#MiedosYTraumas

[inlezaar]

"Cicatrices del Alma"

En el vaivén de un viaje hacia la ilusoria alegría, te vi reír, reír sin cesar, como nunca antes lo hacías. Pero en mi propio viaje personal, te observé, totalmente destrozado, roto en lo más profundo, riéndote como si fuera tu mayor hazaña, mientras lágrimas silenciosas caían en lo oscuro.

En lo más recóndito de una habitación desolada, te encontré sentado, enfrentando tus miedos y traumas, traumas diferentes, pero tal vez hermanados en esencia, comprendí tus temores, tus heridas invisibles, tu temor a ser herido una vez más por la vida.

Tú, buscando refugio en sustancias que adormecen, mientras yo, busco alivio en mi dolor físico constante, somos distintos, sí, en nuestras formas de escapar, pero en lo más profundo, compartimos un origen, nacidos del mismo dolor, hermanados en el sufrimiento.

Analogías y metáforas entrelazadas en nuestras almas, caminamos por senderos divergentes, pero paralelos, buscando una pizca de felicidad en medio de la tormenta, buscando sanar las heridas que nos acechan sin tregua.

No mencionaremos nombres, pero nuestras canciones internas, resuenan en nuestras lágrimas silenciosas y en nuestras sonrisas vacías, encontrando consuelo en las letras de otros, en las notas ajenas, como un eco lejano que nos hace sentir comprendidos, en este vasto universo de almas rotas y corazones desgarrados.

Frases fuertes y sentimientos a flor de piel, nos entrelazamos en la tristeza, en la melancolía compartida, porque a veces, encontrar a alguien que comprenda, que vea el dolor oculto bajo nuestras risas fugaces, es un bálsamo para nuestras almas heridas.

Somos diferentes, pero en lo esencial, somos iguales, víctimas de nuestras propias batallas internas, luchando por encontrar un poco de paz y redención, en un mundo que nos ha golpeado una y otra vez.

Que nuestras historias se entrelacen en versos cargados, que las palabras se conviertan en refugio y consuelo, en este vasto océano de emociones insondables, donde el dolor y la esperanza se entrelazan, donde nuestras almas rotas encuentran un lugar.

No mencionaremos nombres, pero nuestros corazones saben, que nuestras historias, aunque diferentes, se asemejan, y en esta conexión silenciosa, encontramos un consuelo, en el abrazo tácito de nuestras almas heridas.

Annanke