#ANTIGUO BALNEARIO
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ANTIC-BALNEARI-LA PUDA-ART-PINTURA-MENJADORS-INTERIOR-DECADENCIA-PARETS-PORTES-SOSTRE-FOTOS-PINTANT-ARTISTA-PINTOR-ERNEST DESCALS por Ernest Descals Por Flickr: ANTIC-BALNEARI-LA PUDA-ART-PINTURA-MENJADORS-INTERIOR-DECADENCIA-PARETS-PORTES-SOSTRE-FOTOS-PINTANT-ARTISTA-PINTOR-ERNEST - Escenas en el interior del Antic BALNEARI MONTSERRAT de LA PUDA entre Esparraguera y Olesa de Montserrat en el centro de Catalunya y muy próximo a mi ciudad de Manresa, la desolación del lugar donde habían existido los antiguos comedores en los que se reunían los pacientes que llegaban para disfrutar de la Terapia de sus Aguas Sulfurosas, ahora las puertas y las paredes se encuentran ruinosas y bajo un techo de vigas de maderas rotas por el paso del tiempo y su abandono, la luz del cielo se introduce por los agujeros, me usta mucho Pintar estos lugares oscuros en los que circulan las energías de Espíritus que han quedado aquí para intentar ofrecer sui testimonio vital, me siento acompañado por Ellos y sus vivencias. Fotos del artista pintor Ernest Descals pintando las antiguas habitaciones en las que reinaba la alegría de aquellos que querían mejorar su salud en el antiguo Balneario. La Pintura me permite conectar con el lugar y con las almas de las personas.
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Historias de Playa
La historia que procederé a relatar a continuación es brutal y horrible. El protagonista sufrió como un porcino siendo faenado y nunca pudo recuperarse psíquica, emocional, física ni socialmente de la desgracia que le ocurrió.
A fines del año pasado este muchacho, que llamaremos Joselito protegiendo así su identidad, se enamoró perdidamente de una minurri llamada Carla, que era una compañera de universidad. Nada nuevo por cierto, siendo ésta una situación que le ocurre a la mayoría de los weones veinteañeros promedio de este país, sin embargo desde un principio este loco amor no se presentó como normal, ya que este weon estaba tan enamorado, que la miraba y se ponía más tieso que weón con fibrosis quística. De hecho pasó de ser un vagoneta de primera a ir a meterse a todas las clases para intentar jotear a la susodicha. Si hasta tuvo que ponerse a estudiar.
No era pa culparlo tanto tampoco, ya que la loca era bastante encachada, hay que decirlo. Para su felicidad, su arduo trabajo rindió frutos y al poco tiempo ya estaban en una relación en la que todo era teleseriesco: felicidad, mariposas en la guata, ositos de peluche y todas esas basuras romanticonas a las que hay que apelar pa que las minas lo terminen prestando. Sin ir más lejos, Joselito frecuentemente nos comentaba acerca de la acabada y extensa técnica de la lolita en las artes amatorias. En resumen, era una delicia, nada más que pudiera pedir.
Llegó el verano correspondiente, y Joselito invitó a su bienamada novia a la playa junto a sus demás amigos, por allá por febrero, cuando la cosa se pone más romanticona. Partieron así a un balneario del litoral central cuyo nombre no viene al caso, más enamorados que osos panda en época de apareamiento. De la mano pa todos lados el par de tortolitos.
Ni bien llegada la primera noche, deciden todos celebrar el inicio de las vacaciones mandándose un carrete de proporciones titánicas, por lo que fueron a adquirir los insumos etílicos necesarios a algún expendio de alcohol playero. Luego de sortear con relativo éxito los terribles palos a los que los querían someter los careros dueños de las botillerías locales.
Luego de hacerse de los mejores licores en relación precio/precio volvieron a su bunker para empezar a ponerle como correspondía. Los brindis y los saluds no se dejaron esperar. Por el verano, por las vacaciones, por la wea, en fin… motivos para celebrar no faltaban ni ánimo tampoco, por lo que al rato ya estaban todos más o menos maquillados, mas la mina del Joselito ya estaba con los ojos bien achinados, con una notoria tendencia a oscilar en torno a su centro de gravedad, y con los labios ya medios expandidos (los de arriba).
Nadie estaba como para andarla juzgando por ello, pero igual no pasó piola que estaba terriblemente de curada cuando empezó a hablar weas en una lengua que parecía sánscrito antiguo lo que nos produjo unas carcajadas incontenibles. Lo que no le dio tanta risa a Joselito fue que la mina en su borrachera, se empezó a mear en la misma silla en la que estaba sentada. Nadie cachó, pero ya cerca del final de la jornada, cuando estaban todos más doblaos que billete de 20 lucas, la loca se sacó la cresta: rompió una silla, se fue de espaldas con sillón y todo y buitreó hasta las cortinas (apenas se salvaron los muebles de cocina).
Al otro día tuvo que ponerse suspensores pa aguantar la cara de vergüenza, sin embargo todos se lo tomaron con humor. Joselito, en su faceta más tierna y amorosa, le dijo que no se preocupara, que esas cosas pasaban y que en realidad habían ido a la playa a wear así que no era tan grave.
Pasaron la caña durante la tarde, y en la noche decidieron ir a la playa a ver se armaba algún vacilón en torno a alguna fotatita. Como andaban medios damnificados sólo se compraron unas Pilsen.
Llegados a las orillas del mar, armaron una fogata y empezaron a compartir. Al rato, Joselito cachó que su pierna ya se había bajado 3 pilsens completitas ya. Sorprendido, se pregunta “¿que weá esta culiá?”. Va donde su chica y le pregunta si está bien o algo, y la mina se emputece y le ladra:
al mismo tiempo que le lanza un denso flato en todo el rostro, y se para y se saca la cresta. Casi se va de hocico a la fogata la peuca jugosa. La ayudaron a ponerse de pie, pero la mina al incorporarse se fue del lugar a dar jugo a otra parte.
No la pescaron, pero al rato decidieron que era mejor irla a buscar, así que recorriendo otros grupitos dentro de la playa, cacharon que se escuchaban risitas por todos lados y dedujeron que la mina al parecer se iba paseando y estaba con la idea de quedarse con el mejor postor, mas Joselito no estaba pa weas de ese tipo.
Al llegar a un grupito, encuentran a la Carlita abrazada de dos weones enteros reggaetoneros, picaos a Wisin y Yandel subalimentados, vestidos con lo más selecto de la alta costura de la ropa americana de Estación Central, con unos bling bling que parecían sacados de la hojalatería y que se cachaba como a 10 km que habían aplicado deserción escolar en prekinder.
