#Invasión Haitiana
Explore tagged Tumblr posts
rdsolenodonte · 2 years ago
Text
Los prohaitianos y el partido de los haitianófilos
Con un falso sentido del humanismos que esconde un fin más siniestro los partidos políticos, las organizaciones de izquierdas y las ONG’s se han puesto como objetivo principal destruir la nación dominicana, es tán fuerte y poderoso el partido prohaitiano que han llegado a las posiciones más alta en poder politico, mediatico y dominan dentro del mismo gobierno dominicano. No podemos entender el…
Tumblr media
View On WordPress
2 notes · View notes
elsoldesantiago · 3 months ago
Text
Apoyan llamado cedular a estudiantes dominicanos en escuelas públicas ante invasión haitiana
Por Ramón Mercedes NUEVA YORK.- Dominicanos residentes en el Alto Manhattan manifestaron apoyar el llamado que hiciera recientemente en la República Dominicana el comunicador Enrique -Tuto- Mota para que el Instituto Duartiano proporcione “cédulas escolares duartianas” a sus estudiantes. Para tales fines, indican en documento de prensa, “los duartianos deben recibir el apoyo de empresarios,…
0 notes
quecooking2 · 9 months ago
Text
PRONÓSTICO A UN FUTURO NO MUY LEJANO DE NUESTRA DESGRACIAS! TENDREMOS OTRO DEGÜELLO DE MOCA.
PRONÓSTICO A UN FUTURO NO MUY LEJANO DE NUESTRA DESGRACIAS! TENDREMOS OTRO DEGÜELLO DE MOCA. Saben de la adaptación del sapo en el agua tibia en una olla?Respuesta:El animal se va adaptando a la temperatura, que cuando ya el agua esta a punto de hervir, es muy tardes para salirse y muere salcochado!Así mismo los gobiernos PRM PLD PRD PRSC están acostumbrando al pueblo con la invasión haitiana,…
Tumblr media
View On WordPress
0 notes
emma-the-hedgehog · 5 years ago
Photo
Tumblr media
Ayer esta viendo un vídeo sobre países que ya no existen y me acorde por decirlo de la primera indecencia de nuestro país o de la independencia efímera que tuvo nuestra parte de la isla el 30 de noviembre de 1821 hasta la invasión haitiana el  9 de febrero 1822, así que me inspire en así a Haití Español , si soy honesta quería hacer un dibujo simple pero mi cerebro dijo ‘ NO! mejor haz un fondo Extremadamente detallado’ .
Por cierto a pesar de que el reconocimiento por parte de Simón Bolívar no se concreto durante esta corta independencia se alzo la bandera de la República de Colombia ...
.
.
.
El Estado Independiente de Haití Español (también denominado República del Haití Español)​ es el nombre que adoptó la antigua Capitanía General de Santo Domingo (actual República Dominicana) durante el breve período de independencia que siguió a la España Boba, nombre con el cual se conoce al período histórico dominicano en la cual España estuvo bajo ocupación francesa y durante el cual le prestó poca o ninguna atención a la administración de su colonia caribeña de Santo Domingo.
(Gracia Wikipedia )...
16 notes · View notes
aguajerord · 2 years ago
Text
Tumblr media
Noticia | Lo que nunca nos dijeron de la invasión haitiana (OPINION) https://aguajero.com/lo-que-nunca-nos-dijeron-de-la-invasion-haitiana-opinion
0 notes
descifrandolanoticia · 3 years ago
Text
El PUN llama a guerra social contra haitianos ilegales
El PUN llama a guerra social contra haitianos ilegales #DescifrandoLaNoticia #HaitianosIlegales
El Partido de Unidad Nacional, en honor a su vigésimo aniversario, ratificó la filosofía de humanismo cristiano y llamó a una guerra social contra los haitianos ilegales en el país. Consideró el presidente del PUN que la IV República está en decadencia irreversible, amenazada por dos grandes latrocinios, la invasión pacífica haitiana y la degradación moral, social, política y jurídica. “La��
Tumblr media
View On WordPress
0 notes
lafamamusic · 3 years ago
Text
RD celebra el bicentenario de la Independencia Efímera
RD celebra el bicentenario de la Independencia Efímera
Santo Domingo, RD. �� La República Dominicana celebró este miércoles el bicentenario de la Independencia Efímera, hecho histórico que supuso la emancipación de la entonces colonia española el 1 de diciembre de 1821. Abriendo un breve período de soberanía que se truncó dos meses después con la invasión haitiana. La efeméride se festejó hoy con varias actividades oficiales de bajo perfil. Que…
Tumblr media
View On WordPress
0 notes
rdsolenodonte · 2 years ago
Text
¿Combatir la invasión haitiana con quejas?
