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lasdietashoy · 1 year ago

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Explorando los Beneficios de los Limones

Los limones, con su vibrante color amarillo y su aroma refrescante, son mucho más que un simple ingrediente culinario. Desde hace siglos, estas pequeñas frutas cítricas han sido apreciadas por su sabor único y sus beneficios para la salud. En «Explorando los Beneficios de los Limones,» vamos a sumergirnos en el fascinante mundo de los limones y descubrir cómo su contenido nutricional y propiedades especiales pueden impactar positivamente diversos aspectos de nuestras vidas.

Capítulo 1: Introducción a los Limones

Los limones son frutas cítricas originarias de Asia, conocidos científicamente como Citrus limon. Su forma esférica y su característico color amarillo los convierten en una adición atractiva a cualquier plato o bebida. Además de su uso culinario, los limones se han utilizado a lo largo de la historia por sus propiedades medicinales y beneficios para la salud. Estas frutas están repletas de vitamina C, un poderoso antioxidante que desempeña un papel crucial en la protección de nuestras células contra el daño causado por los radicales libres.

El limón también contiene fitoquímicos, como los limonoides, que se han asociado con propiedades anticancerígenas y de fortalecimiento del sistema inmunológico. Además, su aroma refrescante y su sabor ácido hacen que los limones sean un ingrediente popular en bebidas, postres, aderezos y platos principales.

En este post, exploraremos en detalle los diversos componentes nutricionales de los limones y cómo estos pueden contribuir a la salud y el bienestar. Desde su impacto en la digestión hasta su capacidad para mejorar la apariencia de la piel y su potencial para impulsar la pérdida de peso, «Explorando los Beneficios de los Limones» te guiará a través de un viaje completo de descubrimiento sobre esta maravillosa fruta cítrica.

Capítulo 2: Historia y Cultivo de los Limones

La historia de los limones es un fascinante viaje a través del tiempo y las culturas, desde su humilde origen en las tierras lejanas de Asia hasta convertirse en un ingrediente esencial en cocinas de todo el mundo. Estas pequeñas frutas cítricas, conocidas científicamente como Citrus limon, tienen una historia que se entrelaza con la exploración, el comercio y la innovación.

Los Orígenes en Asia Antigua:

Los limones tienen raíces profundas en la antigua China e India, donde se cultivaron por primera vez hace más de 2,500 años. En China, los limones eran apreciados tanto por su sabor refrescante como por sus propiedades medicinales. Se creía que el consumo de limones ayudaba a combatir el escorbuto, una enfermedad causada por la deficiencia de vitamina C. Además, los limones eran un símbolo de prosperidad y se ofrecían como regalos en ocasiones especiales.

Viajes y Comercio:

Con el tiempo, los limones comenzaron a viajar más allá de las fronteras de Asia. A través de las rutas comerciales y las exploraciones, estas frutas cítricas llegaron al Medio Oriente, donde fueron adoptadas en la cocina y la medicina. Los comerciantes árabes llevaron los limones a las regiones mediterráneas y africanas, y su popularidad se extendió rápidamente.

Los Limones en Europa:

En Europa, los limones se convirtieron en un símbolo de estatus y riqueza durante la Edad Media y el Renacimiento. Sin embargo, debido a las condiciones climáticas, su cultivo no era posible en muchas partes de Europa. En su lugar, los limones se convirtieron en un artículo de lujo importado de regiones más cálidas. Los limones también jugaron un papel importante en la lucha contra el escorbuto durante los largos viajes marítimos de exploración y comercio.

Llegada a América:

Los limones llegaron a América a través de los colonizadores europeos. Fue Cristóbal Colón quien llevó consigo las semillas de limón en su segundo viaje a las Américas en 1493. A lo largo de los siglos, los limones se adaptaron a diferentes climas y regiones de América, desde el sur de Estados Unidos hasta América del Sur, donde se convirtieron en ingredientes esenciales en platos tradicionales y bebidas refrescantes.

Cultivo Moderno:

Hoy en día, los limones se cultivan en diversas partes del mundo, desde Estados Unidos hasta España, India, México y más allá. Los métodos de cultivo han evolucionado significativamente con la introducción de técnicas modernas de agricultura. Invernaderos controlados, métodos de riego eficientes y la selección de variedades específicas han permitido a los agricultores cosechar limones de alta calidad durante todo el año.

La historia y el cultivo de los limones son un testimonio de la forma en que las frutas pueden trascender las fronteras y las culturas, enriqueciendo nuestra gastronomía y nuestra salud. En el próximo capítulo, exploraremos la composición nutricional de los limones y cómo sus componentes esenciales pueden beneficiar nuestro bienestar en diversas formas.

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Capítulo 3: Composición Nutricional de los Limones

Los limones no solo son conocidos por su sabor refrescante y su versatilidad en la cocina, sino también por su impresionante composición nutricional. Estas pequeñas frutas cítricas están repletas de vitaminas, minerales y compuestos bioactivos que pueden tener un impacto positivo en nuestra salud. En este capítulo, exploraremos en detalle la rica gama de nutrientes que hacen de los limones una adición valiosa a nuestra dieta.

Vitamina C: El Poder Antioxidante

Una de las características más destacadas de los limones es su alto contenido de vitamina C, también conocida como ácido ascórbico. La vitamina C es un antioxidante esencial que ayuda a proteger nuestras células del daño causado por los radicales libres, que son moléculas inestables asociadas con el envejecimiento y diversas enfermedades. Consumir limones regularmente puede contribuir a fortalecer nuestro sistema inmunológico y mantener nuestra piel sana y radiante.

Fitonutrientes y Limonoides

Además de la vitamina C, los limones contienen fitonutrientes como los limonoides, que son compuestos con propiedades antioxidantes y potencialmente anticancerígenas. Estos compuestos se han asociado con la prevención del crecimiento de células cancerosas y la reducción del riesgo de ciertos tipos de cáncer. Los limonoides también pueden desempeñar un papel en la protección de la salud cardiovascular y en la regulación de la inflamación.

Fibra Dietética

La fibra dietética es otro componente importante de los limones. Aunque se consume en cantidades relativamente pequeñas, la fibra contribuye al funcionamiento saludable del sistema digestivo. Ayuda a prevenir problemas como el estreñimiento y puede promover la saciedad, lo que puede ser beneficioso para el control del peso. Además, la fibra puede ayudar a regular los niveles de azúcar en sangre y mantener estable la energía a lo largo del día.

Potasio y Minerales Esenciales

Los limones también son una fuente de potasio, un mineral esencial para el funcionamiento adecuado del sistema cardiovascular y la regulación de la presión arterial. Además del potasio, los limones contienen otros minerales importantes como el calcio y el magnesio, que desempeñan un papel en la salud ósea, muscular y nerviosa.

Hidratación y Refresco

No podemos pasar por alto la hidratación y el refresco que los limones brindan. El agua es el componente principal de los limones, lo que los convierte en una opción refrescante para mantenernos hidratados, especialmente en climas cálidos o después de actividades físicas.

En este capítulo, hemos explorado la impresionante composición nutricional de los limones y cómo los diversos nutrientes que contienen pueden contribuir a nuestra salud y bienestar. Desde la vitamina C hasta los fitonutrientes y minerales esenciales, los limones son un ejemplo de cómo una fruta puede ser un paquete poderoso de nutrientes beneficiosos.

Capítulo 4: Beneficios para la Salud Digestiva

Los limones han sido valorados a lo largo de la historia por su capacidad para promover la salud digestiva. Su sabor ácido y sus componentes naturales hacen que sean una adición beneficiosa para mantener el sistema digestivo en óptimas condiciones. En este capítulo, exploraremos cómo los limones pueden influir en la digestión y contribuir al bienestar general de nuestro sistema gastrointestinal.

Estimulando la Producción de Enzimas

El sabor ácido de los limones puede ayudar a estimular la producción de enzimas digestivas en el estómago. Estas enzimas son esenciales para descomponer los alimentos en nutrientes más pequeños y absorbibles. Consumir limones antes o durante las comidas puede facilitar el proceso de digestión al proporcionar al sistema digestivo las herramientas necesarias para descomponer los alimentos de manera eficiente.

Aliviando la Indigestión

El agua de limón caliente ha sido utilizada tradicionalmente como un remedio natural para aliviar la indigestión y la acidez estomacal. El calor y la acidez de esta bebida pueden ayudar a relajar los músculos del tracto gastrointestinal y aliviar las molestias. Además, los limones contienen compuestos como los flavonoides, que pueden tener efectos antiinflamatorios y calmantes en el revestimiento del estómago.

Promoviendo la Regularidad

La fibra presente en los limones puede ser beneficiosa para mantener la regularidad en los movimientos intestinales. La fibra actúa como un «limpiador» natural, ayudando a prevenir el estreñimiento al agregar volumen a las heces y facilitar su paso a través del intestino. Consumir limones junto con una dieta equilibrada rica en fibra puede ser útil para mantener un sistema digestivo saludable y funcional.

Apoyando la Microbiota Intestinal

La salud intestinal depende en gran medida de una microbiota equilibrada y diversa. Los limones contienen compuestos prebióticos, que son sustancias que alimentan a las bacterias beneficiosas en el intestino. Al apoyar el crecimiento de estas bacterias saludables, los limones pueden contribuir a un equilibrio óptimo en la microbiota intestinal, lo que a su vez puede tener efectos positivos en la digestión y la inmunidad.

Cómo Incorporar Limones en tu Dieta

Agregar limones a tu dieta diaria puede ser sencillo y delicioso. Puedes exprimir el jugo de limón fresco sobre ensaladas, pescado, pollo o verduras al vapor. También puedes disfrutar de agua de limón caliente por la mañana como una forma refrescante de comenzar el día y estimular la digestión.

