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Farkas lo perdió todo.

Por Matías González, Redactor Jr de MODO

Más de alguno nos hemos topado con este aviso en páginas de anime pirata o algún otro lugar recóndito del internet, debo confesar que cual pichón la primera vez que lo vi no pude contenerme y googlear qué le había pasado al multi instrumentista por excelencia y filántropo chileno. Gracias a algún dios, Leonardo no tenía ningún inconveniente y se encontraba haciendo cosas de millonarios en algún lugar del mundo. Con su fortuna, hasta donde yo sé, intacta.

Pero, me fue inevitable pensar en qué pasaría si Farkas realmente lo perdiera todo. Lo primero que se me vino a la cabeza fue ver a Leonardo con su melena rubia y dientes de porcelana yendo de casa en casa pidiendo que le devuelvan las lucas que en algún momento le regaló a cientos o miles de chilenos. Inevitablemente se me vino la imagen de estas personas tirándole los billetes mientras él de manera desesperada intentaba agarrar la mayor cantidad posible.

También, fue un tanto perturbador imaginarme a Leonardo subiéndose a algún transporte público haciendo lo que mejor sabe hacer, entrar en un trance profundo que le entrega la capacidad de convertirse en el hombre orquesta. O si vamos más allá exigir que le devuelvan los aportes millonarios que alguna vez hizo para la Teletón, este punto se vuelve aún más relevante si imaginamos la posibilidad de crear una “Farkatón” organizada por el mismísimo Don Francisco. O tal vez la mejor opción sería vender sus rizos dorados tan bien cuidados en alguna peluquería elegante.

Después de imaginar estos hechos y suspirar por el alivio de que eran escenarios creados por mi mente volví a analizar la situación y me surgieron una serie de preguntas. Detengámonos un momento y analicemos:

¿Dónde está Farkas ahora? ¿Por qué ya no está en Chile tirando billetes a un grupo de personas o ofreciéndoles cambiar sus relojes baratos por relojes caros? ¿Cuándo fue la última vez que se habló de los cumpleaños de Farkas con músicos invitados de los años 70s y 80s? ¿Será posible acaso que Farkas lo haya perdido todo, pero que al tener contacto con gente poderosa los medios de comunicación tradicionales nos están ocultando esta información?

Demasiadas preguntas y muy pocas respuestas, esperamos de corazón que Farkas no lo haya perdido todo.

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Agenciadas

Por PIPE JIMÉNEZ, Socio Director de MUTA

“Mándame el logo en word”, “quiero una animación sencilla, como la era del hielo”, “algo minimalista, sencillo porfa”, “necesitamos 5 propuestas” esas son algunas de las caricaturas que podemos encontrar en la cuenta @clientadas en instagram. Si bien es cierto es muy entretenida (tomémonos la vida con un poco de humor) , también es una guía de insights y el fiel reflejo de una compleja realidad. Y es que muchas veces nos cuesta entendernos entre agencia y cliente. Tenemos lenguajes distintos, puntos de vista distintos y lo que es más complejo aún expectativas distintas. Y eso no es malo siempre y cuando exista comunicación. Porque de la diversidad salen cosas buenas, pero hay que entenderse.

A muchos clientes les pasa (y es natural) que son expertos en marketing, pero no han tenido mucha relación con una agencia de publicidad. Saben lo que quieren, saben mejor que nadie lo que su negocio necesita, pero a la hora de pasar eso al “lenguaje agencia” o mejor dicho, “un brief” todo se complica. 

Porque acordemos que saber lo que necesita, no es lo mismo que saber cómo lograr que se cubra esa necesidad. Y eso se traduce en que hoy está pasando que en vez de decirnos “tengo hambre y me gusta el tomate”, nos dicen quiero “un italiano”, o algo así pero más innovador. Si ese brief le llega a una agencia, va a estudiar y repensar el hot dog. Pero va a ser difícil que te presente un pan con tomate estilo español, que cubre perfecto la necesidad de comer tomate de una forma en donde el sea protagonista, fresca y poco usual.

Entonces, hay todo un arte en el saber pedir bien.

Bueno, es eso sumado de que se desconocen tiempos y complejidades de algunos procesos. Por lo cual resulta ese choque de comunicación que termina en malos entendidos que desencadenan en briefs mal formulados y los desafortunados resultados “que cumplen”.

Y acá es cuando entra el “Mea culpa” de nuestra industria. Lo verdaderamente cierto es que no tienes por qué saberlo. Lo adecuado sería tener una agencia clara y directa que te haga sentir segur@, te haga crecer y te enseñe en el proceso, sin presiones. Aunque suena un poco raro para algunos, las agencias siempre han tenido ese rol de “educar al cliente” y eso debiera seguir así.

Uno de los mayores problemas es que a nivel industria, la relación cliente-agencia ha ido tomando un rol más ejecucional y de reacción, en muchos casos. Estamos dejando de lado el resto de cosas que creo, son las más importantes de todas.

Se ha ido perdiendo la confianza en las agencias.

 ¿Te familiarizas con estos nombres? 

“Agencia creativa”, “Boutique creativa”, “Laboratorio”, “Consultora Creativa”…o como nosotros en MUTA “Estudio creativo”. Son todos nombres que nos ponemos para demostrar cosas que debieran estar dentro de la simple pero hermosa palabra AGENCIA. Ese lugar donde hay personas que te ayudan a hacer crecer tu marca en el camino indicado y que te apoyan con todo su talento a tu disposición.

Eso sí, es una relación de ambos lados. Tenemos que ayudarnos mutuamente para que exista un gran trabajo en equipo. Y por sobre todo escucharnos para aprender.

Al final, las clientadas son AGENCIADAS. Que un cliente pida algo “que no esté en el parámetro aceptable del tiempo y presupuesto” y una agencia le diga que sí, es una agenciada. Que una agencia se comprometa con algo que sabe que no va a resultar bien es una agenciada. Que una agencia no sepa hacerle entender a un cliente lo que conlleva hacer lo que se está pidiendo, es una agenciada. Que no se vaya a la necesidad más básica para realmente poder solucionarla, en vez de decirle que sí a ese primer brief que más bien viene en forma de táctica, es la agenciada más común.

Así que queridos compañeros de industria. Dejémonos de agenciadas y recuperemos el rol consultor y con eso la confianza de nuestros clientes.

Y bueno, para los clientes que quieran aprender mejor sobre agencias, procesos creativos, procesos de producción o lo que sea relativo a una agencia, los invitamos a conversar con un cafecito en Grupo SUD.

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Me enamoré en Tinder.

Por Pipiolo, Redactor Creativo en MODO

Cuando nos ponemos a pensar en todo lo que nos quitó la pandemia podríamos considerar celebraciones con amigos o familiares, horas de trabajo con nuestros queridos compañeros, quizás uno que otro concierto esperado o partido de fútbol clave y varias cositas más, que ahí ya cada uno sabrá que le ha faltado. Pero entre todo esto, perdimos algo muy importante, la posibilidad de conocer y salir con gente nueva.

