#eso fue antes de que todo se fuera a la ñoña
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@kwontaeil ha enviado 💙 para foto de su mejor recuerdo.
la última fiesta de navidad en el apartamento de darcy, no recordaba la última vez que celebraba una navidad acompañado. puede hablar con sinceridad al decir que tiene muy buen recuerdo de aquella noche navideña, incluso antes de la fiesta comprar los preparativos y acostumbrarse a las nuevas tradiciones como escuchar mistletoe de justin bieber en repetición .
#GRACIAS POR ENVIAR#eso fue antes de que todo se fuera a la ñoña#pero el gran filosofo canadiense justin bieber (según dana) dijo i will never say never i will fight! i will fight till forever!#‘ ⠀ 𝘼𝙁𝙏𝙀𝙍𝙂𝙇𝙊𝙒 ⠀ 、 ediciones.
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Miércoles 18 de octubre del 2023, 0:51 am
Querido Nico:
No sé cómo comenzar esta carta, pero hay algo que quiero recalcar. Siempre te llamé como uno de los chicos menos importantes de todos los que me han gustado.
Han pasado 10 años desde que te conocí, yo creo que no debes recordar ni mi nombre, y nunca leerás esta carta porque está en Tumblr y nunca fui algo para ti.
Recuerdo cuando entre a 1ero medio y yo era full fan de holasoygerman. Tu solías ser un chiquillo flacucho, pálido, bajo y con frenillos, recuerdo tu voz y tus miradas raras ajajajajaja. Pero lo que más recuerdo son tus dientes, me llamaba la atención. No sé, porque, solías usar tu cabello un tanto emo, tenías un bolso Nike color negro y el logo rojo, usabas vans negras y también solías usar lentes. Siempre te acercabas a hablarme y a decirme un "ño" cuando te pedía algo, yo sólo me reía. Eras molestoso conmigo, pero no de esos que te caen mal. Recuerdo que teníamos el mismo modelo de celular y me enseñaste a usarlo para que no se le fuera toda la batería, te gustaba que te lo prestará para jugar. Sabías mucho de tecnología. Recuerdo como una vez me dijiste que habías visto una carcasa de los Iron y yo pensaba que hablabas de Iron Man y tú me dijiste "¿Qué? Hablo de Iron Maiden, ¿Acaso no conoces a Iron Maiden?" Y yo te respondí que "no", sólo conocía a Guns N' Roses y a Bon Jovi.
En ese entonces estaba recién entrando al mundo del rock, tu te burlaste y me preguntaste por "Linkin Park" y yo tampoco los conocía y me dijiste: "¿Cómo no conoces a Chester Bennington? Unas de las mejores voces de nuestra generación" y yo te respondí que "No, porque siempre me crié con música muy mala". Aún así no me entendiste.
Recuerdo como solías robarme un gorro y te lo ponías cada vez que yo salía al recreo o mi poleron ajajjsjsjsjajaj. Yo no entendía porque hacías esas cosas, descargabas videos de holasoygerman en tu celular para que yo los viera.
Recuerdo que tenías hermanos y una mala relación con tu papá, no hablábamos mucho porque eras raro y yo también. Además presentía de que te podría gustar, pero a mí no me gustabas. Creo que te rechace en cierta ocasión.
Pero llegó 2do medio y ya no éramos compañeros de curso. Te había pegado la pubertad y me comenzaste a gustar, ya que mis gustos por los chicos habían cambiado y mi ideal eras tú.
Flacos, pálidos y altos. Por cierto, también te habías pegado un buen estirón. Te ponías poleras de tus bandas favoritas. Cambiaste tus lentes y tu forma de vestir tenía más personalidad, ya no te veías tan ñoño como antes.
Así que comencé a escribirte por facebook, pero que sucedió. Okay, en 1ro medio hablábamos, pero después del 2do semestre comenzaste hablar con una chica que siempre trate de hablar pero jamás me pescó, se hicieron full amigos y sentí envidia por eso. Yo quería ser tu amiga, pero ni para eso alcance y es que ella era como la pick me girl que a los chicos tanto les gustaban en esos años.
Siguiendo con lo de 2do medio, un día te escribí y te dije "Hola, tanto tiempo sin hablarnos" y tú me respondiste "Pero si nunca hablamos". Recuerdo ese chat y aún me duele, fue súper fuerte leer algo así. Ya había perdido por mil, pero me seguías gustando, estabas lindo, quería un pololo como tú, te veía en los recreos y sentía que eras el amor de mi vida (escribo de acuerdo a mis sentimientos de mi yo adolescente). Todos me decían que nos parecíamos, que como iba a ser posible de que no me funcionará. Me gustabas demasiado. Eres unas de las personas por las cuales tuve un cambio de look muy drástico, deje mis colores para usar ropa negra, comencé a escuchar rock, a vestir con camisetas de rock y camisas. Quería que me vieras. Pero muchas niñas andaban detrás de ti. En especial una rubia que hasta conversaba contigo y te abrazaba, dios me daba asco y rabia. En especial rabia porque un año antes te habría tenido si no hubiese Sido tan estúpida y ciega.
Me hice ñoña por ti, osea, antes ya lo era, pero lo habia dejado para encajar. Pero ahora yo quería que me vieras, no lo logré. Recuerdo la última vez que hablamos en buena y fue para la salida de un teatro a la cual tu no fuiste. Te pregunté por facebook y me dijiste que habías ido al dentista.
Yo sufría cuando no te veía, casi todas mis compañeras de curso sabían lo mucho que me gustabas. Pero yo era tan tímida como para decírtelo. Además no quería ser rechazada.
Recordé una vez que fuiste al taller de cocina con el amigo de una amiga y se pusieron hablar de que los habían hechado de la sala por no llevar una placa súper importante pero cara para su clase de electrónica. Que les pondrían un 2,0 si o si. Hablaste más con mi amiga que conmigo por esa ventana y de los celos le pegue con una mata de berros en la cabeza a mi amiga ajsjsnsnsn. Fueron varios pastelazos con ella. Una vez me dijo que había un niño súper lindo en el pasillo que me apurara en guardar las cosas y cuando salgo eras tú y casi se me va el aire y las piernas me temblaban.
Ahora tuve otro recuerdo y fue cuando estaba en 3ro medio mirando por la ventana y vi unas manos blancas, me saludaste y sentía que el mundo era perfecto. Creo que dijimos "como estai?" Y dsps salió la sole a hablarme y cago el momento mágico y romántico.
Recuerdo que al 2do semestre de ese año te cambiaste de liceo porque ya estabas repitiendo. No solías ser tan flojo, pero ahí ya fue demasiado. Después de eso ibas a veces al liceo a ver a tus amigos con unas niñas súper lindas acompañándote. Y recuerdo lo lindo que te quedaba ese uniforme, solías usar camisa y corbata, un tanto desordenada, pero te veías increíble.
Y pues, acabo de tener un recuerdo oscuro, cuando le respondí algo a la Carol por FB y tú te metiste en los comentarios a tirarme mierda junto con ella, me sentí pésimo.
Cuando te seguí por Instagram un par de veces y nunca me seguías de vuelta. Hasta que un día lo hiciste y me seguiste por una semana hasta tuve un like tuyo en una foto. Pero después me dejaste de seguir, literal lo intente contigo, pero no conseguía nada hasta que me cansé. Todas hablaban contigo y yo no. Tenías demasiada popularidad y eras conocido como el copo por ser tan pálido.
Y mierda, me gustabas mucho. Eras el minito emo que tanto quería. Me gustaba tu pelo, tu delgadez, como te vestias y hasta tu forma de caminar.
Aún te tengo en facebook, pero de qué sirve. Ya no te ves como alguien que me gusta, solía publicar ciertas canciones en esos años para que me dieras like y lo lograba.
¿Por qué escribo está carta?
Ayer ví Metal Lords y Kevin me recordó a tí
Era flacucho, blanco, usaba el pelo semi largo y anteojos. Me gustó muchísimo y no entendía por qué. Hasta que te recordé... Recordé que mis gustos no siempre fueron así. Alguien los había creado y ese alguien eras tú. Te valore tan poco durante estos años porque estaba furiosa de no haber logrado nada contigo.
Nicolás, eres importante. No fuiste mi primer amor, pero si el chico que definio mis gustos como persona. Después de ti me enamore de un moreno. Pero tú siempre serás recordado como el esteriotipo que cambio mi vida.
Si bien Kevin se parecía mucho a ti y a un chico con el cual tuve algo corto a comienzos de año.
Era increíble el darme cuenta de influenciable que fuiste en mi vida.
Sabado 28 de octubre del 2023 2:21am
Continuando está carta...
Fuiste el 2do amor más fuerte de mi vida, de verdad me imaginaba contigo frente al espejo. A mí yo del futuro que leerá esto, recuerdas como te parabas al frente del espejo de la pieza de la mamá con tus pitillos y zapatillas de lona y ese poleron ancho más la polera del liceo imaginándote como sería besarlo y abrazarlo porque él era más alto que tú cómo por 10 cm.
Y de verdad me quedo esa mierda tan en la cabeza que lo viví este año con un rockerito, pero siempre quise que fueras tú.
Volvería al pasado sólo para conquistarte como corresponde y vivir eso que tanto quería por la mierda, si sólo Dios sabe cuántas veces le pedí a la luna y a las estrellas porque me miraras y habláramos de cualquier mierda, tenerte conmigo un ratito y conocerte. No sabes cuántas cosas quería saber de ti. Es más, siento que está carta ni siquiera la escribe mi yo actual. Siento que es esa adolescente de 15-16 años que te miraba en los recreos escondida en la sala porque me sentía tan fea y pobre como para que me notarás.
Siempre recuerdo en como te tuve pero no te supe apreciar y creo que eso me va doler toda la vida.
Y es que ahora me pasó algo parecido, un chico que fue muy atento conmigo durante meses, no lo pesqué lo suficiente porque no me sentía bien y porque no me gustaba. Pero me sentí mal y lloré.
Sentía que está historia se repetía y cuando lo comencé a valorar él me mandó a la mierda porque encontró una chica que si lo quiso.
Y me trataba bien, me hablaba cuando estaba mal, me encontraba linda y me invitó dos veces a salir. Pero tenía miedo.
No sé porque escribo esto en tu carta, pero mierda a ti también te tuve y no supe aprovechar.
Si bien, eres uno de los errores más dolorosos de mi adolescencia. Fue duro, pero eres el chico pálido, de lentes, cabello largo y muy delgado que cambio todo en mi... Quizás me encapriche tanto contigo que no la voy a cortar hasta estar con uno así como solías ser antes.
Físicamente te encontraba muy perfecto.
Que loco sería si leyeras está carta.
Pero sé que no va suceder, eres la sombra que me acompaña cada vez que rechazó a alguien. Pero a ti ni a eso alcance.
Eres mi amorcito adolescente más doloroso y de verdad me hubiese encantado haber sido emo hardcore juntos.
Se que se leé estúpido, pero eran mis sueños de chiquilla adolescente enamorada y nunca te dedique muchos escritos porque todo mi amor por ti se lo expresaba a una amiga por wtspp cada vez que te veía.
En serio eras soñado.
Espero que estés bien.
Con besos imposibles que quedaron en el recuerdo...
—Winter❄️
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Sarazanmai Recaps capítulo 5
Capítulo 5: Quiero conectarme pero no tengo perdón
¿Recuerdan que en el capítulo anterior Kazuki declaró que odiaba a Haruka y todos estábamos en ascuas por saber qué quería decir con eso? Bueno, pues vayamos poniendo esto en la lista de escenas que no llevan a ningún lado porque la respuesta a esa pregunta no llega de la manera más directa que quisiéramos. Incluso podría decir que esa conversación nunca sucedió porque en este capítulo los personajes no dicen nada al respecto. Por otro lado, la escena sirve para cuestionarnos la relación entre Kazuki y Haruka, cosa que se discutirá ampliamente en este episodio.
Si Toi tiene una historia trágica de antihéroe de anime, podríamos decir que la vida de Kazuki es una telenovela. Kazuki siempre ha vivido en el seno de una familia muy unida, sin embargo cuando su abuelo paterno estaba agonizando se le ocurrió decir en su lecho de muerte que la madre de Kazuki era una mujer fácil, lo que quería decir que Kazuki era hijo de otra mujer y Haruka en realidad era su medio hermano. Supongo que el viejito estaba muy en desacuerdo con la situación familiar, pero ¿qué necesidad de usar tu último aliento para traumar a tu nieto?
“¡Tu madre es una zorra! ¡Una zorra! ¡Aaah!” “Abuelo, eso dices de todas las mujeres.” “Es que quiero llamar la atención.”
En consecuencia, Kazuki dejó de sentirse como parte de su familia y se fue alejando más y más de sus padres y su hermano, cosa que pareció afectar a Haruka. Además en este flashback vemos que el niño no solía utilizar una silla de ruedas lo que nos hace sospechar que algo pasó ahí y tiene que ver con Kazuki.
De vuelta al presente, Kazuki y Toi están haciendo los preparativos para secuestrar a una idol local porque eso de tomar malas decisiones es un trabajo de tiempo completo para nuestros niños-kappa. Toi le pregunta a Kazuki si no se siente incómodo por saber que él mato a alguien, el otro le responde que no y que de hecho le da envidia. Esto me hace sospechar que la escena del capítulo anterior nunca sucedió, sino Toi ya sabría lo que piensa Kazuki al respecto. Y sobre lo que dice éste último sobre que siente envidia, me parece más cercano a la realidad a comparación de cuando dijo que odiaba a Haruka porque hasta donde hemos visto, el chico no tiene resentimiento hacia su hermano, sino al hecho de que no pueda conectarse con él y la envidia que le da Toi se debe a que piensa que los hermanos Kuji tienen un verdadero lazo filial.
