#cosas que pensé volviendo a cursar
Explore tagged Tumblr posts
sanguchedeporro · 4 months ago
Text
olor a tabaco y mate, eco de aula, panchito de estación, trenes nocturnos, brisa nocturna, gente haciendo, gente pensando, comunidad, sonrisas, mirada a los ojos, calor de proyector, calor de proyecto, calor, que calor, que calor
6 notes · View notes
hala2021 · 1 year ago
Text
Mi caja
Estuve leyendo el nuevo libro, de las clases presenciales que voy a cursar en abril y veo que tiene toda la traducción en español. Y eso es lo que no encuentro en otros libros, en donde cada palabra o frase hay que buscarla en el diccionario o preguntarle a la profesora. Y eso mismo lo padecí en Icana, con las clases de Inglés. Y eso se debe a que las empresas se resguardan de que el alumno dependa casi exclusivamente del Instituto, para que le traduzcan una simple oración. Sin embargo, al mismo tiempo, retrasan tu aprendizaje. En realidad, yo noto en algunos profesores que no quieren enseñar para que aprendas, sino que te mantienen con contenidos básicos o mínimos, con gramáticas complejas y nunca llegas a entender al nativo. Por otro lado, también hay ciertos Institutos en los cuales utilizan otra metodología, pero es aún peor, porque no enseñan nada de gramática y quieren imitar el aprendizaje que todos pasamos con nuestra lengua materna. No obstante, el niño pasa muchísimos años y muchas horas con su madre para lograr hablar. Y si eso debemos pagarlo en un Instituto, seguro de que deberíamos empeñar hasta la gargantilla de oro de la abuela. Además, este nuevo Instituto utiliza el lenguaje formal, que es mucho más fácil de aprender que el cortés. Hablo del coreano, por supuesto. Por otro lado, muchas veces, las empresas contratan a profesores que apenas les alcanza para vivir, y ellos sienten miedo de que alguien les robe su puesto de trabajo; por eso, nunca llegan a enseñarte bien o de forma eficiente, sino que te bicicletean con contenidos que no sirven para aprender a hablar o a desenvolverte de forma idónea.
Hoy fui a la mezquita y disfruté de un lujo exquisito, maravilloso. Comí cordero con arroz, sazonado con curry y otras especias. Sin embargo, extraño aquella mezquita pequeña en el barrio de flores. Yo veo al Islam de otra manera, porque no todas las escuelas islámicas son iguales. 
Volviendo al tema del idioma coreano, me siento feliz por empezar de forma presencial. Y otra cosa que hoy me hizo muy feliz fue llevar a mi tortuga, Shakira, a la avenida 9 de Julio, con su arnés. Nunca pensé que algo tan simple me daría tanta felicidad. De alguna forma quiero conectarme con todas las actividades que haré cuando me jubile. El trabajo me consume mucho tiempo y ahora estoy en otra etapa de mi vida.
Hoy pensaba en una imagen de cajas, como rectángulos de diferente tamaño. Esas cajas representaban cómo tú ves la vida. La caja es individual y personal. En cambio, la sociedad busca introducirnos en una misma caja, para que todos aceptemos una ideología como una verdad. Y nunca debes perder de vista tu propia caja. Por ejemplo, todos hablan de las clases virtuales y hasta Institutos reconocidos como el CUI dan clases por Internet, con plataformas como Zoom o Meet. Sin embargo, yo no perdí de vista mi caja, que sería mi mirada personal. Y encontré un lugar en donde me enseñan de forma presencial y con un libro que te traduce todo al español. Me costó conseguirlo, pero no perdí de vista mi caja. Otros dicen que es mejor lo virtual o que el dinero es lo primero en la vida. Y deberás luchar por derribar a todas esas cajas o miradas que buscan imponerte y moldearte a su manera. Miles de cursos de coreano se promocionan por Internet, de forma «online» (en línea). Sin embargo no dejé de buscar un lugar presencial. Y esa fue mi decisión, mi mirada, única, personal e individual. Esa es mi caja, la imagen que me vino a mi mente, hoy a la tarde. También pasear a una tortuga con arnés es algo raro, pero yo no dejé que la opinión de otros anulara mi forma de ver la vida: mi caja. Ese fue el pensamiento. Todos te enseñarán lo correcto. Hoy escuchaba a un jeque que hablaba en la mezquita del Islam. Pensé en que el árabe es más importante que el coreano, porque se relaciona con mi religión, porque el Corán está escrito en árabe. Pero esa es la mirada o la caja de los demás. Muchos te darán consejos sobre cómo vivir u obtener éxito en la vida. Sin embargo, si decides ser un fracasado y esa es tu caja, pues sélo. Las religiones tienen su enseñanza, su dogma y su idiosincrasia. No obstante, si todo eso no va de acuerdo a tu caja, no pierdas de vista lo que tú piensas. En una palabra, lo correcto sería que estudie árabe y no coreano, pero el coreano es mi caja. 
0 notes
horosebi · 6 years ago
Text
⊰ Noona | 2 ⊱
Tumblr media
❥ su aspecto de bebé era demasiado para tu mente perversa.
「pareja」 ⇢ jungkook ⇿ lectora
「género」 ⇢ school au | smut, fluff
「words」 ⇢ 1,5k
「warnings」 ⇢ noona kink, sexo sin protección.
parts | one  ✽ two 
Tumblr media
Aquellas palabras pudieron haberse cumplido de no ser por el protocolo que la vida les impuso. Jeon JungKook se enfocó en su carrera, mejoró en su canto y baile, rompió récords y vendió millones de discos en sólo dos años, justo como te lo había prometido cuando te despidió en el aeropuerto.
Habías conseguido irte de intercambio a la universidad de Toronto, tu contacto con JungKook nunca se perdió y, de vez en cuando por video llamadas se ayudaban el uno al otro, no sólo en el ámbito sexual. No hiciste muchos amigos, y los pocos que estaban en tu círculo los considerabas más compañeros de clases.
Su amistad y relación seguía intacta, debido a que extrañabas a tu familia y la cultura de Corea, decidiste volver al país que te vio crecer y convertirte en quien eras ahora, también conseguiste cursar tu último año y hacer tus prácticas ahí. El papeleo de traslado duró una semana y para los días de viaje tuviste que recurrir a una leve mentira para escabullirte de las llamadas y mensajes del muchacho, solía impacientarse cuando tardabas en contestar pero también se había acostumbrado a que te durmieras mientras hablaban.
Muchas veces trató de visitarte, lográndolo sólo tres veces de todos sus intentos, gracias a ti, pero nada de aquello había sido fácil, Jeon era el hombre más terco con el que te habías topado en toda tu vida. No querías que tuviera problemas y tampoco verte involucrada en algún escándalo, te gustaba el perfil bajo que su relación mantenía.
Abriste la lata de Cidra Chilsung, era tu bebida favorita, sin duda alguna habías extrañado ese líquido bajando por tu garganta y refrescando tu estómago. Jugabas con tu teléfono indecisa de marcar creyendo que aún era acuciado hacerlo en ese momento, después de tomar un largo trago, te animaste a realizar la llamada. Uno… Dos…
― N-noona…―un JungKook agitado se escuchó, sabías que había corrido a algún lugar privado para atender―. ¿Está bien?
― JungKookie…―pronunciaste con sorna―, adivina quién está de vuelta.
Tumblr media
Sonreía como imbécil desde que recibió tu llamada, te vería después de tanto tiempo, la felicidad que sentía superaba por millones a cuando consiguió su puntuación más alta en Overwatch y se la refregó en la cara a todos.
Llevaba alrededor de una hora buscando un buen outfit para ir a verte. Optó por sus típicos jeans negros ajustados, éstos porque muchas veces le comentaste lo bien que lucían sus muslos en ellos, una camisa de rayas blancas y negras junto con sus amadas botas. Se bañó de perfume y lavó, dos veces, su boca en caso de accidentes.
Cuando creyó estar listo, salió de su habitación encontrándose con Jimin y Tae enterrados en el sillón jugando videojuegos, sin querer, escuchó una conversación que no debió.
― ¿Escuchaste quien volvió?―Taehyung negó sin despegar su mirada de la pantalla―. Es la chica que solía gustarme en secundaria, quizás me anime a invitarla a salir.
Jungkook sabía quién era aquella chica, desde ese entonces había escuchado a sus hyungs hablar de su noona, SU noona. Sólo la idea de que Jimin pudo haber tenido pensamientos impuros con ella prendía fuego a la mecha que corría rienda suelta hasta el núcleo de sus celos.
Con una sonrisa bastante fingida se sentó en medio de ambos tomando sus mandos, los dos lo miraron confundidos por sus acciones repentinas esperando explicaciones.
― Ni siquiera lo pienses, no te acerques―su semblante acompañaba sus palabras―, no la mires ni le hables, porque si ahora te cuesta ver cuando ríes, imagínate cuando olvide que eres mi hyung y te parta la cara.
Los mayores estaban petrificados por las palabras y porque pocas veces les había hablado con ese tono, sin embargo, fue Taehyung quien se atrevió a cuestionarle.
ㅡ ¿Por qué no? Hasta donde yo sé, ella está completamente libreㅡjuntó sus manos entrelazando sus dedos y posándolas sobre sus piernasㅡ, y también lo estaba hace unos años.
ㅡ Ya cumplí con advertirlesㅡse puso de pie, acomodando su camisa, caminó hasta la puerta y antes de salir, dijoㅡ; no quiero escuchar sus lamentos después.
Tocó la puerta de tu casa ansioso por verte, a penas abriste la puerta se tiró sobre ti, atacando tus labios y sosteniendo tu rostro entre sus manos, gimió satisfecho cuando correspondiste con la misma intensidad, bajó sus inquietas manos hasta tu cintura acariciando por debajo de tu camiseta, te encontrabas igual o peor que él, ya que no supiste en qué momento llegaron a tu habitación.