Día tras día vemos en las redes sociales, en algunos medios de comunicación y entre conversaciones con familiares, amigos y conocidos un incremento en la preocupación por la enorme cantidad de ilegales haitianos que invades todos los espacios en la República Dominicana. El problema radica que cuando les preguntas sobre las acciones necesarias que se deben tomar para frenar dicha invasión todos…
Tumblr media
View On WordPress
0 notes
elsoldesantiago · 3 months ago
Text
Apoyan llamado cedular a estudiantes dominicanos en escuelas públicas ante invasión haitiana
Por Ramón Mercedes NUEVA YORK.- Dominicanos residentes en el Alto Manhattan manifestaron apoyar el llamado que hiciera recientemente en la República Dominicana el comunicador Enrique -Tuto- Mota para que el Instituto Duartiano proporcione “cédulas escolares duartianas” a sus estudiantes. Para tales fines, indican en documento de prensa, “los duartianos deben recibir el apoyo de empresarios,…
0 notes
leruffo · 4 years ago
Photo
Tumblr media
UN DÍA COMO HOY NACIÓ JUAN PABLO DUARTE PADRE DE LA PATRIA #🇩🇴 - Juan Pablo Duarte y Díez Nacio 26 de enero de 1813, Ciudad de Santo Domingo, Provincia de Santo Domingo - y murió 15 de julio de 1876, Caracas, Estados Unidos de Venezuela) fue un profesor, militar, político, masón y activista liberal dominicano.Es junto a Francisco del Rosario Sánchez y Matías Ramón Mella, uno de los Padres de la Patria y fundadores de la República Dominicana. Ideó y presidió la lucha de varias organizaciones civiles-político-militares clandestinas como La Dramática, La Filantrópica y la más conocida, La Trinitaria, creadas para luchar contra la invasión haitiana y por la independencia de la República Dominicana. — #dominicanosoy #dominicanosoy🇩🇴 #soydominicano #soydominicana🇩🇴 #dominicana #republicadominicana #juanpabloduarte (at SantoDomingo, Republica Dominicana) https://www.instagram.com/p/CKhCSRrBiII/?igshid=vtoombqv58oh
0 notes
creoqueaparesesenelvideo · 4 years ago
Quote
Juan Pablo Duarte y Díez (26 de enero de 1813, Ciudad Colonial, Santo Domingo, España Colonial; 15 de julio de 1876, Caracas, Venezuela), fue un profesor, militar, político y activista liberal dominicano.12Es, junto a Francisco del Rosario Sánchez y Matías Ramón Mella, uno de los Padres de la Patria y fundadores de la República Dominicana. Ideó y presidió la lucha de varias organizaciones civiles-político-militares clandestinas como La Dramática, La Filantrópica y la más conocida, La Trinitaria, creadas para luchar contra la invasión haitiana y por la independencia de la República Dominicana.3 Duarte, aun siendo exiliado supervisó y financió en gran medida la guerra de independencia llevada a cabo por sus compañeros de lucha, lo que derivó en su ruina económica y la de su familia, poseedora de amplias riquezas provenientes de los negocios de comercio marítimo que realizaba su padre.45 Su visión liberal se vio socavada por las élites conservadoras, que pretendían someter el país a las potencias coloniales y volver al regionalismo tradicional. Sin embargo, sus ideales democráticos han servido como principios rectores para la mayoría de los gobiernos dominicanos. Su iniciativa lo convirtió en un mártir político a los ojos de las generaciones posteriores. En 1842, Duarte se convirtió en oficial de la Guardia Nacional, dirigida en aquel tiempo por el gobierno haitiano. En 1843 participó en la «Revolución Reformista» contra la dictadura de Jean Pierre Boyer, quien amenazaba con invadir la parte occidental de la isla con intención de unificarla6. Tras la derrota del presidente haitiano Charles Herard y la proclamación de la independencia dominicana en 1844, la Junta formada para designar al primer gobernante de la nación eligió por mayoría a Duarte para presidirla pero él declinó la propuesta, tomando el cargo en su lugar Tomás Bobadilla. Duarte sostuvo fuertes desacuerdos con sectores conservadores, en especial con el terrateniente Pedro Santana, quien consideraba inviables las ideas independentistas de Duarte. De estas pugnas, Santana salió fortalecido mientras que Duarte sufrió varios destierros, finalmente vivió en Venezuela donde fue recibido y acogido, quedándose a vivir en este país hasta finalmente morir exiliado en 18767.
Tumblr media
0 notes
descifrandolanoticia · 4 years ago
Text
Presidente del PUN afirma corrupción política del Estado afecta a la nación
Presidente del PUN afirma corrupción política del Estado afecta a la nación #DescifrandoLaNoticia #PUN #Política
El presidente del PUN, Pedro Corporán, dice que en el aniversario 177 de la independencia nacional, los dos grandes latrocinios que amenazan el proyecto de nación de la República Dominicana, son la invasión pacífica haitiana y la corrupción política del Estado. Declaró que la IV república que es la versión histórica que vivimos, está en decadencia y requiere de un proceso de refundación para…
Tumblr media
View On WordPress
0 notes
jaimeariansencespedes · 5 years ago
Photo
Tumblr media
008 - BICENTENARIO - INDEPENDENCIA HISPANOAMERICANA - (1810-1830) -
Era de la revolución y Retroversión de la soberanía de los pueblos.
El principal detonante de la independencia hispanoamericana fue el descabezamiento de la monarquía por la renuncia de los reyes españoles y la invasión napoleónica a España en 1808. Desde entonces, los patriotas, denominados así por su identificación con América (la Patria Grande), recurrieron a las armas frente a España con el objeto de defender la libertad frente a las autoridades peninsulares y obtener la independencia de los nuevos estados.
