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wosohavemyheart · 11 months

Note

Hola! Poderias escribir mas de Andrea Medina? 💗

Aquí lo tienes 💗. Prometo que estoy trabajando en otra petición que me han dejado hace tiempo❤🦄

ABRIENDO PUERTAS

Me siento bastante nerviosa la verdad... Estoy a punto de conocer a mis nuevas compañeras de equipo y me da un poco bastante de miedo.

Nunca he sido buena para relacionarme con la gente, aunque el fútbol me ha ayudado bastante, aún sigo queriendo que la tierra me trague cuando tengo que conocer por primera vez a gente nueva.

Pero una cosa si que he aprendido muy bien a lo largo de mi corta vida... A mentir y esconder mis sentimientos.

-Vamos t/n, te están esperando- Dice Manolo Cano, mi nuevo entrenador.

Le miro y asiento moviéndome junto a él hacia el césped.

Me pongo la máscara y los nervios desaparecen. No quiero que piensen que soy un bebé que quiere volver a casa porque eso es lo último que quiero.

-Equipo- Llama la atención el entrenador- Os presento a la nueva integrante- Me pongo frente al grupo y sonrío- T/n

-Hola, encantada- Saludo y las miro a todas una por una pero las que más me llaman la atención y me dan curiosidad son 2, Lola Gallardo y Andrea Medina, y no sé porqué.

-Hola, yo soy Lola- Se presenta y me da una sonrisa amistosa

-Yo Andrea- Saluda la chica que estaba al lado de la portera y joder... Vaya ojos y vaya sonrisa.

Y así se presentan todas una a una. Yo ya había hecho mi trabajo y las había investigado un poco por Instagram para ver quienes iban a ser mis compañeras durante los próximos 2 años.

-Hacer dos grupos, vamos a hacer un rondo.

La gente se empieza a mover formando sus grupos pero yo me quedo quieta. En ese momento Lola aparece y envuelve su gran brazo alrededor de mi

-Ven con nosotras, novata.

Me encojo de hombros un poco por el contacto pero lo ignoro.

-Claro

En ese grupo estaban Vir, Maitane, Leicy, Merel, Sheila, Sonia y por supuesto Andrea.

-Get in the middle, novata- Dice la holandesa- Let's see what you can do

La miro y sonrío aceptando el reto.

Sin decir nada me pongo en el medio mirando las a todas antes de que empieza a rodar la pelota.

Al tercer toque la pelota está en mis pies

-Ik weet hoe ik meer moet doen dan dit- Miro a Merel sonriendo y esta está sorprendida pero las demás más todavía. (Se hacer más que esto)

-Ken jij nederlands? (Sabes holandés?)

Me encojo de hombros

-Algo- Le paso el balón a Leicy y me pongo en su lugar.

Justo en frente tengo a Medina y me la quedo mirando como juega hasta que el balón cae en mis pies.

Se la paso a Medina

-¿De donde vienes, t/n?- Empieza a preguntar Virginia.

-De Mallorca

-En que equipo jugabas?

-En el Atlético de Baleares

-He escuchado que hay buen futuro ahí- Me guiña un ojo la veterana mallorquina

-Sí, pero todas quieren salir de la isla para poder llegar a jugar más profesionalmente.

-¿Cuántos años tienes?- Pregunta Medina ahora.

-Pues 16

Lola silva

-Te han quitado el sitio de bebé- Dice la portera riendo y despeina un poco a Andrea.

-No quiero ese título- Rechazo

-Ooh, pues lo tendrás. Al menos de mi parte- Dice Lola y me sonrie.

Me la quedo mirando y la verdad es que no me siento incómoda con ella y no veo un atisbo de maldad en ella. Creo que me cae bien.

El entrenamiento sigue y hablamos de cosas irrelevantes y nos reímos de las chorradas de Lola.

Solo cuando el entrenador manda a todas al vestuario es cuando me quedo sola y disfrutando del ruido de mi bota pisando el césped o chutando el balón.

Estaba completamente sola entrenando pero en algún momento Lola y Andrea aparecieron.

Sin decir absolutamente nada Gallardo se puso en la portería, Medina de defensa y yo atacando como si lo hubiéramos hecho mil veces antes pero no, está era la primera vez y se sentía realmente bien.

Medina era una lateral increíble y Gallardo un buena porteraza pero eso no evitaba que mis chutes entraran más en la portería de lo que ellas quisieran.

En algún momento de la tarde paramos, el sol se empezaba a esconder y yo no quería perderme la puesta de sol.

Así que sin decir nada más me senté en el césped mirándola.

-¿Estás bien?- Pregunta Medina y ambas corren a mi buscando algún indicio de dolor.

-Si, de puta madre- Señalo la puesta- ¿No es bonita?

-Sí

Ambas se sientan a mi derecha y miramos el atardecer en silencio.

-¿Qué haces aquí?- Pregunta Lola de repente

-¿No es obvio?- Me río- Lo que todas hacen aquí. Jugar al fútbol y buscar ser la mejor- Me encojo de hombros mirándolas.

-Ya, pero hacer un cambio tan grande con 16 años... A mi me costó aceptar esta oferta- Dice Andrea- ¿No extrañas tú casa? ¿Tú familia?

Suelto una risa sin gracia.

-Yo soy mi familia.

Las dos me observan curiosas, sé que se mueren por seguir preguntando pero no lo hacen y se lo agradezco. Simplemente se levantan y me tienden una mano para ayudarme a levantarme.

Vamos a los vestuarios, no quedaba nadie ya. Todas se habían marchado a su casa

Me estaba poniendo la camiseta cuando Lola habla.

-¿Dónde te estás quedando?

-En un hotel cerca de aquí

-¿Quieres venir a cenar? - Interrumpe Andrea- Hemos quedado Lo y su novia, Cristiana, para cenar en un restaurante.

-Si, puedes venir. Seguro que le caes genial a Cris- Dice la mayor.

-Oh- me sorprendo- No quiero interponerme en vuestros planes...

-Chorradas niña- La guardameta pone sus brazos alrededor de nosotras- Vamos, que a Cris no le gusta que lleguemos tarde

Lola conduce hasta el restaurante y todo son risas porque entre las dos andaluzas es imposible no mearte encima.

Algo muy raro en mi, cabe recalcar, no soy de esas personas que enseguida se ponen a reír y se siente cómoda.

Cuando bajamos del coche veo que las dos chicas se acercan y saludan entusiasmadas a una mujer y deduzco que es Cristina.

Me quedo un poco atrás sin saber cómo intervenir.

-Ohhh- Dice cuando termina de saludarlas- Tu debes de ser el nuevo fichaje del equipo- Se acerca y me da dos besos.

Me paralizo un poco ante el saludo

-Encantada, soy t/n- Respondo cuando vuelvo a mí- Tú eres Cristina, ¿no?

-La misma, espero que te hayan hablado bien de mí- Dice en broma.

-Que va, solo han soltado mierda por la boca- Suelto la broma pero enseguida me arrepiento y dejo de respirar.

Cuando veo que rien puedo volver a la normalidad y recuperar el oxígeno.

-Vamo' a come' que muero de hambre- Dice Medina y todas la seguimos.

Nos sentamos en la mesa al lado mío está Andrea y enfrente nuestro la parejita.

Durante la cena todo son risas y bromas, también intentan conocerme un poco más y yo las dejo.

Hay veces en los que la chica a mi lado y yo rozamos nuestros muslos o brazos y me pongo bastante inquieta... Y no en el mal sentido y eso hace que me inquiete más todavía.

Intento pagar la cuenta pero ni Lola ni Cris me dejan y Medina a mi lado se ríe.

-Ya te acostumbraras- Dice la menor encogiendose de hombros.

-¿Donde te estás quedando?- Pregunta Cris una vez salimos.

-En un hotel cerca de aquí... Puedo ir andando si queréis iros a casa ya

-Tenemos una habitación libre... Oh bueno... Cuando la terremoto no la ocupa- Ríe Cristina

-Si, puedes dormir con ella o sino la hechamos al sofá- Bromea ahora Lola.

-Oyeee- Se queja juguetonamente la aludida.

-No quiero molestar chicas... Estoy segura que sería un estorbo más y seguramente queréis intimidad y esas cosas... - Me niego.

-No digas tonterias chiquilla- Dice Lola.

-Si, Andrea también se acopló cuando fichó por el Atleti... -Dice la otra

-No sé...-

-No acepto un no por respuesta- Dice la más mayor

Se me escapa una sonrisa. Su actitud me recuerda tanto a alguién.

-Está bien- Acepto resignada y Andrea suelta una carcajada.

Me llevan al hotel y Cris me ayuda un momento a coger mis maletas que son pocas, no tenía mucho que coger de casa.

Ella no hace comentarios al respecto pero cuando me meto en el coche la sevillana pequeña si.

