#cuándo me invitas a la tuya
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" ¡como una luna de miel! " repite, encantado con la idea. uno de sus mayores arrepentimientos fue el no haber compartido esa experiencia con soo, aunque algo le decía que tal vez no hubieran disfrutado tanto como ahora. " entonces no se diga más, mañana mismo empezamos la planeación " y no bromeaba. en esta ocasión, subin haría las cosas con tiempo y organización, todo con tal de obsequiarle a soohyun una memorable ceremonia. la primera había sido linda, por supuesto, pero podía adivinar que no era como contrario había imaginado su boda. incluso para él mismo, que nunca creyó que tendría la oportunidad de casarse, el evento había sucedido muy rápido. " apuesto a que hay muchos lugares bonitos como opción " emoción se presenta como un hormigueo en su estómago, sonrisa tan amplia que mejillas comenzaban a doler. sentimiento permanece cuando su esposo regresa a la habitación, curiosidad aumentando debido a las cortas explicaciones. " me gusta todo lo que me das " pese a no saber de qué se trataba, intenta tranquilizarlo. " porque significa que pensaste en mí y eso me pone feliz " termina con una risita, justo antes de abrir los ojos. y vaya que no se había equivocado, pues boca queda abierta de la impresión; casi talla sus ojos para asegurarse de no estar imaginando la forma y decoración de las galletas. " soo... ¿las hiciste para mí? " murmura al sostener el plato, abrumado al grado de que podía sentarse a llorar por tan bonito detalle. " son geniales, las galletas más adorables que he visto en toda mi vida " y teniendo ya la sorpresa frente a él, puede incluso percibir el delicioso olor. " gracias, gracias, graciaaas. ¿en qué momento las hiciste? ¿te tomó demasiado? ¡no debiste molestarte! " abrumado, rompe distancia para rodearlo con su brazo libre, escondiendo rostro entre su cuello, esperando transmitir cuánto apreciaba su dedicación. " te amo mucho " y tras dejar un besito en dicha zona, regresa a enfocarse en el plato para tomar una galleta con cuidado. " oh, son tan lindas que no quiero comerlas. "
sus labios lucen la sonrisa más brillante y dulce que podría lucir, todo gracias al muchacho al que puede llamar su esposo. "te amo, ¿sabes? eres un solecito. mi solecito." que subin este constantemente dandole su apoyo ha ayudado mucho para que soohyun pueda ganar más confianza en sus habilidades para cumplir sus sueños. "gracias por estar orgulloso de mí, por apoyarme y ser la mayor felicidad de mi vida." expresa con dulzura, dejando múltiples besos sobre el rostro impropio, incluso reparte caricias sobre piel ajena con la punta de nariz. "¡¿renovar nuestros votos?!" su rostro reluce de entusiasmo ante la idea, al punto en que parece que esta a punto de saltar de alegría en cualquier momento. "no me importa si es muy pronto, quiero renovar nuestro votos. mi amor por ti es más grande que antes y es completamente necesario que sea expresado de otra forma... ¡oh, escribiré mis votos esta vez! tengo mucho que decir sobre ti." parlotea mientras su mente ya comienza a planea los detalles de que podrían hacer. "¡italia sería perfecto para eso!" exclama maravillado con la idea. "sería como una luna de miel, nunca tuvimos una." aquel hecho lo entristece por supuesto, pero no es fuente de reclamos. todo fue demasiado rápido como para planear algo así, los sentimientos que los unian eran diferentes también. "tenemos que empezar planear desde ya para que salga todo muy bien." a soohyun le encanta planear eventos. sus cumpleaños siempre fueron sus favoritos pues podía dejar volar todas sus ideas en su organización. "¡en nada malo, lo juro!" exclama entre una suave risita. "o bueno, quizás pueda ser algo malo si no te gusta." esta vez forma un mohín en sus labios. "ya vengo, espera aquí sin espiar." le advierte antes de salir de la habitación hasta la cocina, de donde toma una fuente con galletas decoradas como aliens. "no podía decirte o se arruinaría la sorpresa." gran batalla le dio la recetas de aquellas galletas pero lo logro. "ya puedes abrirlos." anuncia con una sonrisa, sus brazos con plato extendido hacia subin. */ @404files
#TMB ME TARDÉ COMO UN AÑO#pero listen............#las galletas son tan adorables como lo eran hace un año#shaking crying throwing up#POR QUÉ SOO ES TAN LINDO#las bodas siempre me llevan a ti bambi#cuándo me invitas a la tuya#bitterswects#subin : diálogo.
