#al carajo con todo
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Y justo cuando pensé que todo iba mejorando
28nueve23
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i dont really know if my career choice is right for me but also i dont know what the fuck to do with my life so. second cuatrimester it is
#sigo en el cbc asi que estoy a tiempo de cambiarme a alguna otra de mi facultad pero. no se#estoy en diseño de imagen y sonido which is. interesting. pero no se si es realmente lo que quiero#solo quiero hacer arte y ni eso hago ultimamente. deberia haber ido a la una? no se.#ddiys me gusta porque bueno es como cine y arte y animacion y etc etc me interesan las historias la literatura el cine y considere estudiar#animacion. pero la verdad me agarran dudas#y saber que ninguno de mis amigos estudia lo mismo y que voy a estar sola el año que viene de nuevo no me motiva.#porque ya los amo y siento una conexion con ellos y despues ellos vana ir todos a arquitectura sin mi y van a seguir su rumbo y se van a#olvidar que alguna vez existi y estoy muy triste estos dias y el mundo se va a ir al carajo y que mierda estoy haciendo yo? viendo peliculas#en mi cuarto? ya ni se en que creer.#spikeposting
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Yo cada vez que quiero ponerme a investigar cosas relacionadas a la vestimenta, peinados y regalia que usaban en la cultura nawat pre colonizacion pero no hay nada, todo es pura informacion de vestimenta post colonizacion con lo poco que se pudo rescatar como cultura nativa siendo los refajos y algunos peinados y tener que investigar mas a fondo y ver mara emputandose que comparen la cultura nawat con la nahuatl algunos hasta negando que la cultura nawat hubiese existido y erroneamente llamandolos maya pipiles cuando CLARAMENTE si teniamos pueblos maya (pocomames y chorti) pero no por eso los "pipiles" (que btw, es un termino erroneo para referirse a los nawat) eran tambien parte de la cultura maya si no se que se tiene registro que eran una cultura hermana de los mexica y ambas caen en la categorizacion de culturas nahuas y hasta habia similitud en deidades a las que se veneraban (vease como por ejemplo el dia de la cruz y como originalmente era una celebracion en honor a Shipetz Tuteku y por eso el uso del palo de ayiote que simula la piel del dios desollado ademas de bañarla para que haya buenas cosechas) pero aun asi hay gente que jode y jode que no y entonces estoy en un vacio donde no se para donde irme si quisiera diseñar un personaje basado en la era pre colonizacion si basarme de registros de vestimenta mexica y tener que vivir con eso que no es "enteramente" basado en la cultura nawat PERO ES QUE FALTAN TANTOS REGISTROS DE LA CULTURA Y AHORA ESTOY EMPUTADO DE NUEVO PORQUE LO UNICO QUE NOS QUEDA SON LAS PERSONAS NAHUAHABLANTES DE SANTO DOMINGO DE GUZMAN, IZALCO, Y OTROS PUEBLITOS PEQUEÑOS.
Que si bien su contribucion a la tradicion oral tanto de la lengua nawat como de creencias y tradiciones que se les fueron transmitidos por sus padres es muy valiosa y apoyo enormemente que se registren los conocimientos que estos nos puedan dar...
...Ya tecnicamente no hay casi nada de como era la cultura nawat pre colonizacion.
#zagreus rambling#no no estoy bien💜💜#saben cuantas horas de investigacion de codices e intentar hayar libros en linea he hecho ademas de buscar entrevistas a nahuahablantes#me he hechado?#mas de las que deberia la neta#“pero de que te preocupas? si igual vos no sos indigena Zag” porque quiero conocer la cultura que existia en mi pais carajo#quiero aprenderla y quiero mostrarsela al mundo con mi arte y quiero que aprendan tambien#desde que estoy chiquito fue algo que me EMOCIONABA#Y ME PINCHES EMPERRA TODO LO QUE PASO
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adrenalina es quien mueve cada músculo de su cuerpo coordinado de forma automática, instinto de huída no hace espacio a ningún pensamiento más que el de ponerse a salvo. pero también a Theia, instinto de protección es propio desde que carga con la vida de su hermana. percibe un dolor agudizado en su derecha, que ignora. debió clavarse algo en su mano cuando saltó el muro. ' sí, sí... estoy bien ' ni siquiera advierte respuesta, porque ojos se encuentran ya sobre el animal que los intenta alcanzar. vaya, ¿qué carajos tienen esos animales en la cabeza? no hay tiempo para pensar si es correcto o no adentrarse a una propiedad privada, pero tampoco mucho tiempo para negarse. coincide quizás (sin conocer los detalles) en que deben meterse ahí. ' vamos ' ya tendrán tiempo de pedir disculpas, piensa fugazmente. mano se une a contraria y es quien toma delantera para entrar, lo primero que ve disponible: la ventana. debieron ser los cuervos quienes rompieron esas ventanas. observa los vidrios rotos, así que no lo duda. ' ¿me permites? ' pregunta es una especie de disculpa, tal vez por el atrevimiento que va a hacer. carga a la mujer y la ayuda a pasar por la ventana, buscando evitar que esos restos de vidrio sean un obstáculo. Viktor va detrás, observando le interior de la casa. ¿qué podría resultar peor que un venado? un adulto loco, sí. eso no lo pensaron ni es una preocupación que le despierte ahora. de nuevo apunta mirada hacia el venado. ventana es suficientemente pequeña para entrar— o eso cree. el animal parece rendido, aunque es más por el ruido de otros vecinos en las calles. Viktor yace su espalda contra la pared, advirtiendo recién con debida atención el corte que trae en la mano, y como eso hizo que una pequeña mancha adorne vestimenta femenina en la espalda. no es grande, pero ¿no pudo lastimarse otra parte del cuerpo? bufa, ofreciéndole una disculpa. ' perdona, decoré tu ropa ' refiriéndose a la mancha. Viktor aprieta su mano para detener el sangrado, soltando una risa después. ' bueno... estamos vivos. no se por cuanto ' dirige mirada hacia el interior de la casa. parece vacía, quizá se encuentran ordenando el desastre de las calles.
no hay lugar para dudar. el corazón late desbocado contra su pecho y el nerviosismo cosquillea, recorriendo cada centímetro de su cuerpo. es un verdadero milagro no paralizarse en esos momentos, una completa bendición que el cuerpo le responda y pueda seguir con la indicación de viktor, retrocediendo poco a poco. las pupilas se dilatan, ver al animal emprender carrera en su dirección provoca que su corazón de un brinco abrupto y, tras darse media vuelta, comience a correr con toda la velocidad que sus piernas le permiten. su mente está completamente en blanco, el miedo apoderándose de facciones. se dirige hasta la propiedad, adrenalina avivando su accionar mientras da un salto para adentrarse en aquella propiedad. ' viktor ... ¿estás bien? ¿te lastimaste? ' la preocupación es latente, observando a su alrededor por alguna persona o posible herramienta que les brinde seguridad, pero nada. ¿acaso los dueños del lugar se encontraban también recolectando el desastre del pueblo? ' vamos adentro. ' pide, extendiendo su mano como una invitación. si ellos no habían tenido problema alguno para traspasar la propiedad, seguro el animal tampoco la tendría.
#01. ⸻ interacción. ⠀⠀⠀⠀#con theia.#aaah use lo de los dados creo que se puede#eli te queremos mucho ;-;#si no se fuera todo al carajo lo re veo vistiendose de HP para su cumple#ah se invitaba#perdon theia por cagarle el outfit
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... i fucked up.
(one shot)
🗯ADVERTENCIAS/TAGS: enzo vogrincic x reader, smut, porn with plot(?), infidelidad, reader es infiel, fingering, squirting, enzo es el cuerno, moral muyyy cuestionable, sobreestimulación, un poco de size kink (no importa si reader es gorda o flaca, tetona o plana ENZO ES MAS GRANDE), age gap de 10 años (reader 20 enzo 30), sexo sin protección, sexo rudo(?), choking (muy ligero), llanto durante el sexo (de placer), un poco emocional y confuso al final.
eran las siete de la mañana cuando ibas saliendo de tu apartamento compartido con tu novio blas. te dirigías al set de la nueva película en la que estaban trabajando él y otros dos chicos de LSDLN, enzo y francisco, ya que formabas parte del equipo de maquilladores en esta nueva película, al igual que en la anterior. de hecho, fue gracias a aquella que te hiciste pareja del rizado y formaste amistad con la mayoría de los otros actores, volviéndote más cercana con enzo.
fue el mismo blas quien solicitó a los directores y productores de este nuevo proyecto que te contrataran para trabajar como maquilladora, así que tú no podías estar más feliz pues significaba que ibas a estar cerca de él más tiempo... y cerca de enzo también.
a los tres meses de hacerte novia de blas, asististe a una pequeña reunión en casa de juani que organizaron entre todos los chicos, como matías había llevado a su novia al igual que esteban, el de rizos decidió llevarte a ti también. lo que no sabía él es que esa misma noche empezarías a guardar un secreto con enzo.
sentados en los escalones de la entrada de la casa más alejados del ruido, cada uno con una cerveza en la mano, estabas con enzo charlando y riéndote de sus incontables chistes, blas no había querido unirse ya que estaba concentrado jugando con la play4 de juani.
"no no pero ahora decime algo, con sinceridad". dijo el castaño repentinamente, haciendo que la risa que tenías cesara un poco.
"¿qué?" dijiste un poco nerviosa sin dejar de sonreír igualmente.
"¿vos estás satisfecha con blas? ¿él te hace sentir bien?"
tragaste duro sintiendo como tu boca se secaba de los nervios, ¿qué pregunta era esa?
"e-eh, a qué te refieres?"
"digo, no niego que blas sea un buen novio, he visto cómo es contigo, pero a veces lo veo muy infantil, no sé, falto de experiencia," chasqueó la lengua, sentiste como ponía su mano en tu rodilla descubierta y la apretaba.
con cada palabra que salía de la boca de enzo y con cada acción te ponías más nerviosa, aunque realmente no le faltaba mucha razón. a pesar de tener la misma edad que blas, sentías a veces que no andaban en lo mismo...
"te pregunto, ¿él te coge bien?"
te ahogaste con tu saliva.
"perdoname el atrevimiento," se retractó casi instantáneamente mientras sobaba tu espalda, ayudándote en tu ataque de tos. "creo que tomé mucho, no mido lo que digo".
cuando dejaste de toser te quedaste mirando al suelo por un momento, enzo era un hombre atractivo y muy intimidante, no lo ibas a negar, pero no captabas por completo sus intenciones y tampoco querías malinterpretarlo, tal vez te pregunta esas cosas porque te considera su amiga cercana y te tiene confianza, así que decidiste ignorar su mano en tu pierna otra vez y tanteaste el terreno.
"tranquilo, s-solo me agarró por sorpresa" le sonreíste. "nada más lo hemos hecho dos... tres veces, creo" notaste como abrió más los ojos, mirándote asombrado. "y realmente no ha sido la gran cosa" murmuraste con pena.
qué carajos estabas haciendo.
"mhm," enzo asintió y frunció el ceño, mirándote atento mientras pensaba. "¿por qué no es la gran cosa?
suspiraste recordando como han sido las experiencias con blas hasta ahora, sintiendo un poco de frustración. "perdoname el atrevimiento a mi ahora," te sinceraste "dios, que vergüenza, pero..." te acercaste un poco a su oreja, hablando más bajo como si alguien más aparte de él te fuera a escuchar. "no me he venido con él nunca, siempre termina y se duerme".
enzo tomó el último trago de cerveza que le quedaba. "no sé por qué no me sorprende sabés," soltó una pequeña risa y desechó la lata en el tacho de basura que había en una esquina. "como te dije, le falta," dijo mirándote a los ojos y acariciando tu muslo con su pulgar "no sabe todavía cómo satisfacer a una mujer".
"¿y tu qué, si sabes?" preguntaste de repente y te sorprendiste de tus propias palabras.
ya había llegado demasiado lejos la conversación, y no sabías por qué no te detenías. tal vez eran las cervezas en tu organismo, o simplemente era la atracción sexual tan fuerte que sentías por enzo que ya no lo podías ocultar.
"no te voy a afirmar nada, chiquita" acercó su cara a la tuya mientras te acomodaba un mechón de pelo detrás de tu oreja. "deberías comprobarlo tu misma".
cortaste el poco espacio que había entre ustedes y lo besaste con deseo.
rápidamente su lengua se apoderó de tu boca haciéndote soltar un pequeño gemido y poner tu mano en la parte de atrás de su cabeza, tomando su cabello.
te separaste cuando un sentimiento de culpa te llenó el cuerpo.
"e-enzo, espera" pusiste una mano en su pecho, jadeando, mientras mirabas el suelo con pena. "esto es malísimo, sabes?" negaste con la cabeza cerrando los ojos y abriéndolos despues de una pausa. "yo quiero mucho a blas, no entiendo por qué hago esto" dijiste más que nada para ti misma.
el mayor te tomó por la barbilla suavemente, obligándote a mirarlo. "nena, esto no tiene por qué significar nada, si?" acarició el borde de tu mandíbula con sus dedos, mientras observaba tus labios "pero entiendo si no quieres seguir".
tomaste aire y suspiraste temblorosa, tenías un conflicto interno. por un lado no querías hacerle esto a blas, te sentías como una mierda y sabes que si se enteraba se iba a ir todo al carajo, pero por otro... tenías tantas ganas reprimidas y acumuladas, que tus bragas ya estaban empapadas y tu coño pulsaba nada más con un roce en tu pierna y medio minuto de besos. realmente patético, pero nadie podía culparte.
"solo será esta vez, y luego seguimos como siempre, como amigos, y hacemos como que no pasó". volviste a cerrar los ojos intentando prometerte a ti misma algo que sabías sería difícil de cumplir. enzo asintió juntando sus frentes y retomando aquel beso hambriento.
enzo se separó, se levantó y se dirigió a la puerta. "espera aquí un momento".
al entrar vio a todos en un desastre, la música estaba demasiado alta y casi todos estaban borrachos ya, algunos jugando cartas y otros bailando. blas seguía jugando con la consola ahora acompañado de matías.
le dijo que te empezaste a sentir mal y que te llevaría a casa, el rizado dudó un poco pero finalmente terminó agradeciéndole. enzo tomó tus cosas y salió de nuevo.
esa noche tuviste tu primer orgasmo provocado por un hombre.
sobra decir que no fue cosa de una vez.
cuando estabas cerca de tu destino recibiste un mensaje de uno de tus compañeros de trabajo, habían rodado la grabación para otro día por un problema con los productores.
bufaste con fastidio y marcaste el número de blas.
"hola lindo, buenos días" lo saludaste cuando contestó. "oye, no tienes que venir hoy al set, no sé si te avisaron ya pero cambiaron la fecha del rodaje".
"mierda, justo salí de bañarme, eh, bueno" escuchaste su voz frustrada. "me voy a dormir otra vez, ya qué. venís?"
"voy a aprovechar de comprar unas cosas, ya que estoy acá, para no perder el día" dijiste recordando al ver un super en la esquina.
"bueno, está bien, traeme algo" dijo divertido y supiste que estaba sonriendo.
"claro, te quiero" hiciste un sonido de beso. "nos vemos".
colgaste y te encaminaste hacia dicho supermercado, cuando sentiste otra vez la vibración de tu celular en tu bolsillo.
era enzo.
"nena, estás sola?"
en menos de veinte minutos estabas en el auto de enzo dirigiéndote hacia su casa.
hablaron de cosas cotidianas y de la nueva película, tú riendo ocasionalmente de los comentarios del mayor.
era increíble el contraste entre esos momentos tranquilos e inocentes y lo que sucedía cuando estaban en privacidad. apenas cerrada la puerta de la casa enzo ya tenía sus labios sobre ti y sus manos encima de tu cuerpo.
te cargó por los muslos y enrolló tus piernas en sus caderas, los llevó a ambos a su habitación y se sentó en el borde de la cama contigo en su regazo. llevó sus besos hasta tu cuello, donde empezó a lamer y morder suavemente un punto que ya conocía a la perfección, un punto que te hacía poner los ojos en blanco y empezar a frotar tu coño contra su bulto.
enzo ya se había memorizado tu cuerpo.
te sacó el suéter que tenías y desabrochó tu brasier en el proceso, tomó una de tus tetas en su mano y acercó su boca a tu pezón, empezando a lamerlo en círculos y succionarlo con la fuerza necesaria para hacerte gemir y jalar su pelo entre tus dedos.
"me encanta lo sensible que eres, tan preciosa" jadeaste ante el apodo.
en un instante, enzo te había acostado en la cama y ahora él estaba encima de ti, repartiendo besos desde tu pecho hasta tu abdomen, donde sentías su aliento caliente bajar hasta tu vientre.
alzaste la cabeza y sus miradas se encontraron cuando empezó a bajar tu short y tus bragas al mismo tiempo, sin dejar de verte, hasta que los terminó de sacar por completo dejándote descubierta ante él.
abrió tus piernas y al encontrar tu coño brillante y húmedo, no pudo evitar relamerse los labios.
"bebé, intentemos algo" dijo mientras te jalaba por tus piernas hacía él, te apoyaste en tus codos sobre la cama para verlo mejor. "si se te hace mucho solo decime, pero tenés que dejarte llevar igual" asentiste con un poco de nervios. desde hace varios encuentros enzo te había ayudado a experimentar algunas cosas nuevas y todas te habían gustado hasta ahora, así que te preguntabas qué sería esta vez.
subió ligeramente una de tus piernas y envolvió su brazo en tu muslo, mientras que con su otra mano frotaba tus jugos en sus gruesos dedos y en todo tu coño, desde tu entrada hasta tu clítoris, el cual empezó a frotar en circulos con su pulgar haciéndote cerrar los ojos y jadear, echando tu cabeza hacia atrás.
metió despacio dos de sus dedos y los empezó mover dentro ti con un ritmo lento, curvándolos ligeramente hacia arriba sin presionar del todo tu punto más sensible, provocándote, desmoronándote ante él. por ahora no había nada nuevo, solo era enzo sabiendo usar sus dedos como un experto. hasta que aceleró el ritmo y la fuerza de sus movimientos, presionando por completo y únicamente tu punto g, con la palma de su mano rozando tu clítoris repetidamente.
todo se volvió demasiado intenso de repente, tus cejas estaban arqueadas en una expresión de placer, tus labios rojos de tanto morderlos formaban una 'o' de la cual salían gemidos y lloriqueos que iban directamente a la erección de enzo, que estaba roja y adolorida encerrada en su pantalón.
abriste los ojos y se encontraron rápidamente con los del mayor, que te miraban con adoración.
"m-me voy a venir, en-" enzo asintió, alzaste tu cabeza y bastó solo con mirar como su mano cubría completamente tu coño, para que un orgasmo te recorriera desde la cabeza hasta la punta de los pies, haciendote soltar un jadeo seguido de un fuerte gemido, mientras tu espalda se arqueaba y tus piernas intentaban cerrarse involuntariamente.
enzo no cesó el movimiento de su mano, más bien mantuvo el mismo ritmo lo cual hizo que tomaras su muñeca intentando sacar sus dedos por la sobreestimulación.
"solo un poquito más, chiquita" dijo quitando tu mano con delicadeza y acercando su cara a la tuya para tratar de distraerte con un beso.
pronto sentirías como se formaba un nuevo orgasmo en tu vientre, pero esta vez se sentía raro.
tomaste otra vez la muñeca del castaño "e-enzo, creo que me voy a-". te interrumpió una sensación de presión en tu vientre.
un segundo orgasmo más intenso que el anterior, te llevó a sentarte de golpe mientras se formaban lágrimas de placer en tus ojos, tus uñas se clavaron en la piel de la muñeca del mayor con fuerza y lo único que sentías eran los espasmos de tu cuerpo y tu coño alrededor de sus dedos.
cuando te calmaste un poco abriste los ojos, los cuales ni siquiera sabías que tenías cerrados, solo para encontrarte con la cama totalmente empapada al igual que el brazo y la mano del castaño, cuyos dedos seguían dentro de ti, ahora quietos.
te asustaste y te giraste hacia él, haciendo que salga de tu cuello donde estaba repartiendo besitos.
sacó sus dedos con cuidado de tu coño haciendote soltar un quejido, sintiendote vacía de repente, y viste como se metió ambos dedos en la boca, limpiándolos con ella. jadeaste por lo obsceno que se veía.
"qué vergüenza... perdoname". dijiste viendo otra vez el desastre que era la cama.
"nada de eso," respondió recostándote otra vez. "fue demasiado caliente ver como te venías tan duro, te gustó?"
"la verdad sí..." dijiste bajo, "mucho". lo miraste a los ojos y viste como algo se oscureció en ellos.
"decime, tu novio te ha hecho venir así, princesa?" dijo observándote, con la voz más grave y baja de lo normal.
"n-no, nunca". de repente estabas apretando tu coño alrededor de la nada otra vez.
enzo pensaba que esta era una de tus mejores facetas, cuando estabas desnuda en su cama, temblorosa y jadeante, completamente jodida por él, porque sabía que era él y solo él quien te llevaba a ese estado. tú ni siquiera debías hacer nada complicado para ponerlo caliente, le era suficiente ver como reaccionabas a las cosas que le hacía a tu cuerpo, porque tu placer era el suyo.
parecía que con cada encuentro que tenían, más atraído se sentía hacia ti, más hermosa eras en cada ocasión.
tenía tiempo sin sentirse de esa manera.
a todo esto, el mayor seguía completamente vestido, así que tomaste el borde de su camisa y la subiste intentando sacársela.
"¿todavía tenés ganas?" te miró con diversión, incrédulo, quitándose la ropa igualmente.
observaste sus anchos hombros y sus brazos, tan grandes en comparación con los tuyos. enzo como tal, era tan grande al lado tuyo, y tan fuerte. amabas como te podía cargar y mover fácilmente, como sus grandes manos apretaban tu cuerpo mientras empujaba su miembro dentro de ti.
el hecho de que no solo era más grande en físico, sino en edad también, te excitaba más de lo que le podías admitir.
cuando el castaño liberó su polla de la ropa interior que se había vuelto incómoda, sentiste que se te hizo agua la boca. la punta estaba sonrosada, brillante con líquido preseminal, y viste como una gruesa vena sobresalía a lo largo de la base.
"dejame chupartela, por favor", casi suplicaste, levantándote para quedar más a su altura y tomando su polla en tu mano, recogiendo la humedad de la punta para empezar a moverla de arriba a bajo más fácil.
"no, no, preciosa" detuvo tu mano. "necesito ya estar dentro de ti".
te empujó suavemente y tu hiciste un puchero en frustración, pero te volviste a acostar, con enzo encima tuyo.
con una mano apoyada al lado de tu cabeza como soporte, alineó su miembro en tu entrada con la otra. no te preocupaste por el condón porque ya habían hablado el tema, ambos estaban sanos y tu estabas con la pastilla.
