#manuel mandeb
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radiocalamar · 2 years ago
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APARECIÓ MANUEL MANDEB
Estaba dando besos por doquier por Bacacay.
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waltfrasescazadordepalabras · 10 months ago
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Cuando un grupo de amigos no enrolados en ningún equipo se disponen para jugar, tiene lugar una emocionante ceremonia destinada a establecer quiénes integrarán los dos bandos. Generalmente dos jugadores se enfrentan en un sorteo o pisada y luego cada uno de ellos elige alternativamente a sus futuros compañeros. Se supone que los más hábiles son elegidos en los primeros turnos, quedando el final para los troncos. Pocos han reparado en el contenido dramático de estos lances. El hombre que está esperando ser elegido vive una situación que rara vez se da en la vida. Sabrá de un modo brutal y exacto en qué medida lo aceptan o lo rechazan. Sin eufemismos, conocerá su verdadera posición en el grupo. A lo largo de los años, muchos futbolistas advertirán su decadencia, conforme su elección sea cada vez más demorada. Manuel Mandeb, que casi siempre oficiaba de elector, observó que las decisiones no siempre recaían sobre los más hábiles. En un principio se creyó poseedor de vaya a saber qué sutilezas de orden técnico, que le hacían preferir compañeros que reunían ciertas cualidades. Pero un día comprendió que lo que en verdad deseaba era jugar con sus amigos más queridos. Por eso elegía a los que estaban más cerca de su corazón, aunque no fueran tan capaces. El criterio de Mandeb parece apenas sentimental, pero es también estratégico. Uno juega mejor con sus amigos. Ellos serán generosos, lo ayudarán, lo comprenderán, lo alentarán y lo perdonarán. Un equipo de hombres que se respetan y se quieren es invencible. Y si no lo es, más vale compartir la derrota con los amigos, que la victoria con extraños o indeseables.”
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yoestuveaquiunavezfrases21 · 11 months ago
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1472- INSTRUCCIONES PARA ELEGIR EN UN PICADO: Cuando un grupo de amigos no enrolados en ningún equipo se reúnen para jugar, tiene lugar una emocionante ceremonia destinada a establecer quiénes integrarán los dos bandos. Generalmente dos jugadores se enfrentan en un sorteo o pisada y luego cada uno de ellos elige alternadamente a sus futuros compañeros. Se supone que los más diestros serán elegidos en los primeros turnos, quedando para el final los troncos. Pocos han reparado en el contenido dramático de estos lances. El hombre que está esperando ser elegido vive una situación que rara vez se da en la vida. Sabrá de un modo brutal y exacto en qué medida lo aceptan o rechazan. Sin eufemismos, conocerá su verdadera posición en el grupo. A lo largo de los años, muchos futbolistas advertirán su decadencia, conforme su elección sea cada vez más demorada. Manuel Mandeb, que casi siempre oficiaba de elector, observó que sus decisiones no siempre recaían sobre los más hábiles. En un principio se creyó poseedor de vaya a saber qué sutilezas de orden técnico, que le hacían preferir compañeros que reunían ciertas cualidades. Pero un día comprendió que lo que en verdad deseaba, era jugar con sus amigos más queridos. Por eso elegía a los que estaban más cerca de su corazón, aunque no fueran tan capaces. El criterio de Mandeb parece apenas sentimental, pero es también estratégico. Uno juega mejor con sus amigos. Ellos serán generosos, lo ayudarán, lo comprenderán, lo alentarán y lo perdonarán. Un equipo de hombres que se respetan y se quieren es invencible. Y si no lo es, más vale compartir la derrota con los amigos, que la victoria con los extraños o los indeseables.
(Manuel Mandeb es un personaje ficticio creado por Alejandro Dolina) y este relato futbolero, me identifica mucho, porque siempre pensé así, aunque nunca pude encontrar las palabras como magistralmente lo hace Dolina.
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marcosernestomarsal · 2 years ago
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Las tardecitas porteñas son...
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Crónicas del Ángel Gris by Alejandro Dolina My rating: 4 of 5 stars Manuel Mandeb me visita, una tarde ocre de Villa Devoto, me dice léete este cuento, o serie de cuentos. Nunca debi haberlo hecho. View all my reviews
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laheridaabsurda · 5 years ago
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Alejandro Dolina y la importancia de soñar
“Los vendedores de elixir nos convidan todos los días a olvidar las penas y a mantener jubiloso el ánimo. El Pensamiento Oficial del Mundo ha decidido que una persona alegre es preferible a una triste”, denunciaba el polígrafo Manuel Mandeb, en las Instrucciones para abrir el paquete de jabón Sunlight (1).
Ahora bien, continuaba Mandeb (¿Mandeb-Dolina?), “la tristeza es la única actitud posible que los compradores de este jabón pueden adoptar ante un universo que no se les acomoda”. Y se refería entonces a la soledad, la angustia, el desencuentro y la injusticia.
