Tumgik
#veré los demás que puedo st
izzakry · 4 months
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𝗉𝖺𝗋𝖼𝗈 𝗌𝖾𝗆𝗉𝗂𝗈𝗇𝖾.
Tumblr media
malestar alimenta introspección, un potente motor que consideraría flemático sin octava de subconsciente taladrando ¡bimbo! ¿siquiera escapó? el pobre canino con clima de milán temblará de frío y miedo, cuestionándose cuál era el propósito real de usar mascota. probable que despertase del lado incorrecto de la cama como para no saltar eufórico de volver a ciudad querida, entablando conversaciones con simpáticos chiquillos para apaciguar humor y mostrarle foto del fugitivo. dominar idioma simplifica consulta, retrocediendo con sombrilla en alto al vislumbrar estudiante de academia. ' ¿se te apetece chocolate caliente? conozco un buen lugar cerca. además bimbo debe estar escondido en algún hoyo hasta que cese la lluvia. '
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yanohaynieve · 5 years
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25-09-2019
12:10
Llevo más de cinco horas despierto. Tiempo más que suficiente para darme cuenta de que esta idea de comenzar un diario seguramente no pase de hoy. Ahora mismo creo que, como todo lo que ha engendrado mi cabeza durante los últimos cuatro meses, no es más que una excusa para subirme al carro de la gente normal. La gente que no hace daño a sus parejas afectivas por ocultar todo continuamente; la que no sufre paranoia por haber perdido de una vez por todas la confianza de todxs sus amigxs. Otra cancamusa (gracias Jaime) más a la que auguro cero posibilidad de éxito.
Este cuaderno es muy estrecho y me duele la mano; no creo que sea secuela de cuando me la rompí. Nunca tuve buena caligrafía y siempre desconfié de la gente que respeta bordes imaginarios en el papel.
Esto no es ni será un ejercicio estilístico, que te quede claro (esto me lo digo a mí, todo me lo digo a mí, aunque interpele) que escribes como la mierda. Métetelo en la cabeza de una puta vez.
Ni se te ocurra perderte en pseudoflorituras que solo emocionarían a un bachiller que aún no leyó a ---------  (ni te las des de listo incluyendo nombres de autorxs que tú tampoco entiendes). Suficiente introducción.
Quieres que esto sea un diario. ¿Por qué?
Porque tienes absolutamente cero control sobre tu vida y sobre el impacto de tus acciones en lxs demás. Ignorando todo esto has conseguido en un tiempo récord alejar de ti a todas las personas que, dios sabe por qué, creían de ti alguien interesante al que valía la pena escuchar, querer o incluso amar. Me duele la mano, debería seguir luego, y tengo que cambiar la cara del disco (el st de Loss Leader, f.f.r.). Hasta ahora he:
· Desayunado NO · Automedicado NO · Hecho ejercicio NO · Hablado con alguien NO
Date tiempo. (1ª frase autoanímica, yuhú). Vuelve al final del día y completa esto, por el amor de dios.
13.30
Siento la necesidad de volver a escribir, es pronto para creerme que esto sirve para algo, pero oye, que ni tan mal. También he pensado que es buena idea apuntar citas o frases de canciones si me ahondan en un momento concreto. Al fin y al cabo puedo escribir lo que me apetezca. Ahí va:
“I can haunt you too, if you want me too” 
¿Tiene alguna relación directa con mi situación actual? Que lo decida una profesional. Yo he temblado, y eso me basta.
13.47
A colación de lo anterior.
“my body is shale & sandstone - dig deep to well its worth. I made a map of my scars and warts - the pieces i cut away. I am a stone clastic and coarse grained. I was formed for this world. I am not afraid of my body - I hope you feel the same way about yours- I won’t let fear take anything away.”
Debería tratar de ahorrarle trabajo al “profesional” y tratar de analizar por qué me guardé esta frase de Heritage Unit en 2017 y por qué me sigue calando hoy en día. Es cierto que, en el sentido más literal, he perdido la vergüenza a ser contemplado, a enseñar mi cuerpo, tanto en la intimidad como en público. Curiosamente me da la sensación de que tengo la fobia contraria: siento recelo a no ser observado físicamente, a ser mencionado sin que mi yo físico esté delante. Aún desnudo, sucio, y en un postura vergonzante, prefiero que mis interpeladorxs observen mi gesto cuando se dispongan a decir cualquier alabanza o crítica sobre mi persona. ¿Es esto una incipiente paranoia? Todo indica que sí.
