#El trazo de la memoria

[laopiniononline]

Obras que reflejan trayectoria de Patricia Israel en nueva exposición temporal del MUG - Upla

La muestra estará disponible hasta el 26 de febrero. El Museo Universitario del Grabado de la Universidad de Playa Ancha (MUG – Upla), inauguró la exposición temporal “El trazo de la memoria”, que contempla obras de Patricia Israel (1939 – 2011), destacada artista nacional quien, entre otras distinciones y premios, fue la primera mujer en ganar la Bienal de Valparaíso en 1991. Las 18 obras…

[vivencias-del-alma]

Caminos de la memoria

El trazo del pensamiento

hoy relata tu aprender,

personal como el presente

que renueva tu pensar,

caminos de la memoria

que te invitan a crear.

Amanda Ackermann

[mariamanuelaae]

He visto bailar a mi alma

He visto bailar a mi alma,

de puntitas y bajo la luna,

a escondidas para no asustarla,

admirando su candor y calma.

La prueba perfecta de mi existencia,

el origen invaluable de mi propia vida,

artificio de mis memorias pasadas,

contención de mi más dolorosa agonía.

He visto bailar a mi alma,

de puntitas y bajo la luna,

en silencio, para contemplarla,

con el pecho abierto, para escucharla.

Mis ojos, atentos, clamando a su luz,

testigos de cada giro que danzaba,

ensoñando la brisa que su paso levanta,

anhelando con ella poder bailar.

He visto a mi alma rendirse al viento,

desnuda de certezas, vestida de dudas,

una llama temblorosa en medio de la oscuridad,

que danza para recordar su existencia.

En cada giro, se deja un trazo de estrellas,

un polvo brillante que florece al vacío,

y en su vuelo, crea un universo

donde el dolor se convierte en libertad.

He sentido su melodía sobre mi piel,

ese susurro que nadie más escucha,

esa canción que guarda los secretos

de quién fui, quién soy, quién podría ser.

He visto bailar a mi alma,

borrando el dolor de puntitas,

tejiendo la angustia en constelaciones,

soltando suspiros de amor y pasiones.

Y en cada giro, despide un último adiós,

en cada salto, recoge lo que seré.

Con su vuelo, deja ir todo lo que fui

para abrazar, finalmente, lo que soy.

He visto bailar a mi alma,

de puntitas a la luz de la luna,

temblorosa, alejando al dolor

que tantas veces contengo en ella,

escapando de mí para encontrarse

con la eternidad.

María Manuela

Colección - La sonrisa de María

[esuemmanuel]

Yes, there are ephemeral presences that come and stir everything in you, igniting your insides with their sudden frenzy… and then there are the others, those perpetual presences, the ones that become perennial in your memory, creating in your guts an inexhaustible source of emotion that resolves itself in ink… and in love. You, my white stroke of innocence, are one of those that cannot be left unwritten, because they take root in the soul like a sacred vine that has no beginning and no end. That is why I smile with pride every time I remember you and that precious opportunity I had to have you for myself…. God, I can die happy now!

Si, hay presencias efímeras que vienen y remueven todo en ti, encendiendo tus adentros con su repentino frenesí… y luego están las otras, esas presencias perpetuas, las que se vuelven perennes en la memoria, creándote en las entrañas una fuente inagotable de emoción que se resuelve en tinta… y en amor.

Tú, mi blanco trazo de inocencia, eres de ésas que no se pueden dejar de escribir, porque se arraigan en el alma como una enredadera sagrada que no tiene principio ni fin. Es por ello que sonrío con orgullo cada que me acuerdo de ti y de esa preciosa oportunidad que tuve de tenerte para mí…

¡Dios, ya puedo morir feliz!

[dknlkv]

Desde que tengo memoria fui seguidora de Dragon Ball, fue por ello que de niña comencé a dibujar, actividad que me arrepiento haber interrumpido por años. De niña soñaba ser dibujante y una guerrera saiyajin 🥺 lo segundo era imposible, lo primero no creo lograrlo pero se hace el intento por hacer llevadera la existencia con una actividad tan bonita como es dibujar. Con los pocos medios de información a los que tenía alcance en los 90's supe de la existencia del hombre detrás de esa serie que cada tarde era mi total ilusión: Akira Toriyama. Siempre lo admiré bastante, fue mi inspiración de niña, pasaba tardes enteras intentando mejorar mis garabatos para que se parecieran a Gokú. Luego vinieron más personajes, más capítulos, películas... Quién me conoce sabe que soy muy fan de Dragon Ball. Hice este dibujo hace tiempo, pero no me sentía conforme con el resultado. Hoy quiero compartirlo, y aunque no tengo una imagen de mi primer dibujo de Gokú, sé que dista mucho de aquellos trazos. Este es mi humilde tributo y agradecimiento al mangaka detrás de esa serie animada que hizo de mi infancia un periodo feliz.