-¿Solo tienes eso?¿Te vienes aquí a vivir solo con 2 maletas pequeñas?-Me mira alucinada

-Si- Me encojo de hombros sin decir nada más y lo capta.

Una vez llegamos a su casa me enseñan la casa y la que va a ser mi habitación por un tiempo. Veo que Lola saca mantas y cojines de un armario.

-¿Para quien es eso?- Pregunto confusa.

-Para la niña- Mira a Medina

-¿Qué? No- Niego- Estoy invadiendo su cama... -Miro la cama y luego a Andrea- Es lo suficientemente grande para las dos. No me importa dormir contigo.

-Si, a mi tampoco- Me sonrie y puede que me derrita un poco.

Nos mira y sonrie traviesa

-Bueno... En ese caso me voy a dormir. Buenas noches, chicas.

Saco las cosas para ir al baño a lavarme los dientes y veo que ella me sigue y hace lo mismo.

Nos lavamos juntas en silencio pero empieza a hacer guarradas con la pasta y yo la sigo y nos reímos.

En un momento veo que empieza a grabar pero me da igual sigo haciendo el tonto junto a ella.

-Nuestra primera de muchas- Levanta el móvil.

Ignoro el comentario sin hacerme ilusiones.

-¿Qué lado quieres?- Pregunto señalando la cama

-Este está bien- Señala la izquierda y asiento así que me meto en el contrario.

Cuando me acuesto cojo el móvil para enviar un mensaje

"Hola, se que estas despierta esperando :)"

"Ha sido un día movidito, siento no haberte llamado"

"Mañana te llamo, lo prometo"

Mando y mientras espero respuesta veo como se mete en la cama mi compañera de habitación temporal.

Ambas boca arriba mirando el techo.

Gira la cabeza para mirarme y hago lo mismo.

-¿Qué estudias?

-Ummm, me estoy sacado un FP de auxiliar de enfermería y el año que viene quiero hacer el de rayos o algo así

Abre la boca

-Así que enfermera eh

Suelto una carcajada

-Si te lo quieres tomar asi... Es parecido solo que sin pinchar

Asiente sonriendo

-¿Y luego? Quieres ir a la uni o te quedas con los FP?

-Uni, pero no sé de que. Soy un poco indecisa

-Es normal yo tampoco sabia que hacer

-¿Qué haces tú?- Pregunto ahora yo curiosa.

-He hecho bachillerato y ahora me he metido a hacer ciencias de la actividad física y del deporte online.

-Que guay, yo también quiero hacer algo relacionado con el deporte o medicina pero tengo tiempo todavía- Me rio- Soy un puto bebé

Suelta una carcajada y yo con ella.

-Puede que si

-Oye, tu también lo eres

-Para Lola si, pero soy mayor que tú- Me saca la lengua y yo a ella.

En ese momento me llega un mensaje y lo cojo rápido

"Hola peque. Estaba esperando tu llamada.

"Espero que este todo bien, mañana me contaras todo... Sino cojo el primer vuelo para verte eeeh"

Me río por lo último y Andrea me mira curiosa

Me llegó otro

"T'estimo petita❤"

Le respondo

"T'estimoooooo ❤❤❤❤"

Dejo el móvil cargando y me pongo de lado mirando a la chica a mi izquierda.

-¿Alguien importante?

-Si, una de las pocas que está ahí pase lo que pase.

Me sincero

Seguimos hablando pero en algún momento ya no recibo respuesta.

-¿Andrea?- La llamo suavemente y la miro ya que estaba mirando el techo

Estaba de lado hacia mi con los ojos cerrados y respirando tranquilamente.

Sonrio y sin saber porque le hago un mini video

Me quedo mirandola sin poder dormir, media hora después Medina estaba encima mia con la cabeza apoyada en mi cuello.

Me tenso pero luego acabo rodeandola con mis brazos y poco después me duermo.

Me despierto al sentir movimientos encima mia y resoplo.

-Estate quieta- Mando y entierro la cabeza en el matojo de pelos.

-Perdón, no quería despertarte- Susurra.

Obro los ojos de mala gana y después de acostumbrarme a la luz la miro.

-Buenos días- Digo con la voz rasposa

-Buenos días, perdon por haberme puesto encima de ti- Se disculpa sentándose en la cama.

-Me han molestado más tus ronquidos- Bromeo y abre la boca ingidnada.

-Yo no ronco!

-oh, si que lo haces, pero todavía es aguantable. No me has dejado sorda.

Me río y me levanto

-Yo n... - Se calla de repente cuando me ve en ropa interior para ponerme la ropa de entreno.

-No pot ser- Me río al ver su cara roja y aparta la mirada- ¿No tendrias que estar acostumbrada ya a ver a chicas en ropa interior? - Me burlo.

-Lo estoy- Se defiende.

-Ya lo veo- La miro y me visto rápido- Venga arreglate.

Salgo de la habitación y voy a la cocina.

-Buenos días- Saludo a las dos mujeres.

-Bueno' día' niña- Me acerco para ver lo que hacen y me sorprende con un beso en la sien.- ¿Qué tal has dormido?

-Pufff genial, es agradable dormir con un oso que ronca- Digo esto último en voz alta.

-Otra vez. Que yo no ronco- Aparece la aludida y me río al ver su carita enfadada.

-Si que lo haces, terremoto- Dice Cris y le da varios besos en la mejilla.

-A mi me trae por el camino de la amargura cuando duermo con ella- Se mete con ella Lola

-Esto no puede ser, todas contra mi no eh- Se cruza de brazos enfadada pero sonrie cuando Lola la llena de besos.

-Aun así, roncando y todo te queremos.

Sonrío al ver la complicidad que tienen las tres aún habiéndose conocido apenas hace un año.

Desayunamos y vamos al centro de entrenamiento. Hicimos físico y luego estuvimos un poco con el balón para irnos acostumbrando a jugar entre nosotras.

Cuando el entreno termina espero a que todas entren al vestuario para hacer una videollamada.

-Hola, pequeña- Saluda alegre Alexia.

Se escucha mucho alboroto de fondo.

-Hola, Ale- Devuelvo contenta.

De repente se para el ruido y se escuchan varios "Esa es T/n?" de fondo hasta que aparecen 4 cabezas más aparte de la de Ale.

-T/n- Exclaman Mapi, Patri, Claudia y Jana a la vez.

-Hola chicas- Saludo sonriendo

-Te echamos de menos- Dice Mapi con un puchero

-Si, yo no se porque has rechazado la oferta del equipo B- Dice Pina ahora.

-Ya os lo he dicho. No quiero que me tachen por enchufada ni nada de eso- Digo- Además... Mi calidad no es para estar en el B de nadie- Les guiño el ojo y se ríen todas.

-Ahí tienes toda la razón, niña- Patri comenta.

-Aparte me va a gustar jugar contra vosotras y patearos el culo- Hago como que me quito polvo de los hombros.

-Ya lo veremos- Dice Jana.

-Oooh, preparate Janita.

Ahí empezamos una discusión bastante infantil entre las 5 mientras la doble balón de oro mira divertida la interacción.

-Bueno, basta ya- Corta la mayor- Fuera, dejarme hablar con ella a solas.

Las chicas la miran indignadas pero le hacen caso y se van.

Veo que ha quedado una pelota del entrenamiento y me pongo a jugar con ella

-Cuéntame, que tal estos dias? Has echo amigos?

-Eeeh- Hago una vuelta al mundo- Ha estado bien, las chicas el primer día me desafiaban por mi edad- Ruedo los ojos- Ya sabes, lo de siempre. Les calle la boca en 15 minutos y ahora parece que soy una más aunque es clara la diferencia de edad- Me encojo de hombros.

-Esa es mi chica- Dice orgullosa

-Parece que Lola me a cogido bajo su ala. No me dejó quedarme en el hotel y me ha ofrecido una habitación hasta que encuentre otro sitio.

-¿Si? Eso es muy bueno t/n- Dice contenta- Lola es una buena chica y te ríes una montón con ella. Seguro que te cuida bien, ya me encargaré de eso.

-No, Alexia- Digo con el ceño fruncido

-¿Qué tiene de malo?

-Ya te lo dije antes de irme. No quiero que me vean diferente o que tu intervengas en algo o lo que sea.- Paro y la miro- Suficiente has echo con sacarme de ahí y darme la oportunidad de hacer esto- Le enseño el campo- Es algo que nunca te lo voy a poder agradecer lo suficiente.

-Es algo que te mereces por tu propio mérito y habrías podido conseguirlo igualmente- Asegura- Tienes mucho futuro.

-Gracias- Digo emocionada- Que me lo digas tú es... - No encuentro las palabras.

-Es la verdad- Dice- Entonces cuando nos veamos tengo que hacer como si nada? No creo que pueda y menos creo que pueda controlar a las chicas. Están ansiosas por verte otra vez.

