#Heródoto
Explore tagged Tumblr posts
mosaicos-poeticos · 3 months ago
Text
Tumblr media
Heródoto
86 notes · View notes
user25122005 · 2 months ago
Text
graças a deus to acabando esse texto nao aguento mais ler esse autor que só sabe ficar falando bem do heródoto tipo cara ele não vai te comer
4 notes · View notes
whencyclopedes · 1 year ago
Photo
Tumblr media
Halicarnaso
Halicarnaso (la actual Bodrum, en Turquía) era una antigua ciudad griega jónica en la región de Caria, en la costa de Anatolia. Es conocida por ser el lugar de nacimiento de Heródoto (en torno a 484-425/413 a.C.), el "Padre de la Historia" además del emplazamiento del Mausoleo de Halicarnaso, una de las siete maravillas del mundo antiguo.
Sigue leyendo...
4 notes · View notes
bloomserpent · 2 years ago
Text
Tumblr media
2 notes · View notes
el-velo-de-mayaa · 2 months ago
Text
Tumblr media
0 notes
propronews · 9 months ago
Text
Un novio sin brazos, un asesinato a sangre fría, la huida de Arafat, el secuestro de un niño, los judíos de Etiopía…, historias que viví, el sentido de una vida
José María Pagador empieza desde hoy esta serie de reportajes para narrar las historias más interesantes de su carrera como reportero
Tumblr media
1 note · View note
fotograrte · 10 months ago
Text
Descubrimiento gore de la semana:
Los antiguos escitas - guerreros nómadas y pastores que florecieron en las estepas de Europa y Asia - convertían la pielk humana en cuero, según un nuevo estudio. El descubrimiento confirma una afirmación del antiguo historiador griego Heródoto que señalaba que los escitas (entre los años 800 adC y 300 adC) usaban carne humana para hacer cuero.
Un vídeo explicativo sobre los escitas: la falta de escritura sin embargo no ha disminuido su importancia histórica.
youtube
Cada época tiene su barbarie.
Oh, this is all kinds of yuck.
20 notes · View notes
masticadoresdeletras · 1 month ago
Text
Sacred town —¿Cuál es el tamaño de su sabiduría personal? 01 by j re crivello
“ Sacred town”, decían. (Ya antes me había llamado la atención el gran número de cosas sagradas que había en el país: Ciudad sagrada, río sagrado, millones de vacas sagradas […] el ingente numero de personas que lucían en sus rostros marcas de algún rito y el de personas que sentadas sin mover un músculo, tenían la vista fija en algún punto místico)” Pág. 32, Viajes con Heródoto, Ryszard…
0 notes
juuanre · 1 month ago
Text
Sacred town —¿Cuál es el tamaño de su sabiduría personal? 01 by j re crivello
“ Sacred town”, decían. (Ya antes me había llamado la atención el gran número de cosas sagradas que había en el país: Ciudad sagrada, río sagrado, millones de vacas sagradas […] el ingente numero de personas que lucían en sus rostros marcas de algún rito y el de personas que sentadas sin mover un músculo, tenían la vista fija en algún punto místico)” Pág. 32, Viajes con Heródoto, Ryszard…
0 notes
divinoleitao · 11 months ago
Text
ALEXANDRE GARCIA JORNALISMO SEM GRAVATA
O jornalismo, especialmente da TV, deixou de ser uma opção desde que a Internet começou a absorver alguns dos maiores nomes do jornalismo brasileiro e restam poucos vivos ou que não “melanciaram” ou cederam ao deslumbre fácil de se transformarem em “influenciadores digitais” algo que qualquer criança de 5 anos consegue fazer melhor que estes marmanjos. Alexandre Garcia é um profissional…
Tumblr media
View On WordPress
0 notes
notasfilosoficas · 8 months ago
Text
“De todos los infortunios que afligen a la humanidad el más amargo es que hemos de tener conciencia de mucho y control de nada”
Heródoto
Tumblr media
Fue un historiador y geógrafo griego, nacido en la antigua ciudad griega Jonia en Halicarnaso, famoso por su obra “Historia”, considerada una de las fuentes mas importantes de la descripción del mundo antiguo a gran escala y una de las primeras en prosa griega.
