#Tiempos de motosierra

[adribosch-fan]

Ni pizza, ni champagne: menemismo en tiempos de motosierra 

Por Carlos Fara (*) Todo es nuevo. Los protagonistas, su rutina laboral, la fuerza política en sí, el equipo de gobierno, la coalición social electoral, la profundidad de la crisis, el shock sobre el statu quo político, la fragmentación del sistema. Por lo tanto, no se podía esperar otra cosa que muchas idas y venidas que suenen a improvisación. Todos están en el aula aprendiendo un idioma…

[yanaleese]

◈ Ámame, Secuéstrame y Quiéreme Más ◈

Yandere! OC Karma x Calculadora! Género Neutral! MC

ENGLISH VER. HERE!

Sinopsis: Pones sangre, sudor y lágrimas en tu trabajo. Lo que no sabías es que tu admiradora secreta, Marka, también lo hace.

Advertencia de contenido: Yandere y literalmente cualquier cosa que vaya con ello, violencia, hipnosis (no en el lector), drogas (implicación), y sí habrá una Parte 2.

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Puntuaciones, talentos, personas.

ÉSTOS son los factores que clasifican el sistema educativo. Aunque no es inmaculado, cumple su propósito: enviar a personas vulnerables al mundo laboral y devorarlas enteras. Sus medios de vida, su tiempo y los minúsculos retazos de energía que les quedan dentro.

Pero hay algunos que nacen con ventajas, y otros que tienen que dejarse la piel para conseguirlo.

Yo, por desgracia, tengo lo segundo. Las cosas no vienen fáciles, ni instantáneas, ni perfectas. En realidad soy bastante ocioso, disfruto de la libertad de adquirir conocimientos y perspicacia. Conocimientos únicos, probados y comprobados que son fundamentales para la supervivencia.

Y así es como gestiono mis trasnochadas. Escuchando "Consejos para sobrevivir" con su presentador, McGregory Callahan.

En los años 60, era un oficial CWO-4 Navy Seal, un rango dado a unos pocos exclusivos. Y ahora que está retirado, comparte humildemente sus consejos con la comunidad, y presenta invitados de vez en cuando para mantener vivo el programa. Pero la mayoría prefiere escuchar su voz, algo con lo que estoy totalmente de acuerdo.

"Y así, damas y caballeros…" Su voz era suave y ronca. "Es hora de despedirse, amigos. Manténganse a salvo, y recuerden siempre…"

Me reí entre dientes, diciendo sus líneas finales con él.

"Vivir, no morir, e intentar sobrevivir. Gracias a todos".

Mientras la radio se apagaba, el sol derramaba sus rayos en mi ventana, como si el calor no fuera suficiente. Gemí, y mis ojos me llevaron a mi colección de cápsulas "despertadoras". Tentado y engañado, me deslicé hasta ellas y me metí otras dos o tres en la boca.

Refunfuñé. El arrepentimiento se filtró en mis venas, mi cuerpo mareado y tenso. Una vez más, me quedé despierto.

Y por supuesto, resultó ser un lunes por la mañana; donde tenía clase por la mañana.

"Pues fóllame suavemente con una motosierra". Empecé a llenar mi mochila con mis utensilios, papeleo, bocadillos. Nunca podría acostumbrarme a esta mierda. "Espero que nadie me cabree el resto del día".

◈

"La campana. Ugh, la maldita campana. Nunca he querido romper esa cosa en pedazos". Apenas podías distinguir a la multitud, más o menos. Ni siquiera la cara de tu mejor amigo.

"Espera. ¿Has tenido una noche dura… otra vez?" Heidi miró, sus ojos prácticamente brillaban de preocupación.

"Quizzássss..." Balbuceaste, dando pasos de bebé hacia tu asiento. "Menos mal que mi compañero de asiento es un chico tranquilo".

Hablando del diablo, Marka entró en la habitación, sus pisadas silenciosas mientras paseaba en tu dirección. Su sincronización fue impecable.

"Buenos días, Marka". Murmuraste, sin encontrarte con sus ojos. Además, no había ojos gracias a su flequillo.

"Je…" En respuesta, Marka esbozó una emocionante sonrisa, devolviéndote alegremente los buenos días. Cómo podía estar lleno de energía un lunes por la mañana, era un completo misterio para ti.

En realidad, mucho de él está rodeado de misterio. O más bien, en la sospecha.

Aparte del nombre raro, Marka era supuestamente del campo de Honduras, Tegucigalpa. Sus padres también eran hondureños, y él trabajaba como repartidor de pizzas, y se alojaba en el apartamento de un amigo para refugiarse, con el propósito de volver a estudiar tres veces para obtener un título. Aunque parte de esto es cierto, otra parte no cuadraba.

Por ejemplo, sus modismos. A veces decía "Puchica" , "Chero", "Chivo" - y cuando los busqué todos, el denominador común era El Salvador. Decía que sus padres venían de Honduras, así que ¿cómo podía ser cierto?

"[S/N]".

Entonces él, siendo el repartidor de pizza. No suele pedir pizza, pero nunca pensó que la pizza pudiera oler tan mal. Podías recordarle llegando corriendo a una de tus clases de la tarde, y en vez de oler a aceite y grasa, olía a hierba. ¿Qué coño…?

"Hola? [S/N]?."

Además, el hecho de que está rehaciendo el curso por tercera vez. Y sin embargo, en cada examen saca perfectamente una nota media. También termina antes que los demás, como si tuviera todo el tiempo del mundo.

Eso no es normal.

Aunque nunca te has enfrentado a Marka por esto, has preferido guardar silencio. Los tiempos son duros, y no estabas dispuesta a tender una mano cuando apenas podías ayudarte a ti misma.

