#colaboracionistas
Explore tagged Tumblr posts
Text
Silvia,
No hay que discutir con un colaboracionista. No tienes que hablar muy rápidamente, bajo la presión infernal de estos criminales de masa. Cuando empieza como empieza aquí, diga : "No es nuestro problema, el simple hecho que COMETAN CRÍMENES (y no diga "delinquir" porque delinquir es la 2nda zona de la criminalidad) anula todos tus "argumentos" lacrimales. Si continuas hablar de esto intentando culpabilizarnos y criminalizarnos como "racistas", es que APOYAS esta criminalidad (y la delincuencia), y estamos trabajando para añadir en nuestro programa los castigos legales contra gente que apoya criminalidad y delincuencia, y que ataca sin nunca parar la gente que rechaza el crimen y la delincuencia. Hace décadas que esta mierda dura y tenemos la firma intención de pararla".
Basile Pesso, Land of Somewhere, 17 de julio de 2 024
#basile pesso#silvia orriols#spain#catalonia#combatir la neo colaboracion#combatir el neo-izquierdismo#combatir el crimen#castigar los colaboracionistas
1 note
·
View note
Text
La ecología identitaria de la Agrupación Nacional
Traducción de Juan Gabriel Caro Rivera
Entrevista a Stéphane François por Sarah Sermondadaz, “Le Rassemblement national prône une écologie superficielle, une écologie de carte postale”, The Conversation, 25 de junio de 2024.
¿Qué es la ecología de extrema derecha y cuál es su origen histórico?
La ecología conservadora apareció a partir de finales del siglo XIX, esta ecología pretendía preservar el medio ambiente en un sentido muy amplio e incluso dando un giro rousseauniano: la naturaleza era concebida como algo que no podía ser tocado por la acción humana. En Europa, sus raíces se encuentran principalmente en Alemania, que entre 1860 y 1880 pasó de ser un país casi medieval formado por principados, estados y ciudades libres, a un país unificado en torno a Prusia y que experimentó una industrialización masiva. Se convirtió entonces en la 2ª potencia económica del viejo continente, por detrás del Reino Unido. Pero esta modernización no estuvo exenta de una enorme violencia contra el pueblo.
En los círculos ultranacionalistas alemanes de la época, como el movimiento völkisch – palabra difícil de traducir hasta el día de hoy, pero que se basaba en el racismo, el populismo y el etnonacionalismo –, se rechazaba la Modernidad y se defendía una Alemania más arcaica, incluso pagana. Este movimiento fue el primero en Europa en insistir en la necesidad de proteger el agua, el aire, etc. Preocupaciones medioambientales más que ecológicas, ciertamente, en consonancia con una concepción romántica del mundo.
El nazismo fue también un partido völkisch. Tras la Segunda Guerra Mundial, el movimiento tuvo vínculos con una serie de figuras radicales de la extrema derecha europea, sobre todo francesa.
Entonces, ¿la extrema derecha no se ha “reapropiado” de las cuestiones ecológicas?
Precisamente. Es un error que algunos ecologistas de izquierdas piensen así. Es el mismo problema que se comete con la idea de nación y el nacionalismo. Desde un punto de vista histórico, la nación fue originalmente una idea de izquierdas que surgió durante la Revolución Francesa, con el pueblo en armas y demás teorías. Un siglo después, se había convertido en una idea de extrema derecha, aunque entonces todavía estas ideas no fueran denominadas así. A menudo, en la historia de las ideas, las palabras pueden cambiar de campo político o ideológico.
¿Qué distingue a la ecología de “izquierdas” de la de extrema derecha?
En la década de 1960 vimos una explosión de un discurso ecologista de izquierdas bastante libertario y que coexistió con otras corrientes como las antes mencionadas. La ecología identitaria buscaría defender la nación – o incluso la raza, en el caso de los movimientos (neo)nazis – mientras que la ecología de izquierdas defendería a las minorías de origen inmigrante y a las minorías sexuales y de género.
Pero debemos tener en cuenta que la ecología identitaria también pretende defender a ciertas minorías: las minorías etnoregionalistas. En Francia, estos movimientos regionales, como sucede en Bretaña (1), pueden tener fuertes afinidades con la extrema derecha (2). La idea, defendida en particular por el movimiento identitario Terre et Peuple, es que cada nación tiene una etnia y que se debe defender este etnoregionalismo. Sin embargo, más allá de esta gran diferencia, puede haber temas comunes entre el ecologismo de izquierdas y el ecologismo identitario.
¿Quiénes han sido los principales ideólogos de esta ecología identitaria en Francia desde la Segunda Guerra Mundial?
En la época del régimen de Vichy, aunque podemos decir que algunos de los altos funcionarios y tecnócratas del momento ya eran muy tecnófilos, existía la idea de “la tierra que no miente”, por utilizar una expresión petainista. Posteriormente, después de que la guerra acabó vemos como surgen en Francia discursos ecologistas en la extrema derecha. Henry Coston (3), por ejemplo, colaboracionista, antisemita, antimasón y notorio teórico de la conspiración, era cercano a las antiguas SS, pero también fue uno de los pioneros franceses de la agricultura ecológica como lo demuestra el equipo de La Vie claire. Coston promovía una ecología que iba de la mano de un rechazo de la tecnología.
Estos discursos reaparecieron de la mano del movimiento völkisch alemán y en conexión con antiguos miembros de las SS que tenían una concepción pagana del mundo. Cada grupo étnico está vinculado a un territorio, incluso a un terruño, poseyendo sus propias prácticas paganas.
La ecología identitaria völkish impregnó posteriormente los círculos nazis, neonazis y de extrema derecha franceses y luego, de forma atenuada, al movimiento de la Nueva Derecha (corriente de pensamiento político de extrema derecha de tendencia nacional-europea surgida en 1969). El primero fue Dominique Venner (4) y el movimiento de extrema derecha Europe Action, y después el Groupement de recherche et d'études pour la civilisation européenne (GRECE), una rama de la Nueva Derecha.
Los Grecistas retomaron posteriormente la tesis, formulada en 1966 en una célebre conferencia del estadounidense Lynn White Junior en su discurso sobre “Las raíces históricas de nuestra crisis ecológica” (5), de los orígenes cristianos (especialmente católicos) del actual desastre ecológico.
A partir de la segunda mitad de los años 70, estos discursos de inspiración nazi resurgieron en el seno de la Nueva Derecha, en particular bajo el impulso de los antiguos miembros de las SS en las actividades del GRECE como lo fueron Saint Loup (Marc Augier) (6), Robert Dun (Maurice Martin) (7) y Robert Blanc (8). Luego, junto con otros radicales del GRECE, terminaron por irse y conformar Terre et Peuple, la organización fundada por Pierre Vial, que se convirtió en una corriente dentro del FN y luego en una entidad autónoma. Este fue uno de los primeros grupos identitarios franceses en existir.
Alain de Benoist, principal representante del movimiento de la Nueva Derecha, desempeñó un papel central aquí: desde mediados de 1970, se alejó de la corriente tecnófila dentro del GRECE y redescubrió a los pensadores “tradicionalistas” como René Guénon (9) y Julius Evola (10). También se interesó por la filosofía de Martin Heidegger (11), cuyo discurso estaba impregnado por el pensamiento völkisch. Así se forjaron los conceptos ecológicos de los elementos radicales del movimiento identitario francés.
¿Cuál es el legado actual de esta ecología para el FN y posteriormente para la RN?
El Frente Nacional (FN), bajo la presidencia de Jean-Marie Le Pen, nunca ha tenido un gran interés por la ecología. Le Pen fue elegido por los miembros de Ordre Nouveau, que crearon el FN, con tal de tener una figura menos polémica como líder de la extrema derecha. Le Pen procedía del movimiento petainista, el cual se reintegró en la vida política francesa tras la Segunda Guerra Mundial, y que era más bien liberal en lo económico.
En el FN/RN encontramos una yuxtaposición según los periodos: por un lado, una ecología de extrema derecha teorizada por sus elementos más radicales y, por el otro, un desinterés enorme por parte de los cuadros del partido acerca de este tema. El nivel de interés por la ecología fluctuó con la llegada y la salida de las figuras más radicales.
La primera vez que el FN se ocupó de cuestiones ecológicas fue cuando Bruno Mégret, que había sido miembro del GRECE, se afilió al partido. Comprendiendo que el comunismo había desaparecido y que había que encontrar un nuevo enemigo, defendió un “ecologismo nacional” (12) vinculado a la ecología de las poblaciones y concibió el discurso del FN en torno a la noción de identidad.
La segunda vez fue cuando Marine Le Pen se hizo con el control del partido e incorporó a Laurent Ozon, ecologista y antiguo militante del GRECE. Ozon acabó dimitiendo en el 2011 a raíz de unos tuits de apoyo a los terroristas de Oslo (13).
El tema ecológico decayó dentro del FN hasta la llegada de Hervé Juvin (considerado ministro de Ecología por Marine Le Pen durante su campaña de 2017), pero este eurodiputado fue condenado por violencia doméstica en el 2022 (14).
Teóricamente, hoy en día queda Andrea Kotarac, estrecho colaborador de Juvin y disidente de la izquierda, pero su discurso es inaudible.
En otras palabras, no hay una figura claramente definida que pueda encarnar el papel de ministro de Medio Ambiente en un gobierno del RN.
Sin embargo, el discurso del FN (ahora RN) ha evolucionado: durante mucho tiempo, Jean-Marie Le Pen lo consideró una “preocupación bobos” ...
Ya en el 2011-2012 (15) Marine Le Pen hizo comentarios escépticos acerca del cambio climático. Después de que fue atacada por ello, se ha vuelto prudente. Sin embargo, su programa para las elecciones presidenciales de 2017 no contenía prácticamente nada sobre ecología. El punto de inflexión llegó con las elecciones europeas de 2019 (16).
En su programa del 2022 las palabras que más aparecían en su programa eran soberanismo y nación, no ecología. Más recientemente, ha criticado la llamada ecología “punitiva” (17) frente a la llamada ecología “positiva” (18), la cual nunca ha definido. Su defensa del campo francés se limita a las postales,
El discurso del FN/RN sobre la ecología es muy superficial. Se reduce a preservar el patrimonio visual y los paisajes: nada de turbinas eólicas, nada de energía fotovoltaica. El RN es ahora un partido muy tecnófilo que defiende el desmantelamiento de los aerogeneradores y los paneles solares y la reactivación de la energía nuclear. Al mismo tiempo, los eurodiputados del FN y luego los de RN siempre han hecho comentarios muy agresivos (19) sobre los informes del IPCC.
¿Qué queda del programa ecológico de RN para las elecciones legislativas?
Creo que lo vimos claramente en el 2023 durante el debate entre Jordan Bardella y Hugo Clément (20): donde uno hablaba de ecología, el otro sólo hablaba de inmigración. De hecho, Jordan Bardella es muy cercano a la línea identitaria. El RN es, por así decirlo, el único partido que nunca ha tenido un programa ecológico.
Esto nos lleva a la segunda parte de su pregunta: lo que “quedaría de ecología” en el programa del RN es el localismo. Pero este término no es sinónimo de ecología: que algo se produzca localmente no significa necesariamente que sea mejor, aunque limite el impacto climático del transporte. El localismo también significa alabar la producción “en casa” en lugar de “en la de ellos”, lo que encaja con el nacionalismo.
Desde el año 2000 los identitarios han invertido mucho en ciertas AMAP (Associations pour le maintien de l'agriculture paysanne - asociaciones para el mantenimiento de la agricultura campesina) (21), aunque no siempre de forma explícita. En el fondo, el problema reside en las múltiples acepciones de la palabra “local”. La ecología defendida por el RN sigue siendo muy superficial. Más allá de la defensa de lo local y del campo, ninguna campaña del FN o del RN ha defendido nunca las zonas húmedas (marismas, por ejemplo) para proteger la biodiversidad...
De forma más general, ¿podemos hablar, como hace Antoine Dubiau en su libro homónimo, de ecofascismo (22) en ecología política?
En mi opinión, el mismo término de ecofascismo es problemático. ¿Cómo definirlo? Es muy polisémico. Si eres liberal o libertario consideras que un ecofascista es alguien que quiere imponer medidas restrictivas, alguien que quiere una ecología punitiva y autoritaria. Por otro lado, algunos ecologistas piden un régimen fuerte con tal de imponer reformas difíciles, porque piensan que jamás serán aceptadas de forma democrática. Por último, hay neofascistas que dicen ser ecologistas, como el autoproclamado ecofacista Brenton Tarrant (23), que mató a 51 personas en Christchurch (Nueva Zelanda) en 2019. Al mismo tiempo, la mayor parte de la extrema derecha rechaza la etiqueta de fascista, considerándola como descalificadora. El término es demasiado polisémico para ser útil.
Stéphane François, Político, historiador de las ideas, investigador asociado de la EPHE, profesor de Ciencias Políticas en la Universidad de Mons, Agencia Universitaria de la Francofonía (AUF).
Notas:
1. https://www.mediapart.fr/journal/france/050124/en-bretagne-tour-tan-brandit-la-culture-regionale
2. https://france3-regions.francetvinfo.fr/bretagne/morbihan/vannes/extreme-droite-qui-est-an-tour-tan-le-groupuscule-breton-present-dans-le-cortege-d-ultradroite-a-paris-2769770.html
3. https://laviedesidees.fr/Le-ble-noir
4. https://theconversation.com/politiques-identitaires-et-mythe-du-grand-remplacement-117471
5. https://bibliotheque.univ-catholille.fr/Default/doc/SYRACUSE/431630/les-racines-historiques-de-notre-crise-ecologique-lynn-t-white-jr?_lg=fr-FR
6. https://fr.wikipedia.org/wiki/Saint-Loup_(%C3%A9crivain)
7. https://fr.wikipedia.org/wiki/Robert_Dun
8. https://www.retronews.fr/politique/bonne-feuille/2018/08/28/collabos-rechappes-epuration
9. https://fr.wikipedia.org/wiki/La_Tradition_selon_la_perspective_de_Ren%C3%A9_Gu%C3%A9non
10. https://fr.wikipedia.org/wiki/Julius_Evola
11. https://theconversation.com/heidegger-in-ruins-grappling-with-an-anti-semitic-philosopher-and-his-troubling-rebirth-today-200826
12. https://www.liberation.fr/france-archive/1996/11/18/le-fn-programme-un-national-ecologismemegret-vante-les-lois-naturelles_188248/
13. https://www.lemonde.fr/politique/article/2011/08/15/fn-le-malentendu-laurent-ozon_5981795_823448.html
14. https://www.lemonde.fr/politique/article/2022/11/07/l-eurodepute-herve-juvin-condamne-pour-violences-conjugales-ecarte-par-le-rassemblement-national_6148872_823448.html
15. https://www.liberation.fr/checknews/debat-presidentiel-marine-le-pen-est-elle-climatosceptique-20220420_AZ55DS2LURCXLIAR2OJ5FYTE2U/
16. https://www.lemonde.fr/politique/article/2019/04/15/derriere-le-virage-ecologique-de-marine-le-pen-l-obsession-de-l-immigration_5450173_823448.html
17. https://www.lemonde.fr/politique/article/2022/04/15/marine-le-pen-oppose-son-ecologie-nationale-a-l-ecologie-punitive-d-emmanuel-macron_6122325_823448.html
18. https://www.jean-jaures.org/publication/elections-europeennes-que-veut-le-rassemblement-national-sur-le-climat/
19. https://www.humanite.fr/environnement/ecologie/climat-lanti-ecologisme-ligne-de-conduite-du-rn-au-parlement-europeen
20. https://www.leparisien.fr/environnement/je-le-referais-sans-hesiter-hugo-clement-justifie-sa-participation-a-la-soiree-de-valeurs-actuelles-14-04-2023-MY54KGRE35HQLIOZPRBT4D6PRM.php
21. https://www.slate.fr/story/59077/extreme-droite-ecologie-bio
22. https://www.babelio.com/livres/Dubiau-cofascismes/1414224
23. https://theconversation.com/le-retour-de-lecofascisme-122339
Fuente: https://tempspresents.com/2024/06/26/lecologie-identitaire-du-rn/
2 notes
·
View notes
Text
Centro Ex Combatientes Islas Malvinas La Plata (CECIM) presentaron un recurso de amparo contra la derogación de la Ley de Tierras (contemplado en el DNU) que habilitaba la compra sin límite de tierras por parte de extranjeros. La Cámara Federal de La Plata falló a favor del "amparo colectivo" del Centro de Ex Combatientes Islas Malvinas La Plata (CECIM) -que impugnaron la norma que consideran lesiva para la soberanía nacional- por tratarse de "una asociación de quienes debieron empuñar las armas en su defensa". Además de considerar que no existieron causas "excepcionales" que justificaran la necesidad y la urgencia del Decreto. El fallo solo puede ser apelado ante la Corte Suprema.
Gracias a los veteranos por su dignidad y coherencia, por defender hoy el suelo de la patria del colonialismo y de sus cipayos colaboracionistas.
3 notes
·
View notes
Text
Tercer Grado y Sheinbaum: claudistas, claudicantes y Televisa con AMLO
Los destruyeron. Dentro y fuera de todas las “redes sociales” fueron destruidos los integrantes de la mesa de opinión de Tercer Grado. No merecían menos: su “entrevista” a Claudia Sheinbaum es un tapete tejido con su cobardía y los intereses de Televisa, y adornado con los “prestigios” de Genaro Lozano, Denise Maerker, Leo Zuckerman, Sergio Sarmiento, Raymundo Riva Palacio, etc. Hasta pareció entrevista de Inna Afinogenova a López Obrador.
No sorprende nada en el caso de Genaro Lozano, mediocre e insufrible politólogo falso, profesor por superficialidad estúpida de ciertas universidades, operador mediático claudista (vea mi crítica al maestrito Lozano en el volumen 2 de Los Farsantes de la 4T). No sorprende tanto de la Maerker. Sí confirma el pésimo momento de Zuckerman. Lo peor que le pudo pasar a Leo es trabajar para Televisa en un sexenio como el de AMLO. En general, la entrevista fue un pésimo trabajo, pésimo trabajo periodístico, si se le puede llamar periodismo al partidismo hipócrita de Lozano, el fingimiento de equilibrio de Maerker y la claudicación cobarde u oportunista de los demás. De los claudicantes como Leo Zuckerman.
Hace unos días Televisa publicó un reportaje contrario a Rocío Nahle. Lenta de reflejos para varios asuntos y siempre dispuesta a salvarle la cara a El Empresario Privado, la parte de la oposición a la que siempre critico (y los pejistas dicen que la oposición es bloque…) empezaba a defender a Televisa por ese reportaje. “AMLO la amenazó”, dijeron después, y así explican que haya pasado lo que pasó en Tercer Grado. “Los dobló con amenazas por criticar a Nahle”. En serio? Tienen memoria corta: Salinas Pliego defendió al gobierno la mayor parte del sexenio y Televisa nunca fue muy crítica. Lo dije mil veces: Televisa está con AMLO, y por eso AMLO nunca ha atacado a Emilio Azcárraga. Casi al final del sexenio, Televisa saca una pieza anormalmente crítica y AMLO el colérico grillo difamador no ataca personalmente a Azcárraga. Le hace un recordatorio que puede interpretarse como amenazante, pero que sobre todo es un recordatorio: sigamos como íbamos, sin atacarnos de veras, ganando los dos.
De hecho, se puede hacer la hipótesis de que Televisa sacó algo contra Nahle para intentar minimizar el daño de imagen que provocaría la cuestionada entrevista. Es imposible para mí creer que Sheinbaum haya aceptado ir a Tercer Grado sin garantías. Lo más probable me parece un acuerdo para que la entrevista fuera lo que fue, una entrega de la plaza... Claudia mandó ahí, se portó como le dio la autoritaria gana, desplegó impunemente su actitud de “soy su próxima jefa”, se calló lo que quiso, nadie metió las manos para hacer lo que un buen periodista debe hacer -Cuestionar.
No dije que Televisa acordó con Sheinbaum atacar a Nahle. No. Dije como hipótesis basada en hechos que Televisa y Sheinbaum habrían acordado una entrevista abyecta, pues si no se quedarían sin entrevista, y que Televisa anticipando la reacción adversa cuando se viera el bodrio aceptado publicó poco antes algo contra alguien del equipo claudista para que pareciera una empresa menos colaboracionista o que, en efecto, sólo permitía una entrevista así por amenazas. En qué me baso? Como dije, en hechos: es hipótesis pero basada en la historia general de Televisa este sexenio: poca crítica, mucho silencio, mucha omisión, muchos obradoristas contratados, la destrucción del programa de Zuckerman, la amabilidad de trato entre AMLO y Azcárraga, la continuidad de Televisa como el medio con más dinero del gobierno federal, la continuidad televisada del insufrible Genaro, a pesar de sus fracasos, operador mediático claudista.
Los fanáticos pejistas creían antes de 2018 que Televisa era simplemente empleada de los presidentes del “PRIAN” y que no criticaba nada; en realidad, todo lo que va de este siglo fue lo que es hoy: una colaboradora del presidente, una empresa que critica pero poco y estratégicamente. En el siglo XX fue otra cosa, peor, pero en el XXI fue eso, lo que empeoró (para variar) AMLO. Los fanáticos no saben, creen, por definición. Creen las estupideces que AMLO les da en papilla idiota. Sólo espero que esa famosa parte de la oposición entienda, a partir del caso “Tercer Grado se doble ante Sheinbaum” (Zuckerman y compañía se doblaron como AMLO ante Trump), que muchos de sus idolatrados empresarios privados sólo ven por ellos y sus intereses inmediatos, no por el país ni por los confundidos que los idolatran.
