#miryam brontë quotes

[johanncatesby]

Cuando era pequeña me contaron que los recién nacidos llegaban a las puertas de las casas de sus padres, traídos en el pico de una cigüeña, dentro de un pañuelo de tela blanco y suave. Me hablaban de la maternidad como si fuera un sueño, una alegoría de la propia vida. Me dijeron que un hijo era la persona que más se quería en el mundo, una persona que no se parecería a nadie más... Mi primer instinto maternal, llegó gracias a esas palabras, a manos de Papá Nöel. Era un muñeco de goma, de unos 46 centímetros, y aunque era muy rígido y estaba muy lejos de parecerse a un bebé real, para mí era lo mejor del mundo, porque era mi hijo. Le cuidaba como si fuera real, le daba de comer, le aseaba, le cambiaba de ropa, le llegaba al médico... Tan grande era mi instinto maternal cuando era niña, que incluso llegué a ponerme el despertador para dar de comer a mi pequeño, mi juguete favorito. Soñaba con ser mayor, casarme y tener muchos hijos... Darles de comer, llevarles de paseo, peinarles, enseñarles a hablar... Estaba segura de que desvelarme merecería la pena. Poco a poco me hice mayor, y toda esa idea de la maternidad, cambió. Nos hacemos mayores y perdemos la inocencia que teníamos de niños. Y si no lo hacemos, si la seguimos conservando, siempre habrá alguien que nos quite todas esas ilusiones, todos esos sueños, todas esas ideas. Las chicas de mi edad hablaban de lo que era en verdad ser madre. Pasarías por un dolor terrible, uno de los más grandes, acabarías agotada en una cama de hospital, probablemente perderías al chico que te dejó embarazada, las noches ya no serían iguales y tendrías que despertarte cada dos horas para darle de comer, te levantarías ojerosa al día siguiente, sin ganas de nada, y cada poco tiempo, tendrías que cambiarle a ese recién nacido los pañales... Y no acabaría en unos días, tampoco en pocos meses. Ese bebé iría creciendo y con ello todo a tu alrededor, se rompería. Ya no tendrías tiempo para amigos, ni tampoco para vacaciones, tu pareja pasaría a un segundo plano y podría acabarse hartando de ti, tendrías mucho más difícil encontrar trabajo, tu cuerpo cambiaría para siempre, tus pechos acabarían cediendo, y en caso de quedarte soltera, tendrías muy difícil volver a encontrar pareja. Pero ahora, recostada en la cama de la habitación de un hospital de Exeter, solo pienso en una cosa, y es en las ganas que tengo de vivir esa cita a ciegas en la que conoceré al único y verdadero amor de mi vida.

Miryam Brontë

[claudiarwood]

Me niego a pensar que Londres no echa de menos el sonido de los pasos de mi madre sobre sus calles

Miryam Brontë

[miryambronte]

Sofía sonríe con la mano cubriendo su boca cuando le dices que es tan guapo como ella, mientras que yo te miro emocionada. Me cambiaste la vida al asomarte a ver a mi hija y decir lo guapa que era. Se la cambias a ella cada día cuando la miras al corazón, sin que los rasgos  de su cara te impidan ver su ser.

Claudia Ravenwood

[irenebutler]

Alcanzó la tierra el día 1 de julio...

Johann sobre Halley

[thestoryoflevenbanner]

Un día soñé con que un hombre condecorado, llevaba a su hijo a buscar dragones. Le llevaba con Leven, que se había enamorado. Ahora tengo a ese niño en mis brazos y a Leven, enamorada... Ese sueño puede ser real, pero lo estoy viendo con mis propios ojos y no desde mi cielo.