Pero de NINGUNA MANERA te harías amigo de alguien tan sospechoso como él.

"[S/N]!!!" Heidi susurró, sacándote de tus pensamientos.

"[S/N], por favor contesta…" El Sr. Dimmy hizo una pausa, aclarándose la garganta. "En realidad. Pensándolo mejor, por favor, ven a verme después de clase. Gracias."

Me mordí el labio, dejándolo sangrar. Joder. Te has vuelto a despistar.

"Señor yo…"

"Sin peros, sin cocos".

Mientras te maldecías internamente, decidiste sacar tu libro de ventilación de la mochila, sólo para que el señor Dimmy te detuviera una vez más.

"[S/N]. ¿Puedes responder a la pregunta de la pizarra, por favor?"

Mierda, acabas de abrir tu bolso.

"Dame un momento…"

"[S/N]."

Apretando los puños, esbozaste una sonrisa de plástico. Era comprensible de dónde venía, ya que no quería que su alumno estrella soñara despierto por segunda vez.

"Culpa mía, señor. Espero hacerlo bien".

Mientras estabas ocupado resolviendo la ecuación, Marka decidió hacerte un favor y cerrar tu bolsa.

Para cuando volviste, Marka sonrió, esperando que saliera de ella un agradecimiento. Pero decidiste ignorar el amable gesto, continuando prestando atención a la pizarra. Ya tenías suficiente atención por hoy.

◈

Si había algo que le gustaba eran los relojes. Era agradable saber cómo pasaba el tiempo, si era rápido o anormalmente lento.

Y por supuesto, era lento.

"[S/N], esto ha ocurrido en múltiples ocasiones". El señor Dimmy se frotó las sienes, agotado de mantener la misma conversación con usted. "Nosotros, como personal, dejamos claro que puedes tomarte días libres".

"Lo siento mucho señor, pero no puedo hacer eso…"

"[S/N], basta de excusas. No estás durmiendo lo suficiente, y eso está afectando a tu concentración".

Puntuaciones, talentos, personas: NADA en esta conversación se aplicaba a eso. La amabilidad era un coñazo.

"Y por eso, voy a pedirle al decano que te suspenda personalmente. Una semana entera de suspensión".

Tuvo que morderse la lengua. ¿Por qué tienes que hacer el triple de trabajo?

"Señor. Estoy atrasado en lo que tengo que cubrir. Se lo ruego, por favor déjelo pasar."

"Pero [S/N], llevas tres semanas de adelanto. Tomarte una semana libre es suficiente ahora mismo. Créeme".

Miraste el reloj. Eran las 9:47, el minutero aproximadamente alcanzando el siguiente minuto.

"Si te veo el martes por la tarde, te acompañaré personalmente fuera. Eso es todo".

Frotándote los ojos, corriste hasta lo alto de las escaleras, antes de hacerte a la fuga. No podías creer lo que acababa de pasar.

"[S]-[S/N]…" Era Heidi.

"Heidi. He terminado por hoy, así que me voy a casa. Mándame un mensaje más tarde si tienes curiosidad". Sus demandas fueron rápidas y severas.

◈

"Risitas, tras risitas. Estos putos chuches no saben cuándo dejarlo, ¿verdad?".

"Markaaaa…" Resopló, sonando exactamente como él la llamaba: cerda. "Enséñame un poco de español, ¿no? ~ ❤️"

Marka negó con la cabeza, su cara mostraba claramente incomodidad.

"¡Vamos, queremos oírlo! A lo mejor podemos cagarla, ¿sabes?".

Maldito sea el cabrón de Rico. Nunca supo leer una habitación.

"He dicho que no". Marka se pasó los dedos por el flequillo, revelando la oscuridad que se arremolinaba en sus ojos. "Ahora aprended a ser buenos mierdecillas, estoy de mal humor".

Inmediatamente, todo el grupo se quedó completamente inmóvil. Antes de que pasaran unos segundos, gritos horripilantes escaparon de los labios de la gente. Algunos se congelaron de horror, sudando profusamente. Otros simplemente huyeron de Marka, mientras que algunos lucharon con él. Por suerte, gracias a su físico podía manejar a sus atacantes con bastante claridad.

"Ja…vergüenza…" Siguió golpeando a Rico con cada puñetazo, empezando a ver como la sangre le supuraba. Marka no pudo evitar sonreír con sádico regocijo. "Esta hipnosis siempre es pura suerte para mí".

Agarrando la pierna de uno de sus compañeros. Marka retorció, fracturó e incluso saltó sobre su pierna, lo que estaba perfectamente sincronizado con sus palabras".

"Joder. Joder. Joder. JODER. JODER". Marka maldijo en voz alta, gruñendo de frustración. Cada vez que pensaba en ti, la sensación no desaparecía. "Sólo quería hacer una buena obra. ¿Por qué? No. Ellos. Me. A mí".

Al oír el agudo grito del compañero, Marka lo apartó de un puntapié, dirigiéndose a tu taquilla. Estaba rodeada de un montón de cerraduras, todas ellas hechas personalmente por ti. Sabías ser eficiente y útil.

Lástima que Marka supiera forzar cerraduras demasiado bien.

"Ha pasado un tiempo desde mi último rechazo… así que veamos qué hay aquí ahora…". Con un tintineo, guió sus dedos a las primeras letras que hizo….sólo para encontrarlas….

Aplastado.

"…."

Ya debería estar acostumbrado a esto. El polvo, la suciedad, las arañas muertas. Después de conseguir por fin una taquilla nueva y fresca, era comprensible que limpiara el espacio.

