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«La tercera es la que se deduce a partir de lo posible y de lo necesario. Y dice: Encontramos que las cosas pueden existir o no existir, pues pueden ser producidas o destruidas, y consecuentemente es posible que existan o que no existan. Es imposible que las cosas sometidas a tal posibilidad existan siempre, pues lo que lleva en sí mismo la posibilidad de no existir, en un tiempo no existió. Pero si esto es verdad, tampoco ahora existiría nada, puesto que lo que no existe no empieza a existir más que por algo que ya existe. Si, pues, nada existía, es imposible que algo empezara a existir; en consecuencia, nada existiría; y esto es absolutamente falso. Luego no todos los seres son sólo posibilidad; sino que es preciso algún ser necesario».
Santo Tomás de Aquino: Suma de Teología. Biblioteca de Autores Cristianos, pág. 112. Madrid, 2001.
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SANTO TOMÁS DE AQUINO, SACERDOTE DOMINICO, DOCTOR DE LA IGLESIA, PATRÓN DE LAS ESCUELAS CATÓLICAS
Fraile dominico y gran teólogo conocido como el Doctor Angélico, Tomás de Aquino vivió entre 1225 y 1274. Sintetizó la filosofía aristotélica y la patrística con la confianza en que la razón puede armonizarse con la fe cristiana. Es el protector de las escuelas católicas, teólogos y libreros.
S. TOMÁS DE AQUINO, SACERDOTE DOMINICO, DOCTOR DE LA IGLESIA, PATRÓN DE LAS ESCUELAS CATÓLICAS
28 enero
"¡Ustedes lo llaman el buey mudo! Yo les digo que este buey mugirá tan fuerte que su mugido resonará en todo el mundo". San Alberto Magno, su maestro, no se equivocó. Con estas palabras, lo defendió de sus compañeros de estudios, quienes le habían dado ese apodo por su carácter taciturno y aparentemente poco brillante.
Encarcelado por su familia por haberse hecho un religioso predicador
Tomás nació en el castillo de Roccasecca, en el Bajo Lazio, de los Condes de Aquino, emparentados con el Emperador Federico II. Su padre Landolfo esperaba que fuera abad del Monasterio de Montecassino, pensando que de ese modo se habría conjuntado el carácter tímido y amable de su hijo con sus ambiciosos planes políticos. El punto era que Tomás, rechazando cualquier ambición, ya había elegido una Orden mendicante para convertirse en un fraile dominico en Nápoles. Una elección muy frustrante para su ambiciosa familia. Sintiendo traicionadas las expectativas familiares, su madre y dos de sus hermanos lo secuestraron y lo mantuvieron prisionero en su castillo por un año. Su humor, poco sociable pero a la vez muy pacífico, se alteró solo cuando le hicieron entrar a una prostituta en su recámara para hacerlo desistir de su vocación. A ese punto, Tomás reaccionó aferrando con fuerza un leño ardiente y la hizo escapar. Con la ayuda de sus hermanas, se cuenta que luego Tomás logró escapar haciéndose bajar de las murallas del castillo de Roccasecca en una grande cesta.
Un intelectual enamorado de Dios
Finalmente libre del acoso familiar, fue enviado a Colonia y allí, con San Alberto Magno como su maestro, profundizó el aristotelismo. Se trasladó luego a París donde, no sin dificultades con el clero secular, enseñó en la Universidad. De regreso a Italia intensificó el estudio de Aristóteles gracias a las traducciones de un cofrade, y compuso el conocido himno vinculado a la fiesta del Corpus Christi, el "Pange lingua". Comenzó a escribir su "obra maestra", la Summa Theologiae. De este genial compendio teológico son particularmente conocidas las Cinco vías para probar racionalmente la existencia de Dios. (cf. ST. I Pars, q. II). El centro de su trabajo fue la confianza en la razón y los sentidos: la filosofía es un válido auxilio de la teología pero la fe no anula la razón. (cf Rm 1,19). Amaba el estudio y no es difícil imaginar por qué su inmensa producción filosófico-teológica haya causado un gran impacto entre los teólogos contemporáneos. Un día, el 6 de diciembre de 1273, Tomás le dijo a su cofrade Reginaldo que ya no escribiría más: "No puedo, porque todo lo que he escrito es como paja para mí en comparación con lo que se me ha revelado". Según algunos biógrafos, una experiencia mística con Jesús precedió a esta decisión. Parece ser que cayó enfermo en 1274, en el viaje a Lyon, donde el Papa Gregorio X lo había convocado para el Concilio, y murió en la abadía de Fossanova. Tenía sólo 49 años.
Santo Tomás leído por Chesterton: la reconciliación fe-razón
El famoso escritor inglés G. K. Chesterton, con su fina agudeza, en 1933 le dedicó un conocido ensayo titulado "Santo Tomás de Aquino". En tal texto Chesterton escribió: "Tomás fue un gran hombre que concilió la religión con la razón, que la expandió hacia la ciencia experimental, que insistió en que los sentidos son las ventanas del alma y en que la razón posee un derecho divino a alimentarse de hechos, y que es competencia de la fe digerir". Para Chesterton, tanto Santo Tomás como San Francisco fueron los iniciadores de una gran renovación del cristianismo desde dentro y cuyo centro fue la Encarnación: "... estos hombres se hacían más ortodoxos al hacerse más racionales y naturales: sólo siendo así de ortodoxos pudieron ser así de racionales y naturales. En otras palabras, lo que realmente se puede llamar teología liberal se desplegó desde dentro, desde los misterios originales del catolicismo".
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¿Quién fue Santo Tomás de Aquino? ¿Por qué es el Doctor Angélico? ¿Quién le llamó el «buey mudo»?
De Santo Tomás de Aquino (1225-1274) se ha dicho que ha sido el más santo de entre los sabios, y el más sabio de entre los santos. Y es que si algo destaca de este santo dominico cuya festividad se celebra el 28 de enero han sido las aportaciones que ha dejado para la historia, especialmente cómo fe y razón son completamente compatibles y armónicas entre sí. Este santo, que es Doctor de la…
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GALOPE MUERTO, Dios mío, más cerca de ti
24 septiembre 2021
Como cenizas, como mares poblándose,
en la sumergida lentitud, en lo informe, o como se oyen desde el alto de los caminos cruzar las campanadas en cruz, teniendo ese sonido ya parte del metal, confuso,pesando, haciéndose polvo en el mismo molino de las formas demasiado lejos, o recordadas o no vistas, y el perfume de las ciruelas que rodando a tierra se pudren en el tiempo, infinitamente verdes. Aquello todo tan rápido, tan viviente, inmóvil sin embargo, como la polea loca en sí misma, esas ruedas de los motores, en fin. Existiendo como las puntadas secas en las costuras del árbol, callado, por alrededor, de tal modo, mezclando todos los limbos sus colas. Es que de dónde, por dónde, en qué orilla? El rodeo constante, incierto, tan mudo, como las lilas alrededor del convento, o la llegada de la muerte a la lengua del buey que cae a tumbos, guardabajo, y cuyos cuernos quieren sonar. Por eso, en lo inmóvil, deteniéndose, percibir, entonces, como aleteo inmenso, encima, como abejas muertas o números, ay, lo que mi corazón pálido no puede abarcar, en multitudes, en lágrimas saliendo apenas, y esfuerzos humanos, tormentas, acciones negras descubiertas de repente como hielos, desorden vasto, oceánico, para mí que entro cantando, como con una espada entre indefensos. Ahora bien, de qué está hecho ese surgir de palomas que hay entre la noche y el tiempo, como una barranca húmeda? Ese sonido ya tan largo que cae listando de piedras los caminos, más bien, cuando sólo una hora crece de improviso, extendiéndose sin tregua. Adentro del anillo del verano una vez los grandes zapallos escuchan, estirando sus plantas conmovedoras, de eso, de lo que solicitándose mucho, de lo lleno, oscuros de pesadas gotas.
Galope Muerto de Pablo Neruda
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Marxismo para dummies
A nuestra edad, hemos escuchado el nombre de Karl Marx infinitas veces en diversos ámbitos de nuestra vida, desde memes en Facebook, hasta en las peleas políticas familiares. Es uno de los muchos nombres que la sociedad siempre se ha jactado de conocer perfectamente, pero en realidad sobre su pensamiento y trabajo llegamos a tener muy poca información, y la que tenemos ni siquiera logramos entenderla al cien por ciento. El pensamiento marxista ha causado controversia desde que se dio a conocer y es una de las más complejas formas de ver al mundo y la relación que nosotros tenemos con el mismo. Y es justo cuando dejamos atrás las escasas preconcepciones que tenemos al respecto y nos zambullimos un poco en la cabeza de Marx, que nos damos cuenta del pensamiento tan complejo y revolucionario que tenemos enfrente.
Karl Marx nació en Tréveris, Alemania el 5 de mayo de 1818. Esta es una de las muchas situaciones de la vida de Marx que fueron clave para el desarrollo de su pensamiento, era como si el universo hubiese querido que todo saliera justamente de esta forma. Tréveris es pieza clave en el contexto de Marx porque servía como una especie de puente entre dos culturas: la alemana y la francesa, generando en esta ciudad una gran mezcla de contextos y pensamientos. La familia de Karl era de ascendencia judía y contaba con una larga lista de rabinos, entre ellos su padre Hirschel Marx quien decidió convertirse al cristianismo, adoptó el nombre de Heinrish Marx y contrajo matrimonio con Henrietta Pressburg con quien tuvo cuatro hijos.
La educación de Karl comenzó en forma a nivel secundaria en el Instituto Friedrich Wilhelm en Tréveris, donde estuvo recibiendo de 1830 a 1835 una educación con enfoque humanista. En 1835 ingresó a la Universidad de Bonn para estudiar Derecho, donde solo permaneció un año y fue en este tiempo cuando comenzó a leer a autores como Marsilio Ficino y Pico della Mirandola; quienes tenían un pensamiento orientado a “el hombre es posibilidad, potencia e incertidumbre”.
En 1836 Marx pasó una temporada en Tréveris, donde con dieciocho años se comprometió con una vieja amiga de su familia: Jenny von Westphalen. Karl y el padre de Jenny tuvieron cierto acercamiento al menos en el ámbito intelectual, pues fue el señor Westphalen el que inició a Marx en la lectura de clásicos como Homero, Dante y Shakespeare.
Ese mismo año, por consejo de su padre, Marx se traslada a Berlín para continuar sus estudios jurídicos. Es durante este periodo que continúa con su interés por la filosofía y la historia, las cuales estudiaba en su tiempo libre. También es en Berlín donde comienza a tener sus primeros acercamientos al pensamiento de Hegel, con quien muchas veces contrastaba en punto de vista pero que de una u otra forma lo mantenía encantado por su nivel de complejidad intelectual. Es en Berlín donde comienza a interesarse por la filosofía del derecho, otra rama de pensamiento que será crucial para la concepción del pensamiento marxista. Durante este tiempo también desarrolló más su lado artístico, dejándonos dos cuadernos enteros de poesía dedicada a Jenny. Aquí es cuando podemos ver que el pensamiento de Karl comienza a ir en todas direcciones, no sabiendo exactamente a donde planea llegar.
