#cuchillo gaucho
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mercadocoleccionistas · 9 months ago
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FACÓN CRIOLLO Cuchillo Artesanal Argentino
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oraculoediciones · 9 months ago
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LA ESCRITURA COMO CURA (2024) Mariano Buscaglia, escritor y editor, nos habla sobre cómo llegó a la literatura y su importante labor al frente de los sellos "Ediciones Ignotas" y "Cigarro Volador".
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waltfrasescazadordepalabras · 2 months ago
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Los gauchos Quién les hubiera dicho que sus mayores vinieron por un mar, quién les hubiera dicho lo que son un mar y sus aguas. Mestizos de la sangre del hombre blanco, lo tuvieron en poco, mestizos de la sangre del hombre rojo, fueron sus enemigos. Muchos no habrán oído jamás la palabra gaucho, o la habrán oído como una injuria. Aprendieron los caminos de las estrellas, los hábitos del aire y del pájaro, las profecías de las nubes del Sur y de la luna con un cerco. Fueron pastores de la hacienda brava, firmes en el caballo del desierto que habían domado esa mañana, enlazadores, marcadores, troperos, capataces, hombres de la partida policial, alguna vez matreros; alguno, el escuchado, fue el payador. Cantaba sin premura, porque el alba tarda en clarear, y no alzaba la voz. Había peones tigreros; amparado en el poncho el brazo izquierdo, el derecho sumía el cuchillo en el vientre del animal, abalanzado y alto. El diálogo pausado, el mate y el naipe fueron las formas de su tiempo. A diferencia de otros campesinos, eran capaces de ironía. Eran sufridos, castos y pobres. La hospitalidad fue su fiesta. Alguna noche los perdió el pendenciero alcohol de los sábados. Morían y mataban con inocencia. No eran devotos, fuera de alguna oscura superstición, pero la dura vida les enseñó el culto del coraje. Hombres de la ciudad les fabricaron un dialecto y una poesía de metáforas rústicas. Ciertamente no fueron aventureros, pero un arreo los llevaba muy lejos y más lejos las guerras. No dieron a la historia un solo caudillo. Fueron hombres de López, de Ramírez, de Artigas, de Quiroga, de Bustos, de Pedro Campbell, de Rosas, de Urquiza, de aquel Ricardo López Jordán que hizo matar a Urquiza, de Peñaloza y de Saravia. No murieron por esa cosa abstracta, la patria, sino por un patrón casual, una ira o por la invitación de un peligro. Sus cenizas están perdidas en remotas regiones del continente, en repúblicas de cuya historia nada supieron, en campos de batalla, hoy famosos. Hilario Ascasubi los vio cantando y combatiendo. Vivieron su destino como en un sueño, sin saber quienes eran o qué eran. Tal vez lo mismo nos ocurre a nosotros. Fuente de libro y Poema de Jorge Luis Borges:
Elogio de la sombra (1969) / Borges /
Ilustración, Juan Carlos Castagnino.
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iamkenlee-blog · 1 year ago
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"만드리아 Mandria"
로베르또 삐르뽀는(Roberto Firpo)는 마토스 로드리게스가 작곡한 '라 꿈빠르씨따'를 초연한 사람으로 역사에 남았지만, 땅고 태동기(=과르디아 비에하)에 쁘란씨꼬 까나로와 함께 장르를 개척한 인물이기도 하다.
가장 큰 공헌은 플룻, 클라리넷, 기타, 바이올린의 초기 악기 구성에서 기타를 대신해 피아노를 도입하고 베이스를 추가해 이른바 '오르께스따 띠삐까' 확립에 일조했단 점을 들 수 있을 듯.
근데 이 과정에서 꽤 살벌한 사건이 모 땅고 연주 대회에서 있었다고 '탱고 스토리 : 우리를 춤추게 한 악단' 143쪽에 나옴.
"….피르뽀는 바이올리니스트인 띠또 로까따리아파(Tito Roccatagliata), 자칭 반도 네온계의 호랑이라는 젊은 반도네온 연주자 에두아르도 아롤라스(Eduardo Arolas)와 함께 임시로 트리오를 결성해 대회에 참가했다. 그리고 모든 사람들의 예상을 깨고 우승을 차지했다. 이런 결과는 기타리스트들에게는 도저히 받아들일 수 없는 것이었다. 그들이 곧 일자리를 구하기 어려워질지도 모르는 사건이었기 때문이다. 해나로 그룹의 한 기타리스트는 화를 참지 못하고 피르뽀를 향해 무대 위로 올라갔다. 축하 인사를 건네는 척하며 다가가 뒤에서 칼로 피르뽀를 찔렀다. 피르뽀는 병원으로 실려갔다…"
미국 서부에서 소 키우는 사람을 카우보이라고 하듯, 알젠틴 팜파스에는 가우초(Gaucho)가 있었다. 서부가 총잡이의 시대였다면, 가우초는 채찍과 단검을 소지했다고 함. 마초적인 가우초 전통을 계승한 도시 건달을 꼼빠드레(=Compadre=Godfather=대부)라 불렀고, 이들을 따라 하던 동네 날라리를 꼼빠드리또(Compadrito)라 했다. 이들이 한껏 멋을 내고 밤거리를 배회하며 술집 여성과 창녀를 꼬셔서 땅고를 춘 것. 그래서 채찍은 무리지만 단검을 들고 다니는 놈들이 많았기 때문에 종종 이런 사고가 일어났던 것 같다.
땅고 음악 중 1926년에 후�� 로드리게스(Juan Rodríguez)가 작곡한 '만드리아(mandria)' 가사를 번역기 돌리면 다음과 같이 시작한다.
"Tome mi poncho… No se aflija… ¡Si hasta el cuchillo se lo presto! 내 판초를 가져가… 걱정 마 칼도 빌려줄게!"
스페인어 사전에서 'mandria'를 검색하면 "게으름뱅이"라고 나오지만, 룬빠르도(구식 알젠틴 속어)로 "나쁜 자식(=Mal Compañero)"이라고 함. 즉 제목 자체가 결투 상대를 의미하는 듯. 왜 싸우러 가야하는지 확실하게 나와 있진 않지만, 아무튼 "네가 죽던가, 내가 죽던가"라는 살벌한 내용.
