#Día del Médico de los Pobres
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marcofuentes63 · 3 months ago
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SEMANARIO – NOTICIAS DE MAR Y TIERRA DEL 21 AL 28 DE OCTUBRE AL 04 DE NOVIEMBRE -TITULARES-
#NoticiasdeMaryTierra. Sector Marítimo, Portuario y Logístico Nacional e Internacional / Editado por Marco A Fuentes P NACIONALES Venezuela participará en tres grandes ferias internacionales en noviembre Fuente copyright(©): albaciudad Venezuela aboga por la biodiversidad y repudia el capitalismo en la COP16 Fuente copyright(©): ultimasnoticias AN declara 26 de octubre como Día del Médico…
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longliveblackness · 1 year ago
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In the 1960s, if you had a medical emergency, a police van would respond, not the paramedics.
There weren't any government-run emergency services in the U.S. at the time. In Pittsburgh, the police and firemen who answered these calls didn't have proper medical training and "had little, no, or outdated equipment," according to the University of Pittsburgh.
These police emergency vehicles refused to go to some poor Black areas, like the Hill District in Pittsburgh. It was there that the precursor of modern EMT service was born-partly as an employment-generating initiative, partly as a way to provide emergency health care to an underserved minority neighborhood.
Black men organized and founded the country's first emergency medical service (EMS). The Pittsburgh-based group, called Freedom House, wrote a training book that still serves as the basis for EMS training even to this day and pioneered life-saving practices in the field. By the mid-1970s, the success made the city government take notice, and it soon took over the program.
•••
En la década de los 60, si había una emergencia médica, una camioneta de la policía respondía, no los paramédicos.
En ese momento, en Estados Unidos no había ningún servicio de emergencia administrado por el gobierno. En Pittsburgh, la policía y los bomberos que respondían a las llamados no tenían la formación médica adecuada y "tenían poco, ningún equipo o equipo obsoleto", según la Universidad de Pittsburgh.
Estos vehículos policiales de emergencia se negaban a ir a algunas zonas negras pobres, como Distrito Hill en Pittsburgh. Fue allí donde nació el precursor del servicio moderno de Paramédicos Técnicos de Emergencias Médicas, en parte como una iniciativa generadora de empleo y en parte como una forma de brindar atención médica de emergencia a los vecindarios desatendidos.
Un grupo de hombres negros organizaron y fundaron el primer servicio médico de emergencia del país. El grupo con sede en Pittsburgh, llamado Freedom House (Casa de la Libertad), escribió un libro de capacitación que, incluso hoy en día, sirve como base para la capacitación de servicios médicos de emergencia y fue pionero en prácticas que salvan vidas en el campo. A mediados de la década de los 70, el éxito hizo que el gobierno de la ciudad se diera cuenta y pronto se hizo cargo del programa.
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baki-tiene-un-simp · 1 year ago
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Hola!, puedes aser un headcanon donde Retsu , Oliva , Baki y Jack tengan una s/o que es muy despistada a la cual casi la atropellan varios vehículos , casi siempre tiene la perseccion de la realidad alterada , se le pierden cosas y siempre las encuentra el mismo día que las pierde ,le caen cosas del cielo , como : ladrillos , pájaros , un rayo, gatos , instrumentos musicales y tijeras ?. un s/o que le pasa de todo tipo de cosas en su vida diaria pero aún así sigue en una pieza y sin darle importancia a todos los acontecimientos que le pasan diariamente por qué está acostumbrada
(espero a verme dejado clara :3 💚)
No sé si el título tiene sentido, prometo desarrollarlo mejor en los headcanons xd
Situación: Un S/O disperso.
Personajes: Baki Hanma, Jack Hanma, Oliva Biscuit y Retsu Kaioh.
Baki Hanma.
No está seguro de como debe lidiar con esto, ¿están bien? ¿Es algo así como un maleficio? ¿El mundo conspira en contra de su S/O? No está muy seguro.
Está inquieto al tratar de bloquear cualquier cosa que pueda dañar a su S/O.
Un objeto cae desde lo alto hacia su S/O. Baki lo bloquea. Un vehículo está fuera de control y su S/O no puede sacar su cabeza de las nubes a tiempo para evitar el golpe. Baki lo bloquea. Su S/O casi se corta el dedo con las tijeras. Baki lo bloquea.
Está más cansado que de costumbre, está alerta con mucha más frecuencia que de costumbre.
Yujiro no puede estar cerca de su S/O. Baki está casi seguro de que su S/O atrae cosas caóticas para sí mismo y su padre es el peor caos con el que lidiar.
Quizá no duermas mucho, el pobre chico no puede dormir tranquilo a menos que su S/O este donde él pueda cuidarles.
Jack Hanma.
Está muy cerca de amarrar a su S/O en plástico de burbujas.
Él está un poco molesto, es ridícula la cantidad de cosas extrañas que le pueden pasar a una persona. Bien, que tus llaves no aparezcan es algo común, no tiene problema con ello, puede buscar las putas llaves todos los días antes da salir. Da igual.
Pero, ¿es REALMENTE posible que su S/O casi haya sido atropellada en tres veces por tres vehículos diferentes? ¿Es siquiera eso posible? ¡Y apenas es lunes!
Jack no es realmente paciente con cosas que se salen de su control, se preocupa al saber que no puede predecir donde o que pondrá en peligro a su distraído S/O.
Prefiere soluciones duraderas y empieza a pensar que encerrar a su S/O en una burbuja suena como una buena idea.
Él los levanta fácil y los aleja del peligro, Jack jalará a su S/O por el cuello de su ropa antes de que sean atropellados por un vehículo al cruzar la calle. Parece sencillo, y para Jack lo es, pero realmente empieza a ser preocupante.
Oliva Biscuit.
Él está un poco paranoico, mucho más por la aparente comodidad de su S/O en este caótico torbellino que llama su día a día, ¿su S/O no se da cuenta de que este hombre casi se infarta la primera vez que un objeto casi le aplasta?
Al principio fue lindo. Su lindo S/O que tiene la cabeza en las nubes y jamás recuerda correctamente donde están las llaves o que parece que no ha dormido lo suficiente y su rostro siempre muestra una expresión atontada.
pERO. Cuando las cosas se ponen pesadas y él cree que el S/O casi muere unas cuatro veces, es cuando Oliva siente que debe hacer todo lo que está en su poder para protegerles.
No importa si el S/O sigue insistiendo en que es una tontearía y que estas cosas suceden con recurrencia, Oliva no les quitara el ojo de encima.
¿Un equipo de escoltas suena exagerado? ¿Sí? Quizá tengan razón, pero esa ni siquiera es la cosa más sobre protectora que Oliva hará con su S/O.
Ahora, ¿Cuál dicen que era su tipo de sangre? También necesita saber si tiene seguro médico, da igual, lo pagará igual.
Retsu Kaioh.
Él está para ayudar a su S/O, pone atención a la mayoría de las cosas que hace para evitar una situación riesgosa o simplemente recordarle donde están las llaves :)
Hace esto de voltearse hacia su S/O cuando está entrenando, algo así como vigilarlos mientras su pareja se distrae en un rincón mientras él termina sus ejercicios.
Lleva curitas en sus bolsillos. Solo por si es necesario.
No sabe qué sentir ante la indiferencia de su S/O hacia la mayoría de las cosas que le suceden, está este sentimiento de incomodidad en su pecho cada vez que su pareja resta importancia a los accidentes que pueden ser evitados, Retsu simplemente no entiende… ¡¿Una caja de herramientas salió de la nada casi dándole a su S/O en la cabeza y solo levantan los hombros como si nada?!
¿Cuántas veces debe pasar para que sientas que es algo normal? Retsu empieza a sentirse preocupado con más frecuencias, empieza a sostener la mano de su S/O más a menudo.
No, extraños que los ven pasar en público, no es romántico, es necesario para la supervivencia del S/O.
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onlymexico · 1 year ago
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La primera mujer que se tituló en una profesión en América Latina fue una dentista mexicana: Margarita Chorné y Salazar.
Margarita Chorné y Salazar, Nació el 22 de febrero de 1864, fue hija de Agustín Chorné, practicante de la orfebrería y la “dentistería” quien llegó a ser uno de los más famosos dentistas de la ciudad. Él era descendiente de franceses, la madre de Margarita fue doña Paz Salazar, dedicada al hogar. Vivían en el barrio de San Miguel en el centro histórico de la ciudad de México, eran una familia de posición social media-alta.
Margarita al igual que sus hermanas, aprendió a leer y escribir, recibieron clases de música, en el colegio aprendieron el catecismo, la aritmética, geografía, francés, y labores propias de mujeres como tejido de gancho y bordado de punto de cruz. Pero al parecer Margarita no le encontró el gusto a estas labores ni le gustaba del todo las reuniones femeninas que no le satisfacían; lo que Margarita disfrutaba era encerrarse durante horas en la biblioteca de su padre y aprender de sus libros, también le gustaba acompañarlo a los conciertos y funciones de ópera.
Observando el trabajo de su padre, Margarita empezó a conocer y a practicar el arte de la orfebrería y también gustaba de ayudar a su padre cuando tenía trabajo de dentista, de igual manera fue ayudante de su hermano mayor una vez que éste se convirtió en dentista. Había para Margarita muchas oportunidades de adquirir el conocimiento para llegar a ser una buena dentista, pues no tan sólo era limitado el número de dentistas en esa época sino que también en aquellos tiempos, era una loable costumbre de los dentistas y médicos que de verdad amaban su profesión y veían en ella no sólo una profesión con la cual ganarse la vida, sino una vocación de servicio al prójimo, atender gratuitamente a los pobres que no podían pagar su consulta pero que la necesitaban igual que los ricos, dedicando para ellos estos buenos médicos un día a la semana u horas extras cuando la urgencia lo ameritaba.
Con los conocimientos y la práctica que Margarita había obtenido siendo asistente tanto de su padre como de su hermano, un día decidió buscar el reconocimiento de los estudios realizados en su casa y conseguir el título oficial para ejercer como dentista en la ciudad de México.
Fue en el antiguo Colegio de Medicina, a los 21 años de edad, que Margarita tendría que demostrar que sabía el oficio, que dominaba satisfactoriamente el conocimiento fisiológico, anatómico y tecnológico y que podría ejercer al igual que lo hacía cualquier dentista ya titulado.
Para conseguir ese anhelado título, Margarita consiguió una carta de un dentista profesional que avaló sus conocimientos, así mismo tuvo que presentar cartas de tres personas de reconocida solvencia moral que certificaran que Margarita era una persona decente y cristiana. Margarita tuvo que pagar 100 pesos, que era el costo del examen (una cantidad por cierto muy elevada ya que la extracción de una muela en ese entonces costaba aproximadamente un peso)
Ante la gran expectación que seguramente se dio en esa época de que una mujer pidiera recibir el título profesional de dentista, Margarita se presentó ante el jurado y ante ellos citó de memoria los últimos tratados dentísticos en inglés, español y francés. Así pues, fue en la época porfirista cuando el 1 de febrero de 1886, fecha memorable, la Junta Directiva de Instrucción Pública del Distrito Federal emitió el primer título profesional de dentista a una mujer en América Latina, a Margarita Chorné y Salazar. Un año después otra notable mujer mexicana recibiría su doctorado en medicina, la primera mujer mexicana en obtenerlo, ella era Matilde Montoya.
En 1906, Margarita Chorné y Salazar, orgullosamente mexicana, recibió la noticia de que la embajada de Francia le entregó la Cruz al Mérito y en 1908 por parte del Institut du Midi en Tolouse, Francia, un diploma y una medalla en reconocimiento por ser la primera mujer titulada en una profesión independiente en Latinoamérica.
Según un informe de la Historia de la Odontología, Margarita fue la primera dentista en dedicarse a la cirugía y en aplicar el éter en la anestesia general.
Margarita Chorné se casó y ejerció su carrera durante aproximadamente cuatro décadas, con una vida longeva y dedicada al servicio de los demás, murió en 1962, a los 98 años de edad.
Actualmente existe el premio “Doctora Margarita Chorné y Salazar” que lo otorga la Facultad de Odontología de la UNAM y en México hay un Centro de Salud que lleva su nombre.
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kamas-corner · 9 months ago
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"Si nada sobra, nada falta: hay comida, tienes un lecho, ropa limpia, cuadernos de dibujo, libros, juguetes. Por un azar incomprensible te tocó en suerte nacer del otro lado de la muralla, en los márgenes. Pero de cualquier modo no te baña la lluvia, no sufres hambre, cuando te enfermas hay un médico; eres querido y te esperaron en el mundo. Son muchos los privilegios que te cercan y das por descontados. Sería imposible pensar que otros no los tienen. Y un día te sale al paso la miseria. La observas y no puedes creer que existan niños sin pan, sin ropa, sin cuadernos, sin padre. Te vuelves y preguntas por qué hay pobres. Descubres que está mal hecho el mundo".
-José Emilio Pacheco
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jartita-me-teneis · 6 months ago
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León Tolstoi - Las tres preguntas.
Cuento.
Cierto emperador pensó un día que si conociera la respuesta a las siguientes tres preguntas, nunca fallaría en ninguna cuestión. Las tres preguntas eran:
¿Cuál es el momento más oportuno para hacer cada cosa?
