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6 de enero

y feliz cumpleaños y corregir mis años y ojalá cumplas muchos más y como puedo tener un feliz cumpleaños si en el trabajo sólo escucho de muertos y roscas de reyes y los amo tanto que a veces siento que puedo explotar y por qué sólo puedo escribir con música que me provoca nostalgia y por qué sólo escribo de tristezas y preguntas y feliz cumpleaños ahora ya son 28 y subí una foto donde me sentí vivo en la piel y no sólo en la melancolía de mis ojos y dónde está eso que busco y sanar y sanar pero sanar qué y crecer y trabajar para estar mejor para mí y para la gente que me dice feliz cumpleaños y empiezo a extrañar a esa gente que me dice feliz cumpleaños pero no sé por qué si aquí están y de pronto pienso que las palabras me faltan para dar las gracias para decirles que me han salvado una infinidad de veces de caer por la ventana de mis ojos de mis pensamientos de ese lugar donde no cabe nada pero que sé habitar y feliz cumpleaños y por qué cambia tanto mi pelo en todas las fotos y me encanta bailar y hace unos días leí palabras que me enternecieron y me asombré y estoy emocionado porque todavía me puedo asombrar y es que de verdad no saben las veces todas las veces que me paraliza saber que el amor es tan peligroso como las teclas de un piano que te recuerdan a lo que piensas que alguna vez fue eso que llaman felicidad y feliz cumpleaños te deseo la noche gracias yo también te amo te deseo la noche también porque la noche es el lugar donde encuentro mi hogar felicidades todo lo que yo pensaba que me habían arrebatado va a regresar tal vez metido en un calcetín o en un sueño donde recuerdo la voz de mi mamá y en el trabajo donde escucho infomerciales y muertos pasé mi cumpleaños escuchando podcasts y el piano y las palabras que llegaban desacomodadas porque ya todos los lenguajes están escritos menos el del tiempo y por qué se acaba el piano no me lo quiten ya no voy a poder hablar perdón me angustié dejé de respirar pero ya puse otro vídeo donde hay un piano y alguien que lo toca ojalá no sea música alegre esa no sirve dejé de respirar mientras le aplauden al pianista ojalá no le aplaudan mucho será que este cumpleaños es más que un cumpleaños pero si yo los amo no sé cómo más lo puedo decir y felicidades porque han salvado vidas miren salió en las noticias que escucho todo el día salvaron a todas las personas hoy las noticias son de cómo un perro persiguió a un gato y también que hay desabasto de rosca de reyes y de niños que las habitan y felicidades a ustedes salvaron a un hombre de sus recuerdos y de su memoria y feliz cumpleaños ya son 28 ya se va acabar el vídeo que contiene al pianista con su canción y ya van a ser las 6 que termina mi turno entonces ya no voy a saber hablar o respirar hasta que regrese el video que contiene la música de las letras que hacen palabras y ahora vamos a buscar más pianos para poder hablar con ustedes que me dicen feliz cumpleaños y yo que me tardaré cada vez menos para contestarles tal vez el próximo año o en 5 minutos que serán las 6 o en el 97 que nací o el 67 que nacieron mis papás pero sí les voy a contestar cuando acaben los aplausos porque los tengo que felicitar porque hoy no hubo noticias sólo piano.

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Me encerré dentro de mis sabanas

El aire se fue poco a poco,

Fui prisionero voluntario,

En celdas de algodón blanco,

Pude ver mi cuerpo,

Mientras me asfixiaba

Los días me han comido,

Tal vez en un mes,

Queden puros huesos,

Hoy tengo las ojeras más prolongadas del mundo,

Fácilmente se pierde alguien ahí,

Ya nadie dice buenos días en esta casa.

Lo encontré en las notas, no tiene fecha.

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Pensamientos de 4 am

No me gusta abrir la ventana en la noche. Se escucha todo y a la vez nada en realidad. El sonido del silencio poco silencioso. 

Las historias que se cuentan en susurros en cada habitación de la colonia. Los ronquidos que retumban en las casas pero no logran salir de la puerta de entrada.

Me da miedo la ambulancia que pasa en la avenida, que de pronto se escucha fuerte y en cuestión de segundos se ahoga a la distancia, me imagino la angustia de quien la sigue. Un efecto Doppler constante que envuelve a la ciudad por unos instantes.

Curioso es que la noche es el momento en el que más activo estoy, resultado de los cafés que se preparaba mi madre en las madrugadas de mis 8 años. Nunca me obligaron a dormir temprano, así que me quedé despierto. 