Hace años, unos 7 u 8 supongo, temblaba de miedo antes de encontrarme con una chica si suponía que podía derivarse en un encuentro sexual. La confianza que me ha dado estar con varias parejas ha disuelto esa vergüenza casi infantil, dando paso a otras inseguridades de otra índole, como la ya expuesta.
Tengo que salir para dar clase en eso de una hora. Dudo en si llevarme esta libreta; también dudo sobre si debería transcribir todo esto al ordenador. Ya veré.
~·~
¿Cómo puede pensar nadie que es mejor estar cerca de mí a no estarlo?
¿Cómo he podido romantizar lo que es tan claramente una enfermedad hasta hacerla atractiva incluso para desconocidxs?
Y joder, sobre todo, ¿por qué me he sentido cómodo haciéndolo, arrastrando a gente a comportamientos y dinámicas tóxicas, mientras me justifico desde mi trono de víctima?
Hay momentos, como este, en los que solo quiero arrancarme la cabeza y ofrecérosla para que juguéis con ella.
15.40 y algo.
~·~
NOTA INCONEXA: Niño escondido.
“Por eso no se cansa de la lucha con el demonio. La vivienda es en esta el arsenal de las máscaras. Pero, una vez al año, hay regalos en lugares misteriosos, en las cuencas vacías de sus ojos, en su boca petrificada.”
~·~
[Cuatro y algo, estando en clase]
Tengo miedo a no poder dormir sin drogarme. Y si no duermo, pienso. Y si pienso, tengo miedo a solo querer morirme.
No recuerdo cuándo fue la última vez que lloré en clase.
~·~
22.18
He estado todo el día rumiando la idea de dejar de fumar (la idea de dejar de beber ya la daba por suficientemente analizada y, evidentemente, por una tarea inconclusa).  He tenido un “examen” inicial en una de tantas asignaturas dedicadas a vanagloriar asesinxs y torturadorxs en masa como si aquí no pasara nada. Mi primera intención era dejarlo en blanco, pero conforme pasaron los minutos me dieron ganas de jugar al pre-teen revolucionario que se cree mejor que la profesora por haber leído algo de anarquismo 101, A los dos párrafos me di por vencido: esto solo me hace gracia a mí. En el descanso puedo elegir entre caminar solo (más solo), o juntarme con mis compañerxs. Opto por lo segundo y pido un cigarro, cómo no. Cabilo sobre si de camino a casa debería comprarme una cerveza. Pienso en mi cuarto vacío, un lorazepam, un litro y una película que quitaré a la media hora y siento una ilusión en el pecho que no se compara a nada de lo que haya sentido en toda la semana. Esto me hace sentir profundamente triste; es el regocijo de un adicto, encima de un adicto de baratijo. Sin altas pretensiones ni aires de liberador de la moral.
Llegué a mi casa, a oscuras, dispuesto a desechar la frugal bacanal de ansiolíticos y Sköl que tanto me ilusionaba. 
A los dos minutos me vi solo, en la cama, con más de 6 horas por delante para pensar. Bajé a comprar una litro.
Si estoy solo, ¿realmente necesito curarme? ¿Hago daño a alguien cogiendo el sueño por la vía rápida? Sé que sí. Sé que ni yo me creo esto como excusa, pero dejadme en paz, joder.
He hablado con mi madre sobre la política actual y el fin del mundo. Me da una mezcla entre ternura y pena ver cómo con ojos incrédulos descubre que soy más cínico cada día. Me entristece que ella piense que sé de lo que hablo o que puede tomarme en serio. Me ofrece helado y B12. Sé que es un cliché a saco, pero no hay mejor forma de no pensar en la autolisis que recordar a una madre (cuando se trata de una madre como la mía, claro). Creo que ya he divagado suficiente hoy.
Pensé en ti, en ti, y en ti bastante más, pero para peor. ¿Seré capaz de seguir mañana con esta gilipollez?
