#está en la terraza
Explore tagged Tumblr posts
Text
‘ eh, alto ahí. ¿cómo sé que no has venido a asesinarme? ’
#no sé chiquis#hoy comenzó mi martirio (el semestre) y no puedo ofrecerles nada mejor#está en la terraza#pero si quieren ambientarlo en otro lugar por mi ta bien#cuento likes y rbs pero lo dejo un ratito nomás#para no agobiarme tanto#mañana me paso con teo y los sts que dejé likeados#y a responder algunos con este tmb#muchos tags innecesarios#buenas noches 🌹
27 notes
·
View notes
Text
tiene lata de cerveza en la mano y agita de esta, dándose cuenta que el contenido se había terminado. '¿crees que el bartender tenga experiencia en coctelería?' ahí, tras la barra, estaba desconocido. 'podría ser uno de nuestros vecinos, no lo sé, ¿habrán contratado a alguien profesional?' se piensa el si arriesgarse con un preparado o mantenerse en lo seguro y continuar tomando solo cerveza.
#de nuevo andamos x acá después de ver si podíamos sacar al bb#eeeeh no cuento nada :p#así que denle con confianza#está en la terraza y esop skjdnsdk <3#me pondré a contestar :3c
19 notes
·
View notes
Text
wade reaccionaba a cada comentario que soltaba la anciana, como un típico oyente activo, quizás relajado por el hecho de que la conversación no parecía girar en torno a él, sino alrededor de isabella. percibía tensa a su compañera, de todas maneras, y en el momento en que decidió desviar la mirada de rosa hacia ella, fue para comprobar si realmente se la notaba incómoda, o si era él quien se lo estaba imaginando, por el silencio en el que parecía estar refugiándose hacía un rato. ‘ creo que isabella es demasiado tímida para decirlo, rosa, pero... ella no está disponible para citas ’ decidió inventarse, sin arriesgarse a mencionar alguna posible pareja que pudiera significar un obstáculo, porque no tenía idea de cuál era la situación real de la castaña. ‘ pero tengo una amiga que es fanática de las pastas, debe estar por aquí. se la puedo presentar, después ’ sugirió, buscando con la mirada a conocida que, suponía, no tendría problema en ganarse una comida gratis.
‘ ¿este fin de semana? ¿como a qué hora? tal vez pueda darme una vuelta ’ comentó, justo cuando leía el mensaje que acababa de llegar a su teléfono. y si bien no estaba obligado a cumplir con compromiso, pues ya habría recibido ( o no ) las propinas de esa noche, lo cierto es que no le molestaría hacerlo, de todas formas. ‘ ah, acaban de liberar el sillón que estaba ocupando hace un rato ’ lo notó cuando apartó la mirada del móvil otra vez, y no dudó en señalárselo, sabiendo que rosa había estado esperando por ese momento; como típica señora mayor, se había empecinado con que quería ese lugar, que según ella era más cómodo y le regalaba mejores vistas. ‘ y me acaban de avisar que hay unos bocadillos recién horneados que son imperdibles. ¿me acompañas a buscar? ’ invitó a su compañera. ‘ de paso traemos bebidas ’
isabella miró a wade de reojo, sintiendo una mezcla de diversión y frustración mientras rosa continuaba su relato sobre su nieto, un joven que, según decía, era un "partido ideal". era la cuarta vez que escuchaban la misma historia, pero rosa parecía estar disfrutando demasiado de su papel como casamentera. "¿y te he mencionado que es un excelente cocinero?” repetía rosa con esa chispa en los ojos que sólo las abuelas tienen cuando hablan de sus nietos. "me hace unas pastas increíbles, y siempre tiene un ambiente tan cálido en su casa. estoy segura de que les encantaría."
isabella sonrió, intentando mantener la cortesía mientras su mente divagaba. aunque apreciaba el entusiasmo de rosa, la idea de una cita a ciegas con un extraño no era precisamente lo que había planeado para esa noche. ya había pasado por esa etapa y, honestamente, no estaba en sus planes volver a intentarlo. además claro, al terminar de hablar de su nieto, comenzó a hacer lo que había estado haciendo la noche entera. "¿ustedes pueden ayudarme este fin de semana con mi jardín, verdad? la juventud es preciosa. " menciona ahora la mujer. la italiana sólo miró al masculino que la acompañaba en cuidar de la mayor, tratando de pedir ayuda mentalmente. quería reunir esas propinas, pero rosa se los estaba poniendo muy difícil. ' ¿qué hacemos con ella ahora? ' pregunta en un susurro. @wadetae.
