#cumbia ebria
Explore tagged Tumblr posts
Text
CAPÍTULO OCTAVO: Fast as you can.
El inicio del 2020 se presentó como una racha de buenos acontecimientos, nuevas puertas de trabajo comenzaron a abrirse para mí y gané un concurso-festival de teatro junto con mi colectivo, para el cual nos habíamos preparado durante mucho tiempo, de hecho, lo considerábamos la revancha porque dos años atrás habíamos perdido el mismo concurso. Luego de ganar, dos temporadas teatrales nos esperaban. Además, comencé a salir más seguido con Diego, le dije “te quiero” por primera vez y conocí a otros dos chicos: Ulises (muy listo y con esta ondita relajada que te invita a bailar) y Adán (un cineasta medio mamón pero buena onda).
Me sentía imparable, parecía que la fortuna estaba de mi lado, cuando salía a la calle me veía exitosa, energética, sensual y alegre, algo así como Meryl Streep o como Anne Hathaway.
Lo extraño era cuando llegaba a mi casa o cuando tenía que despertar para ir a dar clases a preescolares (también daba clases en estancias infantiles para sobrevivir, porque de actriz está canijo)... cada vez que mi despertador sonaba sentía todo el peso del mundo sobre mis hombros, deseaba quedarme todo el día en cama, que Diego me preparara el desayuno y pasármela viendo por la ventana (ya sea real, virtual o de papel) con una taza de café.
No tenía ganas de despertar a las 6am para trabajar y encontrarme con gente horrible, como los acosadores oficinistas o las maestras de plaza que creen que por ser más joven eres pendeja, por mucho que amara a los niños, me cansaba muchísimo y odiaba tener que cumplir con protocolos, saludar, firmar entrada y salida, entregar planeaciones a tiempo, mientras esperaba por meses un cheque retrasado (porque así es el outsourcing)... yo sólo quería quedarme en los apartamentos de los tipos que conocía, despertar hasta las 11 am, que me trajeran el desayuno a la cama, ver una película y cojer todo el día...
Hubo días en que no juntaba ni pizca de fuerza para levantarme, le pedí al cielo que algo sucediera, que hubiera paro en la SEP, que temblara o cualquier cosa para que la ciudad se detuviera… y aconteció: llegó el coronavirus a México, la cuarentena todavía no era oficial cuando yo empecé a faltar al trabajo.
Un día antes de que la cuarentena se oficializara, salí de fiesta por última vez. Yo no sabía que esa sería la última noche, ni siquiera creí que la pandemia fuera a ser gran cosa, es decir, yo no lo planeé pero esa noche, como por un hecho cósmico, se convirtió en la mejor despedida a la vida sin COVID, que pude haber dado.
Era jueves, al día siguiente había trabajo así que no esperábamos una gran fiesta, estaba con una de mis mejores amigas, Clau y su novio Bruno, queríamos distraernos y bailar un poco, así que fuimos al Foro Hilvana. Hubo un concierto de un grupo chidísimo, que combinaba marimba con cumbia y punk, y además usaban máscaras, una de verdugo y otra de espantapájaros. Aunque la música era buena, me sentía algo extraña, quería que Diego estuviera ahí, pero él no tenía ganas de salir esa noche, empecé a sentir que había demasiada gente y al mismo tiempo me sentí un poco sola. En mi cartera traía un ajo que pensaba comerme con Diego, pero él seguía postergando el plan, así que les invite a mis amigos, ellos dudaron un poco, pero al final cada quien se comió un tercio, por ello pensé que no nos iba a pegar. Como a las 2:30 se acabó la fiesta en El Hilvana, la última en tocar fue Dj Wawis y me acerqué a decirle que pusiera perreo y que era la mejor, yo y Clau bailamos solas en la pista, a nuestro alrededor ya solo quedaban los meseros, los dueños del lugar y algunos músicos, sentí un poco de vergüenza por ser las únicas en la pista pero Clau se acercó a decirme:
Es que tú crees que nos están corriendo, pero la fiesta apenas va a empezar.
