#construir nada

[lidia-vasconcelos]

Pois é...

[narcoestadosunidos]

@DaniMayakovski El momento en el que el ejército sionista persiguió y secuestró hoy a un niño palestino en el barrio de At-Ta'awon, en Nablus, en la Cisjordania ocupada. Cada año, hasta 1.000 niños palestinos de Cisjordania son secuestrados por el ejército sionista, torturados en los interrogatorios y juzgados por tribunales militares. Sin embargo, estos rehenes no les interesan a los medios de incomunicación occidentales.

#ZeuzOlimpia @OlimpiaZeuz GOLPEDEESTADO EN🇻🇪#VENEZUELA Y AL PRESIDENTE @NicolasMaduro https://naasonyouporno.over-blog.com/2023/12/andrea-camila.html By: NARCOMALANDROS DE🇺🇸#EEUU @JMilei🇦🇷🇮🇱@ISRAEL @NETANYAHU🏴‍☠️@JoeBiden🚨@elonmusk https://pussyspace.com/search?q=huge+tits+asian&filter=dur NASSONLAPLAZALLDM #LLDM #GDL https://nassonlaplazalldm.over.blog/2024/08/javtven-javtven136514-visegrad24-jmilei-israel-netanyahu-joebiden-realdonaldtrump-golpedeestado-en-venezuela-by-narkoz-jmilei-israel-netanyahu-joebiden-elonmusk-nassonlaplazalldm-lldm-gdl-enriquealfaror-pablolemusn-juanjosefrangie-watch-porn-movie https://pic.x.com/72aefzcyrc

RT(@JavTVen) https://pic.x.com/dmaifrhrqa

Disfruten lo votado🛑@PabloLemusN en complicidad de @JuanJoseFrangie y @EnriqueAlfaroR se han dedicado a talar árboles a distra y siniestra,construir torres de edificios sin importarles nada y aquí están las consecuencias🤬 https://www.tumblr.com/narcoestadosunidos/760714956061720576/narcoestadosunidos , https://olimpiazeuz2030.blogspot.com/2024/09/httpst.html

[victorian-platence]

Estaba en el subte ayer y vi una nena chiquita. Iba de la mano del papá, tenía una puffer rosa metalizada, pantalones de pijama y un tutú y se estaba riendo. Esa nena, que no me vio y no me notó y no va a tener otra aparición en mí vida que ese pequeño reflejo que me hizo cliquear que yo soy grande ya. Que soy grande y me toca defender a ese tipo de nenas chiquitas a mí. No soy aaaa la gran mayor, no conozco lo que es vivir en dictadura, y yo era una beba recién nacida en el 2001, pero yo ya sé lo que es tener miedo.

Yo sé lo que es tener miedo de ir de la mano con una piba, me enteré de ese miedo como a los catorce años, y si bien, generalmente buldozeo a base de impusividad más allá de ese miedo, alguna vez tuve miedo de que mi abuela se agarre un infarto cuando una amiga mía me robó un beso en su pieza y me di cuenta de que me gustaba que me robe besos ella. Y la verdad que fuera de un par de burlas, y los malos tratos generales de una familia abusiva y normativa, pasé varios años sin volver a sentir ese miedo particular, en parte porque estuve en una relación muy larga con un hombre y en parte porque me rodeé de un círculo de amigos queer en el que medio me olvidé que existía la homofobia más que como una ridiculez mental que pasa lejos, muy lejos de mí.

Desde el domingo tengo miedo de vuelta. Escucho a mis hermanos preguntarme por qué me preocupo tanto, qué es tan malo que gane Milei. Escucho a mí abuela decir que no lo votó nomás porque ya se habían agotado sus boletas cuando llegó. Mí abuela, mí abuela que es dulce, que me dice mamita y que me ama con locura, mí abuela que me compró ropa para mí primera marcha del orgullo fuera del clóset porque quería demostrarme que me quería igual, aunque le costara tener una nieta bisexual, tan proclive a traer a casa a un pibe como a una piba. Mí abuela quería votar a Milei. Escucho a mí mamá decirme zurda de mierda, vos seguro votaste a Massa. Yo, que vengo votando al FIT desde que puedo votar, en general, me río nomás. Pero mientras escuchaba el conteo de votos se me hundía el estómago, pensaba dioses míos, ¡qué miedo! Mí familia festejaba que por fin iban a sacar a estos 'zurdos de mierda' se reían de mí angustia, como si fuera un chiste, sin dimensionar que la dolarización es imposible sin matarnos de hambre a nosotros también, sin dimensionar que mamá, vos sos trabajadora del estado, sos profesora de escuela pública, sin dimensionar que dónde se aplican los vouchers efectivamente se privatiza la educación, sin dimensionar lo que un hombre que utiliza datos con la honestidad intelectual de un zapato mojado puede hacerle a nuestro país (por tirar un ejemplo, el famoso asunto de estar a favor de la venta de órganos: 350.000 personas mueren al año y no usamos sus órganos, habría que venderlos!!! Olvidándose que de toda esa gente que se muere son rescatables una fracción nada más, y la propuesta en sí es una especie de movida edgy, de shock, para mostrar lo sólido que es en su convicción y para testear la nula capacidad de pensamiento crítico de sus seguidores).

El miedo no se termina en mí casa. El día siguiente en el tren, cuando voy a la facultad, escucho a la gente está diciendo se van a ir. En el tren Roca. A las nueve de la mañana. Gente laburante, probablemente otros estudiantes como yo, que van a una pública. Y discuten en voz alta que al fin alguien va a hacer algo. En mí cabeza estoy pensando, yo conozco a otro pueblo unido por el odio que tomó las palabras de un hombre que se proclamaba el nuevo Mesías de su gente. En mí cabeza pensaba, es peligrosa está falacia mesiánica. En mí cabeza pensaba, estoy en peligro, toda esta gente está más que dispuesta a tomarme, en toda mí expresión (bisexual, autista, medio discapacitada, medio ciega, estudiante de universidad pública, no binaria) y tabularme como un gasto descartable. En mí cabeza pensaba esta gente no sabe dónde se está metiendo. Llegué a la facultad helada y asustada y el patio de Puan estaba vacío. No había un alma y cuando empezaron a llegar las personas, casi una hora más tarde, había murmullo, ponele, un murmullo bastante triste. Si no fuera por el ruido le diría un murmullo mudo.

Pienso en esa nena hoy de nuevo, yendo a la facu y todas las nenas de su edad que hoy se ríen y van de la manos de sus papás y no conocen lo que es el miedo como ya lo estoy conociendo yo. Pienso, Dios, déjame cuidarlas. Medio me sacó un poco del pozo de la infinita desesperanza en el que estoy metida desde el domingo a la noche.

Ayer unos profesores hicieron un espacio para hablar un toque de lo que está pasando y del fenómeno Milei. Recomendaron un par de libros interesantes, yo estoy leyendo el primero "¿La rebeldía se volvió de derecha?" De Pablo Stefanoni, no es difícil de encontrar el PDF pero si alguien lo quiere leer escríbanme y se los paso, está muy bueno para entender por qué están triunfando estos movimientos de ultraderecha.

Tuvimos el momento de pánico de dimensionar que si gana un energúmeno así, este podría ser uno de los últimos años de educación pública que nos quedan, tuvimos el momento de tener un profesor que toma la palabra y dice que cuando fue a votar se cruzó con un Falcon Verde estacionado con una escarapela. Sí, es una banda. Un poco no le quiero creer, por puro optimismo, supongo.

Pero algo que me terminó de estabilizar bastante fue una profesora que tomó la palabra y dijo: chicos acuérdense que si bien nosotros fuimos perseguidos historicamente la mayor parte de los desaparecidos fueron obreros, la histeria respecto a la pérdida de nuestros privilegios para estudiar o para enseñar o vivir nuestra vida como la conocemos es comprensible pero no conduce a nada, desde una perspectiva puramente estratégica, no nos sirve movilizarnos desde ahí.

Porque sí, obvio, me asusta perder la capacidad de estudiar, de dedicarme a lo que amo, de investigar alguna vez los fenómenos literarios que me interesan pero no es el punto, no? No es el fin del mundo. No soy la única que la va a pasar canuta. No somos nosotros los intelectualoides de izquierda los más afectados, somos una demográfica más y hay que pensar un toque más sobre cómo hacerle dimensionar a las otras personas que van a sufrir con nosotros e incluso más que nosotros si dejamos que un tipo como Milei ascienda a la presidencia.

[leiabomsenso]

Fazer nada nunca construiu alguma coisa. Se você ficar parado no ruim, não sai do ruim.

[tiamorgana]

Em pleno 2023 eu tendo que reaparecer e reblogar ask/post meu de 2020 e que ainda se encaixa em alguns rpgs que participei nos últimos meses, incrível.

o que ta acontecendo com a tag? a quantidade de mod ignorante e que caga pro player é gigante, até agora só vi um rpg que se salva! tia morgana, dá um esporro na galera que ta dificil ter EDUCAÇÃO hoje em dia, tudo tratando player como descartavel. quer sair? foda-se, sai. ta desconfortavel? ao inves de ouvir vou falar como vc ta errado. mandou ask? vou levar dias pra responder. chamou no discord? vou te ignorar mas falar no grupo do rpg. fala serio né, zero respeito

PS: MODERAÇÃO DE RPGs DA TAG, COLA AQUI QUE TEM CONTEÚDO PARA VOCÊ.