Hoy presumo orgullosamente que yo crecí con Dragon Ball, la cuál es para mí una de las mejores series de todos los tiempos y de la cual continuaré siendo seguidora hasta el momento en que deba irme también...

Gracias por tanto Akira Toriyama, descansa en paz.

[goldenfurevamp]

Daniel

5 de noviembre de 1979.

Nueve minutos para que sea el sexto día. Llevó contados los días que dormimos juntos desde el retorno de Italia, y anoto en estricta bitácora tus despertares con horarios detallados.

Me gusta anotar todo, Daniel. He comprado carpetas para organizar y documentar tus acciones, asi puedo estudiarte incluso cuando duermes después de besarte por horas.

Me gusta besarte.

Eres tan delicado, tan Pompeya de hormonas en estallido que se desatan a veces solo por un beso, uno que procuro sea casto aunque jamás he podido lograr detenerme. Nunca es un “solo beso” o “un solo abrazo���. Siempre es paredes de  la terraza, el jacuzzi , la alfombra marroquí o los ascensores de 4 minutos que siempre esquivamos como si yo no tuviera poder sobre la memoria o el recuerdo de cualquier intruso que nos descubriera.

Como si pudieran descubrirnos si no quisiera.

No me gusta cómo te mira el barman del hotel. Ese japonés de mirada felina que se rie de lado cuando le pides un Jack Daniels en vez de un escocés. A los ingleses no les va bien el alcohol americano y a mi tampoco esa maldita sonrisa mal hecha del adefesio ese que me dan unas ganas de….

No, no lo mataré.

Debes sentirte orgulloso de mí, Daniel, no ha desaparecido nadie que pertenezca al grupo de “agradables” o “amables” sujetos que se desviven por servirte o saludarte tras una larga mirada que les costaría la vida si no les leyera en el pensamiento que no se atreverían por mí. Si, por mí. El don vampirico a veces es caricia o garra y sé perfectamente cómo inspirar terror o seducción con tal de apartar cualquier mirada infame de ti. Eres mío, recuerda que cada tatuaje en la memoria que estoy trazando en tu pensamiento es para siempre, como los trazos de Italia y nuestro viaje por el sur sobre ese abdomen que descansa boca abajo dormido mientras te escribo.

Escribir siempre ha tenido un fin, el del registrar o informar. Pero no se me ocurre otra cosa que describirte, que sucumbir profundo a cada línea que en este momento se desnuda ante ti y se posa en tu garganta como si tuviera mi sabor. Lo tiene, tiene mi aliento. Si te escribo, te hablo. Si te hablo.. te hago el amor. Recuerda, Daniel, que no tengo mucha paciencia para tus seductoras caminatas de tarzán intelectual abriendo de un tajo la cordura de Londres, recuerda que no quiero Fabrizzios ni caras anónimas alrededor tuyo y que todo lo que llevas encima y por debajo es mío.

Sobre todo lo de abajo, Daniel. Siempre abajo….

Armand.

[waltfrasescazadordepalabras]

Te escribo con pasión y lujuria, con placer y excitante amor te haré el poema de forma elegante, con roces de color y sabor a intensidad, a felicidad que excede cada encuentro nuestro. Sabor a besos en las llamas de un pecado, porque de ello soy preso y esclavo, hoy te haré el amor hasta que amanezca, hoy seré tuyo y te amaré o por lo menos... hasta que despierte... Soñé fantasías por recorrer. La luna plenamente hermosa, totalmente desnuda estaba. Mi poema como sueño temblaba, cuando el escribidor quiso versar, la palabra en efecto cascada, para comenzar el soñar, desboco el trazo de la tinta en el precipicio de la fantasía. Se dio la muerte del soñador… ¡Nació poeta detrás del verso! memoria inmortal de la piel. Vibran dos anhelos al estallido resonando a letras en lejanía Está en la naturaleza de las palabras en la memoria que aletea el vuelo libre de la prosa Palabras en desvelo convoca el ritmo de la poesía Yo el escribidor fecundando tus vivos recuerdos Bajo este doblegado cielo haremos real el deseo ancestral Versando en la penumbra, surgen fulgurantes poemas del espacio estelar donde el verbo sudado anda en nuestros rostros marcando fantasías de luz estelar.

