#y cambio el final de la respuesta ah

[alexxv]

' eso temía escuchar. ' admisión, aunque se percibe ligeramente divertida, no logra manifestar humor por completo cuando presión personal parece predominar en voz. si es que una conclusión errónea, podría influenciar de forma negativa desempeño de equipo, haciéndole sentir culpable de ello. ' es difícil saber qué pistas seguir. ' en especial cuando, cada una, parecía inclinar balanza de forma equitativa. ' impresionarles es una palabra grande. ' opina, intentando alejar aspecto pesimista de sí cuando tiene un objetivo al cual aferrarse. ' ¿cuántas son las posibilidades de que la respuesta obvia sea la correcta? ' pregunta se inclina a hermana debido a área profesional femenina, quizá probabilidades podían ayudarle a confiar más en propio instinto. ' quizá, pero... ' se detiene un momento, pensando en ello. ' mis habilidades no han sido de mucha ayuda hasta el momento. ' tal vez sea debido a ello, que se ha sentido tan fuera de lugar en la academia. pedido ajeno, sin embargo, es acatado a mitad de propia conclusión, tomando extremo de sofá para moverlo un poco. ' parece una trampilla. ' comenta, elevando mirada del suelo, para centrarla en dani.

— Ah, sí, no tengo duda de ello. ¡No harían una historia lineal! Seguro hay cosas que apuntan a todas las teorías, aunque la evidencia debe ser más fuerte para alguna de ellas —al menos, eso esperaba. No era sencillo estudiar un caso inventado. Tenían que usar pistas limitadas, todas ellas planeadas para ser interpretadas de forma particular, y no podían ponerse creativos para buscar respuestas. Pero tendría que trabajar con lo que había. Ignoró la leve presión que sintió en la garganta, sonriendo de lado ante respuesta contraria—. Así que estás planeando impresionarles con tus dotes de investigación, para esta primera misión —y en lugar de ser el socarrón de siempre, tono fue un poco más suave, indicando que comprendía preocupación contraria, la cuál no le costaría demasiado percibir—. Tienes más cosas que aportar que la investigación cruda en los casos. Si no, no pondrían otras especializaciones en la academia. Pero, ah, eso no quita que puede irte espléndido en esta misión. Mira, ayúdame a mover este sofá.

[idoltoons]

Opinión de los reyes sobre: Elias Rondell

Elizabeth: Es mi tesoro más preciado, mi sol en las mañanas, la sonrisa en mi rostro… Es mi mundo entero, soy tan afortunada de tenerlo como mi hijo. Jamas dejare de combatir las amenazas del mundo hasta que pueda estar segura de entregarle un futuro pacifico en el que pueda vivir.

Charlotte: Es un niño precioso y muy educado. Tanto tiempo que Cervantes pasa con él en sus misiones no entiendo porque no se le pega algo de ese niño.

Rosalie: Es un niño tan dulce y encantador. Sus grandes ojos rosas me recuerdan a esos bellos ojos de su madre cuando era solo una pequeña niña. A pesar de ser la viva imagen de su madre tiene el espíritu de la aventura como su padre. Tengo la certeza que será un rey con el que adorare trabajar en el futuro. Estaré ahí siempre que lo necesite tal como lo estuve con su madre.

Zefora: El príncipe Elías puede ser muy imprudente la mayoría del tiempo al no conocer sus limites como humano. Pero no lo puedo culpar�� es el error natural del humano al creer que puede luchar ante la más complicadas de las adversidades y siempre ganar. Mi familia les enternecen y termina por causarles gracia la confianza con la que el humano cree que todo girara a favor de ellos. En mi opinión, en lugar de causarme gracia, me causa curiosidad… Tal vez nunca ha sido un error natural… si no, una bendición… Observare su crecimiento con el paso de los años, y tal vez, él sea la respuesta a mi pregunta.

Liam: Se ve que es un niño educado, bondadoso y aventurero. Es la viva imagen de Elizabeth, pero tiene ese pequeño mechón de cabello que me causa ternura, es el mismo color de cabello que el de Caleb. Como lo extraño, me agradaba mucho Caleb… Se pierde en sus recuerdos Ah si! Elías será un buen rey, estoy seguro que Melissa hará un gran equipo junto al resto de futuros reyes para mantener la hermandad entre especies.

Khalil: El niño de Elizabeth es muy frágil, débil y muy emocional. Puede que le espere un reino sin problemas, pero eso no es excusa para no esforzarse en volverse un rey cuya fuerza genere el respeto de los que aun permaneceremos al cargo de los reinos. En mi caso, seria imposible tomarme en serio a un rey como Elías… Pero es solo una opinión, de todos modos no es como si Elizabeth me escuche y haga un cambio drástico en su hijo.

Everett: El apellido Rondell finalmente se estaba levantando gracias a Lizzy y viene ese niño a arruinar lo que con esfuerzo habíamos logrado. Torpe, débil, ingenuo e innecesariamente sentimental. Elizabeth era la reina perfecta pero tuvo que mezclarse con Silvertar. Y al menos Silverstar era una bestia en el campo de batalla, pero su hijo nació con nula gracia de batalla.

Opinión de los príncipes/princesas sobre: Elias Rondell

Cervantes: Es un buen amigo mío. Antes creía que por la diferencia de edad seria una perdida de tiempo conocerlo, pero al final del día me termine encariñando del niño. Es muy astuto y tiene grandes habilidades de pelea. Por eso decidí volverlo líder del equipo. Su preocupación por quienes lo rodean siempre es sincera… A pesar de ser muchos años mayor que él, hay veces que sus consejos me dan una perspectiva que no encuentro en ningún otro amigo. Elías es el tipo de amigos que siempre será sincero contigo aunque esa sinceridad te duela o te haga enojar… Siempre me veo rodeado de gente, todos siempre quieren algo de mi… Pero Elías esta ahí siempre enteramente porque quiere asegurarse que me encuentro bien… nunca para pedirme algo. Sera un excelente rey.

Rafael: Elías es un buen amigo mío. Desde que era más niño, venia a visitarnos a mi madre y a mi para pasar el tiempo. Mamá solía preparar un postre exclusivamente para compartirlo durante su visita mientras este miraba curioso mis libros. Recuerdo con risa cuando una vez me menciono que no podía entender porque mis libros estaban repletos de puntos, sin letras o dibujos, cuanta inocencia. Hoy en día, aunque no pueda verlo, se que ha crecido mucho más, su voz esta cambiando, y sus preguntas cada vez me hacen pensar más tiempo del que solía hacerlo cuando este era mas niño. Lo que antes era un niño completamente ajeno a la realidad aterradora que mamá cuenta al regresar de cada una de sus aventuras… actualmente ese niño se esta haciendo más consciente de la realidad… Y eso me entristece. Sus visitas se han vuelto menos comunes, y cuando viene al reino, no desaprovecha la oportunidad para pedir consejos, respuestas del que hacer para poder arreglar el mundo exterior. No puedo evitar que crezca, pero al menos puedo rezar para que la sabiduría que la tierra le haga tomar las decisiones correctas que lo mantengan a salvo.

Raviv: El príncipe Elias es un joven encantador. Tiene un lado sentimental que enternece, siempre haciendo lo posible para adaptarse y respetar las culturas que lo rodean. Demuestra su compromiso con la paz entre especies. Desearía poder ser reina antes de que este tome el trono del reino humano, pero hasta yo se que suena imposible, no creo tener tanta suerte para que mi madre me ceda el reino pronto. Solo quisiera estar segura que ella no será tan dura con él. Hace lo mejor que puede, merece estar rodeado de gente que le de la confianza que necesita. Mi titulo como princesa no será suficiente para ayudarlo una vez este se convierta en rey, pero hare lo posible.

Melissa: Es una bomba de nervios que explota ante cualquier inconveniente, pero eso lo hace tierno. Amy tuvo suerte de atraparlo ni bien lo vio por primera vez. Es una pena, pero me alegro por ella, tendrá un buen marido. En cuanto a mi, daré lo mejor para asegurar la paz y hermandad entre especies, así como comprometerme a luchar a su lado cuando el peligro se muestre.

Ares: El principe Elias es admirable. Valiente, estratégico, determinado, es genial! Amy por años me ha contado del príncipe humano, y realmente quiero ser amigo de alguien como él. Puede que la primera vez que nos conocimos no fue lo esperado, pero estoy seguro que si me esfuerzo, puedo llegar a agradarle y tal vez quiera ser mi mejor amigo! No puedo esperar para cuando seamos reyes y nos reunamos cada mes para organizar nuevas estrategias. Ambos portaremos amuletos mágicos que potenciaran nuestros poderes, y mi primera propuesta para el futuro rey humano es unir la tecnología humana y usar nuestro poder para hacer posible nuevos equipos avanzados que nos permitan explorar fuera de la tierra. Tal vez Elias y yo podamos ser los primeros reyes en viajar al espacio! Estoy seguro que querrá formar parte de algo tan grande!

Amy: Cuando seamos adultos, nos casaremos, nos volveremos esposo y esposa, marido y mujer, rey y reina! Falta tan poco para que ese dia llegue! Sera un esposo perfecto! Lo amo tanto! Y estoy segura que esta loco por mi solo que le da pena admitirlo. Ojala esa pena se vaya una vez cumplamos mayoría de edad porque no pienso esperar más años para casarnos!

Bonus: Adler: Su sola presencia hace feliz a nuestra princesa, por lo que yo no tengo que decir. Princesa contenta, siervo contento. Ivor: Suda mucho. Selig: Un desperdicio de oxigeno. Zev: Molesto. Ofelia: Supongo que agradable. Odette: No importa como sea, no vivirá mucho una vez encuentre el momento indicado para acabar con su vida. King Clown: No me desagrada, pero como Odette lo odia tengo que apoyarla.

[yinnydegoxs]

¿Amor o amistad? Parte 23

Apenas entró en la casa pudo sentir un abrumador aire pesado, la densidad de magia dentro era tan espesa que podía jurar que podía palparlo con sus manos; caminó dentro de la casa, yendo hacía el cuarto de Asgore, en un principio pensó que si bien el ambiente se sentía así de viciado podía manejarlo, aun si se sentía más fuerte que su celo, pero no tardo mucho más de un minuto en empezar a sentir un leve mareo, el calor sofocante, la sensación de cosquilleo por la zona baja de su cuerpo, más una especie de quemazón insistente en su alma.

Era como si fuera él quien estuviera en celo.

—Oh, veo que al final decidiste venir, Dings.

Gaster levantó la vista, sintiendo ahora el calor acoplarse en sus mejillas mientras veía a su majestad solo con la parte inferior del cuerpo cubierta, aún tenía el lado lógico lo bastante despierto para entender que la sensación del celo era menor si no tenía tela molestando.

—¿M-Majestad…?

—Tengo que decir que una parte de mí pensaba que no vendrías… —le levantó del mentón — pero ahora que estas aquí… no voy a dejarte escapar.

Antes de que Gaster tuviera siquiera tiempo de procesar en lo que se había metido, el rey lo aprisiono contra la pared y tomó su boca con la suya, empujando su lengua dentro para atraparlo completamente; el esqueleto pudo sentir una corriente de magia cuando sus lenguas se enredaron, hacía años que Asgore no hacía eso, porque decía que podía estimularlo demasiado, en ese tiempo no lo entendía pero ahora todo cuadraba, mientras más profundo y apasionado era el beso, más de su magia se mezclaba y alteraba enteramente la suya, sus piernas en un momento flaquearon y termino en el suelo casi al instante.

—A-Ah… ¿m-majestad qué…? Yo…ah…

Jadeo ahogadamente cuando se libró de él, aquello no era como cuando lo hizo las primeras veces, donde sus besos solo lo descolocaban, ahora estaban cargados de magia con quien sabe que efectos; pudo notar la tela de sus pantalones apretarlo de repente, sin siquiera invocarlo por su cuenta, su cuerpo estaba preparado en parte y claro que Asgore notó ese cambio.

—Te lo advertí, ¿recuerdas?

Dicho aquello, lo levantó en brazos para llevarlo dentro del cuarto, el esqueleto estaba lo bastante aturdido y ahora nervioso como para oponer algún tipo de resistencia, estaba pensando seriamente que se había metido en la boca de un lobo. Asgore lo dejó gentilmente en la cama, pero no tardo ni un segundo en tomarlo de la cadera y prácticamente sacar sus pantalones de un tirón.

Gaster inmediatamente se cubrió la cadera, dentro de lo físicamente posible, con el suéter, por lo general Asgore no solía ser tan precipitado al inicio. El rey lo miró y se arrodilló delante de la cama, tomando una de sus piernas para separarlas, pasando su lengua por la zona y luego mordiendo el muslo, no lo bastante fuerte como para que doliera, pero si para dejar marca, haciendo que el esqueleto saltara de la sorpresa.

—A-Ah majestad eso… —jadeo por lo bajo.

—Levanta la tela, Dings.

El otro se estremeció al oírlo, aquello no solo sonaba como una, era una orden directa. A pesar de que él ya se había mostrado varias veces, levantó apenado la prenda para dejar al descubierto su miembro a medio despertar, a pesar de que apenas lo había tocado. Asgore por su parte, lamió alrededor de la mordida, para luego llevar su lengua más cerca de la zona más sensible, sopló por arriba del miembro y apenas rozando con sus labios para hacer que se crispara con las sensaciones.

—M-Majestad e-eso s-se siente raro…

—¿No has entrenado aquí delante?

— A-Ah… —sintió su magia acumularse en la cara —y-yo s-solo un poco c-con…

Asgore frunció el ceño un momento ante esa respuesta, no quería dejar que nadie tomara nada primero que él, quizá debió hacer esto mucho antes en lugar de reservarlo. Tomó el miembro con la mano libre, mientras pasaba su lengua por arriba, notando un salto muy fuerte en el otro; peló con cuidado la punta antes de comenzar a tomarlo en su boca, presionándolo contra su paladar y cuidando que sus colmillos no lo tocaran.

Gaster apenas pudo reprimir un fuerte gemido mordiendo la tela del suéter, sujetando tembloroso la tela, aquello se sentía muy, muy diferente a lo que había estado haciendo, los juguetes no se podían comparar ni por asomo a la sensación ardiente y húmeda de su boca. Podía notar que el rey comenzaba a ir más rápido cuando su miembro estaba completamente erecto, haciendo un ritmo más fuerte y cambiante de lo que él llegaba a hacer, después de todo el mantenía un ritmo constante, no había punto de comparación de un trasto sin vida a algo así.

Intento que su mente no se centrara en ello, apretando los dientes, solo para poder aguantar aquello, más Asgore atraía su atención de nuevo a su zona baja, arañando sus piernas y cadera, presionando la base y subiendo lento hasta la punta para volver a meterlo en su boca de golpe. Al final luego de torturarlo un poco de tiempo, arqueo la espalda mientras no podía evitar terminar en su boca, el rey apretó sus labios y subió por su miembro, como queriendo tomar hasta la última gota de magia que hubiese quedado.

El esqueleto lo miró muerto de vergüenza cuando trago de una forma muy visible.

—Parece que aún te faltaba algo de entrenamiento Dings.

Asgore miró de reojo el bolso que había traído con él y como un frasco con una especie gel o algo similar yacía dentro, lo tomó con una de sus manos, mirando al esqueleto, esperando una respuesta.

—A-Ah, yo…—soltó apenas la tela para hablar o al menos intentarlo —p-pensé que q-quizá yo… n-no lubricaría al no ser mi celo… a-así que…

Miró de nuevo el frasco y sintió molestia por un momento al ver que tenía menos de la mitad del contenido, así que habría estado usándolo hasta hace no mucho tiempo. Se levantó del suelo y subió a la cama, tomándolo de la cintura para elevarla y dejar expuesta su entrada.

—M-Majestad e-esta pose es… t-tan vergonzosa… —lo miró muerto de pena.

—¿Oh? ¿Lo crees? —abrió el frasco y tomó algo del contenido —creo que es una buena posición para que devuelvas el favor…

Gaster balbuceó apenas algunas silabas cuando Asgore retiro la tela y tenía delante de su rostro lo suyo, de alguna forma más imponente de lo que él recordaba, se estremeció levemente cuando las feromonas más concentradas llegaron de golpe, embriagándolo. Tímidamente paso su lengua por la piel caliente, tomando tembloroso la punta, el rey jamás le había pedido algo como eso, podía decir que tener aquello al alcance despertaba una excitación que nunca había sentido.

Asgore se sorprendió por un segundo, realmente no esperaba que el otro accediera a su petición, quizá solo quería molestarlo un poco, pero admitía que sentir que intentaba tomarlo tan torpemente en su boca era un estímulo gratificante. Mientras él estaba en ello comenzó a frotar la entrada por fuera con los dedos humedecidos, antes de presionar y meter los dos más largos, si algo sabía bien, era donde el esqueleto era sensible y era accesible, frotó su interior con bastante precisión, notando que el otro ahogaba un gemido o más y movía su lengua alrededor, apretando despacio con el interior de su boca.

Estiró con cierta rudeza, empujando sus dedos hasta la base, podía ver con claridad cuando Gaster se sobresaltaba o su miembro volvía a tener un tirón sin tener que tocarlo. Le dedico unas cuantas mordidas alrededor de la zona, sin dejar de estimular dentro, sentía sus pequeños espasmos cuando las mordidas eran muy cerca de su miembro, atrapó los testículos con cuidado, estrujando apenas para un estímulo un poco más fuerte.

Pudo notar al momento que con el toque adecuado lo hacía terminar una segunda vez.

—Parece que estas mucho más… excitado en esta ocasión —se retiró un poco para dejarle hablar.

—A-Ah… n-no… —jadeo agitado.

—¿Estabas esperando esto con ansias? —golpeo con sus dedos el interior.

—¡AH! —soltó un gemido de sorpresa.

Al verle la cara pudo notar los ojos con forma de corazón, con un tenue rosa difuminado, podía decir sin duda que él ahora estaba muy impaciente por continuar; lo jaló suave para subirlo sobre su cadera mientras él se recostaba ligeramente, dejando que su miembro reposara entre sus nalgas, frotando suave para darle a entender sin palabras que debía hacer. Aunque sabía que aquello podía ser demasiado ya que lo notó congelarse en el lugar con la cara roja así que lo tomó de la cadera para levantarlo levemente y frotarse contra su entrada.

—Dings, ¿entiendes lo que tienes que hacer o debo decirlo?

—L-Lo entiendo… —murmuró notablemente avergonzado.

Se enderezó un poco, apoyándose apenas de forma estable antes de presionar contra su cuerpo aquel caliente miembro, más cuando quiso tomarlo con calma, Asgore posó las manos en su cadera y lo hizo bajar de golpe, haciendo que lo tomara todo de una embestida, arrancando un gemido fuerte y con una cara lastimera, aquello era algo que su rey no quería perderse.

—Si presiono aquí seguramente se sienta mucho mejor.

Dicho aquello, posiciono sus pulgares contra el vientre mientras lo subía y volvió a repetir la acción a pesar de que el esqueleto intentando retirar las manos de Asgore, pero mientras más lo movía sobre él, cada que golpeaba profundo en su ahora excitado y sensible interior simplemente perdía cualquier intento de resistencia, sus pequeños juguetes nunca llegaban realmente tan adentro y estando arriba sus espasmos internos lo apretaban más, intentando que no pudiera salir. No pudo resistir más con su voz, de pequeños gemidos contenidos ahora lo hacía cada que golpeaba hondamente en su vientre.

—¡A-Asgore! ¡Así! ¡T-Tan profundo…!

—Oh, ¿no llegas tan profundo cuando entrenas? —preguntó ronco, sin detenerse.

—¡A-Ah! ¡N-No! ¡N-Nunca p-puedo… ah!

Asgore no pudo evitar sonreír con cierta satisfacción de oír eso, de tanto en tanto, movía a la vez su cadera para entrar hasta la base en su interior, haciendo que el esqueleto gimiera más su nombre, no negaba que eso era algo que le gustaba, cuando se olvidaba del honorifico y solo lo llamaba a él, no a su título.

Gaster gimió ahogado por el calor y aquella magia que desprendía con más intensidad ahora que estaban en el acto, su mente lentamente se iba nublando y solo podía llamar al rey, rogando por más de aquello, se sentía diferente a cuando era su celo, de una forma más intensa y tal vez más excitante al ser él quien era embriagado por las feromonas. Se estremeció entero cuando su alma lentamente iba bajando y podía sentir el movimiento en su vientre, cuando sintió empujar directamente contra ella no pudo evitar correrse de nuevo.