El plan se pone en marcha, lo primero que hace Toi es noquear al manager de Sara a pepinazos, lo deja amordazado en el baño y por alguna razón le quita los pantalones. Lo segundo es hacer que Sara abandone su camerino para que Kazuki tome su lugar. Toi logra hacer esto con éxito y Kazuki se prepara para travestirse de nuevo. Mientras lo hace, repasa la frase secreta que Haruka desea escuchar de Sara, la cual es: “de principio a fin, estamos conectados en un círculo”. El chico recuerda que su hermanito le dijo algo parecido tiempo atrás cuando Kazuki comenzó a vestir de manera distinta a como lo hacía su familia. En realidad Kazuki había hecho eso porque sentía que ya no pertenecía a la familia y no podía revelarlo, sin embargo, en ese momento Haruka le aseguró que pasara lo que pasara, ambos estarían conectados en un círculo. Algo debió haber pasado con la relación de ambos puesto que de vuelta al presente, Kazuki reitera que la única manera de conectarse con Haruka es haciéndose pasar por Sara.
Mientras tanto, Toi tiene problemas con Sara ya que aunque la intente encerrar, ella se convierte en kappa y se escabulle. Qué, ¿no sabían que Sara era un kappa? Pues se revela así, casual, sin que sea lo más importante del capítulo.
“¡Sarato!” (Así nada más)
Por otro lado, Enta lleva a Haruka a conocer a Sara y casi le da un ataque al ver que Kazuki está tomando su lugar. Al parecer Kazuki es un excelente actor puesto que todos los presentes creen que se trata de Sara. El engaño por poco y se lleva a cabo con éxito, esto porque en el momento más inoportuno aparecen el manager y la verdadera Sara. En la confusión, la peluca de Kazuki se cae y queda expuesto ante su hermano, sus padres y un montón de fans que de seguro exigieron un reembolso por tamaña decepción.
Nada le sale bien a Kazuki.
El chico sale corriendo junto con sus dos amigos, Toi le dice a Kazuki que tarde o temprano el secreto iba a salir a la luz y que no debería de hacerse la vís… la víctima porque el verdadero afectado por todo esto es Haruka. De hecho Toi está tan harto de la situación que le exige a Enta que haga entrar en razón a su amigo en vez seguir defendiéndolo como siempre.
Kazuki exclama que no quería herir a Haruka de nuevo (al parecer ya lo había hecho antes). Mientras los chicos estaban en la discusión Keppi los transforma en kappas porque acaba de aparecer un nuevo kappa zombie que se roba sachets (bolsas de olor) y hay que detenerlo.
Kazuki recuerda que haber visto que su hermano perdió un sachet unas horas antes, así que se esfuerza por vencer a este monstruo. Al hacer el Sarazanmai, se revela que en el pasado, Kazuki logró ponerse en contacto con su madre biológica, sin embargo no quizo irse con ella porque no deseaba dejar a su familia. En ese momento, Kazuki nota que el sachet de Haruka es el mismo de su madre, entonces pierde el control de la situación, aunque tal vez esto no es del todo su culpa.
¿Se acuerdan de Mabu y Reo? Resulta que su jefe les ha estado reclamando porque ha disminuido la cantidad de deseos en la ciudad. Después de un par de fracasos, Reo opina que deben de actuar directamente, sin embargo, Mabu propone escoger un deseo aún más fuerte que los anteriores. Resulta que Mabu tiene razón ya que al pelear con el Kappa Zombie el shirikodama resulta ser demasiado para Kazuki y termina expulsándolo, por lo que el Kappa Zombie sigue libre. Esto enfurece a Keppi quien en consecuencia se niega a volver a transformar a los chicos en humanos hasta que venzan al monstruo.
Por su parte, Kazuki se encuentra angustiado porque ahora se ha dado cuenta de que Haruka siempre ha sabido que no son hermanos y por fin se nos revela qué sucedió con ellos en el pasado. Aunque Kazuki había decidido quedarse con su familia, pensaba despedir a su madre biológica en la estación, sin embargo, cuando iba hacia allá Haruka lo interceptó. Por alguna razón, el niño parecía muy angustiado. Kazuki no quería que su hermano supiera lo que estaba pasando y le pidió que por favor se quedara, pero Haruka se negó, corrió tras su hermano y cruzó la avenida sin fijarse. Para su mala suerte, un vehículo alcanzó a golpearlo lo que provocó que ahora esté confinado a una silla de ruedas. Aunque todos le han dicho a Kazuki que él no tuvo la culpa del accidente, el chico no se puede perdonar a sí mismo. Es por eso que ha tomado tantas medidas extremas para hacer feliz a su hermano e incluso ha llegado a castigarse a sí mismo renunciando al equipo de futbol, sin embargo, siente que nada de eso ha sido suficiente. Al final, admite que todo lo que ha hecho por Haruka ha sido para huir del dolor que le provoca lo ocurrido, pero eso no lo hace más que un victimario tal como dijo Toi.
(Es una de las escenas más dramáticas de la serie y todos están convertidos en lindos kappas. El trabajo de los seiyuus aquí es formidable. Mientras tanto, a Keppi el asunto le importa mucho menos que un pepino.)
Escena post-créditos:
Reo y Mabu están más que satisfechos porque su plan ha dado resultados. Sin embargo, Mabu se retira porque tiene que ir al “mantenimiento”. Esto por alguna razón enfurece a Reo. ¿Qué será lo que pasa entre ellos?
Referencias ñoñas:
En este capítulo no hubo tantas referencias, volvieron a poner los carteles de Sara como Saki Asamiya de Sukeban Deka (benditos sean los animadores que son fans de esa serie). También tenemos otra referencia a Yuri-Kuma Arashi. Al inicio del capítulo vemos a Haruka bebé con un gorro de oso lo que es un tanto parecido a Milne, el hermano menor de Lulu Yurigasaki. De hecho, Haruka y Milne se asemejan en su manera tan terca de ir tras sus hermanos mayores sin importar qué, fuera de eso la relación entre Kazuki y Haruka es muy distinta a la de este otro par de hermanos. Les recomiendo que vean el capítulo 4 de Yuri Kuma Arashi el cual trata de estos personajes. Es un capítulo autoconclusivo por lo que no es necesario haber visto los primeros 3 episodios y en lo personal creo que es la mejor parte de esa serie.
Comentario:
Durante lo que llevamos de la serie hemos visto que Kazuki se aísla de todas las relaciones que ha tenido hasta el momento; renunció al equipo de futbol, le ha ocultado cosas a Enta y le ha mentido tanto a Haruka como a sus padres. De hecho, la única persona con la que parece tener una relación más o menos cercana es Toi, aunque sea únicamente por conveniencia. No cabe duda de que su forma de actuar ha sido altamente errática y egoísta por lo que era necesario saber el por qué de sus motivaciones. Al igual que con Enta y Toi, es posible entender mejor porqué Kazuki hace esas cosas pero su historia tampoco lo exime del mal que ha llegado a causar a los que lo rodean.
Vemos que el principal problema de Kazuki comienza en el momento en que ya no se siente conectado al resto de su familia. A su edad debió haber sido muy doloroso sentir que no estaba unido a esos lazos puesto que la familia es la primera conexión que uno tiene y para bien o para mal, en un momento dado llega a ser la más importante. Es natural que al separarse de su familia le siguiera el desconectarse de todos los demás. En consecuencia, tenemos a un joven que no siente el derecho a tener el apoyo de nadie y que decide ocuparse él mismo de sus propios problemas lo que explica por qué tiende a estar tan lleno de secretos.
La tragedia de Kazuki es que al encerrarse tanto en su mundo no puede ver la falacia en la que se ha metido. Está tan convencido de que no pertenece a ningún lado que no se da cuenta de que sus padres y su hermano lo aman a pesar de todo. El accidente de Haruka solamente empeora las cosas ya que al estar acostumbrado a llevar siempre toda la carga, Kazuki asume la responsabilidad de lo ocurrido y al final la culpa lo lleva a tomar medidas extremas que nunca hubiera tomado de tener a alguien con quien sincerarse.
Al final de cuentas, esta actitud no lleva a Kazuki a ningún lado, puesto que, como dice Toi, la verdad tarde o temprano sale a la luz. En este capítulo Kazuki quedó expuesto por completo y el resultado es que todo se le ha venido abajo: terminó hiriendo a la persona que deseaba proteger y ni siquiera fue capaz de conseguir un nuevo plato que podría acercarlo a su objetivo de ayudar a Haruka.
¿Y por qué falló el Sarazanmai? En la serie dicen que fue a causa de que el deseo era demasiado grande, pero no parece que se refirieran al deseo del Kappa Zombie. Creo que más que nada fue porque los chicos no pudieron trabajar en equipo. Toi se limita a juzgar a Kazuki sin conocer realmente sus motivos mientras que Enta lo defiende ciegamente y no es capaz de hacerlo entrar en razón. Sin embargo, ellos no son completamente culpables por haber actuado así ya que Kazuki tampoco ha querido hacerse entender, en consecuencia no puede salir él solo de sus propios problemas ni sus amigos pueden ayudarle. Será necesario un cambio de actitud para que las cosas comiencen a mejorar. Ahora que ha tocado fondo ¿decidirá subir o tratará de cavar para caer más bajo? Eso lo veremos en la continuación de este arco argumental.
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I don't want another girl
HOLAAA.
Es extraño hacer esto porque pensaba en decir la mayoría de estas cosas hasta que pudiéramos ver la de nuevo, pero, es que el día es especial y no sé ni por dónde empezar porque, que bonito es esto. ;;
Desde la madrugada (?) Recordé que hoy exactamente hace un año fue que nos vimos y me emocioné infinito. Lo había anotado en mi calendario y aparte Google me lanzó la notificación de las fotitos y pues ME EMOCIONÉ MÁS. No sé exactamente qué decir, pero supongo que podría empezar a contarte más abiertamente como fue que me sentí ese día de principio a fin.
Primero: estaba demasiado nerviosa, no entendía mucho porque, pero también me tardé un poco más arreglandome que lo normal, porque pues, no, no es por vanidosa, pero quería verme bien, cosa que no me había pasado antes (?) Y bueno, toda la mañana anduve feliz, pensando en muchas posibilidades, en que quizás te caía mal y me ibas a decir "aios" y así, sé que suena bobo, PERO TENÍA NERVIOS. Y entonces llegó la hora jendldldñ.
Te vas a reír mucho, pero aparte de pasarme de estación de metro, después llegué a sentarme en una de esas jardineras que están fuera y quería verme cool, like chica ruda:( JAJAJAJAJA, así con todo y lentes de sol y demás, Dios, ¿En serio estoy diciendo esto? Parece ser que sí, ya no hay marcha atrás. ¡Recuerdo los stickers de los muñequitos! Que cada mensaje que enviáramos iba acompañado de uno de esos y el "llegué". Me levanté casi corriendo, me tropecé un poquito y casi me voy de boca porque nací bien torpe, la verdad y pues, caminé hacía ti. Y TE JURO QUE SENTÍ BIEN BONITO CUANDO NOS ABRAZAMOS Y TRAT�� DE QUE NO SE NOTARA MI SONRISA BOBA.
Recuerdo la comida, el que ese día probé un nuevo sabor de calpis y me gustó tanto que cada que voy a la friki lo pido (y también porque me recuerda a ti). Que no nos terminamos la comida y nos la llevamos, igual esa travesía en el metro, en general, no sabía que decir y recuerdo haber comentado muchas cosas bobas, perdóname por ser así (?). También: caminar contigo por bellas artes fue bien bonito, es uno de mis lugares favoritos de la ciudad y eso jdkdl.
¿Recuerdas al par de amigos que iban en frente nuestro ya para casi bajar? Los que iban diciendo que no se le acercara tanto porque si sentía y pues, nomás nos íbamos riendo de ellos porque, si mal no recuerdo, la chica se llamaba igual que yo JAJAJAJA. (Suena en este momento Lost in Japan y me estoy muriendo un poquito)
Y ya después no podíamos subir en la otra línea y el Uber fue a nuestro auxilio, me estoy riendo porque Marzia estaba molestando un poquito JAJAJAJAJA, ah. Y que estaba cantando bajito en el carro y me quería lanzar, inclusive el señor me preguntó si era en serio y qué pena:( JAJAJAJA, ¿ves como me pones? (?).
Ya no llegamos a ver a los teloneros, es verdad, pero compramos nuestros súper impermeables y fuimos directamente a nuestros lugares, mi mamá llamando a las 20:30 preguntando si ya iba de salida y apenas nos habíamos sentado. La cervecita, la lluvia, que toda la generación emo estaba presente y tomé una fotito en donde nos vemos muy graciosas, quizás por eso no te la mandé, porque de verdad, me veo demasiado chistosa y ño. Entonces... EMPEZÓ y me emocioné mucho, muchísimo. Tenía tiempo de querer ver a the killers y hasta ese día no supe cuanto quería verte también a ti. Cuando me abrazaste no supe del todo cómo reaccionar, sólo correspondí muy fuertecito porque el corazón me latía a mil. Con somebody told me las dos brincando y con read my mind se me salieron un par de lágrimas y me apapachaste Y ME MORÍ DE AMOR UN SEGUNDO. Seguro pensaste que fue por recuerdos del pasado, pero, en realidad era porque me sentía muy feliz en mucho tiempo, porque de verdad estaba disfrutando del concierto y de tu compañía, de lo bonito que era estar contigo.
