#me cortaron mal el pelo
Explore tagged Tumblr posts
Text
Regrese >:3 ❤️ Hola cuanto tiempo 😅 bueno aquí les dejo un dibujo :3
#dibujodigital#fanart#dibujo#my art#31 minutos fanart#31 minutos canciones#31 minutos#florbovina#pepelota#chascoberto#jhon quijada#character fanart#mi muñeca me habló#me cortaron mal el pelo#diente blanco#señora devuelvame la pelota#amigos#friendship
6 notes
·
View notes
Text
Finally giving into exposure to 31 minutos and immediately being accosted by having mi mamá me lo teje todo stuck in my head
#mort.txt#goddamn you chilean puppet childrens program and your fucking banger music#me cortaron mal el pelo is rlly good also#i feel like those fuckin bluey adults
1 note
·
View note
Note
Oye cuales son tus 10 canciones favoritas de el ranking top musical de 31 minutos!
OOF, ta complicada la pregunta. En ningún orden en particular:
Diente Blanco, No Te Vayas (por alguna razón me da más pena que El Dinosaurio Anacleta)
El Huerfadrino (Mi padrino se fue preso cuando era un bb así que yo JAJAJA)
Me Cortaron Mal El Pelo (tambien muy yo, amiga)
Mi Mamá Me Lo Teje Todo (medio tema)
Tangananica, Tangananá (obv team tangananá)
Calurosa Navidad (siento que encapsula la cultura chilena-santiaguina demasiado bien)
Maguito Explosivo (Dante Torobolino es TODO para mí)
Nunca Me He Sacado Un Siete (Webeamos un kilo a mi hermano con esta canción)
Equilibrio Espiritual (COMO NO)
Ríe (Si te están pegando SOLO RÍE)
Menciones honrosas: Lucía la Sandía (La canción es Meh pero que programa tiene las bolas para burlarse de la vieja culiá hija de puta de la Lucía Hiriart JAJAJAJ), la canción de Navidad de Patana (que me hace llorar), Objeción Denegada (me encanta la parte cuando una paca de verdad se lleva a un titire a la cana, me cago de la risa) y La Regla Primordial
#es mas facil decir las dos o tres que NO ME GUSTAN las cuales son:#mi muñeca me habló. guacala. y papa te quiero#amo 31 minutos. alvaro pedro y juan manuel son buenos escritores y liricistas#eso bye#tessa responde!
7 notes
·
View notes
Text
Un poema de Gioconda Belli en este día Internacional de la Mujer:
Amanece con pelo largo el día curvo de las mujeres,
¡Qué poco es un solo día, hermanas,
qué poco, para que el mundo acumule flores frente a nuestras casas!
De la cuna donde nacimos hasta la tumba donde dormiremos
– toda la atropellada ruta de nuestras vidas –
deberían pavimentar de flores para celebrarnos
(que no nos hagan como a la Princesa Diana que no vio, ni oyó
las floridas avenidas postradas de pena de Londres)
Nosotras queremos ver y oler las flores.
Queremos flores de los que no se alegraron cuando nacimos hembras
en vez de machos,
Queremos flores de los que nos cortaron el clítoris
Y de los que nos vendaron los pies
Queremos flores de quienes no nos mandaron al colegio para que cuidáramos a los hermanos y ayudáramos en la cocina
Flores del que se metió en la cama de noche y nos tapó la boca para violarnos mientras nuestra madre dormía
Queremos flores del que nos pagó menos por el trabajo más pesado
Y del que nos corrió cuando se dio cuenta que estábamos embarazadas
Queremos flores del que nos condenó a muerte forzándonos a parir
a riesgo de nuestras vidas
Queremos flores del que se protege del mal pensamiento
obligándonos al velo y a cubrirnos el cuerpo
Del que nos prohíbe salir a la calle sin un hombre que nos escolte
Queremos flores de los que nos quemaron por brujas
Y nos encerraron por locas
Flores del que nos pega, del que se emborracha
Del que se bebe irredento el pago de la comida del mes
Queremos flores de las que intrigan y levantan falsos
Flores de las que se ensañan contra sus hijas, sus madres y sus nueras
Y albergan ponzoña en su corazón para las de su mismo género
Tantas flores serían necesarias para secar los húmedos pantanos
donde el agua de nuestros ojos se hace lodo;
arenas movedizas tragándonos y escupiéndonos,
de las que tenaces, una a una, tendremos que surgir.