Aunque la tristeza ha sufrido una injusta reputación, el que está triste “se ensimisma, piensa”. En cambio, dirá Mandeb, todos los artificios creados para producir alegría, por ejemplo los concursos de TV, “suspenden toda reflexión”. La tristeza, “hija y madre de la meditación”, encierra así -agregamos nosotros- un potencial disruptivo, cuestionador.
No es que Mandeb-Dolina rechace la alegría, pero sí cree que ésta es apenas un alivio pasajero, fugaz, en un universo esencialmente triste. “El universo se dibuja a sí mismo trazando imposibilidades (…) para intuir la tragedia de la condición humana hay que tener presentes las marcas que dejan las cadenas del tiempo, del espacio y de la lógica” (2). Estamos condenados a la muerte y a la pérdida de la juventud en el incesante devenir. En ese fluir, “la serie de sustituciones es tan vertiginosa que no tenemos tiempo de ser nadie”. (3). Todos somos Dorkas, personaje de las Crónicas del Angel Gris, víctima de un hechizo que lo condenó a caminar sin poder detenerse en ningún momento. Estamos condenados a la determinación (estar en un lugar es no estar en ningún otro) y al implacable reino de la causalidad.
Los personajes de Dolina, sin embargo, se sublevan frente a esta realidad y añoran vivir todas las vidas, estar en varios lugares al mismo tiempo, la juventud eterna, etc., aunque se trate de una batalla perdida de antemano. “Si nos espera el olvido, tratemos de no merecerlo”, dicen las Crónicas... (4). El arte y el amor aparecen como los dos titanes capaces de batirse contra las fuerzas de ese universo “fallado” al que siempre le falta algún detalle decisivo (el vino trae dolor de cabeza, la vida es hermosa pero uno se muere, etc.).
Y andan, sobre todo, a la busca de algún sentido para el universo, aunque sea uno siniestro. “Cualquiera que sea el mensaje que el cosmos prometa, por terrible y amenazador que nos pareciere, será mejor que la ausencia de mensaje. Será más consolador que una ominosa y absurda indiferencia de los astros” (5).
El mundo como es
Se trata, qué duda cabe, de un enfoque filosófico. En Dolina, los padecimientos de una sociedad de clases están relegados a un segundo plano. Las denuncias políticas ocupan un lugar secundario. Por eso, trata de invertir las acusaciones de divagación que pudieran formularse en su contra, señalando que “excepto la metafísica, todo es literatura de evasión” (6), es decir, todo aquello que nos distrae del problema central, que sería la muerte.
En la medida que en el horizonte están la parca y el olvido, los Hombres Sensibles de Flores (protagonistas de las Crónicas del Angel Gris) odian el futuro y la fe ingenua en el progreso que caracteriza a sus adversarios, los refutadores de leyendas.
Sin embargo, convengamos en que la inmortalidad es una fuente de paradojas. La eternidad asegura la perpetuación de un suplicio, como el de Prometeo, al que los buitres llegaban cada día “a cebarse en sus hígados negros”, según la expresión de Esquilo, en un tormento repetido hasta el infinito. Dicho en otros términos, pese a la amargura de la muerte y el paso del tiempo, quizás es preferible que todo lo que existe perezca. En el futuro está la muerte, es cierto, pero también el consuelo de que no hay mal que dure para siempre. Todo despotismo finalmente caerá y renovará las posibilidades de un mundo fraternal y sin opresión. El río herácliteo es un torrente impetuoso que barre con todo, incluyendo las penurias.
Algo de esto enseñaban las Afroditas de Flores, personajes de la novela Cartas Marcadas, cuando decían que “el goce es tal porque tiene fin. Sólo nos complace lo finito. Lo perpetuo es más adecuado para las condenas que para los disfrutes” (7).
Palabras finales
Frente a las penurias de la existencia, Dolina enfatiza la importancia de soñar. Los sueños y la lucha por concretarlos pueden terminar dotando de sentido a una vida que no lo tiene.
Pero es necesario que esos sueños tengan un anclaje en la realidad. La batalla por la realización de un sueño, o el esfuerzo en la realización escrupulosa de una fantasía, según las palabras de Lenin, puede hacer menos penoso nuestro paso por este valle de lágrimas.
NOTAS
(1) El libro del fantasma (Buenos Aires, Ediciones Colihue, 1999), pp. 19-21
(2) Cartas Marcadas (Buenos Aires, Planeta, 2012), p. 236
(3) Bar del Infierno (Buenos Aires, Planeta, 2006), p.302
(4) Crónicas del Angel Gris (Buenos Aires, Planeta, 2012), p. 97. La primera edición se publicó en 1988
(5) El Libro del Fantasma, p.73
(6) ídem, p. 20
(7) Cartas..., p.54
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Instrucciones para abrir el paquete de jabón Sunlight (Trabajo realizado por Manuel Mandeb por encargo de la agencia publicitaria Vivencia)
1) Busque la flecha indicadora. 2) Presione con el dedo pulgar hasta que el cartón del envase ceda.