MEU SENHOR AMADO, VAMOS POR PARTES

Essa não é a primeira ask que eu recebo sobre o assunto, então vamos com calma. Primeiro a tia vai dar uma bronca nas moderações dos RPGs, e depois vou escrever aqui uma aulinha de etiqueta básica, porque anon, eu concordo com você.

As moderações hoje em dia estão sim um pouco diferentes do que eu costumava ver a um tempo na tag. Recebi ask falando exatamente disso, que tem moderação que não liga muito para os players, que aceita FC o qual player tem trigger, que é grosso ou ignora (!!!) player, que demora para responder... Na verdade isso nem é uma bronca, é só eu expressando a minha tristesa. Colega, o seu RPG pode fechar facilmente, se você não tratar os player bem. Não adianta ter um plot legal, personagens bons, se os players não se sentem confortáveis no seu ambiente. Já vi muito RP dando tiro no pé, e causando o próprio floop.

Querida moderação. Vamos a pontos básicos de como tratar um player (eu não acredito que eu to fazendo isso em pleno 2020). No read more:

Ponto 1: Recepção.

Seja no grupo do discord, seja no grupo ooc do tumblr. Seja quando a pessoa te manda o link do blog do char. Seja receptivo. Agradeça por ter aplicado, e ofereça ajuda para qualquer coisa que o player precisar.

Ponto 2: Tempo de resposta.

SEMPRE responda tudo que o player perguntar, e o mais rápido possível. Ninguém é obrigado a ficar online 24 horas, mas se você não consegue responder seus player no discord ou na central com frequencia (e estou falando de asks e dúvidas, não de plots), talvez esteja na hora de pedir ajuda na central. Não é vergonha nenhuma ter 2 ou 3 mods em um RPG. 

Outra dica legal que eu vejo poucos RPGs seguindo, é sempre ser o último a mandar algo no chat, seja no discord ou no char do tumblr. Nem que seja um coraçãozinho depois que o player manda “ok, muito obrigado mods”. 

Ponto 3: a panelinha

As pessoas gostam de saber que elas importam. É natural nos darmos melhor com algumas pessoas, mas quando vemos uma pessoa ignorando as outras e favoritando certas interações, o player acaba desanimando. Quando a moderação faz isso, é pior ainda. 

Ainda nesse ponto, se seu RPG tem plot drops/eventos frequentes, tente incluir os personagens de seus players neles. Como eu disse, todo mundo gosta de saber que importa, e isso ajuda muito nesse ponto.

Ponto 4: a Educação.

O que eu já vi de ask sendo respondida grossamente, nossa! Colega, esse anônimo pode ser um player em potencial, cuidado com as suas palavras! Se for ask hate, aprenda a não responder. Uma ask hate que você responde só atrai outra ask hate. Se for uma ask que não categoriza como ask hate mas ainda sim tem aquele tom de provocação, responda como se fosse um fã. A pessoa vai cansar, ou vai se sentir mal por ser tratada bem quando manda coisas ruins.

Ponto 5: o adeus.

O player pediu unfollow, então ele não importa mais para mim, certo? Errado xuxu. Eu vejo (e já aconteceu comigo) de pedir unfollow e a moderação “ah poxa, ta bom.” Eu olho e fico literalmente estática. Essa frase me mostra que eu nunca importei para aquele RPG, e que tá tudo bem eu sair. O que eu espero de uma moderação descente e que se importa, e chegar e “poxa, mas porque você quer isso? tem algo que eu possa te ajudar? é muse? posso te ajudar com ideias e desenvolvimento. é tempo? não prefere pedir um hiatus por uns dias? se sente desconfortável com alguma coisa? POSSO TE AJUDAR EM ALGUMA COISA?” O que mais me deixa estressada é a falta de interesse que a moderação tem com os seus players. Não passa pela cabeça de vocês que um player que saiu agora, pode possivelmente querer voltar algum dia? Se você foi indiferente com ele, isso com certeza não vai acontecer. Mas se você tratar bem e se importar, pode sim! 

Ponto 6: FCs aceitos (pesquise antes) tw: 4ssédi0 e p3d0fili4.

Esse ponto é bem complicado aparentemente, apesar de eu particularmente achar fácil copiar o nome do FC e colar no google e fazer uma pesquisa rápida antes de aceitar ou dar de sugestão UM FC ACUSADO DE 4SSÉDI0 S3XU4L OU P3D0FILI4. Gente do céu, namoral. Vou fazer um tutorial para vocês. Vai dar sugestão de FC ou recebeu ficha com um FC? 

. Copia o nome do FC

. Cola no google o nome + problematic ou FC problematic.

. Leia notícias :)

2 minutos passando o olho, você vai conseguir ver se o FC é problemático ou se pode ser usado sem problemas. 

-> Procura no google: face claim problematics list, vocês vão encontrar algumas listas de FC problematicos e até com fontes

PS: O FC NEGAR VERBALMENTE UMA ACUSAÇÃO DE 4SSÉDI0 NÃO É PROVA PARA FALAR QUE ELE É INOCENTE!!! NEGOU E NÃO TEM PROVA? CONTINUA BA-NI-DO. Obrigada pela atenção.

Eu já falei demais e já dei muita dica de graça. Espero que as moderações por aí leiam e comecem a tratar melhor seus players, quem sabe a tag melhora um pouco.

[imninahchan]

ℭ𝔲𝔠𝔨𝔬𝔩𝔡

cuckolding ˢᵘᵇˢ ᵛᵉʳᵇᵒ

fetiche que envolve ver a parceira envolvida em relações sexuais com terceiros.

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❝𝐍ão é como se você tivesse sido infiel, o relacionamento do vocês é sem rótulos, sabe? Parece que ele adorar dizer, na verdade, sobre o quão “descomplicados” vocês são. E você gosta da liberdade, de estar com ele e também com qualquer outra pessoa que deseje e na hora que deseje. “Qual é o nome dele?”, dessa vez ele se mostra curioso pelas suas aventuras, ao que você apenas sorri, descarada, não sei, não perguntei, só fodi... Isso te deixa duro ou com ciúmes?❞

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꒰ ꪆ୧ ꒱ 𝛢visos ⌢ ꒰੭. headcanon narrado, enzo (sextape, fetiche por imagens eróticas, exibicionismo, sexo sem proteção, body worship?, venda, um ‘papi’). Quero fazer pra outros tb, o q vcs acham? Aqui nós defendemos os corno🙏

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𝔈𝔫𝔷𝔬

Ele é um artista. O jeito com que trata e enxerga o sexo beira o ideal platônico de uma maneira que te dá nos nervos às vezes. Perfeito, artístico, tão surreal que deve ser imortalizado de alguma forma — e nada melhor do que as lentes fotográficas que tanto estima. Se não te proporcionasse tanto prazer a exibição erótica, o chamaria de maluco por se estimular com coisas assim. Mas já que não é, é nas suas mãos que está a câmera digital quando se isola nos quartos de hotel, ou nas quatro paredes dos amantes noturnos.

A esmagante maioria nunca fica tímida de se expor, é como se o lado maia selvagem humano ganhasse espaço uma vez que tira o objeto da bolsa. Deixa claro, porém, apenas o seu rosto aparece nos cliques. Para o destinatário, é a sua reação, o seu corpo, que deve estar em destaque, é isso que importa. Enzo quer acessar as imagens e apreciar o seu rostinho em cada enquadro. Se estava sorrindo, séria ou com os olhinhos marejando. Em qual posição foi arrumada, como os toques foram firmes na sua pele. Pode viver o movimento através do que visualiza. A imaginação vai tão longe que se permite até construir os sons que impregnaram o local naquele frame.

Depois que entrega a câmera na palma da mão dele, você se delicia com a sensação de saber que vai ser apreciada. Sempre se dedica pra eternizar os melhores takes. Performática e, no entanto, os terceiros nem parecer perceber. Belos ângulos dos dentes rabiscando na sua pele, as mãos abraçando o seu pescoço enquanto os olhos se reviram. Os pulsos amarrados, o rosto sujo de prazer. Batom borrado. Ah, o reflexo do seu corpo nu nos espelhos... Talvez sejam os retratos preferidos do Vogrincic — a confiança de se mostrar para ele e para si mesma.

Se considera uma musa. Provavelmente, seja isso mesmo. Modela os desejos mais sórdidos que borbulham na mente do homem incapaz de realizar o que deseja por si próprio, porque não, vocês dois não fodem.

Essa aura de “musa” é levada a sério demais, entende? O apelo das divas está na expectativa de possuí-las na mesma proporção de não ser dono delas. Você está há poucos centímetros, ali, gravada na imagem, e é o suficiente para o artista. Agora, tem que confessar para si que a maior loucura nesse cenário é o fato de você não se incomodar por não ter dormido com ele ainda. Poderia passar a eternidade se projetando na cama dele...

Usaria uma lingerie vermelha rendada, cinta-liga e meias, bem perfumada, montada como uma bonequinha. O esperaria se aliviar sobre as fotos, os jatos morninhos manchando as coxas masculinas. Não teria pressa, agitando os pezinhos sobre o colchão macio, uma pedaço de fita entre os dedos e o celular por perto. E quando ele te encontrasse, a reação inicial negativa não te assustaria. Calaria-o com um beijo, com a sua fragrância ébria entorpecendo os sentidos dele. O gosto dos lábios da diva seria doce, a pele seria suave de apertar, então Enzo mesmo escorregaria as mãos pra sua bunda, espremendo a carne, sem se repreender.