La emancipación americana forma parte de un periodo mayor, denominado de Revoluciones Atl��nticas, que ocurre entre finales del siglo XVIII y principios del XIX, y proponían formas de gobierno republicanas para los nuevos países independientes, y que engloba hechos tales como la independencia de Estados Unidos en 1776, la Revolución francesa de 1789, la Revolución haitiana (1791), o la Independencia de Brasil, y que ocurrieron fuera del mundo hispano.
Insurrección de Tacna (1811)
Los patriotas peruanos, conocedores del avance de los ejércitos argentinos en el Alto Perú (actual Bolivia), organizaron en Tacna un movimiento libertario contra el virrey José Fernando de Abascal y Sousa.
El 20 de junio de 1811 (día de la batalla de Guaqui, en donde las tropas realistas al mando del general José Manuel de Goyeneche vencieron a los independentistas rioplatenses), los patriotas, dirigidos por Francisco Antonio de Zela, asaltaron los dos cuarteles militares realistas de Tacna, proclamando a Zela comandante militar de la plaza, a Rabino Gabino Barrios como coronel de milicias de infantería y al curaca Toribio Ara como comandante de la división de caballería.
El día 25 de junio se supo en Tacna de la derrota de los patriotas argentinos en Guaqui. Aprovechando el desconcierto provocado por la noticia, los realistas desmontaron el movimiento y tomaron preso a Francisco Antonio de Zela, a quien llevaron a Lima donde fue condenado a cadena perpetua en la cárcel de Chagres, Panamá, donde falleció en 1819, a los 50 años de edad.
Francisco Antonio de Zela y Arizaga nació en Lima, el 24 de julio de 1768 y falleció en Chagres, actual Panamá, 18 de julio de 1819, fue un político peruano que encabezó la Revolución de Tacna de 1811, siendo reconocido como uno de los próceres de la Independencia del Perú.
Francisco Antonio de Zela era hijo del español Alberto de Zela y Neyra, y de Mercedes de Arizaga y Hurtado de Mendoza, natural del Callao, radicados en Lima. Estudió en el Seminario Conciliar de Santo Toribio hasta 1784, cuando a solicitud de su padre pasó a Tacna como aprendiz de ensayador y fundidor de las Cajas Reales de dicha localidad. Ascendió en dicha profesión hasta llegar a ser ensayador. ​ Se casó con María de la Natividad Siles y Antequera (tacneña), con quien tuvo nueve hijos.
Zela es conocido por dar el primer grito libertario del Perú en la ciudad de Tacna el 20 de junio de 1811 siendo considerado el líder de la primera insurrección armada por la independencia del Perú.
La rebelión de Tacna estuvo en estrecho contacto con la Revolución Argentina, que se inició en Buenos Aires el 25 de mayo de 1810. Los argentinos enviaron un ejército a la Provincia de Charcas (actual Bolivia), bajo el mando del general Antonio González Balcarce y del abogado Juan José Castelli. Los rioplatenses enviaron proclamas a varias ciudades del sur del Perú, invitándolos a seguir la revolución. Revista Bicentenario de la Independencia del Perú - (1821-2021) - [email protected]
0 notes
quecooking2 · 6 years ago
Photo
Tumblr media
Hoteleros con el grito al cielo: No aguantamos mas la invasión Haitiana Hoteleros con el grito al cielo: No aguantamos mas la invasión Haitiana La Redacción Nacionales 0…
0 notes
rdsolenodonte · 2 years ago
Text
El gobierno no quiere, no puede, ni le interesa resolver la invasión haitiana
El gobierno dominicano ha destacado en los foros internacionales por su continuo llamado de ayuda para Haití, tal pareciera que es un gobierno elegido por los dominicanos para que represente los intereses de los haitianos. Son muchas las declaraciones donde se dice que República Dominicana no puede cargar con los problemas del vecino país; pero en los hechos se ve todo lo contrario. Nuestras…
Tumblr media
View On WordPress
0 notes
jgmail · 5 years ago
Text
La tradición negra radical y el marxismo en Cuba (I)
Maikel Pons Giralt
Nota: Participaré próximamente de un Seminario, convocado por CLACSO, titulado “Marxismos negros: raza y clase en el pensamiento crítico afrodescendiente y africano”, coordinado por los profesores Ramón Grosfoguel, Jacqueline Laguardia Martínez y Daniel Montañez. En la fundamentación del curso se consigna: “…. en este seminario se estudiarán, bajo la idea de “marxismos negros” acuñada por […]
Nota:
Participaré próximamente de un Seminario, convocado por CLACSO, titulado “Marxismos negros: raza y clase en el pensamiento crítico afrodescendiente y africano”, coordinado por los profesores Ramón Grosfoguel, Jacqueline Laguardia Martínez y Daniel Montañez. En la fundamentación del curso se consigna: “…. en este seminario se estudiarán, bajo la idea de “marxismos negros” acuñada por Cedric Robinson, aquellas reflexiones marxistas heterodoxas elaboradas desde la experiencia histórico-social de la población negra, marcada por siglos de esclavitud y superexplotación.” Mi participación tratará sobre dicho “marxismo negro”, específicamente en Cuba. Comparto plenamente la intención del curso, al tiempo que considero que la expresión “marxismo negro” es problemática en el contexto cubano. En aras de reflexionar con mayor amplitud sobre ello, pedí opinión a varios colegas, especialistas en el tema racial en nuestro país, sobre este concepto y sus posibles usos. En un inicio, propuse solo un intercambio personal de trabajo. Sin embargo, las respuestas, por su profundidad, me parecen útiles no solo para el curso en específico, sino para el debate más general sobre estos temas en nuestro país. Por ello, he solicitado autorización a sus autores para ir