2 notes
·
View notes
Text
IMAGENES Y DATOS INTERESANTES DEL DIA 12 DE MAYO DE 2024
Día Internacional de la Enfermería, Día Internacional de las Mujeres Matemáticas, Día Mundial de la Fibromialgia y del Síndrome de la Fatiga Crónica, Día Europeo de las PYMEs, Día Internacional de la Sanidad Vegetal, Semana de Acción Contra los Mosquitos, Año Internacional de los Camélidos.
San Nereo, Santo Domingo de la Calzada y Santa Domitila.
Tal día como hoy en el año 2017
Un ciberataque masivo (más de 200.000 infectados) golpea a grandes empresas en al menos 140 países. El virus informático, del tipo rasonware, lanzado desde servidores chinos, afecta a empresas como Fedex, el sistema de salud británico o Telefónica de España. (Hace 7 años)
2010
Se estrella el vuelo 711en la maniobra de aterrizaje en las inmediaciones de la pista del aeropuerto de Trípoli (Libia). En el accidente pierden la vida 103 personas y sólo hay un sobreviviente, un niño de 9 años.
1951
El presidente estadounidense Truman da luz verde a experimentar la bomba de hidrógeno, un arma tan poderosa que, a su lado, la bomba atómica no pasa de ser un mero fuego artificial. La explosión de prueba se realiza en un desolado atolón de Micronesia, en el Océano Pacífico, concretamente, en el islote Eniwetok (islas Marshall). La bomba de hidrógeno, también llamada bomba H, es un ingenio formado por dos bombas, una primera atómica que, al estallar, provoca una reacción de fisión dentro una segunda que consiste en una mezcla de hidrógeno, deuterio, tritio y litio, lo que le otorga un potencial enormemente superior a las bombas de uranio y de plutonio, también llamadas bombas de fisión. (Hace 73 años)
1949
Los EE.UU. y la URSS llegan a un acuerdo negociado en el seno de la ONU para poner fin al bloqueo que sufre la ciudad alemana de Berlín. (Hace 75 años)
1940
Las panzerdivisionen alemanas, después de franquear el bosque de las Ardenas en Bélgica, irrumpen con sus potentes blindados en la llanura francesa, y rebasan por la espalda al ejército francés y la Línea Maginot. El 10 de junio se firmará el armisticio por el que Francia quedará dividida en dos zonas: la ocupada y la "libre", bajo el gobierno colaboracionista con la Alemania nazi del mariscal Pétain. El 14 de junio los alemanes desfilarán victoriosos por los Campos Elíseos de París. (Hace 84 años)
1927
En Nicaragua, Augusto César Sandino anuncia, mediante una circular dirigida a las autoridades locales de todos los departamentos, su determinación de continuar la lucha contra las tropas de intervención estadounidenses que en enero desembarcaron en Corinto. (Hace 97 años)
1926
A bordo del dirigible Norge, el explorador noruego Roald Amundsen, el científico americano Lincoln Ellsworth y el ingeniero italiano Umberto Nobile (diseñador del dirigible), logran sobrevolar el Polo Norte por primera vez. (Hace 98 años)
1776
En Francia, Luis XVI, presionado por la nobleza, destituye al director general de Finanzas que ha suprimido los impuestos que pesan sobre los económicamente débiles, cargándoselos a cambio a los terratenientes. (Hace 248 años)
1588
Enrique III, rey de Francia, huye durante un levantamiento de los católicos y será apresado más tarde por el pretendiente católico al trono, duque Enrique de Guisa. El rey se verá obligado a nombrar al duque, lugarteniente general de Francia. (Hace 436 años)
1551
En Lima, Perú, se funda la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, la más antigua de América. (Hace 473 años)
1539
El conquistador y explorador español Hernando de Soto, hasta hoy gobernador de Cuba, sale de La Habana con 11 naves y casi 1.000 hombres aprovisionado con abundantes víveres y armas para emprender la conquista de La Florida, descubierta por Juan Ponce de León en 1513. Unos días después llegará a la costa occidental de la Florida, cerca de la actual Bradenton. Desde allí iniciará la exploración del territorio y descubrirá, para su desgracia, que en vez de hallar abundante oro, el lugar bulle de pantanos plagados de mosquitos, con una húmedad y calor extremos. Los nativos también le hostigarán complicándole su labor de exploración. (Hace 485 años)
907
El emperador chino Ai Di es depuesto por el ejército de Zhu Wen, cabecilla de la insurrección campesina, poniendo punto final a la dinastía Tang tras 289 años de gobierno y 21 emperadores, en los que China se mantuvo unida convirtiéndose en modelo político y centro cultural del Asia Oriental. (Hace 1117 años)
2 notes
·
View notes
Text
Sin él no se puede comprender la historia del nacionalismo francés después de la IIª GUERRA MUNDIAL
30 de julio.
Aniversario de la muerte de Maurice Bardeche. Escritor, crítico de cine y literario, activista político, creador de la Revista Defense de l´Occident, organizador en la posguerra de los primeros movimientos neofascistas europeistas y cronista de los mismos.
Bardeche, fascista de preguerra que evitó la Colaboración durante el periodo de la ocupación alemana de Francia, se convirtió en Colaboracionista sólo cuando la Segunda Guerra Mundial acabó. Detenido por se fascista y por ser cuñado de Robert Brasillach, siempre arrastró la pena de saber que este se había entregado a la chusma gaullista, únicamente para salvarle la vida. El infame juicio a Brasillach y su posterior asesinato en el paredón, fueron los motivos que llevaron a alguien con vocación de profesor de literatura a ser entonces, y sólo entonces, autor de libros a favor del nacionalsocialismo, en contra de la depuración cuando esta estaba aún en marcha y, después, en el primer revisionista francés de la Shoah ...
La revista que fundó, Defense de l´Occident, duró una treintena de años y fue la primera en que publicaron, a veces con décadas de distancia, los últimos supervivientes de la catástrofe de 1945, como el miliciando y novelista François Brigneau, y los primeros neofascistas franceses de posguerra, como Duprat, Venner o Le Pen, pasando por todas las generaciones intermedias.
Defense de l´Occident, junto a Nation Europa, fue a la vez memoria de lo perdido y presagio de los volvería a renacer.
El nacionalismo francés no existiría, no al menos en su forma actual sin el trabajo casi en solitario de Bardeche.
2 notes
·
View notes
Text
Mas series de las actuales o del siglo XXI.La de hoy es 𝗖𝗢𝗟𝗢𝗡𝗬 (𝟮𝟬𝟭𝟲).Compuesta de tres temporadas entre los años 2016 y 2018 y 36 capítulos.Estamos ante una realidad distópica, que es una sociedad imaginaria bajo un poder totalitario o una ideología determinada, según la concepción de un autor determinado, que sería lo opuesto a la utopía.
Aquí la distopía que es total y además una serie muy extraña, se desarrolla en una ciudad de Los Ángeles absolutamente desconocida y ocupada por una fuerza opresora (una fuerza alienígena), y que ha pasado de ser una ciudad libre a una colonia (que da el título a la serie).Esta separada del resto del país mediante un inmenso muro que la rodea, el cual solo puede pasarse a través de puertas de acceso.Estas están custodiadas por los llamados Cascos Rojos.Nadie entra o sale sin una orden.
La ciudad vive literalmente bajo una tenaz dictadura, lo cual empieza a influir rápidamente en la vida y el ánimo de los ciudadanos y los Cascos Rojos hacen y deshacen a su antojo, y todo aquello llamado “derechos humanos” queda relegado o el en olvido.
Siempre que se produce este tipo de situaciones donde hay una ocupación surgen diferentes tipos de comportamiento, Están aquellos que resisten la ocupación, los que colaboran con ella y está la gran mayoría que son aquellos que tratan de sobrevivir.Pues aquí la economía se ha degradado tanto que la moneda frecuente es el trueque.El tratamiento de las enfermedades está prohibido por lo cual se puede sobreentender que están buscando o aplicando medidas para mejorar o perfeccionar la raza humana (eugenesia).
En este contexto caótico los principales protagonistas son 𝗟𝗮 𝗳𝗮𝗺𝗶𝗹𝗶𝗮 𝗕𝗼𝘄𝗺𝗮𝗻, que durante la invasión han perdido a uno de sus hijos, 𝗖𝗵𝗮𝗿𝗹𝗶𝗲 (𝗝𝗔𝗖𝗢𝗕 𝗕𝗨𝗦𝗧𝗘𝗥).Claro está que cada uno de la familia se verá obligado contra su voluntad y a su pesar a colaborar de diversas formas en la situación día tras dia. 𝗪𝗶𝗹𝗹 𝗕𝗼𝘄𝗺𝗮𝗻, 𝗶𝗻𝘁𝗲𝗿𝗽𝗿𝗲𝘁𝗮𝗱𝗼 𝗽𝗼𝗿 𝗝𝗢𝗦𝗛 𝗛𝗢𝗟𝗟𝗢𝗪𝗔𝗬 (𝘃𝗶𝘀𝘁𝗼 𝗲𝗻 𝗟𝗼𝘀𝘁, 𝗜𝗻𝘁𝗲𝗹𝗹𝗶𝗴𝗲𝗻𝗰𝗲 𝘆 𝗼𝘁𝗿𝗮𝘀) será colaboracionista (a ojos de los invasores) a quien le prometen tener una mejor vida y con todas las comodidades para él y su familia.Pero ya dentro del sistema luchará a su manera para encontrar a su hijo perdido y también pelear contra el enemigo. 𝗪𝗶𝗹𝗹 𝗲𝘀 𝗼𝗯𝗹𝗶𝗴𝗮𝗱𝗼 𝗮 𝘂𝗻𝗶𝗿𝘀𝗲 𝗮 𝗹𝗼𝘀 𝗰𝗮𝘀𝗰𝗼𝘀 𝗿𝗼𝗷𝗼𝘀 (𝗹𝗮 𝗣𝗼𝗹𝗶𝗰𝗶́𝗮 𝗠𝗶𝗹𝗶𝘁𝗮𝗿), dado su pasado de ex militar y ex agente del FBI.Y claro su tarea principal es encontrar a los miembros de la resistencia.
𝗞𝗮𝘁𝗶𝗲 𝗕𝗼𝘄𝗺𝗮𝗻 𝗶𝗻𝘁𝗲𝗿𝗽𝗿𝗲𝘁𝗮𝗱𝗮 𝗽𝗼𝗿 𝗹𝗮 𝗯𝘂𝗲𝗻𝗮 𝗮𝗰𝘁𝗿𝗶𝘇 𝗦𝗔𝗥𝗔𝗛 𝗪𝗔𝗬𝗡𝗘 𝗖𝗔𝗟𝗟𝗜𝗘𝗦 (𝘃𝗶𝘀𝘁𝗮 𝗲𝗻 𝗧𝗵𝗲 𝗪𝗮𝗹𝗸𝗶𝗻𝗴 𝗗𝗲𝗮𝗱 𝘆 𝗲𝗻 𝗣𝗿𝗶𝘀𝗼𝗻 𝗕𝗿𝗲𝗮𝗸) se verá inmersa y envuelta en lo que llamamos 𝗹𝗮 𝗿𝗲𝘀𝗶𝘀𝘁𝗲𝗻𝗰𝗶𝗮.Un grupo insurgente que intenta mejorar la calidad de vida mediante circuitos clandestinos de recursos, como por ejemplo cambiar la situación sociopolítica mediante acciones que el régimen califica como terroristas.Este grupo es dirigido por alguien llamado 𝗕𝗿𝗼𝘂���𝘀𝗮𝗿𝗱 (𝗧𝗢𝗥𝗬 𝗞𝗜𝗧𝗧𝗟𝗘𝗦, 𝘃𝗶𝘀𝘁𝗼 𝗵𝗼𝘆 𝗲𝗻 𝗹𝗮 𝘀𝗲𝗿𝗶𝗲 𝗧𝗵𝗲 𝗘𝗾𝘂𝗮𝗹𝗶𝘇𝗲𝗿).
Además del hijo perdido, los Bowman tienen dos hijos más, el mayor 𝗕𝗿𝗮𝗺 𝗕𝗼𝘄𝗺𝗮𝗻 (𝗔𝗹𝗲𝘅 𝗡𝗲𝘂𝘀𝘁𝗮𝗲𝗱𝘁𝗲𝗿),que tiene un futuro de insurgente y la más pequeña una niña 𝗚𝗿𝗮𝗰𝗶𝗲 𝗕𝗼𝘄𝗺𝗮𝗻 (𝗜𝗦𝗔𝗕𝗘𝗟𝗟𝗔 𝗖𝗥𝗢𝗩𝗘𝗧𝗧𝗜), que está siendo adoctrinada por los profesores que les envía el régimen.
Entre algunos de los personajes que no son de la familia Bowman, destaca uno de los grandes protagonistas y es 𝗔𝗹𝗮𝗻 𝗦𝗻𝘆𝗱𝗲𝗿 (𝗲𝗹 𝗲𝘅𝗰𝗲𝗹𝗲𝗻𝘁𝗲 𝗮𝗰𝘁𝗼𝗿 𝗣𝗘𝗧𝗘𝗥 𝗝𝗔𝗖𝗢𝗕𝗦𝗢𝗡). Quien es el gobernador del bloque de Los Ángeles, pero que también tiene que cumplir ciertas reglas (y responder ante una jefa) para poder llevar una vida de privilegio, pero que más tarde que temprano se une a la causa (resistencia).
A partir de estos datos la serie se ve sumergida en lo que podría decir un thriller, en el cual no siempre entendemos verdaderamente que es lo que pasa.Esto se da sobre todo en los primeros episodios y hasta la mitad de la primera temporada, que es donde de verdad pareciera arrancar la serie. Aquí es donde la serie deja de ser un poco aburrida ya se mejoran un poco los diálogos y todo en general para hacer más llevadera la historia.
El principal problema que tiene la serie es que nunca se explica cómo es que se llega a esta situación, quienes invaden y el porqué.Ni siquiera aquel que es consciente de quien es el ocupante y lo que realmente ha ocurrido.Esto genera incertidumbre, genera ganas de saber e incluso uno puede vislumbrar algo parecido a 𝗩, 𝗜𝗻𝘃𝗮𝘀𝗶𝗼́𝗻 𝗘𝘅𝘁𝗿𝗮𝘁𝗲𝗿𝗿𝗲𝘀𝘁𝗿𝗲 (𝘀𝗮𝗹𝘃𝗮𝗻𝗱𝗼 𝗹𝗮𝘀 𝗱𝗶𝘀𝘁𝗮𝗻𝗰𝗶𝗮𝘀).La vista de la ciudad por ejemplo rodeada de un muro interminable hasta parece excesivo y lo menos original de todo en los mundos distópicos, es que los malvados evocan (sin nombrarlo) el Tercer Reich en todo caso y entre comillas, como si no hubieran existido otros regímenes totalitarios en toda la historia de la humanidad.
El show salva la ropa porque realmente pasan cosas, aparecen personajes nuevos hacia las temporadas 2 y 3 (las 2 últimas) y porque los productores y escritores van despacio y con mesura ( a veces demasiado), lo cual quita ritmo.
La serie claro es de ciencia ficción y arranca un año después de la colonización o invasión. Lo cierto es que en 𝗖𝗼𝗹𝗼𝗻𝘆 los elementos de género son más una alegoría.Y digo esto porque la verdadera intención de la historia es profundizar en los diferentes aspectos de una dictadura militar (ya sea terrestre o alienígena) y las diversas reacciones que provoca este tipo de represión, desde la psicología del colaboracionismo hasta los grises de una insurgencia con violencia, explorando dilemas morales derivados de todo esto y mezclándolo con el día a día de la vida de esa familia (𝗹𝗼𝘀 𝗕𝗼𝘄𝗺𝗮𝗻 𝗲𝗻 𝗽𝗮𝗿𝘁𝗶𝗰𝘂𝗹𝗮𝗿) en la dinámica de la colonia.
Como dije la serie se toma todo el tiempo del mundo en empezar a desarrollarse, aunque de entrada es prometedora y estimulante y su atractivo argumento inicial invita encontrarse con los personajes en situaciones que involucran al espectador y a juzgar moralmente sus acciones.
Sin embargo, cuesta mucho tener empatía con los Bowman desde un principio, pero algunos episodios tienen ritmo y aumentan el contexto con las historias de cada capítulo.
Para ir terminando, la narrativa de 𝗖𝗼𝗹𝗼𝗻𝘆, no se especializa en estirar subtramas o forzar situaciones, pero si hay gratificaciones para el espectador.El show se vuelve más oscuro y fatal hacia el final de la temporada tres, hubiera faltado el broche de oro de la cuarta temporada.Mi puntuación es un 6/10.
#netflix series#hbo series#colony#ciencia ficcion#distópico#alienigena#invasion#dictadura#josh holloway#sarah wayne callies
2 notes
·
View notes
Text
A minha opinião do facto de o partido comunista ter convidado um representante e agente infiltrado no país de um inimigo de Portugal por motivos históricos e alvo preferencial de atividade de sabotagem económica e social e da civilização ocidental reiteradamente exposto pelos factos históricos e sendo as suas máfias criminosas responsáveis por inúmeros atentados bombistas a representações comunistas como um ato colaboracionista como alvo a minha pessoa, no entanto, quando contactei o PCP para obter ajuda para concretizar a minha invenção, os funcionários do PCP não foram de grande ajuda em criar emprego em Portugal na forma da minha invenção TAL PODE SER CORRIGIDO CONTACTANDO O @ [email protected]
youtube
0 notes
Text
Jajajajajajajajajajajajajajakakakaka las de la cadena herrerar con mis medidas 6 en el 24: Todo esto está para tirar?
Pero ustedes me están hablando enserio pedazos de ahuevonadas
Ustedes tienen todos los premios dorados de los compromisos
No conozco lo que es un compromiso quién te conoce colaboracionista
por eso soy herrerar
Andá andá
Andá antes que les pegue una patada en el ojete a todas en un ascentro post colaboraciones
0 notes
Text
A CONDIÇÃO HUMANA / HANNAH ARENDT
youtube
A luta pela igualdade, liberdade e fraternidade ganha um novo e paradoxal capítulo de crueldades, desigualdades, encarceramentos e brutalidades.A política praticada reflete e subverte discursos e práticas, disfarçada de retórica da paz, a guerra se torna uma necessidade para proteção e vigilância constante da distopia real da paz entre os homens, e somente no " Reino dos Céus" a utopia da paz é atingida, o discurso e retórica da paz prevalece.
Seria o paradoxo entre a paz e a guerra, utopia e distopia, igualdade e desigualdade, liberdade e prisão, fraternidade e brutalidade, um processo recorrente de vida e morte ou uma condição da natureza humana necessária para sua evolução?Teria sido a Revolução Francesa um capítulo necessário e natural para dar continuidade ao "processo civilizatório' da humanidade?E Napoleão?Seria esse processo involução, evolução ou revolução? Pois muitas vezes é necessária a guerra para que se faça ou se mantenha a paz, e o que chamamos de paz seja na realidade barbárie, amor seja terror, e paz seja guerra, logo continuidade seja descontinuidade, interrupção, quebra, cisão e que, por mais traumática que seja a guerra contra o terror, a corrupção, as autocracias, ditaduras um mal necessário para esse "processo civilizatório" decidida seja na realidade a eterna busca do homem de fazer o bem pelo mal, mal que dizimou e dizima centenas,milhares e milhões para justificar a guerra pela paz.
Contrasensos, paradoxos, bipolaridades, extremismos da direita, da esquerda, do centro,sim esse existe, esse último que sempre apóia o líder máximo de uma nação, independente das correntes ou vertentes, de quem ou do que ele, esse líder máximo,represente na teoria ou retórica ou na práxis ou prática, que se adapta e se concilia e pacifica diante da natureza humana e considera o cinismo, a hipocrisia algo tão natural como "escorpiões que mordem"ao se sentirem ameaçados e o natural do homem, torna-se comum e o comum normal, tornando paz em guerra e guerra em paz em nada mais relevante diante das proximas definições elencadas nesse artigo.
Complexo? É da natureza humana a complexidade e vivamos a eterna guerra interior e exterior entre lógica, razão, ciência, racionalidade, bom senso, e paixões, devoções, emoções, senso comum, ignorância, subserviência, cegos, surdos, seguidores que vez por outra leva centenas, milhares e milhões a morte, talvez seja da natureza humana ser político, mesmo que ele abomine a política ele será afetado direta ou indiretamente por ela dado sua autonomia estar subordinada a uma soberania.
Vejamos alguns desses capítulos atuais da política ou geopolítica focando nas posições aparentemente antagônicas entre dois líderes de dois países: França e Israel - Emmanuel Macron e Benjamin Netanyahu.
Na segunda guerra mundial a Alemanha nazista invade a França com alguma facilidade,"fatalidade", permissividade, promiscuidade e passividade de uma "elite burocrática" e uma parcela ponderada e aritmetica da população da França em anuência oficial ou oficiosa de países que estavam também administrando seus próprios e idênticas burocracias com problemas internos e externos, de política interna e externa.Alguns parágrafos desse capítulo são até hoje motivo de vergonha para França.
