la cara riéndote, mirando como era demasiado obvio lo que estaban haciendo. “sos un idiota.”
“a veces.” dijo sonriendo, y dibujó una carita feliz en el cristal.
920 notes · View notes
dolotte · 2 months
Text
₊‧꒰ა☆໒꒱‧₊magreza de comportamento₊‧꒰ა☆໒꒱‧₊
essa tread é destinada exclusivamente para o ed, por favor saia caso não faça parte
Olá, hoje vamos falar sobre como seu peso afeta a forma com que você age e é vista mesmo de forma inconsciente.
vamos começar pelo basico, vocês provavelmente ja notaram comportamentos naturalmente doces vindo de meninas magras e delicadas (na vida real ou não) e por muitas das vezes reparamos em coincidências que ao meu ver são padrões de meninas finas.
em um geral é extremamente difícil notar esse comportamento em meninas com sobrepeso, e quando tentam normalmente são ridicularizadas por que não soa natural.
abaixo irei listar sutis comportamentos para se adequar a uma mente magra.
❤︎exemplos de magreza de comportamento ❤︎
¹ comer pouco e devagar- esses dois comportamentos estão atrelados, a saciedade com pouco se torna algo admirável, todos demonstram preocupação pelo seu natural jeito de ser. a leveza de comer degavar também e notada por todos, a forma como você não se parece com um monstro esfomeado viciado em se saciar te torna adorável e faz com que não sintam nojo do seu jeito de agir
(diferente das pobres meninas gordas, que são enojadas por parecem porcas até mesmo sobre a mesa)
² leveza e falta de pressa- garotas magras não se apressam sobre a mesa, não correm sobre seus pratos para conseguir logo o que comer, de forma gentil esperam que todos se sirvam e então comem, isso torna seu comportamento leve e educado, tipico de meninas magras
(meninas gordas não conseguem se controlar em momento algum, correm na frente de todos para comer e sempre tomam iniciativa para iniciar a refeição)
³ tom de voz e comportamento- meninas magras não precisam elevar sua voz para serem ouvidas, podem expressar seus sentimentos e pensamentos de forma baixa e delicada que ainda sim todos a ouviram e amaram ouvir seu tom de voz doce tipico de uma menina magra. suas falas nunca estaram cobertas por palavrões ou inveja, pois nunca te falta atenção.
(ja as pobre porquinhas se submetem aos berros, gritarias e as mais diversas girias so para atingir um pouco de atenção, tadinhas logo serão taxadas como pick me)
⁴ hobbies- meninas magras sempre estaram atreladas a um hobby, dançar, jogar, pintar, correr, cozinhar. e por uma mera coincidência, seus hobbys são mais prazeros que comer, logo podem esquecer de se alimentar.
(coisas que não acontecem com meninas gordinhas, ja que anseiam apenas por comida)
⁵ estilo- meninas magras estão fadadas a serem lindas e até mesmo a roupa mais básica parecem ter sido feitas a medida para seus corpos. sua magreza é idealizada e planejada para acolher as mais belas roupas, assim como modelos
(gordas vestem apenas restos, e sugam migalhas de estilos magros ja criados)
⁶ aparência e higiene - assim como fadas e princesas, meninas magras naturalmente nascem com o melhor senso de higiene.
•se levantam ao sujar suas mãos com comida, para que a limpeza seja feita da forma correta.
•suas roupas nunca ficaram manchadas por gordura ou molhos excessivos.
•seus dentes sempre limpos por não comer a todo momento.
pequenas atitudes se tornam um padrão inalcançável para qualquer uma acima do peso.
(infelizmente gordinhas naturalmente parecem não se adequar a certas normas)
existem os mais diversos comportamentos, mas esses foram os principais notados por mim.
espero que tenham gostado e espero que assim consigam se adptar ao padrão de uma menina magra.
beijinhos da lotte
Tumblr media
382 notes · View notes
ihrryboobies · 2 months
Text
Bitch Boss
Tumblr media
Avisos
へㅤh cis fem | ltops | power bottom | oral sex | praise kink | overstimulation | dirty talk | breath play
Part 1
Peço perdão pela demora e se tiver algum erro, passei por um bloqueio criativo enorme
Boa leitura❤️
— 𝘚𝘦𝘯𝘩𝘰𝘳𝘪𝘵𝘢 𝘚𝘵𝘺𝘭𝘦𝘴? 𝘌𝘶 𝘴𝘰𝘶... — 𝘓𝘰𝘶𝘪𝘴 𝘯𝘢̃𝘰 𝘤𝘰𝘯𝘴𝘦𝘨𝘶𝘪𝘶 𝘵𝘦𝘳𝘳𝘮𝘪𝘯𝘢𝘳 𝘢 𝘧𝘢𝘭𝘢 𝘱𝘰𝘪𝘴 𝘧𝘰𝘪 𝘪𝘯𝘵𝘦𝘳𝘳𝘰𝘮𝘱𝘪𝘥𝘰 𝘲𝘶𝘢𝘯𝘥𝘰 𝘦𝘭𝘢 𝘴𝘦 𝘷𝘪𝘳𝘰𝘶
— 𝘓𝘰𝘶𝘪𝘴 𝘛𝘰𝘮𝘭𝘪𝘯𝘴𝘰𝘯, 𝘦́ 𝘶𝘮 𝘱𝘳𝘢𝘻𝘦𝘳 𝘤𝘰𝘯𝘩𝘦𝘤𝘦-𝘭𝘰 — 𝘋𝘪𝘴𝘴𝘦 𝘏𝘢𝘳𝘳𝘺 𝘤𝘰𝘮 𝘶𝘮 𝘴𝘰𝘳𝘳𝘪𝘴𝘰. — 𝘌𝘴𝘱𝘦𝘳𝘰 𝘲𝘶𝘦 𝘨𝘰𝘴𝘵𝘦 𝘥𝘦 𝘵𝘳𝘢𝘣𝘢𝘭𝘩𝘢𝘳 𝘢𝘲𝘶𝘪.
👠
Quem diria que a vida poderia ser tão imprevisível? Um dia você sai para curtir o carnaval, acaba dormindo com uma pessoa e no dia seguinte descobre que ela será sua chefe, com quem irá conviver por um bom tempo.
Desde aquele reencontro no escritório da cacheada, haviam se passado cerca de três meses. Louis havia conseguido passar pelo período de experiência e estava trabalhando de forma fixa com a cacheada. Ele se mostrou muito competente no trabalho, sempre ajudando sua chefe com tudo, inclusive em novas ideias e projetos. A relação entre os dois estava boa, eles continuavam se encontrando, saindo para jantar, mas ainda não haviam avançado na relação. No trabalho, eles sempre agiam de forma profissional.
No entanto, nem sempre as coisas eram tão fáceis…
Louis estava na sala da cacheada, a pedido dela, para uma revisão das propostas que seriam discutidas na reunião já agendada.
Harry estava vestindo um terno cinza com espartilho que modelava perfeitamente o corpo da mulher, o cabelo preso em um rabo que realçava seu belo rosto e scarpin preto nos pés. Louis usava um terno todo preto com uma camisa social branca e um sapatos sociais pretos.
Porém, os dois estavam deitados trocando alguns beijos em um sofá que se encontrava no canto esquerdo da sala. Louis estava por cima da garota, pressionando sua ereção no meio das pernas de Harry, que não demorou muito em deslizar as mãos por toda extensão e apertar de leve.
— Você está tão gostosa e sexy com esse terno. — Disse Louis, levando as mãos até um dos seios coberto da garota. — Mas o que eu queria mesmo, é arrancar esse terno e te comer aqui nesse sofá. — Disse ele baixinho perto do ouvido da garota. — O que acha, hmm?
— Eu acho isso maravilhoso. — Disse Styles, trocando as posições e sentando-se sobre a semi ereção de Louis, começando a se esfregar nele. — Mas infelizmente teremos que continuar em outra hora. A reunião começará daqui a uns 5 minutos e precisamos ir agora. — Harry disse, levantando-se e ajeitando seu terno.
— É sério isso? — Disse Louis emburrado. — E o que eu faço com esse problema aqui embaixo? — Levou a mão para a ereção evidente.
— Dê um jeito nisso aí, pense em algo broxante. — Disse, se aproximando do rosto de Louis. — Como você me comendo em cima da minha mesa. — Harry disse com um sorriso, deixando um beijinho em sua bochecha antes de se afastar e ir em direção à porta.
— Filha da pu... Você me paga. — Louis levantou, arrumando a ereção dolorida, enquanto colocava seus óculos e caminhava para fora da sala, logo atrás de sua chefe.
👠
Eles se encontravam na sala de reuniões discutindo os últimos detalhes para um novo projeto, que consistia num lançamento de um novo tipo de carro. Louis apresentava o projeto do carro que tinha feito junto com sua chefe para Harry e seu sócio Finn. As ideias de Louis seguravam toda a atenção da cacheada, que estava deixando o homem na sua frente frustrado. E o assistente percebeu isso.
Desde que Louis começou a trabalhar ali, ele sentia os olhares de raiva e cochichos vindo desse cara, mas sabia que tudo isso era inveja.
— Então, essa é a ideia do projeto. O objetivo principal é torná-lo mais econômico. O senhor tem alguma pergunta?
— Quero acrescentar que, além de econômico, pretendemos fazer um carro mais sustentável.
— Gostei da ideia. Quando vocês pretendem começar a montar
o carro? — perguntou o homem meio desinteressado.
— Logo, logo, precisava pensar em alguns detalhes finais. — Disse Louis, ajustando seus óculos no rosto.
O homem revirou os olhos disfarçadamente, mas que não passou despercebido pela cacheada
— Alguma coisa te incomodou, senhor? — Disse Harry, cruzando os braços
— Eu não entendo o que ele está fazendo aqui, sendo que ele é apenas um secretário. — Disse o homem com desdém. — Há quanto tempo você está trabalhando aqui, Louis?
— Há uns 3 ou 4 meses, por quê? — Disse Louis, confuso com a pergunta.
— Eu queria saber, o que o senhor teve que fazer pra conseguir essa moral toda, hum? Aposto que só precisou...
— O senhor pense muito bem no que irá falar — interrompeu Harry, se levantando abruptamente da cadeira. — Embora Louis não lhe deva satisfações, ele está aqui por mérito próprio, é uma pessoa esforçada e tem uma mente brilhante que você jamais teria. E, pelo que eu me lembre bem, você só continua aqui pela consideração que meu pai tem pelo seu. Se dependesse de mim, essa parceria teria acabado há muito tempo. — A mulher recolheu todas as folhas espalhadas e guardou em sua pasta. — Se não for falar sobre o carro, pode se retirar porque esta reunião está finalizada. — dirigiu-se à porta e a abriu rapidamente.
Harry saiu da sala e Louis a acompanhou, com um sorriso no rosto pela maneira como ela o defendeu. Ele não ficou chateado, nem nada do tipo, pois sabia que o cara tinha uma queda por ela, assim como todos os outros, mas apenas ele tinha a atenção de uma mulher tão gostosa como essa. Quando os dois chegaram à sala dela, Harry se sentou no sofá, observando Louis fazer o mesmo.