Amanece con pelo largo el día curvo de las mujeres.
Queremos flores hoy. Cuanto nos corresponde.
El jardín del que nos expulsaron.
#dia internacional de la mujer#mujeres#poesía#poesia#gioconda belli#dia de la mujer#día internacional de la mujer#día de la mujer#international women's day#women's day#poetry
6 notes
·
View notes
Text
yo, a punto de postear la letra de me cortaron mal el pelo de 31 minutos: pensandolo bien, conociendo a mis mutuals, no es muy buena idea
7 notes
·
View notes
Note
me cortaron mal el pelo
ay, qué voy a hacer ahora
esto no tiene remedio🥳😭🥲🥺🙃😺😫
Más encima cobran los descarados 😿
2 notes
·
View notes
Text
Alexa play "me cortaron mal el pelo"
🌻🌷
3 notes
·
View notes
Text
when will a kpop artist sample me cortaron mal el pelo by legend chascoberto??????
1 note
·
View note
Text
El día de hoy, sentí uno de los mayores miedos que una mujer puede sufrir....
Tuve miedo de quedar como Dora la exploradora....
Estaba en una peluquería, el servicio era genial pero, yo ya no confío en las peluqueras, la última vez que me cortaron el pelo, me dejaron como Baldi.
No le deseo esto a nadie, Diosito me los cuide.
Por cierto, busco amiguitos ya que los de mi Uni me caen mal
Ahora sí, Bendiciones.
1 note
·
View note
Text
Stranger Things characters as 31 Minutos' songs
Eddie Munson - Drácula, Calígula, Tarántula
Nancy Wheeler - La señora interesante
Steve Harrington - Mi equilibrio espiritual
Will Byers - Me cortaron mal el pelo
Henry Creel - Severlá
0 notes
Text
Esta es una lista
de las cosas que me suceden en una interacción social normal de duración promedia mayor a 20 minutos - para llevar a terapia:
El olor: empiezo a preocuparme descaradamente sobre si huelo bien, si se me habrá pegado el olor a meo de la ciudad y de humo de los autos en mi pelo recién bañado, encerado y engelado y acomodadito así para el costado y para el otro despeinado y ligero al mismo tiempo… bueno, y también lo otro me preocupa si mi ropa se chupó el humo del tabaco o del porro… o del tabacorro… o deseo que porfa sí se huela el olor a perfume de varón que me salpiqué una vez sobre el cuello y que no se sienta el desodorante a bolita en mis axilas que es género neutro y no tan… “masculino”...? porque así es como quiero oler
El aliento: hasta 3 horas antes de la juntada empiezo a regular o gestionar más lo que como o bebo porque me pone nervioso salir a un encuentro social con mal aliento o mal sabor en la boca, y si como/bebo algo en la juntada no puedo relajarme si no tengo mentitas para apagar el sabor a comida de la boca, y me callo, hablo menos, sonrío menos: busco abrir la boca lo menos posible, para que nadie me sienta el “aliento” que según yo tengo tan fuerte, si no hay mentitas ni chicles, me tengo que ir
El pelo: me preocupa que caiga de ciertas formas o ángulos específicos que me hagan ver más femenino que lo deseado, hay pelos que me hacen ver más masculino… comillas… “ “
Mi boca: me limpio las comisuras de los labios todo el tiempo, porque me fijo todo el tiempo que no me quede el aura colorida de lo comido/bebido alrededor de mi boca y que se me empiece a acumular porquería entre los labios o encima de ellos como piel muerta y eso que siempre me está saliendo - y claro ni se me ocurra tener los dientes manchados, mis dientes son enormes, me paso servilletas, dedo, agua, me cepillo varias veces
Los ojos: mis lagrimales producen muchísima mugre, lagañas o “cebo” como me dijo un oftalmólogo, me dio unas gotitas que no me lo cortaron - cuando me despierto estoy toda la mañana entera quitándome porqueria de los lágrimales de los ojos, sólidas, granulares, blancas cositas de los ojos y luego en el dia lo hago cada 2 horas por mantenimiento, luego me limpio el otro extremo de los ojos porque también se me acumulan porquerías
Mi boca y los ojos: en resumen, me preocupa tener sucio continuamente los ojos con los que veo y soy visto por las personas y la boca con la que le hablo y soy respondido por las personas. No paro de pensar: ¿qué cara estoy haciendo?