O "regime de Vichy", cuja memória ainda causa desconforto nos franceses, foi o sistema político autoritário e colaboracionista de autoridades francesas da época com a Alemanha nazista, um regime estabelecido na França após sua rendição, em 22 de junho de 1940, durante a Segunda Guerra Mundial, que encerrou a ofensiva alemã sobre o país, a Holanda, a Bélgica e Luxemburgo. Milhares de judeus franceses foram deportados sob o regime de Vichy para os campos de concentração de Hitler, sob o olhar complacente das autoridades francesas da época. "Colaboracionista" continua a ser um termo extremamente pejorativo na França desde então.
Em outro capítulo mais atual.O mundo civilizado assistiu, de forma alarmante e estarrecida, aos atentados terroristas do dia 13 de novembro de 2015 em Paris.
Estabelecido o terror, com 129 mortos e centenas de feridos, o famigerado Estado Islâmico (EI) assumiu a autoria dos atentados.
Em pronta reação, o presidente da França( François Hollande)decretou o Estado de Emergência e considerou os atentados como atos de guerra.
A solidariedade dos países ocidentais e cristãos foi imediata. Todos hipotecaram pleno apoio à França, berço da liberdade. Até mesmo a enigmática Rússia engrossou as fileiras de combate ao terrorismo, com o objetivo de destruir, pelas armas, o Estado Islâmico.
Em outro ainda mais atual.O presidente francês, Emmanuel Macron, insinuou nesta quarta-feira (24.10.2024) que Israel “semeia a barbárie”, em resposta ao pedido do primeiro-ministro israelense, Bejamin Netanyahu, que havia solicitado apoio da França na “guerra da civilização contra a barbárie”. Macron fez a declaração durante uma conferência em que anunciou um pacote de ajuda financeira de aproximadamente US$ 1 bilhão ao Líbano.
Vamos agora analisar os paradoxos históricos segundo o preceito fundamental que não há política interna desconectada de política externa, são dependentes e fazem parte de um continuum de prevalência do poder pelo poder, logo os fins justificando os meios.
Barbárie é a condição daquilo que é selvagem, cruel, desumano e grosseiro, ou seja, quem ou o que é tido como bárbaro. A barbárie pode ser interpretada como uma ação de extrema violência e agressividade, com o único objetivo de afetar diretamente a paz e a tranquilidade de determinado grupo.
A Assembléia Geral, por sua vez, em 09 de dezembro de 1994, adotou a Resolução 49/60 onde terrorismo é conceituado como a prática de “atos criminosos planejados ou calculados para provocar estado de terror no público em geral, num grupo de pessoas ou em particulares por motivos políticos” (ONU, 1995).
Logo a barbárie é o terrorismo e tudo que ele representa ou possa representar inclusive os terroristas ou aqueles que promovem o terror seriam assim considerados bárbaros da atualidade, correto? Alguns países, como o Brasil, nas suas posições defendidas do atual governo Lula da Silva, defendem e se aliam direta ou indiretamente a grupos como o Hamas e Hesbollah, considerados ou não como terroristas, aqui o conceito foge das definições previamente citadas de barbárie e terrorismo e provoca os primeiros " assaltos e sobressaltos diplomáticos" ou da política externa brasileira, revelando-se antagônica, contraditória e paradoxal, assim como a posição da ONU.A realidade dá exemplos concretos dessa sintonia fina e sofisticada entre teoria e prática; i.g.: células terroristas já estão no Brasil e lavam dinheiro pelo narcotráfico e pelo Deep State;há um conflito diplomático entre Israel e Brasil sobre a guerra contra o terror ou terrorismo; o Brasil apóia o Irã que apóia o terrorismo e os terroristas do Hamas e do Hesbollah,isso só para citar alguns paradoxos da política externa conciliada com a política interna de facilidade, "fatalidade", permissividade, promiscuidade e passividade, supra citada no caso da França, diante de um Estado Paralelo ou Dual*.
Logo podemos questionar: É um paradoxo de posições políticas ou mudança da definição pela conceituação individual de países atreladas a políticas interna e externa de cada um ou a um grupo de países envolvidos formando blocos politico- econômico como o BRICS( Brasil, Rússia, China e África do Sul), logo a conceituação se sobrepõe a definição das palavras : Barbárie e Terrorismo por interesses próprios, inclusive da ONU e da França que se atrela a correntes do " globalismo" , da esquerda, da agenda WOKE,do "Comunismo Dino", dos "Dinossauros do Jurassic Park" em pura utopia marxista, leninista e flagrantemente leniente?
As palavras ganham novos significados, mas na guerra entre o bem, o bom, a correta posição moral e o mal, o mau, e em paralelo a incorreta posição moral em termos locais ou internacionais, esse correto posicionamento moral deve levar a uma coerência, coesão, consistência, e coexistência pacífica de que os interesses pela paz devem estar acima das posições políticas que buscam supremacias ou hegemonias visando ambas visões obtusas a conquista de vantagens por meios oportunistas cuja base está no Deep State ou Estado Parelho ou Dual, o que, em última, mas não menos importante, análise,significa em termos geopolíticos globais, disputas terrorialistas, de sobrevivência diante do continuísmo político,da corrupção interna e outras externalidades marginais e em oposição a liberdade, a justiça de Deus, mesmo para aqueles que se denominam de ateus, estando essa última acima da justiça dos Homens.
"Que se faça a guerra para se conquistar a paz, que o terror junto com os terroristas sejam extirpados,eliminados da face da terra!""Marginal bom é marginal morto!" são afirmações que representam a Barbárie ou o Terrorismo?Extremismos?
O contrário disso, a atual política externa brasileira,atrai o terror e o terrorismo que assola o país, e essa não representa a teatralidade ou neutralidade enigmática da conveniente prisão de cidadãos comuns do 08 de Janeiro de 2023, é o "Estado Democrático de Direito" corroído, corrompido, é chorume, a substância líquida que resulta do processo de apodrecimento de materiais orgânicos do Estado brasileiro que se liquifaz e é muito encontrado em lixões e aterros sanitários nas "comunidades", "nas mansões de milionários ou de certos políticos operários" ditos comunistas/socialistas de plantão, que vestem as fardas e fardões, hábitos, pontos cardiais,cortes da justiça dos injustiçados, legalizando o roubo e a corrupção endêmica e sistêmica, fazendo " vistas grossas" , omissas, omissos, covardes, conivente, semovente, removente, entricherados em cargos públicos,parasitas penetrados em estatais, paraquedistas em órgãos federais que deveriam promover a justiça de Deus, igual, transversal, e universal para todos.
Mas " É na omissão dos bons que os maus prosperam." dizia Allan Kardec.
Segundo Hannah Arendt, a Banalidade do mal é o fenômeno da recusa do caráter humano do homem, apoiado na recusa da reflexão e na tendência em não assumir a iniciativa própria de seus atos.
A banalidade do mal atual está na fusão entre o poder do Estado desprovido de moral e o poder oriundo do terrorismo, dos narcotraficantes que em seus códigos de ética própria se apropriam da termologia e definição de, por exemplo, das palavras barbárie e terrorismo, logo a política externa brasileira está de mãos dadas com o terror, o terrorismo em todas suas formas e formatos, conceituada nos relatos ou notícias oficiais ou oficiosos em nada relativas ou relativisadas pelo instituto político jurídico da "Máquina do Estado."
Condenar Israel e sua guerra contra os grupos terroristas é estar coadunado e em cumplicidade com o terror e os terroristas.Estados da Palestina e Líbano receberam e abrigaram esses grupos e agora a população paga com sua própria vida a imbricação, corrupção, parasitismo dos Estados que venderam suas nações por facilidades,"fatalidades", permissividade, promiscuidade e passividade.
Independente de "Teorias da Conspiração" sempre haverá uma teoria e um prática contrária, há de se partir das práticas do Estado e o quanto realmente ele age no combate essa dualidade,números não mentem sempre que controlados por cidadãos de bem, esses paradoxos, essas contradições entre o bem, o bom, o mal e o mau, a bipolaridade é uma doença, o bipolarismo também, o unilateralismo, o neocolonialismo, as hegemonias, as supremacias desequilibram, moedas fortes, Estados fortes, a força e a forca levaram e levarão novamente ao caos, as tragédias humanitárias, da fome pela falta de acesso ao alimento a outros tipos de fomes que matam tanto quanto a primeira, das faltas, das falhas, da concentração de poder nas mãos de poucos, de líderes operários, de pseudo intelectuais, de militares, de péssimos gestores, faz o "Estado Democrático de Direito" naufragar,ruir, desmoronar e os ratos são os primeiros a fugir, ratos, não camundongos, fazem da hipocrisia uma fantasia, onde o anti herói é a melhor versão de uma realidade onde prevalece o cinismo.
A história se repete, sempre se repetirá, num continuísmo político justificando o poder pelo poder, para ter e manter a roda girando? Até quando?Até quando conceitos prevalecerão sobre definições numa "lógica política" onde é o mais forte e o mais " adaptável " os que sobrevivem?
*Em um artigo de 1955 no Bulletin of the Atomic Scientists (Boletim de Cientistas Atômicos) , o estudioso realista de relações internacionais Hans Morgenthau citou outros falando sobre um "estado dual" existente nos Estados Unidos: a fachada democrática de políticos eleitos que operam de acordo com a lei, e um hierarquia de segurança nacional e governo paralelo que opera para monitorar e controlar o primeiro.Isto foi dito ser a origem da noção de um estado profundo( Deep State ) nos Estados Unidos.
0 notes
Text
Um de Nós Foi Traidor
F, 1959
Julien Duvivier
7/10
Cherchez le traître
Baseado numa novela de Jacques Robert, Julien Duvivier, Henri Jeanson e o próprio autor, escreveram um argumento original para este filme, que mais parece, na verdade, uma peça de teatro, pois tudo decorre no espaço de poucas horas e quase sempre na mesma sala.
O enredo, pese embora incida sobre a descoberta de um traidor, entre o grupo de velhos companheiros de armas, da resistência, quase parece uma longa cena de Agatha Christie, em que Hercule Poirot desenrola hipótese atrás de hipótese, até concluir pela descoberta do assassino.
O principal atrativo do filme é que permite uma leitura nas entrelinhas do enredo policial, para mostrar uma França simultaneamente resistente e colaboracionista. Todos são suspeitos porque, apesar de heróis da resistência, todos colaboraram, com maior ou menor frequência e gravidade, com o invasor alemão e o governo de Vichy. E todos se acusam mutuamente desses pecados cívicos.
É a França a acertar contas com a história e a limpar a consciência pesada, da derrota e do colaboracionismo, durante a ocupação nazi.
Nesse sentido é uma obra provocadora, para a época. Embora de leitura subtil.
No geral, sobressai contudo, quase um banal jogo de Cluedo, apesar de recheado de estrelas.
Cherchez le traître
Based on a novel by Jacques Robert, Julien Duvivier, Henri Jeanson and the author himself, wrote an original script for this film, which actually looks more like a play, as everything happens in the space of a few hours, and almost intirely in the same room.
The plot, despite focusing on the discovery of a traitor, among the group of old comrades in arms, of the resistance, almost seems like a long scene from Agatha Christie, in which Hercule Poirot unfolds hypothesis after hypothesis, until concluding with the discovery of the murderer.
The main attraction of the film is that it allows us to read between the lines of the police plot, to show a France that is both resistant and collaborative. They are all suspects because, despite being heroes of the resistance, they all collaborated, more or less, with the German invader and the Vichy government. And everyone accuses each other of these civic sins.
It is France settling accounts with history and clearing its guilty conscience of defeat and collaborationism, during the Nazi occupation.
In this sense, it is a provocative work, for its time. But subtle reading.
However, in general, it looks almost like a banal Cluedo game, despite a cast full of stars.
0 notes
Text
El secuestro de la vivienda por los intereses financieros... En la última década los alquileres han experimentado en España una brutal subida del 77%. ¿Nuestro país ha sufrido algún tipo de catástrofre que haya destruído una gran parte de los edificios? Si la respuesta a la pregunta es negativa, debemos deducir que no tenemos un problema con la vivienda, sino un problema con la inversión. ¿En qué sentido? En el de que las viviendas han pasado a ser un bien de inversión especulativa... No se trata de que un ciudadano compre una vivienda para alquilarla o venderla en un futuro para obtener un beneficio razonable, sino de que el gran capital internacional ha tomado el mercado inmobiliario como la nueva gallina de los huevos de oro de donde obtener unas rentas astronómicas, que puede alcanzar dependiendo de las zonas hasta un 14%, porcentajes que sólo son posibles con inversiones de alto riesgo... “Ahora hay más inversores que pisos... Son chicos jóvenes, que han visto vídeos en YouTube y que quieren sacar rentabilidad de un piso"... Si a esto le sumamos el alquiler turístico y de temporada, tenemos la tormenta perfecta que ha dejado a la intemperie a esos 3’6 millones de hogares que viven de alquiler, precisamente aquellos con las rentas más bajas... en este pelotazo en torno a los alquileres hay responsables y víctimas pero también una gran cantidad de colaboracionistas, una clase media con la educación financiera de un cuatrero, la moral de un vendedor de coches usados en Las Vegas y la visión económica de un asaltante de diligencias... España gastó, entre el año 2001 y 2013 sólo en deducciones fiscales en el IRPF, cuarenta y dos mil millones de euros ¿Alguien ha cuantificado qué parque público de viviendas se podría haber construido con esta exorbitante cantidad para que fuera el Estado, no los grandes inversores, quien en la práctica pudiera marcar los precios? (Daniel Bernabé)
#derechoalavivienda#vivienda#viviendasoluciones#viviendaespeculacion#derechoalaviviendaespeculacion#especulacion
0 notes
Video
youtube
🔴 ESPECIAL: La Islamización de Europa
El domingo, durante una manifestación pro Palestina, un imán, Elias d'Imzalène, llamó a los musulmanes de París, de Marsella y de toda Francia a la INTIFADA, es decir, al levantamiento. Desde un imán, cuando conocemos el acercamiento de muchos imanes con los Hermanos Musulmanes y salafistas de todo tipo, no nos sorprendemos en absoluto y esto se parece a una cierta normalidad islamista y ya ni siquiera nos escandaliza. En cambio, lo chocante, cuando se es francés, respetuoso de los valores nacionales y enamorado del espíritu francés, es saber que entre el público que aplaudió masivamente a este imán catalogado como S e inscrito en el Expediente de Prevención de Ataques para la seguridad pública (FPASP), estuvieron presentes los diputados de Francia insumisa, Mathilde Panot, Rima Hassan, Louis Boyard, Ersilia Soudais y Thomas Portes. Los diputados de la República Francesa, que han pagado fortunas gracias a los impuestos pagados por el pueblo francés, participan, aplauden a un imán que llama a un levantamiento de los musulmanes contra el pueblo francés, por quien votaron 8 millones de franceses, lo que nos empuja a decir que 8 millones de franceses están hoy en guerra contra Francia y su pueblo. Con tales riesgos de levantamiento, transmitidos por un partido político de izquierda, no hay que mentir, en 1945, estos 8 millones de franceses habrían aparecido en las listas de los colaboracionistas, esa es la verdad... ¿Dónde están Fabien Roussel, el francés Hollande, Marine Tondelier y toda la camarilla del Nuevo Frente Popular y por qué no condenan el apoyo de la Francia rebelde a este llamado a un levantamiento contra el pueblo francés? la respuesta es simple, ''¡el que calla, otorga! ''
0 notes
Text
El Frente Oriental y la extrema derecha radical francesa
Por Nicolas Lebourg y Jonathan Preda
Traducción de Juan Gabriel Caro Rivera
Primera publicación de este artículo: Nicolas Lebourg y Jonathan Preda, «Le Front de l'Est et l'extrême droite radicale française: propagande collaborationniste, lieu de mémoire et fabrique idéologique», en Olivier Dard ed, Références et thèmes des droites radicales IDREA III, Berna, Peter Lang, 2015, pp. 101-138.
Tras la apertura del Frente Oriental el 22 de junio de 1941, los principales grupos colaboracionistas lanzaron juntos La Legión de Voluntarios Franceses contra el Bolchevismo (LVF), que formó el 638º regimiento de la 7ª división de la Wehrmacht (6.000 hombres). Una intensa campaña de propaganda en la Francia ocupada promovió el nacimiento de una «Europa socialista» a través de este compromiso francés. En 1943 el Tercer Reich les concedió el derecho de unirse a las Waffen-SS a miles de voluntarios franceses dentro de la división Frankreich (2.500 hombres). De esta última, la LVF y los Milicianos fueron finalmente transferidos a la división Carlomagno de las Waffen-SS en noviembre de 1944 (menos de 8.000 hombres) [1].
En la Francia liberada la colaboración militar fue considerada como una de las principales marcas de la infamia. Al dictaminar que las SS eran una organización criminal, el Tribunal de Nuremberg descartó la posibilidad de representación de los combatientes ordinarios. En consecuencia, los colaboracionistas que lucharon en el Frente Oriental tuvieron que elaborar una narración de los hechos que rehabilitara su capital social personal y relegara el nacionalsocialismo alemán, pero no su visión del mundo, a otro plano. Los procedimientos judiciales y la desaprobación moral se combinaron para impedir que esta labor se realizase a través del activismo político. Así pues, la revisión histórica del Frente Oriental supuso un combate cultural y una competición de representaciones, en particular a través de la producción de novelas, tanto más cuanto que, si bien la legislación francesa controlaba férreamente la práctica política, dejaba un amplio margen a la libertad de creación artística. La materia prima que estos autores usaban no estaba en los archivos, sino que era producto de sus recuerdos (entresacados o propios) y en la imagen proyectada por los órganos de propaganda de la implicación en el Frente Oriental (Le Combattant européen, Devenir, La Jeune Europe o Signal [2]).
Inicialmente fue un tema abordado por la franja más radical y condenada al ostracismo, pero esta construcción de la identidad resultó ser un problema para todos los ultraderechistas en todos los niveles ideológicos (ética, proyectos geopolíticos, relación concebida entre centro y periferia, puntos de referencia, etc.). La normalización de la participación en la Werhmacht y las Waffen-SS en forma de «lugar de memoria» constituye así uno de los primeros ámbitos de la «metapolítica» que la Nueva Derecha conceptualizaría más tarde [3]. Esto no es ilógico: los novelistas Jean Mabire y Saint-Loup fueron ambos escritores clave en la creación de la estética novelística del Frente Oriental y del corpus ideológico neoderechista: Saint-Loup publicó su primer libro sobre los reclutas del Frente Oriental en 1963, justo cuando Europa-Acción estaba experimentando una transformación. Esta práctica contribuyó a una redefinición racialista del nacionalismo, sobre todo porque el racialismo, tal y como lo define Stéphane François, implica una explicación de la historia a través de la cuestión racial [4].
Además, en un ámbito político que se basa menos en un corpus doctrinal que en una «visión del mundo», y en una sociedad en la que la industria del entretenimiento de masas moldea las identidades, sería un error centrarse únicamente en textos neoderechistas con pretensiones intelectuales y descuidar la cultura popular representada por las novelas históricas. Para estos productores del pasado el objetivo era representar unas Waffen-SS independientes del hitlerismo, románticas y heroicas: una vanguardia revolucionaria (1). La trilogía publicada por Mabire a finales de los años 70 fue un muy singular en este sentido, tanto como receptáculo como matriz y difusor de esta renovación de la imagen de los voluntarios del Este que esta a medio camino de la metapolítica y el lugar de la memoria (2). Saliendo de la sombra de los crímenes contra la humanidad, el Frente Oriental no fue más que la última etapa de una confrontación geopolítica entre el Este y el Oeste en la que las SS se mantuvieron firmes (3). Esta relectura conduce ciertamente a reescribir la historia, pero también a redefinir los objetivos políticos actuales (4) [5].
¿Una vanguardia revolucionaria?
Después de la guerra, los voluntarios franceses se apresuraron a contar su propia versión de su participación. El contexto lo hacía necesario: además de los relatos de experiencias bélicas, el 20 de octubre de 1944 se fundó el Comité d'histoire de l'Occupation et de la Libération de la France (Comité de Historia de la Ocupación y la Liberación de Francia). A pesar del título, se centraba principalmente en la Resistencia [6]. Sin embargo, los primeros relatos autobiográficos de los que sirvieron en el Frente Oriental se produjeron ya a finales de los años cuarenta [7]. Así pues, hubo un periodo de interacción y competencia. No fue hasta el periodo posterior a 1968 cuando los estudios académicos se ocuparon de la cuestión del colaboracionismo armado francés y destacaron la importancia del apoyo ideológico de los reclutas al Nuevo Orden Europeo [8]. Del mismo modo que las investigaciones sobre Vichy y las formas de Colaboración se sitúan así en el mismo espacio temporal que la «ola retro» en el cine y la literatura, estas publicaciones llegan al mismo tiempo que los libros de Saint-Loup y Mabire revisitan la historia de las SS francesas en su propio beneficio [9]. En respuesta a una demanda social evidente, la competencia entre historia y memorias es clara, aunque sosteniendo dos puntos de partida opuestos: la investigación revela el proyecto ideológico y la trayectoria de los implicados (extrema derecha), mientras que la ficción y la autobiografía presentan a individuos más desideologizados, con características que rompen con lo socialmente establecido sobre el nazismo (europeísmo, neopaganismo) y están menos arraigados en los fundamentos de la extrema derecha (oscilaciones ideológicas).
