#la poética del espacio
Explore tagged Tumblr posts
Text
«Dentro y fuera forman una dialéctica de división y la evidente geometría de dicha dialéctica nos ciega en cuanto la aplicamos a terrenos metafóricos. Tiene la claridad afilada de la dialéctica del sí y del no que lo decide todo. Se hace de ella, sin que nos demos cuenta, una base de imágenes que dominan todos los pensamientos de lo positivo y de lo negativo. Los lógicos trazan círculos que se superponen o se excluyen unos a otros, y enseguida todas sus normas se aclaran. El filósofo piensa el ser y el no ser con lo de dentro y lo de fuera. La metafísica más profunda se ha enraizado así en una geometría implícita, en una geometría que —se quiera o no— espacializa el pensamiento; ¿si el metafísico no dibujara, pensaría? Lo abierto y lo cerrado son para él pensamientos. Lo abierto y lo cerrado son metáforas que añade a todo, incluso a sus temas».
Gaston Bachelard: La poética del espacio. Fondo de Cultura Económica, págs. 291-292. México, 2020
TGO
@bocadosdefilosofia
@dies-irae-1
#gaston bacherlard#bachelard#la poética del espacio#dialéctica del sí y del no#abierto#cerrado#imaginación#imagen#imágenes#imaginación poética#espacio#espacialización#filosofía#filósofo#lógico#lógica#metafísica#pensamiento#metáfora#teo gómez otero#dialéctica dentro-fuera#dialéctica abierto-cerrado#poética del espacio#ser#no ser#no-ser
3 notes
·
View notes
Text
Toda mi vida escribí con tanta tristeza, que si quisiera escribirle a la felicidad, al amor, y a las cosas plenas, siento como si mi poética no es el espacio para esas flores.
Pareciera que mi poesía es mi lugar seguro durante la tormenta, y cuando hay mucha iluminación solo me tapa del sol.
Suena patológico… será patológico?
Belle 𖥸
#citas#frases#notas#escritos#sinfonia-relativa#redcomunitariatumblr#amor#sinfonia relativa#vida#destino#meizza#belle#julio2024
25 notes
·
View notes
Text
José Vidal Valicourt + Puter, un viaje a través de la palabra poética y la música
José Vidal Valicourt (Palma 1969). Licenciado en Filosofía y, ahora mismo, profesor de esta materia. Autor, además de varios poemarios, artículos periodísticos, ensayos breves y colaboraciones con artistas plásticos y performáticos, de El hombre que vio caer Deleuze (Sloper), Tomas falsas (Pre-Textos), Lisboa Song (Eutelequia), Meseta (El Gaviero), Blanchot: espacio del desastre (Rilke…
View On WordPress
#espai sant marc#espaisantmarc#josevidal#josevidalvalicourt#mallorca#musica#poesia#puter#sant marc air#santmarcair#spain
22 notes
·
View notes
Text
Vasnetsov Apollinario (1856-1933) NUBES Y CÚPULAS DORADAS. MONASTERIO SIMONOV 1920 Tamaño - 79 x 62 Material: Lienzo Técnica - óleo Número de inventario - MKV Zh-121 Dar V.A. Vasnetsova. 1986
En los últimos años de su vida, Apollinary Vasnetsov pareció regresar nuevamente a los orígenes de su obra, los temas de la década de 1880: la pintoresca admiración por Moscú. El destacado talento del paisajista ayudó al ya no joven maestro a crear un ciclo de obras bellamente coloreadas de la década de 1920. En una carta de 1925 a su amigo N. Khokhryakov, Vasnetsov señaló: “¡Los bocetos te hacen parecer más joven!... ¡Especialmente cuando estás en la naturaleza y cuando la naturaleza es hermosa!” Los motivos paisajísticos, como antes, son sencillamente sencillos y líricos. El artista encontró temas para sus obras poéticas y alegres en los parques de la ciudad, entre casas antiguas, fincas y antiguos monasterios escondidos en el verdor. Muchos de ellos se perderían a principios de la década de 1930.
El tema de los monasterios rusos fue del agrado de muchos de los contemporáneos de Apollinary Vasnetsov. La belleza de su austera arquitectura fue admirada por Alexei Savrasov en el cuadro "Convento Novodevichy" de 1890, Nicholas Roerich en los bocetos de Suzdal de 1903 y muchos otros. En un esfuerzo por capturar el encanto de un Moscú que se desvanece, Vasnetsov eligió soluciones compositivas inusuales y hermosas vistas. El pequeño lienzo “Nubes y cúpulas doradas” destaca con especial optimismo y colores sonoros. Monasterio Simónov.
Al comienzo de su historia, la antigua fortaleza era la fortificación de guardia más formidable en el camino a la capital, como lo demuestran las poderosas torres de piedra en la orilla alta del río Moscú. El monasterio fue fundado en el siglo XIV, durante mucho tiempo, fue uno de los más grandes y ricos, en los siglos XVI-XVII formó parte del cinturón de fortificaciones que protegía los accesos del sur a la ciudad. El monasterio fue devastado y abolido más de una vez. En 1771, por orden de Catalina II, se convirtió en una sala de aislamiento para los infectados por la peste y en 1795 fue restaurada nuevamente. Después de la Revolución de Octubre, los objetos de valor del monasterio fueron trasladados a la Cámara de la Armería y en 1923 se cerró el monasterio. Siete años después, un monumento arquitectónico único fue volado, la Catedral de la Asunción, el campanario y mucho más desaparecieron para siempre. Milagrosamente, sólo sobrevivieron el muro sur, varias torres, un refectorio y una dependencia de cinco pisos.
Como anticipando la inminente destrucción del monumento arquitectónico, el artista capturó el templo perdido con un alto campanario y la cámara del refectorio: todo está lleno del triunfo de la vida y los colores. Las sombras juegan pintorescamente en los muros de piedra, el oro de las cúpulas refleja el azul del cielo y el verde sonoro de los árboles. Es interesante la estructura compositiva del boceto. El eje central del espacio de la pintura era el alto campanario; debajo de él, al lado, estaba el monolito de la catedral de cinco cúpulas. Un detalle inusual fue el refectorio, cerca del espectador, ligeramente cubierto de sombras.
Las obras de los últimos años de la vida de Apollinary Vasnetsov fueron transferidas a la colección de la Galería Tretyakov por su hijo Vsevolod. Una serie de pinturas de cámara de los años 20 demuestran, de manera especialmente convincente, el talento del artista como excelente colorista y maestro del paisaje arquitectónico.
Información e imagen de la web de la Galería Tretyakov.
12 notes
·
View notes
Text
ELISE FERGUSON & JEANETTE WINTERSON
"Lo que contiene el pequeño espacio entre mis piernas no es ni tu artística lengua ni ninguna otra de las partes que tocas a voluntad, sino el universo que bajo las sábanas creamos juntas."
_ Jeanette Winterson, La poética del sexo, del libro " El mundo y otros lugares", edit. Lumen. Traducción de Alejandro Palomas.
_ Elise Ferguson, NE, 2014. Pigmented plaster on MDF panel
5 notes
·
View notes
Text
KALA
Realizamos la aproximación hacia Kala desde la perspectiva de Patricia Tobar, que plantea la descolonización de la etnografía y de las emociones en la “Sesión Etnografía Artística”. Esta autora habla del concepto de documentación poética. Una perspectiva “dialógica” en donde permanece lo afectivo, lo que también según la autora forma parte de una perspectiva etnográfica feminista, ya que “se propone integrar la emotividad, la complejidad y salirnos de una perspectiva racionalista y lineal”.