Aunque no se conocen muchos detalles de su vida, parece ser provenía de una familia aristocrática de la Asia Menor, lo cual le permitía pagar su educación, pues sus escritos reflejan un profundo aprendizaje en las mejores escuelas de la época.
Sus continuos viajes al parecer por voluntad, también dan pie a pensar que se trataba de un hombre de recursos.
Se cree que sirvió en el ejército de hoplita, pues sus descripciones de dicha batalla son bastante precisas y siempre se cuentan desde el punto de vista de un soldado de infantería.
Dedica buena parte de su obra a relatar la historia del imperio persa, así como de sus costumbres y gobernantes, y de las guerras que enfrentaron con los griegos.
Dedicó gran parte de su vida a efectuar viajes para obtener la información y los materiales que le permitieron escribir una gran obra de valor histórico y literario.
Se le considera padre de la historiografía, y la primera vez que se le cita de esta manera es en el ciceroniano De legibus, un texto de Marco Tulio Cicerón escrito alrededor del año 52 a.C.
Su obra “Historia”, que se describe literalmente como investigaciones, exploraciones, fue escrita probablemente en Turios, una ciudad de la magna Grecia en el Golfo de Tarento a corta distancia de Sibaris.
El conjunto fue dividido en 9 libros por su editor alejandrino del siglo III a.C. uno por cada musa; Clío, Euterpe, Talía, Melpómene, Terpsícore, Erato, Polimnia, Urania y Calíope, y en ellos narra con detalle Las Guerras médicas entre Grecia y Persia a principios de siglo V a.C., con especial énfasis en aspectos curiosos de los pueblos y personajes, al mismo tiempo que describe la historia, etnografía y geografía de su tiempo.
Para sus obras históricas recurrió a fuentes orales y escritas, aludiendo siempre a sus informadores, es decir, citando el origen de la Fuente de la siguiente forma; “Según los persas…”, o “a decir de los griegos” etc.
Sus libros abarcan temas tales como la historia de Creso, acontecimientos en Babilonia y Persia, geografía de Egipto, costumbres y animales de Egipto, costumbres de los Escitas, la conquista de Persia a Libia, y múltiples relatos de batallas de la época.
Al ser “La Historia” la primera obra griega en prosa, no es de extrañar que su estilo sea simple y con vocablos antiguos. Ya Aristóteles definía su estilo de escribir como “ordenado o concatenado”, y al ser muy concreto, rehuía a las abstracciones, fijándose en lugar de ello en datos perceptibles.
Heródoto muere en el año 425 a.C. a la edad de 59 años, tal vez en Turios o Calabria y hay quien señala Pella o Macedonia.
Fuentes: Wikipedia, worldhistory.org, historianationalgeographic.com.es
24 notes · View notes
mmesmerizesteinbeck · 8 months ago
Text
Cómo historiadora, propongo que se cambie al padre de la historia, ya no más Heródoto de Halicarnaso, ahora es Fyodor Dostoyevsky
As a historian, I propose that the father of history be changed, no longer Herodotus of Halicarnassus, but now Fyodor Dostoyevsky
Tumblr media
13 notes · View notes
whencyclopedes · 1 year ago
Photo
Tumblr media
Heródoto sobre los gatos de Egipto
El historiador griego Heródoto proporciona una descripción precisa de la devoción de los antiguos egipcios por los gatos en el Libro II de sus Historias, pero este pasaje se cita a menudo fuera de contexto. Los capítulos II. 66-67 se incluyen frecuentemente en una antología, sin discutir el pasaje anterior sobre cómo los egipcios valoraban a todos los animales y los consideraban sagrados.
Lire la suite...
3 notes · View notes
sofea-00 · 5 days ago
Text
Tumblr media
Ramera, es uno de los muchos términos que se usan para referirse, despectivamente, a la mujer que ejerce la prostitución o que vende su cuerpo por dinero. Pero, ¿qué relación tiene la palabra prostituta con ramera? ¿de dónde procede la palabra ramera?