2 notes
·
View notes
Text
Boludo | Enzo Vogrincic
Para mis hispanas/hispanos: en español completito.
-
Mientras caminas por las calles de Tlaquepaque en Guadalajara, decides acudir a una pizzería llamada La Valentina. Es de noche y llevas puesto un vestido negro hecho a mano, te sientes supercómoda y segura de ti misma. El mesero te pregunta si quieres ir a una mesa o al bar, y le dices que prefieres el bar. Al llegar, te sientas y le pides al bartender un Moscow Mule. Lo tomas tranquila y feliz, entablas una conversación con él, y le cuentas que eres de (tu país) con una gran sonrisa.
A medida que pasa el tiempo, te das cuenta de que el bartender está muy ocupado. Miras a tu alrededor y ves a tres chicos guapos, pero hay uno en particular que llama más tu atención. Te das cuenta de que no son mexicanos; tienen un acento argentino. Sin embargo, el chico que estás mirando tiene un acento muy peculiar.
Sigues disfrutando de tu trago, y el chico se acerca a ti, diciendo: "Disculpa, eh... es que mis amigos me retaron a que te hablara, porque te ves hermosa y, en realidad, no sé cómo hablarte. Ah... ¿te apetece un trago en la terraza y una pizza? Veo que no has ingerido ningún alimento", dice con timidez.
Sonríes y le respondes, repitiendo sus palabras: " 'No has ingerido ningún alimento', suena muy formal, ¿no? Es que cuando estás tomando un trago, la comida va al final, like the end," dices, terminando en inglés.
"Bueno... arrancamos con un traguito, supongo que eso es un Moscow Mule, y al final nos mandamos una pizza," dice con un toque coqueto.
"¡Vale! Nos vamos pa' la terraza y charlamos," le dices, esbozando una sonrisa pícara.
Cuando suben las escaleras hacia la terraza de La Valentina, te quedas asombrada al contemplar el paisaje nocturno, con una iglesia colonial antigua como telón de fondo y las coloridas calles de Tlaquepaque. Las luces de la terraza crean un ambiente relajante y romántico, y a tu lado está el chico, y comienzas a admirarlo. Sus ojos tienen un toque de caramelo, pero debido a la oscuridad de la noche, se ven intensamente cafés puya. Su nariz es prominente, al estilo de Adam Driver, y su piel tiene un tono moreno, como café con un toque de leche. Alto y hermoso. Era simplemente perfecto.
Entonces, él te mira y se presenta diciendo: "Che, creo que debería presentarme. Soy Enzo, de Montevideo. Resulta que acabo de laburar en una película, o mejor dicho, soy actor, y..."
Sin embargo, lo interrumpes diciendo sorprendentemente: "¡Oh! Con razón ese acento. Me preguntaba de dónde eras. Anyway, me llamo (tu nombre) y soy de (tu país), pero llevo casi toda una vida viviendo en los Estados Unidos".
"Y... ¿por qué estás aquí?" él dice intrigado.
"Amo viajar, y la verdad es que no soy tan amante de Estados Unidos, así que decidí recorrer América Latina. Pronto me iré a España, ya que tengo amistades en Madrid. Quizás me quede allí y trabaje como maestra de inglés," respondes.
Enzo te mira con interés y te dice: "Me encanta que hagas eso— viajar y conocer el mundo. De verdad que sos muy afortunada. Ojalá te vea en Madrid, ya que laburo bastante por allá."
"Gracias, y tú, eres muy afortunado. Yo pienso que la actuación es un trabajo de talento y valentía," le decís orgullosamente, dejando un toque de coqueteo en tus palabras.
Mientras Enzo y tú están inmersos en una conversación sobre logros y conociéndose, entran los amigos de Enzo, visiblemente tomados. Un chico guapo y argentino le dice a Enzo: "Che, yo pensé que te habías desaparecido con la boluda," mientras otro chico le pregunta a Enzo: "Pero, ¿quién es esta chica, Enzo? Preséntela." Tú te ríes ante sus comentarios disparatados.
Enzo te mira medio avergonzado y suelta: "(Tu nombre), estos son mis amigos del alma y compatriotas, Matías, Agustín y Simón. Son más locos que una cabra en patines, pero los banco a muerte".
