#Se prendió

[tatatale]

Te grito por aquí también lo canon que es esto HAHAHAH

Mil gracias, lo adoro muchito T ω T)♥♥♥

Me dieron ganas de dibujar a sunflower tan bonito y tierno

Sunflower by: @tatatale

[th3e-m4ng0]

Siempre me emociono cuando hay fanart de Zeta, muchas gracias, te quedo bine chulo T-T

teeheee q bueno q te gustó !!!!!!! 🙏🙏🙏

[qernn]

Nada mejor que una hija de Aleria casi absorbiéndote el alma para cerrar el día (aka buenas tardes):

@luiwritings g o t h

[magiaveneno]

me fascina todo lo que fue el primavera sound xq la organización fue malisima, había que caminar como 20 cuadras para llegar al predio, hubo tormenta, humedad y 30 grados de calor, el domingo terminó antes, tragamos kilos de tierra en los pogos y terminamos todos re enfermos, pero aún así fue el mejor festival de la historia de argentina chupala lollapalooza

[blackberryhexee]

Pelea de novios 😍

[triplendeja]

YEOROBUNNN I'M BACK

[mantecol]

Los días de paro me sacan lo facho de adentro

[cacaitos]

yoooo

[safvdie]

lo que le dice june le genera un pánico que la asusta por lo irracional en sus pensamientos. no quiere que caminen hasta chicago, ¿y si llevan la desgracia con ellos? en su mente todos llegarán a un lugar seguro, normal, ajeno a todo esto y podrán cada uno seguir su camino. sally volverá a chicago con su padre y todo lo ocurrido quedará como un mal recuerdo que se encargará de reprimir. pero no dice nada de aquello que piensa--casi que por primera vez en su vida-- porque sabe que algo de todo eso no tiene sentido, y elige pensar que es la parte de sentir que aquél grupo que proviene de safe heaven carga con algún tipo de maldición. prefiere centrarse en lo que le cuenta de él, y aferrarse a la idea de que quizás el frío los detenga. " ¿eres cercano con tu tío? " espera no importunar con la pregunta. " yo elijo pensar que todo sucede mientras nos vamos moviendo " porque si no lo ha dejado claro antes, pensar en la posible masividad de la situación la abruma. " entonces--según mis cálculos " sonrisita se extiende buscando otorgarle tranquilidad. " tu tío está sano y salvo " sacude la cabeza, intentado quitarle un poco de responsabilidad al moreno. " todos están igual de desconfiados " ella menos que el resto. no porque les crea a los habitantes de la nueva era, ni porque no le parezcan raros, sino porque añoraba esa calma en la. que estaban viviendo. y podría acostumbrarse a ella. toma aire y exhala con pesadez. " pero sí, la mejor idea es descansar un poco " aunque imaginaba que sería difícil. " no me asignaron ningún rol fijo aún. está bien igual, puedo testear cuáles son mis mejores habilidades para el apocalipsis " tono es bromista sólo porque ya dejó claro que le cuesta asimilar todo lo que están viviendo. " ¿tú estás a cargo de un grupo, verdad? " lo señala con el dedo en una gestualidad que acompaña sus palabras, como siempre que abre la boca. no está muy segura de la pregunta que hace, pues no ha estado prestando mucha atención. " ¿cómo lo llevas? "

asiente con suavidad. no tenía un gran recuerdo de aquella ciudad porque no encontraba demasiado de sí entre esas calles, llenas de talentos intentando ser descubiertos, artistas desesperados y trabajadores buscando salir adelante. quizá recuerdo de vacaciones para el olvido eran lo que ataban mal sentimiento con el lugar realmente, pero no es el punto de la conversación. solo sabe que enormidad del lugar y masividad de personas era todo lo que necesitaban evitar — lo único que los salvó de peor imagen en safe haven. ' con suerte podemos caminar hacia ahí luego. si toda esta infección viene de un virus o algo así debería ser menos efectivo con el frío... ' pero nada sabe de ciencia, todo es esperanza en lo que se basa. ' no todos tenemos a quien buscar en ese puesto militar de greenville, mi tío debería estar en augusta ' su ex-mujer también, piensa, inevitablemente recordando lo asustadiza que solía ser. baja la cabeza apenas, sonriendo para sí mismo de solo pensar en lo mucho que se asustaba con los animales nativos. ' no tengo idea de si los militares habrán llegado ahí, o si logró irse antes... tiene una gran intuición el viejo ' se pregunta, a la vez, si todo aquel drama de los infectados sería lo suficiente fuerte como para cruzar fronteras y llegar a toronto... pero deja ir el pensamiento, porque no tiene intenciones de sumar a su padre a ideas recurrentes que ya molestaban. ' honestamente no debería estar pecando de desconfiado en este momento, quizá sólo debemos dejar una semana de descanso en paz para que todos se recupere y ver alternativas de nuevo ' sentía los segundos pesados como una bomba sobre su pecho, hartante y cansadora. pero tampoco debía asentarse en la posición de líder paranoico porque no tendría buenos resultados. incluso si no forma parte de su grupo, valora a sally y no quiere que esté intranquila. ' también podría ayudar a que se nos aclaren algunas ideas... ¿qué te asignaron como tarea estos días? '.