Joselito asume su rol de pololo y le dice que se pare y se vaya con él a la casa, ante lo cual se para uno de los roticuacos y le dice,
A Joselito se le envalentonaron todas las hormonas, le hirvió la sangre. No podía ser pisoteado de esa forma así que quiso ser aún mas xorizo que su contendor, a lo que le respondió,
Como buenos caballeros, estos dos muchachos se dieron la mano y la discusión quedó zanjada. No, mentira. En realidad se agarraron a cornetes ipso-facto. Salieron las manoplas y unas cadenas por ahí. Quedó la tole-tole como diría Sapito Livingstone. Patadas, combos, gargajos, y un cuantioso etcétera describe lo que ocurrió en esa reyerta. Uno de los muchachos de Joselito recibió un soplamoco en pleno rostro y resultó con la ceja depilada. Joselito no se quedó atrás y le voló un choclero de un puro ganador en l’ocico a uno de los hampones.
Al final llegaron los verdes y como Joselito y sus amigos tenían menos cara de flaites, solo los redujeron, pero los otros tuzones se botaron a xoros con los pacos así que les pegaron una repasá más o menos. Los giles culiaos golpearon con sus cabezas y estómagos con una tenacidad y una fuerza encomiables las lumas y los bototos de los representantes de la ley. Igual nomas todos se fueron preciosos y pasaron la noche en el calabozo, y Joselito sin noticias de su novia.
Llegado el amanecer, fueron puestos en libertad, quedando exonerados de toda deuda con la sociedad. Joselito se vio sobrepasado por la situación, y con el sol asomándose por la Cordillera de la Costa, se arrodilló en la calle y con una desesperación que podría haber desagarrado hasta el alma del más duro, gritó al cielo,
Fueron a la playa, pero ya no quedaba nadie más que un viejo rancio y negro recogiendo basura, y unos pendejos púberes durmiendo tiraos comiendo arena. Recorrieron un poco más y entremedio de unas dunas, Joselito divisa algo que le parece familiar. Se acerca un poco hasta poder alcanzarlo, lo toma con sus manos, y no lo puede creer. Cayó de rodillas y con lágrimas manando de sus dos ojos reflejó toda la pena y la angustia que apresaban su corazón. Sus emociones se descontrolaron y su dolor estalló en un sobrecogedor clamor hacia el firmamento al observar frente a sí, tirados en la arena, los calzones de su amada.
Volvieron a la casa y Joselito tomó hasta quedar inconsciente y poder así conciliar un poco el sueño.
Al final Carlita se dignó a aparecer en la casa como a las 7 pm, caminando a lo cowboy y con más sed que la chucha y por supuesto más chascona que la mierda. Joselito recobró algo su dignidad tapizándola a chuchadas como ni el más deslenguado hincha de fútbol en el estadio lo había hecho jamás. Le tiró su calzón en la cara y le dijo que se virara para no verla nunca más.
Esa misma tarde Carlita se volvió a Santiago con la cola entre las piernas, mientras el bueno de Joselito se quedó solo en la playa, mirando las puestas de sol sin compañía y a merced de quienes seguían carreteando allá, quienes lo sometían a burlas y ofensas acerca de su situación, gritándole weas como “cacha, ahí esta el aweonao que cooperó”. Sus risas eran como puntudos estoques que perforaban su en un ya deplorable estado corazón.
Pero como Joselito es weon, no paraba de repetir que aún la seguía amando, aún cuando se lo cagaron de forma artera, con premeditación, alevosía, en despoblado y la conchetumare… Los cielos se nublarán de vacas voladoras, los ríos podrán invertir el curso de sus aguas, la arena de las playas podrá convertirse en oro… pero los aweonaos no se acabarán jamás…
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Paisajes de Vizcaya
El litoral se extiende magnífico y ondulado en Lemoiz
con sus ásperos peñascos y playas de arena fina,
en frente de mí la marejada pálida del Cantábrico
rompe sus olas contra el balneario y el muelle pesquero.
Armintza, antiguo bastión del señorío provincial
permanece encerrado entre la ensenada y los barrancos
y Bermeo, puerto deportivo y coloreado de barcos
ofrece una abundancia bíblica de pescado azul.
El dulzor de las olas que son las delicias de las mujeres
cuyos senos desnudos reposan sobre las arenas,
los calamares en su tinta, las terrazas, el frontón
y los paseos para perderse o soñar sobre un banco.
En Guernica Lumo los restos del roble heroico
aguardan en su mausoleo consagrado a la patria vasca,
ante el árbol santo de Vizcaya prevalece mi respeto
y hago un largo silencio, en honor a la libertad.
-Jomar, 2 de septiembre, 2023
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“Balnearios”/ Mariano Llinás (2002)
Hace años, en la época de los grandes transatlánticos, de los grandes hipódromos, de los grandes Casinos, los hombres inventaron los balnearios. Fue una idea alucinada y festiva, una idea inocente. Creían que el paraíso era algo posible, inmediato y fácil. Tomaban una franja de la costa marina y la llenaban de palacios, ramblas y palmeras para después desvestirse y pasar horas y horas en el agua o en el sol. Los balnearios surgieron como un juego, los inventó un siglo que todavía jugaba, que todavía era un niño. Es por eso que pensar en los balnearios es siempre pensar en la infancia, en la infancia del siglo, en la infancia del país y también en la propia. En la felicidad simple y diáfana, en tiempos que evocamos como exaltados y brillantes. Son el lugar de las cosas pasadas, de las cosas buenas. Son probablemente algo triste. Y lo más extraño es que todo en los balnearios es alegre. Los balnearios nacen de algo antiguo y profundo, casi animal, nacen del placer del agua, por nadar, zambullirse o flotar, por explorarla, desafiarla y celebrarla, por hacer de ella una fiesta. Es como el fuego, como la velocidad o como la música. Algo primario, algo primitivo. Y en la esencia de los balnearios resiste aún esa cosa animal. Son lugares hechos para estar cerca del agua.