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Jesús invita a luchar. Jesús lucha con sus conocimientos, con los ejemplos, con las enseñanzas “Toda la fuerza está en la pequeñez” “Si ustedes no cambian o no se hacen como niños, no entrarán en el Reino de los Cielos” (Mt: 18, 3) ¡Ah! Estaba siguiendo mi vuelo en el Fiat Divino y mi dulce Jesús se hacía ver que salía de dentro de mi interior, y entrelazaba sus manos con las mías invitándome a luchar con Él, yo era pequeña, pequeña, y no me sentía hábil y fuerte para luchar con Él, mucho más porque salió una voz de dentro de una luz que decía: “Es demasiado pequeñita, ¿cómo puede vencer en esta lucha?” Y Jesús ha respondido: “Más bien porque es pequeña puede vencer, porque toda la fuerza está en la pequeñez.” Yo estaba desconsolada, no me atrevía a luchar con Jesús, y Él incitándome a la lucha me ha dicho: “Hija mía, ánimo, inténtalo; si tú vences vencerás el reino de mi Voluntad, no te debes detener porque eres pequeña, porque he puesto a tu disposición toda la fuerza de las cosas creadas, así que junto contigo lucha toda la fuerza que contiene el cielo, el sol, el agua, el viento, el mar, todos me dan batalla; la hacen junto conmigo para hacerme ceder el reino del Fiat Divino, la hacen a las criaturas con las armas que cada cosa creada tiene en su propio puño, para rendirlas a reconocer mi Voluntad, a fin de que la hagan reinar como la hacen ellas reinar, y queriendo vencer, todas se han puesto como en orden de batalla, y viendo que las criaturas resisten, queriendo vencer por fuerza porque tienen con ellas la fuerza de aquella Voluntad que las anima y domina, con las armas que poseen derriban gentes y ciudades con tal imperio que ninguno las puede resistir. Tú no puedes comprender toda la fuerza y potencia que contienen todos los elementos, que si mi Querer no los tuviera como frenados sería tan encarnizada la batalla, que de la tierra harían ruinas. Ahora, la fuerza de ellas es también tuya, y por eso tú gira en medio de ellas para ponerlas en orden de batalla, tus actos, tu pedir continuo el reino del Fiat Supremo llama para poner atenta a toda la Creación, y mi Voluntad moviéndose en ella pone todos sus actos en oficio regio para dar y hacer vencer su reino en medio de las criaturas. Por lo tanto es mi mismo Querer el que lucha, que da batalla con mi misma Voluntad para el triunfo de su reino. Así que tu lucha está animada por Ella, la cual tiene fuerza suficiente e irresistible para vencer. Por eso lucha, porque vencerás. Y además, luchar para vencer el reino del Fiat Supremo es la lucha más santa que puede existir, es la batalla más justa y más de derecho que se puede hacer, tan es verdad, que mi mismo Querer desde que formó la Creación empezó esta batalla y esta lucha, y se rendirá sólo cuando venza completamente. ¿Pero quieres saber cuándo luchas conmigo y Yo contigo? Yo lucho cuando te manifiesto los conocimientos sobre mi Eterno Fiat, así que cada dicho, cada conocimiento, cada semejanza que se refiere a Él, es una lucha y una batalla que hago contigo para vencer tu voluntad, ponerla en su puesto creado por Nosotros, llamarla casi por vía de lucha al orden del reino de mi Divino Querer, y mientras lucho contigo para subyugar tu voluntad, la inicio en medio de las criaturas. Lucho contigo cuando te enseño el camino que debes hacer y lo que debes hacer para vivir en mi reino, las felicidades, las alegrías que debes poseer; en suma, lucho por vía de luz que contienen mis conocimientos, lucho por vía de amor y con los ejemplos más tiernos en modo de no poder resistir a mi lucha, lucho por medio de las promesas de felicidad y de alegrías sin fin; mi lucha es persistente y no me canso jamás, ¿pero para vencer qué cosa? Tu voluntad, y en la tuya a aquellos que reconocerán la mía para vivir en mi reino. Y tú luchas conmigo cuando recibes mis conocimientos y poniéndolos en orden en tu alma formas el reino de mi Fiat Supremo en ti, y haciéndome lucha buscas vencer mi reino. Cada acto tuyo hecho en mi Voluntad es una lucha que me haces; cada giro que haces por todas las cosas creadas para unirte a todos los actos que Ella hace en toda la Creación, llamas a toda la Creación a mover batalla para vencer mi reino, moviendo a mi misma Voluntad dominante en todas las cosas creadas para dar batalla a mi misma Voluntad para establecer su reino. Y por eso en estos tiempos, el viento, el agua, el mar, la tierra, el cielo, están más que nunca todos en movimiento, moviendo batalla contra las criaturas, sucediendo fenómenos nuevos, y cuántos más sucederán, destruyendo gentes y ciudades, porque en las batallas es necesario disponerse a sufrir pérdidas y muchas veces aun por parte de quien vence. Sin batalla no ha habido jamás conquistas de reinos, y si esto ha habido, no han sido duraderas. Luchas conmigo cuando invistiendo todo lo que Yo hice y sufrí en mi Humanidad, esto es, en mis lágrimas, en mis penas más íntimas, en mis oraciones, en mis pasos, en mis palabras y hasta en las gotas de mi sangre, imprimes tu te amo y por cada uno de mis actos me pides que venga el reino de mi Fiat Supremo, ¿quién puede decirte la lucha que me haces? Mueves a mis mismos actos para hacerme batalla para vencerme a cederte mi reino. Por eso Yo lucho contigo y tú luchas conmigo, es necesaria esta lucha, tú para vencer mi reino y Yo para vencer tu voluntad y para iniciar la batalla en medio de las criaturas para establecer el reino de mi Supremo Querer. Yo tengo mi misma Voluntad, toda su Potencia, Fuerza e Inmensidad para vencer, tú tienes mi misma Voluntad y a tu disposición toda la Creación y todo lo que Yo hice de bien en la Redención, para adiestrar un ejército formidable para mover batalla y vencer el reino del Fiat Supremo. Mira, también cada palabra que escribes es una lucha que me haces y un soldado de más que colocas en el ejército que debe vencer el reino de mi Voluntad. Por eso sé atenta hija mía, que son tiempos de lucha y es necesario usar todos los medios para vencer.” Libro de Cielo, Vol. 20 , Cap. 61, Febrero 19, 1927 http://bit.ly/2TxNtFA
