Tumgik
#hola bambi!! ale de este lado
Text
♡ old habits die screaming. para brigitte delacour. @acuamentis
Tumblr media
“Eso es cierto” comento tras unos segundos en silencio para posar la mirada en la contraria. “Es muy difícil dejar hábitos incluso cuando sabes que son malos” asintió suavemente para después verla con curiosidad. “¿Puedo preguntar de donde salió esa frase tan filosófica? Y si al mismo tiempo no soy muy imprudente ¿todo esta bien?”
3 notes · View notes
favye · 2 years
Text
faye stevens.
Tumblr media
esqueleto i1 ( all of my brothers ). veintitrés años. actriz de cine. formulario.
hola familia, por este lado bambi. traté de hacer este posteo cortito y fallé :-) pero si les interesa una conexión con la niña denle al corazón y me acerco a hablarles. no pressure, también salen cosas lindas en el rol. seguro les hable por discord, pueden encontrarme ahí como bambi#8851.
@mnnconex
nace en la otra punta del país, en un hogar de clase media en virginia, con una madre alcohólica y enferma y sin padre. cuando faye cumple dos años, su madre literalmente tiene un brote psicótico y decide dejar todo atrás para mudarse a los ángeles haciendo dedo por la autopista, porque cree que está destinada a ser famosa.
durante los primeros años de su infancia, la madre de faye se la pasa yendo a audiciones y colándose en fiestas con famosos. viven de la paga que recibe por pequeños papeles y todo lo que tuvieran ahorrado de antes, pero este estilo de vida les dura poco con la renta carísima de los ángeles y en cinco años las desalojan. pasan una temporada viviendo en la calle hasta que una asistente social se hace cargo y faye acaba en el sistema.
vive el resto de su infancia y toda su adolescencia hasta cumplir los dieciocho años en hogares transitorios. el último en el que estuvo es donde conoce a los otros chicos de all of my brothers.
es actriz porque de tal palo tal astilla, pero mucho más talentosa que su mamá. tras años de intentar conseguir un contrato, a sus dieciocho una agencia de actuación se da cuenta de que la historia de niña huérfana vende un montón y la toman bajo el ala. desde entonces interpretó varios papeles chiquitos y uno importante el año pasado, gracias al cual viene recibiendo mucho hype en hollywood como alguien a tener en cuenta y está empezando a probar la fama y el dinero.
hace cuatro años retomó el contacto con la madre y hablan por teléfono cada algunos meses porque le da culpa ignorar sus llamadas afjsgjs. sabe que se casó y tuvo un hijo al que faye todavía no conoce. ahora que empezó a tener éxito, la madre está buscando reconstruir el vínculo y ella se quiere m*tar pero no sabe poner límites.
de personalidad es muy buena onda. se enamora un poquito de cada persona que conoce porque realmente trata de ver algo bueno en todes, principalmente porque le asusta volverse desconfiada y miserable. en el fondo vive en una sad girl hour constante pero casi nadie ve este lado de ella. necesita terapia ok?
tiene dos gatas a las que ama con su vida aunque sean las hijas del diablo y arañen a todo el mundo. ella las defiende a muerte :-(
está desarrollando un problema con la bebida oops.
IDEAS DE CONEXIONES.
sus hermanos del alma claro !!
amistades de toda la vida, en especial del ambiente callejero o artístico. viejas amistades que se perdieron con el tiempo. amistades más recientes con gente rica y famosa, estas últimas pueden ser genuinas o falsas.
hookups, amistades que pudieron ser más, crushes, matches, gay panics. es homosexual y un desastre, no sé si tiene una ex en toda regla pero seguro le rompieron el corazón varias veces.
pr relationships lmaoo. gente de cualquier género con quien se la haya visto en alfombras rojas o comiendo afuera, sería muy gracioso.
compañeres de trabajo o se cruzaron en alguna audición.
un alma sacrificada que le haga de niñerx de gatos cada tanto.
alguien con quien irse de fiesta. es muy relajada y divertida, aunque si bebe mucho es la chica que se pone a llorar en el baño :/
cualquier otro hc que se les ocurra ! seguro si faye conoció a sus pjs en un evento / fiesta o en su lugar de trabajo les sacó conversación.
11 notes · View notes
myhelaxavier · 3 years
Text
Un poco Desvergonzado
19/22
Armie nunca había estado tan impaciente por llegar a casa, Siempre había vivido solo y nunca nadie había estado esperándolo cuando regresaba de sus viajes de trabajo, de modo que la impaciencia que le inunda la piel mientras se encuentra sentado en el taxi es una sensación más que extraña, sintió que su piel se arrastra en ella y se sorprendió tamborileando los dedos sobre el asiento de la cabina, finalmente, llegó el taxi.
Después de pagarle al conductor y sacar su equipaje, salió del coche, su corazón se tambaleó dentro de su pecho cuando vio a Timmy corriendo hacia él.
- ¡Armz!
Se quitó las gafas de sol y sonrió ampliamente, abriendo sus brazos justo cuando Timmy chocó contra su pecho, lo rodeo con los brazos abrazándolo con fuerza, inclino su rostro enterrándolo en el cuello del niño… Mierda, fue consciente de todo el número que montaron al percibir un movimiento en su visión periférica, Thomas Holland se encuentra de pie en la entrada de su casa observándolos fijamente, su cuerpo se tensó en el acto, momentáneamente molesto y enojado porque no puede ser él mismo ni en su propia casa.
Se pregunta como fue posible que no notará el automóvil de Thomas estacionado frente a su entrada, o al chico parado en sus escalones de entrada, pero es muy consciente de que tiene una relación estrecha cuando Timmy se encuentra cerca; no observo hacia Thomas, fingiendo no verlo, tomo una bocanada profunda de aire, adentrándose al papel del Armand Hammer que el chico conoce, El de un hombre amable que le había brindado un hogar a un niño sin techo por la bondad de su corazón.
- Bien, déjame mirarte - Dijo retrocediendo para mirar a Timmy de la manera más paternal posible - ¿Has crecido otra pulgada en una semana? A este ritmo, serás más alto que yo muy pronto – Para su suerte, Tim no pareció darse cuenta de que se suponía que debía desempeñar un papel de hermandad, y sus ojos de cierva verdes lo miran ávidamente.
- Te he extrañado mucho – Declaró el niño apretando nuevamente los largos brazos alrededor de su pecho, susurrando apenas de manera audible, aferrándose a él como si pensara que desaparecería en cualquier momento - Llévame contigo la próxima vez, por favor – Como pudo trago la repentina opresión en su garganta, forzándose a sonreír volvió abrazarlo de manera más suave, depositando un beso en la parte superior de la cabeza del niño.
- Yo también te extrañe, ricitos – Respondió tratando de mantener su voz ligera y divertida para el beneficio de Thomas, aunque tiene la sensación de que no tuvo un éxito total… el chico le dedicó una débil sonrisa.
- Hola - A regañadientes se vio obligado a soltar a Timmy de sus brazos, para encaminarse hacia Thomas.
- Hey dulce, tenía planeando llamarte, no esperaba que me encontraras aquí, no es que no esté contento de verte - Completamente consciente de la mirada de Timmy en su espalda, se inclinó para acariciar los labios de Thomas con los suyos, pero el chico volvió la cabeza para que su beso aterrizara en la mejilla, retrocedió enseguida, estudiando al chico con el ceño fruncido- ¿Todo está bien? - Thomas cruzó los brazos sobre su pecho.
- Yo... no creo que quiera ser tu novio – Puede contar con sus dedos la cantidad de veces que había estado tan sorprendido y esta sin duda, se agregaría a esa corta lista.
- ¿Puedo preguntar por qué? – Thomas se encogió de hombros con algo incómodo en su expresión.
- Yo solo... He tenido una racha de malas relaciones, mi primer novio resultó estar casado y con niños, mi segundo novio me abandonó por alguien más pervertido cuando me negué a hacer algunas de las cosas que quiso practicar, el tercero se asustó y me abandonó cuando le dije que en realidad no quería nada casual y deseaba una familia en algún momento; el cuarto se asustó cuando se enteró quién era mi padre – le dedicó una sonrisa torcida -  y mi padre siempre tenía cosas mucho más importantes que hacer que ser un padre para mí, seguramente ya sabes el camino hacia dónde voy.
Lo miró fijamente; a pesar de que había investigado extensamente el pasado de Thomas Holland, no se había dado cuenta de cuán profundamente era ese deseo de compromiso - Quieres a un hombre completamente comprometido contigo.
- Quiero un hombre que escuche mis pensamientos, un hombre que me ponga en primer lugar en su vida y me cuide – Respondió el chico en voz baja - Realmente me gustas, Armie, pero parece que tú tampoco eres ese hombre – Joder; por instinto su mirada se dirigió a Timmy.
- ¿Esto es por Tim? No es lo que parece, solo es un niño.
– Él ya no es un niño, Armie - Replicó Thomas con una sonrisa - Abre los ojos, sólo tiene un par de años menos que yo, y realmente no importa, de todos modos, incluso si realmente no es lo que parece, es extremadamente importante para ti, y tal vez sea egoísta de mi parte, pero estoy cansado de recibir migajas de la atención y los afectos de los demás, he estado en eso, he hecho eso; creo que merezco algo mejor… Todos lo merecen… Tú también.
Tuvo que reprimir el impulso de maldecir… Nunca había fallado en una misión tan estrepitosamente, o puesto en peligro tanto, ya podría comenzar a imaginar la reacción de Greta cuando descubriera por qué Thomas Holland rompió los lazos con él; pero no hay nada que pueda hacer al respecto, tiene que jugar su papel hasta el final, se inclinó y se besó al chico en la mejilla.
- Realmente me gustas, hoyuelos, si cambias de opinión, sabes dónde encontrarme - Asintiendo, Thomas se alejó.
- Gracias por todo, Armie – Le dijo en voz baja - Realmente lo siento si te hice ilusiones, no pretendía hacerlo, tenía fe en que podríamos funcionar, que podría enamorarme de ti – El chico le dio una sonrisa torcida - Eres todo lo que he buscado en un hombre, pero estoy empezando a ver que no es suficiente, así que, sí, lo siento si involuntariamente te ilusioné – Resoplo en un intento por parecer una reacción genuina e involuntaria.
- Tener a un chico lindo y dulce en mis brazos no fue exactamente un problema para mí.
