#que no tengo prisa de nada y he aprendido que la vida es un proceso y toma sus tiempos y las cosas llegan y se van pero qué maravilla aprend

[depoesiaypoetas]

He pensado si nuestros apellidos combinan En los hijos que aún no tenemos He hecho una playlist de las canciones para cuando discutamos, cuando no quepamos de la felicidad, cuando me rompas el corazón, cuando todo se arregle. He imaginado planes de los lugares que quiero mostrarte los museos y obras de teatro y exposiciones y galerías. He ideado 32 poemas que aún no he escrito y todos te dicen un poquito lo que te quiero. Tú sigue respirando, yo aquí lo seguiré haciendo. Hasta que te encuentre o me encuentres, que es lo mismo. Hasta que la vida nos atropelle. No hay mucha prisa...

Clara Ajc

[paranoidandreaoid]

Yo -siempre adelantada a mi época-ya me había impuesto el retiro temporal de mi trabajo y aislarme de mis amigos y familia.

El mes de enero bosquejé el plan, el 3 de abril era mi partida; la pandemia adelantó mi liberación laboral 2 semanas y me dió una palmada, confirmando a mi mente que incluso el universo estaba a favor de mis planes.

Siempre estamos donde tenemos que estar. A esa frase en la que tan fielmente creo, le agregaría para mayor claridad -en estos tiempos en que a todo se encuentra cómo malinterpretar- cuando no estamos donde aparentemente debemos/queremos estar, es posiblemente porque es tiempo de transformar el entorno, de volvernos responsables de nuestra realidad y marcharnos de ese sitio de nuestra vida si es necesario. Así me pasó en 2019, todo en ese año se sintió tan fatídico, tan pesado, pero conforme el tiempo, alcancé a comprender que estaba en el lugar donde tenía que estar: ocupaba tristeza, mucha soledad y reflexión -a pesar de tener medalla como overthinker profesional, nunca había llegado tan hondo en la indagación de mi propio caos emocional y por ende, de vida- entonces el lugar que no parecía nada a dónde debía encontrarme a mis 28 años, me ayudó a diseñar el rumbo a dónde seguir.

Hoy estoy en León, viviendo lo opuesto a lo que grita mi generación, no estoy desmontando paradigmas, no estoy defendiendo mis convicciones ni opiniones, no estoy dejando huella de quién soy, ni peleando con los opresores ni con las mentes cerradas.

Hoy tengo otras voces que gritan dentro, lo opuesto a todo lo que me repetí antes:

Tolera.

Aguanta.

Resiste.

Desde que soy pequeña he tenido una resistencia a las imposiciones de otros, era ir en la dirección opuesta a lo establecido por mis padres. Crecí inconforme con el mundo y conmigo. Esa inconformidad me ayudó a salir de la caja, a nunca acoplarme a un sistema de creencias y valores únicamente por ser lo necesario para cohabitar socialmente.

Fui un bicho raro desde la preparatoria, busqué relacionarme con los inadaptados todo el tiempo, las personas que salieran de lo correcto. Mi primera relación sentimental fue con el chico malo cliché: odiar al sistema con tenis de marca, desobedecer a sus padres mientras que sigue viviendo con ellos y le pagan todo. Ese estilo.

Desde entonces supe que la autenticidad era más difícil de lo que pensaba, en esa etiqueta también se escondían muchos "fakes". De esa gente que cree que ser uno mismo requiere de atacar y ser impositivo con quienes piensen lo contrario, yo había vivido esa conducta aplicada con mis padres, estar a la defensiva siempre. Pero hoy el mundo requiere más esfuerzo, más análisis que condenar a los padres por sus malas decisiones sin verlos desde su condición humana imperfecta como la de cualquier individuo. Posiblemente ellos también estaban, como todos, muertos de miedo de encontrarse a sí mismos en su vulnerabilidad, buscando su lugar en el mundo.

Indiscutiblemente todos somos copias de algo, de algo más grande, patrones familiares, ídolos, autores, profesores, etcétera, todos ellos juntos. Empecé a aprender en mi búsqueda de la autenticidad, que los ejemplos más pésimos de esta, son quienes pretenden un concepto, son inseguros de sí, entonces es más fácil ser alguien más y estar a la defensiva de las opiniones de otros. Piensan que ceder de su personalidad habitual, los invalidará de ser ellos mismos, se sienten manipulados por su medio e inconformes con cualquier sugerencia que haga alguien más. Están atorados en esos procesos del niño en edad preescolar, cuando el YO se ve vulnerado con hechos como prestar tus juguetes a alguien más o compartir el cariño de los padres.

Me di cuenta que esas personas no crecen y así, tampoco crece nada junto a ellos.

Lo tuve que experimentar para creerlo. ¿Qué quiere uno ganar? ¿A quién quiere uno probar algo, y que es precisamente ese algo? ¿Qué pasa si no me defiendo, qué estoy en realidad perdiendo? Aclaro, todo esto en el ámbito de ceder ante situaciones cotidianas triviales, no me refiero ante agresiones graves, ante esas pequeñas cosas como: ir a una fiesta que es aburrida sólo por acompañar a alguien o permitir una situación incómoda/fastidiosa sólo por llevar la convivencia en paz con la familia.

Si uno pierde la práctica de estas situaciones que involucran el salir de las casillas habituales, de romper nuestras ideas, terminamos enajenados con nosotros mismos, alienados en la convicción de que no importa perder a todo el mundo antes que perder 1 cm de quiénes somos. No alcanzamos a observar que no hay manera de perdernos a nosotros mismos mientras que tengamos nuestra valía personal en nuestras manos y no en las de los demás.

Esto implica una reflexión y análisis de uno mismo que nos lleve a conocernos de verdad.

Hasta hace unos años, por ejemplo, de manera inconsciente, yo sostenía todo mi valor como persona en el concepto de ser la divertida, eso era ser yo misma. La irreverente, alocada, risueña todo el tiempo, alegre. El momento en que tuve que compartir mi espacio con alguien más que pudo ver cómo realmente me pasaba la mayor parte del tiempo llorando, enojada con los demás sobre "las pendejadas" que opinaban, desesperada por el próximo encuentro social en el que pudiera pasarla bien (osea, dónde podía seguir reforzando la idea de mí que me gustaba). Todo parecía una imposición entonces, él quería que fuera feliz, ¡qué pinche enfado! Estar satisfecha conmigo, con la vida tan horrible que hay afuera. ¿Qué se creía ese para imponer valores y moral en nuestra relación?

Si cedo ante eso, dejaré de ser yo.

Un año me resistí y el próximo, que debería ser la liberación deseada, se sintió peor.

En realidad estaba obedeciendo otra imposición, la de mi ego. El ego es ese que se crece con la atención de los demás, es el que llena los vacíos con la búsqueda de aprobación, de reconocimiento, de validación. Carencias emocionales que buscan su consuelo en manos de otros.

Todo el año pasado fue una extensa lección, me encontré sin la fatal imposición de ser feliz de Sergio, y me encontré muy sola también. Porque ya no me interesaba ser "cool", ni "divertida", ahora sólo quería ser yo y no buscarle la cara a nadie, ni aguantar la dinámica pasivo agresiva de todos los ambientes, las pretensiones, la fantochadas de "me vale v todo".

A ese periodo de tiempo lo llamaría mi rockbottom. Me había caído el 20 de todo y me sentía tan idiota.

Ahora entonces no parece descabellado quedarme callada cuando escucho a su mamá hablando desde ideas obsoletas, ya no me ofenden los prejuicios característicos de la sociedad de este lugar, sé que quién soy realmente, es más fuerte que todo ello.

Ahora puedo por fin sentir, de verdad sentir, el amor de Sergio, prefiero mil veces alguien con quién esforzarme por ser feliz en esta vida desdichada de pandemia y cáncer, a estarme regocijando y autocompadeciendo, culpando las mismas cosas una y otra vez. Te das cuenta que cuando dejas de atacar, es porque ya no te sientes atacado, y cuando ya no te sientes atacado, es porque por fin dejas de poner en manos de los demás quién eres y lo que vales.

Yo ya quería huir de todo antes del Covid, y dicen que cuando deseas mucho algo, el universo conspira a su favor. Yo creo que así fue.

Necesitaba tanto desintoxicarme de los mismos lugares, las mismas caras, los mismos días en repetición, que el universo me tiró esquina, y con una pandemia me llegó la lección para discernir "las actividades escenciales" y darme cuenta que la única actividad que necesito, es estar en compañía del humano tan humano con el que voy a lado, viviendo sin prisas para hacer rendir con justicia cada hora de las 24 en el día.

Esta cuarentena no aprendí un idioma nuevo, no escribí un libro y no he acabado de leer más que uno ya empezado. No me puse a hacer ejercicio, ni yoga, ni abrí tiktok, ni hice absolutamente nada divertido, puedo decir que me he dedicado reconectar todas mis partes y he aprendido y me he llenado de mí, bastante.

