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Así de sencilla, acogedora y sobria nos ha quedado la gran terraza interior de esta vivienda que acabamos de terminar. Lista para pasar muchas noches a la fresca en buena compañía. El futuro mobiliario pondrá la guinda. Proyecto de mi compañera @eva_f.s._ y mío, dirección de obra mía y construcción por #AecuorArquitecnia #obraterminada #obrapropia #viviendaunifamiliar #viviendaautopromovida #autopromocion #viviendafamiliar #viviendaenvalencia https://www.instagram.com/p/B3WQcj6CV6m/?igshid=92l46nw6326f
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Silver Screen Spain; Better than Ever has been published at http://www.theleader.info/2018/12/12/silver-screen-spain-better-than-ever/
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Silver Screen Spain; Better than Ever
The statistics can lie to us or deceive us, but the facts are undeniable; international film making in Spain has never been better. ‘Movies Made in Spain’ was a book published by teacher and writer Bob Yareham in 2016, detailing where over 700 English language films were shot in Spain since the 1920s. Two years later Bob, who has worked in Valencia since 1981, has had to update the book and has reissued the 600 plus page electronic version with the new title ‘Silver Screen Spain’, a reference to a website he created. The new version has more than 800 films, mostly due to an intense increase in filming during the current decade, but also fruit of deeper investigation showing some filming in Spain in, for example, Gregory Peck’s Snows of Kilimanjaro. As far as the statistics go, for the 50s Mr Yareham located 47 films, which rose to 120 in the 60s. The 70s brought another 122, but then came a decline, with only 83 in the 80s, due almost certainly to the fact that with the death of Franco, the Spanish army was no longer for rent, and many mass battle scenes such as the final battle of Spartacus, became much more expensive to make. Worse was to come, with only 56 films in the 90s, although a recovery was on its way in the new millennium, whose first decade saw 152 productions. And the present decade? So far, and it hasn’t finished yet, there are 215 films made or in production. A spectacular increase. So, which films stand out among so many? In the 50s we could witness Elizabeth Taylor running up that hill towards the castle of Begur, Girona, in Suddenly Last Summer, and the first English language western made in Spain, not in Almeria but in the Comunidad de Madrid, where Kenneth More parodied the genre in The Sheriff of Fractured Jaw. In the 60s Doctor Zhivago showed us the versatility of the scenery of Soria, while in Circus World, John Wayne’s only Spanish excursion, scenes from Barcelona, Madrid, Toledo or Chinchón represented several European countries. In the 70s Dustin Hoffman and Steve McQueen, marched disconsolately through the streets of Hondarribia, towards their exile in Papillon; and the magnificent Audrey Hepburn accompanied Sean Connery in the poignant Richard Lester film Robin and Marian, where Medieval Merrie England was represented by Navarra. Although the 80s saw a decline in English language films made in Spain, American English made headway as Steven Spielberg undertook his two Spanish adventures; Empire of the Sun and Indiana Jones and the Last Crusade, filmed in great part in Andalucia. In the 90s international filming bottomed out, although Johnny Depp reached Toledo for scenes from The Ninth Gate, written by Arturo Pérez Reverte, and Columbus scored a double with 1492 and The Discovery, by Ridley Scott y John Glenn respectively, shot all over Spain. The new millennium saw an improvement, above all in Catalonia, where two celebrated films were shot. The Perfume turned the streets of Barcelona into Paris, while Girona became Provence, as Woody Allen show-cased Gaudí’s city in Vicky, Christina, Barcelona. Allen’s film helped increase American interest in visiting Barcelona, in the same way that Martin Sheen’s The Way multiplied by 5 the number of Americans who walked the Camino de Santiago following the release of the film. In the current decade we are witnessing an increase in productions that would normally be considered all-American. The latest instalments of Rambo and Terminator, as well as spin offs such as Han Solo, ‘cashing in’ films like Blade Runner 2049, or even