Y fue ahí cuando el ajo hizo lo suyo, empecé a sentir la sensación de bailar elevada y de sonreír como estúpida. Ya eran las tres de la madrugada, entre los músicos estaba el tecladista de 31 minutos y yo quería conocerlo, pero me decepcioné un poco porque en lugar de tener una conversación divertida o interesante, estaba muy borracho y sólo quería saber con qué me había drogado para invitarme a otro lugar, preguntaba insistentemente a dónde íbamos a ir, no sé, no me cayo bien…
Queríamos seguir bailando así que nos mudamos a La Puri, pero llegamos justo al cierre, cuando todo ya estaba muerto; había un montón de vatos sin camisa, todo olía a sudor y humanidad, y podía alcanzar a ver varios bultos de cuerpos mezclados en las esquinas, esa fue la etapa angustiante del ajo, comencé a pensar que no había sido una buena idea comérselo y le llame a Diego, quería escuchar su voz…la llamada no se escuchaba bien y eso me produjo mucha angustia, vinieron las palpitaciones, la falta de aire y quise irme a casa, pero escuche la voz de Clau gritándome:
¡Wey vamos a Soberbia, esto ya fue!
Ella me vió mal y se acercó.
CLAU: ¿Qué onda? ¿qué tienes?
VICTORIA: No sé, me siento mal.
CLAU: ¿qué sientes?
VICTORIA: Wey lo extraño un chingo… ¿por qué no viene?
CLAU: ¿Quién?
VICTORIA: Diego.
CLAU: No mames Diana.
Bruno, quien nos estaba escuchando, se acercó.
BRUNO: Diana disfruta la noche, él está en su cama dormido, seguro piensa en tí, pero no está aquí.
Entonces, caminamos hacia Soberbia, afuera, frente al escaparate con luces y maniquíes travestis, un hombre bigotón y panzón vestido de bombero le tomaba fotos a los maniquíes (adjunto pruebas). Siempre que estoy en ácidos pasan cosas así, por ejemplo, la primera vez, mientras yo me viajaba con el ondular de las luces de los semáforos, se subieron al metrobús en el que iba, dos enanos vestidos con smoking, no sé exactamente qué decir sobre eso, pero es muy loco ¿no?, es decir, es una muy buena forma de empezar el viaje.

También recuerdo que afuera de Soberbia había un hombre bajito con bata de doctor tomando temperatura en la entrada, y eso me pareció tan surreal, le pregunté si realmente era doctor y con acento argentino me respondió:
¿Crees que si yo fuera doctor, estaría acá parado? Soy actor, boluda.
Mi mente explotó, pensé que con el coronavirus se abrían nuevas posibilidades de trabajo para mí y mis compas y me dije a mí misma “tal vez no esté tan mal”.
Entrando al lugar escuchamos al Dj diciendo; “ya váyanse a sus casas, no voy a poner perreo, no todo en la vida es perreo.” Eso podría haber parecido un mal augurio, pero la verdad es que puso unas rolas buenísimas, desde Sweet Dreams, hasta Si te vas de Shaki, pasó por Mecano y Daft Punk, parecía que él y yo éramos uno mismo y le declaré mi amor. La noche se volvió mágica, en la barra bailaba un bailarín exquisito, nunca había visto a nadie bailar tan bien en ningún bar de República de Cuba.
La fiesta también era alucinante del otro lado de la barra, el Dj, la cajera, los bailarines y los meseros, cada uno eran personajes que le añadían fantasía a la noche, la cajera tenía toda la energía de una Harley Queen, los meseros parecían chambelanes y el DJ era como un rey posmoderno y arrogante, pero lo más importante es que todos ellos se estaban divirtiendo muchísimo. De pronto, el milagro sucedió: María Daniela de María Daniela y su sonido láser apareció, estaba tras la barra emborrachándose con estos seres. De vez en cuando le robaba el micrófono al Dj para decir que estaba ebria y que nos amaba y luego de un rato se subió a la barra para cantar. ¡Escuché a María Daniela en Soberbia, con mi mejor amiga en ácidos! Y la teníamos a escasos 3 metros, mientras coreaba su música, mi cerebro se pintó de rosa, quise besar a todo el mundo y pensé en lo afortunados que éramos todes de estar ahí en ese momento y compartir el baile y el sudor, pedí al cielo por enésima vez ser joven para siempre.
