magosinsombra

[magosinsombra]

Geometría del Dolor

Me regalaste dolor,

ese dolor que tanto extrañaba.

Provocaste que tocara lo más profundo,

la geometría de un pozo perfecto para imaginar.

Nuevamente, vuelvo a sentirme vivo.

Las tres espadas vuelven a abrir la herida,

no dejan cicatrizar,

son mi condena,

son mi liberación.

Deseo que algún día mires al cielo,

y las nubes rojizas se enciendan,

provocando un incendio catastrófico,

tan catastrófico que me permita observarlo desde cualquier lugar del planeta.

En ese momento entendería,

que sigo fundiéndome en mis propios deseos.

[magosinsombra]

D.

Me mostraste tu mundo, y en él me alojé,

tímidamente, sin miedo a perder,

pero ahora siento que he perdido mucho,

en un mar de resistencia, me encuentro a la deriva.

Muchas veces no entiendo.

Veo puertas abiertas, demasiadas opciones,

pero la ruptura recae en un solo punto,

ese punto puedo resolverlo,

porque no quiero perder la memoria de tu olor,

ni el darte la mano, ni tu risa antes de dormir.

No quiero perder lo que hemos construido,

como una casa a medio hacer,

que puede seguir creciendo,

o convertirse en una ruina eterna.

Solo si pudieras abrirte a una posibilidad,

me siento sin alternativas,

pero sé que debo resistir,

porque en mi interior, aún guardo la esperanza de seguir.

[magosinsombra]

D.

Hoy me tomé el café que me dejaste en el refrigerador.

Hoy consumí lo último que me recuerda a ti dentro de mi hogar.

Tu olor se desvaneció de la ropa que te presté, de un momento a otro, como si fuera un acto mágico.

He tenido amoríos fugaces, pero este me dolió. Sí que duele.

Creo que he vuelto a sentir que estoy vivo.

[magosinsombra]

Anoche soñé contigo, fue hermoso. Era una escena cotidiana en la que salíamos con otras personas, pero de repente quedábamos solos, como en una feria libre. Tu risa resonaba, y yo intentaba acercarme a ti, contándote estupideces que me hacían reír. En un momento, intenté besarte, y lo sentí tan real: un beso tímido que se volvía más intenso.

Aunque siento que apenas te conozco, solo en aspectos superficiales, mi subconsciente parece reflejar lo que realmente siento.

A veces, me parece que eres inalcanzable. Quizás sea simplemente mi propio miedo, o incluso el placer que me provoca el miedo.

A veces solo deseo que me rechaces, que me destroces internamente. Pero, al mismo tiempo, me quedo en la incertidumbre.

Tal vez nunca llegaré a saberlo

Tal vez llegaré a saberlo y será hermoso, ya sea por lo negativo o positivo del resultado.

[magosinsombra]

Un amigo me contó que tenía un pequeño trauma relacionado con llegar a casa. Siempre se imaginaba que podría haber alguien acostado en su cama, como un vagabundo o algún ser desconocido. Este miedo se transmitió a mí. Cada vez que ingreso a mi casa, creo que podría haber alguien sentado o acostado en mi cama, como un ser desconocido que solo visita mi hogar para saber cuándo llego y luego desaparecer, vigilándome desde la oscuridad. Este recuerdo me lleva a mi infancia, cuando tenía un temor sorprendente a la oscuridad y a lo desconocido. Es contradictorio, porque hoy en día me creo historias para provocarme miedos internos, aunque en verdad lo interpreto como una necesidad. Mi hermana me comentó una vez que yo era mi propio enemigo, que solo yo podría hacerme sentir miedo y provocarme auto dolor. Hoy en día, sus palabras cobran más sentido.

[magosinsombra]

LED - SoundCloud

Escucha LED de parallenoise en #SoundCloud

[magosinsombra]

Tres de oros

Trabajar juntos ha fortalecido un vínculo que se va moldeando desde el desconocimiento mutuo, es un proceso gradual, similar a la construcción de una catedral, sólido y meticuloso.

