Tumgik
#ellos pueden cerrar un poco el culo
antotheethnographer · 2 months
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Va sonar falso, pero no me importa.
Tengo un primo de esos a los que uno quiere porque compartiste cosas creciendo, pero que de adulto es un boludo que por como se expresa te dan ganas de hacer una grieta del tamaño del cañón del atuel entre el municipio en el que vivo y el suyo. Es la clase de persona que cree que no votar a la ultraderecha te hace un inútil y vago de mierda que no quiere laburar. Su abuelo, al que no conoció, era judío, pero él es antisemita. Trabaja de lo que siempre quiso trabajar (es aprendiz de camionero), pero aspirar a trabajar de algo que no te deja dinero es de estúpido y si lo hacés te merecés que te saquen la obra social.
Mi primo es pariente lejano de Enzo Fernández, y aunque lo detesta con todo su corazón de libertario ortiva, seguramente va a defender los dichos racistas e imbéciles porque es parte de la mitad de la población que interpreta que un derecho ganado o el reconocimiento a una parte de la población que está marginada y alterizada es una molestia que le impide hacer chistes. O que le están sacando algo a él que les ineherenteme propio.
No seamos boludos y reconozcamos que tenemos un problema. No te tiene que gustar lo que dicen las comunidades, es hasta esperable que sus lógicas y las tuyas choquen, pero por lo menos tomate el laburo de escuchar. Buscá colectivos que tengan redes sociales, viajá al interior (del país o de PBA), hablá con gente de otros barrios (CABA), o como mínimo leete un paper de la temática que quieras subidos al archivo de conicet o cualquier revista (te prometo que no usan las mismas categorías que los yanquis).
Informate, debatí, no te quedes con una sola versión, y no caigas en esencialismos. A ver si así le damos menos razones al resto del planeta para tratarnos de nazis.
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astronena · 3 years
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Sex tape Yoongi
Resumen: sabes que yoongi tiene experiencia en esto, y decidis filmarte por primera vez con él para que no te extrañe cuando se vaya.
Warnings: Yoongi idol, sexo intercrural, sexo frente al espejo, nalgadas, menciones de ataduras, orgasmo femenino y masculino, Yoongi te acaba en la boca.
Tumblr media
Por la manera de moverse, la manera en saca el tema mientras están los dos en su cama, iluminados solo con la luz de una lámpara, sabes que Yoongi hizo esto con otras mujeres y no lo oculta.
No estás celosa, te da cierta seguridad que otras parejas no pudieron darte, que sepa lo que quiere hacer y que puede guiarte.
Cuando te acurrucas en su pecho, poniendo tus manos frías debajo de su remera, riendo porque se queja, le decís que te gustaría probar.
Por una semana lo llenás de preguntas, y  responde con mucha paciencia cada inquietud sobre el tema ¿Con cuántas chicas? ¿Borraste todos los vídeos una vez que ya no salieron? ¿Hace mucho que querés hacer esto?¿Cuando querés hacerlo?"
"Dos mujeres"
"Por supuesto que los borré, ellas también, no soy un cerdo"
"Empecé a querer ver cómo éramos desde esa vez que me arañaste la espalda"
"Cuando vos te sientas lista"
Pero ahora estás más consciente de que puede pasar en el momento que sea, porque según Yoongi, va a pasar cuando lo sientan y es mejor si se da de manera orgánica.
"Y si no lo sentís, está bien"
Con él siempre es sobre confianza mutua.
Es confianza que se ganaron ambos, cuando le decís que te desate, Yoongi te saca las esposas sin pensarlo, cuando decís que te duele, él para.
 Cuando te dice que no tiene ganas, no insistís.
Ahora es decisión tuya, si decís que saque la cámara, lo hace, si decís que deje de grabar, para.
Y si te pide que borres el video, lo haces sin pensarlo.
Es confianza absoluta saber que no vas a compartir el video con nadie, que algo que podría poner en juego su carrera, es solo para ustedes dos.
Es confianza mutua.
Pensás en eso cuando estás en su cocina y te abraza por detrás, no con cariño sino apoyando su centro en tu cola, tocando tus caderas y besando tu cuello. Arqueás tu espalda dándole espacio para que se pegue mas a vos, escuchás sus suspiros mientras levanta tu falda cuadrillé hasta tu cintura y mueve sus caderas casi no estando ahí, pero sintiéndote de todas formas.
Pensás en la cámara  profesional que está apoyada en la mesa y guardada en su estuche, en como Yoongi siempre está acostumbrado a actuar frente a las cámaras, y en cómo su comportamiento cambia de una entrevista a la vida real, como es más relajado.
Movés tus caderas para poder sentir su media erección pensando que quizás delante de una cámara Yoongi sea más serio, y te trate de una forma más dura, como es en las entrevistas.
Y la idea hace que más calor recorra tu cuerpo, te hace agarrar sus manos y ponerlas abajo de tu remera para que pueda sentir que no estás usando nada, y Yoongi suelta un “Mmmm” mientras con sus dedos acarician tus pezones.
Su lengua cálida en tu cuello, sus caderas apretándose contra vos, sus manos bajando por tu cuerpo hasta  agarrar la ropa interior y tironear de ella, bajándola lo suficiente para que te puedas doblar sobre la mesada y para que él pueda bajar sus pantalones y el boxer.
Una mano separando tus muslos y corriendo la tanga mojada para un costado, sus dedos acariciando en círculo tu clitorís para mojarte más.
La cámara está apagada y Yoongi se toma su tiempo para hacerlo de forma más lenta, para buscar tu boca y besarla mientras gime o apoya su frente en tu hombro.
Y te preguntás si con la cámara prendida va a ser diferente, si va a mirarte de otra forma, si va a dejar llevarse menos como está acostumbrado, si va a tocarte con más fuerza.
Apretás las piernas haciéndolo gemir en tu oído, pero entre movimientos desesperados por sentir alivio en el otro, encontrás cariño y cuidado, cuidado de no dejarte marcas ni hacerte doler.
Y Acabás mirando la cámara guardada en el estuche.
Una semana después juntás el valor para decirle que querés hacerlo dos noches antes de que se vaya, así puede llevarse el video con él.
 Se lo decís mientras están en la ducha juntos, el vapor cubriendo sus cuerpos y lo mirás a los ojos bajando tu mano por su abdomen, trazando con un dedo el pequeño hilo de vellos debajo de su ombligo. Subís la mirada y se relame los labios, se acerca y te besa, tus espalda chocando contra las baldosas de marmol mientras reís y lo sentís sonreir.
“Sos mala, eh”
Y dos noches antes de que se vaya, lo esperás en tu departamento. Tenés tu propia cámara y la acomodas en un trípode frente al tocador con un espejo en frente.
Y Yoongi llega tarde, con una remera negra y joggings grises, te pide disculpas y te da un beso cuando cerrás la puerta.
Llevas un remeron que le encanta y cuando entran a tu habitación y ve la cámara, te mira y sonríe pero respira hondo y te dice “Si en cualquier momento querés parar, solo decilo”
“Sí en cualquier momento, no te sentís cómoda, paramos. Si después te arrepentís y queres borrarlo, lo borramos”
Y es Yoongi sin una cámara delante, siempre cuidadoso y mirándote con cariño, poniendo tu seguridad primero.
Ahora te toca a vos “Si no te sentís cómodo con que yo tenga el video, lo entiendo”
Pero te mira y sonríe, porque confía en vos. Son meses desde que lo conociste en una fiesta y ataste sus muñecas a la cama del hotel con su corbata, meses desde la primera vez que dejaste que te atara a vos y usara su cinto porque habías mirado a un amigo suyo.
A veces usando la palabra de seguridad que tenían ambos, para decirse cuando cruzaban una línea invisible.
“Tetera” dijiste.
Yoongi te dijo que sí con la cabeza.
Y por lo que acordaron esta vez, es algo ligero, porque puede ser abrumador. Y, si se sienten cómodos para una próxima vez, pueden intentar cosas diferentes.
Está sentado  en la punta de tu cama con las piernas abiertas, te parás entre medio mirándolo desde arriba, acariciando su cuello blanco, algo prohibido para marcar, un límite impuesto entre ambos.
La cámaras está apagada mientras te sacas el remeron y dejas ver tu lencería, nada lujoso, un brasier transparente y negro haciendo juego con la parte de abajo, porque sabés por experiencia que mantener algo sencillo ayuda a los dos a relajarse un poco.
Su mano acariciando tus caderas y enrollando sus pulgares en los elásticos de la tanga negra, haciéndolos golpear contra tu piel,sonriendo.
“¿Es nuevo?”
Sacas sus manos de tu cuerpo, haciéndote la ofendida y te alejas caminando al espejo, arreglando tu pelo.
"Lo use varias veces pero nunca me prestás atención"
Y Yoongi se tapa la cara con ambas manos pero lo ves sonreír detrás de sus dedos. Se pone de pie y te abraza por detrás, se miran en el espejo, él completamente vestido, estirando tu brazo para acariciarle el pelo 
"Siempre te presto atención, este conjunto es nuevo"
Sonreís y decís que sí con la cabeza, estirando el cuello para un lado, pero no sentís sus labios sobre tu piel.
Sentís como se desabrocha el pantalón de poco, mientras miran en el espejo cómo caen el piso y después se saca la remera negra quedando en boxers.
Cuando Yoongi prende la cámara, solo queda enfocado un cuadro de tus caderas para abajo, mueve la cámara para  que enfoque tu frente mientras ustedes se miran en el espejo frente a su cama, y vuelve a estar atrás tuyo.
No besa tu cuello pero sabés que quiere, y cerrás los ojos mientras sentís. Con la yema de sus dedos tibios, acaricia la espina de tu espalda recorriendo el camino, y tu piel se eriza a su contacto. 
Antes de darte cuenta estas arqueando un poco la espalda, buscando fricción, mientras te imaginás que está sonriendo.
En la cámara, queda registrado como sus dedos recorren tu cadera con toques ligeros, fantasmeando la zona, tocando un poco del aire que rodea tu piel y haciendo mover tu cuerpo contra su mano, necesitando su roce.
Sintiendo como tu cuerpo sentía de a poco calor.
Pasa los dedos por tu espalda, con un poco más de presión, haciéndote suspirar y apretar un poco las piernas. Siempre te sorprende como tu cuerpo responde al suyo con un simple toque. Necesitas más, pero la espera de esto también te hace desearlo más, elevar tu temperatura. Yoongi desabrocha tu brasier y con delicadeza acaricia tus hombros como si tuviera que medir cada caricia para no irritar tu piel y baja las tiras hasta sacarlo casi por completo.
Acariciando la zona y él mismo suspirando de a poco.
Con los ojos cerrados dejás el corpiño en cualquier lado, y volvés a enfocarte en las sensaciones. En como Yoongi pasa sus dedos por tu cuello y cómo sentís calor, cosquilleo en las puntas de los pezones, queriendo que se acerque más a ellos, esperando.
Desliza los dedos por tus brazos y sube por tu torso tocando el aire que rodea tus pechos y, vos te movés buscando sus manos, chocando su palma contra tus pezones.
 Estremeciéndote frente al contacto, queriendo que acaricie con más fuerza.
Acaricia con delicadeza y cierra sus  dedos contra tus pezones jugando con ellos hasta endurecerlos. Ahora acercando su cuerpo más a el tuyo.
Entre caricias va bajando hasta acariciar tu culo y abrir de a poco tus muslos.
En la grabación no se escucha, pero cuando la ves semanas más tardes, recordás cómo mientras sus dedos blancos fantasmean sobre tu pie te dijo, con su voz grave: ¿Puedo?
Y en respuesta abrís más las piernas, bajas tu ropa interior hasta que quedan suspendidas en tus rodillas, inmovilizándote un poco.
Yoongi te gira para que quedes frente a la cámara, sus manos contrastando con tu piel y solo podés ver esto. Sus manos venosas acariciando tus piernas y abriéndolas un poco.
Se escucha tu suspiro y su siseo cuando arqueas tu espalda buscando sentirlo contra vos, pero Yoongi se aparta un poco, se baja los boxers dejándolos en el suelo.
En la grabación no se puede ver pero apoyas tu cabeza sobre su hombro y lo dejas manejarte, dejas que agarre su pene medio erecto y lo deslice entre tus piernas, rozando tus labios externos, haciéndote cerrar las piernas con fuerza.
Respondiendo con un 'mmmm' desde lo profundo de su garganta.
En el video se ven tus piernas cerradas, sus manos venosas apretando con fuerza en tus caderas y la cabeza de su pene cada vez que Yoongi mueve sus caderas. Rozando tu clítoris lo suficiente para calentarte pero no para hacerte sentir bien.
Mueve sus caderas contra tu cola, su longitud deslizándose sin entrar en vos y él suspirando en tu cuello, mientras te mojas cada vez más.
Se escucha tu piel golpeando contra la suya y los suspiros. Tus caderas se mueven buscando algún alivio pero Yoongi las sujeta con fuerza en su lugar, no permitiéndote que llegues, volviéndote  más sensible a cualquier roce.
Besas su cuello y le pedís por favor, esto sí se escucha en la grabación. Se escucha como pedís que por favor te toque, y en la cámara, se ve como arqueás el cuerpo mientras una de sus manos te acaricia la cintura hasta llegar a un pecho y pellizcar tu pezón haciendo que aprietes más las piernas.
Y estás tan frustrada que abrís las piernas y negás con la cabeza, porque no es justo. No es justo que él pueda sentir alivio mientras vos te frustras cada vez más.
"Cerrá las piernas"
Negás con la cabeza en su cuello.
"No"
Y mientras te suelta, la cámara graba como yoongi se toca, cómo mueve su mano por la longitud de su pene con lentitud, la cabeza roja y goteando un poco.
Negas con la cabeza pero miras la cámara y caminas con pasos medidos y lo miras mientras sacas la ropa interior. Lo besas mientras tu mano cubre la suya y lo masturbas con lentitud.
No se escucha pero entre besos te pregunta si vas a ser buena para él.
"Sí" 
Y te das la vuelta apoyando tus brazos en el tocador con el espejo en frente.
Miras tu reflejo, los labios hinchados y las mejillas sonrojadas.
Apoyas los brazos y arqueas la espalda, lo miras sobre tu hombro y lo ves mirando la cámara. Poniendo la misma cara seria que tiene en entrevistas, moviéndose con la misma confianza que tiene cuando está arriba de un escenario.
Con esa misma mirada, acaricia una nalga varias veces y cerrás los ojos cuando sentís la palma de su mano golpeando de lleno. 
Llenándote de vergüenza, haciéndote apretar las piernas y luego sintiendo el escozor en una mejilla.
Y el placer llega antes de la segunda nalgada, como si tu cuerpo liberara las endorfinas emocionado porque sabe lo que está a punto de llegar.
Serio, lo podés ver por el espejo. Acaricia la nalga rosada y da otro azote, un poco más fuerte. 
Gemis y tus ojos se llenan de lágrimas, pero te moves dejando tu cola más al aire, diciendo de forma silenciosa que está bien.
Miras a la cámara y arqueas un poco más la cola, dejándote expuesta, sintiendo calor en todo el cuerpo, porque es algo que yoongi va a ver más tarde y querés lucir bien.
Así que decís su nombre, calentandolo un poco más. Gemis un poco más exagerada mientras acaricia la otra mejilla y da una nalgada.
Miras tu reflejo y el suyo antes de pedir por favor.
Yoongi pasa el dedo índice recorriendo tu columna, hasta subir por la nuca y envolver sus dedos en tu pelo. Te agarra y te atrae hacía él.
Tenes la boca abierta y sisas frente al pequeño dolor, pero miras la cámara y sacas pecho. Lo miras entre tus pestañas y con una mano recorres tu pecho hasta llegar a tu pelvis, moviendo las caderas contra Yoongi, sintiendo su erección contra tu cola, la piel rosácea sigue sensible y escociendo.
Antes de entrar, Yoongi da golpesitos un par de veces en tus labios con la punta de su pene. Suspiras y cerrás los ojos bajando dos dedos desde tu pelvis hasta tu clítoris ya sensible.
Yoongi entra y dibujas círculos mientras soltás gemidos apoyando tu cabeza en su hombro.
Tocandote mientras miras a la cámara, porque sabes que lo va a calentar.
"Ah ah"
Con sus manos envueltas en tu cadera, Yoongi se mueve con fuerza y precisión, mirando sus reflejos en el espejo y soltando un gemido.
Encontras sus movimientos a medio camino y tratas de mover tus caderas en círculos pero él te sujeta en tu lugar con fuerza, tomándote de las caderas mientras se estira para pasar la lengua por tu cuello.
Sentís más calor en todo tu cuerpo y gemis mientras muerde la piel con delicadeza haciendo que aprietas la pelvis alrededor de su pene haciéndolo suspirar y moverse con más fuerza.
Suspirás su nombre y él corre tu mano de lugar arrebatándote el orgasmo que estabas construyendo. Fruncís el ceño, frustrada casi enojada, pero con rapidez reemplaza sus dedos por los tuyos. 
Marcando con círculos tu clítoris sensible, tus piernas tiemblan un poco porque mueve los dedos con rapidez. Las olas de calor y frío invaden tu cuerpo, querés cerrar las piernas pero él no te deja y de pronto una expresión cruda de placer se construye en tu cara mientras llegas al orgasmo, con los ojos cerrados y las piernas temblando, mientras él sigue moviendo sus dedos durante todo el transcurso.
Mientras te agarrás con fuerza al mueble con una mano y la otra sujetando con fuerza su brazo. Llevas sus dos dedos a tu boca, probándote a vos misma y pasando lengua como si fuera la cabeza de su pene.
Yoongi mira el reflejo de ustedes en el espejo y sus movimientos se vuelven más erráticos mientras se muerde el labio para no gemir con demasiada fuerza, y empuja sus dedos más profundo en tu boca, mientras movés la cabeza de arriba a bajo.
Se acerca a tu oído.
"¿Te puedo acabar en la boca?"
Te sacas sus dedos de la boca.
"Lo que vos quieras"
Y Yoongi se mueve con más fuerza, casi llegando al orgasmo con solo darle el permiso de hacer lo que se le dé la gana con tu cuerpo. 
Gemis casi quejándote, porque tú cuerpo está muy sensible a cualquier roce, y antes de que puedas decir algo Yoongi sale y lo sentís masturbarse contra tu cola, dando golpecitos con la cabeza de su pene contra tus nalgas.
Te das la vuelta y lo miras mientras te pones de rodillas, luciendo hermosa para la cámara, solo para que él te vea. Ojos llorosos y un poco de maquillaje corrido.
Lo escuchás suspirar mientras con su mano derecha se masturba con más rapidez, con la imagen que tiene enfrente, diciendo tu nombre.
Abrís la boca y sacas la lengua para que pueda apoyar la cabeza en ella. Yoongi acaba tirando la cabeza hacia atrás y con un sonido que sale desde el fondo de su pecho, un sonido tan bajo y profundo que estabas segura de que esta no era la última vez que iban a estar delante de una cámara.
Lo que cae por tu barbilla, lo juntas con tus dedos y lo volvés a meter en tu boca, tragando.
Su pecho sube y baja, y cuando puede recuperar la respiración, acaricia tu cara y se acerca para apagar la cámara.
Vuelve a ser él, con cuidado te ayudo a levantarte y te pregunta si estás bien, sus hombros caen y pierde la buena postura. Te sonríe y te abraza mientras te dice que te quiere, algo que no haría con las cámaras prendidas. Y, una vez que volves a ver el video, meses más tarde, te tocás con esa idea en mente. De lo que puede hacer Yoongi con una cámara prendida, como su comportamiento cambia de un momento a otro.
Sabe lo que hace.
 Ves una entrevista en otro país, y sabes que el Yoongi que está sentado, hablando y pestañeando es el que te tocó esa noche.
Es el mismo que atendió la llamada cuando dijiste que viste el video y que ahora necesitas su ayuda. El mismo Yoongi que te dió instrucciones de como tocarte y te escuchó suspirar del otro lado de la línea, estando a miles de kilómetros de distancia.
Fin.
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myhelaxavier · 3 years
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Daddy
2/2
La sensación de Armie detrás suyo es jodidamente deliciosa, la dura polla presionando contra la curva de su trasero a través de sus pantalones, mientras su propia dureza es presionada contra el frío granito del mostrador,  así es como ha querido a su papi durante tanto tiempo, ni siquiera puede recordar un momento en que no fantaseara acerca de Armie tomandolo con rudeza
Ese había sido su mayor secreto a lo largo de sus años en el instituto, cuando inició la universidad, todo fue diferente , algo que no es puramente  sexual pero que ha estado siempre allí, hirviendo debajo de su piel quemando su cuerpo con deseos insatisfechos, volviéndose  más difícil de controlar  luego de que su papi lo viera desnudo bajo el agua de la ducha luego de su primer fiesta universitaria, sabe muy bien que Armie tiene necesidades sexuales, incluso si no se atreve a reconocerlo externamente, siempre lavando las sábanas que mancha con su semen encendiendo la lavadora él mismo en un intento por ocultarlo.