-Jugaremos dentro de 4 meses. Creo que es tiempo suficiente para ganarme el pan yo solita.

Se ríe.

Veo por el rabillo del ojo que Medina se acerca.

-T'he de deixar, t'estimooo

-D'acord, t'estim

Cuelgo

-Eres un poco inquieta no? Llevo mirándote media hora hablando por teléfono y no has dejado de mover la pelota en ningún momento.

-¿Me estas espiando?- Fingo indignación.- Pensándolo mejor... Es normal que no pares de mirarme, soy increíble.

Nos reímos.

Los meses pasan hasta que llega el partido contra el Barça en territorio catalán.

Ha ido todo genial, me he ganado un sitio en el equipo y todas son muy protectoras conmigo sobre todo Lola, con ella he creado un vínculo super fuerte y se a vuelto un pilar en mi vida junto con Cris y Andrea.

Mi relación con las dos futbolistas es increíble han pasado de ser culo y mierda a ser culo, mierda y peo o eso dice Lo.

Con Andrea tengo una conexión que no he tenido nunca con nadie. Puedo pasar de hacer el gilipollas con ella, bromas, comportarnos como niñas pequeñas a abrirle mi corazón a pecho abierto y a quererla de una forma súper fuerte.

Pero volviendo al presente. Teníamos un partido que jugar.

Estaba en el vestuario poniéndome la equipación. No tenía prisa, estaba en el banquillo.

Me senté junto a Vir cuando los dos equipos salieron al campo.

En el medio tiempo estábamos perdiendo 2-0 y en el 50 decidieron que era hora de que entrara al terreno.

Mientras esperaba que la arbitra diera paso al cambio vi una silueta pararse a mi lado. Al girarme vi a la número 11.

-Pero si tengo a mi lado a la mismísima reina- Exclamo en voz baja para que sólo me escuche ella- ¿Estás lista?- Sonrió traviesa.

-¿Lo dudas?

En ese momento la arbitra nos deja entrar y empieza la función.

El chip del equipo cambia cuando toco el primer balón y pongo en apuros a la defensa blaugrana. Ahora creen que podemos llegar a algo.

En el 56 después de unos cuantos intentos de mi parte y de Banini llega mi gol.

Cojo enseguida el balón y voy a ponerlo en el punto de inicio y después celebro con las compañeras que venían corriendo detrás de mi.

Continuamos y ahora el Barça estaba mucho más defensivo y muy pendientes de mi. Cada que tocaba balón me lo intentaban quitar o me hacían entradas feas.

En una de esas estaba en el suelo sentada tocandome el tobillo y vi a Medina acercarse enfadada a Pina que estaba junto a mi y Patri.

-No era necesaria esa entrada- Dice de mala ostia encarandose mi número 20.

Me levanto enseguida un poco coja y me pongo en medio.

Medina tenía muy mala ostia pero Clau también y no quería un pelea ahora.

-¿Estas bien?- Dice la culé ignorando a mi compañera.

Asiento con la cabeza

-Como si te hubiera importado hace 2 minutos- Suelta Andrea.

-Andrea, basta- Ordeno y la cojo de la mano para sacarla de ahí.

Es una falta muy cerca del área y peligrosa y pido tirarla.

Me mira Menayo y asiente.

Coloco el balón y veo en la barrera colocadas a Patri y Aitana y luego miro al cúmulo de jugadoras que hay en el área.

Miro la portería guardada por Paños y cuando escucho el silbato chuto la pelota.

Va por toda la escuadra y Sandra no consigue llegar.

La primera en engancharse a mi es Medina a la que agarro por las piernas y luego ya las otras se van sumando.

El partido terminó 2-2 minutos después y iba saludando amistosamente a las que se cruzaban por mi camino antes de que me arrastrarán a una entrevista.

-Muy buenas tardes T/n

-Buenas tardes

-¿Cómo te sientes después de haber enfrentado y empatado a un equipo como el Barça con sólo 16 años prácticamente tu sola?

-Bueno, el equipo ha echo un buen partido, ha podido contener bastante bien a Geyse, Alexia, Ana María... Solo les faltaban las ocasiones de gol.- Me encojo de hombros- Estoy contenta pero hay cosas por mejorar y en eso hay que centrarnos.

-Veo que tienes las cosas muy claras, pero dime. Tú personalmente te veías cuando eras pequeña jugando contra el Barcelona?

-No, de pequeña iba día a día y sigo haciéndolo pero jamás me había imaginado estando hoy aquí o por lo menos no siendo tan jóven.

-Te ves vistiendo en un futuro los colores blaugranas?

La miro y me rio.

-Cualquiera estaría loco de decir que no a jugar en un equipo tan grande. Pero ahora hay que centrarse en el Atleti que es otro equipo muy grande.

-Muchas...-Alguien salta a mi espalda- gracias, T/n. Disfruta del día.

-Igualmente- Me voy de ahí con Andrea encima de mi.

-Así que el Barça, eh- Dice Andrea primero.

-Es mi sueño

-Lo sé- En ese momento Pina y Patri aparecen frente a nosotras y Andrea se baja de mi espalda pero la agarro de la mano para que no se encare.

-Tu... - Empieza a hablar la sevillana pero se calla cuando Patri y Pina se abalanzan sobre mi

-Joder, te he echado de menos- Dice Patri en mi pelo.

-Si, pues cualquiera lo diría- Me separo- Anda que habéis tenido tiempo para venir a verme, sinvergüenzas

-Te juro que cuando tengamos un par de días libres venimos a verte- Dice Patri- Bueno, casi todas las chicas.

En ese momento alguien me levanta del suelo en un abrazo apretado pero reconozco ese olor a kilómetros, Alexia.

-Si, en cuanto tengamos libre vamos enseguida- Afirma sin soltarme

-Hola, Ale- La abrazo de vuelta y noto varios cuerpos más encima.

-Estas más fuerte eh- Dice Jana cuando nos separamos- Y corres más, mare meva.

-Y estoy más buena también- Me río de las caras.

-También, también para que engañarnos -Dice Bruna y escucho un resoplido

Era Medina. Estaba mirando todo confusa y a Bruna bastante mal por estar tocando mi biceps.

-Oohh, chicas esta es Andrea- Rodeo su cintura y ahora mira triunfante a Bruna o eso creía. -Una de las que me ayudó a integrarme y una muy buena amiga.

-Tu eres la que ganó el Mundial no? - Dice Mapi emocionada- Si que lo eres, tienes mucho talento

-Gracias- Dice sonrojada y le pellizco la mejilla

Llega Lola también confusa

-Ellas son las que me acogieron prácticamente en su familia- Les resumo brevemente- Luego os lo explico.

-Vamos todas a cenar? - Dice Patri

Y todas afirman

-Antes podemos ir a un bar o algo para hacer tiempo- Sugiere Alexia y todas estamos de acuerdo- ¿Vais a venir? - Pregunta a las sevillanas

-Si, claro- Responde Lo por las dos.

-Pues genial, vamos a saludar a los fans.

-Yo de mientras iré a decírselo a unas cuantas chicas del Atleti- Dice Mapi y todas nos esparcimos pero Andrea se queda conmigo mientras saludamos a los fans y firmamos.

Me sorprende ver a varias chicas colchoneras con mi dorsal pero lo que más me sorprende es encontrarme a una mujer en concreto en las gradas.

Camino hacia ella ignorando a alguno que otro y Andrea me sigue desde la distancia.

-¿María?- Pregunto alucinada de verla.

-T/n!- Dice contenta y me abraza tan fuerte como puede.

-¿Qué haces aquí?- Pregunto sin creerlo cuando me separo- ¿Cómo estás?

-Bien, viviendo después de lo de Lucía- Dice sonriendo triste- Pero he venido aquí porque me he enterado que jugabas y quería volver a verte.

-Si, ya han pasado 2 años desde que no nos vemos- Digo triste recordando esos tiempos

-¿Tú cómo estás?

-Feliz- Digo sinceramente- He conseguido a gente importante y que quiero- Miro inconsciente a Andrea que estaba a unos metros mirando hacia nosotras- Y estoy haciendo lo que quería.

-Esa chica eh, te brillan los ojos cuando la miras- Ríe tiernamente y me sonrojo pero no digo nada- Lucía estaría muy orgullosa de lo que has logrado, T/n- Dice sinceramente y la abrazo muy fuerte con los ojos llenos de lágrimas.

-La hecho mucho de menos- Digo con un nudo en la garganta

-Y yo, cariño. Pero donde quiera que este está cuidando de nosotras, como siempre a hecho

Me despego del abrazo y nos miramos.