"nena, mirame". te dijo obligándote a mantener contacto visual, le gustaba ver tus expresiones en todo momento.
un gemido de alivio salió de ambos al sentir como finalmente introducía la punta, pero cerraste los ojos con fuerza cuando siguió empujándose dentro de ti. no importaba que tan mojada estuvieras, el grosor de su miembro casi siempre los obligaba a tomar una pausa.
sentiste como su pelvis chocaba con la tuya y exhalaste fuertemente, el castaño corrió el cabello desordenado que se habia pegado a tu frente, y comenzó a repartir pequeños besos.
"estás bien? querés que me mueva?" murmuró contra tu piel, bajó su mano desocupada hacia donde ambos se unían y empezó a frotar círculos en tu clítoris con sus dedos.
el estímulo hizo que tu coño se apretara alrededor de él, sacándole un jadeo.
asentiste con fervor, moviendo tus caderas en un intento de estar imposiblemente más cerca de su cuerpo. "s-sí enzo, cogeme duro esta vez". tus mejillas se enrojecieron, ya no tenías nada de pena.
"¿ah, sí? ¿querés que te coja fuerte y que te deje sin caminar bien?" el castaño rió al verte asentir con ojos grandes mientras te relamías los labios.
"¿querés llegar a casa y que blas se de cuenta de que no está haciendo su trabajo como debe, ah, chiquita?" masculló y se irguió en su lugar, comenzando sus embestidas controladas pero duras, sus manos apretando con fuerza tus caderas y sosteniendote.
gemidos agudos salían de tu garganta mientras jalabas las sábanas en puñados, sentías como el placer hormigueaba en la punta de todos tus dedos, estabas sensible todavía por los orgasmos anteriores.
tus tetas rebotaban con cada estocada, enzo las tomó en sus manos y las amasó, pellizcando y frotando sin cuidado tus pezones, mientras aceleraba el movimiento de sus caderas. la punta de su polla llegaba a golpear tu cervix haciéndote lloriquear, pero el ligero dolor solo te excitaba más, y enzo sintió como te contraías en su miembro.
"mirá como me apretás, dios" el mayor dijo casi sin aliento. "así querías que te cogiera? hmm? querías que fuera malo contigo, princesa?"
lo miraste directamente a los ojos con una expresión de placer puro. "sí, sí, m-mierda, tan rico- ah,"
agarraste una de sus manos y la dirigiste hacia tu cuello "a-ahorcame enzo, dios" suplicaste prácticamente fuera de ti misma y tus ojos se llenaron de lágrimas otra vez, extasiada. estabas muy cerca y sabías que querías correrte con sus manos en tu cuello.
sin detener sus duras embestidas, el mayor envolvió su mano y apretó con cuidado los lados de tu cuello, haciéndote girar los ojos y echar la cabeza hacia atrás, mordiéndote el labio inferior. "qué preciosa sos-" se acercó a tu oreja dándote un beso en la mejilla antes de murmurar muy, muy bajo "no sabés cuánto te amo".
no descifraste qué palabras dijo enzo en tu oído, porque el tercer orgasmo de esa mañana te azotó con más fuerza que los dos previos.
tu vista se nubló y tu boca se abrió sin soltar ningún ruido, agarrabas con fuerza la muñeca de enzo cuya mano seguía en tu cuello, pero que yacía quieta ahora, nada más que acariciando tu piel suavemente.
con un gritito ahogado tu cuerpo pareció ganar consciencia de nuevo, y sentiste como el castaño todavía se empujaba con dificultad dentro de tu agujero, de forma más desordenada y errática por cómo tu coño se contraía repetidamente alrededor de su miembro.
tu mano se posó en su abdomen débilmente, intentando alejarlo de ti por lo incómodo que se estaba volviendo tanto estímulo, hasta que su orgasmo llegó de manera repentina, llevándolo a sacar su polla y venirse sobre tu vientre, gimiendo con el ceño fruncido mientras terminaba de exprimir hasta la última gota de semen sobre ti.
lo único que se escuchaba en la habitación eran sus respiraciones agitadas y ocasionalmente pequeños gemidos tuyos, estabas completamente sensible y podías sentir las corrientes de placer en todo tu cuerpo aún. al recomponerse, enzo bajó delicadamente tus piernas temblorosas de la posiciónen la que estaban, y se levantó a buscar un paño para limpiarte.
al llegar de nuevo a la habitación, el castaño recién pareció notar tus mejillas sonrojadas y húmedas, al igual que tus pestañas, por tus lágrimas.
"bebé, te hice daño?" preguntó preocupado analizando tu cuerpo, temía haberse pasado. "fue demasiado para vos?"
acarició tu rostro suavemente, apartando las lágrimas de tus ojos.
"estuvo más que perfecto, enzo" lo miraste con ojos adormilados y una pequeña sonrisa en tu boca, estabas tan saciada.
tan satisfecha.
la expresión en su cara se suavizó y te devolvió la sonrisa. "deberíamos ducharnos" dijo antes de darte un piquito en los labios.
"estoy taan, tan cansada sabes" te quejaste e hiciste un puchero que enzo también besó.
"no importa chiquita, nos metemos en la bañera y yo te limpio, sí?"
no entendías nunca esto. pasaban de tratarse como amigos normales... a tener sexo así de sucio, para luego tratarse con una intimidad que parecía de pareja.
cuando tu verdadera pareja te estaba esperando en el apartamento que compartían.
¿te sentías culpable? demasiado, todo esto era el resultado de un error, un error que cometiste en una noche de desliz. todo por no haberte comunicado desde el principio con tu novio sobre su situación sexual. tu estabas segura de que lo amabas, simplemente sentías que... el sexo con él era lo terrible.
la peor parte era que tal vez ya no había vuelta atrás. los meses pasaron y perdiste la cuenta de las veces que estuviste con enzo, blas no sospechaba nada pero sabías que era cuestión de tiempo para que se enterase.
sí debías poner un alto a la situación con el mayor, aunque no sabías cómo, ni cuándo exactamente.
por los momentos, solo te dedicarías a disfrutar de los dedos que masajeaban tu cuero cabelludo suavemente en aquel baño.
pensabas que no sería tan difícil dejar el tema con enzo, después de todo, antes de besarse y coger, eran amigos muy cercanos. el único sentimiento que había entre ustedes era ese, amistad.
o al menos eso creías tú.
#enzo vogrincic#enzo vogrincic smut#enzo vogrincic x reader#oneshot#smut#enzo x reader#enzo vogrincic one shot#enzo vogrincic fluff#lsdln
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Amor y Odio II | Enzo Vogrincic
Para: los que quieren volver con su ex!
Parte 2:
Lo primero que cruza por tu mente es recordar todo lo compartido con la persona con la que te has encontrado de manera inesperada. Al mirar a Enzo, percibes sorpresa en su rostro, y te das cuenta de que la colisión ha causado que tu nariz sangre.
Enzo, también asombrado, busca rápidamente una servilleta en la cafetería y te la ofrece para cubrirte la nariz. Sin embargo, con un tono agresivo, le retiras la servilleta de la mano y le dices: "Déjame, yo me encargo". La tensión en el aire es palpable mientras tratas de manejar la situación de manera independiente, incluso en medio de la sorpresa de encontrarte con tu ex en un lugar tan inesperado.
Enzo te mira, aún visiblemente impactado, y te pregunta de manera titubeante: "¿Cómo estás?" Luego, señala la mesa cercana en la cafetería para que te sientes. Asientes y lo observas con seriedad, sosteniendo la servilleta en tu nariz. Él busca dos vasos de agua y te entrega uno, sentándose a continuación, mientras el silencio se instala, cargado de pensamientos reflexivos.
La realidad es que todavía estabas impactada, como si el universo los hubiera juntado sin explicación. Al mirarlo seriamente, Enzo rompe el silencio y pregunta de nuevo: "Eh... ¿cómo estás? Veo que no andas por Uruguay". Respondes bruscamente, "¿no es obvio?" Enzo te mira y corrige su tono, "Cierto. Eh... ¿cómo va todo?" Tú le respondes con seriedad, sin mirarlo a los ojos, "bien, trabajando... ¿y vos?" Enzo pone una sonrisita y te dice, "muy bien, mejor dicho, me siento fantástico". En ese momento, lo miras a los ojos y te reís cortamente con sarcasmo, comentando, "me imagino".
Un tenso silencio llena la cafetería y decides levantarte del asiento, tomando tu cartera. "Bueno, si es así, me voy", anuncias. Enzo, rápidamente, se pone de pie y te detiene: "¡Espera! Por favor, (tu nombre), hablemos. Si quieres, nos vemos mañana o algo, eh... ¿hasta cuándo vas a estar aquí?" Tu respuesta es contundente, con un tono de rechazo: "Yo no quiero hablar contigo para nada. Vos decidiste dejarme, y ahora no me tenés. Así que vete pal carajo", expresás antes de marcharte rápidamente por las calles de Madrid.
Entonces, en medio de la calle que estabas cruzando, Enzo te agarra y te dice con urgencia: "(tu nombre), porfa, hablemos". Tu mirada se encuentra con la suya en un tenso intercambio, la luz se pone roja y los autos detrás comienzan a tocar bocina. Ante la presión del momento, decides ir con él al Parque del Retiro para hablar. La tensión persiste en el aire mientras se adentran juntos en el parque, dejando atrás el caos de la calle y permitiéndose un espacio para desentrañar las complejidades de sus emociones.
Caminando por el Retiro, intentas evitar mirar a Enzo y él hace lo mismo. Un silencio incómodo envuelve la conversación, pero él finalmente comienza a contarte las cosas que le han sucedido desde que se separaron. "Pues, en dos días voy para Los Ángeles para una audición con, puede ser que sea con la producción de Star Wars y...", pero tus pensamientos se dispersan observando a la gente haciendo ejercicio, los pavos reales, los niños jugando en el parque. Intentas no prestar atención a Enzo.
Sin embargo, él se detiene y te pregunta, "¿todo bien?" No puedes contenerlo más y lo miras intensamente, como si estuvieras a punto de llorar, y le dices, "tú no sabes lo preocupada que estaba por vos. No sabes las noches que no he dormido pensando que estabas sufriendo. Y ahora, horas después, estás súper bien. Nunca viniste a buscarme, me dejaste como una cucaracha muerta, tirada. Ahora, no quiero saber nada de vos. Mejor quédate con esas actrices, fóllatelas a todas y vive tu vida en Hollywood. Yo estoy súper bien aquí en mi trabajo", dices, temblando de enojo y con ganas de soltarle más verdades.
Enzo te mira intensamente y admite: "Vos tenés toda la razón. Yo no te voy a decir un pero. Sé que me alejé y no volví. La verdad es que no sabía cómo, y estoy sumamente de acuerdo en que es mi culpa", se apuñala metafóricamente en el pecho mientras te mira con tristeza y esperanza. "Así que por favor, perdóname. Sé que me odias, me odias demasiado, pero por favor, perdóname".
Tú lo miras y, a pesar de tus esfuerzos por contener las lágrimas, una se escapa. Le respondes: "Enzo... de verdad no sé qué hacer. Me he quedado esperándote, una llamada tuya, un mensaje, pero solo recibía mensajes de tu manager, no de vos. Era como si me odiaras o te diera asco, es que—" Él te interrumpe apresuradamente: "Asco para nada, amor. Yo nunca te odié. Vos sos todo para mí. ¿Cómo que asco, (tu nombre)?", te dice agitado.
Tú te tapas la cara con las manos, sintiendo la tensión y el coraje que te genera Enzo. Internamente, sabes que lo amas y que deseas volver al pasado, anhelas esos besos, tocarlo, abrazarlo como hacían todas las noches. Extrañas las caminatas por Montevideo, los cafecitos con la abuela, extrañas todo lo que compartías y decías con Enzo. Pero en ese momento, no sabes realmente qué decir. Solo logras murmurar: "Creo que es muy tarde ya".
Enzo te mira fijamente y te pregunta con sinceridad: "(tu nombre), ¿eso es realmente lo que quieres? ¿Sabes algo? No he dejado de pensar en vos, te amo demasiado. El amor es tan intenso que siento que mi pecho quiere salirse. Vos conoces todo de mí, eres la única que me entiende. No me importa lo que haya pasado hasta ahora, y le doy gracias a Dios por darme la oportunidad de volverte a ver. ¡Vos no sabes cuántas veces le he pedido a Dios!", dice con emoción, como si estuviera al borde de las lágrimas.
Tú lo miras, sorprendida por la intensidad de las palabras de Enzo. Nunca lo habías escuchado hablar de esa manera. Siempre fue tranquilo y ansioso, pero en ese momento, su desesperación parece temblarte a ti también. Enzo confiesa: "Te amo, (tu nombre)". Mirando a ambos lados y contemplando el atardecer, los rayos del sol iluminan el rostro de Enzo. Respondes, un poco más relajada y con una pequeña sonrisa: "Enzo, por favor, deja esa bobería de romántico que eso no es vos".
Enzo te mira, sonríe pero a la vez llora, y te dice: "Te puedo decir algo". Miras justo en la terminada del atardecer y le animas: "Dale, dime". Con sus ojos enrojecidos, Enzo confiesa: "Quiero besarte, pero todita". Tú le sonríes sarcásticamente y le respondes: "Como si yo quisiera lo mismo". Él se acerca, acariciando tu brazo y llegando a la muñeca, masajeándola en círculos. "Ven acá, chiquita,” te dice, tomándote del rostro y dándote un beso apasionado mientras el sol completa su despedida. Fin.
VOLVIMOS CON EL EX! 😬
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⤷ ❝sex hotline❞ — myg (s.m) pt. 2
➤ Pareja: yoongi x lectora!fem
➤ Recuento de palabras: 17.4k
➤ Género: sexo telefónico! smut y obscenidad!
➤ Resumen: La idea de tener tu primer orgasmo hablando con un extraño atractivo a través del teléfono te asusta muchísimo, pero tal vez no sea tan malo como crees, después de todo, Min Yoongi era el mejor en su trabajo.
➤ Advertencias: 18+ | lenguaje maduro y explícito | sexo telefónico | diferencia de edad (edad legal) | charla sucia | masturbación (ambos) | dom!yoongi sub!lectora | la lectora deja de ser vírgen | elogios y ligera degradación | Yoongi es coqueto y sabe lo que hace y dice | sobreestimulación | semi-exhibicionismo | mucha tensión sexual | muchos besos | sexo oral (r.lectora) | sexo con protección | sexo romántico (solo poquito) | Yoongi tiene un gran pene! | Jungkook hace una pequeña aparición sorpresa. ➤ Si no eres mayor de 18 años, POR FAVOR, no leas. Si lo haces es bajo tu propia responsabilidad, ten en cuenta las advertencias.
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Delight no siempre había sido una empresa reconocida y tolerada por mucha gente. La primera vez que lanzaron su sitio web, la gente se sintió intrigada por esa llamada "línea directa de sexo telefonico", y era esperarse que muchos se mostraran escépticos y disgustados por la idea general de su concepto.
Pero no hasta que una persona, alguien que no había sido bendecido con el premio gordo de la vida, decidió intentarlo y solicitar el trabajo. Y eso cambió todo.
A Yoongi simplemente le importaba un carajo que la gente lo señalara por postularse para ser un operador de sexo telefónico. Estaba ganando dinero desde la distancia sin esforzarse tanto como una persona promedio lo haría en un trabajo mediocre, ¿Quién no querría el tipo de trabajo que él tenía?
Y fue entonces cuando apareció el nombre 'Suga' en la plataforma, convirtiéndose en una demanda popular de los clientes por encima de otros empleados.
Y Yoongi lo había disfrutado, demasiado, sabía de antemano que él había sacado a flote una empresa condenada al fracaso y que ahora era quién la mantenía viva, él y su afilada lengua, muchas veces fue glorificado por su trabajo y su jefe nunca dudaba en decir eso frente a los otros empleados, ganádose solo los celos y la envidia de los demás empleados por ser considerado el favorito del jefe.
— Que se jodan.— Yoongi respondía de forma arrogante cada que escuchaba las quejas de sus compañeros de trabajo sobre la supuesta injusticia laboral que sufrían.— Deberían ser mejores en su trabajo.
Había estado viviendo los mejores momentos de su vida sin duda alguna, disfrutando con el hecho de hacer que las personas se retorcieran de placer a kilómetros de distancia de él con unas simples palabras que lograban desatar todas sus fantasias mas oscuras, había disfrutado de esa sensación de poder, atención y halagos que recibía por su buen trabajo, pero bien dicen que lo que fácil llega, fácil se va.
Ahora sentía como si todo lo que había logrado en Delight hubiera sido un solo momento de euforia que ahora se había acabado, porque ya no se sentía igual que cuando comenzó con este trabajo.
Ya no sentía esa sensación de adrenalina correr por sus venas cada que escuchaba el tono de llamaba de su número de trabajo, era como si esa sensación de satisfacción y poder se hubiera reducido a nada, como si la rutina de cada día lo hubiera consumido por completo, ya sin siquiera hacerlo sentir placer con lo que hacía, y odiaba admitirlo, pero se sentía como si solo fuera combustible de fantasía para los clientes que pagaban por escucharlo.
Era su trabajo, sí, pero mentiría si dijera que ahora se sentía como una tarea que debía cumplir.
Había una distancia entre él y los demás que de alguna manera detestaba ahora.
Antes, Yoongi encontraba esa desconexión como un consuelo, creía que podía ir y venir cuando quisiera. Se divertiría con los demás en una proximidad lo suficientemente segura como para perder el tiempo sin temor a contraer sentimientos serios y poder mantener su trabajo. Era un plan sólido, hasta que dejó de serlo.
Todo lo que Yoongi anhelaba ahora era esa chispa entre él y otra persona, tener alguien con quién hablar de cosas banales sobre su día y no solo tener que escucharlos gemir a través del teléfono. Y cuanto más tiempo pensaba en eso, más se daba cuenta de lo solo que estaba.
Los ruidosos gemidos al otro lado de la línea lo hicieron formar una mueca y alejar considerablemente el teléfono de su oído, eran tan ensordecedores, mucho más exagerados que si estuviera viendo una película porno, y esa simple situación estaba agotando su paciencia poco a poco. Podía haber sido lo que él quería antes, la distancia, la capacidad de mantenerse inalcanzable, pero ahora se está convirtiendo en algo molesto.
— Relájate bebé, no querrás que tus vecinos te escuchen ¿verdad? — Habló por lo bajo en una sutil amenaza cubierta en una voz ronca, agradeciendo internamente que los lamentos de su clienta al otro lado del teléfono se detuvieran casi por completo.
Y lo siguiente que vinieron fueron los mismos halagos de siempre, agradeciendo haberle hecho pasar un buen momento y rogando su atención de nuevo para la próxima llamada, pero todo lo que pudo hacer fue forzar una amplia sonrisa y encogerse de hombros ante sus palabras justo antes de que toda su máscara se desmoronara cuando terminó la primera llamada de la noche.
Su teléfono se deslizó por la mesa en el centro de la sala cuando lo lanzó sin cuidado, elevando ambas de sus manos para frotar su rostro y suspirar con frustración como lo había hecho en los últimos días, su mirada se desvió hacia su entrepierna y bufó aún más molesto. ¡Ni siquiera habia tenido una jodida erección!
Era realmente divertido como las cosas habían cambiado en un mes, hacer la misma rutina agotadora cada vez le costaba más, después de dos años de estar trabajando para Delight estaba considerando seriamente renunciar al trabajo en el que ya no podía volver a encontrar el mismo placer que sentía antes. Y sabía muy bien que el que estuviera considerando esa idea tenía mucho que ver con una persona, específicamente con T/n.
Supo que estaba completamente jodido desde el primer momento en que se dio cuenta que no podía dejar de pensar en ella, en la forma tan inusual en que llamó a su línea de trabajo,y en cómo se escuchaba tan avergonzada después de que lo supo, había sido lindo, demasiado para hacerlo sonreír después de mucho tiempo de no hacerlo.
Pero lo que simplemente no podía olvidar era su suave y dócil voz con la que lo llamaba y el título que había utilizado para él, era como si aún pudiera escuchar su respiración agitada a través del teléfono, sus gemidos, el simple hecho de recordar que él había sido el primer hombre en hacerla sentir bien, y en lo dulce que se escuchó cuando la hizo tener su primer orgasmo.
Sabia que eso simplemente había alimentado por demás su ego, pero habia algo más y él no podia comprenderlo del todo, T/n tenía algo mas que lo hacía quererla sólo para él, lejos de la forma tan adorable en que ella le había preguntado si podian conocerse en persona, lo entusiasmada que se escuchaba con la simple idea lo seguía atormentando por las noches, sintiéndose como un idiota por la forma tan cobarde que huyó de ella y de algo que él tambien quería.
Y ahora aquí estaba, mirando con desdén el sobre grueso y blanco con su paga mensual por su trabajo y con la mente llena con el recuerdo de T/n, sabía que estaba en las mismas circunstancias, porque sí, joder, la quería, la deseaba y necesitaba, pero sabía que había arruinado todo y que tendría que vivir con eso desde la última vez que habló con ella hace un mes.
Volvió a gruñir frustrado mientras se ponía de pie del sofá donde estaba para servirse un poco de Whisky y ponerse de buen humor para sus próximos clientes, sabiendo que incluso el mínimo requería un cierto grado de esfuerzo y él ya se sentía más agotado que otros días.
Pero su línea se reabriría de nuevo en diez minutos y debía cumpir con su trabajo mientras se preguntaba cuáles podrían ser los interés de su próximo cliente, qué podría hacer para complacerlo y qué podría decirle, estando seguro que al final tendría que conformarse con una paja mal hecha que intentara llenar el vacío dentro de él.
T/n se arrepentía de muchas cosas en su vida.
Cómo no haber organizado una grandiosa fiesta de cumpleaños número dieciocho para celebrar su legalidad, cómo no socializar lo suficiente como para tener un gran círculo de amigos que la sacaran de vez en cuando de su encierro en su departamento. y de cómo había tirado el trozo de papel con el número de teléfono de Yoongi hace unas semanas.
Mentiría si dijera que no había estado tan avergonzada después de todo lo que había pasado con él, podía sentir un nivel de humillación que no creía que un ser humano pudiera sentir. Pero ella lo sentía.
Qué estúpido de su parte habia sido pedirle que se concieran en persona. ¿Para qué? ¿Para que la pudiera follar? ¿Estaba tan caliente que permitió que sus sucios deseos tomaran control sobre ella?
Sí, bueno, había sido una completa tonta con sus palabras, pero lo que aún le seguía dando vueltas a su cabeza fue lo que Yoongi dijo justo antes de terminar la llamada.