El sendero del amor

[jartita-me-teneis]

Angelina beloff la amante olvidada de diego rivera que era mejor artista que frida kahlo

Los muralistas mexicanos fueron uno de los primeros grupos que implementaron el acrílico como técnica pictórica. Ese material fue comercializado con fines artísticos a comienzos del siglo XX y a diferencia del óleo, permite crear obras con colores más vivos. Lo que aún causa desconcierto sobre este material, es la duración de los colores y resistencia del tiempo de los cuadros que son realizados con este.

Puede que los lienzos al óleo resistirán más que los trazos en murales; es algo que sólo en algunos cientos de años se sabrá. Lo que sí resistirá serán las palabras. Escribimos para recordar, como sentenció en la primera línea de sus memorias Angelina Beloff (1879-1969).

El amor es más tenaz que la memoria.

Eran los años 20 y antes de su triunfal regreso a la academia de pintura mexicana, Diego Rivera (1886-1957) se enamoró de una pintora rusa que había sido alumna de Henri Matisse, para quien también traducía tratados de pintura al francés.

En 1909, ella tenía 29 y él 23. Estaban en Brujas cuando fueron presentados por una de sus amigas en común. Diego Rivera no hablaba francés y Angelina Beloff entendía poco el español, aún así comenzaron a verse, y junto a algunos amigos, recorrieron parte de Europa estudiando y ensayando obras. Al regresar a París, comenzaron la relación formal.

Beloff escribió en sus memorias, refiriéndose a Rivera: «En aquel entonces era un pobre estudiante de 23 años que no sabía mucho del mundo de París, pero yo ya empezaba a amarlo en serio».

Comenzaron a trabajar y pintar juntos; actualmente se expone en el Museo de Arte Moderno de México, un retrato de la rusa hecho por Diego Rivera.

«Cuando nos reuníamos hablábamos de nuestro porvenir, del matrimonio. Diego argüía que sentía temor, en caso de que nos casáramos, de que por falta de trabajo tuviéramos que vernos obligados a vivir en un taller, y que si tuviéramos un hijo tendríamos que tener los pañales dentro».

Aunque el trabajo de Diego Rivera destacó más que el de ningún otro artista mexicano de la época, el de Beloff, igual que el de muchas de las compañeras de los grandes pintores, quedó en el olvido. La rusa sobrepuso la obra artística de Diego a la suya, por lo que su obra no es tan reconocida en México, ni Rusia, ni el resto del mundo.

En 1910, Diego Rivera regresó a México durante un año y al volver a París, se casaron y comenzaron a vivir juntos en diferentes países europeos. Juntos se unieron al cubismo de Picasso, quien los visitaba de vez en cuando en su pequeño departamento.

En 1914, Angelina comenzó una relación amistosa con el escritor y político Alfonso Reyes, que años más tarde sería la persona que posibilitaría su traslado para vivir en México, en 1932; aceptando el puesto de maestra de artes plásticas en escuelas oficiales de la que es parte hasta el año de 1945.

Su trabajo no sólo se basó en el óleo, Angelina realizaba acuarelas y serigrafia para componer bodegones, autorretratos y paisajes. Buscando a través de su obra la reflexión y observación paciente del mundo.

Diariamente, Angelina realizó cuadros para representar el México urbano, los edificios modernos y las olvidadas montañas de las zonas aún rurales. Creó personajes como “la muñeca pastillita” para los niños de este país e incursionó en el teatro guiñol.

Sin embargo, muchos inviernos antes de venir a México, en el crudo frío parisino de 1917, murió de una bronquitis, que después se volvió bronconeumonía, Miguel Ángel, el bebé de Angelina y Diego. Había nacido en el verano de agosto de 1916. Este hecho lo cambió todo ya que el futuro muralista se fue separando de su mujer, abandonó el cubismo y ella se fue sumergiendo en sí misma.

En agosto de 1921, Rivera rompe su vida en París, y decide regresar a México, donde realiza su primer mural al siguiente año.