¿Cuál es la gente más importante con la que trabajar?
¿Cuál es la cosa más importante para hacer en todo momento?
El emperador publicó un edicto a través de todo su reino anunciando que cualquiera que pudiera responder a estas tres preguntas recibiría una gran recompensa, y muchos de los que leyeron el edicto emprendieron el camino al palacio; cada uno llevaba una respuesta diferente al emperador.
Como respuesta a la primera pregunta, una persona le aconsejó proyectar minuciosamente su tiempo, consagrando cada hora, cada día, cada mes y cada año a ciertas tareas y seguir el programa al pie de la letra. Solo de esta manera podría esperar realizar cada cosa en su momento. Otra persona le dijo que era imposible planear de antemano y que el emperador debería desechar toda distracción inútil y permanecer atento a todo para saber qué hacer en todo momento. Alguien insistió en que el emperador, por sí mismo, nunca podría esperar tener la previsión y competencia necesaria para decidir cada momento cuándo hacer cada cosa y que lo que realmente necesitaba era establecer un «Consejo de Sabios» y actuar conforme a su consejo.
Alguien afirmó que ciertas materias exigen una decisión inmediata y no pueden esperar los resultados de una consulta, pero que si él quería saber de antemano lo que iba a suceder debía consultar a magos y adivinos.
Las respuestas a la segunda pregunta tampoco eran acordes. Una persona dijo que el emperador necesitaba depositar toda su confianza en administradores; otro le animaba a depositar su confianza en sacerdotes y monjes, mientras algunos recomendaban a los médicos. Otros que depositara su fe en guerreros.
La tercera pregunta trajo también una variedad similar de respuestas. Algunos decían que la ciencia es el empeño más importante; otros insistían en la religión e incluso algunos clamaban por el cuerpo militar como lo más importante.
Y puesto que las respuestas eran todas distintas, el emperador no se sintió complacido con ninguna y la recompensa no fue otorgada.
Después de varias noches de reflexión, el emperador resolvió visitar a un ermitaño que vivía en la montaña y del que se decía que era un hombre iluminado. El emperador deseó encontrar al ermitaño y preguntarle las tres cosas, aunque sabía que él nunca dejaba la montaña y se sabía que solo recibía a los pobres, rehusando tener algo que ver con los ricos y poderosos. Así pues el emperador se vistió de simple campesino y ordenó a sus servidores que le aguardaran al pie de la montaña mientras él subía solo a buscar al ermitaño.
Al llegar al lugar donde habitaba el hombre santo, el emperador le halló cavando en el jardín frente a su pequeña cabaña. Cuando el ermitaño vio al extraño, movió la cabeza en señal de saludo y siguió con su trabajo. La labor, obviamente, era dura para él, pues se trataba de un hombre anciano, y cada vez que introducía la pala en la tierra para removerla, la empujaba pesadamente.
El emperador se aproximó a él y le dijo:
—He venido a pedir tu ayuda para tres cuestiones:
¿Cuál es el momento más oportuno para hacer cada cosa?
¿Cuál es la gente más importante con la que trabajar?
¿Cuál es la cosa más importante para hacer en todo momento?
El ermitaño le escuchó atentamente pero no respondió. Solamente posó su mano sobre su hombro y luego continuó cavando. El emperador le dijo:
—Debes estar cansado, déjame que te eche una mano.
El eremita le dio las gracias, le pasó la pala al emperador y se sentó en el suelo a descansar.
Después de haber acabado dos cuadros, el emperador paró, se volvió al eremita y repitió sus preguntas. El eremita tampoco contestó sino que se levantó y señalando la pala dijo:
—¿Por qué no descansas ahora? Yo puedo hacerlo de nuevo.
Pero el emperador no le dio la pala y continuó cavando. Pasó una hora, luego otra y finalmente el sol comenzó a ponerse tras las montañas. El emperador dejó la pala y dijo al ermitaño:
—Vine a ver si podías responder a mis tres preguntas, pero si no puedes darme una respuesta, dímelo, para que pueda volverme a mi palacio.
El eremita levantó la cabeza y preguntó al emperador:
—¿Has oído a alguien corriendo por allí?
El emperador volvió la cabeza y de repente ambos vieron a un hombre con una larga barba blanca que salía del bosque. Corría enloquecidamente presionando sus manos contra una herida sangrante en su estómago. El hombre corrió hacia el emperador antes de caer inconsciente al suelo, dónde yació gimiendo. Al rasgar los vestidos del hombre, emperador y ermitaño vieron que el hombre había recibido una profunda cuchillada. El emperador limpió la herida cuidadosamente y luego usó su propia camisa para vendarle, pero la sangre empapó totalmente la venda en unos minutos. Aclaró la camisa y le vendó por segunda vez y continuó haciéndolo hasta que la herida cesó de sangrar.
El herido recuperó la conciencia y pidió un vaso de agua. El emperador corrió hacia el arroyo y trajo un jarro de agua fresca. Mientras tanto se había puesto el sol y el aire de la noche había comenzado a refrescar. El eremita ayudó al emperador a llevar al hombre hasta la cabaña donde le acostaron sobre la cama del ermitaño. El hombre cerró los ojos y se quedó tranquilo. El emperador estaba rendido tras un largo día de subir la montaña y cavar en el jardín y tras apoyarse contra la puerta se quedó dormido. Cuando despertó, el sol asomaba ya sobre las montañas.
Durante un momento olvidó donde estaba y lo que había venido a hacer. Miró hacia la cama y vio al herido, que también miraba confuso a su alrededor; cuando vio al emperador, le miró fijamente y le dijo en un leve suspiro:
—Por favor, perdóneme.
—Pero ¿qué has hecho para que yo deba perdonarte? —preguntó el emperador.
—Tú no me conoces, majestad, pero yo te conozco a ti. Yo era tu implacable enemigo y había jurado vengarme de ti, porque durante la pasada guerra tú mataste a mi hermano y embargaste mi propiedad. Cuando me informaron de que ibas a venir solo a la montaña para ver al ermitaño decidí sorprenderte en el camino de vuelta para matarte. Pero tras esperar largo rato sin ver signos de ti, dejé mi emboscada para salir a buscarte. Pero en lugar de dar contigo, topé con tus servidores y me reconocieron y me atraparon, haciéndome esta herida. Afortunadamente pude escapar y corrí hasta aquí. Si no te hubiera encontrado seguramente ahora estaría muerto. ¡Yo había intentado matarte, pero en lugar de ello tú has salvado mi vida! Me siento más avergonzado y agradecido de lo que mis palabras pueden expresar. Si vivo, juro que seré tu servidor el resto de mi vida y ordenaré a mis hijos y a mis nietos que hagan lo mismo. Por favor, majestad, concédeme tu perdón.
El emperador se alegró muchísimo al ver que se había reconciliado fácilmente con su acérrimo enemigo, y no solo le perdonó sino que le prometió devolverle su propiedad y enviarle a sus propios médicos y servidores para que le atendieran hasta que estuviera completamente restablecido.
Tras ordenar a sus sirvientes que llevaran al hombre a su casa, el emperador volvió a ver al ermitaño. Antes de volver al palacio el emperador quería repetir sus preguntas por última vez; encontró al ermitaño sembrando el terreno que ambos habían cavado el día anterior.
El ermitaño se incorporó y miró al emperador.
—Tus preguntas ya han sido contestadas.
—Pero, ¿cómo? —preguntó el emperador confuso.
—Ayer, si su majestad no se hubiera compadecido de mi edad y me hubiera ayudado a cavar estos cuadros, habría sido atacado por ese hombre en su camino de vuelta. Entonces habría lamentado no haberse quedado conmigo. Por lo tanto el tiempo más importante es el tiempo que pasaste cavando los cuadros, la persona más importante era yo mismo y el empeño más importante era el ayudarme a mí…
»Más tarde, cuando el herido corría hacia aquí, el momento más oportuno fue el tiempo que pasaste curando su herida, porque si no le hubieses cuidado habría muerto y habrías perdido la oportunidad de reconciliarte con él. De esta manera, la persona más importante fue él y el objetivo más importante fue curar su herida…
»Recuerda que solo hay un momento importante y es ahora. El momento actual es el único sobre el que tenemos dominio. La persona más importante es siempre con la persona con la que estás, la que está delante de ti, porque quién sabe si tendrás trato con otra persona en el futuro. El propósito más importante es hacer que esa persona, la que está junto a ti, sea feliz, porque es el único propósito de la vida.
FIN.
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revistapipazo · 11 months ago
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Agarra un coco!!!
No podría asegurar que el relato que viene a continuación es realidad o ficción. Llegó a mí como un pseudo mito urbano, que en realidad fue presenciado por el primo de la polola de un compañero de universidad, enfermo de cuentero (mi compañero (bueno, y según él, el primo también)). En teoría el primo este dio jugo estudió medicina 1 semestre y medio con notas como la gran verga paupérrimo rendimiento, por lo que terminó rindiéndose y estudiando una promisoria y nutritiva carrera llamada periodismo.
Tan poco fue lo que aprendió en dicha carrera de las ciencias de la salud este muchacho, al que llamaremos Alfonso, que la única gueá que tiene para compartir con la demás gente cuando le preguntan cosas al respecto de su paso por la facultad de medicina, son las historias que según él vio en vivo y en directo.
Una de ellas, quizás la más tórrida, ocurrió en un servicio de urgencia de una localidad del país SAPU de Cerro Navia que no revelaremos.
Sucedió entonces que una noche llegó bastante compungido y alterado un paciente cuyo rostro evidenciaba una dolencia profunda e intensa. A simple vista algo raro se apreciaba ya que se notaba algo afiebrado y estaba más pálido que culo de esquimal. También se encontraba algo encogido y con una de sus manos se tomaba la entrepierna de manera insistente.
La enfermera jefe procedió a realizar su ingreso, y ahí fue cuando acudió Alfonso junto a uno de los médicos de turno para atender al paciente. Al comienzo no les quiso revelar el origen de sus molestias físicas, tan sólo se tendió en la camilla y no se sacaba la mano del paquete. No fue fácil hacer que los dejara llevar a cabo su labor médica, y tan solo lograron convencerlo de bajarse los pantalones (y no para chuparle el pico) una vez que la enfermera y la otra interna presente se marcharon, y ahí pudieron observar el origen del malestar del caballero en todo su esplendor.
Su aparato reproductor completo estaba envuelto profusamente en gasa y vendas, con manchas amarillas (debido a alguna clase de desinfectante) y rojas (por el shocolate) alrededor. Casi intuitivamente, él se resistía a que lo revisaran ya que si bien quería recibir atención médica, el dolor era extremo cuando le tocaban su vendaje artesa.
Después de cierto rato weveando, finalmente pudieron calmarlo y abrir el envoltorio: un olor penetrante se dejó sentir en el aire del box hospitalario. Pero el olor no era nada comparado con lo que podían admirar frente a sus ojos: el agilao este tenía una profusa herida en el escroto, con forma de marrueco de pantalón. La herida chorreaba sangre y pus, alrededor de la herida la piel estaba de un color como entre morado y azul, y el escroto propiamente tal lo tenía como balón de hándbol.
Se notaba que el longie había intentado, presumiblemente por vergüenza de mostrar su accidente al público, curar su herida en la casa, con lo que tuviere a mano, pues era evidente el el vello genital había sido cortado hacía no muchos días, y se percibían algunas lesiones posiblemente producto de su mal manejo del problema. Sin embargo, lo que más llamaba la atención, eran unas patitas metálicas que sobresalían de la piel en ciertos puntos de la lesión.
Algo confundidos, el doctor y Alfonso le preguntaron qué era eso, y él contestó que había tenido un accidente laboral, y que en su desesperación producida por una lesión testicular, había procedido a cerrar la herida con una corchetera industrial que tenía a mano en ese instante.
El misterio quedaba develado: este imbécil tenía corchetes en las weas, y eran varios y de 2,5’’ para peor, que en algunos lados los usan para fijar tableros de madera. Evidentemente lo que hicieron fue aplicar una vacuna antitetánica y desinfectar para prepararlo para una intervención quirúrgica.
Durante la operación, Alfonso y su médico le extrajeron 12 corchetes en un estado repugnante y realizaron aseo quirúrgico como se debía, sin embargo, luego de eso, empezaron a indagar dentro del paquete del pobre paciente, y se dieron cuenta que el weon tenía un coco desaparecido en acción. Lo buscaron por todo el escroto pero no lo encontraron, así que mi compadre quedó irremediablemente cojo.
Finalizado el procedimiento, todos los presentes se pusieron a elucubrar respecto a lo que acababa de suceder. Con una incredulidad propia de la situación, muchos no eran capaces de establecer una razón lógica para lo que le había ocurrido. Sin embargo después de puro sapos y hasta de mandarse una apuesta, lograron sacarle la información a la víctima de tamaña flagelación.
Resulta que este chuchesumadre grande, que luego de todo el weveo logró confesar lo ocurrido solamente a Alfonso (según él, pues no logró confiar en nadie más): este weon del paciente era un loser reculiao que no tenía mina ni que le pidiera plata, y que cada vez que se quedaba sólo en la planta donde trabajaba, pescaba un poco de lubricante para la máquina y metía la tula entremedio de algún rodillo de espuma para que se la sobajeara un resto y así poder obtener el placer carnal que era incapaz de conseguir con una mina.
