#basta de miedo estoy harta

[neswina]

Promt: 01 - “It’s not too late, let’s go.” / "No es demasiado tarde, vamos"

Fandom: Safir

Ship: AtFer (Ateş Gülsoy / Feraye Yilmaz)

Audiencia: T

TW: acoso.

El vestido

El bullicio de la universidad era casi insoportable, había gente por todas partes subiendo y bajando por las escaleras y corriendo por los pasillos. Se notaba electricidad en el ambiente, ya que pronto serían los exámenes y tocaría entregar los trabajos que habían encargado los profesores y el alumnado estaba de los nervios. Bueno, algunos más nerviosos que otros.

—Chicas no puedo aceptarlo, es nuestro trabajo de fin de trimestre. ¿Y si le pasa algo? —Feraye miraba el vestido con admiración. —Mira, chica, te lo mereces. ¡Te vas a casar! No va a pasar nada. —Hazal era todo optimismo, era la primera vez en mucho tiempo que veía a su mejor amiga sonreír con ganas. —Eso, además nos van a quedar unas fotos y unos videos impresionantes para el dossier del trabajo. Que mejor modelo que tú. —Sevda se tiró al cuello de Feraye y la abrazó fuerte—. Eres la novia más guapa de toda Capadocia y vas a ser super feliz. Que fuerte que te casas con Ateş Gülsoy. Pensábamos que te casarías con Ya… —la muchacha se calló de golpe cuando Hazal le atravesó con la mirada—. Nada, no he dicho nada. ¡Que te casas! —Además la culpa en todo caso es de la profesora: ¡a quién se le ocurre poner en el primer trimestre que entreguemos un vestido de novia! —Damla como siempre frivolizando la situación, aunque ahora sea por echar un capote a Sevda.

Las chicas siguieron intentando convencer a Feraye de que sería una buena idea usar en su boda el vestido que habían hecho durante semanas. Era un vestido muy sencillo de color blanco roto con pequeñas piezas de pedrería que al andar lanzarán pequeños destellos, una gran espalda abierta y con un escote en pico, discreto, en la parte delantera, rematado con unos tirantes finos. Era elegante, pero no ostentoso, era un vestido de novia simple sin más pretensiones que elevar la belleza de quien lo llevase.

—No se hable más. —Hazal dobló el vestido con cuidado y lo metió en una bolsa discreta—. Cuando llegues a casa acuérdate de sacarlo y darle con la plancha de vapor. No creo que se arrugue porque es una tela a prueba de bombas. —Vale, está bien. Lo acepto como regalo de bodas. Uno que hay que devolver.

Feraye estaba en una nube, hasta Damla, que había sido un grano en el culo, está contenta de que se vaya a casar y está comprometida con el trabajo en grupo. Daba gusto un poco de paz y felicidad entre tanta desgracia. Los estudios iban bien y pronto se casaría con Ateş y podrían salir de allí para poder criar a su hijo en paz, lejos del ruido y de la violencia.

Salieron juntas de la universidad sin percatarse de que alguien las estaba siguiendo. Llegado a un punto las chicas se separaron y Feraye siguió su camino en solitario.

Quedaban quinientos metros para llegar a su casa cuando Feraye fue abordada en el camino.

—Feraye, espera, habla conmigo. —Yaman, estoy harta de decirte que no hay nada que hablar. Que se acabó. Tú estás casado con Aleyna y yo me voy a casar con Ateş —Ateş, Ateş… ¡Estoy harto de ese nombre! Tú eres mía, como yo soy tuyo. —Yaman se acercó a su “amada” e intentó abrazarla, pero esta se zafó y al hacerlo se cayeron las bolsas que llevaba en las manos y el chico se fijó en el vestido y lo cogió con rabia—. ¿Qué es esto, Feraye? ¿Qué? —Yaman, devuélvemelo. Es un regalo de las chicas y es importante. —¡Este es el vestido con el que te vas a casar con él! ¿Con esta mierda de vestido te vas a presentar ante él el día de vuestra boda? ¿Con este vestido me vas a matar? —Yaman, basta, devuélveme el vestido, por favor. —Feraye estaba frenética, ya no por lo que le decía su ex, sino porque tenía miedo por el vestido, era su nota final de trimestre. Si no había vestido no habría nota y suspendería todo el equipo y eso no podía permitirlo—. Ya basta. Dámelo. —No, estoy harto Feraye, recuérdalo solo te casarás conmigo, solo serás feliz conmigo. Nos pertenecemos el uno al otro. —Mientras hablaba iba desgarrando el vestido con rabia. —No. Yaman, no. Se acabó. Acabas de clavar el último clavo en el ataúd de nuestro amor.

Feraye sujetaba los trozos del vestido con impotencia. Habían trabajado duro en él, tenía muchas horas de trabajo, de discusiones, de tés junto a las chicas. En ese vestido estaban las esperanzas de sus amigas y se había hecho pedazos como sus sueños y la imagen que tenía de Yaman en su corazón. Se escuchó el ruido de un coche acercándose y Yaman optó por irse de allí dejando sola a Feraye con su tristeza.

Era el coche de Ateş, volvía a casa después de tener un par de reuniones en la ciudad. Cuando vio en el suelo a Feraye no lo pensó, frenó el coche y bajó rápidamente a ayudar a la chica.

—Feraye, ¿estás bien? —era la frase favorita de Ateş cuando hablaba con ella— ¿Qué ha pasado? —Esto ha pasado… Me ha destrozado el vestido de novia. —Exhibió la tela rasgada ante el estupor del chico—. Le dije que no lo hiciera, que era importante, que era nuestro trabajo de fin de trimestre. —La muchacha no dejaba de llorar—. Estoy muy cansada Ateş, mucho. —Pero ¿quién ha sido? —Ateş tenía su sospecha, así que preguntó— ¿Ha sido el padre del bebé? —Sí. Ha sido él.

Feraye volvió a llorar y esta vez se refugió en los brazos de Ateş, a quien se le suavizó el rostro al notar el abrazo de la chica y sentir que por fin se estaba abriendo a él.

—Ven, coge tus cosas. Vamos a dar un paseo para que te dé el aire y te calmes un poco, no podemos dejar que tu familia te vea así y te acribille a preguntas. Vamos. —Sí, será lo mejor. Gracias.

Le acompañó hasta el coche, mientras Feraye montaba en el sitio del copiloto, Ateş guardaba las bolsas en el maletero y una idea empezó a bullir en su cabeza. Algo que quizá hiciera feliz a Feraye. Cuando terminó se encaminó al puesto de piloto y se la llevó de vuelta a la ciudad para dar un paseo y tomar algo.

Una vez en el café Ateş no pudo evitar hacerle una de las preguntas que le rondaban en la cabeza desde hace tiempo, más o menos desde la pedida de mano.

—Feraye, sabes que no me gusta la mentira, pero entiendo que se mienta para proteger algo querido o para no hacer daño. Tranquila, no es un reproche ni una reprimenda. Hay veces que nos vemos obligados a mentir para no herir… O más bien creemos que haremos menos daño con la mentira que con la verdad. Y créeme, la verdad es mucho mejor que la mentira. —Lo sé, pero no sé a dónde quieres llegar. —Te voy a hacer una pregunta y quiero una respuesta sincera. Te prometo que no me enfadaré, ni seré brusco. Y pase lo que pase seguiré queriendo casarme contigo porque te lo prometí. —Vale. ¿Qué quieres saber? —Feraye agarró fuerte su taza de té para coger fuerzas. —¿Es Yaman el padre de tu hijo? —¿Cómo? ¿Qué? —Si o no. —Ateş sonreía amable. No había ni una pizca de enfado, o resentimiento, ni siquiera una sombra de duda. Solo había amabilidad y entendimiento. —… —Feraye cogió aire y lo soltó—. Sí. —¿Cuánto tiempo estuvisteis juntos? —Muchos años. Creí que era el amor de mi vida, hasta que se cansó y se casó con Aleyna mientras estaba conmigo. —Y en todo este tiempo… ¿Nunca te llevó con él a la casa? —No. Nunca nos dejamos ver en público, ni mis amigos de la universidad lo sabían. Solo las chicas y porque necesitábamos a alguien que nos sirviera como excusa si nos ausentábamos. Pero nadie más. Yaman se encargó de eso. Incluso nuestras citas siempre eran fuera de la ciudad. —Feraye sonaba triste y dolida, como si acabase de comprender algo trágico. —¿Sigues queriendo ocultar a Yaman que es el padre de la criatura? —Sí. No quiero que tenga nada que ver con nosotros. No desde lo que me ha hecho pasar estos días… —Feraye se tapó la boca, no quería crear un conflicto más entre los hermanos. —Me parecía que Yaman se comportaba raro últimamente, pero no imaginaba que se dedicara a fastidiarte la existencia. —Una sombra de oscuridad pasó por sus ojos, fue una fracción de segundo, pero Feraye la vio. —¿Cuándo te diste cuenta? —El día de la pedida de mano, cuando te dio el anillo. Ese anillo, —señaló al ostentoso anillo de zafiros que llevaba la chica en su mano—, que debería estar en la mano de su mujer, empecé a sospechar. Luego en la noche de henna, fue más que evidente. Y alguna que otra cosa rara que ha pasado últimamente que no tiene importancia comentarlas ahora. —Ah, s��. La noche de henna... —Feraye movió la cabeza espantando el recuerdo y habló con calma—. La verdad es que no quiero este anillo, me pesa como una losa. —Se lo quitó y lo dejo encima de la mesa—. Solo me recuerda lo mal que lo he pasado. —No te preocupes. —Cogió el anillo y se lo guardó en el bolsillo interior de la chaqueta—. Te regalaré un anillo que solo te traiga alegría y te recuerde cosas buenas. —Le dedicó una sonrisa cálida a su prometida. —No hace falta, de verdad. Tenemos las alianzas que nos trajo tu abuelo. —Tonterías, te mereces algo que sea nuestro. Algo que represente nuestro pacto y un futuro mejor. —Ateş cogió una de las manos de la chica y la sostuvo entre las suyas con cariño—. Nos lo merecemos. —Vale, está bien. Me rindo —Por primera vez, Feraye, sonrió desde que llegaron. —¿Estás mejor? —Sí… Pero ¿Qué le digo a mis amigas? ¿Qué hago con el vestido? —Feraye volvió a hundirse en la miseria al darse cuenta de que tenía un gran problema. —No te preocupes. Se me ha ocurrido una idea que puede que lo solucione. —Ateş, la boda es en dos días. —Te prometo que tendrás tu vestido, el mismo vestido, incluso si queréis con mejoras. —¿Cómo vamos a hacer eso? —Avisa a tus amigas, te voy a pasar una ubicación. Diles que nos reunimos allí de forma urgente y os lo explico a todas cuando nos juntemos. —Ateş… Es imposible. —No es demasiado tarde, vamos.