He decidido transcribir este diario porque al fin y al cabo ni cristo mira este tumblr, y para forzarme a seguir un ejercicio de sinceridad. No quiero recibir feedback alguno, dejadme en paz (en la medida de lo posible). Tampoco pienso comprobar las faltas de ortografía ni incoherencias, de eso se trata, hostia.
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you-moveme-kurt · 6 years
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Glee «The Royal Baby»
Agosto de 2018
-Kurt… —susurró Blaine sentándose a su lado en la cama— Kurt… despierta… —repitió acariciándole el cabello de la frente, su esposo dio un suspiro y se dio media vuelta para seguir durmiendo— oye… Kurt… —insistió meneandolo un poco por el hombro que se asomaba entre las sábanas, se acercó más y le dio un par de besos. -Es lunes Blaine… no trabajo los lunes… -Lo sé… —contestó sonriendo y dando más besos. -¿Entonces?... ¿por qué te atreves a despertarme el unico dia de la semana que puedo dormir hasta que me dé la gana?... ¿que hora es? -Temprano… pero paso algo que creo y necesitas ver… -¿Henry esta bien? -Lo esta, dormido y tranquilo… —contesto mirando el «baby monitor» como si pudiera ver a través del aparato, como su pequeño hijo dormía tranquilamente. -¿Y tú?... ¿estas enfermo?, ¿te sientes bien? —agregó abriendo un solo ojo para mirarlo por sobre el hombro. -Yo también estoy bien… -Entonces… —dijo acomodándose en la almohada— si las dos personas que más me importan en este mundo están bien, todo lo demás puede esperar hasta mediodía… —añadió tapándose la cabeza con uno de los cobertores.
-Vamos… —respondió su esposo descubriendolo de inmediato— me lo agradecerás cuando sepas que es.... -Blaine… —reclamo de vuelta recostándose de espaldas. -Es la verdad… ven… levántate... -¿Tengo que abandonar la cama también? -Si quieres ver lo que te estoy diciendo, por supuesto que sí…. vamos… no seas perezoso —insistió jalándolo para que terminara por levantarse. -¿Como se puede ser perezoso si aun ni siquiera ha amanecido?... —dijo mirando por la ventana la oscuridad de la madrugada en New York— ¿que hora es? -Un poco más de las cinco...—respondió Blaine buscando por él las zapatillas de levantarse y la bata de seda. -¿¡Las cinco de la mañana!?, ¿estas bromeando conmigo Blaine Anderson-Hummel? —añadió sentándose en la orilla, dio un bostezo bien exagerado y luego se restregó toda la cara. -No estoy bromeando… esa es la hora… vamos… —dijo agarrándole ambas manos para ayudarlo salir de la pereza— tengo del café que te gusta… -¿Y pasteles?... —preguntó levantándose. -Muy temprano para eso, pero veré que puedo hacer… vamos... -Espero y sea bueno lo que quieres que vea Blaine Anderson-Hummel, si no, prepárate para soportar mi mal humor durante todo el dia... —dijo calzándose las zapatillas y poniéndose la bata. -Lo es… y me lo agradecerás, te lo aseguro… -Pues déjame dudar eso último... -Es algo genial, te lo prometo, no tendrás motivos para ponerte de mal humor...—dijo llevándoselo de las dos manos hasta la sala. -¿Ese es el televisor? -¿Lo es? —agregó su esposo guiándolo como si Kurt tuviera problemas de visión. -¿Por qué oigo acento inglés? -Pues velo por ti mismo… —contestó Blaine apartándose, Kurt abrió y cerró los ojos en dirección del televisor, tal y como si quisiera enfocar un punto a la distancia. -¿Acaso...? —preguntó señalando la pantalla. -El «bebé real», esta a punto de nacer… -¿En serio?... ¡por dios!... ¡esa es una de las noticias que encanta ver!... —exclamó caminando hacia la sala, se sentó mediante un salto y de medio lado en el sofá más grande y tomó el control remoto del televisor para darle más volumen al noticiario de la BBC y que, en ese instante y en pantalla dividida, mostraba en una la imagen en vivo de las afueras del St Mary's Hospital y en la otra, la llegada de los duques de Cambridge más temprano aquel mismo día, Blaine se sentó a su lado y se llevó el «baby monitor» de Henry al oído por si aquel incremento en el volumen, había acabado por despertarlo— esto es genial… —añadió sonriendo. -Te lo dije… asumo entonces que, ¿no estarás de mal humor? —preguntó acomodándose a su lado. -¡Por supuesto que no!