No te esperabas que su reencuentro fuera de esa manera, no te quejabas para nada. No ibas a negar cuanto lo extrañaste, pero por la falta de sexo que tenías, necesitabas tenerlo sólo para ti. Con desespero te despojó de tus pantalones y ropa interior, tú también hiciste lo mismo con él.
Encajó sus dientes en la piel de tu cuello provocando un revuelo en tu vientre, succionó en múltiples lugares, pronto bajó el de tu camisa hundiendo su rostro para dejar un gran chupetón en uno de tus senos. Sus manos volvieron a bajar hasta tu centro llevándose la sorpresa de que no necesitaba prepararte porque para su suerte con los preliminares habías tenido suficiente, y lo agradecía, porque no soportaba un minuto más sin poder penetrarte a su gusto.
ㅡ Mira que desastre tienes aquí abajoㅡacarició débilmente tu clítoris haciéndote sisearㅡ, me ha extrañado mucho, ¿no es así?
Asentiste agobiada por sentirlo, con brusquedad te giró obligándote a pegar tu mejilla al colchón haciendo que tu trasero quedara a su disposición, haló tu prenda acercándote más a él, propinó una dolorosa palmada en una de tus nalgas dejando un placentero ardor que no hizo más que mojarte y hacer que apretaras las sabanas omitiendo un gritito. Se alineó a tu entrada tanteando lo que había extrañado con demasía.
ㅡ Nunca nadie va a tratarte como yo lo hago, y si lo intentan, juro por Dios que voy a matarloㅡun desgarrador gemido salió de tu garganta cuando entró en ti sin avisar y con una fuerza bruta, debido a tu inexistente vida sexual desde la última vez que te visitó, estabas muy apretada y dolía un poco a pesar de lo lubricada que te encontrarasㅡ. Voy a follarte tan duro, noona. Quiero escucharte gritar, no lo retengas, sabes que me encanta.
Al parecer JungKook en ese momento no recordaba lo que era la sutileza, porque se aferró a tu cadera poniendo toda su fuerza en cada estocada. Sentías cada mísero centímetro de su longitud, te conocía con demasiada exactitud como para saber cómo, cuándo y dónde golpear.
Creías que en cualquier momento te desmayarías por tanto placer, él no paraba y tu cuerpo comenzaba a temblar, soltó un gemido cuando le resultó demasiado placentero que tus paredes lo apretaran con tal vehemencia. Viraste tus ojos gimiendo como desquiciada porque comenzó a estimularte a la misma velocidad que te penetraba, trataste de alejarte gateando, sinceramente pensabas que te partiría en dos.
Te atrajo de nuevo a él, te tomó de las manos volviendo a penetrarte con desenfreno,  ahora no tenías con qué sostenerte porque tus brazos los tenía para atrás usándolos para intensificar y golpear con más exactitud tu punto dulce.
ㅡ ¡JungKook!ㅡgritaste con desesperación llegando al orgasmo, tus piernas se desplomaron temblando sin parar, liberó tus extremidades ahora usando su mano para sostenerte y seguir buscando su liberación, que llegó golpes más tarde, salió de ti soltando maldiciones y sentiste el espeso y caliente líquido bajar por tu trasero.
ㅡ Oh, noonaㅡse lanzó a tu lado tratando de regular su respiraciónㅡ. Ahora que está aquí, no tengo porqué volver al gimnasio.
Rió al ver tu cuerpo sin fuerzas, te abrazó colocando tu cabeza en su pecho dándote un corto beso, lo observaste a detalle amando cada cosa de él, todo lo que acaba de pasar te hizo recordar que aquel niño que conociste había crecido, y tú te habías encargado de corromperlo en todos los aspectos posibles.
ㅡ Te extrañéㅡmurmuraste avergonzada, pequeñas arrugas aparecieron en las esquinas de sus ojos a causa de la hermosa sonrisa que te dabaㅡ, mucho.
Te apretó más contra él, los mimos de ese momento eran como disculparse contigo por lo rudo que había sido y también desquitar así su rabia. Es que el imaginarse que otro pudiese tener los mismos privilegios de los que él disfruta lo vuelve loco, por eso se dijo a sí mismo; es hoy o nunca.
ㅡ Ya no quiero estoㅡlo miraste asustadaㅡ, no quiero sólo tener sexo y luego volver a mi vida como si nada, te necesito a mi lado en todo momento, sabes que te he amado desde que era un estúpido adolescente y no dejaré de hacerlo, jamás. Quizás no sientas lo mismo pero no me rendiré tan fácil, ahora te pregunto. ¿Quieres ser mi novia?
ㅡ Uhm, no lo sé, déjame pensarloㅡacariciaste sus marcados abdominales jugando con él, en ningún momento su mirada abandonó la tuya y eso te causó ternuraㅡ, claro que si quiero, sería una idiota si te rechazo.
ㅡ Por un momento pensé que pondrías la excusa de los cuatro mil won, porque tengo un ramo de rosas que cuesta más que eso esperando en el auto.
Reíste estirando tu cuello para alcanzar sus labios, suspiró como un estúpido enamorado, porque eso era. Ambos se acomodaron listos para descansar después de tanta acción, ahora él podría dormir en paz sabiendo que tenía a su chica entre sus brazos.
116 notes · View notes
2muchloveinmy-heart · 5 years ago
Text
Al amor de mi vida.
A mis 17 años tuve mi primer novio formal. Esa relación fracaso porque jamás tuve esa "chispa", lo termine al encontrarle unos mensajes quedándose de ver con una chica aunque era un hombre cursi, atento y súper creativo con sus detalles. Experimentamos por primera vez las relaciones sexuales.
A mis 18 tuve mi siguiente novio, creí que estaba enamoradisíma de él (grave error) y fue la primera vez que me rompieron el corazón, me engañó varias veces con la misma chica, yo estaba obsesionada con el, era adicta a su sexo e intenté dejar pasar una vez su engaño pero no pude. Cobre venganza y tome la decisión de volverme una culera con los demás hombres. Y con él y ella me vengue haciendo que engañara a la chica con la que me engaño a mi cuando se hicieron novios.
Después conocí un chico. El que cambio toda la historia... Menor que yo, 2 años específicamente. Gracias a que no me iba bien en las materias de la preparatoria tuve que cursar el mismo semestre en el que iba y me tocó cursarlo en su salón, justo ahí lo conocí; recuerdo estar demasiado nerviosa afuera del aula pensando seriamente en si valía la pena seguir intentando salvar mis estudios o no y simplemente tomar la decisión de irme. Estuve a punto de hacerlo en varios momentos pero una parte de mi no me dejaba pero justo cuando me convencí de irme y abandonar la oportunidad de cursar el semestre de nuevo para salvarlo me giré hacia las escaleras (era el último piso) pero el profesor no me dió tiempo para irme ya que iba subiendo justo los últimos escalones para entrar a dar su clase, y pensé: -"Maldita sea me debí ir antes".
Y en una ráfaga de segundo en el que pensé eso y ví al profesor subir su último escalón ví a varios chicos subiendo detrás de él, entre ellos iba él con su mejor amigo, mi mirada y la suya se encontraron y recuerdo perfectamente cómo sentí como si se hubiera marcado un antes y un después de mi vida apartir de ese momento.
Cuando entre a el salón, nerviosa, analice a todos los que estaban dentro; localice el grupito de las creídas, el de los aplicados, el de los chistositos, el de los amistosos, las mejores amigas, los humildes, los desmadrosos y a él; con su gorra azul cielo con unas manos con guantes tipo Mickey mouse haciendo un triángulo y una camisa de botones, de cuadros verde obscuro con negro. Lo ví sonreír con sus amigos, delante de él estaban dos chicas; una guapa y otra linda, cuando las ví pensé rápidamente que una de ellas era su novia entonces traté de no prestarle tanta atención para que mi interés por él no se viera tan obvio. Traté de mostrarme indiferente a todos pero por más que lo intentaba no podía dejar de mirarlo en los más pequeños momentos que se me presentaban. Y cuando lo veía sonreír, noté sus oyuelos y me perdí ahí. Una parte mía se quedó entre esa curvita que se le hacía cuando sonreía.
Cuando terminó la clase me fui lo más rápido posible de el salón. No quise que mi presencia se notará más de lo que ya se había notado puesto que al nombrar lista el maestro nombró mis nombres súper extraños además de ser la nueva del salón. Jamás lo mencioné antes, pero otra razón fue porque me dió miedo lo que acaba de sentir; me dió miedo ver a alguien por primera vez y sentir algo que jamás me había pasado antes, me dió miedo sentir esa chispa que jamás había sentido con nadie de los pasados. Me dió miedo simplemente sentir algo totalmente nuevo y de lo que le rogaba al cielo no fuera amor...
Al día siguiente no quería ir. Me daba mucha pena, jamás me gustó ser el centro de atención de ningun lugar. Y serlo en un salón nuevo era de lo más terrorífico y entraba en bastante ansiedad. Pero quería verlo así que fui... Pasaron muchos días y el me seguía provocando bastante interés, me parecía misterioso y quise conocerlo así fuera por medio de otras personas... En ese salón había una chica que ya era mi amiga anteriormente, curso el año de nuevo justo como yo, pero un año antes. Le comencé a preguntar sobre él; sobre cómo se llamaba, si le hablaba a él, si era amable, si tenía novia, si a ella alguna vez la había tratado mal... Al hacerle todas esas preguntas me di cuenta que yo estaba haciendo lo que jamás en mi vida; indagar personalmente sobre alguien totalmente nuevo para mi por medio de otras personas.