Mi vientre: si no tengo ropa lo suficientemente holgada y grandota, me preocupa que se note mi cintura, mis curvas o mi vientre hinchado hacia adelante, que se me asome un cuerpo de niño recién nacido que no ha hecho gimnasio de varones nunca en su vida entera (no hay músculos de… comillas… varones…)
Mi outfit: quiero verme lo suficientemente cool pero relajado como para invitar a las personas a acercarse a hablarme pero no quiero verme lo suficientemente extra para que alguien diga qué hace este vestido así, me comparo si alguien está mejor vestide que yo, me encanta la ropa, quiero buenas texturas colgadas sobre mí, me hace feliz
Y finalmente, claro, lo que digo: nunca me siento seguro con las palabras que salen de mi boca… ¿tengo que mirarle a los ojos o a la boca? ¿le dará nervios que lo mire hablar como me pasa a mí? ¿ya terminó de hablar? ¿se dará cuenta que estoy distraído por la persona que está más allá a la diagonal izquierda a mí que tiene un tono más elevado y escucho toda su conversación desde dónde estoy? ¿se dará cuenta que me aturden los autos que pasan detrás nuestro o la música tan fuerte que no se escucha? ¿tengo que responderle ahora? ¿le escucho en silencio y respondo con mis gestos o intervengo verbalmente porque quiero explícitamente que sepa bien sabido que soy de las personas que escuchan activamente y no sin entenderle nada? ¿se dará cuenta que la escucha activa es importante para mí pero no puedo me cuesta aplicarla y ahora voy a caerle mal como me caen mal las personas que no escuchan activamente? ¿me va a preguntar sobre mí? ¿qué me va a preguntar? ¿qué palabras puedo usar para no sonar soberbio, arrogante, creído o demasiado intenso? ¿estoy hablando demasiado sobre mí? ¿ya pasé el tiempo estimado socialmente para hablar sobre uno mismo? ¿desvió la mirada mientras hablaba? ¿no le interesó en lo más mínimo o va a preguntarme algo más? ¿por qué no me pregunta nada? seguro no le intereso en lo más mínimo, si no sabe nada sobre mí, nunca me pregunta nada, seguro le parezco aburridísimo, esto que estoy contando es aburridísimo, ¿ya terminó? uff, alguien vino a hablarnos, puedo relajar, digo que voy al baño, llego me estampo y respiro hondo para recuperarme, salgo y se me acerca alguien sonriendo a preguntarme algo… ¿tengo que mirarle a los ojos o a la boca?
0 notes
Text
damn
Les juro que no ha habido finde mas cansador que este.
Me pelé la raja trabajando desde las cinco am para mi curso, para nuestro beneficio de 4to A, por que queremos ir a bariloche. Ctm, hemos estado para la corneta estos días y yo peor. No he descansado mas que en este momento, me siento tan chato y estoy con la bateria social re agotada (ayuda)
Lo peor, es que se me ocurrió teñirme el pelo de naranjo, puta la wea por que se me ocurren weas asi ahora, me corté el pelo (me siento horrible por que me cortaron medio mal adelante, me siento como un flaite promedio) DIGO QUE EL PELO CRECE, pero los dias de sufrimiento son horribles.