Lamentablemente en dicha ocasión, la gente de mantenimiento no le avisó que debido a pruebas para un nuevo producto cambiaron los blandos y tulísticamente confortables rodillos de espuma por unos polines con pequeños dientes metálicos que a todas luces impedían la concresión de la placentera maniobra, mas nuestro amigo nunca supo de ello sino hasta que ocurrió el accidente.
Al ver que un coco ya se le había caído al piso debido a la herida producida en el saquito, no quiso por nada del mundo olvidarse de tener descendencia así que con lo más cercano que tuvo a disposición, procedió a cerrar la herida, siendo la herramienta utilizada para ello, una corchetera industrial. La cagada y la humillación fueron tales que antes de que su jefe siquiera esbozara la primera letra de su carta de despido, él ya estaba dejando su cargo a disposición.
El coco perdido finalmente lo recogió gente del aseo, y actualmente figura en un frasquito como trofeo en el camarín de los trabajadores de dicho lugar.
Comparte con tu familia, amigos y némesis!
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sonparesggo-blog · 1 year ago
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izuku Midoriya x AFO's Daughter PT1
La niña de AFO, la preciosa heredera del rey demonio ahora estaba frente suyo, Toshinori no sabía que hacer.La sobrina del primer vestigio gateaba en el suelo felizmente, tenía el cabello y los ojos de su padre, definitivamente una copia de él. Pobre de la madre que fue usada y asesinada. Suspiró, ahora le tocaba hacerce cargo de una niña que no era suya, pero que no podía dejar a la ligera. Siendo hija de AFO, estaría bajo supervisión de All Might. La niña era tan dulce, quizás salió a su madre, All might no pudo evitar encariñarse con los años. La niña encontró algo fascinante en All Might, su pequeño secreto. Era bien sabido que poseía el mismo quirk que su padre, por lo cual, tenía su conexión con One For All. Sentía una cercanía, un calor en Toshinori no solo como su padre, si no como algo más, había algo más.
A ella le encanta tomar siestas sobre Toshinori, su esquelética forma no le asusta en lo absoluto, le encanta cuando sonríe con esa forma delgada. Es en una de esas siestas que despierta en un lugar blanco, ella siente algo distinto y le produce miedo. Sabe que su padre no está allí con ella aún si hace poco ella dormida junto a él. La ansiedad se junta en su pequeño ser y las lágrimas fluyen con libertad. Tiene miedo de hacer ruido y llamar la atención de algo desconocido. No es hasta que un hombre muy grande se cierne sobre ella, está estupefacta, aterrada. Este hombre parece confuso sobre lo que hace una niña aquí hasta que sus ojos se abren en su descubrimiento.
Cielos, la niña de All Might.
La hija de All For One.
Frunce el ceño nervioso, está niña entró en el One for all sin restricciones, ¿Porque?
Los demás portadores se reúnen a su alrededor, Nana golpea al hombre más grande por asustar a una niña. Por que eso es lo que era, una niña asustada. No había maldad.
Nana intenta acercarse amablemente, una sonrisa maternal en su rostro. La niña solo se aleja.
— Mi papá dice que no me acerque a extraños. —Continua llorando, y eso es hasta que un hombre con cabello blanco se inclina frente a ella.
Sus ojos rojos se abren ante este hombre, él era..este hombre era aquello que se encontraba en All Might.
— Toshinori te enseño bien, querida. —Murmura con cariño, sus ojos verdes sonríen genuinamente.
Ella lo sabe, sabe que este hombre es familia y se lanza a abrazarlo, es lo que ella estuvo sintiendo desde que era mas pequeña dentro de su padre adoptivo.
Y es simplemente como si él siempre la estuviese llamando, con su instinto de instruirla en cambio de su hermano. Desde entonces suele visitar a los vestigios frecuentemente. All might no sabe cómo está niña sabe siquiera lanzar un golpe, otro pequeño secreto, Nana le instruye defensa personal. Le gusta jugar juegos de rompecabezas cuando Tsukauchi los visita y vestir trajes de dinosaurio mientras Toshinori la lleva a los parques de diversiones.
La vida junto a Toshinori es la más divertida, ¡Héroe de día y padre de noche, es mucho mejor que Batman! Si alguien le preguntará quién es su héroe, ella no responderá que All Might, ella dirá cálidamente.
— ¡Mi papi Toshinori!
Lo que hace que el corazón del rubio explote, ella no quiere la imagen que construyó durante años, ella lo quiere a él, al verdadero él. Sí, tener hijos no es tan malo, es increíble. Y la diversión acaba en el incidente donde All Might casi pierde la vida, su estómago fue vaciado y le consiguieron los mejores médicos para mantenerlo estable. All Might hubiese preferido perder la vida en ese instante cuando Night Eye le contó que su hija adoptiva fue secuestrada. Rápidamente desconecta todos los cables que tiene en el cuerpo e intenta salir de la cama, es tan débil que su compañero lo obliga a estar en la cama y obedecer a los médicos. No puede evitar pensar en donde puede estar su niña, que está haciendo, quién la tiene y si está bien. Sí, esto es culpa de All For One, todo es culpa de ese hombre.
Saliendo del hospital no puede evitar buscar en todos lados, en todo el mundo, no puede evitar pensar en que su niña ahora podría estar siendo moldeada en el siguiente simbolo del mal en contra de su voluntad, es una niña tan dulce.. su cabeza da mil vueltas todo el día. All Might no culpa a Sir night eye, sabe que All For One es más poderoso que cualquiera, que aún teniendo previsión la maldad de ese hombre supera todos los aspectos, realmente no lo culpa. Aún si se separaron, Sir night eye lo notificará de la búsqueda de su hija, no dejará de investigar por All Might y por la culpa que siente, él debió prever ese escenario. Recuerda a la niña, sus lágrimas y sus gritos mientras sus pequeñas manos forcejeaban con los agresores.. y como él no pudo hacer nada. El fracaso no era una opción y sin embargo lo hizo de la peor manera.
La niña lloró con fuerza esperando ser escuchada por algún héroe después de que la niebla se la llevará y la dejará en esta bodega, el hombre no se mueve y conserva su distancia, lo que alivia a la niña en cierta forma, no la lastimaron y no sabe si lo harán. Pronto la puerta del lugar es abierta con fuerza y ella no puede evitar estremecerse, hay un hombre cubierto de sangre acercándose a ella, no puede discernir bien su rostro masacrado, es como una película de terror y ella no quiere ser la protagonista. La niña tiembla cuando el hombre coloca su mano ensangrentada en su mejilla y le dedica esa sonrisa tan aterradora.
— Bienvenida a casa, Cariño.
****
A lo lejos pudo notar a una chica, su cabello blanco bailando en el aire, sus ojos se posaron en él, no pudo evitar estremecerse. El aire se volvió tan pesado y helado que le costó respirar por un momento, su presencia es como la de AFO. Estaban lidiando con un ataque de villanos y ahora esto..¿Qué diablos estaba pasando?
Ella sonrió.
El peliverde podía verla avanzar hacia él en un salto y cuando la tuvo tan cerca, no se atrevió a atacarla.
— ¡Tío!
Izuku no sabía lo que pasaba hasta que la chica lo tomo de las mejillas, con una sonrisa aterradoramente calida, como si de un premio se tratará. Sintió terror, All For One alguna vez lo llamo hermano, como si Izuku fuera algún tipo de encarnación del primer portador y ahora está chica lo relacionaba con su tío. Izuku no sabía cómo procesarlo, se sorprendió aún más cuando OFA repelió a la chica, mandándola hacia atrás.
— ¿Porqué? ¿¡Porque diablos te la pasas rechazandome!? ¿A nosotros? —Exclamó con desesperación. — ¡Soy tu familia, siempre lo he sido, Tío!
Ella lloró frente a Izuku, una mano en su pecho apretando sus prendas.
— Solo te quiero cerca una vez más.. ¡Solo una vez más! — Murmuró antes de que Kurigiri llegará a su lado e intentará llevarla de regreso. — ¡No! ¡Mi tío está allá, y si mi padre y Tomura son tan cobardes yo lo tomaré!
Ella aparta la niebla tanto como puede para avanzar aunque sea un paso hacia Izuku.
— Princesa, la llevaré sea su deseo o no.
Y con eso desaparecieron ambos, dejando a Izuku con mil preguntas que esperaba All Might contestará luego.
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natacherrypie · 1 year ago
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EL ABORTO
Introducción.-
La interrupción definitiva del embarazo o también conocido popularmente como el aborto, es un procedimiento médico que pone fin definitivo al embarazo, puede producirse de forma espontánea (aborto natural) o provocada, se realiza cuando la mujer considera que no quiere o no está lista para tener un hijo, o bien si el equipo médico considera que es necesario para cuidar su salud. El aborto no es una práctica que haya surgido en nuestros días, es decir, este procedimiento se ha ido realizando desde hace muchos años atrás.
El aborto al ser un tema importante, sensible y de mucha polémica, hace que surjan distintas opiniones y cuestionamientos, a su vez personas y movimientos sociales que luchan por el acceso libre, seguro y gratuito al aborto, como otras agrupaciones que exigen la ilegalización, penalización y el desistir de esta práctica, así mismo, hay personas que prefieren mantenerse en un margen ´´neutral´´ con respecto a este el tema.
Al igual que personas a favor y personas en contra de la interrupción del embarazo, existen países en donde este procedimiento está legalizado y despenalizado (siempre y cuando se realice en un tiempo determinado durante la gestación), otros países en donde el aborto terapéutico o eugenésico es legal, es decir, en casos en donde corra riesgo la vida de la mujer o también cuando se puede predecir con probabilidad o seguridad que el feto nacerá con un defecto u enfermedad, y finalmente encontramos que hay otros países más radicales donde ésta práctica (sin importar las circunstancias) está penalizada ante la ley.
En este ensayo profundizaremos en el tema mediante diferentes aspectos, como lo son; la penalización del aborto, la embriología, métodos anticonceptivos, el aborto dentro de los derechos humanos, salud mental, la penalización del aborto impide al personal de la salud prestar atención básica sobre el tema.
Argumentos.-
• La penalización e ilegalización del aborto.
Mucha gente tiene la idea que la penalización e ilegalización del aborto hace que las cifras se reduzcan o directamente que no hayan incidencias en este procedimiento médico, pero la verdad es que siempre se va a practicar los abortos voluntarios sea legal o ilegalmente, la penalización de la interrupción del embarazo es un problema que va más allá, estas son algunas de las consecuencias que hay al penalizar el aborto: Hace que los abortos sean clandestinos, por ende que los abortos se practiquen de forma insegura, aumenta la mortalidad entre las mujeres (usualmente son mujeres pobres y jóvenes), criminaliza a las mujeres y las pone en una situación de riesgo, al interrumpir el embarazo en condiciones poco favorables puede crear también complicaciones médicas (Hemorragias, perforaciones uterinas, expulsión incompleta de los tejidos del embrión, la muerte, etc), la estigmatización social, la pobreza, dificultades para continuar o finalizar los estudios académicos, el nulo acceso a la atención médica respecto a la interrupción del embarazo, etc. Está comprobado que el aborto es uno de los procedimientos médicos más seguros que hay, los riesgos de los abortos son similares a los de otros procedimientos ginecológicos que se realizan dentro de la medicina todos los días. La despenalización del aborto hace que las mujeres no sean condenadas por esta práctica ante la ley, y la legalización permite la interrupción del embarazo en cualquier clínica, hospital o centro de salud a nivel nacional.
• Embriología.
Antes de iniciar con este subtema, hay que replantearnos a qué nos referimos o consideramos cuando hablamos de la vida, si consideramos que un embrión tiene vida, también aceptamos que tiene la misma condición que una célula, óvulo, espermatozoide ya que cumplen con ciertas funciones en nuestros cuerpos, en pocas palabras la vida no empieza desde el primer momento de la fecundación, pues va mucho más atrás. Lo que ahora debemos analizar es que si después de la fecundación, nos encontramos frente a una vida humana ya realizada, cosa que no es así. Las leyes para regular esta práctica son diferentes en cada país y tienen en cuenta diferentes aspectos, diversos países permiten el aborto libre hasta la semana 12 y 14 de gestación, (donde la persona embarazada no corre riesgo) es decir, el primer trimestre del embarazo, pues el feto no siente dolor antes de la semana 20, a menos de que hablemos de un desarrollo más avanzado de su fisiología, usualmente los fetos empiezan a sentir dolor entre las semanas 22 y 26.
• Métodos anticonceptivos.