Alice Carroll

[lilupotterw]

“La vida me ha dado la fortuna de participar en la unión en matrimonio de muchas personas que quiero y que son parte de mi vida. He sido invitada y espectadora y he recorrido el camino al altar como Dama de la novia en tres ocasiones. Pero esta es la primera vez que tengo el privilegio de firmar como testigo de la unión de dos personas extraordinarias que la vida puso en mi camino. Es la primera vez que mi firma sirve para dar testimonio, un testimonio del amor que Johann y Miryam se profesan, ese amor que los ha llevado a elegirse cada día para compartir cada momento de sus vidas, cada página que escriban juntos a partir de ahora y a las que se les sumará el pequeño Halley cuando decida que el mundo está listo para conocerle. Y es la certeza de saber todo eso, la emoción que siento por formar parte de uno de los días más importantes y felices de mi querido Johann y de la preciosa Miryam, lo que hace que mi mano tiemble al sostener la pluma que se me ha entregado para tal fin, un temblor que parece cesar cuando la punta de esta roza el papel para, con el rastro de tinta que va dejando con cada movimiento que hago, dejar constancia de que he tenido la dicha de presenciar un enlace que sé que nunca tendrá final porque sé que ni la muerte conseguiría terminar con su historia de amor, porque si se han encontrado en esta vida, lo que venga después solo sería un nuevo principio, un comienzo nuevo en cualquiera que sea el lugar al que vamos cuando nos hacemos eternos.”

-Lily sobre el momento en el que ha firmado como testigo en la boda de Johann y Miryam

[vera-lynch]

Sabía que ibas a hablarme de Halley, mi pequeño hijo, al que tanto quiero ya, antes de haberle visto la cara por primera vez. Es la única persona a la que he querido a ciegas...

Miryam

[eider-parker]

Me niego a pensar que Londres no echa de menos el sonido de los pasos de mi madre sobre sus calles

Miryam Brontë

[johanncatesby]

Siento el cariño con el que me peinas, el cariño con el que me cuidas... No me cabe ninguna duda de que serás un buen padre. El mejor padre del mundo.

Miryam Brontë

[johanncatesby]

Tu pregunta me hace reír, pero emocionada. Es cierto... Vas a estar enamorado de ese chico toda la vida, tanto como yo. Esta es sin duda alguna, la mejor cita a ciegas de toda mi vida. No he tenido que maquillarme, no he tenido que vestirme de gala, ni he tenido que ponerme tacones para acudir. Solo he tenido que recogerme el pelo en una coleta, llenar una pequeña bolsa deportiva con algo de ropa, ponerme un camisón de colorines, y unas zapatillas cómodas de estar por casa... Así es como conoceré al hombre de mi vida. Con la cara lavada, despeinada, sudorosa, un poco ojerosa a causa del cansancio, y en camisón. Espero que le guste tal cual soy, porque va a tenerme a su lado toda su vida.

Miryam Brontë

[johanncatesby]

Johann aprieta mi mano y yo aprieto la suya, sintiendo la cama y mi ropa cada vez más mojada. Siento que voy a desfallecer, que me voy a desmayar de un momento a otro, que ya no tengo fuerzas para nada más... Que me quedo sin aire porque ya no puedo respirar, mientras siento el agua de la vida saliendo de mí. Pero entonces le oigo llorar y abro los ojos. Todo da vueltas a mi alrededor, pero ahora ya nada importa. Ni el dolor, ni la asfixia... Ahora solo importa conocer el rostro de ese chico que me lleva robando el sueño nueve meses, y que no me deja dormir desde hace varias semanas. Ese chico de poco más de cuarenta centímetros que llora en las manos de una mujer que no conoce... Veo que le envuelven en una toalla y lloro, lloro mucho, tanto como hacía mucho tiempo que no lloraba, porque lloro por mil cosas a la vez. Escucho su llanto, y me doy cuenta de que es lo mejor que he escuchado nunca. La doctora le pone en mi pecho, y siento algo que es simplemente indescriptible, algo que jamás antes había sentido nunca, porque este pequeño cometa de carne y hueso que pasa hoy por mi vida, es lo mejor que me ha pasado nunca. Lloro poniendo mi mano libre sobre su espalda, bajo la de Johann para llevarle contra mí-. Ya estamos aquí, mi amor... -Le digo a mi hijo antes de mirar a Johann que llora como yo-. Qué guapo es... -Digo y vuelvo a mirar a ese bebé recién nacido que llora sobre mi pecho: mi hombre favorito.

Miryam Brontë

[johanncatesby]

Cierro los ojos llorando pero sonriendo a la vez, y pido que todo vaya bien, pero no se lo pido a Dios, sino a mi madre... A la abuela de mi hijo, que estará ahí para cuidar de que nada vaya mal.