En resumen, los limones no solo agregan sabor a tus comidas, sino que también pueden mejorar tu experiencia digestiva. Desde estimular la producción de enzimas hasta aliviar la indigestión, los beneficios para la salud digestiva de los limones son abundantes.

Capítulo 5: Efectos Positivos en el Sistema Inmunológico

La Combinación de Jugo de Limón y Bicarbonato de sodio Erradican las Células cáncerosas

Los limones son ampliamente conocidos por su alto contenido de vitamina C, que desempeña un papel crucial en el fortalecimiento del sistema inmunológico. Además de la vitamina C, los limones también contienen otros compuestos beneficiosos que pueden contribuir a mejorar la respuesta inmunológica del cuerpo. En este capítulo, exploraremos cómo los limones pueden tener efectos positivos en el sistema inmunológico y en nuestra capacidad para combatir enfermedades y mantenernos saludables.

Vitamina C: Defensora del Sistema Inmunológico

La vitamina C es uno de los nutrientes más importantes para la salud inmunológica. Actúa como antioxidante, protegiendo a las células del daño causado por los radicales libres y fortaleciendo la función de las células inmunológicas. Además, la vitamina C estimula la producción de células blancas sanguíneas, como los glóbulos blancos, que son esenciales para la defensa del cuerpo contra infecciones y enfermedades.

Propiedades Antivirales y Antiinflamatorias

Además de la vitamina C, los limones contienen compuestos con propiedades antivirales y antiinflamatorias. Los flavonoides presentes en los limones han demostrado tener efectos positivos en la respuesta inmunológica al reducir la inflamación y ayudar al cuerpo a combatir infecciones. Estos compuestos también pueden ayudar a disminuir la gravedad de los síntomas de resfriados y gripes.

Apoyo a la Barrera Mucosa

El sistema inmunológico no solo se encuentra en el torrente sanguíneo, sino también en las membranas mucosas que recubren las vías respiratorias y digestivas. Los limones pueden ayudar a mantener estas barreras mucosas saludables al fortalecer las células que las componen y estimular la producción de mucosidad protectora. Esto puede ser especialmente beneficioso para prevenir la entrada de patógenos en el cuerpo.

Reducción del Estrés Oxidativo

El estrés oxidativo, que ocurre cuando hay un desequilibrio entre los radicales libres y los antioxidantes en el cuerpo, puede debilitar el sistema inmunológico. Los antioxidantes presentes en los limones, incluida la vitamina C, pueden ayudar a reducir el estrés oxidativo y proteger las células inmunológicas de posibles daños. Esto puede contribuir a una respuesta inmunológica más efectiva y a una mejor salud en general.

Incorporando Limones en tu Dieta

Para aprovechar los efectos positivos de los limones en el sistema inmunológico, es recomendable incorporarlos regularmente en tu dieta. Puedes disfrutar de jugo de limón fresco en bebidas, aderezos para ensaladas, marinadas y más. También puedes añadir trozos de limón a tu agua para obtener un impulso de vitamina C durante todo el día.

En resumen, los limones son una valiosa herramienta para fortalecer tu sistema inmunológico y mejorar tu capacidad para enfrentar enfermedades. Desde su riqueza en vitamina C hasta sus propiedades antivirales y antiinflamatorias, los limones son un aliado natural en la defensa de tu salud.

Capítulo 6: Limones para la Salud de la Piel

La piel es el órgano más grande de nuestro cuerpo y desempeña un papel crucial en la protección contra elementos externos y en la regulación de la temperatura. Los limones, con su contenido de nutrientes y compuestos beneficiosos, pueden ser una adición valiosa a tu rutina de cuidado de la piel. En este capítulo, exploraremos cómo los limones pueden promover la salud y la apariencia de tu piel.

Propiedades Antioxidantes y Antiinflamatorias

Los limones son ricos en antioxidantes, incluida la vitamina C, que pueden ayudar a proteger la piel del daño causado por los radicales libres. Estos radicales libres pueden contribuir al envejecimiento prematuro de la piel y a la aparición de arrugas y manchas. Los antioxidantes en los limones pueden combatir este daño y mantener la piel con un aspecto más joven y saludable.

Aclarar y Unificar el Tono de la Piel

El jugo de limón se ha utilizado durante mucho tiempo como un remedio natural para aclarar el tono de la piel y reducir la apariencia de manchas oscuras. Los limones contienen ácido cítrico, que puede exfoliar suavemente la capa superior de la piel y mejorar la textura. Sin embargo, es importante usar el jugo de limón con precaución, ya que puede ser irritante para algunas personas y aumentar la sensibilidad al sol.

Tratar el Acné y las Imperfecciones

El ácido cítrico en los limones también puede tener propiedades antibacterianas y astringentes que son beneficiosas para tratar el acné y las imperfecciones cutáneas. Puede ayudar a eliminar el exceso de grasa, desbloquear los poros y reducir la inflamación. Sin embargo, al igual que con el aclarado de la piel, es importante utilizar el jugo de limón con cuidado para evitar irritaciones.

Hidratación y Vitalidad

Además de sus beneficios específicos, los limones también pueden contribuir a mantener la piel hidratada y con un aspecto radiante. El agua presente en los limones, combinada con los nutrientes que contienen, puede ayudar a mantener la piel suave y elástica. Además, el aroma refrescante de los limones puede tener un efecto estimulante en los sentidos y mejorar el estado de ánimo.

Cuidado de la Piel con Limones

Para incorporar los beneficios de los limones en tu rutina de cuidado de la piel, puedes probar mascarillas faciales caseras con ingredientes naturales que incluyan jugo de limón, miel y yogur. Sin embargo, es importante realizar una prueba en una pequeña área de la piel antes de aplicar cualquier producto nuevo para asegurarte de que no haya reacciones adversas.

En resumen, los limones pueden ser aliados valiosos para mejorar la salud y apariencia de tu piel. Desde sus propiedades antioxidantes hasta sus efectos aclaradores y antibacterianos, los limones ofrecen una serie de beneficios que pueden ser incorporados de manera segura y efectiva en tu rutina de cuidado de la piel.

Capítulo 7: Limones para la Pérdida de Peso

La pérdida de peso es un objetivo común para muchas personas que buscan mejorar su salud y bienestar. Los limones pueden ser un aliado valioso en este proceso, ya que ofrecen una combinación única de nutrientes que pueden apoyar la pérdida de peso de diversas formas. En este capítulo, exploraremos cómo los limones pueden desempeñar un papel en la gestión del peso y cómo incorporarlos de manera efectiva en tu plan de pérdida de peso.

Impulsar el Metabolismo

El contenido de vitamina C en los limones puede tener un efecto positivo en el metabolismo. La vitamina C es esencial para la producción de carnitina, una sustancia que ayuda al cuerpo a convertir las grasas en energía utilizable. Un metabolismo más eficiente puede ayudar a quemar calorías de manera más efectiva y contribuir a la pérdida de peso.

Hidratación y Saciedad

Beber agua es esencial para cualquier plan de pérdida de peso, ya que puede ayudar a controlar el apetito y mantener el cuerpo hidratado. Agregar limón al agua puede hacerla más atractiva y sabrosa, lo que puede motivarte a beber más agua a lo largo del día. Además, la fibra y el contenido de agua de los limones pueden ayudar a generar una sensación de saciedad, lo que puede reducir el consumo excesivo de calorías.

Controlar los Antojos

El sabor ácido de los limones puede ayudar a controlar los antojos de alimentos dulces y salados. Cuando experimentas un antojo, tomar un vaso de agua con limón puede distraer tus papilas gustativas y satisfacer tus ansias de una manera más saludable. Esto puede ser especialmente útil en momentos en que estás tratando de resistir alimentos poco saludables.

Sustituto de Ingredientes Calóricos

Los limones pueden ser utilizados como un sustituto de ingredientes calóricos en recetas y aderezos. Por ejemplo, puedes utilizar jugo de limón fresco en lugar de aderezos comerciales ricos en calorías para ensaladas. También puedes agregar limón a platos de pescado o pollo en lugar de salsas grasosas. Esta simple sustitución puede ayudar a reducir la ingesta calórica total de tus comidas.

Cómo Incorporar Limones en tu Plan de Pérdida de Peso

Para aprovechar los beneficios de los limones en la pérdida de peso, puedes comenzar cada día con un vaso de agua tibia con jugo de limón. También puedes agregar limón fresco a tus comidas, batidos y ensaladas para darles sabor sin agregar calorías significativas. Recuerda que los limones son una herramienta útil, pero la pérdida de peso exitosa también requiere una dieta equilibrada y actividad física regular.

En resumen, los limones pueden ser un aliado valioso en tu viaje de pérdida de peso. Desde su capacidad para impulsar el metabolismo hasta su efecto saciante y su capacidad para controlar los antojos, los limones ofrecen una serie de beneficios que pueden contribuir a tus objetivos de pérdida de peso de manera efectiva y saludable.

Capítulo 8: Impacto de los Limones en la Salud Cardiovascular

La salud cardiovascular es fundamental para nuestro bienestar general. Los limones, con su contenido de nutrientes y compuestos beneficiosos, pueden tener un impacto positivo en la salud del corazón y los vasos sanguíneos. En este capítulo, exploraremos cómo los limones pueden contribuir a la salud cardiovascular y cómo pueden ser incorporados en una dieta que promueva un corazón saludable.