Pierre Clémenti (llamado François Clémenti) fue uno de estos colaboracionistas que tomaron la pluma, publicando La Troisième paix en 1949. Fundador del Parti Français National-Communiste en 1934, lo rebautizó como Parti Français National-Collectiviste a petición de las fuerzas de ocupación y declaró la guerra a Inglaterra «a título personal». El PFNC tenía una base ideológica fascista, una visión contrarrevolucionaria del mundo, referencias a los socialistas franceses (Proudhon, Blanqui), un deseo de control estatal parcial de la economía y era fuertemente antisemita. Al principio de la ocupación, Clémenti rechazó la idea de colaboración en favor de una alianza entre el Reich y Francia, pero también apoyó a Pierre Laval y ayudó a fundar la LVF. Él mismo se alistó en el Frente Oriental. Fue condenado a muerte por rebeldía en 1948. Su obra es un alegato a su favor que sólo puede entenderse mirando más allá de su propio caso y reconsiderarando el significado del compromiso pronazi. Resulta significativo que su opúsculo fuer publicado por «Editions de la Jeune Europe», en referencia al periódico Jeune Europe, que presentaba el Frente Oriental como el momento de construcción de Europa [10]. Clémenti expresó su convicción de que las nuevas necesidades de la lucha anticomunista conducirían pronto a la rehabilitación de las SS. Subraya que él y sus allegados nunca han querido que ganara la Alemania nazi, sino la Europa socialista. Vio en la unificación de los antiguos nazis y fascistas de Alemania, Italia y Francia, así como de los antiguos combatientes de la resistencia anticomunista, la base para la posible construcción de una tercera vía europea basada en el nacimiento de un Estado único para estas tres naciones. Frente al materialismo comunista y capitalista, podrían encontrar apoyo en una Unión Soviética que se alejara del marxismo en favor del socialismo nacional. Atribuyó este cambio en su visión de la URSS a su estancia en el Frente Oriental, donde descubrió a «este magnífico pueblo [ruso], sano, robusto y bueno» [11].
Los objetivos bélicos del pasado se diferenciaban así de la lucha por Alemania, mientras que la actitud hacia los comunistas y los rusos implicaba una representación distinta a la de un avance perpetrado mediante crímenes de masas. Otros «veteranos» tenían la misma idea y esto se reflejó en la propia reorganización de las estructuras nacionalistas. Miembro del Parti Populaire Français, Jean Castrillo se alistó en el Schutzkommandosen en 1942. Fue enviado a Noruega y más tarde se incorporó a la División Carlomagno. La participación en la guerra fue una experiencia bastante transformadora para él y el Frente Oriental ocupaba un lugar tan importante en su memoria que en 1991 resumió sus experiencias bélicas diciendo: «No puedo decir que fuera nacionalsocialista en 1941. Me convertí en nacionalsocialista en 1941 cuando luché en el Frente Oriental». Encarcelado por los rusos, se hizo eslavófilo y se convirtió a la ortodoxia. Se llevaba muy bien con algunos oficiales rusos y creía que el estalinismo era en realidad una forma de nacionalismo. Tras ser encarcelado en Francia, afirma haber ido al cine cuando estaba libre para ver una película sobre el exterminio en los campos. Niega la posibilidad de tales actos, basándose en la actitud que dice haber visto entre los SS. Su experiencia en el frente se convirtió en un medio personal para legitimar la negación. Castrillo pasó a formar parte de Europe-Action, cuyo nacionalismo blanco se correspondía perfectamente con el neonazismo desprovisto de jerarquías blancas internas que había adoptado en el Este, desde su participación armada hasta su encarcelamiento [12]. Europe-Action también tomó prestada su expresión del «realismo biológico» de otro miembro francés de las SS, René Binet (que anteriormente había pertenecido al trotskismo, al Partido Comunista y al PPF) y quien en 1951 fundó el Nuevo Orden Europeo de una escisión del Movimiento Social Europeo [13]. Varios ex-Waffen-SS habían participado en la fundación del MSE y su tema propagandístico de unir a la «juventud nacional de Europa» para comprometerse en el Frente Oriental tuvo eco. El fracaso del MSE también condujo a la creación de Nation Europa en Alemania por el antiguo Waffen-SSArthur Ehrhardt, con el apoyo financiero de Georges Albertini, Maurice Bardèche, Oswald Mosley y el antiguo Secretario de Estado de Goebbels, Werner Naumann [14]. En otras palabras, aunque nadie teorizara sobre ello, el fracaso del partido, al igual que el del activismo, llevó a cierto número de cuadros en la década 1950 a recurrir a lo que veinte años más tarde se llamaría metapolítica.
Aunque el enfoque de Binet era la acción militante y la fidelidad a su compromiso armado, sentó muchas de las bases de lo que se convertirían en las corrientes neoderechistas y nacionalistas-revolucionarias. Tomando prestado el título del periódico de la LVF, Binet fue uno de los primeros, en su Combattant européen, en lanzar una guerra cultural contra los signos de los tiempos. Binet expresaba su nacionalsocialismo de forma izquierdista, su discurso recordaba más los de Otto Strasser que a los de Himmler. Su prosa puede relacionarse con la de Lucien Rebatet que, a partir de 1942, en Je suis partout, hizo un llamamiento al entendimiento entre el comunismo y el «socialismo ario» [15]. Ya en 1946 Binet escribió que «Los Voluntarios del Frente Oriental (...) que fueron pioneros de la nación europea, tienen hoy la alegría de lanzar las primeras consignas y ayudar a construir el primer baluarte de la nueva resistencia contra la nueva ocupación». De ahí que el título complete esa inversión simbólica proclamando que constituye la «voz de la Francia Libre». Mediante la unión deantiguos comunistas de la resistencia y ex-Waffen-SS se pretendía invertir el curso de la historia, cuyo motor era «la lenta o rápida sustitución de la raza por la raza» [16]. Esta perspectiva formaba parte de un plan político.
En 1946, según los Archivos Generales, un grupo de antiguos Waffen-SS franceses formó un Grupo de Autodefensa clandestino y una red encargada de servir de enlace con los movimientos de extrema derecha [17]. En 1947 un Comité Nacional de Coordinación clandestino publicó un memorándum en el que se afirmaba que había que infiltrar los cuadros de los movimientos anticomunistas para dirigir la vida política a través de esta red oculta y concluyendo: «Somos la nueva resistencia...». En 1951 se recristaliza la oposición entre petainistas y colaboracionistas, agrupándose estos últimos en torno al semanario Rivarol [18]. La participación en el Frente del Este ya no era tanto un signo de traición patriótica como la antesala de una tropa de soldados revolucionarios capaces de manipulaciones políticas ocultas. La subversión de la clandestinidad podía ir de la mano del deseo de incluirse en las referencias sociales aceptadas. Un ejemplo de ello fue la creación en Francia de una sección nacional de la antigua asociación de ayuda a las SS (HIAG, fundada en 1951, reconocida de utilidad pública en la República Federal de Alemania en 1959), bajo el patrocinio de Maurice Bardèche, que también se dedicó a difundir la negación del Holocausto [19].
Además de su contenido «revolucionario» las antiguas Waffen-SS legaron así una postura, hecha de reinterpretaciones y del rechazo a renunciar o abnegar cuando todo estaba perdido, etc. En esta etapa, sin embargo, todo forma parte de la clandestinidad, y corre el riesgo evidente de convertirse en una cultura de «gueto». El escritor Jean Mabire desempeñó un papel clave para que lo político y lo cultural se dieran la mano de una forma más abierta.
Las representaciones de Binet eran muy similares a las popularizadas por Jean Mabire cuando escribía para el periódico L'Esprit public de 1962 a 1965. Mabire volvía regularmente al nazismo, presentándolo como una forma de romanticismo. Militante a favor de una perspectiva europeísta y racialista (como resultado de su trabajo con los Jeunes de l'Esprit Public y dentro del movimiento Europe-Action fundado por Dominique Venner), Mabire afirmaba que la internacional nacionalista no necesitaba ser construida sino reconstruida, ya que había sido construida tanto en las Waffen-SS, de las que se decía que habían sido traicionadas por el pangermanismo, como en los maquis, de los que se decía que habían sido traicionados por el panslavismo [20].
Mabire alcanzó un gran éxito con sus relatos sobre las Waffen-SS. Sus primeras novelas sobre el tema, una trilogía (La Brigade Frankreich en 1973, La Division Charlemagne en 1974 y Mourir à Berlin en 1975), fueron auténticos superventas, todas publicadas por la prestigiosa editorial Fayard y reeditadas poco después en rústico [21]. Como muestra de su éxito, poco más de un año y medio después de su publicación, en noviembre de 1973, se habían vendido los 31.900 ejemplares de La Brigade Frankreich impresos por Fayard [22]. Le Livre de Poche había vendido 13.100 ejemplares de La Division Charlemagne en febrero de 1978 [23].
Mabire retoma la creación de un hombre nuevo, tema central de la concepción totalitaria, y lo presenta como un hilo rojo que va desenrollando a lo largo de una narración iniciática. El punto cero de este viaje moral es la derrota de 1940, trauma original de los futuros voluntarios y símbolo de la decadencia francesa. La aventura, por su parte, «comienza al amanecer del 22 de junio de 1941» [24] con la invasión de la URSS. Se pasa del francés cobarde de 1940, indisciplinado y dado al alcohol, al heroísmo y al ascetismo de las Waffen-SS «europeas». En términos más generales, existe una oposición entre los soldados de la Wehrmacht asociados a las LVF, que eran nacionalistas reaccionarios y chovinistas, cristianos y viejos, y la juventud europeísta, revolucionaria e idealista de las Waffen-SS «auténticas». Según James Gregor, existían serios antagonismos entre los miembros de la antigua LVF, que tenían una visión nacionalista y francocatólica, y las SS francesas europeístas, nazis y neopaganas [25]. Pero también se corresponde muy bien con las tendencias históricas de la extrema derecha francesa. La división entre «nacionales» (nationaux) reaccionarios y «nacionalistas» (nationalistes) revolucionarios, usada por primera vez en la publicación de Pour une Critique positive de Dominique Venner en 1962, puede verse aquí.
La tensión entre los partidarios de Maurras y sus herejes que se orientaron hacia el fascismo antes y durante la guerra, la tensión entre vichyistas y colaboracionistas [26], la tendencia a querer crear una escuela revolucionaria por parte de los antiguos colaboracionistas para manipular los movimientos de la extrema derecha nacional-populista después de la guerra, y de nuevo en 1966 por Europe-Action en el contexto de su intento clandestino de manipular a la extrema derecha a través de un comité clandestino [27], todo ello apunta a la ruptura entre una extrema derecha reaccionaria y otra radical y, en este caso, se reflejan en la doble imagen de los reaccionarios de la LVF y los revolucionarios de las SS. Al mismo tiempo, esto refuerza la legitimidad de los revolucionarios que promueven el neopaganismo, el europeísmo y la ideología de la Suelo y el Sangre. En otras palabras, el relato histórico lleva a los radicales a creer que la renovación y la desdiabolización de la extrema derecha sólo pueden lograrse resucitando la ideología de las SS francesas... La paradoja es evidente, pero empírica y estructural. El imaginario del Frente Oriental alimenta y nutre la bipolarización de la extrema derecha francesa.
Metapolítica y lugar de la memoria: el caso de Jean Mabire
La revolución cultural que Venner reclamaba en 1962 para forjar lo «nacionalista» (nationaliste) se vivió plenamente en el Frente Oriental si hemos de creer lo que decía la propaganda de las SS al respecto (en el primer número de Devenir Joseph Darnand afirmaba que este «ejército revolucionario» había roto con el viejo nacionalismo y el socialismo, Marcel Déat precisaba que, como los «soldados del año II», las SS destruían el viejo orden en beneficio de Europa [28]) y este renacimiento tanto del voluntariado como de la geopolítica se refleja en los libros de Mabire. Toda una serie de pruebas jalonaron este tránsito hacia una nueva humanidad, todas ellas seleccionadas. La biografía de los voluntarios de Mabire evoca el «viaje del héroe» teorizado por Joseph Campbell en El héroe de las mil caras, reeditado en una versión revisada en 1968 y que posteriormente gozó del éxito popular gracias a La guerra de las galaxias: una nueva esperanza (1977) inspirada en él. «El camino no es más que una pista de barro donde se hunden hasta las rodillas. La visión de este pozo negro escuece a las Waffen-SS francesas mejor que cualquier discurso. Aquí comienza otro mundo» escribió Mabire [29]. El nacionalsocialismo fue elevado a la categoría de fe, de religión, frente a la Tercera República parlamentaria y las guerras intestinas que desgarraron a colaboradores y colaboracionistas. Pero, en conjunto, el ojo del lector que busque interpretar históricamente la representación vería sin duda a estos hombres como fascistas, pero no como nazis.
Mabire advierte al lector que, desde su participación en la guerra de Argelia, ha «conservado la costumbre de dejar que sólo los guerreros juzguen a los soldados». Además, «no se trata de dar la razón o no a las SS francesas» [30]. Se prestó una atención obsesiva a una condecoración que se convirtió en el símbolo por excelencia del valor: la Cruz de Hierro. Al mismo tiempo que se multiplicaban los episodios que enfrentaban a un pequeño número de «resistentes» a las Waffen-SS en contra de una multitud de rusos, como si se tratase de una reedición de los guerreros de las Termópilas. Se trata de un tema recurrente en la epopeya literaria que puede encontrarse en otros relatos del Frente Oriental [31].
Además de algunas consideraciones sobre la geopolítica militar, Mabire nos invita a seguir esta experiencia de guerra en el frente, a la manera de los periodistas-soldados de las Waffen-SS. Se relatan numerosas conversaciones. Los héroes son presentados mediante breves descripciones que los destacan, como esbozos tomados in situ. Esta atención a los hombres es consustancial a la propia forma de trabajar del autor. Mabire se basó principalmente en las palabras de los actores, tomadas de relatos autobiográficos, así como en numerosos testimonios recogidos por él mismo y por Eric Lefèvre. El trabajo del novelista se asemeja a una mediatización sobre los recuerdos, a la producción de una narración que cataliza los diversos testimonios individuales, publicados o no. No critica el material: para Mabire, la reconstitución a posteriori, es un error y un juicio que no deben existir en los testimonios de los excolaboradores.
Su principal fuente de influencia es sin duda la obra de Saint-Loup, pero aún más que Saint-Loup, Mabire se propone hacer aceptables estos recuerdos, disociándolos de los recuerdos del nacionalsocialismo y del exterminio de los judíos europeos. Los franceses del Frente Oriental se convierten en «ingenuos de corazón en medio de un sistema totalitario» que «nunca se implicaron en tareas policiales» y «no participaron en el mundo de los campos de concentración». Todas las razones aducidas para alistarse pueden parecer respetables, ya se trate de «ideales políticos», del «gusto por la aventura y el riesgo», del «atractivo de la profesión militar independientemente del uniforme», de imaginar que «los alemanes iban a ganar la guerra» o de creer en «la cruzada contra el bolchevismo y el nacimiento de una nueva Europa» [32]. Esta forma de presentar a los «vencidos» como idealistas tiene su origen en lugares comunes forjados en las cárceles de la Liberación [33]. Sin embargo, el propio tema del valor en combate de las Waffen-SS, por ejemplo, fue retomado y a menudo presentado como verdad histórica después de 1945, dado el impresionante número de Cruces de Hierro recogidas por estas unidades. De hecho, esta entrega de medallas fue delibera y extremadamente generosa, hecha con el objetivo de «hacer héroes» [34]. Ya en el primer número de Devenir, un reportaje sobre cómo las SS estaban forjando un nuevo hombre europeo terminaba certificando que los reclutas volverían para regenerar Francia proclamando: «Se ha corrido la voz de las Cruces de Hierro» [35]. Como los reclutas franceses, en particular los de la LVF, no habían brillado en el frente, esta imaginería era tanto más necesaria (algunos de los que aún se presentan como antiguos miembros del Frente Oriental sólo habían visto la retaguardia de ese frente).
Mabire afirma haber escrito sus novelas con «rigor histórico» [36]. La expectativa creada por esta afirmación en la lectura no es de verosimilitud, como ocurre con las novelas históricas, sino de veracidad. Y, sin embargo, en su opinión, estos relatos tienen un «color novelesco» [37]. El estilo, que combina lo espectacular, lo heroico y lo erótico, es muy evocador. Al igual que Saint-Loup, Mabire no presenta sus análisis históricos y políticos disociándolos de la narración, sino poniéndolos en boca de sus protagonistas. El anacronismo se convierte así en archivo a través de la metanarrativa, consecuencia lógica de una concepción cultural de la política que Mabire expone: «para mí, la política sólo tiene sentido si se incluye en un conjunto más amplio (de la arqueología a la metafísica, por ejemplo)» [38].
En estas obras la identificación con los «héroes» se consigue a través de la valentía. Son, ante todo, soldados de élite que luchan por una causa perdida. El punto de vista teleológico juega aquí a fondo, relegitimando a los hombres en nombre del «es mucho más hermoso porque es inútil» de Cyrano de Bergerac, como en la imagen de Henri Fenet, un SS francés presente en el búnker de Hitler al final, o la de Christian de La Mazière, un dandi de las SS. Estas novelas presentan a los soviéticos utilizando una profusión de recursos técnicos y de artillería contra las Waffen-SS, que luchan únicamente con la fuerza de su heroísmo. El símbolo mismo de esta lucha es el combate cuerpo a cuerpo con los tanques soviéticos, Panzerfaust en mano, coraje y voluntad frente al acero. El autor transforma a sus héroes en monjes-soldados: «en vísperas de volver a la línea, aún les quedaban algunos días por vivir en un estado de privación y de pureza que los SS franceses nunca habían experimentado y que les parecía ser la razón misma de su alistamiento» [39]. Alistarse en las SS se convertía en un gesto respetable porque era una prueba de abnegación, al parecer los escritores no se detenían en los documentos de propaganda del alistamiento que detallaban los menús gastronómicos que se suponía se servían a los SS... Por otra parte, cuando Mabire insistía en que los ojos de esos Waffen-SS «ardían con un fuego extraño» [40], ¿no estaba reproduciendo la impresión dejada por los carteles de reclutamiento?
Mabire evoca trayectorias individuales que las memorias gaullistas y comunistas que habían dominado hasta entonces no podían explicar. Un ejemplo es Jean Bassompierre, «un teniente (...) con fama de “fascista” [que] luchó enérgicamente contra el ejército italiano» [41]. Participó en la «ola retro», iniciando un número especial muy leído de Historia sobre «La Internacional de las SS», que dio un nuevo giro a los principales temas de sus novelas [42] que encaja perfectamente en esta visión de atracción-repulsión: “Odiaran a los vencedores o los envidiaran, y a veces ambas cosas a la vez, [los franceses de 1940] no dejaban de estar fascinados por esos adolescentes rubios (...). Para los chicos de quince años, más que para nadie, se trataba de un ejército luciferino que marchaba por las carreteras de Francia. En junio de 1940, los guerreros de la Wehrmacht poseían el esplendor del infierno” [43].
La generación más joven sentía pasión por aquellos a quienes sus mayores habían intentado olvidar. Mabire se inspiró en gran medida en Réprouvés, de Von Salomon, una novela, en gran parte autobiográfica, que narra el alistamiento en los Cuerpos Franceses alemanes tras la derrota alemana de 1918 y que se reeditó en rústico en 1969 y que era especialmente popular entre Dominique Venner, la Nueva Derecha y los neofascistas de Ordre Nouveau [44].
La experiencia de los voluntarios en el Frente Oriental fue doble. Presentados como irreductibles a cualquier otro, sus protagonistas se desenvolvían en “un mundo aparte”, un universo donde reinaba “una dimensión completamente distinta del bien y del mal” [45]. Y, sin embargo, tiene una pertinencia contemporánea. Mabire juega tanto con la memoria literal, que construye el acontecimiento como único para no devaluar el objeto de la memoria, como con la memoria ejemplar, que reconoce rasgos comunes con la situación actual [46], necesarios para ganarse al lector medio. Las Waffen-SS francesas que defienden Berlín contra los soviéticos son los descendientes de los emigrantes hugonotes franceses que contribuyeron a la construcción de la capital alemana. También son “soldados perdidos”, una referencia a los combatientes de las guerras de Indochina y Argelia que los lectores con una cultura “de derechas” no pueden dejar de comprender [47]. A raíz de Mayo del 68, se les presenta incluso como “manifestantes [que] rechazaron en bloque el mundo que sus hermanos menores quieren destruir hoy” [48]. Esto no debe interpretarse como un signo de inconformismo del autor.
La descomposición del movimiento Europa-Acción dio lugar a un grupo nebuloso que pretendía vincularse al movimiento de ultraizquierda surgido de Mayo del 68 reformulando intensamente los esquemas ideológicos racialistas, abogando por una Europa de las regiones étnicas bajo el nombre de “socialismo europeo”, fórmula tomada de Binet, que se hacía eco de Marcel Déat y justificando el colaboracionismo político y militar [49]. Pierre Vial (sobrino de Clémenti, miembro de Jeune Nation, futuro ejecutivo del FN y dirigente de la asociación Terre et Peuple) ya había lanzado un boletín Socialisme européen que pretendía ser “un laboratorio de ideas a partir del cual definir las posibilidades de acción”, presentando el racismo en un discurso muy “de izquierdas” [50]. La extrema derecha radical estaba generalmente implicada en este movimiento, al igual que los neonazis de la Fédération d'Action Nationaliste-Européenne (fundada en 1966 por la unión de tres grupos, entre ellos el Cercle Charlemagne, llamado así por la división de las SS del mismo nombre, un grupo socialista-europeo escindido de la Jeune Europe de Jean Thiriart, que preferían a Emile Lecerf [51]). Al mismo tiempo eran defensores del acercamiento de los extremos, creyendo que los hijos de René Binet y del Che Guevara podían unirse en una causa común [52]. Las novelas de Mabire son, en efecto, la vertiente “metapolítica literaria” de una estrategia “metapolítica de grupo” que, con la Nueva Derecha, evolucionó progresivamente hacia una metapolítica stricto sensu. Dominique Venner, que le conocía bien, decía que “para Jean, la literatura y la política no podían separarse” [53].
