#distraccion ansiedad amor sentimientos obsesiva lagunasmentales Bunbury 10am

[elmasoscurodelosazules]

Lagunas... ¿emocionales?

Color blanco borroso, una voz mayor constantemente rebotando de las paredes a mi oídos, vibra mi teléfono, mirada hacia la pizarra y de vuelta a la realidad.

Una vez más estaba absurdamente perdida en la infinidad de posibilidades de que todo me salga absolutamente mal, deben haber al menos mil y un resultados diferentes para cada situación que me preocupa, a diario durante mi clase de Derecho Civil las discuto todas conmigo misma como parte de mi rutina, atormentarme sola.

Este es el grave dilema de enamorarse para alguien tan inestable como yo, es esta situación de tener miles de cosas que hacer y a las cuales ponerles mi atención y dedicación pero sin embargo el cien por ciento de ambas están trabajando sin parar en maneras de mantener el vicio a mano y al mismo tiempo que esta adicción no me vuelva inútil, sin descanso busco un equilibrio entre mis sentimientos y mis responsabilidades lo cual comúnmente termina en una computadora con el teclado lleno de lágrimas, a las dos de la mañana, con Enrique Bunbury de fondo. Esta necesidad ridícula de quererlo solo para mí, de querer saber lo que su mente en realidad tiene por ofrecer, de querer la esencia pura de su ser en una bandeja de plata desparramada para descifrar y disfrutar, su instinto en lo más crudo posible dirigiéndose hacia mí, SOLO PARA MI, para siempre, maldita obsesión… “Verdial, su turno, explique el tema de la página noventa y uno”, abogada quisiera poder explicarle porque esta exposición está a punto de ser un discurso mediocre de un tema que apenas manejo, pero al igual que todo en mi vida últimamente, es complicado.

- “La paternidad se puede impugnar por medio de….”