Reducción de la Presión Arterial

El potasio es un mineral esencial presente en los limones que puede tener un efecto positivo en la regulación de la presión arterial. Consumir una dieta rica en potasio puede ayudar a contrarrestar los efectos del sodio en el cuerpo, lo que puede resultar en una disminución de la presión arterial. Mantener una presión arterial saludable es crucial para prevenir enfermedades cardiovasculares.

Mejora de la Función Endotelial

La capa interna de los vasos sanguíneos, llamada endotelio, desempeña un papel clave en la salud cardiovascular al regular el flujo sanguíneo y la vasodilatación. Los antioxidantes presentes en los limones, como la vitamina C, pueden ayudar a mejorar la función endotelial al reducir la inflamación y prevenir la acumulación de placa en las arterias.

Reducción de la Inflamación

La inflamación crónica en el cuerpo puede contribuir al desarrollo de enfermedades cardiovasculares. Los limones contienen compuestos con propiedades antiinflamatorias, que pueden ayudar a reducir la inflamación en el sistema cardiovascular. Esto puede ser beneficioso para prevenir el daño a las arterias y promover una circulación sanguínea saludable.

Mantenimiento de los Niveles de Colesterol

El consumo de limones puede ayudar a mantener los niveles de colesterol en equilibrio. Los limones contienen fibras solubles, como la pectina, que pueden ayudar a reducir los niveles de colesterol LDL («colesterol malo») en la sangre. Mantener niveles saludables de colesterol es esencial para prevenir la acumulación de placa en las arterias y reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares.

Incorporando Limones en tu Dieta Cardiovascular

Para aprovechar los beneficios de los limones en la salud cardiovascular, puedes incorporarlos en tu dieta de diversas formas. Puedes exprimir limones frescos sobre ensaladas, pescado, pollo y otros platos principales. También puedes disfrutar de agua de limón como una bebida refrescante y saludable que contribuye a la hidratación y al bienestar cardiovascular.

En resumen, los limones pueden tener un impacto positivo en la salud cardiovascular al ayudar a regular la presión arterial, mejorar la función endotelial y reducir la inflamación y los niveles de colesterol. A través de su contenido de nutrientes y compuestos beneficiosos, los limones pueden ser un componente valioso de una dieta que promueva un corazón saludable.

Capítulo 9: Protección Celular con las Propiedades Antioxidantes de los Limones

Las propiedades antioxidantes de los limones pueden tener un impacto significativo en la protección de nuestras células contra el estrés oxidativo y el daño causado por los radicales libres. Estos compuestos beneficiosos pueden contribuir a mantener la salud celular y prevenir enfermedades crónicas. En este capítulo, exploraremos cómo los limones pueden ser agentes antioxidantes efectivos y cómo su inclusión en la dieta puede beneficiar la protección celular.

Combatiendo el Estrés Oxidativo

El estrés oxidativo es un desequilibrio entre los radicales libres y los antioxidantes en el cuerpo, lo que puede resultar en daño celular y envejecimiento prematuro. Los limones, especialmente su contenido de vitamina C, son poderosos antioxidantes que pueden neutralizar los radicales libres y reducir el estrés oxidativo. Esto puede tener un impacto positivo en la prevención de enfermedades crónicas como el cáncer y las enfermedades cardiovasculares.

Apoyo a la Salud de las Células

Las células de nuestro cuerpo están constantemente expuestas a factores que pueden dañar su ADN y estructura. Los antioxidantes en los limones pueden ayudar a proteger las células de este daño y promover la salud celular. Esto puede ser particularmente importante para prevenir mutaciones genéticas y el desarrollo de enfermedades relacionadas con la edad.

Reducción del Riesgo de Enfermedades Crónicas

El estrés oxidativo y el daño celular están asociados con una serie de enfermedades crónicas, incluidas enfermedades cardíacas, diabetes tipo 2 y ciertos tipos de cáncer. Al consumir limones regularmente, puedes ayudar a reducir el riesgo de estas enfermedades al proporcionar a tu cuerpo los antioxidantes necesarios para combatir el estrés oxidativo y proteger tus células.

Aumento de la Longevidad

La protección celular y la reducción del estrés oxidativo pueden contribuir a una mayor longevidad y envejecimiento saludable. Al mantener las células en un estado saludable y prevenir el daño acumulativo, puedes promover una vida más larga y activa. Los limones, con su capacidad antioxidante, pueden ser un componente clave en tu búsqueda de una vida plena y duradera.

Incorporando Limones en tu Dieta Antioxidante

Para aprovechar los beneficios antioxidantes de los limones, puedes incluirlos en tu dieta de diversas formas. Además de consumir limones frescos y su jugo, también puedes incorporarlos en batidos, infusiones y platos cocinados. Combinar limones con una variedad de frutas y verduras ricas en antioxidantes puede potenciar aún más los efectos protectores para la salud.

En resumen, los limones son ricos en antioxidantes que pueden proteger nuestras células del estrés oxidativo y del daño causado por los radicales libres. A través de su capacidad para combatir el envejecimiento prematuro y prevenir enfermedades crónicas, los limones pueden ser un aliado valioso en la promoción de una salud celular óptima.

Capítulo 10: Usos Tradicionales y Modernos de los Limones

Los limones han sido apreciados a lo largo de la historia por sus propiedades medicinales y su versatilidad en la cocina. Tanto en usos tradicionales como en aplicaciones modernas, los limones han demostrado ser una fruta valiosa para mejorar la salud y el bienestar. En este capítulo, exploraremos los usos tradicionales y modernos de los limones, desde la medicina ancestral hasta su incorporación en la vida contemporánea.

Usos Tradicionales en la Medicina

En muchas culturas antiguas, los limones se utilizaban con fines medicinales. Se creía que el jugo de limón podía aliviar problemas digestivos, combatir el escorbuto y aliviar la acidez estomacal. En la medicina ayurvédica, se consideraba que los limones tenían propiedades equilibrantes para los doshas (tipos de energía) y se usaban para tratar diversas dolencias.

Alivio de la Gripe y el Resfriado

En la medicina tradicional y moderna, los limones han sido reconocidos por su capacidad para aliviar los síntomas de la gripe y el resfriado. El alto contenido de vitamina C en los limones puede fortalecer el sistema inmunológico y reducir la duración y gravedad de estos trastornos. Las infusiones de limón caliente con miel son un remedio común para aliviar la congestión y el malestar.

Desintoxicación y Limpieza

Los limones también han sido utilizados en programas de desintoxicación y limpieza interna. La combinación de agua caliente con jugo de limón fresco se ha promovido como una forma de estimular el sistema digestivo y eliminar toxinas del cuerpo. Esta mezcla también puede ayudar a hidratar el cuerpo y a mantener el equilibrio ácido-base.

Belleza y Cuidado de la Piel

Además de sus usos internos, los limones también han sido aprovechados en el cuidado de la piel y la belleza. Los limones pueden ser utilizados para aclarar manchas oscuras en la piel, exfoliar suavemente y mejorar la textura. Sin embargo, es importante usar limones con precaución en la piel debido a su naturaleza ácida y la posibilidad de sensibilidad.

Cocina Moderna y Estilos de Vida Saludables

En la cocina moderna y en la búsqueda de estilos de vida saludables, los limones siguen siendo una herramienta valiosa. Se utilizan para realzar el sabor de una variedad de platos, desde ensaladas hasta platos principales y postres. Los limones también se incorporan en batidos, tés y aguas saborizadas como una alternativa saludable a las bebidas azucaradas.

Usos en la Limpieza del Hogar

Los limones no solo son útiles en la cocina y la salud personal, sino que también pueden ser utilizados en la limpieza del hogar. Su acidez natural puede ayudar a eliminar manchas, olores y bacterias en superficies y utensilios. Además, los limones pueden ser utilizados para darle brillo a utensilios de cocina y dejar un aroma fresco en el hogar.

En resumen, los limones tienen una larga historia de usos tradicionales en la medicina y la gastronomía, así como aplicaciones modernas en la salud, la belleza y la limpieza. Desde el alivio de la gripe hasta la mejora de la piel y la promoción de estilos de vida saludables, los limones continúan desempeñando un papel vital en nuestras vidas. Su versatilidad y sus beneficios nutricionales hacen de los limones una fruta imprescindible en la búsqueda de bienestar y equilibrio.

Capítulo 11: Limones como Agente Desintoxicante

Los limones son reconocidos por su capacidad para actuar como agentes desintoxicantes naturales en el cuerpo. Su contenido de nutrientes y compuestos beneficiosos puede contribuir a la eliminación de toxinas y a la mejora de la salud general. En este capítulo, exploraremos cómo los limones pueden ser utilizados como agentes desintoxicantes y cómo pueden incorporarse en programas de limpieza y bienestar.

Estimulación del Sistema Digestivo

Los limones son conocidos por su capacidad para estimular el sistema digestivo y promover la función hepática saludable. El ácido cítrico presente en los limones puede ayudar a aumentar la producción de enzimas digestivas, lo que facilita la descomposición de los alimentos y la absorción de nutrientes. Un sistema digestivo eficiente es esencial para la eliminación de toxinas del cuerpo.

Ayuda a la Eliminación

El alto contenido de agua y fibra en los limones puede contribuir a una mejor eliminación de desechos y toxinas a través del sistema digestivo. La fibra soluble puede ayudar a suavizar las deposiciones y prevenir el estreñimiento, lo que es crucial para garantizar que las toxinas no se acumulen en el cuerpo. La hidratación proporcionada por los limones también es esencial para mantener el sistema excretor en buen funcionamiento.

Propiedades Alcalinizantes

Aunque los limones son ácidos por naturaleza, su efecto en el cuerpo es alcalinizante. Esto significa que pueden ayudar a equilibrar el pH del cuerpo y reducir la acidez. Un ambiente alcalino en el cuerpo se considera menos propenso a la inflamación y puede contribuir a una salud óptima. La reducción de la acidez también puede ayudar a prevenir la formación de cálculos renales.