Pasó el tiempo, lo agregue por facebook, platicamos y me cayó muy bien, me gustaba su charla, me gustaba su forma de expresarse, me parecía interesante más de lo que ya lo hacía... Se empezó a hacer necesario para mí el tener que platicar con él. Saber su vida, sobre él, tenía un constante interés por él...
Un día por la mañana me lo tope en la escuela, curso una materia y yo iba a repetir otra, cuando lo vi yo lo iba a saludar dándole un beso en la mejilla y se quitó! Jamás me había pasado eso con nadie y me sentí confundida y con mucha vergüenza por sentir que estaba haciendo algo qué el no quería. Me comentó que él jamás le daba un beso a nadie así fuera en la mejilla porque los besos para él no eran cualquier cosa; prosiguió con qué él saludaba a todas las mujeres como si fueran sus amigos, las saludaba con su choque de palma y puños... Y así fue como lo saludé, me despedí de él y entre al salón pensando:
-"Wow, qué hombre tan hermoso, nunca había conocido a nadie que hiciera eso en la vida. Me encanta este hombre." ...
A los próximos días nos fuimos acercando más, platicábamos más, me confesó que le gustaba y le dije que a mí él igual... Duramos poco saliendo, porque mis tiempos no eran muy flexibles con todo eso y porque me daba bastante miedo sentirme como me sentía. Me daba miedo verlo, me daba miedo sentirme así. Entonces le pedí espacio.... Tenía que meditar sobre todo eso nuevo para mi. Este hombre no me gustaba para un rato, este hombre no entraba en mi venganza de todos los hombres, este hombre era diferente, este hombre me hacía sentir tantas cosas sin siquiera hacer nada.
Traté de enfocarme en lo que yo quería; que era no tomar a nadie enserio para que no me dolieran; suena tan estúpido ahora que lo cuento pero yo quería hacer llorar no que me hicieran llorar. Yo quería hacer sufrir, no que me hicieran sufrir. Y el sentir algo diferente por este hombre rompía todo lo que yo tenía pensado. Me daba miedo.
Comencé a salir con otro chico, cabello chino muy alto, y le robe su virginidad, era un chico bueno pero yo no quería nada serio con él. Me presento a su familia en año nuevo y justo ahí en una mesa de billar se la robé. Era buen chico pero me aburría.
Estando con este último pensaba en ese chico que me estaba volviendo loca. Constantemente me preguntaba que hacía, esa necesidad de saber de él me perseguía desesperadamente así que buscaba la forma de hablarle. Comencé a salir con él a escondidas de todos, empezamos a ser más cercanos y él me acompañaba a comprar mis materiales de la escuela, me llevaba mis papitas favoritas a mi casa. Lo que sentía por el cada vez crecía más y yo ya no sabía dónde meter todo eso que aumentaba. No sabía cómo más esconderlo y un día simplemente explotó;
Me acompaño a comprar unos materiales para una clase, nos sentamos afuera de una plaza, en una banca. Estaba platicandome algo y yo no dejaba de verlo, veía sus labios y me encantaban y quería solamente besarlo y ya pero me decía; NO, no lo hagas! Cómo te a ver él después de eso?
El seguía platicando y en mi mente pasaban mil cosas, miles de advertencias más como; Tú sigues con el chico chino, estás en la calle, puede haber alguien que lo conozca y estarás en problemas.
Sentía un maldito imán, que me acercaba a él aún con todas las jodidas advertencias que una parte de mi me decía. Sentía algo tan extraño, algo que jamás jamás jamás me había pasado con nadie, yo en mi vida había besado a alguien dando el primer pasó, siempre me besaban a mi. (Aunque suene egocéntrico) . Y ahora estaba ahí yo, queriendo besarlo intensamente hasta que no pude más y pasó; LO BESÉ!!!
Sentía como sí todo el mundo afuera nos observara pero yo no podía parar de besarlo, sentía que en cualquier momento podía verme alguien conocido y acusarme con el chico chino. Pero me daba igual. Él me estaba besando igual y fue el mejor besó que tuve en mi vida. Porque yo lo inicie, por primera vez yo lo había iniciado y en segunda él también quiso. No podía estar más feliz!
A los próximos días seguimos igual, saliendo a escondidas, yo vivía en casa de mi padre y me escapaba en las noches diciendo excusas tontas para salir aunque fueran 5 minutos ya que ahí no me dejaban ir ni siquiera a la tienda. A él lo veía en la esquina de la casa y lo único que quería era correr y besarlo. Así que eso hacia... Cada vez sentía más ganas de tenerlo por mucho más tiempo posible conmigo, quería salir con él a donde fuera pero juntos. Y empecé a caer en cuenta de qué me estaba enamorando.
En el cumpleaños de él, quisé darle un regalo, quise darnos un regalo a ambos porque ambos queríamos y nos fuimos a un motel. Fue su primera vez y por primera vez me sentía emocionada de hacerlo con alguien. Él estaba tenso y nervioso esa vez y aún así estuvo bien. Después de ahí, terminé con el chico chino.
Yo solo quería estar con él, él se volvió todo, se volvió mi tiempo, se volvió mis días, se volvió mis buenos momentos, se volvió mi vida. Me enamoré..
Días después me pidió que fuera su novia y para mí fue la mejor declaración porque yo sabía cómo era él, yo sabía que él jamás se le había declarado formalmente a ningúna otra. Me sentía tan afortunada y feliz.
Una vez le cante una canción por teléfono, siempre fui muy tímida de alguna manera, jamás bailaba frente a nadie y con él, bailé una canción de Coldplay en una biblioteca.... Amaba su sonrisa, amaba sus oyuelos, amaba sus pestañas, amaba su risa, su voz, sus ojos, su cabello, sus manos, sus dedos, sus uñas, su espalda, sus labios, su cuello, su lengua, su frente, su nariz, sus brazos.. amaba mirarlo cuando no se daba cuenta e igual para tomarle fotos, amaba tomarle fotos. Amaba cuando dormía, cuando despertaba, cuando comía, amaba incluso como respiraba, admiraba como su cuerpo se elevaba y se bajaba cada que respiraba y cada que lo hacía le agradecía a Dios por permitirnos vivir juntos ese momento. Amaba su sentido del humor, su sarcasmo, su seriedad, su perversión, su ternura, su amor, amaba hasta su mal genio. Amaba su perfume, su ropa, su estilo, la música que escuchaba, su letra, su inteligencia, las películas que le gustaban, sus gustos, todo en él me parecía perfecto. Amaba como lo hacíamos y dónde; en la biblioteca, en un baldío, en el cine, en su casa y en la mía y estuviera quien estuviera. Todo lo que viniera de él me encantaba. Amaba su creatividad para darme detallitos. Jamás me pasó, por eso sé que lo amaba tanto.
Cada que lo hacíamos yo sentía que el amor estaba alrededor de nosotros, no era solo sexo y ya. Lo miraba a los ojos y sentía como sus ojos me dejaban ver su alma y su alma me gritaba que amaba. Jamás he superado el hecho de que con él todo fue diferente.
Buscamos casa juntos, nos comprometimos a nuestros 18 y 20 años. Pero en un tiempo todo se torno negro...
Celos, inseguridades, desconfianza, groserías; faltas de respeto, agresiones verbales y una física.
Éramos muy jóvenes y nuestra inmadurez no nos dejó saber cómo rectificar nuestros errores, así que se terminó...
No tiene ni caso mencionar que fue lo que pasó después de él ni quienes llegaron después. Porque después de él no ha habido nada igual ni mejor.
A excepción de mi hijo claro.
Jamás volvió a existir esa chispa de todo a todo. Jamás volví a sentir nada igual. Jamás me volví a enamorar igual. Nunca nada tomo el mismo sabor ni color.
Es por eso que sé que el fue el amor de mi vida, porque eso fue; una persona que me enseñó lo que era el amor, me enseñó a descubrir cosas que jamás me habían pasado, me enseñó lo que era estar enamorada. Me enseñó a amar realmente de corazón y alma y entregarte soltandote y confiando incondicionalmente. En esta vida él me enseñó lo precioso, rico, doloroso y duro que es el amor.
Y lo triste es qué duró muy poco por nuestra juventud inexperta. Pero duro lo que él universo nos quiso dejar juntos y ya, tan simple como eso. En esta vida fue todo. Eso se terminó y no pudo dar para más...
Él, está con una chica, se ve demasiado feliz y enamorado. Yo estoy comprometida e intentando ser lo mejor con mi futuro esposo y a veces al mirarlo pienso: "Qué se sentirá estar casada con quién amas hasta las entrañas. Que se sentirá casarte amando con toda tu alma a tu prometido... Yo pude saberlo...."
Muchas veces trato de recordar las cosas malas que pasaron durante esta relación tan linda que tuve con él, simplemente para dejar de pensarlo, para convencerme de que eso ya no era sano para ninguno de los dos y que fue lo mejor terminar dónde estamos. Pero el sentimiento perdura, el sentimiento lindo perdurará hasta el fin de mi vida. Porque esto fue algo inusual y la vida me premio de cierta manera al permitirme experimentar lo que era encontrar el amor real...
El día que me vaya de este plano, me iré dejándolo ir, aceptando, aprendiendo de la forma más triste a desapegarme y a soltar, me iré algún día de esta vida aprendiendo a qué no siempre salen las cosas como uno quiere ni termina su vida con quién de verdad quiere. Algún día me iré de esta vida deseando algo que no se pudo y con la esperanza de en la próxima poder hacerlo bien y mejor. Con la esperanza de volver a encontrarlo y saber que es él quién en esta vida y en otras yo lo amé. Porque me resulta tan ilógico que todo esté amor tan INMENSO y con tanta pero tanta fuerza se haya desarrollado solamente en esta vida. Simplemente eso no puede ser. Este es un amor que viene emitiendose desde hace siglos. Yo estoy convencida de que él, ya fue el amor de mis otras vidas. Él es el amor de mi alma. Posiblemente fue mi esposo en una de mis vidas, el padre de mis hijos, mi amor de ancianos. Posiblemente en algunas vidas no pudimos estar juntos como en esta, pero nuestras almas se reconocieron y se volvieron a amar justo como en está...