"Lo pensaré."
¿No era esa una buena forma de decir "no"?
Pero aún así, no había forma de que volviera a hablar con él y pedirle una explicación o aunque sea disculparse por dejarse ver como una urgida. Su teléfono no habia guardado su contacto y queriendo olvidar todo lo que habia pasado, simplemente tiró la tarjeta a la basura.
No sabía si culparse a sí misma por querer escuchar su voz una vez más, por querer revivir los sentimientos que tenía cada vez que Yoongi le hablaba con esa voz tan sensual, incluso si era simplemente para poder disculparse, T/n anhelaba ser cautivada una vez más con su voz.
Se encogió de hombros mientras desconectaba su computadora de su escritorio para pasarse a su cama sin darle muchas vueltas al asunto.
— Soy una perra desesperada, pero está bien.— Habló sarcásticamente mientras abría el navegador, respirando profundo para tomar algo de valor.— Todo lo que tengo que hacer ahora es disculparme. Eso es todo.
Se sentía incluso más nerviosa que esta tarde cuando decidió que debia ponerle fin a todo esto que tuvo con Yoongi y tratar de buscar la empresa en la que trabajaba para disculparse y poder dormir en paz por las noches, sus manos sudaban mientras escribía en el buscador "línea directa de sexo", inmediatamente apareció un sitio llamado Delight como el enlace superior y cuando le dio clic al texto resaltado en azul se sorprendió aún más.
— Dios…— Resopló de forma temblorosa preguntándose cómo era que a las 7 p.m de un domingo se encontraba desplazándose por este sitio web.
En la página principal podía ver una línea directa etiquetada como "perfiles de operador" y cuando dio clic alrededor de 10 perfiles de operadores se desplegaron ante sus ojos, cada uno en orden de acuerdo al puntaje de estrellas que recibían de los clientes, y el primer perfil era el de Suga con una calificación de 5 estrellas y con cientos de opiniones de diferentes clientes; hombres y mujeres por igual.
Le fue imposible no sonrojarse viendo una que otra de las opiniones donde halagaban sus servicios, sorprendiéndose con lo abiertos que eran los usuarios de la página, pero de igual no podía negarlo, Yoongi era realmente bueno en su trabajo, lo había comprobado por sí misma aunque no hubiera sido una clienta como tal, y sintió su corazón latir con fuerza en su pecho mientras marcaba en su teléfono cada número que estaba en la plataforma, sin saber si estaba mental y físicamente preparada para lo que estaba a punto de hacer.
Yoongi ya iba por su segunda copa de Whisky de la noche, y agradecía internamente que fuera demasiado tolerante con el alcohol para decidir seguir trabajando con los clientes que tenía en espera en lugar de mandar todo a la mierda e irse a dormir.
Suspiró pesadamente mientras le daba un último vistazo a la gran vista de la ventana hacia la ciudad nocturna debajo de él, viendo el bullicio de los vehiculos y de la gente vivir sus vidas en paz antes de volverse hacia su sofa y tomar asiento, ya estaba sin camisa y solo vestia un par de pantalones negros, las luces de la sala era tenues y la musica sonaba de fondo, lo que ayudó a construir una buena atmosfera como lo hacia cada noche.
El tono de llamada volvió a resonar en toda la habitación y dejó el vaso de cristal en la mesita frente a él mientras respiraba hondo, como si su cerebro encendiera un interruptor su actitud arrogante y sensual regresó a su cuerpo en un abrir y cerrar de ojos mientras levantaba el teléfono para contestar.
— Buenas noches cariño.— Respondió por lo bajo, haciendo todo lo posible por entrar en personaje, y no pudo evitar fruncir el ceño cuando el otro lado de la línea se quedó en silencio.— ¿Hola? ¿Puedes oírme claramente, querida?
Y aún así, el silencio seguía predominando.
Yoongi no estaba sorprendido por eso, e involuntariamente sonrió al recordar que así fue como conoció a T/n, se rió por lo bajo de eso y cuando estaba a punto de hablar, lo siguiente que escuchó lo tomó por sorpresa antes de que pudiera pronunciar alguna palabra.
— ¿Yoongi?
Y con eso se quedó boquiabierto cuando se dio cuenta de que el cliente sabía su verdadero nombre, entró en pánico, sin saber si alguien se había entrometido en su privacidad o si era un acosador espeluznante.
Ahora, fue su turno de quedarse sin palabras.
— Yoongi... soy T/n.
Y Yoongi sintió una puñalada clavarsele en el pecho. Había estado intentando olvidar lo que pasó entre ustedes dos durante las últimas semanas, sin poder dejar de pensar en ella, y ahora de repente todos esos recuerdos le volvieron a inundar la mente.
Ya había cometido el error de huir de ella cuando le preguntó si podían verse, pero con lo siguiente que dijo fue como si estuviera actuando solo por impulso y con la sorpresa del momento.
— ¿T/n? — Balbuceó de a poco, aun sin poder creer que estaba hablando de nuevo con ella.— T/n, ya te dije...
— ¡Escucha! — T/n respondió de inmediato, sin darle oportunidad de que volviera a alejarse.— Sé que probablemente este no sea el momento adecuado, pero quiero pedirte perdón por...
— Sí, T/n, ahora no es el momento.— Yoongi la cortó de repente, inclinando la cabeza hacia atrás y desplomándose sobre el sofá.— Estoy tratando de trabajar.
Y tan pronto como dijo eso ni siquiera pudo luchar contra el impulso de querer golpearse el rostro, ¿de verdad había dicho eso? Después de estarse quejando de su trabajo durante semanas, ¿lo había vuelto a poner primero antes que ella?
Con eso solo volvió a corroborar que era un idiota, y se sintió así aún más cuando escuchó a T/n murmurar un pequeño y debil “lo siento” a traves del telefono, era como si pudiera imaginarla encogida en su cama y con un puchero en los labios por sus palabras disculpandose por haberlo molestado, cuando él era el que debia disculparse con ella por todo lo que habia pasado.
— Esta bien bebé, lo entiendo…— Comenzó a hablar despacio mientras se pasaba una mano por su cabello negro.— Y yo también lo siento, lo último que dije la otra vez fue un movimiento idiota, solo estaba pensando en mi trabajo.
Y con eso T/n se permitiò escucharlo atentamente, asintiendo a sus palabras como si él pudiera verla, sonriendo al escuchar ese bonito apodo brotar de sus labios y sintiendo como su voz tan calmada y serena viajaba por su cuerpo como si fuera una manta cubriendola y haciéndola entrar en calor, sin poder evitar admitir que había extrañado demasiado esa sensación.
— Pero, dijiste que pensarías sobre eso…— T/n murmuró poco después sintiendo como el entusiasmo volvía a ella y atreviéndose a mencionar eso de nuevo con la pequeña esperanza de que él también lo quisiera tanto como ella.
Y aparentemente estaba en lo correcto, porque una sonrisa felina se dibujó en los labios de Yoongi al escucharla, y decidió llevar la llamada por una ruta diferente, viendo si podía usar esto a su favor para hacerlos pasar un buen rato ahora que se daba cuenta de cuánto había extrañado hablar con ella y queriendo aprovechar esta llamada al máximo.
— ¿Cuánto tiempo has estado pensando en mí, bebé? — Preguntó con su voz volviéndose grave y ronca, ensanchando su sonrisa al escuchar un leve suspiro al otro lado de la línea.— ¿No me digas que ya has dejado de pensar en lo que puedo hacerte?
Y ante eso T/n tuvo que morder su labio para intentar reprimir los pequeños gemidos que amenazaban con salir de su boca, siempre iba a estar sorprendida del increíble poder que tenía su voz en ella, de cómo se derretía ante sus palabras y de cómo su respiración se aceleraba con solo escucharlo.
Yoongi era como ese néctar de placer al que siempre quieres regresar para poder disfrutar un poco más, y por supuesto que no negaría sus preguntas, todas las noches después de sus calientes encuentros por medio del teléfono se encontraba sobre su cama y con la mano entre sus piernas intentando volver a sentir lo que sintió con él hablándole al oído, pero como era de esperarse, ninguna de esas veces lo logro, y eso solo la hacía desearlo aún más.
Yoongi solo sonrió aún más al no recibir una respuesta de ella, solo disfrutando con el sonido de su acelerada respiración, casi pudiendo imaginar que era lo que T/n debía estar sintiendo en este preciso momento
— A decir verdad, T/n, yo no podía dejar de pensar en ti. Si tan solo supieras lo horrible que me sentí cortándote así.— Yoongi volvió a hablar, usando esa voz tan sensual y sabiendo perfectamente el efecto que tenía sobre ella solo para ver hasta dónde podía llegar.
— Supongo que ambos somos culpables de algo, ¿eh? — T/n respondió de igual forma, todavía tratando de acostumbrarse a escucharlo después de tanto tiempo.— Pero eso es todo lo que tengo que decir. Yo... puedo dejarte con tu trabajo ahora, supongo que tienes toda una fila esperando por ti.— Agregó con calma y su voz se desvaneció al final de su oración.
Y esa fue la señal que Yoongi esperaba, una bombilla apareció en la parte superior de su cabeza, con una idea nadando en su mente sobre lo que podía hacer con ella, no podía dejar que esta llamada se desperdiciara, sin saber si esta podría ser la ultima vez que hablaría con ella y que escucharía su dulce voz.
— ¿Crees que voy a dejarte ir así? — Yoongi murmuró roncamente después de escuchar sus palabras y solo para agregar en medio de un gemido ahogado.— ¿Sin hacerte pasar un buen rato? ¿Qué dices, bebé?
Era como si con con cada palabra Yoongi le estuviera hablando como si fuera la primera vez, y T/n pudo sentir como los latidos de su corazón se volvieron más rápidos y acelerados, estaba volviendo a usar esa voz que tanto adoraba en secreto y simplemente dejó que su mente se sometiera a sus deseos y que sus fantasías hicieran lo que quisieran con su cuerpo.
— Aw, sé que quieres, T/n. No seas tímida, sé que ha pasado un tiempo desde que escuchaste mi voz. ¿No quieres que te hable sucio? — Yoongi volvió a provocarla, pero era como si los efectos estuvieran actuando de forma contraproducente en él porque todo su cuerpo se calentó en un santiamén cuando la escucho soltar un rápido y silencioso gemido por lo bajo, haciéndolo sonreír de forma arrogante y sentir como toda la adrenalina volvía a apoderarse de él.— ¿Mhm? ¿Ese pequeño gemido es un sí? ¿Quieres que te hable sucio y te ayude a correrte, bebé?
T/n suspiró temblorosamente mientras se acomodaba mejor sobre la cama, apoyando su cabeza en las almohadas solo para cerrar sus ojos por un breve momento, estaba aquí, ésto estaba ocurriendo de nuevo, y no había un solo nervio en su cuerpo que quisiera detenerse, así que se obligó a cerrar sus piernas juntas por la necesidad de sentir un poco de fricción ahí abajo con lo siguiente que dijo.
— Sí, por favor.
Yoongi chasqueó su lengua al otro lado de la línea al mismo tiempo que inclinaba su cabeza hacia un lado en señal de molestia.— Niña mala. ¿Ya has olvidado cómo llamarme?
— No, lo siento señor.— T/n se corrigió de inmediato, sin poder evitar arrastrar su pijama hasta sus rodillas para poder acariciar la parte interna de sus muslos de a poco, sintiendo su piel caliente y ansiosa.
— Joder, me encanta que me llames asi.— Yoongi soltó un gemido de satisfacción después de escucharla, dejando caer su cabeza hacia atrás sobre el respaldo del sofá y sintiendo como toda la sangre de su cuerpo se concentraba en su entrepierna.— Siempre tan obediente y educada conmigo, creo que necesitas saber cómo tu dulce voz hace que mi polla se ponga dura por ti.— Y con eso volvió a escuchar otro gemido manso brotar de sus labios, instandolo a continuar hablando con una sonrisa arrogante.— Me imagino lo desesperada que debes de estar por sentir mi polla follando tu pequeño y apretado coño, porque eso es lo que quieres ¿verdad?
— Sí, señor…— T/n suspiró esas dos palabras mientras su mano subía por sus piernas, llegando al lugar deseado solo dejar que sus dedos se deslizaran lentamente por encima de su núcleo vestido, sintiendo un escalofrío recorrer su cuerpo cuando escuchó un gemido gutural brotar de él seguido de un profundo suspiro.
¿Él tambien se estaba tocando? Joder, si estaba en lo correcto T/n pudo jurar que sintió como si una oleada de calor la hubiera golpeado de repente, todo su cuerpo se sentia extremadamente caliente y necesitado y le fue imposible no enredar sus dedos en el borde de su blusa para quitarsela, arrepintiendose casi de inmediato cuando escucho a Yoongi chistar molesto.
— ¿Ya te estás desvistiendo sin que yo te lo haya dicho? — Yoongi se burló con un tinte de advertencia en su voz que rápidamente fue remplazado por una neblina de deseo al imaginar todo su cuerpo desnudo, con sus senos al aire libre y sus bragas empapadas mientras lo esperabas tendida en su cama, y fue esa misma imagen mental la que lo hizo comenzar a palmearse su pene medio duro por encima de sus pantalones.— ¿Puedes hacerme un favor y jugar con tus tetas, bebé?
Yoongi pidio en medio de un suspiro tembloroso que hizo que T/n obedeciera de inmediato a su orden, poniendo su teléfono en altavoz para elevar sus manos hacia su pecho, jadeando con fuerza cuando deslizó la punta de sus dedos alrededor de sus duros pezones, amasando cada uno de sus senos con la presión perfecta haciéndola arquear su espalda; prácticamente retorciéndose sobre su cama y apretando sus muslos juntos, sintiendo como el calor en su entrepierna aumentara incontrolablemente, obligándose a morderse el labio inferior para tratar de ocultar sus vergonzosos gemidos y fallando olimpicamnete en el intento.
— ¿Alguna vez te tocaste pensando en mi, bebé? — Yoongi pregunto después de unos segundos queriendo saber si ella había pasado por lo mismo que él; disfrutando en silencio de su respiración laboriosa y sus suaves gemidos, jugando consigo mismo debajo de sus pantalones, con sus largos dedos frotando fácilmente toda la circunferencia de su pene erecto aún atrapado en su boxer.
— Lo intenté…— T/n susurro a medias, con su mente volviendo a esos momentos en los que Yoongi la hacía sentir increíblemente húmeda con solo su voz cuando hablaba con él, aun cuestionandose como era posible que un hombre detrás de un teléfono tuviera tanto efecto en ella.— Lo intenté, pero no era tan bueno…
— ¿En realidad? ¿Prefieres que yo te ayude?— Yoongi sonrió ante tus palabras y ante el bonito gemido que se escuchó al otro lado, haciéndolo sacar su pene de su confinamiento y viendo su erección salir disparada hacia arriba y golpear su abdomen ligeramente, sin poder evitar morderse el labio ante la vista, hacia tanto tiempo que no tenía una buena erección y ahora T/n lo había logrado tan fácilmente.
— Joder, sí…— T/n respondió con su voz temblorosa y mientras arrastraba su mano por toda su entrada, jugando con sus pliegues humedos por encima de la tela; ejerciendo un poco de presión sobre su clítoris solo para que sus caderas se sacudieran con placer y haciendola respirar con dificultad.— Mhm ¿puedo tocarme, señor?
Y Yoongi gruño a través de su labio inferior mordido, con sus cejas fruncidas y con sus dedos moviéndose con más fuerza sobre su dura longitud, eras una chica tan buena para él, y lo ponía duro como una piedra concebir que una chica tan linda como tú pudiera someterse fácilmente a una de sus charlas sucias, solo haciéndolo esparcir el líquido preseminal que brotaba de la punta de su pene por todo lo largo, imaginando que era tu humedad la que lo cubría.
— Ow bebé…— Yoongi bromeó con arrogancia y solo escuchandola quejarse por lo bajo de sus burlas.— ¿Quieres tocarte ahí abajo con mi ayuda?
— Sí, sí…— T/n respondió rápidamente, casi jadeando mientras las puntas de sus dedos se movían entre sus pliegues, chillando por lo bajo sin tener una fricción real donde más lo necesitaba.— Por favor, señor. Por favor…
— ¿Y qué te hace pensar que te mereces mi ayuda, hm? — Yoongi preguntó con su voz áspera, deteniendo los movimientos en su pene y escuchando el susurro confundido brotar de sus labios.
— P-pero…— T/n balbuceó sin entender sus palabras, sintiendo una serie de fuertes escalofríos recorrer su cuerpo una vez más.
— Puedo dejarte aquí, ahora mismo, terminar esta maldita llamada como si hablar contigo nunca hubiera pasado.— Yoongi habló con desdén riendo por lo bajo de la forma en que la escuchó removerse sobre la cama y dejar escapar otro gemido lastimero ante sus palabras.— Eres como una pequeña gatita, siempre lloriqueando en lugar de decir lo que diablos quiere.
¿Cómo se habia vuelto tan degradante de repente?
La mente de T/n estaba haciendo todo lo posible para pensar en una respuesta a su pregunta anterior, y, afortunadamente, Yoongi espero paciente.
— He sido buena, señor…— Respondió poco después, no queriendo hacerlo esperar demasiado y que se molestara por eso antes de sobresaltarse sobre la cama al escucharlo reír burlonamente.
— ¿Buena? Claro, has sido una buena niña.— Yoongi reaccionó arrogante ante su respuesta soltando el agarre en su miembro y viéndolo rebotar levemente sobre su vientre.— Me he encontrado con muchas de ellas en el pasado, cariño. Todas estaban llenas de palabras, pero no podían soportar ser jodidamente obedientes. ¿Cómo puedes ser diferente, eh? ¿Cómo puedo saber que no me estás mintiendo?
T/n quería golpear una pared por la forma en que se estaba burlando de ella, y su espalda se arqueó sin darse cuenta, reprimiendo un grito de frustración al escucharlo reír sutilmente ante su reacción.
— Sabes, escucharte toda ansiosa y necesitada, escuchar las sábanas debajo de ti moverse mientras tu cuerpo se retuerce es música para mis oídos, será mejor que no te toques, T/n. ¿Quieres ser una buena niña? Entonces espera mis instrucciones, ¿entendido?
— Sí, señor.— T/n respondió en un santiamén a sus palabras, alejando sus manos por completo de entre sus piernas.
Oh, Yoongi nunca se cansaria de escuchar la forma en que decias esas dos palabras.
— Más fuerte.— Demandó endureciendo el tono de su voz.
Otro jadeo tembloroso dejó los labios de T/n al escucharlo, sabía muy bien que Yoongi estaba en su estado más dominante y eso solo la hacía querer darle todo lo que pidiera, y le encantaba, jodidamente que le encantaba.
— Sí, señor.— Expresó una vez más, más fuerte que la anterior.
Yoongi no solo estaba cautivado con ella y con su afán de querer complacerlo, sino que se sentía diferente cuando hablaba con ella a comparación de otros clientes y no podía negar que sentía un cariño especial, era como si estuviera hablando con alguien personal para él, y no solo con un extraño, todo era mas intimo con ella.
— Muy bien…— Murmuró poco después, mientras que con uno de sus dedos trazaba la longitud palpitante de su miembro; provocándose desde la base hasta la punta, impaciente por escuchar sus encantadores gemidos, pero aún así se las arregló para seguir hablando.— Sabes, T/n, quiero saber más sobre ti.
— ¿Oh? ¿A qué te refieres? — T/n preguntó un tanto confundida, casi sintiendo como su excitación inicial se iba esfumando de su cuerpo.
— Tienes que decirme lo que te gusta, cariño. Lo que te excita, las fantasías que tienes almacenadas en esa sucia cabecita tuya.— Yoongi habló con una voz tan baja, tan profunda y tan sensual que T/n ni siquiera pudo evitar sentir como una descarga de adrenalina corría por sus venas y como el familiar cosquilleo se acentuaba entre sus piernas una vez más.
Inmediatamente su rostro se sonrojo y su respiración se agitó al darse cuenta de lo que estaba pidiendo, esta era la primera vez que un hombre le preguntaba cuales eran sus deseos y, si era completamente sincera, T/n tenia las fantasías más oscuras y sucias para alguien que nunca antes habia tenido sexo.
— No puedo ayudarte si no me lo dices, bebé. Vamos, dime lo que te gusta y tal vez…— Yoongi volvió a hablar justo antes de hacer una pausa y morderse el labio inferior ante lo que siguiente que dijo.— Tal vez podemos hacer que cobren vida.
Y T/n pudo jurar que casi jadeó al escucharlo, sus cejas se arrugaron dándose cuenta de lo excitada que estaba de nuevo y sus caderas se agitaron sobre la cama necesitando un poco de fricción en su clítoris, la forma en que Yoongi hablaba solo alimentaba aún más su deseo de él, y sabía que si no podía tenerlo pronto se volvería loca.
— ¿Cobren vida? — T/n preguntó retóricamente mientras pasaba la punta de su lengua por sus labios, sonriendo con complicidad queriendo escucharlo decir lo que tanto necesitaba.— ¿Qué está insinuando, señor?
Yoongi podía sentirla sonriendo al otro lado de la línea mientras decía esas palabras, haciéndolo sonreír de la misma forma; contento con la repentina confianza en su tono de voz generalmente manso que tanto adoraba.
— Niña, estoy insinuando que vengas para que finalmente pueda hacer que mi lengua pruebe tu dulce coño.
Y con eso T/n ni siquiera pudo evitar jadear con fuerza, sintiendo como si con esas palabras hubiera activado un botón de deseo duplicado dentro de ella, y haciendo que Yoongi sonriera aún más al escucharla.
Completamente seguro de que él quiso decir cada palabra que dijo.
Él la necesitaba, y ya le importa un carajo todo lo demás.
T/n no podía hacer que sus pies se quedaran quietos mientras rebotaban constantemente bajo el escritorio, sus ojos miraban el reloj sobre la pizarra cada minuto como si pudiera hacer que el tiempo avanzara mas rapido. Quedaban diez minutos antes de que terminara su última clase, irónicamente con la profesora Kim, y con eso ya habría terminado con sus clases del día de hoy, y eso significaba que finalmente conocería a Yoongi.
Nunca pensó que terminaría así, una chica universitaria virgen que anhelaba a un hombre que nunca antes había visto, pero Yoongi lo había logrado, había logrado que se enamorara completamente de él con solo su voz.
T/n no dejaba de pensar en qué aspecto tendría Yoongi, si su voz era tan profunda y erótica en la vida real o solo lo era a través del teléfono, pero en lo que más podía pensar era en cómo se sentirían sus manos en sobre ella, apretándola contra su cuerpo mientras se encargaba de murmurar todas esas palabras lascivas contra su oído, haciéndola temblar con cada sílaba que pronunciara como tantas veces había soñado. Esa simple idea hacía que su cabeza diera mil vueltas, solo haciéndola sentir cada vez más ansiosa y desesperada.