Su papi no es realmete viejo, solo es dieciocho años mayor que él, aunque la madurez en su rostro sólo incremente su deseo sexual por tenerlo estre sus piernas, un hombre maduro siempre tiene las mejores  formas de dominación en la cama, y no tiene duda de que su papi tiene un impulso sexual  fuerte, el duro miembro presionado contra su culo es una gran indicación de lo bien que Armie lo puede tratar.
— Te siento tan duro... — Le encanta saber que está a punto de tener la gran polla de su papi estirando su agujero  — Por favor papi - Dijo jadeando, mientras se aferra al borde mostrador con amabas manos, empujando tanto como puede su trasero en dirección a la entrepierna de Armie.
— ¿Por favor, que cariño? —  Armie pregunto, su voz es firme mientras golpea su trasero — ¿Por favor, que mi pequeño?
Ese pequeño golpe fue directo a su entrada que se contrajo con necesidad, sabe que Armie ama los juegos previos, pero no esperaba que su miebro comenzará a mojarse tan rápido con  los golpes, sus jugos pegajosos terminarán arruinando el mostrador mientras su papi lo folla sobre el.
—  Te necesito.... — Concluyó incapaz de articular algo más que eso, no le importa lo que Armie le  haga, o como lo  haga, solo le importa estar debajo y que lo joda tan duro hasta dejarlo bien abierto, quiere ser el caliente agujero de  papi para follar.
— Sólo un momento — Su papi susurro, arrastrando la boca por su nuca, gimió cuando tomó la cinturilla de sus pantalones tirando de ellos hacía bajo  llevando consigo su ropa interior, alzó sus caderas tanto como podía para ayudar a sacarlos con mayor rapidez.
— ¡Papi! -— Se estremeció cuando su polla se apretó contra la friesa del granito
— Tranquilo cariño, Papi esta aquí para cuidarte — Sintió como Armie caía de rodillas detrás suyo, las gruesas manos tomaron sus muslos abriéndolos tanto como la tela envuelta en sus tobillos lo permitió, arqueo sus caderas mientras su papi se acomoda entre sus piernas, sintiendo como el cálido aliento se mueve por encima de su agujero.
— ¡Papi! — Jadeo cuando un beso fue depositado sobre su entrada seguido de la húmeda lengua que lame deliciosamente lento su borde inchado mientras los dientes raspan su carne sensible, sintió el gemido de Armie cuando comenzó ha chupar directamente sobre su entrada,  forzando un dedo en su interior;  apenas pudo contener un gemido cuando su entrada cedió abriéndose para él, las vibraciones eléctricas de placer llenan su miembro.
— Joder cariño, eres tan apretado —  El torturoso dedo encontró su próstata con precisión digna de un médico, un jadeo salio de su garganta cuando su punto sensible fue empujado una y otra vez, dibujando círculos sobre él..
— ¡Oh joder! —  Otro fuerte golpe se estrelló contra su culo provocando que su miembro se contrajera.
— No puedes maldecir dentro de casa — Su papi lo reprendió antes de continuar sobando su interior y joderlo con  la lengua, conoce las reglas pero no puede seguirlas cuando las sensaciones que se construyen rápidamente en su interior con la necesidad de terminar queman su polla desde su interio, contrayendose ansiosamente contra el granito.
Las manos de Armie alcanzaron uno de sus pezones, pellizcando y tirando de él lo suficiente para llevarlo al borde, sacudió sus caderas sobre el rostro de su papi en busca de mayor profundidad.
— ¡Papi!, ¡papi! — Armie separo aún más sus muslos, la lengua en su interior es como un arpón en la cual puede  balancear sus caderas para llenarse tanto como pueda, es increíblemente depravado hacer esto con el hombre que prácticamente lo educó, pero se siente tan correcto entregarse a él.
Un segundo dedo se hundió en su interior, empujando al mismo tiempo que la caliente lengua, reclamando su interior sin piedad, gimio incapaz de sostener el suficiente aliento, incapaz de pensar, incapaz de hacer cualquier otra cosa que no sea rendirse ante su papi.
El placer explotó en grandes olas por todo su cuerpo, cerró los ojos dejandose inundar por el orgasmo que le es otorgado, su miembro se sacudió con placer mientras sus bolas deliciosamente llenas vaciaron su liberación sobre la encimera, su agujero se contrajo sobre el par de dedos en su interior, aunque son demasiado delgados para satisfacerlo por completo, joder, necesita ser llenado hasta el borde... necesita la polla de su papi.
Cuando su respiración se regularizó y su mente volvió a ponerse en marcha fue consiente de que su pene está completamente empapado con su venida al igual que su pecho, y puede sentir su entrada punzante bien abierta que está seguro de que no será capaz de cerrar sus piernas decentemente.
Su rostro se giró cuando Armie se puso de pie, mirándolo con los ojos llenos de lujuria, la dura polla aun vestida presionandose firmemente contra su culo desnudo, como pudo giro su cuerpo sobre la isla para poder admirar a su papi y dejarle ver el desastre de su venida qué él había ocasionado, los gruesos pantalones clínicos no pueden ocultar a su vista lo duro que ésta.
Comenzó a dejarse caer de rodillas para devolverle el favor a su papi cuando él negó con la cabeza sosteniendolo por la cadera, en cambio lo ayudó ha salir de sus pantalones y ropa interior, saco su playera sobre su cabeza; ahora está de pié, desnudo en medió de la cocina de su casa, su el cuerpo humedecido por su venida, mientras su papi reclama su boca con un profundo beso, sintiendo el sabor de sí mismo.
Su mano buscó desabrochar a tientas el botón de los pantalones de Armie, dándose cuenta de que sus dedos son demasiado torpes para manejar el broche, su papi con una sonrisa, deshizo el broche de sus pantalones dejandolos caer al suelo, en un movimiento rápido dejo caer los bóxers también.
— inclinate de nuevo sobre el mostrador, cariño — Lo obedeció sin dudar, sí su papi quiere hacérselo por detrás la primera vez, no importa...  Con tal de que la enorme polla se entierre profundamente en su interior y lo folle duro hasta ser capaz de sentirlo dentro mientras recorre los pasillo de la Universidad, es todo lo que necesita para levantar y ofrecer su trasero.
Aunque su mirada no pudo despegarse del cuerpo de su papi cuando la ropa  comenzó a caer al suelo — Papi quiero chuparte — Su boca comenzó a salibar al notar la gruesa dureza que su papi tiene entre las piernas.
— Más tarde cariño, primero necesito enterrarme profundamente dentro de ti — Armie respondió, bajando una mano por su espalda empujandolo hacia abajo, y tirando de sus caderas  hasta colocarlas sobre el borde de la encimera, la dominación solo añade otra capa a su excitación.
La sensación del frío mostrador contra sus sensibles pezones son como dardos que estimulan su piel, haciéndolo gemir y separar un poco más las piernas, intento plantar sus pies, cubiertos de sus calcetines, firmemente en el suelo, en un intentó por sostenerse, aunque todo quedó en el olvido, cuando su papi golpeo por primera ves su entrada.
Arqueo la espalda mientras lo siente deslizar su polla, la presión contundente de la polla de su papi contra su agujero necesitado lo hizo rodar los ojos  — Oh Dios papi, sí — Jadeo mientras comienza a presionar contra la polla, su cuerpo le duele con necesidad.
Su papi lo tortura sólo dándole la cabeza de su polla, intento hacer rodar sus caderas en un intento por tomar más, pero las fuertes manos que lo sostienen lo impidieron, su suplica comenzó cuando Armie saco la punta y lo volvió a golpear de nuevo dentro de su agujero —Por favor, papi... Te necesito.
— Paciencia Timmy, los chicos buenos saben esperar — Le susurró suavemente, mientras propina otro azote a su culo — Estuve esperando tenerte así durante años y pretendo disfrutarlo.
Quiere comenzar a protestar  pero se encuentra en el cielo cuando Armie desliza por completó su polla dentro suyo, se desliza hasta que las bolas están bien apoyadas contra su trasero, le encanta que su papi sepa que no necesita ser cuidadoso con él, que su agujero puede tomar su polla con un solo empuje, quiere sentir el estiramiento, la leve quemadura, quiere que sus piernas no puedan cerrase.
— Si eres mi niño bueno, la próxima ves te amarrare en mi cama completamente abierto y adolorido, apuesto que te verías hermoso con pinzas en tus rosados pezones, un enorme vibrador en tu codiciosos agujero abriendote de par en par y un bonito anillo en tu pene... Completamente a merced de mis deseo — La mano de su papi se adentró a sobar su propia polla, dándole un pequeño pellizco sobre su punta, la punzada de dolor lo hizo gemir y sollozar — Quizás agregue una mordaza para chupar y así llenar todos tus preciosos agujeros.
— Seré tu buen niño, por favor papi — Armie tomó duramente sus caderas y comenzó a empujar sólidamente dentro de él, las bolas golpean la base de su trasero, sus caderas intentan seguir el ritmo pero está tan perdido en el placer que titubea con cada empuje — ¡Oh, Papi! — Mueve su culo hacia atrás para asegurarse de que su papi está completamente adentro suyo, que está tomandolo todo.
— ¿Te gusta cariño? ¿Me sientes bien? — Su papi pregunta, mientras golpea su entrada con más fuerza, una de las grandes manos toma el cabello de su nuca tirando de él, forzando a su espalda a arquearse, sus caderas se levantan tanto que apenas alcanza a tocar el suelo con las puntas de los pies, sino fuera por la polla de su papi dentro suyo sosteniendolo, abría caído hace mucho..
— T- tan maravilloso, P-papi,  — Apenas puede pronunciar, sus gemidos salen de manera descontrolada de su boca mientras intenta aferrarse al borde del mostrador — ¿Puedo tocar mi polla por favor? — Está tan cerca de su orgasmo que lo puede saborear, su vista se a nublado por el placer centelleando por su piel.
— No — La repuesta es firme,  negándose a discusión, está por protestar pero una mano se desliza sobre su estómago para tomar la parte superior de su polla, Armie desliza el pulgar por su raja y comienza a acariciar toda sue extensión mientras se lo folla — Esta es mi polla ahora mismo, cariño, no puedes tocarte o venir hasta que papi te lo diga.
— Por favor, Papi, estoy tan cerca que no puedo, me estás llenando tan bien y lo necesito tanto, por favor quiero ...
Sus palabras de cortaron cuando su papi follo tan duro en él, no cree que sea capaz de aguantar mucho más, su polla puede explotar en cualquier momento — Te ves tan jodidamente hermosa con mi polla llenando tu agujero cariño— Vuelve a golpear duramente contra su próstata mientras gime, sus caderas se golpean contra la encimera con cada empuje, formando bonitos moratones sobre su piel  — Me encanta lo apretado que te sientes — Su papi bombea rápidamente dentro y fuera de él, su agujero se siente tan abierto, amando el deslizamiento de la polla de su papi, ama cómo ni siquiera duele, ama como su cuerpo lo recibe gustoso.
— Dios Papi... Yo estoy... Por favor —
—  Eres tan hermosa, mi pequeño hijo... Te has portado tan bien con papi... Puedes venir
— ¡Papi! — Sus gritos son fuertes y eufóricos cuando la avalancha de sensaciones orgasmicas lo envuelven  mientras las ondas de placer recorren su mente, su polla tiembla viniendo por segunda vez sobre la mano de su papi, y su agujero se contrae con cada espasmo sobre la polla en su interior.
Las embestidas de Armie se volvieron más profundas y desesperadas persiguiendo su propia liberación, envolviendo los brazos alrededor de su cintura sosteniendolo fuertemente contra su polla, sintiéndolo venir con pequeños empujes rápidos, bombeando toda la venida en su interior, ama que el semen de su papi cubra sus entrañas marcandolo.
Por un momento, guardan silencio recuperando el aliento y calmando los latidos erráticos de sus corazones, su papi se retiró de su interior mientras gemia por la pérdida sintiéndose tristemente vacío.
Armie se inclinó, deslizando un brazo debajo de sus piernas y levantándolo en brazos como si no pesara nada y lo llevó al piso de arriba, al dormitorio principal, dejándolo caer cuidadosamente sobre la cama.
Vio como su papi desaparecía dentro del baño, regrensado con una toalla húmeda, comenzando a limpiar con manos suaves y paciente los restos de su venida sobre su pecho y muslos.
Una ves limpio su Papi dejo caer la toalla al cesto de la ropa sucia y subió a su lado en la cama; automáticamente se envolvió en el cuerpo de su papi, depositados suaves besos sobre el musculoso pecho.
Armie se echo areír, una de sus manos tomó suavemente su cabello tirando de él con cariño hasta acomodar su cabeza sobre su grueso hombro.
—Más tarde, cariño, tenemos mucho tiempo para nosotros... Toda una vida. — Añadió un momento después, mirándolo a los ojos con una sonrisa cariñosa.
— La tenemos... Te amo, papi.
— Te amo mi pequeño
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guardianasdelrpg · 4 years
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¡Feliz año Estrellitas! Quería empezar el año con una nueva entrevista y aquí estamos. Hoy me encuentro con Kraken - también conocida cómo Pilar - y nos ha dado la increíble oportunidad saber un poco más de ella. ¿Estáis listos? ¡Allá vamos!
A: - ¡Hola Pilar! ¿Qué puedes contarnos de ti? ¿Cómo te ganas la vida el día a día? ¿Cómo pasas el tiempo fuera del rol? ¿Qué otros hobbies tienes?
K: Feliz año Guardianas y Estrellitas. Un placer hablar contigo Ahri. Antes de nada quiero agradecer a las guardianas, la oportunidad de conversar con ellas y que todos nos conozcáis pero…no desvelo nada todavía.
- ¿Qué puedo contarte de mí? Soy periodista cultural, por desgracia estoy en el paro y tengo que ganarme la vida dando clases particulares. En cuanto a mis hobbies fuera del rol, me gusta leer, ver series, hacer senderismo, deporte, escuchar música y…¡los juegos de mesa! Los adoro y he de reconocer que son una buena fuente de ideas para los foros.
A: - ¿Eres periodista? No seas muy severa conmigo durante la entrevista, ¡que seguramente vaya a meter mucho la pata! La situación actual es precaria, pero gracias al mundo del rol tenemos todos un rincón donde poder descansar el espíritu haciendo algo que nos encanta y creando mundos muy interesantes. ¿Cuanto tiempo llevas roleando, Pilar? ¿Cómo de cambiado ves el mundo del rol desde que empezaste hasta ahora?
K: Sí, soy periodista y no te preocupes ♥. Siempre me cuesta saber la fecha exacta pero diría que unos 10-12 años con una breve pausa en medio. Cuando empecé a rolear todo era mucho más distinto y diría que hasta más sencillo como admin y como usuario. ¿Por qué? Porque no era necesario tener una skin súper elaborada para llamar la atención, o unos sistemas de lo más enrevesados. Antes era todo mucho más narrativo pero evolucionar es bueno y creo que el nivel ha mejorado muchísimo, en parte, porque somos los mismos pero más viejos.
A: - ¡Diez años! Me ganas por cuatro o cinco, ni yo misma me acuerdo la verdad. ¿Y te gustaría recuperar algo de los viejos foros? ¿Algo que eches en falta? Hablando de foros viejos. ¿Eres administradora de Deep Seas, correcto? ¡Y habéis cumplido este 3 de Enero tres años On-Line! Eso es digno de mención, y más hoy en día teniendo en cuenta que aguantan tan poquito. ¿Nos hablas un poquito de tu foro?
K:Sí, ni yo me creo que haya pasado ya tanto tiempo…recuerdo el primero, era de un internado, todo muy old school jajaja. ¿Recuperar? Tal vez la importancia de los diseños porque hay buenos foros con diseños menos elaborados y mejores narrativas que otros más chulos, además, soy una negada de esos menesteres jajaja. Sí, de hecho, la historia que me une a Deep es bastante peculiar…
Verás, yo entré en enero de 2018 (al poco de su apertura) como usuaria. Me encantó la temática, el diseño, todo aunque sentía que faltaban cosas y bueno, buscaban mods y decidí postularme. De mod pasé a admin y ¡hasta mastereé por primera vez en mi vida! Al final la fundadora no tenía tiempo y le pedí que me diese el foro, y bueno, ese verano (más o menos) adopté Deep Seas.
A: - Es decir, que en vez de dejar morir el foro, quisiste seguir adelante con él. Eso es muy noble por tu parte, y también por parte de su fundadora. Dejar su legado en manos de otra persona para que no muera es un gesto tanto noble cómo maravilloso. ¡Me ha gustado mucho esta historia! Ojalá toda nuestra comunidad aprenda sobre ella. Muchas gracias, Pilar, de verdad. ¿Y estás en más foros o te entregas completamente a Deep Seas?
K: Sí, fue bastante bonito…aunque estresante la verdad.Tuve que hacerme cargo del foro yo sola. Ni siquiera había mercado o sistemas… Con ayuda de varios usuarios como Arturo o Fernando, y más tarde Rodrigo, fuimos complementando estas carencias y bueno, quiero creer que Deep Seas es un foro de calidad. Soy demasiado culo inquieto, siempre he estado en varios foros porque me gusta mucho jugar con las temáticas pero Deep, bueno, es mi hijo.
A: - ¿Y has sentido alguna vez la necesidad de rendirte? ¿De tirar la toalla? ¿Qué consejos les das a aquellos administradores que quieren rendirse porque no ven un futuro cercano o no se han cumplido sus expectativas?
K: Muchas veces, Ahri. Llevar un foro sola implica mucho trabajo y aunque siempre he contado con alguna ayuda de mods o colaboraciones puntuales, todo el peso recaía en mí. Era frustrante no tener con quién compartir las ideas y que tuviese iniciativa… Ahora afortunadamente tengo un grupo de mods que son puro amor, y me ayudan bastante. Consejos…Veamos. Primero que se organicen bien y sobre todo, que sean honestos consigo mismos. Si pueden llevar un foro y están seguros que lo hagan si no…que no se vuelvan locos a abrir para luego cerrar porque creo que es frustrante para todos. También les diría que escuchen a sus usuarios, que sean cercanos, que pidan opiniones, que sigan algunos de sus consejos, y de paso, que creen sinergias con otros administradores porque es enriquecedor. Por último, que no se olviden de rolear y disfrutar de su propio foro que lo crearon para ello. A veces nos metemos tantos en el papel de admin que nos olvidamos de ser usuarios y cuando un admin no rolea en su foro…es símbolo de que algo no va bien. En definitiva, que sean honestos y lo disfruten.
A: - ¡Gracias por los consejos de toda una veterana! La honestidad puede ser un consejo muy peligroso. Espero que no confunda la gente ser sincera con ser de lengua fácil, que eso puede llegar a ser tan peligroso cómo un staff poco honrado. ¿Hay algo que nos quieras decir a nosotras, Las Guardianas? ¿Consideras buena nuestra labor y que ayudamos a la comunidad rolera? ¿Qué opiniones, sensaciones o impresión te transmitimos?
K: No hay de qué. Claro, con honestidad me refería a analizar con realismo si se es capaz de llevar un foro o no, a eso. De todos modos, siempre hay que ser educado ante todo y tratar bien tanto a los usuarios, como al staff porque formamos parte de un todo. En cuanto a vosotras, os conocí hace tiempo ya. Siempre me habéis parecido el tumblr de este mundo por excelencia donde todos tenemos un espacio, como ahora mismo, y se prima la educación y el buen rollo que para dramas ya tenemos la vida real. Así que os doy las gracias nuevamente porque este tipo de tumblrs son muy necesarios para todos.
A: ¡Muchas gracias, Pilar! Me encantó leer que querías una entrevista y me animé a contactar contigo sin dudarlo. Gracias por estrenar este nuevo año la sección de entrevistas con nosotras. ¿Hay algo más que te gustaría decir antes de que terminemos?
K: ¡Mil gracias a ti! ♥  Ha sido una experiencia única para mí porque suelo estar en el otro lado jajaja. Me ha encantado. Pues antes de finalizar quiero invitar a todos los amantes de la aventura a Deep Seas. Somos un foro que cumple 3 años llenito de personas adorables y accesibles, somos una pequeña familia como digo yo. Cada mes sacamos novedades y cada mes-mes y medio hacemos tramas oficiales. Quizás no somos 100 pero somos una comunidad abierta y activa. Así que bueno, os invito a todos a echarle un ojo y os cuento en exclusiva que hasta tendremos cambio de imagen. Y a ti Ahri, gracias otra vez por tu tiempo, tu dedicación y esta oportunidad única de compartir mi historia y la de Deep, ambas fuertemente enlazadas. Y tranquilos, el Kraken no es tan temible como aparenta. ;)
A: - ¡Ya sabéis, estrellitas! Deep Seas invita a la aventura a todo aquel que quiera internarse en un foro ambientado en pleno siglo XIX rodeado de piratas, intrigas políticas típicas de aquellos siglos y muchas cosas más. ¡Un abrazo súper cósmico a Pilar de parte de todas las estrellas!