Apoyo al Hígado

El hígado es un órgano vital en el proceso de desintoxicación del cuerpo. Los limones pueden ayudar a aliviar la carga de trabajo del hígado al facilitar la descomposición de grasas y toxinas. Además, el contenido de vitamina C en los limones es esencial para la producción de glutatión, un antioxidante crucial para la eliminación de sustancias tóxicas.

Incorporando Limones en tu Programa de Desintoxicación

Para aprovechar los beneficios desintoxicantes de los limones, puedes incorporarlos en tu dieta de diversas formas. Puedes comenzar el día con agua tibia y jugo de limón para estimular el sistema digestivo. También puedes incluir limones en batidos verdes y ensaladas frescas para aumentar la ingesta de nutrientes y fibra.

Precauciones y Consideraciones

Si bien los limones pueden ser agentes desintoxicantes efectivos, es importante recordar que una desintoxicación saludable debe ser equilibrada y supervisada. No te excedas en la cantidad de jugo de limón que consumes, ya que su acidez puede ser irritante para algunas personas. Si tienes condiciones médicas preexistentes, consulta con un profesional de la salud antes de realizar cambios significativos en tu dieta.

En resumen, los limones tienen propiedades desintoxicantes que pueden beneficiar la salud al estimular el sistema digestivo, apoyar la eliminación y equilibrar el pH del cuerpo. Al incorporar limones en tu dieta de manera sensata y equilibrada, puedes aprovechar sus efectos positivos en la desintoxicación y el bienestar general.

Capítulo 12: Recetas Refrescantes con Limones

Los limones son una adición refrescante y versátil a muchas recetas, desde bebidas hasta platos principales y postres. Su sabor ácido y brillante puede transformar cualquier plato en una experiencia culinaria emocionante. En este capítulo, exploraremos algunas recetas refrescantes y deliciosas que destacan el sabor único de los limones y demuestran su versatilidad en la cocina.

1. Limonada Clásica

La limonada es una bebida clásica y refrescante que es perfecta para los días calurosos. Para hacer limonada, exprime el jugo de varios limones frescos y mézclalo con agua y un poco de azúcar o miel al gusto. Agrega hielo y rodajas de limón para darle un toque visual y disfruta de esta bebida refrescante y deliciosa.

2. Ensalada de Pollo con Limón y Albahaca

Para una ensalada ligera y sabrosa, combina pechugas de pollo a la parrilla con hojas de lechuga fresca, tomates cherry, pepino y albahaca. Prepara un aderezo con jugo de limón, aceite de oliva, ajo picado, sal y pimienta. Rocía el aderezo sobre la ensalada y mezcla bien. Esta ensalada es una opción perfecta para una comida saludable y satisfactoria.

3. Salmón a la Parrilla con Salsa de Limón y Eneldo

El salmón a la parrilla con salsa de limón y eneldo es una opción deliciosa para los amantes de los mariscos. Sazona el salmón con sal, pimienta y ralladura de limón, luego ásalo a la parrilla hasta que esté cocido. Prepara una salsa mezclando jugo de limón, eneldo picado, aceite de oliva, ajo y sal. Sirve el salmón con la salsa por encima.

4. Sorbete de Limón

El sorbete de limón es un postre refrescante y ligero. Mezcla jugo de limón fresco con azúcar y agua caliente para hacer un jarabe simple. Enfría la mezcla y luego mézclala en una máquina para hacer helados o congélala en un molde. El resultado será un sorbete de limón suave y delicioso que es perfecto para satisfacer los antojos de postres.

5. Infusión de Limón y Menta

Una infusión de limón y menta es una opción refrescante y saludable para mantenerse hidratado. Agrega rodajas de limón y hojas de menta fresca a un jarro de agua fría. Deja que los sabores se mezclen durante unas horas en el refrigerador y luego disfruta de esta bebida sutilmente aromática y revitalizante.

6. Pollo al Limón con Hierbas

Prepara un pollo al limón con hierbas aromáticas para una cena deliciosa y reconfortante. Marina las piezas de pollo con jugo de limón, romero, tomillo, ajo picado, sal y pimienta. Luego, ásalas en el horno hasta que estén doradas y cocidas. El resultado será un plato jugoso y lleno de sabor con la frescura distintiva del limón.

7. Té Helado de Limón y Jengibre

El té helado de limón y jengibre es una bebida revitalizante y llena de sabor. Prepara un té de jengibre y déjalo enfriar. Agrega jugo de limón fresco y endulza al gusto con miel. Sirve con hielo y rodajas de limón para obtener una bebida refrescante con un toque picante.

En resumen, los limones son una adición versátil y deliciosa a una variedad de recetas refrescantes. Desde bebidas hasta platos principales y postres, los limones pueden realzar el sabor de tus creaciones culinarias y agregar un toque de frescura. Experimenta con estas recetas y descubre cómo los limones pueden transformar tus comidas en experiencias gastronómicas emocionantes.

Capítulo 13: Limones en la Cocina y la Gastronomía

Los limones tienen un lugar especial en la cocina y la gastronomía gracias a su sabor ácido y refrescante. Su versatilidad los convierte en un ingrediente esencial en una amplia variedad de platos, desde ensaladas hasta postres. En este capítulo, exploraremos cómo los limones se utilizan en la cocina para realzar el sabor y agregar un toque especial a las creaciones culinarias.

Potenciador de Sabor

Los limones son conocidos por su capacidad para resaltar los sabores en una variedad de platos. Agregar unas gotas de jugo de limón puede equilibrar la dulzura, la salinidad y la riqueza de los alimentos, creando un perfil de sabor más complejo y agradable. Su acidez también puede cortar la grasa en platos más ricos, proporcionando un equilibrio de sabores.

Aderezos y Salsas

Los limones son ingredientes clave en la preparación de aderezos y salsas. El jugo de limón fresco se utiliza para crear aderezos de ensaladas, marinadas para carnes y pescados, y salsas para acompañar platos principales. Las salsas como la mayonesa de limón, la salsa tártara y la salsa de limón y mantequilla son solo algunas de las muchas opciones disponibles.

Postres y Repostería

Los limones también desempeñan un papel importante en la repostería. Desde pasteles y tartas de limón hasta galletas y merengues, el sabor brillante y ácido de los limones puede equilibrar la dulzura en los postres y agregar un toque refrescante. La ralladura de limón también es una forma popular de agregar sabor y aroma a los productos horneados.

Bebidas Refrescantes

Los limones son ingredientes clave en muchas bebidas refrescantes. Desde limonadas y tés de limón hasta cócteles y bebidas mixtas, el jugo y la ralladura de limón pueden aportar un sabor único y revitalizante. Además, los limones también se utilizan en la fabricación de licores y extractos de sabores.

Creatividad en la Cocina

La versatilidad de los limones permite la creatividad en la cocina. Puedes experimentar con diferentes combinaciones de sabores al agregar limones a platos salados y dulces. La variedad de texturas que los limones pueden aportar, como el jugo fresco, la ralladura y las rodajas decorativas, ofrece múltiples formas de incorporar su sabor único en tus creaciones culinarias.

En resumen, los limones son un ingrediente esencial en la cocina y la gastronomía, agregando sabor, frescura y versatilidad a una variedad de platos. Ya sea en aderezos, salsas, postres o bebidas, los limones tienen un lugar especial en la creación de experiencias culinarias emocionantes y deliciosas.

Capítulo 14: Limones en la Industria Cosmética

Los limones no solo son valiosos en la cocina, sino que también tienen un papel destacado en la industria cosmética debido a sus propiedades beneficiosas para la piel y el cabello. En este capítulo, exploraremos cómo los limones se utilizan en productos de cuidado personal y cómo pueden ser incorporados en tu rutina de belleza.

Aclaramiento de la Piel

El jugo de limón se ha utilizado tradicionalmente como un agente natural para aclarar la piel y reducir las manchas oscuras. Los limones contienen ácido ascórbico y alfa hidroxiácidos que pueden ayudar a exfoliar la capa superior de la piel, promoviendo una piel más clara y luminosa. Sin embargo, es importante usar con precaución, ya que el jugo de limón puede ser irritante para algunas personas.

Tratamiento del Acné

Las propiedades antibacterianas y astringentes de los limones pueden ser útiles en el tratamiento del acné. La aplicación tópica de jugo de limón diluido puede ayudar a eliminar las bacterias que causan el acné y reducir el exceso de grasa en la piel. Sin embargo, es esencial hacer una prueba de parche antes de aplicar el jugo de limón en áreas afectadas.

Exfoliación Natural

La textura granulada de la ralladura de limón y su alto contenido de vitamina C hacen que sean un exfoliante natural efectivo. Puedes mezclar ralladura de limón con ingredientes como el azúcar o la miel para crear exfoliantes caseros que ayuden a eliminar las células muertas de la piel y a suavizar la textura.

Acondicionamiento del Cabello

Los limones también pueden ser utilizados para acondicionar y dar brillo al cabello. El jugo de limón diluido puede ayudar a equilibrar el pH del cuero cabelludo y eliminar el exceso de grasa. Además, se ha sugerido que la exposición al sol después de aplicar jugo de limón en el cabello puede aclararlo de forma natural.

Precauciones y Consideraciones

Aunque los limones tienen beneficios para la piel y el cabello, es importante recordar que su acidez puede ser irritante para algunas personas. Siempre realiza una prueba de parche antes de aplicar cualquier producto a gran escala. Además, debido a su capacidad de aumentar la sensibilidad de la piel al sol, es recomendable aplicar protector solar después de usar productos de cuidado con limón.

