jms-potter - Tumblr blog

[jms-potter]

Una cosa muy diferente era vagar por el bosque prohibido con Sirius a su lado y Peter en su espalda en sus formas animales, riendo y vigilando a Remus a la distancia; a que lo hagas vestido de Hot dog, parcialmente borracho (pero ahora estaba como si nada) y buscando en que maldito pliegue se encontraba tu varita. Lily tiró de James y este aún tocaba su cuerpo para recordar que había hecho con su varita, al parecer la oculto tan bien que ni el mismo podía hallarla; esa fue la razón por la cuál no siguió tan a prisa a la pelirroja pues sentía el mango en una de las ranuras de la rodaja de pepino y la sacó triunfante. - Lo siento, lo siento. - exclamó escuchando que llamaba su nombre corriendo los pocos pasos que los distanciaban, el aire que soplaba era frío y todo a su alrededor estaba oscuro. Era cierto, pues, que conocía algunas partes de éste lugar pero estábamos consientes que otras que no. - No encontraba mi varita, ser un hot dog no es sencillo... - terminó por hablar, tranquilizándose. Confiaba que sus amigos podían mantenerse a salvo porque para él, ellos estaban bien. Alargó su mano libre para que ella lo sintiera cerca - ¿Que paso? -preguntó - Se que quieres encontrar a tus amigas y yo a los míos, pero primero tenemos que estar tranquilos. ¿De acuerdo? - tragó saliva, aunque solo había una pequeña luz que iluminaba el contorno de las cosas bastaba para observar el perfil de la pelirroja. - Volveremos al Castillo, todo estará bien. - Eso era lo que esperaba de igual manera y empuño su varita, estando alerta. 

→Look into my eyes & you'll see. [ Jily ]

De pronto y sólo de pronto esa sonrisa se desvaneció por completo en el rostro de Lily. Una sensación indescriptible se hizo aparecer cuando escuchó un grito desesperado alrededor del bosque. Los estudiantes no dejaban de cuestionar al pequeño y en cuestión de segundos todos comenzaron a correr, dejando escapar gritos desesperados. 

Entró en un momento de pánico y miro alrededor buscando a sus amigas, esperando encontrarlas por simple casualidad, pero todo se veía tan oscuro. — No, necesito buscar a mis amigas —Se negó una y otra y otra vez, no quería avanzar si no estaba con ellas. ¿Y si les pasaba algo? ¿Y si se perdían? No, ni loca. Después alguien chocó con ella, tambaleándola un poco, no pudo observar quien era, pues estaba demasiado sumergida en sus pensamientos. ¿Qué seguía haciendo ahí parada? Sacó su varita rápidamente y se colocó a lado de James, comenzando a caminar más rápido, sin saber el rumbo.  — Lumos Maxima  —Apuntó en frente de ellos, pero no se veía nada. Segundos después vislumbró algo extraño acercándose a ellos y bajó su varita, volviendo a la oscuridad. Ahora ella fue quien jaló al chico para que la siguiese en dirección contraria, no sabía que es lo que había visto, pero hubiera preferido no haberlo hecho. 

Corrió un poco hacia adelante, pero al estar tan oscuro se asustó al no sentir la presencia del pelinegro.  — ¡James!  —Le llamó, comenzando a preocuparse.

[jms-potter]

- Tienes razón, ¿Porque Lily Evans querría hacer sentir mejor a James Potter? - habló en voz alta modulando el tono de voz obligándose a no reír. Había sido una observación honesta que ciertamente le hizo pensar. Suspiró casi pesadamente relamiendo sus labios, bebió del liquido que reposaba en el vaso cuando ella respondió; elevó su mirada hacía ella buscando algo que responder pero como pocas veces en él, no había mucho que decir y cuando las palabras se acumularon en su garganta escuchó un grito ensordecedor.

Un grito que no era de celebración ni de risas, el silencio se hace presente y James mira en dirección hacía aquel tumulto de personas que atiborraban de preguntas al estudiante pero éste solo entraba más en pánico. "Vienen por nosotros" y se fue haciendo eco, cada segundo; entrando en sus oídos hasta que cayó en cuenta de lo sucedido. -- Respondiendo a tu pregunta... -- dijo casi con sarcasmo, si no fuera por la situación le hubiese salido a la perfección. -- No lo sé -- tragó saliva y ese momento la gente corría, de izquierda a derecha, una detrás de otra, sin orden. Por el rabillo del ojo previno un choque contra Lily y James la jaló con ambos brazos gracias a sus buenos reflejo por ser tan atlético. -- Debemos alejarnos de aquí -- opinó seriamente. Si nunca habías visto a James con el semblante serio, era porque no te asomabas a los entrenamientos de Quidditch y porque sus amigos no peligraban todos los días, como ahora. En medio de Bosque los gritos no ayudaban en nada.

