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frayvictor · 4 years ago
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🌎Una vez me preguntaron por qué razón llamarle "Casa Común" a nuestro Planeta Tierra. Quisiera compartirles mis motivos.🙏🏼 🎄Nuestra Casa Común es el lugar donde habitamos y co-existimos. No podemos hacerlo individualmente. Nadie produce sólo su propio alimento. Siempre somos un tejido de macro y micro-relaciones sociales con personas, comunidades y seres vivos.🎎 🧵Todos nosotros, juntos, formamos parte de una bellísima pintura de la Creación. Somos el fruto de millones y millones de años de formación.🎨 📢Todo ello se hizo posible para que experimentaramos aquella hermosa descripción de la vida: "Sentirnos en casa".👣 🏠Nuestra casa es el espacio donde nos hemos sentido seguros en medio de la pandemia. Nuestra casa ha sido refugio de lluvias y tormentas. Nuestra casa siempre representa seguridad, pero también calidez, cercanía, alimento, familia.👩‍❤️‍👨 🗾Nuestra casa no es un patio trasero. No es el lugar donde se deja la "basura". No es el espacio descuidado, sino el más importante. Es el lugar donde se encuentran los que aman y aman lo que hacen.💒 🏞️Cuando nos sabemos en "común-unión", podemos ver que nuestros espacios privados son pequeños en comparación con nuestros espacios compartidos.🏝️ 🏘️Esos espacios compartidos son los que siguen más descuidados. No sólo contaminados, sino también explotados, talados y destruidos. 🌋 ⛰️Llamar Casa Común a nuestro planeta es llamar la atención sobre la consciencia colectiva. Es decirnos: podemos salvarnos juntos si respetamos la vida juntos. 📿 🕯️Hijas e hijos de una misma Madre, somos hermanas y hermanos todos de esta nuestra Casa Común que podemos custodiar. ☺️🌎 #Franciscanos #pazybien #santaalegría #fraternidad #vocación #pastoraljuvenil #vidareligiosa #vivelaudatosi #casacomún (en Pastoral Juvenil Franciscana de La Pintada) https://www.instagram.com/p/CIa2UTEjVFY/?igshid=toz9ybue0qai
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lucy-u · 8 years ago
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Gracias por mi Amazonía 🌎 #TiempodelaCreación #SeasonOfCreation #ViveLaudatoSi #LiveLaudatoSi
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frayvictor · 4 years ago
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¡Qué maravillosa certeza es que la vida de cada persona no se pierde en un desesperante caos, en un mundo regido por la pura casualidad o por ciclos que se repiten sin sentido! El Creador puede decir a cada uno de nosotros: «Antes que te formaras en el seno de tu madre, yo te conocía» (Jr 1,5). Laudato Si', n. 65. #Franciscanos #pazybien #pastoraljuvenil #santaalegría #vocación #vivelaudatosi #laudatosi #lsrevolution #ofm (en Pastoral Juvenil Franciscana de La Pintada) https://www.instagram.com/p/CG0_GILje2L/?igshid=5b2b6tggpc1j
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frayvictor · 5 years ago
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Están invitados al coloquio que realizaremos con nuestra querida amiga Doralice: @julianna19pereira Vamos a platicar un poco del cuidado de la casa común y de su vivencia al respecto de lo que sucede en el Amazonas y tomar más conciencia sobre nuestra crisis socioambiental para responder a este gran desafío. Nos vemos en mañana! Paz y bien. 🌎❤ #livelaudatosi #vivelaudatosi #GLS #JPIC #Casacomún #franciscanos #pueblosorignarios #prayforamazonas https://www.instagram.com/p/B1zMbq3F9Zx/?igshid=166jc9ikwtaao
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frayvictor · 6 years ago
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Conversión alimenticia en los frailes franciscanos
La conversión es un tema clave y constante para los hermanos menores. Así lo expresaba el Seráfico Padre Francisco, quien se sintió a lo largo de su vida llamado a la conversión permanente. En sus palabras, él le llamaba la gracia de “comenzar a hacer penitencia” (Test 1). Sus biógrafos lo resaltan desde el inicio de su nuevo estilo de vida: “Desde entonces comenzó a predicar a todos la penitencia con gran fervor de espíritu y gozo de su alma” (1 Cel 23).  En cierta ocasión, le pidió a los primeros hermanos que cuando les preguntaran por su identidad, estos respondieran “Somos penitentes, oriundos de la ciudad de Asís” (AP 19). Cuando salía de misión, los enviaba también diciendo: «Vayan con el Señor, hermanos, y, según Él se digne a inspirarlos, prediquen a todos la penitencia” (1 Cel 33).