[andreamccavoy]

Faith

Me hicieron una pregunta hace unos días, ‘¿qué le dirías a tu yo de hace 5 años?’ Honestamente no supe qué contestar. Cuando miro al pasado, me doy cuenta de lo que ha cambiado desde entonces, en mi familia, en mis amistades, en mi persona, prácticamente en todo aspecto de mi vida. Entendí que el silencio solo cura aquello que te deja de importar. Que vas olvidando todo conforme llenas tu mente con cosas nuevas. Y he de decir que puede que ya olvidé muchas anécdotas tal cual ocurrieron, varias son como un flashback. Están guardadas en mi cabeza como si fueran un álbum fotográfico que abro cada que quiero recordar algo más importante que un recuerdo: un sentimiento. La emoción del momento, esa es la que nunca se pierde. Ese instante en el que fuiste tú mismo, en que reíste o lloraste tan espontáneo, simplemente te sentiste vivo cual fuere tu ánimo. Exactamente es lo que más recuerdo, ver esa fotografía en mi mente y volver a sentirme como me sentí en ese día, es lo mejor. Me es bastante claro que no soy la misma persona de hace 1 año, es obvio que hay mucha diferencia a la persona que era hace 5. He perdido grandes amistades, he formado grandes lazos con personas que jamás creí. Me he equivocada, me enamoré, reí, lloré y por mucho tiempo estuve en una enorme tristeza... Pensé que nunca saldría del hoyo en el que yo misma me metí, lloré hasta el cansancio, me pregunté qué hice mal, pase más de una noche en vela o sin poder dormir. Pidiéndole a las estrellas un deseo, rogándole a Dios para que me iluminara. Mi fe me hace creer que Dios escuchó. Pienso que es verdad eso que dicen sobre ‘Dios te da lo que puedas soportar’ y ‘La vida te dará las cosas cuando las necesites y no cuando las quieras’. Lo único que no entiendo, es por qué ni Dios ni el Universo pueden conspirar a mi favor una vez. Tal vez ya lo hicieron y ni cuenta me di. Me he puesto a pensar en la clase de karma que estoy pagando y no se me ocurre nada. Creí que ya tenía esa cuenta saldada. A decir verdad me siento frustrada, ya hice todo lo posible para que alguien me acepte. Odio la idea de tener que cambiar solo por querer encajar. Considero que esto fue un experimento. Y la verdad es que si funcionó. El problema es que me di cuenta de lo vacío y superficial que es este mundo. Siento que desde hace mucho evado mi realidad gracias al decepcionante presente en el que vivo. Es como un método de defensa supongo. Ya tenía tiempo en que me di cuenta de que las cosas no son color rosa, pero me niego a aceptarlo. Me declara incompetente en entender las relaciones, en tener empatía,  y en general tener que convivir. Estoy herida, me siento herida. Y yo sé que en algún momento todo esto va a explotar y no es justo para nadie a mi alrededor. Tengo miedo de que llegue ese día, porque sé que me voy a arrepentir de muchas cosas y me voy a convertir en una persona amargada, sin amigos, sin ningún sueño. He tenido suerte, eso lo debo aceptar. Supongo que es porque aún no ha llegado mi momento, no sé. Estoy decepcionada, frustrad y en realidad no tengo ganas de nada. Quiero repuestas, pero definitivamente no estoy lista para escucharlas. Leí que a un narcisista en realidad no puedes romperle el corazón. Solo ellos mismos pueden hacerlo. Últimamente mis amor u obsesión por mi misma ha crecido. Me preocupa que sea como un autoestima inflado, que sea solo una careta. He aprendido mi valor como persona, mi valor como mujer y creo que nadie me merece. Que todos tienen suerte de estar conmigo y los que no, son inútiles. Eso no es correcto, (justo ahora mi cerebro piensa la contrario) voy a convertirme en alguien muy chocante y eso no va. Descubrí mi poder de manipulación, que puedo hacer todo lo que yo quiera, tener al hombre que yo quiera. Solo que con un gran poder, una gran responsabilidad. Faltan aproximadamente 6 meses para terminar la aventura que decidí empezar hace 4 años. Quiero terminarla como la empecé, conmigo misma y con las personas que amo. No sé qué pasará mañana, lo único que sé es que voy con miedo, sin frenos y sin prisa. Sé que no estoy sola, que soy fuerte y que no hay nada que no pueda lograr. Estoy en proceso de entender que no debo perseguir a las personas, si se quieren ir, tienen que irse. Que el amor no es forzado, a veces ganas, a veces pierdes. Que el sol saldrá y lo volveré a intentar, nada es tan serio como parece. La vida es una montaña rusa, hay que aprender a vivir en la cúspide y saber como levantarte del fondo. Así que si me preguntas ‘¿qué le dirías a tu yo de hace 5 años?’ Le diría: “No te preocupes, todo será increíble”.

[i-joserra-blog]

REFLEXIÓN SOBRE EL PROCESO DE APRENDIZAJE

Este ha sido el bloque en el que más he aprendido y el que más recursos me ha dado para la aplicación en mi aula.

¿Qué ideas nuevas te ha suscitado el bloque?

Lo más importante para el perfil de mis alumnos, sin duda, ha sido toda la organización de la Matriz de paisajes y los diferentes itinerarios y su clasificación de los mismos. Me ha dado muchas ideas para afrontar ciertos aprendizajes de una manera diferente. Por ejemplo:

Trabajar una composición entre varios,

Dedicar parte de la clase a la interpretación de sus propias obras o las de sus compañeros,

Pensar que actividades puedan ser obligatorias u optavivas.

El mapa de empatía no me ha parecido tan atractivo y no creo que me ayude en nada más de lo que veo, oigo y hablo con mis alumnos. Además cada uno de ellos es de una manera determinada, tiene intereses diferentes y son muy abiertos como para preguntar e informarse de lo que necesitan saber.

Las insignias me han parecido un buen aliciente (lo veo más para alumnos más pequeños), aunque el programa ofrecido para ello me parece un poco escueto. Intentaré encontrar otro en el que pueda diseñar con más opciones.

¿Habías usado antes técnicas de narración (storytelling)

La verdad es que no.

No se muy bien como afrontar esto, pensando en la edad de mis alumnos (entre 18 y 25 años).

¿Se te ha ocurrido la historia que dará sentido a tu paisaje?

Ya que he basado todo este trabajo en “componer y analizar una Invención al estilo de Bach”, pensé en contar una historia (que podría haber sido real en la vida de Bach) relacionada con las prisas y el stress que tenía que tener Bach en su día a día, ya que cada domingo tenía que estrenar varios “corales” a cuatro voces y algún que otro “motete”, además de tener que ensayarlos.

¿Cómo lo vas a gamificar?

Esto lo tengo un poco más complicado por el perfil de mis alumnos (entre 18 y 25 años), aunque el concepto de “imagen interativa” me gusta y creo que puede ser de ayuda para ellos.

En el primer trimestre del curso que viene lo pondré en práctica con alguna invención de Bach que no de tiempo en clase. Me parece un buen recurso, en mi caso, para que repasen conceptos en casa.

¿Conoces alguna otra herramienta, además de las aquí propuestas, en las que puedas diseñar un paisaje?

No había utilizado este tipo de programas interactivos en mis clases. Lo que sí he hecho ha sido trabajar con “Pages” para hacerles pequeñas presentaciones, alguna infografía con “Infogram”, en mi “Pinterest” para que vean diferentes fotografías e informaciones sobre algún tema concreto (instrumentos musicales o músicos de Jazz, entre otros) y “Prezzy” para videos y presentaciones.

¿Qué dificultades has encontrado en el uso de la herramienta?

La verdad es que ninguna. Son todas herramientas de fácil manejo y muy intuitivas.

¿Qué ventajas le has visto?

Genially me ha parecido especialmente atractiva y que voy a utilizar de ahora en adelante. Para la edad de mis alumnos creo que se le puede sacar un buen partido pedagógico.

           Incluye tu paisaje en el diario final usando el código HTML

https://view.genial.ly/5cc6a4197f316b0f70dc581c/interactive-content-invencion-no-1-bach

[oli-ser]

Semana 18-26 de Agosto 2019

Fue una semana de puro trabajo y de empujar y seguir empujando. Teníamos prisa y cosas que entregar, así que estuve empezando más temprano y terminando mucho más tarde, mi horario regular de sueño se fue al carajo. Sentí cada día más pesado pues dejé de hacer mi rutina, dejé de leer, escribir, reflexionar, meditar, ir a correr, y dibujar, mi trabajo personal que me mantiene a flote, sentí hundirse lentamente el barco por apagar un incendio. Aparte no volví a mi casa en más de una semana, estuve encerrado en AmarAbierto, un lugar tan bueno como abrumante para mí. Los últimos días me sentía disociar, junto con una tristeza profunda, impotencia, y un revoltijo mental; me urgía reflexionar y por eso escribo esto. Ahora despierto por fin en mi nuevo cuarto, respiro tras descansar muy bien, he vuelto, el barco vuelve a su ruta tras un encierro en los Campos de Trabajo. Acá lo aprendido en retrospectiva.

Navegar el Flow Noto el ritmo revuelto de trabajo y cómo la tensión aumenta con el tiempo. Durante las horas de trabajo el cansancio aumenta, el cuerpo se tensa y la tensión acumulada se empieza a carcomer a las emociones, estrés emerge, el reflejo de huye o lucha generan una mezcla de enojo y tristeza, hartazgo, el rendimiento del cerebro empieza a cesar, no hay sinapsis de ideas, no puedes procesar información, ni recordar nada. Si estabas frente a una computadora ya no eres más que una herramienta para que ésta sea operada. Esta tensión debe ser balanceada con relajación, así como sube debe bajar, se debe mantener un ritmo, mantener alineado el sistema cuerpo-emociones-mente, mantenerse a flote antes de que el barco se hunda. La presión por tiempo es contra-intuitiva: es más productivo descansar que seguir empujando, sentirse bien es lo más importante. Encontrar este balance y llevar la productividad y enfoque al límite nos permitirá entrar al Estado de Flow, llevando nuestra creatividad al siguiente nivel.