-El otro día me atreví por fin a abrir y mirar las cajas de Lucía que desde la mudanza habían estado guardadas- Se aclara la garganta- Vi una cosa y pensé en ti- Se gira un momento y me tiende una guitarra

-Que, que haces?- Se me entrecorta la voz

-La vi y en que sitio puede estar mejor que contigo?

-No-Niego repetidas veces con la cabeza y aparto la mirada hacia Andrea que al verme así se acerca más todavía- No puedo aceptarlo. Es de ella.

-Estoy segura de que hubiera querido que la tuvieras- Se acerca y me susurra- Y que le cantes a esa preciosa chica

Cojo la guitarra marrón oscura y observo la inicial de Lucía y mia que hicimos cuando le regalé el instrumento.

Paso los dedos por encima y luego me dispongo a tocar un par de acordes pero paro.

-Me da que tendrás que afinarla un poco- Ríe suave.

-Eso parece- Digo- Gracias... Por venir y por la guitarra

Me da un beso en la frente

-Disfruta ahora todo lo que tengas y lo que se te presente- Me mira a los ojos- Y no dejes los sentimientos para el último momento. Tu más que nadie te mereces esto y más- Me hace un gesto con la cabeza y se que se refiere a Andrea.

Con un último beso en la frente se gira y se va.

Me quito una lágrima y sonrío mirando el instrumento que ahora me pertenece y que en su momento regalé.

Andrea termina de acercarse y pasa su brazo por mi cintura en un gesto protector.

Me aclaro la garganta y la miro

-Ven, es hora de que sepáis todo- Me decido

-No tienes porque hacerlo...

-Quiero hacerlo- Digo segura.

-Loooolaa- Llama Medina de camino hacia los túneles, ella nos ve y se acerca.

-¿Estás bien?- Es lo primero que pregunta cuando ve mi cara.

-Venid- Las guio a una sala donde se que no habrá nadie.

-¿Qué es todo esto?- Pregunta confundida Lola y señala la guitarra

-Cierra el pico, Lola- Dice sería Andrea y esta se vuelve sería.

Algo muy raro en estas mujeres

-No se como empezar...-Hago una pausa y suspiro.- Me crié en un barrio un poco chungo, había mucha mierda para que mentir- Hago una mueca graciosa

Se rien un poco

-Mi infancia no fue la mejor. Mis padres eran alcohólicos sobre todo mi padre y mi madre acabo siéndolo por culpa de él y los maltratos.

-A ti también... - Lola no pudo continuar con la frase. Ambas apretaban los puños.

-Si, me acuerdo de la primera vez. Era mi cumpleaños, cumplía 5 y yo estaba emocionada y contenta. Todos mis amigos de clase me felicitaron era nuevo para mi, en mi casa eso no existía. Mi padre estaba en el sofá durmiendo con unos 10 botellines de cerveza alrededor- Hago una pausa- Mi madre no estaba y yo contenta me fui a mi cuarto y cerré la puerta para ponerme a jugar. Grave error, la cerré más fuerte o eso pensó mi padre- Me reí y negué con la cabeza- A partir de ese día nunca más volvi ha hacer ruido con las puertas.

-T/n- Exclaman y me abrazan.

-Pasaba el menor tiempo posible en casa desde ese día, estaba mucho mejor en la calle que en casa. Un día vinieron a vivir una familia nueva al barrio y yo tenía curiosidad. Conocí a Lucía, la niña pequeña de la familia, y enseguida nos hicimos amigas, todos los días estaba en su casa o en la calle con ella. Gracias a su madre pude apuntarme a un equipo de fútbol.

-A Lucía le encantaba la música, lo llevaba en la sangre. Eran una familia gitana con mucho arte, el padre y los tios tocaban la guitarra y el hermano la caja y yo bueno, aprendí de todo. Cuando cumplió once le regalé la guitarra- La miro con añoro- Aún ella teniendo una se volvió loca y se convirtió en su preferida, nunca la soltaba. O estábamos tocando y cantando juntas o estaba mirándome jugar mientras hacía música o lo que sea

-Que bonito, t/n- Susurra Medi emocionada y sonrío de verdad, con el corazón

-Era la mejor- Me aclaro la garganta- Por esa época tambien conocí a Patri. Vivía unas calles más para atrás y la pasión por el fútbol nos unió, fichó por el barça y solo venia en vacaciones y una vez vino con más chicas, concretamente Mapi, Pina y Alexia. La conexión con estas era increíble pero con la última fue instantánea. Casi como cuando nos conocimos nosotras o tu y Medi- Digo mirando a Lola.

-Entiendo

-Intentaba ocultar lo que pasaba en casa cuando estaba ella ya que a un referente no quieres darle esa imagen pero acabó enterándose y la conexión se volvió muchísimo más fuerte.

Hago una pausa y les sonrío

-Ale me queria llevar con ella. No me queria dejar ahí ni un minuto más pero por ese entonces a Lucía le detectaron cáncer y yo no iba a dejarla sola. Fue una lucha intensa durante 2 años pero no fue suficiente. Murió hace 2 años.

-Joder, t/n, lo siento mucho- Dicen ambas y me abrazan

-Su familia se fue de Mallorca y yo desde entonces dejé de tocar nada, todo me recordaba a ella. Ya no tenía nada que me retuviera ahí así que Alexia por fin me pudo sacar y aquí estoy

-Ahora también nos tienes a nosotras- Dice Lola abrazándome fuerte y se une Medi

-Lo sé y estoy agradecida de haberos conocido. Sois increíbles.

-Lo sabemos- Dice la andaluza pequeña con una sonrisa arrogante.

Le pego un puñetazo en el hombro

-Pero yo lo soy más, ahora moviendo el culo que nos están esperando y tengo hambre.

Ordeno y me hacen caso.

3 horas después estábamos todas cenadas pero cada una tenía sus conversaciones en la gran mesa

-Te hemos visto con una guitarra, ¿tocas?- Dice Paños.

-Sí, se tocar- Respondo y me muevo un poco incómoda. Parece que las que están a mi lado se dan cuenta porque Andrea pone una mano en mi muslo y Ale en el otro.

-¿Tocas algo para nosotras, t/n? - Dice Bruna ilusionada ajena a todo lo que pasa por mi mente- Porfaaa

Abro la boca pero no sale nada.

-Si no quieres no tienes que hacerlo- Dice Alexia a mi lado y Olga, su novia, me da una sonrisa alentadora. Ellas saben como me siento.

-No no, esta bien. Puedo hacer esto- Digo más para mi misma.

Me levanto de la silla y me tomo unos minutos para buscar la guitarra y volver

Cuando estoy lista regreso y me siento en la silla tocando suavemente las cuerda para poder afinarlas.

Tengo la mirada de todas encima pero sólo hay una que hace que me ponga un poco nerviosa, Andrea.

Toco un par de acordes y sonrío inconsciente cuando me vienen imágenes a la cabeza de las horas que pasamos Lucía y yo cantando y tocando.

Miro de refilon a Medina y es cuando se me viene una canción a la mente, una que he tocado incansables veces con Lucía y siempre imaginando a alguien sin rostro pero ahora lo tiene.

Empiezo con la melodía y ahí es cuando se me olvida todo y sólo me centro en la música.

"Una vez, soñé lo que el futuro me deparaba

Había un patio andalu'"

Empiezo a cantar y cuando viene cierta frase miro discretamente a Andrea aunque como ella está fijamente mirándome se da cuenta

"Ya encontré

La que será mi futura esposa

La madre de mi' tres hijo'

Sevillana, guapa y hermosa

Y al bailar parece que vuela

Su' pie' son de oro puro

Cásate conmigo, flamenca

Que amor eterno, yo a ti, te juro"

Noto un poco de sorpresa en su reacción y algo más que no sabría describir pero continúo cantando hasta que la canción termina y todo el mundo aplaude hasta las mesas de los alrededores y camareros.

-Wooooooww t/n, no sabíamos que escondias esa voz- Dice Bruna maravillada y le doy un sonrisa

-Gracias pero no es para tanto- Le respondo y todas me miran mal

-¿Qué no es para tanto? Tu voz es preciosa, t/n- Dice Andrea y eso hace que me ponga roja, muy roja.

Alexia me da un golpe en el muslo sutilmente y me giro a mirarla y veo como ella y Olga se están riendo de mi.

Le saco el dedo y la lengua y ella me saca también la lengua.

-¿Puedes cantarnos más?- Pregunta Jana

-Solo si me acompañais

Así nos pasamos un par de horas entre todas cantando y divirtiéndonos y luego fuimos a cenar a un restaurante.

Me había olvidado lo divertido y bien que me sentía con la música.

-Nos vamos a ver pronto Pinita- Le digo a la chica que estaba abrazándome fuerte y puede ver una cola detrás de ella con las demás chicas del Barça.

De repente se unen al abrazo Bruna, Jana y Patri

-Te vamos a hechar de menos, t/n- Dicen estas últimas.