Si la penitencia nos lleva a la conversión, es posible hablar de ella en varios tipos. Conversión cristiana, de cuando se toma conocimiento de Cristo Jesús; conversión kenótica, de cuando se toma conocimiento que la minoridad es el modo de presentar el mensaje cristiano; también se puede considerar la conversión pastoral, de cuando se habla de nuevos modos proceder para llevar el Evangelio al mundo. El Papa Francisco, recientemente, ha hablado también de conversión ecológica, que en esta época nos resulta más urgente que nunca. Aquí queremos hablar sobre la conversión alimenticia, que está íntimamente ligada a la anterior, y que hoy se nos vuelve necesaria, sobre todo a los frailes franciscanos por su “estilo de vida”.
La conversión alimenticia tiene que ver con la conversión ecológica. Evidentemente, como lo establece la Laudato si’: “Todo está interrelacionado” (LS 142). Es decir, que no hablamos de dos momentos divorciados. No existen “mi vida pública” y “mi vida privada” como dos realidades distintas. Es una realidad y ambas tienen consecuencias. En este conocimiento nos llevan la ventaja los movimientos feministas al revelar que las mujeres también se jugaban las relaciones políticas y económicas de poder desde casa, fue entonces cuando declararon su mejor bandera: “lo privado también es político”.
En pleno 2019, los frailes franciscanos no podemos desligar estas realidades. Sobre todo por el peso de la espiritualidad que manejamos. Nuestra oración de la mañana, está ligada con nuestra pastoral de la tarde. Nuestro trato con los trabajadores, con los agentes de pastoral y con los hermanos está finamente ligado con el trato que nos damos a nosotros mismos. En esto tiene que ver nuestro tiempo de reposo, el cuidado de nuestra salud, el tiempo dedicado a hacer deporte o a algún pasatiempo como leer o cantar, fuera del activismo depredador que gobierna en nuestras sociedades aceleradas al ritmo de robots.
Me viene a la mente el decir de Rosy Zavaleta: “Bien comer para bien vivir” (Agenda Latinoamericana 2019, p.). Son tres tiempos de comida los que dedicamos al día. No quiero meterme en el ambiguo lujo de las refacciones entre tiempos. Pasamos gran parte, por no decir todos, de nuestros momentos fraternos alrededor de la comida. Cosa que no está mal. Realmente es evangélico recordar que los momentos más cruciales de la vida y resurrección de Jesús se desenvolvieron en torno al pan compartido en la mesa de la fraternidad. Esto sin comentar todo lo que para Francisco significaba el poder compartir el alimento con sus hermanos, aunque sea en la suma penitencia y la más austera pobreza.
La idea de fondo es considerar que tu alimento puede ser también tu medicamento o tu enfermedad. Para nadie es novedad que nuestros hermanos sufren el achaque de la enfermedad, unas más graves que la de otros; sin embargo, sería remitirnos a la ignorancia el no querer examinar y evaluar el modo de alimentación que prevalece en nuestras fraternidades. Las cantidades de azúcares, las comidas fritas, la constante búsqueda de carnes para cada tiempo, el uso de bebidas gaseosas u artificiales, la poca estimación que le damos al agua, entre otras problemáticas.
A este problema de salud de nuestros compañeros, le podemos agregar otras dos agravantes: el problema económico y el problema ecológico. El problema económico se traduce a los ecónomos de nuestras fraternidades: el mayor gasto del mercado nunca es por vegetales o frutas, siempre es por la cantidad y el precio de las carnes. Ciertamente, en algunas fraternidades más que en otras. Esto es un lujo que a los más pobres se les es negado por la lógica de la “libre empresa” donde cada quien come en la medida en que trabaja. Esta falacia va contra la lógica de la gratuidad de nuestro carisma, donde el Padre de las misericordias da su sustento hasta a las aves del cielo (Lc 12,6), ¿acaso no vale la persona más que unos pajaritos?