- Siempre halagador – Thomas soltó una risita, mientras se estiraba para besar su mejilla - Tengo que irme antes de que tu Timmy me mate por tratar de robarle a su “Papito”.
– Ja Ja, hilarante – Respondió inexpresivo; el chico solo sonrió, se despidió de Tim con la mano y subió al coche - Esperó a que el automóvil desapareciera de su vista antes de permitirse maldecir en voz alta, aunque no le sirvió de nada para librarlo de la frustración que empapo su cuerpo.
- ¿Qué sucedió? – Se rió entre dientes al escuchar la voz de Tim a su lado.
- Acabo de fallar asquerosamente en la misión, eso es lo que ha sucede Bambi… - Levantando su maleta de la acera y se dirigió hacia la casa, tratando de contener su ira, en su mayoría, siente ira consigo mismo, pero también tiene ira irracional hacia Timmy.
- ¡¿Qué?! – El niño lo siguió dentro pisándole los talones -… ¿Por qué? – Dejo caer su maleta sobre el sofá, giro sobre sus talones y caminó hacia él delgado cuerpo del niño, en su lenguaje corporal debe representar mas salvajismo del que piensa de la que piensa, ya que los ojos de Timmy se volvieron cautelosos y sus rasgos rebelaron algo más que preocupación, lo vio dar un paso atrás, luego otro, y otro, hasta la pequeña espalda se golpeó contra la puerta principal - ¿Armie? - Inquirió el niño con incertidumbre en lo que apenas es un susurro.
- ¿Por qué crees? – Contra preguntó colocando la palma de su mano contra la puerta, justo sobre la cabeza del niño, inclinándose sobre él, observo el rostro confundido de Timmy, él quiere... Los dedos de su mano libre se flexionaron, con ganas de tocar, acariciar y marcar - Él me dejó, porque aparentemente piensa que estoy demasiado apegado a ti como para ser un buen novio para él - La manzana de Adán de Tim se movió y las cejas pobladas de alzaron con sorpresa.
- ¿Quieres decir que fallaste en la misión por mi culpa? - Sus labios se torcieron en una mueca.
- Fallé la misión porque Greta pensó que era una gran idea asignarme a una misión de Sugar Daddy y comprometer mi cubierta, luego fallé en hacer creer a Thomas que te di un hogar porque sentí lástima por ti, que simplemente eres un niño por el que siento pena - Se rió entre dientes con amargura - Thomas quiere ser la prioridad de su pareja, quiere un hombre que lo ponga en primer lugar, y en vez de convencerlo de poder ser ese hombre para él, le dije que tu presencia en mi casa no se encuentra disponible para discusión - Soltó una carcajada, incapaz de creer que realmente hubiera dicho eso - Es como si yo no pudiese pensar cuando... no tengo idea de cómo voy a explicar esto a los altos mandos - Y para empeorar las cosas, no tiene ganas de ir a la sede y dar el informe, como debería haber hecho desde el principio, tendría que alejarse de Timmy por eso;  presionó su nariz contra el costado del rostro del niño, tomando una profunda y codiciosa respiración - ¿Qué has hecho conmigo bambi?
No puede creer lo que les ha sucedido a sus prioridades, todo lo que quiere en ese momento es absorber a Timmy por completo, tocarlo en todas partes, presionar sus cuerpos más cerca y enterrarse en él, está inhalando el aroma del niño como un hombre obsesionado, su barba dejando rastros rojizos en la lechosa mejilla de Timmy.
- Armie… - Puede sentir como la respiración del niño se vuelve irregular.
- ¿Qué ricitos? – Quiere arrastrar su boca por el largo cuello de Tim, chupar esa piel perfecta y suave, marcarlo para que todos puedan ver que el niño le pertenece y no se atrevan a tocarlo.
- Me estás confundiendo - Declaró Timmy, apretando y soltando los dedos enganchados a sus cabellos; él se río sobre la cálida piel.
- Ya somos dos -Había pensado mucho desde su llamada mientras estaba en Francia, pero todavía no tiene idea de qué es lo que realmente siente, innegablemente tiene una vena posesiva en todo lo referente al niño, apenas puede negarlo cuando odia la mera idea de que hombres que no sean él, toquen a Timmy; y ahí está la otra cuestión, ya no puede pretender que su necesidad de tocar a Tim es platónica, no es así, parece que se aferró  tan emocionalmente al niño que quiere estar físicamente pegado a él, su sexualidad está condenada - Joder - Exclamó contra la suave mejilla - ¿Tienes alguna idea de cuánto me has arruinado?... Lo arruinaste todo - Sus prioridades, su sexualidad, sus emociones, Timmy lo a cambiado todo, el niño se metió tan profundamente bajo su piel que ni siquiera le importa que recibirá la reprimenda de su vida por no controlar su mierda.
Timmy no dijo nada, pero lo sintió muy quieto contra él, cuando levantó su cabeza, vio que el rostro de Tim se encuentra más pálido que de costumbre y en totalmente en blanco, antes de que pudiera preguntarle qué pasa por su mente, su teléfono comenzó a sonar; haciendo una mueca, se alejó y respondió la llamada
- 011 – Saludó teniendo en cuenta de qué se trata, el automóvil de Thomas se encuentra intervenido y hay cámaras de vigilancia fuera de su casa, no existe probabilidad de que el IC no se encuentre enterado sobre lo que ha sucedido.
- En mi oficina, diez minutos - Imperó la voz helada de Greta antes de que la línea se cortara.
Suspirando se volvió para informarle a Tim que tendría que irse, pero no lo encontró, en cambio obtuvo la vista de la puerta abierta de par en par, con las cejas fruncidas, consideró primordialmente seguirlo, pero no tiene tiempo de averiguar de qué se trata su malestar, Greta ya se encuentra lo suficientemente furiosa, no necesita llegar tarde y darle más motivos para joderlo.
_______________________
Caminó… Ni siquiera sabe hacía donde se dirige, solo sabe que tiene que alejarse de los acusadores ojos azules, aunque Armie no lo culpó directamente por el fracaso de la misión, ese sentimiento se encuentra implícito, puede sentir el resentimiento, la agresión en el lenguaje corporal del Agente, tal vez Armie no lo había dicho abiertamente, pero claramente lo culpa por aún mantener su estúpido apego hacía él, que básicamente es lo mismo que tener la culpa del fracaso de la misión.
Y tiene toda la razón al culparlo, el hombre aún no sabe que Thomas había hablado con él varias veces mientras Armie estuvo de viaje, está tan jodido, sabe que no había logrado contener por completo sus celos, había sido grosero y agresivo con el chico, solo queriendo que se fuera de su hogar, probablemente le había dejado claro que no es un simple chico heterosexual sin hogar que se preocupa por la persona que lo dejó vivir en su casa.
El Agente seguramente lo descubriría pronto, y luego lo culparía de nuevo, si no lo hace, probablemente lo resentiría por crearle problemas con en el trabajo; sin duda, Greta aprovecharía esta oportunidad para hacer que Armie se viera muy mal y poco profesional, después de fracasar en una misión tan importante, no hay manera de que 011 sea nombrado como jefe del IC… Y todo es por su culpa.
Parpadeó rápidamente para alejar la humedad de sus ojos, tragar el doloroso nudo que se formó en su garganta fue más difícil; se sentó en un banco cerca del parque, enterrando las manos en su cabello mirando fijamente las bonitas botas negras nuevas que Armie le había comprado, el hombre lo había cuidado, facilito su educación y sobre todo, le dio un hogar cálido, mientras él le había traído a Armie nada más que problemas desde que se aferró a él como una especie de parásito… un jodido parásito… Eso es lo que es, no otra cosa.
El Agente había gastado una ridícula cantidad de dinero en él y todo lo que recibió a cambio fue una misión fallida, cortesía suya, por supuesto, y no se trata de cualquier misión menor, se trataba de una misión de alto perfil para la que Armie había pasado años construyendo la cubierta perfecta, y el fracaso de esa misión retrasaría al IC por varios años más.
¿Cuántas personas morirían por eso? ¿Cuántas personas morirían por su culpa? ¿Cuántas personas morirían antes de que Armie se diera cuenta de que él nunca valdría la pena por las vidas perdidas? todavía puede recordar con perfecta claridad la mirada en los ojos del hombre cuando le contó sobre la misión en que había fracasado porque comenzó a ponerse sentimental y se negó a matar a una mujer embarazada.
- Me llevó once meses infiltrarme en esa red de tráfico sexual; después de que mi cubierta falló, le tomó al IC otros dos años para conseguir otro agente que lo lograra - La voz de Armie era hueca - Había niños entre las trabajadoras sexuales, el más joven tenía ocho años, el niño superviviente más joven – recuerda como lo miro y sonrió, una sonrisa que no resultaba agradable - ¿Todavía crees que hice lo correcto?
Incluso si el Agente no lo culpa ahora, a la larga, cuando las consecuencias de su misión fallida sean más claras, lo terminaría haciendo, así como aun lamenta claramente elegir la vida de esa mujer embarazada en lugar de la de esos pobres niños; la corporación comercial de Dominic Holland también es sospechosa de trata de personas entre otras cosas
Claro, Armie le tiene cariño, pero a los ojos del hombre, el apego que desarrollo hacía él fue lo que comprometió su misión… ¿Cuántos días le llevarían antes de que el Agente comenzara a arrepentirse de darle un hogar? … Con los ojos escocidos, apretó sus temblorosos labios con fuerza… Quizás deba irse, no sería capaz de soportar ver el arrepentimiento y resentimiento en la mirada del hombre, no quiere seguir siendo un parásito pegajoso, y tampoco es como si tenga la opción de significar algo más para el hombre.
011 le había dejado en claro un millón de veces que no lo quiere de esa manera, realmente no, desde luego, él es posesivo, protector y le tiene cariño, pero esas emociones no son amor, alguien puede ser cariñoso y protector con un niño; alguien puede ser posesivo con un juguete comprado.
La posesión no tiene nada que ver con el amor, Armie tiene una mujer a la que ama esperándolo para formar su propia vida, lo que sea que 011 sienta por él claramente no es lo suficientemente serio como para evitar que se reuniera con su chica francesa.