super-hero stories such as Wonder Woman 1984 have or are all being made in Spain. More and more Spanish directors, actors and technicians are benefitting from the surge in productions in Spain, not to mention the hotels and suppliers who have a field day when Hollywood hits town. However, another area where Spain has been slow to move is set-jetting (cinema tourism). Although a lot of interest has been shown by set-jetters visiting Game of Thrones locations in Spain, Croatia has handled it much better. In January 2019 the Spanish tourism fair FITUR has announced a special section dedicated to film tourism, so maybe things are looking up, although in the past the Spanish authorities have shown short-sightedness when presented with opportunities. In Trebujena, Cádiz, for example, they demolished Spielberg’s Japanese POW camp from Empire of the Sun instead of turning it into a visitors’ attraction, and in Denia, where Robert Stack portrayed the American admiral in John Paul Jones, the monument erected 50 years later was a perfect example of how to ruin a perfectly attractive little square with a tasteless, unthinking monstrosity. Photo attached. Silver Screen Spain the e-book is published in Valencia by Obrapropia: http://www.obrapropia.com/Obras/1834/800-ENGLISH-LANGUAGE-FILMS-SILVER-SCREEN-SPAIN Contacto: [email protected]
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Nuevo rumbo
Quería escribir algo aquí por las fechas que son, pero siempre pasa que cuanto más te propones algo menos lo haces. Año tras año los propósitos se acumulan y repiten incumplidos, ¿serán las ganas o qué hasta ahora he apuntado muy alto?
Acabo este año a ratos triste y a ratos subiéndome por las paredes, pero para el próximo sólo tengo ganas de comerme el mundo. Propósitos, los justos: trabajar siempre duro, ponerme “algo” en forma, divertirme lo máximo y el más importante, que aunque llueva, salgamos a bailar bajo la lluvia.
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Yo soy.
El crujido de una rama calló a los grillos de alrededor. El cuadrúpedo peludo y esquelético trotaba por el bosque. Un bosque no muy frondoso, no muy poblado de vegetación o insectos, un bosque triste. El animal respondía al nombre de “Chico”; había estado vagando en busca de comida por la zona, por desgracia, no había encontrado nada. Era un perro triste.
El cielo se aclaraba mientras amanecía, la aves diurnas emprendían su vuelo y el volvía donde debía. De repente, un gato se cruzó en su camino y ambos se detuvieron. Solo se oía algún ruido de civilización a lo lejos mientras cruzaban sus miradas. En un segundo, ambos empezaron dos carreras muy distintas. El gato corría por su vida y el perro por su estómago. Ambos eran animales con experiencia, al sabueso le faltaba la cola y al felino una oreja. Como buen perro de caza que había sido no pensaba dejar escapar a su presa, corría esquivando árboles, arbusto, ramas. Si conseguía cazar al minino, toda la noche habría valido la pena. No sé durante cuanto tiempo estuvieron cabalgando por el bosque pero recorrieron una gran distancia. Desafortunadamente para el cazador, el gato se metió en un árbol hueco lo suficientemente alto y escaló por dentro hasta una rama y de esta escapó trepando. Para cuando el sabueso intentó frenar el gato ya estaba muy lejos y él se daba de bruces contra el tronco muerto, cayendo redondo al suelo. Pasaron cinco minutos hasta que el pobre chucho se despertó y sintió algo extraño. Algo no estaba bien. Al recordar al gato, lo buscó instintivamente por si aún podía cazarlo y al darse cuenta de que no estaba, emprendió el camino original que empezó tomando. El sol ya se dejaba ver entre los árboles cuando el sabueso sintió un olor apetecible. Delante de él, en un claro, un grupo de campistas se había dejado una bolsa de basura colgada de una rama. El perro se acercó silenciosamente pasando entre las tres tiendas que allí había. Tuvo que dar un salto para poder alcanzar la bolsa pero consiguió romperla, dejando caer envoltorios, restos de comida y alguna que otra servilleta manchada; un verdadero manjar para “Chico”.
El demacrado animal lamía incesantemente todo lo que se posaba delante de su morro sin darse cuenta de que los campistas se habían despertado por el ruido de la basura al caer.
-¡Fuera de aquí, perro sarnoso!-gritó un de los campista mientras le asestaba un patada en el trasero.