3) Disimule. Soy un joven escritor que no tiene otra ocasión que ésta de conectarse con las muchedumbres. Usted finja que sigue abriendo este estúpido paquete y yo le diré algunas verdades.
4) Los vendedores de elixir nos convidan todos los días a olvidar las penas y mantener jubiloso el ánimo. El Pensamiento Oficial del Mundo ha decidido que una persona alegre es preferible a una triste.
5) La medicina aconseja cosmovisiones optimistas por creerlas más saludables. Al parecer, la verdad perjudica la función hepática.
6) Viene gente. Siga la línea de puntos en la dirección indicada por la flecha.
7) Escuche bien porque tenemos poco tiempo: la tristeza es la única actitud posible que los compradores de este jabón pueden adoptar ante un universo que no se les acomoda. Toda alegría no es más que un olvido momentáneo de la tragedia esencial de la vida. Puede uno reírse del cuento de los supositorios, pero éste es apenas un descanso en el camino. Uno juega, retoza y refiere historias picarescas, solamente para no recordar que ha de morirse. Ése es el sentido original de la palabra diversión: apartar, desviar, llamar la atención hacia una cosa que no es la principal.
8) Conversar acerca de estos asuntos es considerado de la peor educación. Los comerciantes se escandalizan, las personas optimistas huyen despavoridas, los maximalistas declaran que la angustia ante la muerte es un entretenimiento burgués y los escritores comprometidos gritan que la preocupación metafísica es literatura de evasión. Al respecto, mientras le recomiendo que no deje que paquete de jabón al alcance de los niños, lo juro que todo lo que se escribe es de evasión, menos la metafísica: las noticias políticas, los libros de sociología, los horarios del ferrocarril, los estudios sobre las reservas de petróleo no hacen más que apartarnos del tema central, que es la muerte.
9) Calcule 100gr de jabón por cada kilo de ropa sucia.
10) Cuanto más inteligente, profunda y sensible es la persona, más probabilidades tiene de cruzarse con la tristeza. Por eso, las exhortaciones a la alegría suelen proponer la interrupción del pensamiento: "es mejor no pensar...". Casi todos los aparatos y artificios que el hombre ha inventado para producir alegría suspenden toda reflexión: la pirotecnia, la música bailable, las cantinas de la Boca, el metegol, los concursos de la televisión, las kermeses.
11) Separe la ropa blanca de la ropa de color. Y entienda que la tristeza tiene más fuerza que la alegría: un hombre recibe dos noticias, una buena y una mala. Supongamos que ha acertado en la quiniela y que ha muerto su hermana. Si el hombre no es un canalla, prevalecerá la tristeza. El premio no lo consolará de la desgracia. Byron decía que el recuerdo de una dicha pasada es triste, mientras que el recuerdo de un pesar sigue siendo pesaroso.
12) No mezcle este jabón con otros productos y no haga caso de los sofistas risueños. Tarde o temprano alguien le dirá: "Si un problema tiene solución, no vale la pena preocuparse. Y si no la tiene, ¿qué se gana con la preocupación?". Confunde esta gente las arduas cuestiones de la vida con las palabras cruzadas. La soledad, la angustia, el desencuentro y la injusticia no son problemas sino tragedias, y no es que uno se preocupe sino que se desespera. Lloraba Solón la muerte de su hijo. Un amigo se acerca y le dice: -¿Por qué llorás, si sabés que es inútil? - Por eso — contestó Solón — porque sé que es inútil.
13) No está mal ser triste, señora. El que se entristese se humilla, se rebaja, abandona el orgullo. Quien está triste ensimisma, piensa. La tristeza es hija y madre de la meditación. Participe del concurso "Vacaciones Sunlight" enviando este cupón por correo.
14) Ahora que se fue el jabonero, aprovecharé para confesarle que suelo elegir a mis amigos entre la gente triste. Y no vaya a creer el ama de casa Sunlight que nuestras reuniones consisten en charlas lacrimógenas. Nada de eso: concurrimos a bailongos atorrantes, amanecemos en lugares desconocidos, cantamos canciones puercas, nos enamoramos de mujeres desvergonzadas que revolean el escote y hacemos sonar los timbres de las casas para luego darnos a la fuga. Los muchachos tristes nos reímos mucho, le aseguro. Pero eso sí: a veces, mientras corremos entre carcajadas, perseguidos por las víctimas de nuestras ingeniosas bromas, necesitamos ver un gesto sombrío y fraternal en el amigo que marcha a nuestro lado. Es el gesto noble que lo salva a uno para siempre. Es el gesto que significa "atención, muchachos, que no me he olvidado de nada".