Thomas Holland lo había interpretado terriblemente mal, definitivamente él no es la prioridad en la vida de Armie, y nunca lo sería, si se queda, sería él quien rogaría por las migajas del afecto del hombre, como un cachorro estúpido y enfermo de amor que constantemente se interpondría en su camino, del cual el Agente no se deshacía por lástima y cariño erróneo, debe irse antes de volverse más patético de lo que ya es, antes de que el poco cariño que 011 le tiene, sea reemplazado por arrepentimiento y resentimiento, antes de que se convirtiera en una carga mayor.
- ¿Tienes alguna idea de cuánto me has arruinado? Lo has arruinado todo- Limpiándose los ojos con la maga de su sudadera, se levantó y continúo caminando, alejándose de la casa del Agente, sabe que bien puede regresar para recoger sus cosas, está casi seguro que 011 ya se ha marchado para conseguir la venganza de Greta, pero se siente demasiado asustado para hacerlo, tiene miedo de no ser lo suficientemente fuerte como para irse si se encuentra rodeado de todo lo que le recuerda a Armie, tener su aroma rodeándolo, tentado a vestirse con una de las enormes camisas y esperarlo acurrucado en el mullido sofá, no, no, no, tiro de los borde de las mangas de la sudadera y continuo caminando.
Él no quiere ni necesita posesiones materiales, de todos modos, sus labios se torcieron en una sonrisa amarga, siempre puede robar lo que necesita, después de todo, es para lo único que parecer ser bueno.
A medida que crece la distancia entre él y la casa del agente, el dolor en su garganta se vuelve casi insoportable, nunca más volvería a ver a Armie, la idea se siente como un golpe en el estómago, haciéndolo tambalear y detenerse abruptamente en busca de un apoyo, con los ojos muy abiertos y sin aliento… Él no puede hacerlo… Simplemente no puede - Puedes, maldita sea Chalamet -Se susurró, clavando sus uñas en las palmas de sus manos.
Apretó los dientes, mientras se obliga a seguir caminando, se siente como si caminará contra un viento fuerte, cada paso y esfuerzo debilitando más su cuerpo, haciéndolo temblar e incrementando las ganas de rendirse y volver, ignoró a la pequeña y necesitada voz en el fondo de su mente susurrando que no puede simplemente marcharse sin decirle nada al hombre, no puede permitir que lo influya, no puede hablar con el Agente, una mirada del hombre y provocaría que su resolución se desmorone, además, no necesita ver a Armie para informarle que se va.
Sacó su teléfono, el único vínculo que hay entre él y Armie, escribió un mensaje rápido, le debe mucho al hombre, n o se iría sin agradecerle.
Lo siento mucho. Gracias por todo. Por favor no me busques.
Observo el texto, dudando un momento, quiere decirle de una manera tan fuerte al hombre que lo ama, puede ser que nunca tenga el amor de Armie, pero no quiere que lo recuerde como el estúpido niño gay enamorado, un enamoramiento es algo emocionante, divertido, juvenil y fugaz, la sensación que aprieta su pecho cuando mira fijamente la fotografía que había establecido como fondo de la pantalla no es ninguna de esas cosas.
Había tomado esa foto hace unas semanas, 011 había estado hilarantemente gruñón ese domingo por la mañana, negándose a levantarse de la cama y mirándolo adormilado por haberlo despertado temprano, él le había dicho al hombre que la imagen era demasiado graciosa como para no ser su fondo pantalla, lo que no le había dicho, es que lo hace sonreír cada vez que la ve.
Mordiéndose con tanta fuerza su labio inferior que puede saborear el óxido de su sangre, envió el mensaje sin agregar nada más de lo que pueda lamentarse más tarde, apagó el teléfono y lo arrojó al cubo de basura más cercano.
___________________
No volvió a la pandilla de Ansel, incluso si así lo hubiese querido, lo cual no es el caso, no puede volver allí, Armie lo podría encontrar fácilmente si lo hace, se entregó a la idea de ser independiente solo por un par de días, no importa cuánto le gustase ir por su cuenta, no sería inteligente de su parte, tarde o temprano, Ansel lo encontraría, necesita protección de otra pandilla.
La pandilla de Saoirse Ronan opera en el extremo opuesto de la ciudad, en el que opera Ansel, lo que le sienta perfectamente, Saoirse no hizo muchas preguntas y lo aceptó en su pandilla con el entusiasmo suficiente, él aún tiene una reputación respetable, como uno de los mejores ladrones., el trato es simple, le debe dar el setenta por ciento de sus "ganancias" a Saoirse a cambio de protección y un techo sobre su cabeza, estuvo de acuerdo sin pedir más, conoce lo suficiente de la reputación de la rubia, como para tener en cuenta que no es una buena idea intentar regatear el porcentaje de “cuota”.
Esa primera noche, permaneció despierto durante mucho tiempo, sin poder dormir, no se trata de la dureza de la cama o el desagradable olor de la habitación que le habían otorgado, ha dormido en peores lugares que aquel, es la ansiedad y la incapacidad para relajarse con los sonidos de las idas y venidas de las personas desconocidas dentro del edificio.
No, la puerta no tiene ningún tipo de cerrojo, no cuenta con alguna clase de restricción para acceder al interior de la habitación, y es dolorosamente consciente de eso, las paredes son muy delgadas, haciéndole estremecer cada vez que alguien se ríe o grita.
Cuando la gente comenzó a tener sexo en la habitación a su izquierda, escondió su rostro debajo de la almohada, tratando de no escuchar o preguntarse si el sexo es consensual o no, no es como si pudiera hacer algo si no fuera así, aún no tiene amigos ni aliados en esta pandilla y no tiene ilusiones sobre su destreza física.
Cuando la mujer gimió de placer, él suspiró con alivio quitándose la almohada de la cara, observo el techo oscuro, deseando poder relajarse y tener algunas horas de sueño, pero no puede hacerlo… No se siente lo suficientemente seguro como para dormir… Él quiere a su Armz.
Asqueado de su dependencia, se situó bocabajo, pero su nueva postura le pareció demasiado expuesta por lo que al acto volvió rodar sobre su espalda, su piel arde con inquietud mientras preguntándose qué hace Armie en estos momentos ¿Aun estaría en la oficina central tratando de resolver el desastre en que se convirtió la misión Holland? ¿O quizás lo esté buscando?
Suprimiendo su deseo traidor de ser encontrado por el hombre, comenzó a pensar en lo que debe hacer para evitar ser encontrado, tal vez deba cortar su cabello y teñirlo no suena como una mala idea; también tiene que evitar las cámaras CCTV por un tiempo, seguramente el Agente dejaría de buscarlo después de unas semanas.
Ignoro la patética esperanza que aun vibra en su pecho, de ser más importante para el hombre que simplemente buscarlo por un par de semanas, se volvió hacia un lado y abrazó su delgada almohada, no se siente solo, no se siente acongojado, no tiene miedo, él solo quiere a su Armz, no puede imaginar no volver a verlo nunca más, no volver a sentir sus brazos alrededor de él, nunca más sentir el rastro de barba sobre sus mejillas cuando es besado, no tener más de esas ardientes caricias mientras…
- Cállate, cállate, cállate - Susurró con voz ronca, sus respiraciones ahogadas y húmedas se convirtieron en lágrimas, su cuerpo se estremeció mientras intenta desesperadamente respirar profundamente, con los ojos apretados, él es fuerte, no iría corriendo hacia Armie él es fuerte.
2 notes · View notes
rapunzelcircehunt · 4 years
Text
Laguna,  14 de febrero ‘21 PARTE 1
Finalmente después de mucho pensarlo, había accedido a venir, quizás podía cambiar su opinión o convencerlo de que volviera a casa y arreglar las cosas por muy difíciles que fueran. Era el responsable de muchas cosas horribles, y por su culpa había gente que había muerto – incluyendo mi hermana - , Hércules había estado en coma y a mí, me habían maldecido con una de mis mejores amigas, todo por mi padre por juntarse con ese tipo de personas tan horribles y despiadadas. Mientras caminaba por la nieve mirando a la nada, pensaba todo esto y en la vida antes de conocer el horror o el dolor, cuando era realmente feliz y no tenía ningún tipo de preocupación salvo dramatizar el tiempo de espera de mis películas favoritas.
No sabía por donde tirar, no quería adentrarme al bosque y terminar perdida, pero había gente por todas partes y solo quería que mi padre y yo estuviéramos en un lugar oculto donde poder hablar bien. Hacía igual de frío que en Invernalia, así que me había puesto un conjunto de cuero morado oscuro que mi tía Sheyk me había comprado para salir en la nieve y una gruesa capa de invierno, así como unas botas hasta la rodilla y que caminaba sin problemas. ¿Dónde diablos podía ir? Finalmente me alejé de la zona del castillo donde seguí el camino de algunos farolillos hasta un pequeñísimo bosque y enfrente un lago.
Me sentía inquieta, como si en cualquier momento pudiera aparecer Ambrosia y hacerme cualquier cosa. Mejor no pensar en ella o terminaría convocándola. Me eché la capa hacia atrás, si mi padre andaba cerca querría que me reconociera.
[Cuervo de Dunyasha]
Estaba furiosa, nunca me había sentido tan humillada como me había sentido en ese estúpido baile, donde no solo mi hermana se había reído de mí, sino que también aquel maldito enclenque me había ofendido de la peor forma posible. ¡Les odiaba! Quería que sufriesen de la misma forma que yo estaba sufriendo ahora y nada más más ver lo que vi en el laberinto decidí volver tras mis pasos en busca de Rapunzel, esa niña tan boba que mientras ella paseaba por los terrenos su novio se estaba besuqueando con la bicho raro de piel azulada. ¡Vaya con el enclenque y parecía tonto!
Esperaba encontrarle o todo mi plan se iba a venir a pique porque a medida que iba caminando por los terrenos la idea de hacer daño a ese maleducado que me había ofendido se iba perfilando en mi cabeza. No tenía nada en contra de la buena de Punzie, solo que era una amiga de la rarita de mi hermana, pero tampoco me importaba que ella recibiese daño, era tan solo una víctima colateral, aparte; necesitaba saber la verdad, una por muy princesita Disney no podía ir por ahí con la cornamenta del padre de Bambi, no señor. ¿Y si acababa que no podía ni cruzar la puerta? “Rasputín, ya sabes que debes de hacer” Le ordené a mi mascota y posteriormente cuando esta se puso sobre una de las ramas de un árbol cercano, empezó a graznar de forma escalofriante para llamar la atención de la niña y cuando creyó que ya tenía, empezó con lo bueno.