Si por mí hubiera sido, les habría pedido que siguieran tocando toda la noche para poder estar más tiempo a tu lado. Para saber cómo reaccionar, para aprovechar un poquito más de tiempo junto a ti, pero no pudo ser así y sin embargo, ha sido uno de los mejores días de mi vida. Lo juro.
Se suscitó la despedida, tenía ganas de abrazarte un poco más, pero el tiempo apremiaba y bueno, tuvimos que partir. Me divertí mucho esperando al Uber, conocí a una chica muy genial y aparte estaba preguntándome si había sido real e imaginando la posibilidad de volver a repetirlo ya fuese en un concierto o una visita esporádica nomás y me fui tan, tan, pero tan feliz. Al llegar a casa sólo estaba preocupada porque llegaras con bien y cuando me agradeciste por el día, estalle en un millón de pedacitos jdjdkdld.
Desde ese día, había noches en las que te soñaba, aunque claro, no lo decía porque pues #miedosa y #ñoña y poco a poco me daba cuenta que me interesabas más y más y que te extrañaba y bueno, es tema para decir más adelante porque me siento muy jfkdldld (?) Y siento que probablemente derrame miel por doquier.
Me hiciste mucha falta. Sé que lo he dicho mucho desde que volvimos a hablar, pero, de verdad fue así. Y ¿Sabes? Temía que con el primer encuentro se desarrollaran más (o pararan) los sentimientos que ya habían surgido hacia ti y el temor se confirmó, pero pasó a ser muchas mariposas en el estómago, emoción, felicidad y ganas de lanzarme del balcón porque no tenía idea de cómo decirlo, jeje.
Gracias por tanto, gracias porque hace un año me hiciste vibrar y a mí corazón latir consciente o inconscientemente. Gracias, de verdad. Sigo sin creer que ya pasó un año y estoy contando en serio los días para semana santa. ¡Falta tan poquito! AHHHHH, AYUDA.
PS. Me gustas mucho.
PS. 2 No sé cómo finalizar esto.
Ps. 3 Adjunto la fotito de lo que creí (o creímos) eran impermeables de tiburón uwu
Oh well, I don't mind, you don't mind, 'cause I don't shine if you don't shine. Before you jump, tell me what you find when you read my mind. 🖤
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Un cuento más. No lo odien, sí comenten. Gracias por leer 💙
Perdida
Por Linette Cozaya Otto
No sé cómo empezar esto. Pensé que los muertos no hablaban. Yo sí hablo. Y bueno, ¡quién iba a pensar en un muerto escribiendo! Pero heme aquí, lista para contar lo que pasó, aunque nadie en el mundo lo lea. Tengo, bueno, tenía doce años cuando empezó todo. Era una niña feliz: tenía muchas amigas en el cole, con las que salía al cine, a la plaza y a pijamadas. Era parte del equipo de volibol y del grupo de coro. Me gustaba la escuela: tenía mucho sol y plantas, risas y juegos. El uniforme era lindo: una falda verde que repetíamos tres veces a la semana, con medias azules, zapatos negros, una playera blanca súper casual y suéter azul oscuro. Los dos días restantes usábamos pants azul marino con la misma playera.
Solía ser bonita, o así me consideraba yo. Tenía pálida piel con lunares, facciones finas, cabello oscuro y abundante, ojos grandes, dientes también, que a veces amaba y a veces odiaba: podía ser una conejita bonita e interesante o una ñoña y fea. Me gustaba peinarme de mil formas distintas, a veces me hacía coletas, luego lo llevaba suelto; el peinado preferido era trenzado. Sí, solía ser bonita. Ahora soy una piltrafa. Mi piel se cae a pedazos, mi cabello está seco. Me desmorono y lo odio. Estoy sola en un sitio tan frío como me figuro que es la Antártida. Escucho y siento roedores y gusanos y no puedo hacer nada para sacármelos. Seguro se preguntan cómo he llegado aquí. Se lo preguntarán aun cuando termine de contar la historia.
Todo comenzó con mi tío. Sí, leyeron bien. Mi tío. Era un hombre alto, guapo, gracioso y divertido. No había persona que no lo adorara. Cuando llegaba a visitarnos, me lanzaba a sus brazos para que me diera vueltas hasta casi vomitar. Vivía fuera de la ciudad, sus visitas eran de varios días, en los que nos desvelábamos todos jugando dominó y póker. Lo consideraba mi mejor amigo, le contaba mis sueños y pesadillas, mis juegos favoritos y lo que quería ser de grande. Él era lindo conmigo, me escuchaba con atención. Siempre fue tan cariñoso que no supe en qué momento dejó de ser el cariño de un tío. ¿Y cuál es el cariño de un tío? No lo sé, no sé ni entiendo nada ya.
Lo corrieron de su trabajo, cuando yo tenía, como les platicaba, doce. Vino a la ciudad y mamá le dijo que se hospedara en casa el tiempo que necesitara. Estábamos todos muy felices, imagínense, tener a un mejor amigo como roomie, nada más mágico que eso. ¿Verdad? Pues no. La primera vez que sentí que algo no andaba bien fue extraña y fugaz. Me alistaba para ir al colegio, era día de falda. Cogí una rebanada de pan y me paré al lado de mi tío, que estaba sentado a la mesa bebiendo café y mirando cosas en el móvil. O eso pensé yo. Me miraba a mí. E hizo más que mirar: puso la mano en mi pierna y la subió hasta rozar mi ropa interior. No dejó de sonreír mientras me deseaba un buen día en la escuela. Estaba congelada, confundida. ¿Por qué sonreía de esa forma si sabía que eso no estaba bien? ¿Papá no veía lo que estaba pasando? Y si lo veía, ¿no me iría peor a mí? Mamá gritó desde la puerta que era hora de irnos y salí volando como corredor que escucha el disparo. No miré atrás e intenté no pensar más en lo que había sucedido. Ese día no comí. No estaba segura de lo que había pasado, si había sido bueno o malo. Si yo había sido buena o mala. No llegué a ninguna conclusión.
Llegar a casa iba a ser difícil: quería que mamá o papá estuvieran presentes. Sabía que las probabilidades de que eso pasara eran pocas. Me quedé charlando un rato más con mis amigas después del entrenamiento, quizá si tardaba, llegarían antes yo a casa. Y no. Sonó mi teléfono. Que si ya había salido de clase, mi tío podía darme un aventón. Había ido a una entrevista cerca del cole y el acomodo de tiempos no podía haber sido más perfecto. Según él. Descubrí que estaba nerviosa, así que intenté calmarme pensando que había sido un malentendido. Él estaba como si nada, y así nos fuimos todo el rato: como antes, como si lo de en la mañana jamás hubiese pasado. En casa también estuvo normal, pasado un rato, me tranquilicé y fue como cualquier otro día: vimos pelis, comimos galletas y luego me fui a dormir.
Todo anduvo normal después de ese día. Me convencí de que había sido un error y que no volvería a pasar. No lo hablé con nadie, ni siquiera con él. Lo “normal” se fue al caño una semana después, cuando tocó mi espalda mientras leía en la sala. Se erizó mi piel y levanté la mirada bruscamente, para encontrarme con que se había puesto en cuclillas frente a mí, de manera que sus ojos quedaban al nivel de los míos. Preguntó si había besado a algún chico ya, me sonrojé y negué. ¿Cómo se atrevía a preguntarme esas cosas? Dijo que ya era edad para que habláramos de chicos y de las cosas que hacen. Quería levantarme y esconderme en mi habitación. Se rio echando la cabeza hacia atrás, se levantó y me dejó ahí. Como siempre, sin entender nada.
Pregunté a mis amigas, al otro día, si habían besado chicos ya. Algunas sí, otras no. Dijeron que no era la gran cosa y dejamos el tema de chicos a un lado. Esa tarde estuve muy distraída. Ahora que puedo analizarlo, me doy cuenta que fallé en notar cómo me miraba mi tío, cómo me seguía por la casa. Entró a mi habitación y se acostó a mi lado. No pude concentrarme más en el libro que tenía que terminar para el siguiente día. Tocó mi pierna, y como aquella mañana, intentó subir la mano. Lo detuve y pedí que se marchara. Sonrió y dijo que era sólo un juego, que me enseñaría cómo besar chicos para que no hiciera el ridículo. No quería y aun así me besó. Me tocó e hizo que lo tocara. Se fue después de un rato, recordándome que si decía una sola palabra, me iría terrible: papá sentiría asco de mí, mamá estaría tan decepcionada. No abrí la boca. Lloré en silencio hasta que me quedé dormida.
La siguiente tarde pasó por mí. Otra entrevista cerca. Ya no le creía. Me hizo cosas horribles. Estaba adolorida y triste. Me daba asco mi propia piel, y por más que apretara mis uñas contra ella, no podía arrancármela. Jamás había tardado tanto en un baño, no quería cerrar el grifo, no dejaba de estar sucia. Y era todo mi culpa, por ponerme falda para el cole, dijo mi tío. Yo lo había provocado con todas las sonrisas, por treparme en él y pedir que me cargara. El tiempo ya no pasaba. Dejé de entrenar. La comida ya no me importaba. Mi tío pasaba por mí justo después de clases y me hacía lo que quería. ¿Qué pensaría papá de todo esto? Seguro me desheredaba. Mi tío decía que me amaba, que era lo más importante en su vida y que entonces no podía dejarlo nunca. ¿Y qué pasaba si lo dejaba? Tenía miedo. Mamá y papá me odiarían por hacer tan infeliz al tío, y no quería que me odiaran.
Un día en clase decidí que ya no aceptaría más. Llevaba noches pensando que no quería seguir con esto. Pensé en lo mucho que me odiarían papá y mamá, pero no podía con el asco de mirarme al espejo antes de ir a dormir. Temblaban mis manos cuando mi tío pasó por mí. Le pedí en el carro que no me tocara más. Una bofetada fue la respuesta. ¿Cómo se me ocurría semejante tontería? ¿No sabía cómo me iría si mis padres se enteraban? La amenaza era clara: les diría en el segundo que yo no quisiera más estar con él. El camino a casa era sinuoso: justo después del último semáforo, pasábamos al lado de barrancas con frondosos árboles. Llegamos al último cruce, estaba en rojo. Bajé del auto y corrí.
Corrí como jamás lo había hecho. Me dolían las piernas y pensé que me explotarían del esfuerzo. No veía bien, las lágrimas nublaban el camino. Tropecé y caí. Sentí que fueron horas. Golpeándome aquí y allá, la rodilla, el antebrazo. Luego, el golpe mortal en la cabeza. Seguí rodando abajo, ya sin aire en los pulmones, sin pulso en la muñeca, ni señales en el cerebro. Y quedé escondida entre la naturaleza, disfrazada por el lodo y la sangre, la tierra y las lágrimas. No sé si mamá y papá me buscaron. No sé si alguna vez se enteraron. Los extraño y quiero volver a casa. Llegamos al principio: yo escribiendo esta historia para ustedes. ¿Aprendieron algo? Y si yo lo hice, ¿me sirve de algo? No hay nada ya que pueda hacer. Gracias por leerme. No sé tampoco cómo terminar.
xx linette
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Aclaración del autor:
El orden de romances no será cronológico por entrada, sino por cómo decida contarlo.
En mi ocio de madrugada (que es cuando llega la añoranza y melancolía), recordé a Fernando; quien a menudo veo su perfil de Facebook, pero fue hasta que vi una foto de él con su actual y desde entonces pareja, que recordé lo que llegué a sentir por él.
Estas anotaciones son con fines personales, por si en algún momento mi memoria falla aún más o que quede como simple vestigio que quizá nadie más lea. Considero que en su momento, lo que hice no fue lo correcto o mejor que pude hacer, pero no me arrepiento de nada que he hecho hasta ahora y las personas con las que he salido, al contrario, considero fueron buenas experiencias y al no haberlas hecho cuando tuve la oportunidad, tendría más arrepentimientos (de los que ya tengo).
Como hoy, ciertos días me llegan flashbacks de situaciones de la nada, así que aquí recopilaré un poco.
I: Fernando
Sin esforzarme mucho, lo primero que recuerdo de él, es que nos pidió poner las bancas en círculo dentro el aula, con motivo de presentarnos. Sí, él fue mi profesor de la universidad. Nos llevábamos unos 4 o 5 años. En ese entonces, yo tenía una relación (en ese momento no tan “mala”) con O. Por lo que aún recuerdo que en mi presentación mencioné entre mis actividades favoritas estaba el pasar tiempo con O. A lo que todos en el salón hicieron mofas, incluso Fernando. (Después siempre mencionaba esta situación y se burlaba de mí).
Cuando lo conocí no sentí particular enamoramiento. Quizá una simple atracción (que suele ocurrirme a menudo), pero por mi cabeza no pasó más.
En esa época había sido elegida como jefa de grupo, situación absurda considerando mi personalidad introvertida. Pero esa razón fue la detonante por la que Fernando me dio su correo para mandarme información de la clase, archivos, etc. Siempre, incluso durante nuestro <romance> me dirigí a él como “usted”, cosa que ahora me da <cringe>. Continuando, recuerdo perfectamente como en los correos me daba instrucciones y yo las escribía en un grupo de Facebook que teníamos del salón de clases.