En resumen, los limones tienen propiedades que los hacen valiosos en la industria cosmética para el aclarado de la piel, el tratamiento del acné, la exfoliación y el acondicionamiento del cabello. Si bien pueden ser útiles en tu rutina de cuidado personal, es esencial usarlos con precaución y considerar las necesidades individuales de tu piel y cabello.

Capítulo 15: Cuidado del Hogar con Limones

Además de sus usos en la cocina y la belleza, los limones también tienen aplicaciones en el cuidado del hogar. Sus propiedades antibacterianas y su agradable aroma los convierten en una opción natural para la limpieza y el mantenimiento del hogar. En este capítulo, exploraremos cómo los limones pueden ser utilizados para mantener tu hogar limpio y fresco.

Limpiadores Multiusos

El jugo de limón mezclado con agua y vinagre blanco puede convertirse en un limpiador multiusos efectivo. Esta mezcla es ideal para limpiar superficies de cocina, baño y otros espacios. El ácido cítrico del limón puede ayudar a descomponer la grasa y la suciedad, mientras que su aroma fresco dejará un olor agradable en el aire.

Eliminación de Malos Olores

Los limones son excelentes para eliminar malos olores en tu hogar. Puedes hervir rodajas de limón en agua para refrescar el aire y eliminar olores persistentes. También puedes colocar cáscaras de limón en áreas propensas a olores desagradables, como la nevera o los cubos de basura.

Desodorización de Utensilios y Tablas de Cortar

Los limones son eficaces para eliminar los olores persistentes de utensilios de cocina y tablas de cortar. Frota una rodaja de limón en tablas de cortar de madera para eliminar los olores de alimentos fuertes como el ajo y la cebolla. También puedes frotar una rodaja de limón en utensilios de acero inoxidable para eliminar los olores residuales.

Ambientadores Naturales

Los limones también pueden ser utilizados como ambientadores naturales. Puedes hacer tu propio ambientador colocando cáscaras de limón en un recipiente con agua y dejándolas en diferentes áreas de tu hogar. Con el tiempo, el aroma fresco de los limones se dispersará en el aire, creando un ambiente agradable.

Limpieza de Superficies Metálicas

El jugo de limón es útil para limpiar superficies metálicas como grifos y fregaderos de acero inoxidable. Frota jugo de limón sobre las superficies, déjalo actuar durante unos minutos y luego enjuaga con agua tibia. Esto ayudará a eliminar manchas de agua y a dejar un brillo reluciente en las superficies metálicas.

En resumen, los limones tienen aplicaciones prácticas en el cuidado del hogar, desde la limpieza hasta la eliminación de malos olores y la desodorización. Sus propiedades naturales hacen que sean una alternativa efectiva a los productos de limpieza convencionales, y su aroma fresco añade un toque agradable a tu entorno. Con precaución y creatividad, puedes aprovechar los beneficios de los limones en la limpieza y el mantenimiento de tu hogar.

Preguntas y Respuestas de Explorando los Beneficios de los Limones

Pregunta 1: ¿Cuáles son los beneficios principales de los limones para la salud?

Respuesta: Los limones ofrecen una variedad de beneficios para la salud. Son ricos en vitamina C, antioxidantes y compuestos naturales que pueden fortalecer el sistema inmunológico, mejorar la digestión, desintoxicar el cuerpo y promover una piel saludable.

Pregunta 2: ¿Cómo puede la vitamina C en los limones beneficiar al sistema inmunológico?

Respuesta: La vitamina C es esencial para el sistema inmunológico, ya que puede fortalecer las defensas del cuerpo contra las infecciones y los resfriados. Los limones son una excelente fuente de vitamina C, que puede ayudar a aumentar la producción de glóbulos blancos y fortalecer la respuesta inmunitaria.

Pregunta 3: ¿Cómo los limones pueden contribuir a la salud digestiva?

Respuesta: Los limones contienen ácido cítrico, que puede estimular la producción de enzimas digestivas y ayudar en la digestión de los alimentos. Beber agua tibia con jugo de limón en las mañanas puede ayudar a estimular el sistema digestivo y aliviar problemas como la hinchazón y la indigestión.

Pregunta 4: ¿De qué manera los limones pueden ser considerados agentes desintoxicantes?

Respuesta: Los limones tienen propiedades diuréticas y pueden estimular la eliminación de desechos a través del sistema digestivo y urinario. El contenido de agua y fibra en los limones también puede ayudar a eliminar toxinas y mejorar la función del hígado, un órgano clave en la desintoxicación del cuerpo.

Pregunta 5: ¿Cómo los limones pueden promover una piel saludable?

Respuesta: Los antioxidantes presentes en los limones, como la vitamina C, pueden ayudar a proteger la piel contra el daño causado por los radicales libres y los rayos UV. Además, las propiedades astringentes y exfoliantes de los limones pueden contribuir a una piel más clara y suave.

Pregunta 6: ¿Qué precauciones deben tenerse en cuenta al consumir limones para obtener beneficios de salud?

Respuesta: Aunque los limones son saludables, es importante recordar que su acidez puede ser irritante para algunas personas, especialmente para aquellos con problemas gastrointestinales. Además, debido a su efecto en el esmalte dental, es aconsejable enjuagar la boca con agua después de consumir jugo de limón puro.

Pregunta 7: ¿Cuál es la recomendación para incorporar limones en la dieta de manera equilibrada?

Respuesta: Puedes incorporar limones en tu dieta de diversas formas. Agregar jugo de limón a tus comidas, beber agua tibia con limón por las mañanas, o usar limón como aderezo en ensaladas son algunas opciones. Sin embargo, es importante mantener un equilibrio y no exceder el consumo, especialmente si tienes problemas médicos específicos.

Pregunta 8: ¿Los limones tienen propiedades antiinflamatorias?

Respuesta: Sí, los limones contienen antioxidantes que pueden tener efectos antiinflamatorios en el cuerpo. Estos antioxidantes pueden ayudar a reducir la inflamación y proteger las células del daño.

Pregunta 9: ¿Los limones pueden ser beneficiosos para la digestión ácida del estómago?

Respuesta: Aunque los limones son ácidos por naturaleza, su efecto en el cuerpo es alcalinizante. Pueden ayudar a equilibrar el pH del estómago y reducir la acidez, lo que podría ser beneficioso para algunas personas con problemas de digestión ácida.

Pregunta 10: ¿Cómo los limones pueden ayudar en la absorción de nutrientes?

Respuesta: El ácido cítrico presente en los limones puede ayudar a descomponer los alimentos y aumentar la actividad de las enzimas digestivas. Esto puede mejorar la absorción de nutrientes esenciales en el cuerpo, contribuyendo a una mejor salud en general.

Pregunta 11: ¿Cuál es la propiedad principal de los limones que los hace valiosos en la limpieza del hogar?

Respuesta: La propiedad principal de los limones que los hace valiosos en la limpieza del hogar es su contenido de ácido cítrico. El ácido cítrico presente en los limones tiene propiedades desinfectantes y puede ayudar a descomponer la grasa y la suciedad, lo que los convierte en un ingrediente efectivo para la limpieza de diversas superficies.

Pregunta 12: ¿Cómo se puede utilizar el jugo de limón para eliminar malos olores en el hogar?

Respuesta: El jugo de limón se puede utilizar para eliminar malos olores en el hogar de varias formas. Una opción es hervir rodajas de limón en agua, lo que ayuda a refrescar el aire y eliminar olores persistentes. También se pueden colocar cáscaras de limón en áreas propensas a olores desagradables, como la nevera o los cubos de basura, para absorber y neutralizar los olores.

Pregunta 13: ¿Cómo se puede utilizar el jugo de limón para limpiar superficies metálicas?

Respuesta: El jugo de limón se puede utilizar para limpiar superficies metálicas como grifos y fregaderos de acero inoxidable. Para hacerlo, simplemente frota jugo de limón sobre las superficies metálicas, déjalo actuar durante unos minutos y luego enjuaga con agua tibia. Esto ayudará a eliminar manchas de agua y a dejar un brillo reluciente en las superficies.

Pregunta 14: ¿Cuál es el beneficio de utilizar limones como exfoliante natural en el cuidado de la piel?

Respuesta: El beneficio de utilizar limones como exfoliante natural en el cuidado de la piel radica en su textura granulada y su alto contenido de vitamina C. La ralladura de limón puede actuar como un exfoliante suave, ayudando a eliminar las células muertas de la piel y suavizar su textura. Además, la vitamina C presente en los limones puede contribuir a la luminosidad de la piel.

Pregunta 5: ¿Cuáles son las precauciones importantes al utilizar productos de cuidado personal con limón?

Respuesta: Es importante tener precaución al utilizar productos de cuidado personal con limón debido a su acidez. Antes de aplicar cualquier producto en áreas extensas de la piel, es recomendable realizar una prueba de parche para evitar reacciones adversas. Además, debido a la sensibilidad aumentada de la piel al sol después de usar productos con limón, se recomienda aplicar protector solar para proteger la piel.

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deepinsideyourbeing · 17 days ago

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Until the Ribbon Breaks - Enzo Vogrincic

+18! CNC (E.R). Dom!Enzo. Age gap (implícito), biting, creampie, dacrifilia, (fugaz) degradation, dirty talk, fingering, (menciones de) sangre, sexo oral, sexo sin protección, Virgin!Reader. Aftercare. Español rioplatense.

La desolada sala de espera te hace preguntarte si realmente hay más personas en el edificio: llevás quién-sabe-cuánto hecha un manojo de nervios mientras esperás para realizarte una ecografía y desde que te sentaste no viste pasar enfermeros, doctores, personal de limpieza o personas en lo absoluto.