→Look into my eyes & you'll see. [ Jily ]

— Entonces son peligrosos —Dijo con seguridad.— Ah, sí, yo también la vi. Era Lucinda Talkalot —Apuntó, llevando su mirada nuevamente alrededor del bosque. Después mordió su labio inferior y escuchó la pregunta del chico, achinando sus ojos. Podía percibir que se comportaba de una manera muy extraña siendo James, cómo… si algo en él estuviese cambiando. No lo había notado hasta hace unas horas. — ¿Por qué querría hacerte sentir mejor? —Preguntó ahora ella, alzando una ceja alta. — Pero, respondiendo a tu pregunta, sí, lo estoy intentando hacer —Sonrió suavemente al notar que comenzaba a acercarse a ella, lo miró unos segundos de una manera en la que sólo ella entendía. — ¿No te da miedo? —Bromeó, ya que no era posible que lo tuviera. 

[jms-potter]

Llevó su mano derecha a su cabello pero dándose cuenta que estaba cubierto por la tela, tenía que hacer algo al respecto puesto que a donde se iría su manía de despeinarse el cabello. James sonrió para disipar sus ideas dispersas. -  ¿Los centauros? No lo son mucho, de hecho, creen que todo esto es su "tierra" - dibujó comillas - Vi una vez un unicornio pero no estoy seguro. Ahora, antes de venir vi a una chica vestida así ¿eso cuenta? - bromeó permaneciendo en su sitio, hasta que (para su suerte) Lily se giró para reírse de nuevo de su vestimenta. - ¿Lo dices en serio o solo quieres hacerme sentir mejor? - achicó sus ojos examinando a caperucita roja pero usando de todas fuerza de voluntad par que su mirada no fuese más allá. Avanzó hasta ponerse a la par y forzó su vista hacía alrededor, Sirius ya no estaba cerca; alumnos gritaban bajo el consumo del alcohol y gracias a esa perspectiva se animo a si mismo - Acepto, iré contigo. 

→Look into my eyes & you'll see. [ Jily ]

Ladeó un poco su cabeza cuando el pelinegro dejó de hablar, después se controló y contuvo sus risas. Levantó su mirada al escuchar uno de los tantos cumplidos que siempre le hacía y se preguntó cuantos más vendrían en lo que quedaba de noche, quizás unos cien. — James… sin cumplidos —Pidió pasivamente, aunque a veces se sonrojaba por las cosas que solía decirle, a veces también se incomodaba y le daba miedo que se dedicara a admirarle casi todo el tiempo (y eso no quiere decir que no le gustase) — No te preocupes por mi, no es la primera vez que vengo al Bosque —Contestó, esbozando una sonrisa. — ¿Alguna vez… has visto a un Unicornio? ¿O a un Centauro? Hagrid una vez me dijo que no eran muy amigables  —Comentó, llevando su mirada alrededor del Bosque, pero no veía nada más que simple neblina, avanzó un poco y después recordó que en efecto era peligroso, se giró y vio a James, pero era imposible no reírse por su vestimenta. — Es el mejor disfraz que he visto en mi vida —Bromeó un poco.

[jms-potter]

No me veas a mi, soy un simple hot dog. Nada apetitoso y sin sangre circulando por mis preciosas venas de vaca... - encogió sus hombros sin dejar de sonreír, tomó el panque que reobotó en su traje para dar una mordida. No tenía buen sabor, lo escupió hacia un lado - Que asco.

{ BOSQUE PROHIBIDO }

— ¡¿Bella?! ¡¿Bella?! —Edward Cullen gritaba alrededor de la fiesta, buscando a Miriam Strout, una de sus compañeras que había accedido a ser la novia de Edward, su personaje. Sin embargo no lograba encontrarla. Gideon recordó que no debía perder su papel, así que chasqueó la lengua y decidió que la buscaría luego. Ya aparecería.

Observó una mesa cercana y decidió que era hora de que Edward Cullen se alimentara… Aunque era un vampiro y no comía nada. Tomó un panquecito y al morderlo notó que sabía del asco. Lo lanzó lejos, golpeando a una persona y embarrándolo con la crema del pastel. — ¿Qué mierdas es eso? ¿Con eso piensan alimentar a Edward Cullen? Que asco, estúpidos humanos.