¡Hasta la próxima entrevista!
★Guardianas del RPG★
Deep Seas RPG 
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zcort · 4 years
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APROVECHÁNDOME DE LA CRISIS
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Mi nombre es Ismael, soy contador de profesión y quiera decir que esta es mi historia pero no la es, esta es la historia de Lauro mi mejor amigo de toda la vida, Lauro y yo siempre supimos que rollo con nuestros gustos, hemos cogido entre nosotros para reforzar la amistad, él es activo y yo pasivo, pero lo que les voy a contar tiene escasos días de suceder… Lauro es un activo dominante muy masculino, tiene a todas las secretarias del juzgado y del bufet donde trabaja muertas por él, es lo que cualquier mujer desearía para marido, moreno claro, peludo, alto, cuerpo trabajado en el gym, exitoso, con porte… pero lo más notorio de él es ese instinto de alpha que destila tanto en lo público como en lo privado… un buen día platicando nuestras puterias me comento que tenía una fantasía “bien loca” cogerse a dos heteros que no quisieran hacerlo, que accedieran a ser sus perras porque de plano necesitaran un favor así bien cabron, me comentaba que en su trabajo había visto algunas buenas oportunidades pero que no se animaba… pasaron días de eso y esa imagen de ese cabronsote haciendo trizas a dos heteros comunes y corrientes me calentaba mucho, más de una vez me dedee y me la jale pensando en eso… en otra ocasión hablando con un amigo arquitecto (Jordi) no sé cómo salió eso a colación y él me dijo algo que me dejo pensando “pues con esto del virus eso hay mucho desempleado… para Lauro no sería ningún pedo soltar una lana para cumplir su fantasía… vieras como llega gente desesperada a pedir trabajo de lo que sea a la constructora… yo ya me comí a dos que tres y que sin problema alguno hasta lavado de cazuela y metida de dedo me dejaron hacerles por unos cuantos pesos…” esa charla me dejo aún más clavado en esa idea, ya no era cosa de que si Lauro quería cumplir o no su fantasía, ¡yo! Me moría de ganas de ver esa escena digna de una porno… así que moví mis hilos… me contacte con Jordi mi amigo el arquitecto y me dijo que fuera el lunes, que los lunes es cuando más gente va a pedir empleo… así lo hice estuve desde temprano en su despacho platicando, a veces salía a la recepción a tomar aire y ver si algo me llamaba la atención… ya era medio día y nada, no llegaba nadie que me interesara hasta que casi a las 2, justo a la hora que salen a comer todos en la constructora llegaron dos chavos como de 19 años, morenos, delgados pero con buen cuerpo, espaldas anchas y brazos fuertes… se acercaron a la recepción  pedir informes, la secretaria les dijo que si querían información tenían que esperar… en eso los aborde y les comente que uno de los arquitectos de alié era mi amigo, que yo les podía conseguir la entrevista… la secretaria puso cara de ¿Qué? pero como mi amigo era uno de los socios de la constructora no puso objeción, los lleve a la oficina de Jordi y se sentaron, Jordi tampoco entendía muy bien qué onda pues ya se disponía a salir y yo con señas detrás de los dos chavos le hice saber que me interesaban… así que quitándosela fácil les dijo “Mi socio les hará la entrevista” o sea yo... y se salió, yo me quede algo nervioso sin saber que hacer… me senté empezamos las preguntas de costumbre, poco a poco indague sobre ellos y resulta que  eran cuñados, que llevaban ya un mes sin trabajar estaban peor que en ceros, estaban súper endeudados, eso era justo lo que quiera oír… incluso uno de ellos agrego “haremos cualquier trabajo, lo que sea, no importa la jornada, pero necesitamos trabajar”… “¿Lo que sea?” pregunte en un tono casi sádico, mientras los veía cual león a punto de lanzarse sobre su presa… ellos se miraron el uno al otro y dijeron “Si lo que sea” al unísono… cerré las cortinas de la oficina, me senté en la sala de la oficina y les hice una seña con la mano para que se acercaran… se miraron por un momento con cara de resignación, se pudieron de pie, caminaron hacia donde yo estaba y quedaron parados justo enfrente de mí, “manos atrás” dije, ellos obedecieron… yo rápidamente baje ambas braguetas buscando el preciado tesoro que hay dentro de ellas, mis manos no tardaron hacer a un lado la trusa y el bóxer de esos jóvenes para sacar sus miembros morenos y peludos que colgaban flácidamente, eran miembros muy morenos, largos, pellejudos, de la bragueta salían largos pelos púbicos negros… mientras con ambas manos los masturbaba disfrutaba de ver sus gestos de desaprobación eso siempre fue un gusto culposo para mí, el tener enfrente a un hetero que de otra manera no aceptaría hacer lo que está haciendo… uno miraba hacia el techo y el otro hacia un lado, pensando quizás en que no era yo el que tocaba sus masculinos miembros si alguna de tantas perras que se cogen semanalmente, “quítense la playera” indique… cuando se despojaron de esa prenda pude ver unos torsos fuertes, trabajados, con sus cuadritos bien marcados… mientras me comía el miembro de uno de esos jóvenes con mi otra mano acariciaba los duros abdominales del otro… el miembro que chupaba no tardo en comenzar a crecer su largo aumentaba con cada chupada al igual que su grosor… sabia rico, sabia a hombre, a hombre joven, macho, hetero cogedor… “¿Cuántas vaginas no habrá penetrado esta verga?” me preguntaba a mí mismo mientras degustaba su sabor… momentos después me dispuse a cambiar de verga, la verga del otro chavo ya no estaba tan flácida estaba en un estado de semi erección, su miembro viril al sentir el contacto con mi boca no tardo nada en crecer, era un miembro venudo, pesado, potente, su sabor era distinto, mas salado, pero sin llegar a ser desagradable… mientras chupaba su verga con mi otra mano masturbaba a su amigo, podía sentir las pulsaciones de su miembro, su dureza y calor… de un momento a otro jale a su amigo más cerca de él y comencé a besar, chupar, lamer y disfrutar ambas vergas en mi boca… sabía que no tenía mucho tiempo, además de que aún tenía que cerrar el trato con ellos… así que sin más me separe de ellos… me desnude rápidamente, me senté en el mueble largo de la sala, alce mis piernas y ofrecí mi culo a esos jóvenes… “tu chúpame el culo” le dije al que tenía más próximo, “tu ven y dame tu erga en la boca” le dije al otro… ambos obedecieron sin chistear… yo me sentía en la gloria, me sentía actriz porno, tenía a un joven hombre mamándome mi culito rosadito mientras el otro me llenaba la boca de verga de macho hetero… me saque por un momento de la boca la verga de ese joven hombre y le dije al que me mamaba el culo “follame duro, ¡Rómpeme el culo!”… de inmediato me volví a pegar a la verga deliciosa de ese chacalon que ya comenzaba a lubricar… de repente siento como un objeto extraño comienza a abrirse paso entre mis pliegues anales… la presión no cedía pese a la resistencia de mi culito, de repente un fuerte dolor punzante atravesó mi cuerpo al mismo tiempo que es duro y joven miembro perforaba mi ser…. “¡ahhhh!” grite de dolor, cosa que aprovecho el otro chavo para meterme su verga hasta la garganta… “que delicia” pensaba mientras disfrutaba de ser penetrado por mis dos hoyos… podía sentir los huevos peludos del que me cogía chocar con mis nalgas, sus pelos púbicos chocaban con mi culito, me sujetaba fuerte de las caderas penetrándome con furia, como diciendo “Yo mando putito” y eso me enloquecía, me gustaba que me trataran duro y sin respeto alguno, pero eso aún no lo sabían mis jóvenes amantes… después recordé donde estaba y decidí que era momento de terminar… me saque la verga de la boca y le dije a los dos “ya no tenemos tiempo, jálensela, échenmelos en el culo” mientras decía eso me giraba para ponerme en 4 recargado sobre el mueble ofreciendo mis blancas nalgas a esos morenotes de fuego… poco después comenzó a oír sus gemidos, era evidente que estaban a punto de venirse, me repegue al mueble, eche mis manos atrás y abrí mis nalgas como queriendo que algunas de esas gotas de semen entraran en mi ser, de repente calientes chorros de leche comenzaron a escurrir por mis nalgas “¡Que rico!! exclame… uno de esos dos jóvenes no se aguantó las ganas de penetrarme, creo que fue el que no lo había hecho, de repente siento como su verga se va al fondo de mi ser y empieza a soltar chorros de leche caliente “¡Ahhhhhhhh!” Grito extasiado el chacalon mientras su verga terminaba de bombear los últimos chorros de leche… “¡Ufff que rico cabron!” le dije, cuando me incorpore pude notar que en efecto era el que me había estado follando al boca el que me penetro al final… me vestí ellos hicieron lo mismo… abrí las ventanas y mientras lo hacía les dije: “Esto del virus se va a extender más allá de cuando dice la autoridad sanitaria… así que tengo algo que proponerles… por lo que hicieron horita les voy a dar 5 mil a cada uno, es lo de un mes de trabajo… pero como les digo esta situación va a durar más de un mes… lo que tengo que proponerles es: yo les doy el triple a cada uno de ustedes si le cumples una fantasía a un amigo… antes de decir sí o no piensen que en un solo día pueden llevarse lo de 3 meses de trabajo... solo hay un pequeño problema, lo que quiero que le hagan a mi amigo es algo muy diferente a lo que hicieron aquí…” dije mientras notaba una cara de duda en ambos… “¿Qué deberíamos hacer?” pregunto uno de ellos… “Para no hacérselas larga, lo que me hicieron a mi es lo que mi amigo les haría a ustedes”… “No como cree ¡está loco! Nosotros somos hombres”…. “pues yo también soy hombre ¿o qué? ¿Acaso me vieron cara de jirafa?” Exclame, supuestamente molesto… de nueva cuenta se quedaron pensando, hasta que el otro pregunto “¿y por cuánto tiempo?”... “dos horas” les dije, solo por dos horas pueden ganarse 15mil pesos cada uno… se volvieron a  ver mutuamente, uno de los dos le dijo algo al oído al otro… estaban en silencio… así que decidí meter presión… “piénsenlo rápido porque si llega mi amigo el aquí se acaba la oferta”… el silencio reino hasta que uno de los dos dijo: “pues yo si me rifo”… el otro lo dudo un poco más pero al final acepto “Órale pues, ¡Va!” dijo… Yo feliz por el buen deal que había hecho afine detalles con ellos en una cafetería cercana mientras aprovechaba para cuadrar tiempos también con mi amigo…  Lo que paso en esa ocasión es digno de una película porno y estoy seguro que se la jalaran bien rico leyéndolo, pero tendrán que esperar un poco. Saludos.
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wepurge-rpg · 6 years
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Eso de “me llevo lo mío y borro lo tuyo” es la mayor tontería que puede pasar en una administración. Por qué hacer sufrir a los usuarios por caprichos del staff?
Todo depende de como lo veas.  ¿Por qué voy a dejar algo que me costó tiempo, esfuerzo y cerebro (o no tanto, pero un poco) en un lugar donde ya no me siento a gusto? Si, hay que pensar en los usuarios, si, ellos no tenían la culpa de nada y fueron quienes salieron perdiendo. 
Pero es como si un usuario se va del foro por x razones y yo, staff  pretendo que deje la información de su personaje porque como está involucrado en historias/tramas de otros usuarios o tal vez en alguna trama global, lo voy a hacer a canon, de esa forma alguien más puede tomar ese personaje y en teoría eso sería lo ideal para no afectar a los demás solo porque ese fulano decidió marcharse.  Ahora, ¿qué pasa si la persona del staff deja sus "cosas" y después por alguna razón quiere hacer un sitio de la misma temática? Tendría que volver a invertir tiempo, esfuerzo y demás. No parece justo.  En el caso de BS&T, del cual solo tengo la información que han subido a este sitio, por lo que mi opinión no esta a favor de uno y en contra del otro, diré que el error fue el cómo hicieron las cosas. Si iban a cerrar, ¿por qué no avisar a sus usuarios y darles un par de días para que pudieran llevarse sus cosas y ya?  Según entiendo, toda la información importante y vital para el funcionamiento del foro, así como código y gráficos eran de una persona. Si esa persona decide llevárselos es su decisión, su problema pero que de tiempo a que el resto del staff pueda encontrar una solución.    No sé como lo ven ustedes pero si yo fuera parte del staff y decidimos a echar a alguien porque ya nos ha causado problemas o por otra razón pero esa persona es la creadora de los temas informativos, sistemas, etc., primero nos ponemos de acuerdo los demás para usar nuestro cerebro (porque se usa, ¿saben?) y hacer nuestra propia información, sistemas y demás necesario. Si no sé de códigos me busco un skin o alguien que me ayude, lo mismo para los gráficos. Aunque hay skins bien hechos gratuitos, que no tengan las mil monadas como les gustan es distinto, así como hay colorings y psd que son buenos para salir de un apuro. Y ya que tenga todo eso, entonces sí,  le digo a la otra persona: "Ya no te queremos en staff por -razones-, gracias por todo lo que has hecho y eres libre de llevarte tu información, códigos y demás, tienes tantos días". Y si ya sé que está persona es inestable desde antes le quito el poder administrativo y yo le pasó todos sus códigos, las templates, y toda su información la cual eliminó después para subir la mía y de mis compañeros, pongo mi skin y gráficos nuevos y ya, no tengo nada tuyo, adiós.  Tampoco digo que hacer eso sea muy aceptable pero si una solución más adecuada.  Y en caso de que mi cerebro no me de para idear algo, pues busco a alguien que si piense entre mis usuarios, o hago un tema donde den sus opiniones, ideas, quejas, etc.  O como dije antes de plano les digo que se acabo que tienen una semana para bajar sus fichas, llevarse sus roles, pasarse medios de contacto entre ellos, que les vaya bonito y pasada esa semana elimino todo.  Queda claro que ninguna de las dos partes le ha importado el foro muchos menos los usuarios. Si yo fuera usuaria de ahí les digo que se metan sus disculpas por el culo, porque no se las voy a creer después de ver que se han montado todo un teatro cuyo propósito principal parece ser desprestigiarse y lavarse las manos por un foro que ya ninguna quería seguir llevando.  Es demasiado pedir una administración que haga las cosas como debe, con madurez y pensando en el bien común (tómenlo como afirmación o pregunta que la respuesta es sencilla).
En resumen: no está mal el llevarte algo que es tuyo de un sitio de donde te echan o te vas por problemas u otras cosas. Deja a un lado tu imbecilidad, inmadurez, egoísmo y haz las cosas del mejor modo. ¿Es mucho pedir? Y la verdad, eso de que el dominio era mío y por eso el foro mio es una tontería, me ha dado mucha risa. ¿Saben que pueden crearse el foro en menos de cinco minutos?¿Qué si ya les cogieron el "foroactivo.com", todavía hay muchas opciones? En serio, ¿lo sabían? ¿O es que no querían usar su correo? Bueno, también se puede crear uno nuevo en pocos minutos.  Si no saben como, díganlo y con gusto les paso algunos tutoriales prácticos.
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bookish-miriam · 6 years
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"Las cosas son como son porque creemos que son así. ¿Buenas? ¿Malas? En origen, todo es bueno y nada más." (p.204)
Primeras impresiones.
Bueno... los primeros capítulos del libro me han dejado con muuuchas preguntas sobre el universo en el que viven los personajes del libro. Aquí van (sentaos, que va para largo...):
¿Por qué viven a x distancia de la tierra? ¿Cómo pueden obtener agua allí arriba? ¿La obtienen de la lluvia y la almacenan? ¿Y la comida? ¿Cómo consiguen los ingredientes para hacer esa “porquería blanca y pastosa” (p. 16) como la llama nuestra querida protagonista?
Si nunca han bajado a la tierra, ¿por qué Kala reconoce el mar cuando va a Otro Lado? ¿Se lo han enseñado en la escuela? ¿O es algo propio de Otro Lado y no saben que también hay un mar abajo?
¿Cómo nacen los niños? El libro dice que hay remesas, ¿quiere eso decir que no se puede dar a luz a niños cuando los padres quieran libremente? ¿¡No tienen sexo!? Al principio, dice que hay una remesa que ha llegado a los 100 años y que el número de la población ha bajado. ¿Quiere eso decir que todos se han muerto a los 100 años al mismo tiempo? ¿Cómo? ¿Se han muerto de forma natural o los han matado?
¿Por qué la protagonista es especial? ¿Por qué tanto secretismo?
¿Por qué está tan enfadada con todo?, en serio, to-do.
"Ella sabía que él sabía que ella cruzaría" (p. 69)
Aquí todo el mundo sabe todo menos el lector, lol.
A medida que iba avanzando con el libro se han ido respondiendo algunas de mis preguntas, sin embargo, otras permanecen sin respuesta.
Argumento.
¿Trata de la Tierra en un posible futuro? ¿De una realidad virtual? ¿Piratas? ¿Y por qué no lo mezclamos todo? ¡Sí! ¿Qué podría salir mal?
Esperad, que os lo explico.
El mundo en el que vive la protagonista, Kala, es la Tierra en un posible futuro: la humanidad vive en casas futuristas pero es tan futurista que no viven en el suelo. No, viven tan alto que ni siguiera se puede ver abajo porque las nubes lo impiden. Se supone que hay calles y carreteras aunque no ha quedado muy claro… Hay coches flotantes y en la escuela se sientan en sillas que también flotan (a saber para qué; supongo que para ver mejor la pizarra, lol).
Vale, un mundo bastante impresionante con muchas cosas a desarrollar y con muchas posibilidades de que pase algo emocionante, ¿no?
Pues no. Veréis, en este mundo existe Otro Lado que es una realidad virtual donde la gente pasa su tiempo libre. En Otro Lado te puedes crear un “doble”, es decir, una especie de avatar o personaje. Es básicamente un juego. La idea de este Otro Lado me ha recordado mucho al juego de Dragon Quest y a animes como DanMachi, KonoSuba o SAO; cosa que me ha gustado porque los juegos y animes de este tipo me parecen interesante entretenidos.
Para rematarlo, hay… ¡piratas! No tengo nada en contra de los piratas (me gustan los Piratas del Caribe).
Pero el problema que he encontrado es que me ha parecido que era una historia de piratas dentro de un juego creado en un futuro idílico… ¿veis el problema?
Ay, si, el libro trata de la protagonista que está intentando buscar a su amigo en el mundo virtual que ha desaparecido en el mundo real, pero en el proceso ha sido capturada por los piratas.
Personajes.
La protagonista es una niña de quince años muy negativa, agresiva e irritable. Todo lo que piensa es negativo. Cree que todo el mundo está en su contra cuando en realidad es ella que está en contra de todo el mundo. Alguien la mira y ella ya dice que es idiota. Alguien le dice algo y ella ya se cree que la está tratando como una tonta.
Hace cosas estúpidas, corre riesgos innecesarios y cuando los otros personajes la culpan por ello, ella se defiende a si misma mentalmente sin tener la razón. O sea, internamente ella tiene que ser perfecta todo lo que hace ella es bueno y los otros son los que no la entienden y no entienden sus razones.
O, todo el contrario, hay momentos en los que su confianza está por las nubes, diciéndose a si misma que ella es la Única, que lo puede hacer todo y tal y al cabo de una página o menos, se dice a si misma que ella no puede ser la Única, que porqué el Capitán le ha puesto esa idea ridícula en su cabeza, que no puede ser, que bla bla bla.
En mi opinión es una protagonista insufrible, que hace sufrir al lector en cada página.
Os he recopilado algunas de las escenas que me han hecho cerrar el libro para inspirar y expirar algunas veces.
La protagonista acaba de ser capturada por los piratas, junto con otra chica. Esta le está hablando y la protagonista, en vez de ser amable e intentar entablar conversación con alguien que sabe que está pasando y que tal vez pueda ayudarla a salir de esa situación, lo que piensa es: “¿Se puede ser más idiota?” (p. 80).
Y yo me pregunto lo mismo que ella… de verdad, ¿se puede ser más idiota? La protagonista, Kala, es nueva en Otro Lado y no aprovecha que alguien le está hablando para conseguir un poco de información que la pueda ayudar. Está claro que no le gusta esto de ir a la realidad virtual pero, ¿de verdad ha de insultar (considero llamar idiota a alguien un insulto) y ponerse siempre a la defensiva contra los que disfrutan de ese mundo?
