Algunos escritos, fotos con cámaras descartables, colores y plantas. Yenhy Turkie nació un viernes 4 de noviembre en la ciudad de Córdoba Capital. A los 18 años se mudó a Buenos Aires para comenzar su formación técnica en diseño de producto orientado a la indumentaria en el Instituto de tecnología ORT. En el año 2009 comenzó un taller de escritura y lectura con Karina Macció (Viajera Editorial) allí editó su primer libro de poemas titulado: 12 meses. En el 2014 con ganas de iniciarse más en la narrativa comenzó el taller de escritura creativa con Romina Paula y Cynthia Edul. Actualmente está desarrollando su primer novela con el seguimiento de Virginia Cosin. Participa de diferentes ciclos de lecturas y trabaja en la producción de una película en la casa/productora Ayar Stories.
Don't wanna be here? Send us removal request.
Photo
Un verano con nieve
#dibujo#nieve#ilustración#paisaje#frio#zorrito#pinos#cielo#nubes#acuarela#ilustração#ilustraitor#drawing#snow
3 notes
·
View notes
Text
45 minutos
Tengo 45 minutos para escribir algo. En el medio me gustaría ir al baño y antes de ir al baño armar un cigarrillo para fumarlo ahí adentro. Es una de las cosas que más disfruto. Ver el débil humo que sale de mi cigarrillo armado que junta ceniza flaca agarrada de no se qué pero hace equilibrio todo el rato que me paso sentada en el inodoro observándola. Después lo tiro en la bacha. A veces me lo olvido y el Tano ya me dijo. Ese cigarrito tuyo en la bacha. No me da vergüenza, lo miro con cara de que no me da vergüenza, le levanto el hombro con ese gesto que aprendemos todos a no se que edad, el hombrito elevado hacia la oreja, el ´qué me importa´. Ya no tengo secretos. Voy al baño.
2 notes
·
View notes
Text
Los huevos
Traigo las bolsas llenas de verduras. Las apoyo en la mesada. Busco vaciar primero la de los huevos porque todavía tengo miedo que se rompan, todo el camino de la verdulería a mi casa tuve miedo. Los desenvuelvo del papel de diario. Si supiera el verdulero todo el diario que tengo para regalarle. Aunque el Tano los esta usando, esta intentando prender la salamandra todos los días y no le sale. Ya no se cuantos diarios usó pero no prendió nunca, hace un frío acá adentro. Veo la foto de tres chicos arrodillados en el piso con la cabeza tapada. Según el titular eran 4 los chorros pero el que falta lo mato el dueño de la casa a la que entraron a robar. La victima o el victimario. Era un juez o alguien del senado o no se. Los nombres de los puestos políticos o relacionados con eso no los se. Aunque estoy viendo House of cards hace dos meses no los se. Los lideres, los votos, el congreso, el vocero. Todo la misma mierda. Yo veo otras cosas, a mi me intrigan los colores. La remolacha, la sopa de remolacha que logré hacer ayer. Eso es un logro y un color. Todo mezclado. Riquisimo. Dejo afuera de la heladera lo que va a ser para la cena. Las batatas, los ancos y las papas disfrutan de la temperatura ambiente. Del frío de la casa. Las bananas también, al tano nunca le gustan las bananas temperatura heladera. Dice que se pierde el sabor y un poco tiene razón pero yo se que lo dice más por la textura. El es de las texturas. Aunque desde que estamos juntos experimenta más. Hasta se sienta a comer recién cuando todo esta listo en la mesa. Me dice gracias. Me agradece a mi aunque a veces me ayuda a cocinar pero siempre me dice gracias. El si sabe los puestos políticos. Llega con el resto de las cosas. Yo fui a la verdulería y el al súper. Le cuento lo del choreo, se lo cuento a la mitad por que ya me olvide la historia. Lo hago un bollo y lo meto en la salamandra. El diario tiene colores horribles.