Nota: Las instrucciones para abrir el paquete de jabón Sunlight fueron rechazadas.
—Alejandro Dolina, El libro del Fantasma
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cactusclerico · 7 years ago
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Instrucciones para abrir el paquete de jabón Sunlight
-Trabajo realizado por Manuel Mandeb por encargo de la agencia de publicidad Vivencia. 1)Busque la flecha indicadora. 2)Presione con el dedo pulgar hasta que el cartón del envase ceda. 3)Disimule. Soy un joven escritor que no tiene otra ocasión que ésta de conectarse con las muchedumbres. Usted finja que sigue abriendo este estúpido paquete y yo le diré algunas verdades. 4)Los vendedores de elixir nos convidan todos los días a olvidar las penas y mantener jubiloso el ánimo. El Pensamiento Oficial del Mundo ha decidido que una persona alegre es preferible a una triste. 5)La medicina aconseja cosmovisiones optimistas por creerlas más saludables. Al parecer, la verdad perjudica la función hepática. 6)Viene gente. Siga la línea de puntos en la dirección indicada por la flecha. 7)Escuche bien porque tenemos poco tiempo: la tristeza es la única actitud posible que los compradores de este jabón pueden adoptar ante un universo que no se les acomoda. Toda alegría no es más que un olvido momentáneo de la tragedia esencial de la vida. Puede uno reírse del cuento de los supositorios, pero éste es apenas un descanso en el camino. Uno juega, retoza y refiere historias picarescas, solamente para no recordar que ha de morirse. Ese es el sentido original de la palabra diversión: apartar, desviar, llamar la atención hacia una cosa que no es la principal.   8)Conversar acerca de estos asuntos es considerado de la peor educación. Los comerciantes se escandalizan, las personas optimistas huyen despavoridas , los maximalistas declaran que la angustia ante la muerte es un entretenimiento burgués y los escritores comprometidos gritan que la preocupación metafísica es literatura de evasión. Al respecto, mientras le recomiendo que no deje el paquete de jabón al alcance de los niños, le juro que todo lo que se escribe es de evasión, menos la metafísica: las noticias políticas, los libros de sociología, los horarios del ferrocarril, los estudios sobre las reservas de petróleo, no hacen más que apartarnos del tema central, que es la muerte. 9)Calcule 100 gr. de jabón por cada kilo de ropa sucia. 10)Cuánto más inteligente, profunda y sensible es una persona, más probabilidades tiene de cruzarse con la tristeza. Por eso, las exhortaciones a la alegría suelen proponer la interrupción del pensamiento: "es mejor no pensar...". Casi todos los aparatos y artificios que el hombre ha inventado para producir alegría suspenden toda reflexión: la pirotecnia, la música bailable, las cantinas de la Boca, el metegol, los concursos de la televisión, las kermeses. 11)Separe la ropa blanca de la ropa de color. Y entienda que la tristeza tiene más fuerza que la alegría: un hombre recibe dos noticias, una buena y una mala. Supongamos que ha acertado en la quiniela y que ha muerto su hermana. Si el hombre no es un canalla, prevalecerá la tristeza. El premio no lo consolará de la desgracia. Byron decía que el recuerdo de una dicha pasada es triste, mientras que el recuerdo de un pesar sigue siendo pesaroso. 12)No mezcle este jabón con otros productos y no haga caso de los sofistas risueños. Tarde o temprano alguien le dirá: "Si un problema tiene solución, no vale la pena preocuparse. Y si no la tiene, ¿qué se gana con la preocupación?". Confunde esta gente las arduas cuestiones de la vida con las palabras cruzadas. La soledad, la angustia, el desencuentro y la injusticia no son problemas sino tragedias, y no es que uno se preocupe sino que se desespera.     Lloraba Solón la muerte de su hijo.     Un amigo se acerca y le dice: -¿Por qué lloras, si sabes que es inútil? -Por eso- contestó Solón- porque sé que es inútil. 13)No está tan mal ser triste, señora. El que se entristece se humilla, se rebaja, abandona el orgullo. Quien está triste de ensimisma, piensa. La tristeza es hija y madre de la meditación. Participe del concurso "Vacaciones Sunlight" enviando este cupón por correo. 14)Ahora que se fue el jabonero, aprovecharé para confesarle que suelo elegir a mis amigos entre la gente triste. Y no vaya a creer el ama de casa Sunlight que nuestras reuniones consisten en charlas lacrimógenas. Nada de eso: concurrimos a bailongos atorrantes, amanecemos en lugares desconocidos, cantamos canciones puercas, nos enamoramos de mujeres desvergonzadas que revolean el escote y hacemos sonar los timbres de las casas para luego darnos a la fuga. Los muchachos tristes nos reímos mucho, le aseguro. Pero eso sí: a veces, mientras corremos entre carcajadas, perseguidos por las víctimas de nuestras ingeniosas bromas, necesitamos ver un gesto sombrío y fraternal en el amigo que marcha a nuestro lado. Es el gesto noble que lo salva a uno para siempre. Es el gesto que significa "atención, muchachos, que no me he olvidado de nada". NOTA: Las instrucciones para abrir el paquete de jabón Sunlight fueron rechazadas. _____________________ Alejandro Dolina.