Los balnearios son las únicas ciudades que dio el siglo, y siempre hay en ellas algo épico. Primero, está la lucha contra la arena. La historia de cada balneario siempre incluye la batalla contra las fuerzas naturales, contra el viento, contra el mar, contra la arena, contra la sal. Frente al mar, en medio de la nada, se construía una ciudad faraónica, imperial, cuyos palacios eran los casinos y cuyo templo era el hotel. Y así empezaban los balnearios. Al principio eran solitarios y remotos, había poca gente, pocos edificios, pocas cosas. Años después se habían convertido en monstruos, se habían convertido en su propia parodia, en su propia caricatura. La fiebre del oro que las atacaba cada año, cada verano hizo de ellos otra cosa, una cosa extraña. Todo en los balnearios es distinto. El balneario es un mundo extravagante, onírico, un mundo de irrealidad, cuando uno visita un balneario fuera de estación parecería que estuviera en un teatro vacío, con sus decorados y sus mascaras abandonadas. Siempre hay algo de misterioso en ellos y conmovedor. A los balnearios los imagino una época arrebatada y arrogante; y cuando esa época se termino, cuando sus transatlánticos fueron a parar al fondo del mar y cuando sus dirigibles se prendieron fuego, los balnearios quedaron como los únicos sobrevivientes. Como náufragos. Como seres de otro mundo.
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El Desierto de los Barcos Fantasmas
Hace apenas 30 años, este lugar albergaba la cuarta masa de agua interior más grande del mundo: un mar antiguo tan vasto que hasta Alejandro Magno escribió sobre sus desafíos al cruzarlo. Era un paraíso para el comercio pesquero y un imán para turistas que acudían a su próspera ciudad balneario.
Hoy, por primera vez en 600 años, el Mar de Aral está (casi) seco. En su lugar, una flota de barcos gigantes y oxidados se erige como testimonio fantasmal de su glorioso pasado. Este mar, que solía ser tan inmenso, abarcaba dos países euroasiáticos, ahora unidos por sus restos polvorientos: Uzbekistán y Kazajistán.
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¿Cuáles son las atracciones turísticas más destacadas en la provincia de Orense según El Nacional?
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¿Cuáles son las atracciones turísticas más destacadas en la provincia de Orense según El Nacional?
Lugares turísticos en Orense
Orense, también conocida como Ourense, es una provincia en Galicia, España, llena de encanto y belleza natural. Conocida por sus aguas termales, paisajes pintorescos y arquitectura histórica, Orense es un destino turístico popular para aquellos que buscan una experiencia única en España.
Una de las atracciones más populares en Orense son sus aguas termales, como las del balneario de Laias y el balneario de Outariz. Estas aguas termales tienen propiedades curativas y son ideales para relajarse y rejuvenecer el cuerpo y la mente.
Orense también es conocida por su casco antiguo bien conservado, donde se puede disfrutar de una arquitectura medieval impresionante. La catedral de Orense, con sus impresionantes vistas y detalles arquitectónicos, es una visita obligada para los amantes de la historia y la cultura.
Además, los paisajes naturales de Orense son otro punto destacado para los turistas. El Cañón del Sil ofrece impresionantes vistas del río Sil y sus empinadas laderas cubiertas de viñedos. Este paisaje es ideal para hacer senderismo, pasear en barco o simplemente disfrutar de la tranquilidad y la belleza de la naturaleza.
En resumen, Orense es un destino turístico versátil que combina historia, cultura, naturaleza y relajación en un solo lugar. Ya sea que estés buscando unas vacaciones relajantes en aguas termales o una aventura al aire libre, Orense tiene algo que ofrecer para todos los gustos y preferencias. ¡Descubre los encantos de Orense y déjate sorprender por todo lo que esta provincia tiene para ofrecer!
Visitas imprescindibles en la provincia de Orense
La provincia de Orense, ubicada en la región de Galicia en España, es conocida por su impresionante belleza natural, su rica historia y sus aguas termales rejuvenecedoras. Si estás planeando una visita a esta encantadora provincia, aquí tienes algunas visitas imprescindibles que no te puedes perder.
Las Termas de Outariz y Burgas: Orense es famosa por sus aguas termales, y una visita a las termas es una experiencia relajante y revitalizante. Las Termas de Outariz ofrecen piscinas al aire libre rodeadas de exuberante vegetación, mientras que las Burgas son manantiales de agua caliente en el centro de la ciudad, donde puedes sumergirte en aguas termales de forma gratuita.
La Catedral de Orense: Esta impresionante catedral gótica es una obra maestra arquitectónica que data del siglo XII. Su fachada es impresionante, con detalles elaborados tallados en piedra, y su interior alberga obras de arte sacro de gran valor histórico y cultural.
El Puente Romano: Construido en el siglo II d.C., este puente romano es uno de los emblemas de la ciudad de Orense. Cruza el río Miño y ofrece vistas panorámicas del paisaje circundante, además de ser un lugar perfecto para dar un paseo tranquilo y disfrutar del ambiente.
Las Ribeiras del Miño: Estas orillas del río Miño son ideales para relajarse y disfrutar de la naturaleza. Puedes pasear por los senderos junto al río, hacer un picnic en sus áreas habilitadas o simplemente sentarte y contemplar el paisaje.
El Monasterio de San Estevo de Ribas de Sil: Situado en un entorno natural impresionante, este monasterio benedictino del siglo XII es una joya arquitectónica. Su claustro y su iglesia son especialmente destacables, y la visita al monasterio te transportará a tiempos pasados de espiritualidad y serenidad.
Estas son solo algunas de las visitas imprescindibles en la provincia de Orense. Ya sea que busques relajarte en las aguas termales, explorar la historia y la cultura de la región, o simplemente disfrutar de su hermoso entorno natural, Orense tiene mucho que ofrecer para todos los gustos.
Atracciones turísticas populares en Orense
Orense, una encantadora ciudad situada en la región noroeste de España, ofrece una variedad de atracciones turísticas que cautivan a visitantes de todo el mundo. Desde su rica historia hasta sus impresionantes paisajes naturales, Orense tiene algo para todos los gustos.
Una de las atracciones más populares de Orense es su casco antiguo, que rebosa de encanto medieval. Los visitantes pueden pasear por sus estrechas calles empedradas y descubrir monumentos históricos como la Catedral de San Martín y el Puente Romano, que ofrece vistas espectaculares del río Miño.
Otra parada obligada en Orense es el famoso Balneario de Orense, conocido por sus aguas termales curativas. Aquí, los turistas pueden relajarse y rejuvenecer en piscinas de agua caliente mientras disfrutan de los beneficios para la salud de las aguas minerales naturales.
Para los amantes de la naturaleza, Orense también ofrece el impresionante Cañón del Sil, donde se pueden realizar excursiones en barco para admirar los imponentes acantilados y las pintorescas aldeas que se asoman al río.
Además, los amantes de la buena gastronomía disfrutarán de la deliciosa cocina gallega en los numerosos restaurantes y tabernas de Orense, donde se pueden degustar platos tradicionales como el pulpo a la gallega y el caldo gallego.