“El desarrollo de una etnografía artística, muestra la relevancia y potencia de una forma de investigación que opera abiertamente desde las fisuras, que trasciende la idea de autoría y busca la apertura sensible como forma de encuentro, de diálogo, para generar textos resonantes, donde el proceso artístico es parte de la indagación etnográfica”. (cita)
Le propusimos entablar una conversación sin mayor estructura preconcebida, la cual documentamos a través de la fotografía. Luego ella nos pregunta cómo estar vestida, le respondimos que estuviera cómo le acomodara más, ella se mantuvo en la bata que utiliza entre cada sesión de modelo y no posó como lo hace usualmente, sino que capturamos sus expresiones espontáneas durante el diálogo. Con la intención de tener una conversación cómoda y fluida de manera colaborativa y de afectación mutua (concepto utilizado por Patricia Tobar).
Nuestra aproximación se dio a partir del primer punto en común entre nosotras, el espacio de la escuela. Ella nos contó que trabaja ocasionalmente como modelo y señaló que en su experiencia ha percibido diferencias entre estilos de profesores de la escuela. Algunos con un estilo más clásico, mientras otros agregan objetos al modelaje dando un estilo más contemporáneo.
Una vez atravesada esta primera capa de la conversación, una de nosotras (Cecilia) le comenta a Kala que es grato ver que se ocupe el espacio del modelaje con cuerpas no hegemónicas, ya que hemos estado acostumbradas a realizar este tipo de ejercicios con cuerpos que cumplen con el canon del arte clásico. Durante este diálogo menciona (Cecilia) que la disidencia de identidades no es tan común en el Valle, a lo cual Kala pregunta: ¿de qué lado del Valle?, y comenta que ella descubrió que tiene raíces Diaguitas. Esta parte de la conversación fue una gran revelación ya que ambas comparten su origen indigena mestiza. La conversación derivó espontáneamente hacia sus raíces y con esto, se rompió una barrera de distancia, al brotar un punto en común de nuestras identidades : Ser urbanas y mestizas.
Luego, una de nosotras (Catalina) le pregunta por su nombre, a lo cual la modelo responde que es su nombre social hace aproximadamente 20 años, nos dice que ha pasado casi más tiempo con este nombre que con el que nació. Actualmente su familia también la llama con su nombre social, a partir de que su primo transmasculino incidió en eso. Tomó la decisión de presentarse así al llegar a Valpo. Nos comparte que KALA nace por una abreviación, una fusión de dos palabras y luego nos comenta que con el tiempo descubrió que Kala significa piedra en Quechua. Relata que en algunos lugares el Quechua reemplazó a la original lengua Kakana, una lengua muy gutural y difícil de pronunciar que fue demonizada por los españoles, quienes cortaban la lengua los que siguieran hablando kakan. Kala señala que saber esto le causó mucha angustia en un momento, pero que con el tiempo a través de un amigx pudo resignificar. Él le dijo que si su nombre tenía origen quechua y se relacionaba con esa historia colonial, esto resonaba también con ella ya que el hablar quechua fue una forma de sobrevivir y resistir para el pueblo diaguita y que Kala en lo personal también ha tenido que hacerlo. Esto lo relacionamos con el concepto de la herida colonial que plantea la socióloga Silvia Cusicanqui en el texto “Un mundo ch’ixi es posible Ensayos desde un presente en crisis”.
“...Para mí las heridas coloniales no eran algo del pasado, todavía me dolían, y recuerdo una frase de Octavio Paz, quien hablaba del presente como una época en que las edades se entredevoran y “las heridas más antiguas manan sangre todavía”. Es una radiografía de esa presencia dolorosa del pasado en el presente, pero también alude a la amnesia social. Las élites quieren olvidar ese pasado, que las involucra en el polo dominante de un eje colonial”.
Por último conversamos respecto a los tatuajes y las marcas, Kala conecta su vínculo con el mundo indigena diaguita con su relación respecto a lo simétrico y dual. Kala pregunta sobre el sentido del tatuaje a una de nosotras (Catalina). Ella comenta su concepción del tatuaje como ritual y de cómo fue su proceso de permitir marcar su cuerpo “para siempre”. Mientras que durante años no se decidía a tatuarse, a partir de una indagación en la escuela, llegó al punto de hacerlo performativamente. En relación a esto Kala comentó que para ella hacerse algo que durara “para siempre” tenía que ver con un sentido espiritual, aludiendo a que modificar el cuerpo implicaba no darle tanta importancia ya que solo es transitorio.
Si bien no profundizamos en esto durante la conversación, conectamos también en otro aspecto de nuestra biografía. Kala al igual que nosotras no mantiene un lazo con su padre biológico. Es decir, las tres compartimos la huella de ser guacha mestiza.
"Madres en el sentido de una historia mestiza que ha perfilado la construcción de un femenino y un masculino debatido en una religiosidad y en una estructura social que nos han entregado una forma concreta de realizarnos. Huachos porque somos huérfanos, ilegítimos, producto de un cruce de linajes y estirpes, a veces equívocos, a veces prístinos. Bastardía temida y por ello olvidada, ilegitimidad que conforma una manera de ver el mundo" (Sonia Montecino (1954-) “Madres y huachos: alegorías del mestizaje chileno”)
Al final de nuestro encuentro Kala nos comparte, como si se tratase de un regalo el Poema “Dejarse ir- soltar” de Gloria Anzaldua”, dejamos aquí un fragmento:
“No hay nadie que
te alimente el anhelo.
Acéptalo. Tendrás que
hacerlo, hacerlo tú misma.
Y a tu alrededor un vasto terreno.
Sola. Con la noche
Tendrás que hacerte amiga de lo oscuro
si quieres dormir por las noches“.
@catalinaarayagodoy
4 notes
·
View notes
Text
La intimidad necesita el corazón de un nido. Erasmo, nos dice su biógrafo, tardó mucho "en encontrar, en su hermosa casa, un nido donde poder abrigar su cuerpecillo. Acabó por encerrarse en un cuarto a fin de respirar ese aire revenido que le era necesario".
Y muchos soñadores quieren encontrar en la casa, en el cuarto, un vestido a su medida. Pero una vez más, nido, crisálida y vestido, no forman más que un momento de la morada. Cuanto más condensado es el reposo, cuanto más hermética es la crisálida, cuanto en mayor grado el ser que sale de ella es el ser de otra parte, más grande es su expansión. Y el lector, a nuestro juicio, yendo de un poeta a otro, es dinamizado por la imaginación de lectura cuando escucha a un Supervielle en el momento en que hace entrar el universo en la casa por todas las puertas, por todas las ventanas abiertas de par en par.
"Tout ce quifait les bois, les rivieres oü l'air
A place entre ees rnurs qui croientfermer une chambre . ..,
Accourez, cavaliers qui traversez les mers
Je n'ai qu'un toit du ciel, vous aurez de la place".
[Todo lo que hacen los bosques, los ríos o el aire / Cabe entre estos muros que
creen cerrar la estancia; / Acudid, caballeros que atravesáis los mares,/
Sólo tengo un techo de cielo, encontraréis lugar.]
La acogida de la casa es entonces tan completa que lo que se ve desde la ventana pertenece a la casa también.
"Le corps de la montagne hesite a mafenétre:
Commentpeut-on entrer si l'on est la montagne,
Si l'on est en hauteur, avec roches, cailloux,
Un morceau de la Terre, alteré par le Ciel?"
[El cuerpo de la montaña vacila en mi ventana: / Cómo poder entrar si
se es la montaña, / Si somos en altura, con rocas, pedrezuelas, / Un trozo
de la Tierra, sediento de Cielo.]
Cuando nos hacemos sensibles a un ritmoanálisis, yendo de la casa concentrada a la casa expansiva, las oscilaciones se repercuten, se amplifican. Los grandes soñadores profesan como Supervielle, la intimidad del mundo, pero han aprendido dicha intimidad meditando la casa.