Y espero que está vida podamos aprender algo de todo esto y si no lo sintió o siente mutuo pues en fin... Tal vez yo me imaginé e ilusione sola con todo lo que pasó. Pero al menos por mi parte si lo fue y es.
Lo estoy dejando ir, aceptandolo, ahora lo recuerdo sin dolor, solo con un poco de nostalgia porque un sentimiento tan enorme no pudo surgir más tiempo. Pero estoy feliz de haberte podido encontrar esta vida aunque me dejarán tenerte muy poco dentro de ella. En otra vida espero encontrarte, encontrarte rápido y poder hacer las cosas bien.
Cuídate mucho y te deseo todo lo bueno del mundo con todo el amor que te he tenido por siglos, te tuve y tengo... Aunque no seas el mismo conmigo, aunque ya estemos en dónde estamos ahora. En esta vida no se pudo más y lo acepto. Tal vez simplemente está vida logras deslindarte de mi para las siguientes no volver a encontrarnos porque tal vez encontraste alguien mejor que te trasmite cosas nuevas y mejores, tal vez ella se hizo el amor de tu vida y no yo, tal vez tú estás más enamorado de ella y está bien si es asi, yo solo puedo decirte y desearte que seas muy feliz mi amor... Fue un gusto haberte encontrado está vida.
0 notes
yoledigorosado · 6 years ago
Text
Mi madre, la tesis y yo
Me son indiferentes los lunes, como idea. Pienso que son igual de chotos que el resto de los días. De hecho, a veces pienso que son mejores porque la cabeza ocupada es saludable.
Pero despertarse de forma exasperada un lunes de actividades por un tercero cuando uno está acostumbrado a vivir solo, no es bueno. A las casi 12:30 horas, me levantó mi mamá a los gritos. 
-¡Lucía, vení!
-¿Qué pasa, mamá?
-¡Vení, Lucía!
“Debe ser algo interesante en la tele. O catástrofe doméstica”, pensé. No me quería levantar todavía. Además los entusiasmos de mi mamá suelen oírse siempre parecidos cuando me grita algo, entonces ya no sé cuándo se trata de algo que me importe más a mí o a ella, o si de hecho, sea tan fundamental como para hacer que interrumpa mis siete horas de sueño, que valoro por demás.
Fui, porque hay que ser considerado con quienes uno quiere, después de todo. Pero me tomé el tiempo suficiente, aunque estuvo mal eso, dada la situación que se estaba desatando adentro de mi casa. Daban la luz de sol de mediodía de la izquierda en mi habitación, y la artificial del baño, ahí en el medio, entre ambo cuartos. Ahí me paré. Descalza, rascándome la cabeza, pisé algunas gotas afuera de la puerta del baño. 
“Lucía, ¡¿cómo se cierra esto?!”, me gritó, medio agachada al lado del inodoro. El chorro del bidet casi pegaba arriba del techo y se estaba mojando todo. Mi mamá estaba ahí, con sus guantes amarillos, limpiando el baño,  y no podía cerrar bien la canilla, dado que se supone no la conoce tanto como yo.Pero ninguno de estos sobresaltos me parecen extraños.
El mes anterior, una noche cualquiera, mi mamá hizo que deje de ver una peli a las 2am en su cama porque, abajo, mientras había ido a hacerse un té en pijama, tuvo otro ataque doméstico. “¡Lucía!” gritó una o dos veces. Mi viejo dormía, encima. Fue raro que gritara alto porque siempre piensa en eso, que mi papá tiene que descansar, entonces creí que debía acudir. 
Cuando llegué a la cocina, la encontré en su pijama mangas largas, conjunto rayado azul y blanco, mirando en la oscuridad. Miraba un fuego naranja, vivo. Se le había quemado una caja de pizza que habíamos dejado muy cerca de una hornalla, y mi mamá sólo la corrió de lugar, y la dejó ahí, sola, encendida por el fuego, mientras la observaba. “¿Qué hacés parada ahí, mamá?” le pregunté, igual, sonriendo, descolocada. La caja tenía dos porciones de pizza ya un poco amarillentas pero pizza en fin, y le dije que le había quemado el almuerzo a papá, pero me recordó que a mi papá tanto no le gustaba la pizza, así que todo bien. Así es que sus formas de importunarme no me resultan tan misteriosas.
Pero en departamento propio, cuando es de mañana y hay que dormir, es otra cosa. 
Volviendo al lunes en mi casa, en el baño, cerré la manija del bidet con mayor fuerza, y asunto solucionado. Mi mamá me preguntó, de nuevo, que hacía durmiendo, que ya era tarde, y le dije como siempre que me dolía todo y quería seguir acostada, pero igual estaba bien levantarme porque tenía que cursar en media hora. Eso suponía, por lo tanto, la neurosis natural de los días de clase y pensar en la tesis. Así que así empezaba el debate de mediodía, el intercambio antes del “buenos días”; las primeras palabras, el fervor en pijamas.
-Mamá, yo no puedo hacer la tesis.
-¿Pero no era que era “re fácil”, que estabas muy segura?
-Pero mamá, el otro día un compañero tuvo que dar una lección oral, una EXPOSICIÓN, (en voz más alta) de una materia del ciclo básico, y se DESMAYÓ. Imagináte una TESIS. ¡Le agarra un paro cardíaco!
-Bueno, pero a todo el mundo le hacen hacer tesis. No a vos solamente, ¡es a todo el mundo!…
-Pero mamá… ¿Vos te das cuenta que te van a juzgar siete personas? Por algo se llama “jurado”, ¡porque te juzgan!
-Eso será un “juzgado” en todo caso.
-Bueno, eso…Pero igual…
Terminé yo, quedándome pensando. Soltando más el aire un poco, después de gastar tanto aliento repentino en el aire matutino. Estaba el tele prendido, mi mamá cambiaba cada tanto: canal de noticias, o alguno de cocina. Yo buscaba ropa para ponerme o inspiración para irme a cursar. Ella cada tanto se sentaba en el sillón a mirar las noticias, que pasaban algo de Cristobal López en ese momento y yo caminaba, de la pieza, al baño, al living.
-¿Quién es Cristóbal López? (pregunté, con un gesto en la cara que podría confundirse con extrañeza o expresión de “recién me levanto”).
-¿Cómo “¿quién es Cristóbal López?” Lucía? ¡El dueño de C5N! ¡¿En qué mundo vivís vos?!me contestó. 
Mi mamá responde esas cosas que sólo tienen indignación en el momento en que se responden, pero no tienen lugar nunca más. O salvo que se enfurezca conmigo un día por algo y entonces ahí sólo ahí, después de mucho tiempo, dirá algo como “Lucía, vos no sabés ni donde estas parada. ¡No sabés ni quién es Cristóbal López!” Pero no es que le asombrara realmente día a día que yo no lo sepa, (más aún porque estudio Periodismo) sino que algunas cosas le asombran en general, sin razón ligada a algún hecho aparente.
Después, mientras, se puso a limpiar el inodoro. Yo por mi parte, me había puesto a pensar de nuevo que no quería hacer la tesis, que hasta a la clase me daba miedo ir, mucho miedo. Encima que, como suelo llegar tarde, me asusta el entrar y quedar en evidencia por mi irresponsabilidad. Pensaba que ahí sólo podía sentir miedo y hambre mientras estaba sentada, porque además nunca como antes de ir a cursar. 
“El Chaqueño Palavecino enseña a hacer empanadas de chori”, leyó la locutora de la configuración de TV para ciegos, en TELEFÉ. La chabona relataba el almuerzo en “Morfi”. Nunca entiendo por qué tengo activado eso y no sé cómo quitarlo. “¿Empanadas de chori?” me pregunté en voz alta. Mi mamá no contestó nada. 
Continué el debate.
-Mamá, además yo nunca trabajé, tuve algunos ataques de pánico alguna vez…¿Hacer una TESIS? (Seguí) Quiero PROPONER una tesis, pero no HACER una tesis. Una tesis “anti-tesis” quiero proponer.
-Pero bueno, Lucía, es así. ¿Igual no es muy del macrismo la idea de sacar la tesis de la facultad?
-No sé. Mi facultad se hace la inclusiva, no debería tener.
La tevé ahora anunciaba la muerte de María Julia Alsogaray.
-¿Quién es María Julia Alsogaray, mamá?
-La María Julia Alsogaray? Una que era funcionaria del menemismo. “Voy a limpiar el riachuelo, voy a limpiar el riachuelo” decía...Ahí está. Se murió.
Terminó de ver la noticia de María Julia, que parece que bien no le caía. “Lo que le hizo Menem a este país no tiene nombre”, dice ella, cada vez que habla de Menem, y se acuerda de cómo era antes Plaza Huincul. 
Mi mamá hace algunos comentarios que suenan como si estuviera poniéndose las manos en la cintura cuando los dice, aunque no lo esté haciendo. No reconozco si es algún gesto un poco italiano de nuestra familia, o es sólo de ella. 
Enseguida de ver lo de la señorita menemista, se levantó del sillón y siguió con el baño, y pensando en mi situación. 
-Pero vos estabas tan convencida, ¡re segura con la tesis...!
-¡Y si! De hecho, por ahí pienso que en una de esas me va tan bien, que la profe me llama para que sea ayudante del Seminario de Tesis, y voy a tener mi primer ayudantía en una materia por invitación...