Asgore lo sintió apresarlo de golpe debido al orgasmo, dio unas pocas embestidas más antes de salir y terminar sobre su vientre. Pero eso estaba lejos de terminar. Tomó al esqueleto para tirarlo encima de la cama, con la cara contra las sábanas y levantando su cadera, separando con una de sus manos los glúteos, frotando de nuevo su miembro que no parecía haberse calmado en lo más mínimo.

—¡¿A-Ah?! ¡A-Asgore espera, e-estoy muy sensible ah-!

El rey lo interrumpió, entrando esta vez despacio para que su interior grabara a fuego lento su forma, si es que no la sabía ya después de sus otros encuentros, termino por llegar hasta la base, notando una leve vibración en la punta, podía notar la inquieta alma del esqueleto intentando acomodarse para tener más. Mientras, el dueño de aquella temblorosa pero atrevida alma luchaba por no desvanecerse de un momento a otro, mordiendo y enredando sus dedos en la tela que cubría la cama, cuando notó movimiento y como su cadera era sujetada para que no se dejara caer, intento callar sus gemidos, estaba mucho más sensible después de la primera ronda y no le había dejado ni un momento para recobrar el aliento.

Lejos de dejarlo acostumbrarse, se aferró con sus garras a su cadera y la levantó de forma que pudiera frotar con cada embestida la cara interna de su pelvis, sabía de sobra que aquello hacía que la razón del esqueleto se apagara por completo y en esta ocasión no fue la excepción ya que al momento de empezar a frotar aquella zona él ya no pudo resistirse a gemir.

—Agh Dings… —gimió roncamente, notando los espasmos que lo apresaban.

En un momento, una idea cruzó por su mente, una muy tentativa, más porque seguramente si Gaster no aguantaba todo su celo, entrenaría más con quien sabe quién, a pesar de que no tenía derecho, aquello le molestaba demasiado, dejar que otro monstruo lo vea así de vulnerable, que lo escuchara gemir, que viera esas expresiones que solo tenía en la intimidad o que probara más de él. No podía soportar la idea de compartir absolutamente nada de ello con nadie.

Lo quería solo para él.

—¡AU! ¡Ah! ¡A-Asgore eso d-duele!

Gaster notó un fuerte pinchazo doble en su cuello y un ligero crack de sus vertebras cuando el rey le había mordido bruscamente, clavando sus colmillos en el hueso y logrando que sangrara, tiró de su pelo débilmente antes de notar una especie de chispazo en su cabeza y una corriente recorrer toda su columna desde la zona del daño hasta la punta de su coxis. Ahogó un grito mientras su alma bajaba del todo para ser embestida rudamente por Asgore, sabía que aquello era efecto de esa mordida tan precisa; la sensación de dolor desapareció por completo, solo sentía placer con cada movimiento, era demasiado para su mente asimilarlo todo, y sin poder resistir mucho más tiempo volvió a llegar al orgasmo, pero mucho más fuerte que antes.

Asgore apenas tuvo tiempo de sacarlo para no hacerlo dentro.

—No te desmayes ahora, apenas estamos comenzando.

Dicho aquello levantó por el pecho al esqueleto para pegarlo contra él, hizo que juntara sus piernas para pasar entre sus muslos su miembro y frotarse contra ellos, sin dejar descuidada la marca que ahora le había dejado, lamiendo y besando la zona herida que hacía exaltar al esqueleto. Apenas podía entenderse vagamente como pedía lastimero que le diera un respiro, pero eso no iba a pasar, ahora que tenía a un compañero en su celo después de siglos, no lo soltaría hasta estar satisfecho.

Se despertó completamente adolorido, podía sentir sus piernas adormecidas y sus caderas sufrir con cualquier tipo de movimiento brusco, así que se sentó con cuidado. Se llevó una mano al cuello, notando que traía una fina tela o venda que le cubría, suspiró, ahora probablemente le quedaría una cicatriz muy a la vista si no llevaba ropa con cuello alto; respiró hondo, ya no se sentía el aire viciado, de hecho, lo notaba bastante limpio.

—¿Majestad? —pronunció un poco alto.

Inspeccionando un poco el cuarto se percató de la pequeña y vieja campana que una vez tuvo cuando fue cuidado hacía más de una década, supuso que no estaba ahí por mera decoración así que la tomó y agitó para hacer que sonara. Al cabo de un minuto, pudo escuchar los pasos apresurados en la escalera.

—¡Dings! —Abrió la puerta de golpe. —Ah, menos mal… —respiro con alivio.

—Por su reacción diría que volví a desmayarme… ¿por mucho tiempo?

—No, no tanto, pero no quita que me preocupara después de tanto…

El rey decidió callar, pero ya era tarde, el esqueleto se puso rojo de la vergüenza, sabía lo que iba a decir y podría jurar que recordaba la mayor parte de la noche, pero había perdido la cuenta de cuantas veces su mente quedo en blanco antes de perder el conocimiento.

—¿C-Cuantas veces…? —balbuceó por lo bajo.

—Ah… diez veces. —Murmuró como queriendo no ser oído.

—¡¿DIEZ?!

Asgore miró a otro lado, sintiéndose un poco culpable, ya que lo llevó al límite, no le dio ningún momento de descanso hasta que se sintió satisfecho y apenas lo liberó, terminó noqueado.

—Te lo advertí…—murmuró por lo bajo, suspirando —soy demasiado intenso cuando es mi celo… simplemente perdí el control.

—A-Ah yo… c-creo que tomé d-demasiado a la ligera sus palabras.

—Sí, lo hiciste, pero no me da derecho a hacer algo así. —Se llevo una mano a la cara.

—Ah, es mi culpa, era demasiado pronto para intentarlo… por cierto su majestad…

—¿Ah, ¿sí?

—Esa mordida… —toco con sus dedos la venda.

—Dings, yo… ah, lo siento, solo… no quería lastimarte, fue… instintivo, pero no es excusa para hacerte daño.

—No me molesta ni nada, pero… esa mordida era una "marca" ¿verdad?

Asgore levantó la vista de golpe, sorprendido de ello. Buscó que decir al respecto, pero no tenía nada con que defenderse, de hecho, era casi inaudito que él supiera sobre eso cuando nunca se lo contó y no creía que estuviera en los libros.

—¿Cómo… cómo sabes…?

Gaster abrió los ojos como platos, mientras su cabeza se volvía un bombillo rojo brillante.

—¡¿E-En verdad me marco?!

—¡Lo siento! N-No estaba en mis cabales…

—Dios… e-entonces… —balbuceó nervioso.

—¿Cómo sabes de eso? Nunca te lo dije.

—Ah, eso… la… la antigua niñera de Papyrus tuvo un tiempo una venda en el cuello… cuando le pregunte sobre ello me dijo felizmente que ella había formalizado y su pareja la había "marcado" con una mordida como prueba de… ah… —mientras más hablaba, más bajo lo hacía —¡Ah! ¡N-No me cambie el tema majestad!

—N-No lo estoy cambiando, dios, l-lo siento de verdad —se sentó en la cama, cubriendo su cara.

Gaster solo pudo llevarse la mano al cuello, completamente avergonzado, más había algo que no cuadraba, ¿por qué de todos los monstruos, había decidido marcarlo a él? Sobre todo, porque él siempre estuvo interesado con que encontrara a alguien más.

—A… Asgore…

—¿Ah? —levantó la vista apenas.

—E-Eso n-no significa que… ¿y-ya no podré estar con otro monstruo?

—Ugh, —ahogo una queja —así es, la marca se queda hasta que el compañero o pareja perece… la marca haría muy… doloroso el acto con otro que no sea el que la puso… lo siento tanto…

El científico probó por un instante a hablar, pero simplemente no le salían las palabras, dentro de cualquier resultado posible, aquello podría ser lo mejor que podía pasarle, ahora solo era de Asgore gracias a la marca de pareja y apenas podía ocultar su emoción o felicidad. Pero su curiosidad no lo dejaba tranquilo así que intento carraspear un poco para poder serenarse lo suficiente.

—Asgore… ¿qué… qué cruzó por tu mente cuando…?

Él simplemente desvió la mirada, queriendo evadir esa pregunta, pero sabía que le debía una explicación después de hacer semejante error y sin consentimiento previamente pactado.

—Yo… —levantó la cabeza, sin dirigirle la mirada —solo… se me cruzó por la mente… que, si no resistías mi celo, entrenarías más… que otro… ah, simplemente… no lo sé… yo… yo no quería que otro monstruo te pusiera una mano encima…

Entonces, la mente del esqueleto hizo clic, recordando la suposición de su viejo amigo, ¡el rey realmente pensaba que había otro monstruo! No es que él diera pistas de que realmente hubiese, pero poniéndose en su punto de vista, ahora entendía que era factible esa hipótesis, después de todo, sacaba tiempo después del trabajo para entrenarse y para que algo le privara tiempo tan valioso… tenía que admitir que era sospechoso.

Así que, él lo había marcado… ¿por celos?

—E-Está hecho…—murmuró, intentando con todas sus fuerzas no sonreír. —no hay nada que pueda hacer… pero, debo decir que no me molesta la idea Asgore…

—¿Ah? ¿Pero tú… cómo "entrenarás" ahora?

—S-Sobre eso…—murmuró nervioso, intentando pensar algo —¿p… podría… estar contigo Asgore?

Asgore se sobresaltó un momento antes de mirarlo sorprendido de la petición, aunque pasaría de ser un entrenamiento a simple y llano sexo, simplemente cuando ellos quisieran, sin la restricción de esperar a que el otro entrara en celo, solo por gusto. Respiró hondo, en parte se lo debía ya que ahora no podría estar con nadie más, pero, por otro lado, no podía negar que le gustaba la idea.

—Puedo preguntar… ¿Qué tanto… entrenabas? ¿Cuánto lo hacías?

—A-Ah yo… ah… —junto los índices mirando a otro lado —t-tres veces a la semana, a veces… cinco…

—¡¿Qué?! ¡¿Estabas tantos días…?!

—E-El placer es adictivo…—murmuró avergonzado —además, t-tenía que ganar resistencia rápido… p-pero no tengo que volver a ese ritmo, t-tampoco tiene que ocuparse de mí fuera de nuestros celos… m-me las arreglaré.

Asgore se llevó una mano entre los ojos, apretando con sus dedos, de nuevo ese extraño sentimiento de enojo, saber que estuvo entrenando tan seguido le enervaba, es decir, no esperaba que el esqueleto se volviera adicto al placer a ese punto, pero mirando hacia atrás, él tenía la culpa de que lo fuera, fue quien le abrió las puertas a ello.

—Puedes pedirme cuando quieras.

—¿Qué? —lo miró, sin entender.

—He fastidiado tus entrenamientos, es justo que me haga responsable.

—¡N-No! ¡No! N-No quiero que lo vea como una responsabilidad u obligación. —acercó las manos a una de las suyas. —S-Si no quiere hacerlo… n-no tiene que… solo… quisiera que fuera algo reciproco.

El rey solo lo miró, se sentía culpable de haberlo atado a él sin ningún aviso, solo por un momento de rabia, eso siempre le había traído problemas en la vida.

—Ah, siento que tengas que estar atado a este torpe rey, Dings.

El esqueleto lo miró apretando los dientes, enojado por el comentario, apretó la mano de Asgore entre las suyas.

—¡N-No podría estar más feliz Asgore!

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Parte 22

Parte 24

[wysteria-comic]

Introducción a Hope

Uno de los protagonistas del Circo Melodia, el cual se ha asentado una temporada en Lunaria. Demasiado talentoso para ser solo un niño, parece ocultar un secreto junto con su hermano. Desearia que Ivory se quedara con ellos para siempre...

Era la primera noche que el Circo Melodía se presentaba en Lunaria. Bajo el cielo estrellado, la enorme carpa se alzaba de manera maravillosa, rodeada de lamparitas resplandecientes.  

Hope, el pequeño que hacía de acto principal del circo, miraba nerviosamente lo que había tras la cortina: un montón de gente de todas partes de Lunaria que habían llegado a apreciar el novedoso espectáculo. El ambiente era colorido y animado, y sus nervios se transformaron rápidamente en emoción. 

Talent, su hermano mayor, le revolvió el cabello de manera juguetona. Hope sabía que si estaban juntos podían lograr cualquier cosa. 

Era hora del show. 

Los otros miembros del circo abrieron la carpa y los hermanos se encargaron de recibir a la gente, quienes snacks en mano entraron emocionados en busca del mejor lugar. Habían escuchado maravillas del Circo Melodía. Todos estaban a punto de ver un espectáculo que prometía no decepcionar. 

La actuación comenzó con un despliegue impresionante de acrobacias y magia. Los actores del circo tenían un encanto que atrapaba al público, quienes coreaban una serie de “oh’s y ah’s” en cada momento. Todo el mundo se encontraba al borde de su asiento cuando los hábiles trapecistas volaban por el aire, cuando el hombre de fuego retaba a las llamas en increíbles hazañas y cuando Talent lanzaba cuchillos anotando siempre en el blanco. 

Lo mejor estaba a punto de comenzar cuando Hope se preparaba para el acto siguiente: un despliegue fantástico de marionetas bailarinas de todas formas y tamaños controladas por Hope. Las figuras desfilaban, actuaban y bailaban libremente por la tienda, sin ataduras ni mecanismos, dejando al público encantado. 

Para su acto final, Hope necesitaba un voluntario. Cuando su mirada cayó sobre cierto trio aventurero y ojos azules conectaron con negros, algo dentro de Hope cambio. Una voz en su cabeza le hizo pensar que se había topado con algo impresionante, y estaba a punto de descubrirlo. 

“¡Usted, la señorita de negro!” Llamo Hope. 

Las luces cayeron sobre una pequeña niña pálida cubierta por una capa negra. La niña sonrió emocionada, girándose hacia sus acompañantes para pedir permiso. 

Los jovenes guardianes se miraron con duda, pero terminaron por dejarla ir. La observarían muy de cerca de todos modos. 

Cuando la niña bajo a la arena, Hope la recibió con una reverencia. El público aplaudió.  

“Hola, soy Hope.” Susurro el pelirrojo con una sonrisa. 

Cuando tomo su mano para dirigirla al espectáculo, una visión peculiar lo detuvo. Miro detalladamente el brazo de Ivory, más específicamente las costuras que mantenían unidas sus articulaciones. Sus brazos, su cuello, sus piernas. Todo estaba cosido de manera experta.  

“Eres... una muñeca.” 

Ivory guardo su usual silencio. 

“¿Quién te...” Hope enmudeció repentinamente. Se quedo pensativo, como si estuviera escuchando algo que nadie más podía. 

“¡No importa!” Sonrió. “¿Te gustaría formar parte del espectáculo?” 

La niña había ensayado su respuesta un millón de veces. “¡Si!” 

“¡Queridos invitados!” Anuncio Hope, pero no miraba al público. Al menos no a nadie que Ivory pudiera ver. “¡Hoy presenciaran un acto más allá de su imaginación! ¿Podrías pararte frente a esta lampara?” 

Algunos miembros del circo colocaron una farola convenientemente posicionada para reflejar la sombra de la niña en una pantalla improvisada. 

“Por favor mantente en posición. Y recuerda que todo es parte del show.” Añadió. 

El público miraba expectante. 

Hope levanto las manos. 

La niña sintió como perdía el aire. 

Y su sombra empezó a bailar. 

Con movimientos extraños pero hábiles, Hope dirigió a la sombra de la niña en una danza fantástica. No conforme con hacerla bailar en a la pantalla, arranco a la sombra de su lugar y la hizo pasear por toda la arena. El público exclamo enloquecido. Nadie podía creer lo que estaba viendo. No conocían de un truco mágico capaz de manipular las sombras de esa manera.  

La niña seguía congelada en su lugar, como detenida en el tiempo. Sus acompañantes se levantaron alarmados para ayudarla, pero algo invisible los devolvió con fuerza a sus asientos. 

Hope termino el acto devolviendo la sombra a su lugar. El público aplaudió una vez más. 

Los aventureros finalmente liberados de su contención corrieron a toda prisa para recoger a su niña. Cuando volvió en sí misma, salieron del lugar con Hope pisándoles los talones.  

“¿Cuál es tu nombre?” Grito Hope, pero los aventureros ya se encontraban demasiado lejos como para escucharlo. 

Desanimado, entro nuevamente a la tienda. Finalizado el acto la gente abandono el recinto, dejando a Hope y Talent atrás. 

“No te preocupes hermanito.” Le dijo su hermano mayor. “Tengo el presentimiento de que la volverás a ver.” 

[silvestreycoqueta]

Depresión veraniega: ¿por qué todos salen menos yo?

Nada más terrible en estas fechas que encontrarse con amistades o gente conocida que nos cuentan sobre los lugares maravillosos donde irán de vacaciones. O quizá las fotos en redes sociales de lo fabuloso que lo están pasando al refrescarse en aguas cristalinas que nos vendrían de maravillas. Ah, esas arenas, esos paisajes, ¿por qué yo no?

Incluso a mi mamá por estos días le da terror que le pregunten: ¿dónde irás de vacaciones? Y saber que la respuesta es: a ningún lado. Quedarme en casa, con tiempo libre.

Yo por mi parte estoy acostumbrado a que cuando llega el verano agarro mi mochila y parto hacia el sur. Pero este año, al igual que mi madre, al igual que varias personas que en estos momentos están como papas cociéndose en sus piezas, no saldré. Y lo que es peor: me quedaré trabajando.

Pero he descubierto algo: no es necesario ir a ninguna parte. De hecho, como dice el poeta Fernando Pessoa: “al final, la mejor manera de viajar es sentir”. Nada más cierto.

Cuando por motivos que no vienen al caso decidí quedarme trabajando este verano, caí en depresión y pensé que el infierno se me vendría encima. Pero es increíble todo lo que puede cambiar una vida -favorablemente- con tan solo unas pequeñas variaciones.

Y es que son los pequeños cambios los que remecen nuestra percepción de la realidad, permitiéndonos encontrar nuevos gozos que no teníamos en consideración, por simples que sean. De pronto basta con una nueva actividad en nuestras vidas, recurrir a nuevos lugares de nuestro mismo pueblo, abrirse a compartir con gente para recibir una sensación de frescura, de novedad, de entretención superior al estar de guatita al sol en la playa.

Créanme, lo estoy viviendo.

Escrito por: Fernando Osorio redactor de Silvestre & Coqueta.

[limeonie]

una vez más la cuestión de gustar o no gustar que no tenía una respuesta adecuada. “ me gustan, de vez en cuando... pero es un poco abrumador estar aquí de repente sin los preparativos adecuados y sólo por un juego algo tonto. de haberlo sabido, me traía mi almohadón favorito para poder dormir ” labio inferior sobresale en un disimulado, casi casual, puchero. admite la completa falta de control sobre circunstancias la vuelve un poco loca, aún si se ha tornado parte de la rutina de pertenecer a reverie. “ por eso no puedo evitar sentirme un poco ofendida por los profesores y sus constantes artimañas ” balbucea, arrojando una simple broma allí. es obvio que ha despertado curiosidad ajena por sus propios dibujos, y leonie parece contemplar al respecto. esos cuadernos suyos eran un tesoro que jamás verían luz del día, dueño de sus secretos y pensamientos más profundos; no quería decir que no pudiera idear otra cosa. humedece sus labios, comisuras alzándose en ladina sonrisa antes de volver a abrir la boca: “ hm, ahora no tengo nada conmigo. la próxima vez ” busca crear anticipación en un posible futuro encuentro y posibilidad de un obsequio a modo de dibujo de su parte, que pensase en ello aún cuando pasase un día, o dos, o tres.  “ aunque no prometo la gran cosa — ¿salvo quieras te dibuje aquí y ahora? ” inquiere bajito, casi poseída por la duda y temiendo cruzar una línea invisible. ja. 