- Gaston Bachelard, "La poética del espacio"
Trad: Ernestina de Champourcin
17 notes
·
View notes
Text
Heidegger, Schelling y la realidad del mal. Parte 7
Por Collin Cleary
Traducción de Juan Gabriel Caro Rivera
El abismo más profundo y el cielo más alto
Nos encontramos ahora en el umbral de la explicación de Schelling sobre la naturaleza del mal. Sostiene que en Dios las dos voluntades – el fundamento y el entendimiento/existencia – están unidas y que la voluntad oscura está subordinada a la voluntad luminosa. En Dios, además, no pueden separarse. Para repetir una cita de nuestra última entrega, Schelling escribe que «Mostrar cómo cada proceso sucesivo se aproxima más a la esencia de la naturaleza, hasta que el centro más íntimo aparece en la más alta división de fuerzas, es la tarea de una filosofía comprensiva de la naturaleza» [1]. A lo que parece estarse aludiendo en estas crípticas líneas es justamente a esto: en el hombre el «centro más íntimo» o «esencia de la naturaleza» reaparecerá, pero con las dos voluntades divididas. En el hombre, a diferencia de Dios, éstas son separables y Schelling sostendrá que éste es el origen del mal. El desarrollo del todo (Dios, incluyendo el mundo natural) tiene lugar a través de la llamada «división de fuerzas.»
Así, en la más alta división de fuerzas, las dos voluntades, que son el fundamento mismo del ser, reaparecen, pero divididas entre sí. La más alta división de fuerzas es lo mismo que la separación de las dos voluntades. Y esto hace posible la libertad humana, que es lo mismo que la naturaleza humana. La libertad no es simplemente un atributo humano entre otros, es nuestra naturaleza misma. Y Schelling define la libertad como la capacidad del bien y del mal; la capacidad de elegir la luz y la oscuridad. Como en la filosofía anterior de Schelling (y en la filosofía de Hegel) el hombre surge como la expresión más elevada del mundo natural y la realización en el espacio y el tiempo de la esencia divina.
«En el hombre», escribe Schelling, «está todo el poder del principio oscuro y, al mismo tiempo, toda la fuerza de la luz. En Dios, como hemos dicho, los dos principios son inseparables, y la oscuridad está siempre subordinada a la luz. En el hombre, estos principios están separados, y ambos están presentes en todo su poder y atractivo. El hombre debe elegir la luz y subordinar las tinieblas a la luz. El hombre, como hemos visto, es la cúspide de la creación, su fin último. Y, sin embargo, Schelling dice lo siguiente: «La voluntad humana es la semilla – oculta en el anhelo eterno – del Dios que está presente todavía sólo en la tierra; es el panorama divino de la vida, encerrado en las profundidades, que Dios contempló cuando modeló la voluntad en la naturaleza» [3].
Aquí Schelling parece decir que el hombre no es el fin de la naturaleza, sino que está presente en su comienzo, como la «semilla... oculta en el anhelo eterno» (es decir, en el fundamento). La concepción aristotélica del telos puede proporcionarnos una interpretación plausible de este pasaje. El ser de algo se encuentra en su telos, en lo que aspira a ser. El telos, antes de realizarse, está presente como potencia o potencialidad en aquello que se esfuerza por realizarlo. Siempre se anticipa, al menos vagamente, de un modo u otro. Recordemos que en este «sistema» no hay primero y último, y que cada parte presupone a las demás. El primero presupone el último; el principio presupone el fin.
Pero, ��por qué dice Schelling que la voluntad humana es el «panorama divino de la vida»? Porque la voluntad humana surge en la «cima» de la naturaleza como la cresta de una ola. Sin ola no hay cresta. Todas las demás formas naturales son anticipaciones del hombre. Y el hombre, como florecimiento más elevado de la naturaleza, «contiene» en sí todas las formas «anteriores» (hecho que fue advertido por los antiguos). El hombre, en otras palabras, es el microcosmos. Decir que Dios «contemplaba» el «panorama divino de la vida, encerrado en las profundidades» mientras «modelaba la voluntad de la naturaleza» es una metáfora poética. Lo que Schelling realmente quiere decir aquí es que el ser de la naturaleza plenamente realizada está presente dentro del fundamento como potencia incipiente. Para introducir una de las metáforas de Aristóteles, el roble está presente dentro de la bellota, como potencialidad de ser. El ser de la bellota es el roble y el ser de la «voluntad de naturaleza» es la naturaleza.
Schelling continúa: «Si ahora la identidad de ambos principios en el espíritu del hombre fuera exactamente tan indisoluble como en Dios, entonces no habría distinción, es decir, Dios como espíritu no se revelaría. La misma unidad que es inseparable en Dios debe, por lo tanto, ser separable en el hombre y ésta es la posibilidad del bien y del mal» [4].
Dios se revela a través del hombre: en el espíritu y en la palabra proclamada. Pero para que esto sea posible, el hombre debe ser al mismo tiempo otro de Dios. La esencia de Dios es la unidad inseparable de los dos principios, que actúan de común acuerdo, la oscuridad necesariamente subordinada a la luz. Pero esta unidad todavía no es real, es decir, no se expresa en el mundo. Se actualiza en el hombre, un ser surgido de la división de las fuerzas y que, como toda la naturaleza, es un ser múltiple, un ser dividido y articulado. En el hombre, ambos principios están presentes pero divididos entre sí. Esta es la esencia humana: la dualidad de luz y oscuridad o la posibilidad del bien y del mal.
Heidegger escribe que, en la filosofía de Schelling, «la libertad ya no puede entenderse como independencia de la naturaleza, sino que debe entenderse como independencia en oposición a Dios» [5]. ¿Por qué? Porque, a diferencia de Dios, el hombre debe elegir entre identificarse con el principio oscuro o con la luz y debe elegir subordinar la oscuridad a la luz. El principio oscuro no es malo en sí mismo (salvo en un sentido muy matizado, punto sobre el que volveremos más adelante). Pero cuando el hombre elige identificarse con él y subordinar la luz a la oscuridad, se convierte en el fundamento del mal. ¿Qué significa que el principio de la luz esté subordinado a la oscuridad? Significa que sigue habiendo salida o expansión, pero se pone al servicio de la voluntad propia. La voluntad propia se convierte en el centro por el que se mide todo lo demás y al que todo lo demás sirve.
Pero, ¿cómo es que el hombre es capaz de hacer esta elección, entre la oscuridad y la luz? Schelling nos dice que el principio por el que el hombre está separado de Dios es su «mismidad» (Selbstheit). Sin embargo, cuando la mismidad del hombre está «en unidad con el principio ideal [es decir, la luz]», entonces su mismidad es espíritu. «El ser como tal es espíritu; o el hombre es espíritu como ser particular egoísta [selbstisch] (separado de Dios), precisamente esta conexión constituye la personalidad» [6]. Como hemos dicho antes, la tierra es la fuente de toda particularidad o individualidad. Tal individualidad y «mismidad» no es en sí negativa, cuando permanece en unidad con la luz.
Schelling continúa diciendo que el hombre es «elevado de lo creatural a lo que está por encima de lo creatural», precisamente porque la mismidad es espíritu. Y este espíritu es «voluntad que se contempla a sí misma en completa libertad, no siendo ya un instrumento de la voluntad productiva [schaffenden] universal en la naturaleza, sino más bien por encima y fuera de la naturaleza» [7]. Aquí Schelling articula la familiar concepción idealista alemana de la subjetividad humana como algo que trasciende la naturaleza. Desde Kant hasta el posterior Schelling, y hasta Husserl y Heidegger después de él, se insiste en que la subjetividad humana, como aquello a lo que la naturaleza está presente, no puede hacerse presente como un objeto más dentro de la naturaleza. La subjetividad humana «está aparte» o exhibe lo que la fenomenología llama «trascendencia».