[unborrador]

Perder es amar

Siempre he sentido que mi pecho está lleno de amor para dar, que mis manos, mis ojos, están hechos para acariciar y mirar. Desde que era pequeña había soñado con enamorarme y poder palpar el amor en su máxima expresión. Conforme han pasado los años, puedo decir que esa primera percepción del amor ha transmutado, y yo con ella. 

El amor es un espectro infinito, y yo solo conocía un pedacito, todo lo que leía en libros de Jane Austen, en poemas de Saramago, o películas tremendamente cursis que me hicieron creer que la única forma de amar era a través de esta noción idealizada del romance pasional, de ese amor romántico; no fue sino hasta que me rompieron el corazón una, dos… muchas veces, que me di cuenta que el amor es mucho más complejo.

Tampoco quiero decir que no me han sabido amar, o que la tristeza invade mi inexorable soledad, o que voy a terminar siendo un cliché más de las mujeres que aman demasiado. Al contrario, creo que las desilusiones me han enseñado esa otra faceta del amor que desconocía, porque cuando pierdes a alguien, cuando lo dejas ir, cuando sueltas… también amas.

Es curioso pensar que perder es un acto de amor, pero dentro del duelo reside el acto más revolucionario de la ternura, compasión, del querer(me).

Cuando amas a alguien, y esa persona te ama de vuelta, el mundo parece levitar en torno a ese sentimiento, el cual se desborda e inunda la intersubjetividad que comparten, esa intimidad que trasciende y toca la esencia de ser quienes son, mutuamente, en secreto, como un espacio único que dos personas crearon y en el cual nadie más puede entrar; en ese mundo habitan las palabras que no siempre son dichas, a veces son miradas, destellos de sonrisas cómplices, confesiones, tacto, una inmensidad de sentires que dibujan y desdibujan el trazo de su historia juntos. Pero no todo es para siempre, ni siquiera el amor, porque este se transforma contantemente. Y las personas se van, como pasajeros que se bajan de tu vagón, y el tren tiene que seguir su marcha, porque la vida no se detiene. Y de repente ese mundo que habían creado juntos ya no será.

La soledad puede ser una compañera amarga cuando pierdes a alguien, y es duro dejar ir, porque no solamente estás soltando a esa persona, estás desprendiéndote de un pedazo de ti también; es decirle adiós a esa versión tuya que solo cobraba vida en compañía de él o de ella, ya nunca más volverás a serla, y ese pedazo que te arrancas con la despedida es lo que duele, porque parece que está inmersa en la cotidianidad y en la costumbre de la presencia del otro. Y ese otro, al volverse un fantasma que habita tu memoria fragmentada, hace que esa versión tuya no se quiera ir tampoco, y no los sueltas, los evocas. Y eso lastima, porque ya no están, ya no estás.

Aun así, amar es abrazar ese dolor, es confrontar la incertidumbre, la ausencia de uno mismo. Amar significa aceptar la posibilidad de salir herido, porque para nuestra mala suerte, la impermanencia forma parte de nosotros, así como si fuera parte del mismo respirar. Nada es para siempre, por eso atesoramos esos momentos y los conmemoramos continuamente, aunque eso implique que el pasado sea una historia que como empedernidos nos contamos una y otra vez, hasta que deje de doler, hasta dejarlo ir.

Amar, como les decía antes, es un espectro, puedes encontrar el amor en la sonrisa de un extraño al subirte al tren, en caminar bajo una noche estrellada, en escuchar el viento pasar por las copas de los árboles, escuchar discos de música ochentera con tu papá en el carro o reír a carcajadas con un amigo. El amor es infinito, el amor sana, te reinventa, el amor vive en la cotidianidad y no nos damos cuenta, hasta que el momento se vuelve recuerdo, hasta que las personas se marchan sin cerrar la puerta, sin apagar la luz. El amor es infinito y por eso también nos hiere, porque nos hace sentir vivos incluso cuando creemos que se va. En realidad, nunca se va, como ya dije, solo se transforma continuamente, como una luz a veces tenue, a veces con un esplendor maravilloso, pero que nunca deja de cobijarnos en su calidez.  

Muchas veces perder a alguien provoca que veamos el amor en todas partes, en uno mismo, en la música, en la poesía, en la compañía de tu mascota, en esa sobre mesa familiar. Perder es seguir amando en nuevas formas, desde la tristeza, desde la soledad, desde la compasión y la ternura.