Es entonces donde también podemos pensar el problema ecológico: la dieta carnívora, a la cual estamos altamente acostumbrados en cada tiempo de comida, nos presenta dos graves consecuencias: actualmente es mala para nuestra salud y también es insostenible para nuestro planeta. Ninguno de nosotros posee las garantías sobre la carne que consumimos. Los procesos alimenticios modernos han sido creados para capitalizar las ganancias a las grandes industrias de carnes, aunque las secuelas pasen una factura más alta en el cuidado de un hermano enfermo.
Además, hablamos aquí que es insostenible: el 14, 5% de los gases de efecto invernadero – los que causan el calentamiento planetario –  emitidos por la acción humana provienen del sector de la ganadería[1]. En otras palabras, la digestión de las vacas, su crianza, su ventosidad, su excremento, el uso de tierras y las industrias que a ello se dedican producen más gases que todo el sector mundial de transporte[2].
Nuestros actos tienen consecuencias y es tiempo que empecemos a responsabilizarnos de ellas. La abstención de carne pudiese ser imposible; sin embargo, Dios nos dio una riqueza de vegetales para no perder los 50 gramos de proteínas necesarias que debemos tener al día. Podemos sustituir la carne por nueces, legumbres, semillas, granos, verduras y la salvífica carne de soya.
Si todo el mundo se volviera vegetariano o vegano pudiera revertirse el impacto del calentamiento global en un 63% o 70% respectivamente[3], sin hablar del beneficio al cuidado de los animales y el boicot al modelo consumista. Los frailes sabemos que San Francisco no fue vegetariano, pero fue un ejemplo de penitencia. En Navidad invitaba a las paredes a comer carne, pero hacía hasta cinco o seis cuaresmas al año con un ayuno devoto; esto sin contar los días viernes que, como él pidió en su Regla, deben ser ayunados por ser el día de la crucifixión de Nuestro Señor Jesucristo.
En la práctica concreta, se trata aquí de abrazar una alimentación más sostenible y más saludable. La leche y carne de soya se nos vuelven una propuesta factible, económica, saludable y franciscana. De la misma manera podemos plantearnos más caminos de conversión ecológica, como poder rechazar de manera rotunda en nuestras fraternidades el consumo de gaseosas como la Coca – Cola y compañía. Esto se puede sustituir por el uso de tés naturales y jugos naturales y mucha agua. La mayoría de nuestro organismo es sobre todo agua. Ahora solo bastará vencer el pecado de la gula y educarnos a alimentarnos fuertemente en el desayuno, para luego almorzar de manera modesta y, finalmente, cenar tan solo un poco.
Esta conversión alimenticia tan solo es un tejido que nos enlaza con la conversión ecológica y, por ende, a la conversión cristiana. Entretejer esta lucha junto a la de nuestras homilías proféticas, al trabajo educativo de nuestros colegios, al papel promocional de nuestras obras sociales y el acompañamiento espiritual es el reto actual que tenemos como hermanos y menores. Todos en camino de conversión. Exigente, ciertamente, pero netamente evangélico. Al final, esto una propuesta para promover esta espiritualidad de manera integral.
Decía el Papa Francisco: “La espiritualidad cristiana propone un crecimiento con sobriedad y una capacidad de gozar con poco” (LS 222). Por esa razón, el Seráfico Padre Francisco no necesitaba más que conocer a Cristo, Pobre y Crucificado, eso le bastaba (2 Cel 205). Los frailes franciscanos, y todos aquellos que se sienten movidos a cuidar de la Casa Común, estamos invitados a dar, con el ejemplo de nuestras vidas, patente testimonio profético contra los «falsos valores» de nuestro tiempo[4]. Que Dios nos ayude, más que a trabajar, a aprender a vivir en armonía con todo lo creado, con quien Dios nos ha permitido compartir la belleza de la existencia.
Fr. Víctor Treminio, OFM
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[1] Datos de la FAO: Informe de la Agencia de las Naciones Unidas para la alimentación y la agricultura.