"¿Qué estaba pasando para que todos la trataran como a una tonta?" (p. 144)
Niña, que solo te han repetido como te encuentras porque no has contestado a la primera... Creo que ya empiezo a comprender porqué eres tan especial…
“¡¿Cómo puede un caracol ser más listo que ella!?” (p. 216)
Bien, incluso ella lo admite…
“Si ella fuera la Única lo sabría, lo notaría. Tendría alguna idea de lo que significa. Sabría cómo lidiar con la tripulación, y habría conseguido un beso del buenorro de Numo” (p. 217)
A ver… una cosa no tiene que ver con la otra… Es como decir que porque tengas algo que los otros no tienen (por ejemplo: dinero) puedes conseguir lo que a ti te da la gana sin tener en cuenta como se sienten los demás. No funciona así. Las otras personas también tienen sentimientos y si el buenorro de Numo no te quiere besar es porque no te quiere besar o por otras razones, no porque tu quieras algo se va a realizar y punto.
Espero que la personaje principal sea escrita con un fin satírico porque sino…
Romance.
Romance, si… vamos a ver, los hechos son los siguientes:
- El chico y la protagonista se conocen.
- El chico es insoportable según nuestra prota.
- El chico le toca el culo (para que no se caiga, ojo).
- El chico la abraza para protegerla de una estampida.
- Cuando ya están a salvo de a estampida la prota casi lo besa, casi porque el chico le dice con los labios "ahora no" ¿porqué quiere besarle? ¿Cómo ha pasado la protagonista a tener sentimientos de no-odio hacia los otros personajes?Ay si, ha pensado desde el principio y en un par de veces que el chico está bueno.
- Cuando la prota hace algo mal y pierde la confianza de los demás el chico intenta animarla y le dice que no la dejará sola, pero la prota quiere algo más.
- Luego el chico no aparece (o sea, la ignora, según ella).
- Después de toda la acción el chico se digna a aparecer, la prota lo perdona por no estar allí para ella y se besan.
- Más tarde, el chico le revela un “secretito” y la prota se arrepiente de haberle besado.
Romance calidad 10, ya lo veis.
La verdad es que me había spoileado algo del final y este romance no me pillaba por sorpresa…
Lo que me ha gustado del libro.
La verdad es que es difícil encontrar algo que me haya gustado …
He de admitir que la idea era buena, interesante e intrigante. Todas las ideas, en realidad: la de el futuro, la de la realidad virtual, la de los piratas; pero no juntas, por separado.
También me ha parecido fascinante que una hora en la realidad equivalga a un día en Otro Lado. Imagina todo el tiempo que se podría pasar uno leyendo libros en Otro Lado o estudiando a última hora para un examen, etc.
También se agradece que haya representación LGBT.
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LA MADRE  ( Cuento)
-Mire, yo le juro que yo no tuve nada que ver, yo sé que usted no me cree porque yo soy una puta, una traveca. Pero por su santa madre, haga el favor de escucharme por lo menos. La Madre sí vive aquí, sí es mi madre, pero yo no la he visto desde el sábado que se fue a putear con las otras travecas. Yo sólo sé que aquí vino una muchacha dizque Vanessa y se llevó unas cosas de La Madre, pero yo no sé cómo encontrar a la tal Vanessa ni a La Madre. Que ella no está en la ciudad, eso sí le puedo decir. De pronto la pueden buscar en Bogotá porque yo sé que ella tiene unos clientes con plata allá, me parece que son políticos. De pronto también en Fresno Tolima… Porque ella una vez dijo que tenía unas hijas allá que dizque la querían mucho porque ella les enseñó a putear, abrir y cerrar el culo y esas cosas que le gustan a los clientes…
...pero vea, yo le juro que no sé más. No me pegue, no…, venga, no me pegue. Por favor no me pegue que así moreteada no puedo trabajar, yo no le he dicho mentiras... Por favor…  -
                                                          ***
La mañana del sábado, La Madre visitó la peluquería de Maritza, se mandó a poner unas extensiones con rayitos violetas. Maritza le hizo la cera en el bigote y en las patillas, hablaron un rato, ella les contó que estaba planeando un viaje para ir a preparar unas hijas en Popayán, porque allá apenas estaba empezando el negocio de las putas travecas y necesitaban a alguien para trazar los territorios, regatear con los dueños de las residencias o moteles de malamuerte, y ajuiciar a algunos machitos que se estaban pasando de violentos con las chicas. Como pago por el servicio les ofreció popper, perico, unas pastillas de éxtasis y se fue después de haber tomado tinto, contenta con las extensiones que le rozaban el culo al caminar.
La Madre era una de las travestis más viejas del grupo, una suerte de señora salvaje con expresión agresiva que no dudaba dos segundos en meterle una trompada a cualquiera que quisiera pasarse con ella, o con sus hijas.
Con los años había construído aquello que solo los verdaderos líderes consiguen, una comunidad de personas devotas, que le dedicaban tiempo, dinero y amor a esa matrona gigantesca que se paseaba en la galería por la mañana  y en la carrera 66 por la noche, consiguiendo clientes para ella y para sus hijas, puteando derecho hasta el amanecer, expendiendo drogas y haciendo favores delictivos.
Pero la buscaban por un favor en especial. La noche del sábado, según decían las prostitutas que trabajan por el sector, una aparatosa camioneta blanca paró un momento en la esquina donde putean las travestis o travecas, como se llaman entre ellas. La camioneta paró y como siempre, una de las chicas se acercó a la ventana. Pero al poco tiempo torció el gesto, se llevó las manos a la cara y salió corriendo. De repente, varias armas largas se asomaron por las ventanas de la camioneta y dispararon contra las travecas.
Una prostituta que estaba parada al otro lado de la calle, vio cómo la madre pasó por entre las balas y agarró una de las armas por el cañón. Un solo jalón fue suficiente para quitársela de las manos al propietario. Acto seguido, caminó hacia la chica que se había acercado a la ventana hacía nada más unos minutos.
-Tranquila, Tania, son balas de pintura, eso solo deja el morado-  Le acarició la cabeza porque era su Madre, y cuando volteó atrás, la camioneta se había ido.
En la carrera 66 reinó el silencio por un rato, hasta que las travecas se reunieron para decidir qué hacer respecto al atentado.
eso tienen que ser esos hijueputas de hace ocho días, niñitos de colegio. -
Sí, pero ¿qué hacemos?, no nos vamos a dejar joder más, así no podemos trabajar. -
La Madre estaba en silencio, cuando cesaron las quejas, todas la miraron.
Tranquila que ellos vuelven- dijo.
A las travecas nunca se les ocurrió llamar a la policía, ¿para qué? En esa gente no se puede confiar. Todo lo contrario, a los policías les gustaba golpearlas y sobrepasarse con ellas, por regla general debían evitarlos a todos, excepto a uno que otro cliente que coincidía en esa profesión viciada.
Las putas continuaron con la jornada de trabajo. Unas llegaban y otras se iban en carros lujosos, los clientes pasaban con regularidad y la situación se normalizó. La Madre había mandado a Tania en un taxi con destino a La Galería y estaba observando con detenimiento el arma que tenía en las manos. Era alargada y negra, con el gatillo suave y aceitado, parecía de verdad. La sangre le hervía, la apretaba con recelo.
Reconocía la cara del dueño, y no habría de olvidarla en mucho tiempo. Pensó con detenimiento y decidió bajar hacia la zona rosa de la ciudad, donde se encuentran las discotecas. A veces conseguía algún cliente para ella o para alguna de las hijas. Esperaban a que la gente comenzara a salir a eso de las tres de la mañana, y entonces podían vender drogas o dar los números de contacto. Muchos hombres les hablaban luego de dejar a sus novias o esposas en casa, los mismos que unos minutos antes las repudiaban, querían pagarles por sexo.  La Madre pensaba que era ridículo, y por eso mismo era real.
A las cuatro de la mañana, luego de todo el trajín, hacía frío afuera de la discoteca. Un terreno baldío rodeaba a La Madre y a sus dos hijas que la acompañaban.Caminarían de regreso hasta la carrera 66 para ahorrar algo de dinero, así que se dispusieron para emprender el trayecto, pero antes inhalaron algo de perico para quitarse el frío.
El sonido de un carro las puso alerta, tal vez eran clientes. La camioneta blanca estacionó junto a ellas. Se bajó quien creyeron era un hombre de baja estatura y que en realidad era un muchacho joven, con el cabello negro cortado como algún futbolista famoso. Se balanceaba un poco y masticaba chicle.  Miró a la Madre, quien tenía en la mano el arma que le había arrebatado, y antes de cerrar la puerta sacó del interior del carro un bate de madera.
Todo pasó en segundos: La Madre balbuceó dos palabras y se puso delante de las hijas, quienes buscaron sus cuchillos y escopolamina. De la camioneta no bajó nadie. El muchacho - que después algún familiar reconocería con el nombre de Alberto- empuñó el bate y gritó algo, con el gesto arrugado y rojo. Blandía el bate mientras caminaba hacia La Madre, que calculó la distancia entre ambos y apretó el arma alargada. Era casi como una ametralladora, se agazapó y la experiencia de años enteros de peleas callejeras le aclaró la mente, tenía que dejar él que se acercara. Miró con cautela a las hijas, quienes entendieron que aquella pelea no les pertenecía, pero mantuvieron los cuchillos donde pudieran verlos.
El muchacho, convencido de que la estaba intimidando, se le acercó y le propinó un batazo en la pierna, borracho de júbilo se paró a ver el resultado, quería ver la expresión desfigurada de ese monstruo que se hacía pasar por mujer, y entonces la cacha del arma lo impactó en la frente. La Madre aprovechó el aturdimiento del chico para golpear -también con la cacha- la muñeca que empuñaba el bate y el chico no lo soltó. Movía el bate sin mucha fuerza, la golpeó en una clavícula y ella juró escuchar cómo se le partía, pero no paró. Un episodio de la infancia le recordó lo que tenía que hacer, así que - con un impulso vigoroso- le asestó un golpe en la garganta y asegurándose de lastimarlo, le arrancó el bate de la mano.
A las seis de la mañana, la policía reportó que habían encontrado un cadáver desfigurado, irreconocible.  La mujer que se lo encontró sufrió tal sobresalto, que cuando llamó a la policía para informar lo que había visto, no se le entendía nada. No había rastro visible del asesino, el cuerpo estaba intacto, la cabeza completamente aplastada. Un operativo ubicó la camioneta en uno de los deshuesaderos de la ciudad.
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artesinsino · 4 years
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Día 23
Era la hermana mayor y tenía la responsabilidad de cuidar de su hermana pequeña, o eso es lo que ella había asumido desde que no podían ver a su madre.
Naira tiene casi siete años, de hecho, apenas queda una semana para su cumpleaños pero no quiere ni pensarlo. Se niega a cumplir años en esta situación y así se lo ha hecho saber a su padre. No va a malgastar un día tan especial encerrada en casa y sin poder ver a su madre ni a sus amigas. Así que, cumplir años queda aplazado hasta nueva orden.
***
Es marroquí. Se “coló” en España con su primo, que venía desde Argelia. Se encontraron en Marruecos y consiguieron embarcarse en una de las pateras de las que tanto les habían hablado. Al llegar a España tuvieron que separarse. Su primo no tuvo su suerte, o sí pero no la supo aprovechar. Fue detenido y enviado a Argelia. Él se fue agarrando a todo tipo de trabajos en los que no le piden papeles, y después de año y medio aquí, está buscando la forma de legalizar su estado para traerse un día a su madre y regalarle un poco de dignidad durante los últimos años de su vida.
***
Bajó las persianas y no quiso ver la luz del día. Las ha subido a las ocho, para los aplausos. Su vecina ha intentado verla durante estos días, pero ha rechazado cordialmente su compañía, necesita estar sola, necesita morirse un poco antes de volver a la vida. "Nadie tiene una vida ahora a todos nos tocará volver a empezar."
***
Habla con su madre, está bien pero tiene ganas de verlo. Por su edad, no le dejan acercarse a la cárcel para ver a su hijo, ella, que cada semana desde que lo encerraron había ido para ver cómo crecía su hijo.
Cuando cuelga decide escribirle una carta, ya ni se acuerda de cómo se hace eso
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Las mañanas las pasa en el huerto que está detrás de su casa. Sus nietas, que no pierden ojo a cada uno de sus movimientos, siempre le esperan desde una de las ventanas del granero. Le encanta verlas allí, pero a veces no es capaz de avanzar con cada una de esas preguntas curiosas que solo saben hacer los niños.
***
Llorar a un muerto es algo que todo el mundo necesita. Estos días no hay espacio para ello. O se llora en soledad o no se llora hasta que explota dentro. Sobre todo cuando esos muertos son de los que han quedado fuera, de los que se ha dado por hecho que tenían menos posibilidades de sobrevivir y se quedaron si uno de los deseados respiradores.
Como psicóloga tiene ciertas herramientas para ayudar a cicatrizar heridas, pero a menudo se le olvida cómo usarlas cuando tiene que cerrar las suyas.
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Empieza a estar un poco harto de tanto jaleo. Sobre todo porque a veces parece que la gente se olvida de que solo es un teleoperador técnico de internet y que no les puede solucionar la vida. Entiende que es un momento en el que la tensión que soporta la población está en lo máximos niveles de ansiedad pero es que él también está encerrado, separado de su familia, con dos compañeros de piso que hacen de todo menos compañía... Solo esa voz le haría desconectar de este barrizal de mierda que tiene encima. Pero esa voz nunca está al otro lado del teléfono.
***
Han llegado las vacaciones escolares, vacaciones de confinamiento en casa, pero vacaciones al fin y al cabo. Se ha pasado el fin de semana descansando de el sobreesfuerzo que ha experimentado en las últimas semanas.
Está preocupada por su vecina, no quiere visitas, lo entiende, pero le da miedo que se acostumbre demasiado a su luto en soledad... "Mañana golpearé la puerta hasta que me abra" o quizás solo le deje unos tuppers de comida en el felpudo.
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Yaiza  está más tranquila, aunque no se puede quitar algunas cosas de la cabeza, los días enfrían los recuerdos.  A veces llora pero ahora lo hace a escondidas de su padre y de su hermana, no quiere que le riñan. Piensa en las personas que echarán a esos agujeros en el suelo y se pregunta si al menos su mamá podrá estar cerca de ellos.
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Ayer le dieron  el alta a su marido, puede continuar la recuperación en casa. Le alivia. Claramente esto supone más trabajo para ella pero necesita a alguien que lleve la mitad de la carga mental. Su hijo está cada día más quieto, echa de menos su hiperactividad normal, le da miedo que en estos días crezca varios años, "no es justo, no quiero que su infancia desaparezca antes de tiempo", pero ella no podrá evitar eso.
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Hay días que mandaría a todos a tomar por culo. Son días en que los clientes del supermercado se creen con la potestad de hacerle la vida más difícil a ella solo por el mero hecho de estar trabajando allí. Afortunadamente siempre hay excepciones de esas que le devuelven la confianza en las personas, esas que le dan las gracias por trabajar y le desean mucho ánimo para estos días. No son muchas, pero con una sola que le diga una palabra bonita, ya siente que ha merecido la pena el día.
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Esta mañana ha visto cómo su vecino le gritaba a una chica que pasaba por la calle. "Vete a tu puta casa ya". Lo están advirtiendo, nadie sabe de dónde viene esa persona, adónde va, la población no es quien para juzgar los movimientos de los ciudadanos. Así que él le responde desde su ventana: "¿Y si viene de trabajar en el hospital para salvarle la vida a tu madre? Gilipollas". Después de decir esto tiembla, jamás se mete en confrontaciones con nadie, es más bien de los que busca comprender a todos los bandos. Pero ya está harto de escuchar memeces sin sentido. Por contra a lo que esperaba, su vecino cierra la ventana y no contesta.
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Lleva un tiempo pensando que ya es hora de dejar este mundo cada vez más extraño para ella. A ratos piensa si no sería mejor que le llegara ese virus ya y le ahorrase la agonía del mientras. Por supuesto esto no se lo ha contado a sus hijos, nunca entenderían esa forma de pensar, por lo menos mientras tengan la edad que tienen ahora. Ella no quiere tirar la toalla, pero siente que ha vivido más de lo que le correspondía. Y ahora, si así va a ser el final de su camino, preferiría que fuera más corto.
***
Sus suegros la llaman cada dos días y le cuentan cómo va su marido. Tampoco ellos saben que está embarazada. Sin familia con la que contar, sin amigos cercanos —puesto que sus amigos son los de su marido— se siente en una encrucijada que se complica más y más. Ha buscado por Internet, pero las respuestas que necesita no están la red. Lo que sí está es un teléfono que se ha habilitado para atención psicológica durante estos días. Lo anota pero no llama. No quiere saturar las líneas con lo que considera "mis tonterías" y que alguien con problemas más graves no pueda ser atendido.
***
Esta semana ha empezado con los ánimos por los suelos. Ver a su hija pequeña llorar como lo hizo cuando vio las noticias por error, le rompe por dentro en trocitos. Hay cosas que un niño no debería vivir. Y piensa en todos los hijos de esos padres que están siendo enterrados a granel. Esos niños que dejaron de ser niños casi en el momento de nacer por el lugar donde ha nacido. Hoy no quiere hablar con su compañera, sabe que ella se va a percatar de que algo no va bien y no quiere que se preocupe con todo lo que ella tiene encima. Así que se inventa una excusa tonta y le hace unos audios con las niñas para animarla.
***
Vive bien en el Hospital, por raro que parezca. Como no recuerda su vida, tampoco la echa de menos, solo a sus padres, no entiende por qué no pueden venir a verlo.
***
Sabe que su compañero no está bien. No es normal que decline una invitación para hablar a solas, sin sus hijas delante. También sabe que si se lo está ocultando es para no preocuparla. El volumen de trabajo en el Hospital está alcanzando niveles desorbitados y, aunque ella no se lo cuente, hoy en día las noticias en las redes hacen que sea imposible guardar un secreto. Así que lo acepta y se hace la tonta mientras habla con sus padres y les pide que estén pendientes de él y de la niñas. Confía en ellos, son los mejores padres que conoce y nunca se han olvidado de serlo.
 ***
Ha tenido videollamada con su alumno de inglés-profesor de informática. Hoy le ha hablado de su madre, de lo que la echa de menos desde que empezó el confinamiento. Al parecer, antes de eso, comían todas las semanas juntos, tienen una buena relación. Ella traga saliva cuando escucha esto y piensa en su propia madre y en esa buena relación que solo tuvieron cuando todavía era una niña. No había vuelto a pensar en ella desde los primeros días tras el parto... Hoy su alumno le ha recordado que tiene ganas de verla.
***
Ha sido un día nuevo en la vida de Azai. Para él un día nunca es igual al anterior,  siempre hay algo nuevo, algo sorprendente o algo que le horripila y le hace llorar. Tampoco recuerda los días anteriores, pues en realidad sus días comienzan cada vez que despierta y eso ocurre hasta tres veces al día. Está cansado ya de los dibujos de la lluvia en los cristales. Eso que tanto le emocionaba al principio, después de cuatro días lloviendo ahora le aburre, se ha hecho rutina, aunque él no entienda lo que significa tener una rutina.
**
“He tenido mucho tiempo para pensar. No ahora, si no en los últimos tiempos. Casualidades de la vida, circunstancias buenas y malas, me han llevado a pasar mucho tiempo conmigo y con lo que me rodea más que con quienes me rodean. Por eso no me importa seguir pasando el rato conmigo, seguir bailando para nadie, seguir mirando cómo sale y se pone el sol cada día un poquito más al oeste.
Llevo un año exactamente viviendo en este piso en el que he vivido una especie de exilio involuntario. Desde que llegué, he observado cómo se mueve la bóveda celeste arrastrando a las constelaciones según el momento del año. He visto cómo cambiaban mis sombras reflejadas en la pared. En invierno solo intuyo el atardecer, en verano el sol se pone de frente. Me he detenido pensando que el mundo se detendría conmigo, pero el sol, como siempre, no ha dejado de salir cada mañana, desnudo o disfrazado entre las nubes. He visto cambiar los pájaros de estación, los que conocía y los que no. He comprendido que, pase lo que pase con nosotros, los mecanismos de la Naturaleza continuarán funcionando como lo llevan haciendo desde mucho antes de que a esta especie humana nos diera por aparecer. Y a pesar de todo, no he sido capaz de explicarlo. Mi mundo personal se paró hace un año y comencé un nuevo camino sin rumbo fijo. No puedo echar de menos una normalidad que no tenía, esa que otros anhelan y que yo anhelé durante un tiempo, hasta que aprendí a ser anormal, y vivir lo que me fuera viniendo. Llevo un año acostumbrándome a vivir en una incertidumbre continua, llevo treinta días encerrada con esa incertidumbre en casa... Ahora se ha detenido el mundo de todos a la vez, como si hubieran querido hacerme compañía, y me encantaría poder decirles que después de todo, se puede empezar de nuevo."
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Amargo
Inglés autor: @imagining-supernatural Traducido por: @kclaire1
Petición anónima: ¡Hola! Me preguntaba si podrías hacer un fic sobre una chica en el instituto a la que le dicen que sus padres han muerto mientras está en clase, y no tiene más familia, así que vive por su cuenta durante un tiempo. Al final Dean aparece y le cuenta que la muerte de sus padres es sobrenatural para que ella le ayude a resolver el caso. Sin embargo Dean se da cuenta de que ella no ha tenido tiempo de llorar la muerte de sus padres así que se preocupa por ella y le ayuda en el proceso del duelo.