Esta dimensión metapolítica se dirige tanto al gran público como a la extrema derecha, con el objetivo de cambiarlos desde dentro. Ya en el seno de L'Esprit public, tras la pérdida de la Argelia francesa, Mabire había hecho mucho por convertir a los nacionalistas surgidos de la OAS y de las luchas coloniales a la idea de la Europa de las etnias y del “socialismo” antimarxista. Aunque los elementos léxico-ideológicos se han difundido desde entonces, estos hombres no han sido necesariamente rehabilitados: incluso durante los últimos coletazos de Europe-Action, cuando Bousquet y Clémenti tomaron el control de lo que quedaba de su Rassemblement Européen de la Liberté, se produjo una oleada de dimisiones en contra de la toma de poder por parte de los antiguos miembros del Frente Oriental [54]. La mala representación de las SS era, pues, un hecho incluso en la extrema derecha radical; no, es cierto, que este asunto complicaba el aspecto financiero, incluso cuando la formación interna incluyera sesiones sobre el Apartheid o Mein Kampf [55].
Así, una década después de sus publicaciones en L'Esprit public, Mabire sigue desempeñando el papel de “despertador” por medio de la ficción. Muy leída en la sociedad de la década de 1970, la trilogía de Mabire no deja de ser un lugar de la memoria para una contracultura de derecha radical. Las críticas de la prensa de extrema derecha de la época fueron en gran medida positivas, sobre todo porque quienes reseñaban la obra compartían a menudo las opiniones del autor sobre el tema. En la reseña de Bardèche, Jean-Paul Rondeau alabó el poder evocador de los relatos [56], mientras que el órgano del Frente Nacional habló de una apoteosis trágica [57]. La acogida más fuerte y calurosa se produjo en las columnas de Rivarol, semanario leído en los grandes círculos de extrema derecha. Las elogiosas críticas de André Doutart refrendaron los principales temas de Mabire. Los voluntarios de las Waffen-SS habrían luchado por una Europa unida y socialista, por una mística luminosa en un ejército internacional. Mucho mejores que los pálidos revolucionarios de hoy, eran auténticos “contestatarios contra la sociedad plutocrático-democrática de su tiempo”. La conclusión no sorprende: “la consecuencia lógica del relato de Jean Mabire debería ser la rehabilitación de estos combatientes, que permanecieron fieles a su juramento hasta el final” [58]. El promotor de la trilogía era el más indicado para actuar como intermediario, ya que era un antiguo miembro de las Waffen-SS, lo que avalaba los mitos convertidos en realidad bajo la pluma de Mabire [59].
“Muchos jóvenes de hoy quieren saber lo que fueron realmente [las Waffen-SS francesas], al margen de la pasión partidista que transfiguró su historia de un modo u otro”, afirma Mabire [60]. Pero no cabe duda de que sobre todo los jóvenes de extrema derecha demandan textos que afirmen una contrahistoria. Detrás de esta postura se esconde una antífona de extrema derecha que forma parte de esta visión singular del pasado: todo investigador objetivo debe denunciar la “historia oficial”. Frente a la historia de los vencedores se alzan los testimonios de quienes dicen: “Yo estuve allí”. “Inconformismo”, “verdad” y rehabilitación tienden a menudo a entrecruzarse en un lenguaje propio en la galaxia de la derecha. La revista Le Combat européen, dirigida por Pierre Clémenti en el seno de la NOE, respaldó el primer volumen de Mabire, afirmando que su visión le parecía objetiva y sincera [61]. La revista Nouvelle Ecole del GRECE describió la novela como “la verdadera historia de los voluntarios franceses en las Waffen-SS” [62].
Sin embargo, la tendencia de las personas a permanecer en sí mismas es motivo de preocupación para quienes sueñan con oportunidades políticas. El impacto de la obra de Mabire fue tan fuerte que, en la década de 1980, Jean-Gilles Malliarakis, líder del Mouvement Nationaliste-Révolutionnaire y luego de Troisième Voie, introdujo lo que denominó la “demabirisación”: la purga periódica de militantes demasiado influidos por Mabire, que coqueteaban demasiado con la ideología de Sangre y Suelo y que corrían el riesgo de cometer actos violentos [63].
Una de las consecuencias habituales de estas importaciones culturales en la política fue el fenómeno del “entre-sí” (el mismo problema se produjo con la difusión de la obra de Julius Evola durante la misma década). Los héroes de Mabire saben que “su único futuro será dar testimonio. No tanto de un ideal como de una actitud” [64]. Este concepto de “vigilantes” dentro del “interregno” es muy típico de la extrema derecha que redescubrió la Revolución Conservadora y en particular de la Nueva Derecha con su tendencia a desmovilizar la acción [65]. Sin embargo, fue también a través de este enfoque estilístico como la obra de Mabire se incorporó a una cultura política que trascendía las divisiones entre las diversas corrientes de extrema derecha.
Esta trilogía era un eco de la crítica de Jean-Marie Le Pen a la decadencia en 1969: “En un momento en que el ateísmo progresa formidablemente, la necesidad de un orden moral es tanto más acuciante cuanto que la moral es tan laxa. Los jóvenes de hoy quieren certezas, no problemas. Desde este punto de vista, el hombre de las SS con su uniforme es un poco como el cura con su sotana. Desaparecido en un apocalipsis de fuego, bombas y sangre, el soldado de Hitler se ha convertido en un mártir para estos jóvenes en busca de pureza, aunque sea la pureza del mal” [66]. Lo entiende, pero no está de acuerdo, porque Jean-Marie Le Pen es un “nacional” y no un “nacionalista”. Sin embargo, la extrema derecha radical encuentra a menudo aquí lo que es: una posición más estética y cultural que política, más elitista que de masas, menos un régimen que un estado de ánimo y una postura. Estas novelas están hechas de la suma del valor individual que conduce al hombre nuevo. Las masas, características del totalitarismo fascista pero ausentes de un neofascismo francés que sólo concibe la política en términos de teoría de las minorías activas, son una característica únicamente del mundo soviético.
Independientemente de que militantes y simpatizantes califiquen o no de “fascistas” estos valores, la trilogía de Mabire que los encarna contribuyó a crear un ethos identitario para la extrema derecha radical. En el ocaso de su vida, Mabire miró hacia atrás en su carrera como escritor y destacó un tema recurrente en su obra: lo que tienen en común sus héroes es que son “aventureros”, que viven peligrosamente frente a una sociedad burguesa conformista [67]. Aquí encontramos uno de los ingredientes del éxito de las novelas históricas, a saber, la presentación de hechos épicos y gloriosos que contrastan con la torpeza y la rutina de la vida cotidiana [68]. Pero, como estas novelas son ante todo una representación de las representaciones que hacían los “antiguos”, tiene sentido. Al leer Le Combattant européen de la LVF, Simon Epstein observa que, dada la mediocridad de la actividad militar de la unidad, “Augier, soldado-escritor, debe por lo tanto transformar una actividad de segunda línea (...) en una epopeya romántica y salvaje” [69]. Sin embargo, como esta tergiversación era un hecho de la época en cuestión, y por lo tanto, podía aducirse como prueba que había moldeado las mentes de los actores, contribuyó a una autorrepresentación de la legitimidad, llevando en última instancia a Saint-Loup a crear una titanomaquía en sus novelas.
La oposición entre una “derecha adinerada” y una derecha revolucionaria, entre los que aceptan el “Sistema” mientras fingen combatirlo, los “nacionales”, y los verdaderos oponentes que se niegan a transigir, los “nacionalistas”, se vuelve a escenificar aquí, amplificada por el poder de la novela y las posibilidades de identificación asociadas. Estos “réprobos” de las Waffen-SS se convierten en modelos para una extrema derecha que se siente condenada al ostracismo. Sus militantes, sobre todo los más jóvenes, tienden tanto a denunciar el rechazo del que son objeto como a cultivarlo: ¿por qué no habrían de reconocerse en esas Waffen-SS “malditas”? El estigma se convierte en una reivindicación conmemorativa y en una comunidad conmemorativa. A los activistas de extrema derecha se les recuerdan constantemente las responsabilidades criminales del Nuevo Orden Europeo nazi: convertir el estigma en una posición de inconformismo, de posesión de conocimientos específicos sobre lo que “realmente” fueron las SS – en resumen, de posesión de conocimientos cuasi esotéricos frente a la “historia oficial” – significa transformar la propia imagen de uno mismo y adquirir capital cultural. En resumen, hay que cambiarlo todo sobre el pasado para poder vivir en el presente.
Un teatro euroasiático
El estigma que pesa sobre los antiguos soldados del Frente Oriental no es sólo una cuestión política, sino también ética. Por ello, el teatro de operaciones debe convertirse en un teatro humano. La propaganda colaboracionista presentaba el alistamiento en el Este como una entrada en la caballería: se había convertido en un símbolo de deshonor y traición. Los círculos comunistas insistieron en ello. Cuando, en 1948, un menor de 19 años fue detenido y condenado por haber asesinado al miembro mayor de un trío homosexual en el que era antiguo voluntario de las SS, L'Humanité denunció los hechos, vinculando el vicio pederástico, el impulso asesino y la implicación colaboracionista. El asunto de la moral se convirtió en un hecho político y aunque el joven fue condenado a cadena perpetua, el diario comunista declaró escuetamente: “Merecía morir” [70]. La representación forjada por la extrema derecha radical debe ser, pues, la otra cara de esta obra. Para Mabire, el hombre de las SS francesas era a la vez Rolando y Don Juan: “Chabert pudo ver que los rusos se acercaban y pensó que tendría que dar la orden de retirarse rápidamente. La chica se apretó cada vez más contra él. Es una invitación que el guardiamarina nunca ha rechazado. Las isbas arden, las bombas caen, las balas maúllan. Pero el guardiamarina Chabert está besando a una chica guapa en los labios. Con la mano derecha, no suelta su subfusil ruso. Con la izquierda, desabrocha el corpiño y se sumerge bajo la falda. La chica se desliza bajo el oficial francés, que empieza a hacerle el amor mientras mira a ‘Iván’ lo ven por las rendijas del desván” [71].
Las SS de Mabire recuerdan a un personaje de James Bond, pero también son el material de las memorias de muchos antiguos reclutas, que erotizan la práctica de la violación o, como en la autobiografía del antiguo miembro de la división Charlemagne Christian de La Mazière (1972), describen los efectos del encanto del uniforme de las SS. También hay referencias sistemáticas a los hunos y a Gengis Kan. La Mazière afirma que, en Pomerania, madres agradecidas ofrecieron a sus hijas vírgenes a las SS francesas para que no fueran “desfloradas por los mongoles” en el momento en que llegara el Ejército Rojo [72]. El imaginario era claro: las SS francesas eran virilidad aristocrática y seducción, los bárbaros violación en masa. Saint-Loup llevó este razonamiento a su extremo político. Donde de La Mazière veía el efecto del encanto, Saint-Loup describía un plan: para evitar quedar preñadas durante las violaciones masivas que pronto perpetrarían “los hunos”, las mujeres de Europa Oriental se entregarían a los voluntarios de las SS para estar seguras de quedar embarazadas de niños blancos. El sexo ya no era una cuestión liberal de los individuos, sino parte de un proyecto de higiene racial ciertamente totalitario, pero popular [73].
Sin embargo, nada de esto basta para tejer una narración que permita comprender a estos actores en el repelente mundo de la “barbarie” nazi, por utilizar un término que se ha convertido en lugar común. El tema de los “malditos” y los “réprobos” es un entramado romántico bastante apropiado en un momento en el que el rock'n'roll se resquebraja y surgen contraculturas que ponen el acento en la estética de los márgenes. Es todo lo contrario de uno de los argumentos repetidos por la propaganda que aboga por el colaboracionismo armado, a saber, que, gracias a los voluntarios del Frente Oriental, Francia estaba en condiciones de participar honorablemente en la posguerra tras la victoria del Tercer Reich. Incluso cuando, en marzo de 1944, Jean-Marie Balestre calificaba a los reclutas franceses de Devenir de “parias” víctimas de “prejuicios” a su salida, certificaba que los SS franceses sabían que Hitler “los conduciría al triunfo total, y sabían también que, gracias a ellos, Francia habría participado” [74].
Aunque históricamente erróneo, el tema del romanticismo vitalista permite rehumanizar a las SS en la memoria. Mabire suscita “empatía” en el sentido griego de la palabra, un sentimiento de pertenencia a la misma humanidad, como contrapunto a la deshumanización de los soviéticos. El lector entra en su categorización del mundo mediante el uso de términos específicos. Los enemigos se convierten en “partoches” o “Iván” en singular. Es imposible tener ninguna connivencia con ellos. Al lector no se le presentan figuras soviéticas individuales, sólo las masas.
La figura del Ejército Rojo es, en definitiva, deudora de la tan popular imagen de finales del siglo XIX que consideraba que el “peligro amarillo” desatado por las hordas mongolas significaba para Europa. En su Mito del siglo XX, el teórico del partido nazi Alfred Rosenberg insiste en que la Revolución Rusa representa una liberación de la sangre mongola y la sed que esta siente por arrasar Europa. Él y Hitler describen el bolchevismo como la movilización de la sangre asiática para destruir la Europa aria, igual que los hunos arrasaron Roma después de que esta última permitiera que su sangre y su alma se volvieran asiáticas [75]. Por ejemplo, Signal podía fustigar al “Asia soviética” que acechaba “tras el Telón de Acero” [76], pero también tenía que elaborar un ditirámbico informe de seis páginas sobre los tártaros voluntarios del Este y su “cuerpo de caballería cosaca” [77].
La mongolización del enemigo “judeo-bolchevique” es bastante vivida en Binet y Mabire. Ambos autores describieron la Europa de la Guerra Fría como “ocupada” por tropas “negras” (estadounidenses) y “mongolas” (soviéticas). El boletín universitario lanzado por el grupo de Binet en 1946 insistía en la “barbarie mongola”, pero sustituía la negrificación de los Estados Unidos por la denuncia del “maquinismo esclavista”. Como su línea era presentarse como socialistas, afirmando que “los voluntarios del Frente Oriental y los antiguos miembros de la resistencia comunista deben unirse en la nueva resistencia”, es posible que este aggiornamento reflejara una percepción de la dificultad de promover esa unión con una retórica racialista [78]. Los textos de la NOE siguieron fustigando las ideologías “antieuropeas”, “asiáticas” o “mongoloides”, “como el marxismo” [79]. Por su parte, Mabire afirma que Hitler “puso su humanismo al servicio del nacionalismo (nacionalismo más que racismo, siendo un pangermanista austriaco y no un europeo nórdico) (?) demostrando con eso ser un hombre del pasado”, lo que también es un problema actual ya que “[nosotros] que apenas pensamos en Europa, nunca pensamos en la indispensable unidad ruso-americana-europea que constituirá mañana el triple frente nórdico-occidental contra la ineluctable marea asiática” [80].
François Duprat, figura clave en la reconstrucción de la extrema derecha, no se quedó atrás, y sus artículos publicados en la revista de Bardèche muestran cómo la narrativa bélica puede utilizarse para reconfigurar el pasado en beneficio del presente: “Las poblaciones rusas y alemanas de 1941” alaban a las valerosas SS; “La Batalla por Budapest (1944)” relata la “audacia sin precedentes de un puñado de SS [mientras] los rusos avanzaban, saqueaban y masacraban”; “La guerra y la ocupación en los Estados bálticos” describe al pueblo báltico enfrentándose al Ejército Rojo “con un coraje excepcional contra las hordas que barrían su suelo”, siendo las Waffen-SS “formaciones de choque” que lucharon “heroicamente” y gracias a las cuales Letonia fue “salvada temporalmente”. Duprat pintó con exaltación a los “jóvenes voluntarios fanáticamente anticomunistas” que aseguraron la “resistencia” de unas Waffen-SS dotadas de todas las cualidades y cuya retrospectiva revela una Europa que parece revivir “la espantosa época de la invasión mongola de la década de 1240” [81]. Es difícil expresarlo de forma más elocuente: el nacionalismo sería la guerra heroica contra el judeo-bolchevismo y sus hordas mongolas. Pero su descripción es la opuesta a las de Binet o Mabire. Aunque utiliza los mismos mitos sobre el Frente Oriental, Duprat sitúa los hechos en una perspectiva anticomunista. Tanto es así que deslegitima las ideas de la alianza de los extremos, de realismo biológico y de una orden negra esotérica promovidas por Binet, Mabire y Saint-Loup. El lector no se dirige a los grupúsculos socialistas europeos: los verdaderos descendientes de las tropas francesas del Frente Oriental serían las tropas de choque de la acción directa anticomunista, Occidente y luego Ordre Nouveau.
El “mongol” como enemigo tenía la ventaja de sacar el Frente Oriental de la historia del exterminio, situándolo en la continuidad de las guerras internas en el espacio euroasiático. La insistencia en el tema mongol permitió alejarse de la parusía racial concebida por las SS, al construir una Europa Judenfrei. La idea nazi de arios y judíos como desencadenantes del enfrentamiento final se sustituye por una representación del enfrentamiento entre Oriente y Occidente. Esto coincidía plenamente con la reescritura racialista de la historia difundida por Europe-Action [82]. También permitió sortear la discordia en torno a la cuestión israelí, ya que cuando Mabire pedía que “los tractores y las pistolas automáticas se unieran fueran de la mano como en Israel”, Saint-Loup, entre dos obras hagiográficas sobre los voluntarios de las SS, aprendió a utilizar su propia imagen como elemento estigmatizador, comparando Israel y el Tercer Reich, Tsahal y las Waffen-SS en una percepción negativa del nazismo que le era desconocida [83]. Por último, esto permitió heroizar la oposición a la inmigración, tema al que los radicales eran sensibles desde la NOE y que entró en la alquimia del Frente Nacional a través de Duprat y Militant. Por ejemplo, una portada del órgano de los Faisceaux Nationalistes-Européens (ex-FANE) representa a las SS en el Frente Oriental con el titular “Ayer y mañana, defendiendo Europa”, mientras que otra muestra a jóvenes nacionalistas con chaquetas de cuero portando bates de béisbol a la sombra de los voluntarios de ayer [84]. Hay aquí efectos entrelazados: Roma contra los hunos, las SS contra los mongoles bolcheviques y el rechazo de la presencia de inmigrantes africanos se entremezclan para legitimarse mutuamente y hacer de la marginalidad digital un no-acontecimiento.
Mabire adoptó el tema colaboracionista, para quien la adopción de una religión política europea era la única forma de contener el empuje del Oriente tras el estandarte rojo [85]. El mito de la cruzada transcendió el conflicto a una guerra escatológica mediante el encuentro de entidades primordiales Oriente/Occidente [86]. Es Europa en armas contra el enemigo de siempre, un Oriente fantaseado y temido contra el que los europeos forjaron su identidad. “Esta noche, Berlín cambió de continente” [87], escribió Mabire para describir la caída de la capital nazi. La oposición es también entre civilización y barbarie. Los combatientes son los símbolos mismos de esta dicotomía fundadora. No hay rastro de los actos de crueldad cometidos por el ejército alemán [88]. Por el contrario, una escena se describe como “altamente simbólica”: en la capital alemana en llamas, los franceses encuentran una colección de fotografías dedicadas a España y a su cultura. “Fernet sintió que también luchaba por defender estos libros. Como antiguo estudiante de khâgne antes de convertirse en oficial, la situación le parece altamente simbólica. Mañana, los mongoles quemarán todos estos libros” [89]. El estilo de la novela produce una inversión del hecho, sustituyendo las quemas llevadas a cabo por los nazis en 1933 en nombre de la lucha contra el Kulturbolschevismus por una Europa del Kulturvolk defendida por sus SS. En este sentido, las ideas de Saint-Loup estaban a veces más cerca de los teóricos nazis que de la propaganda colaboracionista difundida en Francia. Para estos últimos, la construcción de un ejército europeo a través de las Waffen-SS era una promesa sobre el futuro en la perspectiva del tiempo lineal (así, un grueso folleto que promovía el alistamiento presentaba a los SS franceses uniéndose a sus camaradas europeos como un “nuevo paso muy importante en la unión de la juventud europea contra el nihilismo bolchevique”). Por otra parte, en las novelas de Saint-Loup las SS funcionaban armoniosamente no porque compartieran un horizonte común de expectativas, como había afirmado la prensa colaboracionista, sino porque reconstituían la unidad aria original, tal como existía antes de que los descendientes de Thule fueran vencidos por el mestizaje [90].
Aunque la visión racializadora que surgía aquí y allá debía mucho a Europe-Action y luego a la Nueva Derecha, que seguía muy influida por las referencias a la biología [91], estos topoi también recordaban a los estereotipos de las novelas de aventuras coloniales. Tales novelas habían desempeñado un papel decisivo en la difusión de la “cultura colonial”, que seguía presente en diversas formas en la década de 1970. El lector viaja a un territorio de fronteras, ayer las colonias francesas, hoy los límites de Europa, en cualquier caso, las fronteras de la civilización [92]. La designación del enemigo lo convierte en “exótico” en un caso u otro.