Pero no lo hiciste. Decidiste hacer de tu vieja taquilla tu nueva bolsa de basura - incluyendo sus cartas de amor.

Su pulgar lleno de cicatrices aferró el sobre rosa, o la bola aplastada que era. Podía recordar la vez que tuvo que salir por negocios, perdiéndose la universidad durante una semana entera. Tuvo que permanecer agachado debido a un disparo, que le produjo una importante lesión en el hombro y en la mano izquierda. No le importaban las heridas debido a experiencias pasadas, pero estaba… deprimido. Marka no podía ver a nadie, ni estar en línea por si le descubr��an. Fue una decisión que tanto él como José tomaron por su seguridad.

Y así, para saciar su soledad, te escribió. Aunque le dolía la mano izquierda, escribió. A pesar de que su cerebro le decía que parara por el dolor, escribió. Escribía porque sabía que tú le dabas la felicidad, la esperanza que necesitaba para este mundo. Sí, teníais defectos… pero el uno con el otro, los dos podíais curar las cicatrices del otro. ¿Verdad?

"….Ha…."

Sus manos temblaron con rabia silenciosa mientras gotas oscuras caían sobre el papel. Estoy seguro de que no sabías nada mejor, simplemente fue un malentendido. Sí, sí, fue un malentendido.

Era comprensible, ya que él no lo dejó claro. No coqueteó contigo, ya que no era lo tuyo. Supongo que las cartas tampoco lo eran.

Tal vez tendría que intentar algo… un poco más drástico.

"Necesito saber… ¿me quieren…? ¿No me quieren? Quizás…."

Apretando el papel contra su pecho, empezó a reírse para sus adentros. No, sonreía como un loco mientras miraba la taquilla que tenía delante, con la cara contorsionada en algo retorcido y grotesco.

"Tal vez sea hora de que haga una visita a tu casa, ¿eh? ❤️~."

NOTAS:

Cuche = Significa cerdo en el argot salvadoreño. sɪ ᴛɪᴇɴᴇs ᴀʟɢᴜɴᴀ ᴘʀᴇɢᴜɴᴛᴀ sᴏʙʀᴇ ᴋᴀʀᴍᴀ, ᴊᴏsᴇ́ ᴏ ʜᴇɪᴅɪ, ɴᴏ ᴅᴜᴅᴇs ᴇɴ ʀᴇᴠɪsᴀʀ ᴍɪ ʙᴀɴᴅᴇᴊᴀ ᴅᴇ ᴇɴᴛʀᴀᴅᴀ.

[saintsr]

Missa entraba y salía de la inconciencia tan rápido le dolía mucho la cabeza y sentía cómo algo se escurría por la sienes y se pegaba a su cabello, todo estaba borroso apenas y podía ver algo bien, de repente oyó gritos, sus niños intentó mover su cuerpo pero esté no respondía oyó pasos apresurados, luego tres gritos, quería decirles que no se detuvieran que él estaba bien, sintió como pasaron a su lado después una sombra más grande lo pateo en las costillas dejándolo sin aire y dejándolo boca abajo, después cayó otra vez en un lugar oscuro dónde oyó agua corriendo y chapoteos como los que daba Chayanne cuando inicio a nadar sin el flotador, su niño valiente nunca grito ni pidió ayuda, no como ahora lo oía gritar pidiendo por él, lágrimas se formaron en su cara después no sé oyó nada, después oyó a Llulah, su princesa gritar y después cómo si tuviera algo que la impidiera hacerlo, cómo esa vez que fueron a jugar y de la emoción Llulah gritó de emoción al ver a los ponys por primera vez de lejos ahí supieron que tenía asma, ellos asustados la llevaron al hospital le dieron instrucciones de cómo cuidarla hasta ahora que solo lo necesitaba de vez en cuándo, después oyó una especie de ruido blanco cómo estática de radio antigua se pregunta si Dapper otra vez está construyendo algo cómo esa vez que destruyó un televisor y luego lo mejoro porque era muy obsoleto según él, o cómo cuándo descubrieron que le gustaba usar las motosierras y eso lo asustó mucho. Cayó otra vez en la negrura del vacío después sintió su cara caliente siendo quemada así abriendo un poco los ojos notó que era arrastrado en el piso, intentó clavar sus uñas pero no tenía la suficiente fuerza, Bad debió haberlo notado porqué lo volteó boca arriba de nuevo y su cara estaba llena de rasguños, sus brazos y tenía ligeras gotas de sangre en ciertos lugares o manchas gigantesco en el estómago, así cómo lágrimas secas, vio con horror como lo llevaba  al ático, batallando Bad lo subió por la escalera importándole poco si su cabeza golpeaba con fuerza los escalones o si seguía respirando, cuándo por fin pudo ponerlo en un lugar cómodo de subió encima de su pecho y con sus manos empezó a ahorcar a Missa, vio cómo se removía intentando salvarse pero fue en vano su cuerpo no estaba en condiciones de pelear más, vio cómo sus ojos llegaron al blanco y cómo sus labios se tornaban morados y azules, sin más jaló su cuello hasta que sintió como se rompió, agarró la pequeña navaja que tenía en su bolsillo y la pasó por la cara de Missa tiernamente, hasta que la clavó en la parte baja de la mandíbula y presionó hasta llegar profundo arrastró con cuidado por los bordes sin que se le escapará nada y levantó la piel hasta ver los músculos de la cara, su preciosa piel por fin era suya, su cara aquella que podía conquistar a cualquiera, cómo él, por fin era de él nadie más tendría el privilegio de verlo, por fin era de él, con paciencia tenía mucho tiempo raspó con cuidado el músculo hasta desprenderlo del hueso después de todo a Missa siempre le gustó las calaveras, él siendo su marido le daría el privilegio de ser una, por fin vio el hueso cómo esté estaba manchado de sangre, buscó por la habitación hasta encontrar una cajita dónde guardó con cuidado la piel dándole un beso de despedida hasta que regresará a casa envolvió el cuerpo en una manta casi cómo una momia, arregló su pierna pero está no cooperaba y terminó en un ángulo extraño, pero no importaba por fin Missa no las necesitaría. Terminó en un charco de sangre y cómo la manta antes morada se hacía con un color rojo más oscuro, salió de ese lugar y agarrando un papelito de su bolsillo salió en busca del culpable de todo esto, él que logró quitarle su paz y todo lo que amaba, agarró un cuchillo más grande y un martillo y fue a la dirección de Philza aquella que Missa consiguió siguiéndolo a sus espaldas.