Para 1838 Marx comienza a ampliar sus horizontes de pensamiento participando en revistas y círculos de discusión con postgraduados y maestros. Entra al Círculo de los Doctores, una asociación universitaria donde existía una libertad crítica que no se podía encontrar en la universidad, y donde les tomó gusto a las discusiones sobre religión y política. Aquí es donde conoce a dos personas que también influirán fuertemente en su pensamiento y actividades futuras: Adolg Rutenberg, que lo inicia en el mundo del publicismo; y Bruno Bauer, quien era el jefe de los jóvenes hegelianos. Y es justo la mezcla del acercamiento a estas personas y su “pasión desbordante” por Jenny, lo que lo llevó a escribir poemas y en ellos darse cuenta de la afinidad que tenía por el pensamiento de Hegel.
“Nunca más flotaré sosegado;
el alma profundamente emocionada,
nunca más descansará plácida,
lucho sin descansar.
(…)
Me envuelve una fuerza perpetua,
un rugido y un ardor incesantes;
no me puedo conformar en la vida
ni andar con la corriente.
Quiero comprender los cielos, impregnarme de los mundos. Y en el amor y el odio
vibrar y seguir creciendo.
Quiero alcanzarlo todo,
los favores de los Dioses,
adentrarme sin miedo en el saber,
comprender música y arte.
Los mundos inmóviles destruiré yo mismo
porque no los puedo recrear
porque no escuchan mi llamada, enmudecidos por el conjuro.
¡Ay! Los muertos y mudos miran
burlones nuestras hazañas.
Nos derrumbamos y nuestra labor también
y ellos siguen andando.
Pero no cambio mi destino por el suyo.” (Fernández Buey 2009, 35-36)
Al conocer un poco de los primeros veinte años de su vida, podemos notar que Marx recibía estímulos intelectuales y culturales donde quiera que iba, y que todos ellos eran muy diferentes entre sí. Es justo aquí donde quiero enfocarme, porque el que de pronto llegaran a su vida el romanticismo alemán, los economistas, los socialistas, la filosofía continental, etc. Hicieron que el pensamiento de Karl se volviera un enfoque complejo y transdisciplinario. Esto significa que la teoría marxista enfrenta problemas que trascienden el pertenecer solo a una disciplina y es justo la mezcla de varios enfoques lo que nos da una imagen más exacta del problema al que nos estamos enfrentando, sobre todo cuando es algo tan complejo como el sistema económico por el que se rige nuestra sociedad. La crítica es el elemento central que nos ayudará a comprender mejor el pensamiento de Marx; es el núcleo que lo inspiró a cuestionar todo cuanto se le ponía enfrente y así elaborar una teoría en extremo compleja.
La crítica marxista es la forma de construir conocimiento que pretende cuestionar, conocer y derrumbar los conceptos que “resumen” y rigen nuestro mundo; lo que hacen pasar a las particularidades como si fueran cosas generales que afectan a toda la población y a sus relaciones por igual. Esta situación de generalización es fuertemente criticada por Karl en la medida en la que acontece efectivamente en el capitalismo la economía política. De esta manera los conceptos con los que percibimos nuestra forma de manejarnos en el mundo son en su mayoría abstracciones reales.
Estas abstracciones son construcciones conceptuales que pretender representar lo real partiendo de manifestaciones parciales o limitándose a lo empírico. Como ejemplo podemos utilizar la idea y concepto que tenemos sobre el dinero. El dinero para nosotros actualmente es algo que está tan arraigado a nuestra vida diaria que pocas veces nos ponemos a pensar más profundamente lo que ese dinero representa. Ahora cada vez que nos acercamos a una tienda, lo primero que observamos es el precio, ese precio nos hace pensar automáticamente en la forma en la que pagaremos por el producto. (Si en este momento nos limitamos a hablar únicamente del pago en efectivo, todo quedará más claro.) Si mi intención es comprar una paleta congelada en mi OXXO más cercano, pagaré con mi billete azul de $20 pesos y podré tomar mi paleta y salir de la tienda tan rápido como entré. La abstracción real entra en juego cuando nosotros le damos a un trozo de papel azul la significación suficiente para obtener algo a cambio; sin ponernos a pensar en cómo esa significación ahora es universal. De esta forma dejamos de lado parte importante del concepto que tenemos enfrente, limitándonos a la idea ya arraigada en nuestra mente y a la acción sin análisis.
Otra parte clave en la crítica de Marx, la encontramos cuando hablamos del concepto praxis como algo que únicamente se limita a lo conceptual o lo sensible, sin ver más allá. Karl planteó de una forma más que sencilla su crítica en cuanto a este tema en las Tesis Sobre Feuerbach, donde en la tesis número XI nos dice lo siguiente:
“Los filósofos no han hecho más que interpretar de diversos modos el mundo, pero de lo que se trata es de transformarlo.” (Marx 1888)
Lo que Marx quiere exponer con esto, es que la práctica humana no es solo material y sensible, sino que puede ser concebida también como una praxis revolucionaria. La forma revolucionaria de la práctica entonces, sería la intervención efectiva del ser humano en el mundo con el trabajo. Karl también toma como tarea reivindicar el carácter ontocreador del humano, eso significa reivindicar la manera en la que intervenimos en el mundo y como cuando lo hacemos estamos tomando el papel de crearnos a nosotros mismos. Aunado a esto, lo que provoca que la praxis sea tan importante no es únicamente la revolución de la misma, sino el encuentro entre teoría y acción, entre reflexión y creación de mundo; esto nos da el ángulo necesario para efectivizar nuestra vida.
La crítica de Marx es tan extensa que podríamos dividirla en varios ejes específicos y uno de ellos sería la crítica conceptual. Aquí se pretende dar cuenta de los conceptos específicos que, en la sociedad burguesa, la economía política y la filosofía idealista se generalizan como si fueran una dinámica que involucra a todas las clases sociales en su totalidad. Es una crítica que opera al nivel de cómo nombramos las cosas y su manera de trabajar es meterse en el concepto y “cavar” hasta encontrar las contradicciones que existen en el mismo para después hacerlas salir. Es la parte corrosiva del pensamiento marxista; planea desintegrar lo que conocemos para quedarnos con las partes más fundamentales y acertadas. Es incluso meterse al discurso propio para una vez ahí, encontrar contradicciones. Para que esta parte quede más clara, podemos volver al ejemplo del dinero. Nuestro concepto de dinero hace que cuando escuchamos/leemos esta palabra, automáticamente pensemos en monedas y billetes; dos cosas que podemos “intercambiar” por algún objeto en las tiendas. Hasta aquí todo va bien, no hay nada del otro mundo, pero es justo cuando (como en mi ejemplo anterior) vamos al significado que todo esto tiene, donde encontramos el problema. La contradicción más básica cuando hablamos del concepto “dinero”, es que es justamente un concepto que actualmente provoca guerras silenciosas (o no tanto) y muchas muertes a lo largo y ancho del mundo, aunque al final, el dinero en su manifestación más burda y común (con la que nosotros nos relacionamos) es un mero trozo de papel, o un pedazo decorado de materiales férreos. Marx nos habla de contradicciones justamente en esto, en como algo que se nos presenta como natural e imprescindible, es únicamente significación sin sentido.
Siguiendo con nuestro hilo acerca de la crítica, algo que identificaba a Marx en el ámbito intelectual (y en todos los demás) eran sus constantes ganas de cuestionar todo lo que estaba dicho y es por eso que un factor que le ayudó a desarrollar de forma más precisa su pensamiento fue el criticar a los pensadores anteriores a él y a sus contemporáneos. Aquí vuelve la característica corrosividad de su crítica, provocando que desintegre el pensamiento ajeno para conservar lo que le sirve y a partir de eso, ir generando sus teorías y pensamiento propios. De esta forma, los demás pensadores se vuelven los peldaños que ayudaron a Marx a poder ver la vida desde otro punto de vista.
En cuanto a su crítica al capitalismo, podemos decir que es una crítica a la realidad en sí misma. Se centra en criticar la manera específica en que esferas como la economía, la política, la moral, etc. Se presentan dentro del capitalismo. ¿Qué forma particular toma el trabajo en el capitalismo? ¿Qué forma particular toma la gestión de lo público? Es dejar de lado las apariencias y entrar en como la visión que tenemos de estos temas afecta la manera en la que nos relacionamos con los mismos.
Un punto que también abarcó gran parte de su crítica fueron los fallos y desacuerdos que encontraba con el materialismo tradicional. Este materialismo estaba enfocado en lo puramente sensible, tangible y material; sin observar la esencia del objeto o algo más allá de su imagen. Una discusión importante dentro de esta corriente de pensamiento es lo que sucede en la interacción del sujeto y el objeto; aquí tenemos contraste entre el punto de vista idealista de Hegel, quien nos dice que el papel principal de esta interacción lo tiene el sujeto, ya que el objeto es pasivo y su existencia es únicamente para poder ser observado y utilizado por la mujer. Mientras que, para Ludwig Feuerbach, filósofo materialista alemán que será de los principales en influenciar los cuestionamientos de Marx, el sujeto tiene un papel secundario y su única intervención con el objeto es el acto de observarlo, este no puede modificarlo en ningún sentido. A todo esto, Marx aporta su pensamiento radical y niega estas dos concepciones; argumentando que el pensamiento de Feuerbach se queda a mitad del camino en esta concepción y así él entrega al mundo su argumento y genera el concepto de materialismo práctico.
Contando con esta base, Francisco Fernández Buey en su libro “Marx (sin ismos)” divide el materialismo práctico en tres ejes, los cuales son:
1. Materialismo Práctico: Momento en el que el ser humano se involucra con su entorno, aplicando la llamada praxis. Su relación con el mundo deja de ser contemplativa para evolucionar a involucrarse de forma activa con lo que le rodea. Se considera que la verdad únicamente se puede encontrar dentro de la praxis.
2. Materialismo Histórico: Esto nos habla de cómo el ser humano se produce a sí mismo. Es un materialismo que intenta captar el verdadero proceso de producción y todo lo que en él se involucra (como las relaciones sociales y los efectos que la producción tiene en las personas). Considera la historia como la forma de rescatar la manera en la que el humano persigue sus propios fines y relaciona lo material con la ideología y como ésta misma puede afectar la forma en la que se le concibe y la relación que se tiene con el objeto.
3. Materialismo Económico: Es un eje que da prioridad a las relaciones de propiedad, producción, distribución y consumo de bienes. Marx se enfoca en las relaciones dado que esto representa lo contrario a lo que hace el capitalismo, que sería fijar la atención en los objetos, en lugar de analizar y enfocarse en como el ser humano se relaciona con los mismos. Nos hace voltear a ver la división del trabajo que se ha configurado a lo largo de la historia, cómo está actualmente y cómo afecta a los humanos en su relación con ellos mismos y con los demás.
Y es justo aquí, cuando ya entendemos lo que es materialismo, cuando confrontamos a las dos partes vitales de la concepción del pensamiento marxista: materialismo y dialéctica. Es Bolívar Echeverría en su libro “Materialismo de Marx: Discurso crítico y revolución.” El que nos explica que el resultado de la confrontación entre estas dos modalidades estructurales del pensamiento abre las puertas al discurso propiamente comunista, dándonos la posibilidad de un nuevo enfoque en el discurso, un discurso completamente nuevo.