Cuando terminó de cantar, pude acercarme a decirle que también la amaba.
Casi al final de la fiesta, pusieron El baile y el salón, mejor despedida no pudo haber, salí cuando abrieron la puerta de emergencia, el ácido aún no bajaba, contemplé a Bruno y Claudia bailando y besándose en medio de la pista, sonreí.
Fuimos a casa de Clau a tratar de descansar, pero no dormimos sino hasta las cinco o seis de la mañana. Al día siguiente yo debía trabajar e ir a una entrevista de trabajo en Coyoacán, pero obviamente no me levanté y cuando iba camino a Coyo (tarde y hasta la madre del tráfico), comenzaron a llegar mensajes a mi celular diciendo que “debido a la cuarentena, todas mis temporadas se cancelaban”. En ese momento me bajé del autobús, no valía la pena llegar a ningún lado, todo se detuvo.
No es que me haya vuelto loca, pero un poco sí; lograr esas temporadas había sido un arduo trabajo y representaban nuestra entrada a un circuito mucho más profesional, además, no podíamos hacernos los tontos, la cuarentena anunciaba no sólo una pausa, sino más recortes al irrisorio presupuesto cultural, cierres de teatros y un golpe más a la crisis artística, que de por sí ya está de la chingada.
De alguna forma, la cuarentena era todo lo que estaba pidiendo, o lo que pensaba que quería, los primeros meses pude relajarme muchísimo, dedicar tiempo para hacer ejercicio y para escribir, sin embargo, por otro lado, sé que eso sólo ha sido posible porque estoy en el lado de los privilegiados, tengo trabajo y tengo casa, nadie de mi familia se ha enfermado y blablabla.
Lo que yo quería realmente y aún quiero, es encontrar un trabajo digno, que me emocione y en donde me paguen lo justo, de hecho eso es lo que queremos todas, por eso ha sido tan difícil para mí enfrentar esta pandemia, porque ha traído más incertidumbres de las que puede tener cualquier persona a sus 26, nos tocó una época extraña, el apocalipsis permanente.
He pasado por muchas crisis en esta cuarentena, y una de ellas me ha permitido reafirmar que es esencial fortalecerse en soledad antes que buscar que otros te fortalezcan o sirvan de refugio, porque eso de alguna forma es postergar las verdaderas luchas con una misma. Durante la cuarentena tomé la decisión de vivir sola y ha sido una lo mejor que pude haber hecho, porque estoy construyendo mi propio refugio, no es nada lujoso en comparación a los departamentos de algunos chicos de Tinder, pero es mío y es perfecto.
Además, la cuarentena ha sido ideal para trabajar mi soledad, gracias a ella he descubierto el placer del ocio, de pasar horas sin hacer nada “productivo”, cada vez dedico más tiempo a estar conmigo misma, a cocinarme, bañarme, ver películas, masturbarme, etc.
Aunque agradezco todo esto, no dejo de tener sentimientos encontrados, como todas, ya quiero que esto termine, y no sólo que termine sino que suceda algo, que aquellas quienes nos pudimos fortalecer durante el encierro, salgamos más armadas que nunca a enfrentar junto con otras las luchas que tengamos que enfrentar, desde el acosador del transporte público hasta el reconocimiento de nuestros trabajos.
Hoy es un buen día, gracias por leerme, suya Victoria.
Les dejo algunas cosas que he hecho durante la cuarentena, si quieren, aprovechen este espacio también para compartir sus aprendizajes, obras, o habilidades adquiridas en cuarentena :P, que de algo sirva. Besos.
youtube
youtube
youtube
0 notes
Text
Alv: 50 cosas sobre Versh Martz (Osea yo, morros).
1 - Me llamo Oliver debido a que una tía era fan de los Super Campeones (Captain Tsubasa) y ella eligió mi nombre.
1.5 - Me refiero a mi mismo como Versh (Con la esperanza de que los demás lo hagan) porque es una acortación de una versión censurada de un apodo muy vulgar que no me gusta (Versh<Oliversh=Oliverga) y este apodo me lo puso una chica que estaba ebria y me pidió un beso (Me lo pusó porque me negué a besarla).