En la planificación familiar, específicamente en la sexualidad, se cuenta con numerosos métodos anticonceptivos que como dice su nombre, evita los embarazos no deseados, algunos de estos métodos tienen más eficacia que otros, al hablar de la eficacia contamos con que ciertos métodos pueden llegar a fallar, ya sea por el mal manejo de éstos, como también las posibilidades de falla que hay, por ejemplo: Vasectomía, ligadura de trompas, DIU, anillo vaginal, pastilla anticonceptiva, parche anticonceptivo, implante anticonceptivo e inyección anticonceptiva: Efectividad del 99%. Condón masculino: Efectividad del 98%. Preservativo femenino. Efectividad del 95%. Diafragma: Efectividad del 94%. Esponja anticonceptiva: Efectividad del 91%. Capuchón cervical: Efectividad del 85%. Método de Billings: Máximo 75%. Método Ogino/Kaus: Máximo 65-80%, dependiendo regularidad ciclo, también hablamos de los métodos anticonceptivos permanentes pero usualmente éstos son los más difíciles de acceder dentro del sistema de salud público de un país, aparte de que pueden llegar a tener costos altamente elevados, no todas las personas tienen el alcance de pagar cierta cantidad de dinero, los trámites para acceder a estos métodos son muy complejos. Como se puede observar, no todos los métodos anticonceptivos tienen una efectividad del 100%, en caso de una falla en estos, se producen los embarazos no deseados. Dentro de los derechos sexuales y reproductivos, encontramos el derecho a ejercer la sexualidad de manera independiente de la reproducción y estar libre de discriminación, presión o violencia en nuestras vidas sexuales y en las decisiones sexuales, en pocas palabras cualquier persona puede ejercer su vida sexual libremente, al hacerlo corre el riesgo de que su método de protección no funcione correctamente y no se puede obligar a alguien a continuar con un embarazo no deseado por el simple hecho de que el anticonceptivo falló.
• Los Derechos Humanos
El aborto se considera un derecho, pues no obliga a otras mujeres a abortar pero sí permite que exista la libre decisión por parte de ellas, también podemos considerar que negar a las mujeres, niñas y otras personas embarazadas el acceso al aborto libre constituye una forma de discriminación y atenta contra una variedad de derechos humanos, como lo son los derechos sexuales y reproductivos, La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha indicado que las complicaciones en el embarazo y el nacimiento son la causa principal de muerte de niñas y mujeres.
• Salud mental.
Los embarazos no deseados pueden ser un gran impacto para la vida de una mujer, los embarazos no planeados pueden ser por producto de la violencia sexual, fallos en los anticonceptivos, falta de educación sexual, el difícil acceso a los métodos anticonceptivos, la inefectividad o no administración de la píldora de emergencia, etc. La maternidad no deseada genera traumas, retraso social en la vida de la mujer, al igual que trastornos mentales y físicos como por ejemplo la depresión, ansiedad, incluso síntomas del trastorno de estrés postraumático (TEPT). Hay casos en los que la maternidad no deseada presenta menores índices de felicidad durante el nacimiento y en la crianza de los hijos. Así como los embarazos no deseados pueden general una problemática en la salud mental, los abortos también pueden producir ciertas alteraciones en la salud mental de las mujeres, como sentimientos de culpabilidad, etc; en algunos países en donde el aborto es legal, los pacientes que acuden a la interrupción del aborto, cuentan con asesorías en lo que es en la salud mental, es decir, reciben ayuda psicológica por parte del Estado.
• la penalización del aborto impide al personal de la salud prestar atención básica sobre el tema.
Penalizar el aborto puede tener un "efecto paralizador" tal que los profesionales médicos no comprendan los límites de la ley o apliquen regulaciones más estrictas de lo que exige la ley. Esto puede ser causado por varios factores como: Creencias personales, prejuicios contra el aborto, estereotipos negativos sobre mujeres y niñas o miedo a la responsabilidad penal.
Conclusiones.-
En este ensayo concluimos con que el aborto, como todos sabemos es la interrupción del embarazo antes de que el feto se desarrolle completamente, en países donde el aborto es legal, se lo realiza durante un tiempo de gestación establecido por sus leyes, la interrupción del embarazo se produce en cualquier momento de la gestación y que se realiza por voluntad propia o también por riesgos en la salud de la mujer o el feto, igualmente se seguirá realizando este procedimiento, esté o no esté legalizada en ciertos lugares, también está demostrado que prohibir el aborto no disminuye la incidencia de esta práctica como se suele pensar, sino que trae consecuencias para las niñas, adolescentes y mujeres, porque afecta su salud, salud mental, integridad física y bienestar general. Los abortos no se van a detener y, si no se legalizan y regulan, tampoco las muertes de mujeres, especialmente, en situación de pobreza.
Los métodos anticonceptivos no cuentan con una eficacia del 100%, y al tener cierta posibilidad de fallar, hace que corra el riesgo de un embarazo no deseado, ante los derechos humanos no se puede obligar continuar con un embarazo a una mujer, ya que estaría vulnerándose sus derechos sexuales y reproductivos, así mismo, no se puede considerar como un castigo a un bebé no deseado (ya sea porque fue producto de un descuido, etc), pues trae complicaciones en las vidas de los padres y dependiendo si la situación es desfavorable, la vida del bebé no será la mejor que digamos, recurrir a la adopción no es tan recomendable ya que el sistema de adopciones en el país no es muy favorable, hay decenas de testimonios que afirman que el proceso de adopción es muy complejo y largo, y sin contar con la vulneración de derechos que usualmente los niños sufren dentro de estas instituciones. Finalmente también vemos que el aborto al ser como cualquier otro procedimiento médico, se corren los mismos riesgos, es decir, hay poca posibilidad de tener complicaciones durante la interrupción del embarazo, como también las bajas probabilidades de tener problemas durante una intervención quirúrgica.
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ibarbouron-us · 2 years ago
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San Pantaleón fue mártir y médico que dedicó su vida a sanar a los pobres. Murió a corta edad no sin antes realizar una serie de milagros. Hoy en día se le considera el patrono de los médicos y enfermos siendo venerado en varias partes del mundo acudiendo a él miles de personas para pedir mejoría.
Médico nacido en Nikomedia (actual Turquía). Fue decapitado por profesar su fe católica en la persecución del emperador romano Diocleciano, el 27 de julio del 305.
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escaldo · 1 year ago
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Leyendas de terror de Puebla
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El Puente de México
Durante los tiempos del virreinato, la comunicación entre Puebla y la capital era esencial para el comercio. Sin embargo, al no haber ningún camino entre ambas, los asaltos y accidentes eran cosa frecuente. Fue así como en el año 1707, el ingeniero Santiago Guzmán llegó a la ciudad poblana por órdenes del virrey, para construir un puente que conectara ambos lugares.
Le acompañaba su esposa, una mujer muy bella y vanidosa, cuyo mayor defecto era buscar diversiones vanas. Mientras él supervisaba la construcción, ella se dedicó a engañarlo con un mozo pobre pero atractivo, que se dedicaba a engatusar señoritas.
En un principio la obra parecía destinada al fracaso. A cada instante había derrumbes y ya varios trabajadores habían perdido la vida. El ingeniero estaba desesperado. Una noche tuvo un sueño, en el que una presencia oscura le revelaba la causa de su frustración: su mujer estaba cometiendo adulterio y era preciso que limpiara su honra para que el proyecto tuviera éxito. Ese mismo ser no tuvo reparo en revelarle el nombre de su rival.
La siguiente noche, Santiago salió de casa con la intención de matar al sinvergüenza. Lo apuñaló en un callejón oscuro y después trasladó su cadáver hasta la obra, emparedándolo en uno de los pilares que sostenían el puente. A partir de ese momento la suerte cambió para él. El camino se concluyó con éxito y nunca volvió a haber derrumbes, ni accidentes.
Tiempo después, con gran arrogancia y satisfacción, Santiago le confesó el crimen a su aterrorizada esposa, quien llevaba semanas preguntándose porque su amante no iba a verla. Nunca pudo denunciarlo por temor a destapar su infidelidad y también a terminar de la misma manera.
La aparecida del Hospital de San Pedro
Durante el siglo XVII, cuando México era conocido como la Nueva España, hubo un brote de cólera que asoló a buena parte de la población. La región de Puebla fue una de las más afectadas. Las personas morían a decenas y la enfermedad se reproducía como la peste. Los hospitales no se daban abasto. Uno de los más célebres ocupaba las instalaciones de lo que actualmente es San Pedro Museo de Arte.
El Hospital de San Pedro era llevado entre médicos y frailes, que hacían todo lo posible por atender a sus numerosos enfermos. Una noche, Fray Luis, que era uno de los encargados del lugar, recibió la visita de una misteriosa mujer.
La pobre iba cubierta con una capa negra y tenía las manos muy pálidas. Lo despertó a medianoche, asustando con su delgadez espectral.
—Le ruego que acuda a mi casa, por favor. Mi hijo está muy enfermo —le pidió con voz temblorosa—, tiene fiebre desde ayer y no se puede ni mover de la cama.
Rápidamente, Fray Luis pidió a un doctor que lo acompañara y fueron hasta la casa de la desconocida, donde encontraron al pequeño a punto de morir entre horribles calores. De inmediato lo trasladaron al hospital, no sin antes decirle a su madre que podría ir a recogerlo en una semana. Aunque no creían que pudiera salvarse, el chico milagrosamente se curó gracias a los cuidados que le brindaron.
Pero pasaban los días y la madre no regresaba por él.
Intrigado, Fray Luis volvió a su casa para darle las buenas noticias sobre el estado de salud del niño y preguntarle porque no había ido a buscarlo. Nada más llegar, sintió un olor nauseabundo que provocó que se cubriera la nariz. Llamó a la puerta, pero nadie contestó. Extrañado, forzó la cerradura y lo que encontró lo llenó de horror.
El cuerpo sin vida de la mujer yacía derrumbado en el piso, en pleno estado de descomposición. Llevaba así más de una semana.
Fray Luis dio aviso a las autoridades y después ofició una misa por el alma de la difunta, que aun después de la muerte, había regresado para velar por su hijo. Desde entonces, dicen que su fantasma aparece en ocasiones por las inmediaciones del hospital.
Por otra parte, Fray Luis fue recordado durante los años venideros como un hombre de gran corazón, especialmente por aquel niño al que salvó, el cual tras quedar bajo su protección, llegó a convertirse en un afamado médico.
El aparecido del Patio de los Azulejos
El Patio de los Azulejos es un convento restaurado que, hace años, se convirtió en una vecindad popular. Allí llegó a vivir un humilde abogado, que se instaló en uno de los departamentos del segundo piso. Todas las noches que llegaba de trabajar, se encontraba con un hombre muy anciano sentado en las escaleras, sosteniendo un rosario en las manos y rezando.
Al abogado esto le parecía muy curioso.
Con el paso del tiempo y después de encontrarse a diario en aquel lugar, los dos terminaron haciéndose amigos. El viejo le contó que él era sacerdote y por eso nunca se iba a dormir sin antes haber orado.
Un día, llegaron de visita a la vecindad dos monjitas. Iban a ver a una amiga y como no sabían en qué departamento vivía le preguntaron al abogado, que de casualidad estaba saliendo para su trabajo.
—Imagino que ustedes conocen al padre, él vive justamente al lado —les dijo—, debe estar durmiendo todavía.
Las monjitas, extrañadas, le comentaron que no sabían que allí viviera ningún sacerdote. Cuando el abogado les dijo cuál era el nombre del susodicho y descubrió su apariencia, ambas se pusieron pálidas y se persinaron.
—Sí sabemos de qué hombre nos habla —le dijeron—, cuando era sacerdote vivía en el convento y todas las noches rezaba su rosario. Pero eso fue hace ya muchos años y él falleció hace poco.
Incrédulo, el abogado tocó a la puerta de su amigo, solo para comprobar que el departamento había estado deshabitado por meses y que el religioso con el que había conversado tantas veces, era un fantasma. Su impresión fue tal, que al día siguiente se marchó de la vecindad sin dar explicaciones a nadie.
La cueva del tiempo
Al norte de Puebla, en un poblado llamado Teziutlán, durante el año de 1800, vivía un joven de nombre Silverio, desesperado por salir de su situación de pobreza. Un día escuchó hablar acerca de una gruta en la que supuestamente, habían abandonado un inmenso tesoro. Todos la conocían como la cueva del tiempo; estaba ubicada en medio de una serie de cavidades a los pies del cerro de Ozuma, en la sierra poblana.
Nadie se atrevía a entrar allí, pues se creía que en dichos pasajes habían ocurrido cosas terribles, asesinatos, robos, violaciones… Sin embargo Silverio solo podía pensar en el tesoro, en lo mucho que podría cambiar su vida si llegaba a encontrarlo.
Sin avisar a nadie preparó todo lo que necesitaba para una rápida expedición. Cuerda, machete, un morral con algo de comida. Se fue muy confiado hasta la cueva, a la que llegó apenas cayó la noche. Ya en el interior sintió algo de inquietud. Desde todas partes, el parecía percibir varios ojos amarillos y penetrantes, que acechaban cada uno de sus movimientos. Más cuando miraba descubría que no había nada.
Silverio ya había escuchado que en las grutas podían habitar seres de oscuridad, los cuales gustan de matar a todo aquel que se atreviera a exhibir su miedo. Por eso ignoró las miradas y siguió adelante, andando por un trecho que parecía interminable.
Horas más tarde, cansado y sediento, finalmente llegó hasta un recoveco que estaba repleto de monedas de oro y plata, joyas y piedras preciosas. El muchacho creyó que iba a volverse loco de alegría. Ahora el único problema que tenía, era que no podía llevarse todo de vuelta, tendría que escoger muy bien las cosas que podría transportar consigo. Tanto pensó que se quedó dormido y cuando despertó, se sobresaltó al darse cuenta de que estaba cubierto de polvo y telarañas.