— Oye, no hagas eso.— Una voz al otro lado de ella la hizo salir de su torrente de pensamientos sucios sobre Yoongi, y cuando se giró hacia la izquierda para mirar al dueño de esa voz se encontró con un chico de cabello largo y negro, mirandola con ojos de gacela con sumo cuidado antes de volver a hablar.— ¿Estas bien?
— Si, lo siento.— T/n musitó por lo bajo deteniendo el movimiento de su pierna y encogiéndose en su asiento con vergüenza como si el hombre al lado de ella supiera cada uno de sus pensamientos.— No quise molestarte.
— No, no, no es nada. He leído en alguna parte que mover la pierna continuamente es un signo de ansiedad... o algo así.— El chico sonrió mostrando sus dientes antes de resoplar nerviosamente.— Soy Jungkook.
Esto era tan aleatorio. T/n había estado sentada al lado de este chico durante toda la clase sin haber cruzado ni una sola palabra y ahora se estaba presentando a ella.
— Soy T/n, un gusto conocerte.— Respondió cortésmente al mismo tiempo que la campana de final de clases se escuchaba por toda la escuela, regresando los nervios a su cuerpo y haciéndola ponerse de pie para recoger todas su cosas y salir lo más pronto posible, evitando más interacciones con Jungkook.
— Oye…
Su voz la detuvo de nuevo justo cuando estaba a punto de bajar las escaleras hacía la salida de la escuela, y cuando T/n se dio la vuelta hacía él casi estuvo a punto de suspirar por lo increíblemente guapo que era viéndolo pasar una mano por su cabello espeso; peinandolo hacia atrás antes de hablar.
— ¿Tal vez podríamos conocernos algún día?
Yoongi.
Tenía que ver a Yoongi.
—Uhm bueno…— T/n murmuró evitando el contacto visual con él, recordando que Yoongi la estaba esperando fuera de la escuela.— Lo pensaré, Jungkook.
Y antes de que pudiera decir algo mas T/n prácticamente salió corriendo hacia la puerta, frunciendo lo labios al darse cuenta de que acababa de rechazar a un hombre como Jungkook, pero ahora en todo lo que podía pensar era en Yoongi.
Yoongi le había enviado un mensaje de texto para que se encontraran en la biblioteca justo afuera de su universidad, y ahí estaba, sentando en uno de los bancos fuera del lugar con las piernas cruzadas mientras jugueteaba con su teléfono.
Al igual que T/n, él también se preguntaba cómo se vería ella, y sin embargo, él estaba seguro que sería tan hermosa como lo era su voz, y tenía ese pensamiento mientras escaneaba la multitud de estudiantes que salía de la universidad, tratando de adivinar quién eras en esa masa de personas.
Le envío otro mensaje con un simple "Te llamare”, y en cuestión de segundos, su corazón comenzó a acelerarse mientras caminaba hacia la biblioteca marcando su numero para llamarla, sabría instantáneamente dónde estaría T/n tan pronto como se llevara el teléfono a la oreja, y efectivamente así fue.
— Estoy justo aquí, bebé.— Yoongi habló a través del teléfono centrando su atención y su mirada en T/n quien juró que sintió una ola de mariposas revoloteando en su estómago al escuchar su voz resonando a través de su cuerpo.
Se dirigió de a poco hacia donde estaba sentado, viéndolo todavía con su teléfono contra su oreja y con sus ojos enfocados en ella sin dejar de mirarla con una sonrisa arrogante en todo su rostro, y T/n estaba rezando porque no se diera cuenta de la forma tan vergonzosa que su cuerpo estaba temblando de los nervios.
¿Realmente era él?
Dio unos cuantos pasos más hacia adelante hasta que estuvo prácticamente a medio metro de él, su mirada estaba clavada en ella y parecía que todo lo que la rodeaba la hacía aminorar la marcha.
— Yoongi…— T/n susurró por lo bajo, y él escuchó el suave sonido a través del teléfono.
— Mhm sí, ese soy yo.— Yoongi afirmó formando una sonrisa sin apartar los ojos de ella antes de levantarse bruscamente del asiento.— Acércate.— Demandó con el teléfono todavía presionado a su oreja, y T/n hizo lo que dijo, cerrando la brecha entre ustedes dos lentamente.— Más cerca.
Y mientras la veia acercarse mas a él Yoongi ni siquiera pudo evitar escanear su cuerpo de arriba hacía abajo con sus ojos, observando atentamente la forma en que sus curvas resaltaban bajo su ropa, era solo un poco más pequeña que él, sus ojos de muñeca dejaban de mirarlo con asombro y los de Yoongi se perdieron por completo en sus labios que se veían tan suaves, de repente sintió el deseo abrasador de poder besarlos para poder comprobar su teoría y las palmas de sus manos comenzaron a picar con la necesidad imperiosa de poder tocarla.
— Hermosa.— Yoongi susurró poco después, con su voz ahogada y lo suficientemente alto como para que T/n lo escuchara, haciéndolo ensanchar su sonrisa cuando noto como apartaba su mirada avergonzada de él.
La llamada terminó cuando estuvo finalmente frente a Yoongi y cuando él le extendió su mano para que la tomara, todo era diferente esta vez, esto estaba sucediendo en la vida real y T/n ya no estaba en la comodidad de su habitación hablando con él, Yoongi estaba con ella, físicamente presente, a punto de recibir su toque, como tantas veces había imaginado.
— No me dejes con la mano estirada, bebé.— Yoongi habló divertido y con su voz ronca, ensanchando su sonrisa hacia ella.
Oh, Dios. Su voz sonaba mucho mejor que por teléfono, tenía esa misma profundidad, ese tono que siempre hacía que su cuerpo temblara y se agitara de lujuria, y T/n se obligó a sacudir todo tu nerviosismo antes de tomar su mano y estrecharla con la suya.
Podría haber mentido, pero T/n estaba completamente segura que sintió una descarga eléctrica recorrer todo su cuerpo tan pronto como su mano tocó la de él, y se quedó procesando esa sensación mientras Yoongi la acercaba más hacia él, casi demasiado para poder notar la forma en que su mirada estaba pegada a sus labios, lamiendo lo suyos a cambio, y de alguna manera, era como si los dos se estuvieran tomando su tiempo para sumergirse en la presencia del otro entre las personas que seguían caminando a su alrededor.
— ¿Está bien si envuelvo mis brazos alrededor de ti? — Yoongi ronroneó examinando su rostro en busca de una respuesta, desechando su creciente ego al notar que sus mejillas se ponían más rojas a cada segundo.— ¿Hm? — Instó mientras con su pulgar acariciaba sus nudillos con calidez y, con cada roce, T/n sentía su corazón latir más rápido a cada segundo.
T/n no respondió, más bien tomó su mano y la guío hacia su cintura, como si estuviera pidiendo en silencio que la tocara, y él gustoso lo hizo, envolviendo su mano alrededor de su cintura.— Puedes abrazarme, Yoongi.
Y sin dudarlo Yoongi usó ambas manos para acercarla por completo a él, presionando su cuerpo contra su pecho y eliminando por completo cualquier distancia entre los dos casi con urgencia.
— No sabes cuánto te he imaginado diciendo mi nombre, joder.— Murmuró con su voz baja, mirándola con avidez al mismo tiempo que frotaba sus pulgares en su cintura enviandole pequeñas descargas de placer por su cuerpo.— Eres tan jodidamente impresionante, bebé.
T/n prácticamente tuvo que reprimir un gemido que amenazaba salir de sus labios al escucharlo, sabia que no podia hacerlo en publico, pero era casi imposible no querer derretirse a sus pequeñas atenciones.
— Eres más de lo que esperaba…— Yoongi volvió a hablar mientras apoyaba su frente en la tuya, ajeno al hecho de que ambos están en público, mostrando afecto como si fueran un pareja, la estaba mirando profundamente a los ojos como si se conocieran desde hace mucho tiempo sin detener sus caricias en su piel.
¿Por qué lo haría después de todo cuando se moría por ponerle un dedo encima desde que la conoció?
— Eres un chica jodidamente hermosa.— Arrulló con su voz ronca al mismo tiempo que una de sus manos viajaba hacia arriba para sujetarla por su nuca con dureza, casi a punto de besarla de una buena vez.
— Aquí no, por favor…— T/n sollozó por lo bajo, abrumada con su imponente presencia y apartando su mirada de la de él; completamente sonrojada con sus palabras.
— Esa es la voz que me gusta escuchar.— Yoongi habló en medio de una sonrisa arrogante.— No puedo esperar a escuchar más de eso pronto.— Agregó separándose de a poco de ella para tomar una de sus manos y besarla suavemente bajo la mirada sorprendida de T/n.
Aún no podía comprender que esto realmente estaba sucediendo. Nada de esto hubiera ocurrido si T/n no hubiera recogido la nota de su profesora ese día con el número de teléfono de Yoongi. En cierto modo, sentía que le debía mucho a la profesora Kim, una parte de ti estaba contenta de que fueras tú quien experimentara el toque de Yoongi y muchas más cosas y no ella.
— Hay un bar a un par de cuadras de aquí. ¿Qué dices? — Yoongi habló mientras abría la puerta del pasajero de su auto para que pudiera entrar, pero antes de que pudiera tomar asiento frunció los labios hacia él.
— No estoy vestida para eso…— T/n murmuró por lo bajo, queriendo esconderse de su intensa mirada.
— T/n…— Yoongi chasqueó la lengua, sonando un poco decepcionado.— Eso no es un problema, lo sabes.— Agregó al mismo tiempo que con sus dedos aplicaba la cantidad correcta de presión en su barbilla para elevar su cabeza hacia el.
T/n lo miro con ojos grandes sin saberlo, y eso solo hizo que la mente de Yoongi funcionara con varios pensamientos. Pensamientos que no correspondían en este momento y se mordió el labio inferior por un momento antes de regresar a la realidad.
— No tienes que disfrazarte. Solo tienes que verte bien para mí, y en este momento…— Murmuró bajando el tono de su voz, inclinándose sobre su cuerpo para estar más cerca de ella, tanto que sus rostros casi se tocaban.— Te ves jodidamente deliciosa, especialmente con esta falda corta tuya. ¿Está permitido usar un material tan corto en la escuela?
— Está bien, está bien.— T/n exclamó suspirando mientras sentía como todo su rostro se calentaba una vez más antes de subirse de inmediato a su auto sin pensarlo dos veces y haciendo reír a Yoongi.
Era la primera vez que lo escuchaba reír así, casi aireado y con hipo, lo que le pareció realmente adorable; ese era un contraste total de la personalidad habitual que había visto en él, y creo una nota mental para poder hacerlo reír más a menudo.
Era como si Yoongi encajara perfectamente en el bar como si fuera allí cada vez que podía. Su atuendo era completamente negro y se ajustaba perfectamente a su cuerpo bien formado, y complementaba el aura tenue y sensual del bar.
T/n era todo lo contrario, y era ridículo: la imagen de ustedes dos caminando dentro del edificio y lo diferente que se veía a su lado, pero tan pronto como pensó en eso también lo olvidó cuando sintió la mano de Yoongi en su espalda baja, guiandola con firmeza por el bar cuando entraron y cuando fueron recibidos con música r&b retumbando por todo el lugar, T/n prácticamente tuvo que morder el interior de sus mejillas al sentir como sus dedos rozaban su piel expuesta de su cintura, imaginándose como se sentirian si subieran un poco más, y rápidamente salió de su burbuja de fantasías cuando volvió a hablar.
— ¿Tomas? — Yoongi preguntó tirando hacia atrás el taburete para que pudiera sentarse sin apartar su mirada de ella.
— Algunas veces.— T/n respondió tomando asiento y tirando de su falda hacia abajo cuando subió un poco más por sus piernas, y formó una mueca arrepintiéndose por habérsela puesto hoy, pero cuando elevó su mirada volvió a atrapar a Yoongi observando cada uno de sus movimientos con atención.— Deja de mirarme de esa forma.
— ¿O si no qué, hm? — Yoongi farfulló con arrogancia en su voz y sonriendo al verla suspirar, joder, acababan de entrar al bar y él ya le estaban dando ganas de correr a su casa.
Antes de que T/n pudiera decir algo más el bartender se acercó a ustedes dos con un brillo particular en sus ojos, e instantáneamente fijó su atención en ella, la comisura de su boca se levantó en una sonrisa sugerente mientras se apoyaba sobre el mostrador donde estaban, y casi por inercia los ojos de T/n se desviaron a sus brazos, viendo la forma en que las curvas de sus bíceps se marcaban aún más gracias a su camisa de vestir blanca y apretada.
Y por supuesto que Yoongi lo notó, pero opto por no decir nada.
— ¿Qué puedo conseguir para ti…
— Dos latas de cerveza.— Yoongi respondió antes de que pudiera decir algo más y haciendo que el bartender lo mirara solo para poner su mano derecha sobre tu rodilla expuesta.— Para mi niña y para mí.
Dios.
T/n apretó sus labios mientras agachaba su mirada hacia abajo, completamente sonrojada por la forma en que se refirió hacia ella, y solo pudo ver de reojo como el bartender enderezaba su postura mientras tosía incómodamente.
— Entendido, en un momento traeré su pedido.
Y tan pronto como se fue volviendo a dejarlos solos Yoongi acerco su taburete al de T/n, sus rodillas quedaron rozando las de ella mientras T/n seguia mirando hacia abajo.
— Mírame.— Yoongi ordenó poco después tomándola por su mentón para obligarla a mirarlo cuando se encontró con su rostro su mirada se poso de inmediato en sus labio entreabiertos,, casi a punto de mandar todo a la mierda y besarla ahí mismo.— ¿Nerviosa, bebé? — Preguntó con voz ronca mientras frotaba con su pulgar la suave piel de su mejilla sintiendo de inmediato como el calor se acumulaba en su palma.— No tienes porque estarlo, estamos aquí para divertirnos ¿no es así?
Y cuando finalmente T/n lo miró a los ojos a pesar de su nerviosismo entendió rápidamente que a Yoongi le gustaba tener un contacto visual con ella, seguramente disfrutando mientras la veía esforzarse para mantener su intensa mirada, porque realmente era así, a Yoongi le gustaba ver cómo su respiración se agitaba cada que estaba cerca y se excitaba terriblemente al verla tan perdida en sus iris oscuros.
— Eso es, buena chica.— Yoongi murmuró por lo bajo al mismo tiempo que deslizaba su pulgar hacia sus labios, acariciando sensualmente su labio inferior, haciéndolo sonreír al verla suspirar de forma temblorosa ante sus caricias.— Eres mi buena chica. De nadie más.
— Yoongi…- T/n hablo a medias, sin saber exactamente si fue un susurro o un gemido ahogado.— N-no…
— ¿No qué? — Yoongi demandó saber con aire de suficiencia.— ¿No quieres que te toque en público?
Y T/n simplemente pudo responder con un pequeño asentimiento, ¿pero le importó a Yoongi? Por supuesto que no, porque colocó su mano disponible sobre su pierna; arrastrandola por su piel desnuda de una forma tan lenta, pulgada a pulgada, las puntas de sus dedos rozaban su piel suavemente haciendo que todo su cuerpo se estremeciera y se removiera sobre el asiento al sentir el frío metálico de sus anillos, y Yoongi volvió a maravillarse con lo receptivo que era su cuerpo a él, solo invitándolo a avanzar.
— Odio decírtelo, bebé, pero me gusta verte temblar cuando te toco.— Yoongi farfulló antes de que la mano que estaba sosteniendo su mejilla se moviera hacia atrás para sostenerla por la parte posterior de su cuello.
Los ojos de T/n se abrieron de repente cuando lo sintió tomar un puñado de su cabello y tirar de su cabeza hacía atras lo suficiente para que su cuello quedara expuesto a él, sin poder lograr ocultar el pequeño gemido que amenzaba con salir de sus labios, y en cambio soltó un sonido lascivo reprimido, solo haciendo que los oídos de Yoongi se animaran en cuando lo escuchó.
Él empujó de su taburete para que estuviera más cerca, y lo logró, su rostro quedó peligrosamente a centímetros de la curva del cuello de T/n quién tembló al sentir su caliente respiración abanicando su piel tan sensible, la repentina proximidad y el ambiente sensual del bar estaban nublando la mente de Yoongi, quería tocarla por completo, quería tener sus manos por todo su cuerpo después de tanto tiempo de bromas, arrepintiéndose internamente de haberla llevado a un bar en lugar de conducir directamente a su casa y poder tenerla para él solo.
Su mano comenzó a jugar con el dobladillo de su falda, casi de forma burlona al principio, y solo haciendo que T/n dejara escapar una respiración temblorosa al sentirlo y rápidamente se apresuró a sostener su muñeca, sin aplicar ninguna presión, pero sí lo suficiente para recordarle su presencia, y al sentirlo los labios de Yoongi se curvaron en una sonrisa, acercándose más a ella para burlarse un poco más de su estado con lo siguiente que dijo.
— ¿Qué pasaría si te meto un dedo en el coño, aquí mismo, ahora mismo? — Ronroreó con esa voz rasposa que T/n tanto amaba contra su oído, los bordes de sus labios eran como fantasmas alrededor de su oreja e inconscientemente su interior se apretó alrededor de la nada, teniendo que morderse la lengua para ocultar un gemido vergonzoso ante sus palabras.
T/n tuvo la tentación de cerrar los ojos para poder perderse en sus sucias fantasías, pero su cerebro le recordó que la gente en el bar podría estar mirando, e inmediatamente su mirada escaneó el lugar en busca de posibles ojos al acecho, pero casi todos estaban borrachos o se ocupaban de sus propios asuntos como si hubieran visto cosas peores.
— Mira mi mano, T/n.— Yoongi ordenó refiriéndose a la mano que descansaba sobre su muslo, y su mirada rápidamente se posó en ella, suspirando de forma agitada al ver lo jodidamente sexy y grande que era, las venas se resaltaban sobre su piel y los anillos solo la hacían temblar y desear poder sentirlos un poco más arriba.
Mierda. T/n podía sentir el cosquilleo aumentando cada vez más entre sus piernas, podía sentir a la perfección la incómoda humedad manchando su ropa interior, solo haciéndola removerse en el asiento cuando sintió a Yoongi meter su mano debajo de su falda, la tela cubrió sus dedos casi por completo y con eso ni siquiera pudo evitar no sacudir sus caderas más hacia su mano levemente; rogando silenciosamente que subiera más, y por supuesto que Yoongi se dio cuenta, permitiéndose sonreír arrogante cuando sus ojos se volvieron a encontrar.
— Sé que quieres sentir mis dedos dentro de ti…— Yoongi susurró con su voz ronca sin dejar de frotar sus dedos en el interior de sus muslos, burlándose de ella cuando la escucho gemir suavemente mientras lo miraba con ojos necesitados.— Sé que quieres que te toque mientras estamos rodeados de toda esta gente.
T/n podía jurar que se estaba poniendo más y más húmeda mientras él seguia hablandole de esa forma en publico, donde existía la posibilidad de que la gente escuchara todo, y ahogó una maldición cuando su dedo índice apenas y rozó su clítoris por encima de la tela de sus bragas, mierda, esto era mucho mejor que estar hablando con él por teléfono.
— ¿Te gustaría eso, bebé? — Yoongi volvió a preguntar, sabiendo ya la respuesta.
Volvió a sonreír de forma arrogante cuando la vio asentir frenéticamente incapaz de articular alguna palabra justo antes de hundir su mano por completo entre sus piernas para presionar sus dedos directamente en su clítoris, haciendo que T/n diera un pequeño brinquito en su lugar y soltara un gemido ahogado ante el impacto del placer que viajó por sus nervios, haciéndolo reír mientras se alejaba por completo de ella; dejándola completamente sonrojada, caliente y sin aliento.
— Oh, mira…— Habló agarrando las dos latas de cerveza frente a ustedes dos antes de agregar con falsa inocencia en su voz.— Ese pobre mesero debió haber visto todo mientras no estábamos prestando atención, ¿no lo crees?
Él abrió una lata para ella, mientras T/n solo podía mirarlo boquiabierta, apenas procesando lo que acababa de pasar, ¿Realmente la estaba dejando así como si nada hubiera pasado?
Pero al contrario de sus pensamientos, Yoongi también estaba teniendo dificultades para controlar su creciente erección debajo de sus jeans, sintiendo como se presionaba más y más contra la tela casi de forma dolorosa, pero disimulando bien mientras se aclaraba la garganta.
— Salud, bebé.— Habló divertido chocando su lata con la de ella; haciendo un 'tintineo' silencioso antes de que su mirada volviera a oscurecerse cuando volvió a mirarla.— Cierra esa boca tuya, T/n. Antes de que le ponga algo que la llene.
Y con eso último T/n no pudo evitar volver a sonrojarse, e hizo todo lo posible por tratar de olvidarse de los que acababa de ocurrir mientras Yoongi comenzaba a tener una conversación normal con ella, pero era difícil tan difícil hacerlo cuando aun podía sentir sus manos sobre ella, y por supuesto que Yoong estaba disfrutando de esto, estaba disfrutando de su tiempo con ella, finalmente solo estaba inmerso en todo lo que tuviera que ver con T/n, sus ojos nunca se apartaban de los de ella y no podía evitar sonreír cada que la veía agachar su mirada avergonzada cuando decía algo lascivo.
A cada segundo que pasaba mas le gustaba estar con ella, le gustaba ver como sus ojos se iluminaban con ese brillo de inocencia cada vez que lo miraba y era como si quisiera que este momento no acabara, pero habia algo que lo regresaba de golpe a la realidad, la unica regla que Delight tenia para cada empleado seguia grabada en su mente, podia sentir como su cuerpo se tensaba cada vez que su consciencia pensaba en esa regla que justo ahora estaba rompiendo, y no sabia como decirle que lo que estaban haciendo en este momento estaba prohibido en su trabajo.
Pero de cierta forma, deseaba que alguien de su trabajo lo viera en este preciso momento, de ser posible su mismo jefe, joder, deseaba que lo despidieran ahora mismo para volver a tener una vida normal, no era un secreto que Yoongi no había tenido una relación seria en mucho tiempo, había tenido una que otra aventura de una sola noche, pero no románticas, eso no era lo suyo, pero ahora que estaba con ella era como si quisiera estar con ella de todas las formas posibles, la deseaba, la quería y la necesitaba y aún no podía entender porque, lo unico que sabía era que nunca había anhelado algo tanto como ahora, como a T/n
— ¿Alguna vez, eh, has hecho esto con alguien más? — T/n preguntó por lo bajo mirándolo de reojo y rompiendo un poco su burbuja de pensamientos.