“ ah, ¿no he sonado solo pretenciosa? ” busca saber, cejas arqueándose apenas. “ mi amiga me dice que a veces tengo complejo de poeta ” sacude la cabeza con un aire de timidez. “ bueno, si sumo todo el tiempo desde que empecé mi carrera en la universidad... son... casi diez años, creo ” más o menos. “ dios, es demasiado tiempo ” ahora, el ser detective, a diferencia de él, no era una progresión natural en su carrera ni tenía ambiciones de salvar el mundo. “ es un sueño compartido que teníamos con esta amiga que mencioné hace un momento. queríamos hacer algo... más grande que nosotras... habíamos oído hablar de la academia y de lo increíble que era, y a los dos nos gustaban mucho el true crime..." timbre al hablar se apaga cada vez más con cada vocablo, tornándose sombrío de repente en lo que baja mirada con pesar. “ pero creo que al final se convirtió en una pesadilla y ya no sé lo que hago ” entrecejo se frunce un poquito. pensar en noor en ese momento era caminar demasiado cerca de la cornisa, y no debía cae, no frente a ivan, por lo que acaba tomando una bocanada de aire, exhalando antes de volver a verle con media sonrisa. “ aunque sigo intentando dar lo mejor de mí en cada clase y misión, sería malo rendirme sin intentarlo. lo siento, acabo de conocerte y de repente me he puesto pesimista y seria ” se rasca la mejilla con aires inocente y suelta una pequeña risilla, sonando casi tonta al disculparse por nada en realidad. estaba acostumbrada a menoscabarse a sí misma de esa manera, para ser más simpática de algún modo. al fin y al cabo, a la gente le suele gustar eso. “ de seúl, corea, huh. vaya ciudad si las hay… ” por una u otra razón, es un lugar que desprecia y no visitaría en absoluto si no fuera por su estúpida hermana que decidió establecerse allí con su feo marido. “ pero londres es un buen cambio de ritmo, ¿te mudaste sólo para estudiar allí por la academia? ¿o te llamaba la atención de por sí? ” indaga. “ la última vez que fui, hice un tonto tour de jack el destripador ” parece distraída por un momento mientras rememora al respecto, y de repente se ríe cuando él menciona su acento. “ belga. nacida y criada en bruselas ” leonie asiente un poco. la conversación fluye bastante natural, y ella disfrutaba capitalizando toda su atención y teniendo a alguien genuinamente interesado en lo que podía decir. hacía tiempo que no hablaba tanto aparte de, tal vez, con su propio hermano. e incluso con maven estaba maquinando constantemente. gran parte es propia culpa, quizá, porque no esconde lo cerrada que puede llegar a ser y los altas que son las paredes que puede llegar a crear, manteniendo conversaciones superficiales e indiferente frente a gran mayoría pese a postura usualmente agradable, dulce, simpática. 

al verle tan nervioso por su gesto inocente, no puede evitar atribuirle inconscientemente ese carácter tan propio en personas que suele admirar y envidiar a partes iguales. a primera instancia, parece cálido, genuino, dueño de una lucecita que no muchos poseían. decide no tomarle el pelo, sólo frunce sus labios y, sin perder la oportunidad, es entonces su turno de siente nerviosa cuando la mano de él le pone con cuidado la manta sobre el hombro y, aunque no ha sido nada, parpadea un par de veces y se cubre las mejillas con ambas palmas antes de responder rápidamente a su pregunta. “ ¡claro! quiero decir, sí. soy... soy una supervivencialista, sólo disfruta el camino ¡sirvo de brújula humana! ” balbucea como una tonta poseída y poco acostumbrada a encontrarse con una persona decente que le tratase bien, siendo un manojo de nervios ante situación. era demasiado fácil. “ ah… ay. me siento como un ciervo bebé con las piernas de gelatina ” se apresura a agregar como para arreglar propio exabrupto vergonzoso y ríe entre dientes, si bien exagera, es probablemente por haber estado en cuclillas durante un rato. “ ¿tu equipo no se enfadará conmigo por robarte un poco, verdad? he oído que algunos se lo tomaron como algo de vida o muerte ” se aferra a la manta, esbozando una sonrisa en cuanto se posiciona a su lado. 

encuentra reconfortante no haber fallado en la suposición, tal vez no esté perdiendo la totalidad de su foco, está siendo sobresaliente en trazar los datos y, si lo piensa, en parte es culpa de leonie. no le cuesta nada escucharla, ¿será por el tono? se encuentra sin remedio, desde el vibrar de las cuerdas vocales ya está emergiendo la ambición por saber más. ‘ debes saber un montón, ¿te gustan este tipo de ambientes? ’ en el máximo esplendor de la naturaleza, allí donde los objetos de estudio están más presentes que nunca. o quizá le pase como él, que ha sido un sujeto más afianzado al conocimiento a través de la teoría. ‘ ya viste mis habilidades en el dibujo, ¿podré ver las tuyas en algún punto? ’ la curiosidad es genuina, se pregunta cómo será el estilo femenino, a qué le daría relevancia en los trazos y, en especial, lo que eso pueda revelar de ella. ‘ en clases, sólo para practicar. nos colocábamos enfrente y cada uno dibujaba al otro ’  relata, los retratos han sido una parte central del aprendizaje por la relevancia que porta al momento de reconstruir rostros de sospechoses. ‘ por gusto no, todavía no ’ jamás lo ha ambicionado, pero ahora que leonie está poniendo la idea sobre sí, se lo repiensa. no dice nada, aún así. ¿qué demonios se le está pasando por la cabeza? siente que la comparativa entre las disciplinas es acertada, no duda en dejar ver cómo los pétalos se irguen. ‘ si lo dices así, suena hasta poético ’ se lo concede, la risita que suena después se le contagia y, ¡peor! capta la atención de sus iris. no debería sorprenderle que también se viera bonita al reír, pero ahí está, superando sus expectativas. ‘ preservar lo efímero es lo que nos da el poder de inmortalizarlo, ¿no? ’ un paso de lo banal a lo extraordinario, jamás había dotado de tanto valor a su trabajo. ‘ ¿te dedicas a ello desde hace mucho? ’ inquiere. por algún motivo no quiere dar paso en falso alguno, o soltar alguna estupidez. tiene que asentir al oírla, le confirma que es su caso; para él, la academia reverie y el título de detective se sentía natural. sin embargo, le deja con una duda repentina, tiene que inclinar la cabeza a un costado: ‘ ¿por qué quieres convertirte tú en detective? ’ la percepción del entorno pasa a segundo plano y, de repente, se percata de cómo está prestándole atención, de las palabras que le dedica, o de esa manta que se desliza por el hombro femenino. si no suele ser atrevida, ¿qué le ha motivado a serlo justo ahora? ‘ vivo en inglaterra, sí. empecé los estudios ahí y no volví a asentarme en corea, pero soy de seúl ’ su verdadero origen, aún si le orgullece, está repleto de recuerdos dolorosos. ‘ ¿de dónde eres tú? tienes como acento de … ¿algún lado? ’ falla en descubrir, ¡qué vergüenza! por suerte o por desgracia, leonie no le da oportunidad de recaer en el lamento, le deja en blanco al instante. ‘ es que — ’ las palabras mueren antes de salir, el movimiento femenino sobre sí le provoca una tensión primaria, traga en seco en el proceso y el color carmín asciende por los pómulos. no se ve capaz de mantener el contacto visual, así que el mentón se ladea para desviar la atención y, de paso, ocultar el desastre que era. ‘ sí pareces uno, un conejito ’ le da tanta vergüenza que tiene que bajar decibelios, a duras penas se recupera cuando se aclara la garganta y, en esas, vuelve a verla. ‘ gracias ’ por el detalle de la flor, por apreciar el dibujo, siente que si habla más de la cuenta terminará delatándose; se siente realizado por haber conseguido hacer algo que le guste. ‘ un par de detalles más lo harán perfecto ’ otra forma de decir que, simplemente, no quiere entregárselo de cualquier manera. ‘ acepto ’ con cuidado, la palma en libertad se encarga de recolocar la manta sobre los hombros femeninos, incluso si siente los nervios removerse por los adentros. al fin se endereza, dispuesto a emprender camino. ‘ ¿sabes orientarte? ojalá hubieras aparecido antes, entonces, ya me perdí unas siete veces ’ exagera al atreverse con el chiste. ‘ ¿vamos? ’

[sith-fco84]

#BellezaOscura

Ah que chulada de novela juvenil/adulto nos ha dado su autora. Desde el primer capítulo te engancha y no te suelta hasta el epílogo .se agradece leer a estas auroras jóvenes que usan una plataforma de escritoras para darse a conocer . Una enorme y grata satisfacción haber descubierto una historia de la mafia, sexo, amor, traiciones, sangre , etc etc muy bien desarrollada , con grandes cambios en la historia que te dejan sin palabras. Un final exquisito y emotivo que abre camino para desear leer más cuando salga el segundo libro . Ojalá también sea publicado en físico. Necesito respuestas sobre qué será de los protagonistas . Si o si deben leerlo. Y más si les gusta leer sobre la mafia. Si les gustó el padrino esta novela les va a gustar si o si . Le doy 5/5 estrellas o un 10/10 de los mejores libros que he leído en este año.

[bookishnerdlove]

OQN – Ser Diferente 1.6

El Conde Phlox regreso a casa antes de lo previsto. Fue gracias a que alguien transmitió rápidamente la noticia de Elua. Regresó a casa a toda prisa, le informaron que el peligroso obstáculo había pasado. Se sintió aliviado por el diagnóstico del médico. Sólo entonces se hablo con quien salvó a Elua, y éste quedó muy sorprendido. Todo había cambiado. Cuando la muerte de Elua se extravió, todo lo que Kalmia sabía quedo revuelto. ¿Por qué? Al parecer, Elua tuvo el accidente que recordaba. Elua se cayó del caballo mientras montaba en un día lluvioso y murió en el accidente. 'Debería haber muerto pero sobrevivió, quien lo salvó...' "Casi pierde al heredó del Apellido Phlox". "No hay palabras capaces de expresar esta gratitud. Tengo una enorme deuda con el Duque Matari. Muchas gracias, mi Señor." Ante las palabras del Conde Phlox, el niño que estaba frente a él sonrió como un adulto. Después de todo, tenía doce años. Aunque es el miembro más joven de la familia Duque Matari, es un niño que superará a sus hermanos mayores y se convertirá en el heredero en el futuro. La mente de Kalmia se calmó. Rudbeckia fue su futuro némesis que la perturbó hasta el final. "Kalmia, ven a saludar. Él es el benefactor de la familia Phlox". Kalmia, que había estado quieta, dio un paso adelante. Sintiendo que la mirada de Rudbeckia, Kalmia bajó los ojos. Agarrando el dobladillo de su falda, rezó fervientemente para que su cara sonrojada no contuviera hostilidad, que pareciera una chica conociendo a un chico guapo de su edad. "Encantada de conocerlo. Soy Kalmia Phlox". No se escuchó ninguna respuesta. En cambio, la sensación de que su mirada tenaz persistía persistentemente. Kalmia, que soportó el incómodo silencio, levantó los ojos de mala gana. Unos brillantes ojos azules la miraban fijamente a la cara. El cabello negro y el rostro juvenil eran los de un niño. Sin embargo, Kalmia pudo superponer a Rudbeckia, de treinta años, encima. Era un hombre que no perdió su fuerza por la mirada deslumbrante a pesar de que vomitó sangre en ese momento y ahora su apariencia parecía muy endeble. A menudo, cuando alguien llegaba a conocer primero a Elua y luego a Kalmia, se sorprendian por el parecido entre ambos. Parecia que a Rudbeckia le paso igual. "¿Mi señor?" Al escuchar la cuestionable llamada del Conde Phlox, Rudbeckia abrió lentamente los labios. "Encantado de conocerla, Señorita Phlox." Aunque dice que tiene 12 años habla como un anciano. Kalmia bajó ligeramente la barbilla para ocultar su expresión tímida. "Ah, sí." "Escuché que los hijos de la familia Phlox eran gemelos, pero me sorprendió que tan tanto se parecen. Si no fuera por la ropa, no habría podido distinguirlos". Era tan educado que ella no podía creer su edad. Pero, recordando lo arrogante y desafortunado que será en veinte años, a ella no le gustó nada su actitud. Más bien, sintió que el era un poco hipócrita. Pero ella trató de reprimir sus emociones. El Rudbeckia que estaba frente a ella en ese momento no era ni su némesis ni el heredero de la familia ducal, sino un niño de 12 años. "Sin embargo, hubiera preferido conocerla en circunstancias menos desafortunadas." "Si, lo entiendo." Si hubiéramos elegido un lugar diferente, sólo habría habido un lugar para apretar los dientes y gruñir unos a otros. Kalmia, que recordó sus recuerdos del pasado, asintió con la cabeza y desvió su atención. El hombre al que mataría dentro de veinte años había salvado a su hermano esta vez. Debido a que salvó a Elua, Kalmia se enfrentó a circunstancias completamente nuevas y diferentes. ¿Por qué Rudbeckia apareció repentinamente en este momento? Kalmia se esforzó por recordar, pero todavía no podía entender el motivo del regreso al pasado, no hubo reunión con Rudbeckia hasta que Kalmia fue nombrada la heredera oficial. Por supuesto, no entendía por qué Rudbeckia apareció de repente en ese momento. Estaba enojada porque de repente regresó al pasado, pero el accidente que pensó que sucedería naturalmente también fue retorcido. ¿Hay más sorpresas aquí? Kalmia estaba bastante confundida. "Maestro, creo que Kalmia también necesita descansar. En realidad, Kalmia también a estado enferma todo este tiempo, pero finalmente recuperó su energía hoy". "Ah, Storoni." Fue Storoni quien dio un paso adelante como si hubiera leído su deseo de descansar. El Conde Phlox finalmente le presentó a Rudbeckia cuando su voz reveló su presencia. "Este es el joven al que estoy enseñando. Storoni". "Hola, soy Storoni." Ante el impecable saludo de Storoni, los ojos de Rudbeckia brillaron con interés. "¿De qué familia eres?" "...Lo siento, pero mi familia, los Primula, me devolvieron ese Apellido." Devolver el apellido de una familia significa que el nombre de la familia ha sido borrado porque ha cometido un gran crimen, o que ha caído porque no cumplió con sus deberes como noble. Dado que el Conde Phlox no pudo haber detenido a los criminales, debe ser lo otro. Había muchos deberes de un noble, como cuidar el territorio y pagar fielmente el tributo, pero lo que no se guardaba no era honorable. Rudbeckia, que parecía interesado en Stoney por un momento, rápidamente puso una expresión triste. "Una casa noble que ha caído en ruinas... Qué lamentable." Rudbeckia es el hijo menor de la familia más poderosa del país, excluida la familia real. Era natural que él, que habría estado con los nobles toda su vida, menospreciara a los nobles caídos. Storoni bajó la cabeza sin la más mínima incomodidad. El Conde Phlox dio un paso adelante con cara de desconcierto y le dio una disculpa. "Le pido disculpas. Storoni, lleva a Kalmia a su habitación". Storoni dio un paso atrás para seguir las órdenes del Conde. Pero antes de que pudiera tomar a Kalmia y salir de la habitación, Rudbeckia frunció el ceño y dijo "¿Cómo puede el conde permitir que alguien que no es diferente de un plebeyo trate a la hija del conde de manera tan informal?" No es exagerado decir que en realidad era un plebeyo porque devolvió su apellido. Es solo que respeta su origen y no lo trata como a otros plebeyos. Aun así, habría una clara diferencia con el déficit del conde, pero ahora, a los ojos de Rudbeckia, la relación entre Storoni y Kalmia parecía igual. Si no hubiera sido por el permiso del Conde, no habría podido vivir de manera tan informal. Ante el comentario de Rudbeckia, el Conde Phlox miró a Storoni con una mirada afectuosa. "Storony es el discípulo a quien enseño. Puede que no cumpla con los estándares de mi Señor, pero es como un hijo para mí". "Entiendo." Dicho esto, Rudbeckia parecía no tener nada más que decir. Mientras miraba a Storoni con ojos temblorosos, de repente le dijo al Conde. "Sólo me gustaría descansar, ¿puedo pedirle a señorita Phlox que me muestre una habitación?" También hay un sirviente, pero Kalmia sin darse cuenta entrecerró las cejas ante sus palabras que se atrevieron a señalarla. Quería decir que no, pero la otra persona era el hijo menor del duque. Además, también es el benefactor de la familia Phlox. El Conde Phlox asintió sin pensar profundamente. "Con gusto. Kalmia  guia al Señor Matari a una habitación en el tercer piso." Kalmia tomó la iniciativa de mala gana. "Por favor sígame." El sonido de pasos la siguió. Era su enemigo quien siempre estaban atacadose a espaldas. La espalda de Kalmia, tan indefensa a la situación actual de presumir era incómoda, por lo que aceleró el paso. Le resultaba desconocido hasta el punto de estremecerse al ver a la otra persona que estuvo ocupada haciendo comentarios sarcásticos durante menos de cinco minutos cuando se encontraron cara a cara. Afortunadamente, Rudbeckia siguió a Kalmia sin quejarse mucho. "Aquí está. Un sirviente vendra pronto para atender la cama". Kalmia, que hablaba con firmeza, se detuvo de repente mientras intentaba darse la vuelta. Kalmia, que había estado mirando el costado de Rudbeckia, pensó que no había garantía de que Rudbeckia volviera a convertirse en un enemigo. "¿Mi señor? ¿Cómo es que llego a salvar a Elua?" La pregunta no era inusual. Como hermana, era una pregunta natural. Según recuerda, Rudbeckia pasó su infancia en el ducado. El territorio y el ducado de la familia Phlox están bastante separados. Estaba claro que Rudbeckia nunca llegaría a esa periferia. "Estaba de camino a la familia Phlox por negocios, pero fui testigo del accidente del señor Elua y pude ayudarlo". "¿Tienes un negocio... con nuestra familia?" Kalmia trabajó duro, pero por mucho que pensara en ello, no podía inferir el negocio. No sabía por qué, así que esperó la explicación de Rudbeckia, pero él no parecía querer decir nada más. "Me gustaría descansar, pero ¿tiene más preguntas?" "Ah, sí. Disculpe. Descanse bien". Kalmia, quien se retiró sin poder resolver su curiosidad, miró hacia la puerta cerrada con expresión incómoda. Rudbeckia era igualmente dudoso de adulto y de niño. Si es así desde pequeño, así será cuando sea mayor. Miró a la puerta con un corazón feroz, pero pronto se alejó con cara de resignación. Le palpitaba la cabeza cuando vio al enemigo que había estado vomitando sangre volver con vida frente a ella. Este resentimiento era algo que ella tenía sola, y ese niño no lo habría adivinado en absoluto. Para ser honesta, no había garantía de que Rudbeckia volviera a convertirse en un enemigo. ¿Cómo sabes cómo cambiará tu relación con Rudbeckia cuando Elua esté vivo? Ante ese pensamiento, la feroz hostilidad se encogió como una manzana marchita. Kalmia, que estaba a punto de regresar a su habitación, de repente se dio vuelta y se dirigió a la habitación de Elua. El Conde Phlox y Storoni debieron haberse mudado a otro lugar, pero no había nadie en la habitación de Elua. "El." Elua estaba profundamente dormido, respirando de manera uniforme, pero su cara pálida y sus labios sin sangre dejaban en claro lo gravemente herido que estaba. Kalmia, que se mordía los labios y miraba fijamente el rostro de Elua, dejó caer los hombros y giró su cuerpo pesadamente. Por un momento, se desilusionó de sí misma, que estaba feliz con la muerte predestinada de Elua. Además, la vaguedad del acontecimiento cambiado invadió toda la mente. Debido al accidente de Elua, todos los empleados de la mansión estaban ocupados. En primer lugar, la familia Phlox tenía reputación de integridad e inocencia, por lo que no insistieron. Fidelizaba al mayor número posible de empleados, y en días como hoy, cuando llegaba incluso un invitado, una sola persona tenía que repartir varias tareas. Gracias a eso, Hechi, quien debería haber venido a cuidar la cama, estaba ocupada con otras cosas y no podía prestar atención a la habitación de Kalmia. Kalmia se puso hábilmente el pijama ella sola, ya que no era lo suficientemente niña como para hacer pucheros por haber sido privada de atención. Pero el sueño no llegó. Kalmia, que había estado acostada durante un tiempo, se levantó de nuevo. Esto es lo que sucedió porque poco a poco iba a recordar la vida que recordaba durante los últimos 30 años. Kalmia, que sacó su diario escondido en lo profundo del cajón del escritorio, abrió la ultima página. Entonces, el comienzo fue la muerte de Elua. A la edad de diez años, originalmente Elua murió en un accidente a caballo, y el Conde Phlox criticó mucho a Kalmia, quien regresó con vida sola. Tres meses después del accidente, el Conde comenzó a ignorar a Kalmia, y la razón fue que ver el rostro de Kalmia le recordaba a Elua. Eran gemelos, por lo que todos entendían al Conde Phlox. Kalmia recordó la actitud dura y fría de los empleados de los alrededores que comenzó con el trato frío del Conde. Hetchi, algunos de los asistentes trabajaron incansablemente para cuidar de Kalmia, quien se quedó sola, pero en general se mantuvieron alejados de ella. Era porque tenían miedo de provocar la ira del conde si se preocupaban por Kalmia. Si no hubiera sido por Storoni en ese momento, Kalmia no habría podido soportar el trato frío y las miradas. Storoni. La punta del bolígrafo, que había estado escribiendo las palabras sin dudarlo, vaciló. Se dejaron marcas de tinta oscura junto a la letra 'i'. "Storoni" Para Kalmia era un paso inevitable depender de Storoni. Era natural que fuera un hombre que tratara a la aislada Kalmia con la misma actitud. Kalmia lleva un tiempo obsesionada con Storoni y había intentado mantenerlo a su lado. Storoni tampoco rechazó la obsesión de Kalmia, y debido a esto, dentro de la mansión circularon rumores de un romance entre ambos. Sin embargo, no fue suficiente expresar la relación con la palabra asunto eso... Era una relación difícil de describir. Pensar en Storoni le dio un vuelco en el corazón, así que Kalmia soltó su pluma. ¿Debería decir que lo amaba? Storoni se convirtió abiertamente en su amante en algún momento, por lo que no estaría mal decir que estaban enamorados. No sólo dependía de él mentalmente, sino que también tenía una relación física, por lo que tal vez tendría que decirle que lo amaba. Entonces, ahora que ella ha regresado al pasado, ¿volverán a tener esa relación? En aquel momento era inevitable, pero ahora las cosas han cambiado. Ahora que Elua está vivo, el Conde no se alejará de Kalmia. A diferencia de entonces, su vida fluirá como un río tranquilo. ¿Cuántos años tenía cuando la nombraron la heredera? El Conde, que había estado inmerso en el dolor mientras ignoraba a Kalmia, se deterioró gradualmente y, en un momento dado, se deterioró rápidamente. Hubo un momento en el que cayó en un profundo desmayo, y parece que en ese momento, la gente de la familia del conde le suplicó que nombrara formalmente un sucesor. Si no recuerda mal, la causa del desmayo del conde fue el rumor de que Kalmia y Storoni estaban enamorados. Incluso entonces, el conde, que había soportado todo lo que pudo, le dio a de mala gana el titulo de heredera al único pariente consanguíneo que quedaba. Fue el año en que Kalmia cumplió dieciséis años. Por esa época, Kalmia se encontraba en una situación en la que la insatisfacción con el conde y los empleados que habían sido fríos con ella alcanzó su punto máximo. El conde que nombró a Kalmia como su sucesor se debilitaba día a día. La gente decía que se debía al "sucesor equivocado". La persona que debería haber muerto vive y la persona que debería haber vivido murió, por lo que es un precio por ir en contra de la lógica. Era natural que Kalmia estuviera furiosa por los ridículos rumores. "Diecisiete." Kalmia, que escribió la palabra "Diecisiete", la miró fijamente. Diecisiete. Cambió a todos sus empleados. No importaba cuánto tiempo trabajaran para la familia del Conde. Llenó la mansión con gente que no conocía a Elua y nombró a Storoni su ayudante. El conde estaba tan débil que no tenía energías para detenerla. Ahora que lo pensaba, parecía que el conde renunció a todo en ese momento. Simplemente se quedó acostado en la cama, esperando con ansias el día en que fuera con la condesa y Elua. Su actitud enfureció aún más a Kalmia. Cuanto más lo masticaba, menos recuerdos felices tenía, sólo recuerdos llenos de ira y resentimiento. Kalmia miró las oraciones y letras aleatorias y escribió una línea en la parte inferior del papel. '¿Cómo volví al pasado?' Read the full article