publicándolas en este blog. Asimismo, el artista plástico Alexis Esquivel —con una obra esencial sobre el tema racial en Cuba— ha permitido utilizar piezas suyas para acompañar dichas respuestas. Como es lógico, no coincidimos todos en lo que cada uno dice, pero aprecio cierto consenso —entre los colegas que hemos estado intercambiando sobre el tema— en torno a dos cuestiones: ciertamente, es problemática esa etiqueta para Cuba, pero también es imprescindible contribuir al empeño de visibilizar el marxismo elaborado mayormente por personas negras cubanas en relación con la cuestión racial. En ese horizonte, es necesario situar ese pensamiento como parte de los debates y procesos políticos de los que participaron y no solo limitarnos al estudio de sus “ideas”. Esto es, tratarlos como sujetos políticos, contemporáneos de su tiempo —cosa que hace el curso mencionado y que es necesario seguir haciendo— y no solo como “archivos” para su estudio por parte del investigador actual. Comienzo la publicación de tales respuestas con el aporte del investigador Maikel Pons Giralt. Julio César Guanche
La tradición negra radical en Cuba, y el marxismo
Por Maikel Pons Giralt
En el entendimiento de Cedric Robinson, el marxismo negro es una articulación de luchas, fuerzas sociales, intelectuales y activistas que articulan con las resistencias históricas de negros e indígenas. Desde un reconocimiento, acercamiento crítico o identificación con el marxismo europeo, ese enfoque profundiza la contextualización de esas luchas y ese marxismo a nuestras realidades. Ese marxismo negro jugó un papel fundamental en los procesos de liberación nacional en América, África y Asia y luego en la etapa de desarrollo nacional:
“Black Marxism was not a site of contestation between Marxism and the tradition, nor a revision. It was a new vision centered on a theory of the cultural corruption of race. And thus the reach and cross-fertilization of the tradition became evident in the anticolonial and revolutionary struggles of Africa, the Caribbean, and the Americas.” [El marxismo negro no era un sitio de contestación entre el marxismo y la tradición, ni una revisión. Era una nueva visión centrada en una teoría de la corrupción cultural de la raza. Y así, el alcance y la fecundación cruzada de la tradición se hizo evidente en las luchas anticoloniales y revolucionarias de África, el Caribe y las Américas.] (Robinson, 2000, p. 33)
Para Ramón Grosfoguel, uno de los teóricos contemporáneos del tema:
“El marxismo negro no es un color de piel, sino una manera de entender el mundo. Los marxistas negros piensan desde la experiencia histórico social de la articulación entre explotación capitalista y dominación racial, desde la experiencia de un esclavo negro en un mundo capitalista dominado por blancos occidentales, desde la experiencia de un sujeto negro inferiorizado racialmente en un mundo de Estados modernos blancos occidentalizados. El pensamiento marxista negro surge de la visión crítica que se produce a partir de la geopolítica y corpo-política del conocimiento de la opresión racial de un negro en un mundo capitalista, moderno, occidental dominado por elites blancas occidentales. No todo lo que piensan personas clasificadas socialmente como negras en las jerarquías raciales constituye pensamiento crítico.”(Grosfoguel, 2018, p. 18)
Avanza en esa misma dirección para agregar que:
“Lo que hace que la mayoría de los marxistas negros sean sujetos socialmente clasificados como negros y no sean blancos, es la urgencia que produce la vivencia de intentar entender la articulación entre racismo y capitalismo. Por eso, no es casual que la mayoría de los marxistas negros sean negros o que la mayoría de las feministas sean mujeres, es decir, porque son los que confrontan el problema con más urgencia, los que viven la experiencia de ser sujetos oprimidos por relaciones de dominación, en un caso racial y en otro patriarcal. Pero existen personas que son socialmente clasificados como blancas y que podemos incluir como parte integral de la tradición de los marxistas negros, por haberse tomado en serio la teoría crítica de intelectuales negros que nace de la experiencia de opresión racial de un esclavo y/o un asalariado negro super explotado en el capitalismo racial.” (Ídem., pp. 18-19)
A continuación, reflexiono a partir de estos supuestos epistémicos. No obstante, reconozco que todavía necesitamos realizar análisis más profundos y argumentados, sobre estos temas, su concepción e interpretación en el contexto cubano.
Insurrecciones antiesclavistas en Cuba
Yo creo que es posible identificar una tradición negra radical, primero, en el cotidiano y monumental acto de la resistencia cimarrona e indígena, y la conformación de los palenques donde se estructuró una forma de vida alternativa al sistema esclavócrata/colonial.
A modo de ejemplos debemos mencionar las insurrecciones de esclavizados en el Cobre entre los siglos XVI-XVIII [1] y las decenas de negros en las milicias habaneras que enfrentaron la invasión inglesa en 1762. Aparejado a esto, es necesario pensar en la emergente clase de mulatos y negros, con origen en las primigenias formas de sociabilidad de las Cofradías y/o Cabildos de Nación.[2]
En este grupo social emergente (creo que llamarle clase sería un poco precipitado, pero tenían elementos estructurantes de clase, en términos marxianos) podemos identificar el inicio de lo que llaman Du Bois, C. R. L. James, Robinson y otros representantes del black marxism, una incipiente intelligentsia negra.