최초 녹음은 역설적이게도 삐르뽀가 1927년에 했고, 밀롱가에선 다리엔쏘 악단이 1939년 녹음한 것이 최고 인기.
삐르뽀 이분은 칼에 찔린 거 외에도 인생 더럽게 꼬인 뒷얘기가 두개 더 있다. 우선 거의 전재산을 투자해 목장주가 됐는데 이듬해 홍수가 나서 쫄딱 망함. 그리고 남은 재산 긁어 모아 주식 투자했다가 또 실패. 하는 수 없이 다시 땅고 연주자 생활 시작. -_-a
https://youtu.be/lLKoAS_9O5Y "Roberto Firpo - Mandria"
https://youtu.be/AlXbMbK-j1g "Juan D'Arienzo - Mandria"
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viajeenmoto · 2 years ago
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En moto hacia el color de la tradición en la Feria de Mataderos.
Marcelo Hidalgo Sola nos invita hoy a un paseo con sabor a campo y tradiciones criollas. Conocer la Feria de Mataderos, es asomarse a vislumbrar de que está hecha nuestra argentinidad tierras adentro. Desde 1986 esta Feria de Artesanías y Tradiciones Populares Argentinas, exhibe productos y costumbres de la cultura del campo, y también , es escenario del colorido de las danzas más típicas de nuestro país.
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La Feria de Mataderos es siempre un paseo que reconforta el alma. En moto, se puede se puede llegar al corazón más gaucho de la ciudad en apenas cuarenta minutos. El camino es ágil y llevadero ya que, los fines de semana, la ciudad tiene un paso más lento y apagado. Por ello, se puede transitar con ritmo sereno mientras uno se prepara para disfrutar de un paseo tradicional, pero siempre novedoso.
La calle principal que lleva a la Feria ya ofrece calma e invita al sosiego. Es una ancha calle con columnas de árboles centenarios que forman un arco y dan reparo con su sombra. El aire agita las ramas frondosas que discurren en suave murmullo y puede verse el sol que se cuela por entre las hojas.
La avenida Lisandro de la Torre , en la semana, es una arteria bulliciosa de este barrio del sur de la capital : Mataderos. Sin embargo, los fines de semana se convierte en una tranquera de campo que nos abre a un viaje tierra adentro.
Una feria con el color de las tradiciones y costumbres camperas
La popular Feria de Mataderos nace en la intersección de la Av. Lisandro de la Torre y Av. de los Corrales. Los fines de semana es más que una simple feria, es un paisaje con el color y sabor del campo. La visitan por igual gentes de todas las latitudes– cuenta Marcelo Hidalgo Sola-.Llegan en masa: locales, del interior y turistas . Y el lugar, se llena de color y danzas. Grupos folklóricos despliegan un abanico de piezas tradicionales al compás de pañuelos en mano que son, en su mayoría, de los transeúntes y visitantes ocasionales que se suman espontáneamente a la fiesta. Zapateos y revuelo de polleras, se mezclan con giros y contra giros, mientras suenan sin cesar las zambas y chacareras. Por momentos pareciera una postal de campo pero no hemos atravesado los límites de la Capital Federal.
En el desfile de puestos se puede ver de todo. Y comprarse de todo y aprender de todo. La vista no puede abarcar la infinidad de artículos que se exhiben para la venta. Por aquí asoman ponchos, mates de todos los tamaños y formas, cuchillos de plata y alpaca labrados, mantas con guardas de diseños criollos, todo muy bien realizado y de calidad.
Cada pieza al ser artesanal, es única. Por ello, cada mate, cada poncho, y cada artículo que está a la venta busca despertar los sentidos de los visitantes. A simple vista, quizás parezcan similares pero la distinción está en los detalles. Un color, una flor tallada en la calabaza, una cinta de color que atraviesa una manta. Pequeños detalles que hacen que cada uno encuentre su objeto especial, como si el corazón mismo del campo lo hubiera acercado a su dueño.
Los puestos de la feria como verdaderas escuelas de la tradición
Los puesteros son muy amables. Están bien dispuestos y reciben a todos de muy buen humor. Al ofrecer sus productos, por lo general, también ofrecen verdaderas lecciones del campo y sus tradiciones.
A pesar de que por la pandemia muchos turistas se van de la feria sin probar el mate, se llevan una cátedra de cultura matera encima. Si la ocasión lo permite, los puesteros les explican qué es un mate y todo lo relativo a su particular ceremonia. Entonces, además de irse con un mate bajo el brazo, lo hacen conociendo las técnicas de como cebarlo , y de cómo se cultiva el producto en el interior del país. En media hora de escucha atenta, aprenden de las propiedades de la menta, del burrito, el cedrón, la cola de caballo y demás. Y de los gauchos, que decir, preguntan todo y todo les causa fascinación…
Como toda auténtica postal de campo, el recorrido no estaría completo sin la gran cantidad de ‘paisanos’ vestidos con ropas gauchas que con sus aperos recorren la Feria. Y, si uno llega para el espectáculo de doma, puede sentir que ya no le faltaría nada para ver. En un espacio especial de la Feria, se realiza el tradicional desfile de jinetes montados a caballo. Un despliegue de trotes y carreras en donde se luce la destreza y la belleza de la doma. Aquí, ante la vista de los jinetes y sus caballos, uno puede apreciar la bondad de un animal que regala lo mejor de sí a su entrenador. Un pedacito del campo a vista de todos.
Por ello, visitar la Feria de mataderos, es una excelente oportunidad para subirse a la moto y llegarse hasta el campo sin salir de la ciudad. Disfrutar del paseo, una buena comida al paso, aprender de nuestras tradiciones mientras escuchamos excelentes zambas, puede ser una muy buena oportunidad para reconectarnos con nuestras raíces más profundas que, por suerte, siguen vigentes y se actualizan semana tras semana, en estos pagos urbanos, a minutos de la City Porteña y del conglomerado de cemento.