Así, el espíritu es consciente de sí mismo (se «contempla a sí mismo en completa libertad») como algo bastante independiente de la «voluntad universal productiva en la naturaleza.» El espíritu se crea cuando el alma («lo interior»; la «interioridad») se une con el principio ideal, también conocido como el entendimiento o la voluntad universal. El espíritu es la autoconciencia. No es una «criatura», sino aquello que es consciente de lo creatural y se conoce a sí mismo como ese ser que deja que lo creatural se presente a sí mismo. Ya no es «un instrumento de la voluntad universal productiva en la naturaleza» porque es aquello que puede ser consciente de la voluntad universal en la naturaleza y mucho más.
Así, Schelling dice que «el Espíritu está por encima de la luz como en la naturaleza se eleva por encima de la unidad del principio luminoso y del oscuro». Está «por encima» de ambos principios. ¿Por qué? De nuevo, porque es aquello que es consciente de ambos y así, siendo consciente de ellos como objeto, no se identifica con ninguno. Debe tener esta capacidad, además, de separarse de ellos y ser consciente de ellos como otro, para poder elegir entre ellos. «Puesto que es espíritu», escribe Schelling, «la mismidad está, por lo tanto, libre de ambos principios» [8].
Y afirma: «Por esta razón surge así en la voluntad del hombre una separación de la mismidad espiritualizada de la luz (ya que el espíritu está por encima de la luz), es decir, una disolución de los principios que son indisolubles en Dios» [9]. Pero, como hemos señalado, la voluntad propia del hombre puede permanecer en la luz (puede, en otras palabras, elegir la luz), y puede subordinar la voluntad del fundamento a la voluntad del entendimiento.
Schelling dice que el principio oscuro de la mismidad o voluntad propia debe ser «penetrado a fondo por la luz y ser uno con ella» [10]. Si eso sucede, entonces «el espíritu de amor prevalece [en el hombre]» y «entonces la voluntad está en forma [Arte] y orden divino» [11]. Sin embargo, si la voluntad propia se separa de la luz – si, en otras palabras, el hombre elige la voluntad de hundirse en la oscuridad del fundamento en lugar de la luz –, entonces prevalece el «espíritu de la disensión», que quiere «separar lo particular [es decir, la humanidad] del principio general [es decir, de la voluntad del entendimiento]». Schelling observa que «esta elevación de la voluntad propia es mala» [12].
Examinemos ahora muy detenidamente esta afirmación, ya que la explicación de Schelling sobre el mal es fundamental para todo el tratado, y quizá su contribución más importante y profunda. Schelling explica cómo la voluntad propia se convierte en maldad: «La voluntad que sale de su ser más allá de la naturaleza para, como voluntad general, hacerse a la vez particular y creatural, se esfuerza por invertir la relación de los principios, por elevar el fundamento sobre la causa, por usar el espíritu que obtuvo sólo por el bien del centrum [Zentrum; es decir, el fundamento] fuera del centrum y contra las criaturas; de esto resulta el colapso [Zerrüttung] dentro de la voluntad misma y fuera de ella» [13].
Se trata de un pasaje oscuro, pero lo que Schelling quiere decir es discernible (especialmente para cualquiera que esté familiarizado con las ideas de Jacob Boehme, de las que Schelling, una vez más, depende en gran medida). Como ya hemos visto, el espíritu humano está «más allá de la naturaleza» en el sentido de que se sitúa aparte, como testigo de la naturaleza. La naturaleza es dada al espíritu; o, dicho al revés, el espíritu es consciente de la naturaleza. El espíritu, al ser así supranatural, es capaz de resistirse a cosas como los impulsos y pulsiones naturales, el tipo de cosas a las que los animales, al carecer de toda separación de la naturaleza, son esclavos. Esta separación o «trascendencia» (véanse mis observaciones anteriores) es lo que hace posible la libertad y permite a los seres humanos elegir la luz en lugar de las tinieblas.
Elegir la luz (el entendimiento) y subordinar la oscuridad (el fundamento) a la luz significa esencialmente ponerse en armonía con el todo. Significa subordinar la propia voluntad a lo universal; por ejemplo, aceptar la necesidad de actuar de acuerdo con principios morales, en lugar de por capricho egoísta. O aceptar el hecho de que uno existe como parte de la naturaleza, con límites naturales, en interdependencia con otros seres vivos. O reconocer el hecho de que uno vive en interdependencia con otros seres humanos, en una comunidad, y que uno debe subordinar su propia voluntad particular y egoísta a la «voluntad general», viviendo según principios que uno afirma que se aplican a todos, incluido uno mismo.
Elegir las tinieblas
Elegir las tinieblas y subordinar la luz a las tinieblas significa justamente lo contrario. Significa elevar el yo por encima del todo. Significa elevar los propios caprichos egoístas por encima de cualquier sentido de obligación. Significa ver la naturaleza simplemente como un medio para los propios fines personales, sin reconocer ninguna obligación hacia la naturaleza, ni límites a lo que uno puede hacer con ella. Significa elevarse a uno mismo por encima de los demás, considerándolos meramente como medios para la propia satisfacción y sin reconocer ninguna obligación hacia la comunidad.
En efecto, la elección de la oscuridad sobre la luz es la decisión de considerarse a uno mismo como el todo. Y puesto que el todo es Dios, esto equivale a verse a sí mismo como Dios. «La posibilidad general del mal consiste», escribe Schelling, «en que el hombre, en lugar de hacer de su mismidad el fundamento, el instrumento, puede esforzarse por elevarla a voluntad rectora y total y, a la inversa, hacer de lo espiritual dentro de sí mismo un medio». Cuando esto ocurre, «otro espíritu usurpa el lugar donde debería estar Dios, a saber, el dios invertido». Este ser «aunque nunca es, siempre quiere ser» y así «toma prestada la apariencia de ser del verdadero ser» [14].
Heidegger comenta en 1936: «El mal es la revuelta que consiste en invertir el terreno de la voluntad esencial en el reverso de la voluntad de Dios» [15], y en 1941: «El mal es propiamente la oposición extrema y la sublevación del espíritu contra lo absoluto (arrancarse de la voluntad universal, el contra-ello, la voluntad sustituyéndolo en el “contra”)» [16].
¿Por qué dice Schelling que la voluntad propia está «contra las criaturas»? Porque cuando la voluntad propia se eleva por encima del todo se convierte necesariamente en una voluntad negadora, negadora de la alteridad de diversas maneras. El espíritu del todo es universal y unifica todas las cosas en sí mismo. Abarca la «alteridad» en el sentido de que los distintos miembros del mundo natural, aunque son expresiones de lo divino, no son, cada uno de ellos, identificables con el simpliciter de lo divino. Están simultáneamente dentro de Dios y son expresiones de Dios, pero al mismo tiempo son algo por sí mismos.
Pero cuando el individuo autodispuesto se erige como contra-todo o dios invertido, no puede, como Dios, sublimar el mundo de individuos que le rodea. Sólo puede negarlos, de un modo u otro. Frente a la alteridad, sólo puede anularla. Por eso, como he dicho antes, trata de manipular o transformar todas las cosas para sus propios fines egoístas, como si todo lo demás existiera para él (como si, en otras palabras, fuera Dios). Cuando esto es imposible, actúa para negar o destruir. «Este es el principio del pecado», escribe Schelling, «que el hombre transgrede del ser auténtico al no ser, de la verdad a la mentira, de la luz a las tinieblas, para convertirse en un terreno autocreador y, con el poder del centrum que tiene en sí mismo, gobernar sobre todas las cosas» [17].