Feraye siguió a Ateş sin mucho convencimiento de que fueran a solucionar nada en tan poco tiempo. Pero no sabía lo equivocada que estaba. Cuando llegaron al destino, Feraye no pudo creer lo que veía: estaban en el taller de la fábrica textil Gülsoy.

Ateş paró a Feraye antes de que hablara, porque ya la conocía y sabía que iba a protestar y decir que no podían usar el taller, que no era justo. Él la paró diciendo que lo que era injusto era que por culpa de Yaman ella y sus amigas fuesen a suspender. Sus amigas que ya estaban allí esperando le dieron la razón al chico y entre todas se conjuraron para rehacer el vestido en tan poco tiempo.

Pasaron casi 48 horas en aquel taller surtido de telas, máquinas de coser eficientes, cuentas y cintas de encaje. Fue duro, Ateş pasaba por allí de vez en cuando para surtir de comida a las chicas y decirles que tenían que descansar que tampoco había que matarse y siempre contestaban lo mismo: ya descansarían el día después de la boda.

Yamán de vez en cuando llamaba a todas las chicas que estaban en ese taller y ninguna le cogía el teléfono, incluida Feraye.

En la segunda noche, Ateş estaba cenando con la familia y al terminar Yaman se le acercó.

—No he visto a tu prometida estos días. —Lo de disimular se le da: mal. —Está ocupada con los preparativos de la boda, es normal que no la veas. —¿No te reúnes con ella? ¿No sabes dónde está? —Yaman parecía disfrutar con la idea de que Feraye hubiera desaparecido y fuese a dejar tirado a su hermano en el altar. —Yaman, preocúpate de tu esposa. —Le miró con una sonrisa de oreja a oreja—. Que yo ya hago lo propio con mi futura esposa y madre de nuestros hijos.

Se fue, dejando a Yaman rabiando, a ver como estaban las chicas y azuzarlas para que se fueran a casa a descansar. Cuando llegó solo se encontró con Feraye.

—¿Dónde está el resto? Creo que he traído comida de más. —El vestido ya está terminado, solo quedaba rematar una cosa y las convencí para que me dejaran hacerlo sola. —Veo que habéis hecho añadidos. —Sí, le hemos puesto una capa de tul con piedritas para que dé un toque de hada. Vimos la tela y no nos pudimos resistir. —Vas a estar perfecta con ese vestido. Es magnífico. —Eso espero. Mañana es el gran día. —Serás mi mujer por derecho y me harás padre. Me hace feliz la idea.—¿Querrás a mi hijo como si fuera tuyo? —¿Acaso no fui yo criado por un hombre que no fue mi padre biológico? Y le quise como si fuera mi padre. Lo mismo haré yo con esa criatura.

Feraye sintió calor en su corazón, por primera vez sentía que tendría un futuro para su vástago y un poco de tranquilidad para ella. Por lo menos hasta que acabe la luna de miel, luego habría que volver a enfrentarse a la realidad de la familia Gülsoy.

—Feraye, antes de que se me olvide, quería darte algo. —Ateş sacó una cajita de joyería, la abrió y dentro había un sencillo anillo que representaba una flor de lis azul con una piedra blanca en el centro—. Te prometí un anillo mejor para un futuro mejor.

—Ateş… Es precioso. Me gusta mucho, gracias.

Ateş puso el anillo donde correspondía y se fundieron en un abrazo.

[malhedonista2803]

3er día de detox

Hoy me siento perdido entre tantos motivos para dejar de vivir. Siento que hay una ruleta de opciones haciendo el mismo marketing que la feria de universidades en 5to de secundaria. Tantas opciones, hartas salidas laborales, ingreso por tercio medio y descuento en la primera boleta si te matriculas hoy mismo.

Me tientan todas pero sé que ya escogí una opción que no me gusta, o mejor dicho, la única que soporto. Vivir, al igual que la ciencia política, son cosas que escojo porque creo, probablemente estando equivocado, que es lo único que podría sobrellevar estudiando.

Mi tendencia a equivocarme rara vez me falla, es muy probable que pueda vivir de forma decente con cualquier otra carrera de mierda, que no sea esta cagada que de vez en cuando trato de defender. Lo más irónico es que si me hubiera ido bien en mi exposición de mierda ahora estaría hablando de mill maravillas de mi tesis y los evangélicos de mierda que solo soporto. Todo lo demás ya no lo puedo tolerar más.

Se me pasó por la cabeza la idea de fumar, da igual porque no traje nada y me alegro no haberlo hecho. Me da miedo pensar que puedo terminar como antu, a pesar de que igual a ella le debo llegar al re pincho no creo seguro me extraña y sigue pensando en mí. De verdad en todo este mes o no sé cuánto mierda ha pasado desde que dejé de hablar con ella no ha habido un solo día en el que la piense o extrañe, me da tan igual su vida y lo que pasó entre los dos. Me da tanto igual. Yo también me doy igual.

El hijo de perra de mi costado está que escucha cumbia en unos audífonos clara y escandalosamente mejores que los mios, aunque igual son unos que no me compraría ni aunque me pateen 7 venecos en el piso de un bar de mala muerte en barranco a la 4 de la mañana en medio de un brote psicótico colectivo provocado por la mala calidad de un sobre de tusi que circuló toda la madrugada.

Realmente solo quiero desahogarme. Me siento tan perdido en este momento. Ni el gimnasio me puede salvar. Me alegro de no tener ni un moño de weed cerca porque ya estaría armando un bate del tamaño de la jeta de jimmy neutrón. Si no fuera porque dejé la payasada en mi jato, aparte me daría suma flojera armarlo.

Tengo mucha flojera pero tengo cosas que hacer. Tengo que entregar 3 finales mañana. Uno que ni he comenzado, otro que dejé por la mitad y uno último que mi cerebro recién procesó que debo rendir por la mañana.

Que ridículo soy de verdad si tuviera el más mínimo valor no egoísta para quitarme la vida y acabar de una vez con todo este asqueroso sufrimiento innecesario no pensaría un segundo en acabar con este miserable cuerpo lleno de errores y desesperanza. Siento que no estoy ni acabado ni mucho menos en el éxito pero ese limbo que me hace nada me hace sentir mucho peor. Por lo menos los demás tienen objetivos claros, si estás entre la espada y la pared, a dónde mierda vas?

Sé lo que tengo que hacer pero la motivación me deja carcomido en el piso rogando por una muestra mínima de afecto y consideración. Me estoy muriendo poco a poco y no siempre estoy consciente de eso.

Ya basta, tenemos que hacer nuestros exámenes.

[leria-19]

Aveces grito por ser escuchada por sentirme plena, por ya no tener estos momentos efímeros de felicidad disfrazada de reprimiento y soledad.

Estoy harta de no tener la voluntad de cambiar, ser consciente de todo lo que pasa a mi alrededor y no poder decir basta ya, siento mucho tan intensamente que me sofoca un simple pensamiento, que ya no se que pensar,hacer, decir, me sofoco, me inundo, me consumo, me muero lentamente.

Tengo miedo, tengo tristeza, ya no se que hacer.

[esallaum1995]

Y hoy me pregunté. Cómo estás? Tal vez tú estás mucho mejor que yo... Tal vez estás bien con esa por quién me cambiaste, a quien tú elegiste por sobre mi sin importarte una mierda mis sentimientos, sin importarte que yo te amaba y estaba enamorada de ti.