Y desde las sombras, escondida entre los arbustos hablé a través de mi anillo que me permitía a hablar a través de los animales. ¿Y quién era mi animal más leal? Mi cuervo que se llamaba Rasputín. — Que sorpresa verte por aquí, si buscas a Zefaris lo encontrarás en el laberinto, pero te advierto que no está solo, está besándose con la reina de San Valentin, ay cuanto lo siento… pero yo no miento, es más él la coronó como como reina, con corona incluida, a quien preguntes te dirá lo mismo… — Tras mis palabras, Rasputín soltó otro graznido y emprendió el vuelo dejando caer un par de plumas negras sobre Punzie y el suelo en salir volando y perderse en oscuro bosque cercano. “Bien hecho y ahora esperemos a ver si se va en busca de su noviete y le gira la cara.”
[Yo]
Estaba impacientándome aunque claro, no habían pasado más de cinco minutos desde mi llegada. Empecé a caminar de un lado a otro dejando un rastro de mis pisadas hasta que escuché el sonido de unas ramas y me puse en alerta. Poco después el sonido de un cuervo que no dejaba de graznar, ¿quizás era Freya? Poco a poco me fui acercándome hasta un árbol, como todo estaba oscuro y la luz de los farolillos no era suficiente, alce la mano para conjurar un lumos flotante y hacer bolar la luz por encima de mi cabeza y ahí me pareció ver el cuervo. —
¿Freya?
— le hable sintiéndome estúpida, no estaba segura si era ella o un cuervo común pero cuando escuche como el cuervo empezó a hablarme con voz humana di un paso hacia atrás sorprendida.
¿Cómo me había encontrado?
Quizás sería por la visión nocturna en su forma animaga, era lo más normal pero…empezó a decirme que Zefaris se encontraba en el laberinto besándose con una chica…la reina del baile. Y antes de poder decir algo el cuervo se marchó volando. —
¡Espera! Freyaaaa!
— grité con pánico de saber aquella verdad, empecé a sentirme mal y me apoye en el mismo árbol. Freya no tenía porqué mentirme ni inventarse nada de nada. Y confiaba en Zefaris, él no podía hacerme esto…sentí como mis ojos se aguaban y decidí que lo mejor era comprobarlo por mí misma.
Mi padre podía esperar, así que empecé a caminar deprisa hacia el camino de vuelta, no quería desesperarme o pensar mal de Zefaris pero tenía que verlo con mis propios ojos…
[Papa Evan]
Con el orbe que había conseguido en el mercado negro de Ketterdam en el bolsillo, me dirigí a tierras rusas sin saber si mi preciosa Punzie vendría o no, me había dejado claro que apenas quería saber de mí, pero aun así tal como le había dicho iba a estar esperándola en los terrenos de Koldovstoretz, con la esperanza de que todavía había posibilidades de que pudiera romper esa horrible maldición con la que cargaba,
No obstante, esa vez decidí no usar la poción especial que solía tomarme, no, esta noche estaba dispuesto a tomar todos los riesgos con tal de ver a mi hija si esta decidía presentarse y despedirme de ella tal como era debido. “Merlín, que venga… que venga” no era muy dado a suplicar, pero esa noche estaba dispuesto a hacer lo que fuese con tal de que Rapunzel viniera a nuestro encuentro.
No habíamos quedado en ningún punto en concreto, así que empecé a caminar algo inquieto pues no sabía si me la encontraría o de lo contrario me habría dejado colgado, hasta que tras pasado más de un cuarto de hora, tiempo que llevaba caminando me la encontré de cara y nada más verla fui corriendo hacia ella. — Cariño, ¿qué ocurre? — Se la veía apagada, triste y eso como padre que era me preocupaba, yo solo quería lo mejor para ella, siempre lo había querido. La sujeté de los brazos, abrazándola con todas mis fuerzas y luego miré a sus ojos tristes. — Punzie, cuéntamelo, ¿qué es que lo que tiene tan acongojada?
[Yo]
El colegio ruso era tan grande como cualquier otro, aunque quizás lo era más que Uagadou o Hogwarts, tampoco lo tenía claro y al ser de noche no lo apreciaba bien, pero los terrenos eran grandiosos y no tenía mucha idea de donde estaba el laberinto. Me negaba a que Zefaris fuera tan horrible para hacerme todas esas cosas…pero la advertencia de Freya me había puesto en alerta.
Y entonces vi a mi padre, parecía que estaba bien pero con aspecto cansado…y en ese momento solo era su niña, no me importaba lo que había hecho o lo que estaba ocurriendo, me lancé a sus brazos y lo abracé con fuerza, llorando. Tarde como un par de minutos antes de hablar y cuando lo hice me separé de él para mirarlo a los ojos. — Ho…hola yo…nada…es que…mi novio, me han dicho que él…se está besando con otra y que encima la ha coronado como la reina del baile — le confesé completamente triste y sintiéndome que no era suficiente para él. Me dio muy igual que supiera que salía con alguien y en ese instante necesitaba desahogarme.
[Papa Evan]
Por minutos seguí estrechándola entre mis brazos, deseando que estos le dieran algo de confort, al mismo tiempo que le daba la oportunidad de desahogarse todo lo que necesitaba. —
Shhh… llora todo lo que necesites.
— Acaricié su cabello con cariño y suavidad, aunque me quedé un poco pensativo. Punzie era mi niña pequeña, pero me estaba dando cuentan de que esta ya no era tan pequeña y que desgraciadamente me había perdido muchas cosas de ella y más me iba a perder, sentimiento que me entristecía en gran medida, llenándome de mucho pesar. Ojalá hubiera podido haber pasado más tiempo con ella, verla crecer, hacerse toda una mujer, pero me encontraba en tiempo de descuento y cada segundo que pasaba ya no podía recuperarse.
Ya veo… algo me dice que este es tu primer desengaño amoroso, Punzie, la vida está llena de esos momentos de angustia, te sentirás perdida, que vas a la deriva, pero el tiempo pone todo a su sitio. — Volví a abrazarla. — Estás en la adolescencia, la edad de los primeros novios y también los desengaños, créeme, a tu edad yo tuve mis primeras novias y no me duraron ni dos semanas, pero tampoco te creas que te voy a contar mis andanzas amorosas, no quiero estropear tu inocencia y con eso quiero pedirte que me prometas que no vas a tener prisa en hacerte mayor para hacer cosas de mayores como beber o ir a fiestas, quiero que disfrutes de tu adolescencia y cuando llegue el momento ya disfrutarás de lo otro, pero no quiero que te pierdas tus años más maravillosos por querer ir de prisa… — Inevitablemente aquello era una despedida pero esperaba que no se me notase, que simplemente estaba siendo lo que ella necesitaba en ese momento: A su padre. — Punzie. — Besé su cabello con ternura a mi princesa y luego suspiré. — Perdóname por los modales de mi última carta, llevaba mucha presión encima y la descargué contigo, no es justo y tampoco estoy enfadado por lo que me dijiste…
[Yo]
Te eché de menos— confesé sintiendo como poco a poco mi cuerpo se relajaba, aun con los ojos cerrados, aspirando su aroma y sin querer despegarme de su lado. ¿Podría coger mi mano e irnos a casa, junto al calor de la chimenea, todos juntos, por una vez? Extrañaba esos tiempos tantísimos. Finalmente me separé un poquito de él.
Pero se suponía que Zefaris es muy bueno, no sé, quizás es porque no soy suficiente guapa — debía de ser eso, había otras niñas más lindas que ella, como su prima Nova por ejemplo, o Summer, o Freya…odiaba admitirlo. En silencio me quede mirando a mi padre, ya no lloraba pero tenía los ojos un poco húmedos y tristones. Volví a abrazarme a él en el segundo abrazo y volví a cerrar los ojos, sin querer separarme jamás. Pronto crecería un poco más hasta tener trece y la verdad que crecer tan rápido era un rollo, ¡no quería hacerme grande! Todo pasaba tan rápido…y los mejores momentos de mi corta vida había sido así, de pequeña, antes de conocer el horror, el dolor o la pérdida. — Siempre puedes contármelo más adelante… — le digo mirándolo a los ojos y suelto un suspiro. — Te lo prometo, no beberé cerveza ni iré a fiestas hasta tener …¿quince? — igual no pensaba en esas cosas, antes prefería ir al cine con mis amigas, aunque…aunque si imaginaba bailando, en fiestas o bailes y eso me hizo volver a pensar en Zefaris porque era el único amigo bailarín que tenía.
Sentí como me besaba el cabello y volví a separarme de él. — Lo siento…es que hable con Hércules y bueno, él esta herido contigo papá…deberías de hablar con él, para intentar arreglar las cosas…no solo conmigo — esperaba que me hiciera caso, porque mis hermanos todos o mamá también contaban en esto.
[Papa Evan]
Yo a ti también princesa, mucho.— Inevitablemente, escuché sus pensamientos de querer ir juntos a casa y nada más me gustaría en el mundo que concederle aquello, me moría de ganas de regresar a casa, abrazar a mis hijos, besar a Sylke a quienes echaba de menos, incluso empezaba a añorar las peleas con Jeremíah, pero mejor que este no lo supiese o se le iba a subir el ego. No, no podía regresar, no me lo merecía, anqué también estaba el hecho de que si regresaba ya no podría irme de ninguna de las formas, me quedaría con ellos, sería el padre que durante tanto tiempo había sido ausente, quizás hasta podía reconectar con Hérc. Solo tenía que cogerle la mano y decirle vayamos a casa. Era tan fácil y a la vez tan difícil, pero esas palabras me quemaban en la garganta. Demasiado dolor, angustia, miedo habían sufrido y si me quedaba con ellos me arriesgaba a que ellos volvieran a ser dañados cuando llegase la tempestad porque tarde o temprano esta vendría a por mí y si me hundía, no quería arrastrarles conmigo. Ya había perdido a una hija y antes de perder otro hijo me arrancaría el corazón. No iba a volver, pero con mi partida pretendía alejarlos de ese gran mal que los acechaba.