Y estoy tan agradecida de poder experimentarlo, dejar ir, soltar(me), porque ante la incertidumbre de la perdida yo me reinvento, y sigo amando en nuevas maneras, con distintos matices. Amar perdiendo, pero seguir amando, porque la vida es un tren y no se detiene.

[leukiel]

Tantos minutos sin pensarle, mujer. Tantos segundos muertos, tanta vida abandonada en las memorias que se han vuelto polvo. Y de pronto... Se abre de par en par una carta que repentinamente apareció entre las hojas de un libro. Y ahí está de vuelta usted, con sus cabellos blancos como del mar su espuma. Ahí aparece nuevamente, intacta criatura de agitadas olas y brisa gélida. Demente ápice escurriendo la tinta de una estrella nostalgicamente enamorada. Ahí, ahí está... Seduciendo todos mis sentidos en el trazo que alguna vez esbozó trémula con mi imagen apretando su mente, su alma y su corazón. ¡Cuánto la quise y cuánto me extravié en la ilusión de sus rimas! Usted fue cruel, bastante cruel al ponerle firma final a lo nuestro. Y aún así, muy en el fondo la sigo admirando porque después de tanto, sigue teniendo poder en mí.

—Leukiel.

[elosogudo]

//Ami Kawashima// Sonará raro, pero dios no usa direccionales a veces también va viendo el celular mientras conduce no sabemos lo qué hará hasta el último momento y cuando por fin entendemos sus intenciones no hay otra opción que mirar.

Sonará imposible, pero alguna vez salí con la muchacha más guapa de Hermosillo se preguntarán cómo, lo mismo me preguntaba yo pensarán “¿Qué habrán hecho?” y a continuación les diré:

Nuestro amor duró lo que tardamos en terminar de ver un anime ella nunca había visto uno, era guapa de la vieja escuela so despreciaba a los otakus mientras le decía con voz spooky “después de ver esto dejarás de bañarte” puse el primer episodio.

Mi versión del guion era otra, no esperaba variaciones mucho menos un plot twist o universos paralelos siempre que me visitaba yo (inocente) elegía con cuidado algo para ver y en cuanto la programación daba inicio ella se volteaba a besarme con una desesperación perturbadora entonces pensé que no importaba podría poner cualquier cosa y solo sería ruido de fondo para nuestros caprichos arremolinados pensé en documentales de la segunda guerra o en la familia peluche, pensé en programas de cocina y al final encontré la respuesta más chistosa

tampoco fui un idiota, no puse Evangelion o algo así elegí una comedia romántica, algo de fácil acceso tal vez conservaba migajas de esperanza de que no pasara desapercibida tal vez en el fondo no quería cashoriar sino compartir algo

mi versión del guion era otra y no tenía expectativas muy altas es más móvil ni tenía expectativas solo quería, con un morbo infantil y por ende cruel, juntar esos dos contextos có(s)micamente lejanos

mientras yo esperaba adolescente mi chipi chipi de besitos estivales ya con los ojos cerrados y menta violenta en el aliento de pronto la escucho decir ‘Qué bonita’ y entreabro un ojo para ver los suyos clavados en la pantalla

(Nunca supe muchas cosas sobre ella no sabía, por ejemplo, sobre su difunta madre que una vez le confesó disfrutar de las películas raras de los chinos cuando una madrugada entró a su habitación buscando consuelo de una pesadilla y la descubrió viendo la Metrópolis de Ozamu Tezuka que pasaban por canal 5 no sabía que aunque almacenaba ese recuerdo entre relámpagos y materia gris, se  le había sumergido y era imposible evocarlo no sabía que aun así debido a ese insignificante suceso azul ella desarrolló una curiosidad inconsciente por los personajes de trazos redondeados y ojos grandes)

entre sorprendido y no sé si decepcionado me acomodé a su lado y reíamos juntos y nos daba placa juntos y ella se enojaba porque a mí me daba pena ajena y le tenía que poner pausa a ciertas partes duramos toda la noche así eventualmente me dijo que nos fuéramos a dormir nunca se había quedado en mi casa y de pronto una lucecilla esperanzadora y medio psycho surgió entre la oscuridad de mis entrañas me sentí en una de esas historias de amor que todos juzgan de ridículas, pero secretamente quieren protagonizar y después me soñé casado casado con la muchacha más guapa de Hermosillo

cuando desperté ella estaba frente a la tele se había servido un plato de maizoro y siguió viendo el anime sin mí así fue como supe que nuestros días estaban contados