La nueva forma de discurso debe “vencer la limitación o insuficiencia de la problematización materialista-empirista de la objetividad y asumir al mismo tiempo la radicalidad.” (Echeverría 2011, 26) Pero para entenderlo en palabras de Marx, quiero definir en pocas palabras la otra pieza clave de su discurso materialista: la dialéctica.
· Entendida como la revolución de la cognición; ¿CÓMO A PUEDE PASAR A SER B Y SER A Y B AL MISMO TIEMPO?
Sabiendo esto, podemos pasar a que Marx nos dice que la dialéctica debe sustentarse en aprehender la objetividad en la teoría, así generando el proceso que servirá de base para toda relación sujeto-objeto y por lo tanto, el que exista sentido en lo real. Esto generaría “un proceso de ‘metabolismo’ práctico entre el hombre y la naturaleza”. (Echeverría 2011, 27)
Lo que llevó a Marx a concluir todo esto, fue que el discurso materialista de Feuerbach para él era un intento fallido de trazar los fundamentos de la teoría revolucionaria de las clases proletarias; a eso se le sumaba que era de nuevo el camino medio e incompleto entre materialismo-empirismo y el idealismo-racionalismo. Es aquí cuando Karl decide hacer uso de su crítica corrosiva en las Tesis Sobre Feuerbach y nos dice que la praxis que se encuentra dentro de la relación sujeto-objeto es la que le da sentido a lo real. Añade también, que la verdad dentro del discurso teórico (y es aquí donde también podemos encontrar su falsedad), solo se puede explicar si el discurso se da como un momento dentro del proceso práctico-histórico en su conjunto (y no como momento o figura independiente a este proceso).
Con todo lo anterior podemos afirmar, que el discurso dialéctico-materialista planea atacar la problemática existente acerca de la historia que han tenido las formas sociales y dentro de las cuales se realizan procesos productivos o la praxis. Así, al tomar la historia como pieza clave del discurso y de la actividad humana se genera el materialismo histórico, una mezcla entre el materialismo y la dialéctica que pretende entender no solo a la sociedad, sino también a su historia.
Y sé que todo esto suena en extremo complejo, ya vimos que es la palabra que mejor resume a Marx y a su pensamiento, pero si queremos entender la relación de la dialéctica con el materialismo en términos muy sencillos (y con el riesgo de quedarnos a la mitad en cuanto a lo que comprendemos del mismo), podemos resumir esta concepción marxista de materialismo como lo que nos dice que en realidad lo importante no es ni el sujeto, ni el objeto, sino la relación que existe entre ambos; lo que el ser humano hace con el objeto y lo que el objeto es capaz de hacer.
Queriendo sintetizar un poco lo que es la crítica marxista, podemos dirigirnos a como todas estas formas de desintegrar lo que conocemos y lo que vemos a simple vista, nos permiten descubrir que el discurso de construcción de nuestra realidad está codificado para normalizar el capitalismo y las formas en las que este se manifiesta en el mundo. Gracia a Marx sabemos que la manera de generar la revolución necesaria en contra de esta presentación del mundo, se encuentra en la revolución de la teoría. Esto significaría criticar los conceptos, a los teóricos y a las tradiciones que piensan y “eligen” como se construye y significa nuestro mundo. El planteamiento de Marx es revolución teórica, revolución científica, es un llamado político. Pretende que nos demos cuenta de la codificación burguesa que lleva nuestra realidad y el cómo nosotros mismos hemos introyectado conceptos como “dinero”, “trabajo”, “capital”, “valor”, etc. En nuestro día a día, sin siquiera plantearnos su origen y el cómo ahora son palabras que rigen nuestra existencia y desenvolvimiento en el mundo. Karl denuncia que ahora pensamos de ese modo, aun cuando no pertenecemos a la clase social que generó estas ideas. Pero en su opinión más que los conceptos, lo que tenemos más arraigado a nosotros son las relaciones capitalistas y para él es terrible el concebir que actualmente las vemos como normales. He aquí la parte radical del pensamiento marxista, la que nos dice que la clave capitalista es la que codifica nuestro día a día.
Podemos considerar todo lo dicho con anterioridad como únicamente una pequeña introducción a todo el universo que era en realidad la cabeza de Karl Marx. Y es que es muy curioso pensar que lo que la sociedad en general rescata de él es únicamente su texto del “Manifesto Comunista” y como también es relacionado con guerras y masacres a nivel mundial. Karl representa muchas veces un símbolo de revolución, pero una revolución con armas, guerras y naciones como protagonistas; y es aquí donde quiero preguntar ¿de verdad es esa clase de revolución? Con todo lo que he aprendido y con lo que expongo en este texto estoy segura de que lo que Marx representa en realidad es una revolución de la mente y el conocimiento, un cambio que nos permita quitarnos los lentes obscuros con los que estamos acostumbrados a ver nuestra realidad, y aunque duela y nos deslumbre por un periodo de tiempo, saber que existir de manera consciente y activa con nuestra sociedad y con lo que nos rodea es en realidad la manera más digna y revolucionaria de existir.
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021 - IDEAS – SANTO TOMÁS DE AQUINO -
En 1244, Santo Tomás de Aquino, gracias a la amistad que había trabado con el Maestro General Juan de Wildeshausen, ingresó en la Orden Dominicana hacia cuya vida austera e intelectual se sentía atraído desde haberlos conocido anteriormente en un convento de Nápoles.
La decisión contrarió a su familia, que había planificado que este sucediera a su tío al frente de la abadía de Montecasino. Enterados de que Tomás se dirigiría a Roma para iniciarse en los estudios del noviciado, sus hermanos lo raptaron y retuvieron durante más de un año en el castillo de Roccasecca con la intención de disuadirlo de su ingreso en la orden. Tras haber sido tentado varias veces, logró huir del castillo trasladándose a París para alejarse de su familia. El Aquinate sorprendió a los frailes cuando estos vieron que se había dedicado a leer y memorizar la Biblia y las Sententias de Pedro Lombardo, incluso había comentado un apartado de las Refutaciones sofísticas de Aristóteles que eran las referencias para los estudios de la época. Formación universitaria - La Universidad de París era ideal para las aspiraciones del joven Tomás, por su marcada predisposición al Trivium (ya tradicional en París) y por sus escuelas de teología. Tuvo por maestros más destacados a Alejandro de Hales y a Alberto Magno, ambos acogedores de la doctrina aristotélica (especialmente el segundo).
Entre sus compañeros estaba Buenaventura de Fidanza con quien mantuvo una singular relación de amistad, aunque también de cierta polémica intelectual. Antes de que Tomás acabara los estudios, Alberto Magno, sorprendido por el entendimiento de su alumno napolitano, le encarga un Acto escolástico, y a sus fortísimos argumentos el alumno responde con perfecta distinción, deshaciendo el discurso de su maestro y futuro Doctor de la Iglesia, el cual dijo a la asamblea: Vosotros llamáis a éste el Buey mudo, pero yo os aseguro que este Buey dará tales mugidos con su saber que resonarán por el mundo entero
Regreso y muerte. Terminada su labor en Francia, se le encargó la fundación de un nuevo capítulo provincial en Nápoles. Antes de ello, Tomás visitó a su familia y a sus amigos, el cardenal Anibaldo degli Anibaldi y el abad de Montecassino Bernard Ayglier.
En Nápoles debe destacarse que fue recibido como un rey, así como la numerosa correspondencia que mantuvo, respondiendo dudas al mismo Bernard Ayglier entre muchos otros. Sin embargo, tan pronto comenzó la tercera parte de la Summa Theologiae tuvo una singular experiencia mística (ya las había tenido antes, está bien documentado) tras la cual se le haría imposible escribir:
No obstante, accedió a la invitación del papa Gregorio X de asistir al Concilio de Lyon II. Sin embargo, enfermó repentinamente y tuvieron que acogerle en la abadía de Fossanova. Tomás murió haciendo una enérgica profesión de fe el 7 de marzo de 1274, cerca de Terracina. Posteriormente, el 28 de enero de 1369, sus restos mortales fueron trasladados a Tolosa de Languedoc, fecha en la que la Iglesia católica lo celebra.
La importancia y la gravitación política de Tomás de Aquino fue de tal magnitud, que aún existen dudas acerca de la causa de su muerte. Ciertamente, se ha escrito sobre un posible envenenamiento por orden del rey de Sicilia, Carlos de Anjou, según una afirmación sostenida por Dante Alighieri en el Purgatorio de la Divina Comedia, epopeya escrita entre 1304 y 1321.
Después de su muerte, algunas tesis de Tomás de Aquino, confundidas entre las averroístas, fueron incluidas en una lista de 219 tesis condenadas por el obispo de París, Étienne Tempier, en la Universidad de París en 1277. A pesar de ello, tras varias profecías y milagros documentados con numerosos testimonios, Tomás de Aquino fue canonizado casi a los 50 años de su muerte, el 18 de enero de 1323. Las condenas de 1277 fueron inmediatamente levantadas en lo que respecta a Tomás de Aquino el 14 de febrero de 1325.
Tomás de Aquino es uno de los intelectuales más profundos, sistemáticos y fecundos de la Historia. Historia de las Ideas - [email protected]
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Edwin Markham
EL HOMBRE DE LA AZADA
(Ante el cuadro de Millet)
Doblado por el peso de los siglos,
apoyado en su azada mira al surco,
en su faz el vacío de los tiempos
y la carga del mundo sobre el hombro.
¿Quien mató en él la rebeldía, el brío,
y lo dejó sin duelo ni esperanza,
torpe y vencido como el buey, su hermano?
¿Quién aflojó su quijada de bruto?
¿Cuál fue la mano que aplastó su frente?
¿Qué soplo le apagó la luz del alma?
¿Es esta la criatura que Dios hizo
para reinar sobre el mar y la tierra,
otear estrellas y rastrear los cielos,
para sentir la pasión de lo eterno?
¿Es este el sueño del que armó los astros
y les trazó su ruta en el vacío?
Del antro del Infierno a sus abismos
no se encuentra más trágica figura,
más reprochable a la codicia ciega,
más llena de presagios para el alma,
más tensa de peligros para el mundo.
¡Qué abismos lo separa de los ángeles!
Esclavo del trabajo, ¿qué le importan
Platón y la armonía de las Pléyades,
la larga fila de cimas del canto,
la luz del alba, el rubor de la rosa?
En él se mira el dolor de los siglos,
la tragedia del Tiempo está en su agobio;
la Humanidad, en su amarga figura,
robada, traicionada y desvalida,
protesta ante los Jueces de la Tierra,
y su protesta es también profecía.
¡Oh, señores y dueños de la tierra!
¿Esta es la obra que le dais a Dios,
esta cosa monstruosa de alma ahogada?
¿Cómo podréis erguir esta figura,
darle de nuevo la inmortalidad;
devolverle la luz de su mirada;
reconstruirla en la música y el sueño;
enderezar infamias milenarias,
pérfidos daños, incurables duelos?
¡Oh, señores y dueños de la tierra!
¿Qué cuenta le dará el futuro a este hombre?
¿Qué responder a su torva demanda
cuando la rebelión sacuda al orbe?
¿Qué será de los reinos y los reyes;
de todos los que así lo deformaron,
cuando este mudo miedo juzgue al mundo
tras del largo silencio de los siglos?
