#La sangre del árbol azul
Explore tagged Tumblr posts
Text
Adam's Third Wife AU/ La tercera esposa de Adam(HAZBIN HOTEL)
Ariel. La Manipuladora.
Adam no cayó ante la tentación de Eva por la manzana. En el momento que Dios apareció desterró a Eva por rebelde y dejarse tentar por el diablo. Dios, enojado de que Lucifer se metiera en sus asuntos, creó una nueva esposa para Adam.
Creó una mujer con piel palida como la nieve, cabellos tan oscuros como la boca de un lobo, ojos celestes como el cielo, su cara inocente y dulce sonrisa ebombaria a cualquiera que la viera.
Pero ella no por nada fue creada por un Dios enojado.
Aunque Ariel amara mucho a Adam. Dándole cariño, amor y ternura y sus más sinceros sentimientos. La verdad era que ella era una manipuladora total.
En el momento que apareció Lucifer en el jardín del Edén y vio a la nueva esposa de Adam en seguida fue a entrometerse. Ambos tenían encuentros secretos, sin que Adam lo supiera. Lucifer pensó que estaba guiando a Ariel a su trampa. Pero nada más lejos de la realidad.
Era él quien se dirigía a la tela de la viuda negra.
Un día, Ariel mezclo hierbas y plantas inofensivas que juntas creaban un potente veneno, agarro una de las manzanas prohibidas del árbol, la trituro hasta hacerla una pasta y en el cuenco de madera que usaba la coloco adentro y la mezclo con el veneno.
Se fue a su lugar de encuentro para ver a Lucifer.
Lucifer no sospecho de nada y acepto gustoso el recipiente con el líquido. Al tomarlo por completo su garganta comenzó a arder, cayó al suelo. Le costaba respirar, la sangre dorada comenzó a salir de su boca. Cuando levanto la mirada para pedir ayuda, por primera vez sintió miedo.
Encima suya, parada como si nada, estaba Ariel dando una enorme sonrisa de oreja a oreja, sus ojos azules brillaban con intensidad llenos de sadismo.
Es ahí cuando se dió cuenta. Desde el principio fue él el que estaba siendo engañado.
Humillado, se fue arrastrandose fuera del Edén. No sin antes escuchar lo que decía Ariel: "Vuelve arrastrándote sobre tu vientre al agujero al que perteneces, serpiente. Que aquí tú ya no perteneces entre los bien honrados. Que la sangre que salga de tu boca sea índice de tu derrota a manos de la tercera esposa"
Lucifer se fue y no miró atrás. El veneno no lo mataría, pero la vergüenza y humillación prevalecerian.
Ellos se aman su señoría ( ꈍᴗꈍ)
#hazbin hotel adam#hazbin hotel fandom#hazbin hotel fanart#hazbin adam#adam hazbin hotel#hazbin hotel#hazbin art#hazbin hotel au#Adam's Third Wife Au#Adam's Third Wife Au 💝
88 notes
·
View notes
Text
"¿Para qué sirven los versos si no es para el rocío?"
Si pudiera llorar de miedo en una casa sola, si pudiera sacarme los ojos y comérmelos, lo haría por tu voz de naranjo enlutado y por tu poesía que sale dando gritos.
Porque por ti pintan de azul los hospitales y crecen las escuelas y los barrios marítimos, y se pueblan de plumas los ángeles heridos, y se cubren de escamas los pescados nupciales, y van volando al cielo los erizos: por ti las sastrerías con sus negras membranas se llenan de cucharas y de sangre y tragan cintas rotas, y se matan a besos, y se visten de blanco.
Cuando vuelas vestido de durazno, cuando ríes con risa de arroz huracanado, cuando para cantar sacudes las arterias y los dientes, la garganta y los dedos, me moriría por lo dulce que eres, me moriría por los lagos rojos en donde en medio del otoño vives con un corcel caído y un dios ensangrentado, me moriría por los cementerios que como cenicientos ríos pasan con agua y tumbas, de noche, entre campanas ahogadas: ríos espesos como dormitorios de soldados enfermos, que de súbito crecen hacia la muerte en ríos con números de mármol y coronas podridas, y aceites funerales: me moriría por verte de noche mirar pasar las cruces anegadas, de pie llorando, porque ante el río de la muerte lloras abandonadamente, heridamente, lloras llorando, con los ojos llenos de lágrimas, de lágrimas, de lágrimas.
Si pudiera de noche, perdidamente solo, acumular olvido y sombra y humo sobre ferrocarriles y vapores, con un embudo negro, mordiendo las cenizas, lo haría por el árbol en que creces, por los nidos de aguas doradas que reúnes, y por la enredadera que te cubre los huesos comunicándote el secreto de la noche.
Ciudades con olor a cebolla mojada esperan que tú pases cantando roncamente, y silenciosos barcos de esperma te persiguen, y golondrinas verdes hacen nido en tu pelo, y además caracoles y semanas, mástiles enrollados y cerezas definitivamente circulan cuando asoman tu pálida cabeza de quince ojos y tu boca de sangre sumergida.
Si pudiera llenar de hollín las alcaldías y, sollozando, derribar relojes, sería para ver cuándo a tu casa llega el verano con los labios rotos, llegan muchas personas de traje agonizante, llegan regiones de triste esplendor, llegan arados muertos y amapolas, llegan enterradores y jinetes, llegan planetas y mapas con sangre, llegan buzos cubiertos de ceniza, llegan enmascarados arrastrando doncellas atravesadas por grandes cuchillos, llegan raíces, venas, hospitales, manantiales, hormigas, llega la noche con la cama en donde muere entre las arañas un húsar solitario, llega una rosa de odio y alfileres, llega una embarcación amarillenta, llega un día de viento con un niño, llego yo con Oliverio, Norah Vicente Aleixandre, Delia, Maruca, Malva Marina, María Luisa y Larco, la Rubia, Rafael Ugarte, Cotapos, Rafael Alberti, Carlos, Bebé, Manolo Altolaguirre, Molinari, Rosales, Concha Méndez, y otros que se me olvidan.
Ven a que te corone, joven de la salud y de la mariposa, joven puro como un negro relámpago perpetuamente libre, y conversando entre nosotros, ahora, cuando no queda nadie entre las rocas, hablemos sencillamente como eres tú y soy yo: para qué sirven los versos si no es para el rocío?
Para qué sirven los versos si no es para esa noche en que un puñal amargo nos averigua, para ese día, para ese crepúsculo, para ese rincón roto donde el golpeado corazón del hombre se dispone a morir?
Sobre todo de noche, de noche hay muchas estrellas, todas dentro de un río como una cinta junto a las ventanas de las casas llenas de pobres gentes.