Miryam Brontë

[johanncatesby]

Te agachas sobre mi vientre y dices unas palabras preciosas, unas palabras que hacen que las lágrimas rueden por mis mejillas. Tienes razón, nacer debe de dar mucho miedo. En el vientre de nuestras madres, nada nos da miedo... Pero la vida asusta mucho, a veces demasiado. Aún así, tenemos que aferrarnos a ella. Cuando te escucho hablarle así a Halley, pienso en mil cosas a la vez, pero sobre todo en una, en la misma que llevo pensando desde que me he puesto de parto, en ese ángel que nos está viendo desde el cielo. Trago saliva y te toco el pelo cuando me das ese beso en el vientre-. Eres tan bonito, Johann, que espero que Halley quiera ser como tú...

Miryam Brontë

[johanncatesby]

Tú no eres el chico del que me hablaban cuando era adolescente. Tú no eres de los que se van por ser padres, tú eres de los que se quedan.

Miryam Brontë

[johanncatesby]

Un dolor que iniciaba en mi espalda e irradiaba hacia delante, hasta llegar a la parte baja de mi abdomen... Hace casi ocho horas que me he puesto de parto, me he dado cuenta por lo dolorosas y seguidas que eran mis contracciones. Cada cinco minutos, el dolor era casi insoportable. Johann no estaba en casa, por lo que le llamé por teléfono para decírselo, y en cuanto vino a casa, nos abrazamos los dos. Creo que nos hemos abrazado tan fuerte, como nunca antes nos habíamos abrazado. Poco después, yo montaba en el coche de Johann con él, rumbo a Exeter, y a ese hospital privado en el que mi hijo pasará las primeras horas de su vida. Llevo aquí toda la tarde, y en todo momento he seguido las recomendaciones de los médicos. He andado por la estancia, me he dado un baño, he bebido, he cenado... Johann me ha dado varios masajes. Los médicos han comprobado que todo iba bien, usando un monitor fetal, pero solo para comprobar los latidos de mi hijo y que todo iba bien, pues su llegada al mundo va a ser totalmente natural, sin medicamentos ni nada que lo aleje de la realidad. Un parto llamado "Parto respetado o Parto humanizado", será la manera en la que Halley llegue al mundo, sin médicos que intervengan, salvo en los momentos necesarios, o en alguna urgencia que espero que no tenga lugar. La última vez que han entrado a mirarme, mi dilatación era aún leve como para que la llegada de Halley fuera inminente, por eso nos han dejado solos, aunque los médicos están al lado. La bolsa de líquido amniótico que ha abrigado durante tanto tiempo a mi pequeño cometa, se ha roto durante una de las contracciones, estando ya en el hospital, por lo que todo va correctamente, a pesar de que mi pequeño, solo tiene 36 + 5 semanas de embarazo, y aún no llega a las 37. Al principio he entrado en pánico, pero los médicos me han dicho que no hay ningún problema con eso. Sonriendo, aprieto la mano de Johann, a quien miro. Tengo el pelo algo desordenado ya, aunque aún tengo el coletero puesto.

Miryam Brontë

[johanncatesby]

Veo como cortas el cordón umbilical que me une con mi hijo, y cuando lo haces, siento una extraña sensación. Es como si me hubieran arrancado de las entrañas lo que más dentro tengo de mí. Lloro sintiéndome vacía, pero después sonrío porque nunca antes me había sentido más completa como me siento ahora. Estoy cansada, pero más llena de fuerza que nunca, y con una enorme sensación de felicidad y libertad, mezclada con otras muchas sensaciones. Miro al cielo a través de la ventana y trago saliva sonriendo, antes de mirarte-. Felicidades, papá. -Digo sonriendo antes de mirar de nuevo a Halley, mi pequeño Halley Catesby. Dicen que existen tres amores. El primer amor, el amor imposible y el amor de tu vida. Creo que mi primer amor eres tú, no sé si hubo alguno imposible, pero de lo que estoy completamente segura, es de que Halley Catesby, es el amor de mi vida

Miryam Brontë