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Cada 28 de enero se celebra a Santo Tomás de Aquino, patrono de los estudiantes, quien escribió la famosa obra “Summa Teológica”. Santo Tomás de Aquino nació en Roccasecca, cerca de Aquino en Nápoles, en 1225. Realizó sus primeros estudios con los benedictinos en Montecassino, cerca al castillo de sus padres. Fue a la Universidad de Nápoles y destacó por su gran inteligencia. Al conocer a la naciente comunidad de Padres Dominicos, se une a ellos con la oposición de su familia. Huye hacia Alemania, pero en el camino sus hermanos lo apresan y lo encierran por dos años en el castillo de Roccasecca. Tiempo que aprovechó para estudiar Biblia y Teología. Los hermanos al ver que Tomás no desistía de su idea, le envían una mujer de la mala vida para hacerlo pecar, pero el santo, con un tizón encendido, la amenaza con quemarle la cara, entonces la mujer salió despavorida. El Santo obtiene su liberación y es enviado a Colonia en Alemania donde fue instruido por el sacerdote dominico San Alberto Magno. Sus compañeros lo tomaban por tonto al verlo robusto y silencioso y lo apodaron “el buey mudo”. Pero cierto día un compañero le pidió sus apuntes y se los entregó a San Alberto, quien dijo: "Ustedes lo llaman el buey mudo, pero este buey llenará un día con sus mugidos el mundo entero". No obstante, la devoción de Santo Tomás era lo que más resaltaba. Solía pasar mucho tiempo en oración y vivía un gran amor a la Eucaristía. El joven Santo Tomás se graduó como doctor de teología en la Universidad de París y a sus 27 años ya era maestro en esa ciudad. Más adelante es convocado por el Papa y por siete años recorrió el país italiano predicando y enseñando. Incluso el rey San Luis le consultaba los asuntos de importancia. En cuatro años escribió ��la Summa Teológica”, su obra maestra de 14 tomos, que se volvió tan importante que el Concilio de Trento utilizó tres libros de consulta: la Biblia, los Decretos de los Papas y la “Suma Teológica” de Santo Tomás. Lo admirable de este santo es que la sabiduría no la adquirió tanto en la lectura de libros, sino de rodillas y en oración ante el crucifijo. Fuente: aciprensa.com https://www.instagram.com/p/B74bTWhFjPk/?igshid=3xkvkgt842px
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Biografía de Santo Tomás de Aquino
Nace en el Castillo de Rocaseca, cerca de Nápoles, Italia, en 1225.
Es el último hijo varón de una numerosa familia de doce hijos. Su padre se llamaba Landulfo de Aquino.
Alto, grueso, bien proporcionado, frente despejada, porte distinguido, una gran amabilidad en el trato, y mucha delicadeza de sentimientos.
Cerca del Castillo donde nació estaba el famoso convento de los monjes Benedictinos llamado Monte Casino. Allí lo llevaron a hacer sus primeros años de estudios.
Los monjes le enseñaron a meditar en silencio. Es el más piadoso, meditabundo y silencioso de todos los alumnos del convento. Lo que lee o estudia lo aprende de memoria con una facilidad portentosa.
Continúa sus estudios por cinco años en la Universidad de Nápoles. Allí supera a todos sus compañeros en memoria e inteligencia. Conoce a los Padres Dominicos y se entusiasma por esa Comunidad. Quiere entrar de religioso pero su familia se opone. El religiosos huye hacia Alemania, pero por el camino lo sorprenden sus hermanos que viajan acompañados de un escuadrón de militares y lo ponen preso. No logran quitarle el hábito de dominico, pero lo encierran en una prisión del castillo de Rocaseca.
Tomás aprovecha su encierro de dos años en la prisión para aprenderse de memoria muchísimas frases de la S. Biblia y para estudiar muy a fondo el mejor tratado de Teología que había en ese tiempo, y que después él explicará muy bien en la Universidad.
Sus hermanos al ver que por más que le ruegan y lo amenazan no logran quitarle la idea de seguir de religioso, le envían a una mujer de mala vida para que lo haga pecar. Tomás toma en sus manos un tizón encendido y se lanza contra la mala mujer, amenazándola con quemarle el rostro si se atreve a acercársele. Ella sale huyendo y así al vencer él las pasiones de la carne, logró la Iglesia Católica conseguir un gran santo. Si este joven no hubiera sabido vencer la tentación de la impureza, no tendríamos hoy a este gran Doctor de la Iglesia.
Esa noche contempló en sueños una visión Celestial que venía a felicitarlo y le traía una estola o banda blanca, en señal de la virtud, de la pureza que le concedía Nuestro Señor.
Liberado ya de la prisión lo enviaron a Colonia, Alemania, a estudiar con el más sabio Padre Dominico de ese tiempo: San Alberto Magno. Al principio los compañeros no imaginaban la inteligencia que tenía Tomás, y al verlo tan robusto y siempre tan silencioso en las discusiones le pusieron de apodo: "El buey mudo". Pero un día uno de sus compañeros leyó los apuntes de este joven estudiante y se los presentó al sabio profesor. San Alberto al leerlos les dijo a los demás estudiantes: "Ustedes lo llaman el buey mudo. Pero este buey llenará un día con sus mugidos el mundo entero". Y así sucedió en verdad después.
Sus compañeros de ese tiempo dejaron este comentario: "La ciencia de Tomás es muy grande, pero su piedad es más grande todavía. Pasa horas y horas rezando, y en la Misa, después de la elevación, parece que estuviera en el Paraíso. Y hasta se le llena el rostro de resplandores de vez en cuando mientras celebra la Eucaristía.
A los 27 años, en 1252, ya es profesor de la famosísima Universidad de París. Sus clases de teología y filosofía son las más concurridas de la Universidad. El rey San Luis lo estima tanto que lo consulta en todos los asuntos de importancia. Y en la Universidad es tan grande el prestigio que tiene y su ascendiente sobre los demás, que cuando se traba una enorme discusión acerca de la Eucaristía y no logran ponerse de acuerdo, al fin los bandos aceptan que sea Tomás de Aquino el que haga de árbitro y diga la última palabra, y lo que él dice es aceptado por todos sin excepción.
En 1259 el Sumo Pontífice lo llama a Italia y por siete años recorre el país predicando y enseñando, y es encargado de dirigir el colegio Pontificio de Roma para jóvenes que se preparan para puestos de importancia especial.
En 4 años escribe su obra más famosa: "La Suma Teológica", obra portentosa en 14 tomos, donde a base de Sagrada Escritura, de filosofía y teología y doctrina de los santos va explicando todas las enseñanzas católicas. Es lo más profundo que se haya escrito en la Iglesia Católica.
En Italia la gente se agolpaba para escucharle con gran respeto como a un enviado de Dios, y lloraban de emoción al oírle predicar acerca de la Pasión de Cristo, y se emocionaban de alegría cuando les hablaba de la Resurrección de Jesús y de la Vida Eterna que nos espera.
El Romano Pontífice le encargó que escribiera los himnos para la Fiesta del Cuerpo y Sangre de Cristo, y compuso entonces el Pange Lingua y el Tantum Ergo y varios otros bellísimos cantos de la Eucaristía (dicen que el Santo Padre encargó a Santo Tomás y a San Buenaventura que cada uno escribiera unos himnos, pero que mientras oía leer los himnos tan bellos que había compuesto Santo Tomás, San Buenaventura fue rompiendo los que él mismo había redactado, porque los otros le parecían más hermosos). Después de haber escrito tratados hermosísimos acerca de Jesús en la Eucaristía, sintió Tomás que Jesús le decía en una visión: "Tomás, has hablado bien de Mi. ¿Qué quieres a cambio?". Y el santo le respondió: "Señor: lo único que yo quiero es amarte, amarte mucho, y agradarte cada vez más".
De tal manera se concentraba en los temas que tenía que tratar, que un día estando almorzando con el rey, de pronto dio un puñetazo a la mesa y exclamó: "Ya encontré la respuesta para tal y tal pregunta". Después tuvo que presentar excusas al rey por estar pensando en otros temas distintos a los que estaban tratando los demás en la conversación.
Pocos meses antes de morir tuvo una visión acerca de lo sobrenatural y celestial, y desde entonces dejó de escribir. Preguntado por el Hermano Reginaldo acerca de la causa por la cual ya no escribía más, exclamó: "Es que, comparando con lo que vi en aquella visión, lo que he escrito es muy poca cosa".
Santo Tomás logró que la filosofía de Aristóteles llegara a ser parte de las enseñanzas de los católicos. Este santo ha sido el más famoso profesor de filosofía que ha tenido la Iglesia.
Tan importantes son sus escritos que en el Concilio de Trento (o sea la reunión de los obispos del mundo), los tres libros de consulta que había sobre la mesa principal eran: la Sagrada Biblia, los Decretos de los Papas, y la Suma Teológica de Santo Tomás.
Decía nuestro santo que él había aprendido más, arrodillándose delante del crucifijo, que en la lectura de los libros. Su secretario Reginaldo afirmaba que la admirable ciencia de Santo Tomás provenía más de sus oraciones que de su ingenio. Este hombre de Dios rezaba mucho y con gran fervor para que Dios le iluminara y le hiciera conocer las verdades que debía explicar al pueblo.
Su humildad: Cumplía exactamente aquel consejo de San Pablo: "Consideren superiores a los demás". Siempre consideraba que los otros eran mejores que él. Aun en las más acaloradas discusiones exponía sus ideas con total calma; jamás se dejó llevar por la cólera aunque los adversarios lo ofendieran fuertemente y nunca se le oyó decir alguna cosa que pudiera ofender a alguno. Su lema en el trato era aquel mandato de Jesús: "Tratad a los demás como deseáis que los demás os traten a vosotros".
Su devoción por la Virgen María era muy grande. En el margen de sus cuadernos escribía: "Dios te salve María". Y compuso un tratado acerca del Ave María.
El Sumo Pontífice lo envió al Concilio de Lyon, pero por el camino se sintió mal y fue recibido en el monasterio de los monjes cistercienses de Fosanova. Cuando le llevaron por última vez la Sagrada Comunión exclamó: "Ahora te recibo a Ti mi Jesús, que pagaste con tu sangre el precio de la redención de mi alma. Todas las enseñanzas que escribí manifiestan mi fe en Jesucristo y mi amor por la Santa Iglesia Católica, de quien me profeso hijo obediente".
Murió el 7 de marzo de 1274 a la edad de 49 años.
Fue declarado santo en 1323 apenas 50 años después de muerto. Y sus restos fueron llevados solemnemente a la Catedral de Tolouse un 28 de enero. Por eso se celebra en este día su fiesta.