La profesión más antigua del mundo
Es de sobras conocida la frase de que la prostitución es la profesión más antigua del mundo. Debido a que este oficio ya existía incluso en los primeros asentamientos y ciudades en la historia de la humanidad. Y hay ejemplos claros de ello.
En el código Hammurabi, escrito en el 1.700 a.C por el rey de Babilonia Hammurabi, en la Antigua Mesopotamia, ya nos habla de esta profesión. Aquí se regulan los derechos particulares de unas mujeres llamadas hieródulas. Éstas eran sacerdotisas sensuales y bellas que practicaban las artes amatorias con un fin sagrado. Su nombre original se ha perdido, pero su nombre viene de los griegos, que las llamaban hieródulas (que significa «esclavas del templo» o «esclavas sagradas»).
Hay que entender que en la antigua mesopotamia, la práctica del sexo no estaba mal vista sino que significaba un símbolo de fertilidad. Es por eso que estas sacerdotisas estaban en el templo levantado en honor a la diosa babilona Ishtar. Ishtar era la diosa de la fertilidad, el amor, la belleza y la sexualidad.
Las hieródulas, eran muy respetadas en la sociedad porque sólo las más hermosas, devotas, íntegras e inteligentes eran aceptadas cada año de entre cientos de mujeres que intentaban ser admitidas. Era como los castings actuales de las super modelos.
Las que eran admitidas, iniciaban su entrenamiento desde una edad muy temprana. Y sólo empezaban a participar en ceremonias sexuales a partir de su primera menstruación. Era la señal que se consideraba que ya estaban listas.
Según los historiadores griegos Heródoto y Tucídides, en Babilonia las mujeres tenían la obligación de acudir al Templo de Ishtar para practicar sexo con un extranjero como muestra de hospitalidad. Esto lo debían hacer al menos una vez en su vida y a cambio de un pago simbólico.
Una vez al año, se celebraban las festividades sagradas en el templo. Y las sacerdotisas mantenían relaciones sexuales con los hombres que acudían a participar a estas celebraciones. La decoración para estas ocasiones se hacía con ramos de flores como símbolo de fertilidad.
Con el paso de los siglos, en las civilizaciones venideras, todo esto cambió. Toda simbología religiosa se perdió, pero persistieron tanto la prostitución como los ramos de flores.
Parece ser, que en algún momento de la historia las prostitutas usaron la técnica de colgar un ramo de flores en su puerta. Era una manera sutil de informar a los clientes de que allí podrían obtener sexo pagando. Debido a esto a las prostitutas se les empezó a llamar rameras, por lo del ramo en la puerta. Y esta palabra quedó como un sinónimo de prostituta.
Varias teorías sobre el origen de ramera
El origen parece estar claro, pero lo que no está tan claro es de cuándo ocurrió esto. La época concreta no queda claro, ya que existen varías referencias en diversos textos.
La primera referencia encontrada es después de la caída del Imperio Romano de occidente y principios de la Edad Media. Entre los siglos VI-VII d.C, sobre el año 600, un clérigo católico llamado San Isidoro de Sevilla (556-636), en uno de sus escritos, escribía:
Ramus ad ianuam appensus corpus vendibile significat” (“Una rama colgada a la puerta, significa cuerpo a la venta”)
Parece ser que no era necesario que fuera un ramo de flores entero, con una simple rama vegetal era suficiente para advertir a los posibles clientes.
Pero la palabra «ramera» aparece escrita por primera vez en español a finales del siglo XV. Uno de los libros más conocidos es La Celestina (1499), de Fernando de Rojas, donde dice:
“Esta mujer es marcada ramera, según tú me dijiste, cuanto con ella te pasó has de creer que no carece de engaño. Sus ofrecimientos fueron falsos y no sé yo a qué fin.”
La Celestina de Fernando Rojas.
Y ya en el siglo XVII, concretamente en el año 1.737, el Diccionario de Autoridades daba la siguiente definición:
una ramera es la mujer que hace ganancia de su cuerpo, expuesta vilmente al público vicio de la sensualidad, por el interés’.