“Eu preciso de você”, a sua voz ecoaria baixo, chorosa. Atuaria mais uma vez, manhosa, não está desesperada de verdade, só que os homens gostam de ouvir essas coisas, especialmente os artistas. Enzo te olharia, as pupilas dilatadas traçaria o caminho do seu rosto maquiado até os joelhos afundados na cama. Papi, você chamaria, enfeitiçante. As mãos subiriam pela sua lombar, contornando a cintura para espalmar nas costelas até apalpar os seios por cima do sutiã. Nena, ele murmurraria de volta, suscetível.

O nariz grande desenharia na curva do seu pescoço, o homem suspira. O rosto permaneceria escondido, muito “tímido”. A ponta do nariz chegaria a perpassar no seu decote de uma extremidade à outra. Esfregaria a bochecha no seu colo, nena, repetindo e repetindo como se tivesse perdido as palavras. Você deixaria ele se afogar entre os seus seios, não interromperia o caminho das mãos quentes pelo seu corpo. Se sentiria venerada, o seu ego inflado. Entretanto, se apartaria dos dedos ferozes para conseguir atar o pedaço de tecido ao redor da cabeça.

Cobriria os olhos, “confia em mim”, solicitando com a voz docinha. Daria as costas pra ele, apanharia o celular desbloqueado ao passo que a coluna pende no sentido do colchão. Se ofereceria, empinadinha, o rosto vendado seria capturado pelo ângulo da câmera do aparelho e logo atrás da curva da sua bunda, em segundo plano, o Vogrincic também protagonizaria a imagem. “Me come”, pediria, sem receios, “quero gravar você me fodendo e ver depois. Você têm as suas fotos, eu vou ter o meu vídeo.”

A mente de Enzo ferveria, o tesão deixaria o corpo febril. A ereção doeria dentro da calça, a boca salivaria só de pensar no quanto poderia chupar o seu ombro enquanto mete fundo em ti. No fundo, não é somente alguém que observa, é também quem se exibe, quem gosta de ser observado, só precisa de um empurrãozinho.

E a sua determinação por experimentar o faria ceder. O abdômen masculino se revelado diante da filmagem, a pressa em puxar a sua calcinha e por pouco não rasgando a peça. Ao tê-lo dentro de si, nossa, vai entreabrir os lábios, perdendo o fôlego. É bom que tudo será filmado porque a sinfonia dos seus gemidos quebrados junto dos arquejos dele e o som do choque da virilha nas suas nádegas se iguala ao místico. Você estremeceria, balançando conforme o ritmo aumentasse. Tomada, o olhar cerrado do homem mirando o videozinho que se faria naquele instante feito quisesse dominar a sua atenção quando estiver vendo a filmagem mais tarde; quer que saiba como ele é te comendo.

Mas tudo isso na suas fantasias, claro, porque o intuito da musa não é possuir o artista, apenas inspirá-lo.

[elbiotipo]

Yo estoy en el otro extremo total que creo que todo debería ser administrado por el estado de los trabajadores literalmente, pero acá en Argentina hay una tormenta de pelotudez cuando se habla del "gasto" público (de por sí una herramienta de propaganda poniéndolo como un gasto en vez de un deber de todos los países) y se cuestionan cosas que son terriblemente obvias para cualquiera.

"Ay pero la educación pública no es gratis, la pagamos con los impuestos" Y SÍ PELOTUDO. SE PAGAN IMPUESTOS AL ESTADO PARA QUE VUELVAN EN FORMA DE SERVICIOS Y OBRA PÚBLICA. AMIGO ESTO EXISTE DESDE LA ÉPOCA DE LOS SUMERIOS NADA MÁS QUE AHORA EN VEZ DE CONSTRUIR UN ZIGURAT A ISHTAR HACEMOS HOSPITALES Y ESCUELAS. A MÍ ME PARECE BIEN NO S�� A VOS.

(después hablamos del tema que el estado en una democracia legítima no debería existir para tener "ingresos" sino para garantizar el bienestar de la población pero un paso a la vez)

[dramaticadora]

Distância

Nunca pensei que logo eu que não gosto de distância, acabaria me apaixonando por alguém longe de mim, hoje passei por uma loja de roupas e senti o seu cheiro, fiquei alguns minutos parado imaginando você ao meu lado, parecia um estranho parado do nada.

Essa distância entre nós faz com que a minha saudade de você só aumente, junto com a vontade de largar tudo e ir atrás de você. Quem diria que logo eu teria uma conexão assim com alguém, mesmo não te vendo tanto quanto gostaria, meu amor por você só aumenta, nosso amor está em tudo o que fazemos, seja nas ligações de vídeo que seu rosto e seu corpo me dão vontade de sentir pessoalmente, das flores enviadas com desejo do seu cheiro, das garrafas de vinho tão deliciosas quanto o seu beijo, dos mais diversos presentes e mensagens que trocamos, tudo isso só aumenta minha vontade de te ter em meus braços, da conexão dos nossos corpos se tornando um, de nossas almas se ligando.

Gosto de me apegar aos detalhes e são eles que me fazem manter a esperança, é olhar nossas fotos penduradas no mural à minha frente e fazer tudo o que precisa ser feito para construir um futuro incrível para nós. É passar pelos dia mais difíceis e agradecer, porque passamos pela tempestade, de novo e de novo, encontrando calmaria, em uma ilha de sonhos e desejos, somos nós. @dramaticadora escreve sobre distância com @outro-estranho-no-mundo

[interlagosgrl]

🎃 kinktober - day nineteen: massagem com blas polidori.

— aviso: oral m!receiving, penetração vaginal, sexo desprotegido, creampie, blas subzinho.

— word count: 2,7k.

— nota: BLAS SUB GOSTOSO TOMANDO XERECADA.

dias de véspera de entrega de trabalhos eram sempre os piores, na sua opinião. você odiava o frio que ocupava a sua barriga durante todo o dia, assim como os pensamentos fora de ordem, desesperados para serem resolvidos, e as dores musculares intensas que acometiam todo o corpo. sempre fora uma pessoa bem resolvida com os seus trabalhos, mas na arquitetura sempre existiam mudanças de última hora a serem feitas. coisas que o seu cliente gostaria de alterar ou coisas que a empresa não via benefícios em construir. e você sempre fazia hora extra para terminar aquelas tarefas.

naquela sexta-feira em particular, estaria completamente sozinha no escritório se não fosse pelo estagiário. era um garoto novinho e bonito que fazia faculdade de engenharia civil e estava estagiando na sua empresa. você não sabia bem porque ele tivera interesse de ficar depois do horário com você, já que você era uma arquiteta. deduzia que era uma melhor companhia que os homens insuportáveis do setor de engenharia.

seu nome era Blas. era alto, muito inteligente e muito fofo. sempre fazia o que pediam e, ao contrário dos outros estagiários, parecia ser o único que não estava completamente perdido na empresa. sabia o porquê de estar lá e sabia até onde gostaria de chegar e isso era o suficiente para que você aceitasse a ajuda dele no seu projeto.

naquele exato momento, ele estava no fim do corredor buscando café para vocês dois. já sabia que você gostava do seu sem leite e sem açúcar, preto, como viera ao mundo. comprou também um sanduíche natural da máquina de lanchinhos caso você ficasse com fome. sempre fora um menino muito solicito.

Blas te lembrava você quando era apenas uma estagiária. tinha sede de participar de milhões de projeto e dar suas opiniões, mas não podia o fazer, pois era somente uma estagiária. tinha dado a sorte de encontrar uma mentora que a pedia ajuda não só para buscar um cafezinho e desenhar plantas, mas opiniões em seus projetos. ela dizia que não havia nada melhor que um estudante, pois era assim que ela conseguia descobrir o que estava em alta e o que havia caído em desuso. foi assim que você tinha saído de uma mera estagiária para uma contratada da empresa.

e era isso que desejava para Polidori. talvez, se fosse uma boa mentora, ele poderia ter chances de ser contratado pela empresa. seria uma ótima porta de entrada para o mundo da engenharia. e ele com certeza seria uma ótima adição ao time de velhos caquéticos da empresa.

“prontinho. peguei o nosso café.” a voz grossa te fez olhar para cima. encontrou os olhos de Blas, dando um sorrisinho grato assim que ele te entregou o copo de plástico com a bebida quente. “e isso também.”

ele deixou um sanduíche natural do outro lado da mesa, longe das plantas. você agradeceu com um muxoxo, enquanto o convidava para vir mais perto. Blas se aproximou, se abaixando para que pudesse ver a planta melhor.

“você acha que seria possível fazer essa estrutura? o cliente acha que não, mas eu sei que sem isso o projeto ficaria muito diferente.” você olhou para o prédio desenhado na folha. “os engenheiros daqui da empresa também acham que seria melhor retirar isso do projeto, mas eles não fazem nada de inovador desde que entraram aqui. eu só queria que isso fosse possível.”

“depende do material que você usar. nesse caso, você precisaria de um material bastante resiliente e com pouca dilatação.” você encarou o desenho, forçando a mente a se lembrar daquelas propriedades que tinha estudado há muito tempo.