Poesía de la Forma Noto la debilidad en mis ojos, la falta de experiencia y la miopía del detalle, aún hay cierto valemadrismo en mí que es un obstaculo para crear belleza, dejo las cosas así por sacarlas pronto. Debo aprender a ver más de cerca, ver de diferentes ángulos, ser sumamente detallista, buscar que haya belleza en todos los lados de mi creación, tengo que aprender de mis maestros aunque me cueste y me moleste, tengo que llevar mi Poesía de la Forma al siguiente nivel. 

Retroalimentación Noto mi resistencia a recibir retroalimentación, no me encanta escucharla, supongo que porque no me gusta que me digan mis verdades. Sumando a eso, mi miedo a hablar me impide pedir retroalimentación cuando sé que la necesito. Espero que se de sola pero sé que no es así. Tengo que practicar pedirla así como darla, pues sé que es un paso importantísimo para los procesos, es lo que permite la iteración. Se me ocurrió un formato de tres pasos que me gusta: Empezar diciendo qué me gusta (pues la afirmación positiva es emocionalmente necesaria), decir que no me gusta (siendo radicalmente honesto) y finalmente decir qué le cambiaría (dando paso a una conversación de mejora). Permitirme Vulnerabilidad Noto aún los restos del muro que construí hace mucho para separarme de las personas. Mi miedo a hablar sigue ahí, mi miedo a mostrarme, a que sepan de mí, a decir lo que siento, a llorar, a pedir ayuda, a mostrar vulnerabilidad. Aun no me lo permito, y cada día me queda más claro que Vulnerabilidad es la clave para un cambio personal radical que permitirá llevar la conexión con las personas al siguiente nivel, tanto en relaciones, como equipos de trabajo, como instituciones y sistemas sociales de diferentes escalas. Algo tan sencillo pero tan difícil como es mostrar la vulnerabilidad personal será lo que destruya el cimiento del muro, lo que corte el cordón de la máscara, y nos permitirá vernos tal como somos, tan asustados y necesitados de amor como lo estamos, entonces la empatía y la conexión florecerán. El primer paso es empezar por mí y después enseñar con el ejemplo.

Amar mi imperfección

Accelerated Learning Machine Todo lo que he hecho en esta vida se resume en Aprendizaje, cada vez me queda más claro que lo que mejor he hecho es aprender a aprender, y cada vez entiendo más el proceso de aprendizaje y cómo genera cambio interno personal y externo sistémico. Sistema es el que aprende, no yo. Por ello entiendo que mi llamado es convertirme en una Máquina de Aprendizaje Acelerado: comprender por completo el proceso de aprendizaje y subirlo de nivel. Comprometerme a aprender y cambiar el resto de mi vida, aprender cada vez más rápido y más eficiente, procesar información, crear entendimiento, y cambiar comportamiento mío como de los sistemas. También quiero enseñar y ser un gran maestro, y sólo puedo enseñar hasta donde sé, entonces tengo que llevar mi habilidad de aprendizaje al límite para poder crear lecciones poderosas y enseñar a aprender, desarrollando la consciencia de los demás.

[jaimeariansencespedes]

093 – GERENCIA – VALORES (4) – FICHAS (1674-1694) ---

1674 – Honestidad. Como garantes de la sanción a las infracciones éticas y disciplinarias.

1675 – El Pluralismo. Que se expresa en la necesaria y pacífica coexistencia de las más diversas formas de ser y de pensar, en la profesión de diferentes ideologías y cultos y como valor que garantice la convivencia entre sectores diferentes de la sociedad incluso más allá de su diversidad y heterogeneidad.

1676 – El Pluralismo. Garantizado en la tolerancia incluso de las ideas y posiciones antagónicas de nuestros adversarios.

1677 – El Pluralismo. Que encuentra auténtico sentido y expresión en garantizar el ejercicio del disenso, de las deliberaciones y polémicas que puedan conducir o no al consenso.

1678 – El Pluralismo. Que además de reconocer el valor del disenso y el consenso democrático al que aquel debe conducir, los proclama como principios esenciales e inquebrantables de la verdadera democracia.

1679 – "No es justo". Decirlo te hace ver inmaduro e ingenuo, en general la vida no es justa, y existen matices de todo tipo y deberías saberlo. En situaciones injustas, debes mantener una actitud constructiva.

1680 – "Esta es la manera de la que siempre se ha hecho". Decir esta frase te hace ver flojo y resistente al cambio. El cambio tecnológico ocurre a gran velocidad y los procesos cambian cada poco tiempo. Seria al revés un demerito hacer lo mismo durante mucho tiempo, es una clara señal que no avanzamos, que no nos actualizamos. El cambio y la evolución es una cosa natural y como tal debemos aceptarla.

1681 – "No hay problema". Cuando alguien te pide algo o te da las gracias por algo, no debes usar esta frase, porque das a entender que lo que te pidieron sí podría haber sido un problema o que no tiene la mayor importancia, o que la solución era muy fácil.

1682 – "Voy a hacer una pregunta tonta" o "quizás esto que voy a decir es una idea estúpida". Estas frases deterioran tu credibilidad, muestran falta de confianza en ti mismo y los demás pueden también perder esa confianza. Si es tonta u obvia mejor quédate callado y no hagas ninguna pregunta.

1683 – "Esto solo me llevará cinco minutos". Es mejor decir "no me llevará mucho tiempo". La anterior expresión debilita tus habilidades y da la impresión de que haces las cosas con prisa, o das que pensar que lo que te han pedio es algo sin importancia, de todas maneras, reduces el nivel de la operación.

1684 – "Lo intentaré". Suena incierto y denota falta de confianza en tus habilidades. Pueden entender que es posible que no salga bien la operación, y solo tienes como argumento buena voluntad y no la certeza tecnológica y experimental que lograras el propósito.

1685 – "Fulanito es un incompetente", “es un idiota", “no tiene experiencia” No hables mal de tus compañeros de trabajo. No ganas nada criticándolos en público y no te lo perdonaran, es imposible ganar por este camino, entonces evitarlo.

1686 – "Eso no está en la descripción de mi trabajo" o "eso no es mi competencia". No lo digas nunca, ni siquiera lo pienses.

1687 – Las frases negativas te retratan como una persona que quiere hacer lo mínimo para seguir ganando tu sueldo.

1688 – Excepto que te pidan algo éticamente inapropiado, si lo te pidan algo que excede tu responsabilidad lo mejor es cumplirlo lo mejor que puedas y luego, reunirte con tu jefe para hablar sobre tu papel en la empresa y hasta dónde llegan tus funciones.

1689 – "No es mi culpa". Si tienes algo de parte de culpa en algún problema, asume tu responsabilidad. Si no es el caso, da una explicación objetiva y racional sobre lo que ocurrió. Cíñete a los hechos y que el jefe sea quien saque las conclusiones.

1690 – "No puedo". Suele interpretarse como "no lo haré". En vez de decir eso, ofrece soluciones alternativas. Por ejemplo, en vez de decir "No me puedo quedar hasta más tarde", tengo un compromiso ineludible, pero: "puedo venir mañana temprano".

1691 – Otra alternativa de solución es decir "aún no he aprendido a hacer eso, ¿alguien me puede ayudar?".

1692 – No tengo la suficiente experiencia, necesito un poco de ayuda o supervisión.

1693 – "Odio este trabajo". Te hace ver como una persona negativa y además, afecta a la moral del resto de trabajadores. Para los jefes es recordarles que pueden reemplazarte fácilmente.

1694 – Siempre existirán tareas cuyas características no serán de tu completo agrado, pero tienes que hacerlas, una actitud positiva ayuda. Revista Gerencia - jaimeariansen@outllok.com

[little-summers]

House of Cousins.

San Francisco, California.

La casa se alzaba imponente en uno de los barrios más tranquilos de la ciudad. Los rayos del sol del amanecer proyectaban diversos colores sobre los jardines cubiertos de hielo. La noche anterior había caído una helada bastante potente sobre la ciudad y los rayos del sol arrancaban destellos a la hierba de los jardines. Aunque San Francisco no solía sufrir inviernos tan duros como en otras ciudad como Nueva York, a primera hora de la mañana hacían falta algo más que una chaquetita y unos guantes.

La casa de los Summers estaba en pleno proceso matutino. Dawn se había levantado media hora antes para preparar el desayuno de Dorian y asegurarse de que llevaba todo lo necesario en su mochila. El autobús escolar no tardaría en pasar y lo último que ambos deseaban era perderlo. Porque eso significaría que Dawn tendría que llevarlo al colegio y su licencia de conducir había expirado dos meses atrás. Así que lo máximo que podría hacer sería cargarlo en la parte de atrás de una vieja bicicleta que Shane se había dejado olvidada en el garaje y llevarlo pedaleando hasta el colegio.

—.... y no se levanta en toda la hora, salvo para escribir algo en la pizarra —le iba contando el pequeño Dorian, de siete años de edad, con las piernas colgandole de la silla mientras mojaba una galleta en su vaso de leche—. Nos pone ejercicios y, mientras los hacemos, ella se pasa el rato en whatsapp.