Y yo... Yo qué? Estoy aquí, estoy tan sola, tan rota, tan vacía. No tengo a nadie en mi vida, nadie a quien ame tanto, como te ame a tí. Y sabes una cosa? Cada día me doy más cuenta que todos son iguales, todos son una mierda como tú lo fuiste, cada vez me queda más claro que ya no existe el amor, ya no existe el amor sincero, puro e inocente, cada vez se marchita más el romanticismo, cada vez todo se vuelve tan solo sexo.

Será que tal vez ya nadie sabe querer bonito, puede ser que ya nadie hace algo por ti por ayudarte sino hay algo más detrás...

Estoy harta de esa mierda! De las palabras bonitas que solo significan tener sexo, de las buenas intenciones que solo esconden la basura que las personas son realmente. Ya basta de toda esa mierda, estoy tan harta de todo, estoy cansada de siempre tropezar con gente estúpida.

Me harta el hecho que todos solo quieran tener mi cuerpo y no mi corazón!

Díganme si les importa tener mi corazón? Porqué hacen ver qué una cara bonita, solo les sirve como un objeto el cual pueden tomar y tirar cuando se les da la maldita gana.

Que hay de lo que yo siento? Que pasa con lo que yo quiero? No importa cierto... Porqué siempre su maldito ego está por encima de todo lo demás, porque importa más tenerme y sentir placer a lo que yo sienta... Cierto?

A caso se han preguntado cuál es mi color favorito? Que comida me gusta? Cuáles son mis sueños, mis miedos, o tal vez me han invitado a salir? Y no al lugar que eligieron sino dónde yo quiero. Te preguntaste tal vez, cuál es mi canción favorita y que cosas me apasionan?

Así de mierda es. Y justo por esa razón no quiero darle mi corazón a nadie, nadie lo tendrá, no en un largo tiempo. Hasta que yo decida abrirme de nuevo al mundo, porque ahora le huyo a la gente y la evitó en todo sentido, porqué me di cuenta que así me evitó malos ratos.

Porque gracias a ti no me quedaron ganas de querer a nadie!!

_Esallaum. 📝🖤✨

Para: Jw27.

[ourhorizonsmeet]

Me dedicaste esa canción que decía que si uno se iba, volvería porque el destino sabe bien que es lo correcto Pero en nuestra primera conversación Nos emocionamos al coincidir en que ninguno de los dos creía en la suerte ni el destino.

Estoy tan cansada de esta persecución. No entiendo si es un castigo, si es mi karma cuánto dura un karma? La vida entera? Muchas vidas? Por qué siento que yo he sufrido más que tú? Mi lado correcto diría: no voy a escribir eso. No está bien desear el sufrimiento. No sé si eso es lo que te deseo, creo que sólo deseo saber que eres igual de humano que yo porque a veces pienso que no. Y no le estoy hablando a un fantasma de ti la verdad, porque sé que esa versión es una que inventé en mi cabeza, le pregunto al tú real, al que ya no involucra sentimientos. ¿Esto fue real? ¿Por qué se sintió tan intenso, pero arriesgado en el mal sentido? ¿Por qué tú podías ser tan sincero y yo no? Con mi amor siempre fui sincera, en lo que respecta a la palabra y la obsesión y todo eso, pero creo que no en sí. ¿Por qué no puedes dejar de perseguirme y dejarme en paz? Lo peor es que no eres tú, es el fantasma y no me malinterpretes, tengo un amor profundo por los fantasmas, pero este no deja de atormentarme y quiero que se vaya. Por favor, ya no más. Ya no más canciones de Ed Sheeran, ya no más esquinas con nuestras siluetas, ya no más recuerdos de aprendizajes, de conversaciones, ya no más casas ni historias ni nada de lo que sé que me confiaste y que me acuerdo con tan enferma exactitud. Ni de tu número puedo deshacerme. Estoy harta. Quiero vivir tranquila y borrar todo eso y dejar de preguntame si he tomado las decisiones correctas porque no quiero equivocarme, quiero ser feliz en mi relación sana, quiero amar sin ataduras, sin miedo. Entonces, si esto lo leyera alguien creería que es porque sigo enamorada, pero no es eso. Y sí, siento la necesidad de aclararlo: esto es mi desahogo a no poder saltar por tener miedo a equivocarme. Sólo quiero llorar y abrazarlo a él y decirle que soy toda suya con propiedad y continuar agradeciéndole como lo he hecho porque él me da una relación sana y ha hecho que me conozca y también lamentablemente que me cuestione demasiado y que me juzgue mucho a mi misma, pero ha hecho que aprenda lo que es tener confianza plena en alguien y no sentir ansiedad constante, pero a veces tengo tanto miedo de hacerle daño como lo hice contigo, tengo tanto miedo de hacerme daño a mí, tengo miedo de que un día se termine y verlo en todas las esquinas, en todos los lugares donde hemos sido felices. Pensar constantemente en el departamento en el que vivimos, pensar en las conversaciones, en sus sueños, pensar en sus alegrías, sus miedos, pensar en todo lo que no me dijo y me habría gustado que me dijera, pensar en su pelo, en su cara, en su voz. Me da miedo añorarlo, me da miedo equivocarme, extrañarlo, me da miedo pasar por otro corazón roto y siento que si fuese con él, simplemente no podría porque es mi lugar seguro y tengo miedo. Todas esas cosas no son exactamente las que recuerdo o añoro de ti, pero sí las que creo que extrañaría de él y ya basta. Tu fantasma y su capa que arrastra y cubre todo, son los que me recuerdan que hay cosas que podrían perseguirme y eso es lo que hace que no pueda entregarme del todo y ser vulnerable.

Y me siguen apareciendo estos recuerdos del daño que hice, del que me hicieron, de las experiencias. No sé cómo explicarlo: no es enamoramiento, es miedo, es querer soltar todo eso que fui, así como extraño mi casa, así como sufro por ella, por mi pieza, por mi educación, por mis amistades, esto es una cosa más que necesito dejar ir para ser yo. Por favor suéltame.

¿Qué voy a hacer si paso todos estos años con él y un día decide que ya no me quiere? ¿O yo decido que ya no quiero estar con él? O simplemente nos queremos, pero nos damos cuenta de que ya no funcionamos? Creo que independiente de lo insoportable que ha sido tener que cargar contigo, definitivamente dentro de todo me he acostumbrado me he acostumbrado a tener que cargarte en mi espalda y aceptar que estás ahí, pero si fuese él, creo que me destruiría y tengo miedo de que lo haga porque ha sido una experiencia distinta. Y es gracioso (no lo es realmente) porque con él el día a día es tranquilo, fuera de las discusiones de rutina y los problemas al iniciar, es tranquilo. No es ansioso, es natural, a diferencia de como era contigo, obviamente no todo fue malo, pero… no era… esto. Y eso es lo gracioso -que no lo es-, cómo algo que ahora mismo es tan tranquilo y natural, podría volverse mi tortura?

No quiero y eso es lo que me hace huir, cierto? Por eso al mínimo problema quiero escapar porque no me creo capaz. Y él me toma y me explica, suavemente, hasta que dejo de rechazar su tacto. Se acerca cual rescatista que alimenta a un animal temeroso y termino confiando en él hasta que me calmo. Es como que sintiera la lluvia caer y caer y caer haciéndome doler y eventualmente se calma, pero no de inmediato, de a poco. Las gotas cesan como si se recogiesen en reversa y de repente hay silencio y estoy bien. No quiero ser dependiente, no quiero que me contenga, pero sí quiero, sí quiero todo. Y ser buena, y ser suficiente, y ser valorada y que sienta que no puede estar tampoco sin mí, pero de una manera sana, no obsesiva, si no que de verdad me necesite en su vida así como lo veo yo. Pero no quiero. Sí quiero? Sí, si quiero, pero sin el costo. Y amar a alguien es asumir el costo de perderlo y que sea suficiente lo que uno vivió, pero cómo lo hago si esos recuerdos no se tocan y yo soy de piel? -cuando quiero, claro-. Vuelvo a suponer que es más fácil vivir con tu fantasma que con el de él, pero aún así quiero que tu fantasma se vaya, para olvidar lo mucho que cuesta, para olvidarme, olvidarme de todo. Olvidar que eso pasa, olvidar que hay una persecución, y así, si me arriesgo y salto, no voy a vivir con ese miedo constante y si algún día pasa, entonces lo voy a volver a recordar, pero es algo que voy a aceptar en ese momento, pero no algo con lo que tuve que cargar todos estos años, no algo que me va a prohibir disfrutar ahora.

Borrarme la memoria y así empezar de nuevo y si hay un fantasma que me tenga que acompañar, que sea él. O ninguno, pero si tiene que ser uno, que sea él. Supongo que eso quiero decir? Olvidarme de que eso existe para asumir el costo de que amarlo será perderlo y está bien.

[pasitoschingones]

No lo hay

Cómo se construye una confianza en alguien que miente, en alguien que no sabe como tratar, en alguien que no sabe comunicarse y en alguien que no sabe decir con asertividad las cosas, quizas la confianza no exista, quizas lo que existe ahora es un apego ansioso de su parte y también un interes.

Suelo cansarme de desconfiar y esto viene desde mi papá, pero más de mis parejas, creo que nunca he podido confir ciegamente en alguien, pareciera que nunca soy suficiente para alguien, que nunca parece que conmigo basta y ya.