2 - Soy mitad istmeño por mi madre y mitad vallista por mi padre. 100% oaxaqueño (Al menos por mis padres).
3 - Soy hijo único, aunque mi madre quería tener un hijo mas (No le importaba si fuese niño o niña).
4 - No se hablar didxazaa (zapoteco del Istmo de Tehuantepec) aunque siempre he querido aprender.
5 - Considero a mi bisabuelo Maxi como mi verdadero abuelo paterno (Te amo, Maxi).
6 - Me gustan mucho las flores porque mi abuela materna tenía una florería en el mercado de Tehuantepec.
6.5 - Siempre he soñado con que la mujer con la que llegue a formar una familia me regale flores (Mis flores favoritas son las bugambilias, los hibiscos, las guiechachi, las gardenias y las rosas).
7 - Mi tía preferida materna es la hermana mayor de mi madre, se llama Elida y es una segunda madre para mí. Ella es buena haciendo pasteles.
8 - Mi tía preferida paterna es la 2da hermana de mi padre (Quien es el hermano mayor de la familia) Se llama Rosalía y siempre ha sido muy cariñosa conmigo.
9 - Conozco casi nada del padre de mi padre, al cual no reconozco como mi abuelo y cierto que, aunque sea incorrecto, le tengo cierto desprecio.
10 - Mi abuelo Maxi partió a un rumbo hacia el descanso perpetuo 1 mes antes de que yo iniciara la carrera y eso me ha generado un miedo grande a perder a mis abuelos restantes. Ellos son de lo poco que me hace feliz fácilmente.
11 - Mis animes favoritos son Dragon Ball (Z, GT, Super y Heroes), Great Teacher Onizuka, Nanatsu No Taizai, Mobile Suit Gundam: Tekketsu No Orphans y Full Metal Alchemist (La primera versión y Brotherhood).
12 - Mis series animadas (no japonesas) son Coraje el perro cobarde, Star Vs The Forces Of Evil, Steven Universe, Samurai Jack y Avatar: The Last Airbender.
13 - Mis sagas de videojuegos favoritas son Metal Slug, Assassin’s Creed, Dead Space, Gears of War y Dishonored.
14 - Mis sagas de películas favoritas son John Wick, The Equalizer/El justiciero, Depredador, el universo cinematográfico de Marvel y Jurassic Park/World.
15 - Mis personajes predilectos de los cómics son Batman, The Punisher, Daredevil, Doctor Strange y Spiderman.
16 - Mis obras literarias preferidas son los Mitos de Cthulhu (Contándolo como una sola gran obra aunque esté escrito por un chingo de personas a parte de Lovecraft), La isla del tesoro de Robert Louis Stevenson, el Popol Vuh, Siddhartha de Hermann Hesse y La Fabrica Creator de Patricia García-Rojo.
17 - Mis culturas favoritas son la mexica, la sumeria, la japonesa (antigua), la nórdica y la zapoteca istmeña.
18 - Mis temas de conversación mas usuales son música, el cosmos, cocina istmeña, cerveza artesanal y dragones (y otras criaturas mitológicas).
19 - Mis comidas favoritas son: Las tlayudas, las picaditas, la cecina enchilada, los camarones empanizados o al mojo de ajo y los chilaquiles con salsa verde.
20 - Mis bebidas favoritas son cervezas artesanales (la gran mayoría, aunque los estilos que mas me fascinan son las stouts y las IPA’s), el mezcal, el sotol, el agua de coco y el agua de chilacayota.
21 - Solo he tenido 2 noviazgos, nada especiales ni memorables.
22 - Mi mejor amigo se llama Dalí como el artista.
23 - Considero a más de una persona mi mejor amiga, una chica que tiene ojos de ópalo marrón y tiene mis mismos apellidos casualmente, una bruja del viento, una amiga que conocí por ser novia de otro amigo y una amiga que siempre me ha parecido la encarnación de la ternura (Pilar, Jocelyn, Celeste y Nancy).
24 - Me intenté quitar la vida 7 veces, de las cuales 6 fueron en días 15 de febrero.
24.5 - Llevo 2 años sin intentos de suicidio.
25 - He intentado ir a psicólogos en 3 ocasiones, en las 3 terminé incomodo y disgustado...
