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Satan on the Burning Lake - Demetrios Galanis (1931).
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Mountain Brook, Albert Bierstadt (German-American, 1830–1902), 1863
Oil on canvas
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Hoy hace 9 años que llegué a Tumblr. 🥳
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Hoy hace 9 años que llegué a Tumblr. 🥳
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Purgatory Canto 12, The Soul of Arachne (1867)
— by Gustave Doré
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Una gran aventura: El Piscolabis Metafísico. Parte 1.
Muchas veces me he sentido abatido por lo rutinario de la vida y lo insípido de todas nuestras actividades. Especialmente en los últimos tiempos, cuando toda esperanza de emoción y trascendencia parecía desvanecerse en la horrible adultez y la inminente madurez, no pude ver que una gran aventura me esperaba en el lugar más inusitado.
Ayer me encontraba en el messenger haciendo plática trivial y escuchando buen metal cuando de pronto, ¡he aquí un hambre atroz acuciando mis ánimos! Así pues, abandoné mis aposentos y en la cocina me serví un enorme plato de Chocozucaritas con bombones, vertí sobre mis frugales alimentos una buena cantidad de leche orgánica, y regresé a ver si de casualidad la plática había ganado cierto interés (cosa que no ocurrió). Me senté cómodamente y comencé a masticar cucharadas de cereal. De pronto, alguien dijo algo digno de una contestación. Entonces quise colocar el plato de cereal frente al monitor, pero ya sea por torpeza o por el afán de una comunicación alígera, no pude colocar bien el plato, y éste resbaló por el borde del escritorio derramando todo su contenido sobre el teclado. Y yo, anonadado, me imputé mil nombres "cómo eres estúpido, ojalá y te lleve el demonio". Así comenzó la mayor aventura de mi vida.
Como mejor pude, quité todas las partículas sólidas que estaban a mi alcance, y luego con una lata de aire comprimido me deshice de la leche que inundaba a las indefensas teclas. Todo parecía haber salido bien: únicamente la la tecla para el "tres" no funcionaba debidamente. A veces simplemente no salía nada. Otras veces se escribía un ocho. Al principio no razoné las implicaciones cabalísticas de esta "coincidencia". Entonces terminé mi plática trivial evitando a toda costa el tener que escribir un tres. Y apagué la computadora. Tenía la esperanza de que la buena fortuna restauraría la pirmera organización del teclado. Un rato después prendí la computadora de nuevo y para mi sorpresa las cosas habían empeorado mucho.
Así, si deseaba escribir "y" se ponía "uy". Si ponía una "t", se escribía "tre". Todas estas variaciones me parecieron producto de la casualidad, o simplemente, que las teclas se encontraban cerca. Pero de pronto, dialogando con Larisita comencé a notar que esto no era así. Se avino la epifanía más potente, de tal modo que, a través de mi teclado acerealado se comunicaba con nuestro mundo una entidad ajena. Incrédulo en un inicio, intentaba borrar las letras añadidas pero al hacerlo un sonido terrorífico era emitido por las bocinas, como una lúgubre advertencia. Comencé a leer con mayor detenimiento las supuestas incoherencias de mi teclado, y he aquí, un mensaje terrible para toda la humanidad.
Aterrorizado por mi descubrimiento apagué la compu una vez más. Quité algunas teclas e hice una limpieza más profunda. Así transcurrió gran parte del domingo. Pero más noche, con mucha precaución, intenté escribir algo con mi teclado poseso, y nuevamente, pero ahora con mayor fuerza, la entidad se comunicó conmigo y cosas extrañas comenzaron a suceder. Las bocinas retumbaban, el monitor relampagueaba, y el teclado tomó vida propia y escribió algo más o menos así: creion filtornel rismnuts wrugrebg. Inmediatamente copié el mensaje y se lo envié a mi gran amigo Simon Kircher, experto filólogo-metafísico en Cambridge. Él, terriblemente consternado por los arcanos que le mandé por e-mail, me contestó lo siguiente:
Dear Pablo,
I am most aggrieved that we should hear of each other again with such tidings of woe at hand. I have, with much trouble, deciphered all that is said in your message. I must warn you, leave your house at once! For the entity that now rules your keyboard will most likely overtake your monitor, your CPU and utterly your own mind.
Old records have it, the entity you are dealing with was known in ancient times as "the child of whispers", who was often depicted as a faceless girl that would command people to write down or speak plane nonsense. Or so it seemed. Nevertheless, those under its influence went mad and could be heard in the wilderness mumbling words foreign to all languages, so people believed it was the child whispering to them. Some years ago, a British anthropologist traveled to Georgia, where this thing, this "child of whispers" was still a common figure in local lore, deep in the mountains. Though we do not know for sure, it seems he suffered acute dementia while at Georgia and committed suicide. His body was brought back to England, and luckily for us, all his notes remained archived here at Cambridge.
One of the last entrances in his journal says this: "Tomorrow I leave for the mountains. It was very difficult to find a guide here in the city. Because of the rain, many roads could be closed. My guide seems nice, or at least honest. My laptop broke yesterday, the bloody thing would just scribble creion filtornel rismnuts wrugrebg. I guess, it was foolish bringing it anyway, not much hope of getting electricity in the mountains". So now you see, Pablo, that you are in great peril. Obviously I cannot be sure that this is not just a sick coincidence, but I have reasons to believe that the "child of whispers" was in fact speaking through that lap-top in Georgia, and that it has found a way into your own computer. Later in the same journal it is said, plainly "I’m losing it. Voices in my head, people reluctant to speak of the child. I have blundered", then, the final page just puts "creion filtornel rismnuts wrugrebg" over and over again. Yet what marvels me is that the handwriting is clearly not the same as the journal goes on. From there, I lose track of this "child". Nonetheless, there most be a way to get rid of it, be it in lore, or in science, I will try to find it for your sake. Until then, keep away from your computer, and if anything strange should happen (voices in your head, visions, or else), try to keep a mind. Check your e-mail often, for I should be writing again soon, but, don’t you dare opening your account from your computer.
Yours,
Simon
Así, el pavor se apoderó de mí, el simple hecho de recordar los eventos, me obliga a detenerme. Ya escribiré la continuación en otra entrada del blog.
Mayo 22, 2006.
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En el lejano 2006, durante una de esas madrugadas de insomnio, me topé con un blog en WordPress que respondía al peculiar nombre de «El tugurio maloliente». Entre sus páginas, descubrí una serie de tres historias tituladas «una gran aventura» que lograron atraparme con su humor ingenioso y desenfadado.
Hoy, casi dos décadas después, he decidido rescatar estas historias y compartirlas aquí, transcribiéndolas poco a poco en los próximos días. Espero que encuentren en ellas la misma dosis de entretenimiento que me brindaron a mí en aquellas noches en vela.
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The English Dance of Death, from the designs of Thomas Rowlandson, 1903
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