El emperador

La actitud fría y madura del otro se presenta de manera autoritaria y segura, lo que puede despertar un mayor interés al ser misterioso y distante, mostrando sutiles destellos de atención que solo yo puedo percibir.

Reina de copas

Una vez que se rompe esa coraza hermética, podría revelarse una sensibilidad y sinceridad extraordinarias, similar a abrir una caja de secretos. A pesar de eso, sigue siendo misterioso e intrigante, generando incertidumbre sobre los resultados.

Conclusión

Aunque sé que es solo una suposición basada en la intuición, no me importan las posibles consecuencias.

[magosinsombra]

Opté por colocarme un implante dental, no solo por su funcionalidad sino por el atractivo de llevar una prótesis en mi cuerpo. Contemplo la posibilidad de que en algún momento pueda tener un brazo o una pierna metálica, sería incluso atractivo para mi ser.

[magosinsombra]

Hoy volvió una gran parte de mi yo

Hoy sentí que volví a ser el yo de antes.

Creo que la música es mi gran motor para seguir creciendo.

Si la música no existiera , no sería nada ,y nada sería coherente.

El hecho de estar inmerso dentro de un sistema , me hizo desaparecer paulatinamente y olvidar de quien creía ser.

Hoy me hicieron recordar lo sensible e insensible que puedo ser a veces.

Hoy me hicieron recordar que puedo provocar heridas y a la vez provocar sanaciones.

Hoy volví a amar la música como antes.

[magosinsombra]

El desespero de dejar que aparezcas en mis sueños, hace que no desee verte más.

Tal ves sea mi subconsciente el que desea verte o hablarte, pero mi yo terrenal solo quiere soltar y sanar.

Nunca volveremos a ser los de antes.

Mutaremos para adaptarnos a otros seres u otros sistemas.

[magosinsombra]

Análisis del sonido en el espacio construido y proyectual

Siempre ha sido una interrogante el cómo se configura un espacio o más bien del cómo se proyecta desde la disciplina de la Arquitectura y las artes en general. Si bien, todos los ejercicios proyectuales se centran en la observación del lugar, siempre se lleva a cabo un trabajo volumétrico y gráfico, pero en muy pocas ocasiones se percibe un espacio futuro o existente a través de sus sonidos que emiten o del que se requiere que se emita, con esto rescato la cita a Adolf Loos en su texto panfleto de 1912 en el cual protesta por la demolición de un gran teatro que consagró diversos conciertos, mediante su análisis sobre los sonidos que absorben los edificios durante su existencia:

Durante 40 años el material absorbió buena música, eso son cambios moleculares misteriosos que hasta ahora sólo han sido observados en la madera de las cuales están hechos los violines. ¿Quiere decir que para darle buena acústica a un espacio hay que tocar música en él? No, hay que tocar buena música; se puede engañar a la gente, pero no se puede engañar las almas de lo material

Con este argumento, puedo sensibilizar que las materialidades con las cuales están construidos los espacios físicos que habitamos absorben sonidos, exteriores e interiores, nuestra misma sonósfera se ve limitada muchas veces por la misma configuración del espacio, entonces, como primera parte, ¿puedo deducir que el sonido es relevante al momento de diseñar o configurar un proyecto de espacialidad? La interrogante me lleva a pensar que los espacios públicos y privados, poseen “huellas sonoras” es decir una banca en una plazuela concurrida, puede contener mucha información sobre sonidos de interacciones, accidentes vehiculares, catástrofes, ambientes sonoros etc…, como es el primer beso entre dos individuos hasta una protesta política. Es decir, los materiales envejecen en su morfología física, y pueden envejecer en su absorción sonora. Es como pensar en un edificio desde su nacimiento, la construcción misma genera sonidos industrializados, los cuales se enfrentan a estrés y atomizaciones, sonidos de herramientas, golpes, maquinarias pesadas, dan como resulta un nacimiento de un espacio, el cual, al momento de entregarse para su uso proyectado, es representado como el nacimiento, para luego ser utilizado y absorber los sonidos de la ciudad y sus funciones interiores. Los espacios tienen vida útil al igual que los seres humanos, muchas veces podemos utilizar las restauraciones para alargar la vida, pero aun así no podemos opacar su paso por el tiempo, tal y como una cirugía plástica en los humanos, este envejecimiento estamos acostumbrados a evidenciarlos siempre por la visualización física material, ya sea por el tacto o la misma observación, pero también existen formas de identificar un edificio o espacio construido, mediante su sonido. Al entrar a un edificio de más de 100 años podemos escuchar sus desplazamientos estructurales de su envigado de madera o bien contemplar el “silencio” de este, pensando como en un anciano que nos habla de forma muy pausada de sus experiencias pasadas y a su vez se queja de sus dolencias.