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Buena noches Rebe, Dios te bendiga Perdón por preguntar pero Que pasa si oro y siento que si gritara Dios no me escuchara, tengo miedo porque siento que no me escucha Si he pecado y Dios no me escucha que hago) Por favor respóndeme ❤️
Hola :)
A algunas personas les gustaría la oración sin condiciones. Pero el hecho bíblico es que la oración tiene condiciones. Es verdad que Jesús dijo, "Y todo lo que pidiereis en oración, creyendo, lo recibiréis" (Mateo 21:22). Pero, incluso en esa declaración, tenemos una condición para la oración: la fe. A medida que examinamos la biblia, también encontramos que existen otras condiciones para la oración.Aquí hay diez instrucciones bíblicas sobre la oración que implican condiciones a la oración:1) Orar al padre celestial (ver Mateo 6:9). Esta condición para la oración puede parecer obvia, pero es importante. No oramos a dioses falsos, ni a nosotros mismos, ni a los ángeles, ni a buda, o a la virgen María. Oramos al Dios de la biblia, que se reveló en Jesucristo y cuyo Espíritu habita en nosotros. Venir a él como nuestro "padre" implica que primero somos sus hijos, hechos por la fe en Cristo (ver Juan 1:12).2) Orar por cosas buenas (ver Mateo 7:11). No siempre entendemos o reconocemos lo que es bueno, pero Dios lo sabe, y él está dispuesto a dar a sus hijos lo que es mejor para ellos. Pablo oró tres veces para ser sanado de una aflicción, y en cada oportunidad Dios dijo, "No". ¿Por qué un Dios amoroso se niega a sanar a Pablo? Porque Dios tenía algo mejor para él, es decir, una vida vivida por la gracia. Pablo dejó de orar por la sanidad y comenzó a regocijarse en su debilidad (2 Corintios 12:7-10).3) Orar por cosas necesarias (ver Filipenses 4:19). Darle prioridad al reino de Dios es una de las condiciones para la oración (Mateo 6:33). La promesa es que Dios suplirá todas nuestras necesidades, no todos nuestros deseos. Hay una diferencia.4) Orar con un corazón recto (ver Santiago 5:16). La biblia habla de tener una conciencia limpia como condición para las oraciones contestadas (Hebreos 10:22). Es importante que confesemos al señor nuestros pecados. "Si en mi corazón hubiese yo mirado a la iniquidad, el señor no me habría escuchado" (Salmo 66:18).5) Orar con un corazón agradecido (ver Filipenses 4:6). Parte de la oración es una actitud de acción de gracias.6) Orar de acuerdo a la voluntad de Dios (ver 1 Juan 5:14). Una condición importante para la oración es que se ore dentro de la voluntad de Dios. Jesús oró de esta manera todo el tiempo, incluso en Getsemaní: "pero no se haga mi voluntad, sino la tuya" (Lucas 22:42). Podemos orar todo lo que queramos, con gran sinceridad y fe, por infinidad de razones desde la X hasta la Z, pero, si la voluntad de Dios es simplemente ABC, oramos mal.7) Orar en la autoridad de Jesucristo (ver Juan 16:24). Jesús es la razón por la que somos capaces de acercarnos al trono de gracia (Hebreos 10:19-22), y él es nuestro mediador (1 Timoteo 2:5). Una condición para la oración es que oremos en su nombre.8) Orar persistentemente (ver Lucas 18:1). A decir verdad, orar sin cesar (1 Tesalonicenses 5:17). Una de las condiciones para la oración efectiva es que no nos rindamos.9) Orar desinteresadamente (ver Santiago 4:3). Nuestros motivos son importantes.10) Orar en fe (Santiago 1:6). Sin fe es imposible agradar a Dios (Hebreos 11:6), el único que puede hacer lo imposible (Lucas 1:37). Sin fe, ¿para qué oramos?La oración audaz de Josué así como fue la petición para que el sol se detuviera, cumplió todas estas condiciones de la oración (Josué 10:12-14). La oración de Elías para que no lloviese, y después su oración para que cayera la lluvia cumplieron todas estas condiciones (Santiago 5:17-18). La oración de Jesús cuando se encontraba ante la tumba de Lázaro cumplió todas estas condiciones (Juan 11:41). En fe, todos ellos oraron a Dios, por cosas buenas y necesarias de acuerdo a su voluntad.Los ejemplos de Josué, Elías y Jesús, nos enseñan que, cuando nuestras oraciones se alinean con la voluntad soberana de Dios, suceden cosas maravillosas. No hay necesidad de ser avergonzados por las montañas, ya que ellas se pueden mover (Marcos 11:23). La lucha que enfrentamos es hacer que nuestras oraciones se ajusten a la voluntad de Dios, buscando que nuestros deseos coincidan con los suyos. El objetivo es la coherencia entre la voluntad de Dios y la nuestra. Querer exactamente lo que él quiere, nada más y nada menos. Y no queremos nada que él no quiera.Una oración bondadosa y efectiva tiene condiciones, y Dios nos invita a orar. ¿Cuándo podemos orar por cosas grandes? Cuando creemos que Dios quiere algo grande. ¿Cuándo podemos orar con audacia? Cuando creemos que Dios quiere algo audaz. ¿Cuándo deberíamos orar? Todo el tiempo.