— ¿A qué te refieres? — Yoongi cuestionó de igual forma, inclinando su cabeza hacia un lado con una sonrisa astuta en su rostro.
— No importa…
— ¿Estás preguntando si alguna vez he salido con alguien? Cariño, si querías saber mi número de citas podrías haberme preguntado…
— ¡No! ¡No es así! Bueno, quiero decir, sí, pero no quería preguntar directamente…— T/n respondió rápidamente sin saber donde esconderse de la vergüenza que sentía por sus palabras.
Y Yoongi simplemente sonrió mientras dejaba escapar una risa ronca antes de elevar su mano para pellizcar su mejilla enrojecida por el alcohol de forma divertida.
— Está bien. ¿Quieres saber si puedo hacer las cosas que te prometí por teléfono, eh? — Habló regresando a su sonrisa arrogante que había tenido todo este tiempo.— No te preocupes, T/n. No soy una estafa.
Y con eso T/n solo pudo morder su labio inferior inconscientemente, sabía que la estaba molestando con sus palabras, pero su mente solo podía actuar por sí sola, imaginando como se sentiria estar debajo de él con su calor cubriendola por completo y su cuerpo presionandose contra ella, sujetándola contra la cama y haciéndola gemir su nombre.
— Pero sinceramente…— Yoongi volvió a hablar, con seriedad ahora, y T/n se preguntó cómo era posible que pudiera pasar de su tono burlón a uno tan serio en un abrir y cerrar de ojos.— No tengo muchas relaciones en estos días, solo me enfoco en el trabajo.
— Oh, ¿entonces no tienes sexo? — T/n preguntó como si nada levantando sus cejas hacia él.
Y Yoongi se contuvo increíblemente de soltar un comentario sarcástico. No quería ir allí todavía.
— ¿Es asunto tuyo, querida? — Respondió con un tono bajo, como si fuera una pequeña advertencia hacia ella.
Y T/n se encogió en su asiento no del todo satisfecha con su respuesta, sabía que no estaba en lugar para saber eso, después de todo, ese era su trabajo, excitar a la gente y llevarlos al orgasmo, y tal vez ella solo había sido afortunada.
— Oye, creo que ese tipo te conoce.— Yoongi habló de repente casi con fastidio mientras miraba un área detrás de ella.
— ¿Qué? ¿Qué chico? — T/n preguntó frunciendo su entrecejo antes de darse la vuelta en su asiento, mirando hacia todos lados, mirando más allá de toda la gente bebiendo y charlando tratando de encontrar una cara familiar hasta que con un movimiento su atención se centró en el mismo chico de hace horas, mirándola con sus ojos abiertos cuando se dio cuenta que lo había notado.
— ¿Quién es ese? — Yoongi preguntó con el mismo tono de voz mientras se removía en su asiento.
— Un chico que conocí en clase antes. Dios, espero que no me esté acosando... oh, aquí viene, ¡Oye, Jungkook! — T/n respondió rápidamente y sorprendiendose cuando lo vio caminar hacia los dos.
— ¡T/n! Me sorprendió verte aquí.— Jungkook habló con una sonrisa en su rostro antes de inclinar su lata de cerveza en dirección a Yoongi.— Con un buen compañero, por lo que veo.
— Así es, ella tiene buen gusto, ¿no lo crees? — Yoongi respondió descaradamente formando una mueca de disgusto antes de tomar otro sorbo de su cerveza, y T/n se apresuró a golpear suavemente su rodilla mientras fingía una risa.
— Espero que no me estés siguiendo, Jungkook.— T/n habló lo más alegre y amigable posible.
— ¡Oh, no, no! Todo es solo una coincidencia. Lo siento si te hice sentir incómoda…
— Bueno, a mi sí me hiciste sentir incómodo mirándola durante demasiado tiempo, Jungkook.— Yoongi volvió a hablar con dureza mientras se ponía de pie antes de tomar la mano T/n y hacerla levantarse también mientras Jungkook observaba todo con una mirada atónita en su rostro.— Nos vamos.
Todo pasó demasiado rápido cuando Yoongi comenzó a caminar por el bar directo hacia la salida que T/n apenas y tuvo tiempo de mirar sobre su hombro y murmurar un pequeño “Lo siento” a Jungkook.
— ¡Yoongi! — T/n habló en medio de un chillido mientras salían del bar, el aire frío de la noche golpeó su cuerpo y la hizo temblar detrás de él.— Eso fue muy grosero…
— Oh, no dirías lo mismo si hubieras visto la forma en que te miraba.— Yoongi se burló sin gracia de sus palabras mientras llegaban a su auto
— ¿De qué hablas? No conozco mucho a Jungkook pero no creo que él…— T/n habló confundida antes de sobresaltarse cuando Yoongi se giró hacia ella de repente; acorralandola contra su auto y cubriendo su cuerpo por completo con el suyo.
— No quiero que ningún otro hombre te mire de la misma forma que yo.
Y con eso T/n ni siquiera tuvo tiempo de procesar sus palabras, porque tan pronto como Yoongi las dijo su cuerpo se presionó con el de ella, juntando sus torsos y estrellando sus labios en un beso teñido de desesperación pura.
Pasionales, fluidos, húmedos, ansiosos.
Esos eran los labios de Min Yoongi mientras se movían sobre los de ella.
T/n no supo descifrar si fue ella, o Yoongi, o ambos los que suspiraron aliviados contra los labios ajenos, pero lo hicieron, y era entendible, después de tantas bromas y de tanto tiempo era de esperarse que reaccionaran así, sus manos se apoyaron en sus anchos hombros y las de él se ajustaron en su cintura, pasándolas por su espalda baja para lograr apretar su cuerpo mas con el suyo haciéndola jadear contra su boca y sentir que sus piernas temblaban, casi amenazando con hacerla caer de rodillas ahí mismo de no ser porque Yoongi la apoyó contra su auto mientras su lengua ávida acariciaba su labio inferior en pequeños toques, y cuando T/n entreabrió sus labios Yoongi se apresuró a insertar su lengua en la de ella, haciéndolo gemir roncamente y a ella jadear completamente abrumada, sus grandes manos estaban por todo su cuerpo, acariciando cada porción de piel a su disposición y queriendo abarcar todo de ella en menor tiempo posible; apretó su cintura, acarició sus mejillas, sus brazos, clavó sus dedos en sus muslos y enganchó una mano en el interior de su rodilla, elevando su pierna y haciendo que rodeara su cintura con ella.
El chasquido casi obseno de sus lenguas la hicieron temblar entre sus manos y no supo descrifrar si fue por una rafaga de viento o porque estaba increíblemente excitada a este punto, ahí en medio del estacionamiento los dos eran un lío de manos, saliva, lenguas y respiraciones densas.
Una de las manos de Yoongi se había ajustado a su cuello para no dejarle escapatoria, cuando él sabia muy bien que no iba a huir, las de T/n se trasladaron a la parte trasera de su cabeza donde enredó sus dedos en su cabello negro y rebelde; apretándose más contra él y escuchando un quejido gutural salir de sus labios antes de sentirlo envolver un brazo en su cintura para apretar su pelvis contra la de ella sin desantender sus húmedos besos, y en esta oportunidad, ambos soltaron un quejido al unisono sobre la boca del otro antes de tomarla por sus mejillas y separarse de ella, tirando un poco de su labio inferior en el proceso.
— Dios…— T/n jadeó entrecortado apenas separándose levemente de él, sintiéndose un tanto aturdida por la falta de aire y ahí Yoongi abrió sus ojos mientras suspiraba pesadamente cuando tuvo una vista exclusiva de sus pupilas dilatadas, sus mejillas rojas y de sus labios hinchados y resbaladizos con su saliva.
La mano de Yoongi se elevó para tomarla por el mentón con firmeza y sonreír de lado, inclinándose sobre ella para rozar sus labios de los cuales salían exhalación tras exhalación caliente.
— No, soy Min Yoongi.— Decretó de forma engreída apoyándose sobre la puerta de su auto con la otra mano, buscando presionarse mas contra ella como si eso fuera posible.
T/n negó con su cabeza sin evitar sonreír ante sus palabras dándose cuenta de lo bien que encajaban sus cuerpos juntos y del abrumador calor que la inundaba por completo.— Eres un presumido.
— Tengo cosas para presumir, así que puedo hacerlo bebé…— Yoongi explicó con altanería acompañando sus palabras con un certero empuje de caderas contra ella, presionando su erección en su vientre bajo y haciendo que su espalda chocara contra la puerta; arrancándole un quejido ahogado que emergió de sus labios.
Sin pensarlo mucho los labios de Yoongi volvieron a unirse a los de ella, sabiendo muy bien que tarde o temprano siempre volvería a caer en ellos, eran como una de las peores drogas, de esas que solo te bastaba probarlas una sola vez para querer más y más, y se encargó de devorar su boca con la suya, sus labios se abrieron para darle paso una vez más a que deslizara su lengua y que pudiera explorarla como tanto ansiaba, las manos de T/n se sostuvieron de sus hombros y el rodeó su cintura con su brazo, pegándose a ella por inercia.
La necesitaba tanto, necesitaba descargar todo lo que había contenido por días, necesitaba perderse en ella como había imaginado una y otra vez, en sus sueños, e incluso despierto.
El corazón de T/n latía con desenfreno en su pecho y la temperatura en su cuerpo se elevó con facilidad, pero simplemente no podía luchar contra la forma en que su cuerpo respondía a cada uno de los toques de Yoongi, en cómo sus lenguas se entrelazaban con afán la una con la otra, e internamente agradecía el hecho de que no hubiera gente donde estaban, y se lo hizo saber cuando movió sus caderas hacia él; restregandose suavemente contra su pelvis y contra la dura erección que podía sentir a través de sus ropas, solo ganándose que Yoongi gruñera sobre sus labios mientras apretaba el agarre en su cintura, arrepintiéndose casi al instante de su acto cuando lo sintió deslizar sus labios hambrientos por su mejilla y su mentón, hasta llegar a la curvatura de su cuello donde comenzó a besar y lamer su piel cuanto quiso.
— Yoongi…— T/n musitó con un hilo de voz, sus manos se engancharon en su cabello, disfrutando por completo de la calidez de su aliento y la humedad de su boca, mordiéndose el labio cuando lo sintió encontrar ese punto dulce detrás de su oreja que ni siquiera sabía que tenía, dejando rastros húmedos de besos hacia abajo, para luego volver a subir y dispersarlos por toda su piel, y era plenamente consciente de la forma de la humedad en sus bragas aumentando cada vez más.— ¿Vamos a tu casa o a la mía?
Y por supuesto, Yoongi ignoró su pregunta por completo, cada nervio de su cuerpo estaba monopolizado con un apetito sexual que nunca antes había sentido y que solo era potenciado por la forma en que T/n se escuchaba a sus oídos, tan sensual y dulce al mismo tiempo, y toda su mente se quedó en blanco con lo siguiente que escuchó.
— Señor, por favor… te necesito tanto.— T/n lloriqueo por lo bajo mientras empujaba sus caderas hacia él un poco más fuerte esta vez, haciéndolo consciente de la necesidad latente entre sus piernas, buscando de nueva cuenta sus labios para depositar cortos y repetitivos besos sobre ellos, sintiendo sus mejillas arder aún más al ser consciente de la forma en que lo había llamado.
No sabía si era buena o mala señal que Yoongi se hubiera quedado estático ante sus palabras, pero tampoco podía pensar mucho en eso, no cuando su todo su cuerpo estaba ardiendo en calor, y cuando hizo un nuevo intento por mover sus caderas hacia él una de sus manos se apretó en su cintura, manteniendo su cuerpo quieto cuando sus ojos se encontraron con los de él y ni siquiera pudo evitar no temblar en su lugar cuando notó su mirada oscura antes de sentir como la tomaba por el mentón con fuerza.
— Sube al maldito auto. Ahora.— Ordenó con su voz ronca y con su mandíbula tensa, su pecho subía y bajaba en respiraciones tranquilas, como si estuviera haciendo un inútil intento de controlarse sin dejar de mirarla y solo aumentando la excitación en ella, quería estar tranquilo, pero el bulto en su entrepierna revelaba que no lo estaba y menos pudo ocultarlo cuando la vio relamer sus labios y sonreírle con descaro antes de asentir levemente; como si fuera una niña que acababa de conseguir lo que quería.
Bueno, tal vez debería quitarle esa actitud.
El viaje a la casa de Yoongi estuvo lleno de tensión y T/n simplemente no podía entender cómo era que se había contenido de lanzarsele encima para besar su cuello, pero decidió no hacerlo porque era un peligro para la seguridad, además de que él había tomado alcohol, pero Yoongi le había dicho que tenía una alta tolerancia y que la cerveza no le afectaba en absoluto, aún desconfiaba un poco.
Y además, todo era mejor cuando había un poco de tensión.
Cuando llegaron a su departamento T/n quedó sorprendida con lo monocromático que era todo, pero lo estuvo aún más cuando se dio cuenta que cada rincón del lugar estaba lleno con el aroma de Yoongi, esa colonia que la había hecho suspirar más de una vez en lo que iba de la noche y que ahora se colaba por su nariz como si se tratara de un afrodisiaco, solo alimentando más su deseo por él, y ahora que estaba en su casa esa sensación se había duplicado diez veces más.
— No t-tienes…— T/n balbuceó de a poco, queriendo abofetearse por tartamudear cuando lo miró recargado sobre el marco de la puerta; inspeccionando su cuerpo de arriba abajo, y fue suficiente para que su mente se quedara en blanco.
Yoongi dio unos pasos más cerca de ella, llegando hasta donde estaba para quitar su bolso de su hombro y dejarlo car al suelo con un ruido sordo.— ¿Mhm? ¿Estabas diciendo?
Su voz se había vuelto mucho más profunda, más relajada, y era un tono que la hacía querer derretirse frente a él, obligándola a tomar una respiración profunda antes de hablar.
— ¿No tienes trabajo o algo así? — T/n preguntó por lo bajo, pensando que tal vez su línea estaba abierta y tenía clientes esperándolo.
Las manos de Yoongi serpentearon por sus brazos con calma hasta llegar a sus caderas, colando una de sus manos debajo de su blusa, lo suficiente para tener contacto directo con su cintura donde frotó su piel en lentas caricias; enviándole pequeñas ondas de calor por todo su cuerpo y haciéndolo sonreír cuando la vio suspirar suavemente y relajarse de a poco, su otra mano jugó con un mechón suelto de su cabello antes de curvarlo detrás de su oreja y responder con su voz una octava más abajo de lo usual.
— No. Estoy trabajando contigo esta noche.
Y tan pronto como dijo eso, guiado por el frenesí del momento, sus labios volvieron a chocar contra los de ella una y otra vez, su mano mantenía el agarre en su mentón y Yoongi se encargó de devorar su boca como si se tratara de un hombre hambriento de ella y anhelante de su sabor, y T/n apenas y podía seguir su ritmo tan demandante sobre sus labios, dejándose caer sobre una pared detrás de ella que, para empezar, ni siquiera sabía que estaba ahí, pero a la que que Yoongi pareció guiarla desde el principio sin que se diera cuenta.
Una especie de ronroneo se derritió a través de su boca al sentir su luengua jugando con la de ella y todo el deseo aumentó de sobremanera cuando sus lenguas chocaron entre sí, casi dejandola sin aliento y derritiéndose por completo al escuchar los gruñidos de Yoongi contra su boca, había soñado tanto con esto, había reprimido todo lo que sentía, y ahora todo finalmente estaba cobrando vida y sólo queria hacer todo lo que alguna vez le había prometido por telefono.
En un arrebato Yoongi guió su agarre a su nuca para mantenerla quieta, y T/n olvidándose de cualquier rastro de pudor enredó una de sus piernas en su cintura sosteniéndose con la otra una vez más, un nuevo gemido ahogado escapó de sus labios cuando Yoongi movió su pelvis contra ella, frotándose en un toque apenas perceptible pero a la vez notorio que le hizo saber de la dureza que estaba encerrada en sus pantalones, sus lenguas se enredaban con afán y todo el cuerpo de T/n tembló cuando sintió a Yoongi tomar su lengua entre sus labios, succionandola con suavidad una y otra vez, haciéndola gemir suavemente y aferrarse a él con más fuerza, moviendo sus caderas de igual forma, frotándose el uno con el otro y sólo aumentando el calor en sus cuerpos casi de forma alarmante.
Y cuando Yoongi soltó su lengua con lentitud ignoró el hilo de saliva que colgaba entre sus bocas, solo enfocándose en la belleza y el placer en todo su rostro en su máxima expresión.
— Estás segura, ¿verdad? — Yoongi preguntó poco después, con su voz ronca y su respiración agitada sin dejar de mirar sus labios hinchados y rojizos mientras se encargaba de acariciar su pierna suavemente en movimientos ascendentes y descendentes.
T/n lo miró con sus ojos muy abiertos mientras respirando por la boca y con la esperanza de que le hiciera saber de su necesidad de manera no verbal cuando movió sus caderas sutilmente hacia él, en una clara invitación.
Pero Yoongi no quería eso, él quería escuchar sus palabras, quería escucharla pedir por él, y se dio cuenta de eso un poco más tarde.
— Sí, señor…— Respondió en un murmullo entrecortado mientras deslizaba sus manos por su pecho que bajaba y subía en densas respiraciones hasta llegar a su desordenado cabello, acercándose a él para darle un delicado beso, apenas perceptible antes de continuar.— Lo quiero tanto…
Y con eso Yoongi se permitió sonreír ladinamente, hundiendo su rostro en la curva de su cuello y haciéndose espacio para sumergir sus labios en su piel y comenzar a salpicar besos húmedos por toda la zona, ensanchando su sonrisa cuando la escuchó jadear y estirar su cuello para darle más espacio.
— No te preocupes, seré amable…— Yoongi masculló contra su piel, frotando su la punta de su nariz contra su oreja, vertiendo su aliento agitado y caliente sobre ella antes de subir y encontrarse con sus ojos y pupilas dilatadas una vez más, y sonreír con lo siguiente que dijo.— Por ahora…
Lo único que T/n pudo atinar a hacer fue soltar un quejido cuando sintió a Yoongi agacharse lo suficiente para tomarla por su trasero con seguridad y alzar su cuerpo en el aire de un salto, haciéndola soltar una risita vergonzosa a la vez que envolvía sus piernas en su cintura y sujetarse de sus hombros antes de que despegara su cuerpo de la pared para comenzar a caminar hacia su habitación, y a pesar de saber el destino, se dejó envolver por sus labios suaves y dulces una vez más.
Las manos de Yoongi subieron por su espalda baja, y despegando momentáneamente sus bocas que seguían devorándose como si no hubiera un mañana, depositó su cuerpo con suavidad sobre el colchón de su cama, todo lo estaba haciendo con suma delicadeza, y T/n no sabia si era para disfrutar más el momento o para alargarlo. Las dos opciones le parecían perfectas.
El cuerpo de T/n se hundió en las sabanas y junto sus piernas frotandolas pausadamente la una con la otra, formando una pequeña sonrisa cuando vio a Yoongi deshacerse de la chamarra de cuero y cuando pensó que también se quitara su camisa, su mano grande y caliente separó sus piernas para hacerse su debido espacio entre ellas, hincando sus rodillas en la cama y acarició sus piernas desnudas con calma antes de subir al borde de su blusa, el cual tomó para tirar hacia arriba y T/n le ayudó estirando sus brazos para quitarse la prenda por completo.
La mirada de Yoongi oscureció aún mas cuando le dio un repaso a todo su cuerpo y ni siquiera pudo luchar contra el destello de timidez que la atravesó, e intentó cerrar sus piernas para cubrirse aunque sea un poco, pero antes de que pudiera hacerlo Yoongi la sujeto por su cuello, elevando su cabeza hacia él para volver a besarla.
Dieron inicio a una nueva sesión de besos desesperados por parte de ambos, dejando que sus lenguas volvieran a unirse una vez más, todo su cuerpo ancho y fornido se presionó contra el de ella y T/n dejó que un gemido saliera de su boca mientras sus manos se pasaban por su cabello para demostrarle cuan a gusto estaba, y Yoongi soltó una especie de ronroneo mientras chupaba su labio inferior, dejándolo ir con un chasquido húmedo antes de que una de sus manos se deslizara por su torso, acariciando con calma la piel que tenía a su disposición, sintiendo el cuerpo de T/n temblar y agitarse debajo de él cuando frotó su pulgar contra uno de sus pezones endurecido, aún por encima de su sostén y solo logrando que soltara un débil gimoteo.
— Quiero besarte entera.— Yoongi murmuró con su voz ronca sobre su boca y T/n supo que hablaba realmente en serio cuando sus labios bajaron por su mentón hasta llegar a su cuello para besarlo todas las veces que quiso; marcando un camino de saliva desde la curva hasta sus clavículas repitiendo esa operación una y otra vez mientras el agarre en sus senos se apretaba suavemente, tarareando de gusto mientras masajeaba uno por uno; dándoles la misma atención a ambos y un pequeño gemido salió de los labios de T/n cuando lo sintió atrapar el lóbulo de su oreja para succionarlo con ansia haciéndolo sonreír ladinamente cuando se separó un poco de ella; notando su cuello marcado y mojado por él, y la simple vista lo hizo trasladar sus manos hacia su espalda y soltar el broche de su sostén en un rápido movimiento encontrándose con sus ojos.— Quiero saber cuan dulce sabes.
Y con eso último T/n ni siquiera tuvo tiempo para reprochar porque en un santiamén los bonitos labios de Yoongi se envolvieron alrededor de uno de sus senos, tomando un gran bocado de su piel y comenzando a repartir besos húmedos en toda la zona, su lengua se movía con maestría y jugaba con su pezón tan lenta y dolorosamente que solo hizo que T/n soltara un fuerte gemido al sentirlo, su caliente respiración erizaba su piel y sus manos viajaron a su espeso cabello para tirar de las hebras sin mucha fuerza antes de arquear su espalda hacía su boca, y él gustoso aceptó el ofrecimiento, gruñendo guturalmente sobre su piel antes de elevar sus manos hacia sus senos; acunando ambos con sus palmas y apretandolos suavemente justo antes de su lengua saliera para lamer sus pezones uno por uno, intercalando entre ellos mientras la miraba con su vista nublada por sus dulces expresiones de placer.
— Yoongi…— T/n maullo sin aliento sintiendo sus besos seguir bajando por su vientre, cubriendo cada porción de piel a su alcance y todo su cuerpo se tensó cuando sin darse cuenta sus manos se encontraron con el inicio de su falda tirando de ella hacia abajo por sus piernas, dejándola demasiado embelesada con sus dedos tocando sus muslos para darse cuenta que se había llevado consigo sus bragas, sino que fue hasta que sintió un repentino escalofrío recorrer su cuerpo y su centro húmedo que se dio cuenta que estaba desnuda frente a él.