-¡Obvio!
-No, pero eso sería terminar como el chabón de la primera temporada de Black Mirror, con el vidrio en la garganta. No. Yo no estoy de acuerdo con la tesis, mamá. Es aceptar la tesis, o aceptar lo que soy.
-Bueno, vos ya sabías que era así. Hacer la tesis también es ser un adulto.
-Bueno, ¡Por ahí no está bueno ser un A-DUL-TO!
Con esas últimas palabras que sonaban a determinación, di un portazo de baño. Ahora me tocaba entrar a mí. Hubo silencio.Y los ruidos de la ventisca de primavera al mediodía que entraba por una ventana y salía por las otras. Y la tele, siempre. 
Mamá ahora se ponía a cocinar. Yo buscaba la mochila que no encontraba por ninguna parte, algún maquillaje, y entré un par de veces a la cocina sólo para mostrarme que seguía ahí, en casa. Ella, también siguió.
-Aparte, vos que sos medio artista, me parece raro que te cueste hacer la tesis.
Eso fue un claro “más por menos” de mamá. Es decir, me dijo algo que yo consideraría “bueno”, para, al mismo tiempo, decir algo “malo”. “Ay, mamá…” le respondí, en un tono reconocible y muy adolescente de incomprensión hacia los padres, o de ellos a nosotros. 
Entre bufidos por no encontrar mis cosas rápido para irme y sus acotaciones, nos despedimos.
-¡Qué mundo de mierda! (me quejé).¡Y no lo digo yo! (me salió con una voz masculina, que parecía a mi tío Edgardo).
-Bueno, hay que aprender a ser feliz con lo que se tiene.
-¡Pero yo ya soy feliz! ¡No necesito UNA TESIS!
Siendo las 12:50, estaba yéndome de casa al mediodía, otro lunes, de nuevo.
-Bueno, me voy a la facultad. Chau má.
Di otro portazo apresurado y, por el aire, la puerta se cerró con fuerza.
“¿Comés allá?” me gritó mi mamá, desde adentro del departamento. Abrí la puerta de nuevo, para contestarle, di dos pasos adentro. “Em, sí. No sé”.Nos dijimos que nos queríamos, de lejos, y me fui. Ah, y por primera vez en este año, llegué a la clase justo a tiempo. 
0 notes
thinkingbook-blog · 7 years ago
Text
las cosas no cambian
Hace mucho que no posteo nada. Estuve reemplazando escribir con pensar en la ducha pero al parecer no volvió a funcionar por que acá estoy. Estas semanas se sienten muy largas y más cuando no salgo de mi casa, estoy faltando a cursar hace 2 semanas y he ignorado varios mensajes por que estoy cansada, no quiero fingir ahora, quizás más tarde pero estos días realmente no he podido. Me siento deprimida y la medicación tampoco me ha permitido dormir bien, pensé que se había solucionado ese problema pero estoy volviendo al principio justo cuando estuve haciendo un esfuerzo para empezar devuelta mejor pero cada vez veo a esa idea más lejos y a la vez siento que se apresura. El médico dijo que puede ser que este deprimida por que estoy en un periodo de despedida . Quizás tenga razón pero no solo me siento mal mentalmente sino también físicamente. Fui al oftalmólogo por que estoy teniendo problemas en la vista y me dieron varios ejercicios para hacer 3 veces durante 3 semanas esperando que sea un problema temporal pero hoy tuve mi 5to encuentro y me dijeron que capaz no se soluciona y me tengan que operar. No me da miedo la operación, me da miedo que se acerque la fecha en la que tengo que viajar a inscribirme a la facultad y no tenga resultó el tema de mis ojos. A veces pienso que nunca voy a poder salir de acá, de este estado, cada vez que siento que tengo una oportunidad para mejorar algo me sucede como recordándome que las cosas no van a cambiar. A veces no se puede ignorar la realidad. Creo que todos los factores que me pasan causaron también que mi autoestima bajará muchísimo más, no me puedo mirar en el espejo, siento que como mucho por la ansiedad y a la vez vomito por la misma, creo que estoy teniendo un problema alimenticio que no puedo contar por que se conecta con la ansiedad. Como todo en mi vida aparentemente. Por más de que vaya a todos los médicos del mundo, yo soy la que tiene que buscar la manera de poder estar bien pero siempre se presenta algo que impide que lo logre y vuelva para atrás, es un ciclo continuo. Hoy vomite las 2 comidas que tuve y siento que vuelco a tener esa sensación de que tuviera un nudo en el estómago y vomitar logra que lo liberé. Me tomé un baño como todos los días esperando relajarme más y termine entrado en un estado de desesperación por que no se que es lo que sigue. Me rasguñe las piernas casi logrando que mis uñas se rompieran. También, lloré un tiempo tratando de que las gotas de agua de la ducha hicieran que desaparecieran todas las lágrimas que acumule para poder dormir y evitar llorar. No por que no sienta las ganas de llorar, sino por que me quiero quedar sin lágrimas. Pero acá estoy escribiendo esto , posiblemente tratare de terminar el tv show que estoy intentado usar de recurso para poder irme a dormir con una historia ficticia. O quizás escuche el podcast que me ha hecho reír bastante pero no creo que nada vaya a lograr que las cosas cambien. Mañana volveré a dejar de soñar y darme cuenta que las cosas siguen iguales. Nunca van a cambiar. Por más de que luche todo lo que pueda para que sea diferente pero nunca lo es.
0 notes
easternlightninges · 7 years ago
Text
La mejor educación (Parte 1)
(Educación de los niños)
Liu Ying
Tengo 50 años y desde temprana edad viví en una pobre aldea de montaña, una aldea muy remota y atrasada. Había ocho personas en mi familia: mis abuelos maternos en primer lugar, cuatro hermanos y hermanas, y una sola persona, mi padre, ganando un salario en el equipo de producción. Mi familia era tan pobre, que ni siquiera teníamos suficiente polenta ni pan de maíz para comer. Sentía mucha envidia cuando veía a otros comiendo bollos cocidos al vapor y pensaba, ¿cuándo podré comerlos yo también? ¿Cuándo dejaré de pasar hambre? Mi abuela me animaba diciéndome: “¡Si quieres vivir bien, comer bien e ir bien vestida, tienes que estudiar mucho! Sólo podrás destacar si tienes conocimientos y cultura; más adelante podrás ir a la ciudad y vivir allí sin necesidad de llevar una vida como esta, de cara a la tierra y de espaldas al cielo”. Las palabras de mi abuela se grabaron profundamente en mi corazón. Tomé entonces la determinación de estudiar duro y cambiar mi destino confiando en el conocimiento.
Pero, en contra de lo esperado, cuando tenía doce años, tuve problemas estomacales a causa de la desnutrición prolongada y no pude ir a la escuela, así tuve que renunciar a mi proyecto, regresar a casa e ir a trabajar en el equipo de producción con los adultos. Triste y cansada, no pude más que secar mis lágrimas y seguir trabajando. No me había librado de lo que me deparaba el destino y aún llevaba una vida de cara a la tierra y de espaldas al cielo. No estaba dispuesta a rendirme y pensé: Esperaré a casarme y a tener hijos, y sin duda haré que estudien. No dejaré que mis hijos sufran las mismas dificultades que yo.
Después de casarme, di a luz a una hija. Tan pronto como nació, pensé: Sólo el conocimiento puede cambiar el destino de uno y uno sólo puede vivir bien si posee conocimiento. Mi deseo no se ha cumplido en esta vida. Esta vez, debo educar bien a mi hija y dejar que ella tenga un futuro. Oí a otras personas decir que, si uno quiere que sus hijos tengan un futuro, debe empezar a trabajar con ellos desde que son jóvenes. La educación formativa es muy importante. Yo pensaba que esto realmente tenía sentido, así que en cuanto mi hija empezó a hablar, comencé a enseñarle a contar, a leer y a memorizar poesía Tang. Al ver que estudiaba tan bien, que era tan inteligente y capaz de aprender cualquier cosa que le enseñara después de varias veces a una edad muy temprana, me sentí muy feliz en mi corazón y pensé: “¡Mi hija es muy inteligente y ha nacido para estudiar, sin duda va a tener un buen futuro! Aunque gaste hasta mis últimos recursos, voy a educar a mi hija para que tenga muchas habilidades y voy a dejar que se marche de esta pobre aldea de montaña y realice los deseos que yo nunca pude realizar”. Justo cuando mi hija comenzaba a tener uso de razón, le dije: “‘El valor de otras búsquedas es pequeño, el estudio de los libros las supera a todas’; ‘El conocimiento puede cambiar tu destino’. ¡Debes estudiar duro y luchar! No debes ser como tu madre, que ha trabajado toda la vida en una pobre aldea de montaña, que vive una vida tan dura y agotadora”. Mi hija, entendiendo sólo a medias, parpadeó, me miró y asintió con la cabeza. De ahí en adelante, por muy duro y agotador que fuera para mí salir a trabajar, cada día, cuando volvía a casa, perseveraba acompañando a mi hija en sus estudios. Ella también era muy competitiva y sus calificaciones académicas siempre estaban entre las mejores. En una ocasión, la evaluaron como una estudiante “tres veces buena” (buena en el estudio, en el comportamiento y en la salud) y me invitaron a la conferencia padre-maestro. Al ver a mi hija de pie en el escenario sosteniendo un premio, me sentí muy orgullosa. En ese momento, el maestro dijo: “La razón por la que la compañera Siqi puede ser considerada una estudiante ‘tres veces buena’ es inseparable de su propio y duro esfuerzo; sin embargo, lo más importante es el esfuerzo y educación por parte de sus padres. ¡Con respecto a esto, su madre lo hace muy bien! Deberíamos aprender de ella…”. A continuación, todos los papás se volvieron a mirarme con admiración y me sentí muy contenta en mi corazón. No pude evitar pensar: Sólo necesito seguir educándola así y sin duda tendrá un buen futuro, sin duda convertirá mis sueños se realidad.