-Y yo a vosotras- Me aclaro un poco la garganta para quitar las lágrimas que quieren salir- Pero hay videollamada y me habeis prometido que cualquier día libre vendreis a verme.

Me separo de ellas y enseguida se engancha Mapi a mi.

-Tu también tienes que venir eh, que sino te meto arrastrando en el equipo B- Dice la aragonesa.

Y así me despido de todas hasta que queda solo una, Ale.

Ella es un poco más alta así que mi cabeza termina en su cuello y quien soy yo para quejarme.

-Pasatelo muy bien, patea muchos culos y hazles saber quién es T/n Putellas

Si, había heredado su apellido cuando terminó siendo mi tutora legal pero eso no lo sabía mucha gente.

-Si, mami- Medio enserio medio en broma

-Y escríbeme

-Mamá Alexia deja un poco al polluelo anda- Dice Mapi burlandose- Escríbele cada minuto eh, que sino lo paga con nosotras- Me dice a mi ahora y nos reímos todos menos Ale que le da un golpe en la nuca.

Le doy un beso en la mejilla

-T'estimooo

-I jo més- Responde y se acerca a mi oido- Ves a por la chica

Me despido con la mano y cuando salimos pongo el brazo sobre los hombros de Medina acercandola a mi cuerpo.

Todas las chicas del Atleti empezamos a caminar hacia el hotel pero me quedo atrás con Lola y Medi.

-Quieres a Alexia eh- Comenta la mayor y yo asiento

-Sí, legalmente es mi madre y yo la quiero como tal

Seguimos hablando pero en ningún momento suelto a Andrea y nadie se extraña porque en estos meses la hemos pasado así día si y día también.

Al llegar al hotel cada una se dispersa hacia su habitación y yo me voy a la mia con Andrea

Voy a mi lado de la cama, dejo la guitarra en el suelo y quitándome la camiseta me tumbo en la cama mirando a mi compañera de equipo.

Se quita los zapatos mientras mira algo en el móvil pero luego lo deja en la mesita de noche y se tira a mi lado.

-Andrea

-mmmh?

-Creo que se a colado una mofeta en la habitación- Digo preocupada mirandola.

-¿Qué estas diciendo?- Me mira raro

-Es que desde que te has quitado los zapatos huele muy mal- Arrugo la nariz para enfatizar.

Abre la boca indignada y me mira mal

-Primero con que ronco y ahora que me huelen los pies

-¿Qué quieres que haga yo? Es la verdad...

-¿Ah si? Pues tu te tiras unos peos mientras duermes mortíferos- Dice ella y ahora soy yo la ofendida.

-Mentira, si yo huelo a rosas siempre

-No, creo que con tus pedos matarias hasta a un muerto y mira que está muerto ya eh

Indignada me pongo sobre ella haciéndole cosquillas y luego ella también me las hace y no sé como termina ella encima mia con ambas piernas rodeando mi cintura y la cara demasiado cerca de mi para ser legal.

Nos quedamos mirando con la respiración bastante acelerada hasta que bajo a sus labios

Levanto la mano y con el pulgar acaricio ese lunar que tiene bajo su labio.

No veo rechazo por su parte y encima intercala la mirada entre mis ojos y mis labios así que me levanto un poco y rozo nuestros labios hasta que los conecto del todo

Es un beso suave, lento, sin prisas.

Saboreo bastante su labio inferior y superior hasta que por culpa del aire tenemos que separarnos.

-Joder- Dice Andrea cerrando los ojos intentando recuperar el aire.

-¿Tan mal beso?- Bromeo aunque por dentro no era una broma.

Abre los ojos y sonrie pícara.

-Un poco, pero no pasa nada, podemos arreglar eso.

Se acerca y me vuelve a besar todavía lento aunque el tiempo pasaba y de cada vez se iban volviendo más intensos los besos.

Estuvimos un par de horas así con ella encima mia pero no llegamos a más que unas cuantas caricias por debajo de su camiseta de mi parte.

Paramos cuando ya teníamos los labios hinchados y rojos

-¿Esto es real?- Pregunto sin creermelo del todo

Sin decir nada me pellizca el brazo

-Auuuu bruta

-¿Parece bastante real no?

-Sí

Le recojo el pelo tras la oreja.

-Vamos a dormir que solo quedan 4 horas

-Mmmmh no- Niego- Solo unos cuantos más

La acerco a mi y volvemos a besarnos.

Al final no dormimos nada...

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redhairedwolfwitch · 2 years

Text

Alongside Her Goalie - Clàudia Pina x Reader

A/n: The next part from the Score A Goalie universe, since I burnt out from this series during the February international break, but if anyone has any ideas for anything, I am all ears/eyes. This is also very long and if you want linking to the previous parts, send an ask, hyperlinks still break the tags for fics.

///

None of the players at Atleti had been able to get a response from you since your message about a loan to Barcelona, and social media confirming your message as you confused fans to no end. With Cata Coll returning to training in December too, Barcelona was juggling five potential goalkeepers, and your contract dictated you get minutes or Atleti would recall you.

Atleti were scrambling to keep a hold on you, since Lola had re-signed with Atleti until 2026. As much as you loved Lola, you had drifted from your team mother, and were now stuck trying to get out of her shadow, your desire for minutes and not getting them was affecting your mental health.

Your mental health ended up being a reason that you had not been present at Atleti’s training leading up to Three Kings Day on September 6th, not that your loan was pending and you would be training at a more intense level at Barcelona, coming back from the break, and the fact that Barcelona were pushing you in a way that made your heart ache.

Whilst Clàudia was getting ready for the match against Sevilla, you were on the phone with Barcelona, organising how things would go in January. You needed to pick up some things from Madrid, and you didn’t want to impose on the shared home of Patri and Clàudia for too long, even as they both complained that you’d be lost in Barcelona without them.

So, currently, you were packing up what you needed from your place in Madrid to take to Barcelona, in the form of two large suitcases and a backpack. You froze as you glanced around your place for anything else, your eyes landing on the two photo frames. Wrapping each of the frames in a hoodie, you strategically packed them so they would not shatter on the journey back to Barcelona.

It would be weird, not wearing the Atleti logo or colours for a while, especially after wearing them for three seasons now. Running over the plaster on your left ring finger that Clàudia had put there after you gave her your gift from New York, you sat down on your couch, taking out your phone to finally do something you had been avoiding doing with your Atleti teammates.

They hadn’t made it easy to talk to last year, and you were in a time crunch before your flight back to Barcelona, but you still began to reply to their messages after checking that they were in fact heading to Tenerife for the away game and couldn’t reply immediately. Yes, you were still slightly avoiding them.

It was easier to talk after you went through the messages that you had been sent, but your heart still ached as you messaged Virginia, then Carmen, then finally Lola. Each had long paragraphs that you probably could have split up for easier reading, but you were busy wiping tears from your face, turning off plugs and making sure your fridge was completely empty before heading out to get to the airport.

You’d have to rush with your suitcases, but Barcelona had a home game against Sevilla later on in the evening and you had been invited to watch it with the injured players.

Biting your lip nervously as Clàudia and Patri went to get ready for the game, you were caught off guard as a hand tapped your shoulder, but Alexia’s smile was warm as she welcomed you, checking you were okay as she noticed how nervous you looked.

“I’m fine… just… need to turn this off before the game.” You replied, trying to avoid looking at your notifications as you turned your phone off, you small talked with Alexia as she led you to where the rest of the injured Barcelona players would be watching the game against Sevilla.

“What happened to your finger?”

“Pancake flipping accident.” A blatant lie, but you weren’t going to say the real reason why your left ring finger had a plaster on it, Clàudia had promised it was only temporary.

Hearing a quiet chuckle, you met Alexia’s gaze, you knew she didn’t believe what you said, but she didn’t press as the game began to begin.

“Where are you staying? With Pina and Patri?”

“Sí. I tried sleeping on the couch but Patri sat on me.” You didn’t elaborate as your focus was stolen by the game, watching intently as Clàudia had started the game, the rest of the injured players falling silent as everyone watched carefully.

You were practically vibrating with energy when Clàudia scored at the 34th minute, amusing Alexia, Caro and Jana who were sitting near you and able to see your excitement, and how tense you were when Clàudia had to take a penalty before the half-time break.

Your eyes widened as you spotted Sampedro, your former captain at Atleti before she left last year. You nervously waved to her as she was subbed off two minutes after Clàudia, Lucy and Mariona were subbed off.

You spent your Saturday night curled up with Clàudia, realising that you had left your car in Madrid when you got up Sunday morning to head to the Barcelona facility for check-ups before you could start to join official training.

“We’ll drive you.” Patri volunteered, making you raise an eyebrow but Clàudia shrugged, asking if you needed a road trip to get your car, or if you wanted it somehow to be delivered to Barcelona.