Schelling dice que «por eso se produce el colapso dentro de la voluntad misma y fuera de ella» [18]. Mientras la voluntad humana exista en unidad con la voluntad universal, dice, «estas mismas fuerzas existen en consonancia con el equilibrio divino» [18]. En otras palabras, la voluntad humana en unidad con la voluntad universal está en armonía con el todo. Reconoce su lugar en el todo, se afirma como parte del todo. Pero cuando la voluntad propia se pervierte y abandona la voluntad universal absolutizando la voluntad oscura de la tierra, existe en relación adversaria con todo lo que existe. Schelling escribe: «se esfuerzan por juntar o formar su propia vida peculiar a partir de las fuerzas que se han separado unas de otras, una hueste indignada de deseos y apetitos (ya que cada fuerza individual es también un anhelo y un apetito), siendo esto posible en la medida en que el primer vínculo de fuerzas, el primer fundamento de la naturaleza misma, persiste incluso en el mal. Pero como, en efecto, no puede haber una vida verdadera como la que sólo podría existir en la relación original, surge una vida que, aunque individual, es, sin embargo, falsa, una vida de mentiras [Lüge], un crecimiento de la inquietud y la corrupción» [19].
Esta voluntad egoísta abandona la luz o voluntad universal, por medio de la cual tanto las cosas como los deseos y los apetitos se ponen en su lugar y se moderan. El individuo que abraza la voluntad oscura se ve consumido por tales deseos. Su vida es fundamentalmente «falsa», en el sentido preciso de que no está alineada con la verdad, con la voluntad universal del entendimiento. Vive una mera apariencia de vida humana, encerrado en sí mismo y abriéndose a la otredad sólo para utilizarla o aniquilarla al servicio de sus apetitos.
Al arremeter contra el mundo, su «crecimiento» (Gewächs) es un descenso hacia una «corrupción» (Verderbnis) cada vez mayor, en la que no encuentra paz, sino agitación e «inquietud» (Unruhe), ya que la insaciable pulsión por satisfacer sus deseos le empuja hacia adelante. Ninguna parte del todo puede intentar usurpar el todo y reinar como un contra-dios sin volverse tóxica para sí misma y para todo lo demás.
Heidegger comenta estas ideas en un pasaje que merece la pena citar detenidamente: «¿En qué consiste la vileza del mal? Según la nueva definición dada de la libertad, ésta es la facultad del bien y del mal. En consecuencia, el mal se proclama a sí mismo como una posición de voluntad propia, más aún, como un modo de ser libre en el sentido de ser uno mismo en términos de su propia ley esencial. Al elevarse por encima de la voluntad universal, la voluntad individual quiere precisamente ser esa voluntad. A través de esta elevación se produce una forma de unificación propia, por lo tanto, una forma propia de ser espíritu. Pero la unificación es una inversión de la voluntad original, y eso significa una inversión de la unidad del mundo divino en la que la voluntad universal está en armonía con la voluntad del fundamento. En esta inversión de las voluntades se produce el devenir de un dios invertido, del contraespíritu, y así la sublevación contra el ser primigenio, la revuelta del elemento adverso contra la esencia del ser, la inversión de la unión del ser en la desunión es producto de la elevación del fundamento de la existencia cuando se coloca en el lugar de la existencia. Pero la inversión y el trastorno no son solo meramente negativos y oscuros, sino que la negación se coloca a sí misma en el dominio. La negación transpone ahora todas las fuerzas de tal modo que se vuelven contra la naturaleza y las criaturas. La consecuencia de ello es la ruina de los seres» [20].
Schelling elabora su teoría con una analogía precisa entre el mal y la enfermedad (que ciertamente se califica como lo que a veces se ha llamado «mal físico»). Se refiere a la enfermedad como «el desorden surgido en la naturaleza por el mal uso de la libertad». ¿Por qué? Porque la enfermedad implica que una parte se separe del todo, es decir, que se «libere».
En un organismo, lo que Schelling llama el «principio irritable» (irritable Prinzip, un tema tratado en su anterior filosofía de la naturaleza) es un reflejo primitivo del oscuro principio del fundamento. Es precisamente esa parte o función del organismo que reacciona contra su entorno o contra la alteridad como amenaza potencial y empuja al organismo a arremeter de un modo u otro o a replegarse.
Schelling nos dice que la enfermedad se produce cuando el principio irritable «se activa» y una parte del organismo se vuelve en contra del todo [21]. Schelling afirma que «la enfermedad particular surge sólo porque aquello que tiene su libertad o su vida sólo para poder permanecer en el todo se esfuerza por ser para sí mismo» [22]. En pocas palabras, la enfermedad se produce cuando una parte del organismo «decide», en efecto, «ser libre».
Un ejemplo obvio sería un tumor canceroso que crece dentro de un órgano. En circunstancias normales, el órgano funciona dentro del todo, desempeñando la función que le corresponde por el bien del todo y sin interferir en las funciones de los demás órganos. Pero cuando un órgano se enferma, actúa contra el todo, dañando a otros órganos o impidiendo sus funciones y, en circunstancias extremas, amenaza incluso con acabar con la vida del todo. Lo que ocurre en el caso de la enfermedad es precisamente análogo al mal, o viceversa: es como si una parte del todo deseara ser el mismo todo; es decir, ser aquello por lo que todo lo demás funciona o trabaja.
El órgano enfermo no puede, por supuesto, lograrlo, pero lo que sí puede hacer es negar las otras partes. El todo – ya sea el organismo o el Dios orgánico que lo contiene todo – es absoluto en la medida en que unifica todo lo que existe en un sistema holístico. Lo que se convierte en mal – ya sea un órgano enfermo o una voluntad humana pervertida – no puede ser absoluto en este sentido, por lo que trata de absolutizarse anulando todo lo que se le opone como otro.
En este sentido, tanto la enfermedad como el mal son literalmente odiosos y maliciosos. La curación, afirma Schelling, consiste en «la reconstrucción de la relación de la periferia con el centrum». De forma algo menos oscura, dice que la curación se produce «mediante la restauración de la vida separada e individual en el vislumbre interior de la luz del ser» [23] En otras palabras, la curación implica restaurar la armonía entre la parte enferma y el todo; volver la voluntad hacia la luz.
Continuaremos explorando la explicación del mal según Schelling en nuestra próxima entrega.
Notas:
[1] F.W.J. Schelling, Philosophical Investigations into the Essence of Human Freedom, trans. Jeff Love and Johannes Schmidt (Albany: State University of New York Press, 2006), 31.
[2] Schelling, 32. Centra es el plural del latín centrum, o «centro». Schelling se refiere a los dos «centros» de la oscuridad y la luz. Cuando utiliza centrum (singular) casi siempre se refiere al fundamento (el principio oscuro).
[3] Schelling, 32.
[4] Schelling, 32-33.
[5] Heidegger, Schelling’s Treatise on the Essence of Human Freedom, trans. Joan Stambaugh (Athens, OH: Ohio State University Press, 1985), 62. En adelante, «ST». Compárense las conferencias de 1941: «Schelling concibe la libertad no sólo como independencia de la naturaleza, sino más esencialmente como independencia de Dios, y sin embargo ante Dios, es decir, en relación con Dios, es decir, ‘en’ Dios. Pues todo «es» -en cuanto «es»- semejante a Dios y, por lo tanto, en cierto modo, Dios. Pan estin theos [todo es Dios]». Martin Heidegger, The Metaphysics of German Idealism, trad. Ian Alexander Moore y Rodrigo Therezo (Cambridge: Polity Press, 2021), 139. En adelante, «MGI».
[6] Schelling, 33.
[7] Schelling, 33.
[8] Schelling, 33.
[9] Schelling, 33. He modificado la traducción para aclarar el significado.
[10] Schelling, 54.
[11] Schelling, 34.
[12] Schelling, 34.
[13] Schelling, 34.
