date-prisa-estamos-leyendo
date-prisa-estamos-leyendo
Date prisa, estamos leyendo
4K posts
«Creo que parte de mi amor a la vida se lo debo a mi amor a los libros».
Don't wanna be here? Send us removal request.
date-prisa-estamos-leyendo · 21 hours ago
Photo
Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media
Apartments in New York ‘At Home with Books’, October 1995
16K notes · View notes
date-prisa-estamos-leyendo · 21 hours ago
Text
cuanto más amo al mundo más te amo a ti le ha dicho un poeta a otro y es cuando han sonreído el agua por las rodillas el sol brillante
Antes de que tiréis mis cosas, Violeta Gil.
5 notes · View notes
date-prisa-estamos-leyendo · 21 hours ago
Text
mi intención nunca fue otra que pasar el verano contigo hacer el amor mirarte desde lejos fotografiarte sin tregua pero tú no puedes saber exactamente qué y ni siquiera yo, que leí quiero decir cuando digo mi intención nunca fue otra que
Antes de que tiréis mis cosas, Violeta Gil.
4 notes · View notes
Photo
Tumblr media
2K notes · View notes
Text
Tumblr media
5K notes · View notes
Text
En una ocasión pidió a los lectores que si alguna vez tropezaban con sus personajes o sus historias, por favor se las creyeran, porque se las había inventado.
En la celda había una luciérnaga, Julia Viejo.
5 notes · View notes
Text
Damos por hecho que las vidas de los demás siguen su curso igual que las nuestras, pero la verdad es que no tienen ninguna obligación.
En la celda había una luciérnaga, Julia Viejo.
13 notes · View notes
Text
En la cuesta que baja al lavadero las mujeres se agarran la falda, no mucho, solo lo suficiente para no tropezarse con los peñascos, dejan al aire sus tobillos salpicados por los rasguños de las zarzas y en ellos yo solo veo manadas de liebres. Si las pillo a tiempo, antes de que se escondan por detrás de la loma incluso me parece que las liebres corretean entre sus piernas como mascotas adiestradas.
En la celda había una luciérnaga, Julia Viejo.
4 notes · View notes
Text
Y yo que nunca he querido hablar del amor que se acaba, solo del amor que hay, te observo como si te hubiera atropellado en mitad de la noche atenta por si aún te mueves, y respiro tranquila al ver que me miras también con un gesto recóndito.
En la celda había una luciérnaga, Julia Viejo.
9 notes · View notes
Text
Pregunté por ti, pero nadie te conocía. Tampoco tienes rasgos distintivos, si hubieras sido cojo o tuerto todo habría sido más fácil, quizá tu vida no, pero sí la mía.
En la celda había una luciérnaga, Julia Viejo.
3 notes · View notes
Text
Dice el abad que casi todo es pecado mortal, creo que se refiere especialmente a cuando te miro a través de los visillos de tu celda del monasterio, iluminada por la luz de un candil.
En la celda había una luciérnaga, Julia Viejo.
2 notes · View notes
Text
No sé qué es el amor, ni tú tampoco lo sabes, ni lo mencionamos nunca por si acaso. Un domingo por la tarde busco en Google cómo saber si estás enamorado, y la búsqueda me lleva a un foro que me dice que la clave para saberlo es responder a la pregunta de si me dejaría matar por ti en un apocalipsis zombi. Le doy muchas vueltas durante el día y esa noche me doy cuenta de que bajo ningún concepto quiero verte por dentro nunca, así que sí, en una invasión zombi sin duda elegiría ver cómo arrancan mis tripas antes que las tuyas.
En la celda había una luciérnaga, Julia Viejo.
9 notes · View notes
Text
El guacamayo murió. Los tomates se pudrieron. Y el rey lloró hasta que se le acabó el aire, porque el Nuevo Mundo iba a extinguirse con nosotros.
En la celda había una luciérnaga, Julia Viejo.
10 notes · View notes
Text
Tengo muchísimas dudas. ¡Dudo constantemente, todo el día! ¡Parezco un filósofo!
En la celda había una luciérnaga, Julia Viejo.
7 notes · View notes
Text
a poesia não sara, mas disfarça bem o estrago.
366 notes · View notes
Text
Hago planes y más planes, como quien deja la luz encendida para que todos sepan que va a volver dentro de un rato.
En la celda había una luciérnaga, Julia Viejo.
36 notes · View notes
Text
A veces escribir te obliga a acumular más preguntas que respuestas, hasta llegar a un punto en que ya no te caben en casa y necesitas donarlas a alguien, si es que alguien quiere quedarse con ellas.
En la celda había una luciérnaga, Julia Viejo.
9 notes · View notes