En resumen, Orense es un destino turístico completo que combina historia, naturaleza, relajación y gastronomía. Ya sea paseando por su casco antiguo, sumergiéndose en sus aguas termales o explorando sus impresionantes paisajes, los visitantes encontrarán en Orense una experiencia inolvidable.
Qué ver en Orense
Orense, situada al noroeste de España, es una ciudad llena de encanto y belleza que ofrece a sus visitantes una amplia variedad de lugares por descubrir. Si te preguntas qué ver en Orense, aquí te presentamos algunos de los destinos más destacados.
Uno de los lugares emblemáticos de la ciudad es la Catedral de Orense, una impresionante construcción de estilo gótico que data del siglo XII y que destaca por sus capiteles románicos y su imponente fachada. En su interior, se puede admirar su hermoso retablo barroco y la Capilla del Santo Cristo, donde se venera una de las imágenes más importantes de la Semana Santa orensana.
Otro punto de interés es el Puente Romano, un puente de origen romano que cruza el río Miño y ofrece unas vistas espectaculares de la ciudad y del paisaje natural que la rodea. Además, Orense es conocida por sus famosas termas, donde los visitantes pueden disfrutar de aguas termales con propiedades terapéuticas y relajantes.
Para los amantes de la arquitectura, el casco antiguo de la ciudad es un verdadero tesoro, con calles empedradas, casas tradicionales y plazas pintorescas que invitan a perderse y descubrir la historia y la cultura de Orense.
En definitiva, Orense es una ciudad llena de historia, arte y naturaleza que ofrece a sus visitantes la oportunidad de vivir una experiencia inolvidable. ¿A qué esperas para descubrir todo lo que esta maravillosa ciudad tiene para ofrecer? ¡No te arrepentirás!
Puntos de interés turístico en la provincia de Orense
La provincia de Orense, situada en la comunidad autónoma de Galicia en España, es un destino turístico encantador con una gran variedad de puntos de interés para los visitantes. Desde sus impresionantes paisajes naturales hasta su rica historia y deliciosa gastronomía, Orense tiene mucho que ofrecer a los turistas.
Uno de los principales atractivos de la provincia son sus famosas aguas termales, conocidas por sus propiedades curativas. Lugares como las Termas de Outariz o las Termas de A Chavasqueira ofrecen la oportunidad perfecta para relajarse y rejuvenecer en un entorno natural.
Orense también cuenta con un patrimonio arquitectónico impresionante, destacando la Catedral de Orense, una obra maestra del arte románico. Otros lugares de interés incluyen el Puente Romano sobre el río Miño, que data de la época de los romanos, y el casco antiguo de la ciudad con sus encantadoras calles empedradas y plazas pintorescas.
Para los amantes de la naturaleza, la provincia ofrece paisajes impresionantes como los Cañones del Sil, donde se pueden realizar paseos en barco para admirar los acantilados y viñedos que bordean el río.
En cuanto a la gastronomía, Orense es conocida por su exquisita cocina, especialmente sus platos de pulpo a la gallega y lacón con grelos, que se pueden disfrutar en los numerosos restaurantes y tabernas de la región.
En resumen, la provincia de Orense es un destino turístico único que combina historia, naturaleza y una cultura culinaria rica que cautiva a todos los que la visitan.
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En "El Balneario"
En mi reciente ida a Uruguay aproveché la ocasión para ir a casa de los amigos Seba y Vale, ubicada en Parque del Plata, y visitamos el estadio del Club Deportivo Parque del Plata, el "Balneario", en donde los verdes juegan nuevamente de locatarios desde 2022.
Fue grato el ver que el field cuenta con iluminación y posee nada menos que los antiguos arcos del Estadio Centenario, renovados el año anterior para ser sede de la final de la Copa Libertadores y Copa Sudamericana 2021.
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El desierto de los barcos fantasma
Hace sólo 30 años, aquí se encontraba la cuarta masa de agua continental más grande de nuestro planeta; un mar antiguo tan vasto que incluso Alejandro Magno escribió sobre sus luchas para cruzarlo; donde el comercio pesquero floreció y los turistas alguna vez acudieron en masa a su ciudad balneario junto al mar.
Ahora, por primera vez en 600 años, el mar de Aral está (casi) completamente seco, y la flota de barcos gigantes y oxidados que ha dejado a su paso se ha convertido en una de las únicas pruebas del pasado.
El Mar de Aral es (o era) tan grande que se extiende sobre dos países euroasiáticos que ahora se extienden a ambos lados de sus restos polvorientos: Uzbekistán y Kazajstán.
El proceso de secado se inició allá por los '60's cuando, la otrora Rusia, planificó el desvío de los cauces de dos ríos, que alimentaban al Mar de Aral, para el regadío de las plantaciones de algodón... cuando el sistema cayó y la madre Rusia se dividió, todo quedó en la nada... diversos problemas y enfrentamientos, más las pruebas armamentistas y los vertidos de los desechos industriales de los fertilizantes hizo del lago un lugar con altos índices de contaminación... el mar de Aral ahora está dividido en "Norte" y "Sur", el mar Aral del norte está recuperando su volúmen gracias a la construcción de una represa, su altura a subido más de 22 metros... pero el mar de Aral del Sur, al parecer está condenado a la desaparición..
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LA PUDA-ART-PINTURA-ANTIC-BALNEARI-ESPARRAGUERA-EDIFICIS-ARBRES-NATURA-POESIA-DECADENCIA-PINTOR-ERNEST DESCALS por Ernest Descals Por Flickr: LA PUDA-ART-PINTURA-ANTIC-BALNEARI-ESPARRAGUERA-EDIFICIS-ARBRES-NATURA-POESIA-DECADENCIA-PINTOR-ERNEST DESCALS- Pintura en el Antic BALNEARI de LA PUDA, en Esparraguera, Barcelona, Catalunya, sensaciones poéticas y de decadencia de sus edificios, los árboles y la naturaleza se han apropiado de las intalaciones que eran generadoras de Terapia mediante el agua sulfurosa que surge de sus fuentes, ahora el tiempo ha cambiado y es la solitud lo que impregna el lugar que antes era visitado por miles de pacientes con problemas de salud, lugares misteriosos en los que encontrar nuevas motivaciones para Pintar sus paisajes repletos de atmósfera romántica. Detalle de unos de los cuadros pintados por el artista pintor Ernest Descals en el silencio que proporciona la maleza y el arbolado que lo invaden todo, la nostalgia de aquello que era y que ahora ha sufrido una transfromación paisajista, creo que los troncos y las ramas de los árboles quieren contarme lo que han visto, ellos son los guardianes.