26 - Le tengo miedo a la soledad.
27 - Le tengo miedo a la oscuridad.
28 - Solo he llegado (hasta la fecha) a odiar verdaderamente a una persona.
29 - Amo mucho a alguien que nunca me corresponderá y trato de digerirlo desde hace 2 años.
30 - Cuando duermo suceden solo 2 cosas: O tengo sueños en los que estoy con una pareja imaginaria que (hasta donde sé) no existe en vida real o tengo pesadillas muy macabras.
31 - Mis 6 bandas de Metal/Core favoritas son Slipknot, KoRn, Arcadia Libre, Rings Of Saturn, Attila e Ill Niño.
31.5 - Ya he podido ver a todas mis bandas favoritas en vivo.
32 - Mis 6 bandas/artistas favoritos que son Rock/Pop/Indie son Carla Rivarola (Antes Iranti), Richard Nats, Tessa Ia, Cat Clyde, Bernardo Sanchez y Atamante.
33 - Los géneros que me maman son el deathcore, el tech death, la cumbia, el nu metal, Pop/Rock Progresivo y vintage y el jazz en general.
34 - Se tocar (aunque sea un poco) instrumentos como batería, flauta dulce, bajo y guitarra.
34.5 - Carla Rivarola dijo que tengo una linda voz, supongo que no canto mal pero me da risa imaginar que sepa que hago guturales (No se si lo sabe).
35 - Mis canciones favoritos: Set Course From Andromeda de Sithu Aye, Killjoy de Richard Nats, Duality de Slipknot, Right Now de Korn, Medula Silvestre de Carla Rivarola y Humano de Arcadia Libre.
36 - Gustos raros que tengo: Sopor Aeternus And The Ensemble Of Shadows, Winny Puh y Vitas.
37 - Las bandas más pesadas que yo he escuchado son Signs of Swarm, Brand Of Sacrifice, Hunt The Dinosaur, Drop The Silence y Shadow Of Intent.
38 - Canciones de mis raizes: Dios Nunca Muere, Tortuga Del Arenal y La Llorona.
39 - Géneros que me aburren: Reggaeton, Bachata, Regional Mexicano Norteño y Pop comercial.
40 - Bandas de Metal que no me gustan: System Of A Down, Rammstein, Megadeth y Linkin Park.
41 - No me gusta que me digan chef.
42 - Quiero hacer un gastropub de cocina istmeña y cerveza artesanal mexicana.
43 - Quiero rescatar la mayor parte que me sea posible de la gastronomía del Istmo de Tehuantepec.
44 - Quiero reformar el restaurante de mis padres.
45 - El nombre del gastropub será “Laura: Son y Sazón”.
45.5 - Se debe a que Laura es el nombre de mi madre, Son se refiere a los sones musicales y a la palabra en inglés son, que significa hijo y sazón... es obvio.
46 - Tengo un universo de ficción que quiero meter en 16 libros.
47 - Este año (2019) estrenaré el primer libro de Crónicas de Landerra, llamado “La perla de Hock, el caballero de cristal y el legado olvidado”.
48 - El mundo tiene elementos de fantasía y ciencia ficción, me atrevo a decir que es el genero es Sci-Fantasy.
49 - El protagonista tendrá 2 hijas con nombres que le quiero poner a unas hijas mías en el futuro (Delilah y Solara).
50 - Me gustaría hacer una banda de Deathcore/Metalcore Progresivo con amigos en el futuro.
0 notes
Text
El día de ayer fui a una fiesta, hace mucho que no iba a una.
Me dí la oportunidad de reconciliarme con esa parte de mí, de intentar disfrutar ese tipo de cosas de las que todos siempre hablan y gozan.
La verdad es que, no ocurrió absolutamente nada.
La fiesta fue hecha por un conocido a razón de su cumpleaños. La verdad es que, él a cumplido 31 y, como era de esperarse, su visión sobre las cosas ya eran distintas.
El un hombre de 31 años que sigue comportándose como si tuviese 20, quizás por no disfrutar del todo su adolescencia.
Hubo la misma música de siempre: salsa, cumbia, ska, reggae y bachata. Se repitió dos veces la lista. La gente bailaba ebria, y yo no entendía y sigo sin entender porqué les causa tanta satisfacción bailar. Gente hablando, bebiendo, buscando a quién darse, a quién no, conviviendo y demás.