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Olvido García Valdés + Warmth
como quien reza escucha, sobrevive en la áspera música del ojo; si sólo quedan nombres, arráncales sus hijas de raíz, contempla esas desnudas cepas abrasadas * Casi sin fin escalera, templo escalera brilla la mica y ciega el sol, el aire leve. También brilla la mica allí, pared de la honda hoz, y algo de un destino que arrastra (amor fondo es de muerte, lecho donde el jade protege del aire enrarecido). Siento verde y liviano el tacto de esta proximidad, escucho pájaros que son y no son los conocidos, la familiar urraca cruzada con el mirlo es el cenzontle, se oye su algarabía densa en este atardecer. Luego se encienden las luces en la plaza, se agigantan los árboles, se vuelven casi transparentes las gentes y los niños, aire festivo y levedad de tránsito, pequeños cometas de colores, escalera, trasvase de pájaros en pájaros, de la mica en la mica. * equilibrio y su ley: el espacio desnudo genera más abajo el horror al vacío es otro el aire aquí, bajo estas bóvedas, aires que las cosas completan, materiales que nombres clasifican oye sólo lo que le habla: oye una rana croar en la noche: oye campos enteros de amapolas (resuena en el hueco de la noche, en el croar, reverbera de rojo en esta luz) la más aguda potencia dice: no existo, vuela tiempo por mí mas yo no soy esta tierra de arcilla, estrellas emitieron luz, un cuerpo tan lejos de otro cuerpo el viento sabe, se hace polvo y conoce, sedimenta, erosiona, cuantos vivieron son ya suyos, su sangre y hueso (la extrañeza endurece en máscara de jade, adhiere al rostro, afila como viento la cumbre, blanquea greda) * Un ojo de buey hacia sureste, una pequeña estancia, algo en su calma, algo en su oficio como luz de alabastro: allá en el Norte según se hace más brava la montaña, según los robles ceden su lugar a los pinos, también los hombres se vuelven más sombríos: primero no cantar, después ya no reír, después quedarse mudos, descorazonada tierra negra. * bóvedas poco más anchas que cuerpos —coloque el brazo detrás de la cabeza, respire suavemente, no se mueva— lugares son ahora de la meditación: reza, habla desde el vientre, o bien, la hermosura es otoño, cuerpo ¿eres tú? todo nos hace señas, neón, casi óleo hacia las nubes * No es compasiva, restalla el fuego el agua, chirría. Está solo, frota una ciruela contra el muslo. Antes de morderla, dice nombres. Di yo. Di tiempo. ¿Por qué ser infeliz es ser culpable, y cuándo, si es posible, cesa el miedo? Había allí una fuente, resplandece el hilillo de baba de las vacas. Más alta, al otro lado, una huerta, un corral; enfrente del establo, entre una palmera y el portillo, la montaña de estiércol. Grita, di la temperatura, la del agua al beber. La hermosura del mundo encierra partos, niños muertos, barro, mugidos en la noche. Brilla cuando amanece el verde más intenso. Se hablaba en voz baja todavía, el monte guardaba los lugares, alto y oscuro en dirección al mar. De allí trajo esta arqueta de caoba. ¿Nacerán de lo podre las abejas? * ¿la oposición materiales y forma la neutraliza el tiempo? ¿es la memoria suceso material o todo en ella participa de forma? guardo casas, guardo memoria de lugares de muerte, guardo conciencia de ser de los vencidos arena, plomo, viejas fotos, ramas secas; raíces y un elemento que soporta y transporta clausurada la mímesis, la palabra hermosura es una incógnita que huye; obturada la lógica, un grito, un gesto, una respiración actuar, sin embargo un nombre es una imagen (Sulamita, Brunilda, Ur) y un nombre hacer violencia a la profundidad o excavar, mirar debajo * Árboles en la bruma sueltos suenan, ser sin remedio el mundo. Dobla su cabo el año: sorbe rocío, escucha esa vigilia, ¿oyes dulce carne que duele cómo se extiende en ti? Hilo animal todo empapado de luz, carnosa flor que espinos requieren, todo querría vivir, todo gangrena [Olvido García Valdés, "Instancias del camino", Esa polilla que delante de mí revolotea, Galaxia Gutenberg, 2016]
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“Una economía que se construye a partir de préstamos y gastos masivos es insostenible. Pero el motivo…no es económico, sino moral. Pone lo material como fin último, y a las personas como una herramienta para conseguir ese fin. Es egoísta, y, por lo tanto, autodestructivo.”
— G.K. Chesterton: Los límites de la cordura (El Buey Mudo, 2010)
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Los Lunáticos
Un texto que espero te agrade.
Lunáticos Por: Rogelio Garza.
Dicen que la inspiración de un rockero baja de la luna, que desciende en forma de lágrimas que antes de caer se convierten en delfines de este Gran Blues. Por eso, cuando la Yeyi llamó para decirme que el 22 de diciembre podriamos ver la última luna llena del milenio, decidí que era prioridad salir a verla. El asunto del milenio era lo de menos, menos que un pretexto pendejo; tan seguro de que dos más dos suman cuatro, como de que la mota no mata, esa noche subí a la azotea de mi casa para ver la luna y escribir una canción. ¿Acaso había un mejor momento para hacer una canción evanescente, etérea, onda “High Time” de The Grateful Dead, con sus alucinantes solos de guitarra slide?
Pues allí estuve, mas de dos horas sentado junto al tinaco, rasgando mi guitarra bajo la luna con una libreta al lado para anotar ideas. Pero las frases inspiradas no se veían caer por ninguna parte y empecé a sentir un frío entumecedor. Las nalgas ya me dolían, asi que me levanté para estirar las piernas y prendi un cigarro. No terminaba de exhalar la primera bocanada cuando se escuchó el grito de una mujer joven, luego siguió, como la víctima entre las fauces de un insecto gigante: “¡Papá, papá, papá!”.
Miré alrededor, hacia las casas vecinas, pero no lograba descubrir el origen de los gritos a pesar de que el brillo lunar iluminaba perfectamente. “¡Papá, papá!”, gritaba aterrada la mujer. En seguida se escuchó la voz de un señor: -¡Oye, tú! ¡Sí, tú, el de la azotea! -¿Yo? Pregunté extrañado, mirando en todas direcciones. -¡No te hagas pendejo! Al escuchar eso, supe que las voces provenian de la casa que está atras de mi patio. La vecina estaba semidesnuda, jalando la cortina de su recamara para taparse y, segun su expresion, yo era José El Violador. Su papá me amenazaba con el puño al aire: -¿Que estás haciendo ahí? Atrapado en el pasmo que suele seguir a estos cambios bruscos de frecuencia, no pude contestar de inmediato. De modo que el vecino se respondió asi mismo: -Espiándola, ¿verdad, cabrón? ¿Por que no vas a espiar a tu puta madre, hijo de la chingada? -Estaba viendo la luna, dije, señalando al cielo inocente, tiernamente. Esta es la última luna llena del milenio. ¿Ya se asomaron a verla? Por supuesto, ni yo creí lo que estaba diciendo. -¿Y me vas a decir que no viste para acá? -Pues no. -¡No te pases de listo, hijo de la chingada! -¡Oiga, si me vuelve a insultar le parto la madre!, le grite, poniendolo en pausa. ¿Cuantas veces quiere que se lo repita? No vi nada. En eso se asomó la mama desde otra ventana y comenzó a gritar: -¡No tienes derecho a violar nuestra privacidad ni faltarle el respeto a mi hija! La mire con ojos de buey adormilado, aunque seguramente mi gesto se perdió entre la distancia y la noche: -Seamos honestos, señora –le dije-, ni que su hija estuviera tan buena… -¡Oyeme, HIJO DE TU PUTA MADRE!, rugio el señor desde la otra ventana y desapareció corriendo. Me di vuelta, recogí mi guitarra y dejé a las vecinas vociferando estupideces. Bajé a la cocina para destapar una cerveza, la leche de los niños grandes. Dos, tres tragos y antes de sentir su efecto alivianador, el timbre empezó a sonar enloquecidamente: dindondindon… Era el vecino, jaloneando y pateando mi reja (que es simbolica, porque hasta un enano la puede brincar) sin dejar de proferir amenazas. Lo vi desde la ventana de la cocina y tuve el presentimiento de que la cosa se iba a poner dificil si no actuaba rápido. Una posibilidad era llamar a la policia para que vinieran a ponerle un estatequieto, pero con la policia nunca se sabe, no hay forma de confiar en ella porque es un bumerang, y a nadie le gusta terminar la noche en la comandancia aclarando situaciones pendejas.
Otra alternativa era salir y enfrentarlo. A tubazos. Sólo asi dejan de joder estas personas. Pero tampoco, no me considero violento y el caso no lo justificaba. Una tercera era no hacer nada, dejar que se cansara y se fuera rumiando a su casa. Sin embargo, esta opcion dejaba abierta otra posibilidad: que en vez de cansarse, el vecino intentara algo más grave. Si ya estaba en la calle armando un escándalo, sin duda alguna podria tomar medidas mas drasticas, como apedrear las ventanas o tirar la reja. Entretanto, su alboroto atrajo la atencion de otros vecinos, quienes escuchaban la version de los hechos: que yo acostumbraba espiar a su hija, que esta era una colonia decente y respetable, que los colonos no se merecian vecinos como yo y mi amigo (el broder con el que rento esta casa); que ademas de todo, lo habia amenazado, que me iba a demandar por violacion a su privacidad y que por lo pronto iba a ponerme una madriza, despues de la cual yo aprenderia a respetar. La vecina de al lado, una imbécil posiblemente salida del Opus Dei, estuvo totalmente de acuerdo con él y agregó que todos los dias organizabamos fiestas desenfrenadas con música a todo volumen y niñas en uniforme escolar. Escuché sus impertinencias en la cocina hasta que terminé la cerveza. Nunca he sabido por que me atrapo en estas situaciones de las cuales despues no puedo salir. Me cansé y fui a la recamara a buscar entre la ropa. Ya me tenia harto con sus gritos y sus insultos, la luna lo habia transformado en bestia, pero la .22 seguro lo dejaba mudo.
Salí y caminé hasta la reja donde ya se habian juntado varios vecinos. El cabron histérico estaba a punto de tirarla cuando dejé ver la pistola. “A chingar a su madre”, les dije a todos, y disparé al cielo tres veces. Los vi correr como cucarachas sorprendidas por la luz y pensé en las cosas que tiene que hacer un rockero para escribir una canción. Cerré la puerta tras de mí, fui a la cocina por otra cerveza y de nuevo me pareció escuchar algo afuera. Sonaba como si alguien estuviera aventando costales rellenos de arena en mi entrada, seguramente el vecino estaba de vuelta con más refuerzos. Me asomé de nuevo a la ventana y entonces los vi entre mi reja y la puerta: tres delfines luminosos que se revolcaban agonizantes en su sangre azul por las heridas de bala. Los vi morir y desvanecerse lentamente sin poderme quitar de la cabeza tamaño suicido inspiracional.