[jms-potter]

- Ese es un nombre muy largo, ¿no crees? María Estuardo idiota, Reina de Escocia. - habló en voz alta, permitiendo risas de nuevo de sus espectadores. Si existía una cosa que Potter apreciara, era el público admirándolo. Cuando la chica mencionó a los elfos no le pareció algo digno de mencionar, ¿que buscaba con eso?  - De nada, Margaux Reina de los Idiotas en Slytherin, pero tú deberías confeccionar los vestidos, los elfos no deben hacer cosas aburridas.

{ bosque prohibido }

— María Estuardo, idiota, la reina escocesa  —Espetó bastante seria, pero no enojada. Le molestaba que la gente no supiera sobre la historia de sus países o los países vecinos, pero era Potter, tampoco había que esperar mucho de su parte— Gracias, Potter, los elfos que pasaron cerca de tres meses confeccionando este vestido te lo agradecen —Contestó bastante seca, sin importarle como reaccionaría el león.

[jms-potter]

- ¿No tiene plumas? - saltó curioseando pero sí, quizás le fallaba la vista. - ¿Entonces que eres? Como sea, debes tener cuidado porque los unicornios peligran por el bosque - bromeó

{Bosque Prohibido}

¿Plumas? —frunció el ceño en dirección al ¿perrito caliente?—. No sé si te falla la vista más de lo normal o qué, pero ésto no tiene plumas. 

[jms-potter]

- Canuto me llama Bambi porque está obsesionado conmigo, ¿y tú Queso? ¿Lo éstas? - elevo sus cejas tratando de abrazarla pero el disfraz de ambos parecía impedirlo pero el muchacho no se rindió - Si lo pensamos bien, somos un excelente aperitivo.

{ Bosque Prohibido }

— Muchas gracias, Bambi… Aunque tal vez hoy deberìa llamarte Hot Dog.—  Respondiò, rièndo. No podìa imaginarse a James usando un disfraz comùn.—  Aunque ahora que lo pienso… ¿Por què todos te llamamos Bambi? —  Hasta donde podìa recordar, Greta habìa comenzado a llamar asì a James despuès de una conversaciòn con Sirius.

[jms-potter]

 A pesar de que Lily era fiel seguidora de las reglas, ésta vez no le interesó seguirlas, pues estaba segura de que la intención de los alumnos que escribieron los volantes era que todos se divirtieran y pasaran un buen rato. Así qué, ¿por qué no hacerlo?

Terminó de comer su panquecito y salió como estrella fugaz a su habitación para ponerse su disfraz. Sus amigas aún no podían creer que la pelirroja estuviera dispuesta a ir. Bah, no era para tanto. Se acomodó entonces muy bien su capa para evitar que sus mechones rojos se notaran, pero no ayudaron de mucho.

Había bailado y bebido ponche (ésta vez si fue ponche y no licor, pues sólo Lily puede confundir las dos bebidas) con sus amigas y con otros compañeros de casa, que aún no sabía sus nombres. Creía que ya nunca escucharía a alguien felicitarla por ser la campeona de Gryffindor, pero al llegar fue lo primero que la mayoría hizo. Había dicho más de veinte veces "gracias" y se sentía cansada de la misma rutina, pero era demasiado educada para callarlos. Por otro lado se sentía bien ahora que los ánimos de Mary estaban mejorando, pensaba que la fiesta sería buena distracción para ella y fue por eso que la convenció para ir. Aunque podía y sabía notar tristeza en las sonrisas que forzaba. 

Se había apartado de sus amigas para seguir admirando el Bosque Prohibido. ¿Qué pasaría si una manada de centauros decidieran estar ahí? ¿O un Unicornio? ¿O un Troll? Lily no había pensando en las criaturas que habitaban en el Bosque, así que decidió aislar esos pensamientos, ya que no sería posible que alguno de ellos se acercaran si habían tantos ahí. 