Según Robinson, sería el fermento de una burguesía conservadora pro colonial y luego proburguesa. Al propio tiempo, fue la intelligentsia que luego, en diferentes momentos históricos se radicaliza y lidera procesos como la Sublevación de Aponte en 1812 y en 1844 la llamada Conspiración de la Escalera.
El primero de estos hechos debe ser analizado en una proyección internacional.[3] En esa perspectiva, la Revolución Haitiana tiene un peso fundamental en la creación de imaginarios literarios y culturales.[4] Baste mencionar una novela como El reino de este mundo (1946) publicada ocho años después de Los Jacobinos Negros de CLR James, donde Carpentier enuncia su concepción de lo real-maravilloso.
En términos político-epistémico la visión carpenteriana se pude entender como una apreciación descolonizadora de los acontecimientos en América. Cuestión sugerente si analizamos las posibles influencias diaspóricas de marxistas, panafricanistas caribeños y africanos, comunistas y los posicionamientos políticos que acompañaron la vida de Carpentier en el exilio y en Cuba.
También podremos notar esta influencia de la Revolución haitiana y del Caribe en historiadores como José Luciano Franco, que por cierto también se admira por figuras negras como Maceo, Aponte y Manzano. En su proyección analítica se pueden establecer nexos con la visión estructural y estructurante de la raza en la sociedad, característica del marxismo negro de Du Bois, Oliver Cox, James, figuras estas que eran contemporáneas entre sí.
El otro acontecimiento, la farsa de la Conspiración de la Escalera, ocurrió al unísono con una de las mayores y mejor articulada sublevación de esclavos en Cuba, liderada por la esclava Carlota en el ingenio Triunvirato. Desconozco si se ha comprobado la conexión entre estos dos hechos. Sería interesante saberlo porque sería una evidencia para presumir alianzas entre fuerzas sociales, ubicadas social e históricamente en diferentes espacios pero con un mismo origen, lo cual los convertía en enemigo común para el sistema. Estos acontecimientos son vitales para entender la larga onda “del miedo al negro” en el contexto cubano.
Conocemos la crueldad desmedida contra esta naciente burguesía/intelligentsia negra cubana, que no solo se expresa en la represión durante los hechos referidos, sino además en la sistemática producción intelectual que los subvalora, criminaliza y los declara una “amenaza” a las “buenas costumbres” y a la “civilización”.
En este punto podemos cuestionar a Saco, Arango y Parreño, y a toda una pléyade perteneciente a la intelligentsia blanca, eurocéntrica, hegemónica, matizada por sus posiciones ante la independencia, de autonomismo o anexionismo, y la conducta de pro o antiesclavismo que podía coincidir o no con la postura ante la independencia.
En todo caso, siempre fue un factor común la invisibilización del legado africano y/o la tendencia al blanqueamiento o a la eugenesia a través de la inmigración forzada de blancos/as, el cruzamiento o del exterminio, ese contradictorio tránsito de “negros/as de Cuba a cubanos negros/as”, que muy bien ilustra Martínez Heredia, donde se establecieron clases, razas, grupos sociales, en relación con la dominación y la rebeldía.
El proceso permitió el avance de un racismo antinegro promovido por los dominantes para disfrazar el crimen colosal de la esclavitud, presentarla como una “consecuencia de un orden natural” y así naturalizar esa inferioridad. (Martínez Heredia, 2018, pp. 417-426).
Las guerras de independencia
Siguiendo una lógica cronológica, una segunda etapa de emergencia notable de una tradición radical negra cubana, tendría que ser ubicada en el inicio de las guerras independentistas contra el poder colonial español.
No me refiero solo a la participación de los negros de Cuba, sino también a la producción y visibilidad de una intelligentsia negra, radical, revolucionaria, popular y democrática que en no pocas ocasiones lideró momentos cruciales de las diferentes etapas de lucha. Se trata del liderazgo indiscutido de hombres negros como Antonio Maceo, Guillermón Moncada, Quintín Bandera, de mujeres negras como Mariana Grajales yMaría Cabrales, que ponen en tensión la cultura racista y su imaginario inferiorizante.
No obstante, persistió una estructura social donde esos patrones sociales sobre el negro esclavo, eran asociados con la incivilización, la brutalidad, y la incapacidad genética para emanciparse. El hecho determinó que existieran y trascendieran en el campo insurrecto posturas contradictorias en la comprensión de la importancia del tema étnico/racial.(Cepero Bonilla,1971)
De todas las tensiones y contradicciones que caracterizaron y dieron forma al nacionalismo cubano, ninguna fue tan complicada e importante como la que se desarrolló en torno al tema de las razas, como demuestra Ada Ferrer. (Ferrer, 1999, 2002)
Para hablar de una tradición radical, revolucionaria y/o socialista o marxista en Cuba, tenemos que entender la dinámica raza-clase dentro de las luchas independentistas, especialmente la Guerra del 95 donde ya existen evidencias de proyectos políticos republicanos (a la cabeza Maceo y Martí) donde lo racial y lo nacional se entrecruzan en una importancia estratégica.