Se quitó todo aquello de encima y volvió a mirar el tesoro.
Silverio terminó colocando un buen puñado de oro en su morral, más algunas de las alhajas que más gemas tenían. Le costó mucho regresar al pueblo, sobre todo porque el paisaje parecía haber cambiado muchísimo. Había jacales que no estaban en el camino cuando había ido hacia la cueva.
Cuando llegó al pueblo no cabía en sí de asombro y preocupación. Nada era igual a como lo recordaba. La casa de sus padres estaba abandonada y lucía más deteriorada que nunca. Preguntó a los vecinos, que tampoco eran los mismos que él solía tener y todos le informaron que sus padres ya no vivían ahí, porque llevaban años muertos.
Loco de dolor, Silverio escapó de Teziutlán con aquel maldito tesoro. Su impaciencia y ambición lo habían llevado a meterse donde no debía. El tiempo había transcurrido dentro de la cueva sin darse cuenta, de manera diferente a como lo hacía en el exterior. El último de sus conocidos al que pudo encontrar, era ya un anciano que se sorprendió mucho al verlo.
Nunca más se supo de él.
El fantasma del Puente de Ovando
En el siglo XVIII, habitaba en Puebla una hermosa muchacha de 16 años, llamada María del Rosario de Ovando. Era hija de un hombre muy rico e influyente, pero por desgracia, se había enamorado de un chico sumamente pobre, mestizo, lo cual no era del agrado de su padre. Fue por eso que le advirtió que nada más regresar de su viaje de negocios, la iba a casar con uno de sus amigos; un sujeto entrado en años y cuya enorme fortuna le convenía más a la familia.
María, muy afligida, se escapó de casa para encontrarse con su enamorado y comunicarle la terrible noticia. Le iba a proponer que se escaparan juntos.
No se dio cuenta de que su hermano, Agustín de Ovando, la había seguido hasta el punto de encuentro, un puente bajo el cual la pareja solía besarse. Al encontrar juntos a los amantes, el joven montó en cólera y los asesinó sin piedad.
El crimen conmocionó a la sociedad y a las autoridades. Pero a pesar de todo, Agustín no fue enjuiciado. En parte por su privilegiada procedencia, en otra, porque el juez consideró que solo había defendido el honor de su familia, cosa que en aquellos tiempos era muy importante.
El padre de María cayó en una profunda depresión al regresar y enterarse de lo ocurrido, abandonándose a la bebida. Una noche en la que volvía a casa, ya muy pasado de copas y al pasar por el puente, vio frente a él a su hija, pálida y herida, suplicando ayuda. El impacto fue tan terrible que le provocó un ataque al corazón y murió allí mismo.
Hoy en día, el puente de Ovando es uno de los sitios más célebres de Puebla. Y hay quien asegura que tanto María como su gran amor, aparecen a altas horas de la noche para revivir su último encuentro.
Fuente: relatoscortos.org, Mily S
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emigdiodia · 1 year ago
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Educando a la malcriada de mi hermanastra  1
Hará unos tres meses que mi padre se volvió a casar y ahora vivimos en un chalé a las afueras con mi nueva familia. Sara la nueva mujer de mi padre también es médico en el hospital donde trabaja mi padre, normal con la cantidad de horas que pasa en el hospital que termine con alguna compañera. Sara no se vino sola a vivir con nosotros sino que se trajo a sus dos hijas, que lo primero que pensé al verlas fue menudas preciosidades, de tal madre tales hijas.
Helena era la mayor que tenía 18 años como yo y Rebeca era un año menos. Las dos eran unas preciosidades morenas con unos cuerpos de escandalo, bien delineadas ya que las dos hacían atletismos y se cuidaban mucho. Helena era una chica malcriada que siempre hizo lo que quiso y como estaba muy buena la tenían como una diosa, en cambio Rebeca era más callada y recatada, lo cual le daba un aire de niña buena que me ponía muy caliente.
Por suerte para mí el veranito llegó pronto y se le empezó a dar uso a la piscina que teníamos. Mis expectativas fueron cumplidas con creces, ver a las dos hermanitas en bikini eras una delicia. La joven Helena tenía unas piernas largas las cuales le encantaba lucir vistiendo un pequeño bikini que solo tapaba la mitad de esas preciosas nalgas. Rebeca más modosita pero al igual que su hermana sugiriendo que estaban bien dotadas con unos pechos bien redondeados aunque no demasiado grandes, perfectos para mi gusto. Voy a reconocer que me la toque alguna vez recordando como salían de la piscina con el cuerpo todo mojado y se paseaban por el jardín, vista que puedo deleitar desde la ventana de mi cuarto que da a la piscina.
Como ya conté Helena era una malcriada que trataba a la gente como sus criados y yo no fui menos, también con antipatía como si hubiese fastidiado su vida feliz que tenían las tres solas antes. Ya que nuestros padres estaban casi todo el día en el hospital, nos pasábamos la mayor parte del tiempo los tres solos al venir del colegio, por lo que dividimos las tareas de la casa entre los tres. Como esperaba Helena no hacía nada de sus tareas y se pasaba todo el día a su bola en la habitación o tomando el sol, por lo cual, la pobre Rebeca siempre le tocaba hacer las tareas de su hermana.
Pasados unos días se me terminó la paciencia de ver como e Helena no ayudaba en nada y se lo eche en cara. Como era de esperar la niñata muy chula me dijo que yo no le daba órdenes y que a Rebeca no le importa hacer sus tareas también. Helena miró a Rebeca y esta rápidamente disculpó a su hermana, diciendo que a ella no le importaba. En ese momento no entendí la actitud de Rebeca pero con el tiempo lo entendería todo, más adelante también lo entendereis vosotros.
Con el cabreo me fui para mi cuarto y no dejé de darle vueltas a cómo darle una lección a la niñata de Helena para que se le bajen los aires de grandeza que tiene. Tengo que reconocer que la imaginación se me fue de las manos con fantasías de sumisión de ese cuerpazo tostado por el sol. Con el calentón que tenía me vino a la cabeza lo buena que tendría que estar desnuda y la idea de espiarla me vino a la cabeza para quedarse. La idea de espiarla en la habitación la veía imposible ya que siempre cierra la puerta y la puesta de Rebeca está justo enfrente, con que tenía muchas posibilidades de que me cazase. Mientras la observaba tomando el sol por la ventana, me acordé de que siempre tenía la misma rutina, una baño en la piscina al cansarse del sol y directa al baño de nuestro piso para ducharse, lo cual hace siempre con mucha calma. Me puse a buscar la cámara de video para colocarla en el baño y así grabarla mostrando todo su cuerpo antes de entrar en la ducha.
La encontré y solo tenía media carga de la batería, suficiente me dije, mientras pensaba lo bien que me lo iba a pasar esta noche tocandomela mientras veía el video de la malcriada. Me puse a esperar en mi cuarto hasta que escuché que se tiró a la piscina y salí corriendo para el baño con la cámara. Nada más entrar me entraron las dudas de donde esconder la cámara, si la encontraba me metería en un buen problema y vi la solución perfecta. Como siempre Helena no recogió el montón de ropa sucia que vamos dejando, el lugar perfecto, ya que ni se acercaría a ella. Coloqué la cámara entre la ropa sucia apuntando hacia la ducha y salí corriendo antes de que ella saliese de la piscina.
Como de costumbre Helena se tomó su tiempo para ducharse, aunque esta vez se me pasó más despacio, por las ganas de ver que se había grabado. Como no escuché ningún grito supuse que no la había encontrado y que mi venganza seguía su curso.
Por fin salió del servicio y fui corriendo antes de que pudiese entrar Rebeca, la cual es más espabilada que su hermana y pudiese encontrar la cámara. La cámara estaba justo donde la dejé y para mi alegría aun tenia batería, conque grabó todo el tiempo que Helena estuvo en la ducha. Volví para mi habitación y descargue el video en mi ordenador, la intriga de saber que se grabó pudo conmigo y le dí al play.
Pasaron unos cuantos minutos hasta que se vió entrar a Helena por la puerta y se colocó de espaldas a la cámara, con que se podía ver un plano perfecto de su increíble culo solo un poco tapado por ese bikini diminuto q un poco más y es un tanga. Ahora que podía recrearme bien en su figura, me daba cuenta que está mucho más buena de lo que pensaba, con esa piel morena y cuerpo esbelto. Empezó a desnudarse y pude ver las marcas del bronceado que le dejó el bikini. Ese culito era perfecto, redondito y cuando se dió la vuelta pude ver sus pechos que no eran muy grandes pero muy redondos con unos pezoncitos pequeños. La perspectiva era perfecta para ver su depilada entrepierna con unos rosados labios cerraditos, que daban ganas de pasar la lengua una y otra vez. Casi sin darme cuenta empecé a masturbarme, la imagen era mucho mejor que cualquiera de mis fantasías con la niñata desnuda. Lo real gana mil veces a la imaginación.
Durante un rato se estuvo mirando en el espejo y entró en la ducha. La cristalera de la ducha dejaba ver perfectamente su silueta mientras se duchaba o más bien parecía que estaba bailando. Decidí pasar hacia adelante el video para ver cuando saliese de la ducha y así no cortarme el rollo de la increíble paja que me estaba haciendo. Al poco rato Helena salió de la ducha pero no cerró el grifo, supuse que sería para coger alguna de sus cremas, pero entonces fue cuando me llevé la gran sorpresa.
Helena se sentó en el suelo apoyada en la ducha y empezó a masturbarse con una mano, mientras con la otra se acariciaba los redondeados pechos. La imagen de la chavala toda mojada masturbandose hizo que se me pusiese aun más dura y empecé a masturbarme con más ganas. Se retorcía de placer en el suelo mientras se pellizcaba los pezones, su cara era de puro y descontrolado placer. Empezó a escucharse unos leves gemidos y rápidamente cogió una toalla y se la metió en la boca, para que nadie pudiese enterarse en casa de lo que estaba haciendo. Cuando ya estaba a punto de correrme, Helena me sorprendió con un último numerito. Se arrastró sin dejar de masturbase hasta un cajón y cogió un cepillo de los diente eléctrico, que pensaba que estaba estropeado. Lo enchufó y se lo acercó a su clítoris y su cara de placer se volvió de éxtasis puro. Empezó a convulsionar teniendo un orgasmo que no podía controlar y yo me corrí con la mejor paja que me había hecho nunca.
No me podía creer lo que había conseguido grabar, el video con el que más había disfrutado en mi vida de pajillero. Helena volvió a meterse en la ducha y al cabo de unos minutos salió para secarse y marcharse del baño. Después de una paja aun la tenía dura solo de pensar del tesoro que había conseguido. Decidí hacer copias del video por si acaso y lo escondí dentro de la memoria del ordenador. Ya me quedó resuelto el misterio de porque siempre tardaba tanto en salir de la ducha la muy guarrilla y con un desenlace muy interesante. Tenía en mi poder una mano de poker ganadora, pero sí se sabía jugar. Tenía que pensar bien cómo conseguir utilizar este video para poner a la perra de Helena donde se merece.
Pasaron algunos días y aún no se me ocurría como chantajear a Helena, lo único que se me ocurrían eran castigos y humillaciones que hacerle. No hace falta contar que su vídeo fue mi favorito todas las noches, mientras me masturbaba. Decidí entrar en webs de relatos de dominación para inspirarme un poco y como de costumbre se me fue de las manos y acabe mirando cómo castigar con azotes. La actitud de Helena no cambió, seguía igual de malcriada y maleducada conmigo, lo cual encendía más en mi las ganas de vengarme de ella.
Al cabo de una semana nuestros padres nos dicen que se marchan a unas conferencias y que aprovecharán para quedarse unos cuantos días más, ya que aún no fueron de luna de miel. Rebeca preguntó si podía irse el finde a casa de una amiga y nuestros padres accedieron. En ese momento en mi cabeza solo podía pensar que era el momento perfecto para mi venganza, los dos solos, era una oportunidad que no podía dejar pasar.
Por fin llegó el día que todos se marcharon de casa y nos dejaron a Helena y a mí solos. Aún no tenía decidido cómo actuar pero por si acaso copie el video en la memoria de la televisión del salón, para que se viese bien en la pantalla gigante. Me olvidé de contaros que todo lo que tenía Helena de cachonda le faltaba de lista, con que siempre andaba suspendiendo alguna asignatura. Esta vez le habían quedado tres asignaturas, por lo que nuestros padres la habían castigado sin salir hasta la recuperación.
Estaba sentado en el sofá cuando veo bajar por las escaleras a Helena con un vestido ceñido y muy corto negro, toda lista para irse de fiesta. Voy a reconocer que no apostaba ni un duro a que la niñata cumpliría el castigo sin que estuviesen nuestros padres vigilandola. Me acerqué a ella y le pregunté:
- ¿A dónde piensas ir así vestida?
- A ti que te importa. - me contestó poniendome cara de desprecio.
- Te recuerdo que estás castigada sin salir de casa.