Originally published at on https://viajeenmoto.com.ar January 23, 2023.
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gojorgeworld · 13 days ago
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CARTA A LOS LECTORES
“Día de la Tradición”
“EL GAUCHO”
En nuestras comarcas norteñas y en gran parte de nuestro país, la palabra gaucho tiene diversas acepciones. Cuando decimos: "¡Qué gaucho es Fulano!", estamos ponderando la nobleza, la generosidad, la caballerosidad, el desinterés, el hidalgo señorío de un individuo desprendido. Y también al decir: "Mengano es un gaucho”, con un matiz en la voz ligeramente distinto, casi despectivamente, lo calificamos como ignorante, rudo, grosero, rústico, tosco, ordinario. El sentido de "gaucho" no sólo varía de acuerdo al tono con que se pronuncie, sino a quien use el término. Si lo menciona uno de los colaboradores de “Güemes”, sin duda se evoca a héroes legendarios, centauros generosos que enfrentan la muerte por lealtad a la patria encarnada en su caudillo. Si lo recuerda el del bando contrario, eran solamente bandoleros o cuatreros. Una carta de un militar en campaña a su contendiente nos da algunos aspectos de la historia. ¿Cree usted que un puñado de hombres desnaturalizados y mantenidos con el robo, sin más orden, disciplina ni instrucción que la de unos bandidos, puede oponerse a una tropa aguerrida y acostumbrada a vencer a las primeras de Europa? ¿Esos a los que se llaman “gauchos” son incapaces de batirse con triplicada fuerza como es la de su enemigo? El receptor de la misiva, un comandante patriota ve en cambio con orgullo que sus "gauchos" han abatido a un aguerrido regimiento. El jefe vencido los desprecia por verlos sin orden ni disciplina, solamente mantenidos con el robo. A la fuerza y con los resultados a la vista tuvieron que convencerse de que esos hombres simples fueron esenciales y eficaces en la defensa de la patria que verdaderamente amaron. ¿Son héroes o bandidos? Para nosotros los norteños, hermanados y consustanciados con los paisanos del campo, al Gaucho no solo lo honramos en su lucha por la independencia de nuestro país y también lo recordamos con simpatía pegado a una guitarra. Su instrumento propio, el más apto para expresar su música, el que por su peso y tamaño no estorba a ese hombre andariego, trashumante. Es que el gaucho es también un hombre de trabajos rudos, de trajinar el cuero haciendo trenzas que exigen esforzar los dedos. Hombres de manos callosas y dedos entumecidos como pesados y agarrotados de tomar el lazo y cumplir largas faenas en el campo travieso. Varón de espíritu noble y osado, sin apegos ni prejuicios, el que siempre cantó su rebeldía y amó su libertad. Nunca tuvo patrones y con su única riqueza y mejor compañero su caballo se ganó su pobre sustento. Hábil jinete, melancólico y reservado. Con su lazo, el rodeo de hacienda y las travesías, las espuelas, el cuchillo, facón o daga y el poncho, fueron hitos de nuestra tradición. Los recados y rebenques, la chiripa serán siempre instrumentos de orgullo para estos gauchos humildes, gauchos pobres, que en las históricas batallas con Güemes a la cabeza, han conseguido que hoy nuestra Argentina sea una Nación libre e independiente. Fierro dice que él sabe "dirigir la mancera / y también echar un pial... / Sé correr en un rodeo, / trabajar en un corral... / Me sé sentar en un pértigo / lo mesmo que en un bagual". De modo que el gaucho con la guitarra podrá rasguear el acompañamiento de un canto, marcar el compás de un baile; cuanto más, arpegiar una milonga, pero con espíritu noble y osado, sin apegos ni prejuicios, cantó su rebeldía y amó su libertad y fue artífice de nuestra independencia y libertad. SALVE CRIOLLO ARGENTINO.
Dr. Jorge Bernabé Lobo Aragón
D.N.I. Nº 12.209.529
Avda.: Camino del Perú 1575
San Miguel de Tucumán
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diario-vespertino · 2 years ago
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El facón y la daga
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El facón, si bien era una herramienta de corte, también era el arma de pelea. Y no es que el gaucho fuera un peleador por naturaleza, sino, a mi entender, simplemente era una cuestión de épocas. Por aquellos tiempos, el honor tenía menos paciencia. Una variante del facón es el llamado “caronero”, de similares características pero generalmente realizado con la hoja de una espada o espadín de milico. Se llevaba entre las caronas del recado (las piezas de suela que separan al jinete de la transpiración del caballo), apretado, del lado de montar (para los diestros), y lo menos visible posible, para que no sea motivo de provocación, porque, inequívocamente, es un elemento de pelea, aunque se lo lleve para la defensa en caso de ser atacado por “infieles” o bandidos. Hoy, en los concursos de aperos tradicionales, se lo pone muy a la vista, para lucirlo y para que el jurado lo observe. Generalmente los “caroneros” tenían vaina de suela o cuero crudo. He visto uno solo, muy antiguo, con vaina enteriza. La daga es muy similar al facón. Su nombre proviene del Medioevo, y tiene la característica principal de tener filo de ambos lados de la hoja. Hay quienes afirman que no debe llevar “guardamano”, pero eso es relativo. No podemos tomar como ejemplo la ya mencionada daga de Juan Moreira, porque como bien probara el investigador en el tema Abel Domenech, era un facón. La literatura la convirtió en daga. El facón y la daga llevan la “espiga” en el medio de la hoja. Es bueno aclarar que llamamos “espiga” a la extensión de la hoja, que es más finita que ésta, y es de donde se encaba el cuchillo. Otra variante a la que genéricamente se le llama facón, por tener un largo parecido (mayor o apenas menor), es el “cuchillo de cintura”. Tiene las mismas aplicaciones, sus vainas coinciden, pero la diferencia está en la hoja, que es como la de una cuchilla de cocina, pero sin panza. Digamos que forma un triángulo y que el vértice que queda junto al cabo, se llama “gavilán”. Y ya que mencionamos la “cuchilla” de cocina, digamos que en el Litoral se ve llevar a la cintura grandes cuchillas envainadas junto a la chaira, que es elemento para asentar el filo de una hoja. A esta cuchilla, he escuchado alguna vez que le dicen “facón hembra”. No sé si es un modismo zonal, una ocurrencia personal o una forma popular de mencionarla. :::Raúl Oscar Finucci Director de la revista “El Tradicional” E-mail: [email protected]:::
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claudioiglesias · 3 years ago
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La revolución de los asuntos del arte empieza por la medicina tradicional
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Ángel Della Valle y su orientalismo
De la "cuestión nacional china" y el "legado cultural chino" eligió ocuparse Mao Tse-Tung en Nueva democracia, su obra filosófica de 1940. De qué sirve la cultura clásica, era la pregunta (o sea: de qué sirve la cultura clásica si el conocimiento es práctica.