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Las termas romanas han sido una parte esencial de la historia de la ciudad de Lugo durante siglos. Recientemente, una excavación en la piscina exterior del complejo de baños descubrió artefactos fascinantes, arrojando nueva luz sobre la importancia histórica del lugar. En este artículo, exploraremos la historia, la ubicación, los descubrimientos y la interpretación arquitectónica de las Termas Romanas de la Ciudad de Lugo. Acompáñanos en un viaje a través del tiempo y descubre los secretos de este antiguo y extraordinario yacimiento. Localización de las Termas Situadas en la margen izquierda del río Miño, la antigua maravilla arquitectónica y arqueológica de Lugo es un tesoro recientemente estudiado y excavado. Estratégicamente situado cerca del Puente Romano, un puente que data de la época romana y que se ha conservado hasta nuestros días, el complejo de baños era evidentemente una parte importante de la infraestructura de la ciudad. Además de su ventajosa ubicación, la zona también se caracteriza por su exuberante vegetación y agradable clima, lo que la convierte en un lugar deseable para relajarse y socializar. Gracias a la reciente interpretación arquitectónica y funcional presentada por Silvia González Soutelo, parece que el complejo de baños formaba parte de un plan urbanístico más amplio que incorporaba otros edificios e instalaciones públicas, teniendo en cuenta el uso de recursos naturales como el agua, y para proporcionar un lugar de ocio y bienestar a los ciudadanos de Lugo. La ubicación de las Termas Romanas es un testimonio de la importancia de los espacios recreativos en el mundo antiguo. Su ubicación estratégica, combinada con el acogedor entorno natural, ha contribuido a revelar la importancia de los espacios públicos para los ciudadanos de esta ciudad de antaño. Descubrimientos de la excavación La excavación de un complejo de termas romanas en Lugo, España, produjo una serie de descubrimientos intrigantes que han arrojado luz sobre la historia del yacimiento. Estos descubrimientos han sido muy valiosos para ayudarnos a comprender el propósito y la función de las termas, y han suscitado un gran interés tanto entre los estudiosos como entre el público. Uno de los hallazgos más notables fue la piscina exterior, descubierta en 1999. Los artefactos hallados dentro y alrededor de la piscina proporcionaron valiosos indicios sobre las actividades que se realizaban en el complejo. Además de la piscina, la presencia de muros romanos de hormigón que siguen en pie es un testimonio de las avanzadas técnicas de ingeniería empleadas por los romanos. El hecho de que estos muros hayan podido sobrevivir durante tanto tiempo es un testimonio de su durabilidad y de la habilidad de los constructores que los levantaron. La importancia histórica del complejo se ha puesto aún más de relieve en el libro 2.000 anos do Balneario de Lugo, que ofrece una exploración del yacimiento y de su importancia para la región. La publicación ha suscitado un gran interés y ha dado a conocer el interés cultural del complejo. Recientemente, Silvia González Soutelo presentó una nueva interpretación arquitectónica y funcional del complejo. Esta interpretación tiene en cuenta los descubrimientos realizados durante la excavación y ofrece una nueva perspectiva sobre la finalidad y la función de las termas. Esta nueva perspectiva ha despertado un renovado interés por el yacimiento, consolidando aún más su condición de hito cultural significativo. Significado histórico Las antiguas termas de la ciudad de Lugo han resistido la prueba del tiempo, proporcionando una visión única de la época romana de la ciudad. Situadas estratégicamente a lo largo del río Miño, Lucus Augusti era un importante centro de comercio, y el complejo de baños era un testimonio del aprecio de sus gentes por las cosas buenas de la vida. Durante las excavaciones del yacimiento se han descubierto diversos artefactos, como monedas, joyas y cerámica, que ayudan a hacerse una idea de cómo era la vida cotidiana en esta época.
En los últimos años, las termas romanas de la ciudad de Lugo han sido objeto de un gran escrutinio por parte de los investigadores, que intentan comprender mejor la importancia histórica del complejo. Esto se plasmó en el libro 2.000 anos do Balneario de Lugo, que detallaba el papel de las termas en el crecimiento de la ciudad. Gracias a esta mayor atención, la importancia cultural de los baños ha sido reconocida más allá de la comunidad local. Silvia González Soutelo ha ofrecido una nueva interpretación del complejo de baños, teniendo en cuenta tanto sus aspectos arquitectónicos como funcionales. Analizando la disposición del lugar, ha podido identificar varias zonas para distintas actividades, como la natación, el ejercicio y la relajación. Esto ha permitido a los historiadores comprender mejor las costumbres sociales y culturales de la época, y cómo se utilizaban las termas en la vida cotidiana de los ciudadanos de Lucus Augusti. Las Termas Romanas de la Ciudad de Lugo son un valioso patrimonio cultural, con mucho que ofrecer en cuanto al conocimiento de la época romana de la ciudad. Los artefactos desenterrados durante las excavaciones han proporcionado una información inestimable, y la nueva interpretación del complejo ha permitido una comprensión más detallada de las costumbres y tradiciones de la época. Está claro que las Termas Romanas de la Ciudad de Lugo ofrecen una gran cantidad de información sobre el pasado de la ciudad, y su importancia no debe subestimarse. Interpretación arquitectónica y funcional La reciente exploración de un complejo en Lugo ha generado una nueva comprensión de su diseño y finalidad. La investigación de Silvia González Soutelo ha puesto de relieve las ingeniosas técnicas de ingeniería empleadas en su construcción, incluido el uso de muros romanos de hormigón resistente. Su examen de las diversas piscinas y salas presentes en el complejo proporciona una vívida descripción de sus aplicaciones previstas y de cómo se empleaban en la antigüedad. Esta nueva interpretación de los aspectos arquitectónicos y funcionales del complejo proporciona una cautivadora visión del pasado y rinde homenaje al genio de nuestros antepasados. Los hallazgos de este estudio son de gran trascendencia, pues nos permiten apreciar la importancia histórica del complejo. Esta interpretación no sólo ha dado vida a la antigua estructura, sino que también nos ha permitido echar un vistazo a la vida cotidiana de quienes hicieron uso de ella. La importancia de este lugar se pone aún más de relieve en el libro 2.000 anos do Balneario de Lugo, que no sólo recoge su historia, sino también su relevancia en la era moderna, como su hotel de actualidad. En definitiva, la interpretación arquitectónica y funcional actualizada del complejo lucense constituye una notable contribución al campo de la arqueología y un testimonio del legado del Imperio Romano. Las termas romanas de la ciudad de Lugo, también conocidas como Balneario de Lugo, ofrecen una fascinante visión del mundo antiguo. A través de las excavaciones e investigaciones en curso, hemos aprendido más sobre la ubicación, los descubrimientos, la importancia histórica y la interpretación arquitectónica y funcional de estas notables estructuras. A medida que seguimos descubriendo más cosas sobre las Romanas de Lugo, profundizamos en nuestra comprensión del pasado y obtenemos valiosas perspectivas del presente. Estas termas son un verdadero tesoro de la historia y un testimonio del perdurable legado del Imperio Romano.
