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Demasiado amor puede ser contraproducente
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Madrid y la lluvia, se los juro, tienen su propia música
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Cada unx empieza su día como quiere
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Imagínate la de las gatas
Por eso tengo dos
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When mondays feel like Wednesday
@spookygirart
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Ya venía siendo la más difícil de todas las vueltas.
Dejar Mendoza para volver a Madrid me estaba costando cada vez más. Había pensado en espaciar (aún más) la frecuencia de mis visitas, pero esta estrategia no estaba dando los resultados esperados.
Me había olvidado de las cosas que pasaban durante un mundial en mi país, las cábalas, las casualidades, la gente, las ciudades desiertas, los colegios sin clases, las oficinas con tele. Sin emitir juicio de valor. Una locura divina.
Me tocó escuchar el primer gol mientras bajaba del avión para la primera conexión. Felicidad, hinchas, abrazos con desconocidos, comentarios de ancianitas tiernas y aficionadas. “Argentina es así, cuando menos lo pensás, te da una esperanza” decía Hilda.
Nos bajamos y el grupo se disipa, cada persona a lo suyo: los que se quedan, los que siguen viaje. Llego al segundo control, estaba al lado de un desconocido que veía el partido desde su celular, nos miramos, me sonríe queriendo decir: “todo bien, acercate que lo vemos juntos”. La voz del relator se acelera, nos emocionamos, mi turno en la fila, la puta madre, típico mío. Paso. No le simpatizo al de seguridad. Mi atención se divide entre lo que debería suceder - el control - y lo que en verdad está pasando - el partido -.
Escucho un “VAMO” bajito, pero seguro. Me doy vuelta, nos miramos con mi ahora no tan desconocido compañero de fila. Me mira, y otra vez, me sonríe, abro los ojos tratando de que me lo reafirme (¿el segundo?), cierra los ojos suave, se ríe e inclina la cabeza en un inconfundible sí.
No lo gritamos, no hace falta. Un festejo menos glorioso pero más seguro. Es el segundo y el de seguridad del país vecino se quiere morir. Nosotros queremos vivir, y ser argentinos.
“La Argentina es así” me he cansado de escuchar eso. Injusta en muchas cosas, te da y te quita como dice Hilda, te une de repente mucho más fuera que dentro. Argentina es así, siempre te dan ganas de volver.
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QUOTATION STRDY .-
“Fame requires every kind of excess. I mean true fame, a devouring neon, not the somber renown of waning statesmen or chinless kings. I mean long journeys across gray space. I mean danger, the edge of every void, the circumstance of one man imparting an erotic terror to the dreams of the republic. Understand the man who must inhabit these extreme regions, monstrous and vulval, damp with memories of violation. Even if half-mad he is absorbed into the public's total madness; even if fully rational, a bureaucrat in hell, a secret genius of survival, he is sure to be destroyed by the public's contempt for survivors. Fame, this special kind, feeds itself on outrage, on what the counselors of lesser men would consider bad publicity-hysteria in limousines, knife fights in the audience, bizarre litigation, treachery, pandemonium and drugs. Perhaps the only natural law attaching to true fame is that the famous man is compelled, eventually, to commit suicide. (Is it clear I was a hero of rock'n'roll?)”
― Don DeLillo
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