—¿Y eso cómo lo sabes? —le preguntó su madre, dándole un sorbo a su taza de café, sentada a su lado.

—Porque cuando me levanto a tirar algo al cubo de basura, la veo que está con el móvil —asintió Dorian, volviendo sus brillantes ojos azules hacia su madre—. Y tiene whatsapp abierto.

Addison Fuller aún no había salido del coche. Llevaba aparcada delante de la casa de su prima unos veinte minutos, pero aún no había reunido el coraje para entrar. No veía a Dawn desde hacía por lo menos un año, cuando quedaron para tomarse un café en aquella cafetería tan mona a la que se prometió volver alguna vez. Y, en un año, habían pasado muchísimas cosas. Cambiado muchísimas cosas. Se veía cansada, y eso se debía únicamente a que había estado trabajando en exceso los últimos meses. El negocio en el que se había metido era completamente nuevo para ella y había querido aprender deprisa. Y aprender deprisa cuando las lecciones tienen garras suele costarte cicatrices. Parpadeó lentamente mientras leía el último mensaje de Frank, que rezaba: "Si lo quieres, bien, sino, se lo daré a otro."

—Siempre eres tan simpático —Susurró Addison. Esa era otra cosa que había empezado a hacer; hablar sola. Bajó el volumen de la música (odiaba la canción que sonaba) y contestó al mensaje, enviando lo siguiente: "Ya te he dicho que lo investigaré. Envíame la información al código postal de siempre y te llamaré cuando tenga novedades".

Addison ya no vivía en Nueva Orleans. Había dejado su pequeño apartamento para mudarse a todas partes y a ninguna a la vez. Vivía en moteles de mala muerte, a veces en hoteles de lujo y otras simplemente en los asientos de atrás de su coche. Sin una propiedad privada de la que valerse, decidió alquilar buzones en ciudades de referencia, como Nueva York, Las Vegas, Chicago o Los Angeles. La única persona con la que se relacionaba más allá de un archivo en un buzón, era Frank. Y simplemente porque se había ganado su confianza. Si, habían cambiado muchas cosas en la vida de Addison. Y no había asumido ni la mitad. Se guardó el teléfono y bajó el espejo para mirarse. El corte que tenía en la ceja estaba mucho mejor, pero aún se veía demasiado para su gusto. Y Dawn preguntaría. Porque Dawn era así; siempre preguntaba.

Salió del coche y arrugó la nariz inmediatamente la nariz porque la luz del sol le daba de pleno en la cara. Se ajustó la chaqueta para abrazarse mientras andaba hacia la casa. Era tonto abrochársela si iba a sacársela nada más entrar. Llamó al timbre. La verdad era que tenía muchísimas ganas de ver a su prima y a su pequeño retoño. Seguramente Dorian había pegado un gran estirón.

El timbre se les antojó extraño a los dos. El autobús escolar no tocaba el timbre sino el claxon.

—Date prisa en terminar de desayunar —le dijo a Dorian, levantándose del asiento según echaba un vistazo al reloj—. El autobús no tardará en llegar.

Su hijo asintió, con la boca llena de leche. Se colocó mejor el enorme suéter rojo que llevaba. Era calentito. Lo suficiente como para aguantar el frío que se colaba entre las viejas paredes de la casa. Esa que había comprado enorme porque iban a vivir muchas personas en ella. Un pinchazo recorrió su corazón al acordarse de sus amigos. Dawn aún estaba acostumbrándose a la solitaria vida que llevaba. No se relacionaba demasiado con la gente. Ya había aprendido a base de golpes que las personas tenían la tendencia de marcharse de su lado o acabar muertas. Así que prefería mantener las distancias ante cualquier posible interacción amistosa.

Cuando abrió la puerta se encontró con su prima, Addison. Sus ojos azules se abrieron por demás por la sorpresa y no tardó demasiado en abrazarla.

—¡Addison! —exclamó, envolviéndola entre sus brazos—. ¡Que sorpresa!

—Hola, Dawnie —Addison devolvió el abrazo con una amplia y relajada sonrisa y, al deshacerlo, le puso las manos en los hombros para poder mirarla bien—. Mírate, si en un año te han salido más tetas y todo —se rió y le dio otro fugaz abrazo antes de invitarse ella sola dentro—. Me quedé con ganas de ver tu casaza la última vez que nos vimos. Me habrás preparado desayuno ¿no? Porque vengo con un hambre que me comería un toro. Si te parece bien pasaré el día en San francisco, podemos salir a tomar algo y ponernos al... —se había guiado sola a la cocina mientras hablaba, sin perderse detalle del decorado y al llegar, vio a Dorian y soltó un grito— ¡Pero tu quien eres y que has hecho con mi sobrino!

Dawn estaba acostumbrada a lo mucho que hablaba su prima. Tenía la firme convicción de que dentro de ella había una pequeña palanca con la que se le podía dar cuerda. Y que esa cuerda no tenía fin. Sin embargo, Addison tenía buen corazón y los hechos traumáticos del año anterior habían hecho mella. A Dawn no podía engañarla; tenía un ojo crítico especializado en ver más allá de las apariencias.

—¡Prima Addison! —exclamó Dorian, bajándose de la silla para abrazarla. Ya había terminado su desayuno y se había entretenido contando las migas de galleta—. Jo, qué fastidio. Vienes cuando me tengo que ir al colegio. No es justo.

Luego iremos a buscarte las dos a la salida —le dijo su madre, esbozando una pequeña sonrisa.

—¿Lo prometes? —dijo Dorian, mirando a Addison con sus brillantes ojos de emoción.

La morena frunció los labios y se agachó a la altura del niño.

—Tienes mi palabra. Pero no me gusta esperar, así que nada de castigos después de clase ¿eh? —Le acarició la mejilla para luego pellizcársela juguetonamente—. Estás guapísimo. Y enorme. Vas a tener que decirme qué cereales te comes por la mañana, a mí me haría falta un buen estirón.

Incorporándose, le arregló a Dorian el cuello de la camiseta. Justo después, se oyó el claxon. El autobús escolar había llegado.

—Anda, ve y sobrevive a la sarta de profesores aburridos que debes tener como puedas.

Dorian de rio antes de tomar la mochila y despedirse de su prima con la mano. Dawn le hizo un gesto a Addison para que esperase.

—Hay café recién hecho en la cafetera y tienes galletas en la cajita —le indicó, señalándole una cajita metálica de diversos colores—. Ahora vuelvo.

Acompañó al pequeño por el pasillo, peinándole con los dedos el cabello.

—Acuérdate de que tienes el almuerzo en la mochila —le iba diciendo hasta llegar a la puerta de entrada—. Pórtate bien, eh.

Le dio un beso en la coronilla y se despidió de él, viendo cómo echaba a correr hacia el autobús. Una vez dentro, Dorian le dijo adiós con la mano y Dawn le dedicó una sonrisa. Segundos después, volvía a estar en la cocina.

—Puedo preparar un poco de te —dijo, entrando de nuevo en la estancia. Recordaba que a Addison le gustaba el té y ella solía tomarlo de vez en cuando como si fuese Pepsi.

—No —Addison sonrió a su prima, levantando la taza en la que se había echado café—, no te preocupes. Ya me he servido. Como que me he aburrido un poco el té, ¿sabes?

No era tanto el haberlo aburrido como el cuanto le recordaba a Matt.

—Es una casa preciosa, Dawn. Anda, siéntate conmigo y tómate otro café. ¿Cómo te va todo?—. Se echó dos cucharadas de azúcar y le dio vueltas, otra vez, al café— Dorian está enorme.

—El tiempo pasa súper rápido —respondió, tomando asiento de nuevo. Tomó la cafetera y se sirvió un poco más de café en su taza—. Parece mentira que haya pasado un año desde la última vez que nos vimos.

Y su vida no había cambiado demasiado desde la última vez. Seguía exactamente igual. Igual de sola.

—¿Vas a quedarte unos días? Sabes que aquí tienes habitación. Será por espacio...

—Tal vez —Dijo Addie, asintiendo lentamente—, lo estoy pensando. Tengo que atar algunos cabos sueltos en Oregón pero supongo que podría esperar. ¿Va todo bien? Pareces cansada. Y no me digas que es el ser madre, porque ese niño es un ángel de Dios. Seguro que hasta te ayuda a fregar los platos —Subió la taza y le dio un sorbo—. ¿estás trabajando? Se había prometido no hacerle demasiadas preguntas a su prima, pero no podía evitarlo.

Además de su madre, Dawn era la única familia que le quedaba. Una familia a la que, si se paraba a pensarlo, apenas conocía. Cada cazador que había conocido le había aconsejado no atarse emocionalmente a nadie, que cualquier ser querido sería una piedra en el camino e, inevitablemente, una debilidad. Pero ella no podía ser tan fría. No podía ser tan solitaria.

—Estuve trabajando en un Starbucks pero ser camarera no es el sueño de mi vida. Además, me despidieron —le dio un pequeño sorbo a la taza de café y se tomó unos segundos antes de añadir—. Hace unos días estuve de cacería con un viejo conocido. Y me dio una idea.

La idea de Josh había rondado por su cabeza desde que se despidieron. Incluso había mirado anuncios de alquiler en el periódico local.