Diccionario de Autoridades (año 1.737). Primera edición del Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española (RAE)
Por lo tanto vemos que a partir del siglo XVII esta palabra ya esta en el diccionario de la Lengua, y por tanto se debía usar con total normalidad en la calle.
También se encuentran algunas fuentes que dicen que los primeros en poner una rama en la puerta fueron los taberneros ya que en estos lugares era en los que ejercían su actividad las prostitutas, mientras a los clientes se les servía unas jarras de vino y una buena comida.
Aunque existen otros autores como Sebastián de Covarrubias (siglo XVII) donde escribe en su libro «Tesoro de la lengua castellana o española»:
se les empezó a llamar rameras a las prostitutas porque éstas vivían, en las afuera de las ciudades, en unas chozuelas cubiertas de ramas, lugar en el que ejercían su oficio»
Tesoro de la lengua castellana o española
Pero este último tampoco determina la época. Así que no conocemos con exactitud el momento en que empezó a utilizarse el término ni cuando empezó exactamente este comportamiento «ramero». Pero queda claro cuál es su orígen.
3 notes · View notes
jartita-me-teneis · 2 months ago
Text
Tumblr media
Cuenta el célebre historiador Heródoto, que las mujeres de Babilonia estaban obligadas a realizar un peculiar rito sexual ofrecido a la diosa Milita, en el que una vez en la vida, debían acostarse con un extranjero en el recinto de su santuario.
En su visita a la ciudad de Babilonia, Heródoto observó un peculiar rito en el que toda mujer estaba obligada a ir al santuario dedicado a la diosa, que era la deidad del amor de aquella civilización, como Afrodita para los griegos y yacer con un extranjero.
De acuerdo a su obra: Los Nueve Libros de la Historia, las mujeres de mayor clase social no se mezclaban con las demás, llegaban con sus carruajes cubiertos y la servidumbre habitual de la época, que le esperaba fuera del templo.
Las mujeres debían entrar en el santuario y sentarse dentro del recinto con una corona de cordel alrededor de su cabeza. Entre ellas se ubicaban unos pasillos separados por cuerdas por los que circulaban los extranjeros mientras decidían con qué señora se iban a acostar. Una mujer sentada en el templo, no podía volver a casa hasta que no hubiese completado el rito. El historiador cuenta que aquellas que no eran muy atractivas pasaban hasta 3 o 4 años en ese lugar.
Una vez que el extranjero echaba dinero en el regazo de la mujer, entraban al interior del santuario a practicar sexo en nombre de la diosa. Terminado el trámite, las mujeres podían volver a su casa, donde ya nadie podía volver a tener el favor de ella.
Este rito era una ley de Babilonia, por lo que todas las mujeres estaban obligadas a cumplirla. Sin embargo, hay dudas de que esta práctica podía ser generalizada y si las hijas de las familias más ilustres, incluso la propia hija del soberano, estaban obligadas a cumplirla, tampoco está muy claro si realmente una mujer podía estar varios años en el interior del recinto hasta poder cumplirla. Pese a ello, las mujeres tenían una alta consideración en esa sociedad.
He aqui una representacion de una diosa, probablemente Ishtar o Milita , la cual puede resultar desconcertante, sensualmente desnuda , con dos búhos a su lados, la misma diosa está parada sobre dos criaturas que parecen ser leones y sus pies parecen garras, lo que le da cierto contraste a su imagen seductora. Es un culto propio a la mitologia sumeria, muy distinto al helenismo, pero con ciertas similitudes.