Conforme mi hija iba creciendo, sus conocimientos iban aumentando. Yo quería ayudarla, pero no me sentía capaz porque sólo había llegado hasta el quinto grado de educación. De todas formas, no bajé la exigencia en su educación. Al ver a otros papás buscando escuelas de cursos intensivos para sus hijos con el fin de mejorar su rendimiento académico, pensé: “No debo retrasar el futuro de mi hija. Aunque gaste mis últimos recursos o tenga que pedir dinero prestado, pagaré lo que sea necesario para que pueda ir a una escuela de cursos intensivos. No puede quedarse atrás”. Por la presión de los estudios, mi hija quería jugar un rato al volver a casa después de la escuela y así relajarse; pero cada vez que yo la veía así, le decía: “Si eres perezosa en tu juventud, te vas a arrepentir en la vejez. Si no estudias duro ahora, ¿qué vas a hacer cuando seas ya mayor? ¿Quieres vivir tu vida de espaldas al cielo y de cara a la tierra como yo? Si no estudias duro, ¿qué futuro vas a tener?”. A partir de ese momento, comencé a vigilarla después de que terminaba la escuela. Si no había terminado la tarea, no la dejaba jugar. Y así, mi hija estudiaba desde temprano hasta muy tarde, durmiendo siempre muy poco. Al verla así, sentía pena por ella; pero entonces pensaba: Si las personas no se esfuerzan, no habrá entonces ganancia. ¿Quién en esta tierra puede lograr cosas y tener éxito sin trabajar duro? ¿No ataban nuestros antepasados su pelo a la viga de la casa y se pinchaban el muslo con una aguja para mantenerse despiertos y poder aprender? Si quieres tener un futuro, ¿qué es entonces una pequeña dificultad? Pensando así, no me volví a preocupar y cada vez era más estricta con mi hija. Pero, poco a poco, ella se fue volviendo menos obediente. Cuando la obligaba, seguía obedeciendo y estudiando; pero, cuando me marchaba, empezaba a jugar. Al principio, podía hablar con ella para convencerla; pero, más adelante, no sólo no me escuchaba, sino que también me acusaba de sermonearla. Decía que no la quería y me pedía que no la obligara. Cuando la oí decir eso, se me partió el corazón y me sentí triste. Molesta y exasperada, le pegué. Esto me enojó tanto que lloré y pensé: El conocimiento puede cambiar el destino de uno, ¿qué puedes hacer si no estudias duro? Si eres como yo que me he vuelto invisible toda una vida en esta aldea pobre de montaña, ¿vale la pena vivir así? ¿Qué futuro hay? Si no me preocupo por ti ahora, ¿eso no te traerá problemas más adelante? ¿Por qué no entiendes mi preocupación y exigencia?
Bajo mi ciclo de educación forzosa, las calificaciones de mi hija mejoraron. Pero, conforme se iba haciendo mayor, se volvía cada vez más rebelde, menos obediente y sensible que antes. Nunca me dijo lo que pensaba o qué era lo que estaba pasando en la escuela. La distancia entre nosotras aumentó. Si quería decirle algo, ella siempre me acusaba de sermonearla y me ignoraba mirándome con impaciencia. Incluso me dijo con cierto desprecio: “¿Qué puedo decirte? ¡Si dijera algo, no entenderías!”. “¡No lo digas! ¡Me molesta! ¡No quiero oír lo que tengas que decir!”. En ocasiones prefería fingir que estaba leyendo en la habitación con tal de no hablar conmigo. Yo me sentía muy triste y decepcionada al ver cómo se encontraba y no podía hacer nada. Me había desvivido por su futuro, pero ella no me entendía en absoluto. No sé cuántas lágrimas derramé por esto.
Tumblr media
Más adelante, fui afortunada al aceptar la obra de los últimos días de Dios Todopoderoso. Un día, vi en las palabras de Dios: “Todo el mundo comienza a planificar tan pronto como tiene hijos: Quiero que mi hijo reciba esta clase de educación, que asista a esta universidad, y después que encuentre un buen trabajo, y tenga una base y un estatus estables en la sociedad. Es decir, lo primero que hay que tener en la vida es conocimiento, un grado académico, y después uno tendrá estatus y poder en la sociedad. De esa forma, tendrán capital vital a lo largo de sus vidas y poder en el mundo, lo que les facilitará la supervivencia y tener una vida estable. No tendrán que preocuparse por la comida, la ropa y el cobijo en el futuro. Así pues, cuando tengas hijos empezarás a hacer planes para ellos. Algunos ven que sus hijos tienen talentos musicales, por lo que los hacen aprender a tocar el piano, el violín, etc. Algunos ven que sus hijos tienen talento literario, por lo que los hacen leer más libros, escribir novelas, biografías. Incluso van en busca de celebridades que eduquen a sus hijos, y se esfuerzan para que sigan la senda que han establecido para ellos. […] Las personas esperan todas que sus hijos puedan tener éxito. Todos esperan que sus hijos puedan ir a una universidad famosa, cursar estudios avanzados, obtener un grado, y después destacar sobre los demás y tener un punto de apoyo firme en la sociedad. Todas las personas tienen este punto de vista y quieren que sus hijos busquen una educación más elevada por el dicho: ‘El valor de otras búsquedas es pequeño, el estudio de los libros las supera a todas’. Además, la rivalidad en esta sociedad moderna es especialmente intensa. Si no tienen un grado universitario ni un punto de apoyo firme en la sociedad, ganarse el sustento pasa a ser un problema en el futuro. Este es el pensamiento y el punto de vista de todos. Es decir, lo que aprendes y la clase de trasfondo educacional que puedes lograr decidirá tu sustento, tu futuro. En otras palabras, las personas pretenden apoyarse en esto para sobrevivir a lo largo de la vida, y lo ven como algo de especial importancia. Esa es la razón por la que todos ven que recibir una educación de alto nivel y entrar en una de las mejores universidades es lo más importante para sus hijos. En realidad, estas cosas, la educación y el conocimiento aceptados por las personas, estos contenidos e ideas, van todas en contra de Dios y de la verdad, y Él las aborrece y condena. ¿Cuál es el punto de vista de la humanidad? Los hombres no serán capaces de sobrevivir y tener un punto de apoyo estable en esta sociedad y el mundo si no tienen estas cosas, y serán inferiores, pobres y viles. Esa es la razón por la que, si alguien no tiene conocimiento, es de poca cultura o no tiene un elevado nivel de educación a tus ojos, lo menospreciarás, lo tendrás en menos, mostrarás desprecio por él, y no te lo tomarás en serio. Si dejas que tus hijos hagan esto y los crías para hacer estas cosas, en primer lugar tu punto de vista y tu motivo no son correctos. Si criáis a vuestros hijos para estudiar y recibir una educación, elegiréis sin duda las profesiones e industrias más carentes entre las personas, porque tu objetivo es dar a tus hijos un buen futuro y que tengan trabajo, familia y perspectivas estables a lo largo de su vida. ¿Pero pensaste, tras ellos aceptar esa educación, en cuántas toxinas, cuántas ideas y teorías de Satanás se les inculcarán?” (‘Conocerte a ti mismo requiere que conozcas tus pensamientos y tus visiones profundamente arraigados’ en “Registros de las pláticas de Cristo”). Frente las palabras de Dios, me sentí abrumada; ¡lo que Dios había dicho me describía! A lo largo de estos años, ¿no estaba viviendo yo por los venenos de Satanás de: “El valor de otras búsquedas es pequeño, el estudio de los libros las supera a todas”? Con el fin de cambiar el destino de mi hija a través del conocimiento, cuando ella era muy joven, insistí en su educación básica. Apenas mi hija comenzó a razonar, le enseñé las filosofías de Satanás, como: “El valor de otras búsquedas es pequeño, el estudio de los libros las supera a todas”. Cuando mi hija comenzó a ir a la escuela, yo supervisaba y organizaba sus estudios con más seriedad y observaba con más detenimiento su rendimiento académico… ¿No hacía todo eso para que ella tuviera éxito, para que los demás la miraran con admiración? Resulta que todo eso era la trampa de Satanás para engañar a las personas. Yo ya estaba viviendo obviamente bajo la oscura influencia de Satanás, viviendo una vida tan dura y agotadora, pero pensando todavía que las personas debían buscar tales cosas para vivir. ¡Sólo hoy me di cuenta de que, si las personas no tienen la verdad para vivir en este mundo, entonces son muy miserables y sólo pueden ser engañadas y estafadas por Satanás! Con el fin de lograr que mi hija tuviera un mejor futuro, yo había hecho un gran esfuerzo; pero no sólo ella no estudió duro, sino que por el contrario cada vez estaba más harta de estudiar e incluso se volvió hostil y distante conmigo a causa de que la obligaba a estudiar. Yo vivía también bajo un sufrimiento infinito a causa de esto. Ahora entiendo, finalmente, que todo este sufrimiento fue causado por la corrupción de Satanás y que, al vivir yo bajo su pensamiento, punto de vista y las leyes de supervivencia de Satanás, había traído a mi hija y a mí muchísimo dolor y sufrimiento.