"Un placer," decís tímidamente, mientras Matías suelta con su típico humor: "Che, vos sos muy guapa, Enzo, me la cogiste, pero como amigo te la doy." Agustín te dice: "(Tu nombre), te dejamos a vos y a Enzo tranquilo, nosotros nos vamos para una discoteca. Enzo, me mandás un mensaje para saber que vos estás vivo. Y sí, vente chico’, que nos vamos, ciao." Todos se despiden de manera cómica y se encaminan hacia la discoteca.
Tú miras a Enzo riéndote, y él, medio avergonzado, te dice: "Los quiero, pero a veces se pasan." Tú te ríes aún más y le dices que no te preocupes. Después, Enzo te dice: "Vos tenés una sonrisa hermosa," y luego, como disculpándose, agrega: "Es que es verdad."
Después de la risueña conversación, Enzo te mira y sugiere: "¿Qué te parece si caminamos un poco por la calle? Seguro encontramos algo interesante." Asientes con entusiasmo, y juntos se aventuran por las coloridas calles de Tlaquepaque.
Enzo y tú se encuentran con unos mariachis que entonan “Y…” de Javier Solís. Sin dudarlo, Enzo te toma de la mano y te invita a bailar cómicamente en plena calle, siguiendo el ritmo apasionado de la música mexicana. Ríen y se divierten, creando un momento inolvidable mientras los mariachis continúan su serenata. La noche se llena de risas, música y la magia de ese encuentro espontáneo en las coloridas calles de Tlaquepaque.
Mientras caminan, se cruzan con una parada animada de tacos. Enzo sonríe y te propone: "(Tu nombre), ¿qué te parece si paramos acá y nos mandamos unos tacos? Y, obvio, los acompañamos con una Coronita." La idea te parece re buena, y los dos se acomodan en la parada, compartiendo risas y sabores locales.
Son las dos de la mañana y de repente llegan los tres amigos de Enzo, caminando en zigzag debido a la borrachera, y le gritan a los dos: "¡Enzoooo, boludo! ¿Nos vamos?" Enzo te mira y tú le dices: "No te preocupes, ya tienes mi número." Él te dice: "Me escribís cuando llegues a casa, y nos vemos mañana por un café, ¿vale?" Tú le respondes: "Claro, ¿cómo no?" y le das un beso, a lo cual Enzo responde profundamente. Mientras tanto, los chicos están gritando: "¡Enzoooo, ya cásate, cabrón!" La noche termina con risas, besos y la promesa de un encuentro al día siguiente.
#enzo x reader#enzo vogrincic#society of the snow#la sociedad de la nieve#uruguay#argentina#mexico#latina#fanfic#my writing#enzo vogrincic x reader
253 notes
·
View notes
Text
Claro que podemos
viajar en el tiempo
hasta detenerlo.
También volar,
vivir los sueños,
morir,
y nacer de nuevo.
Conocer la verdad
y hablar con ella
mientras te tomas
tu taza de café
en una terraza.
Revivir lo que fue
y lo que no,
porque incluso
se puede vivir más allá
de lo recordado.
Hablar con el niño
que fuiste,
y con el anciano
que te está esperando.
Sí,
claro que podemos,
porque de todo eso,
y de mucho más,
con lluvia o con viento,
con calor o en invierno,
en la playa
o en la cima
de la montaña,
se alimenta contigo
haciéndote compañía,
la poesía.
58 notes
·
View notes
Text
# interior de la casona, pasillos .
la fascinación que le causa toda la arquitectura y el diseño de la casa la llevan a aventurarse en algunas de sus salas. conoció la cocina, la terraza y en ese momento se detiene en el pasillo lleno de retratos. bora arruga el entrecejo cuando se queda pasmada frente a una de las pinturas. se inclina hacia adelante y acto seguido se aleja. habrá sido tanta su concentración que cuando se topa con alguien más, le provoca un ligero sobresalto. ‘ dios no te escuché ’ se disculpa de inmediato, ajustando el agarre alrededor del cristal. entonces, solo para calmar su inquietud señala el cuadro con un movimiento de mentón. ‘ va a sonar extraño pero ¿no te parece que nos está observando? ’ aunque su tono es serio, no evita agregar un tirón de comisura.
16 notes
·
View notes
Text
París.
Imagínate que lo logramos, que lo cumplimos.