“e qual seria esse material?”

“depende do orçamento que nós temos.” ele te encarou, arrancando um suspiro de você. “existem ótimos materiais, com custo bem elevado. e é esse tipo que eu recomendaria para um projeto desse.”

“você também acha que não vai funcionar, né?” você pegou a borracha e o lápis dispostos pela mesa, conformada que você teria que desenhar um novo projeto.

“eu acho que você pode redesenhar esse projeto e ter outra ideia que não seja tão... cara.” Blas puxou dois banquinhos para perto da mesa, sentando-se ao seu lado. “vamos, eu te ajudo.”

você concordou. mas, antes, decidiu que teria que estar completamente confortável se fosse desenhar aquele maldito projeto do zero. retirou o scarpin que usava, libertando os pés do aperto vil que ele causava. amarrou os cabelos em um coque e colocou os óculos de grau que estavam guardados no fundo da bolsa. Blas assistiu tudo com um sorrisinho no rosto, admirando o quão mulherona você era.

“que foi?” você indagou quando o viu olhando, pegando uma nova folha de papel vegetal para começar o seu desenho.

“nada.” ele disfarçou, olhando para o interior do próprio copo de café. quando percebeu que você ainda o encarava com uma das sobrancelhas erguidas, ele deu de ombros. “é só que durante o dia você parece super malvada e séria. e agora você parece uma adolescente.”

você riu, revirando os olhos. quando o papel estava na sua frente, você começou a rabiscar o projeto inicial.

“não precisa puxar meu saco para eu gostar de você, Blas. eu já gosto.” você confessou. Polidori assistia como as suas mãos desenhavam a planta com tanta facilidade e habilidade, um pouco atraído pelos seus movimentos.

“não estou puxando saco. ‘tô falando a verdade.” Blas terminou o café. não era de puxar saco de ninguém e muito menos pagar simpatia para quem não gostava. talvez esse fosse um dos seus maiores defeitos, já que ele não se humilhava por ninguém. se tivesse um menor autorrespeito, já estaria bem longe na sua carreira.

“sei, sei. faz um favor pra mim e me traz o sanduíche natural que você comprou e pega um relaxante muscular na minha bolsa.” você apontou para a bolsa no chão.

Blas fez o que você pediu. primeiro, pegou o sanduíche natural e te deu em mãos. você comia enquanto desenhava, focada demais para parar e realmente apreciar o que estava comendo. depois, pegou a sua bolsa e a abriu cuidadosamente. dentro dela, diversos itens pessoais mostravam um pouquinho de você. um óculos de sol de marca jogado, diferentes batons das mais diversas cores, um maço de cigarros, um álcool em gel com cheirinho e até mesmo lápis de colorir jogados por todos os cantos. Polidori desbravou as diversas embalagens de remédio até achar um relaxante muscular, entregando para você junto de uma garrafinha de água. você sorriu em gratidão.

“você ‘tá com dor nas costas?” Blas perguntou enquanto você tomava o remédio.

“nas costas, nos ombros, nos braços, em todos os lugares.” você alongou, ainda olhando para o desenho como se tentasse descobrir o que estava faltando. “quando você começar a trabalhar de verdade vai ver que os relaxantes musculares são os melhores amigos dos homens.”

“sabia que quando eu era calouro eu fiz diversas coisas para ganhar horas extras? incluso um curso de massoterapia?” seus olhos saíram do papel, encarando o garoto sentado ao seu lado.

“você sabe fazer massagem? tipo, de verdade?” uma das suas sobrancelhas se ergueu.

Blas, rindo, se levantou novamente e se colocou atrás de você. as mãos grandes foram até os seus ombros e assim que ele a tocou, pôde sentir a tensão dos seus músculos. você se retesou de imediato, mas ele pediu para que você relaxasse. obedecendo, você fechou os olhos e deixou que ele apertasse seus ombros, desfazendo os nós de tensão ali.

“au acho que assim está melhor. o projeto, no caso.” Blas disse, fazendo com que você abrisse os olhos novamente. tinha realizado um rápido esboço da estrutura do prédio em que estavam trabalhando, mudando algumas coisas aqui e ali.

“você acha que assim é mais possível?” ouviu a própria voz perguntar, animada com a ideia. se fosse possível, vocês terminariam mais cedo do que o esperado.

“sim, é mais fácil de escolher um material que funcione nessa estrutura do que na anterior.”

um gemido de satisfação escapou seus lábios. se inclinou para frente para poder terminar o desenho enquanto Blas massageava seus ombros e a sua lombar. ele continuou dando algumas opiniões aqui e ali, evitando que você se empolgasse demais em desenhos surrealistas. Polidori desceu para as suas mãos, massageando a mão esquerda com cuidado enquanto te observava desenhar. quando estavam quase terminando, você percebeu o quão relaxada estava graças às mãos do argentino que tinham trabalhado sem descanso.

“meu Deus, Blas. já pode parar de fazer isso, suas mãos devem estar doendo.” você o puxou pelo braço, fazendo com que ele se sentasse ao seu lado de novo.

“um pouco, mas foi um prazer. acho que o trabalho foi para frente depois que você ficou mais relaxada.”

“obrigada por ter me ajudado.” você o encarou, apoiando o rosto na própria mão. Blas tinha desabotoado alguns botões da camisa social. tinha algumas bolsas de olheira debaixo dos olhos, mas continuava muito bonito. os cachinhos a faziam suspirar cada vez que batia os olhos nele. “eu sei que você não tinha nenhuma obrigação em ficar aqui hoje. mas, você acabou me ajudando muito.”

“eu que agradeço pela oportunidade. acho que consegui exercer mais engenharia com você do que com qualquer engenheiro aqui da empresa.” ele deu de ombros, brincando com um dos botões da camisa. “que eles não escutem isso.”

você riu baixinho. sabia que era um pouco patético uma mulher da sua idade ficar tão bobinha com um garoto que não tinha nem vinte e cinco anos, mas não conseguia evitar. ele era tão bonito e tão inteligente. tinha a conquistado no minuto que as mãos fortes deslizaram pelo seu ombro, levando com elas toda a tensão e toda dor que os seus músculos acumulavam. e estava a tanto tempo sem transar. sentia falta de ir para a cama com alguém e esquecer todos os problemas do trabalho. se Blas quisesse, você ensinaria para ele muito mais do que engenharia e arquitetura.

lentamente, seu corpo se inclinou para o lado. você puxou o garoto pela camisa, aproximando seu rosto do dele. fez tudo bem lentamente para que ele pudesse rejeitá-la caso sentisse vontade, mas isso não aconteceu. pelo contrário, ele colocou uma das mãos na sua coxa e a outra na cintura, a puxando para ele. quando seus lábios se encontraram, você sentiu o seu próprio sexo derreter em calor.

as mãos fortes a mantiveram firme, enquanto a língua macia resvalava sobre a sua com cuidado, saboreando a sua boca com calma. seus dedos se emaranharam nos cachinhos bem cuidados, puxando os cabelos dele para trás. deslizou a ponta das unhas pela nuca do garoto e sentiu que o tinha feito arrepiar. findando o beijo com uma mordida no lábio inferior dele, levou os lábios até o pescoço do argentino, maltratando aquela região com chupões e mordidas. os suspiros e gemidos baixos foram o suficiente para você decidir que não aguentaria esperar. teriam que fazer aquilo ali.

suas mãos deslizaram pelo peitoral dele, passando pelo abdome até chegar nas coxas. as pernas de Blas estavam abertas e você deslizou os dedos por toda a extensão de ambas as coxas até chegar no membro já ereto. a calça social, a esta altura muito desconfortável, foi desabotoada com rapidez. a destra puxou a cueca boxer preta para baixo, expondo o pau grande e grossinho, assim como você havia imaginado.

“se você quiser parar, nós paramos.” você o avisou, o encarando profundamente nos olhos.

“com todo respeito, a última coisa que eu quero é parar.” ele sorriu, fazendo com que você sorrisse também.

ajoelhou-se na frente do garoto, masturbando o membro ereto com movimentos de vai e vem. suas mãos eram quentes e habilidosas, o que fazia Blas segurar o banquinho com ambas as mãos. não queria mostrar o quão sensibilizado estava, mas você era muito experiente e tornava a tarefa muito difícil. cada movimento seu era certeiro e o fazia sentir coisas que ele nunca imaginou ser capaz de sentir. brincou com a glande na palma da mão, deslizou as mãos por toda a extensão com muito cuidado e também brincou um pouco com as bolas antes de colocar o pau dele na boca.

quando a cavidade oral quentinha envolveu o membro extenso, Blas fechou os olhos e aproveitou a sensação gostosa. ousou segurar os seus cabelos, os ordenando em um rabo de cavalo bagunçado, empurrando a sua cabeça contra o próprio membro. você deu o seu melhor tentando engolir tudo que podia, mas ele era grande demais para a sua boca. de todo jeito, Polidori pode sentir a cabecinha atingindo a sua garganta, o que o fez gemer alto.