Aparte, mi pelo sin arreglarse se ve como el weco.
En fin, vendimos 300 completos, paseamos por todo el centro. Me duelen los pies, las costillas, la espalda, las piernas y la cabeza. TAMBIÉN, el pecho, cada vez me cuesta mas respirar con el binder.
PERO YA DA IGUAL, es mi ultimo año, supongo que debo hacer de todo para salir y disfrutarlo, pero la paso muy mal en mi mente encerrado.
Ya vendrán las etapas, no aceleraré nada.
Por ahora, solo eso. Espero que disfruten leer mi mierda.
atte: xander
1 note
·
View note
Text
Espero les guste Jhon quijada x chascoberto 31 minutos
#dibujodigital#fanart#31 minutos#dibujo#ranking top#31 minutos canciones#31 minutos ships#jhon quijada#chascoberto#31 minutos dibujos#31 minutos fanart#diente blanco#me cortaron mal el pelo
9 notes
·
View notes
Photo
“Pasaron los meses y llegó el momento de viajar a Kenia… Habían pasado las navidades, las cuales había disfrutado al máximo pero de una manera extraña. Era como si me estuviera despidiendo de mi soltería, celebrando las navidades al máximo porque eran las últimas que iba a celebrar sin ser madre. El día 3 de Enero de 2031, pisé Nairobi, la capital de Kenia, y fui hasta la casa de acogida en la que estaba aquél niño, junto a su tutora. Iba nerviosa, con el corazón acelerado. No había roto aguas, no tenía que ir al hospital, no me dolía el vientre ni tampoco los riñones, no tenía los tobillos hinchados, ni miedo a que algo fuera mal… Pero estaba igual de nerviosa porque iba a conocer a mi hijo. Wangari, la tutora legal me abrió la puerta de la casa, me dio dos besos y me preguntó sobre el viaje. Había llegado cansada después de más de once horas de vuelo pero lo único que quería ahora era conocer a aquél pequeño de dos años con cuyo rostro desconocido soñaba cada noche. Recorrí con ella el pasillo imaginando cómo sería su rostro, cómo sería su piel, si sería muy moreno o más pálido, si tendría los ojos oscuros o los tendría claro como Jaydn, si tendría los labio regordetes o por el contrario los tendría más finos, si tendría mofletes, si tendría el cabello largo o corto… Y allí estaba, en su habitación. No estaba manchado de sangre, ni de agua, ni de grasa corporal, no estaba desnudo, no estaba llorando… Estaba sentado en el suelo, junto a unos tacos de madera de colores, vestido con un polo blanco y unos pantalones azules. Era flaco y así sentado no parecía muy grande, pero era hermoso. Las lágrimas rodaron por mis mejillas, mientras en mi cabeza escuchaba un llanto… Aquél niño no estaba llorando porque ya había nacido dos años antes, de otra madre, junto a la que sí había llorado. Al verle pensé en todo cuanto había leído, en todo cuanto me había dicho mi madre, y pensé en esa mujer, en la que le había dado la vida para que yo se la cuidara, en si le habría abandonado o si por el contrario se le habían arrancado de los brazos. Wangari estaba sonriendo, y yo me acerqué a aquél pequeño que no dejaba de mirarme. Parecía que le habían vestido con sus mejores galas para la ocasión… Me acerqué a él y me puse de rodillas delante suyo. Seguía llorando pero sonreí mientras contemplaba su bonito rostro infantil, aún prácticamente de bebé, y le dije “Hola”, en mi lengua natal, una lengua en la que Wangira le había hablado durante los últimos ocho meses. El pequeño me miró más de cerca y yo sentí un escalofrío. Entonces lo entendí todo. No había cordón umbilical entre él y yo, y nadie iba a cortarlo, simplemente porque era irrompible, como los cordones umbilicales de aquellas madres que dan a luz a sus hijos. Este era invisible pero era tan real como todos ellos”.