En algún punto, terminé agregándolo a Facebook gracias al susodicho grupo. No logro recordar el momento exacto, pero comenzaba a gustarme (sí, yo aún en mi relación), y mágicamente, comenzamos a hablar más por Facebook... a mí me emocionaba, siendo que a las demás mujeres de mi salón también les “atraía” Fernando. Me comencé a sentir especial sobre cómo me trataba e hicimos una relación de amistad, más que de maestro-alumno.
Un día, cuando la plática se alargó, me dijo que le gustaba.
¿Yo?, me parecía increíble y aún me asombraba, había pasado la adolescencia siendo prácticamente un ogro para la atención masculina, y ahora, en la universidad, realmente me sentía “atractiva”, parecía un sueño.
Ese momento lo recuerdo tan bien porque me mando un gif* /puesto al final porque no sé ponerlo entre el texto.
¿Y yo?
Le dije que también me gustaba.
Digo, me dejé ir como gorda en tobogán.
En ese momento me empecé a alejar de O. Digo, nuestra relación era forzada para mí, tormentosa y ahora con infidelidad, supongo que al fin puedo verlo así. Porque en ese momento me sentí libre de pecado. Quizá por cómo era la relación misma.
En fin, la primera cita que tuve con Fernando fue a un café que estaba en los portales de la ciudad, era pequeño, yo había ido ahí antes con mis amigos (Melissa y su hermana, o creo que Ángel), entonces lo lleve ahí. Cabe destacar que él no era oriundo de mi ciudad, por lo que siempre me pedía recomendaciones y que yo eligiera dónde ir. Ese día no recuerdo para nada la conversación. Pero puedo recordar que le ponía una servilleta a la botella de cerveza. Me gustaba verlo sonreír y que me llamara “Silvia” para molestarme.
No creo que tuviera mucho tema de conversación, pero aún así creo que simplemente disfrutábamos nuestra compañía.
Me emocionaba verlo, y más en clase. Esperaba con ansias poder encontrarme con él.
Realmente no recuerdo cómo sucedieron las cosas, pero la segunda cita yo me salí de la Universidad una hora antes para esperarlo en un parque que quedaba casi enfrente de la misma, a él le tocaba clase con un salón a lado del mío, por lo que yo solita le dije que me iría a esperarlo desde antes para que pudiéramos vernos. Me dijo que estaba bien, porque sería “raro” si yo me iba con él en su coche desde la Universidad y que no sería correcto si nos veían.
Bajo esa lógica me salí lo más pronto posible y en este enamoramiento me la pasaba de pleito con O, hasta recuerdo que ese día me siguió hasta la puerta de la universidad y yo le dije que tenía que irme, hablaríamos/pelearíamos después. Y recuerdo su cara de frustración.
Lo peor de todo es que NO sentía culpa. Realmente me emocionaba más salir y tener algo que Fernando que lo demás.
Mientras esperaba a Fernando el tiempo transcurría y no lo veía por ningún lado, (y no le llegaban los mensajes), fue después de un largo rato que lo vi a lo lejos en su auto y corrí al encuentro. Me dijo que había dado varias vueltas, pero no me había visto. Yo solo lo miré divertida y realmente sentí ternura cuando vi que traía un tupper entre sus piernas con su “lunch”. Supongo que esos tiempos e incluso ahora no valoro y contemplo el esfuerzo que hacen las personas con responsabilidades y aún velan por mí. Y así como Fernando, siempre espero que estén dispuestos y con tiempo para estar conmigo.
Al final, nuestra “cita” era que él quería elegir una camisa. Y me llevó con él a ello. Al final lo ayudé a elegir una. ~No sé qué tiene Fernando, pero es un toque realmente encantador.~
Al día siguiente recuerdo que le decía piropos de esa camisa, y las demás mujeres confirmaban que se veía increíble. O que estaba muy linda la camisa.
Ese mismo día Fernando me preguntó si los demás sabían algo de lo nuestro o que yo les había dicho. Yo le aseguré que no, que realmente la camisa era bonita. Solo eso. (Y era verdad).
Recuerdo que yo le reclamaba a Fernando por hablar con mis demás compañeras, pero él me decía que era su deber ayudar si tenían dudas (era maestro de After Effects). Todo esto porque una compañera un día alegó que platicaba con él, muy presumida. Y yo sentí celos de la forma que expresó su “amistosa” relación.
Tiempo después, terminé con O. Y yo seguía mis coqueteos con Fernando, incluso un día O estaba enfermo y llegaron sus papás, a mí ni me había importado, porque estaba esperando a Fernando para darle una lechita con empaque de hora de aventura. Recuerdo cómo sonreía, realmente esa sonrisa me recorría el corazón, me encantaba solo con mirarlo.
Un día, de los muchos, me fui a tomar con mis amigos. Recuerdo que Fernando me preguntó por vernos y yo le dije que no. Desde ese día sentí que se enojó un poco.
Pero incluso en las clases continuábamos mirándonos, atrayéndonos. Yo sentía ¿burla? cuando incluso Fernando ayudaba a O y era amable con él, porque pensaba: “lo engañábamos en su cara” “muy buen maestro, pero la pasamos bien, ¿no?”
Un día más llegó alguien.
Él me dijo que una amiga se quedaría en su casa (vivía con su hermana), yo dije que ok. Esa semana se distanció totalmente, no me escribía, no me buscaba. Hasta que cuando tocó clase, llegó con ella. Todos decían que era muy bonita, sí, era delgada.
Ese día teníamos que grabarnos para luego editar esos videos, por lo que formamos equipos y el mío no tenía cámara, por lo que Fernando me dijo que me prestaría su cámara. Para ese momento yo estaba celosa e indignada, así que le respondía cortante y grosera. Pero aún así recuerdo que me dijo que confiaba en mí para que cuidara sus cosas.
Cuando fuimos a grabar traté de actuar con desinterés e hice todas las actividades. Fernando me miraba de reojo, pero siguió con la mujer que había llevado, reían y sonreían juntos. Realmente me sentía enojada. Incluso más porque yo había terminado la relación que tenía ¿para qué? ¿Para esto?
Regresando al salón, recuerdo que le respondí grosero en algo, pero aún así él actuó normal. Saliendo, con mis amigos íbamos a ir a comer gorditas, una actividad que hacíamos a menudo en grupito. Caminando a nuestro destino vimos a Fernando y esa mujer de nuevo juntos. Uno de mis compañeros dijo que era muy bonita y que tenía suerte. Realmente en ese momento me sentí aún peor.
Al pasar los días me volvió escribir y se disculpó. Pero para ese momento yo había regresado a mi relación y comencé a responderle menos. Ya sabía a lo que iba y esa mujer obviamente era su ex, probablemente ya habían regresado y él no me lo había dicho.
No voy a mentir, me puse triste y desquité seguramente el cómo me sentía.
Es cuando pienso ¿quién fue el verdadero monstruo en la relación con O?, si de poner a competir se trata.
Después de un tiempo, volvimos a hablar y acordamos otra salida.
La cita era en el cine, veríamos una película de James Bond. En ese momento yo tenía clases por la tarde, y yo en serio era muy ñoña y me preocupaban las faltas; ya que una sola falta podría significar que me quedaría en un 9 o peor, un 8. Y ¿no exentar la materia? No es algo que ningún hombre valía. Por lo que, si duraba más la película, me saldría corriendo.
Lo esperé con mi hermana y su novio, así que los saludó cuando llegó. Yo me sentí contenta, porque mi hermana más tarde me diría que era guapo.
Al inicio, recuerdo que dijo que me podría besar sin abrir la boca o alguna analogía que no entendí para nada y lo único que hice fue besarlo. Nos besamos y me sentí volada. Había olvidado todo el contexto, lo que había pasado y podría pasar. Me sentí feliz como nunca y vi la película con él. O bueno, casi toda, porque mi profecía se cumplió y tuve que salirme corriendo. Él me miró con burla, supongo que era algo decepcionante para él que yo fuera una estudiante.
Después de eso, las cosas no mejoraron, al contrario. Dejó de dar clases en mi universidad y solo iba de vez en cuando, ya no platicábamos tanto. Las cosas se disolvieron y yo le dediqué varios escritos de desamor. Siempre he sido así de cínica, víctima de situaciones, pero que niega su realidad. O bueno, que está siendo infiel.
Finalmente él abiertamente regresó a su relación y yo hice lo mismo. La última vez que nos vimos es cuando me pidió que le llevara una usb. Yo realmente, REALMENTE creí que era para vernos y tener otra cita, me arreglé e hice todo para verme bien. Pero cuando llegué estaba con su prima y literalmente solo le di la usb y se fue. Me quedé en blanco. Decepcionada y con ganas de llorar. Lo único brillante que mi mente dijo, fue que tomara un camión y fuera a la casa de O. Necesitaba amor y saber que no era una tonta, que alguien me quería.
Después de ese día fueron mínimas las veces que volvimos a hablar, solo me preguntaba por lugares y una vez fue por uno de repostería (que su novia hacía pasteles).
La última vez que me habló fue hace un año (2020), literal había peleado con su novia y según él estaban separados. Yo igual estaba soltera, por lo que le pasé mi número y le dije que si volvía a mi ciudad me hablara. Me respondió que seguro estaba ocupada con trabajo y ya no le dije nada. Desde entonces todo se acabó.
Recuerdo también que nos seguimos en Instagram en algún punto, pero después de un tiempo me dejó de seguir y yo lo hice también.
Fernando siempre será alguien mágico, que si vuelve, seguramente querré ver su sonrisa otra vez.
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Pretty Market: 1a edición
Soy fan de las chicas mágicas. No hay manera de negarlo. ¡Me encantan! Entre más rosas y más ridículas sus historias románticas, más me emociona saber de ellas. Me gustan ñoñas, me gustan dramáticas, me gustan alegren y me gustan tristes. Me gustan tanto que, bueno, ¡escribo sobre ellas! Por eso, cuando un día en que no recuerdo qué estaba me encontré un anuncio en Facebook, brinqué de la emoción: se estaba preparando un evento dedicados a las chicas mágicas en la ciudad en donde vivo. ¡Y estaban buscando expositores! °˖✧◝(⁰▿⁰)◜✧˖° De inmediato envié mi solicitud y me senté a esperar respuesta :) Al cabo de unos días supe que no quedé seleccionada ( *´д`*) No obstante, algunas de mis amigas (como ruzoby.monster y Erickiwi) y artistas favoritas (dígase The Secret Garden y Mimiau) sí quedaron dentro de la lista de expositores. Aunque yo iba a ir de todas maneras, con esa nueva noticia estuve al pendiente a que se revelara la fecha de inicio de preventas. Confieso que tan entusiasmada estaba que, apenas vi el anuncio, corrí a comprar mi boleto:
Fui la número 002, hahaha. ¿Así o más emocionada?
Con mi boleto bien guardado, esperé a que la fecha se acercara, haciendo planes con mis amistades para ir a pasar el día en la galería donde se llevaría a cabo el evento, organizando mis monedas para poder comprar recuerditos y gritándole a los cuatro vientos que fueran a ver el arte que estaría a la venta y el que se expondría.
Hasta ahí, todo iba normal. El evento se llevaría a cabo el domingo 18 de febrero, y un día antes yo me fui a pasear con amigas. Regresé bien tarde a mi casa y me desplomé en mi cama, contenta de que sólo faltaban unas horas para llenarme de chicas mágicas.
No les miento, lectores bellos: a las 6 de la mañana del domingo desperté de un sueño donde un francotirador me quería matar. De no haber tenido ese sueño y haberme despertado abruptamente para esquivar una bala, no hubiera visto el mensaje que Nori Pinku (una de las organizadoras del mercado) me envió: se había desocupado un espacio para dar una conferencia y me invitaban a que yo fuera a hablar de mi libro. En menos de una hora había respondido, dado un baño, reacomodado mi agenda, desayunado, buscado mis libros y recibido la confirmación de Nori. Apenas si me di tiempo de publicar al respecto en mis redes sociales y salí corriendo de mi casa para cortarme el cabello (estoy loca y sentí que era un buen momento para cambiar de look) e imprimir calcomanías de los personajes de Legendme.
Con una melena menos enredada y cuatro tabloides adhesivos, volví a mi casa a comer, arreglarme y pedir ayuda a mi familia para recortar las calcomanías.
Para el mediodía, ya estaba en Barrio – Galería & Café, la sede, saludando a mis conocidos y fangirleando ante las cosas tan bonitas que llevaban los expositores. Había bocinas sonando con jpop y las versiones -tanto en latino como en japonés- de los openings de las series más icónicas del género maho shoujo, cosplayers, banderínes en tonos pastel y mucha gente. Me reporté con Nori y fui a ver la exposición de ilustraciones que se había montado (no me animé a tomar muchas fotos, porque ni siquiera sabía si estaba permitido o no. La única que tomé fue esta, porque saben que AMO Tokyo Mew Mew):
[Btw: anímense a conocer las galerías de NoDeadly, que no se arrepentirán. Yo lo hice apenas ayer y ya me declaré su fan ( ღ’ᴗ’ღ )]
Mi conferencia fue mucho más diferente a todas las que he tenido desde la publicación de Toy-Box, porque en esta ocasión me tocó darla en una mesa cuadrada, conmigo en uno de los extremos y el público sentado en torno. ¡Me sorprendió mucho lo concurrida que estuvo! Yo apenas si alcancé a publicar sobre mi participación en twitter y Facebook, pero Nori estuvo invitando a los asistentes por medio del sistema de sonido y eso bastó para atraer a la gente.