“porra, você é tão boa nisso.” ele elogiou, encontrando seus olhos enquanto você o mamava. “eu posso foder a sua boca?”

você achou tão bonitinho o pedido que não teve como não concordar. autorizou que ele fizesse o que bem quisesse com você e quando ele começou a investir o quadril contra a sua boca, você teve que fechar as mãos para evitar os engasgos que a acometiam toda hora. no entanto, Blas parecia gostar daquela parte em particular, pois era quando ele gemia e empurrava ainda mais o membro contra a sua boca.

quando estava próximo ao seu ápice, ele retirou o membro da sua boca e te colocou de pé. capturou seus lábios novamente em um beijo terno, enquanto as mãos desabotoavam as suas calças de alfaiataria. quando os dedos grandes puxaram a sua calcinha para baixo, você não deixou de se arrepiar. sentia-se como uma adolescente novamente.

Blas empurrou as plantas e os lápis para o chão, colocando você deitada sobre a mesa. era a altura ideal para que ele conseguisse penetrá-la e ainda sim olhar para o seu rosto. se colocando entre as suas pernas, ele desabotoou casa por casa da sua blusa social, a retirando junto do sutiã que você usava. estava completamente nua no seu próprio escritório.

quando ele se posicionou na sua entrada, você o puxou pela camisa para que ele se inclinasse sobre você. enrolou as pernas na cintura dele e gemeu arrastado no ouvido do mais novo quando ele deslizou para dentro. o corpo do garoto estremeceu quando adentrou o seu canal apertado, um palavrão saindo da boca dele enquanto deslizava para dentro e para fora de você.

“você é realmente bom em tudo que faz, Blas.” você comentou, arrancando um sorriso orgulhoso do garoto.

Blas determinou um ritmo gostoso para as investidas, indo fundo entre suas paredes. a sensação gostosa do nó sendo desatado no seu baixo ventre era suficiente para fazer você gemer o nome dele, segurando os cachinhos com força enquanto os olhos permaneciam fixos nos dele. vocês estavam tão próximos que os seus gemidos se misturavam um ao outro, assim como suas respirações.

seu peito subia e descia, uma trilha de suor descia pela nuca e pelo vale dos seios, o prazer a invadia a cada estocada e você não conseguia resistir à vontade de beijá-lo mais uma vez. ao unir ambos os lábios cheios de paixão e luxúria, foi como se autorizasse seu corpo a relaxar e atingir o seu orgasmo. com um gemido abafado pela boca do argentino, você se desfez no membro dele, sentindo o corpo aquecer imediatamente após o seu término.

Blas, que estava lutando para se manter firme, atingiu o próprio ápice logo depois de você. se desfez no seu interior, o corpo arquejando e as mãos segurando os seus braços com força, como que se quisessem impedir que você saísse do meio dele. com algumas últimas investidas, ele deixou que o corpo desabasse sobre o seu. você não resistiu, abraçando o corpo maior com carinho, mergulhando o rosto nos cachinhos tão amados.

[...]

tinha usado uma grande quantidade de maquiagem para disfarçar as olheiras profundas que a noite anterior tinham causado. apesar disso, estava mais feliz e relaxada do que nunca. tinha terminado os desenhos da planta e a apresentação do projeto e, finalmente, estava contente com o resultado.

a maioria da equipe já havia chegado para a reunião e você não evitou a socialização que acontecia na salinha do café antes de entrarem para a sala de conferências. alguns dos outros engenheiros, arquitetos e assistentes estavam por lá.

“na minha época não existia essa safadeza.” um dos engenheiros comentou.

“se eu aparecesse assim no meu trabalho, eu era demitido.” o outro concordou, enquanto lia o jornal.

“o que aconteceu?” você quis saber, servindo um pouco de café em um copo de plástico.

“um dos estagiários chegou cheio de mordidas no pescoço.” o primeiro homem voltou a comentar, indignado. “um absurdo.”

“realmente... um absurdo.” você concordou.

[soyelmorse]

Hola! 8 minutos tarde pero les prometí el capitulo 7 y aquí está! 😘, antes de darles el capitulo, aclararé que en el siguiente capítulo abra escenas subidas de tono (+18) Entre Pomni y Ragatha.

Sin mas que decir, la imagen no es mía, la saqué de pinterest, el autor de la imagen creo que está en la misma imagen con la marca de Agua y Disfruten el Capítulo.

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Kinger: Y ahora que hacemos?

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*Kinger termino de atacar a Gummigoo*

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Caine: No podemos dejarlo ir así de simple, oh, espera está es la oportunidad perfecta, en cuanto despierte le haremos varias preguntas para saber si está cuerdo

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Kinger: De acuerdo, que hacemos mientras tanto?

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Caine: uno de nosotros debe quedarse para hacerle las preguntas, así que me quedaré yo, ve y unete al resto y trata de hacer plática para que no noten la ausencia de este lagarto humano

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Kinger: Creo que es mejor que vayas tu, yo me quedaré, eres mucho más carismático que yo y sabrás que decir, apenas el despierte te llamaré de acuerdo?

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Caine: De acuerdo

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*Caine se despidió de Kinger y salió de área del cuarto de control, se dirigió a donde se encontraban los Chad y Max y empezó a darles la bienvenida y llevarlos a recorrer el lugar*

*Mientras tanto, Zooble y Gangle estaban revisando las marionetas de la Princesa Lu y ella conversaba con Pomni y Ragatha*

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Ragatha: Y como fue que lograste crearlas a tus súbditos?

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*Ragatha Le pregunté mientras se dirigían al centró del circo para comer unos helados*

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Princesa lu: Fue extraño la verdad, recuerdo que una noche estaba descansando en la cama pensando en como dormir, cuando derrepente me pareció ver algo asi como nieve, cuaso sali no vi nada de eso, pero el suelo estaba cubierto por cenizas, creo que siempre habia estado asi pero no me habia dado cuenta.

Después, agarre las cenizas y empecé a moldearlas, pensé en lo que quería y poco a poco sin darme cuenta había creado algo, no recuerdo exactamente en este momento que era Pero recuerdo que después de eso empecé a construir el castillo

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Pomni: Y porque no intentaste crear una salida?

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Princesa Lu: hm... Salida? Creo que hace tiempo intenté hacerlo. Recurso que lo anoté en mi diario pero este se perdió, un sujeto extraño me lo robo y-

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*Mientras hablaban, Observaron como Jax sacaba varios helados y se colocaba algo en los ojos y oidos para no ver o escuchar algo*

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Ragatha: Ignóralo el siempre es así

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Princesa Lu: De acuerdo, como te decía, un sujeto extraño robo mi diario, creo que algún momento lo conocí o algo así Pero todo eso lo anoté allí

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*Pomni busco varios helados y luego regreso con las chicas*

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Pomni: y realmente no Recuerda algo?

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Ragatha: a qué te refieres Pomni?

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Pomni: No lo se, ver una puerta, un portal, algo que no pareciera normal

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Princesa Lu: oh! El valle vacío, eso definitivamente no era normal

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Ragatha: Valle vacío?

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*Mientras que las chicas hablaban, Jax se quitó uno de sus bloqueadores de sonido y escucho disimuladamente*

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Princesa Lu: un día, envié a mis súbditos a explorar y uno de ellos me contó hacer a del valle vacío, era un lugar donde los árboles que nos rodean se terminaba y que todo era tan plano y blanco que no podías diferenciar el cuello y la tierra.

Tal vez en ese lugar misterioso este lo que buscas

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Ragatha: Jaja...

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*Ragatha rio nerviosamente*

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Ragatha: No lo creo, más bien parece algo como...

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Pomni: el límite del mapa...

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Princesa Lu: Límite del mapa?

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Pomni: No es nada

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Princesa Lu: Bien, gracias por el helado, iré a ver a sus compañeras ya mis súbditos ok?

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Pomni: Ok

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Ragatha: Gracias por charlar con nosotros!

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*Pomni y Ragatha despidieron a la princesa Lu cuando está no las escuchaba hablaron*

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Ragatha: tu que opinas Pomni De ese tal valle vacío?

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Pomni: tenemos que verlo primero, Pero más o menos tengo una idea

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Ragatha: De que se trata?

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Pomni: Si es cierto que es algo así como el límite del mapa, Nosotros debemos estar en alguna parte de este, así que necesitamos ver cómo se cierra este límite

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Ragatha: claro, entiendo, si estamos en un círculo, al llegar al límite, podemos volver en una sola linea recta y mas temprano que tarde llegaremos al centro, dónde probablemente haya una pista

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Pomni: Si, supongo que tendremos que esperar y-

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Ragatha: Esperar?

*Ragatha interrumpió a Pomni y llamo la atención de Caine, quien le estaba enseñando la entrada al salon de pinball a Chad y Máx*

Caine!

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Caine: Si!?

*Saludé a las chicas*

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Ragatha: Pomni y yo saldremos un rato ok!?

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Caine: De acuerdo! Pero no sé olviden llevar sus bubbles, el las ayudara a regresar por si se pierden!

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Ragatha: De acuerdo!!

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*Ragatha dejo de gritar y miro a pomni emocionada*

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Ragatha: andando Pomni! Tenemos que encontrar esa pista cuánto antes!

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*Ragatha se llevó a Pomni de la mano y rápidamente se prepararon para salir*

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Jax: ... Je, ilusas...

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*Jax se quito la venda que tenía en los ojos y fue a agarrar otro helado, sin embargo a lo lejos ví que algo se cayo y se dio cuenta de que era ese sujeto extraño*

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Jax: Que rayos está haciéndo?