Al llegar la casa estaba a oscuras rompió la puerta y entró, revolvió todo pero no pudo encontrar dónde estaba saliendo sin más se dirigió a una caseta de teléfono antigua y espero ahí hasta que Philza regresará, hasta que escuchó un movimiento a sus espaldas, la caseta tenía puertas de cristal en todos sus ángulos solo estaba puesta en un callejón no muy concurrido, puesto que éstos aparatos no eran muy utilizados,  revisando no vio nada al volver la mirada a dirección de la casa de Philza vio algo blanco y después negro.

[rookieforlife]

Dale que los K vienen destruyendo al pais hace años y no decis nada… La gente se muere de hambre, no se puede ahorrar,a inflacion a 142%, corrupcion a otros niveles y mas., La gente se canso.

Literalmente dije que no culpo a la gente porque la economía es un desastre hace años. Entiendo el voto, así y todo alguien como Milei no es la solución, al menos para mí, sos libre de pensar lo que quieras. No creo que él junto con Macri, que ya fue presidente y nos endeudó, presente un cambio. Menos con funcionarios como Lemoine que es impresentable y le quiere sacar derechos a las mujeres, o Marra un cryptobro que te enseña cómo evadir impuestos, y otros personajes que ya estuvieron en la política en tiempos más nefastos de lo que te pudo significar el kirchnerismo como decís. Cambiar corrupción por más corrupción y encima pérdida de derechos… no gracias. Me genera orgullo que nuestra salud y la educación hayan sido gratuitas. No soy ni peronista ni kirchnerista, solo creo qué hay que votar lo menos mierda para todos pensando en frío. Un hombre que parece inestable y recibe órdenes de un perro muerto, habla gritando y sacude una motosierra por todos lados no me genera confianza.

Suerte.

[dalu-listen-queen]

Tengo tanta ansiedad de intentar averiguar por qué a él le importa tanto a quien entrego o no mi cuerpo. No hago daño a nadie. No me meto con gente que tiene pareja, y él tampoco es nada mío para enojarse si tengo sexo o no con alguien por ahí, no es mi padre, pero todo el tiempo está fastidiándonos a mi madre y a mí con que soy una puta. Y no pierde la oportunidad de hablar de mi antiguo novio de que es un ladrón, que ni trabaja. Ya pasarón como 7 años de que no sé nada de ese muchacho y él sigue empeñado en hablar mal de él como si aún le molestara, como si quisiera convencer a mi madre de prohibirme o decirme algo o desilusionarme. Me causa mucha risa este hecho ya que no se ha enterado de que hace un año tuve un nuevo novio y este año ya me gusta otra persona, pero es mejor así en secreto porque sino se arma Chernóbil. Y ayer volvió a tirar una indirecta lleno de odio, como si ya no nos hubiera fastidiado el día el miércoles cuando se emborrachó y no fue a buscarme a la facultad. Tenía un ex ligue a una cuadra de mi casa y por alguna razón él se enteró de que fui ¡FUERON HACE 6 AÑOS! y dijo ayer al pasar por ahí: "calle de sexo lo que está calle es". Y claro, olvidé el hecho de que los chismes no faltan cuando tiene amigos ahí que son más putos al hablar de mujeres que el mismísimo puto. Mi punto es que no entiendo qué le calienta a él mi vida y lo que yo haga. Se mete con mis amigas, con mi carrera, con mis sueños, con mi trabajo, con mi novio, con todo lo que a mí me gusta. Ya, enserio, no lo soporto y tampoco le soporto por las veces que le he pillado mirarme por las aberturas de mi puerta o ventana cada vez que me visto o cuando finjo dormir. No soporto cuando quiere convencer a mamá de llevarme a alguna parte que yo deseo ir SOLA. Odio que cuándo estemos los tres él sea tan malo conmigo y que cuando ella no está, se acerque de manera amistosa cuando estoy en la cocina. No me gusta, me incomoda demasiado. Y no puedo olvidar una confesión que me hizo una ex amiga hace como 7 años cuando íbamos a la beca y lo encontramos en la calle: "no me gusta cómo te mira tu padrastro, no sé, es muy raro, juzgalo tú". Yo en ese entonces tenía unos 13 años y le dije que no invente cosas. Pero ahora todo tiene sentido. El problema es que si le digo esto a mi madre, ella no me creerá porque aunque él le haya tratado mal en más de una ocasión y aunque ella sea testigo de cómo es conmigo y de las cosas que dice de mi, ella lo ama demasiado, podría decir que incluso más que a mí. ¿Qué madre que nos quiere pasa por alto todas las banderas rojas de un padrastro con su hija sólo porque él es un hombre bueno que ayuda? Lo que más me da miedo es que tenga que suceder algo más grave para que ella al fin entienda que ese hombre no es bueno. Supongo que me queda rezar y desear que no suceda nada. Aún no olvido ese forcejeo en el pasillo, esa amenaza que nos hizo estando borracho y con una motosierra. Esa denuncia que fuimos a hacer cuando se fue por ahí y luego volvió a golpear la puerta como si quisiera matarnos. No olvido cuando mi hermano le pegó y los policías se lo llevaron para que al final mi mamá termine por quitarle de ese lugar al día siguiente y perdonarle. ¿Por qué Dios me castiga de esa manera? Pareciera que para dios no fue suficiente con darme una madre biológica que me maltrató cuando tenía 5 o 6 años y un padre biológico que me abandonó, todo el buylling que viví en la escuela y los acosos familiares.