—He pensado en poner un bar. De cazadores. Bueno, puede entrar el que quiera pero estaría bien que fuese un punto de encuentro para cazadores en general. E incluso, que el edificio tuviese un par de habitaciones para que pudieran hospedarse estando de paso.

Su prima se quedó meditando la idea. Addison tenía la costumbre de sumirse en sus pensamientos hasta el punto de ausentarse incluso cuando no estaba sola, olvidando que la otra persona seguramente esperaba que dijese algo.

—Vaya —Soltó al cabo de casi diez segundos—, pues... No es una mala idea. Sería una buena fuente de ingresos, si sale bien. Las dos sabemos que los cazadores son pozos sin fondo cuando se trata de beber. Obviamente, primero será una gran inversión... Eh, podría ayudarte. Si quieres. Estos meses he estado en muchísimos bares de cazadores, sé la clase de decorado que les va —Alzó las cejas y sonrió ampliamente—. Creo que deberías hacerlo. Definitivamente. Tendrías un trabajo y no tendrías que irte de la ciudad. No te sería un problema con Dorian.

—Obviamente siendo mi propia jefa, me quitaría ese problema de encima —asintió Dawn, humedeciéndose el labio inferior, pensativa—. Y podría quedarme aquí, como tú dices. Dorian seguiría yendo al colegio y no se trastocaría demasiado su vida. Principalmente, es lo que más me preocupa. No quiero que le afecte de ninguna forma. He intentado que se mantuviese apartado de todo el mundo sobrenatural y me gustaría que siguiese así.

Era difícil. Más aún teniendo en cuenta que Dorian era consciente de la clase de familia a la que pertenecía. Dawn no había querido criarlo en la ignorancia pero eso no significaba que quisiera ponerlo en primera línea de fuego.

—Aún le estoy pensando un hombre. Al bar, me refiero. Porque llamarlo "Summers Club" suena a pub de verano.

Addison no pudo sino reírse. No, no era un nombre muy adecuado.

—Olvídate del nombre, ya te vendrá. Lo importante es el local. Ya sabes que a los cazadores eso de las grandes ciudades y los centros no les va demasiado, sería más conveniente que te buscaras uno, ya sabes, un poco más apartado. Hagamos esto —Le dio un buen trago a su café, como si estuviese bebiendo agua y luego dejó la taza de un golpe—. En vez de pasarnos la mañana de tiendas, nos metemos en internet y buscamos locales disponibles que puedan encajar para tu particular idea de negocio. ¿Eh? A mi me parece un buen plan. Podemos pillar café para llevar y una bolsa de donuts para llenarnos el estómago. O chocolate, para cuando nos aburra el discurso del hombre de traje de turno que nos enseñe el sitio.

—Aunque suene como un plan idílico para pasar el día, preferiría saber por qué tienes un corte en la ceja —respondió Dawn, cerrando las manos alrededor de su taza aún humeante—. Porque ahora es tu turno de compartir qué ha sido de tu vida durante este tiempo.

Le había concedido cierto margen de maniobra contándole acerca de su vida. Pero eso no significaba que no se hubiese dado cuenta de que Addison no había soltado prenda de su propia vida.

"Por supuesto", pensó Addison. Claro que no iba a pasarlo por alto.

—Es complicado.

Y realmente lo era. Podría decirle a Dawn que había acabado metida en todo lo que sin darse cuenta la estaba ahogando por la muerte de Matt; pero no sería cierto. El asesinato de Matthew solo fue la gota que colmó un vaso que cualquier otra gota podría haber colmado.

—Pero esto —se señaló la ceja— es un regalo que me he llevado del último caso en el que he trabajado. Voy a ser sincera contigo, Dawn, hace más de un año que no nos vemos y mi vida no se parece en nada a lo que solía ser. Pero sigo siendo la misma persona, solo que quizá un poco menos ignorante. Estoy... intentando averiguar en qué estaba metido mi padre, que no era un héroe de guerra sino miembro de alguna clase de orden secreta, y si su muerte está también relacionada con la enfermedad de mi madre.

Dawn le dio un trago a su taza de café y asintió levemente a sus palabras. Estaba claro que su familia era una completa incógnita. O demasiado conocida si se trataba del mundo sobrenatural. Incluso los familiares más alejados como lo era Addison, en este caso.

—¿Qué clase de orden secreta? —preguntó, arrugando ligeramente el entrecejo. Se consideraba un pozo de sabiduría en cuanto a demonología se trataba.

Las largas tardes con Giles, en la tienda de magia, dieron su fruto durante su adolescencia. Hasta el punto de que el Consejo de Vigilantes le había querido ofrecer un puesto. Qué tiempos aquellos cuando era joven e inocente y de lo máximo que tenía que preocuparse era de odiar a su hermana.

—Podría ayudarte con eso, si quieres —le comentó—. Tengo una base de datos informatizada con todas las órdenes no tan secretas que han existido.

—Ya me gustaría a mi saberlo —Contestó con un tono de absoluto cansancio.

Del bolso cruzado que había colgado en el respaldo de su silla, Addison sacó unos cuantos papeles arrugados y doblados que puso sobre la mesa para Dawn.

—Solo son unas cuentas páginas. Nunca llevo el original encima. Mi prima, Piper, tenía ese diario escondido en su viejo apartamento. Cuando yo llegué, el apartamento estaba patas arriba. Alguien había estado registrando cada rincón. Afortunadamente, ese alguien no encontró ese libro —señaló las páginas—, que creo era lo que buscaban. Creo que es una especie de diario, pero está escrito en un idioma que no puedo descifrar. En la primera página, una única palabra: Sigmar.

Aunque sabía varias lenguas muertas como sumerio o latín, definitivamente esa en concreto no la reconocía. Dawn entrecerró los ojos, intentando descifrar los caracteres pero le fue imposible.

—Esto tiene pinta de ser pre mesopotámico... o.... No sé —tomó uno de los papeles y lo acercó a sus ojos—. Utiliza varias letras de distintos alfabetos. No sabría decirte cuántos pero... Luce como que es inventado.

Se puso en pie y fue hacia la encimera, donde tenía sus gafas de leer. Luego de ponérselas analizó mejor la escritura.

—La caligrafía es bastante cuidada y por el redondeo de algunas letras, yo diría que quién lo escribió era una persona distante sin mucha interacción social —volvió acercarse a la mesa y le devolvió la hoja—. Pero no te puedo decir mucho más sin conocer exactamente el idioma.

—Lo escribió mi padre —Addison se encogió de hombros. A sabiendas de que quizá había dejado pasmada a su prima, se levantó y se acercó para quitarle las fotocopias y mirarlas ella—. En la segunda página se lee claramente su nombre. Ya sabes, como si estuviese diciendo "escrito por". Pero a partir de ahí, todo es un misterio —Miró a Dawn por el rabillo del ojo—. No recordaba que fueses una biblioteca con patas. Impresionante.

Su prima hizo un movimiento con la mano, restándole importancia. Era más impresionante quién lo había escrito.

—¿Dices que tu padre se inventó todo un lenguaje y que lo plasmó en su diario? —abrió mucho los ojos en plan "wow". Definitivamente, era impresionante—. Puedo pasarlo por el decodificador de idiomas. Quizás, por algún casual de gracia divina, consiga traducir alguna frase. Ya no digo parte del diario, pero quizás alguna frase... —frunció los labios, encogiéndose de hombros—. Por intentarlo, no pierdes nada.

—En absoluto. Puedes quedarte esas copias. Siempre las llevo encima. A veces me duermo leyéndolas, como si esperara que por ser su hija se me acabase ocurriendo algo —Addison apoyó su peso en el filo de la encimera, de espaldas a esta y se cruzó de brazos—. He intentado hablar con mi madre al respecto ¿sabes? Pero... Las últimas veces que he ido, no me ha reconocido ni una sola vez. Oye, el cazador con el que estuviste en el último caso ¿por casualidad tiene nombre? ¿Un culo bonito? ¿Uhm?

—Se llama Josh Stevens —le respondió, metiendo las tazas sucias en el fregadero—. Está casado y tiene seis hijos. Me contó bastantes cosas sobre sí mismo —añadió, abriendo el grifo para empezar a lavar las tazas—. Tenemos un pasado en común. Bastante breve, a decir verdad. Por no decir casi inexistente pero creo que eso nos ayudó bastante a la hora de encajar en la cacería. Es un tío majo. De esos que van pidiendo amor por las esquinas. Pero majo, al fin y al cabo.

—¿Josh Stevens? Estás de coña —A Addison se le escapó una risa de incredulidad—. Hay que joderse. ¿Rubio, guapo, ojos verdes y una obsesión con las camisas a cuadros? Fue el cazador que me encontré en un charco de sangre en el apartamento de la bruja que vivía delante del mio. Fíjate... —negando con la cabeza, seguía sonriendo debido a la inmensa casualidad—. Pues conmigo fue un poco borde. Bueno, antipático, diría yo. Aunque claro, tenía una herida muy fea y no le gustó mi sopa. Pero luego, poco a poco, fue dejando ver que era más majo.

—A lo mejor me vio más adorable —bromeó, conteniendo una risita mientras fregaba—. El mundo es un pañuelo. De todos los cazadores con los que me podía encontrar, fue a dar justamente con Josh. Y por lo que parece, le has echado el ojo... —añadió, negando con la cabeza, sin dejar de sonreír—. Pues te repito que está casado. Y tú eres demasiado joven para andar con un tipo como él. Necesitas a alguien con menos cicatrices y más "salao".