En cuanto a la forma de proyectar un espacio, debo destacar que es un punto relevante el escuchar el entorno donde se emplace la obra, al igual como se realiza un análisis grafico del entorno, es factible realizar un análisis sonoro, para construir el espacio existente en base a relatos, fenómenos o la ciudad misma. Un ejemplo claro de esto puede ser cuando buscamos un lugar donde vivir, si bien “todo entra por la vista”, sin embargo, situamos nuestra atención en el sonido del entorno, ya sea en flujo vehicular, el sonidos de los arboles al moverse con el viento, o en nuestros vecinos, entendiendo esta búsqueda como un proyecto, podemos deducir que la caminata sonora, puede ser un factor primordial para elegir el espacio donde vivir, el ejercicio de escuchar y armar un relato sobre este es válido para concretar un proyecto, al igual en el caso de proponer un espacio, los análisis iniciales pueden ayudarnos a concretar un relato sobre las vivencias y detectar algunas necesidades o interpretaciones del lugar más certero, a través de la escucha, el mismo hecho de caminar sin rumbo solo escuchando, como un ciego pero con los ojos abiertos, nos hace enfocarnos sobre el entorno donde se ubique el proyecto.

Si bien he analizado solo la antesala de un proyecto espacial a través de la escucha, es factible a través de esta misma herramienta realizar proyecciones sonoras para la propuesta de un espacio. Por esta faceta podemos deducir que estamos acostumbrados a crear nuestros espacios a través de la “aislación acústica”, aislarnos del entorno para obtener la privacidad deseada, que en es cierta manera es algo totalmente valido, no queremos escuchar a nuestros vecinos, tampoco necesitamos escuchar “ruidos” exteriores en nuestro hogar, pero a su vez, muy pocas veces nos preguntamos si queremos algo opuesto, en donde el sonido pueda transportarse de diferentes formas mediante la configuración del mismo espacio, un ejemplo clave para detectar este fenómeno puede ser el mismo confinamiento por las pandemias, el simple hecho de estar en un espacio donde el sonido es cíclico, puede alterarse el bienestar del habitante, es como pensar en capas sonoras que pueden percibirse de diferentes formas. El ser humano no todo el tiempo necesita “silencio” ni tampoco todo el tiempo necesita “ruido”, la versatilidad del espacio puede en cierta forma responder a las sensaciones sonoras que nuestro cuerpo requiere, entonces, al igual que la caminata sonora , en donde el individuo recopila , reordena y analiza los sonidos, se puede recuperar el análisis y proponer nuevos sonidos, a través de nuevas composiciones y demostrando que los que los elementos construidos y sus materias primas se encuentran en constante cambio, el material envejece al igual que la carne viva, y con ello su sonido cambia al igual que su percepción. Esto me lleva a pensar en la construcción de elementos propios de una arquitectura, ya sea como un muro, tabique, puerta o ventana, las cuales generan sonidos propios, según del como ha pasado el tiempo sobre ellas, por ejemplo, una puerta envejecida tras sus múltiples capas de pintura, posee un sonido característico y único al abrirse, un tabique al golpearse produce vibraciones que pueden hasta replicarse sobre todo el espacio dependiendo del como este construido.

Por lo tanto, puedo deducir, que es factible pensar que el sonido es un factor valido y necesario para construir elementos espaciales y a su vez proponer o intensificar los sonidos de los mismos materiales que configuren un espacio y de esta forma pensar en un solo espacio con atmosferas deseadas, o problematizar diversas situaciones a través de la escucha, a través del rescate de los sonidos y la elaboración de estos.