¿Cuánto más debo sufrir para ser feliz?

[johnalisha88]

Las motosierras son herramientas esenciales para jardineros profesionales, facilitando la poda y el corte. Conocer los problemas comunes de las cadenas y su solución puede ahorrar tiempo, mejorar la seguridad y optimizar el rendimiento.

[recaball]

Errores comunes al cortar leña seca y cómo evitarlos

Cortar leña seca es una tarea esencial para los jardineros profesionales, ya sea para preparar leña para la calefacción exterior de un cliente, proyectos de jardinería o uso personal. Sin embargo, no es raro cometer errores durante el proceso, especialmente al cortar madera seca, que puede ser más dura y desgastar más tus herramientas que la madera recién cortada. En este artículo, discutiremos los errores comunes que los jardineros suelen cometer al cortar leña seca y proporcionaremos consejos prácticos sobre cómo evitarlos. Al prestar atención a estos puntos, garantizarás un proceso de corte más fluido y eficiente, alargando la vida de tu equipo y reduciendo el desgaste en ti mismo.

Error 1: No usar la cadena de motosierra adecuada para leña seca

Uno de los factores más críticos para cortar leña seca con éxito es utilizar la cadena de motosierra adecuada para leña seca. No todas las cadenas de motosierra son adecuadas para la textura más dura y quebradiza de la madera seca. Si usas una cadena diseñada para madera verde, es probable que encuentres problemas como que la cadena se desafile demasiado rápido o se atasque en la madera, lo que también puede provocar accidentes. La madera seca requiere una cadena que sea afilada y lo suficientemente duradera para manejar materiales más difíciles.

Cómo evitarlo:

Al seleccionar una cadena de motosierra para leña seca, asegúrate de que esté diseñada específicamente para cortar materiales más duros. Estas cadenas suelen tener un ángulo de corte más agresivo, lo que permite una mejor penetración en la madera densa y seca. Revisa regularmente el estado de la cadena y afílala según sea necesario. Invertir en una cadena de alta calidad no solo hará que tu trabajo sea más fácil, sino que también protegerá tu motosierra de tensiones innecesarias.

Error 2: Descuidar el mantenimiento adecuado de la cadena

Una vez que hayas elegido la cadena de motosierra adecuada para leña seca, el mantenimiento adecuado es crucial. Uno de los errores más grandes que cometen los jardineros profesionales es descuidar el afilado o la sustitución de su cadena de motosierra de manera regular. Una cadena desafilada no solo dificultará el corte de leña seca, sino que también puede sobrecalentar el motor, reducir la vida útil de tu motosierra y aumentar el riesgo de accidentes debido al retroceso.

Cómo evitarlo:

El mantenimiento regular es clave para mantener tu motosierra en óptimas condiciones. Verifica la afiladura de la cadena antes de cada uso y afílala según sea necesario. Si notas que la cadena se desafila demasiado rápido o que es difícil hacer cortes suaves, puede ser hora de reemplazarla. Siempre mantén bien lubricada tu cadena de motosierra y asegúrate de que la tensión esté ajustada adecuadamente para evitar que se resbale o se descarrile durante su uso.

Error 3: Técnica de corte inadecuada

Muchos jardineros profesionales subestiman la importancia de una técnica adecuada al cortar leña seca. Esto puede llevar a cortes ineficientes, tiempo desperdiciado y, lo que es más importante, riesgos de seguridad. Uno de los errores más comunes es aplicar demasiada presión al cortar. La madera seca ya es difícil, y forzar la motosierra a través de la madera puede hacer que la cadena se atore o que la sierra retroceda, lo que es peligroso.

Cómo evitarlo:

Deja que la motosierra haga el trabajo. Con una cadena de motosierra adecuada para leña seca, no deberías tener que aplicar mucha presión. Guía la sierra suavemente a través de la madera sin forzarla. Párate firmemente sobre ambos pies, mantén el equilibrio y mantén una mano firme en la sierra en todo momento. Asegúrate siempre de cortar a una altura segura, utilizando soportes si es necesario para mantener el tronco estable. Esto garantizará cortes más suaves y reducirá el riesgo de accidentes.

Error 4: Cortar leña que es demasiado grande para tu motosierra

Otro error común que cometen los jardineros profesionales es intentar cortar troncos que son demasiado grandes para que los maneje su motosierra o su cadena. Esto puede ejercer una gran tensión sobre tu equipo y resultar en cortes desiguales, troncos incompletos o incluso dañar tu motosierra.

Cómo evitarlo:

Siempre verifica el diámetro del tronco que estás cortando y compáralo con la capacidad de corte recomendada de tu motosierra. Es crucial tener la motosierra y la cadena del tamaño adecuado para el trabajo. Para troncos más grandes, usa una motosierra más potente o descompón el tronco en piezas más pequeñas antes de cortar. Al trabajar dentro de la capacidad de tu equipo, harás el proceso más seguro y eficiente.