El radicalismo negro después de 1902
En aquellas primeras etapas del radicalismo negro y la conformación de una intelectualidad negra destacan sin dudas Manzano, Aponte, Plácido, Maceo, Mariana Grajales, Juan Gualberto Gómez, Rafael Serra, Evaristo Estenoz y Pedro Ivonet.
Este segundo momento de la tradición radical negra cubana incluso determinará discursiva, simbólica y políticamente, ya en la República, la que podemos visualizar como una tercera etapa de esa tradición: la creación del Partido Independiente de Color y luego la Masacre de 1912. Este genocidio contra los cubanos negros puede explicarse teniendo como premisa las tesis del capitalismo racial colocadas por Dubois, James, Cox, Eric Williams y Cedric Robinson. Creo que luego de los sucesos de 1912 comienza una articulación visible o sutil entre esta tradición negra radical cubana y aproximaciones epistemológicas y políticas más cercanas a las diferentes tendencias del marxismo que ocuparon el espectro cubano.
Considero que tendríamos una tradición radical negra evidenciada en los procesos de liberación antiesclavistas y anticolonial; y una intelligentsia cubana dedicada a lo racial en concepciones positivistas, liberal humanistas, y/o marxistas en sus variados matices. Existen evidencias que desde 1901 se había establecido una relación diaspórica entre los afrocubanos y los afronorteamericanos, como la establecida entre Juan Gualberto Gómez y Booker T. Washington (Guridy, 2010, p. 17).
Las relaciones con la cultura afroamericana sin dudas van a permear la intelligentsia afrocubana y la recepción de discusiones artísticas, literarias y políticas en las que se incluían las del movimiento anarcosindicalista, el trostkista, el comunista, y el panafricanismo iniciado por Marcus Garvey con la idea del “regreso a África”, así como la interacción con el proceso conocido como “Renacimiento de Harlem”.[5]
Este vínculo no puede ser codificado como un compromiso con las luchas radicales del pueblo afroamericano, o al menos con las demandas más exigentes, eran notables por ejemplo las diferencias en interpretar el papel de la educación para los negros/as entre Booker y Du Bois.
No obstante creo que es una relación poco explorada, y que en esta búsqueda de la tradición radical negra y un marxismo negro en Cuba,nos puede informar sobre varias cuestiones.
Considero que entre las figuras que por su obra política y/o intelectual/artística avanzaron más hacia esa posible conexión entre el panafricanismo, el marxismo negro y su articulación con las tradiciones liberadoras negras en la primera mitad de la República, se encuentran: Julio A. Mella, Villena, Roa, Sandalio Junco, Rómulo Lachatañeré, Ángel César Pinto Albiol, Cepero Bonilla, Juan Manuel Chailloux Cardona, Nicolás Guillén, Alejo Carpentier y Wilfredo Lam.
La elaboración cultural donde se premedita e induce el apagamiento de la herencia negro/africana en Cuba y a una emergencia de la tradición negra radical cubana, es el eje central para el análisis crítico, descolonizador de figuras como Lachatañeré (El sistema religioso de los afrocubanos, 1938), Cepero Bonilla (Azúcar y Abolición, 1948), Ángel Cesar Pinto Albiol (El negro en la economía y la política cubanas, 1946), y Juan M. Chailloux Cardona (Los horrores del solar habanero, 1945), antes de la revolución de 1959.
Estos análisis tienen una marcada impronta marxista pero también apuntan a brindar argumentos para poder realizar una reconstrucción negra[6], o son cercanas a la visión de Oliver Cox sobre el capitalismo racial, las castas y clases[7], por lo cual considero que en términos historiográficos y sociológicos articulan conceptualmente con esa emergencia de un marxismo negro.
En un segundo grupo de fuentes para esa elaboración y aportaciones al marxismo negro cubano yo colocaría a figuras como Fernando Ortiz y toda su monumental obra, la cual elogió sin reservas alguien como CRL James. También estarían Lydia Cabrera, Gustavo Urrutia, Alberto Arredondo, Sixto Gastón Agüero, Alberto Arredondo y Juan René Betancourt. Luego —el orden de importancia no es lo crucial, pues pienso mejor en la idea de actores-redes—, ubico a marxistas, sindicalistas, socialistas como Salvador García Agüero, Blas Roca, Jesús Menéndez o Antonio Guiteras.
De especial interés me resulta el debate [mencionado por Julio César Guanche en el texto de su cuestionario] sobre el libro de Serafín Portuondo Linares.[8] En este punto deseo retomar a Cedric Robinson cuando señala lo siguiente:
“Como había sido para Cesaire, así fue para todos ellos. Todos pasarían por las afirmaciones propositivas de la ideología burguesa de la superioridad cultural occidental con su único racialismo modestamente disfrazado. Pero eventualmente emergerían convencidos de que se requería un logro mayor y diferente. Al principio, creerían que la respuesta estaba en la visión de la lucha de clases […] Esa concepción, también, sería insuficiente. […] A partir de momentos como estos, cada uno en su propio tiempo, volvió su rostro a la tradición histórica de la liberación negra y se convirtió en radicales negros. Comenzaron la realización de su historia y su tarea teórica.” (Ídem., p. 184)
En la medida que la intelectualidad cubana retomó la tradición histórica de las luchas de los esclavizados, de los invisibilizados, y lograron colocar como foco lo racial para entender mejor la realidad cubana en una perspectiva crítica del marxismo, se articuló lo que podríamos llamar un marxismo negro cubano.