[nomellamocata]

Etapa de creación - Día 8: Pepito siempre fue un niño despierto

Técnica: acrílico sobre tela. Tamaño: 50 x 70 cm aproximadamente. 📸: @fabipavlich

Pintura que terminé hace unos meses y que fue mi primer experimento sobre tela plegada. Aprendí, pasé rabias, desafíos y lo disfruté un montón.

Cuando escuché a Buscarita hablar sobre este momento mi imaginación se prendió de inmediato. Da la casualidad que venimos de barrios muy cercanos, por lo que imagino su casa parecida a la mía, viviendo parecido a como lo hacía yo en mi población.

Por eso no pude evitar pensar que la cocina de Buscarita pudo haber sido un lugar iluminado solo por una ventana, porque me imagino una casa de un piso casi sin patio y con poco acceso a luz. Los muebles se deforman sin dejar entrever si había o no algo para comer. Pero la tetera está prendida lista para armar un té o una sopa, lo que fuera para alimentar a una familia. Y abajo el bolsón con lo que Pepe y sus compañeros podían recopilar, esperando llenarlo con lo que tuvieran.

Fue un aprendizaje pintar sin ver referencias y trabajar solo desde la imaginación y el recuerdo personal. Espero que les guste como a mí.

#comounavida de @nomellamocata es un proyecto financiado por el Fondo Nacional de Desarrollo Cultural y las Artes, Ámbito Nacional de Financiamiento, Convocatoria 2024. Con el apoyo de @museodelestallidosocial@abuelasdifusion y @loicacutura

[sc4rt0st]

Vox se prendió

[quemirabobo]

Cuando arrancamos la marcha desde la facu fue hermoso, habían nenes en la vereda levantando sus libros sonriendo, gente mayor aplaudiendo en los balcones, los autos tocando bocina (en apoyo, no para putearnos). Fuimos en subte y los empleados nos abrieron la puerta para que pudiéramos pasar y ayudaron a organizar la marea de gente que éramos, dsps íbamos todos cantando y la gente que estaba en el vagón se sumaba, un señor me dió ternura porque mientras cantabamos "la uba no se vende" dijo bajito "ni la utn"🫶 El chofer? maquinista? Prendió el altavoz y empezó a cantar "universidad, de los trabajadores, el que no le gusta, se jode, se jode" y cuando estábamos llegando a nuestra estación dijo "en la próxima se baja filo, suerte!" Es hermoso ver como el pueblo se une para defender uno de los derechos más antiguos e importantes de la nación, educación pública, gratuita y de calidad hoy y siempre en la Argentina 🩵🤍🩵

[emily14vo]

Esto se prendió. Giyuu, ¿dónde estás poniendo la mano? Y Sabito está muy concentrado 😳 Como que empezó a hacer calor, ¿no lo creen? 🔥 Que alguien les eché agua fría 🐰🌊

[tanyaspinel]

Se prendió la cosa literalmente XD

[elbiotipo]

Jennifer Lopez salvó a toda mi familia cuando nuestra casa se prendió fuego después nos dio un millón de dólares por ser latinos

que grande la Yenni, siempre firme junto al pueblo

[jartita-me-teneis]

Asesinado por la policía argentina por el delito de "tener ideas avanzadas"…cosas del pasado?

EL FUSILAMIENTO NARRADO POR EL PROPIO VERDUGO ///Un día como hoy, de 1930, es asesinado por la policía argentina por el delito de "tener ideas avanzadas", a sus 25 años de edad, el albañil anarquista Joaquín Penina, quien difundía la rebelión obrera en latinoamérica después de huír del servicio Militar en España. Así narró el momento de su asesinato, el Jefe de pelotón de fusilamientos en el libro "El culto de los asesinos" de Osvaldo Bayer:

<Siendo yo el único oficial presente en la Jefatura, tenía, contra mis sentimientos,y bajo el peso de una gran repugnancia, que llevar a cabo la ejecución de un hombre por el solo delito de no pensar como los que gobernaban y amordazaban al país. La Ley Marcial, vigente en toda su sangrienta fuerza, hubiera caído sobre mí al negarme a cumplir una orden de servicio. “Insubordinación” era la palabra que me hubiera envuelto en la desgracia y me hubiera llevado no al lado, sino frente al pelotón de los tiradores. No oficialmente, supe también que en el domicilio de Penina se habían encontrado grandes cantidades de libros de tendencia avanzada, que se llevaron en camión a la Jefatura de Rosario, donde, creo, ¡se les prendió fuego!…