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*Jax se dió cuenta de que este había descubierto la habitación secreta que el había hecho, rápidamente dejo a su bubble en la mesa sin activarlo y se dirigo disimuladamente hacia la habitación que el había ocultado*

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Jax: Que crees que haces idiota!

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*Jax confronto a Fudge*

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Fudge: Nos volveremos a ver Jax!

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Jax: Que? No te conozco, y más te vale salir de aquí, este lugar es privado

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Fudge: De seguro que si, pero no te preocupes, no le revelaré a nadie tu pequeño secreto, apuesto que nadie sabe que tú eres quien tiene la llave para salir de aquí, o me equivoco?...

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*Fudge saco la llave que Jax estaba ocultado*

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Jax: Como sabes lo de la llave?

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*Me pare en frente de el listo para pelear*

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Fudge: Porque yo estuve allí, y te Vi cuando escavaste el lugar donde todos nosotros aparecemos, también lo hice una vez te hiciste, pero solo encontré una puerta en el suelo la cual no pude abrir, y sospecho que está llave es para eso...

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Jax: je, lo lamento amigo, pero nadie me quitará mi diversión...

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Fudge: Lo suponía, Por eso vine preparado...

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*Cuando Jax dió un paso más, jalo un hilo y 2 columnas pesadas cayeron sobre Jax*

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Continuará :D

[myillicitaffair]

Strawberries & cigarettes | Esteban Kukuriczka

Sumario: llamar a tu ex en la mitad de la noche jamás podrá ser buena idea, a menos de que se trate de él, claro.

Advertencias: sexo explícito (+18), masturbación, dirty talking, degradación, cigarrillos y engaños.

Créditos: el fic está basado en la canción de troye sivan y las fotos utilizadas para el collage las saqué de pinterest.

Nota del autor: este mi primer request, gracias por pedirlo, amoor xx

2k words

La ciudad se alza orgullosa frente a mis ojos, los edificios brillando en todo su esplendor. Un limitado arsenal de vehículos se pasea por las calles; desplegada en una silla de mimbre, me pregunto su destino.

¿A dónde se dirigen a las 2 de la mañana?

La bulliciosa metrópoli parece tomarse un respiro a estas horas de la madrugada, logrando, por consiguiente, relajar a los escasos espectadores de su tranquilidad.

Jugueteo con el cigarrillo entre mis dedos, notándolo desperdigarse gracias a la brisa otoñal. Es un mal hábito, lo sé, pero es de los pocos resabios de su presencia que aún conservo, una de las pocas garantías que aseveran su paso por mi vida.

Lo introduzco en mi boca, inhalando el humo profundamente para luego exhalarlo. Degusto sus notas amargas en mis papilas gustativas, como casi saboreando sus labios…

Esteban y yo habíamos terminado en buenos términos; él vivía en capital y yo demasiado lejos, ahí fue cuando descubrimos que la relación a distancia simplemente no funcionaba para nosotros.

Después su carrera como actor despegó, yo senté cabeza con un viejo novio de la infancia- inofensivo, predecible- y en nuestras vidas ya no cabía lugar para el otro. Incluso ahora, cohabitando en la misma ciudad, nuestros rumbos se habían desviado del otro.

Tecleo los números de su teléfono de memoria, grabados a fuego en mi retina.

Soy perfectamente consciente de las horribles consecuencias que mis acciones podrían conllevar, pero nada de eso cobra importancia cuando la línea se interrumpe con su contestación, su voz dormida aguardando al otro lado de la llamada.

“¿Hola?”- Vocifera, ronco y un tanto desorientado.

Mi pulso se desestabiliza al escucharlo hablar luego de tanto tiempo, recordando de golpe los matices en su tono. Me lo imagino tumbado en su recámara, durmiendo en posición fetal, como siempre, la almohada abrazada entre su fuerte contextura.

“¿Tebi, te desperté?”- Mi respuesta se oye torpe ante el nerviosismo. ¡Es la madrugada, claro que lo desperté!

“Nena, ¿sos vos?”- Pregunta, esta vez un tanto más despierto y despabilado.

Aquel viejo apodo se desliza por sus labios sin siquiera notarlo, sin causarle ningún esfuerzo. Sin embargo, a mi me destruye, me obliga a rebobinar el tiempo y fundirme en los agridulces recuerdos.

“¡Si! Perdón que te llame tan tarde”- Me disculpo atropelladamente, de pasada nada más- “Yo se que no hablamos hace meses.”

Me arrepiento de mis palabras en el segundo en el que las formulo, mis miedos se solidifican ante mis ojos; el temor a parecer necesitada, débil, obsesiva incluso.

Más allá de ello, se que fue la decisión correcta. Es en noches como estas, solitarias y sin una estrella parpadeando en el cielo, en que más extraño su luz, la que jamás fallaba en brindar sin pretensiones.

Un par de lagrimas fugaces atentan mis mejillas, derrumbando por completo el sereno revestimiento que tanto me esforcé en construir.

“¿Estás bien? ¿Qué pasó?”- Cuestiona, todo en su actitud delatando una reciente preocupación. Puedo oír el rechinar de las bases de su cama, evidenciando su brusca reacción, la fricción contra las sábanas al enderezar su espalda.

“Si si, pero ¿Podes pasarte por casa?”- Propongo, más temblorosa de lo que me gustaría.

Agradezco el soporte que el asiento me proporciona, tal vez sin este, mis piernas hubiesen cedido ante la ansiedad.

Espero paciente al otro lado de la convocatoria, siendo testigo de su respiración acompasada, como sopesando mis palabras.

“Estoy allá en 15 minutos, máximo.”- Confirma, irguiéndose para emprender camino.

“Esteban”- Llamo su atención, provocando que sus extremidades se aquieten- “Muchas gracias…”

Una sonrisa brota de su expresión, dándole lugar a una leve risa, que escucho desde la quietud de mi balcón. Sin notarlo, mis comisuras imitan su gesto.

“No hay de qué, chiquita, ¡esperame que ya llego!”- Asegura, dando por concluida la comunicación.

Un poco más distendida, permanezco quieta en mi lugar, moviendo mis anestesiados dedos solo para fumar pausadamente.

Una pequeña expectativa comienza a burbujear en mi interior; con la simple idea de volver a estar en su presencia, mi corazón descontrolado golpetea mi caja torácica, como tratando de huir de sus confinamientos.

¿Cuánto tiempo habré permanecido así? Genuinamente, no lo sé, pero lo suficiente para que él arribe.

Mis ensoñaciones se ven interrumpidas por el timbre resonando en mi departamento, generando temblores en toda la superficie.

Salto de mi butaca impacientemente, avanzando con agilidad hasta el recibidor. Del otro lado de la puerta, lo descubro enfrentándome, jugueteando con las llaves entre sus dedos. Sus orbes se pasean por mi persona presurosamente, por lo que autorizo a los propios a hacer lo mismo.

A pesar de nuestro breve tiempo separados, él permaneció prácticamente intocado; su postura relajada, sus cabellos alocados y desparramados en todas direcciones… “tal vez dejó crecerse la barba”, filosofo al chequearlo.

Sin más premeditaciones, me arrojo a sus brazos entreabiertos, los cuales me reciben gustosamente. Escondo mi nariz en su cuello, inhalando aquella familiar fragancia, perdiéndome en su calor corporal engulléndome por completo. Se toma la libertad de posar su pera contra la corona de mi cabeza.

Contra mis propios deseos, me despego de su torso, alejándome levemente para guiarlo adentro. Estiro mi mano, aguardando que la tome para adentrarnos en el living.

Una vez allí, esquivo la pequeña mesa ratona para dirigirlo hacia el sillón, donde se sienta sin mediar palabra.

Allí, parada en la sala de estar, mis pensamientos giran en su torno, envalentonándose con cada segundo que transcurre. Por un impulso indescifrable, me apropincuo a su espacio personal, rompiendo dicha barrera.

Acomodo mis piernas de modo que las suyas queden entre medio, para luego sentarme sobre sus templados muslos, regodeándome en la sensación de su contacto físico. Mi boca busca la suya en un movimiento desesperado, moviendo mis labios contra los suyos con una inesperada urgencia.

Me inunda la decepción al sentirlo separar nuestros rostros. La confusión tiñe su semblante, mientras investiga la escena que se le presenta.

“¿Y tu novio?”- Consulta, penetrándome con el fulgor de su mirada.

Abrazo su nuca entre mis brazos, atrayéndolo nuevamente hacia mí. Una mano se desliza hasta juguetear con el cuello de su remera, señalizando mi deseo de arrancársela.

“No está en casa”- Ronroneo en su oído, serpenteando mis manos por sus hombros con delicadeza- “No pienses en él, amor, concéntrate en mí.”

Comienzo a despilfarrar besos por su cuello, succionando su sensible piel hasta dejar marcas, clavándole los dientes juguetonamente para luego chupar el escozor. Saboreo su colonia en mi lengua y me encuentro adicta a su sabor amaderado, incapaz de separarme. Una necesidad primal se cuece en mi interior al presenciar su tez brillante con mi saliva.

“Esto está mal, nena”- Gime profundamente, echando su cabeza hacia atrás y concediéndome más acceso.

Me cuelo entre nuestras siluetas, acariciando su agitado abdomen, el cual se estremece ante mi toque. Batallo con el botón de su pantalón hasta desabrocharlo, sin parafernalias desciendo el cierre y descanso mi palma en su entrepierna.