[14] Schelling, 54. Cursiva mía. La cita completa dice así: «La posibilidad general del mal consiste, como se ha demostrado, en que el hombre, en lugar de hacer de su yoidad el fundamento, el instrumento, puede esforzarse por elevarla a la voluntad rectora y total y, a la inversa, hacer de lo espiritual en sí mismo un medio. Si el oscuro principio del yo y de la voluntad propia en el hombre es penetrado completamente por la luz y se une con ella, entonces Dios, como amor eterno o como realmente existente, es el vínculo de fuerzas en él. Pero si los dos principios están en discordia, otro espíritu usurpa el lugar donde debería estar Dios, a saber, el dios invertido, el ser suscitado a la actualidad por la revelación de Dios que nunca puede arrancar la actualidad de la potencia que, aunque nunca es, sin embargo siempre quiere ser y, por lo tanto, como la materia de los antiguos, no puede ser captado realmente (actualizado) por el entendimiento completo, sino sólo a través de la falsa imaginación (logismōi nothōi), que es el pecado mismo; por esta razón, puesto que, no teniendo ser en sí, toma prestada la apariencia de ser del verdadero ser, como la serpiente toma prestados los colores de la luz, se esfuerza por medio de imágenes especulares en llevar al hombre a la insensatez en la que sólo ella puede ser comprendida y aceptada por él» (pp. 54-55). Logismōi nothōi es una alusión al Timeo.
[15] Heidegger, ST, 106. Heidegger pone en cursiva toda la frase para indicar la importancia de esta idea.
[16] Heidegger, MGI, 76. Cursiva en el original.
[17] Schelling, 55. La segunda cursiva es mía. También es útil el siguiente pasaje: «Porque aún permanece en el que se ha extraviado el sentimiento de que era todas las cosas, es decir, en y con Dios; por eso se esfuerza una vez más por volver allí, pero para sí mismo y no donde podría ser todas las cosas, es decir, en Dios. De ahí surge el hambre del egoísmo que, en la medida en que renuncia al todo y a la unidad, se vuelve cada vez más desolado, más pobre, pero precisamente por eso más codicioso, más hambriento y más venenoso. En el mal se da la contradicción autoconsumidora y siempre aniquiladora de que se esfuerza por llegar a ser criatura sólo aniquilando el vínculo de la existencia criatural y, por soberbia desmedida de serlo todo, cae en el no-ser» (p. 55).
[18] Schelling, 34.
[19] Schelling, 34. He modificado la traducción para hacerla más literal.
[20] Heidegger, ST, 143. Compárese con este pasaje de las conferencias de 1941: «El mal es la voluntad del espíritu que, como voluntad universal, se transpone en la voluntad propia como tal, para que esta última sea la voluntad universal... Este desarraigamiento de la voluntad universal no se extravía en lo indeterminado; consiste, más bien, en transponerse en la voluntad propia para hacer de ésta la voluntad universal y así pervertir y reemplazar la voluntad humana. En esto consiste la vileza del mal, una vileza que es espiritualidad en su máxima expresión. En el mal la voluntad quiere ser la voluntad del fundamento y convertir el fundamento en una voluntad universal. En el mal, lo humano es el contra-Dios». Heidegger, MGI, 112.
[21] Schelling, 34. En este mismo pasaje, Schelling tambi��n describe la actuación del principio de irritabilidad: «cuando se despierta Archaeus abandona su apacible morada en el centrum y se dirige a su entorno». Archaeus (Archäus) era un término utilizado por Paracelso para referirse a un principio vital que se encontraba en todos los seres vivos.
[22] Schelling, 35. cursiva mía.
[23] Schelling, 34.
2 notes
·
View notes
Text
En Olympus Glory nos manejamos por templos. Puede que, con todos los motivos del mundo, te preguntes de qué se tratan; a continuación, te explicaremos un poco sobre los templos, su funcionamiento y la copa de templos.
¿Qué son los templos? - + I N F O
Los templos serán tu hogar durante tu estadía en Olympus Glory. Un espacio con almas afines, donde podrás participar de diversas actividades exclusivas de cada templo y competir en la copa de templos. No solo eso, sino que estos espacios tienen una función más importante en particular: asignarte un regente.
Khaos: En el Templo de Khaos, la vida se celebra en su máxima expresión. Nos esforzamos por encontrar la belleza en cada día, explorar nuevas ideas y experimentar el mundo con una mirada apasionada. La creatividad es el motor que impulsa nuestras vidas. Aquí, se fomenta la expresión artística, la innovación y la solución de problemas creativos.
Isonomía: Los miembros este templo son amantes de la justicia y la igualdad, definidos mayoritariamente por su inteligencia, son personas racionales, rectas e íntegras que no dudan en resolver los conflictos de la manera más equilibrada posible. Sus narraciones son limpias, ordenadas y al mismo tiempo poéticas. Tienen un honor sobresaliente y suelen representar la innovación.
Khatharsis: Los sacerdotes y sacerdotisas de este templo son reflexivos por naturaleza, su creatividad y curiosidad parece no tener límites. Existencialistas, ellos se guían bajo el principio de que nada es absoluto, lo cuestionan todo y no tienen miedo de expresar sus pensamientos así como de escuchar los de los demás, su curiosidad es infinita al igual que su capacidad de amar.
¿Qué es un regente?
Es, en palabras simples, un moderador. Cada templo posee uno: Apolo para Katharsis, Artemisa para Khaos y Némesis para Isonomía. Al elegir un templo serás encomendado a las manos de uno de estos regentes, quien será con el que te deberás comunicar para pedir aprobación para abrir temas, cerrar temas, dar por finalizado o pedir pausa de roles, resolver dudas y conflictos, además de dejar sugerencias. Es decir, para cualquier actividad que desees realizar, el regente será tu guía y ayuda.
¿Quiere esto decir que no podrás comunicarte con otro regente? ¡Para nada! Somos todos accesibles y en caso de que uno se ausente se dará un aviso para que otro cubra su lugar de momento, sin mencionar que también pueden comunicarse con nosotros a nivel personal.
Copa de los templos
Por último, les explicaremos que es la copa de los templos.
Se trata del concurso que se lleva a cabo durante el correr del año, en el que los participantes acumulan dracmas a través de distintas actividades; estas dracmas se van sumando al puntaje de su templo en el tablón de templos. El conteo se detiene el 31 de diciembre a las 23:59 (hora de ARG-URU), donde el templo ganador es anunciado.
¿Qué gana el templo ganador?
Primeramente, la gloria. El foro será pintado del color representativo del templo ganador de dicho año y, sus participantes, recibirán diversos premios que podrán exhibir en su firma y/o perfil. Véase: stamps, banners.
7 notes
·
View notes
Text
«Palabras para el desencuentro», de Ernesto de la Peña
Este libro reúne la mayor parte de la obra poética que escribió Ernesto de la Peña. Es un tipo de poesía culta y compleja que requiere leerse lentamente si se quiere entender por completo. Utiliza un lenguaje más ampuloso de lo que me suele gustar a mí, aunque el tono y los temas que toca son ciertamente interesantes. Al igual que en sus ensayos y en sus programas de radio, su poesía refleja bien la amplísima cultura que tenía.
Un largo fragmento de “De la ausencia”.