- Yo hago lo que me dé la gana y a ti no te tengo porque dar explicaciones de mi vida. - me decía mientras cogía dinero del sobre que nos dejaron nuestros padre para gastos.
- Lo siento pero tu madre me dijo que no podías salir de fiesta hasta que recuperases los exámenes. - le dije mientras le quitaba el sobre del dinero.
- Pero, ¿tú quién te crees que eres para decirme lo que puedo hacer? - su chulería me estaba empezando a cansar. - Que te den, yo me voy de fiesta.
Helena se giró para coger su abrigo, mientras mi cabreo estaba en aumento y mis ganas de vengarme ya eran incontrolables.
- ¿Quién me creo? Pues el que te va a enseñar educación y a respetarme. - la agarre del brazo y la coloqué sobre mis rodillas en el sofá. Helena no se podía creer la situación.
- Pero, ¿qué estás haciendo? ¡Suéltame ahora mismo! - gritaba mientras se retorcía para intentar librarse.
- Como solo sabes aprender por las malas, voy a hacer lo que tenían que haberte hecho tus padres hace muchos años.
La niñata no se podía creer la situación y yo no me podía venir atrás ahora, si quería lograr mi venganza. Sin dudarlo le dí el primer azote en su redondeado culito, que hizo que Helena dejase por un momento de quejarse. La cara de Helena cambió ya que vió que esto iba en serio y continue dándole azotes uno tras otro, mientras ellas intentaba escaparse. Tengo que reconocer que la sensación de azotar aquel precioso culo era increíble y me estaba provocando una erección brutal.
- ¡Para por favor! - su voz ya no era tan engreída y desafiante, dejando paso a unos sollozos.
- Hoy vas a aprender una lección que nunca olvidarás, niñata malcriada. - le dije mientras le daba dos azotes bien fuertes en sus nalgas.
- Le voy a decir a mi madre y te vas a enterar, cabrón. - gritó de pronto toda enfadada mientras intentaba soltarse de mi agarre.
A estas alturas ya solo me quedaba una opción, endurecer el castigo si quería domar a esta fiera. Le subí la minifalda dejando al aire su precioso culito que ya empezaba a estar enrojecido, el cual solo protegía un minúsculo tanga negro. Para que viese que esto iba muy en serio, decidí arrancarle de un tirón el tanga y comencé a azotar sus nalgas otra vez. Helena pareció darse cuenta de que esto no era una broma y empezó a dejar de intentar escaparse. Su cara de rabia fue dejando paso a sollozos y lágrimas.
- ¡Por favor, no lo volveré a hacer! - me suplicaba entre azotes.
- ¿Hacer el qué? - le pregunté, mientras paraba de azotarla para escuchar su respuesta.
- Salir de fiesta.
- Respuesta incorrecta. - le conteste a la vez que le daba dos azotes bien fuertes y Helena daba un respingo ya que no se los esperaba.
- ¡Obedeceré! ¡Te obedeceré! - me contestó entre lágrimas.
- No se si creerte, nunca me has mostrado respeto como para obedecerme ahora. Seguro que se te olvida pronto y vuelves a las andadas. - le respondí mientras acariciaba su enrojecido culito. Estaba ardiendo, al igual que mi mano de tantos azotes que le había dado.
- Lo prometo, no te volveré a faltar el respeto. - sus respuestas eran desesperadas por encontrar la aprobación y que se terminase aquel castigo.
El castigo me parecía suficiente ya que su culo estaba muy dolorido y tampoco me quería pasar, pero no podía dejar marchar así, aun no me había mostrado la sumisión que deseaba por parte de esta pija malcriada. Recordé un relato de azotes que leí y decidí ponerlo en práctica.
- Bien. Para que este castigo termine me tienes que demostrar que sabes obedecer. - la cara de Helena al oír la palabra “termine” se iluminó y empezó a asentir con la cabeza. - Te voy a dar diez azotes y tu los vas a contar.
- No me azotes más por favor, no aguanto más.
- Y después del número quiero que digas: Gracias, me lo merezco por mal criada. ��Te ha quedado claro? - le interrumpí con seriedad.
- ¿Solo diez y termina esto?
- Si no te equivocas, solo diez. Si te equivocas al contar o no dices toda la frase volveré a empezar con los azotes, hasta llegar a diez. ¿Te ha quedado claro, niñata?
- Si, si, lo hare. - me dijo limpiandose las lagrimas con unos de los cojines del sofá.
Me preparé para darle el primer y sin ninguna piedad se lo di en sus nalga desnuda. Helena dio un quejido y muy obediente contó el azote y dijo la frase que le había ordenado. Nada más terminar la frase le aseste el segundo azote en la nalga contraria y la niñata respondió correctamente a su castigo. El tercer azote decidí dárselo más fuerte, lo que consiguió que Helena soltase unos cuantos sollozos antes de decir su castigo. Las fuerzas ya flaqueaban en ella pero no podía tener piedad ahora sino perdería todo lo que logré. El cuarto azote cayó con ganas en el culito de Helena, lo que le hizo empezar a llorar. Espere un poco pero la niñata no dejaba de lloriquear sin decir su frase, por lo que decidí imponerle el castigo.
- ¡Volvemos a empezar!
- No. Perdón, ya lo digo bien. - me respondió dejando de llorar en el momento que escucho que volvía a empezar. - por favor, no aguanto más. ¡Me duele mucho!
- Fui muy claro lo que sucedería si no cumplias con tu castigo.
- Me voy a chivar de que me estas pegando, se te va a caer el pelo. - su cara de dolor y llanto volvió a una cara de odio y rabia.
Helena había vuelto a recuperar toda su rabia que había perdido con los azotes y volvía a mostrarse retadora. Decidí que era hora de usar mi as bajo la manga, ahora o nunca. Solte a Helena y esta cayó sobre la alfombra a mis pies. Antes de que se levantase encendí la tele que ya tenía el video preparado. Helena no se podía creer lo que estaba viendo.
- Que bien te lo pasa en el baño no?
- Cabrón me grabaste. - me comenzó a insultar y amenazar con que se lo diría a su madre, mientras se colocaba el vestido.
- Tu no le vas a contar nada a nadie, si no quieres que toda la ciudad se mate a pajas con tu video y medio internet.
Se abalanzó sobre el mando de la televisión y le dio a borrar el video. Me miró con cara de victoria y se empezó a reír.
- ¿Y ahora qué? Ya no tienes video, te vas a enterar cuando hable con mi madre.
- Pero piensas que soy tan tonto como tu y que no he hecho copias del video? Las demás copias están bien guardadas. - le dije entre risas mientras sacaba el móvil y le mostraba otra copia del video.
- No te atreverías a subirlo, la gente sabría que me has espiado y te meterias en un problema. - me respondió con su último recurso para ganar esta batalla.
- Al final sería tu palabra contra la mía y yo nunca he roto un plato en cambio tu siempre dando problemas. En cuanto al video no te preocupes, está listo para subir como los videos que circulan por la red de putas que se desnudan para sus novios. Serías otra putitamás, que parece que se ha unido a la moda. - al escuchar estas palabras Helena volvió a empezar a lloriquear y a temblar.
- ¿Que quieres?
- Ya te lo dije te voy a dar una lección para que aprendas educación y a obedecer.
- No me azotes más, por favor. ¡Ya me duele mucho!
- Me da igual que te duela, por eso es un castigo. Continuaremos con el castigo que estábamos y luego ya se verá lo que haré contigo. - le dije mientras subía el sonido del móvil para que escuchase sus gemidos del video.
- ¿Entonces diez azotes sobre tus rodillas? - me contestó la niñata mientras se limpiaba las lágrimas.
- Eso era antes de ponerte tonta. Todos esos insultos que me dijiste tienen un precio. - los ojos de Helena se abrieron como platos, pensando en que aún podía ser peor.
- Me dijiste que continuábamos el castigo y dijiste que eran diez azotes.
- Si, te dije que eran diez azotes si decias bien tu frase, pero no dije cómo iban a ser esos diez azotes. - Helena seguía aún en el suelo aterrorizada esperando como iba a ser su castigo.
- ¿Y cómo serán?
- Bien, primero te colocarás sobre el apoyabrazos del sofá, se terminó tener que agarrarte. - Helena se levantó del suelo y se dirigió hacia el sofá con la cabeza gacha. - Y lo harás desnuda.
- ¿Desnuda? Ni de broma. Eres un salido. - me contestó con rabia.
- Y me sigues faltando el respeto. Tu no aprendes niñita. - Helena se dio cuenta de su error y empezó a pedir perdón. - Quitate la ropa, colocate en el sofá y prepárate porque los cinco últimos azotes serán con el cinturón por los insultos.
- ¿Con el cinturón? No por favor, eso tiene que doler mucho.
- Colocate como te he dicho o iré aumentando el número de azotes con el cinturón. - le dije mientras me sacaba el cinturón de piel que llevaba.
Cuando Helena vio el cinturón toda su rebeldía desapareció y empezó a quitarse el vestido. Como dije el video era mejor que la imaginación, pero sin duda verla en persona desnuda ganaba a todo. Se fue colocando como le dije en el reposabrazos del sofá, mirándome con cara de cervatilla asustada.
- ¿Recuerdas lo que tienes que decir con cada azote? - le pregunté mientras dejaba el cinturón delante de suya en el sofá.
Me respondió con la cabeza y se agarró a uno de los cojines intentando taparse un poco, ya que estar desnuda le estaba dando mucha vergüenza. Me acerqué a ella y sin previo aviso le dí el primer azote en su hermoso culo. Helena se apretó contra el cojín y dijo su frase sin ningún error. Los azotes fueron cayendo sin interrupciones, parecía que había aprendido la lección de que no podía confundirse en su respuesta, si quería poder sentarse mañana. Cuando llegó el turno de usar el cinturón decidí hacerlo con calma para que pudiese pensar en lo que le venía ahora. Su cara volvía a estar con lágrimas, las cuales le habían hecho correrse el rimel que se había puesto para salir de fiesta. Me miró mientras cogía el cinturón y se agarró fuerte al cojín.
Levanté el cinturón y le propiné un correazo que acertó en las dos nalgas, el cual le hizo soltar un grito a la niñata de Helena. Empezó a lloriquear e intentó decir su frase entre sollozos. Decidí darle un poco más suave el segundo azote, que ya tenía muy enrojecido el culo. Otro chillido entre llantos salió de la boca de Helena, mientras se frotaba el culo para intentar calmar el dolor punzante que le provocó el cinturón. La miré en silencio y se dio cuenta que estaba esperando su contestación y rápidamente la dijo con la voz entrecortada por los sollozos. El tercer azote con el cinturón volvió a acertar en las dos redondeadas nalgas y hizo que Helena mordiese el cojín para ahogar su chillido de dolor. Con la respiración entrecortada dijo su frase mirándome con unos ojos en los que ya no quedaba ni rastro de la rebeldía y rabia que veía hace un rato.
Como había leído en algunos relatos de dominación siempre hay que dar una de cal y otra de arena, para que no te vea solo como un monstruo que la castigas. Decidí parar el castigo ya que estaba muy satisfecho con los resultados que estaba teniendo.
- ¡Ponte de pie! - Helena me miraba desconfiada, pensando que aún le quedaban dos dolorosos correazos para terminar su castigo. - Has obedecido muy bien y has aceptado sin tonterías tu castigo. Por lo que te voy a perdonar los dos últimos azotes.
La cara de Helena se relajó y se puso de pie con las manos frotando su dolorido culo. Yo dejé el cinturón en la mesa, lo que hizo que Helena dejase de llorar, pero desconfiando un poco.
- Como eres una niña malcriada, continuaremos tu castigo como se les hace a las niñas pequeñas. Te vas a colocar cara a pared con las manos en la cabeza, sin moverte hasta que yo te lo diga. ¿Te quedó claro o volvemos a los azotes?
- ¿Me puedo vestir? No quiero estar desnuda. - dijo mientras intentaba taparse con los brazos.
- No he dicho que te puedas vestir. Conque haz lo que te dije o volvemos al castigo de antes. - le contesté muy serio mientras me acercaba al cinturón.
Al verme acercarme al cinturón Helena corrió a colocarse cara a la pared como le dije. La estampa era increíble, viendo ese culito todo rojo y la niñata sumisa como solo había pasado en mis fantasías. Decidí ir un rato a la cocina desde donde podía ver a mi nuevo juguete, que de vez en cuando se miraba si enrojecido culo. Tenía una erección brutal y cada vez que miraba para Helena se me ponía más dura aún. Había conseguido vengarme con creces de la pija de mi hermanastra pero ahora quería que fuese mía.
Después de dejarla un buen rato mirando para la pared, tocaba la hora de someter a mi nuevo juguete y disfrutar de ese increíble cuerpo que me estaba volviendo loco. Volví a poner el video en la pantalla del salón y Helena se giró rápidamente al oírlo.
- No, por favor, quita eso.
- ¿Quien te dijo que te movieses? - rápidamente volvió a colocarse con las manos en la cabeza como le había ordenado.
- Perdón, pero por favor quita ese vídeo.
- Date la vuelta. - le ordené mientras me acercaba ella. - ¿No te gusta escuchar los bien que te lo pasas en la ducha?