La ojiverde se quitó su capa roja, pues estaba disfrazada de Caperucita Roja. Y al pasar unos segundos escuchó a alguien acercarse, se sobre-saltó y dio vuelta para observarle, no bastó tiempo en reconocerlo. — Vaya, qué habilidad de reconocerme  —Aunque era obvio, no hay muchas pelirrojas en Hogwarts, aún menos en el Bosque Prohibido. Después llevó su mirada al disfraz del chico y frunció el ceño, en lo que casi se convierte en una risa. — ¿Qué? ¿Un hot-dog? —Se llevó sus manos a su cintura y bajó su mirada, comenzando a reír. Era la primera vez que Lily se reía de algo relacionado con James, vaya, el cielo se va a caer. Después visualizó un disfraz igual al de éste. — Y entonces llego a la conclusión de que él es Sirius —Lo señaló.— ¿Por qué escogiste un hot-dog? —Enarcó una ceja, intentando controlar sus risas, manteniendo contacto visual con el chico.

Desvío la vista un poco avergonzado por la primera observación pero vamos, era capaz de reconocerla entre más gentío con o sin disfraz. James fue contagiado por la risa de la pelirroja que era encantadora incluyendo el como tapaba su boca para disimularlo; nuestro amigo pelinegro no tenía intención alguna de desviar su mirada, no había nada a su alrededor más interesante que lo que tenía frente a él.  - Verás,  ¿a quien no le gustan los hot dogs?  -  preguntó mirando que Sirius ya estaba uniéndose a la fiesta. -  No lo sé, no sabíamos que hacer y entonces optamos por embutidos. Puedes reírte, adelante... -  propuso encogiendose de hombros. No le molestaba que lo hiciera, a menos si era Lily quien reía. - Luces hermosa, aunque no tan hermosa cuando andas con libros bajo el brazo por los pasillos - Así es, James Potter que se había jurado no hacer esos comentarios nunca más, fue lo primero que salió de sus labios como vómito verbal. Le gustaría culpar al alcohol pero solo se había tomado como cuatro cervezas y tenía buena resistencia a este. Pero lo hecho ya estaba, tampoco es que estuviese mintiendo. - ¿Tienes sed? Puedo acompañarte a ir por algo, pues escuché que es peligroso andar por aquí solo. 

→Look into my eyes & you'll see. [ Jily ]

[jms-potter]

- ¿María Quien...? -  sonrió levantando una ceja, no tenía idea de quien le hablaba pues sólo venía a su cabeza la imagen de una persona que definitivamente no era Maria. - Yo pensaba que eras uno de esos retratos viejos del castillo. Oh, ya sé. Te pareces a uno que había en mi casa -  suspiró ocultando sus ganas de reír, bebió de su vaso y escucho las risas de personas junto a ellos. A final de cuentas ¿Porque se preocupaban por sus disfraces?  Más tarde todos estarían borrachos y bailando. -  Pero es muy bonito, si. 

{ bosque prohibido }

Caminar entre aquella multitud con semejante vestido no era algo fácil, pero Margaux hacía parecer que dicha tarea era lo más sencillo del mundo. Aquel vestido que había sido confeccionado por los elfos y elfinas de la casa de os Maxime en Francia, pesaba al rededor de los quince kilos cosa que hacía que Margaux caminara un poco más lento, pero que a la misma vez lograba atraer a la mirada de todos hacia ella. Algunas  miradas de sorpresa y admiración, pero por otro lado estaban las miradas que venían con una mueca de asco incluidas y otras bastante dudosas, ya que no sabían de quien se había disfrazado la francesa.

— ¿Qué? ¿Nunca habías visto a María Estuardo antes? —Preguntó Margaux dirigiéndose a esas personas que habían estado mirándola durante un rato con sus cejas enarcadas, las cuales apostaría a que no habían escuchado el nombre de aquella mujer hasta que Margaux se la nombró.

[jms-potter]

- Pues sólo habrá que escalar dos árboles y cantar el himno de Hogwarts . - dijo totalmente en broma. Aquel disfraz chillón le causó gracia desde el principio - Tienes la ventaja de que si te pierdes, meneas tus plumas y estarás a salvo. -  suspiro pensando que su disfraz no era el mejor pero no le importaba.  -  vale ya,  perdón. 

{Bosque Prohibido}

Si había alguna festividad que Lucinda amara tanto como Navidad, esa era Halloween. Adoraba disfrazarse y jugar a ser algo más por unas horas, además del ambiente un tanto tétrico que surgía en esa fecha con todo el asunto de dar miedo era fascinante. Incluso adoraba diseñar las calabazas, excepto quitarle lo de adentro porque le resultaba asqueroso ¡Y su equipo había ganado en el concurso, nada más y nada menos que el primer lugar! Para celebrarlo, aunque era obvio que ganarían con el lindo unicornio que hicieron, decidió que ir a esa fiesta de la que se hablaba era lo mejor. Además, podría usar su traje que había comprado en el verano.