Aunque inicié hablando sobre Legendme, su trama y personajes, así como las fuentes de inspiración detrás de mi obra, en algún momento terminamos hablando sobre cómo es ser un escritor independiente y cuáles son los beneficios de la autopublicación y cuáles son los puntos en contra. Resultó que la gran mayoría de los asistentes a la conferencia eran chicos con ansías de publicar sus propias historias de fantasía. Hablamos de esas historias suyas, de otras historias de chicas mágicas mexicanas (como Untold) y quedamos de vernos en la convención de cómics y demás eventos venideros. Espero de corazón haber podido solucionar sus dudas ; w ; o al menos haberles resultado de suficiente confianza como para que vuelvan a buscarme.
¡Ah! Y mi prima Enid alcanzó a llegar, con todo y mi tía, a la conferencia. Sacó varias fotos (que me compartió para este blog) y las se quedaron a un taller sobre Sakura Card Captor que siguió apenas concluimos mi sesión.
Una vez afuera, Nori me ofreció una mesa para vender mis libros. ¡Me causó un montón de ilusión! Después de todas las ganas que había traído de ser expositora y de cómo había preferido no pensar más al respecto, terminé con un espacio para mí misma. Mientras yo atendía y hablaba con los que mostraban interés en mis libros, comprobé que tenía una posición privilegiada, de cara al patio donde se realizarían bailes y el concurso de cosplay.
Después de un día muy atareado y demasiado loco, me compré una limonada con fresa para platicar con otra de mis primas que fue a verme. Y fue con ella con quien me di cinco minutos para repasar más tranquilamente la aventura: tuve varias ventas, muchas personas nuevas siguiendo mi fanpage y demás cuentas, todavía más promesas de gente que quedó de irme a buscar próximamente en el artist alley de la 52 Convención de Juegos de Mesa y Cómics (es del 2 al 4 de marzo, chavos, para que vayan a decir “hola” n_n).
Puede que lo único que no me haya gustado es que el clima de Monterrey, siempre haciendo lo que quiere, estuvo de terco, haciendo acto de presencia con mucho airecito. No me gustó porque eso estuvo volando las cosas que había en la mesa y uno de mis libros terminó maltratado ☹ Fuera de eso, espero con ansías a que haya una segunda edición del Pretty Market 😊 Se les desea lo mejor a sus organizadoras, que le echaron todas las ganas del mundo y siempre estuvieron atentas y con una sonrisa para atender las necesidades que fueran surgiendo. Por siempre les daré las gracias por haberme invitado. Por fis, hadas, que haya más de eventos así~
Antes de irme, una última foto de las organizadoras con los participantes del concurso de cosplay :)
Se estaban tomando fotos bien chidas ; w ; Lástima que no alcancé a tomar las de poses de Jojo... En fin. ∧_∧ (。・w・。)つ━☆・*。 ⊂ ノ ・゜+. しーJ °。+ *´¨) .· ´¸.·*´¨) ¸.·*¨) (¸.·´ (¸.·’* *Nora fuera
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thedreamsoficarus:
Le gustaba demasiado cuando Tony le sonreír, nunca tendría suficiente de esas sonrisas, sabía que era un privilegiado por poder verlas, porque en público no sonreír de esa forma. Se había vuelto adicto a muchas cosas de las que él le ofrecía, sí, pero algunas eran demasiado ñoñas como para decirlas en voz alta, y a veces le hacían pensar que quizá sus sentimientos hacia él estuvieran cambiando.
Ladeó la cabeza con gesto pensativo, no era exactamente lo que fantaseaba, no. -No, cuando fantaseo se parece bastante a la realidad, no me gustas tan sumiso, te prefiero un poco rebelde.- contestó, lo cierto era que no quería nada distinto a lo que ya tenía, salvo que Tony se abriera más a él sentimentalmente, pero ese era un sueño imposible y que no implicaba necesariamente una relación sexual entre ambos. Suspiró aliviado cuando finalmente empezó a masturbarle, aunque fuera condenadamente lento, había necesitado aquello. Le dio una pequeña tregua antes de rozar de nuevo su próstata, rodeándole con su brazo libre por temor a que las piernas le fallaran. -Lo sé, tengo que darme prisa.- murmuró, empezando a presionar con un tercer dedo.
Arqueó suavemente las cejas ante esa revelación, sonriendo de lado. — Vaya, tomo nota de eso. — susurra, aunque de normal Tony era bastante rebelde incluso en el sexo, no llevaba muy bien las órdenes y acababa siendo él quien se quejaba y exigía, sobre todo cuando Steve iba tortuosamente lento, pero en esta vez estaba haciendo un enorme ejercicio de contención, eso fue hasta que el otro susurró aquello y no pudo evitar gruñir aunque entre medias se le escapó otro gemido, agradecido que le sujetara de esa forma porque probablemente habría acabado en el suelo de manera vergonzosa.
— Si. Joder, necesito que me folles. — replica porque había estado demasiado tiempo intentando no decirlo en voz alta, aún y a pesar de era consciente de que Steve sabía que lo pensaba, porque no era nada discreto con sus reacciones y más si iba a seguir rozando de esa forma su próstata y haciendo que sus piernas temblaran como gelatina por ello. Incluso aceleró un poco la masturbación ajena con la esperanza de darle un incentivo. — Steve... — murmura a modo de queja impaciente contra sus labios antes de besarle.
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Todos me preguntan quién eres
—Ah, ¿Eres amigo de $#%”!!?
Llevo mucho tiempo pensando en cómo empezar a contar tu historia. Todos a quienes les cuento de ti me lo dicen. Quizá debería de
— ¿cuál es tu tipo de chica? —se lo preguntan a un puberto que hace poco vio Transformers y quedó enamorado de Megan Fox
Recuerdo que solía contestar a esa pregunta:
—Bueno, me gustaría una novia de mi estatura o más baja, de mi edad, pelirroja, blanca, ojos claros, “buen cuerpo” (lo que quiera que eso significara)
Respondí incluso tiempo después de que tuve dos novias, a quienes quise mucho, que no encajaban en lo absoluto en la descripción
Nunca tuve una opinión sobre los tatuajes o los piercings, sólo sabía que dolían mucho. Mi profesora de inglés del primer año de secundaria tenía un tatuaje en el tobillo. No sé en qué momento me empezaron a gustar
Quizá debería de empezar por ahí, cuando mi amiga te señaló para
En los días en que acompañaba a mi mamá al trabajo, regresábamos alrededor de las 10 de la noche a casa. Esos días me quedaba viendo películas en el canal 22 y 40. A veces compraba películas que veía a esa hora también. Así vi Scott Pilgrim vs. The World, en 2011 o 2012, creo
no es el mejor ejemplo de inteligencia sentimental/emocional, pero me enseñó, ya en mi adolescencia tardía, cómo lidiar con el asunto entre uno y “la que te gusta”.
Quizá debería empezar ahí, la gente te
Les suelo decir que la primera vez que vi Star Wars fue cuando tenía tres años, lo cual no es extraño
A veces me gustaría que no existieras, pero temo encontrarte de nuevo; con sólo seguir un par de vínculos podría ver tu sonrisa de nuevo, pero no sé si quiero ¿No te pasa? ¿Nunca has deseado que una persona fuera producto de tu imaginación, ya por la destrucción que te provocó, ya porque desearías que esa persona fuera sólo una voz en tu mente?
(No me digas que no quieres destruirme, me estás destruyendo)
—dale un dulce
—parece buena idea, aunque parece un arma de dos filos
Ahí estabas ¿Recuerdas? Vestida de rojo y negro, una figura fantasmagórica y amenazante.
Nadie me cree, pero mi primo me llevó a ver el Episodio I de Star Wars en su estreno
—No sé, me gustan más las precuelas, siento que hay más acción y es fácil seguir la trama aunque te distraigas, algo que no puedes hacer con la trilogía original.
Quizá aquí empezaría, tenías…
El capitalismo vio en los geeks una veta de consumo impresionante, y lo empezó a explotar hasta llevarlo a la corriente principal, a lo popular. Los geeks, frikis, nerds, no llegamos a dominar el mundo como se nos prometió, tras tantos abusos en la escuela; seguimos abajo, mientras que los demás saquean nuestras tierras sagradas (tiendas de comics, convenciones de manga, películas ñoñas, etc).
Si te soy muy sincero, antes lo ñoño no era cool y yo era feliz. Sabía de Deadpool antes de Reynolds, antes de la era de los memes
(Acabo de recordar que te regalé mis cronopios y conejos vomitados)
Hasta tenía un poster, y tú una playera
…¿quieres empezar por ahí?
—Oh dios, ¿qué he hecho?
Juro que era la primera vez en mucho tiempo que le hablaba a alguien con el genuino interés de entablar una relación sentimental. Todo se había dado tan natural en ocasiones previas que el hecho de romper el flujo natural de las relaciones humanas e ir a presentarme frente a…
(¿Qué hago aquí sentado junto a ti?)
El constante recuerdo tuyo
¿Quieres empezar por aquí? Todavía no les cuento la primera vez que vi una película del UCM. Estaba emocionado por ver a uno de mis súper héroes favoritos, desconocido por muchos hasta entonces, en pantalla. 2008
En ese año vino My Chemical Romance al Distrito Federal, pero entonces no me gustaban. Le tenía cierta aversión a los “emos”, y por lo tanto Hayley Williams tampoco era un standard de talento para mí. Creo que era la época en la que todavía no formaba mi ideal de belleza
¿Lo hice?
(Parecías más bien antítesis de mis relaciones pasadas, perfección para mis relaciones potenciales, la suma de mis relaciones futuras)
Me acuerdo de cuando me…
Era una noche fría (¿Qué?)
No entiendo cómo o por qué, pero cuando estás creciendo (físicamente), pasan muchas cosas que marcan tu vida, es como si esa etapa de la vida fuera un semillero de huellas, indicios y leit motiven que te siguen de por vida.
Una vez me quedé sin cabello, y prometí que un día, iría a otro país, me teñiría el cabello de rojo y después me raparía, como aquella vez.
¿Rojo, azul, rosa, verde, blanco, negro? ¿De qué color era tu cabello?
—Sí, sí, ya sé, como la canción
— ¿Cuál canción?
—16 de febrero
—No la conozco
Aún hay cosas ñoñas que no son tan mainstream que podemos disfrutar, como la animación coreana, o los animes OVA, como FLCL.
(Sí, todavía tengo el cabello largo, pero ya no sé qué historia contar)
La verdad no le veo nada de malo a que te guste el JRock; y sé que a las de tu tipo las llaman “únicas y especiales”, pero ¿y si de verdad fueras única y especial?
(¿Qué pasó? ¿Por qué le cuento a la gente de ti?)
Si no mal recuerdo, ese día…
La máscara de Majora. Los juegos de The Legend of Zelda, son sin duda alguna, de los más demandantes que he jugado en mi vida, siempre hay un nivel o razón para pausar, salvar la partida, buscar una guía en internet, y en el peor de los casos, cheat codes.
Siempre llega un día en el que decides pasar ese nivel que no has pasado; una vez más rompes el libre flujo de las relaciones humanas,
—me voy a odiar por hacer esto
(¿Exactamente, qué querías para mí?)
—La verdad no creo merecerme un abrazo ahora
¿Me das un minuto más para empezar tu historia? Juro que sé por dónde comenzar…
(Juro que si te veo de nuevo, voy a llorar)
Pasaron los meses, al fin tuve la osadía de renunciar a mi trabajo, ese en donde ya le había hablado a la gente de ti, ahí donde me habían alentado a vomitarte cual conejo sobre el papel
Me he sorprendido haciendo gestos que tú harías
Rosa
Pastel
No rosa pastel
De hecho no había pasteles, había robots, cassettes, mesas mojadas, cielos nublados, amigos y tu hermosa cara frente a mí
¿Está encendido esto? (laughing track sounds loudly in the back)
A veces también quisiera ya no contar tu historia
Ya no quiero hablar del día que te conocí, cuando te confesé lo que me hacías sentir, la única vez que salimos, cuando fuiste a verme en mi cumpleaños o la última vez que te vi. Ya no quiero hablar de cuando te encontré en internet, de lo diferente que te veías.
Todos me preguntan
Me preguntan
Preguntan quién eres
¿Quién eres?
Eres…
Nadie pregunta por ti
Nadie pregunta
Pregunta por ti
Por ti…
¿Te importa si no te contesto?
— Emiliano Aguirre, 2019
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Sin salida
Era un aún fresco día de otoño, aquel año el frío se resistía en llegar. Leah como cualquier día en Hogwarts se alisó el pelo, cogió su túnica y se disponía a salir de la sala común de Slytherin, saludó a un par de chicas antes de salir las cuales la admiraban por su estilo y la seguridad que tenía en sí misma, seguridad que ella misma sabía que no era más que una mera fachada, y les sonrío de forma algo estúpida y ñoña.