Bajo esta idea y con muchísima vergüenza y el rabo entre las piernas decidí adentrarme en la salvaje jungla de Tinder, la aplicación de “citas” que ya todos conocemos (disclaimer: esto no es publicidad).

Joaquín, 27 años, “Si hubiera nacido el 28 de junio, aquí diría que nací el mismo día que Chayanne”. Dentro de ella la verdad encontré de todo: descripciones divertidas que se ganaban likes, compañeras del colegio que no veía hace años y también viví sucesos paranormales como el ghosting, pero lo más curioso que descubrí y que quizás no lo vi venir, fue a una persona que iba a terminar siendo mi polola.

Tras hablar durante semanas por el encierro, concretar citas de tomarse un café a las 8 de la mañana en el horario deportivo, pasear evaluando perritos en franja deportiva y en su tiempo por el toque, juntándonos como mucho durante dos horas, hoy con un escenario pandémico más tranquilo, llevamos 3 meses con la Maca, donde hemos crecido juntos con viajes, cenas, series y películas, y conociéndonos cada día más. Y me dí cuenta que Tinder en verdad sirve y como dicen mis amigos riendo, logré speedrunearlo y dármelo vuelta, porque saqué de ahí una persona bacán que hoy hace mis días mucho más felices y me cuida un montón. 

Y sabís qué, no me dan ganas de decir que nos conocimos por ahí o por amigos en común, porque la verdad es que nos encontramos por azar (o quizás destino) en una aplicación donde conectamos dos personas en la misma página, en la misma parada y eso creo que es algo que a veces perdemos de vista en Tinder. Rompamos la barrera de “no si la aplicación es pa’ puro pelarse” o el “que cringe pololear por una app”, porque cuando vemos más allá del tabú o el prejuicio descubrimos un espacio lleno de personas como nosotros, alguien que al igual que tú quiere que le saquen sonrisas, que los acompañen a todos lados o que los hagan brillar.

Por eso, el mensaje que quiero darles hoy es súper sencillo, atrévanse a arriesgarse y deslizar a la derecha, porque nunca sabrán con quién harán match y lo importante que podría ser esa persona para ustedes hoy, porque el verdadero universo de los “What if?” está ahí y les aseguro que pueden llevarse una alegría que les haga poner esas valiosas cinco estrellas a Tinder. 

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LA MODA ES MUCHO MÁS DE LO QUE CREES: A MÍ ME AYUDÓ

Por Nicolás Henríquez, Ejecutivo de Comunicaciones en ALTA

Históricamente, septiembre es el mes más importante en la industria de la moda, una fecha en que ciudades como Nueva York, Londres, Milán y París se repletan de los principales referentes de esta industria y de las miles de personas que viajan para conocer las nuevas colecciones de las casas de moda. Y es aquí donde mi locura comienza, y claramente este año no ha sido la excepción.

Muchos nos embarcamos en la búsqueda de descubrir quiénes somos, especialmente en la adolescencia, experimentando distintas actividades, buscando respuestas a esta interrogante. Para mí, un joven que a sus 16 años pensó en quitarse la vida sin encontrar ningún rumbo, encontré esas respuestas cuando comencé a revisar las revistas de mi mamá, donde destacaban modelos en grandes producciones, vitrinas de prendas de colección y marcas que poco a poco entendí que eran importantes para este mundo y para mi mundo. Así comenzó mi amor por la moda, donde con lo que me compraban mis papás, tenía tesoros para buscar darle un giro diferente a cada look, combinando colores y añadiendo accesorios. Con los años, entendí qué realmente funcionaba para mi cuerpo y que no, pero lo más importante, es que empecé a tener confianza en mí mismo.

Para muchos, la moda puede resultar banal, frívola y consumista, para mí es el espacio en que logro identificarme como una persona independiente y confiada. Y en el camino a impregnarme más de esto, busco los principales puntos de encuentro, como los desfiles de moda, lanzamientos, publicaciones e hitos, entre otros, para seguir aprendiendo y llevarlo a mi realidad.

Por esto, durante cada evento importante relacionado a la moda, como las semanas dedicadas a ella, las alfombras rojas y, la muy importante Met Gala, en las que se dan a conocer las nuevas tendencias, nuevas propuestas que tienen los diseñadores, busco cómo poder adaptarlas a mi estilo de vida, a mi trabajo y a mi closet. Aunque, tal como ha sido hace varios años, las tendencias en la moda no se centran en un solo estilo, si no que refuerza la idea de que la moda es para cualquiera.

Este mes ocurrió un hecho histórico en Nueva York que me tuvo ansioso por varios días, desde el 8 al 12 se realizó la semana de la moda de Nueva York, el 12 fueron los VMAs y finalizó el lunes 13 con los Oscar's de la moda, la Met Gala.

Calendarizado con alarma cada evento en mi celular, estuve pendiente de todo lo que estaba ocurriendo a 8.000 km desde mi casa a través de los IG Lives de las marcas. Desde el inicio con el desfile de Christian Siriano, pasando por Rodarte, Carolina Herrera, Jeremy Scott, finalizando con Tom Ford, la semana de la moda de NY fue el gran regreso de las marcas de moda y los referentes de la moda mundial a reunirse por lo que muchos amamos.

Uno de los momentos que hace varios años se roba mi atención, es la Met Gala, un evento de moda que, por muchos, se compara con los Oscar's de la moda. Cada año la temática inspira a los asistentes a esta gala a interpretar a su manera el vestuario que utilizarán, y así es como vemos la creatividad y audacia de muchos diseñadores e invitados salen a la luz. Este año la temática “In America: A lexicon of Fashion” llamaba a mostrar el diseño estadounidense, desde referentes de la moda o diseñadores propios. Para mi, las horas y días posteriores a este evento son los más importantes, porque logró analizar el detrás de cada look, entender el porqué y cómo llegó a usar algo así.

La moda no es solo para lucir bien, muchas veces tiene un trasfondo histórico, político o cultural que ayuda a entender cómo está funcionando la sociedad, y son estas instancias las que logran confirmarlo. Hay quienes deciden quedarse fuera y pensar que solo somos egocéntricos por buscar qué usaremos un día determinado, pero hay otros, como yo, que buscamos expresarnos y comunicar cómo nos sentimos a través de lo que usamos. La moda es una declaración de quienes somos, y no todos lo entienden.

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Suicide Squad y la libertad de darte el espacio para jugar

Por Matias Palma, Redactor Creativo de MODO

Imagina que una empresa multimillonaria te encarga el proyecto para su próxima película basada en una de las franquicias que más busca impulsar y tu primera pregunta sea: “¿A cuántos puedo matar?” y que más encima te respondan: “A los que quieras”.