“Decime que queres parar y yo lo hago”- Respiro, sobre la ardiente piel de sus hombros. Aún estática sobre su ropa interior.

“Sabes que no te voy a pedir que pares”- Murmura pesadamente, levantando sus caderas hasta rozarse con mis dedos. Evacua un sollozo de alivio.

Como cobrando vida, deslizo mis yemas por su longitud, generando una creciente erección. Masturbo su miembro sobre el calzoncillo a un ritmo agonizantemente lento.

“Entonces no te niegues, Tebi”- Respondo, inmiscuyéndome en la tela para palparlo piel a piel y acelerar mis atenciones.

Sus gemidos llenan el aire, complaciéndome de sobre manera y excitándome más de lo que creía posible. Buscando desesperadamente calmar el ardor, me froto contra la tela del pantalón, escasas barreras separándolo de mi centro.

Sus músculos se tensan bajo mi coño, devolviéndome placer al golpear mi clítoris al unísono de mis caricias en su polla. Mis labios se entreabren ante la fricción, escurriendo murmullos de regocijo por mis cuerdas vocales.

“Al final, que puta que resultaste”- Se burla cínicamente, enjaulando mi cintura en su agarre para presionarme más contra él.

Subo el volumen de mis quejidos ante la nueva intensidad de sus acciones, la degradación dejándome sin raciocinio. Mi torso completamente presionado contra el suyo, mis manos aún tocándolo deprisa.

Utilizando su fuerza, me recuesta en el sillón y se despega de mí, sentándose en el otro costado de este.

“Quiero que me muestres como te estuviste tocando, pensando en mí, mientras tu noviecito dormía a tu lado”- Demanda, su vista fija en mi mientras comienza a palparse.

“Mi amor, por favor”- Ruego, un tanto agobiada ante las llamaradas quemando mi vientre bajo.

Observo sus movimientos con atención, como sus yemas rozan su glande perezosamente, excitándose aún más. Una gota de sudor descendiendo por su cuello ante el esfuerzo físico, escondiéndose bajo su camiseta de algodón.

Bajo mis shorts aun observando la imagen frente a mí, aventándolos al suelo junto con mi blusa. Recubierta únicamente por mi ropa interior, asciendo hasta mi busto, pellizcando mis pezones hasta formar duros picos entre mis dedos. Sus penetrantes orbes persiguen cada uno de mis movimientos, sintonizando los suyos para que ambos nos movamos al mismo ritmo.

“Tu noviecito no te sabe satisfacer, por eso tuviste que llamarme, ¿o no?”- Se mofa al presenciar la impaciencia que me consume, como me apresuro a infiltrarme por mis bragas para sobar mi punto mas sensible con urgencia.

“Nadie me coge como vos, Tebi…”- Susurro, extraviada ante el renovado éxtasis.

Fantaseo con su toque entre mis labios, desparramando mi humedad, saboreándola desenfadadamente, con los ojos cerrados y la lengua paseándose por sus propios dígitos.

Sin embargo, debo conformarme con la mediocridad de la autovalidez, hasta que decida tomar piedad de mis intentos en vano de remplazar sus atenciones.

“No doy más, necesito que te corras conmigo, mi amor”- Pide al sentir su orgasmo aproximarse, ahora follando su propio puño con premura.

Al ver su estado de frenesí descontrolado, decido avivar mis caricias a mis zonas intimas, introduciendo mis dedos en mi apretado agujero hasta notar que mi estomago empieza a tensarse.

El ambiente transluce nuestros inminentes apogeos con los suspiros que desangran nuestras gargantas, el sucio sonido de humedad encontrada por extremidades y suplicas al aire, con un destinatario en concreto.

Acerca su temblorosa complexión a la mía, atisbando mi muñeca moverse al compás de los bombeos en su longitud y arrimándose a mis piernas abiertas. Ante un sollozo particularmente estridente de su parte, despierto de mi ensimismamiento y lo acerco a partir de sus caderas en erráticos movimientos.

“Encima de mí, por favor, ¡correte encima de mí!”- Imploro, aturdida por las oleadas de placer poseyéndome por completo.

Suelta un grave gruñido seguido de improperios al momento de llegar a la culminación de la satisfacción, depositando cuerdas infinitas de semen blanco sobre mi meciente pecho. Su excitación comienza a chorrear por mi vientre, agrupándose en mi ombligo para continuar su descenso pausado.

Con tal candencia rodeando los actos desplegados, logro abandonarme al pasmo de la conclusión con un arrollador orgasmo; mi coño apretando mis propios dedos, deseando que se aniden allí, mi cuerpo gozando violentos espasmos, mi visión jamás partiendo de las farolas apuntadas en mi dirección.

“Muy bien, chiquita, siempre tan obediente para mi”- Me alaga, estirando sus yemas para recoger unas resbalantes gotas de semen y empotrarlas en mi boca entreabierta, indicándome tácitamente mis propias acciones.

Mi lengua recorre cada uno de sus surcos y recovecos, aspirando casi instantáneamente su salada carga, como si de un codiciado elixir se tratase.

“Ahora vas a dejar que te coja hasta que no puedas ni caminar, hasta que te olvides incluso de su nombre ¿si bebita?”- Propone sin remover sus dígitos de mi cavidad, sus crudas palabras contrastando con la suavidad de sus manos en mí.

Asiento frenéticamente, ahuecando mis mejillas para lograr tomarlo aún más profundo, notando un estremecimiento recorrer mi medula espinal ante la anticipación de una larga noche de pasión.

Aclarar que cumplió con sus promesas al pie de la letra sería, francamente, caer en un vago eufemismo…

[escassa]

E se perguntassem o que vem a ser o certo, Gabriela olharia com a cabeça torta como a de um cachorro quando parece não compreender o que se passa. O olhar de repente vidrado de quem tem sede de entender as coisas que acontecem ao redor. Ela não sabia amar, talvez. Então mais um amor havia ido embora, mais um amor havia chegado ao fim. Nessa imensa individualidade onde ninguém podia entristecê-la sempre cresciam espinhos. Espinhos para machucar aqueles que a machucavam, então assim não a tocavam. Não tocava porque o medo da mágoa não deixava que lhe tocassem, ou então havia medo porque não haviam tocado fundo o suficiente para que o medo não existisse. Que triste então estava sendo, mas Gabriela parecia acostumada. Acostumada e fria porque depois de tantas lágrimas, ela finalmente parecia ter secado. A maquiagem borrada em volta dos olhos tinha sido limpa na noite anterior. Quando Antônio e ela se encontraram; ela parecia inteira. Inteira porque não tinha ficado nada dela para trás. Seus olhos eram de desilusão, de cansaço. Cansada de construir sonhos, planos, fantasias. E depois da desilusão ter de destruir uma a uma, como se nada daquilo tivesse um dia existido, só para olhar para trás e não sentir nada do que sentira antes. Era mais um fim doído, choroso, arrastado. Fosse o ponto final sua última lágrima de dor, já havia então sido decretado. Decretado num discurso mudo, num adeus em silêncio. Dito através de tudo daquilo que não havia sido falado. Antônio não parecia prestes a dizer nada. Gabriela não diria; se pudesse escolher, teria ficado calada, mas lhe escapou: “Meu coração tá ferido de amar errado. De amar demais, de querer demais, de viver demais. Amar, querer e viver tanto que tudo o mais em volta parece pouco. Seu amor, comparado ao meu, é pouco. Muito pouco. Mas você não vê. Não vê, não enxerga, não sente. Não sente porque não me faz sentir, não enxerga porque não quer. A mulher louca que sempre fui por você, e que mesmo tão cheia de defeitos sempre foi sua. Sempre fui só sua. Sempre quis ser só sua. Sempre te quis só meu. E você, cego de orgulho bobo, surdo de estupidez, nunca notou. Nunca notou que mulheres como eu não são fáceis de se ter; são como flores difíceis de cultivar. Flores que você precisa sempre cuidar, mas que homens que gostam de praticidade não conseguem. Homens que gostam das coisas simples. Eu não sou simples, nunca fui. Mas sempre quis ser sua. Você, meu homem, é que não soube cuidar. E nessa de cuidar, vou cuidar de mim. De mim, do meu coração e dessa minha mania de amar demais, de querer demais, de esperar demais. Dessa minha mania tão boba de amar errado. Seja feliz.”.

Caio Fernando Abreu

[bxsunnie]

mark lee x afab!reader

Seu marido sabia muito bem te recepcionar depois de um longo dia.

796 palavras

Gênero: fluffy (com direito à chameguinho antes de dormir e planos de construir uma família)

n/a: eu literalmente acabei de chegar em casa e tô morta, e isso simplesmente veio na minha cabeça, tudo que eu queria era um Mark pra ficar de chamego e dormir coladinhos buaaaaaa 😭😭😭 não revisei, estou caindo de sono, perdão se houver algum erro e boa leitura!

— Achei que já estivesse dormindo… — você fala baixinho, mesmo que a única pessoa que poderia acordar estava bem ali na cama, te olhando com um sorriso meigo.

Você havia acabado de chegar em casa, tinha sido mais uma das ‘noites das garotas’. Todo mês você e suas amigas marcavam se sair para um barzinho, e esse sábado foi o dia da vez; por infelizmente ter surgido um imprevisto no trabalho durante o dia, acabou que você não passou muito tempo com Mark. Vocês se viram de manhã, antes de você sair, e quando você chegou em casa, já indo se arrumar para sair novamente.