Recuento de palabras: 5.319
Advertencias: Se menciona el suicidio.
N/A: Es más bien un DeanxReader. No acabará siendo una serie, aunque es bastante largo. Se sitúa justo después de que Sam se vaya a la universidad. El final no es muy… Dean. Pero lo llaman Fan Ficción por algo, ¿no?
English Version: Bitter
El día que ellos murieron parecía un día cualquiera. Pospusiste la alarma unas siete veces y después te arreglaste para ir corriendo al colegio. Te pusiste a toda prisa la camiseta de tu grupo favorito y unos vaqueros y mientras te pasabas el cepillo por el pelo y te ponías un poco de maquillaje como solías hacer. Después bajaste las escaleras, cogiendo una pop tart y gritándoles a tus padres que tuvieras un buen día mientras salías por la puerta.
Ojalá te hubieras tomado un momento para abrazarles y decirles que les echabas de menos porque unas cuantas horas después estaban muertos.
Pero retrocedamos un poco, porque ese día parecía ir bastante bien. Conseguiste una plaza para aparcar justo al lado de edificio y tu taquilla se abrió al primer intento. Estas pequeñas tonterías te parecían victorias y estabas de buen humor cuando tu amiga Ruby se acercó a ti.
“¿Has oído que hay una nueva familia viviendo aquí? ¿Los Foremans?” Ruby preguntó recolocándose la bandolera sobre el hombro
“Sí. Mi padre les ayudó con una problema en las tuberías cuando acabaron la mudanza anoche. Aparentemente su casa es superbonita por dentro. Como de lujo, tanto como para salir en la portada de Las Mejores Casas.” Cogiste todo lo que necesitabas y de tu taquilla y la cerraste. Ruby y tú comenzasteis a caminar juntas hacia vuestra primera clase. “Dijo que probablemente eran más ricos que toda la ciudad junta.”
“Me pregunto si tendrán algún hijo guapo de nuestra edad. No me importaría comer chocolate de buena calidad durante el día de San Valentín. Vamos, que no tienen ni siquiera que ser guapos. El dinero compensa la falta de atractivo.”
Te reíste. “No creo que tengan hijos de nuestra edad. Papá dijo que había algunas fotos y que parecía que tenían hijos, pero serían de unos veinte o treinta.” Chocaste tu hombro con el de Ruby y sonreíste. “Le pregunté sólo para informarte. Tendré que encontrarte a tu sugar daddy o a tu sugar mami en algún momento.”
“Ya te digo,” asintió con seriedad. Y después se echó a reír. “Y te encontraremos a ti un buenorro caliente también, no te preocupes.”
“¿Un buenorro caliente?, ¿en serio Rubes?”
“¿Qué? Suena muy bien.”
“Gollum seguro que también pensaba que sonaba muy bien y mira dónde está,” apuntaste.
“En un libro. Un libro de ficción.” Ruby dijo impávida.
Te encogiste de hombros. “Lo que sea. Sé que puedes conseguir algo mejor que un buenorro caliente.”
“Me gusta.” Se defendió.
“Vale. Te lo puedes quedar. De hecho,” sonreíste y sacaste tu teléfono. “Estoy cambiando tu nombre ahora mismo.”
Se rió sin darle ninguna importancia. Eso era lo que te gustaba de Ruby. No le importaba una mierda lo que el resto de la gente pensara de ella. Hacía lo que quería. “Asegúrate de poner el emoticono de los músculos y el de los corazoncitos en los ojos al lado.”
“Hecho.” Lo tecleaste rápidamente y lo guardaste en su contacto. Sonó la campana así que os apresurasteis a entrar en clase y sentaros. Mientras esperabais a que empezara la clase, Ruby te puso al día sobre las teorías conspiracioncitas que había descubierto la pasada noche. Estaba obsesionada con las teorías conspiracionistas. No era que se las creyera, sólo le encantaba la creatividad y la paranoia que llevaban consigo. Era como esa gente que se obsesionaba con los asesinos en serie, pero con Ruby eran las teorías conspiracionistas.
Seguiste de buen humor incluso cuando el señor Milligan comenzó a aburriros con el Watergate. Fingías escucharle pero lo que hacías en realidad era llevar la cuenta de las veces que se le caía el borrador o tropezaba con sus propios pies. Era el profesor mas patoso que habías conocido. Agradecías tenerle de profesor en tu último semestre de instituto porque al menos así estabas entretenida mientras estabas en clase. El último año te estaba pateando el culo.
“T/N T/A,  a la oficina principal,” la voz de la secretaria sonaba por el altavoz despertando a la mitad de la clase. “T/N, ven a la oficina principal con los libros.”
Ruby se inclinó hacia delante. “¿Qué has hecho esta vez?”
Le guiñaste un ojo y lo metiste todo en tu bandolera. “Cuánto menos sepas, mejor.”
Salir de clase antes te hacía sentir como si estuvieras en la alfombra roja. Todo el mundo te miraba con envidia según caminabas hacia la libertad y casi sentías la necesidad de saludarles y lanzarles unos besos. Cualquier cosa que te sacara de clase te parecía bien.
Pero cuando llegaste a la oficina y viste a los dos policías mirándote tristemente, cambiaste de opinión.
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Alguien llamó a la puerta y consideraste seriamente ignorarlo. Habías terminado tus deberes y querías ver Netfilx unas cuantas horas a solas. En las dos semanas que habían pasado desde que tus padres habían sido asesinados (la policía dijo que había sido un suicidio pactado pero tú sabías que tus padres no se habían suicidado) parecía que cada persona que vivía en la cuidad había pasado a ofrecerte sus condolencias. Si tenías que sentarte allí y ver como una persona más te tendía una cazuela con comida mientras intentabas no llorar, acabarías por suicidarte tú. Parecía que todo el mundo pensaba que una guiso de pollo y judías verdes lo iba a arreglar todo.
El toque en la puerta sonó de nuevo, con más insistencia esta vez y tú gruñiste, levantándote del sofá. Abriste la puerta de golpe. “¿Qué?”
“¿T/N?” dijo un hombre.
“¿SÍ?” respondiste bruscamente. En otra vida, hubieras tratado de flirtear con ese hombre tan, tan atractivo. Pero tu habilidad para relacionarte con la gente había caído en picado en las últimas semanas y te diste cuenta además que no te importaba.
“Soy Dean Winchester. Era amigo de tu padre.”
“Déjame adivinar.” Dijiste en tono sarcástico. “Piensas que es una pena que muriera como lo hizo y que no se lo merecía. Y yo soy muy joven para haber perdido a mis dos padres.”
Dean abrió de golpe sus ojos de color jade y luego los entrecerró ante tu amargura.
Cruzaste los brazos. “Mira, ya lo he oído antes. Y estoy segura de que lo escucharé de nuevo. Si realmente eras amigo suyo, entonces lamento tu perdida también. Pero no intentes despedirte de él a través de mi.”
Diste un paso atrás para entrar en casa y comenzaste a cerrar la puerta, pero Dean estiró la mano hacia delante para detenerte. “Vale, vale, vale. Para un momento, cielo.”
“¿O qué?” le retaste irritada por el mote cariñoso. “Mira, acabo de perder a mis padres y no estoy de humor para reminiscencias o lo que sea que estés buscando. Si quieres algo, mejor te das la vuelta y te vas alejando. Si quieres ayudar, entonces encuentra al hijo de puta que le ha hecho esto a mi familia. En cualquier caso, esta conversación se acaba ahora mismo.”
“¿Crees que algo les ha asesinado? Todo el mundo piensa que ha sido un doble suicidio.”
“Bueno, nade me cree,“ diste un paso más y lentamente cerraste la puerta un poco más. “Así que, gracias por pasarte por aquí pero—“
Dean dio un paso hacia delante hasta poner su pie en el marco de la puerta. Si querías cerrar la puerta, tendrías que cerrarla de un portazo contra su pie y aún no estabas lo suficientemente enfadada. “Yo te creo T/N. Y yo estoy tratando de averiguar quien los ha matado, pero necesito tu ayuda.”
“¿Tú me crees?” entrecerraste los ojos mirándole. “¿Por qué ibas tú a estar buscando a sus asesinos? Eres un Investigador Privado o del FBI o algo así?”
Dean inclinó ligeramente la cabeza. “Algo así. Tengo que hacerte unas cuantas preguntas.”
Aun así no le dejaste entrar. “Eres demasiado joven para ser del FBI. ¿Cuántos tienes, veintidós? ¿Veintitrés?”
“Empecé pronto.”
“Lo que tú digas,” abriste la puerta un poco mas dándole permiso para entrar. Caminó delante de ti, inspeccionando el cuarto de estar mientras entraba. Te quedaste detrás, mirándole deambular con sus piernas arqueadas que encontrabas extrañamente atractivas. “¿Estás buscando algo?”
Giró la cabeza hacia ti. “¿No es en esta casa donde tus padres fueron asesinados?” asentiste. “¿Y tú vives aquí sola?”
“Tengo dieciocho y preferiría no mudarme a Arizona que es donde la mejor amiga de mi madre vive. Estas son mis últimas semanas de instituto y no quiero tener que mudarme de nuevo.”
“¿Y no te asusta? ¿estar aquí?” El hizo un gesto envolviendo el resto de la casa.
“No sé cómo mi respuesta te va a ayudar a encontrar al asesino.”
Dean se encogió de hombros y caminó hasta acercarse a ti. “Es sólo que pensaba que estar sola aquí daría un poco de miedo. Ruidos extraños, luces que fluctúan… no mucha gente querría estar en la casa en la que se había cometido un asesinato.”
Sus palabras sacaron un recuerdo a la luz y le miraste con una nueva perspectiva. “No les mató un fantasma, si es lo que estás pensando.”
“Espera. ¿Qué sabes tú de fantasmas?”
“Un poltergeist encantó nuestra casa cuando nos vinimos a vivir aquí. Yo tenía ocho años. Un tío llamado Rufus, como la rata desnuda de “Kim Possible”, vino a librarnos de él, pero no antes de que matara a mi hermanito. Créeme, sé lo que los fantasmas pueden hacer, y esto no era un fantasma.”
Mientras Dean digería esta nueva información tu esperaste su reacción. Si él era como Rufus, entonces la razón por la que él estaba allí era porque algo sobrenatural estaba pasando. Si era verdad que algún monstruo había matado a tus padres, entonces Dean probablemente lo mataría y tú tendrías tu venganza. Por eso era por lo que él te había creído cuando le dijiste  que habían sido asesinados.
“Sólo porque no sea un fantasma no quiere decir que no sea un monstruo.” señaló Dean.
Hiciste girar los ojos. Hasta ahí habías llegado tú sola. No necesitabas que él te lo hiciera ver. “Vale. ¿Cómo lo averiguamos?”
“Yo te hago unas preguntas y tú te quedas aquí. Nosotros no vamos a hacer nada.” Dean hizo un gesto señalándoos a los dos, sacudiendo la cabeza.
Te cruzaste de brazos y levantaste la barbilla. “¿Por qué? ¿No crees que pueda con ello? ¿Es  porque soy una chica o porque soy joven? Porque no soy mucho más joven que tú y no tienes pinta de ser un misógino.”
Dean parecía ligeramente desconcertado por tu hostilidad. “Llevo años haciendo esto. No voy a poner tu vida en peligro—”
“Tú no estás poniendo en peligro mi vida. Yo lo estoy haciendo. Y si tú no me ayudas, empezaré a investigar por mi cuenta. Yo sola.”
“Mira, T/N. Esto no es un capitulo Scooby Doo en el que encontramos al monstruo y todo el mundo sobrevive al final. Esto es la vida real y es peligrosa.”
De nuevo giraste los ojos. “Eso ya lo sé Dean. He tenido un poltergeist viviendo en mi casa durante dos semanas. He perdido a mi hermano pequeño. He perdido a mis padres. Ya sé que es peligroso y que podemos salir heridos. Pero sea lo que sea está ahí fuera y ha matado a mis padres y no me voy a quedar sentada si puedo hacer algo. Así que te guste o no, voy a ayudarte o voy a hacerlo por mi cuenta. Tal y como yo lo veo, si te quieres asegurar de que no acabo muerta, tendrás que dejarme ayudarte.”
Dean no había dejado de mirarte a la cara mientras juzgaba si eras sincera y estabas determinada a hacerlo. Finalmente suspiró y se pasó una mano por la cara con un gesto de frustración. “Me voy a arrepentir tanto de esto.”
Casi sonreíste ante tu pequeña victoria, pero no pudiste lograr que la sonrisa de dibujara en tus labios. “Genial. ¿Por dónde empezamos?”
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“¿Un espectro? ¿cómo en esa película de los ochenta?” preguntaste, mirando la pantalla del ordenador por encima del hombro de Dean.
Te miró y parecía impresionado por tu referencia ochentera. “No del todo. Los espectros parecen humanos y sólo puedes ver su forma real si se reflejan. Se parecen a zombies de Hollywood. Y se alimentan usando un pincho que les sale de la muñeca y hacen que las muertes parezcan suicidios.”
“¿De qué se alimentan?” te inclinaste un poco más hacia delante para leer lo que ponía en la página web que Dean había abierto.
“Fluido cerebral.”
“Así que básicamente son zombies vestidos como humanos.”
“Excepto que pueden causar alucinaciones. Pueden manipular algo en la química de tu cerebro y confundirlo.” Dean se giró para mirarte y te echaste hacía atrás cuando te diste cuenta de lo cerca que tu rostro estaba del suyo. No tenías tiempo para cuelgues tontos. Tenías que vengar la muerte de tus padres. Dean se rió ante tu reacción pero no comento nada. “¿Tuvieron tus padres alguna alucinación o dijeron algo raro los días anteriores a su muerte?”
“Eh,” pensaste en los días anteriores. “¿No? Parecían bastante normales. Bueno, mi padre quería comprarse esa silla reclinable tan elegante que vio en la casa de los Foreman la noche anterior. Ni siquiera usaba la que teníamos así que no le di mucha importancia. Pero eso fue lo más raro.”
“¿Y tu madre?”
Sacudiste la cabeza. “No.”
Dean y tu pasaste las siguientes horas buscando información pero no encontrasteis nada. No sabías dónde estaba el espectro. No sabías quién era el espectro. Lo único que sabías es que estabais buscando un espectro.
Tu teléfono empezó a sonar pero lo ignoraste. No tenías ganas de lidiar con nadie en ese momento, a parte de Dean. Dean le echó un vistazo a la pantalla y levantó las cejas.  “¿Buenorro caliente?”
Te pusiste colorada y alejaste el teléfono de su vista. “Es sólo una amiga,” murmuraste maldiciendo mentalmente el momento en que le dejaste cambiarlo y el contagioso me-importa-una-mierda de Ruby. Contestaste mientras te alejabas de Dean “Hola Ruby”
“T/N, ¿cómo estás?”
Su preocupación te dio ganas de vomitar lo que probablemente no era la mejor forma de portarte con tu mejor amiga. “Estoy bien.”
“Bien. ¿Quieres pasarte por casa esta noche? Haremos un maratón de Harry Potter y crearemos nuevas recetas de Gominolas.”
“Lo siento, no puedo. Uno de los amigos de mi padre de fuera de la ciudad se ha pasado por aquí así que tengo que ser una buena anfitriona. Pero gracias.” Tener una excusa de verdad te ayudaba a no sentirte culpable por evitarla. Ruby tenía buenas intenciones, lo sabías. Pero caminaba sobre cristales a tu alrededor y te estaba volviendo loca.”
“Sin problema. Hablamos luego entonces.”
“Claro. Nos vemos.” Colgaste y cogiste aliento, luchando contra las emociones que parecían estar apareciendo de repente. No tenías tiempo para sentirte triste.
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“Dean,” le siseaste al teléfono. “Está aquí. Está en el colegio.”
“¿En serio? ¿Quién es?”
Bajaste la voz un poco más, sabiendo que el baño tenía tanto eco como una caverna. “Es la nueva familia, el tío que contrato a mi padre para arreglarle las tuberías. Es un psiquiatra y ha venido a visitar el colegio y he visto su reflejo en el espejo. Tienes que venir ahora mismo.”
“Estoy de camino.” Escuchaste el sonido del motor arrancando e intentaste relajarte. “Eh, T/N, ha sido buena idea que fueras al colegio hoy, ¿eh?”
“Que te jodan, Dean.” Habíais tenido una discusión esa mañana. Tu querías saltarte las clases pero Dean por alguna razón estaba decidido a que fueras. Estabas convencida de que era sólo para alejarte del peligro pero era molesto de cualquier manera. ¿A penas te conocía y ya te estaba dando ordenes? Qué gilipollas.
¿Por qué demonios te sentías atraída por él?
“Oh, cariño, no tienes más que pedírmelo.”
“Ya quisieras, Winchester.” Miraste la hora en el teléfono. “Tengo que volver a clase. Esta en la habitación 306 ahora mismo. Date prisa.”
Colgaste y caminaste de vuelta a clase tratando de actuar con normalidad. La cosa era que no se te hacía demasiado difícil fingir que no estaba pasando nada raro. Parecía como si realmente fuera un día como otro cualquiera. Cazando monstruos, matándolos.  Encajabas ahí.
Echaste un vistazo a la clase cuando pasabas por delante, pero no pudiste ver al Sr. Foreman. Te giraste hacia el estudiante que estaba más cerca. “¿Dónde ha ido el Sr. Foreman?”
“Se ha ido a llevar a Ruby a casa,” respondió Garth, “No se encontraba bien.”
“¿Qué?” se te aceleró el corazón. “¿Por qué se la ha llevado a casa? La enfermera está justo al final del pasillo y él no es su padre ni su guardián legal.”
Garth levantó las cejas pero no te quedaste allí para esperar a que añadiera algo más. Corriste a la ventana justo a tiempo para ver a Ruby subirse a uno de esos coches deportivos tan elegantes y al Sr. Foreman alejarse conduciendo. Saliste corriendo de la habitación y recorriste el pasillo mientras tus zancadas hacían eco en las taquillas de metal. Te precipitaste fuera del edificio justo cuando el Impala negro de Dean entraba. No le diste ni siquiera la oportunidad de aparcar, abriste la puerta del acompañante y saltaste dentro.
“Se ha llevado a Ruby. Se han ido por allí.”
“¿Qué?” incluso mientras preguntaba pisó el acelerador y salió del parking.
“Garth dice que Ruby no se sentía bien y que Mr. Foreman se la ha llevado a casa, pero eso no hubiera funcionado si él no estuviera haciendo eso de crear alucinaciones que tú dijiste que los espectros pueden hacer. ¡Allí!” Señalaste la  parte de atrás del elegante coche rojo que estaba conduciendo el espectro. “Y Ruby se sentía estupendamente esta mañana, así que no sé que habrá pasado.”
“He llamado a mi padre y dice que la mayoría de os espectros merodean por instituciones mentales porque es más fácil jugar con la mente de las personas allí. Me imagino que no tiene muchas opciones así que ha tenido que buscarse una victima.”
“Ruby no,” dijiste con resolución. “De ninguna manera voy a permitir que muera por mi culpa.”
“Hala, T/N. Esto no es culpa tuya.”
“Ruby sí. No sé por qué fue a por mis padres, pero está yendo a por Ruby porque lo sabe. Sabe que estoy trabajando contigo. Ella tiene un carácter muy fuerte, más que ninguna persona que yo haya conocido. En esa habitación había al menos una docena de personas más fáciles de romper.”
Dean dio otro giro a máxima velocidad mandándote de golpe contra la puerta.
“Creo que van hacia su casa,” dijiste repasando el mapa mental de la ciudad.
“Probablemente sea una trampa si estas en lo cierto sobre Ruby,”
“Entonces no iremos por delante. Hay un bosque en la parte este y norte, a los lados de la casa. Podemos subir a un árbol y dejarnos caer pasando la verja.” 
Dean te miró de  medio lado “¿Habías hecho esto antes?”
“Sí,” te encogiste de hombros. “Gira a la izquierda en la siguiente y luego recto unos cuatro km hasta que veamos el primer camino de tierra a la derecha.” Dean hizo lo que le decías y seguiste con tu explicación. “La mayoría de las casas de las afueras de la ciudad son así. Me he colado dentro y he salido de un montón de casas en un momento u otro para ir a fiestas y ese tipo de cosas. Así que, ¿cómo matamos a esa cosa?”
“Plata.”
“¿Plata? ¿Dónde demonios vamos a encontrar plata?” tus padres ni siquiera tenían plata de verdad.
“Tengo algunos cuchillos en el maletero.” Dean giró en el camino de tierra y te agarraste esta vez para no salir volando contra él.
“Oh, claro, Por supuesto que tienes.”
Te miró con media sonrisa. “Es mi trabajo.”
“Perfecto. Aparca justo aquí. Tenemos que caminar como unos doscientos metros.”