La cultura clásica sirve por un lado y por otro no. Es una inspiración de métodos de trabajo y pensamiento adocenado, una escuela de servilismo y pesimismo, pero también puede ser lo opuesto. Cómo distinguir entonces?
Los marxistas occidentales y soviéticos ya habían puesto a disposición una cantidad de ideas sobre la cuestión del "legado" (¿qué hacer con la cultura burguesa?) pero el tema había quedado en un punto muerto entre el determinismo dialéctico puramente formal de Lukács y el de sus seguidores-negadores (la 'teoría crítica').
Un ejemplo: Según el determinismo puramente formal del marxismo europeo, una obra cultural del pasado lleva huellas de las condiciones sociales que la hicieron posible, y por eso también lleva impresa una posibilidad emancipatoria. Típicamente una escultura europea involucra trabajo cuasi esclavo en su fomación (la violencia social básica) a la vez que conocimientos racionales y sentimientos "humanos" que deben propiciar un horizonte utópico.
Mao piensa al revés. No hay que buscar un elemento emancipatorio en ningún lado. Al revés, la cultura de distintas épocas históricas engloba "una cultura popular [campesina] que es en sí misma revolucionaria y democrática" a la zaga de la cultura hegemónica y patriarcal de las instituciones. La cultura popular se extiende en el folclore y llega a dominios como la medicina, la filosofía y el paisaje. Las instituciones que regulaban la vida intelectual china en tiempos clásicos podían atrapar esta cultura, como se atrapa a un animal.
No se trata de que el relato de la historia del arte pueda contarse de otra manera sino las historias que habían quedado sin contar.
El arte rioplatense en su versión hegemónica es un arte de estancieros, desde su formación. Es arte hecho en y para la propiedad latifundista. Pensar que ese arte tiene una posibilidad utópica es como imaginarse a una princesa encerrada esperando a un sapo que la rescate.
Otra cosa sería pensar que el arte rioplatense, además de arte estanciero hegemónico, incluye cantidad de cosas que ni siquiera hemos conocido, y otras que sí: distintas formas de arte rural y folclórico, arte de puesteros, de gauchos, embrujos, pensamientos malos útiles para echar mala suerte, payadas y otros tipos de poesía, cuerdas y cuchillos para manejar el ganado, vajilla hornada, redes de pesca y formas de producción cuya invención correspondió a las masas campesinas, y no a sus explotadores educados en Europa.
En realidad, la revolución es el único proyecto histórico. Es lo que el planeta ya está haciendo hace decenas de miles de años, y la historia también. Solo hay que desmelar ese proyecto de entre las distintas formas de revisionismo o peor subjetivismo.
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elbiotipo · 5 years ago
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Argentina Post-Magicapocalíptica
Año 2012 después de Cristo: nadie sabe exactamente que pasó; si fueron dioses locos de furia, o demonios vengativos, o naves extraterrestres, o algún cometa perdido. Pero la civilización que existía entonces colapsó por completo, y el planeta cambió para siempre.
*Indeterminados Años Después* la civilización industrial prácticamente ya no existe. La humanidad vive en aldeas y pueblos que apenas se dignan a llamarse “ciudades” amuralladas. La naturaleza retomó el resto.
No todo el conocimiento se ha perdido. En bibliotecas y universidades han sobrevivido enciclopedias enteras de eras pasadas. Molinos de viento proveen electricidad intermitente a los pueblos, y viejos ferrocarriles funcionan aisladamente. Incluso algunas películas y músicas de aquellas épocas sobreviven, salvadas por diligentes archivistas y fanáticos. Pero al leer las enciclopedias, es claro que los hombres antiguos desconocían totalmente sobre los seres sobrenaturales y las técnicas de la magia.
Cosas siniestras acechan en las noches. Fantasmas de soldados que luchan guerras que ya terminaron, o quizá nunca fueron. Lugares (o son horas?) donde la realidad y el tiempo se retuercen en sí mismas. Seres de las profundidades vagan en las playas iluminadas por la inquietante luna. Pueblos a los que nadie va, habitados por mutantes y lunáticos. Sectas que hacen rituales de sangre y dolor. Aparatos de eras pasadas que despiertan con una inteligencia sobrenatural. Nadie cuerdo anda solo de noche, y nadie se queda a dormir sin cuatro paredes, un techo y una luz.
De día las cosas no son menos extrañas. Los espíritus de la naturaleza susurran para los que saben escuchar. Santos y Demonios caminan las rutas, haciendo milagros con poderes desconocidos. Seres casi humanos, de otros mundos, quizá otras realidades, buscan su destino en las ciudades. Animales extintos caminan en el monte y las pampas, desde gliptodontes hasta argentinosaurios. Las calles de Buenos Aires reviven iluminadas con publicidades de productos que ya no existen, con autos y peatones que se desvanecen con el atardecer. Líneas de colectivos que van a ninguna parte, ministerios que nadie sabe para que existen, héroes que nacen de la imaginación popular, salvan al país, y luego desaparecen.