Mark se levanta enquanto você tira os sapatos, seus pés imediatamente agradeceram pelo alívio, e te ajudou a tirar o casaco, deixando um beijinho em seu ombro exposto.

— Tava te esperando, fiz janta, caso esteja com fome. Quer que eu prepare a banheira? Seu dia foi cheio… — respondeu enquanto passava os braços ao redor de sua cintura.

— O que eu fiz para merecer um marido assim? — sorri bobinha, apoiando a cabeça no peito alheio — E estarei aceitando esse banho, acho que é tudo que preciso agora.

Vocês trocam mais alguns chamegos antes de se separarem, você seguindo para a cozinha e ele para o banheiro da suíte. Depois de devidamente alimentada e de banho tomado, você apenas pega uma das blusas de Mark que acabaram virando pijama, e engatinha até o seu lado da cama. Por conta da presença do homem ali, os lençóis estavam bem quentinhos e confortáveis, com o cheirinho de amaciante e daquela linha de loções que ele passava antes de dormir.

Ao se esgueirar para baixo da coberta, sentiu o braço forte rodeando seu corpo e lhe puxando para mais perto. Você deitou a cabeça no peitoral dele e lhe abraçou, passando sua perna por cima das dele.

— Como foi o seu dia? — pergunta, colocando a mão por dentro da blusa dele para acariciar o abdômen, sentindo a pele quente e macia sobre os seus dígitos.

— Depois que cheguei da academia eu assisti alguns episódios de One Piece e depois fui fazer almoço. Durante a tarde eu encontrei com o Donghyuk e a gente foi em um parque com a Subin, toda vez que eu vejo aquela garota parece que ela tá maior. — ele ri baixo enquanto lhe fazia cafuné e relembrava sobre o dia com a filha do amigo.

— Ela é uma graça, e é incrível como é a cópia dele, eu ficaria com ciúme se fosse a mãe. Se a nossa filha não tiver nada meu depois de eu carregar por nove meses na minha barriga, eu vou ficar desolada! — acompanha a risada dele e levanta o rosto para poder apreciar o sorriso que tanto amava.

Os olhos escuros encontraram os seus, e ambos sabiam que nada precisava ser dito para que soubessem o que estavam sentindo naquele momento. Acompanhar de perto o crescimento de Subin engatilhou uma baby fever em vocês dois, e há alguns meses, depois de muito conversar sobre isso, vocês finalmente concordaram que estavam prontos para iniciar sua própria família, e desde então você estava frequentando médicos e se preparando para uma gravidez.

Observar a forma como Mark era um tio extremamente babão e carinhoso com a sobrinha só lhe fazia ter mais certeza de que ele seria um ótimo pai, e ele não poderia estar mais empolgado e feliz com aquilo.

— Tenho certeza que ele ou ela vai ser uma mistura perfeita de nós dois, nosso bebê vai ser tão lindo e talentoso quanto você.

Ele se inclina para deixar um selar em seus lábios e você sorri satisfeita com a imagem que lhe veio na cabeça.

— Você ainda vai me achar linda quando eu estiver uma bolinha, com os pés inchados e o humor péssimo?

— Claro que vou, você é adorável e linda de qualquer jeito, apesar de que não é só por isso que eu te amo. E faz parte do processo, não é? Eu não vou sair do seu lado em momento algum, até o fim da minha vida. — você faz bico, mexida pelas palavras dele — E pode ter certeza que quando eu estiver longe, eu ainda estarei pensando em você.

Declarações eram rotineiras entre vocês, era difícil se recordar de algum dia em que ele não dizia um “eu te amo”, e estava sempre lhe fazendo se sentir especial e te lembrando o motivo de ter se casado com esse homem incrível.

— Eu te amo, sabia? — você murmurou, toda manhosa, e afundou o rosto no vão do pescoço dele, inalando profundidade o cheiro gostoso e familiar que exalava de sua pele.

— Sim, mas eu adoro escutar você dizer. Eu também te amo, muito muito. — um beijo foi deixado no topo de sua cabeça — Agora vamos dormir, você precisa descansar.

[caostalgia]

Mi corazón se encuentra perdido, no se si lo deje guardado en el recuerdo de su mirada o si estará oculto entre las palabras.

Mi mente divaga entre esto y aquello, buscando una brújula que lo dirija, y mientras todo sucede el día se acaba y el tiempo se pasa.

Una vez más las horas se sienten insípidas, construyó castillos de arena y vivo una vida de papel.

El suelo que me sostiene se siente apunto de romper y ni si quiera tengo lágrimas que ofrecer.

Oh vida! Amada mía, dime cómo complacer, este espíritu atolondrado que no ve, que todo lo tiene y aún así no sabe que hacer de el.

Siento como si el tiempo del día no alcanzará para nada. Quiero construir un sueño fuera de mi cabeza, pero parece certeza que solo soy un títere de ilusiones hecho para crear nada.

Desperdicio mi vida como si está no acabara, me siento aprisionado en un juego y una mala pasada.

Nunca quiero estar en ningún lugar, mi mente no se queda en ningún momento. Mi alma grita por ser liberada, pero sale y no haya nada.

Tengo a flor de piel los sentidos y sentimientos atentos ante este mundo cruel y violento.

Los buenos momentos se me escapan como llenando un roto cuenco.

Me enemisto con el tiempo, quiero que esté pare o se acabe, que no me controle ni me devore. Que está vida de verdad se sienta mia, que el cuerpo obedezca y la mente no ensordezca.

Quiero que parezca que la vida tiene sentido y yo en este cuerpo mío me sienta vivo.

-brokencat

[projetovelhopoema]

Palavras... Essas pequenas junções que quando unidas têm o poder de construir pontes ou erguer muros, salvar ou matar. São elas que traduzem o que sentimos, o que pensamos e o que somos. Mas há quem as use como quem espalha pó ao vento, sem peso, sem cor, sem alma. Palavras vazias e desprovidas de essência são como ecos de uma voz que nunca existiu, reverberando em um vazio que nada preenche. Eu nunca fui uma pessoa de palavras vazias, as minhas sempre foram cheias... De sentimentos, de significados, de demonstrações. Em cada frase, em cada sílaba e em cada grito silencioso que dei ao escrever, carreguei comigo uma parte do que sou, do que sinto, do que acredito. Minhas palavras não são apenas sons articulados, são confissões de uma alma que se recusa a ser superficial, que anseia por ser compreendida em sua profundidade. E ainda assim me vejo cercado por discursos vazios, promessas que nunca encontraram abrigo na verdade, elogios desprovidos de sinceridade, consolos que não aquecem. Essas palavras flutuam, sem direção, sem raiz, desaparecendo tão rápido quanto surgiram. Elas não deixam marcas, não tocam o coração, não fazem história. A diferença entre as palavras vazias e as palavras cheias é a mesma que separa uma folha morta levada pelo vento, de uma árvore que se firma no solo. As primeiras se perdem, as últimas permanecem. As palavras cheias têm peso e esse peso vem dos sentimentos que ali existem, do propósito que as direciona, do significado que as sustenta. Quem vive de palavras vazias vive na superfície, onde tudo é transitório e nada é permanente. Eu, por outro lado, prefiro mergulhar, prefiro o fundo, prefiro o desconhecido. Porque só nas profundezas é que encontramos o que é real, o que é duradouro, o que faz sentido, o que realmente é de verdade. Então, quando eu falo e quando eu escrevo, sei que cada palavra é uma extensão de mim mesmo, é um reflexo do que existe em meu interior. E é por isso que minhas palavras jamais serão vazias, pois nelas reside a verdade de quem sou e do que eu sinto... E eu sou muito, sinto muito.

— Diego em Relicário dos poetas.

[aranzaaguinaco2]

Que sea recíproco por amor, no por obligación, que lo que me quieras dar sea porque quieres y no porque tengas que dármelo, que te nazca sin que te lo tenga que pedir, desde adentró, desde las ganas y no desde la demanda. Que te den ganas de construir, de sumar, de compartir algo juntos, no qué lo hagas para que yo no te reclame, que te surja, que lo sientas, que se te ocurra no que debas para que no se pudra todo lo conseguido hasta ahora. Pedir esta bien claro que sí, claro que es parte de la comunicación, pero pedir varias veces lo mismo es hacer ojos ciegos a que del otro lado no quieren dártelo. Y nadie debería mendigar lo que se merece.

Una persona no debería quedarse eternamente esperando lo que la otra no quiere dar, lo que no le nace, no le surge o no se le ocurre, luego de habérselo hecho entender.

Una persona no merece sufrir el desgaste de la agonía que genera esa espera que desespera, mientras a la otra no le nace nada. Una persona no debería quedar paralizada en el tiempo esperando a ver si a la otra se le ocurre darse cuenta que ya no es lo mismo de antes, una persona no debería sufrir en silencio callando lo que siente, ocultando lo que le molesta, tapando con una sonrisa un dolor qué le parte el alma por dentro, una persona debería recibir lo que da porque eso es la reciprocidad, porque ya estamos grandes para ese cuento estúpido de “dar sin esperar nada a cambio”, eso no es amor, eso es necedad, eso es sometimiento, eso es ser emocionalmente dependiente del alguien.

Una persona merece que sea recíproco por amor, no por obligación.