Creo que me he cerrado al amor, a conocer a gente por miedo a que suceda una vez más lo mismo, me siento cansada, me siento harta, me siento decepcionada, la gente quiere tener lo que no estoy dispuesta a dar, quiere que estemos siempre juntos pero no estan dispuestas a dar lo que sigue, me canse, en serio me canse mucho, ya no quiero seguir, quiero alejarme, porque no tengo algo firme.

Estoy cayendo y tocando fondo, no te quiero cerca de mi, de mi energia, de lo que soy, se feliz, de verdad pero a mi dejame seguir mi camino, me estas enfermando cada día más.

No vengas con un discurso de amor, cuando se que no lo hay, seguro el reemplazo estará pero yo ya no quiero eso para mi, de verdad le pido a dios con todas las fuerzas, salir de esto ya!

[depressed-for-no-reason]

Miedo. Miedo. Miedo. Tanto tanto miedo. Tanto que no me a dejado vivir esta vida.

[l4nd-sc4p3]

AY YA CHUPENLA TODOS VENT RE ENOJADO AQUI CON MENCIONES A ALGUIEN PORQUE ESTOY HARTO

WN ENSERIO BASTA QLIAO OBSESIONADO CONMIGO, LITERAL Z CADA PUTO BLOG EN EL QUE LLEGO A MANDAR UN ASK, TU VIENES DE LAS PUTAS NADAS Y MANDAS TAMBIEN UN ASK, ES QUE WN YA HARTAS TE LO JURO HASTA EN BLOGS QUE NUNCA EN TU VIDA INTERACTUASTE LO HACES AHORA QUE YO LO HAGO NO? CUAL ES TU PUTO FIN CON ESTO WN ENSERIO SOLO POR TERMINAR UNA MIERDA DE AMISTAD Y SACARTE EN CARA TODAS LAS ACTITUDES REPULSIVAS QUE TUVISTE? NO TE BASTO CON DEJARME COMO LA MIERDA EN ESE ENTONCES? NO TE BASTO CON HABLAR MAL DE MI A MIS ESPALDAS CON GENTE QUE SABIAS QUE LES CAIA MAL? CON TRATAR DE DEJARME A MI COMO EL MALO SIENDO QUE FUISTE TU QUIEN HABLABA PURA MIERDA DE MIS AMIGOS Y SEGUIAS HABLANDO CON ELLOS COMO SI NADA? ES QUE ERI UN CTM ENFERMO, RENCOROSO Y VENGATIVO WN, ME DAS ASCO ENSERIO Z SI LLEGAS A VER ESTO QUE CREO QUE ES LO MAS PROBABLE, DEJA DE PUTAS ACOSAR A UN CABRO DE 14 AÑOS Y HAS ALGO CON TU VIDA MIERDA, MADURA DE UNA VES WN DEJATE DE SER TAN INMADURO Y MADURA TENI COMO 16 AÑOS WN DALE, DEJA DE CREERTE EL CUENTO DE VICTIMA WN LITERALMENTE CREES QUE TU VERDAD ES LA ABSOLUTA PORQUE LO DICES TU SOLAMENTE, NO ME IMPORTA LO QUE LA GENTE DIGA PORQUE SE QUE YO NO TENGO LA CULPA DE QUE HAYAS SIDO TAN TOXICO Y MANIPULADOR QLIAO, EN 2020 TENIA MIEDO DE DEJARTE PORQUE TE IBAS A SUICIDAR, TU YO DE 2020 Y EL DE DICIEMBRE DE 2021 ERAN LOS MISMOS WN NO MADURASTE EN NADA, QUERIAS ARREGLAR LAS COSAS CON ALISON CUANDO TU ERAI EL QUE MAS ODIO LE TENIA Y MAS PLANES DE PUTA VENGANZA TENIAS, PARA QUE JUSTO DESPUES VINIERAS DICIENDO QUE TE TACHE DE TOXICO POR UNA RAZON QUE NO FUE? WN ENSERIO BASTA CON ESTE SHOW WN, NO CREERE QUE CAMBIASTE HASTA QUE TE DISCULPES CONMIGO Y LA GENTE QUE DAÑASTE, Y HABLO DE UNA DISCULPA DESCENTE PORQUE NI CAGANDO PIENSO PERDONARTE CON UN “AY DISCULPA, AMIGOS?” PORQUE WN LO QUE HICISTE ME DEJO MAL, Y LO QUE HACES AHORA ES PEOR

DEJA DE ACOSAR A UN CABRO DE 14 POR LA MIERDA

[twistedanderangedd]

No hay peor frustración que perder lo que no se tiene,

no hay peor sensación por sentirse tan estúpido por todo lo que no puedes hacer, en serio me doy cuenta de todo y por eso duele más, me doy cuenta en mi pecho, lo siento como dolor y no hay palabras, no entiendo porqué no basta, porqué nunca es suficiente, mi tiempo aún no es, estoy harta de ver a todos tenerlo... no te das cuenta? Mi miedo es más grande, siempre lo ha sido, de verdad no soy una persona egoísta, solo pido tantito, de verdad no pido mucho, es más, ya no lo pido. Estoy muy cansada de llorar porque nunca puedo ser yo y siempre tengo que pensar en que los demás sean felices.

Estoy aquí en el mismo lugar de siempre, la misma cama, la misma yo, siempre yo.

[hell-ha-hachi]

El Monstruo...

"Todos tenemos un monstruo, aveces es chiquito,Tan chiquito que nunca sale por mas que intente, aveces es grande,Tan gigante que cuando sale las personas se asustan .Pero no hay nada que temer, Suelen ser calmados y amigables..."

Dijo mi madre sentada a mi lado en la cama, solia tener ataques fuertes de panico cuando las luces se apagaban y cerraba los ojos,Pues siempre que pasaba ese monstruo empezaba a desgarrar la jaula en la que lo escondia, nunca supe el porque, pero siempre tuve miedo de el.

"Pero...¿y si no es amigable...?"

[...]

No debi hacer esto Era lo unico que pasaba en mi cabeza, pude ver como aquella masa terrorifica se mesia lentamente hacía mi otra vez, iba a sacar sus garras de nuevo, mi cuerpo estaba temblando en el suelo, tenía tiempo que no me sentía así, mis piernas y manos temblando, mi nudo en la garganta que crecía cada segundo, mis vellos erizados, y mis ojos abiertos con puro terror reflejados en ellos.

Miedo Era lo que corría por mis venas mientras que el charco de sangre que habia en el suelo seguia su camino de expandirse, La persona habia dejado de moverse desde hace horas pero la sangre seguia ahí, me movi lo mas lento que pude mientras que mis ojos no dejaban de ver a la horrible criatura qué se acercaba aun mas a mí.

"¡Basta! ¡Ya no quiero seguir con esto!"

Grité lo más que pude mientras que logre quitar el nudo de mi garganta, el sudor corria por mi frente mientras que la criatura para su caminata hacía mi, me levanto aun temblando y tomando el cuchillo qué estaba a mí lado, haciendo que la criatura se ponga alerta,pero yo ya estaba harta.

Harta de tener miedo

Harta de siempre hacer lo mismo

Harta de cuidar este monstruo

Harta de qué todo salga mal

Con el cuchillo en mis manos temblorosas corrí hacia la masa casi cayendo al suelo por la sangre, pero ya nada importaba... Debia terminar con todo lo qué provoque; Al clavar el cuchillo en la carne del monstruo una y otra vez mientras que gritaba furiosa, pero sentí una fuerte punzada y cai al suelo desmayada.

[...]

Despierto de golpe en el suelo viendo el cuchillo en mi mano derecha, no sentia mi brazo izquierdo, me levanto como puedo caminando hacía la puerta de la habitación, Mi cuerpo aun temblaba, y me acerco a la puerta tomando el picaporte con mi mano, pero de la nada escucho algo apoyarse en mi hombro y una voz lentamente me susurro.

"Yo te seguire siempre... despues de todo estoy dentro de ti..."

Mis lagrimas solo calleron al suelo mientras que miro mi brazo lleno de apuñaladas tomando el picaporte y la sangre manchando todo mi cuerpo.

¡Hola! Disculpen si la historia es muy predecible, estoy intentando mejorar.

Espero que les gustara!!

[invampirehellorheaven]

Espectáculo

Palabras: 2.371

En medio del calabozo se encontraba la joven castaña limpiando una celda. Procedía a llenar de agua el trapero para pasarlo sobre el suelo manchado de sangre. Esto se trataba de un castigo por haber llegado tarde a la limusina a la hora de regresar a la escuela. No había opuesto demasiada resistencia, comparado a la vez que quedó encadenada en la sala de torturas esto no era más que una simple labor doméstica. Aunque incluso si decía eso era difícil no preocuparse por las manchas de sangre seca que se encontraban en el piso.  

--¿Serán de ella? ¿O aún más viejas?

La joven ciertamente recordaba haber estado encerrada en aquel calabozo durante una noche, pero durante esa ocasión no se vio torturada por ninguno de los hermanos. Sin embargo era incapaz de recordar si en ese entonces ya se encontraba manchado debido a que no había mucha luz en ese momento.

Tras haberse adentrado aún más para limpiar mejor empezó a escuchar unos pasos aproximándose. ¿Sería Reiji bajando a comprobar si en verdad estaba haciendo su trabajo? No, aquella idea se desvaneció cuando empezó a escuchar las voces de los dueños de aquellas pisadas.