Buenos Aires sigue siendo la mayor ciudad de Argentina, aunque en realidad no es más que una colección de pueblos y asentamientos separados por extensiones de ciudad abandonada y peligrosa. Algunos son tan sólo edificios o escuelas rodeados de barrios retomados por la naturaleza. Pese a que muchas partes del Gran Buenos Aires están envenenadas con contaminantes tóxicos o embrujadas por magias desconocidas, muchos aventureros vienen a buscar “repuestos” y pedazos de tecnologías y artes olvidadas en lo que alguna vez fue el gran centro comercial e industrial de la nación. Artistas y científicos protegen sus museos y laboratorios con recelo, aferrándose a retazos de un mundo alguna vez comprensible. Ingenieros y técnicos errantes son muy valorados; son ellos los que mantienen los molinos y paneles solares que le dan luz a la ciudad, y conservan aquellos cassettes y CDs de tiempos pasados; incluso conectandosé al antiguo Internet, hoy lleno de memes y sitios incomprensibles, capaz hasta peligrosos. Gran parte de la ciudad está inundada; el gran río inmóvil está solo a unos pasos de la Casa Rosada.
La Gran Pampa es un pastizal natural sin fin: los alambrados se han oxidado hasta desaparecer y la soja no es más que un yuyo más. Manadas de venados, caballos, ñandúes y ocasionalmente gliptodontes y perezosos se cuentan por los millones: las cabezas de ganado de los gauchos parecen minúsculas en comparación. Sin murallas que los protejan, los habitantes de esta región pasan sus vidas a caballo y conocen bien como tratar con eventos sobrenaturales en los campos infinitos; cada rezo, cada amuleto, cada hechizo. Los ranchos y pulperías ostentan de una infinidad de símbolos santos para ahuyentar a los malos espíritus; brujas, curas, y otras personas tocadas por lo transmundano bravean a gualichos, espíritus, bandidos y las tretas del Mandinga, galopando entre los ranchos aislados, protegiendo a las personas desde las sombras.
El río Paraná es la arteria comercial de la región. Barcazas, veleros, y los ocasionales vapores cruzan los puertos del litoral; Rosario, Paraná, Corrientes, Barranqueras, Asunción, llevando fruta, maderas, y la tan valiosa yerba mate... Los bosques han recuperado toda su extensión y los yaguaretés de vuelta llegan hasta el bien llamado Delta Del Tigre. Las selvas en galería ocultan pueblitos de pescadores, ranchos de contrabandistas y cabañas de curanderas, perdidas en la infinidad de la naturaleza. Los que viven en estas regiones saben el nombre y el uso de cada planta y animal que vive en estas regiones, desde el magnífico quebracho con su leña de acero hasta los más mínimos yuyos para el mate. De noche, los espíritus de la tierra están más vivos que nunca; las curanderas recomiendan ante todo respeto por ellos. Meteoritos magnéticos en bosques impenetrables, árboles centenarios cubiertos de imágenes sagradas, bestias extintas que acechan en la noche de los esteros… El Gran Chaco guarda muchos misterios, y no se los devela a cualquier persona.
Las sierras y valles del oeste son lugares de una majestuosa belleza, pero secos en su mayoría, en donde la vida transcurre en los pequeños oasis y ríos. Aquí, los pueblitos de adobe blanco con sus viñedos y olivos siguen iguales como si el tiempo se hubiese detenido (y en un par, eso puede ser cierto…). La música suena entre las quebradas, a veces de los festivales y los asados, a veces sin ninguna fuente aparente (y ahí, hay que cuidarse…). Pequeñas iglesias y refugios protegen a los viajeros del frío de la noche y de las funestas luces que acechan en los cerros. En algunos lugares más antiguos, ruinas de pueblos alguna vez extintos viven de nuevo, las terrazas llenas de maíz y papas de miles de colores… y algunos dicen los secretos palacios y ciudades perdidas entre las nubes eternas de las Yungas. Aún más al oeste, se extiende la gran cordillera de los Andes. Aquellos que saben de las leyendas antiguas hablan de los Apus, las montañas y rocas sagradas de Tawantinsuyu.
Al sur, la Patagonia se extiende como si no tuviera fin. Los bosques al oeste, pisando la cordillera, poco a poco se vuelven estepas caminadas por grandes criaturas extintas; más de un paleontólogo ha visto su tema de tesis revivir en bosques petrificados. Jinetes viven arriando ovejas en toldos y cabañas, los pueblos conectados por antiguos trenes que misteriosamente siguen funcionando, la vieja Ruta 40 ocasionalmente tiene camionetas atrapadas en un viaje infinito. Abrazando al frío mar, tranquilos pueblos pesqueros conviven con gigantes manadas de ballenas y el ocasional e inexplicable monstruo marino. Hay rumores de criaturas escamadas que viven en las aguas del Atlántico y salen por las noches de luna, pero nadie está seguro.
Argentina, en teoría, sigue siendo una república representativa federal. En la práctica es una alianza de intendentes y caudillos que le juran lealtad a gobernadores que le juran (teórica) lealtad a un congreso (teóricamente) electo en Buenos Aires que le jura lealtad a un presidente con mandatos casi vitalicios. Este sistema casi feudal está dominado por tradiciones burocráticas, y el estado nacional hace poco más que resolver disputas y mantener algunas instituciones vitales argentinas, como las Universidades Nacionales y la AFA.
Uruguay y Paraguay son naciones amigas de Argentina; Montevideo y Asunción son puertos importantes. Brasil es un imperio nuevamente, aunque la autoridad del Imperador es poco clara, y en la gran extensión hay estados y ciudades que son prácticamente independientes. Al norte, Tawantinsuyu domina el Altiplano, un imperio de una riqueza fenomenal y poderes mágicos extraoordinarios. La República de Chile y su poderosa flota dominan el Pacífico. Poco se sabe del resto del mundo, más allá de lo que hay en mapas de libros antiguos. Ocasionalmente, llegan barcos con visitantes de lugares lejanos, del Sacro Imperio Romano-Germánico, de la Confederación de Malí, de los Estados Pontificios o de la Dinastía Hongsé, y algunos de otros lugares (¿o planos, o dimensiones?) aún más exóticos, buscando cosas que solo ellos comprenden. Al sur, las aguas frías del Cabo de Hornos ocultan a la misteriosa Antártida, donde dicen, dicen, que hay ciudades supertecnológicas bajo los glaciares, mantenidas por reactores nucleares...