Se dirigía a clases pensativa, aún le carcomía lo que días atrás había ocurrido en Cabeza de Puerco; había enfadado a mucha gente y hasta ella misma había perdido los nervios. Le molestaba que Jaden la hubiese despreciado de esa manera por "besar" a Ben cuando él mismo hacía cosas parecidas y peores con cuanta chica de Hogwarts que le siguiese o no el rollo. Pero más le preocupaba el cómo Ben la evitaba, lo entendía perfectamente, este se había sentido utilizado por la joven y ella no sabía cómo remediarlo, realmente le importa lo que pensara Ben de ella y no quería que se llevara una mala impresión.
Caminaba ya por los pasillos cuando metió sus manos en los bolsillos de la túnica y notó un pequeño papel, extrañada lo sacó, no recordaba haber colocado aquí papel alguno; lo desdobló y leyó su contenido: “Atrévete: El miedo llega cuando menos te lo esperas, cuando menos lo quieres y cuando menos lo necesitas”. Leah arrugó la nariz entre atónita y extrañada, ¿qué era aquella nota? ¿Quién se lo había escrito? ¿Cómo había llegado a su túnica? ¿Y qué significaban aquellas palabras? Le dio la vuelta al papel para ver si detrás ponía el nombre de quién la había escrito, había otras palabras pero nada sobre el anónimo autor de aquella nota.
En el reverso rezaba: “Acude a la clase de Pociones antes de la hora de la cena. No hagas preguntas, porque todo lo que buscas lo encontrarás allí”. Leah se guardó la nota contrariada, durante la mañana no pudo concentrarse en las clases, estaba distraída todo el rato, aquella nota la había dejado desubicada, tenía un poco de miedo por el significado de aquellas misteriosas palabras y dudaba sobre el ir o no a la clase de pociones, pero tenía demasiadas preguntas... "¿Quién? ¿Cómo? ¿Por qué a mí? ¿Qué se supone que busco…?"
Después de pasar toda la tarde pensándolo, se saltó un par de clases porque todo el mundo le preguntaba si estaba bien y no tenía ganas de ver a nadie, finalmente decidió que tenía que ir, si era una broma pesada de alguien ya se encargaría ella de cobrársela, ¿sería cosa de Isabella? Leah sabía que la Ravenclaw no la soportaba, pero tampoco la veía tan retorcida como para hacer algo como eso, fuera lo que fuese ella era la princesa de Slytherin y no iba darle el gusto a aquel anónimo de acobardarse y no ir.
Miraba con impaciencia el gran reloj de la sala común de Slytherin, cuando finalmente fue la hora, salió de allí y se dirigió a la sala de pociones, contigua a la de Slytherin.
- ¿Hola? -Preguntó la chica entrando en la lúgubre sala de pociones, no había nadie- seas quién seas que sepas que esto no tiene gracia... -empezó a impacientarse la joven paseándose observadora por la sala-... soy la princesa de Slytherin y no te gustaría meterte conmigo, así que espero que esto no sea una broma pesada. -Pegó un resoplido algo contrariada y sintiéndose tonta por hablar sola, pues claro estaba, allí no había nadie.
Caminó hacia la puerta y trató de abrirla, pero no cedió, volvió a intentarlo pero la puerta seguía sin ceder. Puso los ojos en blanco perdiendo la poca paciencia que tenía, seguramente alguien había cerrado la puerta desde afuera para gastarle una broma. Sacó la varita y utilizó el hechizo "Alohomora", pero nada sucedió, volvió a pronunciarlo. Nada. Probó con otros diferentes hechizos, incluso "Bombarda" pero la puerta siguió ahí, sin inmutarse, como si estuviese burlándose de ella.
- ¡Maldita sea! ¡SEAS QUIÉN SEAS QUE ESTÉS AL OTRO LADO TE VA A PESAR ESTO!¿ME OYES?! ¡Y CUANDO SALGA DE AQUÍ TE...! -Pero interrumpió sus enfurecidas palabras cuando, por el rabillo del ojo, observó una cucaracha en una mesa.
Leah se sobresaltó y retrocedió unos pasos temblorosa, tirando sin querer una pipeta que se rompió contra el suelo. La cucaracha empezó a correr hacia ella y Leah salió corriendo por la sala tratando de evitarla, con varita en mano trató de lanzar chispas hacia el bicho pero fallaba continuamente. Mientras corría el horror empezó a reflejarse en su rostro, empezaron a salir más y más cucarachas, de debajo de las mesas, entre las sillas, entre los frascos de pociones.
- ¡NO! ¡NO! ¡NO! ¡BASTA! -Gritó una Leah fuera de sí, había perdido el control, ya no sabía a dónde huir... los asquerosos bichos trepaban por todos lados y corrían no dejando ningún lugar de la clase de Pociones sin su repugnante presencia.
El sonido de sus patas al caminar mortificaban los oídos de Leah que atemorizada y en shock empezó a agitar la varita produciendo chispas, aquí y allá salían volando y explotando frascos, calderos de peltre y latón, todo se iba haciendo añicos mientras las cucarachas parecían cada vez multiplicarse más y más. Leah gritaba muerta de pánico y del horror, su fobia más fuerte se había materializado en aquella clase.
- ¡DIFFINDO! ¡CONFRINGO! ¡BOMBARDA! ¡INCENDIO! ¡CRUCI...! -La joven profería cualquier encantamiento o maldición que conociese con la varita, pero lo único que conseguía era que más y más objetos explotasen y formaran un caos en aquella habitación, sin que las cucarachas desaparecieran. Notó como empezaron a subirse por sus piernas y como volaban hacia su túnica, sus brazos, su cuello.- ¡NOOOOOO POR FAVOR! -Empezó a llorar la Slytherin agitando violentamente todo su cuerpo para desprenderse de aquellos bichos que tanto temía.
La habitación era un terrorífico espectáculo de luces y explosiones por doquier que profería Leah con la varita, de aquí y allá todo explotaba, los cristales de varios frascos le hicieron varios cortes a la joven en la túnica, las medias, los brazos y el rostro, pero ella solo podía sentir el pavor de las patas y antenas de aquellos insectos, ya apenas se le ocurrían hechizos.
- ¡AHHHHHHHH! ¡QUÉ ALGUIEN ME AYUDE POR FAVOR! ¡SOCORRO! -Soltó la varita y se tiró al suelo a punto de perder el conocimiento del ataque de pánico que tenía, empezó a tirarse y arrancarse mechones de pelo mientras de los pequeños cortes de su cuerpo salían pequeñas gotas de sangre... cuando de pronto las cucarachas desaparecieron y la puerta de la sala de pociones se abrió.
Leah conmocionada y sin fijarse en quién había abierto la puerta, salió corriendo hacia el exterior llorando y de paso empujando a una atónita profesora Etna Beauchamp que ni tiempo tuvo de reaccionar ni de preguntarle que le pasaba pues solo miraba con ojos como platos y sin comprender, la clase completamente destruida y la joven que se alejaba con cortes en el cuerpo.
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Y así me puse Aggro y mala.
Parecía mentira...
Ella nisiquiera volvió a mirarme. Simplemente me besó, y me dejo de hablar durante toda la mañana.
Me fui a la sala sintiéndome idiota, sintiéndome confundida.
Acaso le gustaba?
Como le podría gustar yo si al final ni me hablaba hace unas semanas antes?
Que mierda le pasa?
... Así me mantuve toda la mierda de mañana, donde ella no hizo más que ignorarme, le dije en el segundo recreo que necesitaba hablar con ella. Que necesitaba saber que mierda estaba pasando:
Así que ella accedió. Nos reunimos a la vuelta de la sala de música, En una escalera que estaba bastante alejada de todo lo demás así que podría preguntarle todo lo que yo quería.
Que onda Fune, acaso yo te gusto?- le oregunte. A lo que ella contestó que no.
Y en ese momento sentí mi ego herido, mi ego hecho mierda, me sentí mal.
Que chucha el beso entonces, no me dejaste ni darte un beso bien!- le dije
A lo que ella contestó - no se, sólo tuve ganas de hacerlo nero se nota que no sabes- y yo le dije -entonces enseñarme- y ella contestó con una cara de desagrado con mi proposición- No.
Se fue y me dejo en ese lugar, mal, sola, con rabia, con asco, con pena y con una impotencia extrema. "Guatona culia, guatona de mierda", era lo único que pensaba por rechazarme a mi. Que mierda se creía?
Me fui a la sala cuando tocaron la campana, me vieron dos compañeras que eran mis cercanas y me preguntaron que mierda me había pasado, no aguante y llore.
Una de ellas era super chora y flaite, la mina realmente era de pobla igual que yo pero the rial chora pitia y lanza. La Carly siempre con su pelo teñido rojo fuego, sus aros de círculo de acero, su delineado negro abajo de los ojos, la falda bien corta, con bototos, la mochila toda rallada y esa onda mística que tienen las raperas con la onda de los versos y la música rap. En verdad yo cachaba que toda esa onda era para ocultar su flaiteza, se hacía llamar rapera, pero yo sabía que la Carly era chora y de verdad.
Lloré con ella y le dije lo que me había pasado, y la reacción de ella fue de rabia extrema. La mina me golpeó la mesa y me dijo:
"QUE CHUXHA SE CREE ESA WATONA CULIAH, WEONA RARA. VOH TRANQUILA ESTÁ WEA LA ARREGLO AHORA". Y salió de la sala con toda la choreza que la caracterizaba.
Volvió como a las 15 minutos, entró cuando la clase ya había empezado pero a ella no le importaba nada. Entró a la sala como si entrará a su casa y le dijo a la profe que estaba en inspección tomando un te por dolor de estómago. A nadie le importaba realmente que chucha estaba haciendo pero la weona se digno a decirle a esa profe que onda porque igual cachaba de respeto.
En fin, la Carly camino hacia mi, que yo me sentaba en el último asiento de la sala, se sentó atrás de mi y me tocó el hombro:
-Oye Harly, la watona es puro mariconeo le pare los carros y no me dijo nah. Vo tranquila con el susto de más no te vuelve a weviar pero te quiero proponer algo- y la profe nos retó así que me di vuelta rápido- las va a pagar todas la ñoña culia, vo haceme caso- me susurró para cerrar su leve historia de defensa a una de sus amigas.
Terminó la clase y me dijo que nos quedaramos, en ese grupo de amigas éramos 5 estaba la Carly, la Pefa, La Nicky, la Cris y yo (En otra ocasión voy a hablar más características de cada una porque ahora quiero profundizar en lo que pasó). Nos quedamos y la Carly empezó a explicar la era empezando por preguntar- porque chucha te comiste una mina?, Eri lela maraca?- a lo que yo contesté- no weona!!! Como chucha voy a ser lela si no me había dado besos con minas nunca- y ella me dice- weona está culia te va a cagar, la hizo para meterte en la vola del mariconeo lelo así que vamos a hacer esta sea para que pague por la wea que hizo, pero va a demorar-. En mi corazón yo tenía tanto odio, tanta rabia y vergüenza que dije que me daba lo mismo esperar con tal de que la weona pagará por maricona lo que la había hecho. Así que empezó el plan, "enamorando a la weona".
En verdad para hacer resumen de la wea, me repuse de esa vergüenza después de 2 días al otro día no fui al colegio y al que siguió empecé con el plan.
Era un día jueves, la salude como si nada y ella me miró y me correspondió el saludo igual. Empecé riendome mucho como si nada hubiera pasado, pero empecé más cercana con la Chibi por ejemplo abrazos y weas...
Después si la veía en el patio la saludaba en buena onda y a veces le hablaba a lo que ese momento entraba mi amiga la Pefa a weviar, llegaba de la nada y me abrazaba por la espalda y me daba besos cerca de la boca y que la Fune nos viera. Nos mirábamos con complicidad con la Pefa, y la weona de la Fune se daba cuenta.
Poco a poco... Empecé a acercarme más, de hecho no fue un trabajo de mucho tiempo. Tres semanas después la weona me quería ver otra vez temprano. Yo dije está es la mía me la voy a comer como se debe.
Llegué temprano y estaba esperándome, No la pesque mucho en verdad la salude mientras me acercaba así me ahorraba el beso en la cara. Jajajaja.
Subamos?- le dije- vamos a ver a que hora sale el sol?- me contestó - No, vamos a tirar- le conteste yo caminando hacia la escalera. Subió detrás de mi, y yo tenía rabia con ella todavía, sabía que tenía que hacerla bien para que fuera una wea que la enganchara. Camine hasta una sala entre y me senté en la mesa de los profes que estaba cerca de las ventanas, se puso delante de mi sentada en una mesa cualquiera, y me miro -quieres que nos demos un beso?- me pregunto- y yo la mire y me sonreí. Me bajé de la mesa y me acerqué a ella abriendole las piernas, le pase las manos sobre las rodillas y le levante levemente la falda, Como queriendo tocar más allá pero no. Me miró estupefacta, con miedo y yo le dije- tienes que estar tranquila, esto no te va a doler- y ella bajo la cabeza. Le tome la cara con una de mis manos, y la levanté levemente para hacercar mi boca, ella cerró los ojos de forma automática, le pase la lengua sobre los labios y ella abrió la boca, cuando hizo eso tome su cara con fuerza y le Di un beso metiendo mi lengua y por dentro deseando acabar pronto para ver que me diría, fue un beso de no más de 1 minuto pero la toque, la abrace, levanté su falda, toque sus pechos y su culo y ella simplemente se dejó. Cuando deje de besarla separe mi boca de la de ella y aún la tenía abierta y tenía los ojos cerrados y me dijo - te pasaste, que rico- y yo me aleje tone mi bolso y le pregunté- que cosa?- y ella me miró con ingenuidad- te veo después verdas- me pregunto arreglandose- te veo en el recreo como siempre, chao- me fui tan victoriosa, la weona estaba donde yo quería y ahora, me la iba a recagar.