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Se ha encontrado en Francia un impresionante complejo romano de casi 2000 años de antigüedad. Con calefacción por suelo radiante, red hidráulica y pigmentos raros, los expertos debaten si se trataba de una lujosa vivienda o de un balneario público. ¿Qué opinas?
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𝗛𝗢𝗧𝗘𝗟 - 𝗕𝗔𝗟𝗡𝗘𝗔𝗥𝗜𝗢 𝗣𝗢𝗭𝗢 𝗗𝗘 𝗟𝗔 𝗦𝗔𝗟𝗨𝗗 El Hierro 🇮🇨 ✹✹✹✹✹✹✹✹✹✹✹✹✹✹✹✹✹✹✹✹✹✹ El Balneario Pozo de La Salud es un establecimiento de 3 estrellas que se localiza en la costa de Sabinosa, en la isla de El Hierro. El pueblo es conocido por su pozo de aguas minero-medicinales y por su enorme riqueza paisajística, compuesta por una combinación de agua y acantilados, capaces de cautivar a todos sus visitantes. El alojamiento alberga un completo spa con bañera de hidromasaje, sauna y diferentes tratamientos corporales. De aguas minero-medicinales, el pozo de la Salud es todo un referente en la isla de El Hierro. Se llega por la carretera que va a través del valle de El Golfo. Cerca del pueblo de Sabinosa, desde el siglo XIX que sus aguas son consideraras curativas. A raíz de la escasez de agua en la isla se perforó el pozo y poco después se descubrió los beneficios que comportaba beber de ella. Incluso se llegaron a exportar garrafones a Cuba y Puerto Rico. Desde 1949 sus aguas son consideradas Bien de Utilidad Pública por sus propiedades. Poder bañarse en ellas es posible en el Balneario Pozo de la Salud donde poder tratar problemas digestivos, dermatológicos y reumáticos. Además, se puede visitar el antiguo pozo con las piedras originales. ✹✹✹✹✹✹✹✹✹✹✹✹✹✹✹✹✹✹✹✹✹✹ #pozodelasalud #pozodesabinosa #elhierro #isladeelhierro #aguasmineromedicinales #islascanarias #canaries #canaryislands #isolecanarie #canaryisland #canariasviva #canariashoy #asi_es_canarias #elhierroisland #elhierro #lafrontera #sabinosa #latituddevida #wandergram #islandvibes #isladelhierro #oceanoatlantico #ok_canarias #chusayinka #atlanticocean #pozodelasalud #elhierrocanarias #hotelbalneariopozolasalud #estaes_canarias #canarios5estrellas (en Pozo De La Salud Sabinosa Frontera Isla De El Hierro) https://www.instagram.com/p/Cp7Va9_MHdS/?igshid=NGJjMDIxMWI=
#pozodelasalud#pozodesabinosa#elhierro#isladeelhierro#aguasmineromedicinales#islascanarias#canaries#canaryislands#isolecanarie#canaryisland#canariasviva#canariashoy#asi_es_canarias#elhierroisland#lafrontera#sabinosa#latituddevida#wandergram#islandvibes#isladelhierro#oceanoatlantico#ok_canarias#chusayinka#atlanticocean#elhierrocanarias#hotelbalneariopozolasalud#estaes_canarias#canarios5estrellas
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Balneario Augas Santas
DISFRUTA DE EL BALNEARIO AUGAS SANTAS
El IBERIK Augas Santas Balneario & Golf de 4 estrellas se encuentra en Galicia, en el idílico enclave de Ribeira Sacra, un lugar muy tranquilo y de una gran belleza natural.
Su antiguo balneario ofrece tratamientos de belleza, hidroterapia, sesiones de relajación y masajes con aguas minerales curativas, todo en un entorno natural muy relajante.
El hotel ofrece vistas al precioso paisaje gallego y dispone de un campo de golf privado de 18 hoyos, con una tienda, un servicio de alquiler de material y clases de golf.
Las Aguas del Balneario Augas Santas
Las aguas con las que cuenta el balneario son sulfuradas bicarbonatadas sódicas, indicadas en procesos reumatológicos, dermatológicos y respiratorios.
Afecciones reumáticas
Procesos reumáticos crónicos, degenerativos y antiinflamatorios.
Afecciones respiratorias y otorrinolaringológicas
Procesos inflamatorios crónicos (rinitis crónica, faringitis, sinusitis, laringitis, bronquitis crónicas, procesos asmáticos y otros).
Afecciones de la piel
Procesos crónicos como eczema crónico o psoriasis, procesos dermatológicos de origen alérgico.
Piscinas del Balneario Augas Santas
Las piscinas del balneario disponen de agua mineromedicinal del propio manantial de Augas Santas.
Cada piscina está destinada a un tipo de uso y actividad distinta, por eso cada piscina tiene una temperatura diferente. Las temperaturas que las normativas sanitarias y la dirección médica del establecimiento han establecido como óptimas para las diferentes piscinas del balneario son:
Poza fría: 20 – 25ºC
Piscina activa: 32 – 34ºC
Minipiscina de hidromasaje: 34 – 36ºC
Programas Balneario Augas Santas
Basado en los 6 pilares de la medicina del estilo de vida:
Comer de forma saludable
Actividad física equilibrada
Controlar el estrés
Suspender el abuso de substancias tóxicas
Disfrutar de un descanso y sueño adecuados
Relaciones interpersonales sanas
Programa Wellness Iberik Saludnoches de estancia con alojamiento en pensión completa en Iberik Augas Santas Balneario & Golf **** días de sesiones presenciales en Hotel Balneario Augas Santas y tres meses de seguimiento on-line.
Consulta médica.sesiones con equipo de psicología. sesión con equipo de monitores deportivos/ nutricionistas. análisis de Bioimpedanciometría con determinación de peso corporal, % grasa corporal, % masa magra. test de intolerancias alimentarias. sesión de hidrocinesiterapia.