El pobre perro no entendía nada, el solo tenía hambre. Por miedo a más reprimendas, echó a correr sin rumbo fijo. Por lo menos había comido algo. Cuando estuvo lejos del campamento, bajó su velocidad y disfrutó del bosque. Los olores que emanaban de las plantas, los rastros de animales, restos de gente. La luz se filtraba a través del follaje con más fuerza a cada segundo.
Después de intentar cazar alguna mariposa y alguna que otra avispa, un olor salino le asaltó el hocico y se dio cuenta de que ya estaba cerca. Al salir del bosque, el sabueso fue inundado de múltiples olores y sensaciones. El sol lo cegó por completo, el olor a pescado inundaba sus fosas nasales, el suelo que pisaba se había vuelto duro y un montón de voces llenaban de vida el lugar. Casi sin darse cuenta, se encaminó a unos pescadores que estaban descargando lo que habían cogido esa noche. “Chico” esperó sentado pacientemente para que los pescadores no intentarán echarle. El más viejo de los pescadores al percatarse de la presencia del perro, esbozó una sonrisa y se acercó a él con un pescado fresco en la mano. El perro al ver ese gesto y esperando lo peor, ya que era lo que siempre pasaba, agarró el pescado casi arrancándole un dedo al pobre hombre y empezó a correr poseído por una fuerza que jamás había sentido. Se estiraba tanto en cada zancada que sentía crujir su columna pero la buena suerte no era algo que abundaba en la vida del sabueso así que, allí estaba un charco sobre el que él resbaló de manera tan sublime que fue, aparentemente, lanzado hacía el océano.
Mientras caía, sentía miedo, verdadero pánico. No sabía donde iba a caer, no sabía a que tendría que enfrentarse esta vez. No entendía por que todo eso le estaba pasando a él. Él solo tenía hambre y quería volver con su amigo. Al atravesar la superficie del agua, el miedo creció. El pobre sabueso vio tantas cosas que no entendía, estaba tan oscuro y a la vez había tantas cosas vivas que se alejaban conforme él se hundía más y más. Pero sabía que esto no acabaría, tenía que volver con su amigo. El animal empezó a patalear intentando salir hacia la superficie, pataleaba tan fuerte que sus articulaciones se resentían con cada ida y venida. Después de mucho esfuerzo en muy poco tiempo, consiguió salir mezclando una bocanada de aire con agua salada. La gente miraba desde el muelle curioseando, el perro consiguió alcanzar las escaleras para subir y antes de que una señora le cubriera con una toalla para secarle, el sabueso emprendió una carrera por su vida.
Solo quería ver a su amigo y se había encontrado con muchas trabas por el camino. Algo no estaba bien pero estaba tan confuso que cuando se paró a ver por donde tenía que ir, se encontró perdido. No sabía donde estaba, pero tenía los medios para salir de aquella situación. Como antiguamente solía hacer, posó su hocico sobre el asfalto y empezó a rebuscar entre la cantidad de olores que archivaba. Gasolina, comida, otros animales y ese olor. Mezcla de alcohol y basura, de afecto y bondad, allí estaba él. No estaría muy lejos pero tampoco muy cerca. “Chico” empezó su travesía por las calles de aquel pueblo pesquero. De repente un sonido le hizo detenerse y mirar hacia arriba. En el balcón de una finca, una jaula que contenía a un periquito azul y blanco, temblaba ante los saltos y cantos de este. Instintivamente el perro le respondió con un ladrido y así iniciaron una guerra de sonido que parecía infinita. Incesantes ladridos y quejidos de parte de ambos se cruzaban como puñales. Visto desde fuera solo se le podía atribuir una frase a la escena: “Tonta ella y tonto él”. Una mujer que paseaba a su bebe en el carrito, andaba embelesada en el escaparate de una pastelería así que el bebe, al ver al perro, le entró tal arrebato de pasión hacia una criatura que no conocía que alargó el brazo alcanzando la oreja izquierda del sabueso. Apretó tan fuerte que el perro solo pudo tirarse al suelo tapándose las orejas con las patas. Cuando el dolor cesó el perro, ignorando esta vez al periquito, siguió su camino concentrándose en el hedor de su amigo.