Me hubiese gustado que sólo hubiesen sido represalias con ella, pero después de eso, me Di cuenta que engancharse a minas fue fácil así que empecé a pescarme a cuanta mina se me pasó por delante o me mandó cartas de amor. Pobres, yo ya estaba podrida, estaba cagada de la cabeza así que todo lo que les hice, me arrepiento y pido perdón. Pero en su momento fue necesario. En fin.
En el recreo anduve todo el tiempo con la Pefa, así que la Fune estaba pésimo por lo mismo. No podía hablar conmigo porque no me dejaban sola.. al final me la pille en la salida esperándome para irnos juntas, pero yo ya había quedado de ir con otras amigas así que se fue sola. Me Di cuenta que no fue tan difícil enamora a alguien así que continúe con lo mismo.
Dos semanas después, me comía a la Fune cada vez que quería así que decidí que mejor le pedía pololeo, a lo que me gritó que si. Empezamos bien, yo en cierta forma me la pescaba cuando quería, y adicional a eso me pescaba a cuanta mina me mandaba cartas cuando ella no estaba.
En el Liceo donde estábamos la modalidad era una semana en el Liceo otra en la práctica de la especialidad, como ella era un año mayor que yo, yo estaba en segundo medio cuando me pasó todo esto y ella tenía una semana que no estaba en el liceo. Bueno esa semana yo me la cagaba.
Seguía en la radio del colegio era conocida como una de las weonas más populares en esa wea, la Harly era la mina más conocida por animar fiestas de liceanos y como tenía toda la personalidad y el estilo decidí que tenía que ponerme más aggro y oscura aún. Me tuve que poner lentes, así que el cambio fue radical. Realmente me veía bkn. Bueno siguendo con el pololeo, la semana que la Fune no estaba me comía unas 3 minas dependiendo si se declaraban o no, y la semana que ella estaba una onda cuando podía cuentiarla. Todas las veces que la cague ella supo, y yo me encargaba que ella supiera dure así con ella 4 meses, y cuando supo de la última vez que la cague la mina se volvió loca. La cague con la Chibi, si con la Chibi, se acuerdan de Ella?.. En fin, la cabra un día estaba en el Liceo nos tocaba ir en la tarde por un taller, oscurecia más rápido, y en el gimnasio mientras hablábamos y reíamos, le Di un beso. Y la mina onda se desespero, en vola siempre quiso que yo me la comiera pero como a mi no me importaba nada, nunca me di cuenta. El tema es que me la comí ese día, y el siguiente, y el siguiente, y cuando volvió la Fune, la mina le contó feliz que la weona que tanto le gustaba ahora le había correspondido kajajakakak. Bueno increíblemente yo hice que la Fune no le contará a nadie que éramos pololas y ella accedió sin atados. El tema es que el día Lunes llega la Fune y se encuentra con el grupo ñoño de amigas que tenía y la Chibi feliz le dice que la mina de la que siempre estuvo enamora ahora la pescaba, supe por la Fune que como ella tampoco sabía que era yo le pidió detalles, y la Chibi le contó todo con lujo de detalles sin saber que después le diría que era yo jajajajaja.( Que mala la wea en verdad pero bueno ya está hecho). Según la Fune, La Chibi le dijo todo, y si es así entonces entiendo su rabia, el tema es que después de que estaban emocionadas ambas porque eran correspondida por las personas que amaban, la Fune le pregunta a la Chibi primero que le cuente quien era la afortunada y la Chibi le contesta:
La Harly-Chan!!!!!
No se que pasó después sólo se que la Chibi lloraba por todos los rincones posibles del colegio y la Fune apenas fue el primer recreo me fue a decir que teníamos que hablar.
Al final nos reunimos en el rincón de la sala de música, ese donde habíamos conversado antes pero cuando ella me había rechazado.
PORQUE??.. PORQUE CHUCHA ME HACES ESTA WEA HARLY!!!- me gritó- Oye cállate!!- le dije- como tanto show- y ella se puso a llorar- La Chibi me contó todo, como me pudiste cagar con mi amiga, que mierda te pasa?-
Yo la mire y le dije- Fune te da pena?, te sientes mal?- y ella se secó un poco las lágrimas y le dice- yo te amo, se que vamos a superar esto pero me duele tanto-
Entonces yo cambié mi cara y le dije- no vamos a superar nada Fune porque yo no te quiero- mirándola a los ojos- nunca te quise-
Me acuerdo que no sentí pena en ese momento al contrario, sabía que todo lo que había hecho antes era específicamente para lograr eso así que aún que se lea que es de una csm yo estaba satisfecha. La mina que me hizo sufrir estaba peor que yo, así que daba lo mismo lo demas.
-Harly yo te quiero- me dijo llorando- Oye ya me tengo que ir- le dije yo- a lo que ella me contesta- podemos intentarlo verdad, déjame enamorarte dame la oportunidad- y yo cambié mi cara por una de desagrado, la misma que puso ella cuando estuve ese día en ese mismo lugar para la mierda- No, cuidate- y me fui.
Las ironías de la vida...
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Outlander y la gran aventura de su tercera temporada
Outlander siempre ha sido muchas cosas. Es, esencialmente, una historia de amor, pero también lo es de mentalidades, de culturas, de guerra, de política, de ciencia y de magia; una gran aventura en la que ha habido tiempo para abordar con mirada crítica cuestiones como la homosexualidad, el feminismo y el racismo a lo largo de la Historia. Y es que no deja de tener cierta ironía que una mujer del siglo XX y un hombre del siglo XVIII nos estén enseñando tantos valores, y la dinámica de un matrimonio tan sólido, pero lo cierto es que así es. Esta tercera temporada ha sido su mayor aventura; la que les ha llevado más lejos que nunca, agrandando el universo de Outlander hasta límites que nunca hubiera imaginado...
¡Spoilers de la tercera temporada!
NO estoy llorando, TÚ estás llorando.
Si tuviera que compartimentar estos 13 episodios, los dividiría en tres grandes etapas. Una primera parte (mi favorita, sin duda) que ahondó de manera magistral en el vacío de Claire y Jamie tras esas dos décadas separados, y que tuvo algunos de sus momentos cumbre en el 3x03 "All Debts Paid" con la tristísima muerte de Frank –ese primer gran amor con el que Claire no pudo volver a reconectar–, y el 3x05 "Freedom & Whisky", un episodio catártico que sirvió para reparar el vínculo entre Claire y Brianna. El 3x06 "A. Malcolm" supuso el inicio de la segunda etapa: el reencuentro tan esperado, tierno y ardiente entre Claire y Jamie. Pero no fue hasta el 3x08 "First Wife" cuando ambos depuraron sus rencores, se dijeron todo lo que necesitaban decirse, y pudieron avanzar al despejar Jamie las dudas de Claire en esa bellísima escena frente al mar.
La tercera y peculiar fase la marca el comienzo de la nueva aventura. El viaje a Jamaica, tal como lo hizo la etapa francesa, amplia los horizontes de Outlander. Y, aunque tengo que admitir que cuando más me gusta Outlander es cuando está en Escocia –hace falta más Lallybroch–, lo cierto es que ha sido en estos episodios (mucho mejores que los franceses, todo sea dicho) cuando la serie ha sido más pura aventura que nunca. ¿Qué pasa con Outlander y sus giros, que te llevan por caminos que jamás hubieras esperado? Cuando crees que la situación está calmada, llega un barco inglés lleno de enfermos que secuestra a Claire, y todo lo que dabas por seguro se desmorona. Outlander es un desafío constante, y no hay nada más estimulante que eso.
Excepto John Grey. Él es una bendición.
Hemos visto a nuestra doctora favorita salvarles, defenderse de un intento de violación y dar un salto de fe (literalmente) que la llevó a encontrarse con un cura inglés y su recelosa suegra cubana en Saint Domingue. Ha sido una aventura intensa e inspirada, que ha cuidado al máximo los detalles históricos, y que he disfrutado como un enano. ¿Hay algo que NO haya tenido esta temporada? ¿Algo que le haya faltado? Difícilmente... ha sido, quizá, una de las más completas de la serie. O, como mínimo, la más sorprendente.
En el ojo de la tormenta
Y, tras todo este viaje tan accidentado y disfrutable, llegamos a un season finale donde la magia vuelve a ser la gran protagonista. Geillis como 'villana' ha sido excelente; tan sádica, interesante y magnética como Black Randall, pero mucho más difícil. Difícil porque Claire la consideró su amiga, y había respeto, emoción, un fuerte lazo, entre ambas mujeres. Por eso fue tan duro para Claire tener que dejarla hecha un cuadro. Pero, francamente, ¿qué otra opción tenía? Geillis lleva lo de ser una nacionalista intensita a un nivel tan extremo que, a su lado, hace parecer a los independentistas catalanes meros aficionados.
Probablemente la conversación más bizarra (en el sentido francés/inglés de la palabra) de toda la serie. Gracias por tanto, Geillis.
Pero, ¿no ha sido todo esto maravilloso? ¿La magia, los bailes, esos pequeños-grandes momentos como Claire llorando por el horror del mercado de esclavos? ¿Y qué me decís de la forma tan inteligente en que "Eye of the Storm" ha conectado todos los cabos sueltos de la temporada? Hay quien dice que al season finale le ha faltado más "garra". E, indudablemente, no ha sido tan 'espectacular' como el de la segunda temporada. Pero tampoco le ha hecho falta. "Eye of the Storm" es una preciosa metáfora del matrimonio de Claire y Jamie: siempre en el ojo de la tormenta, rodeados de dificultades, pero luchando juntos. Luchando el uno por el otro para salvarse mutuamente.
Y aquí hago un inciso para quejarme un poco. Porque no es oro todo lo que reluce: tengo que decir de Outlander que aborrezco la forma en que ha jugado con los celos. Ya expliqué en críticas pasadas lo tóxica que me resultaba la forma en que Outlander idealizaba el romance de Claire y Jamie como el "único y verdadero" (¿tan terrible hubiera sido que hubiesen amado a otras personas durante esas dos décadas separados?), pero lo acepté. La metáfora de la pareja de pájaros, todo eso. Vale. Pero, ¿mostrar a Claire celosa e incómoda ante John Grey? –Mirad la forma en que se arrima a Jamie, marcando territorio, cuando percibe lo que siente John–. Creo que están en un punto en que deberíamos haber superado estas chiquilladas de celos. Ya bastante lamentable fue que convirtieran a Laoghaire en el cliché de la ex loca - en contra, por cierto, del criterio de Diana Gabaldon.
Claire poniendo cara de tener gases y disimulando un nuevo ataque de celos...
Hasta que Outlander vuelve a reafirmar que ella es LA Ú-N-I-C-A.
Creo que esta cuestión debería haberse llevado con más inteligencia. Porque, aunque los celos sean un sentimiento muy humano, Outlander debería haberlos trascendido y explicado mucho mejor: ¿y qué si Claire se hubiera reenamorado de Frank? ¿Y qué si Jamie se hubiera vuelto a casar por amor? ¿No debería, pasado el dolor inicial, alegrarles que su amado hubiera encontrado de nuevo felicidad... aunque no fuera a su lado? ¿No es eso el verdadero amor? Aunque de forma indirecta, Outlander refuerza así la idea de que debes sentirte culpable si vuelves a enamorarte tras haber tenido un gran amor, porque gran amor solo hay uno. Y mirad, nop. La relación de Jamie y Claire ya es lo suficientemente fuerte y sólida como para tener que meter estos celos e inseguridad de por medio, y menos si la respuesta va a ser "que no me volví a enamorar, jolines, solo existes tú". Un amor no invalida otro, y creo que esta temporada muchas rabietas a este respecto han sobrado.
Pero basta de quejas. Aunque no esté del todo de acuerdo con el enfoque dado en ocasiones, no puede negarse que la relación de Jamie y Claire es una de las más épicas de la televisión. Tiene muchísimo mérito lo que han hecho. Una mezcla casi perfecta de química, de fuego y de ternura, de lealtad y de compromiso. Porque sacan lo mejor el uno del otro, se dan fuerza para continuar y enfrentarse juntos a la peor mierda del mundo. Eso es, al final del día, Outlander. Eso es lo que ha sido su season finale. Y no sé si ha podido ser redundante, o poco épico, pero a mí me ha emocionado. Me ha hecho sonreír al verles abrazados en la playa, con ese amor tan creíble que casi sientes poder palparlo. Y en eso no deja de haber, también, algo de magia...
¿Qué os ha parecido a vosotros la tercera temporada? Me encantaría analizarla con vosotros. Sentíos libres de comentar lo que queráis (y de rebatirme también). Y, sobre todo, sed fuertes mientras esperamos la próxima aventura.
Y permitidme despedirme con una última anotación un poco ñoña, pero necesaria. Detesto que los críticos reduzcan Outlander a ser la serie con "el mejor sexo". Quizá deberíamos hablar de ella en otros términos: como la serie con el mejor amor.