Alguien se les ha muerto, tal vez han perdido sus colocaciones en las oficinas, en los hospitales, en los ascensores, en las minas, sufren los seres tercamente heridos y hay propósito y llanto en todas partes: mientras las estrellas corren dentro de un río interminable hay mucho llanto en las ventanas, los umbrales están gastados por el llanto, las alcobas están mojadas por el llanto que llega en forma de ola a morder las alfombras.
Federico, tú ves el mundo, las calles, el vinagre, las despedidas en las estaciones cuando el humo levanta sus ruedas decisivas hacia donde no hay nada sino algunas separaciones, piedras, vías férreas.
Hay tantas gentes haciendo preguntas por todas partes. Hay el ciego sangriento, y el iracundo, y el desanimado, y el miserable, el árbol de las uñas, el bandolero con la envidia a cuestas.
Así es la vida, Federico, aquí tienes las cosas que te puede ofrecer mi amistad de melancólico varón varonil. Ya sabes por ti mismo muchas cosas. Y otras irás sabiendo lentamente.
-Oda a Federico García Lorca / Pablo Neruda
#pablo neruda#frases#escritos#pensamientos#fragmentos#poesia#literatura#escritores#libros#poemas#literatura universal
8 notes
·
View notes
Text
ELENA DEL RIVERO & CRISTINA RIVERA GARZA
Unir
Fue en la casa de su madre, en Lincolnshire, que Isaac Newton tuvo el tiempo y la disposición de ánimo para observar una manzana.
El pecado es acaso solo una cuestión de gravedad.
Las letras de la palabra Adán son las mismas que componen la palabra Nada.
«The redness/ of red» escribió Rae Armantrout para referirse a algo que no entiendo pero que, sin embargo, percibo. «Lo rojizo/ del rojo».
Es verdad que amanece.
La sangre suele ser un lugar común.
En la imaginación popular las palabras «y sin embargo se mueve» siguen siendo una referencia más o menos explícita a la tenacidad o testarudez de la mente científica.
El cuerpo es una forma de la mente y viceversa.
Suele producir algo de inquietud observar a un hombre que retoza bajo la fronda de un árbol o que se desliza como entre nubes cuando atraviesa las calles de una ciudad.
Hay ciudades que, en efecto, se prestan para caminar ya sea con o sin lluvia.
Alguien ha asegurado ya que es muy fácil perder un paraguas.
No sé cuál sea la probabilidad de perder, en cambio, una flecha dorada.
En sus retratos de juventud, Isaac Newton da la apariencia de haber sido un hombre hermoso a punto de morder una manzana.
Todos perdemos, eso se sabe.
¿Es posible que un cuerpo yazga orgánicamente sobre un litoral?
El ruido que resulta de la inserción de los dientes sobre la manzana siempre me ha parecido sensual. En cambio, el ruido que se produce cuando los dientes arrancan el pedazo de la fruta me hace vacilar.
Bilabial, la boca. El beso. El chasquido.
En el esquema RGB, el rojo junto con el verde y el azul son colores primarios de luz. Esto cambia en el esquema CMYK que está basado en pigmentos donde el rojo no es parte de los colores primarios sino el rojo magenta, que junto con el cian y el amarillo están más cerca de los colores primarios sustractivos auténticos que el ojo percibe, y se utilizan en la impresión de color moderna.
El menstruo, ah. Viscoso, real, inútil, el menstruo.
Combinación numérica; ranas palúdicas; palma arquitectónica; espesura escalofría.
La urgencia con la que cruzó la puerta y tomó el pincel y trató, inútilmente, de plasmar lo que veía detrás de los párpados.
Voy gravitacionalmente hacia ti.
¿Mencioné ya los pájaros carmesí, la luna vacía, la larga hilera
de hormigas?
Son pocas las vocales que separan la palabra «monstruo» de la palabra «menstruo».
¿Consiste la meta en colorear el propio yo para así convertirlo en un personaje audiovisual?
Había, en algún lugar recóndito de sus huesos, un aroma contradictorio y una sustancia que no dejaba de manar.
Mis vestigios terrestres. La hipocresía de mis roperos. Mi magnético interior. ¡Ah!
Dentro de la cueva, el pálpito. A cada latido, la humedad. La sangre es un lugar común, lo escribí hace rato.
Las fúlgidas aves; los calosfríos ignotos; el letárgico licor; las fulmíneas paradojas; el radioso vértigo; la remordida ternura.
Aquí no vive un coleccionista de insectos.
Como si se tratara de alguien ligeramente atormentado: alguien con un cigarrillo en la boca; alguien con un pasado muy largo.
Todo era mentira, Isaac.
Vivimos en estado de peligro: lo desunido se une. ¿Piensas quemar mi casa también?, preguntó o dijo.
Había una duna y, sobre la duna, unos zapatos muy viejos. Alguien decía entonces: te quedarás.
- Cristina Rivera Garza
- Elena del Rivero, Domestic Landscape #31, Gouache, hilo, grafito y cúrcuma en papel cuadriculado vintage
15 notes
·
View notes
Text
𝑩𝑳𝑶𝑶𝑫 𝑫𝑬𝑺𝑻𝑰𝑵𝒀 ~𝑫𝑰𝑨𝑩𝑶𝑳𝑰𝑲 𝑳𝑶𝑽𝑬𝑹𝑺~
🥀𝑷𝑹𝑶́𝑳𝑶𝑮𝑶🥀
Una noche tormentosa, varios cuerpos manchados de su propia sangre, las paredes y muebles destrozados... Todo era un desastre... En ese lugar sombrío, helado... Vacío, a excepción de aquella melena dorada como el brillante oro por la poca luz nocturna que brindaba la luna... Lloraba sin consuelo alguno, con un cuerpo frío y pálido... Manchando ese líquido rojizo entre sus brazos.
–¿Por qué? – preguntaba aquella chica con ojos cristalinos y lágrimas que corrían por sus sonrosadas mejillas.
–No podíamos... Resistirnos... A que no... Estuvieras... Con nosotros...– Decía el chico de ojos verdes cual esmeraldas, apagados y vacíos, casi sin vida.
–No debieron... – Lo miraba atentamente mientras acariciaba su pálida mejilla manchada con algunas gotas de sangre.
–¿Cómo no?... Si eres nuestra... Especialmente... Mía...— Con una sonrisa en sus labios dando su último aliento.
Una muy dolida rubia abrazada su cadáver en la oscuridad de la noche mientras la Luna de testigo presenciaba su dolor y llanto.
Mientras tanto... En otro lugar una chica corría con los pies descalzos, sin rumbo, pero tratando de huir muy pero muy lejos, su vestido blanco estaba sucio y su rostro expresaba lo muy cansada y asustada que estaba...
Pov...
Maldita sea... Yo no quería esto porque diablos me tiene que pasar estas cosas... Juro por mi vida que ellos me las pagarán, lo juro, ellos no pueden salirse con la suya...