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[ESP] Obey Me! — When Vampires Go Bad —

/¡\ Advertencia: Esta traducción, al igual que las próximas tendrán solo las opciones que yo elegí mientras jugaba. Si quieren que agregue todas las opciones y sus respuestas, dejen un comentario aquí en Tumblr o en mi cuenta de Twitter /!\

(1-1)

Bienvenida a la Tierra de los Vampiros.

— Diavolo: Bienvenida a la Tierra de los Vampiros, MC. ...Oh, discúlpame. Estás un poco sorprendida, ¿No? Soy Diavolo. Soy el gobernante de todos los vampiros y todos aquí me conocen.

— Lucifer: Hablando en nombre de todos los vampiros en esta grande y famosa tierra nuestra... ...te ofrezco la más cordial bienvenida, MC.

[ ¿Vampiros...? ] ✓ [ ¿No se refieren a “demonios”...? ] [ Entonces... ¿Este es un tipo de sueño? ]

— Lucifer: Eso es correcto. Vampiros.

— Mammon: ¡Hey, woa, hey! ¿Están seguros de que esta está bien? Como, ¿Realmente hay un cerebro en esa cabeza?

— Asmodeus: Jeje, bueno... tan extraños como se ven los humanos, apuesto a que saben bien...

— Beelzebub: Sí... ¿Y dicen que esta humana es nuestra nueva estudiante de intercambio? Ugh, esto va a ser una tortura.

— Satan: Belphie, mantén un ojo en Beel. Asegúrate de que no se alimente “accidentalmente” de la sangre de esta humana.

— Belphegor: ¿Qué? ¿Por qué tengo que hacerlo?

— Leviathan: Pff, te quedaste atrapado en trabajo de guardia. lololol

— Lucifer: Esta advertencia no va solo para Beel. Ninguno de ustedes debe alimentarse de la humana.

— Diavolo: Como nuestra estudiante de intercambio del mundo humano, pasarás el próximo año aquí en la Tierra de los Vampiros. Te deseo lo mejor, MC. ¡Buena suerte!

(1-3)

¡...!

[( — Diavolo: Como nuestro estudiante de intercambio del mundo humano, pasarás el próximo año aquí en la Tierra de los Vampiros. Te deseo lo mejor, MC. ¡Buena suerte! )]

[ Abrir la puerta. ] ✓ [ No abrir la puerta. ]

— Beelzebub: Tan...hambriento... Sangre...sangre humana...

— Beelzebub: Sangre... ¡Déjame tener tu sangre...!

[ ¡Alguien que me ayude! ] ✓ [ Adelante, aliméntate. ]

— Belphegor: ��Hey, Beel! ¡No!

— Beelzebub: ¡!

— Belphegor: Sin alimentarte de la humana. Lo sabes.

— Beelzebub: Pero... ¡Tengo taaanta hambreee!

— Belphegor: Tal vez sea así, pero esta humana está fuera de los límites. No quieres desafiar a Lucifer.

— Beelzebub: Aww... ¡Tengo tanta hambre...!

— Belphegor: Ugh. Solo aguanta un poco más, Beel. ...Hey, tú. ¿Crees que puedes ayudarme a llevar a Beel de aquí hasta la cocina?

(1-5)

— Beelzebub: Más...

— Belphegor: De acuerdo, veamos qué tenemos: Jugo de tomate, curry rojo con extra pimiento habanero y filete magro de murciélago marinado en ketchup. Seguro, puede no satisfacerte como la sangre humana, pero si comes todo esto, debería acabar con el hambre por ahora.

— Belphegor: Qu... ¡¿Ya te lo terminaste?! ¡Eso fue rápido! Aquí, tengo un poco más de jugo de tomate.

— Beelzebub: ...Bien. Me siento un poco mejor ahora. Hey, humana. ¿Dijiste que tu nombre es MC? Siento atacarte de esa manera.

— Belphegor: Parece que hemos conseguido calmar a Beel. Puedes irte ahora, MC.

[ ¿Sabes cuán asustada estaba? ] ✓ [ Lo que sea. Estoy enojada contigo. ] [ Bueno, no pudiste evitarlo. ]

— Beelzebub: ...Realmente lo siento.

— Belphegor: Parece que hemos logrado calmar a Beel. Puedes irte ahora, MC.

— Beelzebub: Sí, probablemente deberías (hacerlo). Si te quedas por aquí por mucho tiempo, podría atacarte de nuevo.

[···]

— ???: ¡MC, ahí estás! ¡Finalmente!

— Asmodeus: ¡Te he estado buscando! ¡Por favor, tienes que ayudarme!

(1-7)

— Asmodeus: ¡Estoy tan contento de encontrarme contigo! ¡Te he estado buscando! ¡Por favor, tienes que venir conmigo! ¡Necesito tu ayuda!

[ ¡De acuerdo! ] [ ¿Qué sucede? ] ✓

— Asmodeus: ¡No hay tiempo para explicarlo ahora mismo! Sólo ven conmigo. Lo entenderás lo suficientemente rápido. ¡Ahora ven, rápido!

[···]

— Asmodeus: MC, muchas gracias por venir hasta aquí conmigo. No puedo decirte cuán feliz soy. Realmente debería hacer algo para agradecerte, ¿No?

[ ¿En qué exactamente necesitas que te ayude? ] [ ¿Algo para agradecerme? ¿A qué te refieres? ] ✓

— Asmodeus: Bueno, ¿No es obvio? A cambio de permitirme beber tu sangre... ...Te mostraré un increíble momento que solo yo puedo (mostrar). Como mi regalo para ti, me aseguraré de que experimentes un placer que jamás has conocido antes, MC. Jeje, pero si me sobreexcito y tomo tanto de tu sangre hasta que mueras, lo siento con anticipación, ¿Bien? Tu piel es tan suave, tan frágil... Como este lugar aquí... Es tan suave y flexible. Si hundiera mis dientes ahí, me pregunto qué tipo de sonidos harías...

(1-10)

— Asmodeus: Jeje, eres tan linda... No te preocupes. Me aseguraré de que no duela, ¿Bien? En realidad, puede ser TAN bueno que mueras del puro placer. Ooh, supongo que eso significa que morirás de todas formas, ¿Huh? Oh, bueno, no me importa si estás viva o mueres, realmente. ¡De todas formas, voy a amarte como nunca te han amado antes!

— ???: ...Hey.

— Asmodeus: ¡¿...?!

— Satan: Estás siendo ruidoso. Estoy intentando leer mi libro en paz...

— Asmodeus: ...Satan. No me di cuenta de que estabas en la habitación.

— Satan: Bueno, he estado aquí desde que los dos entraron.

— Asmodeus: Bueno, entonces, ¡Esto es perfecto! Somos dos para divertirnos... ¿Por qué no te nos unes? Estás bien con eso, ¿Cierto, MC?

[ ¡Por supuesto que no! ] ✓ [ ¡Mientras más, mejor! ] [ Quiero decir, como sea... ]

— Asmodeus: ¡Ooh, cuando te molestas de esa manera solo haces que me emocione MÁS!

— Satan: Lucifer se va a enojar si intentas algo con esa humana.

— Asmodeus: ¡Cierto, eso es lo que lo hace tan divertido!

— Satan: Tienes un punto. Me pregunto... ¿Cómo sabe tu sangre, MC? Apuesto a que es dulce y cálida y se derrite en la lengua...

— ???: Ustedes dos... ¿Qué creen que están haciendo?

(1-12)

— Leviathan: ¿En serio? ¿Entonces Asmo y Satan intentó atacarte? Y escuché que Beel casi se alimenta de ti también.... Si Lucifer y Belphie no hubiesen estado ahí para salvarte, estarías muerta ahora. No hay dudas de ello.

— Mammon: Eh, como sea. ¿A quién le importa? Lo que quiero saber es, ¿Por qué estoy yo atascado cuidando a una pobre humana? ¡Yo, el Gran Mammon!

— Leviathan: Hablas mucho, pero sabes que estás demasiado asustado de desafiar las órdenes de Lucifer.

— Mammon: ¡Tú cállate!

[ Obviamente no tienes nada mejor que hacer. ] [ Gracias. Es amable de tu parte hacer esto. ] ✓ [ Como si te quisiera como escolta, Mammon...]

— Mammon: Cierto, esa es la actitud que espero de un humano: bueno y dócil. ¡La manera en la que un humano debería ser! Soy un demonio realmente ocupado, ¡¿Entiendes?! ¡No lo olvides! Se suponía que estaría vendiendo un montón de sangre sintética hoy. ¡Iba a ser una venta realmente grande! ¡Pero todo se volvió humo! ¡Debido a ESTA humana!

— Leviathan: Ah, ¿Te refieres a ese elixir tuyo? El que solo contiene una sola gota de sangre humana real? Esa es una gran estafa y lo sabes.

— Mammon: Hey, ¡No quiero oírlo de ti! ¡Culpa a mis clientes por ser lo suficientemente estúpidos como para comprarla! Aunque, espera... Si tomo la sangre de esta humana, podría hacer una versión 100 por ciento PURA, ¿No? Apuesto que se vendería por un precio realmente alto...

(1-14)

— Mammon: No es como te estuviera pidiendo que me des TODA tu sangre o algo así. Solo necesito un poco, eso es todo. Eso estaría bien, ¿Cierto?

[ ¡Absolutamente no! ] ✓ [ Bueno, supongo que podrías tener un poco... ]

— Mammon: Eres una tacaña.

— Leviathan: Escucha, Mammon, no eres el único que podría estar haciendo otras cosas. ¡Yo podría estar jugando Scarlet Moon justo ahora! ¡El juego de horror y acción donde juegas como un vampiro que caza humanos cada noche! ¡Ugh, estoy taaaan cerca de conseguir el final verdadero de ese juego! Aunque, supongo que una vez en un tiempo ES mucho mejor probar sangre humana en la vida real que en un juego...

— Mammon: Sí, literalmente lo es. Escucha, MC... ¿Qué te parece dejarme lamer la punta de tus dedos o algo?

— Leviathan: ¿Sabes?, en Scarlet Moon, los vampiros besan a sus víctimas y chupan la sangre a través de sus labios.

— Mammon: ...¿Quieres intentarlo?

— Leviathan: Estarías dispuesta a eso, ¿Cierto MC...?

[ ¡No! ] ✓ [ Solo... Sean gentiles. ]

— Mammon: Pff...jejeh...

— Leviathan: ¡Ajaja!

— Mammon: Hombre, si pudieras VER la mirada en tu rostro justo ahora...

— Leviathan: Nosotros REALMENTE no íbamos a hacer algo como eso. Si Lucifer nos atrapa, estaríamos muertos.

— Mammon: Eh, aún así. No bajaría la guardia si fuera tú.

(1-17)

— Solomon: ...Entonces, conseguiste evitar que cualquiera de ellos bebiera tu sangre por el momento, ¿Huh?

— Luke: ¡Repugnante! ¡Es son vampiros son absolutamente, totalmente repugnantes!

— Simeon: Ya, ya, Luke. Como puedes ver, MC está ilesa. Eso es algo bueno, ¿Cierto?

— Solomon: Aún así, no puedo creer que MC esté atascada viviendo con esos siete hermanos...

— Luke: Si solo MC viviera en el la Sala del Purgatorio con nosotros...

— Simeon: Oh, escuché que la Sala del Purgatorio estaba llena, así que fue puesta en la Casa de los Lamentos en su lugar.

— Luke: ¡¿ESA es la razón por la que MC terminó aquí?!

— Solomon: Será mejor que nos vayamos. Es momento de nuestra próxima clase.

— Simeon: Bueno, ten cuidado, MC.

— Luke: ...

[ ¿No estás yendo también? ] ✓ [ ¿Sabes?, como que me recuerdas a un chihuahua... ]

— Luke: Hay algo que quiero darte. Aquí, ten esto. Es un talismán, imbuido con el poder de los ángeles. No puedo decir con seguridad si funcionará en vampiros, pero... ...es mejor que nada, ¿Cierto?

— Lucifer: ¿Qué están haciendo?

— Luke: ¡...! ...Nada. Solo estaba hablando con MC.

— Lucifer: La clase está comenzando. Muévanse.

— Luke: ...Te veo luego, MC.

— Lucifer: ...MC. Me gustaría que te detuvieras en mi habitación esta noche.

(1-20)

— Lucifer: Ah, finalmente estás aquí. Entonces, ¿Qué piensas de la Tierra de los Vampiros? Me gustaría escuchar tu opinión. 

[ No es malo. ] ✓ [ Es absolutamente lo peor. ] [ ¿Es esto un sueño? ]

— Lucifer: Eres bastante valiente para (ser) una humana, ¿No? ¿Crees que es extraño que tengamos estudiantes de intercambio humanos aquí en la Tierra de los Vampiros? Después de todo, es un poco como tirar a un cordero indefenso en medio de una manada de lobos hambrientos, ¿No? Pero también es importante entender a quién estás comiendo, ¿Cierto? Parece que mis hermanos no se han estado comportando a tu alrededor. Así que, después de todo lo que has pasado... ¿...Seguro que no crees que soy el único vampiro que no representa una amenaza?

[ ¿Qué se supone que significa eso? ] ✓ [ Lo hago, en realidad. ] [ Nop, no creo eso. ]

— Lucifer: Significa que te veo como una presa también. Justo como los demás. Sin mencionar que soy por lejos más fuerte que tú. Si fuera a pincharte aquí y ahora, no serías capaz de hacer nada al respecto, ¿Cierto? ¿Qué tal si lo intentamos...?

(1-22)

— Lucifer: Cuando un vampiro se alimenta, no es como que la presa humana sienta solo dolor. Es bastante lo opuesto, en realidad. Ellos se sobrecargan con un sentimiento de inimaginable éxtasis. La verdad es que tú quieres esto también, ¿No? Quieres sentir mis brazos a tu alrededor, entregarte a mí y ofrecerme tu sangre...

[ Quiero eso. ] ✓ [ No, no quiero. ]

— Lucifer: Entonces cumpliré tu deseo. Ven aquí, MC. Eres especial. No te voy a dejar seca... no. Voy a besarte una y otra vez, por todo el cuerpo. Complaciéndote cada noche. Y me refiero a cada noche. Ningún otro vampiro conocerá jamás el sabor de tu sangre...

[···]

— Belphegor: ...Espera un minuto. ¿Qué hace MC durmiendo en un lugar como este?

— Asmodeus: Lo sé... ¿No es linda MC? He estado sentado aquí, saboreando esa mirada adorable mientras ella duerme.

— Leviathan: Tan despreocupada... ¿Ha olvidado MC que esto es Devildom, un lugar lleno de demonios?

— Asmodeus: ¿Quién sabe? Quizás esté soñando con el mundo humano otra vez.

— Belphegor: ...Hm. En ese caso, ¿Por qué no solo dejamos dormir a MC por más tiempo?

[lemecdlucas]

                              🌾 ❛❛🐺💘🌚A Kiki le pareció curiosa la forma en que Tahirah mencionó que de cualquier forma no le parecía el final, guardándose la sonrisa que le provocó aquello, a lo mejor se refería a ser amigas y eso estaría bien para ella, no quería perder de nuevo a Tahirah. Después de todo ya le había dicho que se quedaría.—Sí esta vez te vas sin decirme adios no te volveré a perdonar, eh—Advirtió.—Aunque tecnicamente no quiere decir que ya te haya perdonado, solo te lo estoy haciendo saber—Agregó porque sonó que ya había olvidado todo y aunque técnicamente si, no quería que Tahirah se confiara y se sintiera libre de volver a lastimarla. —Ay aja, mentirosa. Tus favoritas son las que usan bastón y huelen a Clive Christian—La acusó sonrojandose cuando le guiñó. Parpadeó al escuchar a Tahirah acceder a su petición y ofrecimiento.—¿En serio? ¡Eso es fantástico! ¡Gracias, Tah!—Sí realmente le emocionó poder contar con ello en pro de Kendall y se hubiera lanzado a abrazarla como siempre lo hacia pero, se contuvo, tuvo que mesurarse. —Desde luego, lo que sea, cuando sea. Solo que el cobró no sea en una fecha importante para Keny, no me gusta decepcionarle o dejarla plantada—Afirmó muy segura de ello, ya había dado su palabra y no pensaba retractarse ¿después de todo que podía pedirle? Además eso les hacía tener una deuda y significaba que si se iba regresaría de todas formas a cobrarsela y estaba bien para Kiki. —Bueno entonces será Tah, debo tener mis privilegios, supongo—Sonrió confiadamente como si no fuera a dejar pasar esa oportunidad. —Bueno sí, lo soy ¿a penas lo notas?.—Reconoció.—¿Sí se te hace lindo?—No supo porque le agrado que Tahirah estuviera de acuerdo con ella, pero lo hizo. Además siempre había pensado que ambas tenían muchas cosas en común, hubieran funcionado bonito de haber tenido algo, lástima. De todas formas no se lamentaba o no hubiera sido novia de Kendall y eso si no podía ocurrir, la amaba mucho. —Lo sé, suena bastante bien—Sonrió soltando un suspiro, la verdad si fantaseaba con casarse con Kendall. —Es un placer, Tah—La verdad valía escuchar su nombre pronunciada por parte de Tah—Entonces supongo que deberíamos regresar o ¿Deberíamos darles un poquito màs de tiempo?—Kiki quería que Kendall viera todos los objetos mágicos que quisiera y además hablara con Danette porque sabía lo que ella significaba en su vida, tal vez su novia quisiera decirle algo.— Ey, ¿se nota que llore? no quiero que Keny se preocupe y te vaya a dejar calva—Le preguntó a la vampira soltando una pequeña risa.