1 note
·
View note
Text
Esquina de algún verano
Empanadas fritas de camarones y ravioles negros de salmón
coronan el domingo que suspende todos mis pensamientos
Puedo distinguirlo con facilidad al domingo del resto de los días
como el amor del sexo
mi complicidad con la soledad
mi miedo al abandono
la mentalidad de la ciudad
el todo pensar
porque hay que relacionarse y los vínculos aparte de sentidos son mentidos
4 notes
·
View notes
Text
Roña
Puse en mi cuarto la tabla de planchar
las puertas abiertas del placard
la tabla casi pegada a la cama
y yo golpeando mi cola con las puertas del placard
El otro cuarto vacío
el living vacío
la cocina vacía
el piso de arriba sin nadie
la terraza mojada
vos ya no estás
tuvimos que matarte
prendí velas para despedirte
abrí todas las ventanas
pero siento tu olor
te voy a extrañar
0 notes
Text
Principio
Dormir todo el día y cuidar que los huevos no se caigan de la mesa. Porque la mesa tiembla y el agua adentro de la botella se mueve, como las olas.
La luz es naranja, con calor. Como el fuego, es fuego. Hay grillos y pájaros nuevos, que yo no conozco. Hay pinos, montañas gigantes, arboles de antaño y un hombre al lado mío que busca ramas secas. Hace brasas y canta al compas. Prepara las verduras para el fuego. Mientras hace un ruido con la saliva. Es lo único que se escucha, junto con las chispas. La succiona y la lleva para atrás, ese ruidito de concentración, que me enternece. Mirada fija en el fuego. Estrellas arriba, dibujos que solo puedo ver yo y dibujos que solo puede ver él. Otro verano en la montaña. Otro año que vuelve a empezar. De nuevo el miedo, el vacío o la templanza.
2 notes
·
View notes
Text
47.
Tantas personas como respuestas hay, me dijo. Todos venimos de una familia.
El dolor de cintura cada 28 días me recuerda mi ser mujer y el pobre hombre que nació hombre
criatura
guriz
chiquitín
Te desborda la emocionalidad y solo sabes hablar con la verdad.
El egoísmo es otra cosa, me dijo. Y me liberó de todo mal.
¿Estaba hablando de mi?
Que me brillan los ojos. Que soy emocional, que no me endurezca y conviva aunque todos vengan de una familia.
Aunque todos nacimos diferentes y nos fuimos poniendo iguales.
Que sobreviva las veces que pueda.
El viento se lleva las nubes a otra parte, el viento son los suspiros.
Si yo pudiera hablar solo con la verdad, diría que el cielo es la cosa más linda que vi. El cielo celeste y unas nubes que pasan y se van a otra parte.
1 note
·
View note
Photo
2 notes
·
View notes
Text
Tiempo de besos
Cuando salí de bañarme esa mañana, él estaba sentado en el sillón trabajando, me acerque y nos dimos un beso, cuando nos miramos después del beso tenía un poco de lágrimas y cuando le pregunté porqué me dijo que eran muy lindos. Los besos.
Salimos abrigados, ya hacía un poco de frío. Sacamos las bicis del pasillo y me preguntó, como si no supiera, que caminó iba a tomar. Estaba en ese lugar en el que a veces nos ponemos. O él o yo. Le dije que podíamos ir juntos hasta Maure y ahí nos dividíamos. Me miró y arrancamos. El camino me lo sabía de memoria y le mostré todas las cosas que me gustaban. El auto dorado no estaba pero le conté la historia del señor fanático que me cruzo a veces en el café de la esquina.
Llegamos a la bifurcada y me dijo que así a él no le servía. Que ahora todo se había vuelto complejo, que no podía escribirme cuando el quisiera y eso lo hacía poner incomodo.
Esa mañana estaba más lindo que nunca. Se había cortado el pelo y tenía una camisa con unos cuadrados celestes que contrastaban perfecto con las hojas amarillas del suelo. No pude decirle muchas cosas. No me sale hablar cuando es demasiado consiente la conversación, me cuesta la espontaneidad, entonces le pedí otro beso. A mitad de cuadra me di vuelta para ver si estaba mirando y si, estaba pedaleando mirando para atrás. Levante la mano para saludarlo y volví mi mirada al camino.
Hace una semana tengo dos perfumes en mi escritorio. No se cual elegir.
¿Si elijo un perfume de quien va a ser el otro? Entonces la llame a Lola y le dije que me quedaba con los dos, sin siquiera saber el precio, no me importaba. Me dijo que lo piense bien. Que no tenía problema en esperar.
El tiempo como espacio donde descansan las dudas, el tiempo como dilatador de todas mis decisiones.
A la noche me escribió él, preguntándome que hacía, si estaba en el trabajo, si podíamos dormir juntos o eso ya no existía. Le dije que estaba trabajando, que había ido en bicicleta.
1 note
·
View note