Corría sin parar esas cosas pronto iban a alcanzarme, me dolían los pies de tanto correr y mi energía había sido sellada... Esto no podía ser peor.
Ya los había perdido de vista, pero pronto me encontrarían nuevamente... Me saque la ropa y aprovechando que había un lago cerca quitaría el rastro de olor.
La chica de cabellos plateados se sumergió en lo profundo del lago, en el momento en que se hundió, diviso la Luna y en su interior pidió desesperadamente un deseo...
Después de estar aproximadamente 15 minutos en el agua... Salía de lo profundo, mientras que sus pulmones tomaban la mayor cantidad de aire posible; la luna se escondía detrás de las nubes, un relámpago dorado azotó en un árbol cercano, la de cabellos plateados se moría del miedo... divisar esa escena, mientras que ella se encontraba en el agua.
Anonadada por lo que acababa de presenciar sintió que algo duro le caía en cabeza, al mirarlo, noto que era una piedra que brillaba intensamente, sentía que sus perseguidores se acercaban así que volvió a zambullirse en el lago, haciéndose bolita para que el brillo de la piedra no fuera visible para ellos.
Pov....
Espero que se vayan pronto esos malditos...espera que es ese brillo blanco tan fuerte, pero si el brillo hace unos momentos era azul... ¿eh?, Porque yo también estoy brillando... Pero que está pasando... ¡¿Qué diablos?!
La noche era fresca y en el tejado de una mansión abandonada, una chica se encontraba sentada, apreciando la vista mientras que la brisa mecía su cabello suavemente, el cielo estaba nublado amenazando así una posible tormenta... Miraba al cielo como esperando algo o... A alguien.
Su vida había sido muy solitaria y digamos que anhelaba compañía; eran estos sus pensamientos, hasta que una gota de agua cayo en su mejilla deslizándose... Parecía como si llorará en silencio en lo más profundo de su ser.
Una tras otra las gotas de lluvia iban cayendo, decidió entrar para resguardarse de la lluvia y la posible tormenta venidera; el lugar era oscuro a excepción de algunas velas que alumbraban espacios escasos de la mansión abandonada en la que se resguardaba.
Algo llamo su atención y es que se podían ver que rayos de colores dorados y rojos danzaban por entre las nubes, era hermoso y electrizante, sintió una presencia que se acercaba con rapidez hacia la mansión, era fuerte e imponente.
Daba miedo de cierta forma... Se asomó por la cristalina ventana, pero debido a la lluvia no podía ver del todo bien, aun así, esa persona si la pudo ver, observándola con detenimiento, con una mirada que la intimidaba y estremecía su ser...
3 notes
·
View notes
Text
Huracán
Estoy temblando mientras las gotas caen, sangre que corre entre mis manos, se nubla el cielo que pinte de azul, se riega el árbol de mi agonía. Una sádica muerte para el que se enamora, una pincelada de cariño para la mujer que cree en el amor como los cuentos de hadas, no te entregues a mi, ni a él, ni a nadie que te diga que te quiere. El huracán está por llegar y mientras lo hace yo disfruto del dolor que me ocasiona el día a día, tanto sufrimiento que se desvanece entre sonrisas falsas y pasajeras, me he olvidado de mi por intervenir en el dolor de los demás, mientras el viento sopla yo me relajo y pienso en el pasado, me duele el corazón y no puedo hablarlo. Si el infierno lo pintarán de colores sería más divertido verlo arder, o tal vez ya lo hicieron y este mundo es el reflejo de el. Mato mi alma para salir de la prisión de mis falsas ideas, entre letras y pensamientos que mi mente atormentan, desgarro con la punta de un lápiz mi cabeza, intentando lo que para mí la vida quisiera.
La noche ha llegado y con ella mi final, me inco sobre el asfalto viendo como de la luna las gotas caen, mi sangre en un recuadro que Van Gogh jamás va a pintar.
Luis Alvarez
#artista#artists on tumblr#authors#autor#art#mexico#cosas que escribo#un escritor dice#escritor desafortunado#pensamientos de un escritor#poemas de amor#poemas#poemas tristes#poemascortos#mi poema#poema
14 notes
·
View notes
Text
[ARTPOP; 20:13]
Allí estaba ella, la Afrodita de carne y hueso, en la punta de la pirámide donde lxs simples mortales la habían ayudado a posicionarse luego de ser coronada como vencedora de cada una de las batallas que afrontó.
Para sus discípulxs, ella representaba una fuente de energías.
Para otrxs, representaba una fuente de amenazas.
Y para los poetas, representaba una fuente de riquezas.
Algo tenían todxs ellxs en común: esperaban su próximo cántico para dar comienzo a la cena.
Y ahí estaba Venus, en la cima del templo y a sus pies, un ejército de hombres con hambre de derribar su imperio. Temerosos del poder de una mujer, esperando su momento vulnerable para intentar apagar su divinidad, con arco y flecha en mano para cazar "lo que quedaba de ese ser", un cuerpo humano, o lo que para ellos era "solo otro árbol que producía manzanas"
Y finalmente vulnerable, ella caminó por el infierno, invisibilizando sus penas ante ellos con diamantes, una imagen tan estática, lujuriosa e imponente, una escultura. Dominando su propia mente y espíritu a traves de esas sustancias que la subían a bordo de un avión psicodélico con destino al cielo, de regreso al infierno, y finalmente aterrizando en el limbo.
Entonces los hombres armados rieron hambrientos y ante un primer flechazo, entre la lluvia de plumas, trozos de papel verde comenzaron a caer en sus manos. Las escrituras realizaron, el árbol "su fruto estaba dando". Tomaron todo lo que pudieron y escaparon, su banquete había terminado
Y mientras tanto, aquellxs que alguna vez se sintieron intimidadxs ante su luz, vieron aquel ángel caer entre lxs mortales con admiración y repugnancia, pero ella solo tomó la flecha, la desenterró de su corazón derramando sangre a través de los diamantes, se puso de pié y río ante ellxs. Removió las aguas y ellxs vieron sus propios reflejos en el lugar donde yacía aquel angel.
Y entonces lo vieron, ese paraíso que siempre soñaron y ese infierno que siempre temieron, están entre nosotres. Nosotres somos lo bueno y lo malo, somos híbridxs. Y entre nosotrxs se encuentran estos dos mundos porque ambos no existen, solo son representaciones humanas, son nuestros espejos.