Te mando un abrazo y que Dios te sorprenda.
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Cuando llegue el vacío, llama a la incertidumbre; porque lo único (in)finito es el amor.
spoiler del abecé de ella y él: sabíamos que nada entre nosotros sería para siempre.
a) Y bajo el cielo a veces tormenta / conoce a un muchacho que tiene flores muertas en el pecho y los labios llenos de vodka / lo reconoce / (te estuve esperando toda mi vida) / invita al chico-floresmuertas a bailar todas las canciones que puedan debajo de un farolillo / porque / no es como si fuésemos perfectos.
ÉL: Te confesaría que nací enamorado de ti, (que te he esperado toda mi vida), que he sido tuyo desde antes de saber llamarte por tu nombre o que me llames por el mío. Te diría que de verdad eres tan mía como la sangre que me corre por las venas y que soy tan tuyo como los lunares que te beso.
b) —¿Existes? —A veces, es que me duele. —También me quebré. —¿Cómo te llamas?
ELLA: Eres más yo de lo que yo jamás seré. Soy más tú de lo que tú podrás ser. No diremos nada porque no habrá palabras s u f i c i e n t e s.ㅤㅤㅤㅤ
Alexander apareció en el pórtico de su casa luego de dos meses. Era domingo por la noche y lloviznaba. Había pasado toda la mañana y gran parte de la tarde haciendo cosas-sin-sentido. En el tocadiscos (sí, sí, un tocadiscos en plenos dosmil) sonaba algo parecido al blues, giraba. Las gotitas que presagiaban la tormenta le caían por la chaqueta y tenía los rizos del cabello enmarañados, tejidos uno con el otro y un raspón chiquito rojo-sangre asomándose a mitad de su rodilla tras el pantalón deshilachado. Estaba allí, en la puerta, sonriéndole falsamente, un gesto que hacía cuando le gustaba fingir que estaba cuando en realidad no. Ella puso los ojos en blanco pero le dejó pasar de todas maneras y él puso un pie adentro, en silencio, como contando los cuadritos del piso para no errar. Se le daba bien hacer las cosas a su manera así que se encaminó hacía el sofá, dejando que él pisara las líneas negras de las baldosas a su ritmo hasta que realmente quisiera entrar. Era gracioso cuando evadía y cuando eso a ella no la exasperaba. Y por supuesto, a Alexander le tomaron minutos larguísimos arrastrar las piernas, cerrar la puerta y quitarse los zapatos.
—¿Estas? —Preguntó, tanteando. Conocía la respuesta de antemano y siempre era un juego apostar a lo evidente aún así palmeó el vacío a su lado, duro, frío y lleno de pelusas. —No —Sincero, pero aún sin estar, se acercó menos errante hacia ella. Todavía olía a incertidumbre y flores muertas. —¿Cuándo fue la última vez que te vi existir? Una sonrisa casi divertida se apoderó de él, sus labios curvados recordándole a punta de cincel el por qué de la insistencia de Monet en usar blanco de titanio en sus cuadros, impresionismo lo llamaron. —Hace mucho, Izzie.
Asintió, comprensiva. Se acurruco en su cuerpo frío. El tráfico en Nueva York se le antojaba horrible, a todas horas. A lo lejos sonaba lo cotidiano, gritos, la metrópoli, ambulancias, el Empire State. El tocadiscos no había dejado de sonar ni por la sorpresa de verle después de dos meses, sesentayundías, brum-brum.
—Te extrañe mucho. —Y yo a ti.