Cuando quiso hacer amague por cubrirse solo atino a lloriquear por lo bajo cuando Yoongi se alejó de su cuerpo rápidamente, enderezando su espalda y clavando sus rodillas en la cama para quitarse la camisa por su cabeza y los ojos de T/n se perdieron en su piel blanquecina, en las líneas de sus músculos; desde sus bíceps hasta sus pectorales que subían y bajaban en respiraciones acompasadas, todo su cabello caía sobre su rostro y cuando se lo echó hacia atrás, casi tuvo que obligarse a sí misma a no jadear ante la simple imagen, y por supuesto que su mirada no pasó desapercibida por Yoongi, quien formó una sonrisita arrogante mientras sus manos viajaban hacia el botón de su pantalón, desabrochándolo con calma mientras sus ojos seguían cada uno de sus movimientos.
— ¿Estás esperando una invitación? — Yoongi farfulló bajandose de un solo tiron sus pantalones hasta la mitad de sus muslos, quedando sólo en unos boxer color negro que enmarcaban a la perfección el contorno de su dura y tensa erección atrapada en ellos, su mirada subió a su rostro y sonrió con malicia cuando notó su mirada confundida.
Su cuerpo volvió a inclinarse sobre el de ella, la boca de T/n fue sellada una vez más con sus labios, chocandolos de manera repentina en un demandante y posesivo beso, tomando el mando y ladeando su cabeza con vehemencia, succionando su labio inferior y solo ganándose un adorable quejido cuando se alejó de ella dándole un sutil tironcito.
— Tócate, cariño.— Yoongi murmuró sin dejar de mirarla con ojos oscuros, como si se tratara de una fiera; a punto de devorarla por completo.— Tócate como lo hacías cada que vez que escuchabas mi voz. Quiero verte.
Y ante eso T/n ni siquiera pudo luchar contra la bruma de vergüenza que sintió con sus palabras, y cuando elevó su mirada hacia él todo su cuerpo tembló cuando se encontró con sus ojos nublados en lujuria mirándola con atención y que solo la hicieron obedecer sus palabras, su mano se movió precaria por sus muslos hasta llegar a su entrepierna y un suspiro agitado salió de sus labios cuando sus dedos entraron en contacto con su clítoris, tocándose con cuidado y comenzando a estimularse con suavidad recordando todo lo que alguna vez llegaron a hablar por teléfono y solo haciéndola gemir y mover sus dedos más rápido sobre su botón de placer, cerrando los ojos con fuerza un tanto por el placer que sentía recorrer cada rincón de su cuerpo y otro poco para intentar esconderse de su intensa mirada.
— No sabes cuantas veces te imagine así…— Yoongi susurró con voz ronca contra su oído viendo su cuerpo temblar y mover su mano más fuerte sobre su entrepierna haciéndolo sonreír antes de acariciar su mejilla con su mano, viéndola jadear ante otro movimiento y aprovechó eso para meter dos de sus dedos dentro de su boca, sus pestañas se desplegaron hacia él y una sonrisa se formó en su rostro cuando sintió su lengua comenzar a chuparlos una y otra vez.— Te ves tan jodidamente bonita tocándote, bebé.
Y tan pronto como dijo aquello sus dedos dejaron su boca en un chasquido húmedo y obsceno, deslizandolos por su cuerpo y marcando un camino de humedad hasta que llegó al centro de sus piernas, quitando su mano en un rápido movimiento para reemplazarla con la suya propia, y en un abrir y cerrar de ojos, sus dedos se presionaron con fuerza contra su clítoris y el destello de placer la hizo soltar un fuerte gemido; frunciendo sus manos en las sábanas y tirando de ellas mientras sus caderas se movían hacia sus dedos.
— Shh, shh, déjame cuidarte…— Yoongi arrulló apretando su mandíbula al mismo tiempo que movía sus dedos en círculos suaves sobre su pequeño clítoris, escuchándola gemir en cada movimiento, y aún más cuando presionó suavemente la punta de su dedo contra su entrada un par de veces antes de volver a subir lentamente y frotar su punto de placer, sonriendo al verla dejar caer su cabeza sobre la almohada en puro placer junto a un adorable gemido que coreó toda su habitación, haciéndolo sonreír antes de deslizarse por su cuerpo hasta que su respiración abanicó su entrada y que su boca se envolvió alrededor de su clítoris reemplazando sus dedos y haciéndola gemir con fuerza.
Todos los sentidos de T/n estaban al mil, apenas recuperandose de sentir sus dedos en ella cuando de un momento ya tenía su boca entre sus piernas, su cabello negro le cubria ligeramente sus ojos y su lengua se deslizaba entre sus pliegues húmedos de arriba a abajo una y otra vez antes de chupar y succionar su clítoris como un hombre hambriento, sujetando sus piernas con fuerza y gruñendo una maldición contra su piel mientras su sabor llenaba todos sus sentidos sólo haciéndolo tomar todo lo que pudiera de ella, llenando el espacio con sonidos húmedos y lascivos, ahí descubrió que Yoongi no solo sabía usar su boca para hablar sucio, sino que tambien era muy bueno oralmente e imaginó que él estaba orgulloso de lo que su lengua podía hacer, en todas las formas posibles.
Podía sentir el nudo en su vientre apretándose cada vez más; anunciando su pronto orgasmo, los gruñidos de Yoongi contra su entrada sensible solo enviaban ondas de placer por cada nervio empujándola más y más al borde del éxtasis, su nombre comenzó a brotar de sus labios en jadeos entrecortados como si se tratara de un mantra, pero Yoongi no la escuchó, él ignoró por completo la forma en que sus manos tiraban de su cabello y el sonido de su respiración laboriosa, solo se concentró en sus caderas moviéndose contra su boca, haciendo que su lengua jugara con clítoris haciéndola sentir un placer tan abrumador, que cuando sus piernas temblaron a cada lado de su cabeza y cuando orgasmo la inundó de repente solo pudo cerrar los ojos con fuerza y lloriquear por el placer al rojo vivo en cada parte de su cuerpo mientras se removía contra el firme agarre de Yoongi, sintiéndolo lamerla sin querer desperdiciar ni una sola gota de su orgasmo.
— Maldición, hubiera hecho esto mucho antes de saber que sabias tan delicioso.— Yoongi murmuró en una sonrisita y relamiéndose los labios, todavía degustando su sabor en su lengua mientras volvía a subir por su cuerpo, encontrándose con sus ojos entrecerrados y su respiración acelerada.— Oh bebé, ¿Estás cansada? ¿Quieres parar…?
— No, no…— T/n se apresuró a responder apenas saliendo de su bruma de placer, sintiendo todo su cuerpo arder aún más que al principio.— Te necesito…
— ¿Me necesitas? — preguntó con voz ronca, acunando su mejilla con una de sus manos y acariciando suavemente su piel.
— Si, por favor Yoongi, fóllame…— T/n pidió por lo bajo, apoyándose en su toque y mirándolo con ojos necesitados, notando como su rostro se deformaba en una mueca que no supo descifrar del todo.
— Podría lastimarte…— Yoongi murmuró más bajo esta vez, temiendo que realmente pudiera hacer eso.
— Entonces hazme daño, no me importa, solo…— T/n volvió a pedir por él antes de hacer una pausa y elevar su mano para frotarla suavemente contra el bulto en su boxer, sintiendo la longitud y dureza de su miembro palpitar en su mano, elevando su vista hacia el y verlo morderse el labio ante sus movimientos; dándole la última pizca de seguridad.— Por favor…
Y Yoongi simplemente no pudo evitar sonreír al escucharla, suspirando pesadamente al sentirla trasladar sus caricias hacia la punta de su pene e hizo todo lo posible por no mandar todo a la mierda y castigarla ahí mismo por su pequeño y astuto movimiento sobre él, estaba demasiado excitado para que fuera real, eso era cierto, así que verla pedir por él, con ese tono de voz tan dócil que siempre le había encantado solo hacia que su deseo por ella aumentara, casi al punto de ser doloroso y cuando volvió a mirarla algo oscuro comenzó a nadar en sus ojos.
— Hazlo mejor.— Yoongi habló poco después, trasladando su mano hacia abajo para envolver sus dedos alrededor de su cuello con la cantidad perfecta de presión, viéndola parpadear hacia él y respirar agitadamente.— Muéstrame lo buena chica que eres y súplica apropiadamente.
— Señor, por favor fóllame…— T/n respondió en un pequeño jadeo sumiso y necesitado cuando la mano de Yoongi aplicó más presión en su cuello, haciéndola agitarse y mover sus caderas hacia él en una muda invitación, completamente desesperada por sentirlo.— Por favor, lo necesito tanto…
Y antes de que pudiera decir algo más, lo labios de Yoongi volvieron a estamparse con los de ella, esta vez con una voracidad duplicada, T/n reprimió un gemido cuando la lengua contraria no espero ni un segundo en salir en busca de la suya, acariciando con la punta todo lo que estaba a su paso y arrancándole cada uno de sus suspiros en busca de aire, sus grandes manos recorrieron todo su cuerpo con dureza; como si quisiera memorizar cada curva de él, sintiendo su piel estremecerse con anticipación y haciéndola soltar un gemido ahogado cuando sintió la punta de su pene deslizarse entre los pliegues de su entrada y rozar suavemente su clítoris sin saber muy bien en qué momento se había desnudado, pero tampoco pudo pensar demasiado en eso cuando su pelvis comenzó a moverse contra ella, creando una deliciosa fricción entre sus intimidades, sintiéndolo tan grande y pesado presionando contra ella haciéndola acompañar sus movimientos con sus caderas, solo para escucharlo gruñir contra su boca mientras volvía a besarla un par de veces más antes de separarse escuchandola jadear de disgusto.
Yoongi podía sentir sus ojos seguirlo cuando alcanzó el cajón de la mesa de noche, del cual tomó un condón con rapidez, obligándose a respirar para intentar controlarse cuando regresó su vista de nuevo hacia ella, pero era prácticamente imposible hacerlo con la imagen de su cuerpo desnudo y su cabello alborotado que le gritaban que la tomara a como diera lugar, sus constantes jadeos no eran de mucha ayuda tampoco, pero tenía que mantener la cabeza en calma, por ella.
Sus manos se engancharon en el interior de sus rodillas, tirando de su cuerpo hacia él sobre las sábanas, sonriendo al escucharla reír levemente, y se apresuró a rasgar un costado de la envoltura y sacar el condón para deslizarlo por lo largo de su erección, y T/n ni siquiera pudo evitar no relamerse los labios ante la imagen; haciéndola estirar su mano para rodear la base de su miembro duro a lo alto, haciéndolo gruñir guturalmente cuando movió su mano de arriba a abajo, los músculos de Yoongi se endurecieron ante la estimulación y a T/n no pudo gustarle más la imagen de él, le gustaba ver su cabello enloquecido, le gustaba ver sus abdominales marcados por la excitación, le gustaba ver el sudor correr por sus sienes, sus labios hinchados y rojos, le gustaba escuchar su voz ronca y ver su miembro duro por ella.
Su revelación se vio interrumpida cuando de un movimiento, Yoongi se acomodó mejor entre sus piernas, haciendo que soltara el agarre en su erección palpitante, sus manos tomaron sus muñecas y con firmeza a cada lado de su cabeza y sus ojos se conectaron, transmitiendole todo el júbilo y el deseo que parecía sentir y un jadeo tembloroso la abandonó cuando sintió la punta de su pene rozar su abertura; solicitando su debida entrada con cuidado.
La expectativa se acumuló en su estómago cuando Yoongi se acercó a su rostro, tocando su nariz con la de ella suavemente antes de besar el puente de la misma, y T/n no podía entender cómo podía sentirse tanta dulzura y deseo al mismo tiempo, pero Yoongi parecía hacerlo posible con su beso esquimal y su longitud apretándose contra ella al mismo tiempo.
No supo en qué momento soltó sus muñecas pero se dio cuenta cuando comenzó a hundirse dentro de ella con lentitud, las manos de T/n salieron disparadas a su espalda y reprimió un gemido de dolor al sentirlo, todo su cuerpo estaba temblando y trató de concentrarse en los ojos de Yoongi quién estaba estático y que la miraban con atención, como si estuviera estudiando su rostro, se veía preocupado y parecía estar sufriendo en el fondo por controlarse, y otro quejido salió de sus labios al sentirlo volver a presionarse mientras ella luchaba por tomar su circunferencia.
— Ah, Yoongi, d-duele…— T/n lloriqueo por lo bajo, tensando su cuerpo y tirando de las sabanas con fuerza, Yoongi era más grande de lo que esperaba, y la punta de su pene ni siquiera estaba del todo adentro.
— Shh, lo sé, cariño. Pero tienes que ser una buena chica y relajarte para mí o de lo contrario nos detendremos aqui.—Yoongi susurró apretando su mandíbula de la misma forma antes de morder su labio inferior y empujarse un poco más, deslizándose paulatinamente, centímetro a centímetro hasta llenarla por completo y T/n volvió a cerrar sus ojos gimiendo con fuerza; sintiendo como Yoongi volvía a quedarse inmovil, dejando que se amoldara a su longitud ahora más caliente que nunca.
Sus labios fueron rápidos en amortiguar otro nuevo gemido quejumbroso de T/n, tomando su boca con la suya en una nueva oportunidad, una de sus manos se movió hacia su mentón donde acarició suavemente su labio inferior con su pulgar que cuando la vio jadear ante un sutil movimiento dentro de ella; metió su dedo en su boca, haciéndolo suspirar cuando sintió su lengua envolverse alrededor de su dedo y cubrirlo con su saliva.
— Eres muy hermosa, T/n. Muy hermosa..— Yoongi arrulló suavemente y ella abrió sus ojos ante sus palabras, encontrándose con su mandíbula marcada y sus labios entreabiertos; mirándolo sin dejar de chupar su dedo y dejando escapar un gemido amortiguado cuando movió sus caderas hacia él, en un muda invitación a que continuara, el dolor estaba siendo reemplazado por un peculiar ardor y cuando sintió que Yoongi estaba a punto de retirarse por completo de repente volvió a hundirse dentro de ella hasta tocar fondo.
Repitió esa acción una y otra vez, moviéndose dentro de ella con toda la calma del mundo, no entrecortado, sino que se deslizaba con una exquisita facilidad y T/n se dejó relajar debajo de él; intentando acompañar sus movimientos con sus caderas sintiendo como todo el placer comenzaba a consumir todos sus sentidos.
— ¿Se siente bien así? — Yoongi preguntó con su voz ahogada aún conteniendose y comenzando a marcar un ritmo lento y superficial, apretando su mandíbula y luchando por mantener el control.
— Mhm-hu… sigue Yoongi, sigue…— T/n gimió dulcemente esas palabras, rodeando su cintura con sus piernas aferrándose con fuerza a él, todo su cuerpo se agitó cuando sintió a Yoongi deslizarse hacia afuera y antes de salirse por completo la penetró en una firme estocada que la hizo retorcerse debajo de su cuerpo.— Oh, Dios…
— No, soy Min Yoongi.— Repitió socarron esas mismas palabras que había dicho antes ajustando sus manos en su cintura para darle estabilidad a sus nuevas penetraciones que se volvían mas firmes y acompasadas; empujando su cuerpo una y otra vez sobre la cama.
— Deja de decir eso, creo que se te esta subiendo a la cabeza.— T/n quiso amonestarlo pero lo terminó diciendo en medio de una sonrisa delicada que rápidamente se deformó en una mueca de placer al recibir otra rotunda embestida haciéndola arquear su espalda hacia él.
— Eres la única con la que me siento especial, T/n.— Yoongi murmuró acercándose nuevamente hacia su rostro, sosteniendo su mirada y T/n se sintió más que capaz de devolvérsela, los dos estaban igual de sumergidos en lo que sea que fuera esto, sabiendo muy bien que él también se había vuelto la única persona con la cual podía sentirse especial.
Un nuevo gemido brotó de los labios de ambos ante otra profunda penetración, los movimientos de Yoongi eran exactos y precisos, iban tomando cada segundo un ápice más de velocidad y T/n no podía hacer más que gimotear con cada nueva embestida que tocaba aquel punto especial dentro de ella, y es que todo era tan nuevo, tanto placer que no podía sostenerlo ella sola por mucho tiempo mas, todo el juego previo la había consumido, sus manos ansiosas subieron por su pecho hasta llegar a su cabello y jaló de él intentando llegar a sus labios y el mayor se dejó hacer, tomando una vez más el control del beso, mordiendo chupando su labio inferior, sus jadeos combinados con los de él junto a sus repetitivas penetraciones dentro y fuera parecían ser un impedimento para mantener sus labios unidos, pero no les importó.
T/n se sentía drogada, flotando en una nube de placer donde ni siquiera el sudor acumulandose su frente ni el calor abrumador que los envolvía se comparaban al placer latente que sentía en cada parte de su cuerpo, Yoongi se sentía tan bien dentro de ella, su pene la llenaba tan bien y tocaba todos los puntos correctos que solo la hacían gemir entre cada embestida, sus pieles ardían con cada bombeo constante mientras él seguía con sus duras embestidas que sacudían su cuerpo y que hacían que la cabecera de la cama chocara contra la pared una y otra vez, sintió a Yoongi apartar los mechones húmedos de su cabello fuera de su rostro antes de que su boca caliente volviera a devorarla con besos húmedos, comiéndose sus gemidos sin dejar de deslizarse dentro de ella cada vez más fuerte y salvaje, y es que él no estaba mejor que ella.
Estaba cerca, el inminente orgasmo estaba tocando la puerta, pidiendo salir cuando el cosquilleo y las vibraciones de su cuerpo hacían que sus estocadas se volvieran inestables y torpes, no podían culparlo, Yoongi simplemente no podía apartar la mirada de ella, de su cuerpo desnudo y cubierto de sudor debajo de él, de su rostro sonrojado, sus cejas fruncidas y sus labios entreabiertos dando bocanadas de aire entre cada beso hambriento y desesperado que le daba, podía sentir su interior apretándose imponente a su alrededor, podía sentir su cuerpo temblar con cada golpe de su pelvis dentro de ella. Habían estado sedientos durante semanas el uno por el otro, y sabía que se merecía esto y mucho más.
— Yoongi, estoy a punto de…— T/n lloriqueo cerrando sus ojos y apoyando su frente contra su hombro, abrazando su espalda y buscando un punto de apoyo sintiendo como el placer se volvió demasiado para su cuerpo.
— Si, bebé. Yo también. Córrete para mí, vamos…— Yoongi murmuró contra su oreja, dejando un rápido beso mientras aumentaba la velocidad de sus movimientos para alcanzar su placer también.
Y esa luz verde de su voz ronca y ansiosa fue suficiente para empujarla por completo a su orgasmo en medio de un fuerte y agudo gemido; sus piernas temblaron y su interior se apretó con fuerza contra su pene, jadeando ante la sensación tan deliciosa y placentera que llenó sus ojos de lágrimas mientras se aferraba a él con fuerza. A Yoongi solo le basbastaron otras tres penetraciones duras y profundas para derramarse dentro de ella; soltando una maldición entre dientes contra su cuello y un gemido aireado antes de dejarse caer sobre ella llenando el espacio solo con sus respiraciones densas y aceleradas mezclándose entre sí.
Con sus palpitaciones al mil y completamente jadeantes Yoongi trazó un camino de pequeños besos desde el hombro de T/n hacía arriba; pasando por su cuello, mejillas, hasta llegar a su boca, la punta de su lengua delineo sus labios para después soltar una sonrisa que se confundía con dulzura y travesura.
— Buena niña.— Farfulló divertido ensanchando su sonrisa al verla apartar su mirada de él completamente avergonzada, sin perder detalle de lo hermosa que lucía, incluso luego de su orgasmo, toda desalineada, jadeante y sonrojada, se veía preciosa a su ojos, y fue ese mismo descubrimiento el que lo hizo volver a buscar sus labios, más lento y suave esta vez solo para permitirse degustar su sabor una vez más.
El pequeño instante de paz fue abruptamente interrumpido con el sonido repentino y alarmante de un teléfono que se escuchó en la habitación; asustandola y haciéndola separarse de sus labios solo para ver a Yoongi apretar su mandíbula y murmurar una maldición mientras se separaba de ella haciéndola apretar sus labios ante su ausencia, y seguir sus movimientos mientras se recostaba a su lado para quitarse el condón.
— ¿No vas a contestar? — Preguntó por lo bajo removiendose sobre la cama
— No, no voy a contestar.— Yoongi respondió
— Pero, ¿y si es importante, o de tu trabajo…?— T/n volvió a insistir antes de que fuera interrumpida por su voz.
— Me importa una mierda si es del trabajo, no voy a contestar.— Yoongi espeto molesto girandose hacia ella; viendola sobresaltarse y mirarlo sorprendida ahogó un gruñido y se apresuró a subir de nuevo a la cama a su lado.— Escucha, T/n, yo… actúe como un idiota la vez que preguntaste si podíamos conocernos porque no quería perder mi trabajo, tengo esta regla donde no puedo tener ninguna relación con algun cliente y…
— Esa es una regla estupida.— T/n lo interrumpió con esas palabras, haciéndolo reír levemente.
— Sé que lo es, y yo pensé que quería eso, pero cuando no podía dejar de pensar en ti supe que lo que realmente quería era estar contigo, quiero estar contigo, no me importa que me despidan…
— Pero… es tu trabajo, no dejaré que te despidan por mi…
— No me importa, me di cuenta de que tú vales mas que ese trabajo y ese jodido dinero.— Yoongi volvió a asegurar con voz firme y sin dudar mientras acunaba su rostro con sus manos, casi perdiendose en sus ojos.— Quiero que empecemos de nuevo, que nos conozcamos, que vayamos a citas y hagamos todas esas cosas cursis y que no se quede solo como una llamada accidental de sexo telefónico entre nosotros.— agregó sin dejar de mirarla notando su sonrisa avergonzada ante el recuerdo haciéndolo sonreír también.— Estoy hablando enserio, quiero estar contigo T/n.
Y eso una vez mas demostro cuando podían afectarle sus palabras, solo que esta vez no eran vulgares ni lascivas, eran suaves y sinceras, y solo le revelaron algo que ella también sentía, quería estar con él, con nadie más.
— Me habías dicho que no eras romántico…— T/n habló con calma; mirándolo con ilusión y solo ganándose una sonrisa ladina de Yoongi sintiéndolo ajustar sus manos en su cintura para mimar su piel con calma.