Para hablar de esta película obviamente debemos centrarnos en su director James Gunn, un amante del cine, pero no necesariamente del cine tan convencional y no hablo de ese cine impresionista francés o esas películas que un “cinéfilo” dice (o inventa) haber visto, en realidad hablo de que Gunn nace con películas que sólo en tus primeros años de universidad te atreverías a grabar como lo son Toxic Avenger 4 (2000), Tromeo and Juliet (1996) o incluso su primera película oficial llamada Slither (2006) y ahí es donde uno dice: “¿Cómo alguien así llegó a Disney?”.

No creo que sea el punto hablar de su ida y regreso a Disney (saludos tweets del 2010), pero sí destacar que es indudable ver algo esencial que tienen sus películas, ya que más allá de fallos de continuidad o si alguna decisión no funciona, Gunn le da un clavo a un punto que muchas veces olvidamos y es que sus películas son entretenidas. Así de simple y sencillo, no siempre hay que ser un Gaspar Noe buscando impactar en todo lo hagas o un Darren Aronofsky entregando tramas profundas. Algunas veces tienes que sentarte, ver lo que tienes y solamente divertirte dejando volar tu imaginación.

Para mí ese es el núcleo de The Suicide Squad (2021), más allá de que si te gusta o no, esta película no viene a tratar los límites de los héroes o dejar una enseñanza, lo que busca y en general lo que el cine de Gunn viene a decirte es que también puedes contar una historia divertida, atrevida desde el primer minuto, entregar crítica social o incluso darle personalidad a cada uno de sus personajes, pero sin perder la oportunidad  de volarles la cabeza en cualquier momento (literalmente esto pasa) con humor negro, sangre y explosiones por montón.

Hoy en día The Suicide Squad (2021) está catalogada como una de las mejores películas de James Gunn según la crítica especializada y si bien podemos tomarle más o menos peso a esto creo que es claro el mensaje, cuando le das las libertades creativas a las personas correctas terminas obteniendo un producto que se destaca por sobre otros con un sello diferente.

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Cansado de las Fake news

Por Pablo Courard, Director Ejecutivo ALTA Comunicación.

Hoy en día es muy común consumir fake news en la búsqueda diaria de información. Están en los medios, pero sobre todo en las RRSS, ecosistema donde la población está hoy “informándose” en desmedro de los medios tradicionales.

Lamentablemente, las redes sociales hicieron que las personas vivamos en mundos de información diferentes, teniendo distintas visiones y versiones de lo que ocurre en el país para un mismo tema. Como dice muy bien Anne Applebaum, Premio Pulitzer 2004: “ahora vivimos una crisis del conocimiento y eso ha hecho que las divisiones sean más profundas”. No puedo estar más de acuerdo con esa aseveración. Esta desinformación nos lleva a una radicalización del comportamiento, lo que está comenzando a generar peligro. En México, según News Guard, desde julio 2021 las noticias falsas sobre la pandemia superan por primera vez a las informaciones confiables y veraces. En otras palabras, las fake news sobre la pandemia están literalmente matando gente al distorsionar la realidad.

El surgimiento de nuevos medios digitales en RRSS de dudosa fuente, más ligados a la propaganda política que a mostrar la realidad en que vivimos, ayudan también a la confusión.  Por lo tanto, el riesgo hoy es enorme.

En Francia, el presidente Macron anunció hace un par de semanas la creación de una agencia nacional para luchar contra las fake news. Los franceses se la están tomando en serio porque cuando se ataca la desinformación, se ataca la democracia, alterando la realidad, engañando a las personas y generando dividores opuestos en la dinámica buenos vs malos.

En nuestro país recién estamos dando algunos pasos positivos en frenar esta tendencia como por ejemplo Fast Check, medio privado creado con el fin de verificar las noticias, o también la aparición de secciones en medios como El Polígrafo de El Mercurio, pero claramente no es suficiente ya que no logran influir a nivel ciudadano.

Es importante que las personas logren reconocer una fake news de la realidad pero para eso hay que entregarles las herramientas correctas. ¿Y cómo las combatimos? Con 2 estrategias: educación permanente y consistente proveniente de los medios y el gobierno, haciendo campañas de concentización, y por otro lado, con tecnología, específicamente con Inteligencia Artificial. A través de esta herramienta se podría detectar más fácilmente el contenido fake para eliminarlo antes que se viralice, y ahí la tecnología es clave pues tiene la facultad de reunir cantidades masivas de información, procesarlas a través de algoritmos que lograrán interpretar datos para detectar el contenido confiable y el engañoso.

Ojalá pronto podamos tomar cartas en el asunto porque estoy cansado de leer mentiras cada vez que prendo mi celular. Esto ya es materia de seguridad nacional.

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Una mala idea

Por Pedro Ponte, Director Creativo ALTA Comunicación in

Nunca me voy a olvidar el día que un profesor… no, espera, era un Director Creativo… creo. Cuestión que me dijo “empieza bien, una buena idea, mal contada, es una mala idea”.

Esta frase al estilo meme de autoayuda, realmente me quedó grabada, no porque sea un descubrimiento o una maravilla intelectual, sino más bien porque sintetiza muchas actitudes de la vida cotidiana. Y ojo, esto no tiene que ver con no arriesgarse, o no animarse, más bien todo lo contrario, se trata de hacerlo al 100%.

Hace un tiempo en Argentina había un comercial de un banco que decía “Si la vas a hacer, hacela bien, hacela con tu 100% si la vas a hacer… Banco Ciudad te quiere ver crecer”. Me quedo con esta primera parte: Si vas a hacerla, hacela bien, sin vueltas, sin excusas, menos “telling” y más “doing” a bancarse la pelusa si te gusta el durazno.

Malas ideas, muchas veces bien contadas, también se convierten en buenas ideas, y esto creo que se debe a que la hicieron bien, a que hubo emociones, diversión, descubrimiento y mucho aprendizaje. A que muchos factores se pusieron de acuerdo y tiraron para el mismo lado.

Lo que sí es seguro, que las buenas ideas, bien contadas, no llegan al puerto que esperamos, llegan mucho más lejos, una idea bien contada te invita a ser parte de la historia, a ponerte en la piel del protagonista y emocionarte en el recorrido.

Son muy pocas veces pero ¿nunca se les puso la piel de gallina por contar o escuchar una idea? ¿nunca se te aceleró el corazón imaginando llevar a cabo “esa” idea?

Esta profesión es emocionante, con mucho drama, terror y momentos delirantes. Vivir del mundo de las ideas es todo un desafío, enamorarse y odiar al mismo tiempo, una ciclotimia constante pero maravillosa.

Vivir del mundo de las ideas, es una buena y una mala idea, depende de cómo la hagas.

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Extrañando el país guachaca

Por Víctor Cáceres Massara, Gerente de Cuentas en ALTA in

Santiago 20 de julio de 2020. Hemos visto pasar amigos, novias, amig@s con ventaja, aparecer y desaparecer medios, pero también hemos visto como algunas costumbres, junto a lugares icónicos de nuestro país ya no existen, sobretodo por los perjuicios de la pandemia. Este año se cumplen 11 años de habernos titulado como periodistas, junto a Diego Villegas y Carlos Ferreira, a quienes quiero recordar a través de este post, donde le vuelvo dar vida a un proyecto que nunca vio la luz, pero que hoy quise compartir, para que conozcan nuestro lado más guachaca, cuando sólo faltan dos meses para celebrar un nuevo 18 de septiembre.