—Sé que está casado, le llevé a su casa y llegué a entrar, así que conocí a su mujer. Fugazmente. Y a sus siete u ocho perros —estaba exagerando, pero como no los había contado y le parecieron muchos—. En fin, que no. No me gusta de esa manera. Obviamente es un tiarrón, pero...

"Pero estoy colada por otro alguien. Otra alguien". ¿Y por qué no se lo decía a Dawn? Ni si quiera ella lo sabía.

—Pero en fin, que no estoy yo pensando en relaciones ahora mismo.

—Bueno, de momento sólo tienes que pensar en pasar un rato con tu prima —respondió Dawn, terminando de fregar y secándose las manos con un trapo—. Te puedes instalar en una de las habitaciones de arriba. Y recuerda que le has prometido a Dorian que iríamos a buscarlo así que será mejor que nos pongamos manos a la obra.

Le pasó un brazo por los hombros según intercambiaban una sonrisa. Aunque hacía un año que no se veían y su relación nunca fue demasiado estrecha, el destino había decidido juntarlas de nuevo.

[nextnnet]

Infernium se ha convertido, por méritos propios, en unos de los títulos más comentados de 2018. Una apuesta arriesgada y una desafiante aventura de terror, puzles y exploración en primera persona donde ni siquiera el infierno es lo que parece. Un título que hemos disfrutado en NextN y cuyo análisis y gameplay están disponibles en la web. Pero, ¿quien se esconde tras esta arriesgada apuesta?. Ni más ni menos que el joven desarrollador independiente Carlos Coronado. Responsable de títulos como Mind: Path to Thalamus, Annie Amber y SkyRacer. Por suerte, hemos tenido el placer de poder entrevistarlo largo y tendido.

  Entrevistamos a Carlos Coronado, padre de Infernium

  Carlos, ya conocemos tu impresionante trayectoria profesional, ¿pero qué nos puedes contar sobre ti?, ¿quién es la persona tras Infernium?

Carlos Coronado: Pues nada especial la verdad. Me dedico a hacer juegos y ¡me apasiona la vela y el buceo! ¡Intento no crunchear y viajar todo lo posible! Considero que hay que salir más de la habitación y sobre todo despegarse de las pantallas para ser buen diseñador. ¡Es increíble cuando vuelves de un viaje y te das cuenta de cuanto has aprendido! Oh, también tengo una gata, Nina, que es el amor de mi vida. Durante toda mi carrera he desarrollado juegos para Pc, linux, Mac, Oculus, Vive, GearVr, Ps4 y Switch. Entre mis títulos hay de todo, ¡me gusta cambiar de género y estilo continuamente! Warcelona es acción total, Annie Amber una experiencia relajante, MIND: Path to Thalamus un juego de puzles en entornos naturales e Infernium tu peor pesadilla. Es un juego pensado para dar ansiedad.

  Aquí podemos ver a Carlos junto a dos de sus alumnos, ¿llevándolos al Lado Oscuro?

  Últimamente muchas desarrolladoras están decidiendo lanzar sus juegos en Switch, algo que ha ocurrido también con Infernium. ¿Cómo es el proceso de portear el juego a esta consola? ¿Supone un esfuerzo mayor que a otro tipo de plataformas por su hardware más limitado o es más sencillo de lo que la gente cree? ¿Qué pasos hay que seguir para que tu juego aparezca en la eShop?

Carlos Coronado: Pues fíjate que en el caso de Infernium la verdad es que no tuve ningún problema para hacer la versión de Switch, aparte de los que ya me esperaba. Es más, ¡me esperaba muchos más problemas de los que acabaron saliendo! Creo que esto se debe a que desde el día 1 he tenido en cuenta optimizar al máximo para Infernium, y cuando tocó hacer la versión de Switch esto creo que se notó.

  ¿Switch estaba en los planes de Carlos Coronado desde el principio?, ¿por qué?

Carlos Coronado: No, no estaba en los planes. De hecho, el día que empecé a desarrollar la versión de Switch yo me esperaba que tardaría entre 6 y 9 meses en acabarla. Pero OH que sorpresa cuando compilo la primera versión y me encuentro que todo va a 30 fps estables, sin tocar nada. No me lo esperaba. De hecho, lo único que tuve que arreglar para la versión de Switch son un par de puntos específicos relacionados con la IA y spikes de frames en áreas con muchas transparencias. Literalmente, a nivel de texturas, shaders, modelos y distancia de dibujado, ¡el único downgrade que tiene el juego es el shader de las telarañas!

  Ahora que la obra ha llegado a Switch, ¿crees que la consola tiene alguna característica/funcionalidad que podría haber sido aprovechada en Infernium?

Carlos Coronado: Quizás podría haber implementado que el menú fuese táctil también, pero no se, no se me ocurre otra cosa. Criticar a un juego por el menú me parece como criticar a un actor o actriz porno por su abrigo. Lo que me ha sorprendido mucho de la Switch es lo bien que se juega con los Joy-Cons y lo agradable que sienta jugar en el sofá totalmente espatarrado sin tener que estar con las manos juntas.

  ¿Alguna lección aprendida con Mind: Path to Thalamus que fuera de especial importancia para Infernium?

Carlos Coronado: Huye de la vegetación y los campos verdes. En serio, esto se come el rendimiento, así como la herramienta de terrenos. En Infernium no uso ni herramientas automatizadas de foliage ni de creación de terrenos. Todo lo que veis está hecho a mano vértice a vértice. Esto que, al principio, puede parecer más lento y aburrido a la larga he descubierto que te ahorra un montón de quebraderos de cabeza y te ofrece un control más fino.

  ¿Cuál fue la parte más complicada del desarrollo de Infernium?

Carlos Coronado: Sin duda alguna, ¡el diseño de niveles!, pero al mismo tiempo, personalmente, ¡fue con la parte que más disfruté! Sin hacer mucho spoiler, el diseño de niveles de Infernium es un gran ente interconectado y con el diseño vertical llevado hasta el extremo. Hacer que todo esto tenga sentido fue muy difícil. Por ejemplo, hay niveles en los que el jugador puede llegar por A o por B (en lados opuestos del nivel) y con cierta habilidad o no, y todo esto tenía que funcionar en cada una de las posibles situaciones. Cuadrarlo fue una tarea ardua, pero sin duda creo que mereció la pena y personalmente me siento muy orgulloso de como ha quedado.

  Con Infernium me ha parecido, por momentos, encontrarme inmerso en alguna de las aventuras visuales más destacadas de los años 90 y principios del nuevo milenio, estar en plena partida de Pac-Man o incluso viajar al mundo de Dark Souls en términos de exigencia ¿De donde procede la inspiración artística y jugable que Carlos Coronado ha plasmado en este título?

Carlos Coronado: Pues la idea me vino haciendo buceo nocturno en Filipinas por primera vez en mi vida. No se como explicarlo, pero el mundo submarino nocturno me pareció bello y terrorífico a partes iguales. Además, no te asustaba lo que no veías en la oscuridad, sino lo que veías con la linterna. ¡De ahí me vino la idea de hacer un juego de terror bello en el que asusta más lo que ves! Esta fue la piedra angular, pero por supuesto he tenido muchísimas otras influencias. Me encanta prostituirme culturalmente hablando. ¡Hay que ser una esponja en mi opinión! Son tantas las experiencias y obras que me han influenciado a la hora de desarrollar Infernium que no sabría ni por donde empezar.

  Infernium es una pieza concebida para ser disfrutada desde la angustia. Como si de una obra de Edvard Munch se tratara, sus paisajes nos describen un infierno lleno de colores y sensaciones. ¿Qué hizo click en tu cabeza para presentar el averno como una suerte de binomio entre belleza y angustia?

Carlos Coronado: Me remito a la respuesta anterior.

    En Infernium los enemigos se encuentra inmóviles hasta entrar en contacto con el personaje, pudiendo visualizar nuestro camino antes de saltar a la acción, algo poco usual en los horror survival. ¿Para qué público dirías que va más dirigido Infernium?, ¿para amantes de los horror survival o para los aficionados de los puzles/estrategia?

Carlos Coronado: Infernium va dirigido para todo aquel jugador que está harto que le lleven de la mano y que se sienta cómodo con los retos difíciles pero justos. Es curioso pero me encuentro que las reviews de 9 y de 10 ensalzan los mismos aspectos que odian las reviews de suspenso. Si te gusta el sado, te gustará Infernium. Si esperas encontrarte un walking simulator con toques de terror, mejor vete a ladrar a otro lado.

  Este título ya se ha ganado, para muchos, la denominación de juego más angustioso, desafiante y duro de cuantos han aparecido en 2018. Por todo ello, nadie discute a estas alturas que la dificultad de Infernium es parte de sus señas de identidad. No obstante, puede que esa complejidad frene a muchos jugadores a la hora de afrontar y hacer suya esta aventura ¿El riesgo mereció la pena?