ㅤㅤㅤㅤ c) De todas maneras: recordaba. Andábamos sin buscarnos pero sabiendo que andábamos para encontrarnos, —esa frase es de Cortázar no la hagas pasar como tuya, Elizabeth (risas) y que coincidencia que leías el libro cuando un encuentro casual era lo menos casual de nuestras vidas. Y desde ese entonces ya intuía que se iba a ir. Lo veía a través de sus pestañas brumosas, las tardes, cuando la casa olía a oleos, plantitas y jazz. Y él la miraba desde la puerta mientras ella se daba una ducha y su ojos recorrían atentamente el caminito de las gotas de agua desde su hombro hasta perderse en el hueco de su ombligo y luego se acercaba y la besaba despacio pero con prisa. Y cuando la tocaba sin tocarla y en como jamás le hizo el amor. Ella le besaba el hombro en respuesta y mordía el huesito de una de sus clavículas sudadas, saladas. Y sabía bien que él estaba algo así como demasiado roto. Le dolía respirar a veces y existir de sus pasatiempos, era el peor. En ese entonces también pensaba en Sebastian y le hablaba de él a ratos, cuando jugueteaban con sus dedos después de haber bailado salsa en la cocina. Él me enseño, le decía y él asentía. Estuvimos a punto de casarnos y yo pensaba que íbamos a estar juntos toda la vida. Él entendía. No te podría decir que te amo si no le hubiese experimentado antes ya ¿sabes? Él me marcó y esa clase de cosas no se borran así nomás (pausa, él recordaba a Dove) y no era capaz de entender eso hasta que él se fue pero luego te conocí y lo entendí. Alex le sonreía, sincero, con verdadera devoción en los ojos. ¿Qué entendiste? Le preguntaba. Que un día voy a dejar de saber de ti, que un día vas a dejar de saber de mí y está bien. Un día solo seremos un recuerdo el uno del otro porque ya no sabremos más, pero si me pongo profunda, yo no te puedo explicar como siento que eres parte de mí, como si estuvieras aquí conmigo, adentro, en mi cuerpo. Yo no pienso que voy a perderte jamás porque estás aquí conmigo, ¿tú también sientes esto que yo?
ELLA: Un día, mi reflejo en el espejo va a tratar de matarme, lo sabes y yo necesito que cuando eso suceda no intentes detenerlo. ÉL: No soy ningún héroe, no te voy a salvar, ni te voy a arreglar. No puedo, ni debo, ni quiero. ELLA: El amor no salva. Dime, Xander, ¿cómo entendemos que el amor es libertad? ÉL: A ti te quiero libre siempre. Eres porque el mundo necesita tanto de ti como tú de él y es por eso eso me encantas toda tú, tan libre y tan prisionera de sí misma al mismo tiempo.
abecé: Y así como llegó, se fue. No le tomó por sorpresa. Fue un mutuo acuerdo aunque a mitad de la calle paró en seco para decirle que no se imaginaba amándola un miligramo menos de lo que lo hacía y ella le creía. A ti te quiero libre, siempre. ¿Cómo entendemos la libertad? Detestaba la manera que Alexander la dejaba hablando sola frente a la ventana y sus cuadros de quince por quince, odiaba su forma de no decir nada aunque estuviese hablando, le preocupaba cómo guardaba silencio y la hacía tan feliz cuando cariñosamente la llamaba vida sin el pronombre posesivo porque la consideraba tan vasta y tan extensa y lo amaba muchísimo cuando le dejaba toquetearle la carita y cuando, le recordaba, ahora como cuando siempre, que era el humano más imperfecto y más roto y más real que ella hubiese conocido nunca.
ㅤ El frío colándose a través de la ventana les recordó a golpe de vodka el baile que los vio nacer. Elizabeth acaricio su tobillo derecho con los dedos desnudos de sus pies. Un roce por encima de sus calcetines, caliente. Alexander le tocaba el brazo con los deditos siguiendo la canción, brum-brum.
—Te amo. —Yo también.
Y ella pensaba que todo eso estaba bien cuando él se le acercaba mucho pero nunca lo suficiente porque no era necesario. Estaba bien cuando la sostenía de la mano, solo eso, s o s t e n e r l a y pensaba: esto es. Esto es y somos nosotros. Somos lo que somos. No lo que quisiéramos ser. No lo que tenemos que ser. Lo que somos. Elizabeth sabía que ahora hacía la vida. Ahora. Sabía que en un futuro iba a casarse y tener tres hijos y posiblemente iba a enamorarse de alguien más porque Alex y ella no iban a estar juntos por siempre (spoiler) pero de momento estaban y el aliento de Xander le soplaba en la cara errores, realidades, cicatrices, su primer canción y las horas que faltaban antes de que volviera a irse.
—¿Que es el amor, Izzie? —No sé.
Él, visiblemente divertido pero no presente porque me duele respirar, Elizabeth, lo sabes, se inclinó hacía ella y le pegó la frente cálida y pastosa. Lo miraba. Lo sentía. Lo reconocía. Te amo. Te amo muchísimo. Y puede que esto sea y mientras dure el amor, ámame, entonces.
¿porqué?
(“sé que voy a quererte sin preguntas sé que vas a quererme sin respuestas")
lo único in-finito es el amor.
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Me veo aquí. Tan envuelta de ti. Hablando cerquita , escuchandote reir. Esque de lejos te admiro, y de cerca aun mas. Cuando me abres tu casa y me invitas a quedar. Respiro tu aromita,camino en tu andar. Tomo de tu mate y juntos saludamos al vecino de ahí atrás.
'Sueño para ustedes una gran historia de amor' decía mi mam�� en aquella habitacion, cuando eramos aun niñas, cuándo no llegábamos ni a abrir el cajón. Mi mente volaba, imaginaba lo mejor. Pero nada es comparado con lo que vivimos hoy.
Vinimos por el campamento, y me pongo a pensar, que quiero siempre mi carpita junto a la tuya, ancladas en un mismo lugar.