[2] Cfr. Agenda Latinoamericana 2019, p. 26
[3] Informe publicado por el PNAS (Proceedings of National Academy of Sciences). Publicado en: informe publicado por el PNAS (Proceedings of National Academy of Sciences),
[4] Art. 67, Constituciones Generales de la Orden de los Hermanos Menores.
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frayvictor · 5 years ago
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"Qué bello es el ver a Dios en cada cosa del universo". Los franciscanos procuramos ver a Dios en todo lo creado. La creación no es meramente un 《recurso natural》, sino es una caricia de Dios en medio de nosotros. Con Ella habitamos, existimos y amamos. Nuestras vidas están ligadas a espacios físicos concretos y nuestras memorias más dichosas fueron posibles gracias a la creación que nos acobijó alimentándonos, dándonos de beber y posibilitando nuestras condiciones fisiológicas para estar aquí. Solo quien se sabe amado por la hermana madre Tierra sabrá llorar con sus lágrimas cada árbol talado, cada aire contaminado, cada tierra arrasada, cada agua desperdiciada, cada especie perdida y cada pobre abandonado. No pierdo la fe ni la esperanza. Mis luchas, junto a las de todas las personas de buena voluntad que que quieren cuidar nuestra casa común, siguen vigentes. . . . . . #conversiónecológica #livelaudatosi #vivelaudatosi #casacomún #prayforamazonia https://www.instagram.com/p/B1eYQKIF_OR/?igshid=ltqdncxy7nwa
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frayvictor · 6 years ago
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Junto a mi hermano Antonio cantamos una canción que se llama "Despertarnos". Es de un gran cuidador de nuestra casa común: @joacoteran Él nos anima a unirnos en esta lucha por la justicia ecológica a través de la música Es un grito contra el cambio climático. Un despertarnos de estar "adormecidos" creyendo que hay cosas más urgentes que nuestro planeta cuando estamos al borde de una situación grave, especialmente para los más pobres. Esto es algo que nos concierne a todos. Unámonos juntos para tomar medidas concretas y cuidar de nuestra Casa Común. Por nosotros. Por todos. ¡Paz y bien! Mañana todos a manifestarnos contra el cambio climático en el #climatestrike #fridaysforfuture #vivelaudatosi #justiciaclimática #livelaudatosi #ecología integral (en Rafael Landívar University) https://www.instagram.com/p/BvAKU9XFP9-/?utm_source=ig_tumblr_share&igshid=1061prp0m7i0a
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frayvictor · 6 years ago
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Generación Laudato si': nuevos mundos posibles
La filosofía del lenguaje posee un acercamiento para nuestra comprensión a los mundos posibles. Estos los podemos conocer a través de las posibilidades y las imposibilidades de la vida. Por ejemplo, es posible que todas las personas que conozcan la gramática castellana comprendan este escrito. Sin embargo, es imposible que puedan entender este escrito si mi redacción hubiese sido en una lengua marciana.
Claro, me dirán que es imposible que exista una lengua marciana. O si existe, imposible que yo la sepa. O si la conociera, imposible que ustedes pudieran leerla. Pues bien, esta es la relación de los mundos imposibles y los posibles. Aquello que puede ser y aquello no.
Podemos decir que es imposible que existamos en un mundo con mayor temperatura global de la que ya vamos alcanzando, las condiciones biológicas nos lo imposibilitan. Es imposible que exista más tiempo un mundo con el modelo neoliberal y violento que explota los recursos naturales y humanos. Es imposible que exista un mundo donde demandamos más carne de  la que podemos consumir; así como es imposible vivir en un mundo donde se desperdicia dos tercios de la comida mundial en la basura cuando la mayoría de la población está muriendo de hambre. También es imposible que el dinero nos salve al final de nuestros días cuando ya no haya ni animales, ni agua, ni tierra, ni aire qué comprar.
Los mundos imposibles son totalmente irreales e inexistentes. No poseen las características necesarias que la ley ontológica natural exige al ser para su esencia. Efectivamente, me pueden recordar que un mundo posible tampoco es un mundo real. Simplemente es eso, lo que en nuestra mente pueda significar como "una posibilidad" entre muchas otras. Es decir, tan solo es un “poder ser” de un modo u otro. Pero ahora cabe preguntarnos, ¿qué podemos ser?