Durante el trayecto de vuelta a “casa”, el perro vio a una madre pegarle a su hijo, a un hombre cargando a pulso tres cajas de cartón al parecer llenas de comida descongelada, a unos niños jugando en un descampado y a una pareja besándose en un banco de un parque. Recorrió calles, parque, descampados y callejones hasta llegar al callejón donde solía pasar las noches con el que le había puesto nombre. Sin embargó el callejón estaba vacío, no había nadie a simple vista pero la mochila de su amigo estaba ahí tirada sobre el cartón en el que dormían. Al acercarse, detectó el olor de su compañero en un líquido que había en el suelo. Este líquido creaba un rastro que el sabueso siguió hasta girar la esquina del callejón y encontrar allí, a su amigo tirado en el suelo. Se alegró muchísimo al verlo, movía el rabo mientras corría hacía el. Pero no obtenía ninguna respuesta. Levantó uno de sus brazos con el hocico pero al soltarlo, cayó sin vida al suelo.
La realidad golpeó al pobre animal, su amigo había muerto. Se percató que el rastro de líquido salía de una herida en el pecho la cual el animal lamió intentando curar a su compañero. Al no crear ninguna reacción en el cuerpo sin vida, el sabueso se enroscó bajo el brazo de su amigo, apoyó su cabeza en el pecho y lloró. Toda la noche. La luna bañaba la escena, ya no existía el hambre ni el frío para el sabueso. Nada tenía sentido para el sabueso, ni siquiera se molestaba en abrir los ojos por que con los ojos cerrados era la única manera de recordarle vivo. Diez años atrás, el dueño de “Chico” consiguió un sabueso pura raza y decidió echar al pobre animal de un perdigón en el lomo. Cuando el animal vagaba por los bosques, se encontró con su actual compañero: Jack. Le habían repudiado de su hogar por ser homosexual. Pero eso no le importó a “Chico” cuando el chico le dio su primer beso en la frente. Desde aquel momento, crecieron y sobrevivieron juntos. No como amo y perro sino como compañeros en vida y, actualmente, en muerte.
Tres días después hallaron ambos cadáveres, descansando juntos de tan angustiosa vida. Al parecer habían apuñalado al dueño del sabueso. Tres meses después, encontraron al culpable. Un carnicero que confesó orgulloso haber matado a tal escoria de la sociedad. Le encerraron en una condena de diez años. A los cinco le soltaron por buen comportamiento y cuando volvió a casa se encontró a su mujer muerta. La pobre se había suicidado por haberse casado con tal escoria, o eso decía la nota que dejó.
Yo soy la cuchilla que cortó las venas a esa pobre mujer, el martillo del juez al dictar sentencia, el puñal perforando el pecho del vagabundo, las lágrimas del sabueso, la luna, el beso en la frente, soy la saliva que comparten los enamorados, la pelota con la que juegan los niños, el sudor del que carga las cajas, soy la mano que golpea al niño, la necesidad de querer un perro en el bebe, soy el periquito, el afecto y la bondad en el vagabundo, soy las patas y el miedo de “Chico”, el charco, el pescado fresco, el sol, la avispa y la mariposa, soy el pie del campista, el ardor en el estómago del sabueso, las ganas sobrevivir del gato, el cielo, soy el perro. Soy la vida.
Soy sucia, imperfecta, injusta, soy todo y no soy nada. Soy lo que más ansían unos y lo que más detestan otros. No puedo ser buena para todos. Lo importante aquí es que no debéis dejar de correr. Y no me refiero a huir sino a vivirme. Pese a todo, de vez en cuando, os sonreiré. Si no es hoy, puede que sea mañana. Pero tened en cuenta que soy la fuerza con la que paren las mujeres y el último aliento al despedirme del hombre. No me temáis, simplemente sabed quien soy.