— Lou, sinto muito pelo que aconteceu lá. Mas não se preocupe, eu vou resolver isso. — Harry mordeu os lábios enquanto observava os movimentos de Louis.
— Não se preocupe, Hazz. Eu nem liguei pra isso, mas... — Disse se aproximando da cacheada segurando seu queixo para manter o contato visual. Os dois se perderam nos detalhes dos rostos um do outro.
Louis observava cada ponto é traço do rosto dela, seus olhos verdes como jaspers, os cabelos cacheados e sedosos, sua boca vermelhinha e carnuda que estava sendo maltratada pelos dentinhos de coelho.
Já Harry reparou nos olhos azuis profundos como oceanos, nos lábios finos que tinham um gosto maravilhoso, e no sorriso encantador de Louis, que se revelava suas ruguinhas que lhe davam mais charme a mais.
— Eu gostei de como você me defendeu, foi muito excitante. Tão autoritária. — Continuou o que pretendia dizer anteriormente, quebrando o silêncio entre os dois. — Eu não esqueci do que você aprontou mais cedo. — Louis levou o indicador até os lábios dela, quase os encostando nos seus.
— E o que você vai fazer a respeito, huh? — Harry sorriu, mordendo o lábio inferior. Louis levantou do sofá, foi até a porta e a trancou, antes de retornar à cacheada. Ele apoiou um joelho no sofá, vendo Harry se deitar, e se inclinou sobre ela, beijando-a como se sua vida dependesse disso naquele momento. Introduzindo a língua começou-se uma leve disputa por dominância, essa que Louis ganhou rapidamente enquanto mordiscavam os lábios um do outro, deixando-os inchados.
Os dois pararam os beijos pela falta de ar. Harry aproveitou o momento para tirar o seu terno e o de Louis, os jogando em qualquer lugar da sala, o deixando de calça social enquanto ela estava só de calcinha.
Tomlinson desceu o rosto e se aproximou do pescoço alheio, passando o nariz pela clavícula, deixando vários beijos que a deixavam arrepiada. Ele colocou a mão em um dos seios, começando a brincar com o mamilo, apertando, ouvindo uarrepiada vindo da cacheada.
Era tão patético como seu corpo reagia aos toques de Louis, que a deixavam fervendo.
— Seu corpo é tão perfeito, principalmente quando as minhas mãos estão nele. — Louis concluiu descendo até estar de frente com os seios descobertos, vendo os mamilos eriçados.
— O que está esperando? — Harry sorriu abrindo mais as pernas para Louis se acomodar no meio delas.
Louis começou a chupar um dos seios, deslizando a língua em volta da auréola, intercalando com os dedos que beliscavam de leve. Ele observou como ela reagia aos seus toques, sempre implorando por mais.
Rapidamente uma ideia surgiu na mente de Harry que conseguiu se afastar do corpo colado ao seu, trocando de posições. Ela sentou em seu colo, mas rapidamente se levantou e ajoelhou entre suas pernas.
— Você vai prestar bem atenção no que eu vou te falar — Harry deslizou a mão pela perna coberta, chegando na braguilha e abrindo-a rapidamente. — Eu vou sentar na minha mesa com as pernas bem abertinhas pra você ver minha xotinha enquanto me toco, mas você não poderá fazer nada. — Ela terminou de desabotoar a calça, descendo‐a rapidamente pelas pernas de Louis, jogando em qualquer lugar. — E… Se você me obedecer, poderá fazer o que quiser comigo.
Harry o puxou do sofá, empurrando na cadeira enquanto abria a gaveta de sua mesa, pegando duas faixas e amarrando as mãos de Louis nos braço da cadeira. Se sentou em cima da mesa, flexionando as pernas, sentindo o olhar de Louis sobre si.
Ela inclina o tronco para trás deixando as pernas mais abertas, empurrando o pequeno tecido para o lado e levando seu dedo médio até a grelinho, se torturando levemente enquanto sentia o olhar profundo de Louis que desejava usar e abusar daquela bucetinha tão gulosa e sempre tão ansiosa para receber seu pau.
A garota finalmente parou de se totorturar e provocar introduzindo o dedo em sua grutinha, soltando resmungos e gemidos deliciosos.
— Hum... Lou... Tão bom — Harry murmura fraquinho. Esses sons eram músicas para os ouvidos de Louis que observava concentrado cada movimento — Você quer me chupar, amor? — Ela rebolava enquanto introduziu um dedo na grutinha escorregadia, vendo Louis assentir.
— Tão bonzinho... Tão obediente — Harry se arrastou para a ponta da mesa e tirou a calcinha, a deixando de lado. Levantou o olhar, vendo Tomlinson se inclinar, deixando beijos nas coxas grossas da mulher que ficavam arrepiadas até chegar na bucetinha, começando a chupar lentamente, deslizando a língua pelo grelinho inchado até a grutinha escorregadia sentindo o gosto azedinho que explodia em seu paladar.
Ela tinha gosto de morangos.
Louis endureceu a língua, estocando lentamente enquanto ouvia os gemidos um tanto altos da garota, que enfiou os dedos entre os fios de cabelo, começando a apertar e acariciar para ajudar nos movimentos.
— Agora eu vou me foder tão gostoso no seu pau e você não vai poder me tocar. — Concluiu sorrindo, enquanto descia da mesa e subia em cima de Louis, apoiando os joelhos em volta de suas coxas. — Você quer isso, amor? Minha xotinha tá piscando pra te sentir. — Levou os dedos até a grutinha, pegando o que conseguia de lubrificação e espalhou pelo pau duro.
Ela encaixou a glande babada de pré-gozo na xotinha e desceu lentamente para conseguir acordá-lo, sentindo uma leve ardência gostosa no começo pela grossura do homem, coisa que rapidamente passou dando o lugar ao prazer no que ela começou a se mover, subindo e descendo. Ela se apoiou em Louis enquanto se fodia apertando seu ombro como forma de extravasar o prazer sentido já que não podiam fazer tanto barulho.
— Porra, sempre tão apertada pra mim. — Louis mordeu os lábios com força para não gritar pela maneira como a buceta da cacheada sugava com fome e apertava seu pau inchado de maneira que ele precisou usar de todo o seu alto controle para não gozar e encher aquela buceta de porra antes da hora.
Harry estava com as pernas doloridas devido aos movimentos repetidos, então parou rapidamente e começou a se esfregar para frente e para trás, roçando o clitóris na pélvis de Louis.
Ele gemia enquanto a observava usando-o para alcançar seu próprio clímax. Observou os seios inchados apetitosos balançando de acordo com os movimentos, ansiando por mais toques e Louis desejando enfiar a boca no meio deles afim de chupar, morder. Não só eles, mas o corpo inteiro da mulher. Ele estava cansado de não poder tocar aquele corpo, queria fazê-la se derreter com seus toques enquanto deixava belas marcas vermelhas na cintura com o aperto de suas mãos.
Harry estava tão focada no seu prazer que não percebeu quando Tomlinson finalmente havia se soltado, só quando ele a ergueu e a colocou brutalmente em cima da mesa. Desceu até estar com o rosto de frente para a vagina vermelha, colocando a boca no clitóris e começando a chupá-lo enquanto deslizava os dedos para dentro dela, concentrando-se em mover os dedos mais rápido, sentindo as dobras doerem ao empurrar cada vez mais fundo.
Louis analisou como ela reagia aos seus toques, como sua barriga se contraiu; os gemidos cada vez mais profundos e sua pele arrepiada. Ele sabia que ela estava chegando em seu ápice, portanto parou para falar.
— Ah… Minha garota está tão excitada — Retirou os dedos para então introduzi-los novamente, voltando no ritmo em que estava. Socando fundo, tomando seu lugar dentro dela. — Vou te usar do jeito que eu quiser e você vai ficar quietinha, só me obedecendo.
Harry balançou a cabeça em concordância enquanto observava cada movimento de Louis, que também observava o estado dela.
Tão bonito com os cabelos bagunçados, os olhos azuis profundos com as pupilas dilatadas, a boca pequena com um leve sorriso malicioso que estava toda lambuzada com seu melzinho, se deliciando com sua xotinha. Essa visão junto com os movimentos que ele fazia, a deixavam tão perto do seu limite.
— Lou... e-eu... — Harry proferia sentindo seu ventre repuxar e contrair implorando por ele. — Eu tô quase... lá. — Louis aumentou a velocidade dos dedos no mesmo tempo em que com a outra mão, deslizou o dedão para continuar estimulando o ponto mais sensível de Harry que estremecia com os arrepios de prazer que subiam por seu corpo proporcionados por aquele homem.
Sentindo espasmos em seu corpo, Harry já não controlava mais os gemidos cada vez mais altos e incontroláveis, assim como as lágrimas que encharcaram os olhos verdes.
— Vem pra mim, gatinha! — Em um gemido mudo, Harry não conseguiu mais segurar e gozou nos dedos de Louis que continuava a estimulá-la para prolongar o orgasmo e fazer com que ela choramingasse e gemeu manhosa.
Louis continuou a estimulá-la, prolongando o orgasmo, que a fez choramingar e gemer manhosamente
Louis retira os dedos do interior quente e os leva até a boca, experimentando o sabor daquela xotinha tão deliciosa.
Foi impossível negar que mais do seu melzinho escorreu quando ela viu a cena.
Louis se levantou olhando para a bagunça que deixou e deu a volta na mesa, puxando o corpo de Harry mais perto, levando a mão até a mandíbula — Eu tô louco pra foder essa boquinha. — Levou o polegar aos lábios carnudos. — Deixe ela bem aberta pra mim, amor. — Louis então roçou a ereção nos lábios da garota, deixando um pouco de pré-gozo brilhante como se fosse um gloss labial realçando a cor carmesim.
Harry deitou a cabeça na ponta da mesa tentando achar uma posição mais confortável.
Louis foi inserindo lentamente a glande na boquinha carnuda de Harry, gemendo ao sentir a cavidade úmida e acolhedora que o deixava ainda mais duro, latejando.
Ele observou como Harry se esforçava, empurrando a si mesma para levar o pau até a garganta, tentando se acostumar com a grossura sem se engasgar. Louis não se mexeu, deixando que Harry fosse no seu próprio ritmo. Pouco tempo depois, ele percebeu que ela estava mais relaxada e começou a estocar lentamente, sempre atento caso precisasse parar.
Tomlinson acelerou as estocadas, ouvindo o barulho molhado que a ação lhe proporcionava. Desceu o olhar para a cena que quase o fez gozar naquele instante. E ele jurou que o fez de tanto pré-gozo que soltou, algo que Harry engoliu com orgulho enquanto esfregava a língua ávida no comprimento do membro. O desenho do pau deslizando pela garganta da garota enquanto ela tentava segurá-lo, as bochechas vermelhas, o cachos todos bagunçados, aqueles olhos verdes brilhantes que tentavam a todo custo segurar as lágrimas que insistiam em sair dos seus olhos verdes.