Entonces el agua y todos aquellos reflejos se esferizaron, ella tomó el espejo, aquella esfera tan azul, tan marina, tan reflectante. Entró a su templo y le ofreció la esfera a sus monstruosxs discípulxs, rezando:
"Unx híbridx puede soportar estas cosas
Su corazón puede latir con ladrillos y cuerdas
Los pinceles de la oscuridad no te ayudarán a pintar tu realidad
Libera tu mente
ARTPOP podría significar cualquier cosa"
#seapunk#vaporwave#retro#aesthetic#alien#alternative#2013#ARTPOP#LADYGAGA#2013 tumblr#2013 aesthetic#GREEK#INTERNET CORE#vaporaesthetic#OCEANCORE#ocean aesthetic
2 notes
·
View notes
Text
Había sido hombre de poderes y misterios, era cosa de no creer. Su mirada abría o cerraba heridas y despertaba o desmayaba bichos y cristianos. En un clavar de ojos dejaba bobos al potro más bravío y al toro más toro.
Ventura, el vaquero andante de Minas Gerais, pasaba como viento. Tenía muchos rumbos y muchas mujeres y casa ninguna.
Se le conoció un solo amigo, que los dos fueron tientos del mismo lazo.
Deambulaban por el secarral. Llevaban varios días sin probar bocado. Defendiendo alguna causa perdida, se habían quedado sin caballo y sin rumbo. Nada para comer: lagartijas, espinas, arbustos sin fruto ni sombra. Ventura tenía costumbre, pero su amigo no daba más. Y cuando el amigo se tendió a morir en aquellas soledades, Ventura se hizo tigre para salvarlo del hambre. Antes de entigrarse, entregó al amigo una hoja azul, con puntas de estrella, que no era hoja de árbol conocido, y le dijo:
—Cuando vuelva, me pondrás esta hoja sobre la lengua.
Y le dijo que no había otra manera de desentigrarse.
Se fue lejos, pasó la noche cazando.
Regresó al alba, con la primera luz blanca, cargando un venado sobre el lomo. Cuando el amigo lo vio venir, cuando vio venir al tigre aquel con las fauces abiertas, huyó despavorido. El tigre lo miró correr. No lo persiguió.
Por donde él andaba, nada vivo quedaba. Partía las piedras, demolía los montes, desplomaba las barrancas. Echado entre los altos pastos, el tigre alzaba la cabeza y olía el viento y rugía su rabia triste; y nadie dormía.
Fue largo el acoso. Un ejército de buitres, que le seguía las huellas, delataba su paso al ejército de hombres que se lanzó tras él.
Y el cerco se fue cerrando, sudor de caballada, estrépito de avíos de guerra, trueno de voces y ladridos, hasta que una noche de luna el tigre pegó su último salto, en el aire alto, y bramó y cayó. Y ya estaba muerto de mucho balazo cuando el amigo de Ventura le hundió el caño del fusil en la boca y apretó el gatillo.
Muy lejos de allí, Ventura despertó. Despertó todo sucio de sangre seca y atormentado de dolores desde el sombrero hasta los pies.
Hasta respirar dolía. Caminar fue muy difícil, enorme sombra tambaleante, y recordar fue muy difícil. ¿Cuándo? ¿Dónde? ¿Quién? Luna alta, mala luna. Había caído la noche, dentro de él había caído la noche, y la noche ya no era la hora del amor ni de la guerra. Sus ojos habían perdido el habla, y sólo tenía oídos para las goteras de la muerte. Puta vida, vida sin fuego. ¿Sobreviviendo? Sobremuriendo. Quiera Dios soplar esta ceniza.
Blanco de polvo, negro de mugre, rojo de sangre, viene Ventura por el callejón. Pesado de dolores, arrastra los pies. Mal cargan las piernas este demolido cuerpo de gigante. Ventura atraviesa el mercado, sordo al clamor de las vivanderas, y pestañeando vislumbra, allá, al fin de todo, la cantina. La cal de la cantina brilla al pie de la cresta de dragón de los cerros, y más acá brillan de sudor los caballos atados a los palenques.
Bajo el portal, un ciego canta las noticias. La boca del ciego canta lo que han visto sus oídos, mientras una alcancía de lata va marcando el compás. El ciego canta las coplas del tigre del horror, maldición de estos campos, que ha muerto matando y que muchas muertes debía.
Con mano tembleque, Ventura alza el ala rota del sombrero, se limpia el sudor que le nubla la mirada y ve: ve la piel del tigre, colgada de un alambre, secándose al sol. Es imposible contar los agujeros. Poca comida han dejado las balas a las polillas.
Y entra en la cantina.
El amigo lo ve venir, ve venir esta piltrafa, y el vaso de caña le resbala de los dedos y se estrella contra el piso.
Todos callan, calla todo.
Historia del vaquero que fue tigre, Eduardo Galeano
11 notes
·
View notes
Text
¡Eh! Momentito, esta es la mitad de una historia que puedes encontrar tanto en Archive of Our Own y aquí también.
Capítulo 5
Caminaba por el bosque, sintiendo que su cuerpo entero estaba tenso, sus ojos buscando a un macho en particular. No tenía idea por qué lo hacía, qué la había llevado a dejar el Lago Sangravah solo con Catrin para cuidar de las nuevas hembras humanas. Se suponía que él iría a buscarla, ¿verdad? La idea era que ellos fueran tras ellas, que hicieran todo lo que estaba en su poder para convencerlas de darles una oportunidad, no al revés. La noche de Calanmai estaba por acabar.
Miraba a las parejas que correteaban por allí, sintiendo que se le atascaba el aliento en la garganta cada vez que veía a un macho alado, rogando que no fuera aquel rostro filoso, feroz. Quizás si estaba con otra, con una que no había salido corriendo ante la oportunidad de estar con él, así fuera solo por esa noche, sin intenciones de darle más que un pequeño consuelo. Cualquiera de las dos opciones le hacían hervir la sangre, de furia y de culpa. ¿Por qué había corrido entonces? ¿Por qué no había tomado la oportunidad cuando se presentó? ¿Por qué no le había dicho que le mostrara su territorio, el sitio que había acondicionado para ella?
Llegó la mañana y Gwyneth regresó al Sangravah, sin ganas de hablar con Catrin, quien la esperaba con una sonrisa que menguó al verla. Volvió a la cueva, a su lecho de algas que empezaba a resultar molesto, frío. Nadie la molestó esa semana, ni se acercaron cuando salió a la siguiente. Caminaba por el bosque, incapaz de sentir algo más que una sensación opresiva en el pecho que opacaba cualquier placer que le produjera el ver las flores brotar en el suelo.
—¡Gwyn! Vaya, no esperaba verte lejos del lago —saludó Feyre, bajando de un árbol. Detrás de ella aparecieron su pareja y el pequeño, quien se aferraba a su madre mientras la observaba con sus ojos azules abiertos de par en par.
—Yo tampoco, ha pasado mucho tiempo desde la última vez que te vi —dijo, haciendo una cortés inclinación de cabeza, forzando una sonrisa agradable mientras se acercaba al pequeño—. Felicidades, por cierto. ¿Cuánto tiene?