Whilst you were at your check-up, Atleti were at their away game against Granadilla Tenerife, a game that if you had been watching, would have sent you into an anxious flurry as Lola went down twice in the first half. The first time for a boot to the head, the second for her left hip.

You also didn’t see the Barcelona Femeni had updated their social media stories with a short video of you running on a treadmill, although your lack of Barcelona training kit was obvious, it told fans that you were starting your training at your loan team.

Clàudia found you sitting in the corridor later on, staring at your phone in thought. Sitting down next to you, you rested your head on her shoulder, letting out a tired breath.

“They’re not mad at me, just disappointed, upset and a few more adjectives describing their feelings towards me going on loan and not telling any of them-” you were cut off by a notification of a message, but you didn’t expect Jenni to message from Mexico, checking in on you and asking how you were doing.

Reading over your texts, you didn’t realise you were talking aloud but Clàudia kept quiet, listening to what each of those closest to you in Madrid had said and your replies.

“‘please pick up the phone, nobody has heard from you since before Christmas’… ‘sorry Vir, I’ll call when you’re free later?’

‘You could have talked to me’ you didn’t make it easy Lola, ‘I'm sorry, can I call you later?’

‘i’m always here for you, just be safe in Barcelona, call me any time’ thanks Carmen...

oh there’s another ‘please tell Lola you did not run away and get eloped’ well… we’re not eloped, so?” You smiled slightly, looking at Clàudia, who smiled back at you, her gaze drifting to the plaster on your finger.

Typing a reply to Jenni, you chewed your lip for a moment.

“Shall we take a proof of life photo?” Your joke made Clàudia frown for a moment until she realised what you were asking, taking your phone to hold up at a better angle, the two of you smiled at the camera.

“Hopefully, this photo, plus a ‘i am alive’ update will mean we have the rest of the afternoon to ourselves.” You murmured, uploading to your close friends instagram stories with ‘estoy viva’ update that you were alive, then ignoring your notifications for the rest of the afternoon as Clàudia and yourself tracked down Patri and headed back.

You missed your balcony in Madrid, instead looking out the window in Barcelona as you listened to the dial tone, waiting for the person on the other end to pick up the phone. Letting out a shaky breath, you listened as the person picked up.

“Hola Lola.”

“Hola, mini-me.”

“You were right. I should have talked to you about what was going on. But, it was hard. You were always so busy with your captain duties, so I kept it to myself, trying not to waste your time. Then when you weren’t doing captain stuff, you were busy with Medina or… I couldn’t talk to you, or anyone at Atleti. I felt alone, I have not played at all this season and it was messing with my head. I missed playing, and I missed my girlfriend, so I asked for a loan with the hopes that I’d get some minutes somewhere. I didn’t think Barcelona would be interested and I don’t know how it works with them having five goalkeepers, but my loan states I have to get minutes. I wanted to talk to someone, but everyone was busy with their own lives, so I fell through the cracks. Lola, I’m sorry, I’m so sorry, I’m sorry I didn’t tell any of you about any of this, you’re my family, and I love you.”

Lola was silent as your talking turned into muffled sobs, processing what you had said as shuffling on the other side caught her attention, hearing Pina softly comforting you.

Lola couldn’t ignore how her stomach twisted, reminding her of how withdrawn you had been from the start of the season to the last time she had seen you in person.

That last time was before Christmas, but you had been nervous about something at the annual holiday meal, she had noticed it, Carmen had noticed it, and Virginia had pointed out your odd behaviour at training after the meal.

It was like ice water had been dumped over her, realising it had been right in front of her for a while now.

“I’m sorry mini-me, I should have been there for you. I should have realised you were withdrawing and struggling…” Lola began to apologise, reflecting on how her focus had drifted and she had failed to check in on you properly, the conversation continuing until Lola had to go.

“Uh, by the way, Carmen texted me to tell you I did not run away to get eloped, but um, we’re not engaged, but, it’s just, uh, I bought Clàudia a promise ring in New York, okay, buenas noches!” You scrambled to spit out the news, hanging up the phone before Lola could respond, and turning to your girlfriend who immediately looked at your phone with wide eyes. Lola was trying to call back.

Flicking your phone across the room, you opened your mouth to begin to apologise, but you were cut off as lips met yours, quietening you as you were led back to the bed the two of you were sharing. Arms wrapping around each other, you laid in silence together with your fingers running through her hair before eventually falling asleep together for an early night with training tomorrow.

///

Excitement overruled anxiety for the morning, it would lead up to your first official training with the Barcelona team. You still weren’t sure how things would work, but the Copa De La Reina Round of 16 was coming up, you weren’t on the squad list for it but you were ready to throw yourself into training. You didn’t have Lola here, having left her and Atleti behind in Madrid. You didn’t have Carmen or Virginia either, but Clàudia didn’t have Jenni, and Alexia was doing her own training separate to the group.

Sandra spotted you almost instantly, pacing up and down the goal area with something on your mind.

“Hola! Bienvenida a Barcelona, estás bien?” Sandra checked in with you, pulling you into a hug to stop your pacing.

“Hola, muchas gracias, I’m, I’m okay, just… Clàudia is with the physio, and I don’t know what I’m doing.” You admitted, fiddling with your goalie gloves in your hand. They had your number on from Atleti, a number you were not at Barcelona.

“Vamos, mini Lola.” Sandra replied, gesturing for you to run with her around the training field, the two of you eventually joined by Gemma Font, continuing to jog around until everyone else was gathered to warm-up for training.

You were still a bit awkward when you crashed at Clàudia and Patri’s place after New Years turned into staying with them for longer. You had suggested finding a place to rent for your loan, but without your car (that you had left in Madrid in your hurry to get back for Barcelona’s game against Sevilla) you were stuck in a city you didn’t know as well as you knew Madrid. Clàudia knew this, and asked you to stay, the two of you able to function in the same space since staying together.

You still worried about Patri being uncomfortable by living with a couple, but she didn’t seem to mind. You weren’t sure how she hadn’t figured out anything about the promise ring, or if she had heard anything from when you’d shown Clàudia the ring.

The awkwardness washed over you like a wave when Patri and Clàudia had a few more teammates over after training that night, another Barcelona goalkeeper, Cata Coll, Jana, Laia and Aitana included as you ended up hiding out in Clàudia’s room, or, your shared room now. Sat on the bed, you ended up on the phone with Carmen, and then Virginia, who pointed out that you should be bonding with your teammates at Barcelona.

“I know, I know, I just… don’t text Clàudia- wow, thanks, Vir…” You murmured, hearing the Spanish woman hang up on you.

“Bebé, ¿por qué te escondes?” Clàudia enquired, entering the room with her phone in hand, sitting down next to you and leaning into your side. She wondered why you were hiding in your shared bedroom.

“Lo siento. I felt awkward.” You apologised, running your fingers over the plaster that Clàudia had put on your finger. Clàudia took your hand, bringing it to her mouth to kiss with a smile.

“Vamos bebé, we have dinner. You need to eat.” Your lover persuaded you to leave your hideaway, feeling awkward to join the others until Patri cut in with teasing the two of you for taking so long, but you both made a beeline for the food in the kitchen instead.

“How is it you two have been dating for over a year and we barely know you?”

“Madrid to Barcelona is an over six hour drive, or a maximum three hour train journey or an hour and a bit by aeroplane. Circumstances meant I have spent time with some Barcelona players more than others-”

“No shit, Jenni said she and Alexia lost you two in the streets of Barcelona once.” Patri pointed out, making you chuckle, biting your lip as Clàudia flustered slightly, but she still had a smirk on her face at the memories.

“Lola was ready to kill me after she found out that we ditched them, and Carmen and Virginia were not far behind…” you began to recall the story, not realising how relaxed you were until Clàudia was leaning into you, the two of you curled up together until the girls called it a night.

“Te amo, Pina.” You whispered into the darkness, pausing as Clàudia rolled over to bury her face in your neck, holding you closely.

“Te amo, mi amor.”

///

You didn’t play in the Copa De La Reina round of sixteen, instead you, Patri and Pina were at the park. Those two were supposed to be resting, but they were running goalkeeper drills with you in the park. Your confidence was growing as you pushed your worries out of your mind, preventing Patri and Pina from scoring, or making it harder if you couldn’t stop the ball completely. You hadn’t seen how Patri had set her phone up, showing you the pictures she had caught after for you to upload to your socials.

Your drive was relentless as you developed yourself with the training at Barcelona. The hopelessness you felt at Atleti when it came to actually getting minutes had evolved into a hopefulness, even if the loan in general was bittersweet. Barcelona were gearing up to keep Sandra, Gemma and Cata, and with Meritxell with team B, you knew your loan would just be a loan.