— Você fica tão linda com meu pau na sua garganta. — Louis concluiu quando teve uma pequena ideia.
— Mas acho que essa cena poderia ficar ainda melhor — Ele viu o momento de confusão da cacheada ao ouvir tais palavras. — Com minhas mãos em volta do seu pescoço. — Sorriu com o desespero de Harry em concordar enquanto arregalava os olhos.
Olhos que sempre imploravam por mais do que Louis poderia oferecer a ela.
Ele colocou a destra em volta do pescoço da cacheada, apertando com uma certa força e começou a foder, sentindo a elevação que o pau fazia deslizando pela garganta.
Harry sentia seus batimentos a milhão, as lágrimas escorrendo de seu rosto, o calor eminente que sucumbia ao seu corpo e a deixava toda arrepiada. Sentindo o ar se esvaindo de seus pulmões, começou a dar tapinhas na coxa de Louis para alertá-lo. Esse que não prestava mais atenção, tão alheio ao próprio prazer.
— Huh, que boca gostosa. — Louis estava no paraíso. Tão extasiado com os lábios e a língua macia deslizando pela ereção latejante que não conseguiu mais resistir, gozando na boca da cacheada enquanto segurava firme os cachos dela, sentindo pequenos espasmos com o prazer gradualmente se dissipando de seu corpo.
Harry sentiu o ar voltando aos pulmões quando Louis se afastou de sua boca, observando sua própria porra escorrendo pelos cantos dos lábios que ela rapidamente recolheu com o indicador, levando de volta a boca, sem nunca desviar o olhar.
Louis a ajudou a levantar da mesa, segurando a mão da cacheada de encontro com o seu peito, onde seu coração batia acelerado e a sua outra estava em suas costas. Ele se sentou na cadeira e puxou-a para o seu colo. Harry deitou sua cabeça sobre o ombro de Louis, enquanto ele envolvia os braços ao redor da cintura dela.
Louis auxiliou a cacheada a descer da mesa, segurando delicadamente a sua mão contra o seu peito, onde seu coração batia acelerado, e a outra estava em contato com suas costas. Em seguida, ele se sentou na cadeira de Harry e seguiu puxando ela para o seu colo. Com a cabeça de Harry apoiada em seu ombro, Louis envolveu os braços em torno da cintura dela.
— Você está bem, gatinha? — Louis levou as mãos ao rosto de Harry, acariciando e a observando acenar levemente com a cabeça. Parecia naquele momento como um gatinho manhoso que só desejava carinho.
Louis começou a distribuir beijos pelo rosto da cacheada, na testa, nas bochechas e por fim, um suave toque de lábios.
— Você é tão linda, tão perfeita... — Louis sorriu com a coloração mais rosada nas bochechas da garota.
— Não consigo parar de te olhar. De te admirar.
Louis chegou a uma conclusão naquele momento enquanto admirava a garota deitada no seu peito. Ele percebeu que não podia mais perder tempo, não podia mais adiar, precisava agir e fazer o que ele sabia ser certo: pedir e ter a garota ao seu lado como namorada.
Em um impulso de coragem, ele soltou aquelas simples palavras:
— Quer namorar comigo?
213 notes · View notes
Text
Tumblr media
36 notes · View notes
vivikcals · 7 days
Text
hoje na mesa, todo mundo estava comendo o bolo de cenoura com chocolate que minha irmã havia feito.
eu continuei comendo meu melão e meu iogurte com chia.
porque >>>EU<<< sabia que eu nao comeria apenas 1 pedaço.
eu iria comer o bolo TODO, igual uma PORCA.
eu sei que se eu abrir 1 única exceção, eu vou estragar tudo.
já comi muitos bolos na vida, e é por isso que estou do jeito que estou.
MANTENHA O CONTROLE!
206 notes · View notes
imninahchan · 8 months
Text
Tumblr media Tumblr media Tumblr media
⌜ 𝐀𝐕𝐈𝐒𝐎𝐒: strangers to lovers, minhas habilidades precárias em espanhol, sexo casual e sem proteção [não pode camaradas!], dirty talk, diferença de idade, finger sucking, oral masc, elogios, manhandling, tapinhas leves, um ‘papi’, dumbification, dacryphilia. ˚ ☽ ˚.⋆ ⌝
꒰ 𝐍𝐎𝐓𝐀𝐒 𝐃𝐀 𝐀𝐔𝐓𝐎𝐑𝐀 ꒱ @dejuncullen você é a grande culpada por tudo isso, te odeiooo.
Tumblr media
𓍢ִ໋🀦 ELE É O TIPO DE HOMEM QUE VOCÊ SÓ VAI CONHECER UMA VEZ NA VIDA ─────
você percebe isso a partir do momento em que põe os olhos na figura masculina pela primeira vez. Sentada a umas duas mesas de distância da dele, na varanda do saguão do hotel.
Simplesmente, não conseguiu deixar de repará-lo. Os fios espessos do cabelo, como as mãos correm por entre as mechas de forma desleixada, balançando pouquinho conforme o vento suave da manhã sopra. A regata branca, um casaco pendurado nas costas da cadeira livre à mesa. O nariz pontiagudo, os olhos escondidos por trás das lentes dos óculos de sol.
Com certeza, não é brasileiro. Dá pra notar só pela comida que escolheu do buffet para o prato. Fica tão intrigada, obcecada em observá-lo, que se esquece do próprio café da manhã. Os pãezinhos esfriando junto do café na xícara. Quer abrir o aplicativo de mensagens e mandar uma pra sua amiga dizendo cê não acredita no gatinho que eu vi, porém nem tem tempo. O homem ergue o queixo, a atenção desviando do aparelho em mãos para notar a sua presença, à frente em seu campo de visão.
Você abaixa o olhar na mesma hora, sente-se como se tivesse cometido um crime e tivesse sido pega no flagra. Morde o lábio, tentando conter o sorriso bobo. As palmas das mãos suam, frias de repente, então se ocupa com a xícara de porcelana. Não sabe se bebe, por vezes ameaça levar à boca, mas desiste no meio do caminho, perdidinha feito um robô em pane. E quando levanta os olhos mais uma vez, na mesma direção que tanto fitou, a mirada do homem se encontra com a tua novamente.
Parece que vai morrer, credo. Nunca sentiu tamanha vergonha na vida, o estômago até revira. Não vai mais conseguir comer, nem pensar, nem respirar, não enquanto ainda estiver na cena do crime.
Se levanta, então. Cata uns dois pãezinhos do prato, empurra um gole de café pra dentro e caminha em direção ao saguão. Pô, não está nem tão bonitinha... Já vestiu as roupas que planejou pro dia, porém não se maquiou, nem fez os cabelos do jeito que queria, porque o plano era só descer pra tomar café antes de curtir mais um dia turistando pela cidade espanhola. Agora, está fugindo feito uma criminosa, com a boca cheia de pão, para o elevador.
Mas ao pensar que o fechar das portas cinzas significaria liberdade, o seu coração tem um motivo a mais para palpitar assim que o homem se coloca para dentro do cubículo antes que te perca de vista.
Mastiga com mais pressa, escondendo o outro pãozinho entre as mãos. Ao seu lado, ele tira os óculos, está segurando o casaco e uma bolsa transversal.
Olha pra ti.
— Enzo — diz, e pela forma com que anuncia o nome, dá pra sacar que fala espanhol.
Você passa as costas da mão sobre a boca, limpando qualquer farelinho que tenha sobrado. Oi... eh, responde em português, automática, e entra em pânico de novo por breves segundos quando o cérebro não consegue pensar em uma saudação sequer na língua estrangeira. Fala o nome, logo, sem se forçar a raciocinar mais.
— ¿Eres de aquí? ¿De Madrid?
— Ahm... — gagueja. — Brasil!
Ele sorri.
— Ah, sí. Brasil... ¡Es un lugar magnífico! — e elogia. Mas o olhar aperta, procura saber: “Entiendes lo que digo, ¿no?”
— Sí, sí! — Sorri de volta, hiperventilando já.
O seu desespero é perceptível, é fofo. Ele te observa, a cabeça pendendo pro canto lentamente. Ri junto, cada vez o sorriso mais largo. Tem vontade de perguntar mais coisas, esticar a conversa, só que o seu andar chega, e você sai, retraída demais pra falar o que quer que seja.
Merda, devia ter dito algo. Fica se remoendo o dia inteiro, se achando a maior boba por ter perdido a oportunidade. Por que teve que agir como uma adolescente sonsa, hein? Aí, nem os museus têm mais graça, nenhum ponto turístico consegue tirar aquele fiozinho de arrependimento de ti. No outro dia, entretanto, desce pra tomar café no mesmo horário com a tola intenção de tentar vê-lo outra vez, e dito e feito. O homem está sentado numa poltrona do lobby, parece que estava ao seu aguardo também.
Você sente até as pernas bambearem.
— ¡Buenos días! — te saúda. — ¿Cómo se dice ‘buenos días’ en Brasil?
Você demora uns segundinhos pra raciocinar, “bom dia”, responde. Ele sorri.
— Es muy parecido — e comenta, sem jeito. Mira na direção do buffet, ¿Vamos?
Embora, às vezes, ele use termos que você desconhece e precisa pedir para explicar de novo, a conversa se dá muito bem. Descobre que é mais velho, uruguaio, e não espanhol como de imediato achou que fosse. Você conta um pouco sobre o estado da onde vem, e ele se encanta com a forma que seu sotaque pronuncia o nome dele. Enzo. Puxando o som do ‘z’ acima de tudo.
É com a companhia dele que você desbrava a cidade hoje. Vão juntos à uma pracinha, comem sorvete, depois jogam conversa fora enquanto exploram uma lojinha ali por perto. Mais à tarde, é levada até um barzinho. Lá, a conversa se estende ainda mais, regando os assuntos à cerveja que dividem. Quando você não entende nada, só ri, com as bochechas já quentes de tanto sorrir. Honestamente, pode deixá-lo falando sozinho por horas, só porque gosta do som rouco da voz masculina e dos olhos castanhos.
Não quer dizer que está apaixonada nem nada, afinal não tem como se apaixonar em tão pouco tempo. Mas, com certeza, o calor que sente emanando do próprio corpo significa algo. Pode ser por causa da camisa de botões azul escuro — essas peças nunca falham em ser atrativas, né? —, ou o anel prateado que chama a sua atenção toda vez que ele articula com as mãos no ar. Até mesmo o perfume... Ah, o perfume! Uma fragrância que enche os pulmões, amadeirada mas com um leve toque doce. Impregnando o dia inteiro, praticamente te convidando para afundar o rosto na curva do pescoço alheio.
Por fim, é levada até a porta do quarto de hotel. A desculpa dele é que queria te ajudar com as sacolas, como se você tivesse comprado Madrid inteira. E era pra terminar ali, simples. Te entrega as suas coisas, e o máximo que faz é se inclinar, devagarzinho, feito pedisse silenciosamente por permissão, e depositar um beijinho na cantinho da sua boca, a milímetros de tocar os seus lábios pintados de batom. Mas você segura na mão dele, quando o rapaz se afasta pelo corredor, não o deixa escapar.