Vamos de la mano por tus calles favoritas, descubro la ciudad del amor a través de tus ojos y me enamoro. No de las calles ni de la Tour Eifel, me enamoro de tu risa y tus gestos, de tu caminar y tu pensar. Me enamoro de ti mil veces en esas calles que nos observan. Y lo hago sabiendo que mi tren solo tardará unos días en llevarme a casa de nuevo, lo hago sabiendo que no habrá nunca un París tan bonito como el de tus ojos. Me enamoro de ti aún con el riesgo de no poder hacerlo de nuevo.
Nos pasamos las horas enredados en unas sábanas de un estudio perdido a las afueras de la ciudad, uno que puedo pagar y que tiene encanto. Cuento tus lunares mientras me hablas de mil cosas por hacer y de mil sitios que visitar. Te beso para no llorar por saber que nunca habrá tiempo suficiente de descubrir París juntos y tú me sigues el juego. Lo haces sin saber que mi corazón acaba de perder otro pedazo.
Por las mañanas me despiertas con un croissant de esos que me gustan y con un café cargado, porque apenas pego ojo contigo a mi lado. Yo te insto a salir a la terraza y disfrutar de la primera brisa matutina, mientras me fumo un cigarro y pienso en lo que te voy a echar de menos.
Los mediodías me dejas sorprenderte cocinandote mis mejores platos, aunque sea mediocre en la cocina. Nos bebemos unas copas de vino mientras charlamos de los planes de la tarde y, aunque sé que va a doler irme, dejo que la felicidad, de tenerte, me invada.
Las tardes son tan tuyas que a veces siento que solo sueño, que lo hago sin remedio. Siento que si cierro los ojos unos segundos al abrirlos volveré a una realidad sin ti. Pero cuando los abro sigues ahí, con tu sonrisa eterna diciéndome que es preciosa, la ciudad, aunque solo me mires a mi. Yo te digo que eres un romántico y me miras fatal. Sonrío tanto que duele.
Las noches son de los dos, llenas de locura y sin sentidos. Llenas de amor. Ponemos ese candado en el puente, aunque ya no se pueda hacer. Luego corremos por si llega la policia, aunque tenemos un plan B si nos pillan. No dejo de reír mientras corremos por esas calles tan bonitas que tienen escrito tu nombre en todas sus fachadas. Llegamos a un bar cualquiera y me lo paso mejor que en toda mi vida. Solo porque tú estás ahí, riéndote de algo que te cuento y de lo mal que bailo. Porque lo hago fatal y, aún así, sigo bailando. Todas la noches cambio la canción que me gusta para nosotros, porque soy así. Porque no hay una que sea lo suficientemente buena para definirnos, para escucharla y sentirte en cada nota.
El último día te pido que me acompañes a la estación, porque irme supone demasiadas cosas. Cuando veo que mi viaje se termina lloro, de forma silenciosa porque mi corazón se rompe sin hacer ruido, y tú secas esas estúpidas lágrimas que no dejan de caer. Te abrazo tan fuerte que siento que te voy a romper algo, seguramente lo hago. También te beso, despacio y con todo el amor que tengo, para que me recuerdes así. Inestable pero llena de cosas bonitas, llena de ti y tu sonrisa. También lo hago para recordarte así, calmado y etéreo. Tuyo.
El tren llega y cojo la maleta, te doy un último beso y te digo que nos volveremos a cruzar, aunque lo más probable es que no lo hagamos. También te digo que te quiero y que te cuides, que encuentres a alguien que no se parezca a mi en París, que por favor no se asimile en nada a mi. Y me voy, me subo a ese jodido tren sin alcanzar a escucharte, porque si lo hago me quedaré y no puedo, no debo.
El viaje es tan largo que siento que me voy a dormir en cualquier momento, pero no lo hago. Me paso el viaje escuchando todas esas canciones y viendo nuestras fotos. También me río de vez en cuando, recordando todas esas locuras y sin sentidos que nos hacían tan nosotros. Y lloro, mucho. Porque París es bonito sin ti, pero contigo es precioso, único. También lo hago porque se que te enamorarás de alguien que valga la pena, que te lo pueda ofrecer todo sin pestañear, sin dudar. Y sonrío porque sé que, a diferencia de mi, serás feliz con otra persona.