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Instrucciones para abrir el paquete de jabón Sunlight (Trabajo realizado por Manuel Mandeb por encargo de la agencia de publicidad Vivencia.) 1) Busque la flecha indicadora. 2) Presione con el dedo pulgar hasta que el cartón del envase ceda. 3) Disimule. Soy un joven escritor que no tiene otra ocasión que ésta de conectarse con las muchedumbres. Usted finja que sigue abriendo este estúpido paquete y yo le diré algunas verdades. 4) Los vendedores de elixir nos convidan todos los días a olvidar las penas y mantener jubiloso el ánimo. El Pensamiento Oficial del Mundo ha decidido que una persona alegre es preferible a una triste. 5) La medicina aconseja cosmovisiones optimistas por creerlas más saludables. Al parecer, la verdad perjudica la función hepática. 6) Viene gente. Siga la línea de puntos en la dirección indicada por la flecha. 7) Escuche bien porque tenemos poco tiempo: la tristeza es la única actitud posible que los compradores de este jabón pueden adoptar ante un universo que no se les acomoda. Toda alegría no es más que un olvido momentáneo de la tragedia esencial de la vida. Puede uno reírse del cuento de los supositorios, pero este es apenas un descanso en el camino. Uno juega, retoza y refiere historias picarescas, solamente para no recordar que ha de morirse. Ese es el sentido original de la palabra diversión: apartar, desviar, llamar la atención hacia una cosa que no es la principal. 8) Conversar acerca de estos asuntos es considerado de la peor educación. Los comerciantes se escandalizan, las personas optimistas huyen despavoridas, los maximalistas declaran que la angustia ante la muerte es un entretenimiento burgués y los escritores comprometidos gritan que la preocupación metafísica es literatura de evasión. Al respecto, mientras le recomiendo que no deje el paquete de jabón al alcance de los niños, le juro que todo lo que se escribe es de evasión, menos la metafísica: las noticias políticas, los libros de sociología, los horarios del ferrocarril, los estudios sobre las reservas de petróleo, no hacen más que apartarnos del tema central, que es la muerte. 9) Calcule 100 gr de jabón por cada kilo de ropa sucia. 10) Cuanto más inteligente, profunda y sensible es una persona, más probabilidades tiene de cruzarse con la tristeza. Por eso, las exhortaciones a la alegría suelen proponer la interrupción del pensamiento: "es mejor no pensar..." Casi todos los aparatos y artificios que el hombre ha inventado para producir alegría suspenden toda reflexión: la pirotecnia, la música bailable, las cantinas de la Boca, el metegol, los concursos de la televisión, las kermeses. 11) Separe la ropa blanca de la ropa de color. Y entienda que la tristeza tiene más fuerza que la alegría: un hombre recibe dos noticias, una buena y una mala. Supongamos que ha acertado en la quiniela y que ha muerto su hermana. Si el hombre no es un canalla, prevalecerá la tristeza. El premio no lo consolará de la desgracia. Byron decía que el recuerdo de una dicha pasada es triste, mientras que el recuerdo de un pesar sigue siendo pesaroso. 12) No mezcle este jabón con otros productos y no haga caso de los sofistas risueños. Tarde o temprano alguien le dirá: "Si un problema tiene solución, no vale la pena preocuparse. Y si no la tiene, ¿qué se gana con la preocupación?". Confunde esta gente las arduas cuestiones de la vida con las palabras cruzadas. La soledad, la angustia, el desencuentro y la injusticia no son problemas sino tragedias, y no es que uno se preocupe sino que se desespera. Lloraba Solón la muerte de su hijo. Un amigo se acerca y le dice: -¿Por qué lloras, si sabes que es inútil? --Por eso --contestó Solón-- porque sé que es inútil. 13) No está tan mal ser triste, señora. El que se entristece se humilla, se rebaja, abandona el orgullo. Quien está triste se ensimisma, piensa. La tristeza es hija y madre de la meditación. Participe del concurso "Vacaciones Sunlight" enviando este cupón por correo. 14) Ahora que se fue el jabonero, aprovecharé para confesarle que suelo elegir a mis amigos entre la gente triste. Y no vaya a creer el ama de casa Sunlight que nuestras reuniones consisten en charlas lacrimógenas. Nada de eso: concurrimos a bailongos atorrantes, amanecemos en lugares desconocidos, cantamos canciones puercas, nos enamoramos de mujeres desvergonzadas que revolean el escote y hacemos sonar los timbres de las casas para luego darnos a la fuga. Los muchachos tristes nos reímos mucho, le aseguro. Pero eso sí: a veces, mientras corremos entre carcajadas, perseguidos por las víctimas de nuestras ingeniosas bromas, necesitamos ver un gesto sombrío y fraternal en el amigo que marcha a nuestro lado. Es el gesto noble que lo salva a uno para siempre. Es el gesto que significa "atención, muchachos, que no me he olvidado de nada". NOTA: Las instrucciones para abrir el paquete de jabón Sunlight fueron rechazadas.