It was haunting how it felt like your roots were being ripped out from under you, your family in Madrid with Lola, Carmen, Virginia and Andrea, then your girlfriend/partner/soon fiancee, Clàudia in Barcelona. You were a great goalkeeper, but what you wanted was impossible.

You had tripped over your words as you explained the ring to Clàudia, giving her the option to have it as just a regular ring, if she didn’t want it to be a promise ring, or the relationship to be what it would be with that ring. She didn’t even have to wear it, but at that point you were rambling.

You had a feeling that Barcelona would not keep you, and you would not get many minutes at Atleti now, since Lola had re-signed until 2026. It was too early to make a prediction, but you had a feeling you would be loaned out for next season, because whilst Atleti wanted to keep you, but you wanted minutes, and to be close to the people you care about. Too bad the clubs were rather scattered… you really needed to get your car from Madrid.

Every time Atleti played a match, you texted your teammates a red and white heart if it was a home game, a purple and black heart for the second kit, or an orange heart for the third kit. Especially since Carmen had been playing again since the round of sixteen, and Virginia was finally subbed on against Villareal.

The Supercopa de España Femenina semi-final against Real Madrid left you watching intensely with Jana and Cata, the two slowly coming back into training whilst you were not required on the roster for the match, Barcelona had already listed three goalkeepers, but you were fine watching.

El Clásico matches were something you didn’t want to miss, especially when Clàudia scored. Or when Irene got her second yellow, turning into a red card and ejecting her from the game. The extra time left you tense, even after Clàudia had been subbed off, but Mariona’s penalty, followed by Salma’s goal in the 120th minute left you, Jana and Cata jumping around in celebration.

Eventually everyone gathered down on the pitch, hugging and grinning. You let out a breath, glancing around as you spotted the Real Madrid players, your stomach twisting as you recalled something Lola said last year, before keeping your attention on the team you were loaned to, smiling as Sandra pulled you into the celebrations.

The final of the Supercopa de España Femenina would be Barcelona against Real Sociedad, with the players out with injuries coming to watch the match.

“I feel like a traffic cone in this orange.” You murmured to yourself, pulling the coat further around yourself as you heard Alexia chuckle.

“It is very bright, but it is like Atleti’s third kit, yes?”

“Not the goalie kits, black, pink or green.” You fiddled with the zip of your coat, frowning slightly as Alexia asked her next question.

“You are not used to being here, at Barcelona yet, are you?”

“I feel like a fan wearing my fia- wearing Clàudia’s jersey, watching, then it was the same at Atleti last year, sat watching Lola for half a season. Am I just not good enough as a goalie to play? I thought I was good enough, they even put me in against Barcelona last season, but I haven’t had any minutes since,” fiddling with the zip, you didn’t see the frown on Alexia’s face, “I requested the loan to get minutes because it messes with my head to not play at all… I, I need to stop talking, the match is starting.”

Compared to the semi finals, the finals of the Supercopa went quicker, with you making quiet observations under your breath about the defensive lines and goalkeeping, to being completely silent when one of Real Sociedad’s players was taken off the pitch in a stretcher.

Your foot bounced against the floor as you watched everything going on, Barcelona winning the Supercopa 3-0. You grinned as you watched the team flood from the bench onto the pitch, lingering on the sidelines as the team got their medals and began to celebrate with the Supercopa trophy.

It looked strange, but you weren’t on the list for Barcelona for the Supercopa, and Atleti hadn’t qualified this season. It was only when Clàudia ran to you, a Barcelona flag around her shoulders like a cape as she jumped into your arms.

“Felicidades, mi supercampeona.” You smiled, holding Pina in your arms as her nose brushed yours.

“Gracias, mi amor. Vamos!” She grinned, taking your hand and guiding you to where Patri was stood with the cup, which somehow made its way onto the top of Patri’s head in Pina’s hands, before the three of you took a photo, Clàudia holding the cup, with Patri grinning at the camera, and you grinning at Clàudia with pride in your eyes.

You heard Clàudia let out a confused noise from where she sat next to Patri on the coach on the way back, Patri was next to the window so you and Clàudia could hold hands across the aisle when nobody was looking, unless you both wanted to be teased by the others.

“Qué?” you murmured, opening your eyes to look at Clàudia, who was on your phone.

“There are only two photos with you in.” Clàudia pouted, showing you the two photos. One was of you, Clàudia and Patri, whilst the other was you and Clàudia walking around the pitch together.

“Main focus was the trophy winners. Not the fourth goalie, technically fifth once Cata is back.” You whispered, half asleep somehow even with the celebrations on the coach.

Clàudia pouted again, about to open her mouth but instead she was nudging Patri to look at the camera as you got your phone out, holding it up to take a selfie with the two.

“Three photos.” You smiled, texting the photo over to Clàudia, who beamed at you.

“Ey!” Patri jokingly complained as Clàudia stood up, sliding into the seat next to you as you shuffled back against the window.

“You are not fourth choice, or fifth.” Your lover whispered, kissing your cheek before the two of you continued to snuggle, much to Patri’s teasing.

“You know, if I had known, I could have given everyone their medals, shake hands and stuff, since nobody gave them out to you all, maybe it would piss some people off but I’ve not played on a national level so…” You admitted, playing with Clàudia’s hair as she snuggled into you, the two of you in a entanglement of limbs after less than five seconds.

///

“Hey, cariño, do you know how to use photoshop? My attempts aren’t exactly great, I think I’m messing up the layers?” Turning your laptop to Clàudia, who paused, taking a closer look before shaking your head.

“Photoshop?” Patri raised an eyebrow, walking over to see what you were working on.

“I’m not in the team picture for Atleti this season, and I’m not in the Barça one either, so I’m photoshopping myself in… badly.” You grimaced, about to ask Patri for help but she shrugged too, suggesting you try to find a tutorial on youtube.

Later that evening, you uploaded the two photoshopped images to your instagram, captioning the post with ‘fixed it’, gaining the attention of your Atleti teammates and your Barcelona ones, liking and commenting on your post. Andrea had even commented, whilst Lola deadpanned you could have picked a photo where you were wearing your goalie kit.

Your drive had increased. Everyone could see it, your skills were improving, desperate not to plateau your abilities, but also you wanted to enjoy yourself. You started football because you enjoyed it, and you loved being a goalkeeper. So when you got to hold your own in goal during training, Clàudia couldn’t help but grin at the smile on your face. Sandra spotted it too, taking time to bond, and making sure the goalkeeper union got along after the slightly tense realisation Barcelona had five goalkeepers at different stages this season.

Watching Barcelona play Levante Las Planas, your foot bounced up and down, thoughts running through your mind as the minutes went by. Atleti would start playing against Madrid CFF soon, but you pushed it back, quietly talking strategy with Sandra, much to her amusement.

“You will play in February, I know it.” Sandra patted your shoulder, nodding to you as you hummed, watching Clàudia before she was subbed off at the 67th minute, coming over to sit with you both.

Atleti played Sevilla earlier in the day than when Barcelona had an away game against Granadilla Tenerife. You’d eyed the line-ups for the game, feeling your stomach twist at Lola captaining Atleti against former Atleti captain, now captain of Sevilla, Sampedro. Alteti had drawn against Madrid CFF, the score 2-2 in a 15 minute scramble, but as much as you adored Atleti, your focus was on Barcelona.

“I think I’m going to get my car from Madrid during February’s international break…” you decided, your leg bouncing against the floor of the bus as you had to lean across to talk to Clàudia, who sat in the seats adjacent to you with Patri.

“What if you are called up?” Patri enquired but you let out a huff, shaking your head.

“They have enough goalkeepers.”

You knew Lola would be beating herself up about Sevilla’s equaliser goal at the 90th minute, Atleti drawing for the fourth time in a row in the league, but you didn’t have a chance to text her anything too long, as a jersey hit you in the face.

“You know I wear a goalkeeper kit, right? Wow, this kit is reminding me of that Barcelona away shirt from 2019, maybe? It was before I was at Atleti…” You reminisced, smiling as you gently folded the jersey that was thrown at you.

“Where were you before Atleti?”

“I was at-” you were cut off as the staff asked to talk to you, your eyes meeting your girlfriend’s confused gaze which you mirrored.

Your confused look was exchanged for a nervous one as you returned from talking to the staff, getting Patri and Pina’s attention as you wrapped up a conversation with Gemma, and Sandra was not far behind you.

“What’s-”

“Um, against Granadilla Tenerife, I’m starting… they’re resting Gemma and Sandra has some muscle discomfort? I don’t know… but, I’m starting, I’m getting minutes?” Your voice was shaky with disbelief, glancing towards Sandra with concern but the older goalkeeper was supportive, pulling you into a side hug as Pina rushed towards you to hug you too.