Error 5: No asegurar la leña adecuadamente

No asegurar la madera mientras se corta es otro peligro significativo de seguridad. La leña seca, al ser más dura y densa, puede moverse inesperadamente durante el corte, lo que aumenta el riesgo de lesiones. Esto es especialmente peligroso si estás utilizando una motosierra, ya que puede provocar que la sierra se deslice o incluso causar retrocesos.

Cómo evitarlo:

Siempre asegúrate de que la leña esté debidamente asegurada antes de comenzar a cortar. Puedes usar un caballete o otro sistema de soporte estable para mantener la madera en su lugar. Esto no solo garantiza tu seguridad, sino que también permite cortes más precisos. Además, mantente alerta a tu entorno para asegurarte de que la madera no ruede o se desplace inesperadamente durante el proceso.

Error 6: Ignorar las precauciones de seguridad

Cortar leña seca puede ser una tarea exigente, y algunos jardineros profesionales pueden pasar por alto las medidas de seguridad básicas en su prisa por completar el trabajo. Ignorar el equipo de protección adecuado, como guantes, cascos o protección ocular, puede aumentar el riesgo de lesiones graves, especialmente cuando se trabaja con madera dura y seca.

Cómo evitarlo:

Siempre usa equipo de protección adecuado al cortar leña. Esto incluye gafas de seguridad para proteger tus ojos de los escombros voladores, protección auditiva para proteger tu audición del ruido fuerte de la motosierra, y guantes resistentes para proteger tus manos de madera afilada o astillada. También son esenciales calzado y ropa apropiados para garantizar que permanezcas seguro y cómodo durante todo el trabajo.

Error 7: Cortar en terreno desigual o inestable

Cortar leña seca en terreno desigual o inestable no solo es ineficiente, sino que también puede llevar a accidentes. El terreno desigual puede dificultar el mantenimiento del equilibrio mientras usas tu motosierra, aumentando la probabilidad de resbalones o caídas. La madera seca ya es más difícil de cortar, y agregar un terreno inestable al mix hace que la tarea sea aún más peligrosa.

Cómo evitarlo:

Siempre elige una superficie estable y plana al cortar leña. Si debes trabajar en terreno desigual, toma precauciones adicionales para asegurar la madera y garantizar tu propia estabilidad. Colocar la leña sobre una superficie estable te ayudará a mantener el control de la motosierra y evitar posibles accidentes.

Conclusión

Cortar leña seca es una tarea importante para muchos jardineros profesionales, pero viene con sus propios desafíos. Al evitar estos errores comunes—como no usar la cadena de motosierra adecuada para leña seca, descuidar el mantenimiento o ignorar los protocolos de seguridad—puedes hacer el proceso más seguro, eficiente y menos estresante. Con el equipo adecuado, la técnica correcta y la atención a la seguridad, podrás cortar leña seca con facilidad, ahorrando tiempo y esfuerzo a largo plazo.

[ferrolano-blog]

La revolución de los ricos... En la vuelta del fascismo, ¿no se oculta un misterio que aún no hemos resuelto? Lo que tenemos que averiguar es por qué nuestra política de gestos no funciona mientras que sí lo hace la de la ultraderecha... el bulo neofascista resulta más creíble asimismo porque es más apetitoso, más agresivo, más incendiario; cada vez hay más gente cabreada que prefiere una mentira estimulante a una verdad banal. Ese cabreo neurótico, espoleado y saciado en el mundo virtual, no se desactiva ya, me temo, con medidas económicas... La motosierra y la magia son señuelos irresistibles en tiempos de crisis. Las izquierdas, que no pueden ofrecer revolución, que solo pueden proponer la defensa numantina de una democracia no muy lozana, llegan demasiado tarde para la transformación y demasiado blandas para la indignación... La homeopatía socialdemócrata desengancha a los votantes. ¿Qué hacer? Frenarla. Jugar con las bazas que tenemos para rebañar al menos un empate favorable (Santiago Alba Rico)

[teragames]

La influencia de La Masacre de Texas

En esta ocasión nos tomamos el tiempo para desempolvar un clásico del cine de horror, La Masacre de Texas (@ChainsawTX), si no la has visto o te interesa saber un poco más sobre esta película, @Tubi te comparte un poco más.

Agencias, Ciudad de México.- La Masacre de Texas es una película legendaria, nadie puede negarlo. Cuando se estrenó en 1974, revolucionó totalmente el terror y estableció muchos de los estándares narrativos que las películas del género siguen utilizando hoy en día. El sonido de la motosierra de Leatherface aún resuena en la mente de los espectadores y para “diseccionar” toda su influencia se…

[catorcexiv]

Pensar no es cool

Joder, yo también quiero tener la capacidad de hacer esto. Tomar una motosierra y cortarme el cerebro para no pensar, aunque sea por un minuto. Si fuera Denji esta sería mi solución cuando me siento muy mal (que es casi todo el tiempo). Pensar duele. Pensar no me gusta. A mi gustar el café y los culos.

[mandangashams]

[S23-S01] Chainsaw Man (T1)

SERIE (Anime) | Terminada el 7/1/2023

Regreso a los Hams mucho tiempo después con mucha mandanga acumulada. El año empezó con el cierre de la temporada de la motosierra, un anime que me ha sorprendido muy positivamente, porque creo que mezcla de manera muy interesante los momentos serios con los divertidos. Se suma por supuesto que se han dejado los dollars en una animación hipnótica. Quedo con muchas ganas de seguir viendo las mandangas de Pochita.