Katastrophal
#citas#notas#frases#escritos#caostalgia#textos#pensamientos#amor#katastrophal#febrero2023#parís#enamorarme
385 notes
·
View notes
Text
📍 terraza.
está a un costado, observando todo en silencio. acaba de terminarse la segunda copa pero ya oyó que el límite son cuatro y, en lo que piensa cuán estúpido es aquello, decide mejor entretener la boca con un cigarrillo. claro, si su encendedor funcionara. podría ir a buscar otro a su habitación (tiene de sobra), pero sabe que si lo hace ya no volverá. no le queda otra que pedir un favor. "disculpa. ¿tienes fuego?"
19 notes
·
View notes
Text
Fantasmas bailando en la terraza, sentirán vergüenza ajena al ver que no me puedo levantar de la cama porque algo falso está muerto? 🪦
21 notes
·
View notes
Text
⚘ 𝐓𝐄𝐑𝐑𝐀𝐙𝐀 ︧ izzak encuentra a jintao dormitando en la terraza ︡
@jintaov ∕ en ocasiones psiquis conducía a áreas adicionales de modo arbitrario. enclaustrando las voces compasivas de subconsciente, invitándolo a caminar en círculo. todavía no recibía respuestas, siquiera la pretensión de que pudo leerlos. era indiscutible que estaba enfurecido, revolcándolo en inquietantes sentimientos que pudieron salirse de control. reloj de muñeca marcó las tres de la madrugada; los pasillos de la residencia fueron de absoluto silencio, recorriéndolos cabizbajo. afortunadamente culminó otras de las revisiones con su viejo maestro en el tiempo acordado, dirigiéndose específicamente a la terraza por aire fresco. por dos días no había dormido, rompiendo nuevamente récord personal. pero desde que abandonaron francia, las cosas resultaron patas arribas. incluso no reconocía su reflejo en el espejo, preguntándose qué demonios pensaba. ¿para eso se inscribió? ¿una rebelión sin sustancia? ridículo, no quiso escuchar más del tópico, sobando antebrazos desnudos a causa del viento frío. mala idea no cubrirse lo suficiente, doblando de talones para regresar hasta que visión periférica recaía en silueta al fondo. por impulso se frotó hinchados párpados, abriéndolos y cerrándolos en busca de claridad. a la distancia pudo articular el nombre de figura aparentemente dormida, acudiendo a este con el menor ruido posible. era tardísimo, ¿por qué no iba a su habitación aún? muchas interrogantes pasaron como flashes detrás de mirada, arrodillándose para adecuada revisión. naturalmente sus carmines fueron tirados por adorable imagen, posando diestra en rodilla contraria. ‘ hey, jintao. no puedes dormir aquí. ‘ musitó, cuidadoso de asustarlo o incomodarlo, aunque como actuó los últimos días, apostaría que lo ignoraba a propósito. ‘ ¿estás bien? ¿por qué viniste aquí tan tarde? ‘
8 notes
·
View notes
Text
‧₊˚❀༉‧₊˚. Mi personaje está cuidando las plantas de la terraza y pide que le ayude a regarlas con agua. @booara.
' pero pídemelo más bonito. ' responde el inglés con gracia, repitiendo lo que ella le había dicho hace apenas unos días por mensaje en el chat de una clase que tenían en común, aunque sin esperar respuesta, se levantó del asiento y tomó una regadera, poniéndole el agua suficiente para comenzar a esparcirla en las plantas que lo necesitaran.
8 notes
·
View notes
Text
Como todas las tardes, Kai se escabullía en el colegio privado para señoritas , en donde la menor de los Kinomiya estudiaba. Ambos se reunían en la terraza pues era un lugar demasiado solitario, todas las demás alumnas murmuraban que solía rondar un fantasma, y de alguna manera, tenían un poco de razón.
En aquel atardecer, no estaban solos, pues un pequeño minino color ámbar se había acercado a ellos con la esperanza de comer un poco, por fortuna, Mitzy había guardado la leche de su almuerzo, la cual sirvieron en un plato que ella tomó prestado de la cocina del instituto.
Mitzy observaba al pequeño felino disfrutar de su comida, pensó en adoptarlo, pero aun no estaba segura de quedarse en Japón los siguientes meses ; no le había querido decir nada a Kai sobre el próximo campeonato, pues sabía que Hiwatari también tenía muchas cosas en la cabeza, querer ganar este campeonato, pero lo más importante, poder vencer a su hermano. Estaba tan sumergida en sus pensamientos que no se había percatado de que Kai la miraba y, si no es porque el pequeño gato crispó su pelaje y lanzó un gruñido, no hubiera notado que Kai estaba a escasos centímetros de ella.