— Cariño, te di un beso esquimal mientras estaba duro, por supuesto que puedo ser romantico.— Yoongi farfulló divertido sonriendo genuinamente cuando escuchó a T/n reír ante sus palabras, haciéndolo arrastrar sus manos por su cuerpo hasta llegar a su rostro para poder besarla una vez más.
Se volvió a adueñar de sus labios con puro fervor, ronroneando de gusto al sentirla enredar sus dedos en su cabello mientras se aferraba a él; invitándolo a besarla con más entusiasmo cuando el molesto sonido del teléfono volvió a escucharse, pero tampoco les importó mucho que digamos.
*Unas semanas después*
— Bebé…— La voz de Yoongi se escuchó desde el otro lado de la cocina, haciéndola dejar de hacer lo que sea que estuviera haciendo con lo siguiente que dijo.— ¡Tenemos nuestro primer suscriptor!
T/n rápidamente corrió hacia donde Yoongi estaba sentado en el taburete para mirar por encima de su hombro, con su cabello aún goteando y la toalla apenas envuelta alrededor de su cuerpo.
Después de que Yoongi dejó su trabajo y que decidieron mudarse juntos, ustedes dos habían encontrado una manera de ganar dinero juntos y divertirse mientras lo hacían, así que lo vio abrir la aplicación de OnlyFans en su teléfono y leer el nombre de la primera persona que amablemente se suscribió a su cuenta compartida.
— Jeon... Jungkook.
Ese nombre sonaba familiar.
— Wow, me pregunto cómo se topó con nuestra cuenta.— Yoongi reflexionó mientras la tomaba por sus brazos para acercarla a él y darle un pequeño beso.
T/n apenas y respondió, quedándose inmóvil en puro desconcierto, probablemente luciendo tan ridícula con la boca abierta y con el cuerpo cubierto de gotas de agua. ¿Podría ser él?
— ¿Qué estás pensando, bebé? — Yoongi preguntó mirándola con cuidado
— Nada, nada…— T/n respondió negando con su cabeza y arrojando ese pensamiento al fondo de su mente.— Supongo que será mejor que hagamos más contenido ahora, ¿no lo crees?
Y Yoongi simplemente sonrió ante eso, dejando su teléfono en el mostrador para poder envolver sus brazos en su cintura y abrazarla, sin importarle mucho que su camisa se estuviera humedeciendo con su cabello.— ¿Estás emocionada?
— ¿Por trabajar contigo? — T/n preguntó girándose hacia él y sonriendo de la misma forma antes de inclinarse y volver a besarlo.— Por supuesto, bebé.
————————————————————————
N/A: ¿Alguien más aparte de mi necesitaba que estos dos se comieran de una buena vez? Lo siento pero yo ya no podía con la tensión que se tenían
Espero que hayan disfrutado mucho de esta pequeña historia y que les haya gustado igual o más que la primera vez que la leyeron
Gracias por todo su apoyo titis ♡
taglist: @guvgguk @lessuwu @cometaart @AnnieKCV @darysnowflwr @nunubly @choco-linny @wtffktt7 @minmin-cat @18fernanda @ariggukie @Katherine Murillo @lizxz @onixbae02 @piligt @youtis @tessacereza @aavacaf @holiwui032
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Queridos mutuals, necesito de vuestros sabios consejos..
El caso es que hoy he conocido a la persona que estará de prácticas en la empresa y más concretamente, conmigo durante las próximas 3 semanas.
Todo bien, la parte teórica se la sabe como el abecedario, muy maja, muy dispuesta.. peeeero, porque siempre hay un pero………
Se pasa el día masticando con la boca abierta, mastica chicle con la boca abierta, a la hora de comer (ya me lo ha dicho mi jefe) mastica con la boca abierta.. uuuuffff y yo lo paso mal con eso, es algo que me puede y me pone de mala leche.
No soporto a la gente que come así o los que hacen muuucho ruido al comer
La pregunta es..
Pues eso, espero vuestra ayuda
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Peleando con demonios (dejar la carrera para que nadie juegue esto en el festival)
Otro dia, otra vez las ganas de cambiar todo de este juego de mierda
#encima cambie un par de cosas asi q si o si voy a tener q estar ahi al lado porq entrego stickers#i mean iba a tener q estar cerca para controlar q este todo ok igual pero al menos podia fingir demencia#ahora tengo q prestar atencion asi se q tengo que dar de regalo#esto se resolveria haciendo que algun amigue lo juegue y/o me ayude con la historia lo se#pero consideraron esto? (si alguien que conozco lo ve me muero)#el otro dia mis facuamigas se quejaban q nunca pido ayuda un carajo 😭 asi q pedi opiniones para un fondo a regañadientes#(q necesitaba bastante y aprecio pero pedir ayuda se siente como una puñalada aksksksllsll)#haunted.txt
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Propaganda:
Peter Parker
-Spiderman. ya sabés
-Spiderman (Peter Parker). Por vibes y porque en cada maldita esquina de Latinoamérica hay un tipo vestido de spiderman. Qué sería de nosotres sin él
-El hombre araña, literal no hay trencito de la alegría o pelotero donde no aparezca, no importa la edad si le preguntas a alguien por un superhéroe te lo van mencionar. Es básicamente como Goku pero de cómics, hay publicidades y graffitis de él por todos lados, vas a una parrilla y lo tenés ahí pintado al spiderman en un pared preparando unos choris. Tenemos canónicamente? nuestro propio hombre araña (Julián 💙) y tengo fotos de un hombre araña con la camiseta de la selección festejando sobre un camión. (Disclaimer soy argentina 😅)
-Peter parker de Ultimate Spiderman 2012 por que NO DEJO DE VER UNA PROPAGANDA DE BELDENT CON SU ACTOR DE VOZ. TODO EL CAST DE DOBLAJE DE USM ES ARGENTINO Y ME ATORMENTA.
-homem-aranha, tem forte presença no carnaval de rua brasilero e claramente sabe dançar funk
Heidi
-HEIDI dios como nadie a dicho a heidi ella es del norte de chile lo juro me dojo mi abuela
-HEIDI, HEIDI DEL ANIME HEIDI, ABUELITO DIME TU LO QUE DICE EL VIENTO EN SU CANCIÓN ABUELITO DIME TÚ POR QUÉ YO SOY TAN FELIZ, CÓMO TAN POCA CULTURA CARAJO SE OLVIDARON DE SUS RAÍCES? TENGO QUE HACER TODO EN ESTA CASA? VOY CONTIGO HEIDI SI 1000 ESTÁN CONTIGO YO ESTOY CON ELLOS SI NADIE ESTÁ CONTIGO ASUMAN QUE HE MUERTO PORQUE NACÍ CON HEIDI Y MUERO CON HEIDI
-Todo el cast de Heidi, particularmente Pedrito. Tanto por el impacto en Latinoamérica como por el estilo de vida que llevan
-Heidi, yo creo que tiene el mismo derecho de antigüedad que candy y saint seiya, fue una base importante del anime en Latinoamérica.
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modern! aemond targaryen x autistic! reader
• Al comienzo de la relación, solía tomar de mala manera muchas de tus preguntas o comentarios, sin agradarle la forma o el "tono" en que las hacías, ahora conociéndote un poco mejor, cada que lo siente indaga un poco más antes de responder.
• En el caso de que necesites ser contenida, estará más que feliz de abrazarte en la forma en la que prefieras, apretandote con fuerza contra él mientras te calmas.
• Siempre tiene consigo un pequeño kit de costura que guarda en su auto, su bolso o algún bolsillo por si acaso se te olvida quitarle la etiqueta a alguna prenda o tienes alguna costura o etiqueta que no notaste que era molesta hasta que te la pusiste.
• Tiene para ti cualquier bebida, golosina o comida que te agrade. Incluso si tienes momentos en los que solo quieres comer una sola cosa, él la conseguirá para ti.
• En el caso de que pases tiempo en su casa, siempre tendrá para ti platos, vasos y cubiertos que puedas usar sin molestia (grandes, pequeños, pesados o ligeros) así como luces que no lastimen tus ojos o telas en los muebles que no te hagan querer arrancarte la piel con un pelador de papas. (ese capaz fue muy específico)
• Por desgracia, comparte cierta parte del grupo de amigos que tiene con Aegon, por lo que en las reuniones que tienen, si asistes tu, él tendrá pequeños juguetes que puedas tener en la mano, tapones para oídos si no quieres llevar tus auriculares o arreglará la juntada en un lugar donde puedas recurrir a un espacio alejado más calmado y sin tanta gente.
• Con él no hay ningún: "es que me da vergüenza..." ES UNA HERRAMIENTA QUE TE AYUDA A DESENVOLVERTE MEJOR EN EL DÍA A DÍA, MANDARÁ AL CARAJO A QUIÉN TE DIGA ALGO.
• Nunca fue mucho de las mascotas más allá de una vieja gata llamada Vhagar que tuvo de niño, pero si tienes algún animal de apoyo estará bien con recibirlo.
• No te lleva a muchas de sus reuniones familiares; Aegon no es muy comprensivo sobre tu sensibilidad auditiva y su madre, al igual que hace con Helaena, tiende a infantilizarte o hablarte lento como si tuvieras algún retraso. Aemond siempre trata de corregir ciertas cosas, brindando la información a la que pudo acceder, pero hasta que eso cambie no te expondrá a eso si no lo deseas.
• "Perdón, sé que vimos está película muchas veces, pero es que..." está bien, él está entretenido viéndote a ti repetir los diálogos y escuchar esa risa bonita en respuesta al mismo chiste que escuchó docenas de veces.
• "Sabías que..." no, él no sabía, dile más. Ama sobre todo cuando le das datos que aprendiste de un tema que a él le gusta para contárselo después.
• Explica lo que necesitas saber sobre ciertas normas sociales no escritas que no puedes entender, aunque siempre termina siendo él quien se replantea esas cosas porque la forma en la que tu explicas tu razonamiento es más lógico que lo suyo.
• Tiene mucho dinero propio y aún más si suma lo que sus padres depositan en una cuenta de banco separada para él, por lo que cualquier cosa del tema que te interese él la comprara para ti; ya sean peluches, ropa, maquillaje, pósters, figuras de acción, stickers, lo que sea.
• En el caso de que hayas tenido alguna mala relación antes, está decidido a expresar abiertamente cuánto ama la forma en la que eres, ya sea guardando en una cajita de madera bien decorada cualquier piedrita, hojita, hilito o botón que le hayas dado o agradeciendo tus actos de servicio.
• Si pasas por momentos de mutismo selectivo, él se ofrecería a hacerte tarjetas.
• Siempre va a intentar que seas más abierta sobre la forma en la que disfrutas que te quieran, ¿qué tipo de toques te agradan más? ¿suaves, bruscos? ¿hay alguna zona que no pueda acariciar? ¿cabello, manos, mejillas? dile, él quiere aprender.
#modern!aemond oneshot#aemond targaryen#house of the dragon#aemond targaryen x reader#aemond targaryen oneshot#ewan mitchell#aemond one eye#hotd aemond#prince aemond targaryen#la casa del dragón#hotd one shot#aemond x you#aemond x fem!reader#aemond targaryen x female reader
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HANGOVER
PAIRING: logan howlett x female reader (18+)
RATING: explicit smut | WORD COUNT: 4.1 K
Summary: Cuando Logan es enviado al pasado para evitar el apocalíptico futuro de los Centinelas, despierta en una habitación desconocida con una chica atractiva a su lado. Sin saber quién es al principio, los recuerdos de la noche anterior comienzan a llegar lentamente, recordándole los detalles de una intensa y memorable noche. A medida que las piezas encajan, Logan revive los momentos de pasión que compartió con ella, aceptando su naturaleza impulsiva y sin remordimientos, mientras enfrenta las consecuencias de la nueva realidad en la que se encuentra.
WARNINGS/TAGS: logan´s pov, pure smut - mdni 18+ slight dom/sub, drinking, reader has red hair dirty talk, anger!logan x sarcastic!reader, cigar smoking, age gap (27 vs 200), oral sex, fingering, finger sucking, unprotected piv, creampie, spanking
...
1973, New York.
No debería estar aquí. No se donde estoy.
El dolor en mi cabeza me lo confirma. Mi cuerpo, entumecido, me recuerda cada copa que algo paso anoche, pero el verdadero problema no es la mi dolor. Es ella. Está a mi lado, aún dormida, quien carajos es aquella linda chica que está conmigo.
Hasta que el dolor de mi cabeza comienza a bombardearme de una manera constante.
Lo recuerdo. Recuerdo cómo comenzó la noche anterior. Todo estaba bajo control. Las luces del bar parpadeaban mientras ella se reía, relajada, ignorando la preocupación en mi cabeza. No era la primera vez que me pedían que cuidara de alguien, pero esta vez se sentía diferente. El jefe confía en mí. Eso debería ser suficiente para mantenerme alejado de situaciones como esta.
Pero entonces vino la segunda copa. Y la tercera.
"Estás tenso, Logan" me dijo ella, con una sonrisa tan inocente que me hizo dudar por un segundo. Pero solo por un segundo. El alcohol no hizo más que borrar las líneas que había jurado no cruzar.
No soy el tipo de hombre que se deja llevar fácilmente. Sabes lo que haces, sabes lo que quieres, y anoche no fue distinto. Necesitaba despejarme, desconectar de toda la mierda que traigo encima. Lo último que esperaba era que termináramos aquí, pero... ella estaba tan malditamente hermosa. No me lo voy a negar ni a mí mismo. La vi, con esos shorts vaqueros que se ceñían a su cuerpo de una forma casi insultante, el cabello despeinado y esa sonrisa ladeada, y todo en mí gritaba que no me metiera en problemas.
Pero a veces, los problemas son lo único que parece real.
Habíamos tenido nuestros roces antes. Miradas que duraban demasiado, palabras que se quedaban en el aire. No había que ser un genio para notar la tensión. Una vez me tomó del brazo en la cocina del jefe, solo para hablarme de cualquier tontería, pero la forma en que me miraba me decía otra cosa. Siempre había algo, pero por una razón u otra, nunca llegaba a nada. Algún amigo de su padre entraba a la habitación, una llamada urgente, cualquier excusa del destino para interrumpirnos.
Anoche, no hubo interrupciones. No esta vez.
"Vamos, log ¿No puedes relajarte ni por una noche?" su tono era juguetón, pero había algo más detrás de esas palabras. Me desafiaba. Sabía lo que hacía.
El whisky ayudó a bajar las defensas, y no necesité mucho más para saber lo que venía después. Lo necesitaba. No solo la bebida, no solo un escape temporal. Necesitaba sentirme vivo, aunque fuera por unas horas. Y ella... joder, ella lo sabía. Sus ojos oscuros me atrapaban y, en ese momento.
Ya no se trataba de control. Se trataba de perderlo.
La música del bar es fuerte, el lugar está abarrotado, pero entre toda esa gente, ella es lo único que veo. Está sentada frente a mí, jugando con el vaso en sus manos. Esa sonrisa traviesa no se ha ido desde que nos sentamos. Intento concentrarme en cualquier otra cosa, pero esos shorts de jean y la forma en que su pierna roza la mía cada vez que se inclina hacia adelante no ayudan.
"¿Qué pasa, Logan?" pregunta, alzando una ceja mientras bebe otro sorbo. Sus ojos se clavan en los míos, desafiantes. Juega conmigo, pero ya no sé si quiere ganar o perder.
"Nada que no pueda manejar" respondo con una media sonrisa, llevándome el vaso a los labios. El whisky baja como fuego, quemando lo poco que quedaba de autocontrol. No debería estar aquí. No con ella. Y menos así, cuando ni siquiera tengo claro cómo acabamos en este lugar.
"¿Seguro?" se inclina un poco más, y la distancia entre nosotros se acorta peligrosamente. Su perfume me golpea, dulce pero con ese toque embriagador que me deja más perdido de lo que ya estoy.
No contesto. No hace falta. La forma en que la miro lo dice todo, y ella lo sabe. La tensión ha estado ahí desde hace tiempo. En cada maldito encuentro, en cada vez que su mano rozaba la mía o su mirada se quedaba un segundo de más. Siempre había algo, pero las reglas nunca nos dejaban pasar del límite. Hasta ahora.
"Siempre tan en control..." dice, casi burlándose. Se muerde el labio mientras me mira, y eso es todo. Pierdo la batalla.
"¿Es eso lo que piensas?" mi tono es más bajo, y sé que estoy cruzando una línea de la que no voy a volver.
"Creo que debajo de toda esa actitud fría... necesitas un respiro." Su sonrisa se ensancha, y por un segundo, todo parece demasiado claro.
La tomo de la muñeca suavemente, apenas un roce, pero suficiente para que sepa que estoy cayendo. Ella no se aparta, al contrario, se inclina un poco más hacia mí. Cada palabra, cada gesto, cada maldita mirada nos ha llevado hasta aquí.
"Tal vez tienes razón" murmuro, casi para mí mismo.
La noche sigue, pero los detalles comienzan a difuminarse. Copas vacías se apilan en la mesa, las luces del bar se vuelven más tenues, y antes de darme cuenta, estamos saliendo. Su risa se mezcla con el ruido de la ciudad, y mis pensamientos son un caos. Solo sé una cosa con certeza: la distancia que solíamos mantener se ha evaporado.
Llegamos a la habitación sin decir una palabra. Ninguno de los dos necesita hablar. Mi mente me grita que me detenga, que piense en lo que esto significa, pero su cuerpo, su piel contra la mía, lo borra todo.
La noche avanza, y en ese momento, no pienso en las responsabilidades. Solo nosotros dos, y lo que siempre había estado a punto de suceder.
La puerta se cierra detrás de nosotros, y la habitación queda bañada en un suave resplandor. Su risa se convierte en un eco lejano mientras me acerco, la adrenalina y el alcohol corriendo por mis venas. La miro, y en ese instante, el mundo se reduce a su figura: el contorno de su cuerpo, la forma en que se marcan sus curvas, y la manera en que su cabello cae desordenadamente sobre su rostro.
"No puedes seguir así, Logan." Su voz es un susurro desafiante, pero su mirada arde con deseo.
"¿Así? ¿Cómo?" la desafío, acercándome un poco más, disfrutando del pequeño titubeo en su voz. El juego que hemos estado haciendo toda la noche ha llevado esto a un nivel que ni yo esperaba, pero aquí estamos. Ambos jugando al borde.
"Mirandome como si fuera un maldito trofeo, lo haces muy obvio, cariñi" Su tono es juguetón, pero hay una seriedad en su mirada que me hace querer más.
"Es la verdad, eres un maldito trofeo, nena" respondo, sin quitarle los ojos de encima.
Cuando sus labios se curvan en una sonrisa, siento que mi autocontrol se desmorona. No hay más espacio para las dudas, no cuando ella da un paso hacia mí, el roce de su cuerpo contra el mío me deja sin aliento. La quiero. Y eso es un hecho que he ignorado un tiempo.
La atracción es eléctrica, y antes de que pueda pensar en las consecuencias, la empujo suavemente contra la pared. Ella ríe, pero es un sonido lleno de seducción, un eco que me invita a seguir adelante.
"Siempre quise ver cómo eras en realidad "dice, sus ojos brillando con un desafío. Se acerca, su pecho tocando el mío y sus manos bajando lentamente por mi nuca hasta llegar a mis claviculas queriendo provocarme.
"¿Y cómo es eso?" le pregunto, inclinándome hacia ella, haciendo que nuestras respiraciones se mezclen, envolviendonos como si fuéramos uno. La tensión entre nosotros es mas que palpable.
"Despiadado." La forma en que pronuncia la palabra me hace estremecer. Es un reto y un deseo envuelto en una sola frase.
Y entonces, sin pensar más, la beso. La conexión es instantánea, una explosión de sensaciones. Sus labios son suaves y ardientes, y el sabor del whisky aún está en su boca. Se aferra de vuelta a mi cuello, y la forma en que responde a cada toque, cada caricia, me hace perderme en ella.
Ambos sabemos lo que estamos haciendo, y no hay lugar para la culpa. Nos estamos entregando a algo que hemos estado evitando durante demasiado tiempo. El roce de su piel contra la mía me quema, y no puedo evitar explorar cada rincón, cada curva. Ella se mueve, provocando, dejando que mis manos recorran su cuerpo.
"Así que... ¿ahora somos solo diversión?" pregunta, con un tono que desafía cualquier intento de que esto sea solo un momento pasajero.
"Divertido sería un eufemismo"
La besé con intensidad, y mientras nuestros labios se encontraban, el mundo exterior se desvanecía. Pero cuando finalmente me separé de ella, su risa ligera y traviesa rompió la tensión.
"¿Divertido sería un eufemismo?" me repitió, sus ojos brillando con picardía.
"Uhm, si, princesa." Había algo en su energía que me atrapaba.
"Vaya, entonces, ¿soy solo tu diversión por esta noche?" dijo, con un toque de desafío en su voz.
"Podemos hacer que no sea solo esta noche ¿no?" respondí, con tono juguetón, alzando una ceja mientras me acercaba más.
Ella se rió, un sonido que llenó la habitación. La forma en que se reía y me lanzaba esa mirada provocativa me hacía sentir una mezcla de admiración y deseo. Ella estaba aquí, tan cerca, con una confianza que me derritía.
"Te sorprenderías de lo que puedo manejar" le dije, acercándome de nuevo, sintiendo la chispa entre nosotros encenderse otra vez.
"Entonces, ¿qué esperas?" preguntó, con esa voz seductora mientras se inclinaba hacia mí, invitándome a cruzar la línea una vez más.
Sin decir una palabra más mis manos fueron por su espalda llegando hasta su cintura y atrayéndola hacia mí, sintiendo su cuerpo responder a cada uno de mis movimientos. No había más palabras. El murmullo de la noche nos envolvía mientras nos entregábamos el uno al otro.
Tomé su cintura con firmeza y la empujé, empotrándola contra la pared. La sorpresa en sus ojos fue reemplazada rápidamente por un deseo ardiente que reflejaba el mío. Estaba tan cerca de ella, podía sentir su respiración acelerada, y eso solo encendió la chispa dentro de mí.
"Eres tan deseable" le susurré, mi voz baja y áspera, mientras la miraba de cerca.
Sin darle tiempo a responder, empecé a recorrer su piel con mis manos, sintiendo la suavidad de su cuerpo bajo mis dedos. Gruñí suavemente, un sonido primal que resonó en la habitación, y me incliné para besar su cuello, sintiendo su pulso latir más rápido.
Ella arqueó su espalda, presionándose contra mí, provocando cada vez más ese fuego dentro de mí. Sin darle tiempo a responder, le quité la camiseta con un movimiento decidido, dejando su piel expuesta ante mí. Mis manos encontraron su piel, deslizando mis dedos sobre sus senos, sintiéndolos entre mis manos. Ella se arqueó hacia adelante, empujando su pecho contra mí, como si estuviera pidiéndome más.