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DRAGON DAY IN VALENCIA has been published at http://www.theleader.info/2017/04/14/dragon-day-valencia/
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DRAGON DAY IN VALENCIA
Sunday 23rd April will be Dragon Day in Valencia as a new concept in tourism is launched in the city.
The project consists of a bi-lingual book (English and Spanish), a video, a photographic exhibition and a walk-talk, (a guided tour of Valencia’s dragons). It will take place at Valencia’s prestigious L’Iber Museum in calle Caballeros 22 between 11 am and 2 pm.
At this time anyone who wants to can enter the gothic patio free to see the video, the photos and the book, and talk to the authors.
And at 4 pm, dragon seekers can participate in the Dragon Walk Talk around the historic centre visiting the main dragon lairs.
Official guides and teachers are especially welcome as the creators of the project intend to give away the tour to any guide or teacher who would like to make use of it.
The book costs 15€ paperback, the e-book 9.99€, and there is a discount of 1 euro for anyone showing an admission ticket to the museum on the 23rd.
The book is published by the Valencian publishing company Obrapropia:
http://www.obrapropia.com/Obras/1741/VALENCIA–HERE-BE-DRAGONS
The project supposes another addition to Valencia’s wide cultural offer for tourists and follows the trend of ‘fantasy/conspiracy tourism,’ using real locations or history to fabricate tourist attractions, Loch Ness and the Da Vinci Code being the notorious examples.
The creators of the project are Bob Yareham, English and History teacher resident in Valencia since 1981 and Mark Sicon, an Anglo-Spanish photographer, trained at a well-known photography school in Valencia.
Mr Yareham is known in Valencia for his work with schools, where he has undertaken many projects such as 2,000 years of history through an underground map and a collaboration with the L’Iber Museum called ‘Hollywood & History,’ and he is also the author of the book Movies Made in Spain, the story of 720 English language films shot in Spain. Furthermore, he is President of ‘España de Cine,’ a non-profit making association that promotes cinema tourism initiatives.
The book explains why there are so many dragons in the architecture of Valencia, relating the history of dragons from the points of view of architecture, anthropology, history and legend, with a few carefully chosen fibs thrown in to add a bit of spice.
Contact: 637061508 (after 15.30 workdays please),
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Cuando la inspiración suena, mi nariz moquea
Otra noche más no pasa. Hoy toca escribir: te sientas, y si ya estás sentado toda la tarde te levantas y sales a correr porque estás echando culo; abres la página de tumblr y te encuentras frente a frente con la entrada en blanco. Tu mente se te queda del mismo color que el de la hoja. La inspiración desapareció huyendo miedosa como si la pantalla del ordenador fuera un matón. Cierras y abres la página, los suspiros se suceden y pasa el tiempo del límite que pensabas te iba a costar publicar algo. Con suerte, escribes dos líneas para guardar en borradores, líneas que después desechas en una segunda lectura: escribir es duro si eres nuevo.
La inspiración es muy puta: nos unta de ideas por la noche para que al día siguiente no recordemos y se nos oculta si la perseguimos, nos mete en embrollos temáticos con ideas que luego no sabemos desarrollar desapareciendo de nosotros repentinamente y nos hace volar la imaginación en los momentos más inoportunos cuando tenemos que tener la mente centrada.
Os digo que olvidéis su droga antes de ser toxicómanos de letras y cuentos. Os maltratará y os lamentaréis.
¿Y a qué viene el título? En los tiempos en los que ya usaba blogger me pasaba que cuando tenía ganas de escribir, cuando la inspiración llegaba, necesitaba tener al lado un paquete de pañuelos. Aun no sé porque será fisiológicamente: quizás fuera la emoción de ponerme con una nueva entrada la que me hiciera respirar más aceleradamente hasta producir esto o quizás que la inspiración solo llegara en época de catarros. El hecho acabo cogiendo tal relevancia que no consideraba oportuno escribir si no se producía.
Por eso mismo, me despido diciendo orgulloso y con la mano en alto que esta noche mi nariz llora y cuando el río suena, agua lleva.
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Aprendí a mentir
Porque no siempre puedes ser honesto: lo demostraron los hechos. Les das la mano y te cogen el brazo, te da una colleja la mano que te da de comer y lo mismo que te dan te quitan.