--Suéltame Laito-kun, ¿qué es lo que quieres?

--Solo vamos a jugar un rato bitch-chan, no te preocupes.

La joven solo se estremeció un poco al escuchar esas voces, pero nada más. Si aquella joven de cabellos rubios era mordida o maltratada por los vampiros era algo que no debía incumbirle. Respiró hondo e intentó solo pensar en limpiar, nada más… Pero la realidad no fue tan amable como para alejar aquellas voces de ella.

--¿Eh? Vaya, parece que encontré a Cenicienta, nfu~

--¿I-chan?

Al ver como aquellos dos entraban al calabozo la joven solo procedió a soltar un suspiro mientras apartaba la mirada de la rubia. Decidió dirigir su mirada solo hacia Laito.

--¿Para qué viniste hasta este lugar? La sala de torturas está en otra parte.

--Que cruel, ¿acaso me estás sugiriendo que lleve a bitch-chan a un lugar tan horrible?  ¿No será que en realidad eres una de las hermanastras malvadas?

La joven solo suspiró con pereza, los comentarios de Laito no eran lo importante en este momento. Dirigió su mirada lentamente hacia la joven Yui Komori, quien no podía librarse del aparentemente amistoso agarre del castaño juguetón. Pedirle que huyera de un vampiro como él era una estupidez, especialmente en este subsuelo que resulta similar a un laberinto cuando no lo conoces a la perfección.

--Lo que sea que vayas a hacer… ¿Puedes hacerlo en otro lado? Lamentablemente estoy ocupada aquí.

Pudo notar como la mirada de Yui dejaba de enfocarse en ella para dirigirse al suelo con desilusión. Pero era una reacción esperable, ya que incluso si tiene a alguien de su misma especie, eso no significa que vaya a ser salvada. Al fin y al cabo en esta casa ella solo es una presa. I solo se dio la vuelta para seguir trapeando las manchas de sangre.

--No, no necesitas preocuparte por eso.

Las palabras del castaño la confundieron, justo cuando estuvo a punto de darse la vuelta para intentar descifrar el significado de las palabras escuchó como la puerta se cerraba. Se apresuró a ir hacia la puerta, dejando caer la cubeta y el trapero, pero ya era demasiado tarde, para cuando sus manos se habían apoyado en la puerta su mirada chocó con los verdes ojos del trillizo menor, quien cerraba con llave el calabozo.

--¡¿Laito-kun?! ¿Qué es lo que estás haciendo?

La joven rubia también quedó anonadada ante los actos del depredador de la habitación.

--No entiendo por qué están tan alarmadas. Tú misma lo habías dicho, ¿o no I-chan? Que esa persona te envió a vigilar que no se nos pasara la mano con bitch-chan.

--¿Acaso…?

--Sí, sí, te seguiré el juego y tú serás nuestra adorable espectadora.

--Eso es ridículo, Laito-kun saca a I-chan de allí ahora mismo.

La joven intentó alcanzar la llave de la mano del castaño, pero esta la esquivaba.

--No se puede, si lo haces entonces estaríamos desobedeciendo las órdenes de esa persona.

--¡Dudo mucho que esto entre en esos parámetros!

--¿De verdad?

--¿Cómo se supone que te detendría estando aquí?

--¿Detenerme? ¿Podrías haberlo hecho estando libre?

La joven guardó silencio. Es cierto que incluso estando fuera de la jaula sería incapaz de separar a Laito de Yui. Es más, ya se había rendido antes de ser encerrada.

--Lo de hoy será una prueba, cuando acabe me dices si crees que me pasé con bitch-chan o no. Ah, pero no te preocupes bitch-chan, no pienso ser tan bruto como para matarte.

--Eso no es el problema aquí, date prisa y—

Antes de que pudiera seguir hablando sus labios fueron sellados con un beso francés. La pobre humana intentaba apartar con todas sus fuerzas al vampiro, pero sus muñecas rápidamente se vieron inmovilizadas por él hasta acorralarla contra una de las paredes. Lentamente movía las manos de la joven hasta colocarlas por sobre su cabeza y posicionaba una de sus piernas entre medio de las de la rubia. Todo esto en frente de la humana castaña.

Tras despegar sus labios de los de Yui y limpiar con su lengua la saliva que brotaba de la cansada boca de la joven miró pícaramente a la joven castaña que al notar esa mirada apartó su vista lo más rápido posible de aquella escena que había pasado rápidamente frente a sus ojos.

--Desconozco que tipo de imagen te habrá dado esta joven ayer cuando la conociste, pero lo mejor es que conozcas su lasciva personalidad lo más pronto posible.

La rubia solo podía tomar fuertes bocanadas de aire para recuperar el oxígeno que hasta hace unos segundos le había sido privado. Era incapaz de mirar a la castaña que se encontraba enjaulada en frente de ella.

Incapaz de ver, I solo volvió a adentrarse al calabozo para recoger la cubeta con el agua ya derramada y el trapero. Aquella agua sucia se había extendido por el suelo, cruzando más allá de la celda y aún no había empezado a secarse. No iba a poder distraerse limpiando, pero volteada contra la pared al menos se evitaría presenciar el desagradable espectáculo que se desarrollaba en aquel escenario.

Al ver aquel adorable intento de escape de la realidad por parte de la menor el vampiro de la fedora continuó con su acto, esta vez dirigiéndose al cuello de la rubia para morder con suficientes fuerzas para que esta soltara un alarido de dolor. Aquel grito era suficiente para provocar un severo escalofrío en el cuerpo de la joven enjaulada.

Notando que aquel grito no fue suficiente estímulo procedió a derribar a su pareja contra el suelo mojado. El choque contra el frío y húmedo suelo hizo que Yui soltara un quejido y fuera incapaz de reaccionar. Rápidamente removió los listones del uniforme de la rubia para empezar a repartir besos en su clavícula.

--¡Detente Laito-kun! ¡¡Ya basta!!

Una cosa son los constantes ataques que sufre por parte de los seis hermanos. El constante miedo a ser encontrada en lugares públicos en un estado deplorable por culpa del sadismo de los Sakamaki. Pero en estos momentos se encontraba siendo atormentada y humillada en frente de una joven humana con la que se le había dado la oportunidad de vivir por un año. La sola idea de la imagen que se quedaría en la memoria de la menor era algo insoportable.

--¿Detenerme? ¿Es así como me pides más? Pero es normal, con besos no basta, ¿verdad? Tranquilízate bitch-chan, los amados colmillos de tu Laito-kun ya te atravesarán cuanto desees.

Acto seguido sus colmillos perforaron su pecho. La sangre que fluía de las heridas empezaba a teñir levemente los bordes de la ropa de rojo. La joven hacía su mejor esfuerzo por esta vez contener su voz, pero no podía evitar que se le escapara uno que otro quejido de dolor.

La joven castaña ya había procedido a taparse los oídos. No quería escuchar, no quería mirar, pero incluso sin voltearse era capaz de saber lo que estaba ocurriendo tras de sí, debido a que ella ya había vivido ese dolor en sus propias carnes. Se forzaba a sí misma en apartar la mirada, pero esos esfuerzos fueron inútiles cuando escuchó un estruendo contra la reja del calabozo, obligándola a voltear y observar el cuerpo de Yui estampado contra esta. Acto seguido observó como Laito amarraba las delgadas muñecas de la rubia sobre su cabeza y alrededor de uno de los barrotes, utilizando el listón que antes se encontraba amarrado en el cuello de su uniforme.

--Así está mejor, de este modo podremos divertirnos un poco más, nfu.

--Ya suéltame Laito-kun… Mi conciencia ya no. Ngh…

La joven se estremeció al sentir como el castaño masajeaba sus piernas. Seguido por su fría lengua que empezó a recorrer una de ellas hasta llegar al muslo en donde clavó sus colmillos, provocando que otra vez alzara un leve grito.

--¿Lo reconoces I-chan? El momento en el que se termina alzando una voz en donde ya no distingues el dolor del placer.

La joven no respondió. Solo hubo un silencio mientras apartaba la mirada y se cubría sus oídos.

--Oh, pero tú nunca gritabas. Aunque a cambio tu cuerpo era muy sincero. Al igual que el de bitch-chan, incluso teniendo que estar humedecidos están tan calientes.

Tras decir eso besó la oreja de Yui quien no pudo evitar soltar un leve gemido. Tras eso volvió a sentir la fría respiración del vampiro junto a las gélidas manos que levantaban sus muslos, sosteniéndolos suavemente mientras él perforaba la piel de su cuello. Incluso si hubiera estado en su estado más cuerdo le habría sido incapaz de contener su voz.

Ya harta la joven se dio la vuelta y se dirigió hacia los barrotes en donde la rubia tenía sus manos amarradas. Cuando estaba empezando a tirar de la tela sintió como su muñeca derecha fue agarrada con brusquedad.

--Eres una chica mala I-chan, no debes interrumpir el show cuando apenas vamos por la mitad.

Tras eso sacó unas esposas que traía en su bolsillo y la encadenó a la reja.

--Bien, ahora podrás ver perfectamente desde allí arriba, ¿no?