Podemos ser un mundo con bioplástico obtenido de los aguacates para conservar nuestras comidas. Podemos ser un mundo que funcione con energía totalmente renovable para nuestros hogares y automóviles. Podemos ser un mundo donde el agua es un derecho accesible a quien quiera y, al mismo tiempo, no solo como un lujo llamado "el nuevo petróleo", como lo entienden los economistas, sino una hermana que implica valioso cuidado.
Podemos ser un mundo que respeta y garantiza de facto los derechos humanos de la misma manera que respeta los derechos de los animales. Un mundo donde se defienden los huevos de tortuga en peligro de extinción tanto como se pueda defender la vida de un no nacido en el vientre de su madre. Podemos ser un mundo que no explota la tierra con monocultivos, ni tampoco a sus hermanos obreros con inhumanas horas de trabajo pagadas con salarios miserables.
Podemos ser un mundo donde las farmacéuticas no se vuelvan empresas millonarias del monopolio de la salud, sino que sean hermanas amigas de la medicina natural como epistemología válida; a su vez, este mundo posible sea un mundo respetuoso de la sabiduría de los pueblos originarios y milenarios que lo habitaron desde sus inicios y que, junto a sus tierras y culturas, están siendo actualmente devastados por la libre empresa.
Luego de preguntarnos qué podemos ser, y encontrar algunas posibilidades, podemos decidir qué podemos hacer. En este campo el horizonte es amplio y como dijo Jesús: "La mies es mucha y los obreros muy pocos". Aquí es donde el marco teórico se convierte consecuentemente en un marco práctico; por lo tanto, político.
En nuestra vida cotidiana es necesario rechazar de manera lapidaria el uso de bolsas plásticas, desechables y demás con la mayor urgencia posible. El uso de la luz, el agua y el vehículo tiene que hacerse en el margen de lo austeramente necesario. Esforzarnos constantemente en separar la basura orgánica de lo inorgánico; y esta, a su vez, se clasifique en el material plástico, de lata y de cartón. Luchar contra el consumismo y la carnicería exagerada, así como la defensa de los derechos de los pobres, será parte crucial de nuestra vida ecológica integral.  
Se nos vuelve obligatorio crear consciencia de estas problemáticas y compartir nuestras propuestas y soluciones por todos los medios posibles. El papel profético no puede pasar por alto. Es necesario salir a denunciar en actos públicos a las mineras, multinacionales, empresas privatizadoras de los recursos naturales; así como la violencia contra la mujer, la trata de personas y la cultura del descarte contra nuestros niños y abuelos. En este sentido, no podemos escatimar esfuerzos si se trata del cuidado de nuestra casa común y de quienes viven en ella.
Los voluntarios Laudato si' no pueden ser solo un grupo elitista cerrado. Tampoco pueden quedarse como un movimiento exclusivo de la Iglesia y fruto de la encíclica del Papa Francisco. Estamos hablando más allá. Es toda una generación entera la que demanda un cambio cultural. Una generación entera que clama, pide y trabaja por un nuevo mundo posible. Han despertado y no podremos pararlos. No están solos y ellos lo saben.
La generación Laudato si' es uno los dones que el Espíritu de Dios ha dado a la humanidad en esta época de la historia. Quien no esté consciente de la misión colosal a la que han sido llamados, no han entendido el problema planetario al que se enfrentan. Otro mundo es posible y la generación Laudato si’ lo sabe. Vienen de un lugar donde este mundo es real y ha sido posible al entretejer sus vidas con la de la creación de maneras creativas y a favor de los más pobres.
Los frailes solo alcanzamos a contemplar la faz del Seráfico Padre Francisco complacido con ellos; mientras tanto, nos dice: “Hijos míos, ¿qué hacen ahí parados? Luchen junto a ellos y canten con alegría que un mundo nuevo es posible”.
Fr. Víctor Treminio, OFM
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lucy-u · 8 years ago
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Un sólo amor, Amistades santas. #ViveLaudatoSi #LiveLaudatoSi (en Reserva Ecológica Colonso Chalupas)
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lucy-u · 8 years ago
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Vida 💖 #ViveLaudatoSi #LiveLaudatoSi (en Tena City)
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