Fuente del artículo: Iglesia de Dios Todopoderoso
0 notes
kingdomsalvationes · 7 years ago
Text
La mejor educación (Parte 1)
(Educación de los niños)
Liu Ying
Tengo 50 años y desde temprana edad viví en una pobre aldea de montaña, una aldea muy remota y atrasada. Había ocho personas en mi familia: mis abuelos maternos en primer lugar, cuatro hermanos y hermanas, y una sola persona, mi padre, ganando un salario en el equipo de producción. Mi familia era tan pobre, que ni siquiera teníamos suficiente polenta ni pan de maíz para comer. Sentía mucha envidia cuando veía a otros comiendo bollos cocidos al vapor y pensaba, ¿cuándo podré comerlos yo también? ¿Cuándo dejaré de pasar hambre? Mi abuela me animaba diciéndome: “¡Si quieres vivir bien, comer bien e ir bien vestida, tienes que estudiar mucho! Sólo podrás destacar si tienes conocimientos y cultura; más adelante podrás ir a la ciudad y vivir allí sin necesidad de llevar una vida como esta, de cara a la tierra y de espaldas al cielo”. Las palabras de mi abuela se grabaron profundamente en mi corazón. Tomé entonces la determinación de estudiar duro y cambiar mi destino confiando en el conocimiento.
Pero, en contra de lo esperado, cuando tenía doce años, tuve problemas estomacales a causa de la desnutrición prolongada y no pude ir a la escuela, así tuve que renunciar a mi proyecto, regresar a casa e ir a trabajar en el equipo de producción con los adultos. Triste y cansada, no pude más que secar mis lágrimas y seguir trabajando. No me había librado de lo que me deparaba el destino y aún llevaba una vida de cara a la tierra y de espaldas al cielo. No estaba dispuesta a rendirme y pensé: Esperaré a casarme y a tener hijos, y sin duda haré que estudien. No dejaré que mis hijos sufran las mismas dificultades que yo.
Después de casarme, di a luz a una hija. Tan pronto como nació, pensé: Sólo el conocimiento puede cambiar el destino de uno y uno sólo puede vivir bien si posee conocimiento. Mi deseo no se ha cumplido en esta vida. Esta vez, debo educar bien a mi hija y dejar que ella tenga un futuro. Oí a otras personas decir que, si uno quiere que sus hijos tengan un futuro, debe empezar a trabajar con ellos desde que son jóvenes. La educación formativa es muy importante. Yo pensaba que esto realmente tenía sentido, así que en cuanto mi hija empezó a hablar, comencé a enseñarle a contar, a leer y a memorizar poesía Tang. Al ver que estudiaba tan bien, que era tan inteligente y capaz de aprender cualquier cosa que le enseñara después de varias veces a una edad muy temprana, me sentí muy feliz en mi corazón y pensé: “¡Mi hija es muy inteligente y ha nacido para estudiar, sin duda va a tener un buen futuro! Aunque gaste hasta mis últimos recursos, voy a educar a mi hija para que tenga muchas habilidades y voy a dejar que se marche de esta pobre aldea de montaña y realice los deseos que yo nunca pude realizar”. Justo cuando mi hija comenzaba a tener uso de razón, le dije: “‘El valor de otras búsquedas es pequeño, el estudio de los libros las supera a todas’; ‘El conocimiento puede cambiar tu destino’. ¡Debes estudiar duro y luchar! No debes ser como tu madre, que ha trabajado toda la vida en una pobre aldea de montaña, que vive una vida tan dura y agotadora”. Mi hija, entendiendo sólo a medias, parpadeó, me miró y asintió con la cabeza. De ahí en adelante, por muy duro y agotador que fuera para mí salir a trabajar, cada día, cuando volvía a casa, perseveraba acompañando a mi hija en sus estudios. Ella también era muy competitiva y sus calificaciones académicas siempre estaban entre las mejores. En una ocasión, la evaluaron como una estudiante “tres veces buena” (buena en el estudio, en el comportamiento y en la salud) y me invitaron a la conferencia padre-maestro. Al ver a mi hija de pie en el escenario sosteniendo un premio, me sentí muy orgullosa. En ese momento, el maestro dijo: “La razón por la que la compañera Siqi puede ser considerada una estudiante ‘tres veces buena’ es inseparable de su propio y duro esfuerzo; sin embargo, lo más importante es el esfuerzo y educación por parte de sus padres. ¡Con respecto a esto, su madre lo hace muy bien! Deberíamos aprender de ella…”. A continuación, todos los papás se volvieron a mirarme con admiración y me sentí muy contenta en mi corazón. No pude evitar pensar: Sólo necesito seguir educándola así y sin duda tendrá un buen futuro, sin duda convertirá mis sueños se realidad.
Conforme mi hija iba creciendo, sus conocimientos iban aumentando. Yo quería ayudarla, pero no me sentía capaz porque sólo había llegado hasta el quinto grado de educación. De todas formas, no bajé la exigencia en su educación. Al ver a otros papás buscando escuelas de cursos intensivos para sus hijos con el fin de mejorar su rendimiento académico, pensé: “No debo retrasar el futuro de mi hija. Aunque gaste mis últimos recursos o tenga que pedir dinero prestado, pagaré lo que sea necesario para que pueda ir a una escuela de cursos intensivos. No puede quedarse atrás”. Por la presión de los estudios, mi hija quería jugar un rato al volver a casa después de la escuela y así relajarse; pero cada vez que yo la veía así, le decía: “Si eres perezosa en tu juventud, te vas a arrepentir en la vejez. Si no estudias duro ahora, ¿qué vas a hacer cuando seas ya mayor? ¿Quieres vivir tu vida de espaldas al cielo y de cara a la tierra como yo? Si no estudias duro, ¿qué futuro vas a tener?”. A partir de ese momento, comencé a vigilarla después de que terminaba la escuela. Si no había terminado la tarea, no la dejaba jugar. Y así, mi hija estudiaba desde temprano hasta muy tarde, durmiendo siempre muy poco. Al verla así, sentía pena por ella; pero entonces pensaba: Si las personas no se esfuerzan, no habrá entonces ganancia. ¿Quién en esta tierra puede lograr cosas y tener éxito sin trabajar duro? ¿No ataban nuestros antepasados su pelo a la viga de la casa y se pinchaban el muslo con una aguja para mantenerse despiertos y poder aprender? Si quieres tener un futuro, ¿qué es entonces una pequeña dificultad? Pensando así, no me volví a preocupar y cada vez era más estricta con mi hija. Pero, poco a poco, ella se fue volviendo menos obediente. Cuando la obligaba, seguía obedeciendo y estudiando; pero, cuando me marchaba, empezaba a jugar. Al principio, podía hablar con ella para convencerla; pero, más adelante, no sólo no me escuchaba, sino que también me acusaba de sermonearla. Decía que no la quería y me pedía que no la obligara. Cuando la oí decir eso, se me partió el corazón y me sentí triste. Molesta y exasperada, le pegué. Esto me enojó tanto que lloré y pensé: El conocimiento puede cambiar el destino de uno, ¿qué puedes hacer si no estudias duro? Si eres como yo que me he vuelto invisible toda una vida en esta aldea pobre de montaña, ¿vale la pena vivir así? ¿Qué futuro hay? Si no me preocupo por ti ahora, ¿eso no te traerá problemas más adelante? ¿Por qué no entiendes mi preocupación y exigencia?
Bajo mi ciclo de educación forzosa, las calificaciones de mi hija mejoraron. Pero, conforme se iba haciendo mayor, se volvía cada vez más rebelde, menos obediente y sensible que antes. Nunca me dijo lo que pensaba o qué era lo que estaba pasando en la escuela. La distancia entre nosotras aumentó. Si quería decirle algo, ella siempre me acusaba de sermonearla y me ignoraba mirándome con impaciencia. Incluso me dijo con cierto desprecio: “¿Qué puedo decirte? ¡Si dijera algo, no entenderías!”. “¡No lo digas! ¡Me molesta! ¡No quiero oír lo que tengas que decir!”. En ocasiones prefería fingir que estaba leyendo en la habitación con tal de no hablar conmigo. Yo me sentía muy triste y decepcionada al ver cómo se encontraba y no podía hacer nada. Me había desvivido por su futuro, pero ella no me entendía en absoluto. No sé cuántas lágrimas derramé por esto.