Y en todo este tiempo la puerta del consultorio permaneció cerrada.

Las luces blancas del corredor son tan brillantes como para provocar dolor de cabeza y permanecés con la cabeza gacha, concentrada en tu teléfono y en la hoja que te entregó la recepcionista, donde se leen tus datos y los inquietantes detalles sobre los estudios a realizarte.

La peor parte es probablemente la recomendación de utilizar falda para mayor comodidad. No hay forma de estar cómoda en una situación como la que te espera. Simplemente no la hay.

El apellido de la persona encargada es interesante y no podés evitar sentir curiosidad sobre el origen del mismo. Parece bastante difícil de pronunciar y practicás cómo decirlo un par de veces hasta sentirte más segura. Los nervios persisten pero descubrís que es mejor concentrarte en algo que no sean los posibles desastrosos desenlaces de la consulta.

Hay una máquina expendedora en el extremo opuesto de la sala. Dejás tus pertenencias sobre la fría silla de metal y caminás casi en puntas de pie, muy lentamente, para no perturbar el extraño silencio del lugar. Estudiás las opciones durante largo rato y luego presionás los botones (el pitido que emiten resulta ensordecedor) para seleccionar un simple…

Un ruido proveniente del consultorio llama tu atención. Volteás y fijás la mirada en la aburrida puerta blanca, pero todavía está cerrada y el ruido no se repite, por lo que suponés que se trata de algún objeto sin importancia. Regresás la vista hacia la máquina expendedora y esta vez seleccionás una opción diferente.

El golpe cuando el producto cae evita que escuches el crujir de la puerta.

-¿Para ecografías…?- pregunta una voz grave a tus espaldas-. Sos la última, ¿no? Vení.

Obvio que sos la última, pensás mientras recogés tus cosas para dirigirte hacia el consultorio, ¿tiene idea de cuánto tiempo estuviste esperando? Pasaste milenios en la recepción y varios siglos en ese corredor, completamente sola y en pánico, temblando no sólo por las bajas temperaturas producto del aire acondicionado.

El contraste entre la penumbra del consultorio y las luces fluorescentes del corredor es doloroso.

El consultorio está desprovisto de personalidad y las paredes, pintadas de un tono gris-depresión, sólo están iluminadas por una lámpara de escritorio que proyecta largas sombras irregulares hacia toda la habitación. En la pared opuesta a la puerta hay una camilla cubierta con papel blanco, impoluto, esperando por vos. Hacés un esfuerzo para no fijarte en la computadora y en los instrumentos conectados a la máquina.

-¿Es la primera vez que te hacés este estudio?- pregunta el doctor. Está mirando la pantalla de la computadora, los músculos de su espalda son evidentes bajo la impecable bata blanca y su largo cabello oscuro se mueve como seda cuando voltea para poder verte de frente-. Sacate la ropa y recostate.

Sus ojos te estudian con una intensidad que no sabés cómo interpretar y en tu estómago bajo se instala esa molesta, pesada e incómoda sensación, reflejando el pánico y el terror que llenan los recovecos de tu mente. Dirigís una mirada hacia la estantería ubicada en una esquina, llena con lo que parece ser batas descartables, pero él no se muestra consciente de ese detalle y no estás segura de poder pedirlas.

Hay un perchero donde dejás tu pequeño bolso y una silla que ocupás para retirar tu calzado. Deslizás tu falda por tus piernas mientras maldecís internamente porque… ¿No se suponía que la falda se quedaba durante la ecografía? ¿No era ese el motivo de la sugerencia? Te retirás la blusa y el sostén y cruzás un brazo sobre tu estómago. Insegura e híper-consciente.

Voltea. La manera en que sus ojos recorren tu cuerpo te hace temblar y no estás muy segura del motivo.

-Recostate en la camilla por favor.

Permanecés en tu lugar, inmóvil por unos largos segundos, intentando controlar el ritmo de tu respiración y tus nervios, para luego caminar con movimientos mecánicos hacia la camilla. Te ayudás del pequeño escalón para sentarte y cuando te recostás mantenés la vista fija en el techo del consultorio; presionás las yemas de tus dedos sobre el cuero de la camilla con la intención de concentrarte en algo que no sea tu cuerpo desnudo y la estresante situación.

El gel frío cayendo sobre tus pechos hace que te sobresaltes.

Girás la cabeza hacia la pantalla, donde esas incomprensibles imágenes en blanco y negro comienzan a aparecer, pero terminás perdiéndote inevitablemente en el perfil del doctor. La línea de su mandíbula, la manera en que muerde su labio en señal de concentración, su nariz y su ceño fruncido. ¿Deberías preocuparte? ¿Hay algo extraño o…?

Cuando sus ojos se cruzan con los tuyos creés ver algo más en ellos: un destello de interés que va más allá de lo estrictamente profesional. Sus pupilas dilatadas detrás de los cristales y sus largas pestañas negras reclaman toda tu atención y olvidás la inquietud que te generó su expresión desconcertada. Humedece sus labios e inconscientemente imitás el gesto.

-Permiso- dice sin romper el contacto visual. Sus manos están cubiertas por los guantes de látex pero igualmente percibís el calor que emana de ellas cuando mueve tu brazo para exponer mejor el área. La firmeza de sus manos es reconfortante-. ¿Podés…? Sí, eso.

El transductor, más pequeño y mucho más extraño de lo que imaginabas, es un dispositivo de plástico y metal que él sostiene con una destreza inquietante entre sus largos dedos. Mientras lo desliza por la curva de tu pecho derecho, con movimientos lentos y circulares, la placentera sensación de presión te hace temblar. Un suspiro escapa de tus labios.

-¿Muy frío?

Es sólo un segundo pero es suficiente para captar la mirada hambrienta que dirige hacia tus pechos. Tus pezones están erectos por la temperatura del gel y el contacto con el transductor –con el que está rozándolos de una forma que pretende ser accidental- sólo empeora la situación. Repite la acción y fingís que tu cuerpo no lo persigue en busca de más.

-Un poco.

El transductor desciende lentamente hacia tu costado, siempre deteniéndose en puntos específicos y permitiéndote sentir el peso de cada pausa, hasta ubicarse sobre una sección más sensible. El calor de la cercanía opaca la sensación fría del gel y cuando su mano roza de manera imperceptible tu brazo otro escalofrío recorre tu espalda.

-Relajate- ordena luego de verte reaccionar. Hay un deje de un algo extraño en su tono y te preguntás si es consciente del cosquilleo que provoca en el costado de tu pecho. Se estira sobre tu cuerpo y reposa parcialmente el peso de su brazo sobre tus costillas mientras repite el procedimiento en tu pecho izquierdo.

Tu respiración se vuelve más lenta. Más profunda. Percibís cada pequeño detalle, desde el leve crujido del papel bajo tu cuerpo hasta el zumbido distante de la máquina y su propia respiración, sincronizándose con el murmullo de tus exhalaciones. Cuando murmura algo entre dientes te perdés en el movimiento de sus labios y no podés descifrar sus palabras.

El sonido de las toallas de papel interrumpe la quietud y sin permitirte procesar la situación comienza a limpiarte. Retira el producto con movimientos expertos y cuidadosos, sutilmente ejerciendo más presión de la necesaria, mientras te dirige alguna que otra mirada y esa sonrisa sugerente que tira de sus labios. La delicadeza de sus manos es cautivadora.

El pánico se instala en tu estómago bajo y en tu estado nervioso rasgás el papel que recubre la camilla. El sonido lo obliga a voltear y en cuanto ve tus ojos vidriosos sus cejas se curvan en un ángulo de compasión. Se inclina sobre tu cuerpo para poder verte mejor.

-¿Estás bien?- pregunta en un susurro-. ¿Es la primera vez que te hacés este estudio?

-¿Va a doler?

-Puede ser incómodo- contesta-. Pero vamos a hacer lo posible para que no duela nada, ¿sí?

-Tengo miedo.

Limpia una lágrima con su pulgar y te sonríe.

-Yo me encargo- intenta calmarte mientras toma los elementos necesarios para continuar. El transductor vaginal es mucho más intimidante de lo que esperabas y cuando ve tu expresión deja de lado el condón y el gel-. Respirá profundo. Flexioná las piernas.

Obedecés sin cuestionar. Captura tu pierna entre su brazo y su cuerpo, seguramente para mantenerte en posición, pero más allá del profesionalismo y su comportamiento metódico la proximidad hace que te resulte imposible ignorar su temperatura corporal o el bulto golpeando tu pierna. Te esforzás por controlar el ritmo de tu respiración.

Desliza el infernal objeto entre tus pliegues y luego presiona sobre tu entrada.

-¿Doctor…?

-Enzo- dice sin más-. Podés decirme Enzo.

-Enzo- repetís sólo para sentir su nombre entre tus labios. Jurás que los músculos de su brazo se contraen-. ¿Podrías hacerlo muy, muy lento? Es que…

-¿Qué?

Entrelazás tus manos sobre tu estómago en un gesto nervioso y cerrás los ojos cuando sentís su cálida mano desnuda en tu muslo. ¿En qué momento sus guantes desaparecieron? No, eso no importa, tenés que decirle que necesitás que sea cuidadoso porque de lo contrario podría…

-Es que… Yo no…

-Me imaginaba- su tono es condescendiente y no tenés idea de cómo se lo imaginaba. Da un apretón a tu pierna y agrega:- ¿Me dejás prepararte?

Parpadeás.

-¿Qué?

-¿Puedo prepararte para hacerte la ecografía?

-¿Prepararme?- preguntás con voz trémula-. Pensé que…

El fantasma de sus dedos sobre tu centro te corta la respiración.