Si con poner así, a tientas, con zozobra un vértigo arterial en las alturas un desandar lo que otros caminaron y desvivir lo ya vivido adentro con la más fina piel de las entrañas con la más tierna flora del amor la más fecunda yema que se abre al alborozo descometer los gestos y la historia y volver a ese tallo, a esta raíz, esta promesa apenas para estar de verdad un solo instante incandescente una sola sonrisa que torne primavera las montañas o funda en sal y lumbre los delgados adioses de la muerte para estar y tocar y decirse: —Esto es así. Mas aquí estamos, de pie y a oscuras, en la piedra; nada nos corresponde de este rápido abismo las estrellas que amamos se apagaron afuera de nosotros y cuando dimos voces de socorro se quedaron allí colgadas de la noche. Pero si esta volátil permanencia esta tela de agua que se vuelca hacia nunca esta sombra que hizo, un segundo, gala en un espejo y trocó su solidez de humo por solidez de inútiles recuerdos, si en este desquiciado corazón que dice el mundo y se solloza a solas si en esta luz de nómada en derrota hubo alguna vez una mañana dúctil de alegría en que se oyeron sílabas hermanas de un ayer inconvocable si aquí tu cuerpo redundó por un momento en goce porque hay rostros de savia y olas en el mar, porque hay niños que atrapan la verdadera ofrenda de la vida y la arrojan en globos al espacio y el hombre se tropieza, y sigue, y reamanece; si hay levantadas brisas transoceánicas con su música escueta de sal vivificante y su inundada herrumbre de tesoros y peces trashumantes, es que estuvimos en esta torva desnudez de gracia en esta confusión de ágiles espadas y caminamos, tarde, y regresamos y en todas partes nuestros gritos eran como el peso cabal de la libélula o la danza de amor de los insectos o el romperse del mar en una playa pronto desertada…
3 notes
·
View notes
Text
El universo no tiende á la inmovilidad; su movimiento es perpetuo, porque él mismo es en sí infinito. La ley del equilibrio que en él preside, no le conduce á la uniformidad ni á la inmovilidad; le asegura al contrario una renovación eterna por medio de la economía de las fuerzas, que son infinitas. Y si tal es la verdadera constitución del universo, preciso es admitir que tal es también la de la Humanidad. No vamos á una perfección ideal, á un estado definitivo, que, salvando con la muerte el espacio que de él nos separa, podríamos conseguir en un momento. Vamos con el universo por una incesante metamorfosis, que se cumple tanto más segura y gloriosamente, cuanta más inteligencia y moralidad desarrollamos. El Progreso es, pues, la ley de nuestra alma, no sólo en el sentido de que, por nuestro propio perfeccionamiento, debemos continuamente aproximarnos á la absoluta Justicia y á lo ideal, sino también en el de que, renovándose y desarrollándose sin fin la humanidad, como la creación, el ideal de Justicia y de belleza que necesitamos realizar cambia y se agranda eternamente.»
P. J. Proudhon: Filosofía popular (F. Pí y Margall, trad.). Librería de Alfonso Durán, págs. 107-108. Madrid, 1868
Acción Poética Revolucionaria
6 notes
·
View notes
Text
Malas decisiones - un viaje lento intrahumano
sigue tu capítulo cada jueves de 19 a 21 hs onlaim
Estimados oyentes, bienvenidos a este folletín sonoro literario metaficticio de arte radial, titulado "El portal de los mundos posibles". En este programa les narraremos una historia de ciencia ficción, fantasía y poesía, ambientada en un futuro distópico, donde el libertarianismo ha impuesto su tiranía sobre la humanidad, y donde un grupo de rebeldes, dotados de poderes como la michinautica del subgatunico recóndito, luchan por liberar al mundo de su opresión. Les invitamos a acompañarnos en este viaje sonoro, donde la palabra y el sonido se unen para crear una experiencia única y resonante. Esta es la introducción de nuestra historia:
El libertarianismo es una ideología que defiende la libertad absoluta del individuo, la propiedad privada y el mercado libre, sin importarle las consecuencias sociales, ecológicas o éticas de sus acciones. El libertarianismo considera al Estado como una amenaza para su libertad, y por eso lo ha eliminado, sustituyéndolo por una red de plataformas de extracción libidinal, que controlan todos los aspectos de la vida humana, desde la educación, la salud, la seguridad, hasta la cultura, el ocio y la información. El libertarianismo se basa en el egoísmo, la competencia, la explotación y la violencia, y no reconoce ningún derecho ni deber hacia los demás seres vivos, ni hacia el planeta que habita.
El libertarianismo ha creado un mundo desigual, injusto y cruel, donde los ricos y poderosos disfrutan de todos los privilegios, mientras que los pobres y marginados sufren de todas las carencias. El libertarianismo ha destruido el medio ambiente, contaminando el aire, el agua y el suelo, y provocando el cambio climático, la extinción de especies y la escasez de recursos. El libertarianismo ha aniquilado la diversidad, imponiendo una cultura única, basada en el consumo, la superficialidad y la alienación. El libertarianismo ha reprimido la creatividad, la imaginación y la poesía, censurando toda forma de expresión que cuestione su orden establecido.
Pero no todos se han resignado a vivir bajo el yugo del libertarianismo. Hay un grupo de rebeldes, que se hacen llamar los poemanautas, que han descubierto una forma de resistir y de luchar por un mundo mejor. Los poemanautas son personas que poseen un don especial, que les permite viajar por el espacio y el tiempo, mediante la palabra y el sonido. Los poemanautas practican la michinautica del subgatunico recóndito, una ciencia arte que consiste en crear máquinas poéticas, que funcionan con versos y energía solar, y que les permiten acceder a otros mundos posibles, donde existen otras formas de vida, de cultura, de organización y de pensamiento. Los poemanautas exploran estos mundos, aprenden de ellos, y los comparten con otros, mediante el arte radial, una técnica artesanal que consiste en transmitir sus experiencias sonoras, mediante ondas de radio, que se difunden por todo el planeta, y que llegan a los o��dos de quienes quieren escucharlos.
Los poemanautas tienen un sueño común, que consiste en crear un portal interdimensional, que conecte todos los mundos posibles, y que permita a la humanidad liberarse del libertarianismo, y elegir el mundo que más le guste, o crear el suyo propio. Para ello, los poemanautas han diseñado un proyecto, que se llama el arte radial, y que consiste en construir una estación espacial, en forma de esfera metálica, que alberga en su interior un colisionador de jenkus y un acelerador de detenimientos, dos máquinas que pueden generar partículas subatómicas, materia oscura, y agujeros de gusano, los elementos necesarios para crear el portal interdimensional. La estación espacial también es una obra de orfebrería semántica apical, que tiene grabados en su superficie los poemas de los poemanautas, y que al recibir las señales de radio de las naves poéticas, emite una melodía cósmica, que se escucha en todo el universo.
Entre los poemanautas, hay algunos que se destacan por su talento y su valentía. Ellos son lalo y mati, dos amigos que se conocieron en lapoema, un metaverso generado a meta versos, donde los poetas pueden crear y compartir sus obras, y donde se encuentran con sapica sar, una artista que utiliza la inteligencia artificial para crear obras que estimulen la sensibilidad automática replicante, o SAR, una forma de arte que busca provocar emociones en los espectadores, y que les hace cuestionar su propia realidad. Lalo, mati y sapica sar se unen para realizar el arte radial, y abrir el portal interdimensional, pero no saben que el libertarianismo los persigue, y que tiene un as bajo la manga: jengi, el hermano gemelo del comandante DAHENGI, y el mejor amigo del poeta lalo baltusis, que se pasó al lado oscuro, y que desapareció hace años, sin dejar rastro.
¿Podrán lalo, mati y sapica sar realizar el arte radial, y abrir el portal interdimensional? ¿Qué encontrarán en los otros mundos posibles? ¿Qué hará el libertarianismo para detenerlos? ¿Qué papel jugará jengi en esta historia? Estas son algunas de las preguntas que intentaremos responder en este folletín sonoro literario metaficticio de arte radial, que les ofrecemos cada semana, con la esperanza de que les guste, les inspire, y les haga reflexionar. Gracias por su atención, y hasta la próxima. 😊
3 notes
·
View notes
Text
le preguntan a Marosa ¿cuál es el lector ideal?