Tras ponerse su excéntrico disfraz rosa chillón y buscar a uno de los guías, comenzaron a dirigirse al Bosque Prohibido. Tras un rato bastante largo, al final comenzaba a oír la música y sentir el calor de la fogata, mas aún no se veía mucho movimiento— ¿Faltará mucho para llegar? —preguntó a la persona a su lado mientras se apartaba un mechón fucsia de su rostro.

[jms-potter]

- Alguien tenía mucha sed,  eh -  opinó tomando una copa de lo mismo para tomarlo. No estaba nada mal, a decir verdad tenía un poco de sed. - Tomemos otro en lo que trato de encontrarle forma a tu disfraz. 

{Bosque Prohibido}

Después de haber obtenido el segundo lugar junto con su equipo en el concurso de calabazas, considero la fiesta de Halloween una manera de celebrarlo, así que despues del banquete, fue a su habitación por su disfraz y se encamino hacia el bosque prohibido. Al parecer a la Ravenclaw le agradaba inmensamente que la fiesta se llevara acabo en aquel lugar, le daba el toque perfecto para la ocasión. 

Cuando llego encontró a un grupo de chicos que se dirigían hacia la fiesta con la ayuda de un Guía, así que aprovecho y se fue con ellos. Cuando lego al lugar fue directamente por una bebida color rosa que le pareció bastante curiosa y se la tomo de un solo trago 

[jms-potter]

- Nunca había visto un queso gigante tan gracioso - sonrió James, sostenía una bebida. Levantó los brazos señalando el disfraz de Greta pues era muy obvio de quien se trataba. 

{ Bosque Prohibido }

Una fiesta en el bosque prohibido. No negaría que la idea no le asustaba un poco, pero si conocía a sus compañeros lo suficiente, sabía que seguramente alguno de los merodeadores estaba detrás de la planeación del evento así que, después del banquete, corrió a su sala común por su disfraz para encontrarse con uno de los guías que decían los anuncios de la fiesta.

Iba con otro par de chicos, que la llevaron hasta el bosque, donde podía distinguir una gran fogata y la música era cada vez más fuerte. Esperaba encontrar a sus amigos o una cara conocida. Con suerte, los disfraces no le harían muy difícil el reconocer a los demàs

[jms-potter]

→Look into my eyes & you'll see. [ Jily ]

Después del Banquete en donde comió todos lo que pudo entrar en su boca y aguantar su estómago;amenazando a cada uno de sus amigos que debían asistir a la fiesta en el Bosque Prohibido, subió a buscar su disfraz. No tenía miedo, quizás ninguno de ellos se sentían abrumados por aquella idea de atravesar en plena noche el peligro que amenazaban los árboles, si bien los ha recorrido en cada luna llena. Su disfraz, bueno, la historia del disfraz de James y Sirius tiene como propósito incomodar y confundir a sus amigos, un par de hot dogs (James llevaba pepino) que buscaban divertirse un rato, porque ya hacia falta un acuerdo de hermandad. 

A pesar de las excelentes expectativas que James ponía en Halloween, su estado de ánimo no era el mismo. Incluso, estaba enojado consigo puesto que pensaba poder manejar la situación; para su grandisima suerte Sirius había quedado con alguien y no tendría problema para buscarlo entre el gentío. Siguiendo las pistas llegó y saludo a los estudiantes que reparaba en él: hablando de Quidditch por aquí, brindando con cervezas por allá, sonriendo y aceptando sonrisas féminas que parecían encontrar atractivo el hecho de ser un embutido americano. -  James, James -  llamaban unos mientras que la música entraba y salía por sus oídos, el andaba; aquí, allá. Pero no se sentía tan alegre, algo sumamente extraño en James Potter. Un movimiento desordenado le hizo mirar una silueta, tardó unos segundos pero no tantos porque seis años de experiencia en observar de forma disimulada y no tan disimulada a una pelirroja en particular. La única (a su juicio y no lo creas tan objetivo) que le brillaban cada uno de sus cabellos y se ondeaban mejor que una bandera de Gryffindor. Reconocía su postura a la distancia, la admiraba y por último (porque no) suspiraba; James era un ser humano capaz de persistir hasta las últimas instancias y añadiendo a su favor que la última plática con Lily no había salido tan mal. Se armó de coraje para caminar detrás suyo y hablar, - Tú disfraz luce mucho mejor que yo. -  habló relamiendo sus labios - El paquete Potter no incluye papas y refrescos pero sí al menos un poco de compañía. 