En este texto compartiré 10 palabras típicas chilenas, donde a través de una investigación, en la que utilizamos la bibliografía del libro “Palabras con Historia” de Héctor Velis-Meza, descubrimos que muchas de las palabras que utilizamos hoy, vienen de la unión del vocablo lunfardo, del coa y del quechua. 

Si quieres saber más que, las 10 palabras que hay en este post, y conocer más de ese Chile popular, en este link https://issuu.com/vitoko/docs/pa_s_guachaca encontrarás: las ocho características que representan a un guachaca, el significado de 100 palabras típicas chilenas, la historia de siete lugares populares de Santiago como La Piojera y, finalmente, la historia de 10 personajes de nuestra cultura como lo fue el Tony Caluga o la Tía Carlina.

10 palabras típicas chilenas

Yapa: palabra que viene del quechua y que significa regalo que hace un vendedor a un comprador. En Chile el significado se mantiene casi inalterable, y se utiliza cuando en un local comercial o en la feria el producto consumido viene con un regalo, ya sea con un poco más en el peso en el caso de la fruta, o con unos dulces más en el caso que hayas comprado una golosina.

Barsa: “soy entero e´barsa” o “no seas barsudo”, son alguno de los contextos en que se utiliza esta palabra, que tiene como significado ser un farsante, estafador o desvergonzado. Según los estudiosos de la lengua, el término barsa proviene de la economía del lenguaje para farsante. “La deformación en la pronunciación terminó en barsa”, contó hace 10 años Héctor Vélis-Meza.

Achuntar: la palabra achuntar significa acertar, dar en el blanco y se encuentra dentro del diccionario de la RAE. Sus orígenes vienen del quechua, en la voz chontar, que según don Héctor, “es un árbol del cual se fabricaban antiguamente las flechas”, por lo que achuntar proviene de dar en el blanco con una flecha hecha de la madera del chontar.

Cacha: según voces indígenas de uso común en Chile, la palabra cacha tiene varios significados, debido a que tiene diferentes raíces lingüísticas. Por una parte cacha tiene como significado realizar la acción del coito, y sus orígenes estarían en la lengua aimara en la voz Kácha. Por otro lado, cacha también se utiliza para indicar a otra persona que preste atención a algún acontecimiento u objeto, la cual tendría sus orígenes en el verbo inglés “to catch”, que significa coger, pescar o captar.

Chamullar: un chamullero es una persona que constantemente está engañando a otra. Sus orígenes están en la lengua gitana caló, que define chamullar como hablar. Sin embargo, el lunfardo adoptó esta palabra como chamuyar, donde José Gobello define en el Diccionario Lunfardo como: “conversar, hablar una o varias personas unas con otras”. Aunque, para referirse a los charlatanes emplea el término derivado chamuyeta.

Copucha: guarda una copucha es quizás una de las actividades más propias del chileno. Su origen está en el quechua pukuchu, que significa vejiga de animal, que antiguamente se utilizaba como bolsa. De ahí la similitud, puesto que las copuchas se guardan y se conservan en un sitio, para luego ser sacadas de su bolsa.

Cuico: según Juan Grau y su libro Voces indígenas de uso común en Chile, la palabra proviene de la voz quechua cuy, que significa cobayo. Sin embargo, otros expertos señalan que cuico se utilizaba para referirse despectivamente a los bolivianos, que en tiempos de la antigüedad poseían mucho dinero producto del yacimiento en Potosí. 

Witrear: si bien esta palabra se encuentra registrada en la RAE como buitrear, en nuestro país se utiliza con “w”. Como bien dice el diccionario, este concepto se familiariza con vomitar después de una borrachera excesiva y se hace la analogía con el buitre, ya que este es un animal carroñero que no le hace asco a nada, al igual que los curaditos. “Es clasista, porque si son ABC1 vomitan y si son del pueblo, witrean”, comentó Vélis-Meza.

Chupete: palabra proveniente de la voz quechua chupa, que significa sin cola, y que se usa para los volantines que carecen de esta.

Anticucho: palabra que según el libro Voces indígenas de uso común en Chile de Juan Grau, esta palabra proviene del quechua. Una es anta, que significa metal, y la otra es kuchu, que se refiere a cortes o cortadura. El anticucho originalmente se hacía con carne de llama y era muy cotizado por lo sabroso del alimento. 

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¡Clap! ¡Clap! ¡Bravo!

Por Ale Director de Arte Senior en MODO  IG

Los aplausos son reconocidos como una expresión de aprobación, expresión que solemos entregar cuando reconocemos el actuar de alguien quien ha expuesto algún tema frente a un grupo determinado o cuando vemos algún tipo un espectáculo artístico y este finaliza. Desde un escenario los aplausos son un premio enorme a esfuerzo de semanas y horas de ensayo, porque habiendo sido bailarín que perteneció a una compañía folklórica durante 8 años, junto a mis compañeros músicos y bailarines, estuvimos en diversos escenarios, festivales y plazas, y te puedo asegurar que los aplausos finales siempre fueron nuestra mayor recompensa, se nos llenaba el cuerpo de alegría, nos brillaban los ojos de saber que entregamos todo y que el público disfrutó… Pero desde aquí mismo pregunto ¿Tú te aplaudes?

Podrás pensar “¿Porque me voy a aplaudir si no hice nada espectacular?” es precisamente donde radica tu error, por supuesto que debes aplaudirte cada mañana o al finalizar el día, sin darte cuenta has sobrellevado un día más, seguramente superaste algunos inconvenientes y estamos tan ocupados en lograr el mejor resultado que al concretarlo, olvidamos reconocernos a nosotros mismos por haber salido adelante, quizás puede que durante el día algunos nos haya costado un poco menos que a otros, pero finalmente supimos lidiar con aquello, eso ocurre cada día pero si le sumas la pandemia y cuarentenas, sobrellevar el día a día es un desafío constante, entonces si llegas al final del día, cuando se acaban las reuniones, apagas la computadora, suspiras porque se acabó el trabajo del día y pones tu serie favorita, antes tómate un momento, para aplaudirte porque... ¡¡Lo conseguiste nuevamente!!

Apláudete cada día porque solo tú sabes con que debes lidiar cada jornada, apláudete porque no necesitas el reconocimiento de nadie para saber que eres tan bueno/a como te lo propongas, y no, no se trata de ego, se llama valorarse, quererse y reconocerse.