                        🌾 ❛❛ 🧛🏻‍♂️❤️👑—No me incites, Kendall—Bromeo. Danette sonrió de lado, ya no le debía nada a nadie, ahora podía cobrarse lo que Nyun había hecho. Le agradaba reconocer que la bruja la conocía bastante bien pero, mientras notaba eso, ella se iba dando cuenta de que no conocía del todo a Kendall, ya no era la misma ¿podía ser que ya no la apreciaba como antes? a lo mejor ahora todo su mundo era aquella loba y eso le dio celos. —Pero, quiero dartelo porque se trata de ti—Replicó obstinadamente y con un tono casi ofendido de que le estuviera rechazando. —Así que escoge el lugar y lo comprare para ti—Ordenó sin intención de conciliar aquella resolución, Kendall estaba siendo más terce de lo normal y ella no era así, al menos con Danette no pero ¿por qué? —Ah ¿no? entonces en ese caso, debería llevarte a Paris para un cambio de guardarropa, eso iría mucho mejor contigo—Sonrió pensando en que podía ser un plan a futuro. Luego arrugó la frente al escuchar a Kendall. —¿Me estás diciendo que no puedo estar segura de lo que siento sobre ti? Pues entérate Kendall me gusta el control y si digo que te tengo afecto, lo tendré hasta la muerte o hasta que me traiciones—Aclaró necesariamente enarcando una ceja. Tomando eso último como algo imposible, la bruja jamás la traicionaría. Las siguientes respuestas cortantes tampoco le agradaron demasiado. Kendall era parlanchina por naturaleza podía soltarte discursos de horas y Danette no se cansaría de escucharla, incluso cuando discutía, ahora parecía que se le habían olvidado las palabras...o mejor dicho, la estaba castigando con su silencio ¿pero por qué? eso era lo que más le frustraba a la vampiresa. Lo único rescatable de todo y lo que le daba esperanzas era la reacción a su toque, ese sonrojo en sus mejillas, ese pequeño brillo en sus ojos y el sonido de su sangre corriendo más frenéticamente a causa del bombeo de un corazón silenciado. —¿No tiene sentido para ti?—Preguntó pensando que entonces para Kendall era irrelevante, aunque decía que las decisiones eran las correcta, el tono en su voz le pareció tener tintes de reproche.—Lo sé. Nadie hubiera hecho algo así por mi—Replicó gustando de esa sonrisa en su rostro, esa era la Kendall que recordaba, la que le sonreía a cada segundo. Pero, ese gesto duró apenas un parpadeo, luego la miro volver al gesto vacío y alejarse de ella para ver otro de los objetos. Danette no se movió de su lugar , Kendall estaba poniendo distancia entre ellas, lo que nunca había hecho porque recordaba que siempre estaba pegada junto a ella y le agradaba, ahora se sentía como una extraña para la bruja y le dolio. Apretó el mango del bastón mirándola ¿La clave estaba en viaje a Nueva York? Y entonces apareció el nombre de su alma gemela, ¡oh! con que eso era ¿eran celos? —Eso suena a que sí, hice algo de lo que ni estoy enterada. Eres demasiado irónica cuando pretendes no serlo, querida—Indicó moviéndose hasta ella para tomarla del brazo y girarla con delicadeza para hacer que la mirara. —Te la has pasado respondiéndome cortantemente, ni siquiera pareces emocionada de volver a verme y siento que si por ti fuera estarías a 10 metros de distancia de mi; pensé que era porque Nicholette era tu novia y ella es celosa, porque se le ve pero, esto ya va más allá por lo que veo.—Le inspeccionó con la mirada sin soltarla; no, no iba a dejar que pusiera más distancia entre ellas. —No, no te equivocaste pero ¿Es por Tahirah?—Indago.— ¿Por eso te fuiste tan repentinamente de Nueva York? Kendall—Analizó.—Necesito que me lo digas, gritame, discute conmigo, reclámame pero, dime algo porque esa postura de la chica que guarda silencio no va contigo. No te cambiaría por nada en el mundo, para mi eres irremplazable KK—Pidió y dejo saber porque quería aclarar las cosas.

🧑🏼‍🎤💖🎵. — Por supuesto — concedió—, pero no creo que sea el final — reposo tranquilamente sin explicarse. Tampoco estaba seguro de lo que ocurriría en un futuro, pero tras ver la mirada de su amada, y luego de esta interacción con Nicholette, sabía había continuación—. Bien — le sonrió. Se quedaría tanto como pudiera, ahora tenía curiosidad de cómo terminaría esto—. Ah, mis favoritas — le guiño el ojo. Tahirah no sabía lo que buscaba, pero esto la intrigaba. Sonrió. Kendall parecía más maravillosa con cada palabra. Quería conocerla, mas esperaba que le diera una oportunidad. No quería que la bruja pensara que era su rival por Danette—. No necesito verla en acción — exclamó—. Ya escuché referencias. Así que sí, tengo un par de contactos que podrían ayudar a su crecimiento. — Incluso Danette los tenía, pero ocuparía los propios para conservar su palabra—. ¿Con lo que yo quiera? — Pregunto con una sonrisa guardada—. De acuerdo. — Definitivamente no olvidaría lo dicho. Una vez más sonrojadas mejillas y ojos brillantes de la contraria le hicieron sonreír. Le alegraba saber que podía provocarla; mas no por arrogancia; pues ahora comprobaba que no la odiaba en realidad. De hecho, se atrevería a conjeturar que aún sentía algo por ella—. Tú no, puedes decirme Tah — insistió confidente. No era una libertad que otorgara a cualquiera, después de todo—. Eres una romántica — observó, sonriendo—, me parece lindo tu punto de vista, en realidad — agregó—. Señorita Nardell de Ahearn, suena muy bien — exclamó con una sonrisa. A pesar de saber que la provocaba, sabía que el amor de Kiki hacia Kendall era sincero. Un punto a considerar para decírselo a Danette—. Gracias, Kiki — le sonrió—. Parece que tu cerveza está lista — indicó, suponiendo que ya estaba a la temperatura correcta.

💖🧙‍♀️✨. — Haz lo que consideres — dijo con picardía. Sabía que Danette hablaba en serio, y ahora tenía el poder suficiente para no mancharse las manos. Sonrió al comprobar las lealtades de Danette. Eran de ella y para ella. Lo sabía, pero le encantó confirmarlo. Sabía que algún día esos trajeados le pertenecerían—. No necesitas darme todo — le dijo, sabiendo que incluso si pedía una mansión, se la daría. ¿Y por qué no lo aceptaba y ya? Primero, porque era demasiado terca para aceptar ayuda; y segundo, porque seguía herida—. Pero te lo agradezco, eres muy considerada — agregó para no parecer desagradable—. No, no me gusta toda su ropa — chasqueo la lengua, divertida—. Eso no lo sabes, Danette. Ya sé que ahora para ti el tiempo es diferente, pero yo soy mortal, el tiempo es importante, y en realidad no sabes lo que puede pasar en unos años — encogió de hombros. Probablemente, Danette y Tahirah ya estarían reinando Nueva Orleans para entonces. Por lo cual podría apostar—. Gracias —mostró una pequeña sonrisa por el futuro favor—. No importa, en realidad —negó con la cabeza. No quería entrar en conflicto con Danette porque tampoco tenía sentido. La contraria fue a cumplir sus sueños, era obvio que no había espacio para una bruja joven—. Está bien —cedió sin decir nada más, prefería morder su inferior para no soltar una verborrea que podía, o no, meterla en conflicto. El contacto en sus cabellos le hizo sonrojarse, una vez más. Fingir estar enfadado era difícil cuando se le tenía tan cerca—. No lo sé... Y supongo que tampoco tiene sentido hablar de eso —admitió—. Tú eres quien eres y yo lo que soy, gracias a como sucedieron las cosas, así que al final, parece que fueron las decisiones correctas —exclamó. No quería sumirse en posibles alternativas porque indagaría, indagaría hasta el fondo y se arrepentiría. Y no tenía caso, eso había ocurrido hace tanto. Finalmente sonrió—. Lo hice de corazón —se atrevió a decir—. Además, fue divertido engañar al aquelarre —agregó con una risita cantarina. La pregunta salió de sus labios sin pensarla y ahí estaba su respuesta. ¿Qué quería decir con "sus modos"? ¿Qué preferían las relaciones abiertas? ¿O que Tahirah lo prefería? No imaginaba a Danette aceptándolo, pero quizá se refería a otra cosa. En cualquier caso, desvió la mirada, alejándose, para pretender ver otro de los objetos cercanos a una pintura—. No, para nada —se mordió el labio para retener las lágrimas. No quería ser irónica, incluso al estar en la punta de su lengua—. En aquel entonces, supuse que tenías a una persona —se atrevió a decir, de la manera más casual posible. No quería soltar que debido a su noviazgo, se había comportado distante o que, tal vez, uno de esos "objetivos" podría haber sido la misma Kendall. O que, no era suficiente como Tahirah. O sinfín de ideas dolientes que debía guardarse—. No me equivoqué, ¿verdad? —Sonrió, a pesar de que no podía verla—. Como sea, Tahirah es muy guapa... Son la una para la otra.

[shirorina]

EXTRA 10 — INTENCIÓN —

Llegar a la costa que era su primera parada, les llevo dos días luego de que optaran por apresurar sus pasos pasada la hora del almuerzo, el día de su partida. No era sorpresa que la joven pudiera usar técnicas ninja, por ello el joven Uchiha no se preguntó demasiado sobre ello en el camino, en cambio se concentró en seguir planeando su siguiente movimiento en el tiempo que les llevó recorrer el trayecto hasta la costa, por ello al llegar al puerto hábilmente Shisui se encargó de conseguirles un medio de transporte para poder ir a la isla donde estaba el pueblo que buscaban.

Por su parte Yui mientras tanto decidió por cambiar su ropa por algo más “sencillo" optando por una camisa larga de cierre central sin mangas de color blanco y brocado dorado, junto a unos pantalones azul oscuro. Cuando los dos se reunieron nuevamente antes de zarpar Shisui le interrogó con la mirada sobre el cambio, sin embargo, ella se encogió de hombros y aclaró que sus ropas anteriores eran más para combate abierto, pero si iban a pasar desapercibidos algo más “civil” seria una respuesta más acertada, punto que Shisui no le discutió al encontrar lógica en ello, así que n cambio decidió dejar el tema y guiarla hasta el navío donde actualmente se encontraron y se quedarían hasta pisar nuevamente tierra firme.

— ¿Sabías que hace muchos años los barcos no se hubieran atrevido a ir más allá de unos pocos metros de la costa porque había bestias marinas? — Fue el comentario de la tarde cuando estaban cenando en la proa del barco pesquero que amablemente había accedido a llevar a los dos pelinegros.

— Mmm… ¿Aún hay no? — Cuestionó Shisui apartando la mirada del oniguiri entre sus manos y mirando a la joven a su lado que estaba luchando en su mirada con un tentáculo de pulpo.

— No realmente, el que se encargaba de “mantenerlos vivos” termino por asesinarlos a todos porque no eran de su agrado — Suspirando Yui bajo lo que se suponía tenia que comer y lo dejó en el cuenco de sopa que le había provisto el capitán.

— ¿Simplemente así? — Shisui cuestionó mientras observaba como la joven parecía estar evitando la comida, así que agregó el descubrimiento a otro dato curioso sobre la guardiana.

— Si, aun me dan pena pero ciertamente era problemático la cantidad de personas que morían devoradas por ellos —declaró Yui mirando el atardecer en un intento de ignorar el hambre que en ese momento estaba sintiendo.

Shisui estaba seguro para ese punto que la mujer era a su modo bastante normal y en cierto modo no podía ignorar el malestar que se le presentaba por los alimentos. — Hm ¿No te gustan los mariscos? — Saltando ligeramente y apartando la mirada Yui parecía evitar la pregunta esperando que el chico renunciara a cuestionarle sobre esto, pero para ese momento debería aprender que eso con Shisui era casi imposible, el hombre era testarudo cuando quería, por eso permaneció en silencio mirando a la joven que al final resignada suspiró y enfrentó los ojos oscuros que la miraban con curiosidad.

— Un poco… no es que no pueda comerlos, es solo que hablando de bestias marinas había una como un pulpo una vez… solo recordé su sabor crudo porque este no esta precisamente… condimentado —gruño avergonzada por verse tan quisquillosa.

— ¿Quieres cambiar? — Sorprendida por la repentina declaración Yui ahora miró al Uchiha que extendía su paquete de oniguiri hacia ella.

— Pero estos los trajiste tu, comida cacera como se dice. — El pelinegro se encogió de hombros y tomó el cuenco de la chica al tiempo que colocaba si pequeño paquete de bolas arroz como intercambio en sus manos.

— No importa, hay cosas que no todos toleramos, viendo que eres igual en ese punto es entrañable, no me molesta compartir — Shisui sonrió y comenzó a comer la sopa que apenas había tocado la guardiana, ignorante de que la acción tan simple había ablandado notablemente las expresiones de la pelinegra y consiguiendo que por su pecho se deslizara una sensación cálida.

— Gracias Shisui —murmuró la joven dando un mordisco a una de los onigiri. Tenía una textura perfecta, con la combinación justa de sal con las algas y también dentro tenía oculto un poco de atún desmenuzado — Delicioso.

— Es bueno que te guste, usualmente cocino para mi mismo, así que me conformo con lo que sale —declaró el pelinegro justo cuando ella estaba tomando otro bocado de la comida, consiguiendo que casi se atragantara con la porción.

— Espera un momento ¿Tu los hiciste? — Atónita, ella vio cuando el pelinegro levanto el rostro luego de morder un pedazo del pulpo con el que ella no había podido. — Lo hice ¿Por qué la sorpresa? —declaró en respuesta el muchacho.

No es como si el supiera, no era intencional y definitivamente fue un acto de buen corazón. Oh como maldecía en esos momentos las mil y un tradiciones absurdas de su gente, sin embargo, se sentía mal tomar algo que él había hecho para si mismo solo porque no pudo enfrentarse a un estúpido intento de calamar gigante… y sí sabía que ambos eran diferentes pero en su opinión esas cosas con tentáculos podrían ser para ella lo mismo pero con apariencia diferente. — Yo… ah… están bastante buenas Shisui, cocinas bien —finalmente dijo, tragándose el resto de la porción que tenía entre sus manos.

— Estoy curioso, Mencionaste que mordiste una de estas cosas crudas ¿Por qué fue? — Shisui tenía que admitir que la sopa no estaba muy buena, aunque no sería quisquilloso con ella, comida era comida para ese punto y no era la primera vez que comía algo que no estaba del todo hecho.

— Bueno… fue hace mucho tiempo —empezó ella a narrar mientras tomaba otra de las bolas de arroz y finalmente se relajaba completamente, extendiendo las piernas que había tenido recogidas y mirando al cielo — No recuerdo bien la edad que tenía, pero era pequeña, y antes de que preguntes si, nosotros crecemos, nacemos y crecemos.

— No lo iba a cuestionar —Declaró Shisui — Aunque si quería saber la forma.

— Como cualquier criatura viviente, nuestra existencia solo difiere por algunas cosas. El punto de la pregunta no es ese de todas formas. Fui llevada al mar con Nox para “aprender” más sobre nuestros deberes, nuestra vida en general y en parte a sobrevivir. El punto es que juntarnos a Nox y a mí en un mismo lugar por mucho tiempo no acaba bien y más cuando éramos niños, así que luego de un día terminamos peleando. Lo siguiente en ocurrir fue que despertamos con nuestra riña a uno de los calamares gigantes de las profundidades que arribó a la costa y bueno… no fue muy amable para marcharse pacíficamente, casi nos aplasta con sus tentáculos y claro también nos agarró, dio vueltas hasta marearnos, también nos hundió con él. El mar es profundo y oscuro por lo cual para Nox fue fácil soltarse debido a sus habilidades, pero de mi parte estaba algo en desventaja, así que mordí al calamar… — La joven se estremeció un poco y tragó otro bocado de comida antes de continuar con su historia — Podemos producir veneno o antídotos en nuestra sangre, transmitirlo a través de nuestros colmillos o uñas no es problema, y bueno, funcionó la bestia me soltó… a costa de que luego fuera perseguida por ella y el sabor viscoso quedara en mi boca junto con el sabor salado del mar, no tiene un agradable sabor, sin ningún tipo de preparación a mi gusto sabía amargo y estos en especial tenían una capa de baba que les recubría completamente para protección de otros depredadores… el punto es que no es que no pueda comer pulpo o calamar, pero cuando están medio crudos… me dan recuerdos desagradables.

Shisui trató seriamente de mantener una expresión seria en sus facciones, realmente lo intentó con todas sus fuerzas, pero pensar en una pequeña traviesa metiéndose en problemas, en comparación a la mujer confiada que tenía al lado era, por no decir menos, hilarante. Ella también había sido una niña real, también había cometido sus errores al parecer y saliendo de ellos con uñas y dientes como expresaba en su historia, tal como alguien normal, no poderes, aprendizaje propio… era una historia tierna. — Ya veo… es interesante, supongo que en mi caso no soy quisquilloso con la comida, pero no me gustan las setas, las como cuando están de temporada pero es… un poco difícil para mí. — Yui miró la sonrisa alegre en el rostro de su acompañante, sabía que básicamente contar una anécdota como esa era como burlarse de si misma pero no tenía la intención de ocultarlo, no es como si esa información fuera a afectarla de alguna manera.

— Bueno por mi parte esta bien, es tu turno de responder una pregunta ociosa. ¿Alguna travesura que hayas hecho? — Era momento de emparejar el terreno de Juego, ella había comentado algo un poco vergonzoso de su niñez, era lo más justo que conociera algo de él.

— Hm… bueno veamos —el Uchiha meditó un momento, pensando en alguna cosa que hubiera hecho de niño que valiera la pena contar, sin embargo memorias como las que contaba ella no tenía alguna, al menos no de forma tan esporádica, las únicas travesuras que había hecho eran bromas a Itachi y Sakura con sus misiones, pero por lo demás siempre dedicó su infancia a cuidar de su familia, sus difuntos padres cuando ya no pudieron levantarse para ser las cabezas de hogar. — Bueno… siempre me gustó llevar a Itachi y Sakura de misión, una vez nos metimos en problemas, rodeados de ninjas peligrosos luego de que ascendieron a Chunin.

Una sonrisa apareció en el rostro del pelinegro al recordar viejos tiempos — Sakura me persiguió cuando terminamos, e Itachi creo que estaba pensando una forma de vengarse, aunque nunca ejecuto dichos pensamientos; es demasiado amable a veces. Lo siento no es una gran historia, pero realmente no tengo presente un momento divertido como el tuyo. — La pelinegra lo observó un momento en silencio intuyendo que era lo que estaba pensando el chico, así que luego de un momento suspiro y le dio un suave golpe con el codo.

— No es una mala historia, tus recuerdos más felices son con ellos, además me da la idea de que, aunque no te metas en problemas adrede lo harás si es necesario para “probar algo.” Después de todo estabas cuidando a tus hermanitos — La expresión de la chica era suave transmitiéndole su comprensión.

No era una mala dinámica, pensó el hombre, ella era lo suficientemente madura como para ver diferentes puntos de vista sin ser condescendiente, tenía el corazón para escuchar sin llegar a ser como el resto de personas, no había prejuicios incluso si estaba consciente de que ella había creado una impresión sobre ellos y conocía la historia de cada uno. Era intrigante alguien como ella que fácilmente podría asumir algo con los datos que recopilaba, tal y como había estado haciendo. — Hablas de este tal Nox desde hace tiempo… ¿Tu compañero? ¿Hermano? — Su pregunta era por curiosidad, ella lo había mencionado antes, de hecho varias veces y sabía que tenía relación con ella pero no sabía el tipo de lazo.

Una mueca de disgusto cruzó las facciones de la joven como reacia a responder, y de hecho él estuvo a punto de retractarse pero ella se adelantó con la respuesta antes de que si quiera pudiera conseguirlo. — él y yo… bueno somos caras de una misma moneda. No es mi hermano ni estamos relacionados por sangre, lo nuestro es algo más espiritual podría decirse —suspiró y cerro el paquete ahora vacío donde Shisui había pasado sus onigiri antes de continuar — Dentro de los guardianes hay dos tipos de especialidades por así decirlo, luz y oscuridad, de ahí que salen las otras ramas. Aunque esto ocurra no son comunes quienes se repelen o tienen trabajos similares.

— No comprendo es como agua y aceite entre ambas “facciones” —cuestionó el pelinegro, sorprendido que ella fuera abierta a comentar aquello.

— No, no lo son. Nox y yo somos un caso especial —declaró ella levantando la mirada — al igual que nuestros padres somos y no somos compatibles.

— ¿Cómo polos opuestos que se atraen? — Esta vez Shisui lo decía en broma pero solo consiguió que la guardiana se pusiera pálida y le diera una mirada de horror junto a un evidente estremecimiento.