- Me da verguenza que lo veas. Por favor, ¿me puedo vestir? - se le notaba muy ruborizada mientras yo estaba disfrutando de las vistas que me ofrecía.
- No y tranquila que ya he visto el video unas cuantas veces, aunque reconozco que estás mucho más buena en persona.
Agarre sus manos por encima de su cabeza y la apoye en la pared. Helena volvió a poner cara de sorprendida mezclada con miedo por lo que le podría venir ahora.
- Dime qué estabas haciendo en el baño.
- ¿El qué? - contestó toda ruborizada.
- Explícame con detalle lo que estabas haciendo.
- No, por favor me muero de vergüenza.
- Os haces lo que te digo o volvemos a los castigos como antes. - le dije a la vez que le daba un pellizco en una de sus redonditas tetas.
- Ahhh, para, lo haré. Me estaba masturbando. - dijo entre quejidos por el escozor que le había producido el pellizco.
- ¡Con detalle! - le ordene mientras le daba otro pellizco en la teta que le hizo dar un chillido.
- Me estaba acariciando con los dedos entre las piernas porque estaba muy cachonda. Me quería correr.
Sin previo aviso metí los dedos de la mano que no estaba asando para agarrar sus brazos entre sus piernas y empecé a acariciar sus rajita. Helena se sorprendió e intentó cerrar las piernas, pero se lo impedí separando sus piernas con mis pies. Su cara era una mezcla de sorpresa, rabia y aunque ella lo negaba placer.
- ¿Qué haces? Para por favor, ya me has humillado suficiente.
- Creeme niñata aun te mereces muchas humillaciones más. - le dije a la vez que aumentaba el ritmo de mis caricias en su rajita, la cual empezaba a humedecerse. - Parece que te está gustando, que ya te empiezas a mojar.
- No me gusta, para por favor, esto ya es pasarse. - me contestó entre sollozos.
- Conque no te gusta, pues para que veas que soy bueno te voy a dejar elegir cómo seguirá tu castigo. Podemos volver a los azotes, que parece que hicieron muy buen efecto antes o podemos seguir con este nuevo castigo. Tu decides.
- No me castigues más, por favor. No quiero ninguna de las dos. - suplicaba entre lágrimas.
- Pues entonces elegiré yo por ti y creeme no te gustará. - le dije mientras acariciaba su mojado clítoris, lo que le hizo estremecerse.
- Por favor no me azotes más. - dijo mientras intentaba disimular que se estaba empezando a estremecer de placer con mis caricias.
- Entonces di lo que quieres. Quiero oir como lo pides.
- Por favor quiero esto. - me contestó Helena mientras se mordía el labio inferior de la boca.
- Y qué es esto? Pidelo bien o volvemos a los azotes. Última oportunidad. - metí dos dedos dentro de su mojada rajita, lo que hizo que le empezasen a fallar las piernas.
- ¡Ahhh, dios! ¡Por favor, no pares de masturbarme!
La giré y la puse contra la pared, frotándole toda mi polla erecta en su rico culito y mastubandola sin parar. La niñata se estaba volviendo loca, sus espasmos cada vez eran más fuertes y sus jadeos aumentaban cada vez que le metía los dedos. Estaba apunto de correrse la muy guarrilla mientras meneaba el culo frotando mi polla en los pantalones. Sus gemidos se aceleraron y un espasmo recorrió todo su cuerpo, haciendo que las piernas le fallaran cayendo de rodillas al suelo. Se había corrido y ahora se encontraba toda extasiada a mis pies, mirándome con una cara que mezclaba el placer y la vergüenza de lo que acababa de pasar.
- Te has corrido bien guarrilla. ¿No piensas darme las gracias, niñata?
- Gracias. - pudo decir con la respiración acelerada y sin mirarme por la vergüenza. - ¿Puedo vestirme ya, por favor?
- Aún no guarrilla, que no se ha terminado tu castigo. Esto solo ha sido parte de tu castigo, para que veas que si obedeces no serán tan malos los castigos que te esperan. - Helena estaba desconcertada, con miedo de los que le podrá venir aun.
- ¿Qué quieres? - me pregunto con cara de no querer saber la respuesta que tenía en mente.
- Ahora me toca disfrutar a mi, ¿qué se te ocurre para contentarme y librarte de unos azotes?
- ¿Quieres correrte tú también? - dijo Helena en voz baja con vergüenza.
- Ves como eres muy lista cuando quieres niñata. Quiero que me la chupes.
La cara de Helena parecía que acababa de despertar de un sueño al sonar un despertador. La agarre del brazo y la lleve hacia el sofá, notando que aun le fallaban un poco las piernas del orgasmo de hace unos minutos. Me senté en el sofá y le indiqué que se pusiese delante mía, lo cual la niñata dudo en si hacerlo.
- Como me hagas perder el tiempo cojo el cinturón y te aseguro que no te vas a poder sentar en unos cuantos días. - la palabra cinturón resonó en la cabeza de helena y rápidamente ocupó el lugar que le dije. - Muy bien, ¿a ver qué sabes hacer guarrilla?
- Nunca he hecho algo así. Por favor, me da asco meterme eso en la boca.
- Con lo putita que eres de fiesta, me extraña que nunca lo hayas hecho. Menuda calienta horno estás hecha niñita. - Le decía cruelmente mientras acercaba su carita a mi entrepierna.
- Por favor…
- ¡O me la chupas ya o cojo el cinturón, elige ya! - interrumpí dándole un tirón en el pelo.
Helena empezó a lloriquear, pero obedientemente empezó a desabrochar mi pantalón. Yo estaba muy cachondo con la situación y tener a esa preciosidad de rodillas para chuparmela me la estaba poniendo muy dura. Cuando Helena sacó mi polla toda erecta, se le notó una cara de sorpresa al verla apuntando hacia su cara.
- Que, ¿te gusta lo que ves?
- Nunca había visto una sin ser en una peli y es más grande de lo que pensaba, no me va entrar en la boca. - decía toda avergonzada mientras miraba mi polla.
- Tu tranquila que con práctica te entrará toda en esa boquita de pija que tienes. - le contesté mientras le empujaba la cabeza para que se la metiese en la boca.
La mejor de las sensaciones, estaba siendo mucho mejor de como me había imaginado, aunque solo me estaba chupando el capullo y sin parar de hacer ascos. La agarre del pelo y la forcé a que se tragase más polla, lo que le provocó una arcada al tocar su campanilla. Se la saqué de la boca para que respirase un poco pero no le solté el pelo. Parece que no le gustaba nada y empezó a resistirse un poco, pero con el calentón que tenía no lo iba a permitir. Le volví a empujar la cabeza para que se tragase mi polla y que continuase con esa increíble mamada que me estaba haciendo. Volví a poner el video en la pantalla del salón, lo que pareció que no le hizo mucha gracia a la guarrilla. Me estaba costando mucho controlarme para no correrme en el momento, la chica tenía muy buenas habilidades que si perfeccionaba un poco podría ser una chupa pollas increíble.
Ya no podía aguantar más, estaba a punto de correrme. Me puse de pie y agarre a Helena por el pelo para que siguiese chupándomela con más ritmo. Se la saqué de la boca y me corrí en su cara. Helena cerró los ojos imaginándose lo que le venía encima. La imagen era increíble, toda mi corrida sobre la carita angelical Helena, mietras ella intentaba limpiarse un poco los ojos para poder abrirlos. Cogí el móvil y le saqué unas cuantas fotos, la pobre estaba tan agotada y humillada que no dijo nada.
- Así estas muy guapa putita, te queda muy bien mi corrida por la cara.
- Quiero limpiarme. - dijo con mucho asco.
- Pero para limpiarte te lo vas a tragar. - Helena se quedó congelada y empezó a decirme que no con la cabeza y a lloriquear otra vez.
- Eso sí que no, ya me está dando asco tenelo por la cara.
- Mira perrita esta es la última vez que te lo digo, obedeces o cojo el cinturón.
Helena no se podía creer lo que le estaba diciendo y se dió por vencida, ya que no quería volver a pasar por los azotes con el cinturón, que aún le escocían en el culo. Despacio empezó a arrastrar con el dedo toda mi corrida hacia la boca y a tragarsela con una cara de asco que parecía que iba a vomitar. Estaba alucinado de lo bien que me había salido todo, había conseguido domar a la malcriada de mi hermanastra y la había convertido en mi putita. Sin que me diese cuenta ya eran las tantas de la madrugada, con que decidí dejar descansar a mi nueva perrita, la cual estaba en el suelo sollozando y viéndose en el video que aun seguía puesto en la televisión.
- ¿Vas a borrar el vídeo, por favor? He hecho lo que querías, te juro que no se lo diré a nadie.
- El video y las fotos que te saqué con la carita toda llena de leche las borrare cuando hayas aprendido la lección. - le conteste mientras apagaba la tele.
- He aprendido, no volveré a ser maleducada y te obedeceré. - me suplico.
- Esta ha sido tu primera lección niñata y aun te quedan muchas más. Ahora vas a ir a tu habitación y me vas a traer tu celular y laptop.
- Mi celular, ¿por qué? - Me pregunto toda asustada.
- Ves, por cosas así necesitas seguir recibiendo lecciones. Tu solo obedeces y si no lo haces volveré a ponerte sobre mis rodillas. ¿Te ha quedado claro?
Sin decir ni una sola palabra Helena se puso en pie y fue a coger su móvil a su bolso que lo dejó en la cocina cuando se estaba preparando para salir. Lo sacó de su bolso y dudo un poco en darmelo, pero rápidamente se lo saqué de las manos.
- ¿Cuál es la contraseña para desbloquearlo?
- ¿Para que… - se cayó al recordar lo que le podía pasar por no obedecer. - 6789.
- Muy bien, ahora me traerás tu laptop y me pondrás las contraseñas de tu Facebook y tu Twitter.
Helena subió a su cuarto sin decir nada solo algún sollozo. La imagen de verla desnuda por la casa me la estaba volviendo a poner dura, menudo escándalo de cuerpo tiene la niñata. Al poco rato me trajo su portátil y me colocó las contraseñas, para que pudiese ver todas las fotos que tenía.
- ¿Puedo limpiarme la cara y vestirme?
- Sube a darte una ducha y luego a dormir, que mañana vas a tener un día muy largo y necesitarás las fuerzas.
Me dió las gracias y se fue para arriba con su vestido negro en la mano. Me senté en el sofá a descansar un poco, ya que estaba agotado. En la cabeza no me dejaban de venir ideas para seguir humillando a mi perrita y guarradas que le quería hacer a ese cuerpazo. Borré el vídeo de la memoria de la televisión, no vaya a ser que lo viese alguien y se me terminó la diversión. Cuando subí a mi habitación pasé por la habitación de Helena, la cual ya estaba dormida y yo decidí ir a hacer lo mismo, ya que al día siguiente a primera hora quería empezar con el castigo de la malcriada de mi hermanastra.
Mañana será otro día.
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macarraqui · 2 years ago
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Los antibióticos son uno de los logros médicos más significativos del siglo XX
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Fragmento de Cartas a un joven poeta (Rainer Maria Rilke, 1875-1926).
Pobre R. M. Rilke. En sus cartas describe con claridad los primeros síntomas de su tuberculosis pulmonar, confundiendo los problemas respiratorios que presentaba con los de la gripe («causado por la gripe, que me volvía incapaz de todo /…/ me vine al mar»).
En ese entonces, la tuberculosis no tenía cura con antibióticos, y una de las principales recomendaciones médicas era que los pacientes se trasladaran a lugares con abundante luz solar, una práctica conocida como helioterapia o baños de sol.
El efecto beneficioso del sol en la mejoría de estos pacientes se conoce desde hace siglos. Esto se debe tanto al efecto directo de los rayos solares sobre la bacteria como al aumento en la síntesis de vitamina D. Por esta razón, a menudo se aconsejaba que los enfermos de tuberculosis se mudaran a zonas costeras con alta exposición solar.
Aunque la leyenda afirma que la causa de su muerte fue una infección cutánea llamada esporotricosis, producida por Sporothrix schenckii, un hongo presente en maderas y vegetales con espinas, tras un pinchazo con una espina de rosal, el poeta ya estaba muy debilitado y consumido por la tuberculosis (tisis).
Hoy en día, las dos enfermedades infecciosas que sufrió Rilke, la tuberculosis y la esporotricosis, son completamente tratables y curables con antimicrobianos.
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inaudacias · 5 years ago
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El pesimismo es un cadáver
Por lo que lo conozco creo que no es tan malévolo como para mentir sobre la fecha de su cumpleaños. Creo, se me hace, que usted pensaría en las palabras gastadas, en la tinta derramada, y entonces decidiría que por el bien del flujo de los afectos es mejor dejar la fecha real. Es decir, la que sea valiosa para usted, quizá independiente del día en que fue recibido por un equipo médico luego de un arduo trabajo de parto de su madre. No sé, a mí se me hace que es posible que su padre estuviera sentado mirando, lo digo porque veo cierta generosidad en su mirada paciente. Aunque a decir verdad, de prole a prole, creo que a usted también lo crió mayoritariamente su madre. Porque no se puede ser tan sensible en esta sociedad sin haber tenido una gran carga de sensibilidad ahí. Yo también la tuve y me reconozco en su camaradería infinita. Mucho más ancha que la mía, ciertamente.