4 notes · View notes
jgmail · 4 months ago
Text
El deporte contado por escritores
Tumblr media
Por François Bousquet
Traducción de Juan Gabriel Caro Rivera
El deporte está tan asociado a las imágenes que olvidamos que originalmente fue celebrado por los escritores, “desde Homero hasta Blondin”, como reza el subtítulo de la antología literaria del deporte publicada en la colección Bouquins por Denis Gombert, el cual nos deleita con su erudición, su curiosidad y sus descubrimientos. Este es el libro del verano o, más bien, uno de los libros del verano, ya que reúne unos ciento sesenta textos que van desde los clásicos del deporte hasta un sinfín de nuevos descubrimientos y pequeñas joyas. Es recomendable leer esta antología entre cada una de las pruebas olímpicas. El libro ha salido justo a tiempo para hacernos olvidar los comentarios de Léa Salamé sobre el pavo y los chistes de Paul de Saint Sernin sobre golpearse la cabeza contra una mesa de ping-pong. Desde hace 3.000 años los escritores, y no los payasos, son quienes mantienen vivos a los dioses del Olimpo y el oro de las Olimpiadas. Denis Gombert ha recogido su néctar.
Denis Gombert escribe: “No hay actos de valentía sin un cantor que los celebre, ni héroes sin una narración, ni hazañas sin un drama recitado, ni récords sin un testigo. ¿Qué habría sido de maratón sin la leyenda del mensajero griego, Filípides, relatada por Heródoto y recogida por Plutarco? ¿Qué sería del Tour de Francia sin Blondin? Sí, ¿qué sería del deporte sin sus edificadores y poetas, sus héroes sin sus heraldos y sus deportistas, sin su Patrick Montel?”
Sport se pronuncia “sporteuh”, según el acento de Cambridge. La palabra se empezó a utilizar en el siglo XIX y proviene del inglés sportman: alguien que se dedica a actividades físicas al aire libre. Pero, como muchas palabras inglesas, tiene un origen francés que se remonta a la Edad Media y fue utilizada de forma significativa por Rabelais. “Desport” significa entretenimiento, placer físico, “ejercicio corporal”, dice el autor de Gargantúa, el personaje XXXL de la literatura universal que practicaba doscientos dieciocho tipos y variedades de deporte.
El Olimpo del deporte
El deporte es una actividad tan antigua como las colinas, aunque no fue hasta el siglo XVIII a.C., en Mesopotamia, cuando los escritores de la Epopeya de Gilgamesh grabaron los primeros gestos deportivos en tablillas de arcilla. En Egipto, fueron escribas y grabadores quienes, en forma de estela mortuoria cubierta de jeroglíficos, nos legaron la crónica y las hazañas de deportes como el remo, la equitación y el tiro con arco de Amenofis II (fallecido hacia el año 1400 a.C.).
Pero fue en Grecia donde empezó todo y fue el viejo pirata Homero quien recogió por primera vez la crónica del deporte en su Ilíada, el Canto XXIII, al hablar de los Juegos organizados por Aquiles en honor de Patroclo. En el año 776 a.C. comenzó la celebración deportiva más largo de todos los tiempos, los Juegos Olímpicos, que se prolongaron hasta finales del siglo IV d.C., en el 394. Entonces, ¿es Grecia la madre de todas las cosas? Como mínimo, fue Grecia la que dio al “deporte” sus primeras estructuras e instituciones, y la que proporcionó sus primeros campeones: Hipócrates de Tesalia (atletismo) y Alcimedes de Egina (lucha) cantadas por Píndaro, que les escribió a ambos triunfales odas. En aquella época no existía el COI, pero ya había boicots y tráfico de influencias. Los lacedemonios fueron expulsados de los Juegos durante la Guerra del Peloponeso (fuente: el historiador Tucídides, también un gran escritor), mientras que Esparta monopolizaba regularmente los primeros puestos.
Si Roma tuvo tantos autores propensos a la sátira fue quizá porque se diferenciaba de sus vecinos griegos en un aspecto: prefería los juegos vulgares a los nobles y en particular los juegos circenses, los ludi circenses. Luchas de caballos y combates de gladiadores. Allí fue donde nació la sociedad del espectáculo que el romano Guy Debord vio venir claramente. Nada menos que 250.000 espectadores en el Circo Máximo. Pan y circo decía Juvenal. Mucho antes que Gustave Le Bon, Polibio, otro magnífico historiador, reflexionaba en el siglo II a.C. sobre la forma de manipular a las multitudes.