Carlos Coronado: Si, ¡El riesgo ha merecido mucho la pena! La cantidad de gente que ha buscado mi contacto para, simplemente, agradecerme haber hecho Infernium (que es una apuesta super arriesgada) ¡no tiene precio! Por otra parte, desde el lanzamiento entendí que hay gente que quisiera disfrutar de Infernium pero no puede por la dificultad y ¡yo no soy quien como para decirles como deben jugar al juego! Mi pareja, por ejemplo, lo juega con un mod descargado en PC que quita a todos los enemigos. Ella se lo pasa bien caminando y descubriendo como está conectado el mundo y resolviendo los puzles sin presiones. Por ello, una semana después del lanzamiento saqué una update con 4 nuevas opciones de accesibilidad: sin enemigos, enemigos más lentos, sin permamuerte y más tutoriales. Estas opciones se pueden activar y desactivar en cualquier momento. Recomiendo a todo el mundo que juegue al juego sin estas opciones activadas la primera vez y que solo active alguna de ellas si realmente cree que va a disfrutar del juego más, pero vaya, que el juego está diseñado para ser difícil. En PC y PS4 ya está disponible y para Switch en 7 días también.

  ¿Algún mensaje para animar a los que se queden atascados en los puzles?

Carlos Coronado: Que no se olviden de que hay una grandísima comunidad detrás de Infernium y tienen ya una guía, una wiki y miles de vídeos de walkthough en youtube. Por otra parte, si no quieres spoilearte la solución, simplemente ten paciencia y la cabeza bien fría ¡Es lo único que necesitas para superar ese puzle! ¡Sin prisas lo conseguirás!

  Infernium es un juego que no te introduce en una historia propiamente dicha, sino que te la cuenta a través de sus paredes, de sus paisajes, lo que conlleva un riesgo, perderse parte de ella. ¿Por qué optaste por esta construcción narrativa?

Carlos Coronado: Pues primero, no estorbar a los jugadores que se la suda el lore. Y segundo, explicar una historia que la gente no se va a esperar para nada. El lore de Infernium no es el típico lore de seres mitológicos, tragedias griegas y monstruos atroces. Es la historia de 5 amigos que se encuentran por casualidad una entrada al Infierno y como gestionan esto emocionalmente. Dicho esto, por favor, ¡que nadie se compre Infernium por el lore o la historia! ¡Está ahí para quien quiera las respuestas, pero no es el centro de la experiencia!

    ¿Denis, Oriol, Mikel, Ainara y Marina son totalmente imaginarios o se basan en personas de carne y hueso?

Carlos Coronado: Son imaginarios, pero obviamente están más o menos basados en gente de mi alrededor que me ha influido. El personaje más complejo de todos en la narradora, Marina, que está basada en por lo menos 5 o 6 personas. ¡Estoy muy orgulloso de la evolución emocional de Marina durante toda la historia!

  ¿Qué te ha parecido la acogida a nivel internacional?

Carlos Coronado: Lo que esperaba! Como ya he dicho, Infernium es un juego radical. Me esperaba notazas y suspensos, y así ha sido. Por suerte la gran mayoría de feedback que recibo es muy positivo y la gente que le encanta habla mucho a sus amigos sobre el juego y esto se está notando en las ventas.

  ¿Se barajó en algún momento del desarrollo de Infernium la posibilidad de incluir alguna otra habilidad base ofensiva/defensiva distinta a la teleportación? ¿Qué fue determinante para elegir el teletransporte como inicial?

Carlos Coronado: De hecho hay una habilidad que te permite matar a cierto tipo de monstruos pero no, la verdad es que siempre ha sido un juego pensado para que superes los puzles desde una desventaja que tiene que ver con que no tienes poderes ofensivos. El teleport viene de que Infernium al principio estaba pensado para ser VR también y fíjate por donde, ¡se ha convertido en la mecánica básica del juego y la que más juego da!

  ¿Qué sensaciones cree Carlos Coronado que tendrán los jugadores que completen el juego?

Carlos Coronado: Como muchos me han comentado ya, tendrán una sensación de satisfacción y de empoderamiento enorme. Acabar Infernium no es moco de pavo.

  ¿Tienes ya algún proyecto en mente?, ¿puedes dar algún detalle? ¿Con vistas a la eShop?

Carlos Coronado: Solo os puedo decir que el siguiente proyecto estará ambientado debajo del agua y también llegará a la eShop.

  Agradecemos a Carlos Coronado el tiempo dedicado, la cercanía, lo fácil que nos lo ha puesto en todo momento y su sinceridad. Desde NextN estamos deseando poder disfrutar su próximo, y pasado por agua, título. Mientras tanto, regresamos a nuestro particular descenso a Infernium. Os apuntáis, ¿verdad?

  Entrevista – Carlos Coronado, creador de Infernium. Descendemos a lo más profundo de su particular averno Infernium se ha convertido, por méritos propios, en unos de los títulos más comentados de 2018. Una apuesta arriesgada y una desafiante aventura de terror, puzles y exploración en primera persona donde ni siquiera el infierno es lo que parece.

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Mi intento de #whole30 ha sido fallido. Pero no desfallezco. Regreso al mismo el lunes. Aún así voy a listar cosas que he aprendido en este proceso: ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀ 1. Necesito desayunar antes de salir. Si por las prisas no desayuno la he cagado, luego acabo comiendo lo que no debo. Con el hambre se me escurre la fuerza de voluntad. 2. En premenstrual no es el mejor momento para mí para empezar. 3. Si en algún momento necesito dedicar tiempo al “meal prep” es estando en #whole, sobre todo para asegurarme de que la cena esté lista. 4. Lo que mejor me va y más disfruto es el desayuno, aunque a veces desearía desayunar más tarde, la verdad. 5. Mi punto débil es la cena. Es cuando mis reservas de voluntad están más debilitadas y si no tengo algo saludable ya preparado o ha cocinado otro... malo. 6. He de llevar un snack en el bolso siempre que salgo para alguna actividad que implique vida social, y comerme lo que llevo, no guardar la mandarina y acabar probando las magdalenas caseras que ha traído alguien. 7. Necesito obsesionarme un poco, que esto sea no solo una forma de cuidar mi salud, si no incluso un hobbie. Necesito convertirlo en una prioridad si realmente quiero estar mejor. 8. He decidido que voy a buscar un curso de cocina paleo, que haga que me divierta y aprenda a hacer cosas más gourmet que hagan que me Importe un pito lo que comen los demás. 9. Una de las cosas que más me han costado es no poder paleotizar nada. Poder hacer una tarta de calabaza o de plátano hace que todo sea más fácil. Tb eso me ha hecho ver lo muy adicta que soy al azúcar. Entre azúcar y gluten soy una súper yonkie de los hidratos. 10. El yogur de leche de coco me encanta. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀ El lunes empiezo de nuevo con el día 1. No desfallezco. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀ #paleodieta #paleovida #whole30 #nodesfallezco #loconseguiré

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El poder de la daga - Capitulo 2: Maldita Swan

Como se podrá notar la historia ha sufrido sus alteraciones respecto de la original. En esta historia no aparecerán ni Ginebra ni Violet, para empezar. Los cambios creo yo que se irán notando a medida que la historia evolucione. Quiero decir que es un Fanfic Alternative.

Gracias por leer y espero que se pueda disfrutar al menos un poco.

Maldita Swan

Regina ingresó a través de la enorme puerta que llevaba al salón. Normalmente, tomaba su desayuno con Henry y Snow por las mañanas, mientras hablaban de cómo avanzaba su misión en el bosque encantado, y de la evolución de Emma. Pero aquella mañana había despertado más tarde y, además, tardado el doble para vestirse después del altercado 'Emma Swan'. Su hijo no había regresado de la excursión aún y su esperanza de reunirse con la señora Charming se esfumó al ver que no estaba allí. Pero Regina supo reconocer de inmediato el brillo rubio de su "compañera de piso", por decirlo así. Al verla refunfuñó. Maldita Swan.

Emma la observó mientras devoraba un huevo escaldado y una media sonrisa se dibujó en su rostro durante todo el proceso que necesitó su boca para tragarlo – Buenos días alcaldesa – le dijo mientras señalaba el puesto en la mesa delante de ella - ¿es que ya ha recordado que soñó anoche?

Regina estaba a punto de sentarse cuando escuchó la pregunta de la rubia y gruñó con desagrado – si vas a estar así prefiero no desayunar – espetó girando sobre sus talones para marcharse.

-Vale, vale – Emma levantó las manos en señal de paz – solo bromeaba Regina, no tienes por qué montar un drama de este asunto – se sirvió una pieza de pan y un poco de jamón – tampoco es para tanto, solo fue un desliz.

-Emma… ni desliz ni ocho cuartos – la morena se sentó y con pocas ganas dirigió su mano al cuenco de la fruta mientras veía como la sheriff le servía leche en un cuenco – gracias – murmuró sin darle importancia – ¿sigues insistiendo con qué te llamé a ti?

-Es que me llamaste – replicó la rubia con diversión – quieras admitirlo o no, lo hiciste – agregó mientras untaba un trozo de la pieza de pan con mantequilla y se lo pasaba a su acompañante recibiendo de su mano dos piezas de manzana bien cortadas – gracias – dijo luego.

-No sé que es esa manía de insistir con lo mismo – bufó la reina.

Fuera el mini grupo de excursionistas estaba de regreso. Henry sabiendo que era hora de desayuno se dirigió con prisa pretendiendo comer algo antes de darse un baño y ayudar a Belle. Cuando llego a la entrada se quedó en silencio observando el pequeño intercambio verbal y físico entre sus madres. Le pareció divertido lo bien que se compenetraban a pesar de que la conversación estaba cargada de contrariedad. Un gruñido en su estómago lo delató.