“Los rojos son a menudo amarillos, con las caras planas y redondas de los mongoles”, escribió Mabire [93]. El heroísmo y los valores caballerescos eran consustanciales a lo europeo en el sentido étnico del término, ligado a la sangre y al suelo. Las Waffen-SS francesas, vanguardia de esta “europeidad”, no podían actuar de manera ruin y, a la inversa, el asiático soviético no podía actuar con honor y nobleza si no imitaba servilmente a sus adversarios. ¿Estamos hablando de la misma humanidad? El proceso de animalización de los soviéticos nos hace dudar de ello. No son más que soldados que “se multiplican como hormigas” [94] y “pululan en pantanos y bosques” [95]. No es de extrañar que Mabire escribiera obras elogiosas sobre los “paras” aliados, pero ninguna sobre el Ejército Rojo. La línea divisoria no estaba entre los dos bandos de la Segunda Guerra Mundial, sino entre el mundo blanco y sus élites guerreras y las masas no europeas (en otras palabras, las concepciones actuales del autor basadas en su pasado militar). Todos estos estereotipos no son ajenos al éxito de esta trilogía. Al final de la guerra de Argelia, la memoria colonial cayó en un verdadero agujero. Presentándose como novelas de aventuras accesibles al público más amplio posible, los libros de Mabire llenaron un vacío que había quedado atrás, adaptándose al mismo tiempo a los códigos y al contexto de la década de 1970. Por decirlo en términos actuales: la reescritura del Frente Oriental lo convierte en mainstream. Pero todo esto forma parte de una reconfiguración ideológica que comenzó durante el conflicto mundial.
Reconfiguraciones ideológicas
La División Carlomagno no debía incluir en su instrucción la formación ideológica nacionalsocialista [96]. Por lo tanto, la oferta ideológica legítima corrió a cargo de los medios de comunicación de las SS. La interpenetración franco-belga que surgió de la administración militar de Bélgica y el norte de Francia permitió que circularan términos y temas, ya fuera cuando Degrelle, el líder rexista convertido en Waffen-SS, acudió a París para alabar la “revolución europea” y el “socialismo”, o cuando el Dr. Quesnoy de Douai, vinculado a los nacionalistas flamencos y a la SD, y que pronto sería el fundador de una Liga de Derechos del Norte, dio un curso racial en Amberes (se citó en particular a Günther y Rosenberg) a reclutas de la “Allegemein-SS del Norte de Francia”, como dijo la RG, quizá refiriéndose a la antigua Algemeene-SS Vlaanderen [97]. Sin embargo, dado que muchos de los “contrabandistas” de la posguerra pasaron por Devenir, cuyo subtítulo era ya bastante sugerente (“revista de combate de la comunidad europea”), que era, por supuesto, la revista de las SS francófonas que podía considerarse especialmente digna de mención. Sin embargo, esta última proponía temas alejados del nacionalismo francés, pero también de la “cruzada” de 1941. Uno de sus textos se centra en la unidad lingüística y mitológica de los indoeuropeos. Otro certifica la muerte de las naciones europeas con el advenimiento del “hombre nórdico que renace hoy”, también “arraigado” y libre del “orientalismo” cristiano. Un tercer texto comenta entusiasmado al dios Thor y lo compara a las SS con los vikingos. Balestre elogia a “los hombres arios de Normandía, Bretaña y Borgoña [que] se unen a sus hermanos de raza”. En cuanto a Rebatet, saluda a los alemanes nazis, a los rumanos de la Guardia de Hierro, a los antisemitas de Estados Unidos, a los nacionalistas argentinos, a todos los que tienen “el espíritu europeo, el espíritu ario, el espíritu revolucionario”. Y concluye que los soldados del Frente Oriental eran “la élite de esa Internacional Aria que mañana rehará el mundo vaciándolo de judíos, demócratas y monopolios”. Camaradas SS de 18 naciones, os extiendo, con mi brazo extendido, nuestro saludo, el saludo ario. Muerte a los judíos” [98].
Otro título que pudo ser importante para nuestros autores fue La Jeune Europe, una revista geopolítica dirigida a jóvenes intelectuales, que supo construir la ideología y la propaganda de la europeización del Frente Oriental. Muchos de los Nuevos Jóvenes Europeos que la distribuían se unieron al Frankreich [99]. Por último, la persona de Marc Augier estableció el vínculo entre esta revista y la reescritura que hizo de ella bajo el nombre de Saint-Loup. Déat afirmaba que la presencia francesa en África era la de Europa, mientras que el alemán Matthias Schmitt afirmaba que Alemania unificaba Europa e Italia unificaba África para lograr una comunidad “de Hammerfest a Ciudad del Cabo” [100]. Bruno Francolini explicó que, después de la guerra, la colonización de África tendría que basarse en la prohibición absoluta del mestizaje y del trabajo intelectual de los negros, porque “imponer a los nativos un estilo de vida enteramente europeo e inculcarles por la fuerza nuestra cultura sólo podría perjudicarlos”, mientras que su compatriota italiano Julius Evola explicó que el “espacio del Reich” que se avecinaba era superior a los nacionalismos pequeños y estrechos de miras y permitiría a las comunidades adscribirse a un ideal trascendente, aunque desprovisto de universalismo [101].
Paganismo, rechazo del nacionalismo estrecho en favor de una unión europea de las “patrias carnales”: en Devenir encontramos la esencia de la imagen revisitada de las SS esotéricas tan popular en las novelas de Saint-Loup y, más allá, en la cultura pop de la década de 1960 y 1970 (por ejemplo, libros baratos que presentan ucronías o ufología que incorporan a unas SS como depositarias de varios misterios). En un diálogo de uno de ellos, un oficial de las SS afirma que “las naciones se han quedado obsoletas”, que el nacionalismo alemán pretende “reconquistar el espacio vital del hombre blanco” y que “el Führer pretende liderar una defensa global del mundo blanco”, antes de preguntar al borgoñón que tiene enfrente “¿por qué no se alista en las Algemeine SS?”. Es fácil comprender cómo Saint-Loup pudo, por sinécdoque, llegar a creer lo que decía de que las SS eran “una organización de oposición” al hitlerismo, afirmación difundida por Alain de Benoist y otros [103]. Saint-Loup afirmaba que una élite revolucionaria europea trabajaba en el seno de las SS para imponer una Europa de las “patrias carnales”. No sólo presenta el mapa en la misma novela, que oscila constantemente entre la ficción y la afirmación histórica, sino que incluso afirma ante la crítica de Bardèche que esta élite habría estado dispuesta a tomar las armas contra los pangermanistas [104].
¿Los lectores y editores de Devenir confundieron su prosa con la realidad? ¿Qué efecto pudo tener en los jóvenes nacionalistas la reedición de Devenir en 1987 por la librería Ogmios (que lleva el nombre de un dios guerrero galo), la cual fue prologada por Saint-Loup y, sintomáticamente, al mismo tiempo que reeditaban los libros de Mabire? Las ambigüedades de los debates y posiciones de la extrema derecha radical de posguerra ya están presentes en Devenir, en particular las cuestiones del euro-regionalismo étnico, el nordicismo y la unidad del mundo blanco. Del mismo modo, Jeune Europe contenía elementos que abogaban por la unidad de Europa-África y que prefiguraban claramente los objetivos de Europe-Action de Jean Mabire y del movimiento Jeune Europe de Émile Lecerf y Jean Thiriart (desde sus orígenes euro-regionalistas en su manifiesto de 1963 hasta su fase jacobina nacionalista-europea) [105].
Algunos antiguos miembros de los Jeunes de l'Europe Nouvelle participaron activamente en los círculos nacionalistas de posguerra [106]. Uno de los puentes tendidos fue con el movimiento bretón (emsav). En su obra, Saint Loup popularizó unas SS místicas y paganas, sobre todo en Nouveaux cathares pour Montségur (una búsqueda del Grial ario de Thule, cubierto de inscripciones rúnicas, que Rosenberg y un colegio sagrado dirigido por Himmler querían recuperar a través de una fracción de élite de las SS) [107]. Lo mismo ocurre con Georges Pinault, alias Goulven Pennaod, un ex-JEN que desde 1954 participó en La Bretagne, junto con Olier Mordrel, el colaboracionista bretón partidario de los Imperios raciales de la guerra [108]. Todas las revistas socialistas-europeas que surgieron de Europe-Action y, más tarde, de Pour une jeune Europe y Le Devenir européen, incitaron a los lectores a acercarse a la Bretaña real, ya que el tema celta parecía ser uno de los puntos de unión entre el arianismo, el europeísmo y el afirmacionismo blanco.
«Druida» que enseñó en Lyon III, Pennaod fue después investigador asociado en la Universidad de Brest. Ha colaborado en Europe-Action y Nouvelle Ecole. Fue redactor jefe de Devenir européen, la revista “etnicista-socialista” lanzada en Nantes por el antiguo sargento de reclutamiento de la División Carlomagno, Yves Jeanne [109]. Además de Saint-Loup, esta revista también contaba entre sus colaboradores con el ex SS francés Robert Dun, ahora poeta y ensayista que también participó en publicaciones de neoderechistas, en la NOE, fue miembro del Cercle Lux Fero (por Lucifer) druídico y del Groupe druidique des Gaules [110], y fue miembro del comité de patrocinio de Partisan européen, que, con Guillaume Faye y Robert Steuckers, redefinió las fronteras entre nacionalismo-revolución, Nueva Derecha y euro-regionalismo, racialismo y etno-diferencialismo en la década de 1980. Presentaba en su portada frisos de las ilustraciones de Germanien, la revista del Instituto Cultural de las SS, y no dudaba en recomendar La Religiosité indo-européenne [111] de Günther. En 1991 Pennaod participó, junto con todas las demás figuras de la neoderecha, en el homenaje a Saint-Loup. En resumen, una representación de la historia y de los signos culturales y políticos asociados a ella se difundía por todas partes.
El tema nórdico, con su imaginería vikinga y su odinismo, parece haber desempeñado un papel en la posguerra inmediata. Binet no esperó a las renovaciones posteriores a 1968 para titular “Halte à la colonisation de l'Europe” ("Alto a la colonización de Europa") en Le Combattant européen. Pero lo hizo en nombre de una afirmación blanca que rechazaba a negros y judíos [112]. En 1949, el joven Jean Mabire lanzó una revista llamada Viking. Defendía una Europa regionalizada sin desmembramiento de las naciones. Desarrollaba un racismo nórdico y una espiritualidad odinista en la que la imagen del vikingo era una clara transposición del ario antiguo [113]. Ha llegado a ser lo suficientemente conocido como para que se reeditara en dos volúmenes en 2001. En 1950, Binet hizo distribuir su manifiesto por una sociedad llamada Les Wikings, que incluía críticas al cristianismo y apología del “mundo ario” y del “hombre blanco” [114].
Tras su fundación en 1951, el HIAG editó una publicación periódica, Wiking-Ruf, en honor de la División Wiking, que fue la primera unidad no alemana de las Waffen-SS. El redactor en jefe era un antiguo oficial francés encargado de reclutar voluntarios para la División Carlomagno. En su número de mayo de 1953, publicó un llamamiento en francés a los antiguos miembros de la división Wallonie para que se unieran a los antiguos oficiales de las SS Jean Baumann y Robert Debbaudt en la NOE [115]. Esta organización fue una de las primeras de la extrema derecha en defender la unidad del espacio blanco y europeo, la desgermanización del nazismo iba de la mano de la integración de los eslavos en la raza blanca superior a partir de 1951. El anticolonialismo se aprobó en favor de unidades raciales que impidieran el mestizaje: esta apología de la segregación, que se basaba en el etnodiferencialismo fue apoyada en 1956 en un llamamiento solemne a los nacionalistas de Europa para que renunciaran a todas las rencillas entre ellos, como habían hecho las Waffen-SS [116]. El neopaganismo en sus diversas formas se abre paso: en 1957, la Falange francesa organiza su Solsticio de Invierno con un delegado de la Wiking jugend (fundada en la RFA en 1952) [117].
Las runas y los símbolos de las divisiones europeas de las SS eran comúnmente amalgamados por los más radicales, que los utilizaron en sus folletos y logotipos, en particular los d las divisiones Das Reich, Nord y Prinz-Eugen o, en menor medida, Nederland, Langemark y Landstorm Nederland. Esto también contribuyó a la integración de los eslavos en la raza blanca, que ahora se veía como un todo. La descripción de una lucha euroasiática en el Frente Oriental tiene aquí su salida política. A partir de 1980 “el neopaganismo de derechas [se convirtió] en un componente esencial de la subcultura de la extrema derecha francesa”, como escribe Christian Bouchet. Aunque este líder del movimiento NR haya sido cruel con esta subcultura [118], además de utilizarla, lo cierto es que cuando intentó refundar un movimiento tras la disolución de Unité Radicale, su boletín interno informaba de la muerte de Robert Vigny, “un veterano del gran ejército europeo [que], en la lógica de una lucha de más de sesenta años, se había unido a la red radical desde su creación. Su nombre de honor era Fidelidad”. Para completar el efecto, la divisa de las SS iba acompañada de la runa de la muerte, una costumbre introducida en la extrema derecha francesa por la rama Europe-Jeunesse de Europe-Action [119]. Los significados se entremezclan y parece que los mitos de Saint-Loup han cobrado vida, décadas después de los acontecimientos que retrataban.
Los signos y debates de las décadas posteriores a la guerra incluyen la metapolítica, aunque aún no se usa ese nombre. “Metapolítica”, “realismo biológico” y defensa del “mundo blanco” estaban presentes antes de Europa-Acción en las organizaciones del Frente Oriental y los diversos “socialismos europeos” de posguerra. Los debates ideológicos que surgieron del discurso en torno al Frente Oriental no eran reducibles a las inclinaciones más culturales e izquierdistas de la extrema derecha radical posterior a 1968, pero sí tuvieron un nuevo “momento” gracias al periodo poscolonial. La cuestión de la colonización desempeñó un papel en esta inclinación del colaboracionismo al nacionalismo europeo y luego a la defensa del mundo blanco. En 1963 Europe-Action publicó su famoso manifiesto en el que desechaba el nacionalismo clásico definiendo el nacionalismo como “la doctrina que expresa en términos políticos la filosofía y las necesidades vitales de los pueblos blancos” [120]. Mabire dejó claro en la revista que la palabra Europa tenía un significado global y racial: Europa era “un corazón cuya sangre late en Johannesburgo y Quebec, en Sydney y Budapest” [121]. En sus novelas, sostiene que “para [los voluntarios del Frente Oriental], la Europa nacionalsocialista ya no es un argumento propagandístico, sino una realidad vivida”, aunque esta realidad no era en absoluto la europeización del Reich [122]. La representación del hecho se convierte tanto en el motor de la negación de su realidad empírica como en el estímulo de la investigación doctrinal.
Esta tendencia continuó en el primer GRECE, ya que Pierre-André Taguieff ha mostrado cómo, a principios de la década de 1970, Alain de Benoist mantenía vínculos con la NOE y la Liga Nórdica (grupo internacional que retomó las tesis de Günther), entre otros a través de Jacques de Mahieu y el Institut supérieur des sciences psychosomatiques, biologiques et raciales y sus Editions celtiques, que de Mahieu cofundó con Gaston-Armand Amaudruz [123]. La misión del Instituto era prolongar “la magnífica obra” del congreso de 1936 de la nueva medicina natural alemana [124]. Antiguo miembro de la AF, luego de la LVF y de la división Carlomagno (según su propia declaración, aunque no se puede descartar que se trate de una reescritura biográfica, ya que la pertenencia a las SS era para algunos una ventaja social y no un estigma), de Mahieu se fue a Argentina, donde se convirtió durante un tiempo en un ideólogo de primer orden. Convertido en académico, publicó obras en las que afirmaba que los vikingos estaban en el origen de las civilizaciones precolombinas, retomando así los temas de Günther y de la Ahnenerbe, el Instituto Cultural de las SS. Fue ampliamente retomado por el GRECE y publicado por Copernic (dirigida entonces por Mabire), Robert Laffont y J'ai Lu [125]. El Frente Oriental releído y reinterpretado por estos franceses fue, en efecto, un fenómeno revelador y amplificador de la internacionalización de la derecha de Europa y América.
También hay que señalar los vínculos entre Yves Jeanne y la Unión Mundial de Nacionalsocialistas. Yves Jeanne fue monárquico militante, miembro del PPF, sargento de reclutamiento de las Waffen-SS, presidente en Argelia de los Amigos de Rivarol, dirigente de los Amigos de Defensa de Occidente y dirigente del MSE [126]. Ayudó a fundar el WUNS en 1962. El WUNS era descendiente directo del nazismo, que se amalgamó con el odinismo para crear una unión mundial de la raza blanca. Su rama francófona fue desmantelada por la policía en 1964 [127]. Claude Monnet intentó entonces ocupar su lugar, transformando su Organisation des Vikings de France en el Parti Prolétarien National-Socialiste, cuyo órgano Le Viking elogiaba a la URSS “ruso-aria” y certificaba que deseaba una “federación de naciones étnicas” en Europa que desembocara en un “Estado mundial ario” [128]. Los restos de la WUNS pasaron a la NOE. Yves Jeanne siguió activo desde su base de Nantes. Lanzó Le Devenir européen, un título que era en sí mismo un vínculo con la División Carlomagno, y su suplemento Ogmios. Este doble enfoque refleja la voluntad de llegar a públicos diversos. Ogmios estaba vinculado al Centre d'Initiative Progressiste Européen de Yannick Sauveur.
Esta última nació de los debates sobre estrategia política en el seno de la Organisation Lutte du Peuple (OLP) que Yves Bataille dirigía en Nantes, y que introdujo en Francia el estilo nacionalista-revolucionario tanto por importación del nacionalismo alemán como por la lectura de Lenguajes totalitarios de Jean-Pierre Faye [129]. La OLP había elaborado un balance crítico de sus actividades y debilidades en una Asamblea General durante su campamento de verano de 1974: “acción: nula o inútil”, “resultados: un callejón sin salida total”, perspectivas “nulas”, expresión “infantil”, “estilo y propaganda deplorables: exaltación, romanticismo y provocación verbal”. Propone mantener estas características, porque su “estilo romántico conviene a la estimulación de los jóvenes que buscan ante todo el activismo”, pero también probar una nueva táctica: en lugar de hacer el juego a los izquierdistas, intentar entrar en los círculos dirigentes mediante una estructura que no sería en absoluto extremista, sino sólo europeísta. Este “Centro de Acción e Iniciativa Nacional-Europea” pretendía llegar a “la élite de la Nación (...): académicos, ejecutivos, administradores, etc.” y servir de base para la constitución de un futuro Partido Europeo a escala continental [130]. En resumen, aunque no lo admitiera, la OLP estaba en parte comprometida con una estrategia metapolítica.
A finales de año, el grupo se dividió en torno a la cuestión de la estrategia y la utopía (¿Europa de las regiones o no?): Yves Bataille se unió al Centre de Documentation Politique et Universitaire que, tras abandonar el Mouvement Solidariste Français, se había unido a la OLP y que, en aquel momento, se había escindido de ella, mientras que Yannick Sauveur, ex-MSF que había abandonado el CDPU por la OLP, fundó el CIPRE [131]. El conjunto de este entorno buscaba una forma de trabajar con los radicales. Los Cahiers du CDPU se interesaron por Franco G. Freda, popularizaron el acrónimo “NR”, utilizaron runas y elogiaron las teorías racialistas elaboradas por el GRECE y su “formación nacionalsocialista de alta escuela”, que debería permitir generar una “masonería” en los puestos de poder, una interpretación de la metapolítica no muy diferente de la del Central planificada por la OLP [132]. No cabe duda de que, con el CIPRE, Yannick Sauveur persigue de hecho este proyecto. Hay, pues, una vertiente de legitimación tecnocrática en el discurso “saint-loupiano” del Futuro Europeo. La utopía definida por el manifiesto del CIPRE estaba claramente marcada por la influencia de Thiriart (que estuvo en contacto con Yannick Sauveur pero no participó en el CIPRE), acrecentada por el etnicismo de un futuro “socialismo europeo”. Para ilustrarlo, el manifiesto publicó un mapa de las regiones de la nueva Europa que proponía [133]. Resulta que se corresponde exactamente al publicado el mismo año por Saint-Loup en Les SS de la Toison d'or (Las SS del Vellocino de Oro) como supuesta obra de la facción europeísta de las SS...
Nos encontramos con el Ourobouros. Un discurso metapolítico dirigido a las élites reproduce la utopía que una novela pretende haber sacado de un pasado esotérico. La representación del Frente Oriental se convierte en un acto político global, que define el pasado, la estrategia y el horizonte. Los signos de una modernización “de izquierdas” y “creíble” se encuentran en el “pasado que no desaparecerá”, sin que sea posible saber si los militantes toman o no al pie de la letra la prosa de Saint-Loup. Y, sin embargo, casar a Saint-Loup y Thiriart no es más que repetir lo que decían los socialistas europeos que en su día se agruparon en torno a Lecerf, con un fuerte guiño al nazismo... Tanto es así que los dispositivos semánticos pueden conducir a la reformulación explícita de signos socialmente excluidos, como Robert Dun que, en la reseña de Jeanne, afirma que existe “un genocidio anti-ario, una empresa en la que el capitalismo, el marxismo, el catolicismo y todos los globalismos actúan como rivales cómplices” [134]. La NOE, el equipo Militant (que sin embargo forma parte de un nacionalismo europeo no völkisch o esotérico), el equipo francés de Falange, y también ciertos nacionalistas, han pensado más o menos lo mismo, pero lo han expresado de forma menos radical [135]. El manejo de tales conceptos es extremadamente delicado, y si otro escritor, Renaud Camus, lograra triunfar en el siglo XXI con el tema del “Gran Reemplazo”, sería desde una perspectiva donde la islamofobia pretende defender los valores de Europa, donde el tema de la “identidad” se expresa en lugar del “realismo biológico”, sin conspiración antisemita.
