#pero como no sé escribir :c me deben soportar de este modo (?

[grccve]

"Ya, ya. No llores, ¿sí? Todo estará bien". Cuando le invitaron a un dichoso motel, nunca imaginó que la noche terminaría de esta manera; con una persona desconsolada abriendo su corazón y no las piernas.

[juanmartinmasciardi-blog]

No poder dormir

No poder dormir es un malestar que en líneas generales la mayoría padeció en algún momento, supongo que las causas deben ser tan variadas como insomnes que padecen este trastorno. En lo personal cuento con algunos medios para hacer frente a esta situación. Así por ejemplo suponiendo que decida dormirme a eso de la media noche, me dispongo a crear toda una atmósfera previa que contribuya a lograr el sueño pero para ser sincero no siempre lo logro. Lo primero y muy importante es combatir la invasión de los mosquitos. Más de una vez fui despertado por ese pequeño zumbido que ronda mis oídos y como tengo poca tolerancia a estos insectos despierto en el acto para no poder conciliar el sueño de nuevo. Los mosquitos son enemigos que no deben ser subestimados. Me veo golpeando mi rostro o cualquier otra parte de mi cuerpo donde siento sus molestos pinchazos porque siempre llego tarde y termino golpeando mi propio cuerpo. Los combatí con tabletas y espirales en vano, imagino que deben haber desarrollado cierta tolerancia a estos venenos porque últimamente no parecen generar ningún efecto en ellos. Además trato de tener mi lugar de descanso lo más limpio posible pero tampoco es suficiente. También intento leer en la cama hasta que el cansancio me tomé, cuando lo logro apago la luz de mi lámpara y fumo un último cigarrillo para luego cerrar los ojos y dormir. Hasta que un sueño inoportuno me despierta a mitad de la noche, en ese momento tomo mi libreta que siempre dejo junto a un lápiz en mi mesa para tomar algunas notas al respecto, el problema es que luego no puedo volver a encontrarme con el sueño. Noté que en mis sueños soluciono muchos de los problemas que no puedo resolver durante la vigilia, mi inconsciente da respuestas a mi vida cotidiana a través de esas expresiones oníricas que se presentan bajo rostros conocidos o desconocidos en espacios extraordinarios en los cuales vivo situaciones verosímiles a pesar de ciertos elementos fantásticos. Sin embargo la falta de sueño nocturno está debilitando mi cuerpo, por momento siento temblores en las manos, como ahora mientras narro. Me detengo un segundo. Quito mis manos del teclado y las dejo muertas suspendidas en el aire para confirmar que el temblor está ahí. El cuerpo se resiente, pierdo el apetito o lo recupero en horas en las que no corresponde el alimento tal como el acto de dormir, lo hago, duermo pero bajo un huso horario que no corresponde. Es como vivir en otro tiempo, un tiempo extranjero.  Soy un extranjero, me siento ajeno a todo este mundo de provincia que me circunda, me hablan una lengua que no comprendo, los leo en un idioma que no puedo traducir, los veo vivir de un modo que no es el mío, no se trata de juzgar sino de incompatibilidad, una no adecuación, un malestar muy personal bajo una premisa: ¨Cuando sientas deseos de criticar a alguien, recuerda que no todo el mundo tuvo las mismas oportunidades que tú tuviste¨. Quizá eso explique el huso horario distinto al resto, no lo sé pero este mal crónico también lo padezco y me llevó a soportar en más de una ocasión el desdén y la violencia de personas inferiores en carácter y talento.  La clave está en acompañar las enunciaciones sin juzgar al sujeto del enunciado y si el camino no parece funcionar, dejarlo seguir su propio itinerario. No todo quedó aquí, ensayé otras formas de solucionar el problema pero como no encontraba resultados decidí vivir nocturnamente. Trabajar de noche. Leer y escribir de noche hasta el amanecer pero debo reconocer que nadie puede vivir así, durmiendo durante el día y viviendo de noche, el cuerpo lo hace saber. Por eso probé con el alcohol. El alcohol es el mejor soporífero. El cuerpo se consume de a poco  hasta más no poder, más de una vez me encontraron durmiendo con mi cuerpo echado sobre mi escritorio. Otras veces menos extremas voy hasta mi cama sin importar que una legión de mosquitos me espere para consumir mi sangre o el calor excesivo. El cuerpo pierde su condición sensible, se endurece como lo hace también mi corazón bajo el estado etílico. El tiempo deja de seguir la marcha uniforme para devenir momentos entrecortados, imágenes fragmentadas, recuerdos confusos. Dormir entre la cirrosis y el cáncer de pulmón. Sin embargo esta solución etílica a la falta de sueño nocturno no es la mejor. El cuerpo se resiente al despertar, no es posible seguir este viaje sin llegar a un desenlace mortífero. La falta de sueño es un problema cuyas consecuencias vitales con el tiempo se marcan en el cuerpo. Ahora recuerdo esas noches en las que pensamientos hostiles saltan de la trinchera, ¡oh sí! otra vez: ¡los males nunca llegan solos!… Esos recuerdos que no tienen lugar en el presente, rostros olvidados que regresan evitando caer en la indiferencia o esos sentimientos que creía muertos  reaparecen con fuerza para evitar el olvido. O también: qué hubiera sucedido si en lugar de hacer y hubiera hecho x, todas las ucronías posibles mientras espero la llegada del sueño profundo. El calor es otro factor que dificulta conciliar el sueño pero no entraré en detalles, sólo puedo afirmar que detesto el verano con su impostada felicidad imperativa propia de comerciales de cerveza. Un solo anhelo: caer en la cama y hacerme uno con mi almohada, estirar todo mi cuerpo, sentir cada parte relajada, cerrar los ojos y caer en el sueño reparador, sin pensamientos, sin sentimientos confusos, nada de palabras, solo silencio y dormir hasta la mañana. Mientras escribo miro a través de mi ventana, siento el silencio de mis vecinos, no muy lejos de aquí los pájaros cantan a la llegada del sol. En efecto: está amaneciendo.

��F��(c�

hb