Los caballeros suceden a los gladiadores
La conversión de Constantino en el siglo IV puso fin a los “libertinajes” que dos siglos antes habían horrorizado a Tertuliano, formidable polemista cristiano poco aficionado al placer. La sociedad medieval buscaba así un nuevo héroe. Lo encontró en la caballería y sus torneos. Guillermo el Mariscal (hacia 1146-1219), maestro de armas anglonormando y temido en los torneos por tener “cuernos tan bien cortados”, fue la figura arquetípica (véase Georges Duby, Guillaume le Maréchal ou le meilleur chevalier du monde, 1984). El soule, por su parte, apareció hacia el siglo XI y era un deporte popular y rural, una mezcla indomable y violenta que anunciaba los terroríficos – y magníficos – Alain Esteve y Gérard Cholley del XV francés.
Durante el Renacimiento tales placeres son renovados y Gargantúa jugaba con “el balón, las palmas y el campo”. El Renacimiento fue también el “Renacimiento del cuerpo”. En la encrucijada de los siglos XV y XVI florecieron los primeros tratados y manuales, entre ellos un Arte de la gimnasia. El juego de palmas, antepasado del tenis y la belote, nació en los claustros del siglo XIII y se convirtió en el rey de los juegos. También tuvo sus campeones (el gran Masson) y sus jugadores.
¿Milon de Crotone o Teddy Riner?
Pero esto aún no era deporte en el sentido en que lo entendemos, eran juegos. El deporte, en el sentido moderno, nacería en la Inglaterra del siglo XIX, aunque la Revolución Francesa experimentó con la “Primera Olimpiada de la República” en 1796, la cual fue demasiado prematura. La primera publicación periódica exclusivamente deportiva, la Sporting Magazine, fue impresa en 1792 y fue en 1846 cuando Thomas Arnold, director del Rugby College, y sus alumnos inventaron las reglas del mejor de los deportes: el rugby.
En aquella época, el deporte estaba reservado a una élite, cuyo santuario era el amateurismo, muy apreciada por el Barón de Coubertin. Esto excluía inmediatamente a la plebe, que no tenía ni el lujo ni los medios para disfrutar de estas actividades de ocio. Por lo que se necesitaba de la profesionalización para que naciera el deporte. A los grandes campeones olímpicos de la antigüedad no sólo se les pagaba con gloria, sino con dinero contante y sonante. Y, piensen lo que piensen los admiradores de Teddy Riner y Léon Marchand, Milon de Crotone tuvo un palmarés inigualable, ganando las competiciones de lucha de 532 a 516. Píndaro, por supuesto, lo inmortalizó.
Antes de ser codificados los gestos deportivos eran rituales. El transporte de la llama olímpica y el encendido del pebetero olímpico nos lo recuerdan. La religión nunca fue ajena. De hecho, el deporte tiene sus orígenes en los Juegos Funerarios griegos. Denis Gombert escibe: “redención por el sufrimiento” y “victoria por el sacrificio”.
Hoy existen casi cuatrocientas disciplinas deportivas. No existirían sin un modelo económico y una necesidad mediática. El periódico L'Auto (hoy L'Équipe) mostró el camino: fue su fundador quien tuvo la idea, en 1903, de lanzar uno de los monumentos del patrimonio deportivo francés: el Tour de Francia, hasta entonces sólo corrido por dos niños en un famoso manual escolar de la Tercera República.
La violencia bajo control
Adornado con todas las virtudes, el deporte es, en efecto, lo que Norbert Elias y Eric Dunning, pioneros de la sociología del deporte (véase su Sport et civilisation. La violence maîtrisée, 1986), decían de él: una socialización, una codificación, una domesticación de la violencia, cuya obsesión por el rendimiento, no tan contemporánea (ya obsesionaba a Hobbes, socialdarwiniano de ese entonces), que nos recuerda sus orígenes belicos. La vida es, en efecto, un deporte de combate.
Denis Gombert, Le sport. Anthologie littéraire, de Homère à Blondin, Bouquins, 736 p., 30 euros.
2 notes · View notes