Enzo leva o olhar da sua mão entrelaçada na dele pro seu rosto. Sorri ao te ver encolhendo-se, retraída, deitando o canto do corpo no batente da porta. O seu sorriso contido, bobo. Nessa hora, nenhuma palavra é necessária pra entender o que se quer passar. O seu corpo fala sozinho, em alto e bom tom.
Ele se aproxima novamente, a outra mão toca o canto do seu rosto. Quente, afetuoso. ¿Qué te pasa, nena? O foco dos olhos castanhos está na sua boca, a pergunta é sussurrada, sedutora. O toque dos dedos contornam o seu maxilar até se fechar no seu queixo, ¿Quieres algo más que un beso?
Você não tem certeza de que palavra usar, qual comando preferir. Na verdade, não queria nem estar pensando. O cérebro queria estar desligado para que o só o corpo pudesse aproveitar o momento. O envolve entre os braços, o rosto pode, finalmente, se esconder na curvatura do pescoço masculino, aspirar o perfume inebriante. Escuta o som da risadinha dele, sente as mãos grandes sendo depositadas na sua cintura. ¿Qué quieres? Dímelo.
Ergue o olhar, tímida. A ponta do seu nariz roça contra a dele, cria um atrito que só pela proximidade absurda, deixa tudo ainda mais tenso, erótico.
— En Brasil — você começa, mordendo o lábio —, a gente diz ‘foder.’
O sorriso de Enzo cresce, quase em câmera lenta. Foder, repete a palavra num sussurro. De novo, nem tem que pensar muito para compreender. Tudo soa similiar, e parece que a sua mente está conectada a dele por um desejo tão carnal.
Os lábios do uruguaio vão de encontro aos seus, a língua quente esbarra na tua. Os corpos ganham vida própria. Aos poucos, o cenário principal deixa de ser o corredor do hotel, pra ser o seu quarto. A porta é fechada com um empurrãozinho dos pés, enquanto o caminho escolhido é em direção a sua cama.
As mãos sobem da sua cintura para pegarem na barra da blusa e a retirarem. Quando você deita sobre o colchão, apoiando os cotovelos, é a deixa para que o homem possa puxar os seus shorts também.
— ¿Quieres ponerte de rodillas? — ele pergunta, ao desabotoar a própria blusa. O olhar afiado, banhado de vontade, delirando. Nos lábios, você nota o vermelho manchado do seu batom. — Correrme en tu boca...
Talvez seja a mente perdida na ânsia, porque não processa o que te foi dito. Fica com os olhinhos parados, a boca entreaberta puxando ar, ofegante. Tão bobinha que tudo que ele faz é rir, correndo as mãos pelos cabelos em vez de levá-las diretor para o cinto da bermuda.
— ¿Qué? ¿No lo comprendes, no? — o tom usado contigo beira o deboche, é mais agudo. E ao contrário do que normalmente sentiria, aqui sente um frio na barriga, ainda mais tesão. Ele se inclina pra perto. — Mira.
E como se estivesse aprendendo uma coisa pela primeira vez, o imita quando ele separa os lábios. Deixa que o polegar do homem arraste no seu lábio inferior, e depois o médio e o indicador juntos deslizem por cima da sua língua, até ocuparem a sua boca. Así, ele murmura, empurra e recua com a mão, num movimento lento, sensual, metértelo en la boca.
Ah, agora você entende bem. O rosto queima, o jeito molhado com que os dedos saem da sua boca, um fiozinho de saliva resistindo à distância, é devasso, estimula. Faz que sim, se ajoelhando no chão de madeira, os olhos vidrados no desafivelar do cinto até poder ter a ereção em plena vista.
Separa os lábios mais uma vez, como te foi ‘ensinado’. Te enche a boca, vai ao ponto do seu nariz tocar na virilha dele, e vem, completamente molhadinho. Permite que o uruguaio controle o compasso, que pegue no canto do seu rosto. Levanta o olhar para o dele, rendida não só pela lascividade do que faz, mas também pela bela visão que tem da face masculina por esse ângulo.
Enzo usa o indicador da mão livre para deslizar pela curva do seu nariz, afetuoso.
— Qué ojitos más bonitos... — te elogia, com um sorriso. Nesse momento, você jura, o coração parece que explode. — Eres tan bella, nena. Preciosa. — Ele suspira, a cabeça pende pra trás, depois pro canto. Te olha de um jeito tão canalha que você evita retribuir o olhar. — Me encantaría correrme en tu boca... pero prefiero guardarlo todo para dentro de ti.
É conduzida de volta pra cama, facilmente manuseada quando dá o controle da situação na palma da mão alheia. Ele vem por cima, destrava o encaixe frontal do seu sutiã, perdendo-se entre os seus seios assim que os libera do aperto da peça. Você segura nos cabelos dele, inquieta sob o chupar delicioso da língua em cada biquinho, o morder selvagem dos dentes. Arfa, tendo que apartar-se dos fios pretos enquanto a boca desce pela sua barriga.
Te liberta da última peça íntima também, os beijos molhados estalando na sua pele, do ventre ao monte de vênus. A ponta do nariz grande se esfregando de leve por cima da região onde sabe que está o seu pontinho sensível. A palma da mão corre em meio à sua umidade, o friozinho do anel prateado deslizando na sua pele fervente. Estala dois, três tapinhas seguidos que te fazem estremecer, choramingando baixinho. Enzo sorri, não precisa, mas volta àquele tom debochadinho de antes, de quem tem que soletrar com calma os comandos para que você possa compreender. Leva a mão aos seus lábios, dá um toquezinho por cima, de aquí, e depois desce tudo de novo, deixando um rastro molhado até dar outro tapinha na sua buceta, a aquí. E são esses pequenos detalhes que deixam tudo ainda melhor, nossa. Te faz sentir tão bobinha, tola, mas é tão bom...
Quando ele se põe pra dentro, você tranca as pernas ao redor da cintura masculina, o envolve entre os braços, sentindo-o dominar tudo. Ele insiste no contato visual, porém, erguendo o torso, apoiando-se no antebraço contra o colchão, para te olhar no olhos. Sorrir. Ofegante igual você. Gemendo baixo, rouco. Primeiro, lento, só que logo se rende à velocidade, ao som cortado dos seus gemidos a cada estocada mais forte. E são tantos estímulos, porra... Você quer tapar a boca, cerrar os olhos pra tentar se conter. É o barulhinho pornográfico dos corpos em choque, a voz masculina, o perfume da pele quente. Está tão sensível que os olhinhos molham, uma lagrimazinha escorrendo bochecha a baixo.
— Oh, no... Perdón, perdóname, cariño. — Ele cessa o ritmo, o polegar limpa a umidade do seu rosto.
‘En—’, até começa a querer chamar o nome dele, mas a frustração de não receber mais os mesmo estímulos e na mesma medida é tamanha que só sabe se remexer, lamuriando, a mente derretida, murmurando por fim dale, dale, papi.
Enzo volta a sorrir. Deixa alguns selares nos seus lábios, repetindo as suas palavras entre os beijinhos, como se zombasse do seu teor de desespero, do termo que usou para se referir a ele.
— ¿Más rápido, hm? Más duro? — Ele te vira sobre a cama, te ajeita de quatro. A conversa suja te faz sorrir, burra de tanto tesão já, agarrando-se a um dos travesseiros. O corpo do uruguaio se inclina por cima do seu, chega com a boca pertinho do seu ouvido. — Tranquila, nena. Te daré todo lo que quieras.
414 notes · View notes
flan-tasma · 1 year
Text
Sleeping with them (Fontaine men ver.)
In which I tell you what it's like to spend a sleepover with them (I love sleepovers, they're so great, I want to go to one)
Includes Lyney, Freminet, Neuvillette and Wriothesley.
Warning: Nope now💖, Modern!Au(? idk, GN!Reader | Google Translate sponsors me (it's a lie) If I made any mistakes in the english translation, I would be happy to read your comments! | Content in spanish and english
Tumblr media
Spanish:
Tumblr media
Cuando no está ocupado y quiere darse un descanso de su vida, una pijamada es un sí para él.
Hacen algo de comer o piden algo para llevar y empiezan a hablar entre ustedes acerca de su día. Hay veces en las que te habla de sus preocupaciones y se da el lujo de dejar su máscara lejos, ya no necesita ser un Fatui o un hermano mayor ideal, solo es Lyney y lo estás alimentando con comida deliciosa y lo escuchas.
Te pide que le peines el cabello, puede ayudarlo a dormir más rápido, le gusta cuando lo acaricias.
Te pide muchos besos aleatoriamente o los roba.
Le gusta compartir una rutina de skincare contigo, verlos a los dos en el reflejo del baño mientras esperan a que la mascarilla se seque o verte aplicarle una crema humectante es muy íntimo para él.
Definitivamente se hacen manicura y pedicura (si te comes las uñas o las muerdes definitivamente te regaña).
Se cuentan chismes que han escuchado.
Cuando duermen juntos puedes escuchar sus ronroneos desde su pecho, también es alguien que le gusta ocultar su rostro en tu cuello y en algunas ocasiones rasguña tu cabello entre abrazos.
Si tiene sueño y tú te levantas para cualquier cosa, él te abraza más fuerte y puede morder tu hombro para que dejes de quejarte, luego besa dónde mordió (sabes, como ese vídeo tan lindo de los gatos siendo bonitos).
Le va a costar levantarse a la mañana siguiente, definitivamente te obliga a dormir hasta tarde con él. Es un gatito cansado, déjalo descansar contra el sol que se asoma por la ventana.
Tumblr media
Le gusta mucho tener pijamadas contigo, sobre todo cuando están en silencio y está oscuro.
Tal vez hayan algunas velas para que puedan jugar algún juego de mesa o leer estando al lado del otro, pero cuando está oscuro se le hace más tranquilo.
Le gustan las velas aromáticas de olores suaves.
También deja que le hagas alguna rutina de skincare si quieres, le gustan cuando los productos son frescos contra su piel y huelen bien. También deja que le arregles las uñas.
Te ayuda si le pides que te ponga alguna mascarilla o rulos en el cabello.
Le gustan los susurros, cuando hablan en el mismo tono bajo lo hace sentir tranquilo, y el sonido de las hojas de los libros o las piezas de los juegos de mesa junto al crepitar de las velas lo relajan.
Te ayuda a peinarte el pelo antes de dormir.
Definitivamente se acuestan y se cubren con las mantas para abrazarse y descansar, en sí le gusta cuando están en silencio y están juntos.
Le gustan mucho los besos de buenas noches tanto como los besos de buenos días, entonces te los pide.
Pers duerme con ustedes como si fuera su bebé.
Tumblr media
No tiene ni idea de qué es una pijamada pero le gusta dormir contigo, entonces acepta.
Definitivamente algún Melusine se entera de la pijamada y asiste, entonces están en una habitación gigante (espero que sí porque son un montón) y muchos Melusines están ahí riendo y hablando.
Se peinan entre todos, quienes están peinados ayudan a los demás y se llenan el cabello con adornos.