Isidro López (@Drolope)
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只有她 2015.09.30
Su idea iba a la perfección… o, bueno, francamente, en su mente todo parecía ir perfecto. Nevada nunca se imaginó terminar de tal manera, pues, vamos, aquella bruja que todos tachaban de un ser irrompible y severamente frío o amargado, estaba dispuesto a romper el hielo aquella noche, de desatar cada filamento de lo que parecía ser siempre una vida solitaria y por sobretodo unitaria. Estaba bastante emocionada, pero a la vez, algo dudosa. El simple hecho de pensar que esa noche la había dejado exclusiva para una sorpresa de su chica, le revolvía el estómago. Efímeros cosquilleos recorrían su abdomen, pero, más que un buen gesto, generaban uno con cierto disgusto, y es que caer a ese nivel de, como en un pasado habría nominado, “ñoñerías”, la hacían sentir un poco hipócrita, luego de jurar ante cualquiera, que nunca sería capaz de enamorarse o simplemente mostrar afecto. Vaya, aquel refrán de Fiona, “las vueltas de la vida impresionan”, ahora cobrara sentido: lo entendía perfectamente. No obstante, todo eso no quería decir que la característica de Nevada acabaría por derretirse en su totalidad, Nevada sabía hacer excepciones, y solo ella lograba que la francesa terminara con su mundo dado vuelta. Una casa abandonada, la casa que usualmente visitaba la bruja cada que necesitaba un tiempo a solas. Una casa abandonada hace años luego del suicidio de los dos hijos de la familia Bang que alguna vez habitó ahí. Más que una casa, en el interior, eran escombros, pero Nevada se las habría arreglado durante más de un año, para redecorar ese lugar a su mero gusto (aunque no cambiaba mucho al desastre tétrico inicial). La oscuridad seguía en su lugar, no se podía permitir luz en tal lugar, era algo obvio, sin embargo, el hueco que daba a la parte trasera del páramo en aquel bosque de Gwanak-gu, era lo suficientemente grande como para permitirse el lujo de ser acompañada de la luna. La habitación principal era su ubicación constante en ese “hogar”. Solo Nevada lograba llamar hogar a un pedazo de ruina, pero de que disfrutaba la tranquilidad absoluta, más la oscuridad y un lúgubre espacio, lo disfrutaba realmente. Con su teléfono en mano, se tambaleaba sola en la fibra de la confusión, ¿qué pasaría si fuese rechazada? No quería permitirse tal embrollo y vergüenza, pero a su vez, sentía los ánimos suficientes como para dejar de lado aquel miedo con el que constantemente luchaba contra aquellos sentimientos por la otra parte. Entre el silencio, se dio una bofetada mental, desbloqueando el teléfono en esa oleada de valor que la golpeaba, aún así cuando la hacía ver tan serena como siempre. sms ━━ 她 Sé que te dije en mi casa, pero necesito que vengas ya a este lugar. Te adjuntaré la ubicación. Ahora. nevada. Una vez que terminó, lanzó su teléfono a un lado. Retrajo las piernas y apoyó sus antebrazos en las rodillas, usando ésto como barrera para su rostro, escondiendo sus labios. Lo tenía planeado, sí, pero nunca se imaginó tal avalancha de sentimientos que llegarían a bloquearle en el momento exacto. La quería, de eso no había duda. Estaba luchando contra ella misma sí, pero se trataba solamente de ELLA.
♡ rosé Aquella chica que la volvía loca, la había invitado a su casa. ¿Cómo llamar esto? Tal vez… ¿cita? Podría ser el nombre más cercano a aquel evento, al menos de esa forma lo percibía Dánae. Una vampiresa en casa de una bruja, bueno, su madre fue bruja, no había nada qué temer. A parte, conocía bien a esta bruja, y no sería capaz de hacerle daño. Era híbrida, su corazón de cierta forma latía y se aceleraba cada vez que estaba cerca de ella. También agreguemos que en parte era vampiresa, entonces sus emociones se duplicaban. Sabía que estaba perdidamente enamorada de la otra chica. Recibió el SMS de la pequeña bruja, al cual respondió un sencillo “Entiendo, voy en camino”. Antes de levantarse del sofá e ir hacia su coche. Se había preparado desde temprano y sólo estuvo esperando a que llegase la hora. Colocó la dirección que le había mandado por mensaje en el GPS del automóvil, para poder llegar sin perderse en el camino. Arrancó el coche en cuanto terminó de colocar la dirección y encendió la radio para relajarse un poco, no quería verse demasiado emocionada ante la idea de tener una cita. El viaje hasta la localización no fue tan largo pero tampoco fue exprés. La casa deteriorada por los años que veía le parecía perfecta para ambas, de algun modo encajaba con los títulos que llevaban de bruja e híbrida. Sólo pudo sonreír ante la vista, era increíble. En cuanto paró el coche, miró su peinado y maquillaje en el retrovisor, debía lucir bien para la contraria. En cuanto su apariencia le pareció apropiada, salió del automóvil en dirección hacia la puerta principal. Frente a la misma, con si diestra, golpeó la puerta ligeramente para esperar por cualquier sonido proveniente del interior. – ¿Nevada?…
♡ 𝘫𝘪𝘦𝘲𝘪𝘰𝘯𝘨 Su teléfono vibró, incluso la luz de éste le llamó la atención, pero al ver la previa, se conformó con eso, pues siquiera se inmutó a más. Dejó las cosas así, solo restaba esperar por la vampiresa. Inhalaba y exhalaba, intentando calmar lo que podría definir como nervios, ella misma se causaba gracia. Dánae había aceptado, lo que significaba que no había vuelta atrás. Nevada ya había tenido encuentros en los que se negaba a enfrentar las cosas como tal, pero esta vez sería una excepción, porque no se trataba de ella, sino de demostrar lo que realmente sentía por aquella mujer. ¿Pero qué hacía ahí sentada aún? Soltó un bufido y se levantó rápidamente, saliendo por el hueco de la pared. El aire era fresco, pero no gélido, era grato para una noche en compañía de la fémina. ¿Cómo sería capaz de explicarle todo? Aún siquiera podía imaginar a la chica frente de sí, porque con solo pensarle una bobalicona sonrisa se situaba en sus labios, como también un gesto burlesco hacia ella misma. Apoyada contra un pequeño escombro, observaba la luz de la luna, la cual era su única acompañante hasta el momento. Sus ojos seguían estudiando todo el lugar, curiosa, como si nunca hubiese ido ahí, pero sabía que eso solo se debía a tener que dejar aquel lugar perfecto para Dánae (en lo que entraba perfecto para una casa en ruinas). El ruido de los nudillos golpear la muerta, hizo que su mirada se dirigiera hacia el interior de la casa, sus ojos se abrieron cual dos platos. Había llegado. Se levantó sin más y a base de saltos cruzó todo lo que tenía preparado para la fémina, sin embargo, antes de salir de aquella habitación principal, volteó y encendió todas (las cuatro) las velas con solo su mirar. Caminó, como si nada le importase, con aquella típica indiferencia hacia todo, pues, aunque sabía que Dánae podía sospechar sobre sus sentimientos y demás, no significaba que aquel intolerable orgullo que vivía abrazado de la rubia, le permitiera parecer tan dócil ante ella. Abrió la desgastada puerta, la cual rechinó, pero poco le importó, pues ahí estaba, frente de ella. Una frágil sonrisa se situó en sus labios, mientras ojeaba el atuendo de la contraria, hasta arribar a sus ojos nuevamente. ━ Hola, Dánae. Lamento estos cambios de planes es que… Una larga historia. ━ ¿Pretexto para no pintar todo como una ñoña cita? Quizás, pero en el fondo sabía que se trataba de una, una muy esperada a su lado. ━ Te ves hermosa. ━ añadió enigmática en un suave habla. ━ Ven. ━ extendió su mano.
♡ rosé La espera frente a la puerta fue muy corta, pues los golpes que había en la misma, surtieron efecto casi de inmediato. Desde fuera de la casa, podía escuchar los pasos de Nevada en su recorrido hacia la puerta. En un momento como ese, no estaba segura de si tener aquella habilidad fuera bueno, pues cada paso que escuchaba dentro, alargaba su sonrisa de lado a lado. Una vez que la puerta estuvo abierta, se encontró que la hermosa chica que tanto había esperado. La chica a la que que en numerosas veces le había mostrado que tenía fuertes sentimientos por ella. Dánae nunca se había molestado en guardar lo que sentía, siempre le gustaba que las personas supiesen lo que le agradaba y lo que no, entonces estaba bastante claro para ese momento, lo que ella pensaba sobre quien sería su acompañante aquella noche. Logró notar la forma en que observaba su vestimenta, lo que aprovechó para bromear un poco. Levantó sus brazos a la altura de sus hombros y giró lentamente para permitirle ver todo su atuendo, el cual consistía en vestido casual, con estampado de flores en él. El color dominante era negro, como en la mayoría de sus atuendos. ━ ¿Así estoy bien o debería ir a cambiar mi ropa? ━ Inclinó su cabeza hacia el lado derecho al decir aquello, manteniendo la enorme sonrisa que se había formado en su rostro desde antes que la puerta fuese abierta. Poco le importó lo que dijo respecto al cambio de ubicación, a ella no le afectaba en nada, después de todo, podrían reunirse. ━ Gracias por el halago. Tú te ves mucho más hermosa. Tomó la mano que le ofrecía la pequeña bruja. ━ Sólo espero que no termine siendo parte de alguna de tus practicas de brujita. ━ Mencionó riendo un poco ante aquella idea.
♡ 𝘫𝘪𝘦𝘲𝘪𝘰𝘯𝘨 ━ Sé que eres capaz de ir a buscar otro atuendo, así que no. Y gracias, corazón. ━ respondió con una amplia sonrisa en sus labios. Los nervios comenzaron a hacerse presentes en ella a través de la manera en como relamía sus labios y mordía los mismos, era por ese motivo que intentaba evadir la mirada directa en ella. Sabía que corría riesgo de ser descubierta y posiblemente expuesta a bromas de ella, porque nadie la conocía mejor que Dánae. Procuró cerrar, con cuidado, la puerta, que aunque estaba un poco rota en la esquina superior derecha, servía suficiente como para no delatar que dentro de ella, estaba siendo habitada. Sin soltar su mano pero a un paso un poco más rápido, se abrió paso por el pasillo principal. ━ Cuidado que hay varias piedras por aquí, pero es mucho mejor en la habitación. ━ añadió con un alto grado de preocupación en sus palabras tras pasar un gran pedazo de escombro a un costado. Anonadada con su broma, dio un apretón en su mano, para más tarde soltar una carcajada y voltear para dedicarle una mirada, entornando sus ojos. Fue una mirada que, aunque se abstuvo a reír, no estaba ni cerca de ser una amenazante, pero sí en respuesta a su juguetón comentario. ━ Si decidiera un sacrificio para ti, créame que hace mucho ya lo hubiese llevado a cabo, señorita Mikaelson. ━ concluyó con una fugaz risa. Soltó su mano y se adentró a la habitación, que en segundos se transportó al otro lado de la tela que descansaba frente a al gran hueco, dándoles la cara de la luna frente a sí. ━ Sé que no es el lugar más romántico, pero este… este es el lugar al que siempre vengo sola y significa mucho para mí. Sé que podía compartirlo contigo. Y justo aquí… ━ tomó un resceso a sus palabras y se colocó de cuclillas y cara al páramo, volteó luego a verle. ━ es uno de los mejores ángulos para ver la luna, puesto que la colina de la casa evita que las copas de los árboles intervengan en nuestra vista a la luna… Ven. ━ musitó lo último mientras palpada a un lado de ella sobre la tela. Tomó el cráneo a la izquierda sobre un escombro, cráneo que sostenía una de las velas en pie gracias a la cera derretida. Aún así, con cuidado la dejó frente a ella, iluminando el espacio que esperaba por su novia. Para Nevada, no había nada mejor que eso: su lugar favorito, junto a su persona favorita. Los nervios en la contraria eran suficientemente claros para ella. La forma en que se comportaba lo podía decir todo. Suficiente tiempo se habían conocido para saber bastantes cosas la una de la otra, aunque Dánae no era una chica que mostraba sus sentimientos a cualquiera, Lana sabía mucho sobre sí y su familia, unas cuantas cosas porque ella se las dijo y otras cuantas porque ella se enteró con el tiempo. Normalmente, personas que sabían tanto eran una amenaza para ella, pero Lana no era así, era completamente diferente a cualquier chica que hubiese conocido antes.
♡ rosé Su broma fue aceptada por la ajena y al parecer provocó lo que quería, sacar risas de la otra parte. La casa deteriorada, a pesar de su mal estado, parecía ser muy linda. En muchas ocasiones se había topado con residencias de aquel tipo y cada una mantenía un ambiente diferente al resto. Observaba cada detalle del lugar, sonriendo al pensar en los peculiares gustos de Lana, un lugar deteriorado, con una vampiresa de más de mil años, vaya que era la combinación perfecta. Dejó que la contraria entrase primero y se separara un gran espacio de ella. Dánae la siguió lentamente hasta la localización de la chica que tanto le gustaba. Escuchó atenta la confesión ajena, asintiendo ligeramente con las palabras de Lana, siguiendo sus indicaciones y colocándose a su lado en la misma posición que ella, comprobando lo que había dicho segundos atrás. ━ Tienes razón… es un lugar muy lindo, preciosa. ¿Sabes de qué me di cuenta? Que tienes unos gustos muy extraños, pero ya que eres tú, todo es precioso y perfecto. ━ Confesó mirando a la más pequeña. La vista era perfecta, no había nada más hermoso que estar en ese momento con ella, observando dos de las más grandes bellezas: la perfecta luna, y su perfecta acompañante.
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