Cada mañana cuando estés frente al espejo, apláudete porque vas por otro día más, otro día más en pandemia, otro día más con posibles cuarentenas, otro día más con asuntos que resolver y otros más que vendrán, pero apláudete porque a pesar de que sabes todo eso, te vuelves a levantar para enfrentar todo lo que está por venir, celébrate mentalmente si quieres, dilo en voz alta si tienes más confianza, pero apláudete, porque todo lo que haces merece un aplauso, estar frente al escenario actual y finalizar el día merece aplausos, porque no es fácil hacer todo lo que haces, pero ahí vas y lo superas…¡Clap! ¡Clap! ¡Bravo!

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Publicidad: ¿Un reflejo o una fuerza creadora de cultura?

Por Julio Novoa, Director de Arte en MODO IG 

En el corto tiempo que llevo inmerso en la industria publicitaria, han sido innumerables las ocasiones en las que he visto o escuchado como se cuestionan los mensajes y valores que la industria transmite con el objetivo de persuadir a la mayor cantidad posible de consumidores, por lo que en ocasiones se ha llegado a señalar que la publicidad es uno de los fenómenos que ha degradado la cultura.

Antes de profundizar en esta materia es necesario definir a qué nos referimos cuando hablamos de cultura. Según Edward Burnett Tyler  reconocido antropólogo “La cultura es todo complejo que comprende el conocimiento, las creencias, el arte, la moral, el derecho, las costumbres y las otras capacidades o hábitos adquiridos por el hombre en tanto miembro de la sociedad” (1871). De acuerdo a esto me gustaría enfatizar en el hecho de que se trata de un fenómeno adquirido y que por ende puede cambiar con el pasar de los años.

Respecto a lo mencionado anteriormente, me parece indiscutible el gran impacto que tiene la publicidad en la cultura que lamentablemente no siempre ha sido positivo, es más, durante muchos años sobre todo en el siglo XX la publicidad tuvo un impacto negativo en la sociedad propagando alrededor del mundo mensajes machistas, clasistas y racistas como lo ha sido el caso de Cola-Cao, que desde los años 60 ha estereotipado a las personas afrodescendientes en su comunicación. Otro caso conocido es el de Dolce & Gabbana que en el 2007 decidió mostrar a una mujer acorralada por varios hombres en lo que parecía una escena de violación con modelos atractivos. Y es aquí donde tenemos material para extendernos durante horas hablando de cómo a lo largo de los años la publicidad ha denigrado a la mujer de manera horrorosa, otorgándole un rol en la sociedad casi decorativo.

Sin ir más lejos y volviendo al tema en cuestión, yo me pregunto ¿cuál podría ser el origen de estas despreciables consignas? La respuesta a estas alturas me parece bastante obvia, pues los que trabajamos en publicidad sabemos que para que un mensaje sea efectivo, este debe hacer sentido en la mente de las personas y por ende debe tener directa relación con la cultura en la que se encontrará inserto. Esto evidencia el rol fundamental que juega la cultura propia de la sociedad en la publicidad en general.

Entonces podríamos pensar que la publicidad como tal no es mas que un reflejo de la cultura, pero yo pienso que la respuesta es más compleja, debido a que la publicidad como tal es un fenómeno cultural que goza de una gran tribuna, por lo que debe o debería tener una mayor responsabilidad social al propagar y reafirmar conductas, valores o creencias propias de la cultura. Afortunadamente  como lo hemos visto en los últimos años, la publicidad ha servido como gran motor de cambio en los valores que definen la cultura dentro de nuestra sociedad.

Para finalizar se podría decir que la cultura y la publicidad tienen una estrecha relación bidireccional, en donde la publicidad hoy más que nunca no es y no debe ser jamás un mero reflejo de la cultura, porque en el momento en que eso pase y la sociedad enfrente un gran cambio cultural esta seguirá siendo sujeto de constantes cuestionamientos, como lo vimos en el reciente estallido social en donde la industria no solo quedó relegada al silencio, sino que además se identificó como parte del problema. Es por esto que como industria tenemos la necesidad imperante de ir un paso adelante y de esta forma no solo ser actores pasivos en los cambios culturales, sino que atrevernos a liderarlos.

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LA MARCA COMO MEDIO: ¿EL HACER ES EL NUEVO DECIR?

Escrito por Víctor Cáceres Massara, Gerente de Cuentas en ALTA

Hablar de la crisis de los medios de comunicación, es un tema que lleva en la opinión pública más de 10 años, pero posterior estallido social en 2019 y con la llegada de la pandemia, el quiebre del modelo económico con que trabajan los medios “tradicionales”, quedó aún más evidenciado con los bajos índices de lectoría y la falta  de credibilidad, hecho que se concretó con el cierre de medios icónicos para Chile como lo fueron las revistas de papel cuché, el diario La Cuarta y La Hora, entre otros.

Sumado a lo anterior y con la disminución en la inversión publicitaria, donde gran parte de los recursos se los lleva Facebook junto a Google, otro punto importante es la migración de audiencias, donde éstas se han trasladado a otras plataformas para informarse, un hecho trascendental que demostró que el consumo de medios cambió y creó una oportunidad donde cada marca puede convertir en su propio medio.

Un claro ejemplo de cómo las marcas se han convertido en medios, a través del fortalecimiento de su propósito de marca, cautivando sus audiencias e invirtiendo en su Fandom  (grupo de personas que comparten online una pasión por una causa) lo demuestra el último estudio realizado por Talkwalker, compañía global de escucha y análisis de redes sociales e internet, junto a la consultora Interbrand, quienes realizaron un estudio para dar a conocer las diez marcas más queridas de Latinoamérica desde que comenzó la pandemia (Pincha aquí para ver el estudio completo).

Ranking:

1. Natura

2. Nike

3. Lego

4. McDonalds

5. Apple

6. Netflix

7. Rappi

8. Spotify

9. Google

10. Mercado Libre

¿Cuáles son los atributos de estas marcas?

A pesar del distanciamiento social que ha provocado la pandemia, algo en común que tienen estas marcas es que todas buscaron generar un vínculo de conexión, a través de la diversión para estar más cerca de su Fandom, acción que se ve reflejada en el cuadro que adjunto, donde es clave que como comunicadores, llevemos a las marcas a ser oportunas y no oportunistas.

Para cerrar este espacio, me gustaría compartir un ejemplo bien contingente en el cual tuve la posibilidad de participar y que demuestra todo lo que podemos crear en Grupo SUD, donde realizamos una campaña que buscó evidenciar otra pandemia: el femicidio.

Esta acción no sólo logró visibilizar un problema que aún nadie se hace cargo, sino que también posicionó a Fundación Honra dentro de la opinión pública como un actor importante a la hora de hablar sobre violencia de género, primero convirtiéndola en su propio medio, pero también haciendo marca al ser premiada en el último Festival Achap 2021, con un Short List y dos Bronces por poner en vitrina un problema en el que no podemos hacer vista gorda.

Para ver el caso pincha aquí 

Créditos foto: Photo by Yoav Hornung on Unsplash

Estudio: Las marcas icónicas más queridas en Latinoamérica 2021 – Talkwalker Interbrand

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Todo cambió dentro de mí, dentro de ti.