El libro del fantasma, Alejandro Dolina.
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siuttif · 4 years ago
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La conspiración de las mujeres hermosas
Cuando Jorge Allen, el poeta, se cruzaba con alguna mujer hermosa, caía en el más hondo desasosiego. Esta muchacha no será para mi — pensaba mientras la veía doblar para siempre la esquina.
Es que cada mujer que pasa frente a uno sin detenerse es una historia de amor que no se concretará nunca. Y ya se sabe que los hombres de corazón sueñan con vivir todas las vidas.
En ocasiones especiales, Allen usurpaba el tranco de las más buenas mozas para decirles algo. 
— Vea: si no me conoce, no podrá usted darse el lujo de olvidarme. Pero casi siempre ocurría lo mismo. Las pibas de Flores no mostraban el menor interés en olvidar o recordar al poeta. 
Cabe ahora mismo salir al paso de la suspicacia general, aclarando que Allen era un joven de grata y recia figura. Además era muy versado en amorosas cuestiones. En verdad, casi no se ocupaba de otra cosa.
Una tarde, envenenado por la fría mirada de una morocha en la calle Bacacay, el hombre tuvo una inspiración: sospechó que la indiferencia de las hembras más notables no era casual. Adivinó una intención común en todas ellas. Y decidió que tenia que existir una conjura, una conspiración.
El la llamó La Conspiración de las Mujeres Hermosas. 
Allen nunca fue un sujeto de pensamientos ordenados. Pero su idea interesó much��simo a las personas más reflexivas del barrio de Flores. El primer fruto que se recuerda de estas inquietudes fue la memorable conferencia en el cine San Martín pronunciada por el polígrafo Manuel Mandeb.
Su título fue "De las mujeres mejor no hay que hablar" vale la pena transcribir algunos párrafos conservados en la dudosa memoria de supuestos asistentes.
"...Nadie puede negar el poder diabólico de la belleza. Se trata en realidad de una fuerza mucho más irresistible que la del dinero o la prepotencia. Cualquiera puede despreciar a quien lo sojuzga mediante el soborno o el temor. Por el contrario uno no tiene más remedio que amar a quien le impone humillaciones en virtud de su encanto. Y esta es una trágica paradoja.
"...Las mujeres hermosas de este barrio conocen perfectamente la calidad de sus armas y las utilizan con el único fin de provocar el sufrimiento de los hombres sensibles. Ostentan su belleza y sin embargo no permiten que uno la disfrute. Cuentan dinero delante de los pobres. Esta perversa conducta no puede ser inconsciente. Obedece, sin duda a un plan minuciosamente pensado.
"...Cada vez que me acerco a una señorita para presentarle mi respeto. no recibo otra cosa que gestos de desagrado, gambetas ampulosas y aún amenazas de escándalo. Ya no se puede ceder el paso a una dama sin que se sospeche que está por perpetrarse una violación."
Desde la cuarta fila, un grupo de colegialas le retrucó al conferenciante, llamando su atención acerca del comportamiento de los conductores de camionetas. Opinaban las niñas que estos profesionales, más que requerirlas de amores parecían proponerse insultarlas. 
Este que escribe opina que la objeción es interesante. Con toda frecuencia se ven por las calles individuos que lejos de postularse como admiradores de las señoritas que se les cruzan, proceden a agraviarlas con frases puercas.
Aquí surge un tema polémico. ¿En qué consiste el piropo? ¿Cuál es su objeto y esencia?
Algunos sostienen que se trata de un género artístico: Un hombre ve a una mujer, se inspira y suelta párrafos. No existe la esperanza de una recompensa, basta con la satisfacción de haber cumplido con los duendes interiores. 
Si este es el criterio correcto, la actitud de los conductores de camionetas es perfectamente comprensible. Tal vez quepan reparos de índole académica. Se puede opinar que es artísticamente superior un madrigal que un manotazo, pero ambas expresiones se encuadran rigurosamente en la definición que se ha sugerido anteriormente. 
Otra corriente —menos desinteresada— piensa que todo piropo manifiesta la intención de comenzar un romance. Vale decir que se espera de la dama que lo recibe una respuesta alentadora.