—Un año, es raro que duren tanto tiempo así —rio, dejando un beso en la frente de él, Rhysand se acercó a ambos, murmurando algo a oídos de Feyre que la hizo ruborizar. Gwyneth se encontró queriendo tener ese momento también, así fuera solo el abrazo y las palabras secretas. «¿Por qué no apareció anoche? ¿Por qué no lo intentó de nuevo?»—. ¿Estás bien?
—¿Ah? Oh, sí, sí, ando con la cabeza en cualquier lado últimamente —respondió, ahogando todo lo que fuera en relación con ese macho, pero era como parar una ola con las manos—. Los dejo tranquilos, ¡hasta luego!
Y no les dio tiempo para decir algo más. Caminó lejos, hacia las montañas, esquivando a los machos que se acercaban a ella. Estaba empezando a sentir que se le cerraba la garganta, que su cabeza volvía a aquella vez en la que habían pasado un montón de machos por el Sangravah. Una noche cerrada, con ambas dejadas como restos de una carnicería que había terminado antes de que a ella le pasara lo mismo que a Catrin gracias a otros machos. Pero eso no iba a pasar, no iba a tener la misma suerte dos veces, así como había pasado con Calanmai.
El aire raspaba su garganta, sus ojos empezaban a llenarse de lágrimas, y podía sentir cómo varios machos se acercaban a ella. Tonta, tonta por alejarse de su preciado lago, por dejar sola a Catrin y a las otras. Quiso regresar, pero varios machos se interponían, casi todos mirándola de pies a cabezas y empezando a sacar pecho, cantar con voces rasposas y desentonadas. Gwyneth retrocedió hasta chocar contra un cuerpo, haciendo que los otros machos se acallaran de inmediato.
—Largo.
—No está en tu territorio, Sombra —señaló uno, ganándose un gruñido de advertencia.
—Dije ¡largo! —estalló poniéndola por detrás de él, desplegando las alas. Si alguno pensaba quedarse y hacerle frente, se marchó con el resto, dejándolos a solas—. ¿Todo en orden?
Gwyneth lo observó plegar de nuevo las alas, volteándose hacia ella. Estaba más flaco, con los huesos más marcados en el rostro y los ojos con profundas manchas negras bajo estos. Algunas costillas empezaban a asomarse en su torso.
—No has comido ni dormido recientemente —señaló, acercándose hasta estar a poca distancia de él. Quizás no debía preocuparle, no debía ser su problema, pero allí estaba, queriendo acercarse, acunar su rostro entre sus manos, ver mejor lo que había en el fondo de aquellos hermosos ojos avellana—. Vamos, creo que tengo algunos restos de pescado o puedo cazar algunos si necesitas.
—Estoy bien.
—No, no lo estás —sentenció, tomándolo de la mano y caminando de regreso hacia su lago. Lo escuchó farfullar algo, pero la siguió de todas formas—. Ya vuelvo —dijo, soltando su mano antes de sumergirse en las aguas cristalinas, atrapando fácilmente a dos buenas presas, y regresó. Él seguía allí, quieto, mirándola con una ceja alzada mientras salía del agua, ignoró el cosquilleo que tuvo dentro de su ser. Primero tenía que atenderlo, luego se ocuparía de ella misma y lo que estuviera pasando en su cuerpo—. Ten. Cuidado con las espinas.
— ♪ — ♪ — ♪ — ♪ — ♪ — ♪ — ♪ — ♪ — ♪ — ♪ — ♪ — ♪ — ♪ —
Continúa aquí .
4 notes
·
View notes
Text
DÍA DE LA MADRE
“YO”- TE HABLO MADRE MÍA-
Sonido de voz en sangre alcanza a escuchar la mente y busca a su alrededor más no consiguen ver sus ojos, quien es el dueño del tono. ¿Serán duendes? Sé pregunta la morena piel de almendras. Un movimiento leve en su entraña la estremece y llega hasta su conciencia un calor que la transita de los pies a la cabeza. Yo te hablo madre mía, búscame en tu corazón, allí me pusiste vos cuando entre sexo y amor sin querer me diste vida. Sí no existes todavía, ¿cómo es que puedes hablarme? ¿Crees que no existo?, tócate el vientre madre y sabrás que un corazón aunque sea pequeñito, latiendo dentro tuyo te avisa que sí existo y que crece sin medidas mi amor por ti de hijo. Temblor de volcán interno sacude al cuerpo aún en celo, jamás pensó al entregarse a los brazos de su dueño que esa voz la llamaría MADRE antes de tiempo. Siente los senos calientes de futura leche tibia y en instinto maternal lleva sus manos a ellos para cuidar que no falte a su niño el alimento. De pronto la rebeldía le brota dentro del pecho y su boca aciruelada emite palabras que se ha de llevar el viento. Sí yo no pienso tenerte, ¡ni loca que estuviera! Ser una madre soltera causa escándalo en la gente y la familia te aleja como a un enfermo de peste. ¿Y mi amor, madre querida, mis caricias, mis miradas, mi dolor, mis alegrías y las tantas que te daría, no te importan madre mía? Ni padre tendrás mi niño ¿quién te protegerá de tus seguras caídas? Tú, cómo lo haces ahora nada más pido y la vida. Ansío mirar por fuera tu figura de bambú, sentir de tu piel aromas de sándalos y orquídeas, en tu melena azabache esconder mis travesuras, con mis caricias borrar la vergüenza de tenerme cincelándote el orgullo cuando en tus brazos me lleves y lo qué es más importante darte mi amor para siempre, jamás he de abandonarte si te permites tenerme. En fetal pose se acuesta sobre la tierra alfombrada en verde, mira al cielo azul celeste, se abraza con gozo al vientre como si al niño tuviera y a su vez él la abrazara. Entre lágrimas le habla al viento de sus adentros para que lleve el mensaje, nacerás mi pequeñuelo, he de cantarte mil nanas para arrullarte en tus sueños, habré de callar con besos tus llantos de desconsuelos, seré padre y madre según lo que necesites, tu árbol de frutas y tu rosa terciopelo, tú serás mi amor eterno y mi mundo hecho futuro. Tú vida me darás hijo, ese será mi premio. Madre gracias mira al cielo y al Trono del Altísimo. ¿Qué esperan que acontezca? ¿Se ha perdido el temor a nuestro Padre Celestial? Se olvidan de la vos de Saulo al decir “Cuando soy débil soy fuerte”. Desconocen que no hay nada más sañudo en este mundo que cuando los ultrajados se enfurecen. Madre nunca dejaremos de gritar, como cuando aquél nos mandó a matar procurando interferir en los planes del Altísimo. MADRE, RESISTE, CREO EN DIOS Y EN TI. FELIZ DÍA MAMA.-
Dr. Jorge Bernabé Lobo Aragón
María Isabel Clausen - Marisa - (MIC) Escritora-Poeta-
#Córdoba # Tucumán #Argentina #España #México
1 note
·
View note
Text
Diccionario poético
Agua .- Fluido milagroso, indispensable para la vida.