Dean aparcó y salisteis. Esperaste mientras abría la puerta del maletero y la caja negra y grande que había dentro. Cuando abrió la otra te quedaste sin aliento al ver el pequeño arsenal que guardaba. “Ya te lo he dicho, es mi trabajo.”
-----
Dean y tú lograsteis pasar la verja y entrar en la casa sin que os detectaran.
O eso pensabas tú.
Tan pronto como pasasteis por la puerta de atrás una mano apareció en el pasillo y te agarró del hombro alejándote de Dean.
“Vaya, ¿no es esta Y/N?” siseó Mr. Foreman. “No se supone que tienes que estar en clase.”
“¿Dónde está Ruby?” gruñiste, ignorando por completo el agudo pinchazo de su agujón detrás de tu oído. Dean os apuntó con una pistola y trataste de pensar en una forma de sacar el pequeño cuchillo de plata que tenías escondido en el bolsillo por si perdías el otro, el que tenías cuando Mr. Foreman te agarró. Llevabas menos de tres minutos en tu primera caza y ya habías perdido tu arma. Genial.
“Marinándose.”
“¿Qué demonios significa eso?”
“Dean,” Mr. Foreman sacudió la cabeza y chasqueó la lengua mientras cambiaba de objetivo. “Deberías saber que las pistolas no funcionan conmigo.”
“Balas de plata.” Dean apretó la mandíbula mientras separaba los pies para mejorar la estabilidad.
“¿Qué demonios has querido decir con marinándose?” Moviste tu mano un centímetro hacia el bolsillo pero en seguida te sobrecogió una nauseabunda sensación de vértigo.
“Yo no lo intentaría si fuera tu.” Te advirtió el espectro amenazadoramente. Te quitó el cuchillo con una mano enguantada y lo pateó lejos. “Tu amiga está totalmente a salvo ahora mismo. Es sólo que piensa que se está volviendo loca. Sabe mejor así. ¿Te gustaría verla?”
“Cabrón enfermo,” murmuraste entre dientes, intentando que el vértigo no te hiciera vomitar.
Parecía que estabais estancados. Dean no podía acceder al espectro contigo en medio y tú no podías hacer nada, y Mr. Foreman te necesitaba a ti delante para garantizar su seguridad. Clavaste los ojos en Dean, tratando de planear algo cuando una voz débil te distrajo.
“¿T/N?¿Eres tú?”
“¿Jack?” cogiste aire, tratando de mirar de donde venía la voz de tu hermano pequeño. Sabías que estaba muerto. Llevaba muerto diez años. Pero en ese momento lo olvidaste por completo. El estaba allí. Jack estaba allí y estaba vivo. “Jack, ¿Dónde estás?”
Dean cambió el peso de un pie a otro, pero mantuvo los ojos fijos en ti. “T/N, no hay nadie ahí.”
“¡Es Jack! Dean, ¡está vivo!” desde detrás de Dean, un niño pequeño de unos tres años salió tambaleándose de la habitación y Mr. Foreman aflojó el brazo lo suficiente para que tú pudieras soltarte y correr hacia tu hermano. Dean te gritó y hubo un alboroto detrás de ti pero tu sólo podías mirar a tu hermano. Tan pronto como le alcanzaste se desmaterializó en el aire. Te quedaste mirando el punto en el que había desaparecido durante un segundo antes de girarte. “¿Dónde se h—oh, Dios”
A Dean le estaban apuntando con su propia pistola y Mr. Foreman había pateado todos los cuchillos de Dean junto con los tuyos. La boca se te llenó de un sabor amargo al darte cuenta de lo que había pasado.
“No era real, ¿verdad? Sólo era una distracción.”
El espectro sacudió la cabeza y se te rompió el corazón. Jack parecía tan real. “Tus padres no lo pillaron tan pronto.”
“¿Les hiciste esto a mis padres?” gritaste. Empezaste a mover los pies acercándote a él sin más plan que el de matarle pero él quitó el seguro del arma y un vistazo a Dean logró detenerte. No podías hacer nada sin ponerle en peligro.
“Me pasé toda la noche con ellos. Es más divertido cuando puedes jugar con dos personas a la vez.”
“¿Así es como te diviertes?” Dean le preguntó con un gruñido, enfadado. ”¿Haciendo a la gente creer que están locos? Estás más enfermo de lo que pensaba.”
Oíste la voz de tu madre llamándote y temblaste, casi te volviste a mirar detrás de ti pero te las apañaste para contenerte. “No es real. Tú la mataste. Está muerta.”
Mr. Foreman sonrió. “Y todos decían que Ruby era la más lista de las dos. Ella entró al juego en cuanto la toque el hombro. Con tus padres fue fácil también. Y mucho más divertido. Hacerles creer que tú estabas en tu habitación, gritando toda  la noche. Haciendo que el pequeño Jack aporreara su puerta, llorando para que le dejaran entrar.”
“Hijo de puta” gritaste.
“Puede ser. Después de todo, yo maté a mi propia madre. Ella era un puta de verdad. Pero la tuya no lo era. ¿Es por eso por lo que aún estás atrapada en la negación? Dos semanas más tarde y aún no has pasado por el duelo.” Chasqueó la lengua. “Deberías saber que así nunca serás capaz de seguir adelante. Tu querida madre hubiera querido que siguieras adelante.”
“Eso ya no importará cuando estés muerto.” Te tragaste el picor que las lágrimas te provocaban detrás de los ojos.
“¿Es así como te sientes tú también, Dean?” Mr  Foreman preguntó de forma casual, como si esto fuera una sesión en su oficina y estuviera tratando de entenderte. “En cuanto tu padre y tú encontréis la cosa que mató a vuestra madre podréis continuar con vuestras vidas? ¿Por qué no haces como Sammy y abandonas ahora? ¿Vas a la universidad y vives una vida normal?”
Por un breve momento creíste ver un movimiento detrás de Morgan. Foreman, pero después el mundo se movió muy deprisa y te empujaron contra una pared, mientras tratabas de permanecer de pie. Escuchaste a alguien gritar, pero todo se estaba volviendo borroso y los ruidos cada vez más distantes. Había un nudo de cuerpos enlazados junto a ti, y justo antes de que tu mundo se oscureciera del todo lograste enfocar.
Sacudiste la cabeza para aclararla y miraste alrededor. Ruby tenía en la mano uno de los cuchillos de plata y parecía un cachorro asustado. Dean estaba arrodillado sobre el cuerpo del espectro que tenía otro cuchillo clavado hasta el fondo en el pecho. Por la herida salía un poco de humo y les miraste boquiabierta. “¿Qué ha pasado?”
“Y-y-yo,” Ruby hizo una pausa para tomar aliento. “Escuché voces, gente hablando y salí y…” Miró hacia donde estaba el cuerpo, horrorizada.
“Le hizo un rasguño. Lo distrajo lo suficiente para que yo pudiera matarle.” Dean le sonrió a Ruby, tratando de calmarla. “Buen trabajo, niña.”
“Gr-gracias- ¿a quién estás llamando niña?” exigió saber llevándole las manos a las caderas.
Ah, sí. Hay estaba. Ruby había vuelto. Ella estaba bien y el espectro estaba muerto. Todo había salido bien.
-----
“¿Quién es Sam?” preguntaste una vez hubisteis dejado a Ruby en su casa.
“Mi hermano. Tiene más o menos tu edad,” te miró un momento con los ojos en dos rendijas antes de volver la vista a la carretera. “Dejó esta vida para ir a la universidad.”
“¿Y dónde está?” ahora que estaba segura de que tus padres habían sido asesinados y de que la cosa que los había matado estaba muerta, no sabías que iba a ser de ti, y cualquier distracción te venía bien.
“En Stanford. Preparándose para estudiar derecho.” Había un toque de melancolía mezclada con orgullo en su voz y le miraste inquisitivamente, esperando a que se explicara. “Mi familia ha pasado por muchas cosas. Y Sam simplemente decidió irse. Nuestro padre está bastante enfadado con él.”
Le querías preguntar por su madre, pero no querías ser curiosa. Probablemente se iría pronto, y no había ninguna razón por la que quisiera contarle algo tan personal a una completa extraña.
Dean se aclaró la garganta. “Sabes, yo también perdí a mi madre. Sé lo que una pérdida así puede hacerte.”
Incluso aunque querías saberlo, tenías tus sospechas de por qué te estaba dando esa información. ¿A dónde quería ir a parar con esto? Aparcó en tu casa y apagó el coche pero no se movió. Tú simplemente esperaste.
“Cuando tenía cinto años, mi madre murió en una casa en llamas. Pero algo había causado ese fuego. Mi padre me contó que ella estaba en el techo y que el fuego salía de ella. Hemos estado buscando la cosa que mató la mató desde entonces.”
“Lo… ¿siento?” aún no estabas segura de por qué te estaba contando esto.
Se volvió para mirarte, apoyando el brazo en el respaldo del asiento. Sus ojos verdes se clavaron en los tuyos. “He visto gente buena acabar destrozada cuando morían las personas a las que amaban.”
Giraste los ojos, ahora lo entendías. “Vale, yo estoy bien.”
Dean puso la mano en tu brazo cuando te giraste para abrir la puerta del coche. “No, no lo estás. Y está bien admitirlo.”
Las lágrimas te picaban en los ojos, pero las convertiste en rabia en lugar de sucumbir a ellas. “No, ¡no está bien! He perdido a mis padres, he perdido a mi hermano. Estoy sola Dean. Tú tienes a tu hermano y a tu padre, ¡pero yo no tengo a nadie! Sólo me tengo a mi misma ahora y no puedo perder el tiempo sintiendo pena por mi misma. Tengo que seguir adelante.”
Dean alzó el brazo para limpiarte algo en la mejilla. Cuando retiró la mano te diste cuenta de que estaba húmeda. Te limpiaste las  mejillas que estaban llenas de lagrimas. Era como si las puertas de la presa se hubieran abierto y de repente no podías parar de llorar. Dean te atrajo entre sus brazos mientras tu cuerpo se sacudía liberando dos semanas de lágrimas contenidas. Le dejaste confortarte, agarrándote a su cazadora de cuero como si fuera un salvavidas.
-----
“¿Vampiros?”
 “No, pero los hombres lobos sí que son reales. Duros de roer.”
Dean y tú estabais sentados en tu sofá bebiendo cerveza que había traído antes y hablando del mundo de lo sobrenatural. Se había quedado unos cuantos días después de que matarais al espectro diciendo que necesitaba unas vacaciones. Pero tú te dabas cuenta de que se quedaba sólo para asegurarse de que estabas bien y no entendías por qué. Aunque no te importaba. Estaba bien tenerle allí.
“¿Cómo es que los hombres lobo son reales y los vampiros no?”
Dean se encogió de hombros y se acabó la cerveza, mientras ponía la botella vacía sobre la mesita, tiró de tus piernas para ponerlas en su regazo. “Sabes, si de verdad quieres aprender estas cosas, deberías lanzarte a la carretera conmigo.”
Casi te atragantaste con el último trago de la cerveza. “¿Qué?”
“Sí, no eres del todo mala. Y con un poco de entrenamiento serías una excelente cazadora. La forma en la que te enfrentaste al espectro. Lo harías bien.” Dean observó tu reacción con los ojos brillantes, disfrutando de verte con la guardia baja.
“¿No tendría-no tendría tu padre algo que decir?”
Se encogió de hombros de nuevo. “Nuestro trabajo es asegurarnos de que la gente esté a salvo. Tengo la sensación de que no vas a ser capaz de dejar esto de lado, así que, que mejor forma de asegurarme de que estas a salvo que tenerte cerca?”
“Yo-vaya,” tú habías estado planeando aprender a cazar, pero no esperabas que Dean te ofreciera un puesto a su lado.
“No estoy segura de que tu padre lo vaya a entender así.”
Dean sonrió y se deslizó para estar más cerca. “A lo mejor es un poco forzado, pero tengo más razones para querer que vengas conmigo.”
Deslizó su brazo del respaldo del sofá hacia tus hombros y se te aceleró el corazón al tenerle tan cerca. Tu voz era casi un susurro. “¿Y cuáles podrían ser esas razones?”
Dean se inclinó hacia ti, besándote suavemente. “Razones puramente egoístas.”
Sonreíste y le besaste con más fuerza. Te abrazó, reteniéndote contra su pecho. Te levantaste para poder sentarte a horcajadas sobre su regazo. Jadeando te echaste hacia atrás. “Aún no estoy segura de que deba irme contigo.”
“Estoy seguro de que puedo convencerte,” Dean gruñó. Con una sonrisa diabólica, se dedicó a hacerte cambiar de opinión.
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lacronicacoruna1 · 5 years
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6 Leyendas de culturas americanas que hablan sobre animales
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Con el fin de explicar algún aberración natural, cumplimentar una enseñanza o intentar descifrar el origen de los seres vivos, las leyendas americanas comenzaron a formar parte importante de distintas culturas a lo liberal de los siglos. En el caso de los animales, estos se han convertido en protagonistas de historias fascinantes que encantan a niños y adultos, y que incluso en el presente siguen difundiéndose por toda América.
Genial.guru recopiló para ti algunas leyendas donde los animales son los protagonistas, las cuales fueron transmitidas de coexistentes en coexistentes para preservar las tradiciones narrativas de las distintas culturas americanas.
1. La letrero del colibrí
El colibrí era considerado el portador de pensamientos por los mayas, por lo que estaba prohibido capturarlo y encerrarlo en jaulas, ya que “no se pueden encarcelar los pensamientos”. Quizás conveniente a su diminuto tamaño y a la trivialidad de su planeo es que se lo asoció con la transmisión de ideas.
Todo inició con la creación de los animales por parte de los dioses, los cuales habían fueron diseñados para cumplir un propósito en esta vida. Sin bloqueo, se olvidaron por completo de los pensamientos, y, al percatarse de eso, ya no les quedaba comedón ni maíz para crear a otro ser vivo.
Fue entonces cuando encontraron una piedra jade muy pequeña y se les ocurrió tallarla hasta formar la figura de un ave diminuta con la forma de una flecha. Finalizado el esculpido, soplaron sobre ella y salió volando. La bautizaron como x’ts’unu’um, y le encargaron la cometido de transportar los pensamientos de un circunstancia a otro. Es así como nació el colibrí, cuyas plumas reflejan hermosos colores, y el movimiento de sus alas le permite situarse delante de una rosa sin mover sus pétalos.
2. La serpiente y la indeterminación
Esta leyenda norteamericana cuenta el origen de la indeterminación y el surgimiento de la serpiente de cascabel, la cual es considerada una descendiente del gran caudillo de las serpientes conveniente a un trato que esta hizo con los nativos de tribus norteamericanas.
Según cuenta la letrero, las serpientes eran las únicas criaturas del mundo que podían reposar en la indeterminación, conveniente a que la tenían resguardada en un palacio sombrío para no tener que defenderse de los humanos o de los depredadores. Al no tener extremidades ni garras para defenderse o huir del peligro, eran más vulnerables a los ataques.
Pero un día, un representante de los humanos se acercó al caudillo de las serpientes y le suplicó que entregara a la indeterminación para poder reposar, y que, como cuota por su pedido, le ataría un cascabel en la culo para que pudiera entretenerse. Sin bloqueo, la serpiente le dijo que el cascabel solo le permitiría cederles la indeterminación por unos días, y que, si querían tenerla para siempre, debían entregarle poco con qué defenderse.
El humano empapó unas flechas con tóxico capaz de matar a otros animales y se las entregó a las serpientes. El caudillo, a cambio, le entregó un saco enorme donde guardaba a la indeterminación, y, desde aquel entonces, todos los seres vivos pueden descansar, mientras las serpientes se defienden gracias a sus colmillos.
3. Los sapos y la chaparrón
Si alguna vez te has preguntado por qué los sapos cantan en la época de lluvias, es porque, según cuenta la leyenda, estos la guían al campo para que los cultivos puedan principiar gracias al agua. Todo comenzó hace muchos abriles, cuando unos campesinos plantaron tantos maíces que no podían regarlos por completo
Para atraer a la chaparrón, los campesinos les pidieron ayuda a los sapos Cachetón, Patón, Enano y Bocón, quienes se caracterizaban por ser muy organizados. Cachetón era el líder, y le ordenó a cada miembro de su equipo que subiera a un cerro diferente. Cachetón subió hasta donde estaba la chaparrón y le dijo que saltaría muy suspensión y cantaría en cada cerro para acompañarla hasta el maizal donde la esperaban los humanos.
La chaparrón lo siguió, pero en un abrir y cerrar de ojos lo perdió de pinta, por lo que los sapos comenzaron a cantar uno a uno para que pudiera acercarse a los cerros sin problemas. Al final consiguieron llevarla hasta el maizal, donde lanzó sus gotas al suelo cultivado y consiguió que los maíces enterrados ahí germinaran. Desde entonces, los sapos siguen cantando como remembranza de aquel día.
4. El conejo de la Luna
Para los aztecas, las manchas presentes en la Luna representaban a un conejo. Y es que existe una leyenda que dice que el dios Quetzalcóatl bajó a la Tierra disfrazado de humano para conocer a los seres vivos que habitaban en ella. Pero, de todos ellos, el que más lo conmovió fue el conejo, conveniente a que decidió ayudarlo cuando lo vio solo y hambriento por el mundo.
Cuando el dios se sentó a descansar, vio que un conejo estaba comiendo adentro de su escondrijo. Le interrogo qué hacía, y el animal le dijo que cenaba un zacate, pero, al verlo con penuria, le convidó un poco. Quetzalcóatl se negó porque no comía eso, a lo cual el conejo se ofreció a sí mismo para que lo comiera.
El dios reconoció la bondad que poseía el corazón del conejo y decretó que todos los seres vivos lo tomarían como ejemplo, grabando su imagen sobre la Luna en honor a su preclaro seña.
5. La letrero del cóndor
Esta leyenda es de origen peruano, y negociación sobre un cóndor que se enamoró de una humana. Un día, se hizo acontecer por un muchacho y se acercó a la damisela para ser su amigo. Entre juegos y risas, él la aventó por el ventarrón y le reveló su identidad, diciéndole que quería tomarla por esposa y llevarla a lo suspensión de la montaña.
La muchacha se casó con el cóndor y tuvieron un hijo, pero ella extrañaba tanto a su padre que quiso regresar a casa. Un día, vio acontecer a un picaflor y le pidió que le avisara a su padre lo que había sucedido con ella. El ave se acercó al hombre y le explicó lo sucedido, diciéndole que tenía un plan para rescatarlos a ella y al pequeño. Para eso, debían aguantar a la montaña un imbécil arcaico y un par de sapos de distintos tamaños.
Dejarían pasar por la bajada al imbécil para distraer al cóndor, mientras que los sapos serían dejados en el vivienda. El ave, al ver al animal, pensó que sería un buen festín y fue a perseguirlo, mientras que el picaflor le decía a la muchacha y al inmaduro que corriesen montaña debajo donde su padre los esperaba.
Cuando el cóndor regresó, el picaflor le dijo que la muchacha y el pequeño se habían convertido repentinamente en dos sapos. Al comprobar que no mentía, se sintió tan triste que decidió demoler por el bóveda celeste solo por el resto de su vida.
6. La letrero del cangrejo
Y, por posterior, existe una leyenda guaraní que explica por qué los cangrejos caminan al revés. Todo comenzó con Yrasema, una pupila de hermosa voz a la que le gustaba cantar cerca de los ríos guaraníes. Sin bloqueo, un día, cayó enferma de la cuello, haciendo que su religiosa, Sypave, enviara a su hijo, Japeusa, a despabilarse hojas de agria y cáscaras de inga para aliviarla.
Japeusa, quien envidiaba a su hermana, recogió hojas de ka’ati, ortiga y naranjas agrias para preparar un brebaje tremendo que cerraría para siempre la cuello de Yrasema. Pero al ver lo que había causado, se arrepintió y comenzó a saltar por todas las hierbas altas del bosque. Los cantos de su hermana fueron repetidos por la tierra y las plantas, provocando que el damisela siguiera corriendo hasta un río, en el cual se sumergió.
Días a posteriori, el río devolvió a la tierra el bosquejo de Japeusa, y, de él, salió un animal muy extraño que caminaba al revés con respecto a otros seres vivos, al cual se le llamó cangrejo. Y es que Tupá, el dios de los guaraníes, castigó al damisela obligándolo a caminar siempre al revés para que recordara el crimen que había cometido contra Yrasema.
¿Qué es lo que más te gusta de las leyendas de animales? ¿Piensas que estas narraciones pueden aportar una gran enseñanza de vida? Cuéntanos en la sección de comentarios.
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isabella880 · 5 years
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6 Leyendas de culturas americanas que hablan sobre animales
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Con el fin de explicar algún aberración natural, cumplimentar una enseñanza o intentar descifrar el origen de los seres vivos, las leyendas americanas comenzaron a formar parte importante de distintas culturas a lo liberal de los siglos. En el caso de los animales, estos se han convertido en protagonistas de historias fascinantes que encantan a niños y adultos, y que incluso en el presente siguen difundiéndose por toda América.