Punzie, no digas esto, eres hermosa y guapa, pero si este Zefaris no sabe apreciarlo tiene dos problemas, uno es tonto y dos es ciego. — Y en verla con los ojos tristones le di otro abrazo y acto seguido, saqué un pañuelo de mi bolsillo, que usé para limpiarle las lágrimas de las mejillas, sentándome en cuclillas. Todavía estaba a tiempo de decirle de volver a casa y tener una prórroga de horas, días y con suerte meses, pero el riesgo era demasiado elevado y tenía miedo de apostarlo todo y perderlo. Tenía fe en que, a pesar de estar separados, que el amor que había entre Sylke y yo seguía siendo fuerte, podía aceptar a Jeremíah como parte de la ecuación y dejar atrás los celos, los rencores, estaba cansado de discutir, de perder el tiempo con estúpidas peleas. Quería confiar en que todavía estaba a tiempo de ser el padre que necesitaban mis hijos, de demostrarle a Hércules pues era el que estaba más decepcionado conmigo de que seguía siendo aquel a quien había admirado, podía intentar reconectar con él, dándole esa importante charla de que siempre debía de comportarse con las niñas mientras le enseñaba a afeitarse. Maldita sea, quería paz, estaba demasiado cansado y eso que solo tenía veinte y cinco años, pero me sentía como si tuviera el doble. Pero no iba a ser egoísta, no iba a sacrificar a mi familia por otra prorroga indeterminada que tenía fecha de caducidad cuando la oscuridad viniese a por mí. No, mi último sacrificio era una muestra de amor hacía mi familia.
Daba gracias de que Rapunzel no podía leerme mis pensamientos y que estos seguían a buen recaudo. No obstante, sonreí a pesar de mi tristeza pues no habría un más adelante, pero asentí. — De acuerdo, más adelante. — Volví a sonreír de nuevo y luego por su comentario se me escapó un poco la risa. — Iba a decir hasta los dieciséis, pero de acuerdo que sea hasta los quince y solo porque sé que eres buena y responsable.
Sé que está herido conmigo e intentaré arreglar las cosas con él. — Aseguré, aunque yo ya sabía que eso no podía ser posible, solo me quedaban un par de horas y malogradamente no podía dividirme, porque de poder hacerlo ahora estaría despidiéndome de todos mis seres queridos, pasando mis últimas horas con ellos, pero la que más me necesitaba era ella y ahí estaba, lo que me recordó la maldición y que iba siendo hora de ponerme serio, por mucho que quisiera disfrutar de un momento padre e hija como el que estábamos teniendo hasta ahora. — Cielo, sé que lo has pasado fatal pero tu abuela me dio la clave para evitar esa maldición, escucha atentamente lo que voy a decirte, no hagas caso al cuervo, por lo que más quieras cariño no le hagas caso sea lo que sea que te vaya a decir, ¿me oyes? No confíes en él, porque en el momento que lo hagas ya no habrá marcha atrás, la oscuridad te irá consumiendo y corrompiendo cada vez más a medida que tus emociones se volverán más negativas, debes de prometérmelo cariño que no vas a creer nada de lo que te diga… — Pero por la cara que veía en mi dulce princesa, intuí que ya era demasiado tarde...
Sin embargo, no me rendiría, haría lo que fuese por salvar a mi princesa de la oscuridad, lo que fuese, incluso arrebatar una vida…
[Yo]
Por mucho que se enfadase con él o terminase por decirle cosas tan feas y horribles cuando se enfadaba, en el fondo sabía que estar a su lado era como estar en un lugar seguro, a salvo, había venido completamente nerviosa, desconfiada e insegura y ahora todas esas sensaciones habían desaparecido, me sentía bien a su lado pero lo más importante es que me sentía feliz. Segura, tranquila y como si nada malo pudiera ocurrir. Pensaba en el hombre de la playa, aquel hombre indiferente y frío, los dos eran dos personas diferentes, distintas y todo por culpa de la oscuridad, quizás por no aceptarla o por aguantarse. Sabía que nadie era perfecto en esta vida y que empezaba a comprender que los errores se pagaban caro, a veces no había perdón para ellos, pero yo creía en mi padre aunque cualquier otro hubiera perdido la esperanza, yo sabía como era él y el hombre que me había cuidado, confiaba en esa persona y quería tener fe en ella, si yo no la tuviera, qué otro que no fuera la familia lucharía por él? Yo sabía quién era en realidad mi padre. —
Te quiero, te quiero tanto— le dije abrazándolo con tanta fuerza, habían sido meses y meses sin haber podido tener su contacto, su abrazo o sus palabras.
“Por favor no vuelvas a irte, no lo hagas.”
Quería decírselo y se lo diría más adelante.
Empezaba a tener un poco de duda e inseguridad, pensé en Valentino y la conversación del bosque en Navidad, siendo un pesado con la belleza de Freya y aunque me había dicho que era guapa creo que lo había dicho por decir. Y él era tan pesado con Freya que me di cuenta que Zefaris nunca me había dicho que era hermosa o no de la forma en que lo esperaba, qué otra chica podría haberle hecho olvidarse de mí? Empecé a sentir muchísima rabia, tanto como para querer partirle la cara y mire a mi padre aun con la desilusión o el fiasco que me había llevado. Dejé que limpiase mis lágrimas y me acomode en sus piernas para sentarme, gracias a la kefta de color fucsia que me había regalado mi tía Sheyk, no pasaba ningún tipo de frío. —Puede que Zefaris piense que soy tonta y no me vaya a enterar pero si es así, se va a enterar — no pensaba quedarme de brazos cruzados y mucho menos llorar por él. De hecho, pensé en Lando y si había algún otro evento pensaba ir con él me prohibieran salir o no.
Sonreí un poco más cuando me dijo que era buena y responsable, quizás un poco traviesa también pero eso no lo dije en voz alta. — Mis amigas y yo queremos hacer un aquelarre de brujas cuando seamos un poco más mayores… — le confesé aunque sin saber si le parecería una buena idea o qué. Cuando dijo que intentaría arreglar las cosas con Hércules me relajé y esperaba, de verdad que lo hiciera.
En ese momento parecía que tenía algo importante que decirme así que no le interrumpí, a medida que iba escuchando iba poniendo ciertas caras y sentí que mi sangre se congelaba. No…no podía ser cierto. — Pero que me estás contando papa…como que la abuela te dijo eso? — eso significaba que la habría ido a ver al hospital. Me lleve una mano al pecho como si me faltase respiración.— Creo que es demasiado tarde papa…hay una chica, se llama Freya, tiene mi misma edad y es una maledictus, al principio me llevaba un poco mal con ella pepepepero ….le di una oportunidad por…no puede ser — no, Freya no podía ser la causante de todo esto, era absurdo, no entendía nada. Alcé la mirada hacia los ojos de mi padre. — Ella no es una mala persona, la intento ayudar porque es muy insegura y de hecho en la practica de..animagia que tuvimos en Uagadou el profesor Hakim la trataba fatal, la comparó con un squib! Y entonces yo yo yo ataque al profesor cuando me convertí — empecé hablar atropelladamente sin entender por qué confiar en el cuervo iba a volverme oscura o que me fuera a corromper. ¿Su advertencia en cuervo minutos antes había sido para hacerme daño? ¿O es lo que hubiera hecho una buena amiga? Estaba completamente confundida. — Creo que ya es tarde papa, cuando ataque al profesor quise quise…por suerte tía Sheyk estaba ahí y me alejó volando del profesor, me convierto en un guepardo — mire a los ojos a mi padre, empezando a sentirme un poco nerviosa otra maldita vez.
[Papa Evan]
Y yo a ti, siempre te querré, siempre.— Respondí mientras volvía a estrecharla con mis brazos contra mi pecho para reconfortarla. Me dolía que un niño le hubiera partido el corazón, pero no podía hacer nada salvo lo que estaba haciendo, estar a su lado y hacer que se sintiese tranquila. El desamor era un procedimiento que solo el tiempo podía curarlo y poner las cosas a su sitio. Y cuando escuché su voz resonando en el interior de mi cabeza me estremecí, me suplicaba que no me volviese a ir lo cual me partía el corazón en mil pedacitos, porque no había nada más que deseara que quedarme con mis seres queridos, me había perdido muchas cosas, había permanecido demasiado tiempo lejos de ellos y estaba profundamente cansado, solo quería paz.
No iba a irme, no aún, no hasta haber ayudado a mi hija y asegurarme de que esta permanecía a salvo de esa maldición que pesaba cada día más en ella. Y una vez, acabé de limpiarle las lágrimas en sus mejillas me la quedé mirando y negué. — No Punzie, la venganza no te aliviará puede que un principio creas que sí pero el dolor seguirá en ti, cielo, no quiero que cometas los mismos errores que yo cometí, tu eres mejor persona de lo que yo fui. — Precisamente mi sed de venganza fue lo que me llevó a la perdición y no quería que ninguno de mis hijos pasara por lo mismo, eso sí que no. — Estoy orgulloso de ti. — Susurré volviendo a estrecharla entre mis brazos, sin poder evitar emocionarme y arrepentirme de todo el tiempo que había perdido por estar tan lejos de todos mis seres queridos.
¿Un aquelarre? Me parece bien, pero nada de magia oscura. — Me gustaba que tuviera amigas a las que considerase hermanas, yo en mis tiempos de estudiante también había tenido amigos así, incluso fundamos los Hijos de Slytherin, pero desgraciadamente la vida había hecho que nuestros caminos se separasen. Solo quedábamos Jack y yo, pero a partir de mañana solamente estaría él. Pensé con mucho pesar en mi corazón que se encontraba cada vez más quebrado.
Y cuando finalmente llegó el momento más importante de la noche, escuché sus palabras y asentí. — Regresé a Hogwarts para hablar con Beatrice y me la encontré haciendo nuevos dibujos y en uno de ellos salías tú, matándome, no entendía nada y como sabía que tú le habías pedido a tu abuela que me buscase, pensé que quizás ella sabría porque lo hacías y como evitarlo… — Empecé a explicarle, mientras seguía mirándola fijamente a los ojos. — Ambrosia antes de apuñalarla le reveló que la maldición podía evitarse solo si tu no confiabas en el cuervo. — Pero por cómo reaccionó supe que ya era demasiado tarde, que a pesar de mi advertencia ella ya había encontrado al cuervo y este iba a ser su perdición. No, si yo no lo impedía antes. — ¿Una maledictus? Punzie, las maledictus son propensas a sucumbir al lado oscuro y sus emociones son más intensas que cualquiera, muchas prefieren morir antes de sucumbir a la maldición que las condena y harán lo que sea para poder vivir, incluso vender sus almas a hechiceros oscuros que las atraen con promesas de liberarlas de su desgracia, pero nunca cumplen y esa maldición no se puede romper… — En todos los libros que había leído sobre el tema ninguno hablaba de una maledictus que hubiese sobrevivido a su condena. Esa niña llamada Freya estaba sentencia y no iba dejar que arrastrase a Punzie con ella.