La Cual tenemos como segura y firme ancla del alma, y que penetra hasta dentro del velo, donde Jesús entró por nosotros como precursor, hecho sumo sacerdote para siempre(...) Hebreos 6:19
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No debería quejarme, fueron años los que pasó cuidandome. Siempre viendo por mi y del que estuviera feliz.. pero duele tanto que ya le valga un centavo. Las personas cambian, me lo repito, no está obligada a gustar de mi, ni desde un inicio ni para siempre pero.. si dijera que quiero honestidad me mentiría a mi misma. Ella misma ha evitado hablar de eso para no "romperme el corazón" y esa ya es una clara respuesta que no quiero ver. Gusta de más personas, me doy cuenta pero de nada sirve reclamar, ¿Qué reclamaría? No somos nada para ella. Sus te amo, sus te quiero, que alguna vez mencionaba primero o cada día ahora ya solo los usa después de del que se aprovecha de mi calentura. Es tóxico, sé que lo es pero no puedo evitarlo, no paro de llorar. No es que todo estuviera bien, pero tampoco todo estaba mal como para sentirme así. Es una mierda lo que siento, lo es porque ahora solo le imagino con otras, por un lado estoy como "Exageras, respira y verás que no es así. Ella te quiere y solo son ideas tuyas." pero no es así. Poco a poco fue haciéndome a un lado, dejó de responder, dejó de quererme, deje de importarle y duele tanto porque si no es ella, no será nadie. Tonta idea del amor. Recuerdo cuando todo avanzaba y pensé "Woh, en verdad es ella. De verdad siento que es ella!" y me emocioné tanto.. llegué a creer que eso del que nos alejariamos no existiría, no nosotras. O al menos no quería creer en eso. Ahora no dejo de llorar por soñar un recuerdo y el día a día; yo invitándote a pasar el tiempo conmigo y tú.. solo evadiendome o prefiriendo tú celular. Yo viendo el como llamas "Mí amor" a otros o diciendo el como quisieras ver películas,salir con alguien, el cómo estás sola, llamando la atención solamente para que sea quien sea te la de. Diciendo el como invitas a personas a ver x película contigo y ellos e niegan y otros se ofrecen, clamando es una cita. Siempre me escondes y me hace sentir tan mal, haha ya tenía historial de mujeres que me escondían de sus amistades y boom, me haces lo mismo aunque te lo conté. Si, te lo conté, que te importara nada es otra cosa. Estoy tan cansada, no quiero volver a caer en ese profundo estado de depresión en el que estuve hace cuatro años. Después de llorar todo, del secarme, ya no sentía nada. Todo era gris pero ya no importaba, luego llegaste tú y vaya, heme aquí en el mismo estado. Me siento tan mal, sé que lo sabes pero.. prefieres ignorarlo ya. Quisiera no pensar en el que conocerás a alguien y te enamorarás y todo eso, pero me miento a mi misma, hace mucho esto terminó y sé que ya tienes a varias conquistas. ¿También les juras amor eterno? Haha. Recuerdo cuando me dijiste, "No soy un fuckboy/fuckgirl" sin siquiera ser ese el tema, ¡Siquiera hablabamos de algo que tuviese que ver! Ahí me di cuenta del que era tu culpa hablando, algo debiste hacer para tratar de que te creyera. Pero lastimosamente, te conozco y sé cuándo mientes, sé cuándo ocultas algo. Si esto lo escribo aquí es porque necesito drenarme, sacar todo esto o me ahogaré en el llanto. Es inútil mandar siquiera una indirecta, ¿Para qué? Solo.. la dejarás pasar y me ignorarás. No quiero verte con alguien más, me niego, lloro a la sola idea.. pero debo abrir los ojos del que es una realidad. Del que por algún estúpido poder en el mundo las personas me usan solo para no sentirse solas y cuando encuentran a alguien más solo me hacen a un lado. I'm so tired.. of everything. Creo que lo peor es que.. esto como otras cosas dejará huella en mi, en mi pensar, en mi sentir y mi manera del ver el mundo. ¿De que me sirve esto? ¿Aprendizaje del qué? ¿Del no confiar en las personas? ¿Del que al final siempre estarás sola? ...solo quiero ser feliz, por favor..
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Café Majestic
Busque alguna idea en mi guardarropa para vestirme el día de hoy haciendo juego con la lluvia; un pantalón negro, los Vans, la camisa y el gorro negro bastaron. Le prometí al perro sacarlo a pasear, pero no podíamos salir así, conoces las reglas de la casa. Me da un tanto de lástima que el pobre se quede sin hacer nada todo el día, aunque pareciera disfrutarlo cayendo dormido por todos lados. En fin, tome mi mochila, guarde la portátil y salí de casa.