En fin, estos días han sido rough days para mí. He sido evasivo y apenas si me da el cuerpo para levantar la mirada y soltar un gracioso "¡Ey! un nuevo día". Porque no sé, ya los días se van volviendo un poco duros y parecen desencajarse y encajarse en el calendario como figuritas geométricas de algún juego para desarrollar la habilidad espacial de los infantes, ¡los pobres!, como lo fuimos usted y yo ¡Já! en eso nos parecemos todos. Y curiosamente, eso celebramos hoy con estas palabritas.
Amigo... la noche es larga, apenas va comenzando. Y su cumpleaños fue una excusa para retomar la escritura. Así que antes de avanzar quisiera decirle con toda franqueza que es usted un gran amigo, y eso que sin exagerar podríamos contar las veces que hemos estrechado la mano. La suya siempre tibia. Por eso mismo, quizá, su amistad se hace más patente hoy que otras amistades, porque nunca ha dependido de los encuentros. Incluso fui su amigo cuando en el cine no me alcanzó y por la noche me contó mi reacción y dijo que para entender las películas miraba los rostros de la gente cuando los filmes finalizaban y me pareció usted una persona muy generosa. Me perdonará, eso sí, el tono de estas palabras, sin embargo, podrá reconocer que ya no llevan la gravedad de las palabras que ofrecí como brindis en la fiesta de quince años de mi novia de adolescencia. Aunque a ella le gustaron y por eso nos amábamos tanto.
Como le decía, los días son como figuritas móviles y ya no indican absolutamente nada más que mi incapacidad para organizarlas. Me he olvidado por completo de los días del mes y he dejado de pensar en el tiempo en que sea lícito salir de casa. Me he chocado de frente con mis deseos y he entendido la máxima de Spinoza según la cual la servidumbre son los afectos. La forma más rápida de aplacarlos ha sido el entretenimiento rápido, he consumido sin parar comedia ligera, hasta quedar dormido sin más. He reído mucho, amigo, mientras le he corrido a la energía del deseo. Creo mientras río, ingenuamente, que le estoy ganando la carrera. Aunque no llegaré a la cima... como bien han dicho otros antes: el pesimismo es un cadáver y somos afirmativos:
¡Cómo lucha la vida encarnizadamente contra el pesimismo, contra la nada! Convéncete de que mientras seas un ser, una individualidad, mientras seas afirmativo, no eres pesimista; cuando más, puedes presentir la sombra de la nada. Schopenhauer no era pesimista, porque odiaba. Este divino nombre no lo busques sino en donde nada exista, ni odio ni amor; no lo busques sino en la absoluta indiferencia… De todo lo visible lo único que puede dar una idea del pesimismo que nos hace presentir la razón, es un cadáver. Fernando González, Pensamientos de un viejo.
Sin más, me despido, esperando un nuevo día.
Le regalo el Cristo sobre la piedra fría de Juan de Flandes. Una pintura que hoy, me parece, es sobre la imposibilidad del pesimismo.
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Cristo sobre la piedra fría, de Juan de Flandes. Imagen tomada de: Museo del Prado
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jartita-me-teneis · 6 months ago
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@DaniMayakovski
Un 20 de agosto de 1998, Estados Unidos bombardeaba con 13 misiles crucero la mayor fábrica de medicinas de toda Sudán, en mitad de una hambruna en el país que mató a 70.000 personas. Hoy día, este mismo pais, Sudán, sufre un golpe de estado organizado por EEUU/UK/UE para evitar que Rusia construya una base naval en el Mar Rojo. La fábrica en aquel entonces producía medicamentos para enfermedades tan agresivas como la malaria y el dengue, proporcionaba el 90% de los suministros médicos vitales que necesitaban los habitantes de Sudán y también en parte el de los países vecinos. Tras el crimen de guerra, Estados Unidos, lejos de disculparse por bombardear la mayor fuente de recursos médicos de la región, se inventó de manera absurda que la fábrica estaba vinculada a la producción de armas químicas de Osama bin Laden. Después del bombardeo, el sistema de atención médica sudanés, repito en mitad de una gran hambruna, colapsó y dejó a MILES de pobres sin suministros médicos y muriendo de graves enfermedades, incluso 25 años después, todavía arrastran la destrucción de esa fábrica. Sudán solicitó una disculpa oficial varias veces desde el crimen de guerra, pero EEUU nunca pidió perdón ni pagó ninguna compensación por el crimen de guerra, ni la ONU le sancionó ni la UE le bloqueó económicamente, ni nada de nada. EEUU años más tarde se vio obligado a admitir indirectamente que bombardearon el objetivo equivocado cuando tuvieron que descongelar las cuentas bancarias del dueño de la fábrica de medicinas, Salaheddin Idriss, luego de una demanda millonaria. Crímenes del imperialismo ocultos, que no les interesa recordarlos a sus medios de incomunicación.
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revistapipazo · 10 months ago
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Semana Santita [Cap. 2]
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Después de aquella fatídica caída, donde me hice cagar el cráneo, tuve que pasar en esa linda posta por un pinchazo de Dipirona, su yodo en la herida, y era.
“Váyase nomás, no tiene nada. Oiga, y no tome más, mire que por eso los curaos con malas caídas incluso se mueren.” -Me dice alguien que no era médico, ni enfermera, ni nada similar. De seguro era el hueón que trapea los pisos.-
En realidad no tenía nada, sólo un tajo de medio centímetro que chorreaba sangre a borbotones y que ni puntos merecía. Lo peor era el estado etílico que agudizaba el escándalo del momento.
La Loreto estaba desesperada por arrancar de ese antro feo y pobre, y yo también. El olor era nauseabundo, y la gente que me rodeaba más que enfermos, parecían delincuentes mayores, así que cómodas no estábamos.
“Bueno, qué hacemos al final?” -Me pregunta la Lore, con claras ganas de que vayamos a Viña de todas maneras.-
“Todavía querís ir a Viña, hueona?”
“Sí poh! No quedamos en éso?”
“Ay, no sé, necesito dormir, me siento como la callampa, culiá.”
“PF! Dormís en el bus y allá vemos poh. No te pongai cuática!”
Como la insistencia de la Loreto era “vamos o vamos”, y no tenía ganas de atado alguno, le dije que bueno, así que salimos medias asustás a eso de las 15°° hrs. con ganas de NO encontrarnos con los pacos culiaos y tener que mamarnos sus pajas, cual delincuentes prófugas de la maravillosa justicia shilena.
Como no había moros en la costa, rápidamente tomamos un taxi y en 15 minutos estábamos nuevamente en el terminal de buses. A esas alturas todo mal momento ya se había olvidado, así que íbamos felices como perdices camino a 4 días maravillosos de relajo y juerga.
“Llegamos, buscamos dónde quedarnos, duermo unas 5 horas, y listo para organizar nuestra regia salida.” -Pensé yo, ilusamente.-
Para partir, no habían pasajes en ninguna cagá de línea, encontramos pasajes en el terminal Santiago en un bus hecho mierda, sólo hasta Valparaíso, con pasajes inflados en un 5003%, un auxiliar que vendía arriba huevos duros, pan amasado y NINGUNA puta hueá para tomar “Porque llevamos ‘bibias’, pero están calientes, shiquillas”; así que cagadas de sed y hambre, viajamos todo el puto camino conversando puras hueás, escuchando música, leyendo el diario y sin dormir ni medio segundo.
Llegamos como a las 18°° hrs al terminal de Valparaíso, y no nos la pudimos para ir a Viña. Decidimos quedarnos en Valparaíso, buscando dónde quedarnos, con algunos datos que nos dieron en el terminal. Todo copado, y lo desocupado era una mierda demasiado expensive.
Ya rendidas, fuimos a comer algo por ahí, cuando un tipo nos da un “dato” en el antro donde comíamos.
“Buscan alojamiento? Shiquillas, tengo un dato súper bueno, barato, limpiecito, con ‘telecable’, agüita caliente [?], comidita casera buena, lugar tranquilito, nadie las va a molestar ahí cabras, ah!”
“En serio? Cuánto es ‘barato’? -Preguntamos.-
“Aer, esperen, voy a llamar al tiro, para que se vayan directo”
El asunto, es que la ‘pensión’ está emplazada frente al terminal de buses. Ésta es una hueá fea, hedionda, húmeda, oscura, mal… pero cobraban 7 lucas por noche, en una pieza con dos camarotes de palo, una cerradura que constaba de un candado coreano, un tubo fluorescente por lámpara en el techo de 5 metros de altura, y la bendita televisión con cable. Ideal para mí, que lo único que quería era echarme como vaca y dormir alguna hueá.
“Iso, yo me voy a duchar para que salgamos, Wiiiiiiiii!” -Me dice la Loreto, cosa que a mí no me causó gracia alguna.-
“Lore, a ver? Qué hueá voh? No pensai dormir algo?”
“Ah, voh creís que vine a dormir?” -Tirándome claramente la caballería encima.-
“Hueona! No hemos dormido nada, y yo no tengo gana alguna de salir ahora! Además es Jueves Santo, tú creís que vamos a encontrar algo abierto para huevear?”
“Ah, no sé yo, pero de seguro que algo hay. Aprovecha de dormir un rato mientras me arreglo, pero de que salimos, salimos!”
Quedé con ataque al píloro, porque me vi obligada a salir con esta cabra culiá, así que me acomodé para dormir al menos un par de horas. PICO! En 40 minutos, la hueona reculiá conchetumare, maraca de la Lore me estaba despertando y echándome la foca porque no tenía ni la más mínima intención de levantarme.
Por la súper chucha, me tuve que levantar, duchar y acicalar para salir con esta perra culiá deseosa de que se lo pusieran en semana santa.
Taxi:
“Señor, dónde podemos ir a tomar y comer algo acá, hoy?” -Pregunta la Lore al chofer.-
“Pucha, difícil por la fecha, pero en la subida Ecuador, demás que encuentran algo abierto.”
“Llévenos, por favor.” -Fue la orden maldita de la Lore.-
Increíblemente, la cagá de subida estaba atestada de hueones, pero todo ese paraíso rasca de antros tóxicos estaba cerrado en un 90%. Sólo habían un par de hueás abiertas, cuál de todos más feos, entre ellos un bar metalero, “El Martillo” creo que se llamaba, -hueá que yo no pisaría ni por hueveo-,  cuando preguntamos a una pareja de lagis qué nos recomendaban:
“Chiquillas, el ‘Coyote Quemado’, obvio!”
Partimos a la hueá directo, que estaba en la punta del cerro, literalmente.
La cagá estaba casi llena, nos atiende una mina, nos pasa la carta y OH, SORPRESA! La hueá era ultra barata! Copetes a $500, $1.000, $1.500, así como mucho muy caro. La Loreto estaba vuelta loca, queriendo tomarse toda el bar, pidió cuánta hueá se le ocurrió:
“Tráeme para partir unos golpeaditos, un Margarita, unas tablas, y blá. Qué querís tú, Iso?”
“Un té.” -Fue mi en extremo lacónica respuesta.-
“QUÉ!?!?!?!?!?! HUEONA, CÓMO CHUCHA VAI A QUERER UN TÉ!”
“Quiero un té, ojalá con leche. Tengo frío, tercianas, me cago de sueño y no estoy ni ahí con tomar copete. Yo quiero un té. Tienen supongo?” -Le digo a la mina, mirándola con cara de asco.-
“Eeeeh, no. Acá no vendemos té, esto es un PUB.”
“Entonces no quiero ninguna hueá. Punto.” -Protestando sutilmente ante mi no pescada negativa a salir.-
“A ver, déjeme preguntar si le pueden preparar un té.” -Con una evidente cara de entre plop y asco.-
La Loreto me quería matar, odiaba mi resistencia a lanzarme, y quería cortarme las tetas. Pero a mí, realmente me importaba un soberano coco de leproso. Yo quería dormir.
En fin, después de pasar toda una ETERNA noche tomando tecito, que mi mal estado físico me llevara a buitrear 1503 veces, que me quedara dormida como 5 veces en la mesa, que la Loreto se tomara todo el bar, que nos echaran con grúa de la hueá;  AL FIN nos fuimos tipo 5 am.
Al salir y querer puro morirme, había un grupo de hueones metaleros afuera del “Martillo”, que al vernos pasar nos gritan dicen:
“Oye minas! Vamoh a un after!”
Yo casi lloro, porque sabía que la Lore se prendería con la hermosa “invitación”, hasta que quedó la cagá.
“VAMOS!” -Me dice la Lore.-
“No hueona, yo me voy. Si querís, anda tú, pero yo no puedo más… en serio.”
“Puta la hueá, no sé pa’ qué chucha vine contigo, nunca podís carretear más de dos días seguidos! Sabís qué más? Ándate a la mierda, mañana voy a llamar a la Sú y la voy a invitar. Ella sí que jamás se negaría a carretear y lanzarse como corresponde. ÁNDATE HUEONA, ÁNDATE NOMÁS! ARGH!”
La Loreto se fue con los metaleros, yo me subí a un auto, y arriba del taxi logré captar que al llamar a la Sú, se vendría el infierno.
(Continuará…)
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