#pachucocholosychundos#pobre vato con vecinos tan mamertos#te imaginas si eso pasara en la vida real? espera SI PINCHES PASA#text post#submission
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El Salmo de la Vida, de Voces de la noche "No me digas lamentándote, ¡la vida no es más que un sueño vano! Puesto que muerta está el alma que dormita y las cosas no son lo que parecen. ¡La vida es real!, ¡la vida es grave! Y la tumba no es su meta. Polvo eres y en polvo te convertirás, no se refería al alma. Ni el goce, ni el pesar son a la postre nuestro destino; es actuar para que cada amanecer nos lleve más lejos que hoy. El tiempo es breve y el arte es largo y nuestros corazones, aunque bravos y valerosos, todavía, al igual que tambores sordos, tocan marchas fúnebres hacia la sepultura. En el extenso campo de batalla de este mundo, en el campamento de la vida, ¡no seas como buey mudo aguijado! ¡sino héroe en el conflicto! ¡Desconfía del futuro por agradable que sea! Deja que el pasado muerto entierre a sus muertos. ¡Actúa, actúa en el vivo presente el corazón firme y Dios guiándote! Las vidas de los grandes hombres nos recuerdan que podemos sublimar las nuestras, y al partir tras de sí dejan sus huellas en las arenas del tiempo. ¡Desconfía del futuro por agradable que sea! Deja que el pasado muerto entierre a sus muertos. ¡Actúa, actúa en el vivo presente el corazón firme y Dios guiándote! Las vidas de los grandes hombres nos recuerdan que podemos sublimar las nuestras, y al partir tras de sí dejan sus huellas en las arenas del tiempo. Huellas por las que quizás otro que navegue por el solemne océano de la vida, un hermano náufrago desolado, al verlas, vuelva a recobrar la esperanza. En pie y manos a la obra, con ánimo para afrontar cualquier destino. Logrando y persistiendo, aprendiendo así a trabajar y a esperar. "
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UN POEMA DE MARCO MARTOS AL PORTUGUÉS
MARCO MARTOS·
Propercio compara a Cintia com o mar da tranquilidade
Voce vem das profundidades dos tempos,
lembras as montanhas da lua,
com sua luz ambarina da noite
distribuindo a serenidade.
Voce se move no mundo dos fatos,
levas os pergaminos, os papiros,
a todos os cantos do imperio,
voce é luz, sol, estrela, ouro,
agua do mar da tranquilidade.
SOBRE CÉSAR VALLEJO
POR MARCO MARTOS
En las primeras décadas del siglo XX en toda América Latina aparecieron movimientos literarios que eran los abanderados de una renovación, especialmente en la poesía. Los más conocidos e influyentes fueron el estridentismo en México con Maples Arce, el creacionismo en Chile que dirigía Vicente Huidobro, el ultraísmo en Argentina, capitaneado por Jorge Luis Borges, los poetas brasileños de la Semana de Arte Moderno en 1922. Y hubo en el el Perú, un poeta que él solo equivale a esos movimientos literarios: César Vallejo con su libro “Trilce”, también de 1922. En 1925 un poeta de Jauja, Clodoaldo Espinoza Bravo escribió “Vallejo hará escuela y será el vallejismo”. Y esas palabras, menos conocidas que las de Antenor Orrego, similares, fueron proféticas. Más allá de las modas, pasajeras como lo dice su propio nombre, Vallejo, con las marcas de esas modernidad que no ponía títulos a los poemas, que los numeraba, que intercalaban neologismos con arcaísmos, que incorporaba a la escritura fragmentos balbuceantes de la oralidad, logra, ya en esos años, una poesía honda, conmovedora, intensa, única que ha pasado casi cien años, durando sin marchitarse gracias al fervor de sucesivas generaciones de lectores y críticos, diseminados en todos los rincones del orbe en muchas lenguas. “Trilce” es un libro que divide en dos a la literatura española, en un antes y un después, como ocurre con “Tierra baldía” de Eliot en la lengua inglesa. Y marca el inicio de la sostenida poesía prodigiosa que escribió Vallejo hasta 1938, año de su muerte.
OFIDIO POR MARCO MARTOS He soñado con una serpiente que moraba en una gran botella, una diosa congelada, con dos cabezas y dos lenguas punzantes, tenía el cuerpo blanco que lucía sus esplendores en esos vidrios trasparentes, moteada de verde y de negro, cuerpo de aceitunas en los vinagres. Venía mucha gente y le hacía reverencias a la diosa bicéfala. Pasaban los oficiantes con bandejas que lucían cirios encendidos y aceites perfumados. Las sacerdotisas recibían los saludos y el ofidio movía sus ojos diminutos, inquietantes. En el silencio de la noche, el brujo fumó sus tabacos, mezcló en la marmita, con mano diestra, los brebajes, y la pócima llamada soga de la muerte, ayahuasca, quedó lista para satisfacer a los cófrades. De nada más me acuerdo. Cuando desperté, encontré escrito este poema. La letra era mía y los temblores de cada línea.
LA BÚSQUEDA
MARCO MARTOS
Parece que busca a una mujer
en todos los municipios de Medellín,
en Caldas, en Envigado, en Sabaneta,
sabe que aquí está la dama de sus sueños,
pero tiene rostro impreciso, entre tantas brumas.
El temor lo invade, tal vez no pueda reconocerla,
tantas bailan cumbia y tienen acento colombiano.
La tarea es inmensa, puede demorar años.
Tal vez sea una científica, bióloga, matemática,
¡Dios sabe! ¡Y nadie puede ayudarlo!
Ahora está en el Parque Berríos,rodeado
de las desconcertantes esculturas de Fernando Botero.
Aparece una muchacha delgada, de insolente belleza.
¿Será ella? ¿Será ella?
EL MILAGRO DEL GATO NEGRO POR MARCO MARTOS·
Casi habla mientras maúlla
ese gato negro que pulula
por las estancias, cuando me espía,
agazapado, en el orgánico vestíbulo,
una selva de objetos raros,
de sillas de mimbre y de plantas,
en la casa de los principios,
allá lejos, entre mamparas y lámparas.
En la boca trae hojas de eucalipto
y se desliza suavemente
por el piso de madera de cedro
y ¡oh milagro! enciende la chimenea
con sus ojos que son carbones
en la tibia noche lóbrega.
En todos los espacios se difumina
un olor a bosque, a humus de la tierra, a lavanda.
Arquea entonces el lomo oscuro y se frota
con afecto animal en mis largas piernas,
sorprendidas, muy sorprendidas y espantadas.
DESPEDIDA DE SERGUEI ESENIN LENINGRADO,HOTEL INGLATERRA, NAVIDAD DE 1925
Suena el acordeón. Parte a la fiesta.
Muchachos se deslizan entre pobos.
Campesinas preparan sus arrobos.
En las nubes la luna sube enhiesta.
Lúgubre, con su ropa bien medida,
Esenin siente música lejana
solo con la cabeza que desgana
en encontrar un verso despedida.
Sobrevivir no es importante, dice,
morir tampoco. Sangre, tinta roja,
se quedan en la cenefa que ya puebla
el opimo banquete que desdice
el triunfo de la vida que lo aloja
mientras lo roe el humo de la niebla.
CARTUJO, LOS LUNES POR MARCO MARTOS
Te pedimos que seas un cartujo,
muy moderado potro de la pampa,
tu palabra nos llueve, nunca escampa,
no hay materia ni dioses sin tu influjo.
Ser tan amigos tuyos es un lujo,
buscamos escaleras y la rampa
para llegar tan alto sin la trampa:
ganar tu voluntad con un orujo.
Te pedimos que seas lo que quieras:
prior de los monjes fuertes de cantina,
esos de pinta fina de gomina
que van a la biblioteca o a las eras.
Solo los días lunes los cartujos
mucho hablan y nos dicen sus embrujos.
CARTA MORAL A LUCILIO. ESCRIBE SÉNECA. (40 D C.)POR MARCO MARTOS
Solitario y débil
el buey viejo
quiere pasto tierno
y los hombres,
no muy diferentes,
somos alimento
diario de la muerte.
Nuestros cocineros
circulando entre los fuegos
preparan manjares para muchos
y los labriegos en Sicilia
y en África, y acaso más allá
del mar de las tinieblas, siembran
hierbas aromáticas, hortalizas y frutales
para alimentar a Roma y a las ciudades
de los cuatro confines
en cada uno de los imperios.
Cada quien defiende con los dientes
su verdad en el foro.
Con discursos y denuestos
los antagonistas se acompañan.
La mujer discute con el marido.
Ambos escuchan el eco
de dos voces y como eso no les basta,
engendran al hijo entre sollozos.
Condición del hombre es estar solo,
vivir lo breve en la incertidumbre.
En cualquier cosa que hagas,
Lucilio, pon tus ojos en la muerte.
Consérvate bueno.
EL ABISMO POR MARCO MARTOS Si caminas por las calles de Schorndorf con los cabellos mojados, corres el inmenso peligro de quedarte congelado en los principios de año, cuando celebras con tu uniforme de cosaco la llegada de la nieve en medio de la algarabía de los niños que hacen sus muñecos de hielo. Y si te descuidas un poco más y sales sin abrigo, con tus alardes, puedes terminar en una clínica respirando con un balón de oxígeno, pasando de lo sano a lo enfermo en un abrir y cerrar de ojos. Caminas hacia el abismo y el abismo te desea, eres su alimento, el más anhelado, si tú no hubieras nacido, el abismo nada fuera, existe porque lo han creado los seres humanos con su conciencia de ser lo casi perfecto y acabado. Pero el abismo te abraza mejor que una novia feliz el día de su boda. De nada te sirve protegerte, guardar tus cuidados. Cada día que pasa te vas acercando. Abajo, en lo más profundo, está Martín, el que lo ha dicho y diseñado.
EL PUENTE DE LA INFANCIA
POR MARCO MARTOS·
Hubo un puente que se lo llevó el río
en una de las avenidas del verano.
Fue el año del señor de 1894,
cuando se volvieron verdes los candentes arenales.
Ignacio Merino, el pintor famoso, en París
había acumulado muchos francos. Amenguó
su riqueza, sus grandes billetes, su oro en barras,
y mandó a hacer el puente de duro metal rojo.
Ese fue el puente de mi infancia
en el corazón del siglo XX.
Tenía bancas de metal y de madera,
y en las noches del estío despejadas,
la luna espléndida se detenía en lo alto
bendiciendo a los amantes
que iban inventando el amor eterno.
Todo era lento en ese puente, los viandantes,
que iban y venían de Tacalá a San Miguel de Piura,
el paso de las estaciones que se parecían,
los gritos de los niños inacabables,
la tempestad de la noche con sus grillos.
Todavía el Río Bar permanece calladito,
con sus luces verdes en las madrugadas.
HORMIGAS
POR MARCO MARTOS·
Las hormigas están siempre de fiesta,
todos los días, en casa de los enemigos
que las quieren matar.
Tienen hambre, mucha hambre,
y roban mantequilla, azúcar, carne,
cómo les gusta el cuerpo de los grillos,
de los negros escarabajos, de las cucarachas.
Levantan sus laberintos, sus despensas,
las cámaras para las reinas que todo lo merecen.
Nunca ceden al cansancio, ni tienen orgullo individual.
Trabajan para el hormiguero, para los zánganos
que esperan el otoño para emprender
junto con las reinas el soñado vuelo nupcial.
Las hormigas disfrutan yendo y viniendo,
las reinas se van poniendo cada día más bellas
y los machos esperan la muerte,
porque esa es su alegría, besar y acabar.
LÁNGUIDO LICOR
POR MARCO MARTOS·
Está César Vallejo Mendoza sentado en un recoveco de la biblioteca,
un lánguido licor lo acompaña, oscuro, áspera fuente del saber.
A su lado Omar Jayyam escancia los ríos de la vid. Guardan silencio los amigos
y súbito empiezan a parlotear. Los gobiernos de los emires son iguales
dice Jayyam y Vallejo replica: dudo, con Descartes dudo, es mi profesión.