Neuvillette lleva el pelo suelto para estar más cómodo, para que las Melusines lo peinen y porque está cansado, entonces si se duerme de repente estará bien.
Se suele sentar entre todo el alboroto y bebe té a tu lado mientras tu y algunas Melusines le ponen mascarillas, crema y sérum con total tranquilidad.
Te mantiene a su lado y se deja guiar por lo que le pides, ya sea arreglarse las uñas o el cabello entre ustedes o para las Melusine.
Tal vez alguna Melusine se duerma en la cama y todas hacen lo mismo, Neuvillette las acomoda para que duerman cómodas, luego recogen todo y terminan el té ya tibio.
Te recuerda lavarte los dientes y él prepara una zona de la cama para que ambos duerman.
Duermen rodeados de sus hijitas, todos acurrucados y abrazados como si fueran una familia numerosa (que lo son), entre murmullos entre sueños y ronquidos.
Neuvillette te acaricia la espalda y el cabello para que duermas sobre su pecho.
Tumblr media
Hace cualquier cosa que quieras porque se le dificulta decirte que no, por lo que cuando van a dormir ya tiene preparada una tetera y un buen té que les gusta.
Le gusta leer junto a ti, con tus piernas en su regazo para poder acariciarte. Es mucho más divertido cuando tiene una diadema de conejito en su cabeza y una mascarilla con forma de gatito.
Definitivamente usan el sofá y se quedan dormidos ahí. Puedes moverte por todos lados, traer cosas para pintar sus uñas y hacer que coincidan con las tuyas, bailar a su lado o incluso hacerte alguna mascarilla capilar, él estará en el sofá dándote algunas miradas y sonriendo, levantándose a ayudarte cuando se lo pides.
Deja besos en tu cuello cuando has terminado de enjuagar tu cabello y te besa la cabeza cuando terminas de secarte el cabello.
Le gusta poner música tranquila y dejarte jugar con su cabello despeinado, también puede acceder a que le peines el cabello en algún nuevo estilo.
Te da galletas para que comas mientras hablan, también puede burlarse y pedirte que comas de la galleta que está entre sus labios.
Te arrulla para que duermas, te abraza muy fuerte para que no caigan del sofá (a él le gusta su sofá, es muy suave y tiene cojines cómodos).
Si te duermes primero, se acaba el té y va al baño antes de acostarse junto a ti, si se duerme primero él se bebe el té frío en la mañana.
Por favor usa su brazo como almohada, a él le encanta cuando lo haces.
Sus ronquidos son altos, pero intenta no molestarte, te deja ponerle alguna camiseta en la boca para que duermas tranquila.
Tumblr media
English:
Tumblr media
When he's not busy and wants to take a break from his life, a sleepover is a yes for him.
You make something to eat or order something to go and start talking to each other about your day.
There are times when he talks to you about his worries and has the luxury of leaving his mask far away, he no longer needs to be a Fatui or an ideal older brother, he is just Lyney and you are feeding him delicious food and you listen to him.
He asks you to comb his hair, it can help him fall asleep faster, he likes it when you pet him.
He randomly asks you for a lot of kisses or steals them.
He likes to share a skincare routine with you, seeing the two of you in the reflection of the bathroom while you wait for the mask to dry or watching you apply a moisturizing cream is very intimate for him.
You definitely get manicures and pedicures (if you bite your nails you will definitely get scolded).
You tell each other gossip you have heard.
When you sleep together you can hear his purrs from his chest, he is also someone who likes to hide his face in your neck and sometimes scratches your hair between hugs.
If he is sleepy and you get up for anything, he hugs you tighter and he can bite your shoulder to stop you from complaining, then kiss where he bit (you know, like that cute video of cats being cute).
He's going to have a hard time getting up the next morning, he definitely forces you to sleep in with him. He's a tired kitten, let him rest against the sun peeking through the window.
Tumblr media
He really likes having sleepovers with you, especially when it's quiet and dark.
Maybe there are some candles so you can play a board game or read next to each other, but when it's dark it makes him calmer.
He likes the aromatic candles with soft scents.
He also lets you do a skincare routine for him if you want, he likes it when products are cool against his skin and smell good.
He also lets you do his nails. He helps if you ask him to put a mask or curlers in your hair.
He likes whispers, when you talk in the same low tone it makes him feel calm, and the sound of the pages of the books or the pieces of the board games together with the crackling of the candles relax him.
He helps you comb your hair before going to sleep.
You definitely go to bed and cover yourselves with the blankets to hug each other and rest, he actually likes it when you are silent and together.
He really likes good night kisses as much as good morning kisses, then he asks you for them.
Pers sleeps with you two like it's your baby.
Tumblr media
He has no idea what a sleepover is but he likes sleeping with you, so he accepts.
Definitely some Melusine finds out about the sleepover and attends, then you are in a giant room (I hope so because there are a lot of them) and many Melusines are there laughing and talking.
All of you comb each other's hair, those who have their hair done help others and fill their hair with decorations.
Neuvillette wears his hair down to be more comfortable, so that the Melusines can comb it, and because he's tired, so if he falls asleep suddenly he'll be fine.
He usually sits among all the commotion and drinks tea next to you while you and some Melusines put him masks, cream and serum with complete peace of mind.
He keeps you by his side and lets himself be guided by what you ask him, whether it's doing your nails or hair for each other or for the Melusines.
Maybe some Melusine fall asleep in bed and they all do the same, Neuvillette arranges them so that they sleep comfortably, then you put everything away and finish the warm tea.
He reminds you to brush your teeth and he prepares an area of the bed for both of you to sleep.
You sleep surrounded by your little children, all curled up and hugged as if you were a large family (which you are), murmuring between dreams and snoring.
Neuvillette caresses your back and hair so you sleep on his chest.
Tumblr media
He does whatever you want because he has a hard time saying no to you, so when you go to sleep he already has a pot of tea ready and a good tea that they like.
He likes to read next to you, with your legs in his lap so he can caress you. It's so much more fun when he has a bunny headband on his head and a kitty mask.
You definitely use the couch and fall asleep there. You can move around, bring things to paint his nails and make them match yours, dance next to him or even do a hair mask, he will be on the couch giving you some glances and smiling, getting up to help you when you ask him to.
He leaves kisses on your neck when you're done rinsing your hair and kisses your head when you're done drying your hair.
He likes to play calm music and let you play with his messy hair, he can also agree to let you comb his hair in some new style.
He gives you cookies to eat while they talk, he can also tease you and ask you to eat the cookie that is between his lips.
He lulls you to sleep, hugs you very tightly so you don't fall off the couch (he likes his couch, it's very soft and has comfortable cushions).
If you fall asleep first, he finishes the tea and goes to the bathroom before lying down next to you, if he falls asleep first he drinks the cold tea in the morning.
Please use his arm as a pillow, he loves it when you do.
His snoring is loud, but he tries not to bother you, he lets you put a shirt in his mouth so you can sleep peacefully.
840 notes · View notes
psicoativos · 1 month
Text
Quarta-feira. Duas e quarenta da tarde. Você abre mais uma lata de coca-cola sob a mesa. O relógio apita, te dando o sinal diário pra tomar seus remédios, mas você finge que não ouve. Como num passe de mágica, quase todas as notícias de desastre no mundo se juntam no horário das seis e você chora - entre um soluço e outro - porque o sol já se pôs e você não notou. E automaticamente, tudo se torna tão nostálgico. Tudo se torna tão morno. Tudo se torna tão menos suficiente. Um diálogo não é mais como antes. Um abraço não é quente como o de ontem. O arroz não tem o mesmo gosto, mesmo sendo o mesmo arroz no prato que você insiste em comer, porque não quer fazer mal à ninguém. Nem a si mesmo. Você passa pela sala de casa, pela porta do banheiro, entre as paredes dos apartamentos, não querendo ser notado. Não querendo ser visto. Nesse momento, estar dentro de si não é o melhor lugar.
E tu anda por cada rua da cidade como se algo te faltasse. Como se algo estivesse fora do peito e por algum motivo fora do comum, você não sabe especificar o que é.
Literário é não sentir nada. Mas eu sinto tudo além das palavras.
Colapsos mentais.
92 notes · View notes
skzoombie · 5 months
Text
Tumblr media Tumblr media
“Honey, honey, I could be your bodyguard (hey)”
Tumblr media
Wagner estava sentado na cadeira de madeira na diagonal com um lado mais para frente da sacada do apartamento, ele soprava a fumaça da verdinha em direção a rua enquanto observava de longe as noticias que passavam na televisão.
O maxilar do homem começou a endurecer assistindo uma das reportagens do momento, ele sugou com força a seda e soltou um riso irônico.
- Fascistas de merda! - soltou em um tom alto.
Em meio ao xingamento e costume cotidiano de sentar na sacada, s/n observava os detalhes físicos do namorado mais velho, quase marido, mesmo que ele negasse o casamento pois não queria prender ambos em um estereótipo.
Os músculos dos braços saltavam, ao passo que ele apertava um dos braços da cadeira com efeito da raiva e indignação. Wagner alcançou o controle remoto que estava em uma bidê próximo e desligou a televisão.
- Posso fumar um pouco? - s/n questionou quando o silêncio se fez na sala.
Ele virou a rosto na direção do sofá e sorriu para a pessoa deitada, levantou uma das mãos e chamou com o dedos para vir perto. S/n caminhou meio sonolenta e parou com o corpo em frente ao homem sentado, ele bateu nas próprias pernas, sinalizando para que sentasse.
- Puxa devagarinho, tá? - ele orientou virando o baseado na direção da mulher.
Wagner riu baixo quando ela sugou os dedos dele junto com a maconha, um fio de saliva saiu junto e ela sugou mais uma vez para quebrar.
- Você vai comigo amanhã? - ele perguntou fechando os olhos quando sentiu soltando na fumaça no seu rosto.
- Óbvio - respondeu sem pensar muito.
Ele sorriu levando uma das mãos para as pernas nuas do pijama curto da namorada, acariciou a região e apertou forte duas vezes. A mão subiu pelas costas dela até chegar na nuca, wagner apertou e enfiou os dedos entre os fios dos cabelos longos.
- Ainda tem uns arranhões no seu pescoço - comentou observando e chegando com o rosto mais perto do pescoço.
-Não mais do que ela - respondeu fechando os olhos quando sentiu um arrepio com a proximidade da respiração no pescoço.
Ele riu com a fala e concordou com o movimento de cabeça, deu a última tragada, apagou a bituca no braço da cadeira e colocou dentro de uma garrafa de plástico que estava próxima.
- Tenta não começar briga amanhã.
- É só elas não ficarem se jogando pra cima de você - rebateu sentindo a maconha bater fraco.
- Se depender de você, as pessoas não podem nem se aproximar - respondeu revirando os olhos.
S/n concordou sorrindo, aproximou o rosto do homem e deixou um selinho na boca dele, foi descendo o beijo do maxilar até o pescoço e sugou forte para deixar marcas.
- Todos esses anos tentando conquistar você para uma menina de dezoito anos roubar meu lugar? - wagner puxou o cabelo de s/n fazendo a cabeça ir para trás.