Tenía el antojo de visitar una cafetería, pedir uno de esos cafés que te gustan y escribir sin tener mucha idea sobre qué. Ya sé, ya sé, yo tomando café ¡Vaya locura!, después de tantas discusiones sobre si era mejor que el té o el chocolate resumiéndonos al final en besos sin importar cual haya sido la conclusión. Averigüé en el móvil cuales quedaban disponibles y luego de un rato encontré una no muy lejos de donde estaba, aunque para serte sincero mi primera opción fue ese lugar al que tanto me gustaba llevarte, donde acordamos la última cita de nuestro primer reencuentro. Me gustaría pensar que así será esta ocasión solo para engañarme un poco, no suena mal después de todo. Solo imagínalo, ponernos al tanto de lo que hemos pasado, robarte un beso o dos y tratar de escribir un poquito más de nuestra historia. Supongo que de ahí la frase “Aquellos que no recuerdan el pasado están condenados a repetirlo”.
Recordé el consejo que me diste la tarde que juntos buscábamos también una cafetería, el número del lugar indica la calle entre la que se encuentra ubicado el lugar, aunque no fue del todo complicado suponer donde estaba.
¿Cuándo te fuiste aun tenia el mal habito de fumar? Hace una semana que lo dejé y me parecé que fue justamente el dia que no te volví a ver, como si eso me evitara echarte de menos. Una mujer paso al lado mio desprendiendo olor a tabaco, maldije un poco que me haya recordado a ti y me siguieron imágenes tuyas en mi cabeza. Obviamente. No más azúcar ni tabaco para este hombre durante un tiempo.
Al final pedí un chocolate caliente y nos hice la promesa de visitar todas las cafeterías posibles para saber cuál de ellas lo prepara mejor; tal vez en una de esas vuelvo a verte y me dejas pedirte algo, tu invitas los cigarros.
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20 puntos que debemos mantener en nuestras relaciones.
La familia no necesariamente se define por un vínculo sanguíneo, son las personas que te aprecian y te animan a mejorar de manera sana y emocional. Son quienes no sólo aceptan la persona que eres ahora, sino que aceptan quien quieres ser. 1. Libérate de la gente negativa. Pasa tiempo con gente inteligente, entusiasta y con ideas en común contigo. Las relaciones deben ayudarte, no herirte. Rodéate de gente que refleje la persona que quieres llegar a ser. Elige amigos que te enorgullezcan, que admires, que quieras y que te respeten. Personas que hagan tu día más brillante simplemente por formar parte de tu vida. La vida es muy corta para pasar tiempo con personas que absorben tu felicidad. Cuando te liberas de la gente negativa, eres libre para ser tú mismo. 2. Deja ir a aquellos que ya partieron. Es una dura verdad, pero hay algunas personas que sólo tienen tiempo para ti, cuando les das algo que ellos necesitan. Cuando ya no les sirves para ese propósito, se van. La buena noticia es que si eres perseverante, eventualmente descartarás a esas personas de tu vida dejando, en su lugar, a personas con quienes podrás contar. Si alguien se aleja de ti, déjalo ir. Tu destino es, jamás tratar de retener a alguien que te abandona. Eso no quiere decir que sean malas personas, significa que su participación en tu vida concluyó. 3. Darle una oportunidad a la gente que no conoces. Cuando miras a una persona, a cualquiera, recuerda que cada uno tiene una historia. Cada persona ha pasado por experiencias que los han marcado y hecho crecer. Cada cara que ves en la calle, representa una historia que es tan atractiva y complicada como la tuya. Si les das una oportunidad, te darás cuenta que cada uno tiene algo increíble que ofrecer. Así que aprecia la posibilidad de abrirte a nuevas relaciones, así como naturalmente dejas ir las que no resultaron. Confía en tu juicio. Prepárate para aprender, prepárate para el desafío de conocer a alguien que quizás cambie tu vida para siempre. 4. Muestra bondad y respeto a todos. Trata a todos con bondad y respeto, incluso a quienes son groseros contigo, no porque son agradables, sino porque tú lo eres. No hay límites o clases que definan a un grupo de personas que merezcan ser respetadas. Trata a todos con el mismo nivel de respeto que le darías a tu abuelo, y el mismo nivel de paciencia que tendrías con tu hermanito menor. La gente notará tu gentileza. 5. Acepta al resto tal como son. En la mayoría de los casos es imposible hacerlos cambiar, y además es grosero intentarlo. Así que ahórrate ese estrés sin sentido. En lugar de intentar cambiarlos, dales tu apoyo y enséñales con ejemplos. 6. Alienta a los demás y anímalos. Apreciar lo maravillosa que es la gente que te rodea, te lleva a buenos caminos. Así que alégrate por quienes progresan. Celebra sus victorias y agradece abiertamente sus bendiciones. Todo se devuelve, tarde o temprano la gente a quien apoyaste comenzará a apoyarte también. 7. Acepta tu imperfecta manera de ser. Este mundo, a veces, te hace tratar de darles en el gusto a todos. Encuentra el valor para seguir siendo tú mismo. Cuando se burlen de ti por ser diferente, ríete de vuelta porque ellos son iguales al resto. Pasa tiempo con aquellos que te hacen reír y menos tiempo con aquellos que te sientes presionado a impresionar. No somos perfectos para todos, sólo somos perfectos para un grupo de personas que realmente se toman el tiempo de conocernos y amarnos por quienes somos. 