For over an entire season, Lola and Carmen had been a part of your pre-match preparations after they took you under their wing upon Lola’s return to Atleti for the 2021/22 season. Now you were preparing for a match miles away from them in the Canary Islands, but unlike your first season at Atleti back in 2020, you had someone by your side. Clàudia squeezed your hand as she reached over for it on the bus, smiling softly as you met her eyes with as much of a smile as you could muster.

No doubt your Atleti teammates would see your name on Barcelona line-ups, you didn’t have the same number as you did at Atleti, taking Lola’s number 13 after Lola was shuffled up to number 1 there. But at Barcelona, your jersey number was more than triple that.

The first half of the game, you had a few touches on the ball, but Barcelona had more of a handle on it at 5-0 by halftime. You were hopeful that the cameras hadn’t caught you grinning at Clàudia’s goal in the 5th minute, but the cameras and the fans had caught it, just like they had caught you jumping up to grab the crossbar, in a perfect world you would have done a pull-up, but instead you got down quickly, waiting for the game to begin.

The second half of the game, your drive was in overdrive, anticipating as much as you could as you slipped into the zone, retrieving a stray ball to send back to Mapi. With Alexia and Sandra out, and Marta on the bench, Patri was wearing the captain’s armband for the match.

Glancing to the sidelines after one of the Granadilla Tenerife players was down, you spotted the substitutions getting ready to come on soon for both teams. The captain’s armband eventually made its way to Marta as she was subbed on. Asisat, Patri, Rolfö, Mariona and Irene eventually make way for Emma, Nuria, María, Marta and Laia to come onto the pitch.

The scoreline was unchanged since halftime, but you headed onto the field, retrieving another stray ball to send back to your defenders. Nearing the 89th minute, Mapi sent the ball back to you, sending it back to her once the Granadilla Tenerife players moved around a bit to try to anticipate your move.

You let out a breath as the two minutes of stoppage time arrived, Clàudia’s goal attempt falling flat as the Granadilla Tenerife goalkeeper managed to keep the scoreline the same since before halftime, until Lucy’s head sent the ball into the net.

The final score of the match was 6-0 as you made your way around, shaking hands with the opposing players and complimenting Noelia Ramos on her goalkeeping as she let out a sigh.

You were about to mention the shots and shots on target statistics in comparison to how many goals Barcelona did score, when a warm body wrapped around your side, kissing your cheek.

“Hola, cariño, well done today.” You whispered, smiling at the first goalscorer of the game, and your love.

“Well done, bebé. You were amazing.” Pina whispered back, smirking slightly as you glanced over her kit, the fourth kit jersey having grasped your attention from the moment her jersey hit you in the face earlier.

“Vamos, we both stink…” You paused, frowning slightly at the memory of when you and Pina would run away from team mothers who had played the full 90 minutes, but you pushed it back, following your team back to the locker room, where Sandra congratulated you on your performance as you got in the door.

“Gracias!” you grinned back, cut off as a jersey hit you in the face again.

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The next match was an away game against Valencia, with Sandra still out on precaution due to the muscle strain, it was almost a toss up between who would be selected to start. The next matches after were against Real Betis, then Alavés before the international break.

You didn’t play internationally, so you would be able to retrieve your car from Madrid when it rolled around.

But right now, you were in Barcelona’s yellow goalkeeper kit, standing in goal watching carefully. Valencia’s attempts at goal were good, but Barcelona had already scored twice. A free kick almost had you stood on, but it went your way as the whistle was blown.

Twenty two minutes in, and your captain, Marta had scored, taking the scoreline up to 3-0. You were tested twice more before the twenty fifth minute, the ball being carried away down to the other goal for Barcelona to have more attempts. You wouldn’t admit it, but you were enjoying the challenge of this match, especially with how Patri was in control of the game.

Valencia’s Chacón hurtling down towards goal had you and Nuria hurrying into action, before the ball met your gloves less than two minutes later. Valencia’s determination to take away the clean sheet as half-time approached had you on high alert as you sent the ball back into play. You were done comparing yourself to anyone else’s goalkeeping. You glanced over at the bench as the half-time whistle went, walking over to the tunnel.

The music playing coming out of the tunnel was dramatic as you headed over to the goal, hopping up to attempt to reach the crossbar, you smiled at Pina on the bench as she smiled back.

Less than two minutes into the second half, Aitana had taken the score up to 4-0. Punching a ball away near the 58th minute, you caught it again as it was sent back at you, sending the ball away before Valencia could try again.

Two substitutions were made for each time, for Barcelona, Marta and Aitana went off for Lucy and Keira, Patri getting the armband in the process.

A corner to Valencia in the 69th minute ended up hitting the post as you watched, Geyse being subbed off for Ana not long after as you went to retrieve the ball. Another attempt at the 79th minute after a really good cross from Valencia had you smiling to yourself, the ball having clipped the goal frame, going out for a goal kick.

More substitutions came for Barcelona as Vicky came on for Rolfö, whilst Pina came on for Mariona, you had to fight back the excitement as you schooled your features. There were still five minutes left and you couldn’t let yourself get distracted.

Three minutes of stoppage time went by and the whistle was blown, you held back from jogging over to your teammates, instead taking a moment to stand in goal and reflect on everything.

“Hola, mi amor…” you went to hug Pina, but she smirked, looking you up and down before teasingly pulling away.

“Go shower, you smell.”

“Wow… I mean it’s not like you can join me here so…” you teased, heading away when you were pulled back.

“We’re lucky our team mothers are not here, they’d never let us be alone in the same room.” Pina pointed out, smiling as you chuckled.

“Yeah, that sounds like Lola and Carmen, and Jenni and Alexia… time flies…” you began to reminisce, feeling your eyes water for a moment before everyone was heading back to the tunnel, Patri and Aitana coming over to get you and Pina in the process.

Atleti didn’t have another game until the 5th, the same day as Barcelona’s home game against Real Betis. But that didn’t mean you expected to find a missed call from Lola whilst on the trip back, listening to the voicemail as you watched the sun begin to set.

“Capitana Aitana!” you grinned, the Real Betis squad revealed, and although you were resting on the bench this match, you were excited to watch Aitana take the captain’s armband when the game began. Right now though, you were heading out to warm up with Gemma, who was starting this match.

“Atleti won against Huelva.”

“3-1, Huelva’s goal in stoppage time.” You didn’t take your eyes off of the pitch as you watched your team, Geyse already having scored but you were hooked on everything happening.

“Uva?”

“What? Oh, a grape! Gracias- oh, shit, yes Keira!” you exclaimed, spotting Keira score her first goal for Barcelona, whilst you held the tub of grapes in your hand.

Pulling the blanket over your legs, you wrapped your arms around yourself, watching the second half get ready to start, with Human by The Killers playing in the Estadi, giving you something to dance to, and make Bruna laugh too.

Barcelona’s third goal of the game belonged to your lover, your celebration making Bruna laugh again, followed by Patri playfully nudging you to sit down.

“What, can you really blame me? Go, warm up!” you sassed, leaning back in your seat to watch the rest of the game.

It hadn’t taken long for the Barcelona substitutes to make an impact, with Asisat and Mariona both scoring goals quickly. More substitutions and more goals came, with Asisat scoring her third hattrick in twelve days by the end of the match.

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Your instagram stories, and Pina’s, were full of reposts of Barcelona posts, but every so often, the two of you would post something different. This time, the two of you had posted your plates, having dinner together after the match.

Sandra was back by the time the last game before the February international break, so she was starting, whilst you and Gemma sat on the bench, discussing possible gameplays and the international break. You were not called up, so you’d talked to the Barcelona staff, finding a gap where you could go to Madrid to get your car, and drive it back to Barcelona.

The game against Alavés was already going quickly, the offside flag being called before the first goal of the match. It took longer for Barcelona to score against Alavés, compared to the game back in November, being at 2-0 by half-time, (a goal from Asisat, and an own goal from Alavés) compared to the 5-0 that Barcelona were at in the November game.

“Why do you sound weird?”

“I have come to the conclusion that I am going to get ill every time Clàudia does…” you explained, wrapping your coat further around yourself as the second half commenced. Aitana took the score up to 3-0 in the 64th minute, substitutions occurring as Rolfö sat down next to you to observe the rest of the match.

Clàudia took the score up to 4-0 in the 84th minute, your reaction making Rolfö chuckle as you snapped out of whatever half-awake state you were in, the brunt of whatever bug you had caught from the girl you shared a bed with hitting you hard.

“You know you could have told them you’re sick-”

“I felt fine before, that’s what is so silly.” You admitted, sticking your tongue out playfully as Clàudia walked over to you post-match, pulling you into a hug.

“I think I caught what you had.”

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Carmen didn’t expect to get a text message from Clàudia, or that there would be an attached photo of you bundled up in blankets, visually ill, watching the Atleti vs Athletic Club match, then a video of you celebrating Carmen’s goal before almost coughing your lungs up from over doing it.

It might have taken you a little while to go get your car from Madrid.

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