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Se van a cumplir 20 años de cuando fui con mi curso a Pichilemu por la gira de estudios. Una ciudad que me gustó porque era mezclaba muchas cosas, de pueblo chico así como de ciudad, de balneario top y puerto antiguo. Me gustaría volver alguna vez. (foto cortesía de @wikimedia_cl) #pichilemu #balneario #giradeestudios #2003 #20años (en Linares, Chile) https://www.instagram.com/p/CnDlqjhOUM3/?igshid=NGJjMDIxMWI=
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Miró la extensión del mar, ya casi negro. ¿Cuánto hacía que no veían una lámpara iluminar de lleno? Ya no se acordaba de los faroles de los pescadores que viera antaño desde allí mismo, ni de las farolas apiñadas que se encendían por donde estaba el balneario, ni de las luces que guiñaban perfilando en la oscuridad el borde de la península, raleando según se adentraban en el mar, ni siquiera de las farolas de Ginza. Le venía a la memoria cuando fue con su padre a Nara y vio el espectáculo de las diez mil linternas del santuario de Kasuga una tarde de verano al caer la noche. Hubiera querido describirle lo bello que era aquello. Pero, como si él quisiera impedírselo, dijo:
—Me hace falta luz.
[...]
Al punto recordó. Estaba en segundo curso del instituto femenino y, si fue en las vacaciones de verano de 1937, habían pasado de eso ocho años. Tras ir con su padre al norte, donde se encontraba el templo donde estaban enterradas generaciones de la familia, pasaron por Nara, y aquel espectáculo de las diez mil linternas que vieran en el santuario de Kasuga se le aparecía ahora vivamente.
En la noche del día quince, cuando se celebraba la Fiesta de Difuntos con un mes de retraso, todos y cada uno de los faroles de la galería lacada de rojo estaban encendidos en interminable procesión. Había escuchado que en realidad eran dos mil. Los faroles que colgaban bajo el alero, a alturas algo disparejas, casi se tocaban. La distancia entre ellos no era regular. Su tamaño variaba. Y su forma. La mayoría eran hexagonales, con diseños calados, pero diferentes en cada caso. La luz se filtraba por el papel que los forraba, destacando netamente los singulares dibujos.
El cuadro se definía cada vez más. Hinako se incorporó, se volvió a sentar. No era ya consciente de la presencia de Masataka. Si éste se hubiera despertado y dicho algo, habría sido lo mejor. Ella le habría explicado entonces cuán espléndida era la visión que se le aparecía. Pero no se sentía nada. Podía seguir durmiendo o estar callado con los ojos abiertos, tanto daba.
—Vamos a poner unas nosotros también —decía su padre tendiéndole una lucerna en su naveta de metal, que había ido a buscar a la entrada. Tenía otra en la mano y cuando abrió la puertecilla de uno de los faroles, un anciano le dijo: «Ya hay dos ahí», y entonces se acercó a otro donde le decían que no había más que una. Hinako abrió entonces uno de los que tenía cerca, cuyos dibujos le llamaron la atención, y encontró tres lamparillas. Abrió otro donde no había más que una y puso la suya. Al cerrar se fijó en la puertecilla, que tenía grabada en singular estilo una plegaria por la victoria.
—Mira, papá. La familia que encargó éste tiene a alguien que ha ido a la guerra
Su padre miró allí donde le señalaba antes de responder: —Qué lerda eres. Así sería en su tiempo, pero si te fijas...
Tenía grabado el nombre de una era de hacía varios siglos. Al parecer muchos de los faroles eran muy antiguos. Incluso había uno que provenía de un señor feudal de la corte de los Taira.
Un sacristán pasó corriendo con una cesta llena de lamparillas con mechas nuevas, y su padre le preguntó: —¿Cambian el papel del interior? porque se ve muy nuevo...
—Si hay unos oficiales que lo hacen. Reparan los que se han roto y cuidan que todo esté en orden —respondió el hombre.
Así pues hasta los faroles de épocas remotas eran cuidados con esmero para que cada año, en tal noche y en la del Festival de Primavera, lucieran y la gente acudiera a contemplarlos. Serían por lo menos dos millares, colgando de los aleros y los pilares lacados de rojo, parpadeando y proyectando sombras chinescas sobre la multitud que charlaba y zapateaba. Hinako ya no podía decir cuál era aquél donde había puesto su lamparilla. Pero sin duda se establecían correspondencias. Los lazos que se ligaban entre el gentío y las dos mil linternas eran como un rumor de sombra y luz. Cada una era bella en sí. Pero lo extraordinario era el conjunto de todas aquellas luces descabaladas que se apretaban a lo largo de la roja galería, sin que se les viera el fin.