Pongámonos de acuerdo en algo musita el persa: la vida pasa y luego nada queda,
absolutamente nada, ni un grano de la arena del desierto. Así es, o así
nos parece que es, admite Vallejo, pero la vida continúa y los testigos
de un tiempo preciso no la vemos. Sí, conviene Jayyam, la vida
se contiene en las esencias que duran poco, pero son eternas,
como la belleza sacrosanta de la mujer. Es verdad dice Vallejo
y se queda moviendo la cabeza, resistiéndose a dormir.
NAUSÍCAA
POR MARCO MARTOS·
Tu vienes de las arenas de Homero
y trajiste a nuestras vidas la maravilla.
Te soñé entre el agua verde y cana
y las rocas de la playa,
cuando la aurora de rosáceos dedos
empieza a iluminar la vida de los hombres,
y así permaneces en los ojos
como la llama de la esperanza
que no cede al sufrimiento
y que crece y se multiplica
en el amor de los otros.
Verte me alegra tanto
que me quedo mudo
y te bendigo y hay agua y sal
en mi cara y arena de Homero
que se mezcla en mis papeles.
MUERTE DE NÉSTOR
POR MARCO MARTOS·
Se ha ido Néstor.
No hace mucho también se fueron Leoncio y Roberto.
A los tres los recuerdo llevándonos a los churres
a correr como locos por el cauce del río seco,
al tiempo que nos decían por vez primera
el sagrado nombre de las cosas:
sapo, lagartija, chilalo, algarrobo.
Más tarde Néstor me enseñó a leer.
Inventaba para mí los más hermosos cuentos.
Por él imagino a Piura, su ciudad, mi ciudad,
viajando en alfombra voladora.
En las tardes del estío, bajo el sol de fuego,
mi rey vencía al suyo, solo porque él quería.
Fue bueno, como el padre de cualquiera.
Fue bueno. La gente lo sentía.
Y tú mi pequeñín,
mañana cuando crezcas,
ojalá pienses de mí
lo que pienso de tu abuelo.
EL CAMINO DE LA NIEVE
POR MARCO MARTOS
El camino de la nieve
El camino de la nieve ¿adónde me llevará?
Imagino una casa de madera,
un fuego moderado y una taza de café.
Pero sobre todo, me encantaría,
Nausícaa, hablar contigo
como lo hacíamos antaño
bajo el árbol de jacarandá.
Marco Martos
Poema de “El libro de animales” que, editado por Cátedra Vallejo Zuzú, la onza Te vi con tus pasos de terciopelo de onza, deslizándote silenciosa en el empedrado, yendo de grupo en grupo, levantando sonrisas entre todos los animales que no sabían que existen hembras tan finas, preciosas, delicadas, que son el extremo de la belleza en el bosque. En las ciudades es más raro ver onzas de piel moteada, y observarte, por lo tanto, sonriente entre los hombres. Pero tú hablas y tu voz es tan precisa que parece dicha por una actriz en un gran teatro. Entonces los muchachos te hacen zalemas y estallan los aplausos a tu paso. Los más audaces te entregan ramos de rosas rojas que tu amplia sonrisa agradece. Tú has nacido para traer alegría a la gente, estando en algún patio o escenario preciso, necesitas apenas hablar para llenar los silencios de la ternura que nace de tu hermosura. Quien te vio un día a fines de un verano, te sigue viendo y admirando en todas las estaciones.
LA BAHÍA DE ILO POR MARCO MARTOS
Pasaría todos los días de mi vida
contemplando la bahía de Ilo,
en el sur del Perú, descubriendo bondades.
Hay un momento intenso en la mañana:
el cielo se apelmaza con el mar en una divina cópula
y se distinguen dos azules de maravilla debajo
de una montaña de luz que alegra los corazones
y las almas de las mujeres y de los hombres.
Peregrino de tantos mundos bendigo la belleza
de estas aguas tranquilas de ribazos y oquedades.
POEMAS DE MARCO MARTOS UN POEMA DE MARCO MARTOS AL PORTUGUÉS MARCO MARTOS· Propercio compara a Cintia com o mar da tranquilidade…
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La iluminación es un despertar a lo cotidiano.Toda búsqueda de un «allí» extraordinario desvía del camino. Ha de producirse un salto al «aquí» ordinario: «¿Para qué la búsqueda? En ningún tiempo se echó de menos el buey» La mirada, en lugar de andar vagando por otras partes, ha de profundizarse en la inmanencia: Tenemos que mirar con atención al lugar donde ponemos nuestros pies, y no hemos de perdernos en la lejanía. Pues, en cualquier lugar donde vamos y nos paramos, en verdad el buey está ya siempre bajo nuestros pies. En el kôan diecinueve del Mumonkan leemos: Jôshû (Zhaozhou) preguntó una vez a Nansen (Nanquan): ¿Cuál es el camino? Nansen dijo: «El espíritu cotidiano es el camino». Jôshû preguntó de nuevo: «¿Hay que virar hacia él o no?». Nansen dijo: «Quien vira de propia hacia él, se aparta de él». El corazón no ha de aspirar a nada, tampoco a Buda. La aspiración no acierta el camino. La extraña exigencia de Linji, el maestro zen que exhorta a matar a Buda, apunta a ese espíritu cotidiano. Hay que despejar el corazón, hay que liberarlo también de lo «sagrado». Ir sin intención es por sí mismo el camino. El día se logra en este tiempo singular «sin cuidado». Una vez dijo el maestro: «Hoy estamos en el día once desde el comienzo del día de ejercitación del verano. ¿Habéis encontrado un camino? ¿Qué decís?». En lugar de los mudos oyentes dijo el maestro Yunmen: «mañana es el día doce». «Día tras día es buen día», y es ahí donde se despierta para el espíritu cotidiano. El día logrado es el «profundo» día cotidiano, que descansa en sí. Se trata de ver lo inusitado en la repetición de lo acostumbrado, de lo «más antiguo». Satori desemboca en una singular repetición. El tiempo de la repetición, como tiempo sin cuidado (preocupación), promete un «buen tiempo». El canto para el antes citado kôan del Mumonkan va acompañado de la letra: Cien flores en primavera, en otoño la luna, un viento más frío en verano, nieve en invierno. Si nada inútil al espíritu se adhiere, seguro que para los hombres es un buen tiempo.
Byung Chul Han
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16 de febrero
Ezequiel 1-5 Reina-Valera 1960 (RVR1960)
1 Aconteció en el año treinta, en el mes cuarto, a los cinco días del mes, que estando yo en medio de los cautivos junto al río Quebar, los cielos se abrieron, y vi visiones de Dios.
2 En el quinto año de la deportación del rey Joaquín, a los cinco días del mes,
3 vino palabra de Jehová al sacerdote Ezequiel hijo de Buzi, en la tierra de los caldeos, junto al río Quebar; vino allí sobre él la mano de Jehová.
4 Y miré, y he aquí venía del norte un viento tempestuoso, y una gran nube, con un fuego envolvente, y alrededor de él un resplandor, y en medio del fuego algo que parecía como bronce refulgente,
5 y en medio de ella la figura de cuatro seres vivientes. Y esta era su apariencia: había en ellos semejanza de hombre.
6 Cada uno tenía cuatro caras y cuatro alas.
7 Y los pies de ellos eran derechos, y la planta de sus pies como planta de pie de becerro; y centelleaban a manera de bronce muy bruñido.
8 Debajo de sus alas, a sus cuatro lados, tenían manos de hombre; y sus caras y sus alas por los cuatro lados.
9 Con las alas se juntaban el uno al otro. No se volvían cuando andaban, sino que cada uno caminaba derecho hacia adelante.
10 Y el aspecto de sus caras era cara de hombre, y cara de león al lado derecho de los cuatro, y cara de buey a la izquierda en los cuatro; asimismo había en los cuatro cara de águila.
11 Así eran sus caras. Y tenían sus alas extendidas por encima, cada uno dos, las cuales se juntaban; y las otras dos cubrían sus cuerpos.
12 Y cada uno caminaba derecho hacia adelante; hacia donde el espíritu les movía que anduviesen, andaban; y cuando andaban, no se volvían.
13 Cuanto a la semejanza de los seres vivientes, su aspecto era como de carbones de fuego encendidos, como visión de hachones encendidos que andaba entre los seres vivientes; y el fuego resplandecía, y del fuego salían relámpagos.
14 Y los seres vivientes corrían y volvían a semejanza de relámpagos.
15 Mientras yo miraba los seres vivientes, he aquí una rueda sobre la tierra junto a los seres vivientes, a los cuatro lados.
16 El aspecto de las ruedas y su obra era semejante al color del crisólito. Y las cuatro tenían una misma semejanza; su apariencia y su obra eran como rueda en medio de rueda.
17 Cuando andaban, se movían hacia sus cuatro costados; no se volvían cuando andaban.
18 Y sus aros eran altos y espantosos, y llenos de ojos alrededor en las cuatro.
19 Y cuando los seres vivientes andaban, las ruedas andaban junto a ellos; y cuando los seres vivientes se levantaban de la tierra, las ruedas se levantaban.
20 Hacia donde el espíritu les movía que anduviesen, andaban; hacia donde les movía el espíritu que anduviesen, las ruedas también se levantaban tras ellos; porque el espíritu de los seres vivientes estaba en las ruedas.
21 Cuando ellos andaban, andaban ellas, y cuando ellos se paraban, se paraban ellas; asimismo cuando se levantaban de la tierra, las ruedas se levantaban tras ellos; porque el espíritu de los seres vivientes estaba en las ruedas.
22 Y sobre las cabezas de los seres vivientes aparecía una expansión a manera de cristal maravilloso, extendido encima sobre sus cabezas.
23 Y debajo de la expansión las alas de ellos estaban derechas, extendiéndose la una hacia la otra; y cada uno tenía dos alas que cubrían su cuerpo.
24 Y oí el sonido de sus alas cuando andaban, como sonido de muchas aguas,como la voz del Omnipotente, como ruido de muchedumbre, como el ruido de un ejército. Cuando se paraban, bajaban sus alas.
25 Y cuando se paraban y bajaban sus alas, se oía una voz de arriba de la expansión que había sobre sus cabezas.
26 Y sobre la expansión que había sobre sus cabezas se veía la figura de un trono que parecía de piedra de zafiro; y sobre la figura del trono había una semejanza que parecía de hombre sentado sobre él.
27 Y vi apariencia como de bronce refulgente, como apariencia de fuego dentro de ella en derredor, desde el aspecto de sus lomos para arriba; y desde sus lomos para abajo, vi que parecía como fuego, y que tenía resplandor alrededor.
28 Como parece el arco iris que está en las nubes el día que llueve, así era el parecer del resplandor alrededor.
Esta fue la visión de la semejanza de la gloria de Jehová. Y cuando yo la vi, me postré sobre mi rostro, y oí la voz de uno que hablaba.
2 Me dijo: Hijo de hombre, ponte sobre tus pies, y hablaré contigo.
2 Y luego que me habló, entró el Espíritu en mí y me afirmó sobre mis pies, y oí al que me hablaba.
3 Y me dijo: Hijo de hombre, yo te envío a los hijos de Israel, a gentes rebeldes que se rebelaron contra mí; ellos y sus padres se han rebelado contra mí hasta este mismo día.