-auch- chistó Kai.
Mitzy volteo frunciendo el ceño - Espantaste al pobre gatito- pero hizo pucheros cuando en uno de los dedos de Kai notó una muy pequeña herida que se pintaba de escarlata - ¿Estás bien?- preguntó con presura al tomar su mano y examinarla.
Kai esbozó una leve sonrisa al momento de retirar su mano para tomar el mentón de Mitzy y alzarlo un poco para ver el pequeño sol en sus ojos - Vaya, ahora parece que todo el mundo está ene mi contra- susurró mientras la miraba con ternura y deseos de besarla.
Las rosas estallaron pintando las pálidas mejillas de Mitzy, sus labios de durazno se separaron un poco, como invitándolo a juntar sus labios.
Sus corazones palpitaban demasiado rápido, sabían que en algún momento romperían sus pechos para salir y lograr fundirse en uno solo.
-Yo nunca estaría en tu contra- susurró al momento de cerrar sus ojos esperando el contacto de ambas bocas, pues sintió el cálido aliento de Kai sobre su mejilla, acercándose con aquel peligro excitante.
-¿Sabes Kai?...eso necesariamente no es verdad- la voz varonil de alguien sorprendió a ambos.
Mitzy aún no lo sabía, pero su hermano mayor había arruinado aquel beso a propósito.
Bakuten shoot beyblade G-Revolution espisodio 4
(Fake SS por : Alondra Mc)
#kaihiwatari#beyblade#kaibeyblade#kaixoc#g revolution#oc#bakutenshootbeybladerising#bakutenshootbeyblade
3 notes
·
View notes
Text
Granada, 2022 | Esteban Kukuriczka
Para: el individuo que me recomendó escribir sobre Adolfo Strauch *mañana escribiré del otro Strauch XD
~
Estás sentada en la terraza de un café en Madrid, reflexionando sobre la vida con tu taza de café y un cigarrillo. Después de días de indecisión sobre qué hacer con tu vida y recibir recomendaciones que no te convencen, te encuentras en una situación financiera precaria, con casi nada en tus manos.
Sientes el deseo de escapar y explorar una ciudad diferente, con un estilo único, algo que se asemeje a la esencia nazarí. De repente, ves un cartel que destaca la belleza y la arquitectura de Granada. Con el poco dinero que posees, tomas la decisión de comprar un billete y partir hacia Granada al amanecer.
Al día siguiente, te despiertas a las 4 de la mañana, listo para la nueva aventura. Empacas tu cámara Polaroid, metes tus pertenencias en la mochila y esperas mientras un Cabify te recoge para llevarte a la estación de tren.
Una vez en la estación, te percatas de que es muy temprano, así que decides esperar con calma la llegada del tren. Cuando llega la hora de abordar el tren Iryo, te diriges al carril cinco y te sientas. Con tranquilidad, te pones tus audífonos y comienzas a escuchar tu canción favorita. Sorprendentemente, el tren está prácticamente vacío, no tienes a nadie a tu lado ni enfrente de ti.
Mientras miras por la ventanilla del tren, contemplas la belleza del paisaje en el camino hacia Andalucía. La canción que estás escuchando envuelve tu vida con un toque romántico, y de repente, una sonrisa ilumina tu rostro. En ese momento, escuchas una voz masculina que te dice: "Sos prácticamente un protagonista". Tratas de ubicar de dónde proviene la voz, ya que no hay nadie frente ni a un lado de ti, pero percibes un reflejo en la ventanilla de un chico que está detrás de ti.
Tú le preguntas, "¿Disculpa?" En respuesta, el chico se levanta de su asiento y se acerca a donde estás sentada, poniéndose justo enfrente de ti para poder hablar cara a cara.
"Perdona," él te dice, "Me llamo Esteban y vos?" te pregunta. Sin embargo, tú le respondes con tu nombre de manera indecisa.
"¡Qué lindo nombre tenés! Y, ¿vas para Granada o sos de Granada?" Esteban te pregunta. Le respondes que estás escapándote hacia Granada y que eres de tu país. Él comenta, "¿Cómo que de escapada, como de alguien?" y tú te ríes levemente, aclarándole que simplemente estás buscando algo significativo. Él te dice, "¡Qué raro, no?" y tú le preguntas por qué. Esteban responde, "Es que eso es algo que un protagonista haría", dejándote pensativa mientras intentas entender a qué se refiere.