"¿Te gusta esto?" pregunté, sintiendo su cuerpo temblar bajo mi toque. "Más de lo que te imaginas," respondió, su voz un susurro lleno de deseo.
Aumenté la presión de mis manos, acorralándola contra la pared mientras me acercaba más, asegurándome de que no hubiera espacio entre nosotros. La miré a los ojos, sintiendo la intensidad del momento, y ella me devolvió la mirada con una mezcla de desafío y anhelo.
"Voy a mostrarte exactamente lo que quiero," Ella cerró los ojos, disfrutando de cada caricia, y eso solo avivó el fuego dentro de mí. Bese su cuello con intensidad, dejando un rastro de besos y mordiscos que hacían que su cuerpo temblara. Gruñidos de placer escapaban de mis labios mientras la sentía responder a cada movimiento mío.
Mis manos descendieron lentamente hacia su trasero, ese que resaltaba de manera perfecta en los shorts ajustados que llevaba. No pude resistirme; lo agarré con fuerza, sintiendo su suavidad y la firmeza de su cuerpo. Ella soltó un jadeo, la reacción que tanto deseaba escuchar.
Sin pensarlo dos veces, la levanté, y sus piernas se enroscaron alrededor de mi cintura. El contacto era electrizante. Me froté contra ella, buscando ese roce que tanto ansiaba. Su cuerpo se movía al ritmo de mis movimientos, y cada roce provocaba un nuevo suspiro de su parte.
Mientras mis caderas se movían contra las suyas, el sonido de su respiración se hacía más intenso, más ansioso. Cada presión, cada fricción era un recordatorio de lo que ambos queríamos, lo que habíamos esperado tanto tiempo.
La habitación estaba llena de un deseo palpable, y me dejé llevar por la necesidad, dejando que cada caricia, cada roce hablara por sí mismo. Ella se aferraba a mí, y su respuesta me decía que estábamos en la misma sintonía, ansiosos por explorar lo que esta noche aún tenía reservado.
Cada movimiento era una danza entre la urgencia y el deseo. La habitación, iluminada solo por la tenue luz de la calle, se llenaba con nuestros susurros y los suaves golpes de nuestros cuerpos entrelazados. Mis manos seguían explorando, sintiendo la curva de su espalda, el contorno de su trasero, mientras ella se aferraba a mi cuello, sus dedos enredándose en mi cabello.
El ritmo de nuestras respiraciones se sincronizaba, cada jadeo y suspiro se convertía en un lenguaje propio, uno que hablaba de anhelos y promesas no dichas. La presión de su cuerpo contra el mío era intoxicante. Podía sentir su calor, su piel suave, y eso solo intensificaba la necesidad de tenerla más cerca, de perderme en ella.
La miré a los ojos, viéndolos brillar con una mezcla de deseo y desafío, y me incliné para capturar sus labios de nuevo. Este beso era diferente, más profundo, cargado de la urgencia que ambos sentíamos. Sus piernas se aferraban a mí con más fuerza, y mis manos no se detenían, explorando su cuerpo con una desesperación que no podía contener.
Pero entonces, el momento se volvió más borroso. La siguiente imagen que aparece es la cama, nuestras ropas dispersas por el suelo, y yo inclinado sobre ella. Mis manos recorren sus piernas, separándolas lentamente mientras me posiciono entre ellas. Sus labios entreabiertos dejaban escapar un suave suspiro, su cuerpo entregándose completamente. Mis dedos la tomaban con firmeza, y el calor entre nosotros era casi insoportable. Estaba perdido, completamente rendido a ella.
No esperé más. El deseo me consumía, y la necesidad de sentirla completamente era innegable. Mi lengua comenzó a recorrer su vulva con un movimiento lento, explorando cada centímetro de sus labios mayores, y luego deslizando hasta los menores. Podía sentir cómo su cuerpo respondía a cada roce, sus caderas levantándose ligeramente, buscando más contacto.
Me detuve un segundo, solo para escuchar su jadeo entrecortado antes de que mi lengua encontrara su clítoris. Lo rodeé con suavidad, aumentando la presión poco a poco. Su respiración se volvió más rápida, más pesada, mientras sus dedos se aferraban a las sábanas. La sensación de control y de saber que estaba llevándola al límite me encendía aún más. Mi músculo jugaba con su órgano placentero, alternando entre caricias suaves y presiones más intensas, disfrutando de cada respuesta de su cuerpo.
Ella jadeaba mi nombre entre susurros, y cada sonido que hacía me incitaba a continuar, a no detenerme hasta que su cuerpo se rindiera por completo.
Mis manos se deslizaron hacia sus muslos, acariciando su piel caliente antes de apretarlos con fuerza, provocando un leve temblor en su cuerpo. No me detuve ahí; mis dedos alternaban entre suaves caricias y pequeños golpes, justo lo suficiente para hacerla gemir un poco más fuerte. Levanté la vista un instante, viendo su expresión, completamente perdida en la sensación.
"¿Te gusta, nena?", le pregunté con voz ronca, sin dejar de mover mi lengua sobre su clítoris, sintiendo cómo su cuerpo reaccionaba aún más a cada palabra, a cada roce.
Ella respondió con un jadeo entrecortado, apenas capaz de formar palabras, lo que me arrancó una sonrisa. "Así me gusta..." murmuré, mientras seguía estimulándola, disfrutando de cómo sus caderas se movían al ritmo de mi lengua, de cómo se rendía al placer.
Mis manos seguían recorriendo sus muslos, apretándolos con más fuerza cada vez que sus gemidos se hacían más intensos. Estaba completamente entregada, y yo, perdido en el deseo de hacerla llegar al límite. Pero no iba a dejar que eso pase.
Dejé de estimularla justo cuando sus gemidos alcanzaban su punto más alto, sacando mi lengua de su clítoris de manera repentina. El sonido de su respiración agitada llenaba la habitación mientras me deslizaba sobre ella, inclinándome hacia su rostro sin darle tiempo para recuperar el aliento. Sin aviso, capturé sus labios en un beso profundo, posesivo, sintiendo cómo me respondía de inmediato.
En medio de ese beso, mi mano bajó entre sus piernas, y sin previo aviso, metí dos dedos dentro de ella, profundizando el contacto. Su cuerpo se arqueó bajo el mío, y sus uñas se clavaron en mi espalda. El calor de su interior, el sonido de su jadeo atrapado entre nuestros labios, me volvía loco. No le di tregua, mis dedos entrando y saliendo de ella con firmeza, al mismo ritmo que mi lengua exploraba su boca, como si ambos movimientos fueran una sola cosa.
La escuché gemir contra mis labios, y eso solo aumentaba mi deseo de seguir llevándola más allá, de sentir cómo su cuerpo respondía con cada embestida de mis dedos.
Mis dedos se movían con más rapidez dentro de ella, sintiendo cómo sus paredes se cerraban alrededor, completamente entregada. Cada vez que arqueaba su espalda, cada vez que sus jadeos se hacían más intensos, solo me impulsaba a ir más fuerte. Su cuerpo reaccionaba a cada embestida de mis dedos, y el sonido de su respiración desesperada llenaba el cuarto.
"Por favor…" jadeó, apenas siendo capaz de formar las palabras.
Me detuve un segundo, mis dedos aún dentro de ella, pero sin moverme, provocando que soltara un gemido frustrado. La miré a los ojos con una sonrisa burlona. "¿Por favor qué, pequeña?" murmuré, mi voz ronca y desafiante. "Pídelo… vamos."
Su respuesta fue inmediata, sin dudar ni un segundo. "Fóllame de una vez."
Esa súplica me arrancó una sonrisa satisfecha. "Eso quería oír…" Le di un beso rápido y profundo antes de retirar mis dedos, y sin darle más tiempo, me coloqué entre sus piernas y tomando mi extensión, la penetréme adentre a ella con una sola estocada y lo que salió de sus labios fue todo lo que necesitaba para saber que no había nada que ambos deseáramos más en ese momento.
Mi cuerpo se movía con fuerza, rítmico y firme, mis manos aferrándose a sus caderas mientras la embestía con todo lo que tenía. El cuarto se llenaba con el sonido de nuestras respiraciones mezcladas, su piel contra la mía, cada movimiento una promesa de que esa noche estaba hecha para perderse el uno en el otro.
Follarla se sentía como un maldito vicio, uno del que no quería ni podía escapar. Cada vez que me enterraba más en ella, sentía cómo su cuerpo me recibía con una mezcla de desesperación y deseo. Era adictivo, la manera en que se arqueaba contra mí, cómo sus uñas se clavaban en mi piel mientras me pedía más sin palabras. Su calor, su suavidad… joder, todo en ella me volvía loco.
Era como si cada embestida me conectara más con algo primitivo, algo que hacía que cada parte de mí gritara por tomarla, por perderme completamente en su cuerpo. Cada vez que me hundía en ella, más fuerte, más rápido, sentía esa satisfacción visceral, el placer de hacerla mía, de sentir sus piernas apretarse alrededor de mi cintura mientras se aferraba a mí como si yo fuera lo único que la mantenía en el maldito planeta.
No había nada más en ese momento. Solo el sonido de su respiración entrecortada, el latido frenético de mi corazón y el placer de estar dentro de ella.
Todo era puro instinto, cada movimiento guiado por la urgencia de sentir más. Sin embargo, antes de que pudiera procesarlo, ella me empujó hacia atrás, haciéndome girar hasta quedar de espaldas en la cama. No le di resistencia; al contrario, me encantaba verla tomar el control. Se colocó encima de mí con una sonrisa desafiante, esos malditos ojos llenos de deseo mientras sus manos recorrían mi pecho.
Se hundió en mi polla de golpe, y ambos dejamos escapar un gemido. Su ritmo era frenético, sus caderas moviéndose contra mí con una fuerza que me volvía loco. Podía sentir cada centímetro de ella apretándome, y mis manos volaron a sus caderas, guiándola, mientras mis ojos no podían apartarse de su cuerpo moviéndose sobre mí.
"Joder, Logan…" gemía ella, su voz entrecortada por el placer. "Oh, sí… así…"
Sus manos se aferraban a mi pecho, buscando apoyo mientras cabalgaba sobre mí, y cada vez que soltaba un "oh, sí" o un "joder", sentía cómo la tensión dentro de mí se apretaba más. El sonido de nuestros cuerpos chocando, de sus jadeos, de sus gemidos, hacía que todo el cuarto pareciera temblar. Verla perderse en el placer, cabalgándome sin freno, hacía que cualquier control que me quedara se desvaneciera.
Cada vez que sus caderas se movían sobre mí, no podía apartar la vista de su pecho rebotando con cada movimiento. Era una imagen que me quemaba la mente, imposible de ignorar. No pude evitarlo. Mis manos volaron hasta sus pechos, tomándolos con fuerza, apretando sin lastimarla, simplemente disfrutando de la sensación de tenerla completamente en mis manos mientras seguía cabalgando sobre mí.
Ella dejó escapar un gemido más alto cuando mis dedos apretaron sus pezones, y ese sonido fue suficiente para marcarlo todo en mi memoria. Verla así, tan entregada, con su cabello desordenado, sus labios entreabiertos y su mirada llena de deseo… era una imagen que sabía que no iba a olvidar jamás.
Sus gemidos se hicieron más intensos, sus movimientos más frenéticos. "Logan… estoy cerca," jadeó entre respiraciones entrecortadas, sus ojos brillando con una mezcla de placer y desesperación. El ritmo de sus caderas era caótico, imparable, y yo también sentía esa tensión acumulándose en mí, apretando cada músculo como una maldita tormenta a punto de explotar.
Mis manos seguían aferradas a sus pechos, pero la necesidad de perderme en ella me hizo llevarlas de nuevo a sus caderas, guiándola, empujándola más fuerte contra mí. "Joder… yo también," gruñí entre dientes, sintiendo cómo el control se me escapaba, cómo cada embestida me llevaba más cerca del borde.
Un último gemido escapó de sus labios cuando se arqueó sobre mí, su cuerpo temblando mientras el orgasmo la sacudía. La sensación de tenerla apretándome, su calor rodeándome por completo, fue lo que me empujó al límite. Solté un gruñido bajo mientras me liberaba dentro de ella, sintiendo cómo mi cuerpo se rendía al placer.
La llené por completo, cada segundo prolongándose en un torbellino de sensaciones. Ambos nos quedamos jadeando, con nuestros cuerpos entrelazados, disfrutando del caos que habíamos creado juntos.
Cuando finalmente el placer se desvaneció, ella cayó sobre mi pecho, agotada. La abracé, moviendo su cuerpo a mi lado para envolverla con la manta, sintiendo su calor contra mi piel. La habitación, aún impregnada de nuestro encuentro, parecía más tranquila ahora, como si el mundo exterior hubiera desaparecido.
Podía ver lo exhausta que estaba, con el cabello desordenado cayendo sobre su frente. Era un desorden hermoso, una mezcla de cansancio y satisfacción que me hizo sonreír. La acurruqué más cerca, disfrutando de la suavidad de su piel contra la mía. En ese momento, con ella en mis brazos, todo lo demás parecía irrelevante.
Pero el golpe de la realidad llegó como una patada en el estómago. Sintiendo un dolor punzante en la cabeza, y todo lo que había pasado la noche anterior regresó a mi mente en un torrente. Me incorporé rápidamente, sosteniéndome la cabeza con una mano mientras trataba de recordar cada detalle. La habitación seguía en penumbra, pero el eco de sus gemidos resonaba en mis oídos, la imagen de ella cayendo sobre mí aún fresca.
Me dirigí al espejo. Observando mi rostro cansado y despeinado, pero joven, mucho mas joven. Mirando mi reflejo, una sonrisa sardónica se dibujó en mis labios. Después de todo, había algo liberador en la locura de la noche anterior. Claro, era un enredo, y la realidad de la situación pesaba en mi mente, pero el recuerdo de su risa, su piel contra la mía y la forma en que me miraba.
Dejé de lado mis pensamientos, sintiendo la adrenalina de la noche recorrerme. Así que me vestí y salí de la habitación, dejando atrás el eco de su risa y el sabor de su piel. No sin antes dejar un papel en su mesa de noche con mi número de telefono, aunque probablemente sea el incorrecto.
Con un último vistazo al espejo, me obligué a dejar atrás el pasado reciente. No podía cambiar lo que había sucedido, pero podía decidir cómo seguir adelante. Y, por ahora, todo lo que quería era recordar cómo se sentía vivir sin preocupaciones, aunque fuera solo por un instante. La vida seguía, y yo tenía que hacer algo para salvarla.
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Para Consecuencia Divina
No te puedo dejar de pensar en esta AU aun me gustan los otros pero solo pienso en esta y Deadpool bailando BYE BYE BYE de NSYNC en mi cabeza (la pelicula esta buena)
(Sigamos con la interacion no canon de Charlie y seres del cielo o otros dioses y su fracasados intentos de buscar apoyo)
Charlie contanto sus fracasos y como la perseguian con antorchas los ganadores
Angel: Ahh bueno es obvio que pasaria, seguramente gente inocente que mato mi familia esta ahi y no me quieren arriba espero que no resconocan a mi gemela...
Husk:... Bueno si incluso otros dioses creen en la redencion de nosotros aqui, la tenemos dificil * toma licor
Cherry: Ni queria subir igualmente * bebe licor un poco desanimada
Alastor: .... Bueno quisas algun dia suban ganadores tontos... digo mas venevolentes y tengas mas apoyo por su parte * Obviamente es mentira pero se atreve mentirle a la cara a Charlie
Vaggie:.. ahahah Charlie, seguramente Alastor tenga razon... * miente tambien y sabe que Alastor miente
Lucifer: No dejes que bueno... LITERALMENTE todo el cielo y otras deidades desprecien tu sueño, seguramente los dejaras con la boca suelta si llega un redimido arriba sabes * la abraza
*Adam aparece de la nada con las marcas de apuñaladas en su pecho, sentado en un sillon sin usar*
Adam: Ah claro seguir tus sueños contra mi padre y el cielo te fue tan bien y a lilith no? por algo terminaste en el agujero de mierda de la existencia y con depresion y mal esposo, padre ausente etc etc ect *bebe un licor robado de bar
Todos: Que carajo estas vivo!!!
Adam: Perras soy una creacion hecha por el propio dios, solo estube como dormido un buen rato, bueno me comieron un poco pero escape y aqui me ven... a si las marcas no se van, bueno mi hermano jesus aun tiene sus marcas de crusifricion asi que ahora parecemos hermanos * bebe el licor
Charlie: Ahhh bueno es bueno que estes aqui, quisas dios no vengar a buscar destruirnos hahah * rie nerviosa, ve que Adan realmente no se le puede matar
Lucifer: Oh vamos me haces quedar mal.. espera que dijiste de mi y lilith * se enoja
Adam: Por cierto el aun esta enojado, me sacara de aqui y le hara cosas horrible, en especial esa mucama que me lastimo por la espalda * señala a Niffty
Angel:Bueno fue un gusto conocerlos ya que estamos mas que muerto consumire mucho polvo de angel y jodere hasta no poder mas * se va mirando su celular
Charlie: Nooo Angel.. seguramente... estaremos bien... Adam puede ayudarnos!!!! * lo persigue
Adam: Idiota sabes que no los ayudare ni importa si me apuñalan de nuevo verdad o me viste ayudarte a ti a lilith cuando fueron expulsados * se dirige a Lucifer y bebe mas licor
Lucifer: * asustado por él y su hija* Amigo.... vamos... si me disculpo por lo de lilith y Eva nos ayudas?
Adam: *Levanta el dedo medio y se va al bar a beber mas*
Husk: Estamos jodidos, muy jodidos
Vaggie, Alastor: Rayos...
*Niffty tontamente no esta asustada*
Cherry: Bueno fue un gusto ire a destruir cosas y evitare que Angel se ahogue con algo * se va donde fue Angel y Charlie
No se como haras que aparesca Adam pero esta version mia me salio graciosa XD
Demonio random: ¡EL FIN DE LOS TIEMPOS A LLEGADO! ¡EL FIN DE LOS TIEMPOS A LLEGADO! —grita mientras que sacude una gran campana— ¡Y TODO POR CULPA DE LA PUTA PRINCESA! ¡NOS A CONDENADO A TODOS A LA FURIA DE DIOS!—
—Afuera del hotel se encuentra una gran turba furiosa —
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Especial de garabatos basado en la premisa de "rocma tiene una gran 🍆" las respuestas estan en el final.
Idate:"aah...Shirokuma-chan...solo...dame un segundo..♥︎"
_____________minicomic basado en lo de arriba.
Idate:"te dije que podía manejarlo"
Idate:"¿como se siente? ¿Es bueno?"
Idate":al juzgar por esa mirada en tus ojos,a ti también te gusta ¿no?"
Rocma:" ya cierra la boca!"
Rocma: ¿no era 'esto' lo que querias de mi?"
Rocma:"solo te acepte porque queria ver que tipo de expresión patetica pondrias"
Rocma:"una vez que acabe contigo espero que dejes de buscarme"
---------
Fin.
Se preguntaran ¿que carajo?
Dejenme les explico.
Estas cuotas rocmate estan inspiradas en este dibujo que enconte en Twitter de @shexxrvb 👇
Entonces el contexto seria...como reacionaria idate si rocma tuviese una "pieza extra" Xd
Según yo...
Rocma con pito:existe*
Idate al enterarse:
Rocma:("tks...que persistente...)
Idate:"me gusta todo de la shirokuma-chan ♥︎ eso no va a cambiar!"
#fanart#shipp#okegom#deep sea prisoner#funamusea#rocmate#ice scream#rocma#rocma x idate#rocma/idate#icescreamrocma#ice scream idate#idate#rocmaxidate#idatexrocma#funamuseaart#icescream
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La otra vez iba en el colectivo y había dos libertarios atrás mío hablando de Milei despacito, como el que se mandó una cagada, diciendo que estaba marchando todo mal, y que no les parecía que el tipo esté festejando en Israel y metiendonós en conflictos con los que no tenemos nada que ver. Una voz . Pero decían que había que apoyarlo a Milei porque Massa iba a ser peor y quien sabe si después no subía Grabois (ojalá)
Al final uno dice "che pero en serio se fue al carajo el boleto" y el otro se ríe nervioso y se quedan callados los dos.
Clima de época.
#asterisco: sí tenemos que ver con el conflicto de Israel Palestina: deberíamos estar condenando el genocidio junto con Brasil y otros#cosas mias#política#encima el hecho de que SE DAN CUENTA que va a volver la izquierda como nunca antes#y ya les digo: ojalá
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Y después de casi 4 meses pude entender que a pesar de mi error, yo no tuve toda culpa. Espere 6 años para poder hacer todo lo que me dijiste que haríamos, te apoyé por 6 años, te di todo el amor y comprensión que pude por 6 largos años, me estanque para poder vivir la vida junto a ti. Y cuando más necesitaba que entendieras que también soy humana, que también me equivoco y que puedo arrepentirme, simplemente me crucificaste, me abandonaste, comprendiendo la magnitud del error que cometí, solo me culpe a mí. Me sentí inútil todo este tiempo, culpable e inservible. No te importo si volvía mi depresión, no te importo si yo quería matarme (casi lo logro), no te importo ni un carajo todo lo que dejé por ti. Me desvalorizaste al punto de borrarme de tu vida, borraste 6 años, me bloqueaste, borraste todo de mí de tu vida, me humillaste, me trataste de lo peor para estar con alguien más 2 meses después de dejarme. Intenté volver porque traté de darte el espacio necesario para que pudieras estar tranquilo, pero al final todo fue inútil y en vano, solo recibí repudio de ti. Y siento tanto el estar así por ti, tú, que jamás me diste nada, solo palabras bonitas y promesas rotas, tus te amo eran solo de comodidad, de zona de confort, nunca fue real, porque a mí no me vengan con “el que falla lo saco de mi vida”, porque si me amabas realmente no hubieses querido sacarme así de golpe. Jamás me burlé de ti, jamás te mentí después de eso. Si, cometi dos veces un error distinto, pero como un demonio, como quería arreglar lo nuestro. Solo tenías que decirme que había alguien más, y que no te costó soltarme, todo hubiese sido más fácil, me hubieses ahorrado la humillación, pero obvio tú querías que te rogara, tú querías alimentarte de mi dolor para seguir destruyendome. Ay dios! Que dolor este que me haces pasar, no era suficiente con la vergüenza y la culpa que quizás merecía, ahora también tengo que lidiar con ser reemplazada y borrada de la vida de alguien que era mi todo. Sé que lo arruine, pero no merecía tanto dolor, no merecía querer morir por alguien que no me ama y quizás jamás lo hizo en realidad.
No quiero hundirme otra vez por alguien que no le importo
Constanza A. 🌻
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