“Cuidáte” es una expresión que tiene mucho peso en este mundo. Después de todo, lejos de la acogedora luz de los pueblos, las cosas se vuelven incomprensibles y peligrosas. Las personas que se atreven a bravear a estos misterios y caminar entre las ciudades, manteniendo a las comunidades conectadas entre sí, son personas respetadas pero temidas. Algunos eligen confiar en sus habilidades de jinetes y cuchillo, otros en su fe y su conocimiento de magias milenarias, y algunos incluso en aparatos tecnológicos que siguen funcionando para ellos. Algunos son criaturas o espíritus que no son humanos en cuerpo, quizás, pero sienten y aman como nosotros. Otros son gente común y corriente, aburrida de la vida en un solo sitio, que se animan a vivir algo más, solamente confiando en su viveza criolla, y lo demás que sea lo que Dios quiera. Pero todas son personas particulares, bizarras, raras, que atraen miradas torcidas en pulperías, bares y cafés.
Pero alguien tiene que hacer lo que ellas hacen, para enfrentar a lo que acecha entre las sombras, para conectar a los pueblos distantes, para que la llama de la humanidad siga viva, para que no andemos perdidos en la oscuridad...
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dolceminerva97 · 6 years ago
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Rural Wanderer Argentina
English and Spanish description under read more!
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For those who don't know her, here's a little insight on her and this particular picture!
Argentina is a very large country with a not so large population, which is very condensed in a few major cities, so the rest of the land consists of rural areas and wild nature. Moreso before the large influxes of immigration, when the country was practically empty.
This outfit is sort of what Argentina dressed like around the mid-late 19th century when she wandered on her lands, it's meant to be a mix of gaucho clothes and paisana dress (mainly for the skirt). It's quite humble and simple, since our traditional costumes aren't really... detailed or original, they're mainly generic clothes affordable for the masses, which are very common amongst American and European regions.
When traveling around her rural lands, she always kept a facón (the knife) with her, which was useful for multiple things such as hunting and self-defense, among other manual tasks. Facones can vary in length and style, but I chose a version that seemed to be the most common, they're basically big knives or small swords.
Berets weren't that common back then but it looked prettier than a hat lol
So, when she wasn't being bossed around or interacting with other countries, she would take long journeys by herself, to check on her provinces and her people. She's used to being pretty independent and alone, although she hates the loneliness of it. Those long periods of hardships in the isolated lands of her country helped her forge a tough and resilient character, which would be softened much later when she made new friendships with other countries.
Español 
Este dibujo es parte de algo más grande, pero me gustó lo suficiente para postearlo por separado y aprovecho para explicar un poco lo que representa.
Aquí me salió más adulta, pero en ese entonces tenía 16-17 años.
Esta es una ilustración de cómo se veía Argentina más o menos a lo largo del siglo XIX (mediados y finales) cuando emprendía largos viajes para recorrer su país. El territorio de Argentina es muy vasto, pero históricamente ha estado escasamente poblado, a excepción de algunos centros urbanos que reúnen a gran parte de la población.
Por este motivo, desde pequeña, Argentina ha deambulando por sus tierras para estar al tanto de su gente y de sus provincias, las cuales le traían muchos problemas por las constantes guerras civiles, alianzas y enfrentamientos. En cierto modo, ella hacía estos recorridos para poder consolidar esa sensación de unidad nacional que tanto flaqueaba, y que tanto le costó conseguir por mucho tiempo.
El traje es una mezcla de la ropa que usaban los gauchos y las polleras de las chinas o paisanas. En verdad eran ropas humildes y sencillas, pues los vestidos de lujo los reservaba para sus citas con sus superiores o con otros países.
Por los menesteres propios de la vida de una jovencita deambulante, nunca le faltaba su facón, que es el cuchillo emblemático del gaucho. Aunque es un accesorio propio de los hombres, como Argentina no podía solamente dedicarse a casarse y ser ama de casa, le fue necesario adquirir ciertos hábitos más viriles, como domar caballos y saber pelear. De modo que su facón le fue de gran utilidad, puesto que tiene múltiples propósitos: para cazar, para auto defensa y otras manualidades, etc.
Los facones a su vez pueden variar en formas, tamaños y usos más específicos; el que yo dibujé es una versión genérica.
Y así fue en gran parte el estilo de vida de Argentina antes de las grandes oleadas de migraciones, que le cambiaron la vida y hasta el carácter. Por necesidad, desarrolló un genio duro y resilente, lo que no quiere decir que no sufría mucho por las grandes soledades que pasaba, o que no tuviera delicadeza ni sentimientos. Más adelante adquiriría una templanza más alegre y desenvuelta como la conocemos ahora, pero eso es tema para otro post ^^
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maianarojas · 5 years ago
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Poema conjetural
El doctor Francisco Laprida, asesinado el día 22 de setiembre de 1829
por los montoneros de Aldao, piensa antes de morir:
Zumban las balas en la tarde última. 
Hay viento y hay cenizas en el viento, 
se dispersan el día y la batalla 
deforme, y la victoria es de los otros. 
Vencen los bárbaros, los gauchos vencen.
Yo, que estudié las leyes y los cánones, 
yo, Francisco Narciso de Laprida, 
cuya voz declaró la independencia 
de estas crueles provincias, derrotado, 
de sangre y de sudor manchado el rostro,
sin esperanza ni temor, perdido, 
huyo hacia el Sur por arrabales últimos. 
Como aquel capitán del Purgatorio 
que, huyendo a pie y ensangrentando el llano, 
fue cegado y tumbado por la muerte 
donde un oscuro río pierde el nombre, 
así habré de caer. Hoy es el término. 
La noche lateral de los pantanos 
me acecha y me demora. Oigo los cascos 
de mi caliente muerte que me busca 
con jinetes, con belfos y con lanzas. 