Difícil será —por cierto— que alguien obtenga una sonrisa a cambio de una grosería. El asunto es apasionante y fue desarrollado por el propio Mandeb, mucho después, en un libro que se llamó "La objeción de las colegialas", titulo que despertó un equivocado entusiasmo entre los conductores de camionetas. 
Pero volvamos a la conferencia.
Manuel Mandeb presentó durante su exposición a un italiano y a un brasilero, quienes —dificultosamente— expresaron que, en sus países, los idilios se concertaban en forma rápida entre personas desconocidas y que muchas veces bastaba con leves gestos para entenderse bien.
Curiosamente, el propio conferencista desautorizó a sus invitados. 
"...Está muy bien reclamar la tolerancia de las señoritas. Pero todo amorío debe presentar una cantidad razonable de escollos. Para serles franco, no quisiera saber nada con una mujer capaz de entreverarse en dos minutos con un tipo como yo." 
La conferencia terminó en un tumulto. Varias conspiradoras asistentes empezaron a quejarse de recibir propuestas indecorosas de los caballeros vecinos. Probablemente se trataba de conductores de camionetas.
Los Refutadores de Leyendas hicieron oír su voz algunos días más tarde. En una de sus habituales reuniones manifestaron que no creían en la posibilidad de la conspiración. El argumento de los racionalistas merece consideración: según ellos las mujeres hermosas se odian entre si y es inconcebible cualquier tipo de acuerdo. Declararon también que es falso que esta estirpe no haga caso de los hombres: todos los días uno ve hermosas muchachas acompañadas por algún señor.
Ya en el colmo de la locura, los Hombres Sensibles contestaron que allí estaba el punto: el señor que acompaña a las mujeres hermosas es siempre otro y esto provoca aún más tristeza que cuando uno las ve solas. No sería extraño que estas damas y sus acompañantes no fueran sino íncubos y súcubos que recorren el mundo para dar dique a las almas sencillas. 
Ives Castagnino, el músico de Palermo, razonaba de este modo: si el propósito de las mujeres terribles es hacer sufrir a los hombres, tienen dos maneras de lograrlo:
1) No viviendo un romance con ellos.
2) Viviéndolo.
Según parece, al músico lo aterrorizaba mucho más la segunda posibilidad.
Como puede suponerse, las mujeres hermosas consultadas negaron siempre la existencia de la conjura. De cualquier modo, hay que reconocer que la encuesta no fue demasiado amplia. En primer lugar, las señoritas entrevistadas desconfiaban de los encuestadores y pensaban —con toda razón— que trataban de seducirlas. Y por otra parte resulta una verdadera ingenuidad que, quienes son capaces de una gesta tan oscura, se presten a revelar el secreto precisamente a sus víctimas. 
Como suele ocurrir en estos casos, el tema de discusión se bifurcó innumerables veces y tomó el rumbo de los tomates. Hubo quienes pidieron que se aclararan los límites de la hermosura para saber cabalmente quiénes eran las mujeres que alcanzaban esa categoría.
La cuestión es ardua, como todo juicio estético. Se pueden tener en cuenta —quizá— algunos indicios. Se dice que si una dama es muy linda, las demás la tendrán por tonta. Pero no puede tomarse este lugar común como precepto, pues es cosa evidente que existen mujeres que, siendo tontas, son al mismo tiempo feas. Inclusive hay gente que sostiene haber conocido señoritas hermosas e inteligentes, lo cual para mi gusto es demasiado.
El asunto se torna todavía más complejo a causa de la acción de los Agrandadores de Loros, unos caballeros más bien babosos que con halagos y falsedades consiguen que ciertos bagayos se crean la reina del corso. Así, los hombres de corazón llegan a padecer la violencia de verse rechazados por damas que jamás pensaron seducir. 
La tarea de los Agrandadores ha ido muy lejos y ha llegado incluso a las tapas de las revistas y avisos de publicidad, donde se proponen a la admiración de la gente de toda clase de pescados con disfraz de Colombina.
Pero los Hombres Sensibles siempre supieron cuando se hallaban ante la presencia de una mujer hermosa. Sentían lo que Mandeb describía como una patada en el corazón. Y no se equivocaban nunca. 
A decir verdad, jamás se alcanzaron a reunir pruebas convincentes sobre la existencia de la conspiración. Pero sus efectos se siguieron padeciendo.
Pese a todo, Allen, Mandeb y todos sus amigos siguieron recorriendo las esquinas haciendo fuerza para creer que detrás de alguna puerta iba a aparecer la mujer que les salvaría la vida.
Por suerte para los muchachos, hubo siempre entre las filas conjuradas algunas Traidoras Adorables.
Naturalmente toda traición tiene su precio y muchas veces la exigencia era el amor eterno. Los Hombres de Flores pagaban una y otra vez este arancel. 