- E eu não gastei meses comendo você em banheiro público de passeata política, pra te deixar da noite para o dia - provocou beijando entre os seios dela.
- Você nunca nem conseguiria me deixar - respondeu observando sério o namorado - ou você realmente acha que conseguiria viver sem mim?
Questionou provocativa e fazendo homem olhar para ela com ironia, wagner sabia que não viveria sem a mulher, cada pequena atitude dela envolvia o bem estar dele. Sexo matinal para ele acordar melhor, café da manhã pronto na mesa para não precisar gastar tempo pensando em comida, carro sempre com tanque cheio porque ele tinha preguiça de ir no posto, casa organiza, erva e seda sempre abastecida para ele fumar quando precisasse aliviar a ansiedade.
- Hoje de manhã não encontrei os biscoitos de chocolate que gosto, você não parece tão eficaz quanto se acha - ele rebateu provocando a mulher com algo simples que percebeu pela manhã quando acordou.
- Pena ser tão desatento, recomendaria olhar dentro da mochila que leva sua comida para o trabalho - ela comentou não desviando os olhos - Você gosta de comer essas bolachas no intervalo, não é?
Ele abriu um sorriso cínico, levou as duas mãos no pescoço da mulher e puxou o rosto dela com força para iniciar um beijo. Os lábios mexiam com rapidez, saliva se acumulava nos cantos da boca, umedecia toda a região do buço e queixo com o beijo.
- Quem é você sem eu? - cortou o beijo e perguntou para ele tentando puxar o ar que faltava.
- Ninguém - ele disse o que ela gostaria de escutar e tentou puxar novamente para um beijo mas foi negado.
- Me veja como um guarda costa, que cuida e protege você - finalizou sorrindo e levantou do colo do namorado - Vou preparar a banheira para você tomar seu banho antes de dormir.
143 notes · View notes
louddydisturb · 8 months
Text
Back to me (pt. 2)
A familia continua crescendo e para a infelicidade de Tomlinson toda a mudança hormonal o fez ficar levemente esquecido
Harry,27
Louis, 33
Tw: h!mulhercis, breeding kink
Demorou mas chegou, eu imaginei as outras cenas antes do smut estilo modern family por isso são curtinhas
Talvez essa seja a ultima oneshot por um tempo então deixem seus feedbacks e boa leitura
Sol:)
Harry voltava praticamente pulando de uma consulta de rotina, ela empurrava o carrinho de theo, esse que dormia impertubavel, e tentava chegar o mais rapido possivel em seu carro
Ela dirigia pelas ruas cobertas de neve de londres depois de parar em algumas lojas para terminar de preparar o presente de aniversario de louis
“Theo você acha que o papai vai gostar de uma caixa azul? Ou verde é melhor? Afinal ele sempre fala que gosta dos meus olhos”
“Papa anibesario” o garotinho balbuciava enquanto balançava as perninhas no carrinho
“Sim nenem, aniversario do papai” harry decide por fim pegar uma caixa bege e finalizando a compra
“PAPA!” Theo corre para o colo de louis assim que os dois entram na casa
Louis usava um avental e estava coberto de farinha de trigo, alicia sentada no balcão e igual um fantasma de tanto trigo
“Louis william tomlinson-styles! Que droga vocês fizeram na minha cozinha” harry coloca as sacolas na mesa antes de ir averiguar a situação no comodo
“Cookies!” Os dois falam em conjunto com sorrisos orgulhosos no rosto
Harry sorri tentando manter a postura
“Vamos lili vou te dar banho” harry tira a garota de cima do balcão “você vai tomar banho e dar banho em theo já que acabou de sujar ele inteiro de farinha” ela fala ainda autoritaria e louis olha para a criança em seu colo que tinha o cabelo e as bochechas tambem sujas
“Sim senhora capitã” louis sai correndo com theo que ria em seu colo
Harry ri indo com alicia até o banheiro do quarto das crianças
“Desculpa o papai, mamãe. Ele queria fazer cookies para a senhora não ficar tão brava”
“Ficar brava? Porque eu ficaria brava” harry olha a garota confusa
“Por causa da super surpresa” alicia fala baixo como se falasse um segredo
“Louis para de fazer cosquinha em theo ele acabou de comer!” Harry tentava fazer todo mundo ficar quieto na sala, oque era dificil já que o pai era mais criança do que os propios filhos
“Mamãe é chata não é theo?”
“Posso ter um minuto de silencio?”
“Sim mamãe, fale”
“Eu tenho uma surpresa” louis senta direito no sofá prestando atenção em cada movimento de harry “abre isso” ela entrega a caixinha e louis segura o objeto como se fosse explodir em sua mão a qualquer segundo
“Harry… se isso for uma brincadeira” ele tira o sapatinho minusculo de dentro da caixa
“Dois meses”
“Harry Tomlinson! Meu deus se isso for uma brincadeira juro que nunca mais caio nesse papinho de saudades e que ninguem te fo-“ Harry se apressa em tapar a boca de Louis
“Enfim, a familia vai crescer!” Harry continua ignorando a fala de Louis
“MAMÃE VAI TER NENEM!” Alicia grita correndo até harry
Louis continuava estatico no lugar e theo olhava tudo em confusão
“Nenem?” A voz infantil sooa na sala
“Sim amorzinho, daqui a um tempo você vai ter outro irmão ou irmã”
“Uma criança?” Harry podia jurar que viu lagrimas nos olhos de louis “é serio mesmo?”
“Sim, lou” e finalmente louis levanta do sofá puxando harry para um beijo
“Eca” a voz de alicia sooa de fundo e os dois não podem deixar de rir
“Meu deus” louis se agacha encarando a barriga que tinha uma pequena protuberancia, quase imperceptivel “oi nenem, saiba que o papai é mais legal viu. Eu deixo vocês comerem doces antes do jantar”
“Louis!”
“Falando em surpresas…” louis se afasta seguido de alicia
“Louis william não me venha com esse papo” harry senta no sofa observando os dois irem ate o quintal
Ela só não esperava que alicia iria voltar com um filhote de golden nos braços
Um filhote de golden.
“AUAU!!” Theo correu animado até o cachorro praticamente atacando o animal
“LOUIS WILLIAM TOMLINSON-STYLES! Porque tem um cachorro no colo da minha filha?”
“Esse é o luke, mamãe” louis se “escondia” atras da garota e apenas concordava em silencio
“Luke? Louis você ao menos pensou em perguntar oque eu achava?”
“Mas você falou que ia pensar… e cachorros são otimos com nenens… e ele é só um filhotinho”
“É mamãe ele não pode ficar sem casa”
“Agh oque eu não faço por vocês”
“Amor eu achei os cookies de red velvet com pistache que você pediu!” Louis entra na casa puxando luke pela coleira e tentando equilibrar 3 caixas de doces
Harry estava deitando no sofá da sala com theo deitado com a cabeça em sua barriga e alicia pintando suas unhas com algum esmalte infantil
“Você demorou” Louis percebe como os olhos verdes tinham uma aparencia inchada e o nariz de harry estava vermelho
“Amor eu tive que ir de carro no meio de uma quase tempestade de neve, estava engarrafamento” ele entrega a caixa com 4 cookies para harry e as outra duas caixas com alguns doces diversos para cada criança
“Papai deixou a mamãe triste” alicia diz com um bico antes de começar a devorar o muffin de oreo “ela achou que você foi se encontrar com a mulher loira do escritolio”
“Mulher loira?” O Tomlinson segura a risada observando harry com cara de brava enquanto comia o cookie
“Nunca se sabe quando o seu marido vai te engravidar e te deixar toda feia e gorda e depois ir se encontrar com alguma mulherzinha por ai”
“Hazza, você sabe que isso nunca vai acontecer né?” Ele senta no apoio de pés em frente a Harry “e você não ta toda feia e gorda, amor. Essa é a casa do nosso bebezinho”
“Não é bebezinho! é menina eu ja falei”
“Simsim menina” Louis resmunga contrariado mas não querendo começar outra discursão boba “vou levar Theo para o quarto” ele levanta pegando o garoto que dormia enquanto segurava um pedaço de donut “Alicia já são 7:40, amanhã você tem escola”
“Sabe que dia é hoje, amor?” Louis caminha até harry que passava algum creme tranquilamente na barriga redondinha
“Algo entre 1 e 10 de janeiro” Harry responde observando o mais velho pegar o pote de creme de suas mãos
“8 de janeiro” ele massageia a barriga cheinha enquanto fala calmamente “sabe oque acontece hoje?”
“Não Louis, aniversario da queda do muro de berlim?”
“Nosso aniversario de pedido de namoro”
“Parabens pelo dia que eu quase morri atropelada” ela tira o pote da mão de louis e arruma a blusa do pijama “já vou dormir, prometi ajudar Alicia com o penteado maluco amanhã” a cacheada deita se afundando nos lençóis fofinhos, não prestando atenção na feição frustada de louis
“Foi um otimo pedido, não acha?” Louis continua deitando na costa de Harry e acariciando a barriga por cima do pijama de seda
“Sim Louis, foi um otimo dia”
“Quem diria que 7 anos estariamos juntos com dois filhos maravilhosos, um cachorro adoravel e um pacotinho na barriga, né?” Louis se afundava no perfume do cachos de harry ouvindo apenas um suspiro
“Tecnicamente só eu tenho um pacotinho na barriga” Harry se aconchega em Louis “boa noite, amor” e em menos de 5 minutos Harry dormia tranquilamente deixando um Louis frustado em sua costa
“Sim Luke a mamãe não ama o papai mais” Louis sentava no sofá com o cachorro deitado em sua coxa, esse que aproveitava do carinho em seu pelo “acredita que ela não da mais amor pro papai” o filhote lambe a mão de louis como se estivesse consolando ele “você é o unico que me entende, lulu”
“É né dois cachorros se entendem” Harry aparece no corredor ainda de pijamas e com Theo andando atrás de si “Luke e louis ate combina” Harry ri da própria piada
“Bom dia para a senhora tambem, senhora Tomlinson-styles” Louis levanta caminhando até a cozinha onde ja tinha preparado as paquecas, o café de Harry e o achocolatado de Theo e Alicia
“Panquecas de colação!!!” Theo bate as mãozinhas animados
“Sim nenem panquecas de coração para o theo e pra lili” Louis enfatiza o final da frase
“E porque eu não ganho panquecas de coração? Ta me chamando de gorda louis william?!” Harry cruza os braços em cima da barriga cheinha
“Não é isso, só quem ama o papai ganha panquecas de coraçao” Harry bufa baixinho começando a comer suas panquecas normais, achando o cumulo quando viu que Luke tambem comia petiscos de coração
“Harry? Ta acordada?” Louis brincava com os cachos de harry enquanto terminavam de assistir mais um capitulo de modern family
“To” ela se aconchega contra o peito de Louis aproveitando o carinho nos cachos
“Já parou para pensar que os meus meninões são fortes” Harry o olha confusa
“Teus meninões são fortes?”