Lo que te da la calma nocturna es caos mental, es diferente a la calma que te da el desayunar rico y tomarte un café mientras sientes que te da el sol en la cara. La calma nocturna es calma que aplasta, que es tan calmada que te hace pensar en todo; cualquier ruido es perfecto para salir de tu propia cabeza. 

En la noche aprendes, empiezas a notar cosas, sabes cuando tu papá está teniendo pesadillas o cuando no pasa una buena noche, sólo por la respiración. Aprendes sobre ti, sobre lo que extrañas y lo que ya no quieres; todo para desaprenderlo en cuanto despiertas y conformarte con lo que tienes. 

El día es fácil porque camina rápido y la noche es cruel porque te da todo el tiempo del mundo. 

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18 de junio 2020

¿Han estado solos en la playa de noche? 

Sólo ustedes, el mar que parece de color negro y la noche. Mientras lo único que se escucha es el ir y venir de las olas y tienes frío en las piernas porque el agua te alcanzó en un punto. Que podrías caminar hacia la luna que se ve a lo lejos y sería sólo secreto del mar y tuyo. Las personas con las que estabas se fueron a dormir, se fueron a otro lado y te quedaste tú, ahí, solito.

Siento que así me voy a morir, de frío. 

Va a ser un secreto, de la luna y el mar. El agua me cargará y me llevará conocer lo que muy pocos conocen. Me enseñará la belleza de la oscuridad y dejaré de tenerle miedo. En mis últimos alientos sabré que mi cuerpo se va porque se congela pero por dentro sentiré calor, como cuando te tomas un té que tiene la temperatura perfecta y no te quema la lengua, que lo sientes desde tu estómago hasta tu garganta. 

Y si lloro no va a importar porque estaré rodeado de mucha agua con sal, me saldrán pequeños mares de los ojos, incluso con una corriente más alborotada que la que me lleva. Ya no voy resistirme a irme con las olas, seguiré el vaivén contra el que alguna vez quise nadar.  Me voy a rendir ante lo omnipresente, ya no batallaré con el futuro ni con la idea que yo mismo construí de mí, sólo seré, tal vez por primera vez.

Dejaré de escucharme para poder por fin escuchar. 

Mi corazón se va a tranquilizar tanto que se va a quedar dormido conmigo.

Otra vez no puedo dormir.

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un degradado de color

Me ha costado mucho trabajo saber cómo empezar a escribir este texto, tal vez porque no sé bien cuándo mi color empezó a ser factor en cómo la gente me percibía y en cómo yo me sentía sobre mí mismo, así que sólo voy a comenzar, espero vaya tomando forma.

Ya desde hace tiempo soy consciente de lo que el color de piel en este país significa, pero en los últimos días y en particular hoy (por un texto que leí de un amigo cercano y por la situación del mundo, pero en particular de México en torno al racismo) me pregunté desde cuándo supe que ser un niño moreno me haría vulnerable de alguna manera.

La primera vez que me di cuenta que mi color de piel era un tema fue tal vez en la primaria, desde muy niño, como el primo más pequeño que alguna vez fui, tuve diferentes apodos puestos por mis propios primos que también son morenos. Frijol, Tiger (por Tiger Woods), Prieto, entre otros apodos, me hicieron notar mi color de piel a una temprana edad, estos apodos nunca me los pusieron con el afán de hacerme menos, incluso eran y siguen siendo de cariño. Pero sin duda escondían algo, algo que hacía que no me sintiera cómodo con cómo me veía. 

Ya más entrado en la vida escolar adolescente, cuando ya la hormona se empieza a desatar, me di cuenta que los güeritos siempre eran los guapos, sin importar qué. Por ahí de 6to de primaria, entré a una nueva escuela, diferentes personas a los 10 personas con las que había convivido en mi pequeña escuela anterior a lo largo de mi vida consciente. Uno de mis mejores amigos de la actualidad que es güero ojiverde en ese entonces llegó a menospreciarme por mi color de piel e incluso a pedirme favores a cambio de dinero, como si yo tuviera de alguna manera que servirle. 

Probablemente a mis 13-14 años, ya en secundaria, me encontraba ahorrando para comprar cremas de aclaramiento facial, tallándome con piedra pomex el cuerpo para ver si podía aclarar un tono mi piel y tal vez ser un poco más bello. Creo que fue hasta la prepa cuando por fin me acepté y al ir en una preparatoria privada donde la mayoría de la gente era blanca noté que mi color me empoderaba al menos de sentimiento.

 La escuela puede llegar a ser muy cruel porque los grupos están muy bien definidos, ahora que lo pienso es muy impresionante cómo hasta por el lugar en donde comías o pasabas el tiempo dentro de la misma escuela pertenecías a cierta grupo social con mayor o menor estatus. Por suerte siempre me he encontrado con gente que me ha querido por quién soy. 