Desde abajo observó con sus orbes escarlata a la castaña que se encontraba de pie, inmóvil y ahora obligada a tener que observar como la joven que le habían encargado vigilar tenía sus mejillas rojas en contra de su voluntad y se encontraba cada vez más débil.

--N-no mires I-chan…

La pobre Yui se encontraba al borde del llanto. ¿Por qué tenía que ser vista en este estado? ¿Por qué la relación de amistad que pudo haber formado tenía que empezar de esta forma? No lo sabía, no entendía por qué tenía que estar en ese lugar o vivir todo esto. Si era una prueba de Dios, ¿entonces hasta cuando tendría que resistir? Mientras su mente divagaba en eso sentía como el vampiro castaño le retiraba los zapatos y las calcetas.

--¿Eh? Estas mordidas en los tobillos, ¿acaso las hizo Subaru-kun?

Sin querer la joven castaña terminó reaccionando y por más que intentara desviar la mirada ahora había caído presa del juego de Laito. Terminó divisando perfectamente el momento en que los colmillos del castaño se superponían a las marcas que había dejado aquel que antiguamente la poseía a ella como presa. Sin querer terminó imaginando a Subaru mordiendo a Yui y tras eso cada vez que Laito divisaba una herida provocada por sus hermanos y la mencionaba se imaginaba al hermano correspondiente mordiendo a la pobre e indefensa joven frente a ella. El pecho mordido por Shu, el cuello mordido por Reiji, los dedos saboreados por Kanato y la clavícula desgarrada por Ayatp. Progresivamente Yui se estaba quedando sin fuerzas para siquiera gritar.

--Ya fue suficiente… Suéltanos de una vez, ella ya está que se desmaya y ya te divertiste.

--Hablas como si hubiera sido solo yo, no mientas cuando estuviste observando atentamente.

--Eso es porque no—

--No dirás que no tenías otra opción, ¿verdad? Podías perfectamente cerrar tus ojos. Admite que disfrutaste del espectáculo.

--¡Kgh…!

La joven era incapaz de negarlo. Sí, lo había visto todo, ¿por qué lo vio? ¿Para qué lo vio? Hasta ahora las acciones de Laito le habían dado completamente igual, ¿entonces por qué ahora la está molestando? Entonces recordó que le daba igual que fuera ella la que salía lastimada, pero en estos momentos el cuerpo torturado y lleno de heridas le pertenecía a Yui.

--Bueno, si quieres negarlo entonces hazlo. Pero al menos tendrás que aceptar que la puta frente a ti ha gozado cada instante.

--No tergiverses la realidad a tu antojo…

--No lo estoy haciendo, estás observando desde arriba, puedes ver perfectamente el rostro de placer con el que se ha desmayado bitch-chan.

La joven al dar una mirada la apartó rápidamente y cerró los ojos. Era un estado deplorable. Un cuerpo cubierto de sangre y aun así unas mejillas completamente teñidas de rojo con una boca que se esforzaba por recuperar oxígeno.

--Bueno, supongo que este espectáculo ha llegado a su fin.

El vampiro procedió a abrir las esposas de la castaña y seguidamente a abrir la puerta, que al abrirla arrastró el cuerpo inmóvil de la joven rubia, al que la castaña se dirigió apresuradamente para desamarrar mientras observaba a Laito dirigiré a la puerta.

--¿No vas a llevarla a su habitación?

--Puedes pedírselo a Reiji, estoy seguro de que llegará en un rato a ver si terminaste de limpiar. Ah, pero dudo que esté muy complacido con este escenario. Nos vemos.

Tras ver como el vampiro se marchaba la joven solo procedió a quitarse el negro polerón que llevaba encima y cubrir a Yui con este. No tenía fuerzas suficientes para cargarla y lo único que tenía a mano era un pañuelo desechable con el que limpió un poco el rastro de sangre que quedó en su cuello.

--Lo siento…

[g-h-o-s-t-h-e-a-r-t-h06]

México alzó la voz. Estoy orgullosa de las mujeres de mi país. Duele saber que hace falta la revolución para hacer florecer la libertad. Valemos tanto hoy se alza la voz mañana nuestro silencio se marcará en el país...Por todas aquellas que no regresarán a sus casas, que jamás volverán y que jamás podrán gritar por justicia porque desde la tumba no se grita. Mucha gente de mi país se pone en contra de que dañen monumentos y cosas del patrimonio cultural del país pero yo les pregunto ¿Es justo que un objeto del país sea mas protegido que las mujeres en si? Cuantas veces hemos callada por miedo, por sumisión porque nos han quitado todo, a cuantas no han tocado, violado, acosado solo por como visten o por el buen cuerpo que tienen. Hemos normalizado tanto el machismo, el acoso y últimamente los asesinatos y atentados. Así que no nos pidan que ahora permanezcamos en silencio, no nos pidan que no incendiemos las calles, que no nos expresemos. Porque nos han quitado todo, todo incluso el miedo. Ya basta. Me uno a la revolución porque merezco vivir sin miedo a que abusen de mi, a no volver a casa, a no poder salir sin miedo a que me violen o golpeen. Estoy cansada de esas miradas que te acosan, de esas pequeñas frases "estas bien buena". Me uno porque estoy harta de callar y decir que esta bien que te peguen, que te humillen, que te sobajen solo por ser mujer. Nací mujer y no dejaré que eso me condene a muerte. Quiero gritar libertad y callar para que mi ausencia se note, por igualdad, por solidaridad, por empatía. Antes mujeres lucharon por tener los derechos que tenemos hoy , por ellas también me sumo, por las familias a quienes les falta una de nosotras, por las desaparecidas, por las golpeadas, por quienes abusaron sexualmente, por mis futuras hijas que vivan sin miedo por ser mujeres, por mi novia, por mi mamá, por mi abuela, mis tías,por todas aquellas que se sienten pequeñas cuando son lo más grande del mundo. Por las que se sienten que no importan cuando el mundo no sería el mismo si una faltara y hoy que cada día perdemos a 10 de nosotras. Hoy y lo que resta de la lucha apoyaré. Hoy no se felicita mujeres, porque debemos ser apreciadas todo el año,porque importamos y valemos lo mismo que un hombre. Por la igualdad. Hoy se lucha por libertad...

[kgmb]

¡BASTA DE HACER VICTIMA A LOS VIOLADORES!

Necesito desahogarme y solo puedo hacerlo aquí. En contexto, vi un video en Tik tok en el cual compartía una noticia sobre una chica con Covid-19 que fue violada por el conductor de la ambulancia que la llevaba al hospital. En el mismo se muestran los comentarios de puro “onvre” diciendo lo que todo machito dice, como “eso le pasa por ir sola”, “pobre chofer”, “lo siento pero me tengo que reír”, “por eso amanecen en bolsas”, entre otros que dicen la misma mierda pero con diferentes palabras. 

¿Es enserio?

Me parece tan indígnate el hecho de que prácticamente están alabando al cabron que es un VIOLADOR, preocupándose de que se halla contagiado del virus, dejando de lado a la chica quien realmente es la VICTIMA. ¿Realmente les parece gracioso? ¿No pueden tener una pisca de solidaridad? Estoy harta de tener que convivir con personas, ¡claro! si es que se les puede llamar así, que no tienen tantito de sentido común. Me molesta y me entristece que no se hallan preocupado por la verdadera victima de esta injusticia, prefirieron burlarse de ella. Así que, una vez mas, queda claro que ni en una ambulancia estamos seguras. Y eso es lo que mas miedo da...

[ghostlyinternetlove]

Hoy sólo quiero sacarme unas cuestiones de encima.

-Es Ocho de Marzo y tenía una maraña de pensamientos haciéndome ruido en la cabeza-

Estoy enojada...

Por las veces en que se quitan el condón o te obligan a hacer cosas que no querés.

Cuando decís que no, cuando decís que te están lastimando y a propósito te lastiman más,

¿Cómo se le llama a todo eso? ¿Amor?

A alguien le dijeron “Solo cogemos cuando vos querés” y es como “???”

Sí, obviamente, ¿Por qué cogería si no quiero? ¿Estás obligada a cogerte a un maje cuantas veces quiera, a la hora que sea sólo porque tienen algún tipo de vínculo? ¿Entienden lo horrible que suena? Léanlo otra vez, “Solo cogemos cuando querés”. Se llama consentimiento, mi hermano.

¿Es que acaso somos muñecas inflables que podes OCUPAR?

No saben la cantidad de violencia simbólica que ejercen o quieren, ansían ejercer sobre nosotras, ni siquiera la entienden, son como animales.

No es de extrañar que te quieran decir groserías a la hora de coger, o pegarte, o degradarte o humillarte

¿Qué quiere decir de ustedes ese afán de demostrar superioridad, esa necesidad de violencia, de control, de poder?

Es decir, hay hombres promedio y después están los Ted Bundy y femicidas ¿Qué les diferencia?

La necesidad de demostrar lo machos que son porque en su día a día se sienten pequeños es la misma. Piénsenlo, medítenlo.

Como cuando casi me violan y el maje del que estaba enculada me dijo “Es que sos demasiado feminista, no sé porqué pensás que el mundo es como en tu cabeza”.

Como cuando mi mamá me dijo que yo sabía lo que podía pasar.