Tumblr media
Más adelante, fui afortunada al aceptar la obra de los últimos días de Dios Todopoderoso. Un día, vi en las palabras de Dios: “Todo el mundo comienza a planificar tan pronto como tiene hijos: Quiero que mi hijo reciba esta clase de educación, que asista a esta universidad, y después que encuentre un buen trabajo, y tenga una base y un estatus estables en la sociedad. Es decir, lo primero que hay que tener en la vida es conocimiento, un grado académico, y después uno tendrá estatus y poder en la sociedad. De esa forma, tendrán capital vital a lo largo de sus vidas y poder en el mundo, lo que les facilitará la supervivencia y tener una vida estable. No tendrán que preocuparse por la comida, la ropa y el cobijo en el futuro. Así pues, cuando tengas hijos empezarás a hacer planes para ellos. Algunos ven que sus hijos tienen talentos musicales, por lo que los hacen aprender a tocar el piano, el violín, etc. Algunos ven que sus hijos tienen talento literario, por lo que los hacen leer más libros, escribir novelas, biografías. Incluso van en busca de celebridades que eduquen a sus hijos, y se esfuerzan para que sigan la senda que han establecido para ellos. […] Las personas esperan todas que sus hijos puedan tener éxito. Todos esperan que sus hijos puedan ir a una universidad famosa, cursar estudios avanzados, obtener un grado, y después destacar sobre los demás y tener un punto de apoyo firme en la sociedad. Todas las personas tienen este punto de vista y quieren que sus hijos busquen una educación más elevada por el dicho: ‘El valor de otras búsquedas es pequeño, el estudio de los libros las supera a todas’. Además, la rivalidad en esta sociedad moderna es especialmente intensa. Si no tienen un grado universitario ni un punto de apoyo firme en la sociedad, ganarse el sustento pasa a ser un problema en el futuro. Este es el pensamiento y el punto de vista de todos. Es decir, lo que aprendes y la clase de trasfondo educacional que puedes lograr decidirá tu sustento, tu futuro. En otras palabras, las personas pretenden apoyarse en esto para sobrevivir a lo largo de la vida, y lo ven como algo de especial importancia. Esa es la razón por la que todos ven que recibir una educación de alto nivel y entrar en una de las mejores universidades es lo más importante para sus hijos. En realidad, estas cosas, la educación y el conocimiento aceptados por las personas, estos contenidos e ideas, van todas en contra de Dios y de la verdad, y Él las aborrece y condena. ¿Cuál es el punto de vista de la humanidad? Los hombres no serán capaces de sobrevivir y tener un punto de apoyo estable en esta sociedad y el mundo si no tienen estas cosas, y serán inferiores, pobres y viles. Esa es la razón por la que, si alguien no tiene conocimiento, es de poca cultura o no tiene un elevado nivel de educación a tus ojos, lo menospreciarás, lo tendrás en menos, mostrarás desprecio por él, y no te lo tomarás en serio. Si dejas que tus hijos hagan esto y los crías para hacer estas cosas, en primer lugar tu punto de vista y tu motivo no son correctos. Si criáis a vuestros hijos para estudiar y recibir una educación, elegiréis sin duda las profesiones e industrias más carentes entre las personas, porque tu objetivo es dar a tus hijos un buen futuro y que tengan trabajo, familia y perspectivas estables a lo largo de su vida. ¿Pero pensaste, tras ellos aceptar esa educación, en cuántas toxinas, cuántas ideas y teorías de Satanás se les inculcarán?” (‘Conocerte a ti mismo requiere que conozcas tus pensamientos y tus visiones profundamente arraigados’ en “Registros de las pláticas de Cristo”). Frente las palabras de Dios, me sentí abrumada; ¡lo que Dios había dicho me describía! A lo largo de estos años, ¿no estaba viviendo yo por los venenos de Satanás de: “El valor de otras búsquedas es pequeño, el estudio de los libros las supera a todas”? Con el fin de cambiar el destino de mi hija a través del conocimiento, cuando ella era muy joven, insistí en su educación básica. Apenas mi hija comenzó a razonar, le enseñé las filosofías de Satanás, como: “El valor de otras búsquedas es pequeño, el estudio de los libros las supera a todas”. Cuando mi hija comenzó a ir a la escuela, yo supervisaba y organizaba sus estudios con más seriedad y observaba con más detenimiento su rendimiento académico… ¿No hacía todo eso para que ella tuviera éxito, para que los demás la miraran con admiración? Resulta que todo eso era la trampa de Satanás para engañar a las personas. Yo ya estaba viviendo obviamente bajo la oscura influencia de Satanás, viviendo una vida tan dura y agotadora, pero pensando todavía que las personas debían buscar tales cosas para vivir. ¡Sólo hoy me di cuenta de que, si las personas no tienen la verdad para vivir en este mundo, entonces son muy miserables y sólo pueden ser engañadas y estafadas por Satanás! Con el fin de lograr que mi hija tuviera un mejor futuro, yo había hecho un gran esfuerzo; pero no sólo ella no estudió duro, sino que por el contrario cada vez estaba más harta de estudiar e incluso se volvió hostil y distante conmigo a causa de que la obligaba a estudiar. Yo vivía también bajo un sufrimiento infinito a causa de esto. Ahora entiendo, finalmente, que todo este sufrimiento fue causado por la corrupción de Satanás y que, al vivir yo bajo su pensamiento, punto de vista y las leyes de supervivencia de Satanás, había traído a mi hija y a mí muchísimo dolor y sufrimiento.
Fuente del artículo: Iglesia de Dios Todopoderoso
0 notes
persona-993 · 7 years ago
Text
Miedo.
Me encanta usar zapatos con taco. Es una cosa que me fascina, pero deje de hacerlo, ¿Por qué? Por miedo. 
Decidí cambiar mis preciosos tacos por la comodidad de unas zapatillas. Solo por el hecho de que tengo miedo cuando un auto pasa muy cerca mio o si un tipo me mira mucho en la calle... En esas situaciones mi cabeza va a mil y busco todas las rutas posibles de escape.
Un día volviendo de cursar a las diez de la noche un auto paso cerca mio muy despacio, ese día llovía y yo iba con zapatos de taco. Comencé a caminar mas rápido y trate de buscar por donde correr, pero todo estaba mojado y yo seguramente con mis zapatos altos me iba a resbalar y una vez en el piso era blanco fácil para desaparecer, para que me hicieran desaparecer. 
Trate de meterme por otra calle y el auto freno, se me cruzaron mil cosas por la cabeza, el miedo fue lo primero, lo segundo era que no quería no ver mas a mi familia, pensé en mi mama y mis hermanas y por ultimo pensé “No me quiero morir”. Estaba agitada y sabia que en cualquier momento iba a soltar el llanto. Adentro iba un chico debe haber tenido mi edad o un poco mas y solo me pregunto una dirección porque se había perdido. 
Ese día tuve suerte, volví a mi casa abrace a mi mama y me senté a cenar con mis hermanas y después jugué un rato con mis hermanos, a pesar de que llegue muerta del miedo estaba feliz de poder volver a mi casa.
Desde ese día no uso mas zapatos con taco para poder estar preparada si necesito escapar de un hijo de puta que me quiera desaparecer. 
0 notes
l-alien-nation-l · 8 years ago
Video
youtube
[third/last request]
olvidé escribir cosas los últimos días y tres es un mejor número que dos así que por qué no. tampoco voy a escribir todo lo que pensé porque otra vez olvidé gran parte de ello, siempre estoy haciendo tareas triviales mientras divago y vengo aquí mucho tiempo después, es como los sueños, no puedo acordarme de todo y si lo hago obviamente no tengo las palabras para expresarlas. este no debería ser tan largo. el pensamiento más recurrente es la posibilidad de estar equivocado, es decir, ya estuve errado antes y eso es responsabilidad mia, porque aunque los demás den vueltas y las circunstancias sean engañosas, uno siempre tiene que ser más listo que lo que/quienes lo rodean. si te ganan por bobo entonces no te quejes, los demás no te pisaron porque eran crueles y tenían algo en contra tuya. así que tu rival está en tu mente, por más que el mundo pueda ser horrible y tengas alguna desventaja (no es tan simple, lo sé, pero hoy voy a ignorar esto). el otro día leí una publicación acerca de mayu que decía que desde sus catorce hasta sus dieciseis años fue una hikikomori y ni terminó el colegio por esa causa pero eventualmente descubrió lo que hace hoy y le va bastante bien (por favor, no mueras mayu). creo que tiene veinticuatro como yo, o veinticinco, a esta altura es lo mismo, por lo que es un caso bastante cercano, en contexto... tal vez. así que sí, es posible salir ya sea por elección o obligación y tal vez yo tenga que hacerlo por lo segundo porque lo primero no va a pasar. sigo pensando acerca de los errores, tal vez había oportunidad de hacer algo diferente en vez de simplemente huir, o tal vez sólo estoy ignorando a mi racionalidad y en verdad no había nada más que hacer y en el mejor de los casos todo hubiera sido un parche para sentirme bien por un tiempo volviendo a la antigua idealización irrealizable [3年前のあの日のセリフが傷つける傷つける]. estuve pensando esto por un año y medio, muchisimo más de lo que debería y todo es más horrible cuando retrasas las elecciones. es decir, la próxima semana también será horrible porque retrasé otra decisión que mantuve escondida de todas las personas cercanas. ves, en mi mente yo creo poder resolver todo pero en los hechos estoy completamente adormecido y el mundo y las personas me pasan de largo, tanto que ya no los quiero alcanzar (tengan un buen día). igual lo que decidí está bien, no podría quedarme en ese lugar cuando ya es sabido que soy un estúpido o pienso estupideces [holding back the fool again]. detuve una repetición, tal vez la que más me adormeció en estos años, ahora es horrendo y mañana también, puede que el año que viene siga igual, pero a largo plazo es lo mejor (autoconservación, uno no sobrevive si no es egoísta en algún punto). tengo ideas muy claras como para equivocarme tantas veces, el problema son las idealizaciones, siempre. igual es como cuando dicen que soy inteligente (no sé si eso es lo más visible o lo único que se les ocurre decir) pero en realidad sólo uso lo que sea que sé en divagues básicos, en conversaciones más terribles ya me dijeron que no hago nada con lo que sé y que si sigo así todo lo que tengo dentro, todo lo que sé, no servirá de nada (espantosa verdad) pero esto no es relevante ahora. de momento tengo un sólo plan, en agosto volveré a cursar inglés, ése será el nuevo camino. si encuentro la manera, también veré si puedo aprender otro idioma, la idea no me atrae de alguna forma especial pero es necesario que llegue a cierto nivel de conocimiento del japonés para disfrutar de mis nuevas distracciones, que probablemente durarán unos cuantos años. tal vez incluso vaya allá porque de otra forma no veré a ninguna de esas personas jamás, descubrí que no es tan ridiculamente caro ir. ah, también debería volver a dibujar, los dibujos que hice el otro día no estaban tan mal dadas las circunstancias. a diferencia de ayer, conozco esta canción y me gustó por un tiempo. es algo más pensado y al igual que los temas de las últimas dos noches, la escuché como veinte veces seguidas. no sé, nunca pude hacer eso antes, ni siquiera con mis canciones favoritas cuando más me gustaba escuchar música. repetición, otra vez, siempre, tal vez ya no, tal vez ya no con las mismas cosas.
0 notes