Genial.guru recopiló para ti algunas leyendas donde los animales son los protagonistas, las cuales fueron transmitidas de coexistentes en coexistentes para preservar las tradiciones narrativas de las distintas culturas americanas.
1. La letrero del colibrí
El colibrí era considerado el portador de pensamientos por los mayas, por lo que estaba prohibido capturarlo y encerrarlo en jaulas, ya que “no se pueden encarcelar los pensamientos”. Quizás conveniente a su diminuto tamaño y a la trivialidad de su planeo es que se lo asoció con la transmisión de ideas.
Todo inició con la creación de los animales por parte de los dioses, los cuales habían fueron diseñados para cumplir un propósito en esta vida. Sin bloqueo, se olvidaron por completo de los pensamientos, y, al percatarse de eso, ya no les quedaba comedón ni maíz para crear a otro ser vivo.
Fue entonces cuando encontraron una piedra jade muy pequeña y se les ocurrió tallarla hasta formar la figura de un ave diminuta con la forma de una flecha. Finalizado el esculpido, soplaron sobre ella y salió volando. La bautizaron como x’ts’unu’um, y le encargaron la cometido de transportar los pensamientos de un circunstancia a otro. Es así como nació el colibrí, cuyas plumas reflejan hermosos colores, y el movimiento de sus alas le permite situarse delante de una rosa sin mover sus pétalos.
2. La serpiente y la indeterminación
Esta leyenda norteamericana cuenta el origen de la indeterminación y el surgimiento de la serpiente de cascabel, la cual es considerada una descendiente del gran caudillo de las serpientes conveniente a un trato que esta hizo con los nativos de tribus norteamericanas.
Según cuenta la letrero, las serpientes eran las únicas criaturas del mundo que podían reposar en la indeterminación, conveniente a que la tenían resguardada en un palacio sombrío para no tener que defenderse de los humanos o de los depredadores. Al no tener extremidades ni garras para defenderse o huir del peligro, eran más vulnerables a los ataques.
Pero un día, un representante de los humanos se acercó al caudillo de las serpientes y le suplicó que entregara a la indeterminación para poder reposar, y que, como cuota por su pedido, le ataría un cascabel en la culo para que pudiera entretenerse. Sin bloqueo, la serpiente le dijo que el cascabel solo le permitiría cederles la indeterminación por unos días, y que, si querían tenerla para siempre, debían entregarle poco con qué defenderse.
El humano empapó unas flechas con tóxico capaz de matar a otros animales y se las entregó a las serpientes. El caudillo, a cambio, le entregó un saco enorme donde guardaba a la indeterminación, y, desde aquel entonces, todos los seres vivos pueden descansar, mientras las serpientes se defienden gracias a sus colmillos.
3. Los sapos y la chaparrón
Si alguna vez te has preguntado por qué los sapos cantan en la época de lluvias, es porque, según cuenta la leyenda, estos la guían al campo para que los cultivos puedan principiar gracias al agua. Todo comenzó hace muchos abriles, cuando unos campesinos plantaron tantos maíces que no podían regarlos por completo
Para atraer a la chaparrón, los campesinos les pidieron ayuda a los sapos Cachetón, Patón, Enano y Bocón, quienes se caracterizaban por ser muy organizados. Cachetón era el líder, y le ordenó a cada miembro de su equipo que subiera a un cerro diferente. Cachetón subió hasta donde estaba la chaparrón y le dijo que saltaría muy suspensión y cantaría en cada cerro para acompañarla hasta el maizal donde la esperaban los humanos.
La chaparrón lo siguió, pero en un abrir y cerrar de ojos lo perdió de pinta, por lo que los sapos comenzaron a cantar uno a uno para que pudiera acercarse a los cerros sin problemas. Al final consiguieron llevarla hasta el maizal, donde lanzó sus gotas al suelo cultivado y consiguió que los maíces enterrados ahí germinaran. Desde entonces, los sapos siguen cantando como remembranza de aquel día.
4. El conejo de la Luna
Para los aztecas, las manchas presentes en la Luna representaban a un conejo. Y es que existe una leyenda que dice que el dios Quetzalcóatl bajó a la Tierra disfrazado de humano para conocer a los seres vivos que habitaban en ella. Pero, de todos ellos, el que más lo conmovió fue el conejo, conveniente a que decidió ayudarlo cuando lo vio solo y hambriento por el mundo.
Cuando el dios se sentó a descansar, vio que un conejo estaba comiendo adentro de su escondrijo. Le interrogo qué hacía, y el animal le dijo que cenaba un zacate, pero, al verlo con penuria, le convidó un poco. Quetzalcóatl se negó porque no comía eso, a lo cual el conejo se ofreció a sí mismo para que lo comiera.
El dios reconoció la bondad que poseía el corazón del conejo y decretó que todos los seres vivos lo tomarían como ejemplo, grabando su imagen sobre la Luna en honor a su preclaro seña.
5. La letrero del cóndor
Esta leyenda es de origen peruano, y negociación sobre un cóndor que se enamoró de una humana. Un día, se hizo acontecer por un muchacho y se acercó a la damisela para ser su amigo. Entre juegos y risas, él la aventó por el ventarrón y le reveló su identidad, diciéndole que quería tomarla por esposa y llevarla a lo suspensión de la montaña.
La muchacha se casó con el cóndor y tuvieron un hijo, pero ella extrañaba tanto a su padre que quiso regresar a casa. Un día, vio acontecer a un picaflor y le pidió que le avisara a su padre lo que había sucedido con ella. El ave se acercó al hombre y le explicó lo sucedido, diciéndole que tenía un plan para rescatarlos a ella y al pequeño. Para eso, debían aguantar a la montaña un imbécil arcaico y un par de sapos de distintos tamaños.
Dejarían pasar por la bajada al imbécil para distraer al cóndor, mientras que los sapos serían dejados en el vivienda. El ave, al ver al animal, pensó que sería un buen festín y fue a perseguirlo, mientras que el picaflor le decía a la muchacha y al inmaduro que corriesen montaña debajo donde su padre los esperaba.
Cuando el cóndor regresó, el picaflor le dijo que la muchacha y el pequeño se habían convertido repentinamente en dos sapos. Al comprobar que no mentía, se sintió tan triste que decidió demoler por el bóveda celeste solo por el resto de su vida.
6. La letrero del cangrejo
Y, por posterior, existe una leyenda guaraní que explica por qué los cangrejos caminan al revés. Todo comenzó con Yrasema, una pupila de hermosa voz a la que le gustaba cantar cerca de los ríos guaraníes. Sin bloqueo, un día, cayó enferma de la cuello, haciendo que su religiosa, Sypave, enviara a su hijo, Japeusa, a despabilarse hojas de agria y cáscaras de inga para aliviarla.
Japeusa, quien envidiaba a su hermana, recogió hojas de ka’ati, ortiga y naranjas agrias para preparar un brebaje tremendo que cerraría para siempre la cuello de Yrasema. Pero al ver lo que había causado, se arrepintió y comenzó a saltar por todas las hierbas altas del bosque. Los cantos de su hermana fueron repetidos por la tierra y las plantas, provocando que el damisela siguiera corriendo hasta un río, en el cual se sumergió.
Días a posteriori, el río devolvió a la tierra el bosquejo de Japeusa, y, de él, salió un animal muy extraño que caminaba al revés con respecto a otros seres vivos, al cual se le llamó cangrejo. Y es que Tupá, el dios de los guaraníes, castigó al damisela obligándolo a caminar siempre al revés para que recordara el crimen que había cometido contra Yrasema.
¿Qué es lo que más te gusta de las leyendas de animales? ¿Piensas que estas narraciones pueden aportar una gran enseñanza de vida? Cuéntanos en la sección de comentarios.
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lacronicacoruna · 5 years
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6 Leyendas de culturas americanas que hablan sobre animales
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Con el fin de explicar algún aberración natural, cumplimentar una enseñanza o intentar descifrar el origen de los seres vivos, las leyendas americanas comenzaron a formar parte importante de distintas culturas a lo liberal de los siglos. En el caso de los animales, estos se han convertido en protagonistas de historias fascinantes que encantan a niños y adultos, y que incluso en el presente siguen difundiéndose por toda América.
Genial.guru recopiló para ti algunas leyendas donde los animales son los protagonistas, las cuales fueron transmitidas de coexistentes en coexistentes para preservar las tradiciones narrativas de las distintas culturas americanas.
1. La letrero del colibrí
El colibrí era considerado el portador de pensamientos por los mayas, por lo que estaba prohibido capturarlo y encerrarlo en jaulas, ya que “no se pueden encarcelar los pensamientos”. Quizás conveniente a su diminuto tamaño y a la trivialidad de su planeo es que se lo asoció con la transmisión de ideas.
Todo inició con la creación de los animales por parte de los dioses, los cuales habían fueron diseñados para cumplir un propósito en esta vida. Sin bloqueo, se olvidaron por completo de los pensamientos, y, al percatarse de eso, ya no les quedaba comedón ni maíz para crear a otro ser vivo.
Fue entonces cuando encontraron una piedra jade muy pequeña y se les ocurrió tallarla hasta formar la figura de un ave diminuta con la forma de una flecha. Finalizado el esculpido, soplaron sobre ella y salió volando. La bautizaron como x’ts’unu’um, y le encargaron la cometido de transportar los pensamientos de un circunstancia a otro. Es así como nació el colibrí, cuyas plumas reflejan hermosos colores, y el movimiento de sus alas le permite situarse delante de una rosa sin mover sus pétalos.
2. La serpiente y la indeterminación
Esta leyenda norteamericana cuenta el origen de la indeterminación y el surgimiento de la serpiente de cascabel, la cual es considerada una descendiente del gran caudillo de las serpientes conveniente a un trato que esta hizo con los nativos de tribus norteamericanas.
Según cuenta la letrero, las serpientes eran las únicas criaturas del mundo que podían reposar en la indeterminación, conveniente a que la tenían resguardada en un palacio sombrío para no tener que defenderse de los humanos o de los depredadores. Al no tener extremidades ni garras para defenderse o huir del peligro, eran más vulnerables a los ataques.
Pero un día, un representante de los humanos se acercó al caudillo de las serpientes y le suplicó que entregara a la indeterminación para poder reposar, y que, como cuota por su pedido, le ataría un cascabel en la culo para que pudiera entretenerse. Sin bloqueo, la serpiente le dijo que el cascabel solo le permitiría cederles la indeterminación por unos días, y que, si querían tenerla para siempre, debían entregarle poco con qué defenderse.
El humano empapó unas flechas con tóxico capaz de matar a otros animales y se las entregó a las serpientes. El caudillo, a cambio, le entregó un saco enorme donde guardaba a la indeterminación, y, desde aquel entonces, todos los seres vivos pueden descansar, mientras las serpientes se defienden gracias a sus colmillos.
3. Los sapos y la chaparrón
Si alguna vez te has preguntado por qué los sapos cantan en la época de lluvias, es porque, según cuenta la leyenda, estos la guían al campo para que los cultivos puedan principiar gracias al agua. Todo comenzó hace muchos abriles, cuando unos campesinos plantaron tantos maíces que no podían regarlos por completo
Para atraer a la chaparrón, los campesinos les pidieron ayuda a los sapos Cachetón, Patón, Enano y Bocón, quienes se caracterizaban por ser muy organizados. Cachetón era el líder, y le ordenó a cada miembro de su equipo que subiera a un cerro diferente. Cachetón subió hasta donde estaba la chaparrón y le dijo que saltaría muy suspensión y cantaría en cada cerro para acompañarla hasta el maizal donde la esperaban los humanos.
La chaparrón lo siguió, pero en un abrir y cerrar de ojos lo perdió de pinta, por lo que los sapos comenzaron a cantar uno a uno para que pudiera acercarse a los cerros sin problemas. Al final consiguieron llevarla hasta el maizal, donde lanzó sus gotas al suelo cultivado y consiguió que los maíces enterrados ahí germinaran. Desde entonces, los sapos siguen cantando como remembranza de aquel día.
4. El conejo de la Luna
Para los aztecas, las manchas presentes en la Luna representaban a un conejo. Y es que existe una leyenda que dice que el dios Quetzalcóatl bajó a la Tierra disfrazado de humano para conocer a los seres vivos que habitaban en ella. Pero, de todos ellos, el que más lo conmovió fue el conejo, conveniente a que decidió ayudarlo cuando lo vio solo y hambriento por el mundo.
Cuando el dios se sentó a descansar, vio que un conejo estaba comiendo adentro de su escondrijo. Le interrogo qué hacía, y el animal le dijo que cenaba un zacate, pero, al verlo con penuria, le convidó un poco. Quetzalcóatl se negó porque no comía eso, a lo cual el conejo se ofreció a sí mismo para que lo comiera.
El dios reconoció la bondad que poseía el corazón del conejo y decretó que todos los seres vivos lo tomarían como ejemplo, grabando su imagen sobre la Luna en honor a su preclaro seña.
5. La letrero del cóndor
Esta leyenda es de origen peruano, y negociación sobre un cóndor que se enamoró de una humana. Un día, se hizo acontecer por un muchacho y se acercó a la damisela para ser su amigo. Entre juegos y risas, él la aventó por el ventarrón y le reveló su identidad, diciéndole que quería tomarla por esposa y llevarla a lo suspensión de la montaña.
La muchacha se casó con el cóndor y tuvieron un hijo, pero ella extrañaba tanto a su padre que quiso regresar a casa. Un día, vio acontecer a un picaflor y le pidió que le avisara a su padre lo que había sucedido con ella. El ave se acercó al hombre y le explicó lo sucedido, diciéndole que tenía un plan para rescatarlos a ella y al pequeño. Para eso, debían aguantar a la montaña un imbécil arcaico y un par de sapos de distintos tamaños.
Dejarían pasar por la bajada al imbécil para distraer al cóndor, mientras que los sapos serían dejados en el vivienda. El ave, al ver al animal, pensó que sería un buen festín y fue a perseguirlo, mientras que el picaflor le decía a la muchacha y al inmaduro que corriesen montaña debajo donde su padre los esperaba.
Cuando el cóndor regresó, el picaflor le dijo que la muchacha y el pequeño se habían convertido repentinamente en dos sapos. Al comprobar que no mentía, se sintió tan triste que decidió demoler por el bóveda celeste solo por el resto de su vida.
6. La letrero del cangrejo
Y, por posterior, existe una leyenda guaraní que explica por qué los cangrejos caminan al revés. Todo comenzó con Yrasema, una pupila de hermosa voz a la que le gustaba cantar cerca de los ríos guaraníes. Sin bloqueo, un día, cayó enferma de la cuello, haciendo que su religiosa, Sypave, enviara a su hijo, Japeusa, a despabilarse hojas de agria y cáscaras de inga para aliviarla.
Japeusa, quien envidiaba a su hermana, recogió hojas de ka’ati, ortiga y naranjas agrias para preparar un brebaje tremendo que cerraría para siempre la cuello de Yrasema. Pero al ver lo que había causado, se arrepintió y comenzó a saltar por todas las hierbas altas del bosque. Los cantos de su hermana fueron repetidos por la tierra y las plantas, provocando que el damisela siguiera corriendo hasta un río, en el cual se sumergió.
Días a posteriori, el río devolvió a la tierra el bosquejo de Japeusa, y, de él, salió un animal muy extraño que caminaba al revés con respecto a otros seres vivos, al cual se le llamó cangrejo. Y es que Tupá, el dios de los guaraníes, castigó al damisela obligándolo a caminar siempre al revés para que recordara el crimen que había cometido contra Yrasema.
¿Qué es lo que más te gusta de las leyendas de animales? ¿Piensas que estas narraciones pueden aportar una gran enseñanza de vida? Cuéntanos en la sección de comentarios.
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mariaabeleng · 5 years
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23:21
Cuando despierto en mi cama al día siguiente de la fiesta me estiro un poco como cada mañana antes de cepillar mis dientes y entonces lo analizo todo con detalles porque lo recuerdo perfectamente, y me pregunto qué piensas tú. Anoche luego de dejarme en casa, luego de besarnos por última vez y decirnos buenas noches, antes de entrar en el ascensor me miraste sonriente, y seguramente yo tenía cara de perrito, con los ojos más aguados que nunca. Todavía no me lo puedo creer.
Y todavía no sé que hacer.
Luego de que te marcharas aún me sentía en las nubes, borracha de tus besos. Y después de ducharme me dormí y soñé contigo, pero lo que hicimos en la playa, y frente a mi apartamento no fue un sueño, nos besamos.
En realidad espero que estés tan nervioso y conmocionado como lo estoy yo. Nunca había estado tan segura de lo mucho que me fascinas, bueno, quizá sí que lo estaba, me encantas. Y en medio de los besos que nos dimos ayer, seguramente te lo he dicho, sólo espero que sea mutuo, porque a mí en serio me gustas.
Aunque luego de todo el tiempo que llevo junto a ti, no solo me gustas. Adoro cada cosa que haces, y lo hermoso que eres en cada aspecto, cada acción, cada imperfección, adoro hasta las cosas que detesto de ti.
Tan mal me traes que esta mañana antes de salir de casa he preparado el café y lo he dejado todo en la cafetera porque olvidé servirme un poco, estoy tan nerviosa, porque hoy te veré como cada día en la oficina y tengo miedo. Tengo un café frío cuando llego al trabajo, riendo porque me he acordado de la cafetera.
Los lentes oscuros han sido un acierto, porque no pueden ver que te busco. Es realmente raro poder actuar de alguna forma luego de lo de ayer, y más porque todo el mundo lo sabe, y todos están expectantes porque nadie se lo esperaba, ni yo, seguramente ni tú. Cuando nos topamos al fin te beso la mejilla, como siempre, tú me sonríes y yo me derrito ante esos hoyuelos que te hacen tan adorable, aunque seas un hombre de treinta y pocos.
El día será complejo.
ㅡ¿Qué tal la resaca?ㅡ me preguntas mientras caminamos dentro de la oficina, y todos nos miran de reojo o directamente. No estamos borrachos, no nos besaremos ahora.. espero que después cuando estemos solos, sí.
ㅡJajajaㅡ golpeo tu hombro suavemente como normalmente cuando sueltas una bromaㅡ no me ves, estoy reluciente ㅡsonríoㅡ aunque esta mañana puse la cafetera, pero salí sin tomar café.
ㅡYa.. jajaㅡ es tu risita nerviosa ㅡyo si lo bebí en casa, pero estoy que me muero con el dolor de cabezaㅡ tocas un costado de tu cabeza y ríes.
Me quito los lentes y camino hacia el escritorio, dejo mi vaso y abro el portatil, diciéndote que también me duele la cabeza. En un momento nos hemos mirado y sin decir nada solo nos hemos plantado ahí quiero hablar de lo de anoche, y creo que tú también. Lo creo porque me miras no dices nada. Está claro que es porque somos tontos y no sabemos como comenzar.
ㅡQuiero..ㅡ empiezas, pero entonces llega Germania y dice que necesita que vayas a firmar unos acuerdos ㅡespérame para el lunchㅡ me dices, señalándome con un dedo.
ㅡSi me encuentro con ánimo, quien sabeㅡ encojo los hombros riendo, tú me sonríes y te vas.
========================================
Omniciente
ㅡUuuy cuanto amorㅡ habló Germania mientras caminaban hacia la oficina de él.
ㅡTodavía ni comenzamosㅡ suspiró él.
ㅡYo creo que comenzaron anocheㅡ dijo mientras giraba los ojos.
ㅡBueno, estabamos muy ebrios. No sé que pensarㅡ habló consigo mismo en voz alta ㅡen realidad tengo un poco de miedo.
ㅡNo sé porqué lo están pensando tantoㅡ murmuró ella ㅡpensé que habían dormido juntos, por como se comían la boca anoche.
No es que él fuera un santo, pero hasta ese momento no había pensado en ello, si se hubieran acostado, seguramente habría sido más fácil hablar de ello luego de despertar en su cama juntos, juntos y no como amigos que se quedan dormidos, juntos como amantes. Pero bueno, ya hablarían y quizá conseguían llegar a algo, porque por supuesto que se gustaban, anoche lo había descubierto.
ㅡNo pasamos de besarnosㅡ volvió a suspirar ㅡe íbamos a hablar antes de que me interrumpieras ㅡla miró inquisitivamente.
ㅡNo iban a hablar una mierdaㅡ le dijo riendo ㅡsi son más tontos, creo que llevan enamorados desde que se conocieronㅡ ella hizo un gesto, y movió las cejas ㅡy eso ya hace como tres años y poco más.
ㅡEso no es ciertoㅡ habló mientras tomaba los documento que ella le extendía ㅡy ella ninguna vez ha hecho un roce no creo que yo le haya gustado desde el inicio.
ㅡSe gustan desde que se vieronㅡ giró los ojos nuevamente.