Como las veces que decía algo en clases y pasan de ello, lo desestiman, porque los incomoda y luego un hombre repite lo que dije y se lleva el crédito.

Como cuando un profesor en secundaria nos decía que si no se masturbaban pensando en nosotras no nos querían.

Cuando otro profesor de la nada me vio sentada y me bajó la media.

Como cuando los de último año te acorralaban en los pasillos.

O como cuando aquel imbécil le tocó una teta a una amiga en la subida de las escaleras después de recreo.

Como las veces que te siguen y enllavan la puerta y no sabes cómo correr de ahí.

Como la vez que me hicieron sentir culpable de que me acosaron en la iglesia el 24 de Diciembre del 2017.

Como las veces que me han dicho zorra personas que ni me conocen y bueno, hasta gente que decía quererme.

Cuando me dijeron “Bien me lo habían dicho, seguro en Managua se la cogen entre dos”

Como cuando me dijeron que soy feminista para excusarme y “poder actuar como zorra”

No. Soy feminista porque soy mujer y no tengo PORQUÉ JUSTIFICAR mi conducta ni mis acciones, porque no te debo nada. Nada.

Como la vez que mi profesor me seguía a la biblioteca, al bar central, me esperaba en los pasillos vacíos y me castigaba en clases por no corresponderle.

Como cuando casi me violan en la casa de un amigo.

Y años después, un desconocido.

Y años antes de todo eso, una cara conocida.

Y estoy harta, verdaderamente cansada de dar explicaciones y pedir permiso para hablar, por cómo hablo, por lo que hago con mi cara, con mi pelo, con mi ropa, por cómo camino, por dónde camino, por con quién camino. Harta.

¿Cuánta mierda hay que aguantar de la gente que uno quiere para que uno diga basta?

Cuántas veces te las tienen que pegar para que te vayás, cuántas veces te tiene que levantar la voz, te tiene que empujar, te tiene que revisar el celular, te tiene que hacer mala cara cuando dijiste algo que no le pareció, cuántas veces te pidió que te cambiaras, cuántas veces te dejó sola  cuando le pediste ayuda, cuando lo necesitas, cuántas veces se tiene que cagar en vos antes de un día importante en las clases o el trabajo, cuántas veces te tiene que hacer un cuadro bolo y cuántas veces más te tiene que pedir perdón también bolo para que lo dejés.

Odio la manera en que siempre somos las malas, siempre hacemos mal, si lo perdonas, si lo dejás, si sos muy de dejar pasar las cosas o si sos muy contundente. Si sos muy sensible o si sos muy cortante.

Cuando un “amigo” o conocido te acosa y es inapropiado, si le contestas con un “sobre loquito, dale pues” y sos condescendiente, después es un “ah pero ella nunca le puso un alto”, pero si lo haces y les expresas tu inconformidad y lo incomoda que te ponen la respuesta es “uy maje, no sabía que no aguantabas una broma, sos de azúcar, así trato yo a mis amigas, sos una exagerada”.

Así que sí, las mujeres recibimos mierda en todas las esferas de nuestra vida.

En el colegio, en la universidad, en el trabajo, en la casa. De parte de gente que no nos conoce, pero sabe quiénes somos, de nuestras ex parejas, de parte de las actuales, de los tales culitos que sólo quieren usarte, de la persona que amas.

Solía sentirme sola, verdaderamente sola. Las mujeres me han salvado de esa desesperante realidad.

Recuerdo cuando me vine a vivir a Managua y al final del primer cuatrimestre con mi compañera de proyecto de Reflexión Teológica, nos estábamos desahogando. Esta maje es una de las personas más inteligentes que conozco, siempre prestaba libros en la biblioteca, vive con su mamá y su hermano, su papá era un violento, se separaron, no es responsable, y después de contarle lo sola que me sentía, lo que me hacía falta llegar de clases a una casa en que alguien me estuviera esperando y con quien pudiera hablar me respondió diciéndome que las puertas de su casa siempre iban a estar abiertas para mí.

Eso es un ejemplo de lo que la solidaridad entre mujeres es y significa, es incondicional y es probablemente una de las cosas más puras que existe.

Realmente nunca he estado sola, desde que recuerdo siempre ha habido una mujer guiando mis pasos, acompañándome o recordándome lo valiente que puedo ser.

Y leyendo o escuchando mujeres haciendo arte, en cualquiera de sus expresiones siempre me ha reconfortado porque de alguna forma siempre vamos a lograr identificarnos a través de nuestras vivencias, de nuestros dolores, de nuestras luchas y de nuestras alegrías y esto último me importa enunciarlo porque es tan común y creo que no es lo suficientemente apreciado o reconocido, como nos alegramos por la otra y cómo esa alegría se vuelve nuestra y es... no sé, no les puedo describir ese sentimiento, pero sé que lo entienden.

Porque nosotras no encontramos lazos de camaradería en solapar mierda, ni en denigrar a otros, ni en creernos más. Nosotras nos encontramos como espejos a pesar de las diferencias en la resistencia. En el amor. En el llanto. En el sentir. Porque sentimos y abrazamos eso que somos.

Y es que leyendo a Emily Dickinson, a Rosario Castellanos, Pizarnik, a Storni, a Simone, A Virginia Woolf, a Maya, a Atwood, a Austen, a Sexton, a Dworkin, a Audre, a Plath, a Elena Garro, a Gabriela Mistral (el otro día estaba leyendo una recopilación de Gabo y decía algo como “De tres premios Nobel de literatura que ha obtenido América Laguna, dos fueron chilenos, Uno de ellos, Pablo Neruda, el poeta más grande de este siglo” me pegué una arrechura porque MISTRAL>NERUDA, es como Elena Garro>Octavio Paz, no sé si sabían, pero Octavio Paz, premio Nobel de Literatura, le quemaba y rompía lo que escribía a su mujer, que fue inmensa, por miedo, por complejo de inferioridad. Y le decía loca. En tanto Neruda, iba de mujer en mujer, usando y desechando, pobre Matilde y pobre su hija, Malva, también) pero bueno, volviendo al punto, leer a otras mujeres es darse cuenta de que tenemos una muchedumbre y una diversidad de voces dentro de una misma y que están ahí contenidas, que tenemos que dejarnos salir de nosotras mismas para que nuestra voz se haga una junta con todas las otras que andan por ahí, buscando encontrarse, y reconocerse.

Acuerparse.

Recuerdo leer el Diario de Ana Frank, como a los siete y llorar y llorar porque sentía que había dos Anas dentro de ella, una buena y otra... que no tanto. Esta era una niña que me doblaba la edad, pero en quien me hallaba.

«Deambulo por las habitaciones, bajando y subiendo escaleras, y me da la sensación de ser un pájaro enjaulado al que le han arrancado las alas violentamente y que en la más absoluta penumbra choca contra los barrotes de su estrecha jaula al querer volar. Oigo una voz dentro de mí que grita: ¡Sal afuera, al aire, a reír! Ya ni le contesto; me tumbo en uno de los divanes y duermo para acortar el tiempo, el silencio y también el miedo atroz, ya que es imposible matarlos»

A los siete me sentía así y hoy, a los diecinueve, igual.

Y hablando de referencias a pájaros, recuerdo “Yo sé por qué canta el pájaro enjaulado” de Maya Angelou, a quien amo profundamente. Los papas de Maya se separaron y la mandaron, a ella y a su hermano, a vivir en el Sur de Estados Unidos con su abuela y su tío lisiado, al último tenían que  esconderlo en entre las papas y las cebollas cuando el KKK hacían ronda por esos lados. A Maya la violó el novio de su mamá a los siete años, fue a juicio, ella tuvo que testificar, el hombre salió de la cárcel y lo mataron, ella sintió que sus palabras mataron a un hombre así que entró en mutismo por cinco años.

«The caged bird sings

with a fearful trill,

of things unknown,

but longed for still,

and his tune is heard

on the distant hill,

for the caged bird sings of freedom.»

 Pude hablar de que me abusaron hasta los 17, estaba en clase y el profesor hablaba de los mecanismos que tenía la universidad para denunciar el acoso, de que teníamos que acudir con pruebas y fue de esos momentos, en que es como si tu alma se separara de tu cuerpo y pudieras observarte desde afuera, que me escuché decirle a mi amigo Pedro, “pero es que no es tan sencillo, a mí me violaron a los 6 y todavía no sé cómo decirlo” pero lo estaba diciendo, y salió tan natural y fue una afirmación por primera vez.

Toda la vida desde que tenía memoria recordaba una serie de imágenes entrecortadas y me preguntaba ¿Eso es un sueño recurrente o un sueño de hace mucho tiempo que sigo recordando? Porque no quería ni contaminar mi cabeza con el pensamiento de “No, eso realmente pasó y aunque querrás enterrarlo mil metros bajo tierra va a seguir saliendo a la superficie de tus pensamientos. Y no se va a ir”.

Y no se ha ido. Pero al menos puedo enunciarlo, a mí misma, a otros. Al menos pude buscar ayuda, y vaya que les agradezco a todas las mujeres que han estado ahí para mí en todo el proceso.

Así que, un día, un amiga me llamó para preguntarme sobre el tema y mi mamá me escuchó, así que estábamos en la calle comiendo y me dijo “Vos te acordás de...”