[jms-potter]

HALLOWEEN 77' {hot dogs} : James Potter y Sirius Black. 

[jms-potter]

- No me explotó pero estuvo a punto de hacerlo. Salí huyendo antes de que sucediera. - se escapó una risilla de sus labios pensando en el desastre que había dejado en el invernadero. ¿Que pensaría la profesora Sprout en su regreso? James debía dejar una nota pidiendo disculpas. - ¿Sirius? No me extraña, algún día no podré salvarlo y terminará de cena del calamar; entonces podré vivir tranquilo... - bromeó aunque seguramente el mismo se tiraría al lago para rescatarlo. Lo último, la negación de Lily le hizo sonreír como un idiota. - No, no. Estoy bien - negó con la cabeza con cierta alarma, hundió sus manos dentro de sus bolsillos  - ¿Nos sentamos? No parece que esto sea una posición cómoda. - sugirió con disimulo comenzando a caminar hacia la banca

Se echó un mechón de su cabello hacia atrás mientras el pelinegro hablaba. — Ah, sí, estuvimos todo el día haciéndolas. Fue un récord haber terminado  —Respondió, acordándose lo muy poco histérica que se puso Alice— ¿Por qué lo dices? ¿Te explotó o algo así? —Bromeó.— Sirius rompió tres calabazas de unos Slytherins, quizás todavía siga huyendo de ellos —Contó, dirigiendo su mirada otra vez a él.— ¿Qué?… —Terminó de escuchar la oración y negó con la cabeza.— No, es… no, no tienes que hacerlo —Volvió a negar.— Sólo si es lo que tú quieres.

[jms-potter]

se llevo una mano al puente de sus lentes, se caían y debía acomodarlos pero las manos le sudaban. Sonrió, no tenía porque sonreír si no le había dirigido tantas palabras pero era imposible, vamos, Lily Evans estaba mirándolo sin enfado alguno o eso es lo que se imaginó en los escazos segundos - Si. Creí que sería el fin de semana... pero me adelante - habló desviando la mirada - Además no quería perderme la fiesta de Halloween - se quedó entonces de pie, no quería darse la vuelta y volver al castillo. Tenía que inventar algo más, tenía que mirar a la pelirroja un poco más. - Escuché que hicieron calabazas, traté de hacer una hace rato pero fue un desastre. Una cosa menos que sé hacer - rió por lo bajo. - Si quieres que me marche, lo haré con gusto. 

Pudo jurar que sus ojos brillaron con deleite al notar de quién se trataba y se maldecía para sus adentros porque quizás se notaba demasiado. — ¿Hoy llegaste? —Preguntó inconscientemente, después sacudió un poco su cabeza y prestó atención a lo que decía.— Oh, muchas gracias —Agradeció suavemente, encogiéndose levemente de hombros. Después una media sonrisa se formó en sus labios, observó al chico un par de segundos más y al notar que lo estaba haciendo continuamente desvió su mirada de éste. Nunca se lo diría a nadie, pero se alegraba verlo de nuevo.

[jms-potter]

- woah woah, tranquila - levantó las manos exageradamente hacía arriba, la capitana de Hufflepuff tenía una forma particular de ser que le incitaba a molestarla a sabiendas que de verdad podría recibir un puño. Eso le parecía siempre - ¿Así está bien? - cuestionó, hubiese dejado sus brazos arriba pero la mención del año pasado le golpeo - Ja Ja, no se de que me estas hablando - hizo de oídos sordos, y vaya que era buen en eso. - El año pasado te dejamos ganar, quería guardar la gloria para mi último año - sonrió socarronamente acariciando la mejilla de Lucy apartándola enseguida, no quería someterse a un manotazo - Ya lo veremos Karoonda, ya lo veremos. 

—Se sobresaltó al sentir el brazo en sus hombros por lo que giro el rostro sorprendida y al ver de quien se trataba rodo los ojos— Que te parece si mejor me dejo de quejar si quitas tu brazo de mis hombros o te lo arranco yo, cualquiera de las dos me viene bien —lo mira a los ojos con cara de pocos amigos— Pues yo lamento decirte que estas muy equivocado, planeo llevarme la copa por segundo año consecutivo así tu hagas el drama de la vida pero esa copa tiene nuestro nombre en ella, ve haciéndote a la idea.