Fiesta de terreno baldío, similares a las que se hacen en la preparatoria y/o universidad. Ponen una cazuela gigante con hielos y cervezas. La gente, puede ponerse tan ebria que pierde los estribos.
Y, admitiré que por la primera hora fue divertido, pero el siguiente tiempo fue devastador.
Y la gente seguía bailando. Y ni siquiera era un baile con pasión, era un baile aguado, de esos bailes que se han repetido en todas las fiestas con las mismas canciones. Se vuelve mecánico.
Personas de todas edades, viviendo sus momentos "románticos", al lado de la cazuela de cervezas, el ruido adormecedor de la cumbia, el olor a cigarros, mota y tierra.
Liberando la líbido con los chicos o chicas que pasan alrededor. Platicando de trivialidades para definir que lo que no importa, sí importa. Hablando de nuestros trabajos, experiencias, estudios y, por supuesto, POLÍTICA.
Las mujeres, desconozco cuáles sean sus temas preferidos de "pedas".
Salí corriendo, no duré más de dos horas. Y aunque bebí, recuerdo qué estúpido es eso.
Entonces, también recuerdo porque no me gustan las fiestas ni ese tipo de convivencia.
Si alguien quiere ir de fiesta cada fin de semana a llenarse los zapatos de tierra y oler agrio a causa del alcohol, es cosa suya. Cada quién decide cómo destruirse.
Yo, decido la soledad, es menos escandalosa.
0 notes
Text
ruano
En el boliche sonaba una canción de cumbia y todos nos movíamos y bailábamos muy rápido. Pero, yo, con un porro ya dentro mio, veía todo en cámara lenta y yo no escuchaba cumbia, yo escuchaba Chamber of reflection de Mac Demarco. Veia la oscuridad que se perdía en luces redondas de colores amarillos rojos, azules, verdes, rosas. Dani y Karen bailando despacio, con los ojos cerrados, y yo, como Renton en Trainspotting, como una película de Refn, como en un club de strippers de película de policías, como descubriendo una pista recién dada por una puta.
Yo, así, me entregue a la joda.
Los espejos enfrentados del boliche nos reflejaban, y a su vez nos replicaban infinitamente, multiplicaba el cuadro, y en todos los reflejos bailamos despacio y con los ojos cerrados. Nos golpeamos los vasos y nos mojamos un poquito, pero sin enojarnos. Juan me mira como cómplice, como diciendo yo también veo todo despacio, yo también fume un porro y entre acá oliendo a pinot noir.
Y en el medio de todo esto voy al baño. Subo una escalera estrecha de metal que me lleva a un baño casi igual de estrecho. Solo hay dos mingitorios y un espejo. Elijo el que esta del lado de la ventana y veo terrazas. En el piso hay papel mojado, chicles y meo. Veo por la ventana y ademas de terrazas hay ventanas. Las ventanas góticas de la facultad de ingeniería y su fachada que a su vez me observa como diciendo Buenos Aires es barroca y esta tan inconclusa como yo, es tan barroca que hasta desde un baño de mierda podes ver la catedral de Berlin.
Vuelvo y todos nos decimos cosas en el oído que no entendemos, que asentimos y que no contestamos y que seguramente no importan. Todos nos pisamos los pies y la idea de coger nos acecha. Para todos nosotros coger esta prohibido. Pero acá no somos nosotros, acá te puedo tocar las manos, la cintura, acercarnos las caras para bailar y no pasa nada. Te puedo decir que vengas a un costado y te puedo agarrar de la nuca y besarte, y tocarte el culo, y cerrar los ojos y ver arboles, o ver lineas de colores, o ver mi casa de la infancia, ver una taza cayéndose, sentir los pelos bien finos de tu nuca, sentir qué suave es la tela de tu pantalón, y por ahí se me para ¿entendés?