me le uní, la verdad no me importó el acto yo ya había visto Toradora! muchas veces prácticamente me la sabía de memoria, sin embargo fue una señal de que buscaba otra cosa y esa cosa no era yo y probablemente nada sobre esta tierra esta vez ella tenía el control remoto y nunca le puso pausa se reía gloriosamente y daba pequeñitos gritos ahogados ya rendida a la cursilería de las situaciones en ese punto apareció Ami Kawashima mi personaje favorito una chica propensa a las máscaras a los intercambios superficiales de amabilidad a buscar, sin saber por qué, atención y validación de terceros a tratar bien hasta a los que la tratan mal a nunca ser ella a plenitud a esconder su lado oscuro y cochambroso tras conocer a los otros personajes de la serie poco a poco reúne el valor para ser algo más que bonita y linda y amable se permite expresar con sinceridad sus sentimientos más atroces ser shitty, auténtica infantil, vulnerable admirarse en el espejo decir besen mi sombra, banquete celestial, defenderse a sí misma y dejarse defender por sus amigos encontrar un hogar encontrar el amor encontrar el amor encontrar el amor y verlo elegir a alguien más y aceptarlo y alegrarse por quienes ama sin importar su propia tristeza la versión final de su personaje es dolorosamente humano en ese mundo desmesurado y caricaturesco

ella se entendía con Ami Kawashima lo sé porque tenía una parte en secretamente triste, otra obviamente falsa y porque adentro de sus ojos se reunieron las nubes más oscuras y gordas amenazando con el diluvio cuando Ami Kawashima enfrenta su trágico y agridulce destino romántico pensé en decir algo (por ejemplo: hay un videojuego de la serie con finales alternativos donde puedes elegir a Ami Kawashima como depositaria de tu amor ESO NO IMPORTA DE TODOS MODOS porque uno no quiere elegir a Ami Kawashima sino que Ami Kawashima sea elegida por quien ama), callé, sabía que era inútil ella buscaba otra cosa otra cosa fuera de mi alcance, más allá de las palabras

el anime se terminó como a las 2pm yo preparé té, pero su taza se quedó ahí porque ya había llegado su Uber lo pidió sin decir nada se puso su pantalón y zapatos, pero se llevó puesta una camisa mía de Daniel Johnston el resto de su ropa la llevaba enrollada bajo el brazo izquierdo me abrazó y besó mi comisura dijo ‘nos vemos luego’ y todavía heladita por el minisplit atravesó la calle infernal y bachosa hasta el carro subió fresca todavía fresca para siempre dio las buenas tardes al conductor y cerró la puerta yo me paré al filo del sol esperando que volteara para decir adiós con mi mano, pero no volteó

naturalmente jamás la volví a ver, eso sí se burló de mí en unos tweets donde decía algo como que su jale le puso el Kokún cuando fue a visitarlo después del dolor y el arrepentimiento sonreí y agradecí haber presenciado ese momento algo había pasado algo que yo no podía terminar de entender solo ella solo ella y Ami Kawashima que a pesar de recorrer nuestro mismo camino andan siempre unos pasos más adelante Sonará raro, pero dios no usa direccionales a veces también va viendo el celular mientras conduce no supe lo que iba a pasar hasta el último momento él tampoco esperaba nada solo quería, con un morbo infantil y por ende cruel, juntar dos contextos có(s)micamente lejanos y no tuve otra opción que mirar cuando soltó los hilos.

[andrescasciani]

Catalejo Poesía por Daniel Fermani González – Ilustración digital: Andrés Casciani Para Señal U: edición por Fede Valdivia (noviembre 2023)

La hoja en blanco La mañana esparce un reguero de incertidumbre sobre la hoja en blanco. Su inerme melancolía me trae a la memoria la tristeza de aquel adolescente que lloraba de amor en una esquina. Qué solos estamos. Sobre el lento papel un silencio invisible dibuja trazos que se pierden bajo la mirada. Consonantes, vocales, puntos y sílabas se agolpan en la mano incapaz de dar sentido a ese caos feroz y absurdo. Vuelvo a recordar a ese joven abandonado, y la hoja en blanco es su vida. Quisiera decirle que no la llene de palabras, ninguna será en el tiempo la adecuada ni servirá para calmar ese otro vacío, el verso faltante, el capítulo no escrito, el recuerdo imposible de los sueños perdidos.