Insisto que existe una articulación esencial entre la tradición radical negra, los marxismos negros y lo que se ha dado en llamar pensamiento crítico/descolonizador caribeño.
La tradición negra radical y el marxismo negro en Cuba tras 1959
Una cuarta etapa en esta (forzada) periodización sería el proceso de la Revolución Cubana tras 1959.
Con sus alcances, tensiones, conflictos, contradicciones y retrocesos, la Revolución Cubana se enmarca como un momento visible y reconocido en esa articulación de fuerzas e ideas que reconoce la tradición radical negra y el (los) marxismo (s) negro (s).
Son palpables las simpatías y conexiones de líderes indiscutibles del pensamiento panafricanista, de las luchas por los derechos civiles en EE.UU y del marxismo negro caribeño, afroamericano y africano.
A modo de ejemplo es notable el apéndice “De Toussaint L’Ouverture a Fidel Castro” que Cyril Lionel Robert James le hace a la edición de Los Jacobinos Negros de 1962; el ensayo de Eric Williams en 1970 “De Colón a Castro: La historia del Caribe 1492-1969”, la actividad de la Tricontinental y toda la interacción de la Revolución Cubana con las luchas anticoloniales en América, África y Asia, así como con el movimiento por los derechos civiles en EEUU, y de forma particular con el Black Power.
Ese conjunto hace parte de la expresión de “marxismo negro”, en una relación que, como sabemos, no siempre ha sido armoniosa. En estos momentos Agustín Lao-Montes[9] y quien esto escribe, trabajamos en un artículo que profundiza sobre la cuestión racial en el crucial periodo de los 60s-70s.
Surgen interrogantes concretas: ¿se puede hablar de marxismo negro luego de la Revolución? ¿Quiénes serían los exponentes?
Creo que el proceso revolucionario constituye una etapa de articulación de redes, actores y de una epistemología que define el compromiso diaspórico con lo que yo llamo una cubafricanidad (siguiendo el concepto de Leila González de Amefricanidad), un proceso de continuum y también de ruptura con la tradición radical negra liberadora, y con el potente pensamiento social crítico y descolonizador que desde la República ya se desarrollaba.
Evidentemente, el impulso de la Revolución es decisivo, en términos de praxis política y también de pensamiento. En ello, el papel de Fidel Castro y de Ernesto Che Guevara es vital.
En una primera línea de pensamiento, en los 1960, reconozco a historiadores como Walterio Carbonell y Manuel Moreno Fraginals. Proyectos colectivos afines con ese marxismo negro y de los que luego resaltaron individualidades están Pensamiento Crítico (Fernando Martínez Heredia), Ediciones El Puente (Rogelio Martínez Furé, Nancy Morejón, Gerardo Fulleda, Pedro Pérez Sarduy), sin dejar de mencionar el trabajo de instituciones como Casa de las Américas y la Casa del Caribe, esta última en Santiago de Cuba.
Ya en los 1970 el personaje de Caliban cobra con Roberto Fernández Retamar un nuevo significante. Se coloca como una de las creaciones del pensamiento descolonizador cubano, que va más allá de sus fronteras y se intercala con el legado del marxismo negro.
Entre los 1970s-90s también destacan las investigaciones de Juan Pérez de la Riva, Pedro Deschamps, Francisco Pérez Guzmán, Ana Cairo, Joel James Figarola, Tomás Fernández Robaina[10] y muchos otros/as que potencializaron la perspectiva de estudiar “la historia de la gente sin historia”, especialmente de los negros/africanos en la historia y la sociedad cubana. En los 1980s la revista Anales del Caribe resulta vital para entender esas interacciones diaspóricas de lo caribeño en lo cubano y lo cubano en lo caribeño.[11]
Entre las personas que siguen trabajando en nuestros días, reconozco ese marxismo negro y/o la tradición radical negra cubana en investigadores, artistas y/o activistas como (es una lista distante de ser exhaustiva): Zuleica Romay, Daysi Rubiera, Oílda Hevia, Sandra Abd’Allah-Alvarez Ramírez[12], Roberto Zurbano, Alberto Lescay, Roberto Diago, Esteban Morales, María del Carmen Barcia, Olga Portuondo, Mildred de la Torre, Eduardo Torres-Cuevas, Alejandro de la Fuente, Pedro Cubas, Jesús Guanche, Félix Valdés, Rebecca Scott, Aline Helg, Alberto Abreu, Víctor Fowler, Carlos Moore, Alberto Abreu, Julio César Guanche, Ismael Sarmiento, Aisnara Perera, Aida Esther Bueno Sarduy, Tomás Fernández Robaina, Agustín Lao-Montes, Martha Cordiés, Rosa María Argilagos, entre otros/as. Algunos, como Juan Francisco Benemelis y Carlos Moore, se ubican como representantes de un Black Power cubano. En mi criterio las evidencias conceptuales y prácticas no son palpables, por eso me inclino más a ubicar la relación con el Black Power en sus diferentes momentos, como parte de esa articulación con las fuerzas de la tradición radical negra y los marxismos negros, lo cual se podría demostrar desde el punto de vista conceptual.