-Estás muy mojada.

Recorre tus pliegues con caricias imperceptibles antes de separarlos y contemplar tu pequeña entrada brillante. Desliza un dígito de arriba abajo antes de llevarlo hacia tu entrada y ejercer sólo un poco de presión, aún sosteniendo tu pierna, frotándose contra tu costado. Suspira.

-No- negás mientras clavás tus uñas en el cuero de la camilla-. ¿Puede ser por el gel…?

El fugaz pero punzante dolor de su dedo colándose en tu interior te hace tensarte y jadear. Terminamos, pensás, liberando todo el aire en tus pulmones mientras tus músculos por fin se relajan. Querés preguntarle qué es lo siguiente, cómo funciona exactamente el gel (llevás toda la eternidad preguntándolo), cuánto tardarán en entregarte los resultados.

No podés hacerlo porque sus movimientos te roban la capacidad del habla.

-No es el gel, no- mueve la cabeza en un lento gesto negativo mientras retira el dígito y vuelve a introducirlo por completo. Cuando roza algo en tu interior, un punto que te hace temblar, cerrás los párpados con fuerza y te reprende pellizcando tu pezón-. Fue por esto, ¿no? ¿Tenés las tetitas sensibles?

Golpeás su mano para que te suelte. En lugar de liberarte tira hasta hacerte gritar.

-Sh, sh, sh- ordena inclinándose sobre tu cuerpo. Su rostro bloquea tu campo visual y cuando habla no sabés si mirar sus ojos o su boca-. Calladita, ¿sí…? Total nadie te va a escuchar.

Reclama tus labios en un beso, muy húmedo y muy desesperado, que correspondés sin pensarlo. Cuando sentís su lengua colándose entre tus labios gemís y le concedés el permiso: explora el interior de tu boca sin controlarse, profundizando el beso hasta que no hay más distancia que llenar, bebiendo de tus suspiros y protestas cuando comienza a mover el dedo en tu interior.

Deslizás tus dedos entre su cabello largo y sedoso, no muy segura de si buscás un ancla o si sólo querés sentirlo, mientras tirás de la bata blanca que lleva sobre el uniforme azul. Enzo no deja de penetrarte una y otra vez con su dedo, curvándolo hacia arriba y presionando ese punto dentro tuyo que te hace jadear, provocando sonidos húmedos con cada movimiento.

Clavás tus uñas en su brazo cuando sentís un segundo dígito posicionándose contra tu entrada y rompés el beso. El hilo de saliva que te conecta con él se rompe cuando hablás:

-No, no, no- lloriqueás-. Me va a doler.

-Tranquila- besa tu frente-. Tengo que hacerlo, princesa, ¿o cómo te voy a hacer el estudio?

El estudio.

¿En qué estabas pensando? Es tu doctor y está preparándote para un examen, ¿por qué lo besaste? ¿Por qué te dejaste llevar por sus caricias? ¿Y por qué te pellizcó como si disfrutara verte retorciéndote? Tus paredes se contraen con el recuerdo y escuchás una pequeña risa de su parte mientras tu mente grita que nada de esto tiene sentido.

Deja caer unas gotas del gel sobre tus pliegues y observa cómo caen hasta tu entrada. Intentás no ceder el control a tu irrefrenable curiosidad pero de todas formas terminás reincorporándote para ver con claridad qué es tan interesante, qué es lo que está haciendo, qué es lo que provoca que muerda su labio mientras lleva su otra mano hacia su bulto para tocarse.

Desliza otro dedo en tu interior y mordés tus nudillos para no gritar por el dolor.

-Qué conchita más linda tenés- y para remarcar sus palabras su pulgar comienza a jugar con tu clítoris mientras sus dedos medio y anular continúan masajeando tu interior. Observás el débil brillo de sus anillos mientras los músculos de tu abdomen se contraen por la sensación-. ¿Te puedo preguntar una cosa?

Fruncís el ceño y levantás la vista.

-¿Tenés novio?

-Sí.

-¿Y nunca te tocó acá?

Sí.

-No.

Tu respuesta parece ser la correcta porque te recompensa ejerciendo más presión sobre tu clítoris. Millones de veces te tocaste pero jamás lo habías hecho con algo en tu interior y el hecho de que sean sus dedos, visiblemente más largos y grandes, te hace delirar. Es un placer nuevo, diferente e intenso, que termina robándose tus fuerzas y haciéndote desplomarte nuevamente sobre la camilla.

-¿Alguna vez se la chupaste?

Intentás contestar pero lo único que deja tu boca son gemidos. Tus mejillas queman.

-Un par de veces- contestás con voz entrecortada luego de un largo rato. El ritmo de sus movimientos crece y la sensación de presión en tu estómago bajo se vuelve intolerable, peligrosa, recordándote que lo que están haciendo está mal-. Basta, no… No puedo…

Deja de tocarte cuando te removés y el gemido que surge en tu garganta, mezcla de reticencia y angustia, lucha por hacerse oír. Intentás empujarlo pero toma tus muñecas con una mano mientras dirige su miembro a tu boca: admirás, inmóvil, su generoso tamaño, la gota brotando en su punta roja y brillante, el hilo que se forma cuando esta cae en la camilla.

Humedecés tus labios y tu lengua se desliza entre ellos instintivamente, con un deje delator de desesperación, esperando lo-que-sea que él esté por ofrecerte. Cuando baña tu lengua con su excitación suspirás y tu respiración –junto con tus ojos todavía fijos en los suyos y la vulnerabilidad en tu mirada- sobre su glande sensible lo hace gemir.

Empuja lentamente hasta introducir varios centímetros que hacen doler las comisuras de tu boca. Tus ojos se llenan de lágrimas pero eso no impide que continúe empujando, utilizando tu cavidad húmeda y caliente sin importarle nada que no sea su placer.

Intentás succionar y Enzo tiene que luchar para no cerrar los ojos, pero es más difícil de lo que él esperaba y cuando el placer lo supera pierde el control, arroja la cabeza hacia atrás y mueve sus caderas. Golpea tu garganta una, dos, tres veces, cesando sus embestidas sólo cuando escucha tus arcadas. Forcejéas inútilmente para liberarte de su agarre.

Se desliza fuera de tu boca para permitirte respirar y delinea tus labios –tu labial dejó un anillo de color en su piel pero tus labios aún brillan por la mezcla de tu saliva y el líquido preseminal- hasta que te considera recuperada. Vuelve a reclamar tu boca, hundiéndose más y más con cada estocada, golpeando tu garganta hasta que un río de lágrimas corre por tus mejillas.

Tus pulmones queman por la falta de oxígeno y tus muñecas duelen. No importa. De alguna extraña y retorcida manera disfrutás que esté utilizándote, haciendo lo que quiere con tu cuerpo, demostrándote su fuerza, el poder que tiene sobre vos y su deseo de poseerte.

El indecente sonido de su asalto crece junto con sus gruñidos y gemidos, cada vez más profundos y sonoros, aunque tu mente no registra nada que no sea la expresión de placer en su rostro y el calor de sus palmas cuando toma tu rostro entre sus manos. Golpea tu garganta una última vez antes de tirar de tu cabello.

Mancha tus mejillas, tus labios, tu mentón y tu cuello con incontables hilos de semen caliente que te marcan como suya. Las últimas gotas caen sobre tu lengua y su pulgar roza tu pómulo cuando dice:

-Tragá.

Obedecés.

El repentino silencio es extraño y evitás mirarlo o dirigirle la palabra mientras limpia sus restos de tu piel. Masajea tus muñecas y después de ayudarte a reincorporarte masajea tus piernas, donde el contacto de sus manos y sus pulgares colándose entre tus muslos despiertan un hormigueo.

Te perdés contemplando las venas que recorren el dorso de sus manos y entonces…

-¿Qué pasa?

Separás las piernas. Tus muslos están manchados con el mismo rojo que decoran sus dedos y cuando levantás la vista, reclamándole con los ojos llenos de lágrimas, su expresión está libre de remordimiento.

-No pasa nada, mi vida- busca tu boca y deposita un corto beso en tus labios-. ¿Seguimos?

-¿Qué?

-Necesito terminar de prepararte.

-No quiero- negás frenéticamente-. No necesito…

Los besos en tu cuello bastan para hacerte callar y no objetás cuando te sujeta por las rodillas para dejarte peligrosamente cerca del borde de la camilla. Lo sentís golpeando tu estómago con su erección, otra vez llena gracias a la imagen entre tus piernas y tu reacción, y gemís por la sensación de placer que su calor envía directo a tu centro.

Te obliga a mirar mientras se desliza entre tus pliegues manchados -con tu humedad y sangre y ahora con líquido preseminal- y temblás de miedo cuando lo sentís presionar contra tu entrada. No pensó en ponerse un condón pero por lo menos tuvo la gentileza de bañar su extensión con el frío gel incoloro. Respirás profundamente, tus manos en su pecho, mientras esperás.

-Mirame- ordena con voz ronca.

Cuando tu mirada encuentra la oscuridad de sus ojos, abrasadora y peligrosa, Enzo captura tus labios en un beso voraz, desesperado, todavía empujándose contra tu pequeña entrada palpitante.

No duele es lo primero que pensás, pero la presión es tanta que por un segundo sentís que te vas a desmayar en sus brazos, desnuda y portando en tus piernas la evidencia de lo sucedido en la consulta.

Realiza pequeños movimientos con su cadera, todos y cada uno de ellos generándote una incómoda sensación punzante, como si fueras una muñeca de trapo y estuviera llenándote de agujas y alfileres. Te esforzás por inhalar y exhalar lentamente para no desvanecerte.

