#igual ni lo lean not worthy

[hcwlss]

     - welcome back, SCAREDY CAT.

i think I'm scared i have no time (he has no time) i scream out loud just to see if I'm alive i think I'm scared i don't know why (I don't know why) so leave the lights on i'll stay inside

[ acrofobia:  temor patológico a las alturas que se manifiesta frecuentemente con vértigo.]    

tw: mención de muerte

“ vamos, ******, dile adiós a mamá y papá.”  la voz de la mujer es dulce mientras agarra la mano pequeña del niño y la mueve de un lado al otro en el aire, muy por encima de su cabecita llena de cabellos lacios y oscuros como la noche. la pareja  de adultos devuelven el ademán desde la línea de abordar, maletas de mano bien pegadas al cuerpo, sonrisas llenas de tristeza en sus labios.

“ solo se irán unos días, bebé. ” agrega la mujer, ahora agachada ligeramente para estar a la altura del niño, abrazándolo por los hombros al ver que pequeñas lágrimas comenzaban a acumularse en sus ojitos, amenazando caer para juntarse con el montón de pecas que se explayan por todo el puente de su nariz. howl no entiende cuántos días son ‘unos días’ pero asiente a su abuela con una sonrisa chiquitita y voltea por última vez hacia sus padres en la línea. “cuando regresen, tendrás un hermanito. ” mamá y papá desaparecen en el túnel después de checar sus pasaportes y pases de abordar y esa... esa es la última vez que howl realmente los ve.

con vida.  

iban por la hora tres de vuelo cuando una de las turbinas comenzó a fallar. humo, fuego, gritos, turbulencia... al menos eso es lo que los rumores dicen, no están seguros, no existe ni un sobreviviente del vuelo 237 de kingford smith a incheon. fatalidad total, no hubo manera de salvar el vuelo. una fatalidad que dejó a familias devastadas, especialmente a un niño esperando el regreso de sus padres y a otro esperando conocerlos por primera vez.  

" vamos, dile adiós a mamá y papá. ” la voz de la mujer sigue siendo dulce, pero está glaseada con una tristeza pesada, la tristeza de una madre que perdió a su hija, la tristeza de una abuela que ganó un nieto y poco a poco perdió al otro. sus manos puestas sobre los hombros del niño, sollozos llenando el silencio del cementerio.  

howl entendió rápido que los accidentes suceden, pero si puede mantener los pies bien puestos en la tierra, quizá su hermanito no tenga que perder a alguien m��s.  si puede mantener los pies sobre la tierra, no tiene que traer tristeza devastadora a sus abuelos. si mantiene los pies bien puestos sobre la tierra, no morirá.  

aunque no presenció el accidente en primera persona, no fueron sus huesos los que se rompieron en el impacto, no fue su corazón el que falló a mil metros del suelo, igual desarrolló un miedo terrible a las alturas. la fobia llegó a tal punto que el niño no podía ver por la ventana de su cuarto sin sentir que se iba a desmayar, los puentes eran un martirio, las clases en los segundos pisos eran insoportables, todo porque pensaba que en cualquier segundo el piso iba a caerse, quebrarse de alguna manera, y su cuerpo caería directo al pavimento.  

con los años, la fobia fue disminuyendo un poco. cada año transcurrido, era un metro que howl podía soportar encima del suelo, pero el miedo es traicionero y nunca se puede quitar del todo.  

ha pasado una década y media desde la tragedia, pero howl todavía recuerda la esperanza en los ojos de su padre y la nostalgia en los ojos de su madre desde la línea de abordar, aún siente el calor de su labio por última vez en su mejilla y el abrazo tan fuerte que le dieron los dos al mismo tiempo, tan fuerte que parecía sabían lo que iba a suceder... quizá por eso no lo subieron al avión junto a ellos.