Lapiz.- Herramienta que te ayuda a describir tus pensamientos
Colegio.- Lugar que te prepara para un futuro, que tu decides.
Sombra.- Reflejo de ti mismo, el cual te sigue vayas donde vayas
Llanto.- La expresión de un sentimiento, por el cual caen gotas de lluvia.
Luz.- Lo que esta al final del camino.
Carmesí.- Expresión de labios, sangre y el amor por medio de un color.
Margarita.- Brote de la tierra como una expresión de la belleza.
Semilla.- Forma de representar el inicio de la vida, por medio de la flora.
Hombre.- Acompañante de su amada y defensor del hogar.
Dientes.- Perlas preciosas, que nos ayudan a ingerir cosas deliciosas.
Eco.- Reflejo de la voz que está dentro de ti, te dice lo que ya sabes pero no lo quieres aceptar.
Justicia.- Lucha que muchos de nosotros hacemos a diario por un bien común.
Reloj.- Maquina que cuenta cda segundo menos que nos queda de vida.
Risa.- Forma de expresar la felicidad que llevas dentro.
Árbol.- Rascacielo de la naturaleza repleto de seres vivos.
Perro.- Una cosa peluda, fiel y amorosa.
Colibri.- minero que extrae lo mas importante de la flor.
Mar.- Lugar que puede inspirar paz, pero al mismo tiempo puede asustar.
Mano.- Herramienta para poder expresarnos.
Suspiro. El cansancio acumulado del corazon.
Fotografia.- Recuerdo fisico de momentos especiales.
Libro.- Portal a un mundo que te lleva fuera de esta dimención con sus historias y relatos.
Cabello.- Forma de expresarse fisicamente estetico de una persona, dependiendo de sus sentimientos
Ojos.- El reflejo de tu ser, lo mas importante para apreciar la vida y lo que es.
Libertad.-El dejar de tener miedo de ser tu mismo.
Niñez.- Etapa de inocencia y felicidad.
Sueño.- Momento de desconectarse del mundo y estar en paz.
Bandera.- Foramd e representar el orgullo de algo.
Viento.- Susurro del alma.
Rio.- Lleva los recuerdos de las personas y no los devuelve jamaz.
Azul.- Forma de representar el cielo, el mar y la paz.
Arrugas.- Manera de demostrar que ya no eres el mismo que los años ´pasany el tiempo se acaba.
Canas.- Reflejo de un torrente de muchas emociones reflejado en tu forma de ser.
1 note
·
View note
Text
Nuevas Definiciones Cotidianas
Agua: El inicio y origen, vida líquida y necesaria que hace el mundo.
Lápiz: El comienzo de la magia y el intelecto, una pequeña cantera que modifica el lienzo de aquellos que plasma arte y conocimiento.
Nube: Misteriosos objetos indignos de un mortal lleva vida nuevos horizontes.
Colegio: Taller del escultor que talla la obra del cerebro.
Sombra: Un mimo, compañero eterno que odia y ama la luz.
Llanto: El sonido de la de la tristeza.
Luz: Fuente de la visión, el corredor más rápido de todo lo que se conoce.
Carmesí: Rastros de una pasión y sangre manifestadas en en un tono.
Margarita: Un sol rodeado de pétalos blancos y delicados.
Semilla: Una casa para ardillas encapsulada.
Hombre: El ser de dos caras el más inteligente. el más tonto. el más bondadoso y el más cruel.
Dientes: Piezas del molino alojado en la boca.
Eco: La voz explorando lugares y volviendo al propietario
Justicia: Una sincera ceguera honorable que no distingue alegres borregos de terroríficas bestias.
Risa: El intento de fuga de la voz en los momentos entusiastas.
Reloj: Una caja de pequeña ruedas que nos recuerda que no somos eternos.
Árbol: Un rascacielos hábitat de pájaros y ardillas que además es una fábrica de oxígeno.
Perro: Una bestia del bosque que fue amansada por los hombres.
Colibrí: Un pequeño colorido minero que extrae el oro de las flores.
Mar: Un lugar de paz y terror, desértico y lleno de vida, una misteriosa inmensidad azul que tan sólo es un charco para los gigantes.
Manos: Herramientas del artesano que moldea el mundo a su antojo.
Suspiro: Lamento nostalgia materializada en una pequeña rajada de vientos.
Cabello: El bosque que se encuentra encima de la fábrica de ideas.
Fotografías: Un recuerdo que vive en el mundo material y trasciende la memoria.
Libros: Un mar de letras que cantan el himno del conocimiento y la imaginación.
Ojos: Dos ventanas redondas de la mente y los pensamientos.
Libertad: El sentimiento de la naturaleza misma.
Niños: Un hombre inocente alegre y sin incertidumbre.
Sueño: Una realidad falsa que cautiva inspira al mundo que conocemos.
Bandera: Un país representado en colores que ondea en el cielo.
Viento: Una carrera entre las corrientes de aire.
Río: Una gran avenida donde transita todo tipo de gotas.
0 notes
Text
El señor que cumple deseos a niños atentos.
Todas las navidades pedía lo mismo, pero que sus padres no se fueran a enterar. Hacía la carta a papa noel, la sellaba con cinta adhesiva y la escondía bajo el árbol esperando que el gran señor del trineo pasara por ella y cumpliera la petición. Navidad tras Navidad y aunque la carta desaparecía, el deseo no se hacía realidad. Vivían en una casa enorme que para sus ojos podía ser un castillo, lleno de juguetes, las últimas tendencias en camas elásticas, consolas y robótica. Podía mirar las estrellas a través de un telescopio desde su patio todas las noche si quería, jugar en la piscina, ver películas en una sala de cine que su padre le había construído y dedicado porque en la puerta estaba su nombre, pero pese a ser un niño atento, no era feliz. Se la pasaba mirando en internet cómo se hacían los bebés, a sus seis años ya entendía el tema de la reproducción sexual sin tapujos ni vergüenza, examinaba a su padre y su pene mientras se duchaban y también miraba a su madre cuando salía desnuda por la habitación para ponerse encima todas las cremas que te podrías imaginar. El niño nunca preguntó, solo deseaba un hermanito para poder jugar con alguien y que fuese pronto porque también entendía sobre matemáticas y mientras más cumpleaños feliz cantaba, más se alejaba en edad de su posible hermano.