Por Ale Director de Arte Senior en MODO IG

No es un misterio para nadie que después de mucho tiempo encerrados muchas cosas han cambiado, tanto en el exterior como en el interior, adquirimos nuevos hábitos, que ya se transformaron en costumbre, ahora además de revisar si llevamos llaves y billetera, debemos asegurarnos de llevar alcohol gel y mascarillas, muchas cosas cambiaron incluso ahora sabemos que debemos ir con la disposición de hacer fila para entrar a algún local a comprar algo, lo que antes nos parecía tedioso cómo hacer fila, ahora es parte de lo normal.

Para algunos todo ha sido terrible, para otros no tanto, para algunos su vida era similar a la actual, si bien es cierto nadie tiene la misma realidad no podemos negar el pensar de que quizás todo esto sea una “nueva gran oportunidad”, una oportunidad para hacer pequeños o grandes cambios que tal vez en nuestra “vida anterior” pre-pandemia habíamos postergado o quizás simplemente no habíamos pensado por la famosa frase “Me falta tiempo”.

Ahora que llevamos más de un año, la percepción de nuestro entorno cambió ¿Pero nosotros hemos cambiado? Sin duda alguna, nadie podría decir que sigue siendo la misma persona que hace un año atrás, hemos hecho a cambios por voluntad propia o por las circunstancias, alguno de nosotros puede que hayamos cambiado viejo hábitos, en mi caso personal deje el consumo de alcohol, siendo que era parrillero abandone el consumo de carne entre otros productos de origen animal, he sabido que otros descubrieron un amor desconocido y relajante por el planchado, algunos descubrieron esa faceta musical o culinaria que habían relegado, otros más han aprovechado de estudiar, quizás otros cuantos más poseen ese tiempo para ese pasatiempo que tenían abandonado o bien empezaron a tener uno nuevo, otros se dieron cuenta que si eran deportistas y así, muchos cambios hemos tenido, la mayoría de los que menciono son positivos o podrían considerarse de ese modo, pero insisto en esto, no todos tenemos ni vivimos la misma realidad, ni siquiera tu pareja, vecino, roommate, madre, padre o cualquier otra persona, algunos de ellos quizás tuvieron cambios emocionales o de otra índole que no han sido “positivos” y esta pandemia los ha tenido mal, podría decir que todos o casi todos conocemos o sabemos de alguien que perdió su trabajo, que está muy estresado por la carga laboral o peor aún que tuvo que lamentar la pérdida de alguien.

Por eso extiendo una invitación a que seamos conscientes de que todos hemos cambiado en algún grado mayor o menor, para bien o para mal eso ya es experiencia personal, pero sabemos que ninguno de nosotros es la misma persona que hace un año, que hace una semana o incluso no somos los mismos de ayer, toma esta oportunidad que tienes contigo para conocerte, analizarte, aprender a estar contigo, y sobretodo a saber que “Al volver” no todos “la pasamos bien” por lo que muéstrate más receptivo a empatizar y comprender a quien tienes al lado, incluso en un acto tan simple como escuchar podría cambiar el día de una persona.

Para finalizar te dejo unas preguntas: Respecto a un año ¿Qué has cambiado? ¿Te sientes bien contigo?

Cuidate, un abrazo.

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INSIDE (2021, Netflix), la primera obra maestra “Pandémica”.

Por Rolando Santana, Socio Fundador Grupo SUD

Bo Burnham es un tipo alto, pero alto alto, casi 2 metros. En la primera escena del especial de comedia de Netflix "Inside" (Escrito, Dirigido, Producido, Editado y Musicalizado por Bo), lo vemos entrar a una casa de invitados, ubicada en algún patio de algún suburbio de EEUU. Y al entrar, Bo tiene que agacharse, porque apenas cabe por la puerta, como un gigante entrando a una casa de muñecas. La imagen es divertida por naturaleza, pero para Bo es simplemente la realidad de un hombre de 2 metros. Sin embargo, por alguna razón, se ve surrealista, como sacado de una película de Tim Burton. Y durante la próxima hora y media, entramos de lleno a este mundo extraño y maravilloso. Donde Bo reemplazó las muñecas por juguetes electrónicos para crear su obra maestra. Y créanme que al final del viaje saldrán cambiados.

Es difícil identificar los elementos que hacen que una obra trascienda. La mayoría de las veces tiene que ver con una serie de factores, ya sean planeados o fortuitos, internos o externos. En este caso, INSIDE nos pilla volando bajo en plena segunda ola de la pandemia (o tercera? Ya ni sé), encerrados los fines de semana, esperando ansiosos lo nuevo de Netflix para pasar el mal rato. Al enterarme del estreno de INSIDE decidí evitar todo tipo de spoiler, por lo menos hasta verla y opinar al respecto (es decir hasta después de esta columna). Como muchos, Bo ya me había deslumbrado con su talento, primero en sus videos de comedia musical en Youtube, pero sobre todo con la sorprendente película Eight Grade, escrita y dirigida por él (a los 27 años!). Un relato honesto (y terrorífico para los que tenemos hijxs) sobre las angustias de una niña de 6to básico en la era de la sobre-exposición en RRSS, y cómo esto afecta su desarrollo en su transición a la adolescencia. Después de Eight Grade, Bo desapareció un tiempo, para reaparecer como protagonista, junto a Carey Mulligan, en la exitosa película “Promising Young Woman”, otro acierto. Su personaje es por lejos el más realista, el menos caricaturizado y el más divertido. Se nota que es el que mejor entiende las enfermedades de nuestra sociedad. Luego vino la pandemia, y eso cambió todo. Para algunos la Pandemia truncó sueños que por fin se estaban materializando (ojo con este monólogo), para otros los hizo reformular su vida, y para otros simplemente los hundió en un limbo indescriptible. Pero algo es seguro, la salud mental pasó a ser protagonista absoluto de esta nueva comedia de la vida. Y esto Bo lo sabe, y lo sabía al empezar su encierro. Pensó que su creatividad lo salvaría de la locura, y que de paso nos entregaría ese famoso “contenido original” que todos buscan (tremenda intro con “here comes some content”). Pero lo que Bo no sabía, es lo caro que le saldría esta aventura y lo maravilloso que sería el resultado. INSIDE es una radiografía de una sociedad enferma, una obra hecha a pulso gracias al sacrificio de su creador (como Jesús? jajaja me acordé de una escena donde Bo sale crucificado). Con cada canción (TODAS increíbles), con cada carcajada, Bo va mostrando un estado diferente, una introspección que se descifra a través de su arte visual y musical. A través del uso de las luces, de la edición, del ritmo de las canciones, somos testigo de una obra que marca un punto de inflexión de nuestra historia colectiva. En resumen, INSIDE es una montaña rusa de emociones al ritmo de canciones originales, que fácilmente se pudo haber ido en collera y convertirse en cualquier basura de Netflix, pero que sin embargo resulta ser una película única, con estructura, con un conflicto, un clímax, y una (especie de) resolución. Aplauso cerrado para Bo, *****(5).