Yo que anhelé ser otro, ser un hombre 
de sentencias, de libros, de dictámenes 
a cielo abierto yaceré entre ciénagas; 
pero me endiosa el pecho inexplicable 
un júbilo secreto. Al fin me encuentro 
con mi destino sudamericano. 
A esta ruinosa tarde me llevaba 
el laberinto múltiple de pasos 
que mis días tejieron desde un día 
de la niñez. Al fin he descubierto 
la recóndita clave de mis años, 
la suerte de Francisco de Laprida, 
la letra que faltaba, la perfecta 
forma que supo Dios desde el principio. 
En el espejo de esta noche alcanzo 
mi insospechado rostro eterno. El círculo 
se va a cerrar. Yo aguardo que así sea.
Pisan mis pies la sombra de las lanzas 
que me buscan. Las befas de mi muerte, 
los jinetes, las crines, los caballos, 
se ciernen sobre mí... Ya el primer golpe, 
ya el duro hierro que me raja el pecho, 
el íntimo cuchillo en la garganta.
Jorge Luis Borges, 1943.
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andrescasciani · 5 years ago
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De la Zoncera Nro14: "La inferioridad del nativo" Por Arturo Jauretche -ilustraciones: Andrés Casciani (2019)* "Por encima del gaucho se ha conformado una sociedad comercialista y capitalista; el gringo proviene de ella y cono­ce perfectamente la transacción y el valor acumulativo del di­nero. El gaucho ignora hasta la propiedad de la tierra. Se ha formado en donde ésta es "res nullius", o por lo menos desier­to, y su economía es una economía primaria de autosatisfacción fundada en la parquedad de sus necesidades y en la pro­visión por la naturaleza y por sus aptitudes ganaderas, de las cosas esenciales. El dinero es necesario a lo sumo para los vi­cios y elementales urgencias; no tiene valor acumulativo por­que no tiene destino, y sólo puede proporcionarle los lujos del apero y la tropilla. La plata y el oro, aún amonedados, son el adorno de su cuchillo o de su tirador. No concibe lo comer­cial y el comercio no forma parte de su vida; es un incidente con vistas a procurarse cosas de consumo o de uso, nada más. Lógicamente, mostrador por delante, el gringo lo vence siempre y lo vencerá en todo lo que se vincule con sus apti­tudes para la sociedad capitalista. ¿Puede, de aquí, deducirse una inferioridad? Sí, para determinado tipo de sociedad; pero puede ser superioridad para otro". *Lápiz y tiza pastel sobre papel / 21 x 29 cms aprox. c/u. http://andrescasciani.com/
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waltfrasescazadordepalabras · 4 months ago
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Los gauchos . Quién les hubiera dicho que sus mayores vinieron por un mar, quién les hubiera dicho lo que son un mar y sus aguas. Mestizos de la sangre del hombre blanco, lo tuvieron en poco, mestizos de la sangre del hombre rojo, fueron sus enemigos. Muchos no habrán oído jamás la palabra gaucho, o la habrán oído como una injuria. Aprendieron los caminos de las estrellas, los hábitos del aire y del pájaro, las profecías de las nubes del Sur y de la luna con un cerco. Fueron pastores de la hacienda brava, firmes en el caballo del desierto que habían domado esa mañana, enlazadores, marcadores, troperos, capataces, hombres de la partida policial, alguna vez matreros; alguno, el escuchado, fue el payador. Cantaba sin premura, porque el alba tarda en clarear, y no alzaba la voz. Había peones tigreros; amparado en el poncho el brazo izquierdo, el derecho sumía el cuchillo en el vientre del animal, abalanzado y alto. El diálogo pausado, el mate y el naipe fueron las formas de su tiempo. A diferencia de otros campesinos, eran capaces de ironía. Eran sufridos, castos y pobres. La hospitalidad fue su fiesta. Alguna noche los perdió el pendenciero alcohol de los sábados. Morían y mataban con inocencia. No eran devotos, fuera de alguna oscura superstición, pero la dura vida les enseñó el culto del coraje. Hombres de la ciudad les fabricaron un dialecto y una poesía de metáforas rústicas. Ciertamente no fueron aventureros, pero un arreo los llevaba muy lejos y más lejos las guerras. No dieron a la historia un solo caudillo. Fueron hombres de López, de Ramírez, de Artigas, de Quiroga, de Bustos, de Pedro Campbell, de Rosas, de Urquiza, de aquel Ricardo López Jordán que hizo matar a Urquiza, de Peñaloza y de Saravia. No murieron por esa cosa abstracta, la patria, sino por un patrón casual, una ira o por la invitación de un peligro. Sus cenizas están perdidas en remotas regiones del continente, en repúblicas de cuya historia nada supieron, en campos de batalla, hoy famosos. Hilario Ascasubi los vio cantando y combatiendo. Vivieron su destino como en un sueño, sin saber quienes eran o qué eran. Tal vez lo mismo nos ocurre a nosotros.
Fuente de libro y Poema de Jorge Luis Borges:
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Elogio de la sombra (1969) / Borges /
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cincoquesos-blog · 6 years ago
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El locro, la comida patriótica por excelencia
¿Qué argentino no degustó este plato en fechas patrias? Contundente, calórica, llena de ingredientes, sinónimo de feriado y reunión familiar. En esta nota se detallará la historia y las maneras de preparar este plato.
En su nacimiento, allá por 1810, el locro era una comida realizada por gauchos del noroeste del país. El 25 de mayo de 1910 se certificó que este guiso sea la comida nacional en las dos principales jornadas patrias. Y desde ese entonces, se hace presente en cada hogar a lo largo y a lo ancho de la Argentina. Como Batman cuenta con Robin, el locro tiene al quiquirimichi. Es la salsa picante que le termina de dar al cuerpo un calor abrumador.
¿Qué lleva el locro? Hay variedades, aunque ninguna sea muy distinta de la otra. La primera receta es la realizada por Gauchitos Argentinos 👇.