Buscás refugio en su cuello cuando la incomodidad se convierte en un dolor desgarrador y te mordés los labios para no gritar. Su cadera choca con tu centro y gemís.

No estás segura de que el motivo sea sólo el dolor.

-Estás muy apretada- besa tu cabello mientras masajea tu espalda. Ignora que desde tu reconfortante escondite podés ver el hilo rojo en la base de su miembro cuando retrocede unos centímetros. Esta vez se introduce lentamente y repite el movimiento incontables veces hasta que sólo su punta se mantiene en tu interior-. Dios…

Vuelve a penetrarte de una sola estocada y el gemido quebradizo que deja tus labios llama su atención. Te empuja para poder ver tu rostro y tenés que descansar tu peso en tus manos para no caer; la posición le brinda la vista perfecta de tus pechos moviéndose con cada una de sus embestida y le permite ver cómo su miembro te dilata.

Enzo está perdido en tu fragilidad, en tu estado indefenso y en la abstracta delicadeza de este momento, y se deleita con el sinfín de lágrimas que hacen brillar tus pestañas e irritan tus párpados. Lleva una mano a tu pecho y luego de sostenerlo, como si contemplara la manera en que tu cuerpo encaja entre sus manos, comienza a masajearlo hasta que te escucha suspirar y jadear.

Tus paredes se contraen y dificultan sus movimientos.

-¿Sí…? ¿Te gusta?

-Sí, sí, sí- repetís compulsivamente. Un hilo de saliva cae de tu boca y mancha tu mentón-. No pares.

Luego de pellizcar tu pezón lleva sus dedos a tu boca. Observa tu expresión de lujuria cuando succionás y la manera en que rodeás los dígitos con la lengua hace que pierda el ritmo de sus estocadas. Te quejás por la nula estimulación y en un gesto de coraje abrazás su cadera con tus piernas.

Cuando vuelve a hundirse en tu cuerpo su punta besa tu cérvix con un doloroso pero placentero golpe que arranca un gemido desde las profundidades de tu pecho. Enzo sonríe, complacido, estúpido por tu reacción y por la manera en que tus músculos se contraen exquisitamente sobre su extensión.

Llevás una mano a tu abdomen bajo, donde jurás que podés sentirlo llenándote, pero él la reemplaza con la suya. Balbucéas incoherencias y él no deja de embestir con fuerza, sin importarle la desesperación y la confusión en tu rostro, motivado por los obscenos sonidos húmedos y el golpe rítmico de su cadera contra tus muslos.

El placer que recorre tu cuerpo hace que tus ojos se nublen.

-Enzo- intentás advertirle-. Basta, no. Voy a…

-Sí, sí- se arroja sobre vos y muerde tu cuello-. Dale, putita, yo sé que querés.

La línea entre el dolor y el placer se evapora y cuando el calor de tu orgasmo te golpea -con una brutalidad que hasta hoy no conocías y te hace gritar su nombre-, los violentos espasmos que te sacuden no impiden que Enzo continúe abusando de tu cuerpo. Los músculos de tus piernas queman y tus uñas colándose bajo el cuello de su uniforme dejan marcas de fuego en su cuello y espalda.

Las últimas oleadas de placer son imposibles de disfrutar porque Enzo, desesperado y sin medir su fuerza, tira de tus piernas hasta que tus pies tocan el suelo. Permanecés presa entre su cuerpo y la camilla, débil y desorientada, mientras se deshace de su ropa hasta revelar del todo sus brazos musculosos, su pecho y su abdomen tonificados, sus tentadoras piernas.

Toma tus hombros y te obliga a voltear (golpeás tu cadera en el proceso y finge no oír tus quejidos) para luego empujarte, con su pesada mano entre tus omóplatos, hasta que tu mejilla impacta con la camilla. Captura una de tus muñecas y la sostiene contra tu espalda baja como un recordatorio de su poder.

El metal frío de la camilla y el calor que su cuerpo irradia instalan una placentera sensación en tu centro y temblás por la anticipación. Cuando Enzo se desliza entre tus pliegues llorás y suplicás, batallando con su agarre hasta que decide tomar tu mano.

Dirige su miembro hacia tu pequeña entrada brillante y se introduce con un rápido movimiento en tu interior caliente, donde tus paredes imposiblemente estrechas no dejan de succionarlo con hambre, tu cuerpo recibiéndolo y suplicándole.

Contempla con pupilas dilatadas cómo lo recibís, una y otra vez, reclamándole entre lágrimas por el escozor que provoca su tamaño en tu entrada para nada habituada a este maltrato. Los músculos de su abdomen se tensan cuando descubre tu excitación goteando y manchando el suelo del consultorio.

-Te voy a llenar toda- promete-. ¿Querés eso? ¿Querés que te llene toda la conchita?

Entre tus agudos gemidos rotos repetís un hilo de palabras incomprensibles e inconexas que no logra descifrar. Escucha su nombre cayendo de tus labios como un mantra, una súplica o una protesta, empujándolo cada vez más cerca de su orgasmo.

Libera tu muñeca y el calor de su pecho en tu espalda, protector y reconfortante, provoca una fuerte contracción en tu interior. Tus piernas luchan por cerrarse y todas las fuerzas en tu cuerpo se evaporan... pero no importa, porque Enzo te sostiene.

Te cuida.

-Por favor, Enzo- decís luego de tomar una profunda respiración. Estirás tu brazo y tomás su cabello entre tus dedos, tirando fuerte para provocarlo, buscando desesperadamente que cumpla con lo que prometió. Muerde tu hombro para silenciar sus gemidos-. Quiero...

Te interrumpen sus dedos jugando con tu clítoris sensible y el gemido ronco que nace en tu garganta irritada. En cada una de sus profundas y expertas estocadas su miembro roza tu punto dulce y no estás segura de que la sobre estimulación sea el motivo que hace que tu capacidad del habla se esfume.

Volteás para poder verlo y bajo la supervisión de sus ojos te dejás ir. Gemís escandalosamente y te retorcés bajo su cuerpo, sufriendo el constante roce de tus pezones con el cuero de la camilla, rogando con un hilo de voz por más, más, más.

Terminás llorando y Enzo besa tus mejillas cubiertas de lágrimas mientras golpea tu interior de manera salvaje una, dos, tres veces. El palpitar de su miembro y su liberación salpicando tu interior de blanco, llenándote como prometió, prolonga tu orgasmo dolorosamente.

Quema de una manera deliciosa.

-Ya está, ya está- repite en tu oído luego de besar tu hombro, tu cuello y tu espalda-. Ya está, mi vida, ya terminamos.

Dejás escapar un suspiro.

-¿Lo hice bien?

Sentís su sonrisa cuando contesta:

-Lo hiciste muy bien- besa tu cabello mientras masajea tu espalda con movimientos circulares-. Respirá profundo... Eso, sí, muy bien... ¿Estás bien, bebé?

-Sí.

-La voy a sacar, ¿sabés?

Te quejás por la incómoda sensación de vacío y cuando su liberación escapa de tu entrada gemís. Es un gemido de placer, de sorpresa y de incomodidad, pero Enzo intenta concentrarse sólo en la última.

Toma rápidamente unas toallas de papel y se arroja sobre sus rodillas, limpiándote con cuidado, evitando tocar directamente tu centro sensible. Besa tu cadera y tus piernas temblorosas mientras limpia el desastre provocado por la unión de los fluidos de ambos.

Tu voz es un susurro cuando preguntás:

-No te pueden sacar la matrícula por esto, ¿no?

Suelta una carcajada hermosa y escandalosa y te mira sólo para perderse en tus brillantes ojos de párpados pesados. Espera que no sea muy evidente lo mucho que te quiere, la devoción y reverencia que siente por tu persona, lo orgulloso que está de vos.

-Sabías que sos hermosa, ¿no?- pregunta luego de ponerse de pie y besar tu mejilla. Busca la botella de agua olvidada junto a tu ropa y regresa rápidamente a tu lado-. Lo hiciste espectacular, princesa.

Tu mirada está fija en su miembro flácido y cuando lo rozás con tus dedos intenta no saltar por el susto que le provoca tu inesperada acción. Trazás lentamente el halo rojo que rodea su base.

-Es como un regalo- susurrás mientras intentás contener una risa nerviosa-. Este es el moño, ¿no?

Desliza una mano por tu estómago para hacerte cosquillas y cuando intentás huir te detiene con una mano en tu cintura. Tus piernas todavía tiemblan y te indica que te sientes en la camilla.

Se posiciona entre tus piernas.

-El mejor regalo- contesta con genuina sinceridad mientras te ofrece la botella de agua-. ¿Te gustó?

Cerrás los ojos mientras bebés.

-Muchísimo- admitís luego de reunir el valor-. Pensé que...

-¿Qué?

-Pensé que no iba a poder- arrugás la nariz-. Pensé que en cualquier momento iba a empezar a gritar rojo, rojo, rojo.

Frunce el ceño en señal de preocupación.

-¿Necesitabas hacerlo?

-No- negás con simpleza-. Tenía miedo de tener que hacerlo.

-No tenés que tener miedo- une su frente con la tuya-. Si en algún momento la necesitás, cuando sea, usás la palabra de seguridad y paramos. Sin esperar y sin preguntas, ¿está...?

-Sí, Enzo.

Rodeás su cuello con tus brazos y él captura tus labios en un lento beso que hace que tu corazón palpite con fuerza.

-¿Nos vestimos y vamos a casa?- propone luego de unos minutos en silencio.

-Sí... ¿Enzo?

-¿Qué pasa, princesa?

-Te quiero.

Repite te quiero contra tus labios. Un sinfín de veces.

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