Pero esta bien, porque no somos nosotros y todos los otros cuando nos ven no se ponen raros, se ríen de nosotros y nos imitan, pero no son ellos, son otros, como los que se duplican en las paredes. ¿Cual de todos esos somos nosotros?- te digo y vos me miras y me decís que todos y que nadie, porque también fumaste porro y entraste acá oliendo a pinot noir. Y pienso que aunque este prohibido por nuestras vidas comprometidas que viven fuera de este lugar, adentro de este lugar te deseo y te miro como en cámara lenta pero cada vez menos, cada vez es mas vértigo y velocidad. Cada vez que abro un poco los ojos mientras bailamos, veo tus cejas y tu frente y tus ojos cerrados, y de tan cerca que estas también sos todas las mujeres que estuvieron en la misma situación que vos en algún momento de mi vida.
Pero nos vamos, nos encontramos con el viento frio en la cara y nos fumamos un cigarrillo mientras esperamos a Juan y su auto, vemos gente mas borracha que nosotros y nos reímos y nos cagamos de frio. Subimos al auto y terminamos en una pizzeria con dos pizzas gigantes y una jarra de cerveza adelante nuestro. Comemos en ese lugar tan blanco y tan sucio, con mozos viejos que atienden gente como nosotros toda la noche. Un lugar donde los carteles están pintados a mano y los baños están abajo, no arriba, y la escalera es una espiral.
Y bajo a mear de vuelta, y hay un pasillo muy largo que me conduce a una puerta entreabierta, donde hay mas mingitorios, y hay un tipo masturbándose en uno, mirando un rincón, borracho, como mirando la catedral que yo vi antes pero en los azulejos blancos o mirando una catedral cubierta de azulejos blancos y un poco sucios, como viendo las dos torres que no existen y que no van a existir. Y el borracho mira al vació y yo meo dos lugares a la derecha. Hay una maquina de preservativos vacia con la imagen de una mujer medio en pelotas y solo una de las canillas anda. Cuando subo la escalera se hace infinita, el espiral no termina, pero en realidad si, y me encuentro frente a un pizzero aburrido, todo manchado de blanco, leyendo el diario. Tiene un sombrerito blanco, pero la piel es colorada, supongo que de estar mirando el fuego de ese horno de piedra 8 horas por día. Antes de irnos dejamos una propina abultada por 2 cosas: porque somos camareros y porque estamos borrachos.
De vuelta en el auto, nos trasportamos hasta el frente rosa de una casa de Villa Ortuzar, barrio de casas bajas, supermercados chinos y calles empedradas anchas.
Un perro muy grande me salta encima, se llama Umo y es un weimaraner gris, me informan después.
Enseguida, cuatro copas, y un vino abierto.
Karen tenia un corcho en la mano y un Camel en la otra. El Camel era mio, el corcho de un Tempusalba Cabernet Sauvignon que ya estaba vacío. Umo buscaba desesperado el corcho que Karen fingia tirarle. Yo, ebrio, miraba la escena desde el sillón con una copa en la mano. Quede absorto contemplando a Karen, también ebria, jugar como una niña, saltando y corriendo en sus shortcitos como una especie de niña hiperactiva.
Juan y Dani cocinaban omelettes y en el cielo ya amanecía. Y los omelettes quedaron babés, lo que, según todos, los hacia mejores.
0 notes
Photo

Cumbia Ebria en el Blanco Bar de Tenerife, 2010
0 notes
Video
vimeo
Videoclip de Cumbia Ebria, Sácalo escúpelo
David Gp. Lanzarote 2012.
0 notes
Video
youtube
Los Carniceros del Norte La original:
http://youtu.be/wKhATncCiQc Al loro con la divertida versión de Jaime Urrutia. Gabinete Caligari:
http://youtu.be/p8mxQ_eP61U Parabellum:
http://youtu.be/BOkTlizW1JE
La broma de Ssatán:
http://youtu.be/eo_0uYPOScU
Konflikto:
http://youtu.be/z934EDaaMX8
Miseria y kompañía:
http://youtu.be/J6Cgcal9A2E
Monkey Hole
Barbietúrikos
Cumbia Ebria - Grooveshark
#barbieturikos#cover#cumbia ebria#gabinete caligari#jaime urrutia#konflikto#la broma de ssatan#los carniceros del norte#monkey hole#musica#parabellum#paralisis permanente#tejas#un dia en texas#version#versiones#miseria y kompañia
0 notes