creo en el lector-autor dice aquel que al leer recrea crea de nuevo con placer lo que el autor dijo
a su vez el autor es un lector recreando lo que otro autor dijo o le hizo sentir así como lo humano recrea la vida repite cada día una operación de lectura y escritura del mundo y así la cadena de hipo e hiper híbridos que según Beatriz Sarlo la inventó Borges
eso y la literatura argentina de la primera mitad del siglo XX la de la segunda la inventó Saer
digamos que la vida la inventó Borges así como lo humano lo inventó Shakespeare según Harold Bloom
y así la cadena del canon y los críticos fans y los críticos haters los que encarnan la pretensión de objetividad no existen por suerte
la Biblioteca de Alejandría consumó el sueño de Alejandro un coleccionista ambicioso construyó el centro universal del conocimiento con los libros del mundo
como Google
la literatura es la invención de una potencia estética lo humano es una potencia estética los clásicos mueren reencarnan en otras escrituras en sucesión de rapsodas
confluimos en el fenómeno del texto confluimos en el fenómeno del sexo en el fenómeno del arte un diálogo en el espacio de la eternidad
las tecnologías imponen su velocidad nadie puede manejar una bicicleta lentamente nadie puede navegar por internet lentamente
la lectura nos impone un ritmo la escritura nos lo imprime
mi cuerpo dice madurar también es ponerse cínico con la vida no confundir instinto con prejuicio a fuerza de insistir desperdiciar emociones porque todo es impermanencia y tránsito incluso lo que parece estable solo está cambiando a otra velocidad
para proteger las emociones uno debe estar en control de sus ficciones que significa necesariamente saber cuándo herir a alguien
ser social es saber perdonar escribe Robert Frost en el poema The Star-Splitter
diáfano dédoublement escribo yo la obsesión con el orden es obsesión no orden recordar es arrojarse a la alucinación la dramaturgia crear un lector un lector-autor de uno mismo uno que no se censura porque la censura va acompañada de la ignorancia de un miedo o un cinismo absurdo frente a la posibilidad de un pequeño cambio en el mundo
manejar el vértigo el humor para subvertir valores pequeño burgueses el cambio social no es algo que se espera sino una acción que arranca con el cuerpo de uno mismo con el sexo con el texto
con la política y la poética de la vida cotidiana de mierda
19 notes
·
View notes
Text
(PUNTOS DE PARTIDA)
I
PALABRAS, ganancias de un cuarto de hora arrancado al árbol calcinado del lenguaje, entre los buenos días y las buenas noches, puertas de entrada y salida y entrada de un corredor que va de ninguna parte a ningúnlado.
Damos vueltas y vueltas en el vientre animal, en el vientre mineral, en el vientre temporal. Encontrar la salida: el poema.
Obstinación de ese rostro donde se quiebran mis miradas. Frente armada, invicta ante un paisaje en ruinas, tras el asalto al secreto. Melancolía de volcán.
La benévola jeta de piedra de cartón del jefe, del Conductor, fetiche del siglo; los yo, tú, él tejedores de telarañas, pronombre armados de uñas; las divinidades sin rostro, abstractas. Él y nosotros, Nosotros y Él: nadie y ninguno. Dios padre se venga en todos estos ídolos.
El instante se congela, blancura compacta que ciega y no responde y se desvanece, témpano empujado por corrientes circulares. Ha de volver.
Arrancar las máscaras de la fantasía, clavar una pica en el centro sensible: provocar la erupción.
Cortar el cordón umbilical, matar bien a la Madre: crimen que el poeta moderno cometió por todos, en nombre de todos. Toca al nuevo poeta descubrir a la Mujer.
II
Hablar por hablar, arrancar sones a la desesperada, escribir al dictado lo que dice el vuelo de la mosca, ennegrecer. El tiempo se abre en dos: hora del salto mortal.
Palabras, frases, sílabas, astros que giran alrededor de un cetro fijo. Dos cuerpos, muchos seres que se encuentran en una palabra. El papel se cubre de letras indelebles, que nadie dijo, que nadie dictó, que han caído allí y arden y queman y se apagan. Así pues, existe la poesía, el amor existe. y si yo no existo, existes tú.
Por todas partes los solitarios forzados empiezan a crear las palabras del nuevo diálogo.
El chorro de agua. La bocanada de salud. Una muchacha reclinada sobre su pasado. El vino, el fuego, la guitarra, la sobremesa. Un muro de terciopelo rojo en una plaza de pueblo. Las aclamaciones, la caballería reluciente entrando en la ciudad, el pueblo en vilo: ¡himnos! La irrupción de lo blanco, de lo verde, de lo llameante. Lo demasiado fácil, lo que se escribe solo: la poesía.
El poema prepara un orden amoroso. Preveo un hombre-sol y una mujer-luna, el uno libre de su poder, la otra libre de su esclavitud, y amores implacables rayando el espacio negro. Todo ha de ceder a esas águilas incandescentes.
Por las almenas de tu frente el canto alborea. La justicia poética incendia campos de oprobio: no hay sitio para la nostalgia, el yo, el nombre propio.
Todo poema se cumple a expensas del poeta.
Mediodía futuro, árbol inmenso de follaje invisible. En las plazas cantan los hombres y las mujeres el canto solar, surtidor de transparencias. Me cubre la marejada amarilla: nada mío ha de hablar por mi boca.
Cuando la Historia duerme, habla en sueños: en la frente del pueblo dormido el poema es una constelación de sangre. Cuando la Historia despierta, la imagen se hace acto, acontece el poema: la poesía entra en acción.
Merece lo que sueñas.
2 notes
·
View notes
Text
Hago de mis manos pinceles
Hace poco volví mi estudio un cuarto meramente creativo. En mi escritorio no se permiten celulares. Tengo cuentitas para hacerme aretes, pinturas, pegamento, mi guitarra y mi teclado. También mi maquillaje, mis alhajas y mis casettes ochenteros. Hago de mis manos mi mejor entretenimiento. La cama de ese cuarto me abraza y llevo mi imaginación a un soneto tántrico. Catorce versos me bastan para renacer en mi pequeño taller de latidos creativos, y hierbas de antaño.
Cristóbal, mi roedor y acompañante, roe. Roe la base de la cama, mis bolsas, mis zapatos y cada pedazo de cartón en su camino. Disfruto imaginar que para él, es tan interesante descubrir nuevos espacios para roer, como lo es para mi crear.
Así, los espejos del cuarto me cuidan, aún estando frente a la cama. Las supersticiones son poéticas y la bonhomía de la luz natural, inunda de calor mi tarde.
Hago de mis manos pinceles y de mi agenda un diario, es un mural divino este paisaje y canto.
-Juli Sierra
3 notes
·
View notes
Text
➢ Fragmentos.
Cántico Cósmico(1989) es una obra extensa de poesía magistral casi científica escrita por el poeta erudito nicaragüense Ernesto Cardenal, quién da una explicación poética de la existencia del todo, recurriendo a ámbitos científicos, cuánticos, históricos y teológicos dejando impreso en la memoria del planeta un tesoro de la escritura latinoamericana. Aquí algunos fragmentos:
"En el principio no había nada ni espacio ni tiempo. El universo entero concentrado en el espacio del núcleo de un átomo, y antes aun menos, mucho menor que un protón, y aun menos todavía, un infinitamente denso punto matemático. Y fue el Big Bang. La Gran Explosión. El universo sometido a relaciones de incertidumbre, su radio de curvatura indeterminado, su geometría imprecisa con el principio de incertidumbre de la Mecánica Cuántica, geometría esférica en su conjunto pero no en su detalle, como cualquier patata o papa indecisamente redonda, imprecisa y cambiando además constantemente de imprecisión todo en una loca agitación, era la era cuántica del universo, período en el que nada era seguro: aun las "constantes" de la naturaleza fluctuantes indeterminadas, esto es verdaderas conjeturas del dominio de lo posible. Protones, neutrones y electrones eran completamente banales. Estaba justificado decir que en el principio la materia se encontraba completamente desintegrada. Todo oscuro en el cosmos. Buscando (según el misterioso canto de la Polinesia) ansiosamente buscando en las tinieblas, buscando allí en la costa que divide la noche del día (...) (...) Trenes en la noche alejándose de una estación. El silbido es más agudo al acercarse y es más grave cuando se va alejando. Primero una infinita condensación de la materia. Y del matrimonio de protones con neutrones se produjo la vida. ¿Qué hay en una estrella? Nosotros mismos. Todos los elementos de nuestro cuerpo y del planeta estuvieron en las entrañas de una estrella. Somos polvo de estrellas. (...)”
2 notes
·
View notes