Kōno Taeko
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Los gatos
Por cuestiones de trabajo, tuve que dejar la ciudad y mudarme a vivir a una pequeña casa vacacional, que tengo en un modesto balneario. Durante el invierno, es muy difícil ver a un alma caminando por alguna de las dos calles sin pavimentar, que rodean a esta casa. Por las noches, solo me acompaña el sonido que emiten mis zapatos al presionar las maderas del piso, que pareciera distribuirse hasta los tablones del cielo. Últimamente, he adquirido la costumbre de sentarme en el balcón del segundo piso, también construido de madera. Desde ahí, puedo ver las estrellas, los oscuros bosques de pino que rodean el lugar y, a veces, me invento pequeños juegos para pasar el tiempo, como, por ejemplo, seguir con la vista la estela de humo que sale de la chimenea que tiene la casa de enfrente, la única habitada, hasta donde puedo ver. La secreta meta que tiene la estela de humo, es llegar hasta el cinturón de Orión, lo cual, cuando ocurre, celebro con un poco de tabaco. Desde el balcón, alcanzo a ver el patio de esa casa, el cual, es relativamente grande, pero está muy mal cuidado o, mejor dicho, está completamente abandonado a su suerte. Algunas veces, estando en el balcón, he visto a una señora salir acompañada de algunos gatos, a caminar en círculos. Siendo el centro de atracción, la señora, siempre da tres vueltas y luego vuelve a entrar a la casa y no cierra la puerta hasta que todos los gatos hayan entrado. Un par de aquellas veces, la señora, me ha visto a lo lejos, y con una voz dulce, pero desgarrada, me grita “Hola vecino”, o algo parecido. Curiosamente, cada vez que la he visto, la señora, viste de la misma manera. Siempre con un vestido negro, un pañuelo de un color rosado intenso, que rodea su cuello, y zapatos de taco, negros también, y brillantes, como de charol. Una noche, mientras escuchaba absorto el sonido que emite las llamas consumiendo palos secos en mi pequeña estufa salamandra, tuve el impulso de invitar a mi solitaria vecina a conversar sobre nada en particular, solo hablar, como para romper el hielo. Considerando que vamos a ser vecinos por bastante tiempo, me dije, no es mala idea. Tomé mi chaqueta de chiporro, agregué unos palos a la estufa y salí. La reja de la casa vecina estaba compuesta de solo tres vigas secas de maderas cilíndricas puestas de manera horizontal, por lo que, el patio queda expuesto a quién quiera mirar y, además, no era difícil entrar, curvando el cuerpo en noventa grados, eludiendo la puerta, que estaba amarrada artesanalmente, con unos cordeles desgastados. Para evitar ser calificado de una persona con modales toscos, no quise entrar y pensé en golpear la puerta de la reja, pero, dada la distancia entre esta puerta y la puerta de entrada a la casa, debía de golpear fuertemente, algo que mis manos de masajista, no pueden tolerar. Para que la vecina no se asustara, quise agregar información extra a mi grito: “Hola, soy el vecino de enfrente”. La vecina se asomó por la ventana y, al mismo tiempo, cuatro cabezas de gato se asomaron a mirar. Rápidamente, las cinco cabezas desaparecieron y sonó la chapa de la puerta de la casa. La puerta se abrió, dejando salir la luz interior que, entre la oscuridad, se dejaban ver como rayos de luz y, de pronto, apareció el vestido negro caminando con sus zapatos de taco, rodeados de gatos que, con movimientos circulares, se entrelazaban con ellos, como haciendo una coordinada coreografía de entrada en escena. “Hola vecino, por qué no pasó. Venga, venga”. Pensé en aclararle a lo que venía, pero qué más da. No importa dónde sea, la idea era conversar un poco, así que, incliné mi cuerpo en noventa grados, levanté una pierna, y traspasé la reja. “pase, que hace frío” escuché, mientras caminaba por el patio en dirección a la puerta de la casa. Entré y me dijo.
- Póngase cómodo, voy a buscar algo para beber, ¿café está bien?.
- Si, gracias.
La señora fue a la cocina, haciendo sonar sus zapatos como martillazos contra el piso y dejando trazos de olor a perfume sofisticado. El piso de la casa, estaba regado de huesos secos, algunos de pollo, otros de algún otro animal que, debido a las hendiduras de dientes de gato, no podía identificar. En el sillón habían seis gatos, cuatro negros y dos blancos, que dormían plácidamente. Sobre el televisor, habían dos gatos recostados, disfrutando del calor que emite la pantalla del antiguo electrodoméstico. Sobre la mesa del comedor, habían seis gatos, de los cuales, tres estaban lamiendo el único plato que tal vez tenía rastros de sabor, pero ya no contenía restos de comida. Los otros tres, merodeaban la mesa, ignorando las migajas de pan esparcidas por toda la superficie. Tal vez, los gatos no comen pan, me dije. En eso, sonó la puerta de la cocina, que era de esas tipo vaquero, de las que van y vienen, y, haciendo una segunda aparición, la señora, que caminaba con cierta gracia, traía una pequeña bandeja en la manos, portando dos tazas blancas, algo desteñidas.
- Siéntese en el sillón, ellos se moverán en cuanto usted se acerque. Los gatos son muy intuitivos, incluso le diría que pueden ver el futuro.
- Gracias, estoy bien así.
- No sea tímido. Shuu shuuuu, muévanse para que el joven se siente… perdón, ¿cuál es su nombre?
- Daniel ¿y el suyo?.
- Isabella, gracias por preguntar.
Finalmente, nos sentamos en el sillón, que olía a amoníaco y tenía los apoyabrazos húmedos. Francamente, no sabía que decir, así que, mantuve un silencio sepulcral, hasta que, la señora Isabella, dijo.
- El negrito que ve sobre el arrimo, se llama Daniel, igual que usted. Se llama así por un ex marido que tuve.
- Lindo nombre. - Intenté hacerme el gracioso.-
- Los gatos son una gran compañía para una mujer sola, como yo.
- Ya veo. ¿Cuántos gatos tiene?
- Veintitrés.
Mientras conversábamos en torno a sus gatos, yo me sentía como en medio de un zoológico. Algunos gatos, caminaban por el piso, otros, por las superficies de los viejos muebles. Habían algunos que se colgaban, como monos, de las cortinas, mientras otros, dormían o descansaban, reposando sobre algunas repisas que habían pegadas a las paredes de madera.
- Todos mis gatos son machos y tienen nombres de personas. Es más fácil identificarlos así.
- Entiendo.
- Así, cuando los llamo, imagino que estoy llamando a un hombre y no a un gato. Es una sensación interesante. Eso sí, los gatos son mucho más obedientes.
- ¿De dónde saca los nombres para sus gatos? ¿tiene algún método de elección?.
- Todos tienen nombres de algún ex marido o ex pareja de la juventud.
- Qué simpático método. - dije con voz temblorosa.-
De pronto, sentí que la conversación ya había cumplido con el objetivo de romper el hielo y extrañé mi hogar, como si hubiera vivido en la calle durante meses.
- Ya debo irme - dije, como rompiendo la conversación.-
- Claro, siempre es así. Ya lo acompaño a la puerta.
- Gracias.
En cuanto me paré, Daniel, el gato con mi nombre, se me acercó y cuando empecé a caminar, comenzó a caminar conmigo. Nunca he tenido facilidad para interpretar las acciones de los gatos, lo mío son los perros. Seguí caminando hacia la puerta y, desde mi espalda, la señora Isabella, puso su mano sobre mi hombro para detenerme, me di la vuelta, acercó su cara a la mía y, con voz suave, pero rasposa, me dijo.
- Daniel te eligió. Ven a verlo cuando quieras.
- Gracias - Fue lo único que se me ocurrió decir -
Comencé a caminar por el patio en dirección a la reja, acompañado, exclusivamente, por Daniel, de aspecto magullado y flacucho. En cuanto levanté mi pierna para salir por la reja, Daniel, el gato, comenzó a alejarse en dirección a la puerta de la casa, la cual, permanecía abierta de par en par, emitiendo los mismos rayos de luz hacia las estrellas. Cuando salí finalmente de la propiedad, miré al cielo, en busca del cinturón de Orión y cuando lo encontré, me dije “la soledad no es para todos”.
Pablo Aravena L.
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