La denuncia de Jorge Allen ya ha sido olvidada en el barrio del Angel Gris. Pero aunque nadie converse sobre el asunto, basta con asomarse a la puerta para comprobar que las cosas siguen como entonces.
Allí están las mujeres hermosas en Flores y en toda la ciudad, gritando con sus miradas de hielo que no están en nuestro futuro ni en nuestro pasado. 
Allí está la abominable secta de las Chicas con Novio, poniéndonos ante la espantosa verdad de que siempre hay un hombre mejor que uno.
El camino para derrotar a esta moralla es largo y penoso, pero seguirlo es deber de los criollos arremetedores. No hay más remedio que quererlas a pesar de todo. Y más todavía, tratar de que a uno lo quieran. Esta segunda labor es especialmente complicada y puede llevar la vida eterna. Consiste —por ejemplo— en ser bueno, aprender a tocar el piano, convertirse en héroe o en santo, estudiar las ciencias, comprarse una tricota nueva, lavarse los dientes, ser considerado y tierno y renunciar a los empleos nacionales.
Una vez hecho todo esto, ya puede el hombre enamorado, pararse en la calle y esperar el paso de la primera mujer hermosa para decirle bien fuerte:
— He sufrido mucho nada más que para saber su nombre.
Seguramente, la tipa fingirá no haber oído, mirará al horizonte y seguirá su camino.
Pero será injusto.
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pabloaez · 7 years ago
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Cómo se eligen los equipos de fútbol
“Cuando un grupo de amigos no enrolados en ningún equipo se disponen para jugar, tiene lugar una emocionante ceremonia destinada a establecer quienes integrarán los dos bandos. Generalmente dos jugadores se enfrentan en un sorteo o pisada y luego cada uno de ellos elige alternativamente a sus futuros compañeros.
Manuel Mandeb, que casi siempre oficiaba de elector observó que las decisiones no siempre recaían sobre los más hábiles. En un principio se creyó poseedor de vaya a saber qué sutilezas de orden técnico, que le hacían preferir compañeros que reunían ciertas cualidades.
Pero un día comprendió que lo que en verdad deseaba, era jugar con sus amigos más queridos. Por eso elegía a los que estaban más cerca de su corazón, aunque no fueran tan capaces.
El criterio de Mandeb parece apenas sentimental, pero es también estratégico. Uno juega mejor con sus amigos. Ellos serán generosos, lo ayudarán, lo comprenderán, lo alentarán y lo perdonarán. Un equipo de hombres que se respetan y se quieren es invencible. Y si no lo es, más vale compartir la derrota con los amigos”. Alejandro Dolina. 
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emynhen · 11 years ago
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El cuarto y último capítulo es un inspirado texto romántico que se conoce como Elogio del amor inconcluso. Veamos este párrafo: "...Así como las personas que mueren en la plenitud nos ahorran el recuerdo de su vejez, los amores interrumpidos abruptamente siguen viviendo en nuestro corazón no como brasas agonizantes, sino como horrorosas llamas que queman cada noche..." "...No hay mejor amor que el que nunca ha sido. Los romances que alcanzan a completarse conducen inevitablemente al desengaño, al encono o a la paciencia; los amores incompletos son siempre capullo, son siempre pasión."
Alejandro Dolina - Crónicas del Ángel Gris.
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marcosernestomarsal · 2 years ago
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A MARÍA PETROVNA
El encuentro conmigo mismo es difícil. El vapor que mi ser fermenta se retroalimenta con mi efusivo sentir: odio el postre.
Un creemría quel postre es la cosaco que se logra cuando se acaba el plato principal. No señor. El postre  tiene muchas formas de deir, “Soy el postre, estoy acá.” Pero sucede que se postra, valga la redundancia, delante de uno con una lógi-a un tanto banal: “Soy el postre, y que tiene de malo eso.”
Dicen que Manuel Mandeb ya había resuelto este porblema hace menos de un siglo: “Existe la metomimia en cada almuerzo o cena.”
Sin embargo Dimitri insiste, antes de cada esfuerzo mental, evadir los flujos que le imponen su paladar dispuesto a todo. De modo que los cumpleaños y tortas implican siempre un desafío cualitativo de base. Pero ya lo supero, me lo confeso hace un rato, cuando lo encontré digeriendo su melancolía.
Y yo, Tintin Argento, delucidé que los postres rusos tienen mucho que envidiadarle a dulce de leche pampeano. No tanto por su genesis y contextura (se trata un accidente gastronomico.) Mas bien la cosa del momento, a declarar si es cierto, de considerarlo un postre.
Sin mas, adjunto la entrevista a Dimitri, que tiene mucho que contarnos acerca de lo que hay y lo que aun nos queda por delante.
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wiipon · 13 years ago
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Siempre es recomendable recorrer la vida a contramano, sobre todo si uno sospecha quien ha puesto las flechas del tránsito.
Refutación del regreso
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