… estas son las noticias que merecen ser seguidas en vivo, por cualquier contingencia o salida de libreto de los protagonistas… -No creo que en la monarquía londinense exista espacio para «salidas de libreto»… toma… —dijo entregando una taza con café. -Gracias… —respondió Kurt recibiéndola la tomo con las dos manos y dio un sorbo de inmediato— y siempre hay espacios para salida de libreto, en especial si esta Harry presente. -¡Ah por supuesto!... el hermano rebelde… ¿cuando es su propia boda?, ¿en Mayo?... —agrego Blaine antes de tomar café. -Estas muy informado para ser alguien que no comulga con las realezas del mundo… —advirtió Kurt mirándolo con sospecha y de medio lado. -No lo hago… es solo que es algo que te interesa a ti, por lo tanto… —agregó dándole un par de toques en una de las piernas, Kurt hizo un puchero sintiendo que moría de amor. -Eso fue muy dulce, cada vez estoy menos enfadado contigo por haberme despertado temprano… —agregó acercándose más a él, apoyó medio cuerpo en el de su esposo y siguió mirando el noticiario— no se si te he contado esto, pero mi Mamá me dijo una vez, que ella vio en vivo la boda del Príncipe Charles y Diana de Gales… -¿En serio? -Mucho… —respondió sonriendo. -Eso sí que debió ser de madrugada… -Y muy de madrugada —agregó bebiendo un poco más de café— me lo contó cuando empecé con mi interés por la monarquía del Reino Unido… -¿Y eso fue?... -No lo se… cuando tenía cinco… —agregó soltando una risa— creo que estábamos en el centro comercial y vi en una tienda de variedades unos platos con la foto de la Reina Elizabeth y el membrete real… pregunte quien era y allí me lo contó todo… -Suena como una gran historia… -Lo fue… ¿y tu?... ¿como supiste de esto?, ni yo ni Rachel sabíamos que esto podía pasar en esta fecha... -Tampoco lo sabía, es solo que estaba haciendo un par de cosas aquí en la sala, y para no escuchar el ruido de la calle, encendí el televisor, luego me tope con el «breaking news» de la BBC y dije: «esto tiene que verlo mi esposo» -Muy bien pensado… ¿y que hacías?... ¿una inspiración repentina? -No, nada de eso… solo revisaba las cosas que me enviaron de «Insect Record» -¿Te enviaron cosas?... ¿por que? -Porque, por lo general, cuando despiden a alguien, se aseguran de que se lleve todo lo que le pertenece para que no siga molestando... -¿Y cuando te las enviaron?... —quiso saber Kurt con un ojo en su esposo y el otro en la pantalla del televisor, que en ese momento emitía una nota sobre las casas de apuesta y las tentativas a acertar el género del futuro «bebé real». -Ayer en la tarde, no las viste porque llegamos tarde de tu función, pero me enviaron un par de cajas que, por supuesto, guarde de forma ordenada en el closet de la entrada. -¿Y no las viste? -En eso estaba… -¿Y que son?... —pregunto sonriendo al escuchar algunos de los nombres que los ciudadanos ingleses querían que llevara el quinto heredero al trono. -Algunos discos, camisetas, «merchandising» en general… —contesto Blaine con desgano, dio un sorbo extra largo a su taza y se quedo fijo mirando el televisor. -¿Por qué suenas mas triste de lo que un recién estrenado Padre y un flamante contratado por una multinacional sonaría? —quiso saber Kurt olvidando lo que sucedía a esa hora en la entrada del ala privada del St Mary's Hospital, para concentrarse en su esposo -No es tristeza es… no se… —contestó mirando la imagen que recordaba los otros dos nacimientos reales. -Blaine… -Escucha… sé que todo esto de SONY pinta para ser algo grande… -¡Por supuesto que sera algo grande!, tu contrato tiene garantías que nunca pensé que existían y el cheque que te prometieron, tiene una cifra con más dígitos de los que creí y podían ponerse en un documento bancario. -Lo se... -¿Entonces?... —pregunto apagado el televisor. -¡Oye!