8/10

[casiang]

' nos va a perseguir un psicópata cargando una motosierra y quien no logre escapar a tiempo terminará como en una de las películas de fear street o scream ' no se le había ocurrido hasta ahora, pero llevarles al bosque en medio de la madrugada no tiene pinta de salir bien. lo único que le interesa en ese momento es regresar a la comodidad de su cama y seguir durmiendo hasta la mañana, especialmente porque interrumpieron su descanso justo cuando iba en la mejor parte. ni siquiera está del todo despierto todavía. ' bonita, no tengo ni idea donde nos están llevando, estoy igual de perdido que tú ' resopla con aires divertidos, observando a su alrededor tanto como la falta de luz se lo permite. ' ¿crees que haya osos por aquí? '

"¿por qué nos trajeron a un lugar tan oscuro a esta hora? ¿cuál es el punto?" se queja mientras pasa con cuidado sobre montón de ramas, les ha visto de milagro, toda esta 'aventura' se le hace muy peligrosa, espantosa. "¿sabes si falta mucho para llegar a... donde sea que tengamos que llegar? ¿será que se termina pronto?" cuestiona tras sentir pasos en la cercanía, suspiro que delata agotamiento sigue de cerca sus palabras.

[espejodiario]

Nasty Kiss asqueó a los espectadores de 'The Last Of Us'

El segundo episodio de El último de nosotros tiene múltiples primicias para el programa de HBO. “Infected” (dirigida por Neil Druckmann y escrita por Craig Mazin) es la primera vez que Ellie sale de la zona de cuarentena; también es nuestro primer vistazo a los Clickers, que son ciegos pero muy sensibles al sonido. Son repugnantes, pero el primero más importante del episodio es el mayoría asqueroso. En los minutos finales de "Infected" (lea nuestro resumen), Tess revela que ha sido mordida por un infectado. Ella no es inmune como Ellie, por lo que es solo cuestión de tiempo antes de que se convierta. Tess se sacrifica para salvar a Joel y Ellie para que puedan continuar hacia el oeste, pero antes de que pueda encender su encendedor, detonando el edificio y sus habitantes infectados con hongos, es la receptora involuntaria del beso más asqueroso en la televisión desde Hombre motosierra. hbo De acuerdo, técnicamente no es un "beso" sino que un infectado se propaga a otro infectado. Aún así: no es ideal. Pero todavía prefiero besarme con alguien con zarcillos fúngicos (gran nombre de la banda) saliendo de su boca que comer un hongo real. Qué asco. De todos modos, si Tess está realmente muerta, lo que probablemente esté considerando, ya sabes, kaboom, dejémoslo por Anna Torv. Él cazador de mentes La actriz causó una impresión duradera en solo dos episodios, y un beso desagradable. Read the full article

[labitacoradelhombresolitario]

El arrastre

La tarde se arrastraba como se arrastran a veces las tardes. Los hippies tenían en inglés un término para el fenómeno: drag, que significaba precisamente arrastre. «Esto es un arrastre», decían, para las situaciones de martirio lento de la abulia y el fastidio cotidianos. Una especie de versión de andar por casa, en cierto modo, de la angustia vital de Roquentin en La Nausée. Sensación que Dalí había atrapado genialmente, fuera o no esa su intención, en el cuadro aquel de los relojes fundidos como crêpes demasiado hechas sobre un fondo de ensueño vuelto del revés y convertido en pedestre pesadilla lenta (o sea: pesadilla sorda, sin aspavientos ni alharacas).

Era la del seis de agosto. A la tarde nos estamos refiriendo. Todo en el barrio y la ciudad estaba en relativa calma. Esa mañana había habido motosierras, y escándalos varios, porque eso formaba parte de la banda sonora de Madrid; y dos o tres plantas más arriba, seguían de vez en cuando los retumbos de alguna de las perpetuas obras de rigor, marca y sello de fábrica de la psicopatología autóctona más quintaesencial y representativa (la enfermedad se denominaba, en definición de cuño propio que Hugo más de una vez había pensado que debería remitir a los responsables de la edición española del Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales, «síndrome de El Escorial»). En este momento, sin embargo, reinaba más o menos la paz.

Hugo estaba sentado en su estudio, leyendo a ratos a Eça de Queirós (Una campaña alegre, recopilación de artículos satíricos publicados en la revista lisboeta As farpas en la década de 1870, traducidos con jovial fruición al español por Wenceslao Fernández Flórez en los años 40 del siglo que había quedado atrás); pero la lectura, aun siendo por momentos divertida y refrescante, se le hacía un poco ardua, y entonces cerraba con cuidado el vetusto ejemplar del libro y lo dejaba encima de la mesa, entre los teléfonos, el cenicero, el reloj de bolsillo y los papeles, y se reclinaba de nuevo en su butacón italiano, estirando las largas piernas, alzando en el aire los brazos para hacer con ellos idéntica operación, y emitiendo un bostezo que al principio parecía tener aspiraciones de fisiológica relevancia, pero se quedaba luego en desangelada y mustia mueca carente de verdadera convicción.