¿Qué? ¿Qué atacaste a un profesor? — No pude evitar alzar la voz, no escandalizado sino preocupado por sus acciones, dándome cuenta de que ya había oscuridad en ella y no podía ser tan necio de creer lo contrario. Ese profesor se merecía eso y más, estaba seguro de ello por lo que me estaba contando, pero no podía dejar que eso fuera a más, que se dejase llevar por las emociones negativas, que se marchitase por dentro llenándose de oscuridad. Y entonces escuché sus pensamientos de nuevo, cuestionándose las cosas. No. No podía ser demasiado tarde, me negaba a creer en ello y de nuevo la estreché contra mí, abrazándola con un brazo y llevándome la otra mano en el bolsillo de mi chaqueta donde se encontraba el orbe que había comprado para hacer frente a esa horrible mujer.
— No temas, lo arreglaremos, nada está perdido. — Susurré para tranquilizarla, aunque yo no lo estaba, sentía que la situación se me estaba escapando de las manos, que, si no actuaba ya, todo estaba perdido. Ambrosia siempre ganaba porque siempre amañaba la baraja para tener la mano ganadora, era por eso que siempre estaba por delante cuando nosotros dábamos un paso, ella ya había dado dos. Siempre anticipándose, sacando las mejores cartas para derrotarnos una y otra vez. — No voy a dejar que ganes esta vez… — Susurré, no hablaba con Punzie sino con la misma Ambrosia en quien estaba pensando y podía ver donde se encontraba, cerca, ella siempre lo estaba, acechando en las sombras viendo como nos hundíamos en las aguas oscuras de la desesperación. Yo no era un rey en ese tablero de ajedrez, el rey eran Punzie, Hércules, Scar, todos mis seres queridos que sin ellos no era nada.
Ambrosia nos había acorralado, nos estaba haciendo jaque una tras otra, presionando, obligándonos a vivir con angustia, miedo, mientras ella se vanagloriaba de su superioridad. Y ahora lo veía claro, no podíamos ganar, por muchas piezas que moviéramos, Ambrosia Lovecraft siempre salía victoriosa porque nos obligaba a jugar según sus reglas, pues desde el principio siempre había sido ella quien tenía el control, no nosotros quienes para ella solo éramos ratitas.
Pero yo no estaba dispuesto a dejar que ella ganase, no esta vez, así que no me quedaba otra que romper el tablero, romper las reglas de Lovecraft y jugar sucio, pues solo así tendríamos una oportunidad contra ella.
[Yo]
No sabía cuanto tiempo llevábamos ahí pero después de todo me sentía mejor, relajada en sus brazos y diciéndole que le quería mucho. Algo dentro de mí creía saber que iba a ocurrir, no podía pedirle que volviera a casa porque él iba a volver a negarse, estaba triste y no quería escuchar una negativa más ahora mismo, no cuando me sentía algo bien. Escuché atentamente a mi padre diciéndome que no fuera vengativa pero sentía la necesidad de hacer daño a Zefaris o al menos dejarle las cosas claras. Estaba demasiado dolida con él. —
Intentaré hacer lo mejor que pueda papá
— no podía prometerle que me portaría bien, no estaba segura ni de mí misma y más con la maldición que cargaba encima. Sonreí un poco más y otro abrazo más, al cual pude memorizar su aroma y sentirlo.
Sí…bueno una de ellas es nigromante, no sé, esperemos no tocar nada de magia oscura — pero otra cosa que no sabía bien si podía prometerle, al fin y al cabo, Prai tocaba ciertos asuntos que para mí me eran desconocidos. —Siempre he querido aprender nigromancia y ahora que lo pienso me da muy mal rollo — cuando era más pequeña tenía una admiración por todo lo que hacía mi tía Sheyk, pero había que tener estómago para hacerlo. Y ahora no estaba del todo segura si quería seguir aprendiendo o no.
¿Beatrice? Sus dibujos son…son visiones del futuro? — acababa de descubrir algo de la pelirroja, algo que desconocía aunque bien sabía que las Doyle eran videntes de categoría, pero desconocía que se pudiera ver el futuro a través de los dibujos. Quizás incluso ahora con los mismos cuadros…el mundo de la magia no dejaría de sorprenderme y terminaba por descubrir nuevas cosas. — Maldita sea, y no pudo avisarme antes porque….estaba en coma — no me importó decir que me escuchase decir maldita, no había podido evitarlo. Pero eso no era todo, mi padre sabía más de los maledictus que yo y cuando empezó a decirme todas esas cosas empecé a sentirme peor. — No...no… — me lleve una mano al pecho, ¿Freya sería capaz de ser así? Y Valentino debía de estar ahora mismo con ella, bailando juntos, riéndose, quizás hasta besándose…empecé a sentir un poco de miedo, pero no quería pensar mal de Freya, no quería imaginarme que pudiera hacerle daño a él o incluso a mí que ahora nos llevábamos bien. Alcé la mirada de nuevo hasta mi padre, ahora empezaba a tener un poco de frío pero más por todo lo que me estaba diciendo. —Dios mío…sí, estaba con Freya, Sheyk estaba ahí para vigilarme y otro chico de Uagadou, el profesor era horrible y ella le costaba mucho transformarse. Y yo sucumbí a la oscuridad, empecé a escuchar voces de Cissy y Ambrosia diciendo que atacase y lo hice. Papa lo hice porque no soportaba que tratase mal a mi compañera…pero estaba tan ciega, el hombre era horrible y lo ataque, lo arañe y le hice daño. Tía Sheyk hizo que lo expulsaran después de esa clase __ me abrace a mi padre, mamá se había enterado y también me había abrazado. Yo ya no estaba del todo segura. A pesar de su abrazo me separé de él después de que murmurase eso a la nada, pero sabiendo a quién se estaba refiriéndose.
Papá…a pesar de lo que has dicho de los maledictus, que están malditos, no quiero rendirme con Freya, ella no tiene la culpa de serlo y creo que siendo su amiga, podría intentar hacerle bien, ella no tiene por qué hacerme nada malo — era arriesgado pero ¿qué podía perder? — Ya he dado señales de oscuridad, y he confiado en ella para que salga con mi mejor amigo… no puedo darle la espalda sin más — con eso me estaba refiriéndome a qué no iba a ir contra de ella pero tampoco perder la esperanza. — Tú y mamá sobretodo, todos tienen esperanza en mí, en que podremos romper o evitar lo que ocurrirá en verano…pero yo quiero tener fe en Freya, tener esperanza para ella también. Podríamos…podríamos buscar una forma de ayudarla a ella también? — le pedí mirándole a los ojos. — Aunque tenga que estar lejos de ella, pero…podemos?
[Evan]
Estoy seguro de que lo harás bien.
— Confiaba en ella y sabía que ella intentaría hacer siempre lo mejor, independientemente de la situación en la que se encontrase, estaba convencidísimo. Y acto seguido, seguí escuchando sus palabras tranquilamente, vaya con la amiga, pensé, pero tampoco me escandalizaba. Yo también era nigromante, de joven me había interesado mucho aquel tema y gracias a eso Wakanda volvía a estar viva después de que Isabelle la matase tiempo atrás. —
¿Por qué te da mal rollo? Si es por miedo, Punzie no debes de temer a la muerte, no tengas miedo a los muertos sino a los vivos, no te negaré que existen espíritus malvados y vengativos, pero por cada mal espíritu hay cien personas horribles.
— Hice una breve pausa y le sonreí con cariño. —
Igualmente eres muy joven, tendrás mucho tiempo para aprender por ti misma y junto tus amigas…
Sí, descubrí que Beatrice dibujaba el futuro durante el ataque, le requisé los dibujos y los oculté a todos, si alguien se hubiera enterado de ello, la habrían torturado. — Le expliqué por encima y asentí cuando me pregunto si sus dibujos eran visiones del futuro. — En su mayoría lo son, pero creo que también mezcla tiempos y ni siquiera es consciente de ello. Sin embargo, había llegado el momento de ponernos serios y cuando le expliqué lo de su abuela, volví a asentir. — La dejó en coma para que no pudiera avisar y cuando lo hiciese fuese demasiado tarde. — Otro ejemplo que confirmaba que Ambrosia siempre jugaba con la mano ganadora, no importaba lo que hiciéramos, ella siempre salía triunfante. — Ser maledictus es una de las cosas más horribles que pueden pasarte en la vida. — Esa niña llamada Freya me daba mucha pena, pero aun así haría lo que fuese para que no arrastrase a Punzie hacía el abismo oscuro. Poco después escuché su explicación de cómo había atacado a ese profesor, preocupándome más aun por todo lo que estaba diciendo y cuando mencionó que escuchó las voces de su bisabuela y Ambrosia me tensé tanto que me quedé bien rígido escuchándola. — ¿Has… has escuchado más voces? Digo si solo fue esa vez o hubo más veces... — Terminé de preguntar sintiendo como la boca se me quedaba desencajada y con mucho mal cuerpo, aquello era muchísimo más grave de lo que creía y escuchar voces nunca era buen augurio, jamás. Pero, aunque me había quedado más serio de lo normal, no estaba enfadado por lo que había hecho.