— ¡Por Dios No! Me refiero, no hay odio ni nada pero solo pensar algo así me da nauseas, nos mataríamos antes de poder tener una relación — Ella negó fuertemente ahuyentando el pensamiento — Mejor lo explico así. Él y yo nos especializamos casi en lo mismo, nuestros trabajos son pesados, y donde yo no intervengo el complementa mi trabajo, sin embargo nuestras formas de actuar difieren bastante. Hasta ahí parece trabajo entre colegas normal, pero lo cierto es que si bien la luz no puede existir sin oscuridad y la oscuridad engulle la luz o es ausencia de la misma, mantenemos una constante lucha sobre lo mismo, aquellos que llevan el pináculo de esa responsabilidad tienen a chocar entre ellos porque las especialidades son mas fuertes.

— Entonces entre igualdad de fuerzas una ejerce presión sobre otra —declaró Shisui a lo cual Yui asintió.

— No soy buena simplificando, pero es correcto, usualmente entre los demás siempre hay un “dominante” y un “pasivo…” eso no suena bien pero no hay otra forma, son rangos de fuerza, no hay dos que tengan la misma cantidad así que pueden coexistir… a su modo. Nox y yo no podemos de forma natural porque nuestras fuerzas se igualan y servimos casi para lo mismo.

— Bueno otro dato sobre ti, era tan fácil explicarlo, pero te complicas demasiado —comentó Shisui dejando de lado el cuenco de sopa ahora vacío — ¿Eso es normal en ti?

— Supongo que tengo tantas cosas en la cabeza que miro en tras fondo que me es difícil expresarlo correctamente —admitió ella un poco avergonzada de su pequeña debilidad, de hecho, eso también se aplicaba a sus pequeños castigos, parte de su personalidad suponía, después de todo era algo que su compañero siempre le decía. — Como sea, como mencioné no es que nos odiemos solo que luego de un tiempo de estar juntos solemos pelear, con el tiempo ha sido menos frecuente y nuestro tiempo de tolerancia se ha extendido a días, pero nunca debemos cruzar cierto tiempo.

— Bastante complejo —aceptó el Uchiha pensando como seria el tal Nox. Ella era bastante humana quitando sus responsabilidades, algo refrescante para ser su compañera de misión, de hecho hasta el momento aunque no había dado órdenes, seguía sus pasos sin replicar, aceptando su liderazgo sin problemas, aunque ella probablemente tenía más experiencia. — Así que se conocen desde hace tiempo.

— Crecimos juntos. Aunque no somos familia por sangre casi somos como primos. — La expresión de la chica se volvió casi nostálgica — Nuestros padres también crecieron juntos, mi abuelo acogió al padre de Nox aunque con mi padre siempre se la pasaron peleando tal y como hacemos Nox y yo actualmente. Pero realmente se llevan bien, como hermanos así que técnicamente somos una familia, con mi tío por lo menos no tengo problemas.

— Definitivamente es mejor no asumir nada, es más interesante descubrir esos pequeños detalles sobre ti — una sonrisa sincera cruzó la expresión de Shisui, aunque Yui realmente para ese punto se había imbuido en recuerdos, realmente no le importaba hablar de ello, pero se sentía apática con el tema. — No tengo hermanos, pero considero a Itachi y Sakura como tal, hemos crecido juntos así que no puedo verlos de otra forma, además… me apoyaron cuando lo necesité.

— Son una verdadera familia —saliendo de sus cavilaciones la joven volvió a mirar a Shisui esta vez una sonrisa pequeña y amable cruzaba su rostro — Puedo ver cuánto los quieres, y lo desinteresado que eres para verlos felices.

— Oh no, no hables de eso de nuevo. —Gruño el Uchiha ocultando su rostro tras su mano mientras recordaba su primer encuentro, donde él ni siquiera cayó en cuenta de quién era ella; pero podía saber con claridad a lo que hizo referencia esa vez, y aunque no le molestaba admitirlo de todas formas era un poco incómodo recordarlo.

— Oye, descuida, te lo dije se lo que se siente asó que no creo que sea malo. De hecho admiro eso de ti. — Inseguro si mirar de nuevo por un momento Shisui soltó la respiración que contenía y permitió deslizarse su mano un poco, lo suficiente como para poder ver a la mujer de reojo, pero solo encontró una clara sinceridad en su rostro.

— ¿Admirarme?

— Si, no hay muchas personas que puedan desapegarse de esa forma incluso si no es su naturaleza propia hacerlo, sea cual sea el motivo que te llevo a hacerlo inicialmente sigue siendo un gesto significativamente difícil. — No hubo respuesta luego de esto y simplemente se quedaron mirando como el sol se ocultaba tras el mar.

Usualmente no tenía tiempos para hacer solo eso, sentada en la cubierta de un bote al lado de un chico que apenas si estaba empezando a conocer, viendo la puesta de sol luego de una cena temprana cocinada por el mismo hombre. La vida como guardián hacía perderse las cosas hermosas de la vida en ocasiones, una carga destinada desde que nació. No, nunca había maldecido su destino incluso por su propia suerte o las cosas que guardaba dentro de sí, cada experiencia la había aceptado y esos momentos no serían diferentes. — Aun parece que falta un poco ¿Crees que…? — La joven se detuvo en sus palabras cuando sintió un peso extra en su hombro.

Sorprendida, giró delicadamente el rostro hacia su acompañante y vio, con deleite femenino la expresión dormida y tranquila del Uchiha. ¿desde cuándo? ¿La sopa le había sentado mal? ¿Cómo simplemente cayó de esa forma? ¿No se suponía que no debías bajar la guardia? No es que tuviera malas intenciones, pero él no la conocía aun lo suficiente como para… darle ese grado de confianza. Recostó la cabeza contra la madera, y sintió un extraño burbujeo en su pecho, ¿Debería sentirse alagada u ofendida? Realmente la tomó como una almohada, pero… No era algo malo ¿cierto? Probablemente su cansancio fue guardado con recelo por mucho tiempo, no es como si el Uchiha lo demostrara de todas formas.

Su cabello también se sentía suave en su costado ¿Cómo podía ser eso? Siempre se veía rebelde, se parecía al de Nox —La suerte de algunos—. ¿No le dolería el cuello si se quedaba en esa posición? Era el viaje más extraño que hubiera tenido por un tiempo, pero era igualmente bienvenido. Tomando una decisión finalmente, con cuidado ella lo movió suavemente por su hombro y ayudo que su cabeza se deslizarse hasta su regazo, intentando no despertarlo. Aun faltaría algún tiempo para llegar, y a ella no le molestaba guardar su sueño, déjalo descansar para lo que venga. Una sonrisa se deslizó por los labios de la morena mientras cerraba los ojos, solo descansando un poco mientras escuchaba las olas golpear contra el barco y una mano errante inconscientemente comenzaba a acariciar los risos del hombre mayor.

Por otro lado Shisui no sabia si arrepentirse de su decisión. Realmente su plan no era dormir realmente, simplemente ante el silencio quería medir la reacción de la joven si él mostraba la guardia abajo. El resultado fue más de lo que espero y una punzada de culpa golpeó sus costillas, porque aunque no lo había visto, podía sentir lo tensa que había estado la guardiana al él ejecutar tal movimiento osado de su parte. No es que él hiciera eso con toda la gente, pero ¿Cómo actuaria? Cuando tus presas están con la guardia abajo es cuando atacas, y aunque no quería ponerla a prueba de esa manera, no espero que su reacción fuera “considerada” incluso tierna si algo le decía la suavidad con la que lo estaba acariciando. No era una mala persona en conclusión y era un poco cruel de su parte desconfiar tanto pero su familia era importante, esa misión solo seria la confirmación o justificación de la personalidad de ella, aunque hasta el momento cada interacción solo le hacía pensar que ella era más transparente de lo que pensaba.

Pensando en eso, junto con la calma que había lentamente y sin quererlo realmente Shisui cayó en un sueño ligero siendo rodeado de pequeños flash de su viaje en el momento, al menos una decisión sabia por lo que les esperaba cuando llegaran.

-0-

Nada, Shisui podía atribuir que quizás los rumores fueran infundados o quizás había sido una falsa alarma lo que los había llevado allí, porque al pisar la aldea señalada, solo encontraron un lugar animado y nadie sabia nada de lo que estaba insinuando cuando se acercó a los bares a deslizar información de los supuestos rumores. Habían llegado con Yui al amanecer del tercer día y desde entonces habían fingido ser un par de hermanos mercantes, donde simplemente estaban de “viaje” buscando nuevas cosas para suplir sus mercancías, algo exótico había declarado Shisui que en poco tiempo ya había entablado buenas relaciones con varios comerciantes del pueblo. Su elocuencia al hablar y observaciones acertadas de las personalidades de los habitantes le había abierto un espacio fácil entre algunos de los comerciantes más populares e incluso con el dueño de la actual taberna que estaba visitando, sin embargo no había conseguido ni una sola pista, y ya se había asegurado de revisar el mapa varias veces y estaba seguro que era el lugar descrito.

Era desconcertante y frustrante por decir algo. — Oh muchacho, este lugar es más seguro que cualquier lugar que visites, incluso las aldeas ninja no se comparan —reía el hombre tras la barra — Maximo tendremos algunas peleas de borrachos y desacuerdos fáciles pero nada como los rumores que me cuentas que se han escuchado a fuera, siente la seguridad de hacer negocios aquí.

— Eso realmente es un alivio —declaro Shisui dándole otro sorbo a su bebida y una amplia sonrisa que ocultaba su frustración — Entonces no me preocupare de tomarme mi tiempo para mirar las cosas que podría adquirir.

— Sí, que por cierto aquí el licor… es delicioso, si buscas algo como eso para comerciar, puedo recomendarte que vayas con uno de los mejores destiladores de vino de arroz, también trae de otros comercios a base de uva. — El hombre soltó una fuerte risa y le dio una palmada en el hombro al joven Uchiha que siguió la corriente al soltar su propia risa. — Por otro lado, he escuchado que viajas con tu hermana.

— Oh si, ella le gusta mirar por si misma a veces —respondió Shisui pensando en que la pelinegra de hecho había estado en su propio mundo desde que llegaron, pero siempre actuaba bastante de acuerdo a la ignorancia, ni siquiera parecía alarmada y siempre volvía con cosas, muestras aquí y allá que decía que le daban gratis.

Casi una semana y no tenían nada, comenzaba a pensar seriamente que era mejor marcharse y reportar que no había nada inusual, pero ¿Si el tercero y Tsunade tenían razón? — Hm creo que lo he escuchado, es una niña muy dulce, algunos chicos han estado comentando que el otro día estuvo ayudando en la casa de té de la abuela Kuni luego de que se lastimo la espalda de nuevo. En verdad ha atraído mucho las miradas desde que llego ¿Estás seguro de dejarla sola? Puede que sea un lugar seguro para los negocios, pero… una chica linda es una chica linda.

Oh era cierto, y ahí tenía que entrar su actuación, fingiendo que la “dulce” Yui no podía defenderse sola y él como hermano protector no podía ser menos que protector. — Ella es un poco terca pero estaré mas pendiente, no quiero que mi hermana termine lastimada por cualquier persona. — El cantinero estaba asintiendo cuando escucharon una gran conmoción afuera, entre jadeos de sorpresa y miles de murmullos rápidos entre todos.

Ambos hombres se miraron antes de que salieran disparados hacia la puerta, aunque Shisui siendo más ágil que el fornido hombre tras la barra llego antes a la puerta donde algunas personas ya comenzaban a salir. Fue difícil moverse entre las personas que trancaban la salida, pero de algún modo sin llamar la atención logró apartarlos hasta que llegó al frente, para ver que era lo que ocurría. Para ese punto Shisui debería empezar a llevar un registro de cuantas cosas le iban a sorprender de esa misión, porque claramente esa seria otra más para la cuenta.

Cabello morado oscuro, casi negro recogido en un moño alto, rasgos aristocráticos, vestido con una fina ropa de seda, una espada atada al cinto y sobre un caballo. Ese era el hombre que estaba en medio de la calle con la mirada fija en una muchacha en el suelo y junto a ella Yui que la estaba sosteniendo mientras ignoraba al imponente varón frente a ellas. — ¿estás bien? — Escuchó que su compañera susurraba a la muchacha mientras frotaba suaves círculos en su espalda.

— ¿Seguirán interrumpiendo el camino?

— Es raro que Lord Kiyoshi este tan tranquilo ¿No les hará algo?

Los rumores preocuparon a Shisui, no sabía cómo actuaría Yui en una situación si ese hombre se mostraba agresivo e incluso grosero. Ahora ¿cómo intervendría? — A ti no te conozco — Finalmente la voz del hombre salió de sus labios, un tenor bajo y suave, típico de un hombre poderoso — Conozco a todos los de este pueblo y nunca vi a una… mujer como tú.

Era evidente que se dirigía a la pelinegra que aún no lo había mirado, sino que se enfocaba en ayudar a la mujer a levantarse, que para sorpresa de Shisui estaba embarazada, quizás unos cinco meses si barriga daba un aproximado. — Solo soy una comerciante que esta de paso —finalmente respondió Yui levantando la mirada hacia el hombre, su rostro parecía angustiado y sin desenfado, prácticamente humilde y temerosa.

— Tu nombre… ¿Cuál es? — Dijo el Lord espoleando su caballo para acercarse más a las mujeres.

— Yui mi señor —la joven se inclinó suavemente, pero sin soltar a la mujer que parecía a punto de desmayarse. — Si no le molesta parece ser que la señorita aquí se siente un poco mal, una caída así debe tratarse de inmediato.

— Con cuerdo… y agradezco su genuino interés en cuidar a una criada que no conoce su lugar, ahora, ella terminara de recibir el tratamiento que corresponde cuando termine sus deberes. — Shisui sabía que no todos podían ser amos piadosos y ese hombre frente a él era uno de los tantos que veían a sus sirvientes como simples herramientas, sin embargo, la ira burbujeante que se arremolinaba en su pecho no podía apagarse por la crueldad en las palabras del sujeto. Era evidente que la mujer podría estar mal, especialmente si se había caído, asi que estando embarazada el bebe y ella eran prioridad, no los caprichos del lord.

— Hm ¿Cuáles son sus deberes? ¿Cargar todas las compras? ¿Apartar el camino para que pase? — Para incredulidad de Shisui, la joven guardiana no parecía compartir su enojo, sino la curiosidad en su mirada parecía predominar sobre todo.

— ¿Quiere tomar su cargo? — El nombrado Kiyoshi sonrió mostrando una expresión petulante llevando su caballo como método de intimidación para la pelinegra que parecía encogerse bajo la presencia. — Creo que las tareas que esta mujer realiza no son… de su estilo, pero quizás podría calentar bien una cama.

Algunos murmullos más recorrieron el lugar, tonos de preocupación, envidia, asombro, pena… cada uno era diferente y el Uchiha comenzaba a perder la paciencia, era más que claro que la pobre mujer que sostenía Yui necesitaba atención, pero parecía que esos dos seguirían un rato con su charla. — Parece que eres medianamente decente para algo así.

— Bueno, si es lo que desea… — Sorprendido por la respuesta de Yui al igual que muchos, el pelinegro dio un paso al frente para intervenir, hasta que la expresión de la guardiana cambio a una amplia sonrisa que se veía completamente inocente — No pensaba que pudiera tener tales dolencias, pero conozco unos buenos remedios para los problemas óseos, si necesita que su cama sea calentada supongo que usara las mejores piedras calientes y varias hierbas medicinales para evitar sus deficiencias.

Silencio… fue lo siguiente que fue pasado por la calle, que incluso la mujer que hacia unos momentos estaba por caer se quedo de piedra y parpadeando miro a la sonriente pelinegra que parecía ajena a la tontería que acababa de decir. Por supuesto la calma no duró mucho y los murmullos estallaron con más brío alrededor, donde para ese punto el Uchiha comenzaba a cuestionar si las habilidades sociales de la pelinegra o entendimiento de la realidad humana fueran tan pobres. — ¿Estas… retándome? ¿O simplemente eres lo suficientemente tonta? — Declaró Kiyoshi haciendo avanzar a su corcel sin embargo, antes de que llegara el animal se detuvo en seco.

— ¿Yo? Por supuesto que no, es genuino interés —declaró Yui parpadeando confundida para luego parecer como si cayera en cuenta de algo y dirigir una mirada de arrepentimiento al hombre que para ese punto enfoco una furiosa mirada en la pelinegra — Oh, mis disculpas, no quería que nadie se enterara de sus dolencias, por supuesto he escuchado que tales cuestiones también afectan el apetito sexual y energía para realizar las tareas diarias, quizás es por eso que esta tan desesperado porque esta mujer le asista. Que desacierto el mio por revelar aquello.

— ¡Insolente!

— ¡Hermana! — Con paso presuroso antes de que el hombre se decidiera a lanzarse sobre la guardiana Shisui no pudo quedarse más tiempo como un expectador — Vaya que cosas tan raras dices. Mis disculpas, ella es demasiado inocente, no era su intención decir cosas sin sentido Lord…

Llegando en algunas zancadas al lado de Yui se puso frente a ella e inclinó la cabeza en señal de respeto, aunque para ese punto estaba conteniendo las ganas de reír o golpear al sujeto frente a él. — ¿Eres familiar de ella? — Casi parecía que ese sujeto quería escupirle allí mismo, pero todo sea por la misión.

— Soy su hermano mayor, mi nombre es Shisui. Nuevamente me disculpo, ella… no salía mucho de pequeña y es nueva para interactuar con las personas. — Levantando la cabeza finalmente el Uchiha dirigió su vista al rostro del sujeto.

Parecía un noble de otro país, además sus ojos eran de un color Gris verdoso, podía entender que algunas mujeres lo miraran con coquetería, sin embargo, todo su lenguaje corporal lo mostraba como una persona que sin dudar se encargaría de abatir si se lo pidieran. — Escuché que son comerciantes ¿Cuánto cobrarías por ella?

— ¿Disculpe? — No estaba insinuando que la compraría ¿O si?

— He dicho cuanto pides por la libertad de tu hermana, al parecer necesita ser instruida en lo que hablo y parece que mi vulgar criada no dará más la talla así que…

— Con todo el respeto, mi hermana menor no está a la venta. Me aseguraré de explicarle cual fue su error, pero si pregunta nuevamente solo me negaré a su solicitud — Esta vez, aunque cordial su tono permitió que soltara una clara nota de disgusto.

— Oh… Ella me ha ofendido. Si no está dispuesto a venderla tendré que disciplinarla aquí mismo. Aunque sean simples comerciantes pasajeros, esta es mi tierra y todos los que la pisan me pertenecen. — Esto no iba bien, podrían salir de allí sin problema, eran ninja, pero errarían en la misión, sin embargo… aunque la mujer detrás de él no fuera quien es, tal propuesta seria inaceptable.

— ¿En serio? Dai-kun me había dicho que esta tierra era de él no sabía que me había mentido. — Fue como un golpe en seco que dejó el lugar en silencio, especialmente porque el sujeto pareció repentinamente aturdido. — Que hacemos hermano, tenemos que ir a verlo y cuestionarle porque me dijo tal mentira.

— Espera un momento… ¿Alguien esta usurpando mis tierras? — ¿Nerviosismo? Shisui no se perdió el cambio de actitud y tono en el sujeto, como si el simple nombre le aterrorizara, por su parte mirando de reojo a Yui ella estaba haciendo un puchero de molestia.

— Oh, bueno… es un amigo que hace mucho no veo y vive cerca de aquí, aunque poco sale de casa, si usted es dueño de todo esto debe conocerlo, su nombre es Katsumoto Dai, ya sabe… tiene unos bonitos ojos verdes y cabello castaño claro, su casa queda al norte del bosque…

— ¡Oh! Ese rufian… no tengo tiempo para tonterías, hagan lo que quieran. Ese hombre como se atreve… tengo que ir yo mismo a desenmascararlo. Pero no olvidaré esto, definitivamente… — arreando las riendas de su caballo el noble salió de allí como si acabaran de poner hierro caliente sobre el asiento del caballo.

Lo siguiente fue un borrón a los ojos de Shisui, porque antes de tener tiempo para preguntar a la pelinegra que era lo que había pasado ella habiendo borrado cualquier aspecto inocente dedicó toda su preocupación a la mujer en sus brazos y rápidamente pidió a Shisui que le ayudara a llevarla. Para su sorpresa algunos aldeanos cuando la pelinegra lo solicitó asistieron en darles un espacio dentro de sus casas y proveer a la muchacha de algunos elementos. Pronto y sin saberlo se vio inmiscuido en lo que fue un proceso de examen médico apresurado para la mujer junto a algunos brebajes, antibióticos y demás recomendaciones, todo mientras la mujer que luego se entero se llamaba Kasumi contaba entre lágrimas los abusos de su patrón, que para ese punto si estaba en la peor estima para Shisui ahora mismo, con los detalles de violación, latigazos y evidencia de quemaduras debajo del kimono de la pobre mujer había pasado a ser alguien dentro de su lista de asesinatos de primera prioridad si se llegaba a presentar la oportunidad.