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Personas o nó

Por Andrea García, Directora de arte en GRUPO SUD

Si me hubieran pedido definir pandemia hace 2 años, probablemente habría dibujado (digo dibujado porque así me expreso mejor) un mundo con muchas personitas y algunas partículas verdes flotando al rededor del eje de la tierra. Quizás hubiera pintado el agua verde y algunos monos de palito enfermos. Súper técnico, súper comprensión del medio 5to básico, súper Apocalipsis zombie.

Pero si me pidieran definir pandemia hoy, mi dibujo sería mucho menos zombie y más solitario, algo así como un mono de palitos asomado por la ventana con una copa de vino en la mano, dos gatos y una mascarilla colgando con un sujetador de lentes en el cuello. Y obvio, un buzo o “Jogger” como le dicen algunos porque si estai en la casa, siempre cómoda, nunca incomoda.

¿Y sipo, así es la pandemia o no?  chao con los efectos especiales, la idea es sentirse poco especiales, como una cosa, parte del mobiliario de la casa, y así pasan los días. El poco contacto humano te lleva a ser un ser prehistórico con ganas de aprender cosas nuevas o perfeccionar otras, sacando al panadero que llevamos dentro, el escultor, pintor, maestro chasquilla, barman, alcohólico jeje y por qué no, la decoradora, pero decoradora pobre, porque obvio que no podí gastarte la plata de la reserva si se está terminando el mundo y estás sin pega… así que te gastai un poquito nomas… (mentira).

Ya, pero hablemos de otra cosa, no todo fue depresión, alcoholismo y estar sin trabajo. Me puse a trabajar en una pega parche hasta que se reactivara algo de trabajo en mi rubro (eventos) y así fue como después de conversar y llegar a un acuerdo sobre algunas cosas, partí trabajando para Sud producciones totalmente Online. Y nada po´, todo muy bacán. Fijo muchos estaban en la misma posición y empezaron a conocer a su equipo por Meet o cosas así, no sé cómo lo hicieron, pero me lograron hacer sentir arriba del bote en una semana, pero todos mis contactos y compañeros estaban en mi ranking de “No personas” todavía. Para seguir con esta explicación, voy a entrar en detalle sobre la definición de las “No personas”:

-Son reales, pero no tienes la certeza

-Son planas, del grosor de la pantalla de tu computador

-Son RGB

-A veces se quedan pegadas

-A veces se pixelan

-A veces tienen voz robótica

-A veces son solo un nombre

-Son en ese minuto seres digitales y 2D

-Pero te caen bacán.

Muchas veces te preguntai, “¿esto cuenta como contacto humano?” todavía no me lo respondo así que cuando lo sepa les cuento.

El otro tema es que el tiempo pasa tan rápido que cuando te toca ver a una “No persona” en vivo y en directo a veces se te olvida, y cuando llevabas su rato conversando con él o ella, se dan cuenta y ¡¡¡¡ohhh!!!!  verdad que no nos conocíamos.

-Un gusto- y toda la respectiva conversación de por medio. Listo, paso a ser una “Persona”.

-Era Real

-Era 3d

-Tenía Voz de humano

-Se veía HD

-Tampoco era CMYK, era mejor

-Tenía Aroma

-Tenía torso

-Tenía piernas

Y así se vuelve todo más cercano, todo muy de a poquito, si estuviéramos en un juego, sería como ir pasando de nivel. Si lo vemos como una partida, sería la muestra de los avatares. como uno quiera.

Pero si hay algo que me gustaría rescatar de las PERSONAS O NÓ, es que nunca antes tuvimos la oportunidad de conocer a alguien 2 veces, de tener feeling 2 veces, de sorprenderte 2 veces y de tener 2 oportunidades con alguien.

Nos fuimos adaptando de a poco, pero vamos a estar bien, con PERSONAS O NO, quizás es una prueba para aprender a vivir con nosotros mismos y caernos Bacán.

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¿Orgullo hétero?

Por Jhaim Key, creativo MODO

Las personas LGBTQIA+ hemos existido desde el comienzo de la historia de la humanidad, y nos remontamos a las civilizaciones antiguas

Cada vez que comienza un mes o una semana, o incluso un día, pretendiendo honrar los logros de un grupo minoritario, algunos miembros de una mayoría intolerante rara vez callan con gritos de "¿Qué hay de nosotros?"

El 08 de marzo, algunos condenan incluso la necesidad de un Día Internacional de la Mujer.

Grupos particulares de personas encuentran que las marchas son formas innecesarias e inapropiadas de promover mensajes sociales. Pero los grupos marginados de personas no estamos marchando por su aceptación, estamos marchando para ser vistos, para ser escuchados, para ser identificados. Queremos mostrar lo que es ser fuerte y estar unidos con otros miembros de nuestra comunidad.

Junio ​​es el Mes del Orgullo LGBTQIA+, un momento para reflexionar y celebrar la historia de lesbianas, gays, bisexuales, transgénero y queer. Sin duda, y como un reloj, algunos se preguntarán: ¿Pero qué pasa con el "Orgullo Hetero"?

El orgullo es inherentemente político

El Pride se ha celebrado todos los años en junio desde 1970 después de los disturbios de Stonewall en 1969 en Nueva York, cuando la policía allanó la discoteca Stonewall Inn.

En Canadá, el Orgullo de Toronto se lanzó de manera similar después de que estallaron las protestas cuando la policía allanó cuatro baños en febrero de 1981 y arrestó a cientos de hombres homosexuales.

El motivo siempre ha sido, y debe seguir siendo, político. Un recordatorio para todos, dentro y fuera de la comunidad LGBTQIA+, de nuestra espinosa relación con la policía, las leyes que pretendían deshumanizarnos y los sectores conservadores que incluso han planteado hacer como si no existiéramos.

Es un momento para honrar lo lejos que hemos llegado, pero también lo mucho que nos queda por recorrer. Un tiempo para recordar a nuestros mártires, víctimas de crímenes de odio, de lesa humanidad y de homofobia, para alzar la voz por Alireza Fazeli Monfared de Irán, Daniel Zamudio, Miguel Arenas Rodríguez y Nicole Saavedra de Chile, Enzo Ramón Aguirre y Fernando Báez Sosa en Argentina, Eudy Simelane de Sudáfrica, Matthew Shepard de EEUU y a cientos de miles de personas asesinadas por la intolerancia y por gobiernos inoperantes que nunca los protegieron. Un momento para conmemorarlos y gritarles al cielo “Rest in power, Rest in Color, Rest in Love”.

Todavía es perfectamente legal en algunos países que los empleadores despidan a personas por motivos de orientación sexual o identidad de género.