Luego, le comentás a Esteban que pensabas que cada individuo es su propio protagonista. Sin embargo, Esteban te responde, "Vos tenés razón, pero nadie es capaz de dirigir su propia vida. Hay que tener valentía para poder hacerlo". De repente, te reís y le decís, "¿Eres muy filosófico, no?" y Esteban te responde, "Creo que vos me hacés sentir filosófico".
Ambos se ríen y de repente, un miembro del personal pasa por el pasillo ofreciéndoles café. En tono cómico, le comentás a Esteban, "Creo que el café te ayudará a profundizar un poco más", a lo que él responde, "Pues, perfecto".
Ambos disfrutan del café y tú contemplas el paisaje por la ventanilla. Sin embargo, notas una mirada fija hacia ti. Miras a Esteban y le preguntas, "¿Qué?" Él te responde, "Es que, vos sos única, es decir, guapa". Tímida, le agradeces, pero luego, en el silencio, te quedas mirándolo y te das cuenta de lo guapo que es. Su cabello tiene unos reflejos rubios, como rayos del sol, sus ojos son color café, y está lleno de pecas de miel. Luego, tus ojos se desplazan hacia sus brazos, observando las venas que van hacia sus manos rojizas, las cuales se ven cálidas.
Después, Esteban te interrumpe y te pregunta, "¿Qué?" Tímidamente, le respondes, "Nada."
Esteban y tú quedan en pleno silencio, cada uno contemplándose en silencio. De repente, se conectan a través de sus miradas, y él te dice, "Me gustaría salir contigo".
Confundida, le respondes, "¿Aquí en Granada o...?" y él te interrumpe diciendo, "Ambas".
Fin
#society of the snow#la sociedad de la nieve#esteban kukuriczka#fanfic#my writing#uruguay#argentina#reader x Esteban kukuriczka.#enzo vogrincic#spanish
161 notes
·
View notes
Note
Facilísimo explicar la remera de Radiohead: a) Un día te quejaste que la última remera vieja que usabas como pijama era más agujeros que remera y Enzo exitado tan sólo por la imagen mental de vos usando una remera suya y nada más no dudó e insistió en ofrecerte una de sus viejas remeras, asegurándote de que tiene otras en igual o peor estado para usar en casa. b) Una noche te invitó a su casa a cenar. Mientras estaban a punto de empezar a cocinar él insistió en darte una remera vieja como delantal, ya que no tenía uno para prestarte. Dijiste que no era necesario, que no querías arruinar su ropa, pero el insistió, diciendo que era vieja y no le importaba si se manchaba. Para cuando terminaron de preparar la comida habías ensuciado un poco la remera, por lo que insististe en lavarla y prometiste devolvérsela al día siguiente. Enzo insistió que no había problema, que te la quedaras. La lavaste pero fingiste demencia y nunca se la devolviste Enzo hizo lo mismo y nunca te preguntó por su remera. c) (mi favorita) La viste un día en la terraza junto al resto de su ropa secándose y no te resististe; la tomaste y volviste corriendo a tu departamento para que nadie te pudiera ver. La próxima vez que Enzo se mete a tu departamento sin que te enteres encuentra esa remera que le había desaparecido en tu armario. No sabés por qué, pero la próxima vez que te lo cruzás, lo notás de muy buen humor y sonriendo mucho más que otros días. Esperás que haga algún comentario sobre la prenda que le desapareció en la terraza, pero para tu alivio no menciona nada.
Me encanta la opción B pero for the sake of the plot elijo C.
La remera todavía tiene su perfume y cada vez que la usás (poniéndotela para dormir, usándola como funda de tu almohada o sólo para sentirlo a él mientras te tocás) sos muy cuidadosa porque no querés perder el último rastro que le queda. Considerás comprar su perfume -porque todavía recordás la marca exacta- sólo para poder sentir que él está con vos cada vez que te la ponés, pero...
Lo que no sabés es que después de descubrirla entre tus cosas, durante sus próximas expediciones él siempre lleva una muestra de su perfume e impregna absolutamente todo con su aroma. La remera, tu almohada, tus abrigos, los cojines del sofá. Es una magnífica forma para manipularte y cree que si otros hombres perciben perfume de hombre en tu ropa, se vana a mantener lejos.