Sin embargo, escuchar lo siguiente que dijo me rompió más de lo que estaba. Rapunzel aun teniendo oscuridad en su interior seguía llena de bondad y que no se rindiese con su amiga, me llenaba de orgullo y me demostraba que ella era mejor que yo, ella era un alma luminosa como su madre y las dos eran fuertes. No obstante, no podía dejar que la oscuridad que había empezado a manifestar apagase su luz y mi deber como padre consistía en preservar su bondad. — Cielo… — La miré con mis ojos chocolate mostrándose serios, acto seguido, negué con la cabeza. — No puedes ayudarla, por mucho que quieras hacerlo, no debes. — Quizás era demasiado pronto para explicarle según qué cosas, pero Punzie había visto de primera mano lo dura y horrible que podía ser la vida, cosa que no me gustaba porque hubiera preferido que siguiese siendo una niña inocente que cuya mayor preocupación fuese esconder que tenía un novio a sus padres. Pero desgraciadamente la vida le había pateado tanto que le había hecho comprender que el mundo no era de luces y color, sino de grises cada vez más oscuros tirando a negro. — Ser maledictus te condena a vivir sabiendo en que llegará un día en que nunca más podrás ser humana, pero eso no es lo peor, lo más horrible es que con el tiempo tu humanidad acabará desapareciendo, solo quedará el animal, todo lo demás desaparecerá y esto es horrible, ¿Cómo crees que es vivir y tener que despedirte de tus seres queridos? — A mí ya me estaba rompiendo por dentro saber que esta era la última noche junto a ella, que no podría ver como crecía y se convertía en toda una mujer, que formaba junto con sus amigas aquel aquelarre. Mucha cosa ya me había perdido y más iba a perderme…
Entiendo que quieras ayudarla, que no quieras rendirte con ella, eso dice mucho de ti y me llena de orgullo ver cómo quieres luchar por alguien, pero no debes, Punzie por más doloroso que te resulte ahora, más lo será en un futuro cuando su maldición la consuma, decir adiós siempre es doloroso y más a alguien a quien quieres o aprecias. — Merlín, me dolía el pecho de solo pensar que yo antes del amanecer también iba a decirle adiós a mi hermosa hija. Se me quebraba el corazón hasta el punto de que quería llorar, pero me negaba a hacerlo porque no quería que ella descubriese que algo iba mal, no quería estropear esa noche poniéndola triste, pero algo me decía que era inevitable.
Puede que aquel profesor se metiese con ella, pero tarde o temprano aparecerá alguien que le venderá falsas promesas de ayudarla a romper la maldición y cuando ella acepté porque lo hará, porque si alguien viene en tus horas más oscuras y desesperadas diciéndote que puede salvarte de tu cruel destino, haces lo que sea, te aferras con todas tus fuerzas a ese clavo ardiente y aunque te las llamas te consuman, seguirás aferrándote y harás lo que sea con tal de salvarte, incluso traicionaras a tus seres queridos. — En mencionar aquello se me quedó mal cuerpo, pues Ambrosia había mencionado el cuervo y conociendo que esa mala mujer siempre iba dos pasos por delante, la idea que fue formándose en mi cabeza no auguraba nada bueno. — Punzie… esa mujer siempre ha ido por delante nuestro y hay algo que debes saber, ese reloj que Cissy rompió, me lo entregó Ambrosia en mi época más oscura, nunca vi su rostro en Hogwarts, pero cuando entré a los recuerdos de tu abuela para ver su rostro, la reconocí. ¿Y si Freya ya sirve a esa mujer? ¿Quién te asegura de que esa chica ya no esta pérdida? — Y entonces lo vi con más claridad y supe lo que debía de hacer. — Cielo, no podemos ayudarla, pero sí podemos aliviar su sufrimiento...
[Siguiente Publicación...]
1 note · View note
myhelaxavier · 3 years
Text
Un poco Desvergonzado
12/22
¡Maldita sea! Las manos de Armie se apretaron en el volante hasta que sus nudillos se volvieron blancos por el esfuerzo, su interior está luchando contra la necesidad de voltear a ver por el espejo retrovisor mientras la sede desaparece detrás suyo por el camino, él tiene más autocontrol que eso, él puede contenerse… Tiene que hacerlo - Eres jodidamente ridículo Hammer - Murmuró para sí mismo con los dientes apretados.
No solo es malditamente incapaz de resistirse a Bambi cuando le pregunta algo, sino que también tiene que reprimir las ideas totalmente locas y paranoicas de que algo le puede suceder al niño mientras él no estaba a su lado para protegerlo, Timmy no necesita protección, no es un simple chico indefenso ni ingenuo, había sobrevivido por más de una década viviendo en las calles, no necesita que tú lo tomes de la mano para llevarlo a cabo por toda la sede ; su mente no dejaba de repetir esas palabras, Timmy estaría bien mientras él comienza a concentrarse en la misión de Thomas, incluso si la misión le lleva meses.
Sus labios se apretaron hasta formar una delgada línea ante la idea, debe de recordarse a sí mismo que había conocido al niño durante un mes, no es ni siquiera siquiera tiempo suficiente para ser tan ... apegado, además, permanecer un tiempo separados les haría bien, el niño superaría su enamoramiento por él y encontraría otro blanco para derramar su cariño, está seguro que para cuando volviera a verlo, Tim probablemente le hablaría sobre un chico de su edad del cual estaría enamorado, y por fin Bambi dejaría de verse tan aturdido y drogado cada vez que lo toca.
La idea de alejarse y que Timmy encuentra otra persona es ... extraña, el hecho de que sea extraño simplemente le demostró que definitivamente necesita una distancia saludable del niño, por el bien de ambos, su mente trato de convencerse de eso mientras pisa el acelerador y alejarse a toda velocidad por la carretera.
__________
La distancia que se había obligado a formar entre ellos solo duró tres horas; aunque en su defensa, realmente tiene una buena razón para llamar a al niño, o eso se dijo a sí mismo mientras marcaba el número del celular que le había entregado antes de marcharse, Timmy respondió al cuarto tono.
- ¿Armie? - Se enderezó en el sofá al escucharlo, el niño suena como si hubiera estado llorando por horas.
- ¿Estás bien ricitos? - Escuchó una respiración profunda al otro lado de la línea, antes de recibir una respuesta.
- Sí, estoy bien, solo estaba tomando una siesta ¿Algo va mal de tu lado? - Frunció el ceño ante las palabras, está seguro de que no le está diciendo la verdad.
- No, solo quería saber… qué dijo exactamente Greta.
- Oh… ya te lo dije - hizo una mueca con disgusto, necesita mantenerlo en la línea el mayor tiempo posible.
- Lo sé, pero necesito los detalles Bambi.
- Ella pretendía meterte en problemas Armie, trató de hacerme decir que me obligaste a tener relaciones sexuales - Escucho la suave y joven risa del niño - Tuvo el descaro de fingir que era comprensiva, como si no tuviera idea de que ella fue quien te ordenó que me reclutaras para esa misión, perfectamente consciente de que en un momento determinado deberíamos tener relaciones sexuales de algún tipo, fingió que todo había sido idea tuya, que tus acciones no fueron aprobadas ni supervisadas.
- Interesante - Tarareó pensativamente, G había formado todo un plan en su mente.
- ¿Por qué te odia? - Pregunto el niño, ahora es todo curiosidad de nuevo.
- Ella piensa que estoy tras su puesto.
- ¿Lo estás?
- Quizás.
- ¿En serio, quieres ser jefe del IC? - En su rostro se formó una mueca, querer es una palabra demasiado fuerte para él.
- En unos años tal vez, es algo que estoy considerando.
- ¿No eres demasiado táctico para ese trabajo? - Se encogió levemente de hombros a pesar de que el niño no puede verlo.
- Tengo suficiente experiencia para toda clase de misiones, a mi edad eso es algo positivo, tomando en cuenta que la razón principal por la que los altos mandos están reemplazando a Greta es porque sus métodos son demasiado anticuados y tediosamente metódicos, tecnológicamente hablando nos encontramos bastante retrasados ​​en comparación con otras agencias de inteligencia extranjeras como la INTERPOL o el MI6 y no se debe a que no tengamos el ingenio o los recursos necesarios, Greta se ha estancado en las viejas costumbres y se niega a dar suficiente financiación al departamento de investigación y desarrollo, esto a veces se vuelve frustrante porque, por ejemplo, nuestra última misión hubiera sido mucho más fácil si tuviéramos algo de la tecnología que posee la CIA; así que sí, a veces es tentador tomar el control del IC,
- Pero el programa de cifrado que los hackers nos dieron es bastante limpio - El niño replico, aunque pudo sentir esa suave sonrisa en su voz - Pude haber hecho una copia ilegal para mí.
Sonrió con alivio recorriendo a través de su cuerpo ante la levedad en la voz de Timmy, había empezado a pensar que no podría volver a escucharlo tan sereno y juguetón - Fingiré que no he escuchado eso - Contestó secamente.
- ¿Escuchar qué? - Cuestionó el niño con un tono de voz excesivamente inocente y dulce.
Sonrió de vuelta al imaginar vívidamente sus grandes ojos verdes observándolo con fingida confusión e inocencia, si Bambi había estado allí, lo haría, besaría la punta de la nariz, o tal vez en su mejilla, Timmy se sonrojaría, y haría ese gesto inconsciente que siempre hace cuando él lo toca, se inclinaría en su toque, como si estaba pidiendo más… Él siempre quería más.
- ¿Armie? - Timmy pregunto con incertidumbre, devolviéndolo al presente en automático; negó con la cabeza, perplejo por sus propios pensamientos.
- Lo siento, me distraje por un momento - Frotó un dedo entre sus cejas, frunciendo el ceño - ¿Timmy?
- ¿What? - No se puede creer lo que está a punto de preguntar.
- ¿Estamos bien? - Resultó tan raro y extraño como había esperado, le pregunta a un niño de veinte años con el que había compartido una misión, si están bien , aunque objetivamente no había hecho nada malo, no debería de importarle que Tim estaba molesto por su próxima misión .
- ¿Existe un nosotros? - Inquirió el niño con curiosidad, él cerró los ojos tomándose un respiro.
- No te lo estaría preguntando, si no existiera un nosotros, no quiero que pienses que no te quiero aquí, ahora que la misión ha terminado - Hubo un silencio en la línea.
- ¿Lo haces? - La vulnerabilidad total en la voz de Timmy provoco que su pecho se apretara y su lado protector saliera a flote.
- Por supuesto que sí, bebé - Inmediatamente hizo una mueca, no debió use ese apodo, la misión había terminado y continuar usando palabras cariñosas simplemente jodería la mente del niño, jodería ambas mentes, la situación ya se encuentra lo suficientemente complicada.
- No estaba seguro de que lo hicieras - Su confesión fue honesta, no necesita verlo para saber que el niño está sonriendo levemente.
Se dio cuenta de que él también está sonriendo, pasó una mano por el rostro frotando con un poco más de fuerza su barbilla, sintiendo como un malestar comienza a formase en su estómago ¿Qué mierda está haciendo?