Por su parte aprendió otra cosa y es que Yui escuchaba con calma y paciencia mientras sanaba a la mujer, tanto física como emocionalmente porque dedicó algunas palabras tranquilas y sonrisas reconfortantes, asegurándole que el hombre no iba a volver a ponerle un dedo encima. Además luego de una breve entrevista, logró acordar con una de las mujeres que le estaban asistiendo un trabajo como mesera en una pequeña tienda de té, seguramente la que había escuchado que había recibido la ayuda de ella en esos pocos días que habían estado allí. No hubo tiempo suficiente a solas entre los dos para discutir lo ocurrido, no al menos hasta que llegó la noche y pudieron estar en la seguridad de la habitación alquilada que tenían.

— Yui… lo que paso en la tarde… — Empezó él mientras se giraba a verla justo cuando ella se tiró sobre su futon propio.

— No, no soy ingenua y si lo estaba provocando al maldito —contestó la joven ahora dejando filtrar la nota de veneno en sus palabras — Y sobre eso también quería hablarte.

— ¿Qué tienes que decir? Era un noble e inventaste que conoces a alguien que no haces…

— ¿Quién dijo que no conozco a Dai? —respondió la joven mientras dirigía sus ojos ahora ligeramente azules sobre los negros de Shisui — Entiendo que es confuso y la verdad es aún más molesto actuar como simple mortal pero no soy indefensa contra los nobles. Además, ese hombre estaba robando un título indiscriminadamente y torturando a la gente.

— Bien, bien explícate antes, siento que para este punto decir lo que pienso ya tendrás una respuesta preparada —gruñó el Uchiha.

— Disculpa —esta vez la mirada de ella se ablando mostrando su arrepentimiento genuino, al tiempo que se sentaba —Sé que fue incómodo y aún no he contado lo que he descubierto.

Esto llamó la atención del Uchiha que levantó el rostro para ahora mirarla — ¿Te refieres a nuestros motivos originales para venir? — Ella asintió confirmando la pregunta. — ¿Qué es?

— Sé que has estado preguntando a los aldeanos algo que yo también hice al principio, pero claro, si se trata de algo mayor ellos ni siquiera recordaran que es lo que los aqueja, así que seguí otro rastro, algo más visible solo para alguien como yo y descubrí algunos residuos de poder. Ahora a donde me dirige todo esto, bueno, me percate que el tipo que nos cruzamos en el día de hoy tiene rastros de eso…

— ¿Es uno de los tuyos?

— Oye confunde, ofende, pero no intentes maldecirnos tanto. Tenemos gente retorcida, pero en sus propios asuntos. El hombre que nos encontramos es un humano normal, pero parece que hizo contrato con… bueno vosotros le dirían demonios, nosotros les decimos caídos —declaró la chica.

— ¿Cómo ángeles y demonios? — Shisui se sentó en su propio futon frente a la chica y suspiró cansado.

— Ah nada de lo que te imaginas, pero si tenemos algunos que se tuercen en su camino y usan sus habilidades para propósitos más… egoístas. No entrare en detalles, pero parece que de ahí vienen las desapariciones recientes ¿El propósito? Creo que están experimentando, sin embargo, aun es muy vaga la información como para ser completamente certeros de que exactamente es lo que están haciendo. — Si lo que sonaba era una indicación quería decir que todo era más grave de lo que parecía, realmente ir solo probablemente hubiera sido una mala idea.

— ¿Entonces? ¿Qué hay ahora pendiente? —Cuestionó el hombre.

— Bueno… normalmente te diría que tu misión acaba aquí y yo me quedo, pero… —La pelinegra pareció un poco incómoda pero seguido a esto suspiró y añadió — ¿Quieres acompañarme hasta el final? Prometo protegerte para que regreses bien a casa.

Parpadeando Shisui miró sorprendido a la joven que parecía casi suplicar con la mirada al decir esto. — Es parte de tu trabajo ¿No hay problema si estoy cerca?

— Que lo haya o no es mi responsabilidad, pero quiero darte la oportunidad, además no sería justo si simplemente te desplazo a un lado. — Shisui giró el rostro y miró a la joven con seriedad para luego sonreír suavemente. Honestamente no lo esperaba, el pensaba que en el momento que ella determinara que la misión seria más de su área de trabajo lo desplazaría a un lado, pero ahí estaba ella mirándolo con firmeza y lanzando una propuesta bastante… humana.

— Bueno…. En ese caso estoy a tu cuidado compañera.

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Segunda parte de esta pequeña aventura de estos dos. Ciertamente mantener ciertas cosas sobre la mesa y no excederme con algunas cosas es complicado.

Escribir de Yui es complejo porque tengo una maraña de explicaciones sobre ella, pero creo que volveré a dejar las cosas lo más simple posible y que sea Shisui quien traduzca lo que diga hahahahaha. Me gusto la interacción hasta el momento.

Creo que en un principio nuestro pelinegro parecía bastante tranquilo con respecto a Yui, pero claro, él es un ninja y tiene que estar seguro de algunas cosas, por eso juego suave con nuestra amiga guardiana, pero claro igualmente tiene cierta curiosidad por averiguar más sobre quien es y su forma de pensar, por eso, las accione libres de ella y bueno cooperadoras le sorprenden, por que alguien con poder siempre toma el control, pero hasta el momento ella se ha acoplado bien a su papel, e incluso ha conseguido que despierte el propio interés de ella sobre el Uchiha.

Tendremos un poco de movida a partir de aquí pero creo que esto comienza a calentarse, por su puesto esto nos llevará un poco sobre el tema de los guardianes y un poco de su mundo. Bueno eso es todo, seguiré haciendo el paralelo de escribir por aquí y por allá, entre el especial y el proximo capitulo hahaha en ambos estoy inspirada, pero el especial puedo perder la idea asi que por eso le estoy dedicando un poco más, porque el capitulo ya tiene una estructura mejor armada.

Sin más saludos!

[natashasempaii]

La Diabla Venezuela ㅅ5ㅅ

recuerdas el deseo? la venganza la ira ... el rencor... ... el día que dejaste esos sentimientos de lado ese día tu alma dejo de ser mía ¿sera esta la cura para mi mal?

[ ... ]

las cosas de verdad no pueden volver a ser tan simples después de ese punto que quiebre. Eres mi punto de inflexión, la razón de mi cambio, lo siento Luis.

— no puedo juzgarte Luis... no estoy aquí por ti. El motivo por el cual vengo a ti... no es por que me llames es por que... sin duda alguna tienes motivos validos para que tu alma sea mía, cumples los requisitos al pie de la letra... eres un digno candidato... — respondí sin muchas ganas viendo en las expresiones del mortal, la confusión total, por que simplemente cambie el tema de conversación, no quiero pasar por ese terreno. El pasado.

después de un momento en el cual ambos meditan mutuamente por lo incomodo que se torno todo, finalmente Luis abre la boca — lo que quieres decir... es que soy digno pero... pero pero PERO ¡no entiendo tus malditos Peros! — su impaciencia hace que cometa el error de alzarle la voz a la deidad equivocada, ella se mueve rápido, lo sostiene del cuello, sus dedos presionando su cuello apenas dejando pasar el aire por su traquea, mirándolo a los ojos, con una mirada de esas que hiela la sangre y te paralizan, que llega a lo mas profundo de tu alma. Un rápido movimiento de su cola en forma de flecha que se clava a un lado de su oreja cortando un mechón de cabello perteneciente al muchacho. La respiración del mortal es interrumpida temporalmente, sus miradas cruzadas por segundos que se extienden hasta que Luis lucha por respirar aferrándose al brazo de la diabla que notando su lucha por respirar, ella responde subiendo la altura del brazo alzando al chico en el aire contra la pared, cortando las opciones para sobrevivir.

miradas que se llenan por la locura del momento, una buscando vivir y la otra cuyas intenciones parecen claras, dar una lección muy especifica y clara. Luis finalmente empieza a sentir su cuerpo rendirse, sus lagrimas de terror absoluto caen por sus mejillas, sus últimos pensamientos son tan mundanos, el pensar que acabara así, su mente acepto la muerte, no... solo pidió un descanso por que trata hasta el ultimo segundo volver a respirar, sus pies buscan aferrarse de la pared para tratar de subir y poder dar un respiro, sigue luchando aun cuando sabe que no puede ganar.

Así como la diabla lo tomo del cuello lo soltó dejándolo caer al suelo, el mortal toce y bocanadas de aire son robadas para devolverle la vida al mortal, y una duda se hizo presente en el muchacho. ¿porque?. Una ves que tiene la fuerza para subir la cabeza y ver a la deidad que lo observa desde arriba, se topa con sus ojos con esa mirada sombría, como si le despreciara, dejando ver tal ves su verdadero ser, un demonio después de todo, y si tal ves ella es la que se equivoca, Luis no podría saberlo, lo sospecha pero lo mas seguro es que jamas lo sepa, quiere saber que significa esto. quiere entender a la figura frente a el. Con dificultad, se logro poner de rodillas en frente de la silueta frente a el, su cuerpo no deja de temblar, sus pensamientos buscan un razonamiento lógico; tal ves fue un castigo, una humillación, ¿el propósito realmente importa? . No ah encontrado el propósito de esto, quiere saberlo pero teme preguntar.

— te preguntas por que lo hice... si no lo hicieras serias un idiota, y no lo eres... la respuesta esta en ti Luis; cuando ibas a rendirte... volviste a luchar, estas listo para vivir. Aceptar un trato conmigo es renunciar a esa fuerza para vivir, ¿vas a darme eso luis? si tu venganza vale ese coraje... entonces ¿de que valió que lucharas hace un momento? jamas cuestiones mis 'peros'... no vuelvas a subirme la voz, lo peor que te puede pasar no es morir Luis, lo peor que te puede pasar de hecho es que caigas en mis manos... hacer un trato conmigo... es aceptar la fría muerte y revivir una y otra ves tu pecado, sin descanso. — deja la duda en el aire pero no da tiempo a que el chico habrá el pico para decir nada — ¿aprendiste la lección? ... si es así, no me llames de nuevo Luis. Gracias por ser una agradable compañi-. una voz rota la interrumpe, ese instante ella se detiene después de darle la espalda al mortal, lo escucha.

— ¡espera! no quiero que te vallas... no para siempre... — una petición escuchada, la diabla pretende irse cuando el chico continua — quiero saber... que paso en Chernovil... no creas que no note que evitaste el tema — la diabla se detuvo, no hizo nada; no respiro, suspiro, se voltio, solo se quedo paralizada reviviendo los recuerdos vividos en ese lugar.

— Luis... deja que el pasado se quede atrás, que el tiempo sane tus heridas... así como sano las mías — el silencio reino el cuarto unos segundos hasta que finalmente las garras de las patas de la diabla delatan sus pasos en el piso acercándose al toma corriente, antes de apagar la luz decide decirle algo — ... no soy doctora pero... si dejas atrás la ira, el rencor... el deseo de venganza, no me necesitas nunca como tu medicina... podrás vivir plenamente, podrás vivir por que una ves que terminas de aceptar el contrato conmigo... no habrá vuelta atrás — apago  la luz, se pierde en la oscuridad, para irse nuevamente de ese lugar sin despedirse.

[...]

los humanos creen en el paraíso y en el infierno, me gustaría saber si existen, por que de existir no los conozco... pero siendo honestos lo mas cercano al infierno en este mundo se encuentra bajo mi control, el castigo "divino" el eterno tormento... ¿no es ese mi trabajo? por que siempre olvido esto... la mala de la historia... la bruja del cuento, el villano a vencer, el enemigo final, esa soy yo. El castigo por los pecados del hombre pasan entre mis dedos... soy el archivo expiatorio de las demás deidades, los demonios se ríen de mi por soportar esto, ¿que les importa en realidad? hablar con ellos es lo mismo que relacionarte con un niño mimado, imposible no sentir que mueres un poco cada ves que estas con ellos, la lastima que dejan ver me da muchísimo asco. Estamos tan llenos de mentiras.

Hipócrita

Ellos no pueden lidear con estos sentimientos humanos, no los conoces ni los entienden, tan frágiles como una pluma de cristal. Es tan fácil tomar el papel e interpretar tu lugar, o ¿es que este papel me queda como anillo al dedo? ... entonces... ¿los demás están mal? Es lo malo de pensar de que eres el mejor, admitir eso hace ver que los demás están mal. La paradoja es, que ellos son lo mejor de lo mejor y lo peor de lo peor, mientras soy la oveja negra entre las marrones, no tienes forma de huir de ese hecho, soy lo mejor y lo peor de este mundo, el recuerdo del castigo y que aun sumida en la desgracia, el deseo de ser mejor que esto, aun no muere, tener todo y nada a la vez, estoy lista para lo que sea que se venga.

¿cuando empece a auto compadecerme?

[ ... ]

Meditando sobre lo que paso con Luis se pregunta si sera castigada por lo que se negó a hacer, pero finalmente llega a concluir de que no rompió ninguna regla, por que si bien se negó, el chico al final tampoco renuncio a su alma, de no ser así lo habría tomado finalmente, pero este humano parece decido a vivir, es un alivio al menos para la Diabla, que cansada se recuesta pensando en todo lo que perdió a lo largo de su larga vida, también lo que gano. Con cuidado saca de un estuche un instrumento singular, uno que conserva muchas de sus memorias, una singular Zanfona, un instrumento peculiar, le quita el polvo y revisa las cuerdas, incapaz de hacer girar la manivela para hacer sonar las notas, la deja de nuevo en el estuche.

— la noche anterior al desastre... fue ese el ultimo día que me atreví a tocar este instrumento... se siente como un pecado el tocarlo, por que no lo puedes escucharme tocar sus notas — se dice a si misma en un intento de monologo, imaginando que se lo dice a alguien mas, alguien que no esta en su cercanía hace mucho — ... debí deshacerme de ella... de cada uno de tus regalos pero son mis tesoros mas preciados ¿como podría deshacerme de ellos? cada uno de estos tesoros tiene un recuerdo precioso, es lo que me mantiene cuerda últimamente. aun me sigo preguntando ¿cuando dejaste de ser un niño enojado y pasaste a ser un hombre?... el hombre que debías... imagino que fue mi culpa después de todo... fue un final amargo para los dos. aun te sigo extrañando...— guardando la zanfona junto al resto de sus tesoros, guarda silencio recordando con cariño esos momentos.

aun estoy aquí... aun lucho todavía soy digna de tu cálido amarillo

[46snowfox]

Black Wolves Saga Last Hope Memory 60: En el peor de los casos [Historia General 1]

Tras escuchar las palabras de la protagonista Zara revela la ira que tenía contenida.

Fiona: Por ahora... ¿Es poco probable que pueda contagiar a los demás de zodiva?

Zara: ...Sí.

Fiona: ...Que alivio.

Realmente me sentí aliviada por eso... Pero.

Zara: ¡¿Por qué se siente aliviada...?! ¡No tiene nada de bueno!

Fiona: Zara...

Zara se enfadó al escuchar mis palabras. Era poco común que Zara se enojara de esta manera.

Zara: ¡¿Por qué no se enoja?! ¡¿Por qué no me regaña por haber sido incapaz de perfeccionar su medicina...?!

Fiona: No podría...

Nesso: Zara...

Elza: ...

Incluso si alzaba esa voz llena de frustración, yo ya estaba satisfecha.

Ya que entendí lo mucho que Zara desea ayudarme.

¿Por qué tendría que regañar a alguien así?

Al sentir todo el cariño que tenía por mí estaba a punto de derramar lágrimas, pero las aguanté y abrí mi boca.

Fiona: ...Fufu. Zara, eso es imposible. Ya que yo te quiero mucho.

Fiona: Es imposible que pueda regañarte. Ya que siempre te esfuerzas lo máximo que puedes por mi bien.

Fiona: De hecho, ¿no sería mejor que tú fueras quien se enojara?

Zara: ¿Que yo... me enoje?

Fiona:  Diciéndome: ''¿Por qué te enfermas cuando he hecho todo esto por ti?''

Nesso & Elza: Pff.

Zara: ¡No es momento de reírse, Nesso, Elza...!

Fiona: Fufufu.

Nesso y Elza rieron levemente, como si hubieran entendido mis palabras.

Sentí que el pesado aire que se había formado se había relajado levemente gracias a que ellos se rieron.

Fiona: ...Todo está bien, Zara.  Lo que más me asustaba era que todos se contagiaran por mi culpa.

Fiona: Con solo saber que las probabilidades de que eso ocurra son bajas... me he relajado mucho.

Fiona: (...Ya que era consciente.)

Ya de por sí nací como lobeira.

Desde pequeña me han dicho que no podré ser capaz de vivir demasiado.

Hasta han habido ocasiones en las que he estado al borde de la muerte.

Para mí la muerte no es algo que se encuentre muy lejano.

Fiona: (No es como si quisiera morir... Es solo que no le tengo nada de miedo a mi muerte.)

Sería muy, muy propio de mi persona morir a causa de una enfermedad.

Desde pequeña estuve preparada... para que mi final llegara pronto.

Por eso cuando pienso en que ahora podría morir de zodiva...

Fiona: (No quiero lastimar a nadie con mi muerte.)

Eso es todo.

Pearl: ¿...Fiona-chan morirá?

Richie: No quiero eso. Seré un buen chico, así que no mueras Fiona-chan.

Pearl: No quiero... Es mentira, ¿no? No quiero...

Richie: Yo tampoco... ¡No, nooo...!

Tras escuchar preocupados nuestra conversación, Pearl y Richie se acercaron sigilosamente a mí.

Se acurrucaron a mi lado y pude sentir la calidez de los dos.

Fiona: (...Que cálidos.)

Fiona: ...

Acaricié suavemente las cabezas de los dos niños con expresiones arrugadas.

Amablemente durante este triste momento.

...Y entonces, Zara rompió ese momento.

Zara: ¿...Por qué actúan como si nos tuviéramos que despedir? Yo no permitiré eso.

Fiona: ¿Zara...?

Sentía como si los ojos de Zara estuvieran enojados..

Zara: ¿El inhibidor contra el zodiva no funciona? ¿Y qué con eso? Pues perfecto.

Zara: En tal caso solo debo crear una medicina contra el zodiva que logre curar a la señorita. ¿Entendido, señorita?

Fiona: S-sí...

Zara: Sin importar qué no la dejaré morir. Por eso, ¡por favor prepárese para sobrevivir!

Fiona: S-sí...

Zara: ¡Tu respuesta es muy leve!

Fiona: ¡Sí!

Debido a la intensidad de Zara las orejas y colas de Pearl y Richie empezaron a temblar. Acabaron más afectados que yo.

Elza: ...Eso fue genial, señor mayordomo.

Nesso: ...Eso es porque Zara da miedo cuando se enoja.

Zara: ¡Ustedes dos también dejen de balbucear y empecemos con nuestra reunión sobre nuestro próximo plan!

Nesso: ¡S-sí...!

Elza: ¡Sí...!

Y tras eso.

Tras el repentino cambio de ánimo empezó nuestra reunión estratégica.

Zara: ...Ahora quiero que repasemos nuestra situación.

Zara: Actualmente pensemos en el peor de los casos y que la señorita desarrolle zodiva. Es solo una suposición.

Nesso: Solo la peor suposición, la peor... Aunque de ser posible me gustaría eludir ese tema.

Elza: Si nos preparamos para el peor de los casos no tendremos nada que perder. Solo nos queda prepararnos.

Zara: Sí. Si la condición de la señorita no es zodiva, entonces no importará.

Zara: Pero si existe esa posibilidad... entonces quiero prepararme.

Nesso: Que conversación más peculiar. Entonces, ¿tienes algún plan Zara?

Zara: Aún no estoy seguro... Pero si puedo comprobar lo que estoy pensando, entonces puede que tenga algunos.

Pearl: ¿Algo que quieres comprobar?

Richie: ¿Y si lo haces Fiona-chan se curará de su enfermedad?

Zara: Aún no lo sé, solo pienso que sería bueno que funcionara como catalizador.

Elza: ¿Y qué es?

Zara: Señorita, me percaté cuando examiné su cuerpo antes... ¿Acaso usted fue mordida por él?

Fiona: ¡...!

Todos los que estaban presentes voltearon a verme.

Y por impulso presioné mi hombro contra la zona del cuello en donde Rath me había mordido.