Esa misma mañana le había entrado al poeta un texto para traducir: un espinoso galimatías farmacológico, de siete mil quinientas palabras en su versión original, con el que debería ponerse lo antes posible, porque la prisa, en el mes de agosto incluso, era la exigencia que marcaba a fuego todas las labores alimenticias del profesional autónomo de la letra impresa, y tener traducciones pendientes era como tener eternos deberes por hacer: su angustioso reclamo se instalaba cual lloro de criatura hambrienta en la conciencia, y los berridos de la faena inconclusa no cesaban un momento hasta que se les diera su ansiado biberón. Eso, como todo progenitor sabía (por seguir con el ejemplo puericultor), podía desquiciarlo a uno, y dejarlo hecho un fusible carbonizado entre las ruinas de su devastado sistema nervioso; pero Hugo tenía ya decenios de experiencia en la materia, y soportaba las tensiones del apremio interior y exterior con ánimo variablemente impasible y sereno (salvados los ocasionales estallidos de frustrada desesperación, que tras provocar inútiles tormentas en imposibles vasos de agua no tardaban demasiado en amainar ). En esta ocasión, había decidido aparcar hasta el día siguiente el texto que haciendo ya mohines y pucheros le aguardaba, y concederse asueto durante el resto de la jornada; por la mañana madrugaría, como el valiente guerrero que era, y antes de ponerse con el trabajo alimenticio sacaría también tiempo, muy de madrugada, para ponerse al día con sus autoimpuestas obligaciones creativas.

Dejando en la mesa al buen Queirós, se puso unos calcetines limpios, se calzó, tomó su ligera chaqueta de verano, su nuevo panamá —espléndido sombrero de ala ancha y distinguida toquilla marrón, regalo de su hija—, su bolsa para el hombro de elegante color verde oliva, y se echó a la calle calándose las gafas de sol, después de descender en el montacargas los seis pisos que le separaban de tierra firme y navegar, sin toparse con ser humano alguno, el espacio en calma chicha de la desierta portería del edificio.

Ya en la vía pública, Hugo cruzó la avenida de la Ilustración y se dio un pausado garbeo por los alrededores. A pesar de las fechas que corrían, había numerosos viandantes en la calle: hombres y mujeres mayores; jóvenes ataviadas con vestimenta deportiva, yendo o viniendo de sus sesiones de ejercicio adelgazante y hermoseador; parejas de edad intermedia, con y sin niños; alguna damisela no deportista, con perrito faldero acompañante; y pandillas de chavales subidos de vatios que se encaminaban con boyante y alegre paso de viernes por la tarde hacia la cercana boca del metro. El panorama podría ser mejor, pero podría ser también infinitamente peor; sentado tras su corto paseo en la terraza de la cafetería de barrio que hacía esquina en la glorieta de la Reales Academias, en cuyo centro se erguían los enormes arcos metálicos que constituían una de las señas de identidad del vecindario, Hugo pidió un café con leche y un vaso de agua —¡sin hielo, por favor!— y se dejó acariciar por las caprichosas ráfagas de aire que templaban el vespertino rigor canicular. «Cuando la vida te pese —pensó—, cuando el baudelaireano fardo del tiempo amenace con doblegarte las espaldas, y todo sea un arrastre y un drag, sal y mira, querido Wolfe. Instálate en la magia del momento y contempla. No verás nada del otro mundo, pero ahí precisamente está el quid: el aquí y el ahora son cosas de este mundo, y solo en este mundo están. Ninguno de nosotros se dirige a parte alguna. Eso es posible que los otros no lo sepan, o se empeñen tal vez en olvidarlo. ¡Pero lo sabes tú! Todo se encamina hacia su ocaso, como en ese poema titulado “Ocio” dijo Gabriel Ferrater; y no es preciso hacer nada especial para asistir en el proceso. Lo único que es preciso hacer es navegar.»

ROGER WOLFE · 7 de agosto de 2021

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Madrid, 6 de agosto de 2021

[acostumbradoalfindelmundo]

Sobre cómo escapé al salvaje ataque de un saltamontes

Escuché un ruido en el sofá azul, como si alguien apoyara su mano. Estaba solo, así que aquello no era buena señal. Giré lentamente esperando ver a un asesino serial con una motosierra apuntando a mi cabeza. Ojalá. Pero no. Era un saltamontes, plácidamente posado en el mueble blanco detrás del sillón, muy verde y patón. En la vida hay varios tipos de hombres: Está el hombre que lo mata y está el hombre que lo envuelve con un trapo y lo saca. Yo soy el que huye. El bicho movía sus patas lentamente, y me dije "¿Por qué mierda la criatura se mueve? Mejor sería que estuviese quieta; así parece nerviosa, a punto de atacar". Entonces se quedó quieto. Y me dije "¿Por qué mierda la criatura no se mueve? Así parece como si meditara fríamente las cálidas 800 millones de formas de atacarme, picarme morderme envenenarmematarmeycomermelasvísceras". Me miró, y mis huesos se volvieron líquidos. Aún así, por bondad, orgullo o estupidez, decidí envolverlo y sacarlo. Fui hasta la cocina a buscar un repasador que luego pudiera incinerar (después de destinarlo a la tarea de cobijar un insecto grande y verde interplanetario extragaláctico jamás lo podría volver a usar). Cuando volví, ya no estaba. Repito: ya-no-estaba. Y como sabe todo el mundo, cuando perdemos de vista un insecto que odiamos, cuánticamente pasa a estar EN TODOS LOS LUGARES DE LA CASA AL MISMO TIEMPO hasta que lo volvamos a encontrar. Pánico. Comencé a escuchar ruidos de animales salvajes en cada habitación: rugidos de jirafas, aullidos de tigres, gruñidos de tiburones, hasta me pareció ver huellas de garras que alguna serpiente venenosa dejó para marcar su territorio. Y soniditos, muchos microsoniditos de patitas posándose en cosas. Ahí mandé todo a la mierda. Primero pensé en mudarme pero no era una opción, así que hice lo que mejor me sale: procrastinar. Dejé el trapo en cualquier lado y me encerré arriba en mi dormitorio con la esperanza de que los saltamontes aún no dieran ese paso evolutivo que les permita subir escaleras.

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