Lo que contaste como un secreto se gritó a voces y tú, solo te alejas jurando nunca más contar nada. Pero no puedes negar la información que alguien te pide, por eso mientes hasta creer tus propias mentiras.
Por culpa de los otros acabas convirtiéndote en otro, para protegerte. El tiempo pasa, la verdad desaparece y sólo resuena el eco de la mentira ahora transformada en una tautología.
Compruebas en quien debes confiar: vuelves a ser honesto y esperas que el circulo no sea vicioso y tus secretos no vuelvan a ser proclamados.
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Director de cine
El director encuentra el plano que andaba buscando: tiene el guión, tiene a los actores y tiene el material de grabación detrás. Todo preparado para crear arte. Monta el trípode, da unas últimas instrucciones y ordena comenzar el rodaje. Se sienta en su silla, a la que no se adapta: es nuevo en el cine.
¡Acción!
Los actores comienzan a bailar con sus diálogos, su conversación es música para sus oídos y su belleza, incalculable. Ante su cámara todo es hermoso.
Entonces, llega la turbación en forma de ring ring.
El despertador suena, está en la cama y su plató de la Francia de los 70 se esfuma con el aire. Ya no es director, sólo un muchacho con una cámara y un trípode. Un muchacho que en otra realidad podría atravesar paredes.
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Miro al cielo, hoy nadie levanta el vuelo. Sale otro día, solo quiero hacer poesía: caer de nuevo en esta monotonía.
BiciconV (aportación al rap de Toro)
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Oda al libro abierto encima de la mesa
Tú, que intentas atraparme con tu letra pequeña y tus ávidos colores.
Yo, fascinado en otro mundo, más dinámico: frente a la pantalla.
Tú, buscando mi mirada cuando me giro para inspirarme.
Yo, debería estudiar, mas no lo hago.
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Soneto
Tiernas son tus caricias, amor ciego como una historia de oro en su final acabada a besos en tu portal: tus labios y los míos, hielo y fuego. Ojalá lleguemos a tan buen juego, baile entre amantes cual sueño carnal siendo tú sola mí obra ya central Y sin prisa alterando mi sosiego. Mi respuesta segura, pero lenta, me lleva a fracasar. Cuando despierto a mi lado te veo y caigo en la cuenta. Tú encuentras el oasis del desierto, la calma tan ansiada en mí tormenta que a mi encuentro salió y me dejó muerto.
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Bicis sin ocupantes
Las ideas nacen, fluyen, se arrastran y se levantan.
Saltan intentando tocar el cielo, pero no consiguen volar, pues no son aviones.
Se sumergen en el agua, pero el papel en el que van adheridas y escritas se moja y acaban flotando en la superficie hacia la deriva. Tampoco son barcos.
En cambio, otras ideas se nutren de su ingenio. Se insertan ruedas y corren hacia el horizonte transformadas en bicis sin dueños.
Eso son mis ideas, fugaces bicis que antes de poder ser anotadas ya están a kilómetros.
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Relato de la mierda
El pasillo era eterno. Imaginaba que la puerta estaría cerrada, pero cuando acabó de recorrerlo en su kilométrica longitud a James se le cayó el alma a los pies, y porque no también un trozo de mierda, pues se cagaba. El baño estaba ocupado. Maldijo a su hermana. Sabía que ella estaría desperdiciándolo para maquillarse o cosas similares cuando su problema era de mucha mas gravedad y urgencia. Solo se le escapó un grito ahogado maldicíendola, que acompañó con una fuerte patada a la puerta. No tenía que haber golpeado la enorme puerta de roble, pues por dentro se le revolvió el estómago y aun le entraron más ganas. Notó algo raro en los calzones, lo que le llevó a pensar que quizás el esfuerzo de esa patada le hubiera llevado ya a cagarse encima.
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Adentrándome en lo desconocido
La soledad me encierra.
El silencio me acoge.
Las ideas brotan.
El escritor comienza su relato.
Se sumerge en una nueva aventura.
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