Los padres comenzaron a visitar al doctor mucho más seguido que antes, el niño pensó que estaban enfermos o algo parecido, pero la persona que lo cuidaba le comentó que estaban en “campaña” para tener otro hijo. Sus ojos brillaron como un pequeño dibujo animado y saltó de alegría, no se pudo contener, abrazó a la persona que le comunicaba la gran noticia y salió al patio a desahogar esa euforia que sentía porque pese a que papá noel durante tres años nunca pudo hacer su sueño realidad, se sentía agradecido e imaginaba su vida con ese otro niño que llamaría hermanito para siempre.
A la madre se le daba bien hacer bordados y con el estricto reposo que el doctor le había dado a sus cuatro meses de embarazo, ella comenzó a hacer chalecos y gorros diminutos que el niño se ponía encima para hacerla reír, pero ni eso ni los desayunos con jugo natural de naranja, ni las películas que a ella más le gustaba y que al niño le hacían dormir, ni las flores que el papá traía ni los llamados de las amigas, no había nada que la hiciera volver a sonreír. Una noche él soñaba con su hermanito, le tomaba su pequeña mano y lo llevaba a su jardín, pero no al espacio que todos reconocían, por fin le podía mostrar su lugar secreto, su espacio privado, una gruta donde había creado un altar para él. Estaba su peluche favorito, un oso pequeño y azul que tenía desde que nació, un mechón de pelo de su padre y de su madre que había podido cortar durante una noche donde ambos roncaban, también tenía un foto de los tres, velas blancas, un pocillo con canela y una cruz invertida que había fabricado con palitos de sushi que había sacado de un restaurante. Mientras buscaba cómo nacen los bebés y cuánto se demoran en llegar, en internet le aparecieron una serie de mensajes que llamaron su atención, algunos donde daban técnicas o recetas para exitosos embarazos. El niño comenzó a leerlos con profundidad para saber de qué se trataba y el que más le gustó fue uno que decía que haciendo un pacto con Satanás, era la solución más rápida y eficaz, que él solo tenía que construir esa guarida secreta y que este señor Satanás, que le pareció similar a papa noel, lo haría posible. El niño despertó del sueño con los gritos de su madre y el sonido de una ambulancia que se metía en el jardín de su casa, con mucho miedo comenzó a rezar mientras avanzaba hacia la habitación de sus padres y como si fuese un camino de dulces, la sangre lo guió hasta el baño donde su madre lloraba sentada en el water. El niño se percató que en una toalla blanca de ducha, había algo más que sangre, su instinto lo llevó a abrirla y pudo reconocer el rostro que recién se formaba del que iba a ser su hermanito. El niño caminó hasta donde su padre que lloraba con la cara escondida entre un cojín, le cogió la mano y lo llevó a su gruta para que ambos le pidieran al señor Satanás que su hermanito volviera al cuerpo de su madre para que pronto pudieran jugar.
0 notes
Text
Sol del Trópico, Gabriela Mistral
Sol de los Incas, sol de los Mayas,
maduro sol americano,
sol en que mayas y quichés
reconocieron y adoraron,
y en el que viejos aimaraes
como el ámbar fueron quemados.
Faisán rojo cuando levantas
y cuando medias, faisán blanco,
sol pintador y tatuador
de casta de hombre y de leopardo.
Sol de montañas y de valles,
de los abismos y los llanos,
Rafael de las marchas nuestras,
lebrel de oro de nuestros pasos,
por toda tierra y todo mar
santo y seña de mis hermanos.
Si nos perdemos, que nos busquen
en unos limos abrasados,
donde existe el árbol del pan
y padece el árbol del bálsamo.
Sol del Cuzco, blanco en la puna,
Sol de México, canto dorado,
canto rodado sobre el Mayab,
maíz de fuego no comulgado,
por el que gimen las gargantas
levantadas a tu viático;
corriendo vas por los azules
estrictos o jesucristianos,
ciervo blanco o enrojecido,
siempre herido, nunca cazado...
Sol de los Andes, cifra nuestra,
veedor de hombres americanos,
pastor ardiendo de grey ardiendo
y tierra ardiendo en su milagro,
que ni se funde ni nos funde,
que no devora ni es devorado;
quetzal de fuego emblanquecido
que cría y nutre pueblos mágicos;
llama pasmado en rutas blancas
guiando llamas alucinados...
Raíz del cielo, curador
de los indios alanceados;
brazo santo cuando los salvas,
cuando los matas, amor santo.
Quetzalcóatl, padre de oficios
de la casta de ojo almendrado,
el moledor de los añiles,
el tejedor de algodón cándido.
Los telares indios enhebras
con colibríes alocados
y das las grecas pintureadas
al mujerío de Tacámbaro.
¡Pájaro Roc, plumón que empolla
dos orientes desenfrenados!
Llegas piadoso y absoluto
según los dioses no llegaron,
tórtolas blancas en bandada,
maná que baja sin doblarnos.
No sabemos qué es lo que hicimos
para vivir transfigurados.
En especies solares nuestros
Viracochas se confesaron,
y sus cuerpos los recogimos
en sacramento calcinado.
A tu llama fié a los míos,
en parva de ascuas acostados.
Sobre tendal de salamandras
duermen y sueñan sus cuerpos santos.
O caminan contra el crepúsculo,
encendidos como retamos,
azafranes sobre el poniente,
medio Adanes, medio topacios...
Desnuda mírame y reconóceme,
si no me viste en cuarenta años,
con Pirámide de tu nombre,
con pitahayas y con mangos,
con los flamencos de la aurora
y los lagartos tornasolados.
¡Como el maguey, como la yuca,
como el cántaro del peruano,
como la jícara de Uruápan,
como la quena de mil años,
a ti me vuelvo, a ti me entrego,
en ti me abro, en ti me baño!
Tómame como los tomaste,
el poro al poro, el gajo al gajo,
y ponme entre ellos a vivir,
pasmada dentro de tu pasmo.
Pisé los cuarzos extranjeros,
comí sus frutos mercenarios;
en mesa dura y vaso sordo
bebí hidromieles que eran lánguidos;
recé oraciones mortecinas
y me canté los himnos bárbaros,
y dormí donde son dragones
rotos y muertos los Zodíacos.
Te devuelvo por mis mayores
formas y bulto en que me alzaron.
Riégame así con rojo riego;
dame el hervir vuelta tu caldo.
Emblanquéceme u oscuréceme
en tus lejías y tus cáusticos.
¡Quémame tú los torpes miedos,
sécame lodos, avienta engaños;
tuéstame habla, árdeme ojos,
sollama boca, resuello y canto,
límpiame oídos, lávame vistas,
purifica manos y tactos!
Hazme las sangres y las leches,
y los tuétanos, y los llantos.
Mis sudores y mis heridas
sécame en lomos y en costados.