Contiene: 1 kg de maíz blanco partido, 1 kg de porotos, 500 gr de carne de ternera (puede tener hueso), 1 pata de chancho y sus cueritos, 100 gr de tripa gorda, 200 gr de mondongo, 500 gr de zapallo amarillo criollo, 3 puerros, 5 cebollas de verdeo, 3 cdas de pimentón dulce, 2 cdas de comino en grano y 1 cda de grasa de pella.
Con esta cantidad de ingredientes se llegan a preparar ocho raciones. La realización de este plato se debe empezar el día anterior con el remojo del maíz y el poroto durante una noche entera. Luego cocerlos en la misma agua durante 1 hora y media. Después agregar las carnes cortadas en cuadrados pequeños, una vez que rompe hervor, retirar las impurezas soltadas por la carne. Pasada una hora, introducir las verduras y dejar cocer hasta que la preparación se espese. Para la preparación del quiquirimichi: picar la cebolla de verdeo y tirarla a la sartén con la grasa colorada (es la grasa con pimentón), cuidar que no se queme y agregar un poco de agua. Servir el locro en plato hondo con una cucharada del quiquirimichi.
La siguiente receta se caracteriza por ser más simple y no contener tanta cantidad de ingredientes ya que es el locro que se realizaba en 1810 y por eso no contiene la medida justa de sus componentes. Los ingredientes son: maíz blanco pelado, porotos, hueso o grasa (vacuna o porcina), cebolla y carne cortada a cuchillo o algún corte que se desmenuce. Su preparación tarda alrededor de 3 horas. El primer paso es hervir el maíz en una olla con agua, luego agregar los porotos y dejar cocinar durante 1 hora y media. Luego añadir la carne y la verdura y dejar al fuego por 1 hora y media más. Esta receta no cuenta con el querido quiquirimichi, pero no deja de ser un manjar.
Indudablemente, esta comida es un símbolo de nuestra cultura y a medida que pasan los años, toma más fuerza. Sus ingredientes hacen que sea un plato hipercalórico y que se pueda disfrutar en el invierno, son pocos los hozados que lo preparan con altas temperaturas. Por eso y por muchos otros motivos, el locro es la comida patriótica por excelencia.
Sebastián Fermanelli ✏
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demipaisar · 2 years ago
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gojorgeworld · 5 years ago
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                   ¿Héroes o Bandidos?
En nuestras comarcas norteñas y en gran parte de nuestro país, la palabra gaucho tiene diversas acepciones. Cuando decimos…"¡Qué gaucho es Fulano!", estamos ponderando la nobleza, la generosidad, la caballerosidad, el desinterés, el hidalgo señorío de un individuo desprendido. Y también al decir…"Mengano es un gaucho”, con un matiz en la voz ligeramente distinto, casi despectivamente, lo calificamos como ignorante, rudo, grosero, rústico, tosco, ordinario. Es que el sentido de "gaucho" no sólo varía de acuerdo al tono con que se pronuncie, sino a quien use el término. Si se lo menciona a  uno de los colaboradores de “Güemes”, sin duda se evoca a héroes legendarios, centauros generosos que enfrentan la muerte por lealtad a la patria encarnada en su caudillo. Si lo recuerda el del bando contrario, eran solamente bandoleros o cuatreros. Una carta que tuve el placer de leer de un militar en campaña a su contendiente nos da  algunos aspectos de la historia. “…¿Cree usted que un puñado de hombres desnaturalizados y mantenidos con el robo, sin más orden, disciplina ni instrucción que la de unos bandidos, puede oponerse a una tropa aguerrida y acostumbrada a vencer a las primeras de Europa? “…Esos a los  que se llaman “gauchos” son  incapaces de batirse con triplicada fuerza como es la de su enemigo?...Por el contrario el  receptor de la misiva, un comandante patriota ve en cambio  con orgullo que sus "gauchos" han abatido  a un aguerrido regimiento. El jefe vencido los desprecia por verlos sin orden ni disciplina, solamente mantenidos con el robo. Si…y más allá de los avatares de la historia a la fuerza y con los resultados a la vista tuvieron que convencerse de que esos hombres simples  fueron esenciales y eficaces en la defensa de la patria que verdaderamente  amaron. ¿Son héroes o bandidos? Para nosotros los norteños, hermanados y consustanciados con los paisanos del campo, al Gaucho no solo lo honramos en su lucha por la independencia de nuestro país y también lo recordamos con simpatía pegado a una guitarra. Su instrumento propio, el más apto para expresar su música; el que por su peso y tamaño no estorba  a ese hombre andariego, trashumante.  Es que el gaucho es también un hombre de trabajos rudos, de trajinar el cuero haciendo trenzas que exigen esforzar los dedos. Hombres de manos callosas y dedos entumecidos como pesados y agarrotados de tomar el lazo y cumplir largas faenas en el campo travieso.  Varón  de espíritu noble y osado, sin apegos ni prejuicios, el que siempre  cantó su rebeldía y amó su libertad. Nunca tuvo patrones y con su única riqueza y mejor compañero su caballo se ganó su pobre sustento. Hábil jinete, melancólico y reservado. Con su lazo, el rodeo de hacienda y las travesías, las espuelas, el cuchillo, facón o daga y el poncho, fueron  hitos de nuestra tradición. Los recados y rebenques, la chiripa serán siempre instrumentos de orgullo para estos gauchos humildes, gauchos pobres, que en las históricas batallas con Güemes a la cabeza, han conseguido que hoy nuestra Argentina sea una nación libre e independiente. Martin Fierro dice que él sabe "dirigir la mancera / y también echar un pial... / Sé correr en un rodeo, / trabajar en un corral... / Me sé sentar en un pértigo / lo mesmo que en un bagual". De modo que el gaucho con la guitarra podrá rasguear el acompañamiento de un canto, marcar el compás de un baile; cuanto más, arpegiar una milonga, pero con espíritu noble y osado, sin apegos ni prejuicios, cantó su rebeldía y amó su libertad y fue artífice de nuestra independencia y libertad. SALVE  CRIOLLO ARGENTINO.
 Dr. Jorge B. Lobo Aragón
                                #Argentina #Tucumán #Gaucho
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