Y casi vomito. Nunca hable porque tenía miedo y asco... y vergüenza. Pero ella sabía. Yo le dije, a los 6. Yo le dije. Y ella puso una denuncia y habló con una psicóloga. Y le pregunté si mi papá sabía y sí, también sabía. Tampoco dije nada porque sentía que lo iba a destrozar en pequeños pedacitos, porque lo recuerdo diciéndome con lágrimas en los ojos que no saludara de beso, que no estaba obligada a abrazar siquiera a alguien que no quisiera, que no confiara demasiado en los adultos, que por favor siempre le contara todo. Y cuando me decía eso, yo no sabía cómo decirle que entendía porque lo hacía y que igual, ya me había pasado.

Odio el hecho de que una vez que te abusan, quedás como enferma para el resto de tu vida. Sólo no se va, sólo no se supera, sólo se afronta de otra manera.

Odio pensar en mí como una víctima, lo detesto.

Odio pensar en ese hombre interactuando con sus sobrinos.

Odio que por años lo seguí saludando igual.

Odio que toda la vida me dijeron, no te quedés muy cerca de -, te mira de forma extraña.

Odio verlo en misa, estirando la lengua a la hora de la comunión.

Odio verlo con pareja y ella sin imaginarse quién realmente es.

Odio que he tenido el impulso de decirle a niños que no se acerquen a él, nunca.

Odio que lo sigo cubriendo y amparando con mi silencio.

Odio que ni siquiera puedo decir su nombre.

Odio que cuando pienso en eso y estoy sola siento rabia, pero puedo llorar.

Odio que cuando se me viene eso a la cabeza, pero estoy acompañada, no puedo llorar, me siento atrapada y siento como todo se encoge y las paredes y la gente me asfixian.

Odio cuando hacen chistes de violaciones porque empiezo a temblar de odio.

Odio que no se imaginan lo que me ha pasado y esperan que me ría con ellos.

Odio que nunca comprendí porqué desde niña nunca he podido dormir como una persona normal.

Odio que a veces paso horas vomitando sin poder controlarlo.

Odié cada segundo que me sentí sola en esto.

Me reconozco el hecho de que he podido sobrevivir, pero como cuesta.

Odio pensar en lo que me pasó y odio vivir a la defensiva.

Odio mirar hacia atrás cada 30 segundos.

Odio caminar con las llaves entre los dedos.

Odio a esos policías apostados afuera de los portones que me dicen asquerosidades cuando voy a comprar cigarros. Odio que a estos no les puedo sacar el dedo o decirles el asco que me dan.

Odio recordar que cuando teníamos 12 e íbamos a comprar comida frente a emergencias después de danza fueron de las primeras veces que nos acosaron y que a mis amigas les daba miedo que yo les respondiera a esos hombres.

Odio recordar el hombre en moto y con casco parqueado frente a pizza Roma que se empezó a masturbar cuando íbamos pasando después de clases.

Odio recordar al hombre en bicicleta que nos dijo que nos destrozaría la vagina a las dos cuando veníamos de correr en Fátima.

Odio recordar al maje que nos siguió desde la gasolinera de Sutiaba hasta Laborio.

Odio pensar en los dos hombres que nos siguieron desde La Asunción hasta la U de M.

Odio pensar en el maje que me siguió desde el cementerio hasta la puerta de la UCC.

Odio soñar con el hombre que casi me viola en la puerta de mi casa.

Pero también odio pensar que no sólo los desconocidos nos ultrajan, también lo han hecho conocidos, gente que creía amigos, mis novios. ¿Qué haces cuando la gente que amas no está exenta de violentarte?

Si algo me han enseñado las mujeres en mi vida es “Encontrá una voz y no la soltés nunca, es todo lo que tenés.”

Así que después de toda una vida en que me han querido tratar de prepotente, muy ruidosa, con demasiadas opiniones, demasiado exigente, demasiado demandante, de que no tengo saciedad, de que no sé conformarme, demasiado expresiva, demasiado emocional, demasiado enojada, demasiado triste, con demasiadas energías, no lo suficientemente humilde, que es mejor en ciertas ocasiones calmarse o callarse o guardarse lo que se piensa, sienta y opina. Sólo quiero decirle a todo ese ruido “No”. No te voy a dar la comodidad de mi silencio, no me van a amedrentar de esta manera con mi consentimiento nunca más. Sólo quiero decirles que su “Mujer que sabe latín, no tiene marido ni tiene buen fin” ya no significa nada para mí.

Tengo una amiguita en León que vende chicles y sueño con verla un día de uniforme, igual que a mí hermana de 10. Sueño con un mundo menos brutal para las mujeres y con un país que no las mate. Con un país donde no las obliguen a parir, donde no las obliguen a saludar de beso a su abusador, donde no las maltraten, donde todos los días tengan alguien, aunque sea una persona que las abrace y les diga que ellas pueden lograr lo que sea, que pueden ser escritoras, doctoras, abogadas, lo que sea, pero no que solo lo digan, un país que les garantice cumplir esas metas, un país que las proteja.

Porque Nicaragua es un país con nombre de mujer; pero en el que matan a sus mujeres.

Porque el año pasado hubieron 63 femicidos.

Porque en este año van 14 femicidios.

Porque por si lo olvidaban, ese 63 y ese 14, no son cifras. Son mujeres.

Son personas. Tenían una madre, tenían familia, tenían amistades, tenían sueños, tenían anhelos, tenían cosas que les dolían y cosas que las hacían felices. Como yo y como vos.

Y no se murieron porque sí. Les arrebataron el derecho a cumplir con sus sueños, les arrebataron las risas y los llantos, les arrancaron la vida.

Por último, recordar pedacitos de este poema, que es mi ancla para días como estos. Y gracias, a todas las mujeres, por existir, por ser, por levantarse todos los días y dar la lucha, en las aulas, en las calles, en los mercados, en el campo, en las oficinas, en todos lados. Mi papá siempre me ha dicho que las mujeres nacieron con temple y sí. Me lo demuestran todos los días. Gracias.

 “You may write me down in history

With your bitter, twisted lies,

You may trod me in the very dirt

But still, like dust, I'll rise.”

“Did you want to see me broken?

Bowed head and lowered eyes?

Shoulders falling down like teardrops,

Weakened by my soulful cries?”

“Just like moons and like suns,

With the certainty of tides,

Just like hopes springing high,

Still I'll rise.”

“You may shoot me with your words,

You may cut me with your eyes,

You may kill me with your hatefulness,

But still, like air, I’ll rise.”

[tropical-brain]

Estoy tan harta de este lugar.

18 y 19 de Octubre, 2019, Chile.

Vivimos en un sistema represivo al que nos condenan desde que nacemos hasta que morimos, lo disfrazan con democracia, lo endulzan con promesas falsas y lo predican con una supuesta libertad que la gente carece, porque todas esas promesas las hacen políticos, y si es político es una mentira, porque no resuelven nada, solo le ponen peluca al problema y se concentran en otra cosa. Sin embargo, me alivia un poco pensar que la gente está despertando, porque no hay punto de Santiago que no esté siendo peleado por la gente exigiendo sus derechos, la gente se cansó, se cabreó de toda la mierda y la injusticia de clases sociales que el mismo gobierno nos implantó. A la otra cara de Chile le podrá dar risa que estemos peleando por sesenta pesos, pero no es por eso que hacemos esto, es por años de estar aguantando la misma mierda en miseria mientras los grandes se llenan de lujos a costa de lo que nos quitan o impiden tener. Si, estás condenado, porque o les tienes miedo y no haces nada, o te revelas y te echan las fuerzas armadas encima, que por medio de la violencia creen que llegarán a algo. No tengo miedo, no sé por qué pero no me da miedo esto, no me intimida un paco guacho ni un séquito de militares en las calles imponiéndose hasta con tanques ¿que me van a hacer? ¿Me van a callar? ¿Me van a inmovilizar? hay ideas que sólo necesitan ser pensadas, no necesitas manos para actuar, ni necesitas dinero, porque sólo tienes las ganas y con eso basta. De hecho, me da más miedo la gente, que está furiosa allá fuera reclamando por sus derechos. La evasión está más que bien, está increíble.

[oleexa]

Nueva meta: Me dieron ganas de empezar a disfrutar un poco más de todo. Estoy probando con ser mejor persona, con hacer lo que me gusta y dar lo mejor en mis estudios. Quiero tratar de preocuparme menos porque hay un montón de cosas que me van a partir al medio y la verdad es que estoy harta del papel de débil. De ahora en más voy a sacar fuerzas de donde sea para que no me hagan sentir mal, para que ya no me afecte. Quiero ser distinta, una persona que ama lo que hace, que disfruta de las pequeñas cosas, que valora, que se supera. No necesito sumar más miedos, no quiero preocuparme por lo que digan, quiero verme alegre y sentirme así. Quiero ser lo que siempre soñé y nunca me anime, y no me importa cuantas veces me tenga que caer, cuantas veces se vayan a reír de mi  porque se que puedo llegar más lejos que ellos. Tengo potencial, siempre lo supe, solo que hasta ahora lo no he aprovechado pero ya no más. Basta de vueltas, excusas y inseguridades, ya es hora de que haga algo bueno por mi.