La verdad es que Germania estaba sumamente irritada por todo, y es que como a muchas otras en la oficina ella iba tras él, y que ellos se hubieran besado anoche como si fueran colegiales en su primera relación, a todos les había fastidiado. Claro inicialmente se preveía que ellos iban a estar juntos ya que pasaban pegados el uno al otro, pero luego todas retomaron sus esperanzas. Si no había pasado en tres años ¿cuál era la posibilidad de que pase ahora? Pues que estén perdidamente borrachos, enamorados y juntos en la playa, en medio de tragos.
Tampoco es como si nunca se hubieran embriagado juntos, lo habían hecho muchísimas veces, pero nunca tantísimo y si bien ya ebrios se habían insunuado sus sentimientos o coqueteándose de algún modo sin embargo nunca se lo habían creido al otro ¿cómo es que él iba a creer que le encantaban sus ojos y su mirada profunda, cuando también hablaban de culo hermoso de las Kardashian?
ㅡHablaremos a la hora del lunchㅡ dijo acabando de firmar los documentos.
ㅡAdiós ㅡ contestó ella antes de marcharse y cerrar de un portazo.
Ya que estaban en su despacho él se quedó a trabajar en sus proyectos, pensando de pausa en pausa que decir en el almuerzo, si lo esperaba ella, que obviamente lo iba a esperar. Ellos tenían costumbres, por eso mismo es que por la mañana ella le había besadonle mejilla. Y el día anterior casi había dado uno de buenas noches, pero se besaron.
Él se acordaba de la mayoría de las cosas que habían pasado la noche anterior, sabía que quien había besado primero fue él, y era obvio porque se moría de ganas, y de celos cuando la observó hablando tan animadamente con alguien más; se despidió sonriente, amable y rápidamente de las mujeres que lo habían acorralado y con las que hablaba amenamente para ir a su encuentro. Y después ir por ahí emborrachándose más, hasta que en una conversación extraña se acabaron rosando y besando, ya no había vuelta atrás, ya solo podían besarse más y más. Él le dijo que le gustaba, que amaba hasta la forma en la que ella respiraba, y ella le había susurrado que estaba perdida por sus palabras, sus ojos y todo él hace tiempísimo atrás. Se acordaba de eso pero también cabía la posibilidad de que fuera un sueño.
Porque esa noche había soñado con ella, suponía que toda la noche. Desde que llegó a su casa con una sonrisa bobalicona, pensando en los besos que se habían dado. Se duchó rapidamente con agua fría y se durmió. Soñó con sus besos, con sus brazos al rededor de él, con sus manos entrelazadas y sus lengua acariciándose mientras ellos bailaban lentamente, por eso es que esa mañana cuando despertó tenía una erección, no era tan extraño, pero definitivamente no era lo más habitual.
Y volviendo a la realidad actual ¿cómo iba a comenzar a hablarle? ¿qué iba a decirle? ¿debería abordar el tema casualmente o ser puntual? Quizá ir bruscamente iba a ser lo correcto, o quizá debería pasear lentamente antes de llegar a ese momento y afrontar que se habían besado como amantes desenvueltos la noche anterior ¿sería mucho si le decía que estaba enamorado de ella? ¿se acordaría ella de todo? Y si era así ¿era verdad todo lo que le había dicho? Quien sabe, él de momento solo sabía que se estaba poniendo bastante nervioso.
○○○○
A la hora del luch se dirigió a su despacho y dió dos golpecitos en la puerta abieta antes de entrar.
ㅡAquí estásㅡ caminó hasta sentarse en la silla frente a su escritorio, sonriente.
ㅡPues esta es mi oficinaㅡ le señaló con un boligráfo ㅡaquí estoy.
ㅡVamos yaㅡ tocó su estómago  ㅡquiero engordar.
ㅡY yo adelgazarㅡ ella sonrió ㅡpero también me muero de hambre.
ㅡEntonces vámonosㅡ se levantó y ella también avanzando hacia la puerta, y enredaron sus brazos de gancho antes de salir por la puerta.
ㅡDeberíamos de comer pizza hoyㅡ sonrió mirándola mientras caminaban por los pasillos.
ㅡCon bordes de quesoㅡ continuó ella saliendo del edificio.
ㅡ¡Mitad de piña, mitad de carnes y vino! ㅡdijeron ambos porque también era una tradición esa pizza.
Al llegar al restaurante la conversación transcurrió como una normal, como siempre entre ellos, también porque estaban mirando al frente en el trayecto así hasta que se sentaron uno frente al otro en la mesa.
Ordenaron. Se miraron. Sonrieron. Y se callaron.
ㅡTenemos que hablarloㅡ dijo ella luego de un silencio.
ㅡYa lo séㅡ sabía perfectamente a qué se refería.
El tiempo entre una orden y su llegada en ese lugar aproximaba los cuarenta minutos. Les quedaba muchísimo tiempo para hablar, solo restaba comenzar a hacerlo.
ㅡYo lo empecé, lo sientoㅡ dijo él.
ㅡA mí me gustóㅡ se miraron a los ojos.
ㅡNo dije que no fuese así, a mí también me gustóㅡ habló de inmediato.
ㅡEntonces por q..
ㅡDije que lo lamentaba porque sucedió mientras estabamos ebrios, no me arrepientoㅡ no apartó la mirada aunque estuvo manteniendo contacto con ojos oscuros todo el rato.
ㅡYo tampoco, ya llevo tiempoㅡ suspiró.
ㅡ¿Tú también?ㅡabrió los ojos escandalosamente.
ㅡ¿Tú también?ㅡ ella se extrañó.
ㅡ¿Como que llevas tiempo?ㅡ sonrió ㅡo sea que esta carita..ㅡ levantó las cejas.
ㅡNo seas tontoㅡ sonrió ㅡa ver.. no te voy a decir que me gustas, porque me encantasㅡ dijo esto sin mirarlo a los ojos ㅡes solo que..
ㅡOye..ㅡél se inclinò por sobre la mesa, mirándola con sus ojos arrugados en las esquinas por la sonrisa amplia, le acunó la cara entre las manosㅡ a mí también me fascinas, no hay que hacerlo tan díficil.
ㅡBésameㅡ dijo ella acercándose un poco más ㅡno te das cuenta que perdemos tiempo a..
No pudo terminar ese inciso de regaño, porque dos labios carnosos atrapaban los suyos, presionándose, deteniendo y calmando ese calambre que se iba formando en su estómago, acariciando suavemente, hálando con cuidado. Él deslizó sus dedos lentamente por las mejillas en un toque delicado, dejándose besar y besando, sintiendo una manos que le apretaban las muñecas con firmeza.
Dejaron de besarse al escuchar al camarero aclararse la garganta, para dejar los pasabocas y servir las copas.
ㅡLo lamentoㅡ se disculpó el jóven antes de marcharse.
Ninguno contestó a la disculpa, solo se volvieron a mirar.
ㅡ¿Tú te das cuenta el tiempo que llevamos y wue podríamos haber estado juntos?ㅡ habló él, tomando un bocadillo.
ㅡTampoco te creas que me gustas desde que te vi.
ㅡDesde que me oíste.
ㅡHombre si cuando hablas parece que tienes una papa en la boca.
ㅡVamos a ver que eres mala.
ㅡPero bueno, a partir del tiempo, me has ido gustando un poco cada vez, supongo.
ㅡA mí si me gustabas desde el inicio, y ya empecé a caer por ti cuanto más te conocía.
ㅡYa..
Sin duda escucharle no era lo mismo que confesarse, que verguenza tenía en ese momento, que verguenza tenían los dos, y sin embargo continuaron esa convesación, con lo mucho que se enredaron esa noche. Bendito fuera lo que sea que los había hecho acabar robandole el aliento al otro.
Terminaron de almorzar y al salir del restaurante, una vez tomados del brazo, antes de regresar a la oficina, él el tomo la mano entrelazando sus dedos. Todos iban a enterarse, no solo se habían besado, estaban saliendo y esa había sido su primera cita.
ㅡNos van a mirar raroㅡ negó ella con la cabeza, mirando hacia sus manos.
ㅡEl punto es que se enteren que estás conmigo.
ㅡY que tù estàs conmigoㅡ presionó el índice en su pecho.
ㅡCreo que no cabe duda de eso desde ayerㅡse acercó él.
Se dieron un beso casto antes de entrar a la oficina, aún tomados de la mano y antes de dejarla en su despacho, volvió a besarla, abrazando su cintura.
No había quien dudara de que ellos estaban empezando una relación romántica.
El sentimiento que recorría el cuerpo de cada uno se sentía como una mezcla entre libertad y alegría, estaban enamorados.
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javiselerrante · 5 years
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La mayoría de los que marcharon el #24A eran viejos
Son los viejos que te pueden salir de garantes en el banco porque son decentes.
Son los viejos que tienen factura hasta de la Spica que compraron hace 40 años y tienen todo a su nombre.
Son los viejos de "clase media", que arrancaron comiendo fideos blancos y hoy tienen su casa, su auto o la vida que vos les envidiás tanto después de romperse el orto 40 o 50 años.
Son los viejos que hicieron los talleres o comercios donde hoy laburan los que laburan, o son los viejos a los que obligaste a cerrar sus negocios o talleres asqueados de tanto apriete para pagar coimas y mantener vagos.
Son gente decente que hizo lo poco que hoy queda en pie. Son tipos que fueron con la sube en bondi o en subte y que las 7 u 8 cuadras que tuvieron que caminar les dolieron y el frío les hizo mal pero igual fueron.
No los cargaron en micros, ni les pagaron el día, ni les tomaron lista, ni les dieron el refrigerio, ni le cobraron al patrón los del sindicato para después tirarles unos mangos pa’l ferné o la birra.
No rompieron patrulleros. No saquearon comercios. No apedrearon policías. No destruyeron la plaza "porque la pagaron ellos".
No remataron a palazos a policías desmayados por sus pedradas. No pidieron que los mantengan sin trabajar, muchos de ellos son jubilados, tienen achaques y aún trabajan. Muchos ganan muchísimo menos que un maestro promedio.
Son los que con su Anses te pagaron por años el Fútbol gratis. Son los que te pagaron automovilismo para todos, computadoras para todos y planes para todos.
Son tus abuelos, tus tíos o tus papás, los que viste levantarse a las 4 am y volver a casa después de las 10 de la noche. Son a los que vas a buscar cuando estás en el horno para que te salven, te salgan de garantes, te gestionen un crédito o a los que les pedís que te den una mano con tus hijos.
Son los que no duermen tranquilos si no pagaron un impuesto en fecha. Es la gente decente que formó todo lo que ves a tu alrededor y lograron lo que tanto envidiás laburando.
Son los que entendieron que "el derecho a una vivienda digna" era el derecho a romperse el culo para poder tenerla y no pidieron nunca que les den nada de arriba, solo pedían que los dejen trabajar y no los jodan.
Son los que compraron el terreno, los que hicieron el pozo del agua, y el pozo ciego ellos y levantaron las paredes con sus manos y hoy tienen el chalet que tanto les envidian.
Esa gente es la que te dijo basta.
La gente decente, de callos en las manos de muchos, muchos años.
Sean menos insolentes y cierren la boca. Sólo por respeto a los mayores.
AUTOR ANONIMO
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alvarogroppa-blog · 6 years
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Celular
Originalmente escrito el 11/05/2017
La espalda y el culo hacen una sola superficie que, ropa mediante, está adherida al sillón. La cabeza describe un insalubre ángulo recto contra el respaldo, apoyando la quijada en el pecho, y las piernas se apoyan en unas banquetas de madera con superficie de tela en las que el gato se pasa todo el día ocupado haciendo la siesta. En días como estos, fríos y nublados, los primeros del invierno propiamente dicho, con la lluvia que cae lenta pero constante, uno se da cuenta que la fuerza de gravedad puede multiplicarse, y vuelve la sola idea de salirse de semejante estado de anclaje algo osado, atrevido. En esa pose decadente e hiperestática, vestido con mis peores ropas, respirando lento, con una expresión de vegetal hervido dibujada en mi cara, los ojos mirando, sin registrar, sucesiones de imágenes sosas desfilando por el televisor en bajo volumen, la cabeza llena de ese ruido blanco agonizante que emite continuamente el cerebro sub-estimulado del estudiante universitario promedio, procedo a estirar el brazo derecho, la mano antes apoyada con comodidad sobre su par a la altura del pupo, y sin siquiera ver hacia dónde la dirijo, sin medir cómo o cuándo abrir y cerrar los dedos, con una precisión japonesa que me es totalmente carente hasta para mear de pie, alcanzo, por sexta vez en los últimos veinte minutos, el único, el polémico, el igualmente despreciado y adorado, ese bicho de microcircuitos que más que un aparato pareciera un órgano vital: el celular.
Lo tengo entre los dedos, y pienso que lo odio. No; lo detesto, lo aborrezco. Con un movimiento reflexivo, instantáneo, emanado de mi espina dorsal, pongo el código de desbloqueo, y para mi no-sorpresa, la imagen resultante es exactamente la misma que hace cinco minutos. El fondo de mi elección queda tapado por la cuadrícula colorida, programas que en mayoría nunca he usado, o que he dejado en desuso hace rato, rato. Siempre vuelvo, al cabo, a los tres de siempre, la Enfermísima Trinidad, los Tres Zoqueteros, de mis redes: a la vanidad de Instagram, la ira del Twitter, y la… ¿…?, bueno, y a Facebook, que se quedó tanto que ya no sé ni a qué vicio de la conducta se lo puede relacionar.
Y entro, y evidentemente, no hay nada. Nada nuevo, me refiero. Mis globitos oculares color marrón quedan suspendidos en su lugar, y son las imágenes y los textos los que se mueven frente a ellos, ahorrándoles el tortuoso esfuerzo de rotar en sus fosas, marcando el clímax, el punto máximo de la holgazanería, la paja monumental, las ganas de hacer cosas llevadas al mínimo absoluto indispensable que requiere la supervivencia del individuo. El dedo índice desliza sobre la pantalla por pura inercia, guiado no por la curiosidad sino por la rutina, un movimiento pre-programado cuyo objetivo es el movimiento en sí mismo. Y frente a esos ojos sin expresión desfilan videos curiosos, memes, fotos de perros perdidos, santurronerías insólitas, reivindicaciones ridículas, humor negro, la gente que se ofende por él, la gente que se ofende por todo, los perejiles que te hablan desde el trono de humo de moralidad al que tienen conectado el wifi, pasan las pendejas en bikini con fotos de enero y la leyenda “back” o “summer forever”, o alguna huevada por el estilo, como si tener mosquitos tres meses al año no bastara; pasan los grupos de amigos desconocidos, los vasitos de fernet de la previa, las luces giratorias que los acompañan, las postales de Tailandia, Camboya, Vietnam y otras tierras abandonadas por el Dios del caretaje yerbabuenense de las que empecé a pudrirme de ver cuando hasta mi tía Pepita se mandó a “mochilear” para allá; pasan los medios virtuales, con sus noticias tan resumidas, acortadas, e interpretadas como la mona que se terminan transformando en un chisme vulgar; pasan las frases motivadoras de cincuenta centavos, de fuentes improbables o procedencia dudosa, incluidos una, y otra, y otra vez los mismos tres párrafos de ese libro de ochocientos y pico páginas que es Rayuela y que el mismo Cortázar debe ya estar arrepintiéndose de haber alguna vez concebido, mirándonos decepcionado desde un estudio para-dimensional donde fantasea aún con famas y cronopios; se suceden los amores eternos, las amistades perfectas, las sonrisas deslumbrantes, los paisajes fantásticos, las causas nobles, las cruzadas legítimas, los reclamos iracundos, los comentarios filosos, las acotaciones oportunas, las discusiones inacabables. El sentido de la vida está servido en bandeja en cada rincón, expuesto como una pintura en cada muro, colgado como bandera de cada ventana, generosas y desinteresadas donaciones de todos esos nombres sin cuerpo que la tienen re contra clara, súper estudiada, todos y cada uno de esos triunfadores de la vida y el cosmos que todavía viven en la casa paterna y no tienen ningún intención de irse hasta que haya alguna alineación planetaria que les de esa idea para una start-up revolucionaria que no se les ocurrió nunca en quince años pero que, ojo, no tarda en llegar.
Y aunque no me lo quiero confesar, sé que soy igual. Igual. Mugre de la misma uña. Y me hallo cada día tratando de ser distinto, y cayendo en la cuenta, día a día, hora a hora, de lo difícil que es. Uno parte en línea recta y llega al lugar de partida, y se sorprende sin detenerse a considerar que a lo mejor camina en círculos.
Como te odio, aparatejo, maravilla de la ingeniería, pequeño demonio con cámara de alta definición, diablito de 32 gigas que me quedaron cortas desde que estoy en cuatro grupos de WhatsApp de varones que no paran de mandar el tipo de porquerías que pueden hacerte meter en un psiquiátrico. Si tuviera *esto* más de huevos te aplastaría como a un pedazo de plastilina, te haría pedazos, pero no puedo, no tengo los cohounis para vivir a lo Alexander Supertramp, para desconectarme de todo sabiendo que todos están conectados y mandarme a mudar a la Patagonia y vivir de achurar castores – y tengo, además, que reconocer que sos útil cuando hace falta, sos muy útil. Desearía solamente que tu utilidad no fuera tan adictiva, que no viniera con todo ese globo inmundo de aire viciado que ahoga las cosas que valen la pena.
Rubén, ¿por qué eres así?.
“Es por la dopamina, nene. La sustancia se secreta cuando algo nos da placer, y por eso es tan adictivo”, diría con pedantería algún triple PhD con un nombre estilo Winslow Lee Pritzkaterton von Aufganschttüngerenderenderenrreenneren, mirando de reojo a su colega el quíntuple PhD Nam Li, ambos investigadores vitalicios en alguna universidad capitalista del mundo civilizado cuya décima parte de matrícula no llegaría a cubrir ni vendiendo ambos riñones y un par de metros de intestino delgado, en alguna publicación de una revista mensual de la que no me enteraría nunca de no ser por PlayGround o AJ+ y su hábito de sobre-simplificar la información para que pueda ser asimilada por la ansiedad del internauta promedio. Pero no alcanza, docto r, doctores, no me alcanza su explicación, no me satisface ver al humano como una máquina que a dados estímulos devuelve siempre el mismo resultado. Quiero creer que sobre nuestra bi ología existe un juicio, una mente pensante, una consciencia que mide, que analiza, planea, ejecuta y revisa, una voluntad superior a una reacción química, una inteligencia que puede doblegar eso mismo que la hace funcionar. No me rindo a creer que somos así de débiles, así de sumisos, así de patéticos.
Dejo el celular a un lado, y trato de concentrarme en la transmisión televisiva. Imposible. El ruido blanco va ganando sonoridad, resonando entre oreja y oreja. Contemplo el humo del espiral, sublimándose poco a poco, describiendo formas enigmáticas con el humo, contando futuros que alguna gitana sabría leer. Incluso con esta fresca esos esbirros de Satanás a los que dimos el inofensivo nombre de “mosquitos” salen a romper las bolas, qué desgracia. Me levanto haciendo un esfuerzo sobrenatural, me acomodo las telas de vagabundo que me cubren el cuerpo. Me estiro, y siento los músculos como hechos de gelatina, fofos, adormecidos, atontados, cubiertos de una película infinitesimal de baba de gusano, de una sustancia a medio camino entre transpiración y cera, de las que se recubre la piel cuando se pasa horas sin hacer un pomo, confinadas en la oscuridad de las ropas. Afuera sigue lloviendo, sigue gris, casi negro, y me siento viscoso, molesto, pegoteado contra la fibra sintética de la remera. Atravieso con pausa el living tenuemente iluminado, inhalando el olor narcótico del pan lactal tostado que llega por la escalera, venciendo, inexplicablemente, la nube tóxica del repelente que arde en el otro rincón. Prendo la ducha, y ahí está, de nuevo, en mi mano derecha, desbloqueado, mirándome, sonriendo el muy carnero, burlándose. Puta madre. ¿En qué momento?
Una irritación me sube por el espinazo. ¿En qué momento me convertí (nos conve rtimos) en esclavo de esta forma tan patética? ¿Podré alguna vez alejarme definitivamente de vos, querido enemigo? “Pruébame y verás que todos somos adictos”, nos decía Gustavo, y hoy vería con salir a la calle cuál era la dimensión de su acierto, frente a la marea de walking, sitting, driving, jogging, laying on the grass, drinking coffee deads que es el mundo, vendiendo a través de una pantalla gato por liebre, calma por furia, dicha por tristeza, violencia por miedo, fumando ficciones, aspirando sueños ajenos, inyectándonos de mentiras y consumiendo cuánta, cuánta otra mierda innombrable, desesperados todos por llenar un vacío con pulgarcitos y corazoncitos, por encontrar respuestas donde nadie se molesta en hacer las preguntas correctas. Tan cerca de embustes de terciopelo, tan lejos de lo que se toca, lo que se huele, lo que se vive, tan lejos de lo que es verdadero.
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