Plus: si estás tan familiarizada con su perfume (por supuesto que la dosis empieza siendo imperceptible) no vas a sentir nada diferente cuando él haya entrado en tu casa.
3 notes
·
View notes
Text
Vacaciones en Camboya (Vol. 3)
"¡Anda a buscarme una chela!” sugiere coquetamente Enriqueta apenas llegamos al cumpleaños de su amigo Vicentito. Enamorado, parto raudo para no importunar a mi sedienta polola.
Aunque soy ciego como topo, por motivos estéticos evito el uso de gafas en reuniones sociales, pichangas y momentos de intimidad: por eso me cuesta encontrar la maldita mesa de terraza donde se supone está depositado el alcohol. En medio de un jardín más oscuro que el orto del Cerdo, vacilo un par de veces, choco con un invitado y me pierdo tres veces antes de dar con la dichosa cerveza.
Tras servir dos vasitos regreso orgulloso donde mi amada, a quien le sonrío a lo lejos con mi mejor cara de esclavo. Cuando me detengo a medio centímetro de ella, sin embargo, puedo notar que mi alegría no es correspondida en lo absoluto: la cara de nalga le llega hasta el suelo. Ipso facto, y sin mediar explicación alguna, me cruza la cara de una cachetada y se manda a cambiar. “¿¡Pero qué chucha pasó!?”, le inquiero al horrorizado Vicentito, quien me informa que Enriqueta jura haberme visto correrle mano a una lola. En efecto, mi torpe maniobra en la oscuridad -tropiezo incluido- ha sido interpretada como un vil manoseo.
Urgido, entro en la vivienda, donde encuentro al amor de mi vida apuntándome con el dedo. “¡Degenerao culiao, te voy a sacar la chuchaaaaagh!”, chilla. Al ver que se acerca con la manita abierta -soy hueón, pero no tanto- salgo corriendo para que no me aforre otro coscacho. “¡Pero si soy miope amooooor, sabís que no veo ná!”, informo. Comienza entonces una persecución estilo Benny Hill por toda la casa; el público presente, que ya ha presenciado shows similares, alienta con las palmas hasta que mi niña me da alcance. Y paf.
“¿Bailemos?”, le pregunto luego de que me abofetea cuatro veces hasta dejarme los cachetes bien coloraditos. “Bueno ya, pero igual tenís que saber ya no te quiero más, reculiao… apenas nos vayamos de acá te pateo”, amenaza.
Danzamos. Cada cinco minutos, Enriqueta recuerda mi traición y me pega; mientras, yo muevo la patita intentando hacerme el simpático, como si fuera lo más normal del mundo bailar a cachetada limpia. Vicentito, quien es muy decente, trae más tarde a la supuesta víctima de mi ultraje: la muchacha, a quien no conozco ni en pintura, declara que no recuerda que durante esa noche -ni ninguna otra- yo le haya tocado el poto ni otras partes blandas. Cuando los dos se marchan, la loca de mierda mi amada polola me aforra otra vez por obligar a un buen tipo a mentir por mí.
Así avanzan las horas. Desesperado y con la cara hirviendo, le sigo suplicando perdón a Enriqueta y prometo mejorar: por desgracia, como siempre, la muy diabla me hace caso y decide darle una nueva oportunidad a nuestro amorsh.
#chilegram#cuentos#escritos#frases#chile tumblr#chilensis#tumblr chilenito#tumblr chilensis#chilean#andateala.com#instachile#chilenita#chileno#chile#tumblr chile#chilephoto#chileart#artists on tumblr#cuento#dark humor#humor negro#humor
3 notes
·
View notes
Text
Lo único que no quiere es que lo jodan con la derrota de Sterling, que sabe que al final del día es una competencia de porquería, pero igual le afecta porque es otra sumatoria más de cosas que no está pudiendo soportar. Trago al gin tonic, humedece los labios y dice: —Nunca he sido buen actor. —Que a lo mejor sabe manejar los gestos del rostro, pero no le sale con lo que dice la mirada. La hojita que indicaba su papel quedó por ahí en algún lugar y está bastante desinteresado en atenderlo. Además, tiene malos ánimos. Sin girar la cabeza, todavía la vista en el piso que se ve a través de los barandales de la terraza, pregunta: — ¿A ti te sale?
103 notes
·
View notes