-Henry – dijo Regina soltando el pan con mantequilla – has regresado, ¿qué haces ahí?

-Observar – comentó el joven acercándose a sus madres.

-Así que por fin han vuelto de esa "cosa de hombres" chaval – dijo Emma con una voz más grave de lo habitual consiguiendo una sonrisa de la morena, primera del día – y a juzgar por tu aroma parece que ha sido un éxito – se tapó la nariz con dos dedos.

-Ah, bueno, sí, no ha estado mal – dijo el chico dejándose caer en la silla – muero de hambre – acercaba la mano a los huevos cuando la alcaldesa le dio un golpe - ¿qué? – se quejó.

-Con esas pintas no te sentarás a la mesa – dijo escuetamente – ve a darte un baño…

-Pero muero de hambre…

-¡Baño! – corearon sus madres convenciéndolo de que esta pelea era una pérdida.

-Está bien, está bien – dijo mientras se levantaba a regañadientes para cumplir con el mandato no sin antes volverse para decir – se nota que han empezado a acercarse las dos – comentó con una sonrisa – digo, parece que se complementan una a la otra perfectamente – Regina se sonrojó y Emma pestañeó varias veces – con lo del desayuno – explicó su hijo – es decir, tendrían que haberse visto las dos como yo las vi recién, pasándose la fruta y el pan, se ve que se conocen mejor que antes.

Se retiró sin decir nada dejando a las dos mujeres más tranquilas pero igual de confusas. Ninguna habría notado jamás que se conocían lo suficiente como para saber que come cada una en cualquiera de las comidas principales del día.

Regina carraspeó – es normal, al fin y al cabo pasamos casi todo el día juntas.

-Y la noche – soltó Emma consiguiendo una mirada mortal de la ex reina malvada.

-Explicándolo así diría que te tengo envidia, Darling – la voz de Hook las interrumpió antes de que comenzarán a discutir – pero no es cierto – guiñó un ojo a la morena mientras rodeaba la mesa para besar a su novia, la cual lo recibió con empatía – mi señora – dijo el pirata con esos falsos modales de los que hacía gala.

-Buenos Días Regina – al menos Robín estaba allí para compensar el espectáculo – Te he echado de menos – dijo dando un beso en los labios a la mujer.

-Robín… bienvenido… - se hizo a un lado para el ladrón de los bosques se sentará con ella mientras veía como el pirata hacia lo propio del otro lado de la mesa.

-¿Dónde está Henry? – preguntó Hook.

-Lo enviamos a darse un baño – comentó Emma mientras le daba un trozo de su pan al pirata- apestaba a diablos…

Los dos hombres se rieron a carcajadas – es normal cuando te pasas 2 días sin tomar ni un baño – dijo Hook con tranquilidad – parece que la vida en la intemperie es demasiado para un escritor adolescente– comentó.

-Robín – el tono de Regina era de demanda – te pedí que lo cuidaras, deberías haberlo obligado a darse un baño.

-Explícame cómo sí cada vez que le mencionaba lo mal que olía solo decía que sin su Head Shoulder no había baño – manifestó el hombre.

-Aquí tampoco tienen HS – indicó la salvadora.

-Ya, pero no podía pasarme el día insistiéndole en vano, no fuimos a eso – agregó el ladrón.

-En fin… lo arreglará en unos minutos – finalizó Hook quitándole peso al asunto - ¿y por aquí qué? – preguntó - ¿ha estado todo en orden?

Regina se vio obligada a hablar ante el mutismo de Emma y la interrogación de ambos hombres – si… no ha pasado nada especial, lo de siempre, cada uno en sus cosas.

-Lo único relevante fue que Regina ha aprendido utilidades que no sabía que la daga poseía hasta ahora – añadió Emma lanzándole una mirada mordaz a la morena.

-¡Señorita Swan! – "Maldita Swan… pero de que va esta mujer", pensaba Regina mientras no podía contener una expresión de ira y temor mezclada con visible sonrojo.

-¿Volvimos al Señorita Swan eh? – preguntó Robín divertido con la expresión de espanto de su reina.

-Mm… Reina Malvada ¿qué has hecho para ponerte así? – el tonto del pirata no tenía ni idea lo incomoda que estaba Regina en realidad y lo cerca que estaba de morir rostizado.

-Digamos que anoche descubrí a Regina utilizando la daga de forma bastante insólita – prosiguió Emma mientras la morena palidecía.

-No se atreva, Señorita Swan – la amenazó con los dientes apretados. Parecía que Emma se había despertado con ganas de molestarla todo lo que pudiera. ¿Por qué? ¿Por qué había tenido que llamarla inconscientemente? Ahora sabía que la tortura sería infinita.

-Uh ¿qué paso anoche? – decía el pirata mientras Robín los miraba a todos algo confuso.

-Al parecer la daga se puede usar para… - el SWAN volvió a resonar seguido de un par de 'Emma' con muy mala leche - … conseguir rascarse la espalda… - la pausa suspense de Emma y su descarada risa final no concordaban para nada con el sonrojo y el pánico de Regina.

Robín y Hook se rieron con la rubia y el primero le hizo una caricia a su dama – Regina… madre mía… eres demasiado comedida… es normal que si no estoy utilices otra cosa para rascarte la espalda – se rio – relájate mujer – agregó probablemente pensando que la morena era demasiado prudente o quizás orgullosa para que alguien cuente una historia semirridícula o con encanto cotidiano.

Regina solo podía pensar en lo equivocado y correcto que estaba siendo su novio en esos momentos, al mismo tiempo.

-¿Ves Regina? – aprovechó Emma – si él no esta es normal que utilices 'otra cosa' – su tono fingía una ingenuidad casi morbosa. "Maldita Swan".

- De todas maneras usar la daga del oscuro para semejante menester es cuando menos… ¿valiente? – adicionó Robín riendo todavía con la imagen.

-Si el cocodrilo te viera acabaría de petar – dijo el pirata con una risa más descarada que la de la sheriff, la observó un momento y su expresión se transformó – es una pena no tener esa daga – agregó mirando a Emma con aspecto lujurioso – se me ocurren unas cosillas que podría pedirte – le guiñó un ojo.

-Habría que ver si Regina te la presta – le contestó Emma más para picar a su compañera que parecía a punto de estallar que por otra razón.

-¡Basta ya! – dijo la alcaldesa – la daga es un asunto serio, que no te hayas transformado en el ser oscuro es prácticamente cuestión de suerte, y como algo fortuito es también endeble – espetó mirando a Emma con aspecto agraviado – y en parte si no lo has hecho es porque me he tomado seriamente lo de protegerte…

Todos se quedaron en silencio. Al fin y al cabo, Regina no decía más que la verdad. Sin ella Emma habría perdido el norte y la daga estaba en las mejores manos.

-Es cierto Darling y te agradezco especialmente por permitir que podamos tener a Emma aun aquí, con nosotros – dijo con una inclinación – solo bromeábamos – continuó llevándose un trozo de bizcocho a la boca pero antes agregó – pero eso no quita que ver como usas la daga para rascarte la espalda debería matar a cualquier oscuro que te viera, al menos de risa…

Los 3 se rieron y Emma le guiñó un ojo a Regina con una expresión desvergonzada. "¿Quién se cree esta idiota? Cuando estemos solas la mataré. Maldita Swan". Eso pensaba Regina aunque en el fondo no deseaba quedarse a solas para no morir de vergüenza con las insinuaciones de la rubia.

-Por mí no hay problema – dijo Emma – puedes usar la daga para lo que quieras… creo que sería un preciso pelador de naranjas – agregó para deleite de Robín y Hook.

Regina meneó la cabeza en desaprobación mientras terminaba su desayuno dispuesta a huir de tanto jolgorio a su costa cuanto antes.

-Creo que yo también debería darme un baño – dijo Robín terminando la leche de su cuenco – uno a mí y otro a Roland que aún está dormido – se levantó dándole un beso en la frente a Regina – te veo en la comida.

-¿Te apetece dar un paseo conmigo? – le preguntó Hook a Emma, mientras Regina pensaba "este cerdo nunca se baña o ¿qué?".

-Mm… siempre que Regina no me necesite para algo – dijo Emma haciendo que la alcaldesa frunciera el ceño - , ¿no? – preguntó fingiendo candor – vale, creo que iremos de paseo.

Ambos se levantaron y se prepararon para marcharse mientras Regina caminaba en dirección a la salida contraria. Pero no camino demasiado cuando un brazo ahora conocido la tomó por la cintura y la retuvo, haciéndola dar un salto pequeño en el lugar. Sin importarle que el pirata las mirará desde la puerta. Quién sabe qué excusa inverosímil le daría más tarde. El aliento de Emma se impuso patente en sus sentidos cuando acercó su boca a la oreja de Regina para susurrarle.

-Pero sabes… no me molestaría que me ordenaras que te rascará la espalda… o cualquier otra cosa… - dijo con un tono que Regina desconocía en la salvadora, un tono que sonaba tan caliente como su aliento – use la daga prudentemente Señora alcaldesa – concluyó en voz alta caminando hasta tomar de la mano al pirata.

Antes de que pudiera reaccionar Emma ya estaba fuera de su vista. Dejando a Regina con una sensación de insatisfacción repentina en el estómago. "Maldita SWAN".