*Obra disponible: compras y consultas por mensaje privado o al mail andrescasciani@gmail.com

[joseandrestabarnia]

Makovsky Konstantin (1839-1915)

EN EL ESTUDIO DEL ARTISTA

1881

Tamaño - 212,4 x 155

Material - lienzo

Técnica - óleo

Número de inventario - Inv.9385

Recibido del Fondo del Museo del Estado. 1927

En 1878 K. E. Makovsky se instaló en una casa en Palace Embankment en San Petersburgo, conocida como Mengden Mansion. Allí, se pintó un cuadro que representaba el taller del famoso maestro, decorado con pinturas, muebles antiguos, alfombras, utensilios antiguos, armas, telas. El artista estaba obsesionado con la pasión de coleccionar. Según las memorias de su hijo S.K. Makovsky (1877-1962), representado en la imagen, en el futuro un conocido crítico, ensayista, historiador del arte, Konstantin Makovsky, en busca de antigüedades rusas y no rusas, a menudo deambulaba por los mercados, entraba en tiendas de antigüedades: “... compraba constantemente “hermosas antigüedades” con buen gusto, pero sin mucho análisis, tanto necesario como innecesario, y lo que podría ser útil como accesorio para una imagen histórica, y lo que simplemente le “gustaba” su elegancia, originalidad o pretenciosidad…”. Las colecciones fueron un puntal necesario y al mismo tiempo un caldo de cultivo para el artista de la época.historicismo, cuyo vívido exponente en el arte ruso fue Konstantin Makovsky.

Konstantin Yegorovich a menudo representaba a miembros de su familia en lienzos festivos y coloridos. Su hijo Sergei, un niño de ojos azules con rizos dorados, posó para él en una serie de obras: "El pequeño anticuario" (década de 1880), "Retrato de familia" (1882), "Boda Boyar Feast" (1883) y otros. En la familia Makovsky, la pintura "En el estudio del artista" se conocía con un nombre diferente: "El pequeño ladrón": "... aquí, como un niño de tres años con una sola camisa, sentado en un sillón, yo Alcancé un jarrón de cristal con frutas exuberantes, y cerca, un enorme San Bernardo pelirrojo estaba alerta, expectante, tendiéndole la pata al jarrón. Este San Bernardo no era nuestro perro, lo traían a las sesiones de V.F. Golubev, padre de Vitya Golubev, mi compañero y amigo desde que tengo memoria…”, recordó Sergei Makovsky.

La pintura "En el estudio del artista" demuestra las mejores cualidades del talento de Makovsky, apodado por sus contemporáneos "Rubens ruso": la riqueza y variedad de armonías de color, el virtuosismo de la pintura, la energía emocionante de los ritmos de los trazos libres en espiral.

Información e imagen de la web de la Galería Tretyakov.

[visionescontemporaneas]

Del 08 de junio al 01 de octubre del 2023

VC#032 SILVIA ZAYAS

Nacida en León y con base actual en Barcelona, Silvia Zayas trabaja en los límites de las artes escénicas, el cine y la coreografía expandida. Investiga formas de trasladar el lenguaje fílmico a diferentes dispositivos performativos, y mecanismos escénicos al terreno audiovisual trabajando con nuevos modos de percepción y atención al espectador. Un cine que viene a través de fantasmas, agujeros y exclusiones, instrumentos imposibles, experiencias subacuáticas, explosiones, lo infantil y la ficción de la memoria, imaginarios extraños de trazos históricos y todo eso que aún no podemos alcanzar a saber. Sus trabajos se contemplan como procesos de investigación compartida y de larga duración que se pueden materializar en diferentes formatos.

Este Visiones Contemporáneas se centra en su trayectoria audiovisual más inmediata con dos películas que ponen el foco en la naturaleza, el entorno y las ficciones especulativas; ê (2021) película que se sumerge en el Mediterráneo en el entorno de la ciudad de Barcelona, en busca de una variedad de pez raya mientras asistimos a las alteraciones en la percepción sensorial submarina y Puebla (Co dirigida junto con María Jerez, 2021) una coreografía fantasmagórica en un pueblo expropiado, que no abandonado.

Sus obras han sido presentadas en La Casa Encendida, Museo Reina Sofía, Matadero y Teatros del Canal en Madrid, Festival Salmon y Arts Santa Mònica en Barcelona y el MUSAC de León entre otros. En 2020 fue galardonada con la beca de videocreación, Multiverso otorgada por la Fundación BBVA. Esta será la primera vez que expone en Salamanca.