… —exclamó señalando la pantalla— ¿que tal si surge esa contingencia inesperada de la que hablaste? -Si no esta Harry no habrá contingencia, además si surge algo, lo volverán a mencionar en el noticiero o donde sea… tú eres más importante… ¿entonces?... —repitió moviéndose en el sofá para quedar frente a él, Blaine sonrió y le acarició una pierna en recompensa por ponerlo a él primero en su lista de prioridades. -No lo sé Kurt, solo pensaba en... ¿que tal si fracaso de nuevo?... -¿Que?... ¿de que estas hablando? -De la posibilidad, y muy cierta por lo demás, porque si lo piensas bien, eso es algo totalmente factible, nada ha cambiado de que compuse mi último álbum, ¿que tal si sigo siendo alguien incapaz de encantar a las masas o de componer un «single» que valga lo que me están pagando?, ¿que tal si termino vendiendo un disco por año?... otra vez... -Nunca has vendido un disco por año… -Bueno… dos… —corrigió Blaine blanqueando los ojos. -Fueron más de uno y más de dos, y bien que lo sabes, y no actúes de esa forma conmigo, sabes que no encontrarás en mí alguien que te compadezca. -Lo se… y lo siento, pero no puedo evitarlo… —dijo echando su cabeza hacia atrás en el respaldo del sofá. -Por supuesto que puedes, si no empiezas tu a creer en ti mismo, nadie más lo hará por ti, eres extremadamente talentoso y eso no me cansare de decírtelo, además, bien sabes que las grandes compañías hasta son capaces inventar «singles» donde no los hay, para eso tienen más dinero que escrúpulos. -Gracias Kurt, eso es un alivio… -¡Oye!... —exclamó dándole un golpe en la cabeza, Blaine musito un «auch» silencioso y se toco el lugar donde recibiera el manotazo, Kurt rió por lo bajo y acabó subiéndose encima de él, como si quisiera establecer un punto importante y que solo era posible establecer sobre el regazo de su esposo— bien sabes que no me refería a ti…—sentencio apuntándolo— dime que te dijeron cuando fuiste a esa reunión con ellos hace un par de días… —agrego cruzándose de brazos. -Kurt… -Respóndeme… bien sabes que puedo lograr que hables, estoy en una posición dónde puedo hacerte cosas que te harán hablar… -Creo que no me gusta este Kurt de madrugada… —dijo Blaine mirándolo con los ojos empequeñecidos— es mas, siento que le temo un poco... -Blaine Anderson-Hummel… —agrego Kurt en tono de advertencia mientras alistaba una de sus manos para dar un pellizco donde fuera menester. -Que era genial y que donde había estado todo este tiempo… —respondió como entre dientes. -¿Ves?... —insistió tomándole la cara— esta es tu oportunidad, y se que en un par de meses no podrás ni salir a la tienda de la esquina sin que te reconozcan y que en un año o dos, estarás recibiendo los premios que mereces. -Gracias Kurt… —dijo Blaine tomándole las manos. -No me lo agradezcas, es lo mismo que has hecho tú conmigo desde el día uno… o debo recordar tus mensajes de «coraje» -Son situaciones diferentes… -No, es creer tanto en otro, que lo imposible se vuelve posible… —Blaine sonrió y se incorporó un poco para darle un beso, Kurt se movió en su dirección hasta que sus labios se encontraron y gozaron uno del otro por un tiempo más que largo— vaya… —dijo suspirando— ahora si que estaré de buen humor… —agregó saboreándose. -Y yo… —contesto su esposo juntando su frente con la de él. -¿Estas bien?... -Mucho… -¿No más sentirse menos de lo que realmente eres? -No más… —repitió Blaine mirándolo con una sonrisa en la cara. -¡Perfecto!... —exclamó volviendo a su lado del sofá, tomó el control del televisor y volvió a encenderlo— no quiero perder el vestido de Kate cuando salga del hospital. -Traeré unas galletas… —dijo Blaine levantándose. -Me prometiste pasteles Blaine Anderson-Hummel—dijo Kurt apuntándolo con el control remoto. -Tienes razón… —agregó dándole un beso en la cabeza por detrás del respaldo del sofá— veré que puedo hacer… —terminó por decir dando otros dos en el cuello, Kurt rió y encogió un hombro por las cosquillas, Blaine también sonrió sintiéndose exitoso desde ya.
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