Desde luego, no se trata de señalar el “doble lenguaje” ni de repetir la búsqueda de la “herencia nazi” oculta. La mayoría de los militantes y dirigentes confunden las representaciones y los análisis de la historia de sus corrientes, y hacen suyos como ideología elementos creados por la propaganda. Muchos lectores y redactores de Eléments no se reconocerán en el socialismo europeo y en todos los tejemanejes ideológicos llevados a cabo por los veteranos del Frente Oriental. Otros cuadros dudaban menos, como Pierre Vial, líder de Terre et Peuple, que no ocultaba su deuda con Saint-Loup y Robert Dun. Vial, que había abandonado el Socialisme européen por encontrarlo demasiado izquierdista [136], declaró que la piedra angular de estas circulaciones era la importancia concedida a la cuestión racial en la Weltanschauung. Por ejemplo, Unité Radicale podría haber decidido internamente que unirse al solsticio en Montségur organizado por Terre et Peuple “para celebrar el solsticio en un lugar así sólo puede ser muy mítico...”, pero siguió asistiendo hasta después de su disolución, porque sabía que tenía que ofrecer “una contracultura política y existencial a los nacionalistas no católicos [tenía que proporcionar a sus militantes] una visión global del mundo que integre nuestro pasado (...) nuestro ocio (...) nuestra concepción del tiempo” [137].
Conclusión
Cuestionando el análisis de Anne Joly sobre los izquierdistas radicales, Olivier Dard escribía en la introducción del primer número de IDREA que, al igual que este análisis, “se puede plantear la cuestión de la existencia de una ‘escena’ entendida como un ‘medio’ en el que los actores ‘evolucionan y definen su propia pertenencia’ y que, para ellos, ‘se refiere a un medio a la vez underground y subcultural, al margen de la sociedad, cuya identidad plural se construye sobre todo contra la cultura mainstream” [138]. Nos parece que esta cuestión del pasado del Frente Oriental repensado da fe de ello, del mismo modo que constituye un elemento importante dentro de las hibridaciones y circulaciones ideológicas en el espacio Europa-América a través de los laboratorios léxico-ideológicos.
La efervescencia de los intercambios entre materiales – considerados signos de igual valor ya sean de origen novelístico, propagandístico o histórico – contribuye a la circulación de mitos entre corrientes, ofreciendo una subcultura común, dispersando elementos ideológicos diversos en corrientes no separadas (nacionalistas-revolucionarios, Nueva Derecha, Identitarios, neonazismo, etc.) donde se convertirán en instrumentos de legitimación política interna. En la evolución internacional de la extrema derecha, la ruptura modernizadora fundadora entre fascismo y neofascismo es mucho más que el Frente Oriental y la representación que Mayo del 68 dio de él, aunque los redespliegues inducidos por un “largo Mayo del 68” son importantes. Los temas de la oscilación ideológica y de la dialéctica de la identidad que oscila entre la “patria carnal” y Europa son ya aquí cuestiones centrales, al tiempo que pueden coexistir contradicciones entre el afirmacionismo blanco y la soberanía europea, tal vez más perceptibles tras la caída del Muro de Berlín. A pesar de ciertos intentos de modernización, una serie de fantasías “europeas” y/o “identitarias” siguen los pasos de Günther cuando acuñó los términos Aufnordung (“nordificación”) y Vernordung (“renordificación”) para significar el cómo los alemanes sólo podrían sobrevivir volviendo a su esencia nórdica. El mito de los voluntarios franceses en el Frente Oriental, popularizado por quienes fueron ante todo propagandistas y por la cultura de masas que mezcló historia y fantasía para pasar de la “novela histórica” a la “novelquest”, es un lugar de memoria. Como tal, ha marginado a los que se sintieron explícitamente fascinados por ella, pero también ha servido para reactivar mitos movilizadores y producciones ideológicas.
En este caso, por sorprendente que pueda parecer a la extrema derecha, la práctica bien podría haber coincidido con la teoría: los antiguos voluntarios eran efectivamente vigilantes, guardianes de una visión del mundo que debía transmitirse durante el “interregno”. Jean-Yves Camus cuenta cómo, en 1995, Henri Fernet le explicó que si seguía dando conferencias sobre su compromiso era a la vez para ser “un gran testigo” y “un transmisor”. Desde esta perspectiva de transmisión, el politólogo sitúa la conmemoración anual que celebran los antiguos voluntarios a los pies de la estatua de Carlomagno o, en 2008, una sesión de firma de libros en una librería identitaria de Niza sobre las memorias de antiguos SS franceses y un cómic sobre su participación como ejemplos perfectos[139].
A ello contribuyó, sin duda, la relación específica de los radicales con el tiempo. Dado que, por una parte, sus modernizaciones han implicado en gran medida la utilización de la investigación histórica en su ámbito, inspirándose en los trabajos sobre los márgenes temporales y militantes de la experiencia fascista [140], y dado que, por otra parte, se han visto afectadas por este entrelazamiento de representaciones y hechos relativos al mítico Frente Oriental, corresponden a las tendencias generales de patrimonialización surgidas en la década de 1970, pero no al presentismo desarrollado a partir de la década de 1980. Al situar una unidad indoeuropea o hiperbórea como su origen las Waffen-SS europea encontraban un referente para vivir la propia militancia en una red mundial europea o blanca, tener como utopía una palingenesia de dicho origen, vía por ejemplo una Europa unida de las regiones étnicas, no es vivir el pasado en el presente, sino superponer espacios temporales en un todo único: es una salida del tiempo. En una época en que las concepciones holísticas de la historia se derrumbaban, persiste el análisis de una lucha entre las razas como fuerza motriz de la historia. Todo ello tiene un indudable efecto movilizador en la cohesión de una contrasociedad. No se trata sólo de una “subcultura”, sino de una contracultura. La fuerza de la oferta ideológica se reduce así al margen social.
Los éxitos metapolíticos no son necesariamente estructurantes. Las novelas de Mabire, antaño omnipresentes en las estanterías, ahora permanecen exiliadas en editoriales más confidenciales [141]. Su exitosa trilogía era la historia del encuentro entre la cultura política de un autor de extrema derecha y los equívocos de una moda “retro” pasajera. Hoy en día, las actividades del Cercle des descendants et amis des vétérans français du front de l'Est (Círculo de descendientes y amigos de los veteranos franceses del frente del Este) se limitan claramente a una página web con escaso contenido [142]. Al fin y al cabo, gran parte de esta forma fue liquidada con la ruptura que supuso el 11 de septiembre de 2001, que marcó el nacimiento neopopulista de la extrema derecha europea. La “des-diabolización” lanzada por Marine Le Pen se hermana con la “des-mabirización” de Jean-Gilles Malliarakis. Es precisamente esta cultura política de nicho sociológico, por no decir de gueto, obsesionada por las derrotas en lugar de mirar al futuro, la que está en el punto de desaparecer. Es ahí donde los neopopulistas ven las vías de acceso al poder. Los radicales, por su parte, mantienen una relación muy distante: los jóvenes de Génération Identitaire que alaban “le Sang et le Sol” (la Sangre y el Suelo) pueden tener todo en común con los niños de Saint-Loup, pero en general saben poco o nada al respecto. Representaciones de la guerra en la posguerra (periódicos de propaganda, discursos, etc.), el mito del “gran ejército europeo” que implicaba una orientación diferente (una élite revolucionaria guiando Europa o el mundo blanco; una federación europea völkisch; un Septentrión, según un término utilizado por Guillaume Faye para cruzar nordicismo con occidentalismo), que acabaron prescindiendo del mismo referente. Después de 2001, el Frente Oriental se acabó definitivamente y se abrieron otros.
[Este estudio data de 2015, fecha desde la cual varios de los hechos y cifras aquí tratados se han beneficiado de la aportación de nuevos archivos en este libro].
Notas:
[1] Más de la mitad de los novecientos mil miembros de las Waffen SS en 1944 no eran alemanes (Enrique Léon et Jean-Paul Scot, Le Nazisme des origines à 1945, Masson et Armand Colin, Paris, 1997, p.156).
[2] Le Combattant européen es el periódico de la Legión de Voluntarios Franceses contra el Bolchevismo, fundado en 1941. Devenir, el periódico en francés de las SS, se publicó en 1944. La Jeune Europe se lanzó en 12 idiomas en 1942 para representar la unión continental que surgía con las SS europeas. En Francia lo distribuyeron la revista Jeunes de l'Europe Nouvelle, dirigidos por Marc Augier (socialista). Signal se publicaba en 24 idiomas entre 1940 y 1944. Marc Augier (conocido como Saint-Loup) siempre ha afirmado haber sido redactor jefe de las dos cabeceras francesas (y él mismo lo ha insinuado en varias ocasiones). Sin embargo, no hay rastro de su nombre en Devenir.
[3] “El lugar de memoria supone, de entrada, el ensamblaje de dos órdenes de realidades: una realidad tangible y aprehensihle, a veces material, a veces menos, inscripta en el espacio, el tiempo, el lenguaje, la tradición, y una realidad puramente simbólica, portadora de una historia. (...) Lugar de memoria, entonces: toda unidad significativa, de orden material o ideal, que la voluntad de los hombres o el trabajo del tiempo convirtieron en elemento simbólico del patrimonio memorial de una comunidad cualquiera” (Pierre Nora, Les Lieux de mémoire, tome 3, Gallimard, Paris, 1992, p.936).
[4] Stéphane François, Au-delà des Vents du Nord. L’extrême droite française, le pôle Nord et les Indo-Européens, Presses Universitaires de Lyon, Lyon, 2014, p.15.
[5] En este sentido, la literatura sobre el Frente Oriental es un fenómeno esencial para comprender la literatura sobre la negación del Holocausto, no sólo como negación de la existencia de los homicidios con cámaras de gas, sino como un proceso de transformación del paradigma surgido de la Segunda Guerra Mundial para rehabilitar el antisemitismo. Robert Faurisson fue profesor de literatura moderna.
[6] Henry Rousso, La Dernière catastrophe, Gallimard, Paris, 2013, pp.102-125
[7] Philippe Carrard, Nous avons combattu pour Hitler, Armand Colin, Paris, 2011, p.14.
[8] Luc Capdevila, «La Quête du masculin dans la France de la défaite (1940-1945)», Annales de Bretagne et des Pays de l’Ouest, n°117, 2010, pp.101-122.
[9] El trabajo pionero de Michèle Cotta sobre la Colaboración entre 1940 y 1944 y el de Pascal Ory sobre los colaboradores datan de 1973 y 1976 respectivamente.
[10] Cf. note 2.
[11] Pierre Clémenti, La Troisième paix, Ed. de la Jeune Europe, Fribourg, 1949, p.54.
[12] Entevista de Jean Castrillo con Nicolas Lebourg, Paris, 10 abril 1999; Isabelle Ziegler, Pierre Bousquet et le Parti Nationaliste Français. Du Francisme à nos jours. Mémoire et histoire d’un apparatchik fasciste français, mémoire IEP de Grenoble, 1991, p.81. Posteriormente colaboró en la fundación del boletín Militant y fue miembro de la dirección del FN (cercano a Duprat), que abandonó al considerar que el ascenso de Jean-Pierre Stirbois representaba la toma del poder del partido por “los sionistas” (se rumorea que su verdadero nombre era Stirnbaum, lo que es inexacto, pero el nombre de nacimiento de su madre era Luchtmeyer – archivos de la Asamblea Nacional, información amablemente facilitada por Romain Ducoulombier). Castrillo fue miembro fundador del Parti Nationaliste Français en 1983.
[13] Tras la muerte de Binet, el suizo Gaston Armand Amaudruz, asistido durante un tiempo por Pierre Clémenti, se hizo cargo de la NOE.
[14] Patrick Moreau, Les Héritiers du IIIe Reich. L’Extrême droite allemande de 1945 à nos jours, Le Seuil, Paris, 1994, pp.55-56; Jean-Yves Camus y René Monzat, Les Droites nationales et radicales en France, Presses universitaires de Lyon, Lyon, 1992, p.367.
[15] Robert Belot, «Critique fasciste de la raison réactionnaire: Lucien Rebatet contre Charles Maurras», Mil neuf cent, septiembre 1991, pp.64-66.
[16] Le Combattant européen, marzo de 1946; idem, abril de 1946 ; idem, junio de 1946 ; idem, julio de 1946.
[17] Información general de la Jefatura de Policía, «Les Amis de François Duprat», 1989, p.6, Archives de la Prefectura de Police, GAD8 913.285. Incluye a Pierre Bousquet, antiguo miembro de la División Carlomagno, que pasó a militar en Europe-Action, el Front National, el boletín Militant y el Parti Nationaliste Français.
[18] Dirección General de la Seguridad Nacional, Dirección de Expedientes Generales, Partis et groupements politiques d’extrême droite. Tome I Identification et organisation des mouvements et associations 1956, pp.4-6, Archivos Nacionales F/7/15591. Dos nacionalistas siguieron presentes en Rivarol. Pero Jean Madiran abandonó el semanario cuando Rebatet se incorporó en 1963. Por otra parte, en el número de enero de Europe-Action, Rebatet fue entrevistado por Alain de Benoist. En 1985, de Benoist reconoció lo mucho que le debía ideológicamente a Rebatet (Robert Belot, art. cit., p.67). La evolución de la Federación de Estudiantes Nacionalistas hacia Europe-Action, cuyo nacionalismo occidentalista prefiguró el primer Groupement de Recherche et d'Etudes pour la Civilisation Européenne, también se debió en parte a la lectura de las obras de Rebatet, Drieu y Brasillach (Jean-Yves Camus, Le Front National. Histoire et analyses, Olivier Laurens, Paris, 1996, p.175; Anne-Marie Duranton-Crabol, L’Europe de l’extrême droite de 1945 à nos jours, Complexe, Bruxelles,1991, p.23 et p.35).
[19] DGSN, DRG, op.cit., AN F/7/15591, p.7.
[20] L’Esprit public, septiembre de 1963 ; idem, julio-agosto de 1964.
[21] Todos los números de página remiten a ediciones posteriores: La Brigade Frankreich, Le Livre de Poche, Paris, 1976; La Division Charlemagne, Le Livre de Poche, Paris, 1976; Mourir à Berlin, Le Livre de Poche, Paris, 1977.
[22] Carta de Mademoiselle Wittorski a Bernard de Fallois, 8 de noviembre de 1974, Institut Mémoires de l’Edition Contemporaine, LGF S13 C79B1.
[23] IMEC, LGF S13 C28B3.
[24] Jean Mabire, Mourir à Berlin, op.cit., p.24
[25] Artículo citado por Philippe Carrard, op.cit., p.33.
[26] L'Action française en la medida de lo posible se negó a publicar textos que llamaban a alistarse en la LVF y luego en las Waffen-SS (Olivier Dard, Charles Maurras. Le Maître et l’action, Armand Colin, Paris, 2013, p.217).
[27] Cf. Nicolas Lebourg y Joseph Beauregard, François Duprat, l’homme qui inventa le Front National, Denoël, Paris, 2012, pp.184-186.
[28] Devenir, n°1, febrero de 1944.
[29] Jean Mabire, Mourir à Berlin, op.cit., p.236
[30] Jean Mabire, La Brigade Frankreich, op.cit., p.8.
[31] Philippe Carrard, op.cit.
[32] Jean Mabire, La Brigade Frankreich, op.cit., p.6.
[33] Bénédicte Vergez-Chaignon, Vichy en prison. Les épurés à Fresnes après la Libération, Paris, Gallimard, 2006.
[34] Jean-Luc Leleu, La Waffen-SS. Soldats politiques en guerre, Perrin, Paris, 2007, p721
[35] Devenir, n°1, febrero de 1944.
[36] Jean Mabire, La Brigade Frankreich, op.cit., p.5
[37] Jean Mabire, La Brigade Frankreich, op.cit., p.5
[38] L’Esprit public, febrero-marzo de 1966.
[39] Jean Mabire, Mourir à Berlin, op.cit., p.155
[40] Ibid., p.280
[41] Jean Mabire, La Division Charlemagne, op.cit., p.124. El testimonio de Christian de la Mazière en el documental Chagrin et la pitié, de Marcel Ophüls, estrenado en 1971, causó revuelo porque presentaba su justificación personal para alistarse con el uniforme de las SS en nombre de su adhesión ideológica. En 1972 publicó su autobiografía con Robert Laffont: Le Rêveur casqué.
[42] Fuera de serie número 32, 1973.
[43]Jean Mabire, La Brigade Frankeich, op.cit., p.22
[44] Cf. Nicolas Lebourg y Jonathan Preda, «Ordre Nouveau: fin des illusions droitières et matrice activiste du premier Front National», Studia Historica. Historia Contemporánea, n°30, 2012, pp.205-230.
[45] Jean Mabire, La Brigade Frankeich, op.cit., p.7
[46] Tzvetan Todorov, Face à l’extrême, Paris, Le Seuil, 1991.
[47] Jean Mabire, La Brigade Frankeich, op.cit., p.6.
[48] Jean Mabire, La Brigade Frankeich, op.cit., p.5
[49] Entre estos grupos se encontraban Le Communard, Rassemblement Socialiste Européen (vinculado al belga Emile Lecerf), Socialisme européen y Pour une Jeune Europe (en cuya revista colaboraba Mabire y que fue probablemente la primera en Francia en utilizar la palabra “racialismo”).
[50] Socialisme européen, n°0, 1967.
[51] Direction Centrale des Renseignements Généraux, «Les Mouvements néo-nazis: la FANE et le Nouvel Ordre Européen (NOE)», octubre de 1968, p.2, AN F7/15585.
[52] Notre Europe, junio de 1968; idem, agosto de 1968; idem, octubre de 1968; idem, enero de 1969.
[53] Dominique Venner, «Préface», en Alain de Benoist, Bibliographie de Jean Mabire, Pont-Authou, Editions d’Heligoland, 2010.
[54] RGPP, L’Extrême droite, 10 de septiembre de 1969, pp.26-27, APP GADR15. La REL estaba entonces en la lista anarco-socialista-europea.
[55] DCRG, «Le Rassemblement Européen de la Liberté», Bulletin mensuel confidentiel Documentation-Orientation, n°139, abril de 1968, 9 p., ANF7/15584.
[56] Défense de l’Occident, octubre-noviembre de 1973.
[57] Le National, junio-julio de 1975 (Bousquet, Castrillo, Duprat según sus contribuyentes).
[58] André Doutart, «Les Templiers du XXe siècle sous les plis du drapeau noir», Rivarol, 21 junio de 1973; id. «Les Français de la division Charlemagne», Rivarol, 12 diciembre de 1974. El artículo del tercer tomo, «Trente ans après», Rivarol, 22 mayo de 1975, es del mismo autor.
[59] Grégory Bouisse, Waffen-SS français, volume 2, Raleigh, 2013, s.p. También señala que Doutart dejó en 2008 unas memorias inéditas: Le SS frivole...
[60]Jean Mabire, La Brigade Frankreich, op.cit., p.6.
[61] «Livres à lire…», Le Combat européen, n°11, septiembre a noviembre de 1974.
[62] «Bibliographie», Nouvelle Ecole, n°24, invierno de 1973-1974.
[63] Entrevista de Jean-Gilles Malliarakis con Nicolas Lebourg, Paris, 30 de septiembre de 2002.
[64] Jean Mabire, La Division Frankreich, op.cit., p.18.
[65] Roger Griffin, «Between metapolitics and apoliteia: the Nouvelle Droite’s strategy for conserving the fascist : vision of the “interregnum”», Modern and contemporary France, febrero de 2000, pp.35-53.
[66] Le Monde, 23-24 noviembre de 1969.
[67] Entrevista de Jean Mabire con Laurent Schang, «Réflexions sur l’Aventurier», consultado en línea el 27 de octubre del 2005 en el sitio Voxnr.com.
[68] Cf. Francine Dugast, «Le XXe siècle : l’exploration infinie du récit», en Colette Becker dir., Le Roman, Bréal, Paris, 1996.
[69] Simon Epstein, Un Paradoxe français, Albin Michel, Paris, 2008, p.184.
[70] L’Humanité, 14 de febrero de 1948.
[71] Jean Mabire, La Brigade Frankeich, op.cit., p.354
[72] Philippe Carrard, op.cit., pp.81-90 et pp.138-148; Mabire publicó un vibrante homenaje a de La Mazière con motivo de su muerte en 2006.
[73] Saint-Loup, Les SS de la Toison d’or: Flamands et Wallons au combat, Le Trident, Paris, s.d., p.351 (esta es la casa editorial de Jean-Gilles Malliarakis, la primera edición fue publicada por Presses de la Cité, París, 1975; la decadencia de esta prosa en la década de 1980 es evidente).
[74] Devenir, n°3, marzo de 1944. Antes de la guerra, Balestre era miembro del servicio de orden de la Liga Internacional contra el Antisemitismo, donde entabló amistad con Robert Hersant. Unieron sus fuerzas a las de Clémenti y, a partir del verano de 1940, comenzaron a practicar el antisemitismo verbal y físico. Según François Duprat, Balestre fue el primer francés que se alistó en las Waffen-SS. En 1978, Balestre se convirtió en Presidente de la Fédération Internationale du Sport Automobile, cargo que ocupó hasta 1991.