OBRAS

Puebla, co dirigida con María Jerez. Sonido. Color. Digital. 2021. 36’.

ê. Sonido. Color. Digital. 2022. 44’.

[zekoso]

La vida…

Sopesa cada uno de los recuerdos que primero te vengan a la mente cuando te digan, la vida.

Es curioso como somos capaces de dibujar en la memoria trazos que definen caminos a los recuerdos, a cachitos de historia viva, y como todo eso se puede romper.

Vivo con miedo desde que te fuiste, por la forma de irte y por no poder despedirme. Y ese miedo no deja de perseguirme, y más ahora que palpito demás de lo que debería.

Perderte ha supuesto un cambio en la forma de ver las cosas, un nuevo amanecer amargo, diario, en el que quiero contarte mucho más de lo que te contaba. En un momento que todo tiene un vacío.

La vida, la que a ti te dejo, y vives ahora en la mía.

Cuando pienso en la vida pienso en la muerte, y eso antes no pasaba. Porque estabas y era diferente como veía las cosas.

Me invade el miedo, y tengo mucho miedo de la vida pero no quiero la muerte. Estoy asustado, y te hecho de menos. Mucho.

Tengo tanto que contarte que antes no te contaría…

Te quiero Ro.

[injertosyesquejesb]

Estoy sentada, como siempre, frente a la ventana de tu cocina. Es la hora de la comida y es fácil equivocar el camino, los ojos y el tiempo, para llegar hasta aquí. Es fácil tomar café en silencio, lo difícil es imaginar en dónde estás ahora. Pienso en tus gestos, en cómo frunces el ceño cuando masticas, en las migajas de pan que caen en tus rodillas por encima del delantal azul marino, a cuadros, que tal vez llevas puesto. Estoy frente a tu mesa, en la que abundan los trastes viejos y los objetos inservibles para los que nunca hemos encontrado lugar; aquí, en la superficie de madera que cubre un vidrio grueso, abrimos el espacio suficiente para acomodar tu plato, el mío y la jarra de plástico que aún conserva la pala de madera con la que hace unos minutos disolví el azúcar. La sopa, un puré de zanahorias, todavía está caliente. Es fácil recordar la consistencia, el color anaranjado, recordar que aquí, en tu casa, no existen los saleros. Lo difícil es transcribir cada uno de tus gestos hoy, después de años, a esta misma hora, tan lejos de aquí.

Si pierdes memoria, nos conviertes en las raíces de una ficción profunda que sostienen al único árbol podrido. Si olvidas tú que me enseñaste a escribir, a quién voy a dirigir después mis trazos de letra manuscrita, a quién voy a explicarle en cartas cómo el fuego lastima la piel, cómo hiede un velatorio a la medianoche de Navidad, cómo se entierran, o cómo se incineran, los hijos que nunca nacieron. Cada vez que olvidas, yo también olvido: me pierdo igual que tú; pero si contestaras mis cartas, si todavía fueras mi abuela, me escribirías protestando que no me pierda porque no tengo la edad y tampoco el derecho. Tú, en cambio, ahora es cuando puedes hacerlo, puedes quedarte en la cama todo el día, perder el tiempo, las agujas, llorar hasta quedarte dormida; dejar de hablar o de coser o de comer, incluso, y mandarnos a todos al diablo para quedarte sola.

A nosotros nos queda tiempo de angustia y, a mí, más noches intentando escribir en fragmentos cómo la vida es un relato que no entiendo; esperando a que me contestes de nuevo ¿Ya nunca más vas a escribir con el cuerpo? Nunca voy más lejos de la media cuartilla antes del insomnio. En la esquina superior de cada hoja siempre anoto tu nombre, que también es mío, y después confundo la cama de mi infancia con la cama de tu abstinencia porque a las dos prendimos fuego el mismo día. Ya no siento vergüenza por mis cartas porque tú ya no vas a leerlas, vuelvo a ellas como se vuelve al no remedio y a los paseos en círculo. Vuelvo a escribirle a mi abuela, la que tú eras, y un día lo voy a hacer sin agotarme, sin náuseas, sin diarrea; voy a bajar las escaleras de tu casa abandonada y a despertar, a enfrentar el día como me enseñaste, con el café caliente y el regaderazo de agua fría. No voy a olvidar y no voy a perderme porque si respondieras tendrías razón, no tengo derecho.