- Tengo que irme - Dijo lacónicamente y colgó la llamada, inmediatamente, se sentó como un idiota, un idiota mucho más grande de lo que ya es.
_____________________
Timmy lo llamó dos horas después.
- Hola - Saludó, su voz es tímida pero decidida.
Puede imaginar su rostro preocupado, mientras mordisquea su labio inferior, con la barbilla apoyada entre sus rodillas mientras que una de sus manos juega con el dobladillo de su pantalón, la imagen es inquietantemente vívida en su mente.
- Hola - Respondió mientras abría la nevera- ¿Está todo bien?
- Sí - Respondió rápidamente el niño - Es solo que ... Colgaste sin decir adiós y… ahora estoy solo - Detuvo sus palabras antes de gemir, suena amortiguado, está casi seguro de que su rostro ahora se encuentra escondido entre sus rodillas -… Básicamente, soy ese chico jodidamente pegajoso y necesitado, poco atractivo que quiere asegurar de que la gente no lo odie en secreto… Por favor ignórame, estoy siendo ridículo, nunca más volveré a usar un celular - Sorpresivamente se encontró sonriendo antes de esas palabras.
- No te odio en secreto Bambi, estamos bien, lo siento si te di la impresión de odiarte.
- Entonces, ¿por qué colgaste tan bruscamente?
Vaciló por un momento, su primer instinto fue mentir, con su trabajo siempre fue la primera opción, antes de recordar que la honestidad debe fluir en ambos sentidos - Para ser sincero… Quería dejar de hablar contigo - Respondió cerrando la nevera, haciendo una nota mental de ir de compras lo antes posible - Pero no porque te odie en secreto - Hubo un silencio en la línea; él caminó hacia su ordenador portátil, sentándose frente a él de nueva cuenta.
La imagen de Thomas Holland se ilumino en la pantalla, el chico parece mucho más joven que sus veinticuatro años, con cabello castaño, rasgos suaves y finos labios, es objetivamente guapo, incluso más guapo que la mayoría de las mujeres que conoce; es una pena que no podría sentir un destello por mínimo que fuera, de atracción hacia él, lo que provoca que su misión sea aún más difícil, fingir deseo nunca es fácil, ni siquiera para un Agente tan experimentado como él; siempre existen partes que lo pueden delatar, la falta de erección es la más condenatoria; había estado observando esa foto durante la última hora, tratando de encontrar algo sobre Thomas que le atrajera, no puede consumir viagra cada vez que tenga una cita con el chico.
Esa es una de las razones por las que odia las misiones de esa clase, especialmente cuando el objetivo resulta ser masculino; no siempre se sintió atraído por las mujeres que se suponía que debía seducir, pero con las mujeres es mucho más fácil engañar a su cuerpo, haciéndole creer que se sintió atraído por ellas; hasta este momento no ha logrado tener éxito en convencer a su cuerpo de desear a Thomas Holland, por supuesto, el hecho de que sus pensamientos siguen volviendo al suave cuerpo de Timmy con frecuencia no lo ayuda exactamente a concentrarse en el trabajo.
- ¿Entonces por qué? - Insistió el niño por fin; él se reclinó en su asiento.
- Colgué antes de llegar a decir algo estúpido, más estúpido de lo que ya había dicho - Todavía no termina de creer que había llamado así a Tim… Joder ¿Está loco?
- ¿Qué quieres decir?
- Mira, intento no ser un idiota, sé que no es bueno darle falsas esperanzas a alguien, no quiero hacerlo, pero ... No puedo ser tan firme contigo como se supone que debo que serlo - Tendría que haber sido más firme con el niño, respecto a su pequeño enamoramiento, en lugar de llamarlo con apodos cariñosos.
-Espera - La voz de Timmy se escucha como si estaba dividido entre reír y suspirar - Si es porque me llamas bebé , sé que no lo haces en serio, sé que realmente no me ves de ese modo, no te preocupes 011, no estoy delirando.
- Aun así - él replico reacomodándose en su asiento - Debería ... debe existir una limitación, soy el adulto aquí y tengo más experiencia, debo ser más responsable; pero en lugar de ser responsable, continuo jodiendo tú mente y tratándote como ... Mi bebé… No puedo ser tan firme contigo como debería ser.
- Awww… Daddy está siendo demasiado suave con su bebé - Timmy suena como si estaba sonriendo alegremente - ¿Acaso insinúas que me quieres demasiado Armie? - Él sonrió tristemente, si tan sólo fuera así de simple.
- Supongo que me siento un poco apegado a ti, ricitos - Prácticamente puede escuchar la alegría de Timmy burbujear en su voz.
-Por supuesto que sí - respondía coquetamente - Tengo una personalidad ganadora.
- Sí - Secundó sus palabras mientras sonreía débilmente. Ambos permanecieron en silencio por un momento, pero esta vez el silencio fue cómodo.
- Sé que no puedes venir a la sede - Dijo el niño de repente- Pero ¿Puedo visitar en tu casa cuando tenga tiempo libre? - Observo la imagen de Thomas sin verla realmente.
Cuando no respondió de inmediato, escucho a Timmy murmurar con una risa incómoda - Está bien, pretendamos que no dije nada.
- Sería igual de sospechoso, como si yo visitara la sede - Aclaró tranquilamente - Mi casa probablemente será vigilada después de que Holland se entere de que comienzo a pretender a su hijo.
- Lo entiendo, olvídalo, de todos modos, fue estúpido de mi parte sugerir esa idea - Hizo una mueca con disgusto, a veces, la inseguridad de Timmy es desgarradoramente preocupante.
- ¿Recuerdas lo que te dije sobre prestar atención a lo que dice la gente en lugar de dejar que tus opiniones preconcebidas afecten tu juicio? Todo lo que dije fue que no puedes venir a mi casa desde la sede, porque tarde o temprano llevarás a Holland al IC, no importa cuán cuidadoso seas en el camino.
- ¡No lo haré!
- Lo harás, tienes mucho talento en lo que haces, pero todavía eres un novato, no tienes experiencia práctica y cometerás un error tarde o temprano, porque todos los aprendices lo hacen - El niño guardó silencio, claramente desanimado; él apretó la mandíbula ante la reacción de sus palabras. No te atrevas Hammer , le dijo su parte racional, pero otra voz más suave dentro de él le susurró que Timmy se siente triste, el niño está solo y vulnerable , Timmy te necesita -Pero es posible que puedas quedarte conmigo… Si quieres - Dijo para después reprobarse mentalmente ante su poco autocontrol, o en este caso, por la carencia de él.
- ¿Disculpa? - el niño suena tan atónito por la sugerencia.
Él es un hombre reservado, trata de mantener su vida personal lejos de la vida profesional, si eso le es posible; en su década con el IC, nunca le había ofrecido a un colega que se quedara con él, la mayoría de sus colegas ni siquiera saben dónde vive, y ahora está ofreciendo compartir su casa con un chico de veinte años que conoce desde hacía un par de semanas ¿Qué mierda le pasa?
Nunca se había apegado a la gente tan rápido y tan duro, si Timmy fuera de una mujer, podría culpar a un tipo de atracción emocional y física, pero Tim es un niño, se siente tan desconcertado e irritado por la intensidad de ese vínculo; sin mencionar que invitar a un chico gay que tiene un enamoramiento por él, a vivir en su casa es lo opuesto a lo inteligente, es la definición de irresponsable; pero aparentemente, si Timmy se siente molesto o triste, todo su pensamiento lógico y racional se escapa por la ventana. Increíble, jodidamente increíble Hammer ; apretó el puente de su nariz y descripción.
- No hay reglas que prohíban vivir en otro lugar que no sea el centro de entrenamiento; mientras puedas obtener un entrenador calificado, ni siquiera tendrás que presentarte en la sede hasta tus exámenes finales, dentro de unos meses.
- ¿Y tú eres un entrenador calificado? - Consultó el niño temerosamente, él sonrió un poco.
- No, pero soy la segunda mejor opción, todos los agentes de mi rango están calificados para entrenar a los novatos.
- ¿Pero eso no echará a perder tu cubierta? Sería sospechoso si alguien con quien no estás relacionado vive contigo.
- En realidad - Respondió pensativamente- Posiblemente resulte menos sospechoso si vives conmigo, si Dominic Holland descubre que estaba en ese crucero, también descubrirá que compré un sumiso en la subasta, resultaría mucho más sospechoso que mi Sugar baby desapareciera repentinamente después de que llegué a casa.
- Pero… ¿Qué pasa con Thomas? - Preguntó Timmy - No se especifica exactamente emocionado si descubre que estás viviendo con el sumiso que compraste en un crucero fetichista, eso contradeciría tu imagen de hombre confiable que busca una relación seria - Él lanzó un suspiro.
- Lo sé - La misión de Cavil comprometió su cubierta de cualquier modo - Trataré de no traer a Thomas a casa, pero si descubre tu existencia, le diré que eras un niño sin hogar que vi hace unos años, por quien sentí pena y te traje a casa, obviamente, le diré que eres heterosexual.
- No funcionará si Thomas descubre el crucero para Dominantes - El niño Dijo, pareciendo el abogado del diablo, él tarareó.
- De acuerdo, consideremos y descartemos ideas; podría decir que te traje a casa cuando tenías, digamos, catorce años, viviste conmigo por unos años, pero luego te enfadaste y huiste cuando descubriste que comenzaba a considerar establecerme y formar mi propia familia; le diré a Thomas que tienes problemas de confianza y abandono, por eso huiste, entonces no logre encontrarte por un tiempo pero escuché de otra persona que estabas desesperado por conseguir dinero y te registraste en un crucero de poca credibilidad; por supuesto que tuve que interferir, pero no podía simplemente tomar y arrástrate de vuelta a casa, es por eso que decidí comprarte para mantenerte a salvo de mujeres y hombres pervertidos, y aquí estamos.
-Eso… - Respondió Timmy con un poco de asombro en su voz -… Eso podría funcionar, en realidad, explica perfectamente por qué alguien como Armand Hammer estaría en un crucero con cierta reputación - Hizo una pausa antes de continuar en voz baja - ¿ De verdad quieres que viva contigo? -Dios, necesita abrazar al niño y acunar su rostro entre sus manos.
- Sí Bambi, prepara tus cosas, hablaré con Greta y pasare a recogerte en unas horas.
- Pero ella te odia - Sonrió sombríamente.
-Estoy seguro que si Bambi.
2 notes · View notes