4 Yo, pues, te envío a hijos de duro rostro y de empedernido corazón; y les dirás: Así ha dicho Jehová el Señor.
5 Acaso ellos escuchen; pero si no escucharen, porque son una casa rebelde, siempre conocerán que hubo profeta entre ellos.
6 Y tú, hijo de hombre, no les temas, ni tengas miedo de sus palabras, aunque te hallas entre zarzas y espinos, y moras con escorpiones; no tengas miedo de sus palabras, ni temas delante de ellos, porque son casa rebelde.
7 Les hablarás, pues, mis palabras, escuchen o dejen de escuchar; porque son muy rebeldes.
8 Mas tú, hijo de hombre, oye lo que yo te hablo; no seas rebelde como la casa rebelde; abre tu boca, y come lo que yo te doy.
9 Y miré, y he aquí una mano extendida hacia mí, y en ella había un rollo de libro.
10 Y lo extendió delante de mí, y estaba escrito por delante y por detrás; y había escritas en él endechas y lamentaciones y ayes.
3 Me dijo: Hijo de hombre, come lo que hallas; come este rollo, y ve y habla a la casa de Israel.
2 Y abrí mi boca, y me hizo comer aquel rollo.
3 Y me dijo: Hijo de hombre, alimenta tu vientre, y llena tus entrañas de este rollo que yo te doy. Y lo comí, y fue en mi boca dulce como miel.
4 Luego me dijo: Hijo de hombre, ve y entra a la casa de Israel, y habla a ellos con mis palabras.
5 Porque no eres enviado a pueblo de habla profunda ni de lengua difícil, sino a la casa de Israel.
6 No a muchos pueblos de habla profunda ni de lengua difícil, cuyas palabras no entiendas; y si a ellos te enviara, ellos te oyeran.
7 Mas la casa de Israel no te querrá oír, porque no me quiere oír a mí; porque toda la casa de Israel es dura de frente y obstinada de corazón.
8 He aquí yo he hecho tu rostro fuerte contra los rostros de ellos, y tu frente fuerte contra sus frentes.
9 Como diamante, más fuerte que pedernal he hecho tu frente; no los temas, ni tengas miedo delante de ellos, porque son casa rebelde.
10 Y me dijo: Hijo de hombre, toma en tu corazón todas mis palabras que yo te hablaré, y oye con tus oídos.
11 Y ve y entra a los cautivos, a los hijos de tu pueblo, y háblales y diles: Así ha dicho Jehová el Señor; escuchen, o dejen de escuchar.
12 Y me levantó el Espíritu, y oí detrás de mí una voz de gran estruendo, que decía: Bendita sea la gloria de Jehová desde su lugar.
13 Oí también el sonido de las alas de los seres vivientes que se juntaban la una con la otra, y el sonido de las ruedas delante de ellos, y sonido de gran estruendo.
14 Me levantó, pues, el Espíritu, y me tomó; y fui en amargura, en la indignación de mi espíritu, pero la mano de Jehová era fuerte sobre mí.
15 Y vine a los cautivos en Tel-abib, que moraban junto al río Quebar, y me senté donde ellos estaban sentados, y allí permanecí siete días atónito entre ellos.
16 Y aconteció que al cabo de los siete días vino a mí palabra de Jehová, diciendo:
17 Hijo de hombre, yo te he puesto por atalaya a la casa de Israel; oirás, pues, tú la palabra de mi boca, y los amonestarás de mi parte.
18 Cuando yo dijere al impío: De cierto morirás; y tú no le amonestares ni le hablares, para que el impío sea apercibido de su mal camino a fin de que viva, el impío morirá por su maldad, pero su sangre demandaré de tu mano.
19 Pero si tú amonestares al impío, y él no se convirtiere de su impiedad y de su mal camino, él morirá por su maldad, pero tú habrás librado tu alma.
20 Si el justo se apartare de su justicia e hiciere maldad, y pusiere yo tropiezo delante de él, él morirá, porque tú no le amonestaste; en su pecado morirá, y sus justicias que había hecho no vendrán en memoria; pero su sangre demandaré de tu mano.
21 Pero si al justo amonestares para que no peque, y no pecare, de cierto vivirá, porque fue amonestado; y tú habrás librado tu alma.
22 Vino allí la mano de Jehová sobre mí, y me dijo: Levántate, y sal al campo, y allí hablaré contigo.
23 Y me levanté y salí al campo; y he aquí que allí estaba la gloria de Jehová, como la gloria que había visto junto al río Quebar; y me postré sobre mi rostro.
24 Entonces entró el Espíritu en mí y me afirmó sobre mis pies, y me habló, y me dijo: Entra, y enciérrate dentro de tu casa.
25 Y tú, oh hijo de hombre, he aquí que pondrán sobre ti cuerdas, y con ellas te ligarán, y no saldrás entre ellos.
26 Y haré que se pegue tu lengua a tu paladar, y estarás mudo, y no serás a ellos varón que reprende; porque son casa rebelde.
27 Mas cuando yo te hubiere hablado, abriré tu boca, y les dirás: Así ha dicho Jehová el Señor: El que oye, oiga; y el que no quiera oír, no oiga; porque casa rebelde son.
4 Tú, hijo de hombre, tómate un adobe, y ponlo delante de ti, y diseña sobre él la ciudad de Jerusalén.
2 Y pondrás contra ella sitio, y edificarás contra ella fortaleza, y sacarás contra ella baluarte, y pondrás delante de ella campamento, y colocarás contra ella arietes alrededor.
3 Tómate también una plancha de hierro, y ponla en lugar de muro de hierro entre ti y la ciudad; afirmarás luego tu rostro contra ella, y será en lugar de cerco, y la sitiarás. Es señal a la casa de Israel.
4 Y tú te acostarás sobre tu lado izquierdo y pondrás sobre él la maldad de la casa de Israel. El número de los días que duermas sobre él, llevarás sobre ti la maldad de ellos.
5 Yo te he dado los años de su maldad por el número de los días, trescientos noventa días; y así llevarás tú la maldad de la casa de Israel.
6 Cumplidos éstos, te acostarás sobre tu lado derecho segunda vez, y llevarás la maldad de la casa de Judá cuarenta días; día por año, día por año te lo he dado.
7 Al asedio de Jerusalén afirmarás tu rostro, y descubierto tu brazo, profetizarás contra ella.
8 Y he aquí he puesto sobre ti ataduras, y no te volverás de un lado a otro, hasta que hayas cumplido los días de tu asedio.
9 Y tú toma para ti trigo, cebada, habas, lentejas, millo y avena, y ponlos en una vasija, y hazte pan de ellos el número de los días que te acuestes sobre tu lado; trescientos noventa días comerás de él.
10 La comida que comerás será de peso de veinte siclos al día; de tiempo en tiempo la comerás.
11 Y beberás el agua por medida, la sexta parte de un hin; de tiempo en tiempo la beberás.
12 Y comerás pan de cebada cocido debajo de la ceniza; y lo cocerás a vista de ellos al fuego de excremento humano.
13 Y dijo Jehová: Así comerán los hijos de Israel su pan inmundo, entre las naciones a donde los arrojaré yo.
14 Y dije: !!Ah, Señor Jehová! he aquí que mi alma no es inmunda, ni nunca desde mi juventud hasta este tiempo comí cosa mortecina ni despedazada, ni nunca en mi boca entró carne inmunda.
15 Y me respondió: He aquí te permito usar estiércol de bueyes en lugar de excremento humano para cocer tu pan.
16 Me dijo luego: Hijo de hombre, he aquí quebrantaré el sustento del pan en Jerusalén; y comerán el pan por peso y con angustia, y beberán el agua por medida y con espanto,
17 para que al faltarles el pan y el agua, se miren unos a otros con espanto, y se consuman en su maldad.
5 Y tú, hijo de hombre, tómate un cuchillo agudo, toma una navaja de barbero, y hazla pasar sobre tu cabeza y tu barba; toma después una balanza de pesar y divide los cabellos.
2 Una tercera parte quemarás a fuego en medio de la ciudad, cuando se cumplan los días del asedio; y tomarás una tercera parte y la cortarás con espada alrededor de la ciudad; y una tercera parte esparcirás al viento, y yo desenvainaré espada en pos de ellos.
3 Tomarás también de allí unos pocos en número, y los atarás en la falda de tu manto.
4 Y tomarás otra vez de ellos, y los echarás en medio del fuego, y en el fuego los quemarás; de allí saldrá el fuego a toda la casa de Israel.
5 Así ha dicho Jehová el Señor: Esta es Jerusalén; la puse en medio de las naciones y de las tierras alrededor de ella.
6 Y ella cambió mis decretos y mis ordenanzas en impiedad más que las naciones, y más que las tierras que están alrededor de ella; porque desecharon mis decretos y mis mandamientos, y no anduvieron en ellos.
7 Por tanto, así ha dicho Jehová: ¿Por haberos multiplicado más que las naciones que están alrededor de vosotros, no habéis andado en mis mandamientos, ni habéis guardado mis leyes? Ni aun según las leyes de las naciones que están alrededor de vosotros habéis andado.
8 Así, pues, ha dicho Jehová el Señor: He aquí yo estoy contra ti; sí, yo, y haré juicios en medio de ti ante los ojos de las naciones.
9 Y haré en ti lo que nunca hice, ni jamás haré cosa semejante, a causa de todas tus abominaciones.
10 Por eso los padres comerán a los hijos en medio de ti, y los hijos comerán a sus padres; y haré en ti juicios, y esparciré a todos los vientos todo lo que quedare de ti.
11 Por tanto, vivo yo, dice Jehová el Señor, ciertamente por haber profanado mi santuario con todas tus abominaciones, te quebrantaré yo también; mi ojo no perdonará, ni tampoco tendré yo misericordia.
12 Una tercera parte de ti morirá de pestilencia y será consumida de hambre en medio de ti; y una tercera parte caerá a espada alrededor de ti; y una tercera parte esparciré a todos los vientos, y tras ellos desenvainaré espada.
13 Y se cumplirá mi furor y saciaré en ellos mi enojo, y tomaré satisfacción; y sabrán que yo Jehová he hablado en mi celo, cuando cumpla en ellos mi enojo.
14 Y te convertiré en soledad y en oprobio entre las naciones que están alrededor de ti, a los ojos de todo transeúnte.
15 Y serás oprobio y escarnio y escarmiento y espanto a las naciones que están alrededor de ti, cuando yo haga en ti juicios con furor e indignación, y en reprensiones de ira. Yo Jehová he hablado.
16 Cuando arroje yo sobre ellos las perniciosas saetas del hambre, que serán para destrucción, las cuales enviaré para destruiros, entonces aumentaré el hambre sobre vosotros, y quebrantaré entre vosotros el sustento del pan.
17 Enviaré, pues, sobre vosotros hambre, y bestias feroces que te destruyan; y pestilencia y sangre pasarán por en medio de ti, y enviaré sobre ti espada. Yo Jehová he hablado.
Reina-Valera 1960
(RVR1960)
Versión Reina-Valera 1960 © Sociedades Bíblicas en América Latina, 1960. Renovado © Sociedades Bíblicas Unidas, 1988.
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