Nesso: ¿...Te mordió?

Fiona: ...Sí.  Pero Rath no lo hizo porque quisiera hacerme algo malo.

Fiona: Aunque no sé cómo explicarlo...

Fiona: Rath estaba sufriendo un ataque por culpa del zodiva... Y lo hizo en medio de su sufrimiento.

Zara: ¿...En medio de su sufrimiento? ¿No estarás confundiéndote de palabras?

Fiona: ...Es que fue así.

Era como si estuviera intentando escapar del dolor provocado por la convulsión y se hubiera dejado llevar por un deseo contra el que no podía pelear.

Zara: ...Hm.

Elza: ¿Eso tiene algún significado?

Zara: No, solo pensaba en que aún no podía seguir el hilo de la conversación...

Zara: Hasta ahora pensábamos que los lobos no podían contagiarse de zodiva, ¿verdad?

Fiona: ...Ah, ciertamente. Yo también había escuchado eso.

Nesso: Es verdad. Siempre dicen que los lobos no se enferman de zodiva.

Elza: Es por eso que empezaron a decir que el zodiva es una maldición provocada por los lobos.

Fiona: (...Sí. Muchas personas han dirigido su miedo hacia el zodiva en contra de los lobos.)

Zara: Sin embargo él estaba enfermo de zodiva. Los lobos también pueden enfermarse de zodiva.

Zara: Yo creo que eso puede llevarnos a la cura para el zodiva.

Nesso: ...Ya veo.

Elza: Ahora que lo pienso... En estos momentos estamos hablando de la señorita, ¿pero no lo recuerdas Nesso?

Nesso: ¿Hm? ¿Qué cosa?

Elza: Hasta ahora nos hemos enfrentado a muchos lobos que han atacado ciudades y aldeas, ¿no?

Nesso: Oh, sí.

Elza: Recuerda aquellos momentos. ¿No crees que habían muy pocos lobos usando sus formas humanas?

Nesso: ...Ah.

Fiona: (¿Habían pocos usando su forma humana?)

Fiona: ¿A qué te refieres?

Nesso: Es tal y como acaba de decir Elza. Casi todos los lobos que atacaban las ciudades y aldeas estaban usando sus formas de bestia.

Elza: Los únicos que usaban sus formas humanas... eran unos pocos que comandaban a la manada.

Fiona: ¿Y... qué pasa con eso?

Fiona: Los lobos son ciertamente una especie con un cuerpo bastante resistente. ¿Su capacidad física no mejora cuando están usando sus formas de bestia?

Es por eso que deben de atacar las aldeas y ciudades usando sus formas de bestia.

Cazan a las personas usando las superiores habilidades físicas que sus formas de bestia les conceden.

Zara: Sí, en efecto. Al menos eso es lo que hemos pensado hasta ahora.

Zara: Sin embargo... ¿Qué pasaría si los lobos fueran controlados por un impulso, tal y como usted dijo?

Fiona: ¿Intentas decir... que los lobos atacan a las personas debido a que están contagiados de zodiva?

Nesso: ...Ya veo. Eso explicaría por qué los lobos que han perdido la cordura son incapaces de mantener sus formas humanas

Elza: ...Tiene sentido.

Fiona: (Si los lobos no están atacando las aldeas y ciudades por mero odio...)

Entonces deberíamos actuar de forma distinta.

Fiona: (Rath...)

Si ese es el caso, entonces puede que ese solitario él con aquella amable mirada ya no tenga que seguir estando solo.

Tras eso estuvimos hablando hasta tarde sobre la conexión entre los lobos y el zodiva, así como de otras cosas...--

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[Masterpost]

[jjunho]

“claro, estamos en la flor de la juventud todavía.” exagera irónico en favor de bromear por imagen congelada en juventud de ambos, y es que aunque desconoce la edad real de su opuesto, al menos junho esta muy cerca de cumplir cien años. “con que mi destino también me ofrece el mejor día de mi vida,” asiente reprimiendo con mucha dificultad la curvatura de una sonrisa en sus labios. vástago se le hace muy gracioso en ese momento, hay algo entre las ridiculez de todo el asunto del destino y los dramatismos impropios que lo llenan de diversión, “¿cómo podría elegir la ambigüedad antes que eso?” cuestiona entretenido con dramatismos impropios al punto que decide seguirlos. espera atento a escuchar su siguiente invención; intrigado de que más se le puede ocurrir. y no decepciona, la garganta de junho cosquillea con risa cuando al fin obtiene su nueva fortuna. opuesto sí le parece atractivo, belleza ajena es difícil de negar pero en cambio de indicar de que debe ser él que menciona destino, junho decide fingir que tampoco entiende; "no lo sé, ¿quieres ayudarme a buscarlo? porque me encantaría conocerlo si además de ser el más guapo va darme el mejor día de mi vida." suelta inclinando su cabeza a un costado, su mejor actuación de ignorancia. pausa. "¿o será que eres tú?" agrega pregunta pretendiendo que continua dudoso, por completo perdido de descifrar la respuesta correcta. una sonrisa se asoma en sus comisuras. "oh," sus labios se tuercen en mueca al escuchar historia. "eso suena horrible. dime no volviste con ella después de eso." aunque puede notar la gracia con que opuesto lo cuenta, no puede evitar sentirse mal por el luka que paso por ese momento en el pasado. "asumo que eso significa que la nuria queda descartada..." piensa, "a menos que pueda ayudarte a reemplazar esa historia con otra." ofrece idea que pasa por su mente. "no tengo traumas con los parques," finalmente responde la pregunta que trajo consigo historia impropia. "ah," chasquea la lengua ante recuerdo que ahora lo hace sonreir pues después de años lo cuerda con gracia. "cuando era niño insistí en que me quería subir a la montaña rusa con el globo que me compro mi niñera, jure que no lo iba a soltar." leve risita se le escapa a continuación. "obviamente lo solté tan pronto el carro fue en bajada. llore el resto del recorrido." concluye. le compraron otro globo al final y no le guardo miedo a la montañas rusas después de eso pero su mente de niño en ese entonces aprendió su selección; los globos y las montañas rusas se tienen que disfrutar por separado. ( @lukahng )

' claro que no, soy muy jóven para morir ' exclama entre dramático y bromista, resoplando por lo bajo. en teoría, todavía lo era. aún le quedaba por presumir que era un fósil andante de, por lo menos, trescientos años. era algo así como su meta personal. ' ¿preferirías un mensaje ambigüo antes que vivir el mejor día de tu vida? ' alza las cejas con indignación actuada, posando una mano sobre su pecho. ' bien, yo puedo decirte todo lo que quieras escuchar. solo déjame pensar ' era cuestión de poner los engranajes de su cabeza a funcionar, esos que hacian un muy buen trabajo para pensar rápido. ' escucha esto... el éxito es una aventura que vale la pena arriesgarse. no lo pienses más y arriesgáte a disfrutar la compañía del vampiro más guapo que tus ojos vieron ' finge ( otra vez ) leer el mensaje de la fortuna. apretó sus labios para no sonreír por su propia idiotez inventada, abriendo grandes los ojos como si la sorpresa hubiera estrellado su rostro. ' vaya... ¿quién será? ' se hace el desententido, frunciendo sus cejas. en sus ojos se puede ver la sonrisa idiota que las palmas ajenas ahora tapaban, asintiendo con un sonido que se oyó amortiguado. ' no, no la tienes ' niega con una minúscula sonrisa cuando es libre otra vez. ' antes de empezar... ¿hay algo que tenga que saber? ya sabes, algún trauma no resuelto de tu infancia con alguna atracción ' pregunta con interés, perdiéndose por unos instantes en las luces y en algunos gritos terroríficos. todo parecía tan lleno de vida que lo hizo sonreír por un instante. ' yo tengo un mal recuerdo en la nuria. una ex creyó que cortar la relación en la fila y a punto de entrar era buena idea, ' se interrumpió a sí mismo para rodar los ojos con gracia. ' fue la vuelta más incómoda del mundo, ¿sabes? pensé varias veces en tirarme de la nuria '

[lilietherly]

[MiniFic! Newcob]

Fluff.

Primer beso.

(Esto... sí... yo sigo explotando la escena de después que Newt y Jacob capturan a la erumpent ^.^Uu)

* * *

—Entonces —inició Jacob, toalla en mano, siguiendo a Newt—… supongamos que no quiero olvidar este mundo, la magia y todas estas preciosas criaturas, ¿qué debería hacer? —en realidad no había forma de preguntar sobre el asuntó, así que prefirió hacerlo sin tantos adornos, cual fuera la respuesta ya se estaba preparando para el rechazo.

—Me temo que no soy el indicado para solucionar tus dudas. —Jacob no supo cómo tomar eso, pero en definitiva por sí mismo jamás habría encontrado una respuesta tan neutral.

—Oh, lo siento… no pensé que estuviera mal preguntar, solo, ya sabes… lo siento —intentaba sonreír, aligerar el ambiente, ¿pero cómo iba a saber que no debía preguntar? Su único deseo era poder quedarse ahí solo un poco más. Pero sus comisuras no se elevaron y pudo notar el ambiente tensarse a su alrededor.

—No me refería a eso. —Jacob estuvo a punto de golpearse con el mago al detenerse de improviso, si siquiera sabía a dónde se dirigían, pero aun así iba tras él—. Es solo… no quisiera darnos, darte falsas esperanzas —corrigió de inmediato, el muggle lo miró con ojos brillantes, su corazón dando un par de saltos felices.

—Está bien, pero esto es solo una suposición, ¿de acuerdo? Digamos que ya sé que no es posible, pero… si lo fuera, tendría que… —hizo un gesto con las manos incitando a Newt a hablar, había terminado con la toalla, permanecía el aroma del almizcle en su nariz, aunque no resultaba molesto, solo incómodo.

—Casarte —murmuró en respuesta, mirando hacia otro lado.

—Me pregunto si…

—Yo creo que no. —Jacob parpadeó sin comprender, una respuesta tan intempestiva, sin darle tiempo a crear esperanzas, de alguna forma le ayudó a que romperlas fuera más fácil, así que evitó molestarse y en cambio solo sintió agradecimiento hacia el hombre pelirrojo—La señorita Goldstein o cualquier mago o bruja estadounidense no puede casarse contigo, es ilegal. —Puede que no se considerara el hombre más inteligente en ese mágico lugar, sin embargo, y en definitiva Jacob se encargaría de acararlo después, tuvo al instante una cosa clara.

Casarse con muggle/no-maj de ese país era mucho más ilegal que casarse con una persona del mismo género. ¡Ah! Sin importar la magia, de alguna forma, las personas siempre encontraban la forma para interponerse en el amor. Aun así, y a pesar de que el hombre no había anunciado nada sobre sí mismo, el corazón de Jacob sintió agitarse de felicidad ante la pequeña esperanza.

—Pero… digamos, si yo conociera un mago británico dispuesto a hacer el sacrificio —murmuró tentativamente, casi sin querer y en definitiva sin saber del todo de dónde habría sacado el valor para decirlo. Si obtuviera un rechazo lo reduciría a una broma, si era aceptado… ¡Bah! No tenía tanta suerte.

Preparado para reír, se detuvo en cuanto la explosión de estrellas en el rostro de Newt resaltó maravillosamente cuando la piel se tiñó de rojo terciopelo. Le faltaba cerebro para saber si lo había avergonzado, si le hizo creer que se burlaba de él o si fue tomado como una broma y el hombre solo contenía su risa, de cualquier forma, listo para abrir la boca, el hermoso mago se adelantó.

—Es usted un descarado. —Jacob se mordió el interior del labio, ¿así que regresaban a los apellidos? Felicitándose por su idiotez, miró el suave ceño fruncido—Flirteando primero con la señorita Goldstein y conmigo después, no soy un plato de segunda mesa, señor Kowalski —regañaba Newt mientras avanzaba, todavía con el rostro colorado, hacia un sorprendido y temeroso muggle—. Tampoco, bajo esas circunstancias, seré su pase de permanencia en este mundo, por todo lo encantador que me resulte, sería una falta grave a mis principios considerarlo al menos una opción a…

Jacob lo besó. Con una mano sujetando los botones de su chaleco y la otra sobre su nuca, enredó los dedos en el cabello rizado, acariciando a momentos su cuello o toda la piel que estuviera al alcance. No era un experto besador, pero seguro los tenues suspiros que lograba obtener eran todo un halago. Sus labios acariciaron una suave danza sobre los de Newt, mismos que no tardaron en corresponder, siguiendo su ritmo pausado una vez accedió a abrir la boca.

Cuando sintió un par de brazos alrededor de su cintura lo considero el permiso suficiente  para introducir su lengua, todo en movimientos perezosos que fueron devueltos inmediatamente, la calidez mantenía en calma su pasión y el abrazo suave lo obligaba a continuar en la misma sintonía. Ni más ni menos, solo el dulce etéreo andar de un beso que, al parecer de Jacob, tanto él como Newt no deseaban su final.

Pero tenía que haber uno.

—Vaya hombre cruel, a este ritmo me hará acceder a ser el amante.

—Jamás te pediría algo así —respondió de inmediato, sonriendo y evitando no perder la concentración el cuello a su alcance. En respuesta los brazos se ciñeron a su alrededor—. Quiero, si tú me aceptas, seas mi único.

—¿Qué hay de la señorita Goldstein? —Jacob no lo resistió más, besó la piel pecosa bajo a oreja de Newt—Creo que ha sido demasiado clara tu atención sobre ella.

—Por dios, claro que sí, tú también la viste, es hermosa, ¡y puede leer la mente! —El abrazo comenzó a deshacerse, el mago apartó su mirada, entonces añadió—¿Compararla contigo o todo el maravilloso trabajo que haces? En serio, Newt, yo no sería capaz de hacerlo y tú tampoco deberías —sintió cómo la presión volvía a rodearlo, los preciosos ojos volvieron a los suyos.

—¿Entonces…?

—Bueno, ya sabes, no hace mucho que nos conocemos, pero estuve seguro sobre lo que siento casi desde al principio y ahora que sé que no está mal o que no seré rechazado, ¿tu…? —podía sentir sus corazones latiendo rápidamente contra su pecho, saber cuál era el suyo estaba fuera de sus capacidades—¿Considerarías, en el futuro, aceptar mi propuesta de…?

Newt lo besó.

Jacob no dudó  en corresponderle.

Eso era un sí.

 (Muchas gracias por leer :D)

[dawniebb]

Fiestas decembrinas

Wow, han pasado veinte años desde que publiqué en este fandom JAJAJA cómo pasa el tiempo. Pero en fin, consideren esto un tipo regalo de año nuevo, aunque por la temática pensaba subirlo en Navidad y no lo hice :’).

Hay algunas cosas que yo shippeo, bien raras, como XóchitlxBeto (Sí, ese Beto. el de La Leyenda de La Llorona x’D) o ValentinaxMarcela porque why not :) si alguien sigue vivo en esta tag,espero que les guste. Hice lo mejor que pude y con mucho amor :’)

Es Leodora, por cierto :)

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Teodora no le estaba prestando atención. Al menos, no de momento.

Leo sabía que podía concentrarse en más de una cosa a la vez (De hecho, a veces parecía que tenía como cinco manos en vez de dos) pero en algunas ocasiones quería ponerle tanta atención a una sola cosa en específico que parecía que el mundo a su alrededor desaparecía.

Aunque él, en lo personal, nunca había visto a nadie esmerarse tanto en copiar la receta de un pavo relleno y las partituras de quién sabe qué canción.

Es decir, estaba copiando. ¿Tan difícil era?

Aun así, se le notaba linda. Estaba ocupando una mesa entera de la zona del café de la panadería, tenía el cabello atado en un chongo en la parte superior de su cabeza y, junto a ella, estaba su laptop, a la cual miraba para después hacer anotaciones en la libretita de notas.

Desde el mostrador apenas se le notaba el ceño fruncido pero, conociéndola, Leo podía contar con la certeza de que lo tenía así.

Era tan adorable que hasta le pesaba el saber iba a tener que hacerla enojar.

No que “tuviera” como una oración, pero estas cosas eran las que Teodora elegía para molestarse todos los años desde que habían empezado a salir. Y dígase que Leo tampoco se quedaba atrás.

– Hey. – La llamó con mucha valentía, sólo para bajar la mirada un segundo después, tomar el trapo y empezar a limpiar un mostrador que estaba perfectamente limpio. Aun así, sintió la mirada de Teodora sobre él, y la escuchó responder con un simple:

– ¿Uhm?

Leo tomó una respiración profunda, buscando alguna mancha que sí necesitaba ser limpiada.

No la encontró, por desgracia.

– ¿Cómo le vamos a hacer? – Divagó.

– ¿Cómo le vamos a hacer de qué? – Preguntó Teodora de vuelta.

Leo dejó el trapo y, por fin,  la encaró.

Con los años la voz de Teodora había cambiado un poco. Gradualmente, el acento con el que solía hablar se había ido desapareciendo, aunque todavía quedaban vestigios de él en algunas de sus oraciones. No obstante, había sido un cambio tan… inesperado de su parte que alguien que no la conocía de toda la vida como él seguro no habría reconocido su voz.

– Pues con lo de las cenas. ¿Dónde vamos a pasar Navidad y dónde vamos a pasar Año Nuevo?

Y eso fue suficiente. Teodora rodó tanto los ojos que pareció que quería ver a Dios allá arriba en el Cielo.

– ¿Ya vas a empezar?

– A ver…

– No, o sea... – Teodora se talló la frente. – Leo, estoy tratando de tener paz mental. Qué mala onda de tu parte, ¿sabías? Ya lo habíamos hablado. En lo que quedamos el año pasado.

– ¿En qué quedamos el año pasado?

– ¡Pues no sé, se me olvidan las cosas! Pregúntame si en la mañana me acordaba de a qué horas me tenía que ir a poner las uñas.

– Ah, pues entonces no me pidas a mí que me acuerde de cosas que pasaron el año pasado tampoco.

– Órale, pues. – Teodora rodó los ojos y volvió a anotar en su libreta. – Con que nos dé tiempo de hacer lo del intercambio con los muchachos. Ya compré el regalo. Valentina debería de estar agradecida de que no cambié el papelito, ¿eh? Después de los osos que me hizo pasar las veces que le tuve que pagar el Uber por andar de mala copa.

Todos los años trataban de reunirse en algún lugar con los chicos, durante la mañana del 24. Desayunaban, hacían el intercambio de regalos, se tomaban un par de fotos y luego se iban.

– ¿Dónde la va a pasar Xóchitl? ¿Sí va a estar?

– Sí, porque Beto y ella sí se ponen de acuerdo. – Teodora rodó los ojos.

– Oh, pues.

– Ash.

– ¿Y Marce? ¿Te ha dicho algo?

– Ugh. La Marce se va a morir cuando ella quiera. – Gruñó Teodora. – No sé para qué quiere teléfono si ni lo usa. Pero según Valentina sí va a estar aquí. O sea, Leo, todos van a estar aquí. ¿Por qué de repente te consterna tanto?

– Marcela y Valentina andan muy pegaditas.

La simple respuesta de Teodora fue:

– Sí, ¿por qué?

– Eh. No. Nomás. – Leo se rio. – Qué cosas.

– Y sí.

Luego, Teodora dejó de ponerle atención de nuevo, antes de ser ella la que preguntó:

– ¿Entonces cómo le vamos a hacer?

– ¿Pues no que no querías hablar de eso?

– ¿Y quién te dijo que voy a hablar de eso? – Le dijo Teodora. – Te estoy diciendo que me digas cómo le vamos a hacer.

– Ah, para que cuando te diga me digas que no quieres.

– ¡AY, NO! ¡NO HAY QUE IR A NINGUNA DE LAS DOS CENAS, YA! – Chilló Teodora. – Vámonos a tirarnos a perder y les decimos que se nos hizo tarde y ya. Bye.

Leo soltó una carcajada tan escandalosa que le sorprendió que Nando no saliera a ver cuál era el objeto de burla.

– ¿Y el pinche anillo dónde te lo doy, pues?

Quizá se enfrascó mucho en el momento, o quizá sólo estaba demasiado distraído, pero las palabras salieron de su boca nada más así. Como si no fueran nada.

Igual, no se dio cuenta de que lo había dicho hasta que vio el rostro en pausa de Teodora. Detenido en la inmensidad del mundo.

– Ah, no ma—

­– ¿Le puedo decir a mi mami?

– ¡No! ¡Todavía no le digas a tu mami!

Aunque sabía que, cuando no la estuviera viendo, lo iba a hacer, así como sabía que era su culpa por bocón.

Consideraba que eran una pareja bastante equilibrada, unida por la neurona que compartían.

Y, al final, si Leo no la quisiera tanto, no habría habido un anillo en primer lugar.