[75] Cf. Johann Chapoutot, Le National-socialisme et l’Antiquité, Presses Universitaires de France, Paris, 2008.
[76] Signal, n°1, mayo de 1943.
[77] Signal, n°2, agosto de 1943. Aunque la división Frankreich se había formado en julio, la portada estaba diseñada para atraer al público objetivo: mostraba a un oficial francés condecorado en las guerras 14-18 y 39-40 y con la Légion d'honneur, ahora miembro de la LVF y condecorado con la Cruz de Guerra del Legionario.
[78] René Binet dentro de Le Combattent européen, abril de 1946; Universités, feuille de propagande du Socialisme Européen édité par Le Combattant européen, junio de 1946; idem, julio de 1946; idem, agosto de 1946.
[79] Damir Skenderovic y Luc van Dongen, «Gaston-Armand Amaudruz, pivot et passeur européen», Olivier Dard dir., Doctrinaires, vulgarisateurs et passeurs des droites radicales au XXe siècle (Europe-Amériques), Peter Lang, Bern, Berlin, Bruxelles, Frankfurt am Main, New York, Oxford, Wien, 2012, p.218.
[80] L’Esprit public, mayo de 1963.
[81] Dentro de Défense de l’Occident, noviembre de 1967 ; idem, febrero de 1969; idem, marzo de 1969 ; idem, numero especial, 1973. . Inicialmente, la revisión de Bardèche estaba vinculada a la MSE.
[82] Elément orthodoxe dès Europe-Action, n°5, mayo de 1963.
[83] L’Esprit public, mayo de 1963; Pour une Jeune Europe, publicado en 1970.
[84] Notre Europe combattante, octubre de 1985 ; idem, julio-agosto de 1985.
[85] Cf. notamment Julien Prévotaux, Un Européisme nazi. Le groupe Collaboration et l’idéologie européenne dans le Seconde Guerre mondiale, Guibert, Paris, 2010
[86] Cf. Alphonse Dupront, Le Mythe de Croisade, tome III, Gallimard, Paris, 1997.
[87] Jean Mabire, La Brigade Frankeich, op.cit., p.16.
[88]Cf. Omer Bartov, L’Armée d’Hitler: la Wehrmacht, les nazis et la guerre, Hachette Littératures, Paris, 1999.
[89] Jean Mabire, Mourir à Berlin, op.cit., p.413.
[90] La SS t’appelle!, 47p., s.d., AN F7/15304 ; Marc Augier, Les Jeunes devant l’Europe Nouvelle, Les Conférences du groupe «Collaboration», Paris, octubre de 1941, 38p.; Patrick Deschamps, Une mythologie européenne sous le signe de la croix gammée. L’imaginaire européen des patries charnelles dans les romans de Saint-Loup, mémoire de master, Université Pierre Mendès France, 2007, pp.10-41.
[91] Pierre-André Taguieff, Sur la Nouvelle Droite, Descartes and Cie, Paris, 1994.
[92] Alain Ruscio, «Littératures, chansons et colonies», en Pascal Blanchard, Sandrine Lemaire, Culture coloniale. La France conquise par son empire, 1871-1931, Autrement, Paris, 2003.
[93] Jean Mabire, La Brigade Frankreich, op.cit., p.245.
[94] Idem, p.399
[95]Jean Mabire, La Division Charlemagne, op.cit., p.26.
[96] Henry Rousso, Pétain et la fin de la Collaboration Sigmaringen 1944-1945, Complexe, Bruxelles, 1984, p.219.
[97] Commissaire principal, Chef du Service des RG de Lille, au directeur des RG, secret, 21 de octubre de 1943, 17p., AN F7/15304; Marc Sueur, «Collaboration et Résistance dans le Nord et le Pas-de-Calais», Revue d’histoire de la Deuxième Guerre mondiale et des conflits contemporains, n°135, julio de 1984, pp.24-25; Un Appel aux Français ! Aux armes pour l’Europe; texto de un discurso pronunciado en Paris el 5 marzo de 1944, en el Palais de Chaillot por el SS-Sturmbannführer Léon Degrelle Caballero de la Cruz de Hierro Comandante de la Brigada de Asalto de Valonia, Erzàtzkommado de las Waffen SS francesas, s.e.., s.d.
[98] Devenir, n°1, febrero de 1944; id., n°2, marzo de 1944; id., n°3, abril-mayo de 1944; id., n°4, junio de 1944.
[99] François Duprat, Les Mouvements d’extrême droite en France de 1940 à 1944, L’Homme libre, Paris, 1998 (1971), p.149.
[100] Se dice que Hammerfest (Noruega) es la ciudad más septentrional del mundo. Las tropas alemanas la destruyeron en 1944...
[101] La Jeune Europe, n°1-2, 1942, pp.42-44; idem, n°3-4, 1942, pp.9-11; idem, n°7, 1942, p.21; idem, n°8, 1942, p.24
[102] Saint-Loup, Les SS de la Toison d’or, op. cit., pp.53-54.
[103] Alain de Benoist, «Les paradoxes de la Collaboration», Eléments, n°100, marzo de 2001, p. 43 (amablemente compartido por Stéphane François).
[104] Saint-Loup, Les SS de la Toison d’or, op. cit., doble página numerada; Défense de l’Occident, marzo de 1976, citado por Jean-Yves Camus et René Monzat, op. cit., p. 68.
[105] El primer ideólogo de JE no fue Thiriart, sino Lecerf, antiguo autor de la editorial Toison d'Or, que distribuía la literatura de los servicios de Ribbentrop, incluso a través del círculo Jeune Europe, con sede en Bruselas. Lecerf redactó su primer manifiesto oficial para JE en el que sostenía que Europa debía apoderarse de África, tener un gobierno único pero organizarse regionalmente sobre “bases étnicas, culturales y económicas” (La Révolution nationale-européenne, Ars, Nantes, s.d (1963), pp.15-31).
[106] Si el tridente era el símbolo del Groupe de Protection des Jeunes de l'Europe Nouvelle (Grupo de Protección de los Jóvenes de la Nueva Europa), es poco probable que ello influyera a la hora de que el movimiento solidarista adoptara este símbolo. La JEN se escindió y se llamó a sí misma Jeune Europe, utilizando la insignia de la Joven Europa producida por Alemania, cinco antorchas humeantes. Este fue también el logotipo elegido por el Parti Communautaire Nationaliste-européen de Thiriart cuando fue fundado en 1984.
[107] Saint-Loup, Nouveaux cathares pour Montségur, Presses de la Cité, Paris, 1969.
[108] El Parti National Breton de Olier Mordrel, partidario de la independencia antes de la guerra, se alineó con las fuerzas de ocupación, abogó después por una Europa de las regiones integradas en el Tercer Reich, yendo más allá de la cuestión de la nación bretona en favor de la apología de los imperios raciales continentales (cf. Pascal Ory, op. cit., 1976). Olier Mordrel colaboró en Notre Europe y más tarde en Eléments. Su hijo Trystan fue secretario de redacción de Eléments en 1984-85 y uno de los responsables de la librería Ogmios. Junto con Goulven Pennaod y Guillaume Faye, fundó la asociación Europa Riezel (“Europa Imperial”) y Diaspad, una revista celtodruídica nacionalista bretona que aboga por una Europa de las etnias.
[109] Christian Bouchet, que conoció a Jeanne en Nantes, donde ambos vivían, afirma que Jeanne era “teniente en los servicios de propaganda del gran ejército europeo”; sin embargo, esto no cambia su experiencia del frente, marcada por la cuestión de la propaganda (Christian Bouchet, «Savitai Devi Mukherji, le nazisme ésotérique et la tradition», Le National-socialisme et la tradition indienne, Avatar, Kildare, 2005, p.85).
[110] Jean-Yves Camus, «Nostalgia and political impotence: néo-nazi and extreme right movements in France 1944-1964», Edward J. Arnold dir., The Devlopment of the radical right in France From Boulanger to le Pen, Macmillan press, Basingstoke, 2000, pp.195-216; Camus et Monzat, op. cit., 238-241 et p.356; Article 31, abril de 1985; idem, febrero de 1986.
[111] Le Partisan européen, otoño de 1987 (sic). El libro de Gunther fue publicado por Pardès con una introducción de Evola y un prólogo de Robert Steuckers, que también tradujo la obra. Más tarde, a los compradores de los dos libros de la colección Revolución Conservadora de Pardès, dirigida por Alain de Benoist, se les ofreció este libro u otro de Gunther, Mon témoignage sur Adolf Hitler. En 1997 René Monzat publicó un artículo en el que afirmaba que el símbolo del GRECE no era lo que ellos decían que era, un antiguo motivo indoeuropeo reelaborado, sino un recorte vertical de los frisos de las SS. Esto le valió una réplica de Alain de Benoist y, en la versión posterior del nuevo manifiesto del GRECE, una larga exposición de la antigüedad del símbolo. Sin embargo, son precisamente los frisos de las SS los que aparecen verticalmente en Le Partisan européen, enmarcando el símbolo del GRECE en el centro de la portada, y su verticalidad muestra claramente el símbolo tal como lo utiliza el GRECE. René Monzat también muestra una portada de Germanien y su repetición en la contraportada de Nouvelle Ecole, únicamente con la esvástica eliminada. Este dibujo apareció también en el primer número de Le Partisan européen, acompañado de una cita de Erza Pound (ArtPress, abril de 1997, pp.55-61; GRECE, Manifeste pour une renaissance européenne, Grece, Paris, 2000, pp.101-102).
[112] Le Combattant européen, julio de 1946.
[113] Benoît Marpeau, «Le Rêve nordique de Jean Mabire», Annales de Normandie, 43e année, n°3, 1993, pp.215-241.
[114] René Binet, Théorie du Racisme, Les Wikings, Paris, 1950, pp.32-47.
[115] Ambos participaron en la fundación de la Young European Legion en 1958. En 1977, Debbaudt dirigió un Frente Nacionalista Popular entre cuyos activistas se encontraba el joven Robert Steuckers, más tarde líder de la rama völkisch que se separó de la Nueva Derecha, Synergies européennes.(RésistanceS, primavera de 1999 ; Roger Griffin, «Europe for the Europeans: Fascist Myths of The European New Order 1922-1992», Humanities Research Centre Occasional Paper, n° 1, 1994, p.39).
[116] Déclarations du Nouvel Ordre Européen, s.d., 10p.
[117] Fidélité, abril de 1958. Su líder, Charles Luca, es sobrino de Déat, participó en la fundación del MSE y mantiene vínculos tanto con la NOE como con el Mouvement Populaire Européen, la microinternacional neutralista creada por Otto Strasser (Charles Luca, La Paume et le poing, Charles Luca, s.l., 1988, pp.258-300).
[118] Christian Bouchet, B.A.-BA du néo-paganisme, Pardès, Puiseaux, 2001, p.91. El autor termina su libro con estas palabras: “Quizá un drag queen que recrea inconscientemente los ritos de los sacerdotes de Cibeles esté más cerca del origen del paganismo que el francés promedio que se disfraza un fin de semana de druida o de sumo sacerdote de Odín...”.
[119] La Lettre du Réseau radical, vol. 2, n°3, marzo-abril de 2003 (documento interne). En otro sentido, indicando el nacimiento de un ritual SS y el significando de la vida, la runa es el símbolo de la National Alliance, un movimiento estadounidense que dice estar dirigido por Francis-Parker Yockey y cuyo líder William Pierce es el autor de la biblia racista Turner diaries. Él y la NA han estado en contacto con el GRECE y varios movimientos europeos.
[120] La “Comunidad del Pueblo” es un organicismo völkisch que reúne “la tierra y el pueblo, el suelo y la sangre (...) los que tienen la misma sangre, la misma cultura y el mismo destino. La realización del individuo sólo es posible dentro de la comunidad. La vida de la comunidad se basa en leyes no escritas inscritas en su historia y su cultura” (en “Dictionnaire du militant”, Europe-Action, mayo de 1963, pp.52-80).
[121] Europe-Action, julio-agosto de 1965, citado por Anne-Marie Duranton-Crabol, Visages de la nouvelle droite. Le GRECE et son histoire, Presses de la FNSP, Paris, 1988, p.27.
[122]Jean Mabire, La Division Charlemagne, op.cit., p.74.
[123] Pierre-André Taguieff, «La stratégie culturelle de la Nouvelle droite en France (1968-1983)», Antoine Spire dir., Vous avez dit fascismes ?, Montalba, Paris, 1984, pp.129-130.
[124] DCRG, «Le Nouvel Ordre Européen», Bulletin mensuel confidentiel Documentation-Orientation, n°150, mayo de 1969, 3p., ANF7/15585.
[125] Stéphane François, «Jacques de Mahieu entre racisme biologique et histoire mystérieuse», Politica Hermetica, n°26, 2012, pp.123-132.
[126] Article 31, julio de 1985.
[127] Jeffrey Kaplan, «The Post-war paths of occult nationa-socialism: from Rockwell and Madole to Manson», Patterns of prejudice, vol. 35, n°3, 2001, pp.44-65.
[128] Le Viking, enero de 1964. El PPNS fue sustituido en 1969 por una Gran Logia del Vril, cuyo nombre hace referencia a las tesis sobre los fundamentos ocultistas del nazismo (Stéphane François et Emmanuel Kreis, «Le conspirationnisme ufologique», Politica Hermetica, n°19, 2005, pp. 116-137).
[129] Entrevista de Yves Bataille con Nicolas Lebourg, Perpignan, 21 juin 2004.
[130] Informe sobre la organización Lutte du Peuple. Propuestas relativas a la creación de un centro de acción e iniciativa nacional-europeo (documento interno). Nótese la falta de sentido del marketing: escrito tal cual, el acrónimo es AINE, una homonimia tramposa... [131] François Duprat, L’Opposition Nationale de 1973 à 1975, Notre Europe, Supplément à la Revue d’Histoire du fascisme, 1976, p.9. Ambos volverían a encontrarse veinte años después al margen del PNC.
[132] Cf. Los Cahiers du CDPU, octubre de 1972; idem, enero de 1973; idem, noviembre de 1973; idem, abril de 1974; idem, agosto de 1974 ; idem, diciembre de 1974 ; idem, junio de 1976.
[133] CIPRE, Dimension Européenne, s.d., p.15.
[134] Le Devenir européen, diciembre de 1980.
[135] Ya La Falange francesa profetizaba que “los pueblos bastardos y mestizos, una manada dócil de subhumanos que, de Bretaña a los Urales y de Siberia a Florida, verán los mismos programas de televisión, abrirán las mismas latas e invocarán al mismo dios de Israel” (Fidélité, 15 de noviembre de 1957). El boletín interno del NOE de julio de 1976 afirmaba que “la recesión económica no ha provocado una reducción del número de trabajadores afroasiáticos en Europa, sino sólo el desempleo entre los propios trabajadores europeos. En cuanto a los no nativos, están acostumbrados a competir con la mano de obra aria. Su infiltración en todo el continente continúa de acuerdo con el complot imperialista para mezclar las razas” (citado en Bernard Brigouleix, L’Extrême droite en France. Les « Fachos », Fayolle, Paris, 1977, p.221). En Militant se afirma: “Se podría pensar que una mano invisible dirige una monstruosa operación de limpieza étnica en todo el continente, destruyendo por un lado toda procreación de niños arios más o menos cristianizados para sustituirlos suave, pero firmemente por no autóctonos (...). ¿Todos los gobiernos europeos empujados por el culo por los ya depravados Estados Unidos, coloreados al estilo de sus películas y multirracializados, han sido contaminados, convencidos o simplemente se encuentran bloqueados?” (Militant, noviembre de 1999). Este equipo había escrito un homenaje a Duprat en el órgano del FN: “las puertas de la inmigración abiertas de par en par no eran más que el corolario inevitable de la campaña antinatalista y de la propaganda fracasada. Contrariamente a lo que escribían algunos, nos atrevíamos a sostener que no se trataba de un suicidio colectivo de Francia, sino de un asesinato bien premeditado. Cuando estudiamos los nombres de sus promotores, encontramos a las mismas personas incrustadas en los MEDIOS de comunicación, en grupos de izquierda y a la cabeza de ciertos lobbies muy específicos (...). Y por último, para condicionar aún más a nuestros conciudadanos, estaban todos esos tabúes heredados de la Segunda Guerra Mundial” (Le National, abril de 1978). Del lado nacionalcatólico, Romain Marie declara que el aborto es un genocidio y añade: “¿Es tabú decirlo? Todo se organiza para que cada vez haya menos pequeños europeos y más magrebíes. Esto está en consonancia con la Europa cosmopolita y orientada a los negocios que preconiza Guy Sorman” (Présent, 26 de noviembre de 1984). En cuanto a Partisan européen, que se supone es la base de algunos de los virajes del GRECE hacia la “izquierda”, explica extensamente y con intensa labor léxico-ideológica que Europa es víctima de un “genocidio por sustitución (...). Este genocidio va acompañado de un etnocidio y de la pérdida de la identidad cultural” (Le Partisan européen, germinal de 1986).
[136] Article 31 de septiembre de 1988.
[137] L’Europe combattante de 1997; La Lettre du Réseau, febrero del 2000; idem, junio del 2000 (documentos internos).
[138] Olivier Dard, «Introduction», op. cit., p.9.
[139] Jean-Yves Camus, «A Nice, une séance de dédicaces d’anciens de la Waffen-SS», Rue89, 17 de mayo del 2008; Roger Griffin, art. cit.
[140] Cf. Nicolas Lebourg, «La fonction productrice de l’histoire dans le renouvellement du fascisme à partir des années 1960», en Sylvain Crépon y Sébastien Mosbah-Natanson, dir., Les Sciences sociales au prisme de l’extrême droite. Enjeux et usages d’une récupération idéologique, L’Harmattan, Paris, 2008, pp.213-243; Jonathan Preda, Les Enjeux d’un héritage. Les fascismes: mémoire et usages d’une référence historique par l’extrême-droite française de 1945 à 1984, master, Université Pierre Mendès France, 2009.
[141] La trilogía de Jean Mabire fue reeditada por Editions Grancher entre 1995 y 1998.
[142] Cf. http://www.cdvfe-divisioncharlemagne.com/; consultado el 13 abril del 2014.
#historia#literatura#nueva derecha#racialismo#ss#pensamiento#fascismo#nacionalsocialismo#nacionalrevolucionarios
1 note
·
View note
Text
La puta realidad de esta españa aborregada
Descripción clara de la mierda de sociedad que queda en esta España plagada de borregos, cobardes, idiotas y colaboracionistas.
0 notes
Text
Que pasa, y que ha pasado, desde mas o menos 25 años, y mas precisamente desde aproximadamente 2 017 en España en cuanto a la violencia de calle negra, árabe, y latina, sistemáticamente de hombres, como en los otros países con fuerte inmigración de países árabes, africanos y latinos ? 1. A medida que esta inmigración, especialmente sin control o mal controlada, aumentaba, la criminalidad, y dentro, la delincuencia, han aumentado, muchas veces de manera literalmente catastrófica. Como principalmente en lo que he llamado en 2 017 el quintumvirat del miedo : Inglaterra, Francia, Alemania, Bélgica y Suecia, los países se encuentran poco a poco, o de manera brutal en una vez con terrorismo especialmente de masa como en Madrid y alrededor (2 004) y Barcelona y alrededor (Cambrils, 2 017) destruidos por la violencia racista contra los blancos, el miedo muy legitimo, y los ataques incesantes de la neo-colaboración que tiene la increíble audacia de llamarse "izquierda", dejando solo un partido reciente hacer el verdadero trabajo de la izquierda con cojones, el Frente Obrero de Roberto Vaquero. 2. Los hechos de violencia de calle están metódicamente escondidos por medios de comunicación, políticos, y otros miembros de la sociedad, con más o menos influencia. En todos los países dirigidos por la neo-colaboración, lo que incluye la derecha clásica, el mismo fenómeno de corrupción y/o de debilidad cuasi congénito ocurre.
3. En España un medio independiente ha intentado hace algunos años hacer lo que hace F.De Souche en Francia : hablar de esa violencia racista de calle, presentando los hechos, menos sistemáticamente que el sitio de Sautarel, pero de buena manera : Caso Aislado. En mas o menos 2 años la colaboración le ha cerrado.
La falta de conocimiento del publico español es una parte del problema :
-Falta de experiencia personal en la calle o los transportes -Falta de conocimiento y curiosidad - nacionalmente y internacionalmente - cuando del otro puto lado de la frontera hay el caos total, y desde mucho tiempo. Aquí el ejemplo simplemente "terrorismo islámica en Francia". 4. Partidos han nacido para combatir esta mierda, en particular VOX, Aliança Catalana y el Frente Obrero. Se hacen vomitar encima sin parar por la neo-colaboración, y a veces hay agresiones físicas. La toma del poder por la Resistencia no se hará sin unión de estos partidos, especialmente en las regiones mas colaboracionistas y llenas de esa violencia racista, como Cataluña. Para alcanzar el único objetivo que tiene carácter de urgencia y validez, la única solución es abandonar el sueño/la pesadilla que es la independencia catalana, y hacer la unión entre gente que tienen una clara voluntad de paz, que sean de verdadera izquierda o de derecha. Basile Pesso, Land of We're Gonna End Neo-Collaboration, 17 de jullo de 2 024
1 note
·
View note