“Sim, só foi preciso uma vez e olha só” ele faz como se estivesse mostrando um premio
“Louis por favor” Harry se afasta tentando manter a face seria
“Qual foi? Olha ai o resultado de 6 meses bem lindinho ai”
“Sabia que com 6 meses o bebe ja consegue ouvir?? Não fica dizendo essas atrocidades perto da minha criança”
“A criança tambem é minha, ela saiu de mim lembra”
“Louis william tomlinson-styles!” Harry afunda o rosto no traveseiro tentando terminar aquela conversa ali
“Amor? Harry?” Louis deita na cama se aconchegando na costa de harry
“Vai trocar de roupa Tomlinson! Eu já falei que não gosto de deitem na cama com roupa da rua” harry empurra o braço de Louis que rodeava sua cintura
“Ai quanto estresse” Louis levanta bufando baixinho antes de tirar a calça e a camisa social, jogando ambas peças na poltrona no canto do quarto “como foi seu dia?” Ele volta para a cama, afundando o rosto nos cachos com cheiro de chocolate
“Theo perguntou como que Elijah foi parar na minha barriga” Louis ri baixinho fazendo harry revirar os olhos “não aguento mais Lou… parece que a minha barriga fica 10 kilos mais pesada cada dia que passa”
“Isso significa que o nosso garotinho tá crescendo bem e saudável” ele beija a barriga cheinha, percebendo que harry usava apenas sua camisa como pijama. Oque não ajudou com a sua sanidade mental
“Nada mais cabe em mim” harry levanta ficando em pé no espelho na frente da cama. O Tomlinson observa a cacheada, praguejando baixinho ao que sentiu uma fisgada em seu membro
“Eu acho que vou ter que começar a sair assim…” para a surpresa de Louis, harry retira a camisa larguinha do corpo deixando a lingerie preta a mostra
“Acha é?” Ele se aproxima devagar, os olhos grudados nos seios cheios mal sendo cobertos pelo sutiã rendado
“Acho… se bem que já nem cobre meus peitos Lou, olha como eles estão cheios” harry busca as mãos fortes e a colocando em seus peitos, Louis aperta sentindo a carne macia preencher sua mão
“Acho que você vai ter que ficar sem eles também” ele puxa as alcinhas finalmente liberando os peitos doloridos “assim eles me parecem muito melhores” harry geme baixinho ao que Louis aperta os biquinhos durinhos
“Chupa eles, Lou” harry tenta puxar a cabeça de Louis contra si mas ele se afasta
“Que apressada” ele senta harry na cama antes de passar a lingua devagar por uma das aureolas amarronzadas “não acho que eu deveria fazer oque você quer” louis belisca os biquinhos sensiveis antes de se afastar caminhando até o banheiro
“Lou…“ harry o segue, o preto tomando o verde de seus olhos no exato momento que ve seu marido embaixo do chuveiro, a agua escorrendo pelo torso bronzeado e o pau duro em seu estomago “louis… deixa eu te ajudar” ela entra no box se ajoelhando na frente do mais velho, ele ri baixinho com quão desesperada ela parecia
“Tenho me dado muito bem sozinho, harry” o dedão de louis contorna os labios inchadinhos antes de invadir a boquinha vermelho “não preciso de você” ele esfrega o dedo babado no rosto corado
“Desculpa, amor” ela se aproxima afoita, esfregando o rosto na coxa de louis, a centrimetros do pau que brilhava a pré gozo
“Que desculpas vazias, hazza” ele masturba o membro devagar observando harry choramingar embaixo de si
Harry deixa alguns chupões e mordidas pela pelves do outro, os olhos azuis gelidos focados em cada movimento seu
“Deixa eu te chupar” ela fala devagar substituindo a mão de louis pela sua
Louis guia a cabeça de harry, deixando-a chupar apenas a cabecinha
A cacheada geme em deleite sentindo o gosto da pré porra invadir seu paladar
Louis se afasta prensando a mulher contra a parede, começando a estocar contra os labios vermelhos
“Porra, Harry” os fios castanhos serviam como o unico apoio “você sabe que me tem na porra da ponta dos seus dedos, né amor?” Harry lagrimejava mal conseguindo respirar entre as estocadas “veio se rastejando porque não consegue ficar um tempo sem pica” louis força a cabeça de Harry contra a sua pelves, gemendo baixinho cada vez que Harry se engasgava tentando se afastar “você veio se rastejando porque sabe que eu vou ceder” ele solta harry que ja esta a praticamente sem ar, a cacheada se afasta tossindo e com a respiração desregulada
“Eu sempre fui boazinha pra você, amor” ela levanta e começa a beijar o torso molhando de Tomlinson, o olhar verde intenso o encarava como um animal encarava sua presa
“Foi boazinha, amor?” ele puxa os cachos, a forçando contra o vidro do box “na primeira oportunidade você saiu dando pra qualquer mocho que passasse na rua, Harry” a mão forte estapeia a bunda lisinha
“Lou… você sabe que não foi bem assim”
“Ah não? Sabia que eu não me admiraria se esse bebê fosse de algum macho qualquer que você se encontrou” os apertos firmes de Louis faziam harry vacilar, sua mente processando cada vez menos ao que lentamente os dedos com a tatuagem “28” começavam a brincar com seu clitoris
“Você sabe que eu sou sua, Lou” harry apoia a cabeça no ombro de seu marido
“Pena que só lembra disso quando quer pica” ele penetra o indicador e o anelar na grutinha molhada fazendo harry gemer manhosa em seu aperto “mas agora vou me certificar de que você não vai mais esquecer” ele retira os dedos e deixa um tapinha no grelinho inchado
Harry rebola devagar contra o pau de louis, encaixando perfeitamente entre as bandas gordinhas de sua bunda
“Eu poderia foder seu cuzinho, amor” o moreno finge estocadas contra as reboladas de harry, ouvindo ela gemer revirando os olhos “mas a gente tem que treinar sua bucetinha, como que outro bebe vai passar por ela? Ela é tão apertadinha” ele encaixa o pau entre as coxas grossas de harry, estocando ali. O melzinho de harry se misturando com a agua que escorria constantemente em seu corpo
“Me fode, amor. Bem gostosinho” nessa altura harry ja havia se tornado uma bagunça, a bagunça mais erotica que Louis pode apreciar
A bochecha corada apoiada no vidro, os lábios vermelhos formando um biquinho adorável e os cílios longos descansavam em sua bochecha
“Só quando aprender que realmente é minha, harry” harry o olha por cima do ombro, um olhar quase inocente mas no fundo Louis sabia que sua mulher não passava de uma puta “não posso foder a coisa dos outros, certo amor?”
“Mas você… sabe que eu sou sua, Lou” os olhos lagrimejavam e ela mal conseguia terminar a frase de um jeito coerente
“Não tenho tanta certeza”
“Mas eu sou” o tom da garota começava a ficar visivelmente mais desesperado “eu sou sua, todinha sua” ela tenta se virar mas Louis volta a forçar seu rosto contra o espelho “eu sou sua papai! Minha buceta é só sua” ele aumenta as estocadas sentindo harry apertar as coxas e gemer desesperadinha
“É minha?” Um tapa é desferido na bunda gordinha
“Sim! Só do Lou” ele puxa Harry contra o seu peito pelo pescoço leitoso, observando a carinha chorosa da cacheada “só o Lou pode me foder, só você pode botar quantos bebês você quiser na minha barriga” ela esfrega o rosto na barba rala do outro, o cheiro dele invadindo todos seus sentidos “e eu nunca vou nem reclamar” isso foi o estopim para a perda de qualquer resto de autocontrole que Louis inda tinha.
Ele desligou o chuveiro e puxou harry para seu colo, caminhando até a cama larga e pouco se importando se estavam molhando o chão ou os lençóis
Louis se encaixou entre as coxas de harry e não demorou muito para estocar contra a bucetinha molhada
Harry gemia e arranhava as costas largas em busca de apoio
“Lou… isso… me da mais nenens” Harry sentia a sensação no seu baixo ventre que ela tanto sentiu falta começar a se formar
As pupilas já tinham tomado conta dos olhos azuis e louis sequer raciocinava, era como se harry fosse a sua droga
“Porra, porra, porra” ele goza sentindo as coxas de harry tremerem ao redor de sua cintura e as costas arquearem em um orgasmo
“É bom que não se esqueça de quem você é” louis deita puxando harry para o seu peito
A cacheada tinha os olhos fechados ainda aproveitando a sensação pos-orgasmo e o carinho calmo em sua barriga
194 notes · View notes
tecontos · 22 days
Text
Dei meu cú pro amigo do meu marido aqui em casa nessa segunda feira (26-08-2024)
By; Rachel
Oi, me chamo Rachel, tenho 24 anos, sou casada a 3 anos, meu marido tem 30 anos e somos de Vitoria – Espirito Santos, mas moramos em um outro Estado.
A cerca de 3 anos mais ou menos eu conheci o amigo do meu marido, uma cara puta gostoso, ficamos sempre nos secando, e depois de tanto tempo com isso eu acabei partindo de vez pra cima.
Sábado a noite saímos para um barzinho, estávamos em 12 pessoas, meu marido falando de futebol com outro amigo dele que estava ao seu lado e eu acabei ficando passando meu pé no Sergio (o amigo gostoso do meu marido) por baixo da mesa, ficamos assim a noite toda. Eu doida pra dar pra ele, e com certeza ele doido pra me comer.
Era domingo, 9h da manhã quando eu pego meu celular e uma nova mensagem no meu whatsapp havia chegado, sim era Sergio.
Quando vi fui logo respondendo e iniciando um bate papo, começamos a conversar e ele não perdeu tempo, falou lago que eu estava deslumbrante no jantar e que ficou com gostinho de quero mais, disse que amou o carinho por baixo da mesa e que precisa o quanto antes.
Respondi pra agilizarmos o encontro pois eu estava louca de vontade dar pra ele e que fiz sexo na noite passada mentalizando que era ele.
Ele perguntou. - “Seu marido não desconfiou e nem falou nada?”
Respondi; - “claro que não, ele é muito desligado nessas coisas, nem sequer desconfiou de me comer toda molhadinha”
Ele então respondeu; - “nossa mas tava muito na cara, é muito corninho esse meu amigo, melhor assim, vai ser nosso segredinho”
Meu marido estava no banho então pedi para ele esperar um pouco e mandei alguns nudes meu, pra ele me apreciar mais um pouco e ele perguntou onde meu marido estava, respondi que ele estava tomando banho pois eu tinha gozado muito na noite anterior devido a bagunça que fizemos com eu imaginando ele.
Ele me mandou uma foto do pau dele, era torto e grosso, e eu ja me imaginei sendo arrombada por ele, foi então que eu mandei um video alisando a minha buceta pra ele, enquanto gravando meu marido chegou e falou algo, precisei interromper e recomeçar, mas antes pedi pra meu marido ficar assistindo atras do celular pois seria um vídeo pra ficar sempre assistindo no trabalho.
Quanto terminei e enviei pro Sergio e tambem pro meu marido, e pedi pra meu marido socar gostoso pois queria sentir o pau dele dentro de mim, ele me comeu e eu gozei horrores.