La noche era suavemente fresca, de una luna fuerte, que por momentos ocultaban las nubes. Hasta ese momento no había sentido fuertemente en mí la impresión de la orden que tenía que cumplir. Pero el aspecto triste y desolado de las quebradas de ese lugar, el mirar temeroso e interrogante de los soldados, y el pensar que tendría que apagar una vida en una noche que era más hecha para soñar que para morir, empezaron a influir sobre mí desde el instante en que pisé la tierra, la que iba a ser manchada con la sangre de un obrero…

Desde el grupo de presentes, donde se hallaba mi superior salió la orden: “¡Haga cargar las armas!” —¡Carguen! —dije. En ese instante, por la escalerilla trasera del camión bajaba el que iba a morir. Venía con las manos esposadas atrás y cuando sus humildes botines de caña tocaron la tierra que iba a besar su cadáver, halló frente a sí a aquellos a quienes habían dicho: “Maten”. Sintió el ruido de la carga de las pistolas, y entonces yo, que lo tenía a un paso, lo vi abrir los ojos en mirada de asombro, y rápidamente comprender…se mordió el labio inferior como si prefiriera sentir el dolor de su carne mas no el temor. Decididamente dio un paso adelante y, después, ya a paso natural, se dirigió hacia la muerte… El suboficial lo acompañaba apoyándole suavemente la mano sobre el hombro izquierdo; se dejó conducir. No dijo una palabra. Yo iba detrás, a pocos pasos. Desde que lo había visto bajar, en mi frente y en mis ojos sentí que se había posado un velo de extrañeza y de irrealidad. Obraba mecánicamente, llevado hacia donde sentía una orden. —¡Ahí!… —dijo alguien.

El detenido hizo alto y bruscamente dio media vuelta, quedando frente a mí y al pelotón que yo tenía que comandar. La luz de la luna, ocultada por momentos, caía casi perpendicular. Serían las once de la noche. Entre él y nosotros habría unos nueve metros. De un lado, el valor y la muerte. Del mío, la repugnancia y la vergüenza… Pensé en ese momento por qué ese hombre, que yo desconocía, no sería un enemigo de mi vida, a quien tuviera armado frente a mí, pronto para matar o defenderse. Pensé que cuánto más valor y sangre fría necesitaría frente a él, esposado pero no vencido, que delante de alguien que pudiera matar.

No quise prolongar la valiente agonía de ese hombre. El suboficial se retiró hacia el pelotón; antes de que llegara a mí, yo ordené: —“¡Apunten!”… Entonces el reo giró la cabeza hacia la izquierda, y mirando con odio al grupo que presenciaba la ejecución, y que estaba a unos quince metros de él, gritó: —“¡Viva la anarquía!”, con un pronunciado acento catalán. Su voz era templada. Yo no vi temor. —“¡Fuego!”—ordené sin ver ya nada. Tres tiros. Doblando las rodillas, se inclinó lentamente hacia adelante, entre gemidos sordos y comenzó a girar sobre sí mismo y hacia el lado derecho. No caía, y no quise prolongar su segunda agonía de la carne y, sin mirar ni apuntar, hice fuego hacia él. Dos soldados más, sin saber, hicieron fuego. Porque por apresurar el instante, y acortar el dolor de ese hombre, yo hice las cosas tan nerviosamente, que me olvidé de mandar: “Alto el fuego”.

Al sentir la segunda descarga, volví en mí, y mandé: —“¡Alto el fuego! ¡Colocar el seguro!” El ejecutado mientras tanto, sobre quien cayó la segunda descarga, había redoblado, al recibirla, su segundo gemido de dolor; encogiéndose más y más, completó tres cuartos de vuelta sobre sí mismo y cayó para siempre, pecho en tierra, la cara aplastada sobre ella.. Salí al frente del pelotón hasta colocarme a unos dos pasos del caído, que aún temblaba sobre el polvo, pero ya sin gemir. Sin mirar casi, tiré. Parece que no di en él, porque sentí una voz que me dijo: —“¡A la cabeza!” Entonces tiré de nuevo, e instantáneamente, el reo quedó inmóvil. Inmóvil para siempre. Fui hasta mi capitán y le dije: “¡He cumplido la orden!”

Era rubio y de pequeña estatura. Representaba unos 25 o 26 años. Vestía pobremente: zapatos de caña; pantalón, no sé si de fantasía o marrón oscuro. Un saco también oscuro. De sus bolsillos se sacaron dos o tres galletas marineras muy duras y en parte comidas, y un giro de cinco pesetas para un hermano de Barcelona… Todos nos acercamos hasta donde estaba el cadáver y alguien dijo: "Fue un valiente hasta el último momento"…