Hay que profundizar en la sistematización de esta relación, de los avances, retrocesos y desafíos de estos marxismos para la realidad cubana. En concreto, se trata de visibilizar un marxismo y unos marxistas que han sido subalternizados desde una visión hegemónica del marxismo que viene de Europa y que la mayor de las veces no responde muchas de las dinámicas que tenemos, y deviene inoperante para la realidad cubana, caribeña, latinoamericana.
Referencias:
1-Robinson, Cedric J. Black marxism: the making of the Black radical tradition. The University of North Carolina Press, 2000.
2-¿Negros marxistas o marxismos negros?: una mirada descolonial Tabula Rasa. Bogotá – Colombia, No.28: 11-22, enero-junio 2018.
Martínez Heredia, Fernando. Pensar en tiempo de Revolución: antología esencial. Ciudad Autónoma de Buenos Aires: CLACSO, pp. 417-426, 2018.
Cepero Bonilla, Raúl. Azúcar y abolición. La Habana: Editorial de Ciencias Sociales, 1971.
Ferrer, Ada. Insurgent Cuba. Race, Nation, and Revolution, 1868–1898. The University of North Carolina Press, Chapel Hill & London, 1999.
_____________. Cuba insurgente. Raza, nación y revolución. Trad. de Abel González. Revista Caminos, 2002, pp. 19-34. Disponible en: https: //revista.ecaminos.org/article/cuba-insurgente-raza-nacion-y-revolucion-1868-1898/
Guridy, Frank Andre. Forging diaspora: Afro-Cubans and African Americans in a world of empire and Jim Crow. The University of North Carolina Press, 2010.
James, C.R.L. Los Jacobinos Negros: Toussaint Louverture y la Revolución de Haití. Ciudad de México: Fondo de Cultura Económica, 2003.
Notas:
[1] Las minas de Santiago del Prado y la rebelión de los cobreros 1530-1800, José Luciano Franco. Editorial de Ciencias Sociales, Ciudad de la Habana, 1975.
[2] Los Ilustres apellidos: negros en la Habana Colonial, María del C. Barcia. Ediciones Boloña, 2009.
[3] A propósito del tema, Matt D. Childs proporciona un análisis en profundidad sobre la Rebelión de Aponte en 1812, situándola en contextos locales, coloniales, imperiales y del mundo atlántico. Childs explica cómo los esclavos y las personas libres de color respondieron al “auge del azúcar” del siglo XIX en la colonia española al planear una rebelión contra la esclavitud racial y la agricultura de plantación. Alcanzando alianzas entre personas libres de color y esclavos, negros y mulatos, africanos y criollos, y poblaciones rurales y urbanas, los rebeldes fueron impulsados ​​a actuar por una creencia generalizada en rumores que prometían que la emancipación estaba cerca. Inspirándose más en la revolución haitiana de 1791, los rebeldes buscaron destruir la esclavitud en Cuba y tal vez incluso poner fin al dominio español. Al comparar sus hallazgos con estudios de insurrecciones de esclavos en Brasil, Haití, el Caribe británico y los Estados Unidos, Childs ubica la rebelión dentro de la historia más amplia de la revolución mundial atlántica y el cambio político. (The 1812 Aponte Rebellion in Cuba and the Struggle against Atlantic Slavery, Matt D. Childs, University of North Carolina Press, 2006). Desde esta perspectiva, y a través de otras evidencias, podemos teorizar que la Sublevación de Aponte constituye un primer momento en la conformación de una teoría y práctica radical negra en Cuba.
[4] Ver Espectros y espejismos: Haití en el imaginario cubano, Elzbieta Sklodowska; Prophetic Visions of the Past: Pan-Caribbean Representations of the Haitian Revolution, Víctor Figueroa.
[5] Ver David Levering Lewis, Cuando Harlem estaba de moda, Ediciones del Oriente y el Mediterráneo, 1995; Alain Leroy Locke, El nuevo negro: una interpretación . Nueva York: Arno Press, 1925.
[6] Ver W. E. B. Du Bois, Black Reconstruction: An essay toward a history of the part which black folk played in the attempt to reconstruct democracy in America, 1860-1880, Harcourt, Brace and Company, New York, 1935.
[7] Ver Oliver Cox, Caste, class and race. A study and social dynamics, Monthly Review Press, New York, 1959; Montañez, Daniel. La teoría del sistema-mundo es negra y caribeña: capitalismo y racismo en el pensamiento crítico de Oliver Cox. Bogotá: Revista Tabula Rasa, (28), pp. 139-161, 2018.
[8] Portuondo Linares, Serafín. Los Independientes de Color. Historia del Partido Independiente de Color (2da. edición corregida y mejorada [sic]. La Habana: Editorial Caminos, 2002.
[9] Será útil en esta reconstrucción el último libro de Agustín Lao-Montes Contrapunteos diaspóricos: Cartografías políticas de Nuestra Afroamérica, Universidad Externado, Colombia, 2020.
[10] De Tomás Fernández Robaina es vital revisitar El negro en Cuba 1902-1958 y Antología del pensamiento antirracista.
[11] Ver la excelente antología compilada por Félix Valdés, Antología del pensamiento crítico caribeño contemporáneo. Ciudad Autónoma de Buenos Aires: CLACSO, 2017.
[12] Considero un proyecto importante para este empeño de visibilizar una teoría radical negra en Cuba y/o marxismo negro el Directorio de Afrocubanas liderado por Sandra Álvarez y otrxs activistas sociales.
0 notes