8. Perdona y sigue adelante. No vivas la vida con odio en el corazón. Terminarás haciéndote daño a ti mismo, más que a las personas que odias. El perdón no es decir “Lo que hiciste está bien”. Lo que estás diciendo es “No voy a dejar que lo que me hiciste arruine mi felicidad para siempre”. Perdonar es la solución. No quiere decir que estés borrando el pasado u olvidando. Más bien estás dejando el resentimiento y el dolor de lado, estás aprendiendo del incidente. 9. Ten detalles cada día. A veces, esos “pequeños detalles” ocupan la porción más grande del corazón. No puedes ser TODO para todos, pero puedes ser TODO para unas cuantas personas. 10. Presta atención a quienes son tus verdaderos amigos. A medida que crecemos, nos damos cuenta que es preferible tener verdaderos amigos a tener muchos amigos. Recuerda, la vida es parecida a una fiesta. Invitas a mucha gente, algunos se van temprano, algunos se quedan toda la noche, algunos ríen contigo, otros se ríen de ti y algunos llegan realmente tarde. Pero al final, cuando se acaba la diversión, hay un grupo de invitados que se quedan ayudándote a limpiar el desorden. Y muchas veces ni siquiera han sido ellos los responsables del desorden. Estas personas son tus verdaderos amigos en la vida. Son ellos quienes más importan. 11. Sé leal siempre. En el verdadero amor y la verdadera amistad, no se trata de ser inseparables. Estas relaciones se fundamentan en dos personas siendo sinceras la una con la otra, incluso cuando están separadas. En una relación recuerda que la fidelidad no es una opción es una prioridad. La lealtad es todo. 12. Mantén contacto fluido con quienes se preocupan por ti. En las relaciones humanas la distancia no se mide en metros, sino en afecto. Dos personas pueden estar una junto a la otra, pero a metros de distancia. Así que no ignores a alguien que se preocupa por ti, porque la falta de preocupación hiere más que los insultos. Mantén el contacto con quienes se preocupan por ti. No porque sea conveniente, sino porque ellos merecen un esfuerzo extra. Prestar atención a estas personas es prioridad. 13. Cumple tus promesas y sé sincero. Si dices que vas a hacer algo ¡HAZLO! Si dices que vas a estar en algún lugar ¡HAZLO! Si dices que sientes algo ¡SÉ REAL! Si no puedes entonces ¡NO MIENTAS! Siempre es mejor decir la verdad de frente. No juegues con el corazón de las personas. No digas “verdades a medias” esperando que confíen en ti cuando la verdad salga a flote; las verdades a medias no son mejores que las mentiras. Recuerda, el amor y la amistad no hacen daño. Engañar y mentir hace daño. No juegues con los sentimientos de otros, porque no estás seguro de tus propios sentimientos. Sé siempre abierto y honesto. 14. Da lo que quieres recibir. No esperes lo que no estás dispuesto a dar. Comienza a poner en práctica esta regla de oro. Si quieres amor, entrega amor. Si quieres amigos, sé amistoso. Si quieres dinero, aporta un valor. Funciona, es muy simple. 15. Di lo que sientes y siente lo que dices. Dale a las personas en tu vida la información que necesitan, en vez de esperar que sepan lo que no saben. La información es el lubricante que mantiene al motor de la comunicación funcionando. Empieza a comunicarte claramente. No intentes leer la mente de otras personas y no esperes que otros traten de leer la tuya. La mayoría de los problemas empiezan con la mala comunicación. 16. Deja que otros tomen sus propias decisiones. No juzgues a otros por tu propio pasado. Ellos viven una vida diferente a la tuya. Lo que puede ser bueno para una persona, puede no ser bueno para otra. Lo que podría ser malo para una persona podría cambiar la vida de otra persona para mejor. Deja que la genta cometa sus propios errores y tome sus propias decisiones. 17. Habla menos y escucha más. La gente no necesita un montón de consejos, necesitan alguien que los escuche y algo de reforzamiento positivo. Lo que quieren saber, frecuentemente esta dentro de ellos. Sólo necesitan tiempo para pensar y continuar en ese viaje sin rumbo que eventualmente los ayudará a encontrar su camino. 18. Deja los argumentos mezquinos. Los demás no tienen que estar equivocados para que tú estés en lo correcto. Hay muchas maneras de estar en lo correcto. 19. Ignora los comentarios hirientes y poco constructivos. Nadie tiene derecho a juzgarte. No importa lo que hagas, siempre habrá alguien que piense diferente. Así que concéntrate en hacer lo que tu corazón te diga que es correcto. Lo que la mayoría de la gente diga o piense acerca de ti, no es tan importante. Lo que es realmente importante es cómo te sientas contigo mismo. 20. Pon atención a la relación que tienes contigo mismo. Una de las cosas más dolorosas en la vida es perder tu esencia en el proceso de amar a otro demasiado, olvidando que tú también eres especial. ¿Cuándo fue la última vez que “Alguien” te dijo que te ama tal cual eres, y que lo que piensas y sientes es importante? ¿Cuándo fue la última vez que “alguien” te dijo que hiciste un buen trabajo o te llevó a cierto lugar solamente porque sabía que eso te haría feliz? ¿Cuándo fue la última vez que ese “Alguien” fuiste TÚ?.
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