Y otra vez íntegra incorpórame
a los coros que te danzaron,
los coros mágicos, mecidos
sobre Palenque y Tihuanaco.
Gentes quechuas y gentes mayas
te juramos lo que jurábamos.
De ti rodamos hacia el Tiempo
y subiremos a tu regazo;
de ti caímos en grumos de oro,
en vellón de oro desgajado,
y a ti entraremos rectamente
según dijeron Incas Magos.
¡Como racimos al lagar
volveremos los que bajamos,
como el cardumen de oro sube
a flor de mar arrebatado
y van las grandes anacondas
subiendo al silbo del llamado!
0 notes
Text
“Desde el momento en que tomé la decisión de dejarlo ir, mis sentimientos y mi amor por ése querubín dejaron de existir....
Mi mente ha quedado en completa soledad, cómo el árbol a la deriva del otoño invierno, cuando las hojas secas se rompen y se van con el aire, he adquirido un color de blanco y obscuro sin rumbo ni dirección......
vivo en la melancolía, con una mente en el laberinto sin salida, un mundo horrorifico y siniestro, frío de 0° con un paisaje gris, no hay nadie más por aqui. he capturado muchas fotografías con mi cara diciéndole que todo va estar bien, intentó no llorar, sosorrandole a mi corazón (nada va, hacerte daño, mientras yo te cuide). Con la voz grave salen muchas palabras en silencio......
Digo! <todo estará bien> estoy dando vueltas, tengo visiones de tí.....
Pero luego entiendo, el sol está muy lejos, mis pensamientos se desvanecen con sus cosas frías....... Tuve que aprender a dejar ir......
Cambié mi mundo, mi mundo de flores y alegrías, con un paisaje de azul verdoso a un mundo obscuro. dónde la luna perdió la luz y la pinté con sangre salidas de mis entrañas por ende vanguardia el desierto de polvo con cenizas volando sobre el aire tóxico y frio...”🕯️🖋️📖
Dilan S. Hadz
#poesiassentimientosencontradosenunbalcon
0 notes
Text
¡Perros, mil veces perros!
-Efraín Huerta, junio de 1954-
De nuevo vuestras garras sobre el rostro
de paz y de trabajo de América.
Ya no tenéis descanso, apenas respiráis,
agónicos, bestiales, sucios, embrutecidos.
Desesperados, fríos como la muerte,
teméis a la mujer que ama y al niño
que sonríe.
Teméis a vuestra propia sombra.
Hace un año, a orillas del río Hudson,
asesinasteis a los Rosengberg. El ancho río
lleno de los ojos de Whitman, el río
que todo lo viera, lloró con sus ojos azules
ante la cobardía y el crimen.
Desde hace un siglo matáis de hambre
y de sangre al Continente.
Sólo sabéis matar.
Sólo sabéis escupir
a la rosa de la libertad.
(Chapultepec no olvida. Aquella joven sangre
es como el pan de cada día,
es como la oración de cada día del mexicano.)
Pues sólo sabéis hincar los dientes
y las metálicas garras. Sólo sabéis
degollar a la paloma de paz y de trabajo.
Ahora es Guatemala, donde el azul
es el cristal del triunfo
y la revolución la semilla del amor.
Volvéis a andar, cenicientos y apocalípticos,
grises como gallinas, como perros
olisqueando la adolorida carne del Caribe;
siempre volvéis,
sobre la canción del quetzal,
sobre el Asia que es dulzura
sobre Hiroshima que vio morir a todos sus niños
y ahora sobre el pequeño país,
que se construye al tiempo
que se abren sus alas.
¡Bandoleros de siempre, arrasadores
de América!
¡Pisoteadores de países,
sangrientos y sanguinarios siempre:
en Colombia que se rompió los hombros
y en Veracruz que se llenó de sal
la pavorosa herida del 14!
¡Ya no tenéis descanso!
¡Respiráis, como los muertos, y los muertos
se ríen de vuestro aire,
de vuestras banderas donde las estrellas
están muertas,
donde el azul traiciona
y las barras se desploman de vergüenza!
¡Bandidos sin bandera! ¡Desesperados,
histéricos, hipócritas, viciosos!
¡Ahora es Guatemala, donde el azul
es el azul del cielo!
Guatemala,
donde el honor hace honor a su nombre
y donde el río de Roosevelt y
las rosas de Roosevelt
palpitan;
donde se quiere vivir y amar
como se debe amar y vivir.
Guatemala más hermana que nunca,
la más hermana,
nuestra pequeña niña de los ojos de agua.
(Guatemala, niña de nuestros ojos...
¡Hoy te rompen el alma
y te quiebran la música y el triunfo!)
¡Pues sólo sabéis, oh yanquis de miseria,
oh matadores de indios y de niños,
oh vencedores de Hiroshima,
oh miserables buitres de Chapultepec,
sólo sabéis ladrar,
babear,
morder rabiosamente!
¡Perros, mil veces perros!
Asesinos de todo:
bebedores de la sangre del poeta,
mancilladores de las canas de Whitman,
enlodadores de Jefferson,
enfangadores de Lincoln,
asesinos,
simplemente asesinos...
¡Yanquis, mil veces perros,
yanquis de Wall Street!
¡Maricones de McCarthy, rectores de Columbia,
condecorados de Corea...de Corea del Sur,
ladrones del mundo,
chérifes,
espías,
nadie os olvida, nadie,
nadie os perdona, nadie!
De nuevo vuestras garras sobre el cuerpo
de paz y de trabajo de América.
Desesperados, aislados como el odio,
fríos como un árbol de veneno,
ciegos como una noche ciega,
viles como la eterna vileza,
idiotas como gallinas idiotas,
os lanzáis sobre América,
sobre la suave paz de Guatemala
y volvéis a morder,
perros, mil veces perros,
la carne viva del amor,
la carne viva de la paz.
¡No tenéis más bandera que la sangre de América!
La sangre de todos los países,
la roja sangre de nuestras limpias lágrimas,
¡oh perros
devastadores,
incendiarios, mil veces perros!
0 notes
Photo
𝒰𝓃𝒶 𝓋𝒾𝓈𝒾𝓉𝒶 𝒾𝓃𝑒𝓈𝓅𝑒𝓇𝒶𝒹𝒶...
La sangre del árbol azul, una novela de J. C. Mora
A la venta en Amazon
#Blasón#Heráldica#Belhêtre#Francia#SigloXIX#Siglo XIX#Vampiros#Misterio#Chateau de Martagon#La sangre del árbol azul#novela#J. C. Mora#Anne-Eglantine Léger#Madeleine de Charrière#Evora Daduc#LGBT#Romanticism#Romanticismo#literatura#ficción histórica#fantasía#drama#Lecturas recomendadas#libros recomendados#libros
15 notes
·
View notes