El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, se disculpó recientemente con los miles de hombres y mujeres LGBTQ que fueron despedidos por agencias gubernamentales, incluido el ejército, entre la década de 1950 y 1992. Fueron investigados e interrogados, algunos incluso obligados a someterse a pruebas de polígrafo y luego despedidos porque fueron consideradas amenazas a la seguridad nacional. Fue una "purga gay" que aún, en pleno 2021 sigue sucediendo en otras latitudes.

Visibilidad e igualdad

Estas luchas por la aceptación y la igualdad no han terminado.

Vivir con orgullo y abiertamente en sociedades donde nuestro bienestar (emocional, físico, psicológico y profesional) está constantemente en riesgo es nada menos que valiente. El hecho de que veamos a más personas vivir abierta y honestamente a pesar de estos desafíos es un verdadero milagro.

Casi todos los días, vemos amenazas contra miembros de la comunidad LGBTQIA+. Es difícil ignorar la reducción de los derechos y las protecciones que tanto nos costó ganar, en particular a las personas transgénero.

Entonces, cuando las personas heterosexuales preguntan por qué es necesario el orgullo gay o se preguntan por qué no hay celebraciones del orgullo heterosexual, se siente como si estuvieran diciendo que las contribuciones de las personas LGBTQIA+, un grupo minoritario que nos enfrentamos a la adversidad constante, simplemente no somos dignos de recibir reconocimiento y sentir orgullo de seguir en pie ante actos dantescos y humillantes. Además, están negando la importancia y el significado de identificarse como LGBTQIA+ y lograr cosas, incluso sobrevivir, cuando las probabilidades están en nuestra contra.

La resiliencia de la comunidad LGBTQIA+ por sí sola es digna de celebración, digna de orgullo, respeto y admiración. Somos milagro.

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Guitarras y Bajos

Por Pipiolo, Redactor Creativo en MODO IG

Cuando trabajas en creatividad al momento de tocar la puerta de una agencia publicitaria, es fácil que te juzguen por una simple variable: tu book. Qué has hecho, las marcas que llevas y porqué no, algún premio que ganaste como algo llamativo para contratarte.

Sin embargo, ya con unos cuatro años trabajando en esto, me empecé a dar cuenta que a pesar que un book te dé un par de indicios, es bueno aprender a ver más allá de eso y darse el chance de entrevistar o conocer a las personas para descubrir al tipo de creativo que tienes frente a ti, porque para mí, existen dos: guitarristas y bajistas.

Pensemos en la estructura simple de una banda: Batería, Bajo y Guitarra. En una agencia podría decir que tanto Directores Generales Creativos, Directores Creativos, Planners o Cuentas, toman el rol de la batería: marcar el ritmo, la base y los tiempos de una canción para que toda la banda toque al unísono, de manera coherente. Esto nos deja por otro lado guitarristas y bajistas.

Los guitarristas son rockstar, aman las ideas, alargar el día hasta tener esa idea premiada, ganar cualquier licitación frente a otra agencia y lucirse frente a los clientes con un guión emocionante. Nostálgicos enamorados de la publicidad que cada día quieren dejar nuestra industria en lo más alto dando de qué hablar.

Por otro lado los bajistas son más reservados, diría que son personas que les gusta el trabajo silencioso, el orden del día a día, tener a los clientes felices y marcar un ritmo parejo al de la batería. Trabajadores pasivos que aman lo que hacen por trabajar con un equipo y quizás solamente luchan porque una persona no salte un preroll.

Si bien podemos ser multi instrumentales y tocar ambos instrumentos de vez en cuando, siempre he sentido que se juzga mucho buscando uno u otro de estos músicos, cuando lo importante es reconocer cualidades y diferencias en la persona que buscamos.

Ambos perfiles tienen una visión diferente de cómo hacer nuestra pega, ambos pueden ser igual de creativos y ambos al formar un equipo o una dupla combinan a la perfección.

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La lucha que me moviliza: #SalvemosPalestina.

Por Pedro Massai, Ejecutivo de Planning & Analytics en ALTA COMUNICACIONES

Prendo la tele, bloque internacional, y los canales me informan sobre una escalada de violencia en medio oriente, en donde el foco principal se basa en un bombardeo comandado por el grupo Hamás hacia población israelí. Como imágenes de apoyo, veo un templo en Jerusalén envuelto en llamas. Me surgen dudas inmediatas: ¿por qué los medios masivos cubren una parte de la historia?, ¿quiénes son los buenos y malos?, ¿qué tendrá que suceder para que alguna vez, la cobertura se aborde desde los realmente afectados?

Soy una persona que creció bajo el alero de una educación naval, en donde la iglesia complementaba las doctrinas a seguir. Criticar ambas instituciones, era engendrar una verdadera espada de Damocles. A medida que fui madurando el intelecto, pude entender lo importante que significó para mi país recuperar las libertades cívicas, desprenderse de ideales autoritarios y tener esperanza de crecimiento en un entorno amigable. ¡Quiero eso para Palestina!

Desde el año 1948 hasta la fecha, con la creación occidental de un estado israelí independiente, el hostigamiento que ha sufrido el pueblo árabe ha costado vidas que no distinguen rango etario ni género.  Barrios tomados por colonos extranjeros y hogares corrompidos por personas no vinculadas al territorio en cuestión, han desarrollado un ecosistema de apartheid y segregación sobre generaciones palestinas asentadas desde tiempos inmemoriales.

Ni las numerosas condenas de un organismo protector de los derechos humanos como Human Rights Watch, ni la intervención del Secretario General de la ONU, Antonio Guterres, comparando la vida de los niños en Palestina a un infierno en tierra, parecen remover las conciencias de quienes ostentan el poder alrededor del planeta. También me resulta de una inmensa incongruencia ver como Israel se vende al mundo como un país ancla en los avances tecnológicos, pionero en materia COVID-19, abrazador de orientaciones LGBTI, cuando a metros de distancia promueven el dolor familiar y la destrucción humana. ¿Es que a los medios se les empaña el lente acá? Más de 63 niños palestinos muertos en esta última masacre a población civil, un cese al fuego que se responde con represión en la mezquita Al-Aqsa, un presidente estadounidense Joe Biden que refuerza el financiamiento militar a su par Netanyahu y una historia que tiende a carecer de solución concreta. Es hora de correr el cerco. Que el gran espíritu derrochado el pasado 18 de mayo por esa caravana kilométrica de autos, que atravesó tres comunas de Santiago, en donde tan claramente se manifestaba el apoyo a la causa palestina, sea la verdadera clave para destruir todos los check-points, todos los obstáculos, todos los muros que impiden el libre transitar de personas con las mismas virtudes y defectos que puedes tener tú o yo. Quiero una Palestina libre, sin intervención, sin obstruccionismo comercial ni social, en donde el respeto de credos destaque por sobre una ideología fanática y sectaria, propia de tiempos oscuros del siglo 20.   *Todo lo mencionado acá fue corroborado y todas las opiniones acá vertidas son de única responsabilidad de quién las escribe, no necesariamente responden a la opinión de todo Grupo Sud.