poesia-barata69

[poesia-barata69]

Color miel

Se siente como al hacer arte,

como al ver el cielo,

la luna o las estrellas,

como sentarse a la orilla del mar

y solo contemplar...

De alguna forma esos ojos te dan la misma sensación,

quieres verlos, necesitas verlos

la vida duele menos al verlos,

esos hermosos ojos color miel,

adictivos al hombre que se enloquece

por sus hermosos detalles.

Últimamente solo quiero guardarte en mis memorias,

tener esos ojos de frente y admirarlos

apreciarlos, y decirtelo

aunque no lo creas

que tienes los ojos mas bellos del mundo,

que eres hermosa

que no eres el problema.

Quiero ver esos ojos color miel

y extrañarlos apenas deje de verlos,

extrañarlos tanto

como se extraña el mar.

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Y te abrazo con ganas de que no te vayas nunca,

Que te quedes,

Que te fusiones conmigo y vivas entre mis carnes,

Que hagamos hasta lo imposible

Pero que no te vayas,

No te vayas nunca

No lo soporto

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Who's a good boy?

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~ ~

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~ ~

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Quiero que alguien me ame con una intensidad que sea capaz de incendiar el mundo, solo por mi.

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Te extraño

Pocas cosas extraño en la vida

pocas cosas me han hecho feliz,

pocas cosas me dan ganas de

vivir.

Sin duda reflexiono te recuerdo

y suspiro: "aghh".

Extraño la forma en que me miras,

extraño la sonfonía de tu risa,

extraño los pies mojados después

de bañarnos.

Hoy por hoy, te extraño,

extraño ese pelo corto despeinado,

extraño tu cuerpo y la forma

en que hacíamos el amor.

Te extraño y más extraño

no poder confesartelo.

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[poesia-barata69]

La poesía es la insurgencia, el rugido del ser que se niega a ser domesticado. Es un grito de rebeldía, un bálsamo para el alma atormentada por la mediocridad. Salvo la poesía, todo está bien, porque en ese rincón de la palabra desnuda encontramos la verdad que nos han robado.

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¿Me recomiendas un poema que me duela muchísimo, por favor?

Ya no, de Idea Vilariño

Ya no será ya no no viviremos juntos no criaré a tu hijo no coseré tu ropa no te tendré de noche no te besaré al irme nunca sabrás quién fui por qué me amaron otros.

No llegaré a saber por qué ni cómo nunca ni si era de verdad lo que dijiste que era ni quién fuiste ni qué fui para ti ni cómo hubiera sido vivir juntos querernos esperarnos estar.

Ya no soy más que yo para siempre y tú ya no serás para mí más que tú. Ya no estás en un día futuro no sabré dónde vives con quién ni si te acuerdas. No me abrazarás nunca como esa noche nunca.

No volverá a tocarte.

No te veré morir.

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Querida muerte

Muchas personas sienten  el miedo a la muerte  en sus últimos instantes, a lo largo de su vida  piensan en ello como un  momento que pasará, nada más.

Desearía poder hacer lo mismo, pero en cambio la siento en las noches, la siento en el borde de mi cama, acariciándome el pelo y susurrándome al oído: un día te tocará a ti. ¿Estas listo? ¿O aún me temes?    Que vacío más oscuro y aterrador.

Aún soy joven pero el tiempo no se detiene los días pasan, y la verdad se asoma; me estoy volviendo viejo.

Apenas recuerdo cuando era niño y el reflejo que veo en el espejo ya no lo reconozco.  El futuro me aterra desearía ser joven por siempre.

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Solo han quedado pequeños fragmentos de recuerdo de lo que una vez fui y sé que esto me lo dire toda la vida.

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Brindo por mi, por la cerveza, y por las canciones que me recuerdan a ella.

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Eres como un atardecer, te puedo ver desde lejos pero no te puedo tener cerca.

Así que solo me toca ver como te vas, con la esperanza de que algún día vuelvas.

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Te amo, te reconozco siempre

No, no vengas

Prometí no mirar tu cara

Tus agujas encendidas

Como lava traspasan mis visceras

Eres el ermitaño de sombrero negro

Que más me gusta

Nunca quise convertirme en villano, nunca quise

Que el mejor villano es el que nada oculta

y el que nadie nombra

Hoy mi rencor se ha llevado el recuerdo de quién eras consigo

Atándole a sus fuertes jarcias con un cinto de amargura

Hoy se ha olvidado tu recuerdo y mi rencor no se ha ido

Ya no sé quién eras y olvide quién habías sido

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Soñandote

Desquiciada mente, por meses sigues siendo la espina clavada en mi mente, no puedo sacarte, no puedo arrancarte y menos estriparme el cerebro para dejar de pensarte, no puedo, no puedo. Sigues apareciendo como un fantasma en mis sueños diciendome te extraño, vuelve, besandome sin parar, abrazandome sin pensar, cogiendome como si la distancia y el tiempo hubiesen hecho estragos y la necesidad de que nuestros cuerpos esten juntos de nuevo sea tan insaciable que la muerte se indigne y no quiera recogerme en sus brazos hasta que este con ella de nuevo, hasta que nos fusionemos, hasta que seamos uno, otra vez.

Ha pasado el tiempo, mas de año y medio, sigo soñando contigo.¿Por qué? ¿Tan importante fuiste para mi? Ahora te veo y siento una ligera brisa, un alivio efimero pero eterno. ¿Estas feliz con lo que eres ahora mi niña? ¿Eres feliz con la persona que esta contigo? Yo siempre temí que estuvieras sola, que te dejaran sola, ahora no me siento mal, no siento nada, solo un leve deseo de ser la persona que te acompañara hasta que tu piel se arrugara, pero la vida no siente compasion por deseos ajenos.

Despues de meses de sufrir amnesia por el abuso de drogas, por querer olvidarte en un tablero de clonas, por dejarte de pensar mientras exhalaba el humo del porro, tengo ligeros destellos de recuerdos, pequeños fragmentos de felicidad momentanea, siempre viene a mi mente esos ojos tuyos, como me miraban llenos de amor, tu cabeza en mi pecho mientras dormias, como nos abrazabamos deseando no separarnos nunca y esa sonrisa, esa maldita sonrisa que me hacia sentir que levitaba, hacerte reír era mi mayor bendición pues el sonido de tu risa hacia que la vida doliera menos, me hacia querer seguir viviendo, ya no me sentia tan solo, tan abandonado en este cuerpo tan extraño, sentía que había nacido solo para hacerte reír. La vida ahora me duele y me pesa pues tus ojos miran a alguien más y sonríes por alguien más.

Mientras que yo, yo sigo soñandote y te soñaré hasta que muera.