Sergio ficou enlouquecido com o video e disse que precisava me ver pra despejar seu leite em mim, eu disse que infelizmente nao tinha como naquele domingo, mas que na segunda a noite conseguia, ja que disse a ele que meu marido iria a um jogo de futebol.
Foi o suficiente, na segunda, combinamos as 7h da noite aqui em casa, e Sergio chegou pontualmente.
Estava suado com roupa de corrida, ele havia dito pra Flavia (sua namorada) que iria pra sua corrida diaria, chegou suado com a camisa encharcado, nem pediu licença, ja foi me dando um beijo e enfiando a mão na minha raba.
- “Então quer dizer que a puta quer trair o marido enquanto ele vai pro estádio ?”
Respondi; - “quero que esse gostoso me coma com força porque meu corninho não aguenta”.
Ele me botou de joelhos a mamar aquele pau meia bomba torto e suado, era uma mistura fresquinha de suor, gala e resquícios de mijo.
Comecei a chupar como se não visse uma rola a dias e me babava com aquele liquido gostoso que ele emitia misturado com minha baba.
De repente ele me puxa pelos cabelos pra cima, me vira de costas, abaixa minha saia, e começa a esfregar o pau na portinha do cuzinho.. ameaço me abaixar duas vezes mas ele me segura firme e diz;
- “vou comer vc aqui mesmo e de pé”
Segurou firme minha cintura, deu um cuspi que escorreu a valetinha da minha bunda até a porta do cuzinho com uma das mãos esfregou e enfiou o dedo.
Fez alguns movimentos no cuzinho com o dedo até que colocou sei pau sem parar.. dei um pulo e um grito de dor e começou a macetar com cada vez mais força. Eu não tinha mais forças mas ele me segurava e me socava.
- “Vai puta, da logo esse cuzinho enquanto teu corninho não volta… a partir de hoje serei teu comedor dos horários do teu marido”
E continuava as estocadas sem parar, todas com muita força e indo até o fundo. Sentia aquele pau torto abrindo meu buraquinho.
Foi então que ele falou;
- “logo logo vou te levar ao motel e colocar vc e minha esposa a mamar pra mim até eu jogar leitinho na cara de vocês duas”
Eu não resisti, gozei e tive até um mini squirting enquanto gozava!!! Ele mesmo vendo nao parava de socar e de martelar meu rabo. Até que me botou de quatro e continuou por mais algumas estocadas e gozou dentro.. mas gozou tanto que eu senti um pouco escorrer pra fora… então ele disse
- pronto, vou continuar a minha corrida! Até a próxima, putinha.
Saiu sem que eu nem tivesse levantado do sofá.
Quando meu marido chegou, ficamos conversando um pouco, ele foi tomar banho e eu fui atrás, dei uma mamada nele pois queria seu pau em mim, ele ficou de pau duro na mesma hora, me levou pra cama e meteu sem dó na minha buceta, depois pedi pra ele meter no meu cú pois ele tava pegando fogo.
Meu marido se deitou, eu sentei encaixando seu pau no meu cu, que aquele momento já tava bem fodidinho por causa do pau do Sergio, sentei ate o talo e comecei a subir e descer ate o meu marido gozar dentro... depois ele me deitou e disse;
- “que delicia amor, agora vou limpar tudinho”
O cheiro de porra era insuportável, mas ele lambeu todo meu cuzinho e ainda chupou minha bucetinha.
Quando terminou voltamos para o banho felizes e satisfeitos, eu 2x kkkk
Enviado ao Te Contos por Rachel
105 notes · View notes
llorentezete · 4 months
Text
Aprendendo a não me desafiar! — Esteban Kukuriczka
com licença mulheres para uma breve canetada com Esteban professor de história, usando aqueles óculos de armação marrom, cabelo bagunçado e carinha de sonso.
warnings: sexo desprotegido (NÃO FAÇAM LOBAS), palavrões, espanhol meia boca, kink size (porque sim), leves tapas, não interaja se for menos de 18!, leitinho quente tirado na hora.
Tumblr media Tumblr media Tumblr media
Kᥙkᥙ!Tᥱᥲᥴhᥱr começaria com a reader em uma excursão pra o museu da cidade com a galera da faculdade. Esteban, seu professor, cuidou de todos os detalhes para que seus melhores alunos, inclusive você, desfrutasse do melhor do museu. Com direito a entrarem em salas privadas.
Kᥙkᥙ!Tᥱᥲᥴhᥱr ficaria louco desde que te viu entrar no ônibus com aquela mini saia branca que deixava suas coxas a mostra. Os meninos do fundo observavam você caminhar igual uma barata tonta pelos corredores, sorrindo para as quatro paredes de emoção. Kuku sentiu o sangue ferver de ciúmes. Quer dizer, vocês já haviam ficado algumas vezes, mas não era nada sério, ele será só o seu professor de história gostoso.
Kᥙkᥙ!Tᥱᥲᥴhᥱr tentaria resistir ao máximo, dando sua palestra com os olhos focados em você e uma carranca significa que faria você tremer na base apenas de imaginar ele vindo em sua direção. Kuku começaria falando sobre o tema, e então, seu olhar desceria a suas pernas e coxas grossas prensadas na sainha branca. Ele salivaria.
Kᥙkᥙ!Tᥱᥲᥴhᥱr liberaria os alunos e palestrantes para andar livremente pelo museu, fazer observações e anotações. Você iria toda vez para as obras de Da Vince quando sentiu seu braço ser puxado com força. Seu rosto colocou no peito do mais alto. Ah, sim, ele era bem mais alto que você. Precisava erguer a cabecinha e levantar os olhinhos para encontrar ele com aquela carinha de pobre coitado, mas que no fundo, queria te comer na vista de todos.
Kᥙkᥙ!Tᥱᥲᥴhᥱr vai enrolar todos os outros com a sua dúvida específica que só pode ser tirada na sala privada para professores, é claro. Ele vai te arrastar pra dentro sem deixar você dar um pio em contestação. Vai te jogar em cima da mesa, tomando cuidado pra não derrubar os artefatos de quase mil anos, vai puxar seu quadril e de dar um tapa considerável na bunda. Esteban vai deitar sobre você, roçando o pau duro em sua entradinha, sussurrando no seu ouvido o qual ferrada você estava por ter escolhido aquela saia pra ver ele.
Kᥙkᥙ!Tᥱᥲᥴhᥱr vai te posicionar bem rente a mesinha, levantar sua sainha tendo total visando de sua bunda. Kuku vai ficar um animal quando ver sua calcinha de renda branquinha manchadinha de sua lubrificação. Vai levar os dedos até sua buceta inchada e dizer algo como "ysi descubren que eres una perrita con tu profesor?" e isso te faz se esfregar ainda mais no volume entre as calças de Esteban.
Kᥙkᥙ!Tᥱᥲᥴhᥱr te forçaria contra a mesa, fazendo seu rosto bater contra o vidro frio. Você conseguiria ouvir ele abrindo o próprio zíper da calça e abaixando ela o suficiente para te alcançar. Kuku passaria a cabeça rosinha do seu pau sobre a sua buceta inchadinha e molhada, te arrancando suspiros. Logo, ele te daria um tapa forte na bunda, te obrigando a ficar muda "una palabra y te dejo aquí sin nada", é o bastante pra você assentir já sem emitir som. Sorrindo de seu desespero, ele meteria me devagarinho, te fazendo sentir cada parte do seu pau grande te alargando. Remexeria o bumbum tentando ter mais contanto enquanto sua boca formava um "o", o que deixaria Esteban mais louco, "você implora como uma virgem, cariño".
Kᥙkᥙ!Tᥱᥲᥴhᥱr saberia que não tem todo o tempo do mundo, então aumenta a força das estocadas, metendo em você tão forte que a mesa embaixo de si começaria a ranger, mexendo os artefatos pra lá e pra cá. Kuku puxaria você pelos cabelos, te colando no peito dele. Você soltaria um gritinho de susto e ele te enforcaria de punição, de fazendo ver estrelas e ao mesmo tempo perder o ar. Seu corpo ficaria mole e sua bucetinha começaria a apertar o pau de Esteban imediatamente. "esto es para que aprendas a no desafiarme más." ele metia com tanta força que assaria o meio de suas pernas. Sentiu um grito fino querer sair quando Kuku foi extremamente fundo, seus pés mal tocando o chão. Você gozaria em segundos, depois que ele maltratou seu clitóris com o dedão. Seu gozo foi tão intenso que o aperto de sua buceta deixou Esteban fora de órbita. Ele gozou como um adolescente precoce, gemendo seu nome e se agarrando a você.
Kᥙkᥙ!Tᥱᥲᥴhᥱr te daria o melhor beijo da sua vida, apenas pegando no seu queixo e te virando. Ele daria mais algumas estocas, sentindo a cabecinha do seu pau sensível, então ele sairia lentamente de você, enquanto sua porra escorria pelas suas pernas bambas.
Kᥙkᥙ!Tᥱᥲᥴhᥱr vestiria suas roupas, fecharia seu zíper e te deixaria na sala, ainda empinada, acabadinha, com a porra quente dele vazando de sua buceta, que diga-se de passagem, era uma visão e tanto, se ele não precisasse ir, te fuderia de novo. Sua boquinha aberta e os olhos espremidos. "mucha suerte cuando volver, mi amor" ele vai sorrir e fazer a maior cara de sonso que conseguir, fechando a porta e voltando a dar aula como se nada tivesse acontecido.
115 notes · View notes
lolowkcals · 19 days
Text
꒰୨ Comportamentos que eu notei da minha amiga anoréxica IMC 13 ୧꒱
ೀ Comida
Ela come porções grandes de frango e peixe, evitando carne vermelha.
Volume eating sempre! Enche o prato de vegetais e muita salada.
Batata doce praticamente todos os dias.
Nada de carboidratos. Pão? Jamais! Sobremesa nunca.
Café puro ou com leite, sem adoçantes.
Nada de sucos naturais ou refri zero. Apenas água sem gás.
Se não tiver o que ela come, ela faz um ovo cozido ou não come.
Ela registra todos os pratos.
Segue diversas nutricionistas e todos os restaurantes da cidade.
Após refeições, ela vomita na boca e engole de novo.
Prefere buffets ou restaurantes com calorias no cardápio.
ೀ Movimento
Não fica sentada, sempre de pé e de preferência caminhando.
Sempre dando preferência para ajudar os outros e evitar sentar e comer na mesa.
Realiza todas as tarefas diárias, além de cozinhar a janta.
ೀ Conversa
Nunca se chama de gorda ou comenta no corpo de outros - somente se você der abertura.
Vai te convidar para cozinhar sobremesas mas nunca vai comer.
Muito atenciosa na hora de falar - ela não vai ficar te falando quantas calorias o que você está comendo tem, ou falar dos hábitos alimentares dela.
Faz trabalho voluntário toda semana.
Dorme no tempo livre para evitar comer.
Ao longo do tempo irei adicionar mais coisas ୨୧
143 notes · View notes