#si me alargué no t importa

[malevna]

' o con alguien que no le venda tus secretos a su esposo. ' la sugerencia es débil, vocablos apenas son audibles en el momento que le otorga la victoria de no querer volver a mirarle, recordatorio de rechazo, insuficiencia, falta de encanto, es sucesión de inseguridades apiladas en la indiferencia contraria que duelen, porque entre todos aquellos que habían llamado su atención, la reciprocidad ajena había sido tan escasa que probablemente había sido la razón por la que se había prendado en primer lugar. ríe, entre dientes, memoria de alfred, de situación, de manipulaciones y de juegos mentales que le habían dejado agotada retumban en la cabeza, hacen estragos, colisionan unos con otros y no sabe bien qué hace ahí todavía, sin embargo los pies están anclados al suelo. ' merecías algo mejor, él, no pretendo conocerlo más que tú — ' dios sabe que le terminaría crucificando allí mismo, sin embargo también siente responsabilidad, aunque sea excesivamente moral, meramente por propia salvación, de decirle a medias, lo que puede. ' tal vez el libro de vera fue una señal divina para que intentes seguir adelante. ' tampoco lo dice con convicción, todavía está bastante avergonzada por encontronazo, por lo que parecía que iba a ocurrir y no ocurrió, cruza los brazos contra el pecho, como si tuviese que esconder todo centímetro de piel expuesta, es en realidad contraste, porque antes no habría querido algo más que la mirara. baja la mirada, da unos pasos hacia atrás, no sabe qué hacer cerca de él, es precisamente inútil intentar ser encantadora, simpática, le queda únicamente ser real, eso es lo que más miedo termina dando, porque quien ella es realmente son pocas las veces que podría llamar la atención, es obscura y tormentosa, detestable en sus mejores días, aterradora para sí misma en los peores. ' si quisiera seguir pretendiendo te diría que no sabes con quién estás perdiendo una oportunidad. ' ríe, sin ganas, le mira fijo por vez primera en la conversación. ' si somos más honestos y dios sabe que la honestidad es mi peor pecado — te diría que eres inteligente porque estoy podrida. ' irónico es en realidad confesiones que jamás habían salido de entre sus labios se colocan en recipiente de la mayoría de fantasías románticas que había tenido, fortuna es, no tenerlas más, con nadie. revolea los ojos, toma asiento sin prestarle ya demasiada atención, se echa hacia atrás para acostarse, no le importa el frío, se enfoca en estrellas que en esa parte del pueblo brillan tanto. ' sí lo eres, pero está bien. ' y no puede evitar echarse a reír, la carcajada es limpia, en realidad no cesa, y sabe que no es tan gracioso lo que ha dicho, o que tal vez no intentaba ser una broma sino un cumplido. ' también eres mentiroso, ' juguetea con borde de encaje del escote. ' theseus, theseus, theseus, ¿cómo te enamoraste del minotauro a todo esto? ' referencia a alfred es cruel, descarada, no se molesta en humanizarlo.

“ me gustaba, sí. ” se trataba de disfrute momentáneo, algo en lo que podía confiar, pero no está seguro de si alguna vez le encantó. es consciente de que honestidad llega a ser cruel, no se arrepiente cuando la misma nace de propias heridas, de necesidad de devolver el mismo daño. “ tendré que sacarme una cita con maude. ” y no niega acusación porque no es necesariamente mentira, sin embargo tiene claro de que no es el único que necesita considerar propios deseos, porque femenina siempre estuvo más que dispuesta a seguirle el juego. situación retorcida y complicada que compartieron alguna vez dice algo de ambos, no es theseus el único culpable. no entiende a qué se refiere, pero es inmediato el recordatorio de que habían un montón de cosas sobre alfred que nunca le compartió, existían un mundo de relaciones y vínculos que consideraba más importantes o interesantes que el que compartía con él, y le sigue doliendo después de todo este tiempo, a veces piensa que alfred nunca dejará de dolerle, como cicatriz que nunca terminaba de sanar. por primera vez durante intercambio decide tomar la decisión correcta y no le pregunta más sobre el tema, se siente mucho más ligero cuando malena lo aparta y siente que puede volver a respirar con normalidad. toma unos pasos atrás antes de carraspear y guardar mano dentro de bolsillo de chaqueta, como si verla fuese recordatorio de lo podrido que estaba por dentro. no le gusta saber que oportunidad sigue ahí incluso luego de veneno intercambiado, es abrumador saber que tiene o tuvo tanto poder sobre alguien que, en el gran esquema de cosas, fue insustancial para él. “ eso no va a pasar, malena. ” lo menciona con suavidad ahora, toda la lucha ha terminado por desaparecer de su cuerpo y ahora sólo queda la culpa. lo siguiente lo obliga a sonreír, desvía mirada al frente, se pierde en el jardín de los buchanan. “ no soy tan patético como piensas. ” se defiende, y es cierto, alfred puede que haya sido enamoramiento más intenso pero no es protagonista de todas sus fantasías. lo único que sabe es que contraria pocas veces lo fue. “ te mereces algo mejor, de todas formas. ”