[magosinsombra]

DEMOLER

Siempre que puedo presenciar una demolición, siento una gran satisfacción, especialmente cuando se trata de demoliciones justificadas, como la eliminación de elementos innecesarios de un espacio o, en este caso, la eliminación de elementos completamente irregulares en un edificio. Es como si se estuviera llevando a cabo una operación para extirpar un tumor de un cuerpo infectado.



En este caso, se muestra la demolición de una ampliación irregular que pertenecía a un salón construido por el Club Militar en el Palacio Ariztía, durante la época de la Dictadura Militar en Chile. Esto me lleva a reflexionar sobre los acontecimientos ocurridos en estos espacios, donde los muros, pisos y techos parecen ser testigos de los numerosos hechos experimentados en el lugar, que solo pueden manifestar sus declaraciones a través del deterioro natural causado por la falta de mantenimiento. Siempre he creído que los materiales guardan historias, se impregnan de vivencias y emociones, es por ello que envejecen, se deterioran y mueren naturalmente, o los matan, como es el ejemplo de una demolición, se pueden interpretar como seres inertes, que al igual que los humanos, cumplimos un ciclo en el cual no podemos volver atrás.

La demolición en sí genera un respiro para reflexionar, pensar y talvez diseñar o construir algo nuevo. Este puede ser, volver al origen o bien pensar en las alternativas del proyectar algo más acorde al contexto, cualquiera sea su intención, la destrucción de un objeto genera la antesala a creación.

Fotografía digital, abril 2019

[magosinsombra]

El fantasma del calefón

El calefón que está en la casa de mis padres, se encuentra en una situación desfavorable. Lo detecte el día en que mi papá lo destapó al presentar unos problemas de funcionamiento. Pude visualizar la estructura interna del calefón, en ese momento, miré fijamente un agujero, al costado de una especie de estanque ,que reflejaba una luz desde su interior, la cual respondía al fuego que genera el artefacto al encenderse, en ese momento traté de grabar un video con mi celular, fue una pésima idea ,ya que, dentro de mi ansiedad por saber como se podría ver un calefón desde el interior , trate de meter mi celular por aquel agujero en el aquel estanque quedando totalmente caliente.

La forma de la estructura del calefón, me recordó a la de un a un torso humano, en donde el estanque se asemeja una caja torácica y mas abajo como se formaban una serie de cañerías, simulando en cierta forma a unos intestinos.

El agujero del calefón, lucia como una herida, como si hubiera sufrido un ataque con un objeto punzante en mis pulmones, es raro, pero sentí como si el artefacto fuera un ser vivo, me dio lastima , como si viera mi propio cuerpo herido y mutilado.

Al dar el agua caliente, el calefón disparaba un sonido fuerte y vibrante. El lavaplatos se encuentra precisamente abajo del calefón, por lo tanto, cada vez que se lava la losa el calefón queda a la altura de mi rostro.

Desde ese día, cada vez que lavaba la losa:

Imaginaba como el calefón explotaba y estallaba el muchos pedazos, destrozando mi cara y azotándola contra el muro que se encontraba atrás del espacio.

Imaginaba mi muerte con ese simple sonido. El simple ejercicio de realizar una tarea habitual, me producía una especie de catarsis interna, que en lo mas profundo me fascinaba.

Imaginaba como quedaría la superficie del muro de atrás mío, con mis restos de sangre y carne esparcidos de manera aleatoria, como si fuese una pintura.

Imaginaba como mi cabeza y brazos podrían desintegrarse , al tratar de cubrirme de la explosión, dejando mi cuerpo con solo el torso, el cual me recordaba la estructura interna del calefón.

Un día llegue a lavar la losa y me encontré con la sorpresa que habían cambiado el calefón, este era un artefacto totalmente nuevo, sin problemas y silencioso.

Aún recuerdo el anterior calefón ya que a veces creo que explotará, me persigue como un alma en pena, como un fantasma dentro mi imaginario, hasta lo extraño , ya que me daba dinamismo al lavar la losa, un acto que detesto.