Siempre me llamó mucho la atención ser actor, me ilusionaba la idea de la televisión y nunca me dio pena exhibirme frente a personas, a medida que crecí me di cuenta que ir a castings para comerciales es de lo peor que le puede pasar a tu autoestima, del primero que me acuerdo fue para Disney Channel, muchos niños impecables, blancos y con unos padres que más bien parecían coaches. Después de esperar y con la moral decaída pasé, me pidieron que diera una cápsula en inglés y bueno, evidentemente no quedé. Por azares del destino llegué a tomar un curso de actuación en Estados Unidos como a los 17, de las cosas que más me pedían eran que intentara americanizar mi acento, recuerdo haber batallado mucho con la idea de que mi acento me quitaría posibles oportunidades pero sobre todo lidiar conmigo mismo y el cómo no podía imitar un acento. Conforme fui creciendo mi mente entendió que tal vez no encajaba en el perfil de latino internacional y poco a poco desistí de buscar castings.

Creo que no está de más mencionar las numerosas veces en las que en los antros no me dejaron pasar o me dejaban pasar porque venía con gente que se veía mejor que yo. Con pensar que tres veces fui a bar 27 y en ninguna me dejaron pasar, a pesar del tiempo esperando y de ver cómo pasaban a diestra y siniestra grupos que se veían mejor que el mío. 

Desde niño se me enseñó que el tener una relación con una persona blanca era bueno porque “mejorabas la raza” y desde mi propia morenez se me enseñó que las mujeres morenas eran menos atractivas. Aun cuando la mayoría de mi familia es morena.

Me ha tocado escuchar muchas veces en mi propia familia cuando un bebé nace “ay qué bueno que salió güerito” o “mira, qué bonita/o salió güerito” y es que desgraciadamente es una realidad que en este país sea algo bueno nacer con una tez más clara, es decir, desde el primer momento que respiras se abren posibles puertas que tal vez si hubieras nacido dos tonos más oscuro no habrían. Para mí eso es racismo sistémico. 

Hace no mucho tuve una pequeña discusión con un familiar cercano de tez blanca, él a veces señalaba que la gente prieta tenía un color feo o inferior. A mí a estas alturas de la vida esos comentarios me son inofensivos pero me pongo a pensar en mis sobrinos que tienen la edad que yo alguna vez tuve y en cómo yo a veces me sentía avergonzado después de las vacaciones por llegar más bronceado al siguiente ciclo escolar. Ahí es cuando me doy cuenta del poder que las palabras pueden llegar a tener y cómo hay dinámicas familiares sujetas al color de piel que vienen desde hace años y de las cuales no somos conscientes. 

 Igual desde hace mucho estoy orgulloso de mi color de piel, me encanta ser prieto y hoy más que nunca le diría al pequeño Sebastián que no busque cremas que le aclaren la piel y que no hay razón para sentir pena cuando llegas de la playa más bronceado de lo usual.

Quiero que quede claro que este texto no busca evidenciar o culpar a ningún familiar o amigo, es mas bien una reflexión personal sobre mi color, llevo muchos años de ser adjetivado por mi físico y no me molesta, me quiero como la persona que soy. Amo a mi familia y amigos que a veces sin darse cuenta tienen actitudes racistas adoptadas desde cómo nos han educado a todos. Y no se trata de cancelar personas por actitudes que hemos tenido todos, sino de ser conscientes de cómo a todos nos han enseñado a ser racistas por generaciones. 

Hoy sólo hago esta reflexión sobre mí y lo que ha significado crecer y quererme, vivir en un país que sí es racista pero que a veces no nos damos cuenta o lo ocultamos. Aquí quiero parafrasear/citar una parte del texto de Edgar que leí hoy en la mañana; afortunadamente mi tez no es tan obscura, afortunadamente me muevo en un contexto de gente blanca que me protege de muchas situaciones, afortunadamente puedo escribir sobre esto y decidir cuándo dejar de hacerlo. 

Aquí el texto de Edgar: https://fiestaparados.tumblr.com/post/619784760817008640/falacias-sobre-el-color-de-mi-piel

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22 de abril

Hoy tomé una siesta,  Decidí abrir la ventana, Observé por la rendija, Las nubes, El pequeño retoño que nace, El árbol que lo custodia a lo lejos,

Y me dormí, Tuve frío, Me cubrí con una sábana, La abracé,

Desperté, El ruido de la televisión, Mi habitación oscura, Una luz de nubes rosas, La ventana abierta,

Oscureció, Poco a poco, Mi oscuridad más oscura, Que la habitación misma, La luz del cielo me busca alumbrar, Hoy no lo logra

Sebas

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Yo cantando. Un autorretrato.