“Nació huérfano… El dolor que sentía mientras le daba la vida era el efecto secundario del dolor de una vida sin él. Quizá lo mejor que pude hacer por mi hijo, fue sufrir los dolores más inmensos porque era lo único que quedaría en mí. La sangre me mojaba los pies y el temblor de mi cuerpo me llenaba de frío. Las chicas que estaban ahí no querían mirar. Algunas se tapaban los oídos al oírme gritar. Pero yo no podía dejar de hacerlo. Me retorcí de dolor en el suelo, me guié por mis instintos naturales tratando de traer a la vida a mi hijo como hacen los animales. Pedía que no se lo llevaran, que no lo mataran, que no me lo quitaran… pero sabía que todo eran meras quimeras que nunca llegarían a pasar. Mi corazón latía tan fuerte que lo oía contra el suelo sucio en el que estaba tumbada de lado. Hasta que uno de esos sucios hombres me agarró con fuerza para darme la vuelta con violencia diciéndome que era una maldita zorra y ahogaría al niño con las piernas si no las abría. Me rompió el vestido abriéndome las piernas para ayudarle a nacer y yo temí que su agresividad acabase con su vida. Pero temer por su vida fue lo único que pude hacer como madre… Todo el dolor que sentí en ese último momento, me hizo retroceder hacia atrás como si retornara a la inocencia. El agua de la vida de mi hijo cayendo entre mis piernas, el terror a saber que nacía, la falsa ilusión de ser madre aun sabiendo que no lo sería… Ya no habría más náuseas, dolores, miedos… Ya no tendría hinchados los tobillos, ni los riñones resentidos, ya no temería por su vida o su muerte. Ahora me tocaría echarle de menos. Había imaginado mil veces cómo sería su rostro, si tendría pelo, si su piel sería más clara que la mía o más oscura, si sería muy pequeño, si tendría alguna marca de nacimiento… Había imaginado muchas veces cómo sería poder cogerle en brazos, si pesaría poco, si su boca sería como la mía o su nariz… había imaginado sus mofletes como los míos, su cara redondeada y sus ojos oscuros… Pero no le vi… Noté cómo salía de mi cuerpo, resbalando entre mis piernas, mojado, con olor a algo diferente a todo lo que había olido y que debía ser la vida. Me incorporé para poder verle, pero solo logré atisbar un cuerpo pequeño, delgado, cuya piel era extraña, de un tono grisáceo y claro. Estaba mojado, cubierto de grasa y sangre… Y no lloraba hasta que le cortaron el cordón umbilical y le arrancaron de mí. Ese sucio hombre se llevaba en mis brazos a mi hijo y yo no podía hacer nada más que suplicarle. Quería verle, tener la oportunidad de tocarle, darle aunque fuese un beso y un único abrazo. Pero se le llevaba en brazos y la desesperación me llevó a arrastrarme por el suelo resbaladizo por mi propia sangre con el afán de ponerme en pie y quitarle a mi hijo. Pero por más que intenté levantarme del suelo entre todos esos dolores y los intentos por no caer, me cogieron del pelo arrastrándome hasta que ataron mis manos a mi espalda dejándome tirada como si fuera ganado. Grité como nunca, dañándome la garganta mientras el llanto me hacía temblar y la orfandad de dejar de ser madre me golpeaba el vientre vacío que tan lleno había estado durante todos esos meses. Quería más su vida que la mía y no me había dado cuenta… Entonces lo entendí todo. No había cordón umbilical entre él y yo porque lo habían cortado… pero era irrompible. Real, invisible y ya solo entre mis piernas… Una unión que estaba rota, pero que era para siempre”.
Daniela y Anoona
29 notes
·
View notes